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Después de ese año, año suburbio y doliente, que no le daba ningún sentido a la

vida, más que la muerte misma. Hanna que había estado con tantos hombres que
ya no sentía nada, lo que se supone que es el éxtasis del amor. Lo que llena el
alma y la estima se veía en ella destruido, solo se levantaba porque sentía
obligación, pero no tenía ganas de vivir, así fue como se contagió de las
necesidades y la pobreza.
John, un muchacho inglés de familia adinerada y políticos, de una ciudad de clase
media alta, dónde él y su familia eran los de mayor patrimonio. Londres un lugar
como todos los del mundo que tienen caras adversas que afortunadamente el no
conocía, pues su ética y rebeldía lo hacían desear conocer este mundo. Era sólo
aún un estudiante de fotografía y comunicación social con muchos deseos de
conocer el mundo en su esencia propia y ver como unos eran más que otros.
En unas de sus practicas fue a los suburbios dónde nada es igual se dio cuenta
que el y nada más que su familia era de ese grupo selecto de personas, de esas
que salen en las películas y que son dueñas del mundo y que siempre a lo largo
de la historia han controlado las sociedades.
Sintió culpa, su alma sentía ira pues nunca fue educado en esta realidad, como en
todas las altitudes familiares el solo recibía. Deseaba en sí conocer la humildad,
por esta razón al llegar a estos fríos lugares para él, descubrió como la población,
así como su familia, pero con aspecto diferente tenían que trabajar demasiado, se
les veía agotados y destruidos, pobres, el fotografiaba cada aspecto peculiar que
se le presentaba. Observaba como nada era fácil. Había necesidad, hambre y
muchas miradas de revolución
En un segundo su mirada se centró en un niño descalzo con mirada arrasadora
que transmitía deseo de algo y necesidad en ese momento no dudó, vio en el la
explicación artística de lo que sentía en ese momento y decidió documentarlo, el
niño caminaba en soledad y en coordinación con un hombre que de la nada como
una sombra salió y con un leve empujón a una mujer que caminaba con mucha
prisa , en un cometido con ignorancia y sin entender nada más que era trabajo y
ganas de sobrevivir, ella se distrajo tan solo un poco y el niño con mucha habilidad
en un segundo le quitó varios billetes y una cartera que llevaba en su bolsillo .
John solo pensaba e inconscientemente fotografiando, en su mente radicaba
como la vida que tubo de niño ni siquiera la humildad se la podía brindar a otro y
que seguramente ese momento se había repetido miles de veces y se seguiría
repitiendo y que la educación que tubo fue diferente, a él le decían ser más y a
ellos por otro lado solo ser menos, todo esto en una fotografía.
Después de ese momento como un alma sin conciencia, solo caminaba
recordando por donde era el camino, pero sin importarle si consiguiese llegar o no,
sencillamente su mente se sumía en la trascendencia y lo que había vivido parecía
ser injusto con los demás sin saberlo siquiera.
Justo ya en su hogar le daba repudio ser parte de tantos sucesos que los medios
diversificaban y transformaban la realidad, cuando el en unas pocas horas sabía la
mentira que surgía con tan solo prender la tv, pondría, niño hurtando en las calles
de Londres, sabiendo que no era culpa suya, como iba el pagarse estudio si todo
era para unos pocos, y como el comería si no tenía quien le ayudase, desigualdad
nada más pensaba eso.
Era casi de noche y el cartero pasaba regularmente a esa hora, a veces en la
mañana, ese día pasó a las 7:30 pm así que salió a recibir el periódico, quiso
leerlo pues así, podría existir en alguna de esas páginas noticias en qué hacer
critica de lo que ya había vivido, solamente para recordar y sentirse iracundo,
aunque no lo sabia.

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