Universidad Nacional Autónoma de México.

Facultad de Estudios Superiores Iztacala.

Carrera de Psicología.

Educación Especial y Rehabilitación Teórica I.

Reyna Cruz Winter Edgar.

Grupo 1504.

Tema:

La construcción de la condición de vida y las implicaciones para la

persona señalada, para la psicología y el ejercicio profesional.
Las personas señaladas como deficientes mentales, discapacitados, minusválidos,
anormales, etc.; han sido conceptualizados de diferentes formas a lo largo de la
historia, desde la edad media cuando se consideraban a dichas personas como
posesionadas por demonios (aunque dicha idea proviene desde épocas mas
antiguas cuando los griegos trataban e las personas descritas anteriormente como
posesionados por dioses o demonios) tratando de buscar una solución a ellas
mediante sangrías, exorcismos e incluso se les recluía en asilos o manicomios;
hasta épocas recientes en las que el individuo etiquetado es tratado como
enfermo, y se buscaba el desarrollo de explicaciones, que en general atribuían
dichas “anomalías” a cuestiones medicas o mentales, y de esta manera establecer
estrategias y tratamientos apropiados y eficaces para insertar al dichos individuos
a las exigencias de la sociedad.

Sea cual fuese, la percepción que se tenga o se halla tenido de estas personas, lo
que se ha intentado a lo largo de la historia es encontrar la solución para estas
personas (solución en el sentido estricto de la palabra, ya que estas personas mas
allá de ser vistas como individuos capaces de desarrollar habilidades de la misma
manera en que todos lo podemos hacer, son vistas como un problema que debe
ser resuelto). De esta manera se trata de atender cuestiones sociales, individuales
o laborales para poder construir una condición de vida en la que el individuo
señalado se ajuste a las prácticas convencionales de una sociedad determinada,
es por esta razón que el objetivo de este ensayo es realizar una análisis de como
se construye y asume el concepto de anormalidad en la sociedad, como influye
este concepto en el individuo desde que es niño y el papel que juego la psicología
como ciencia encargada de abordar, estudiar y tratar a dichas personas, todo esto
desde la humilde perspectiva del autor.

Para muchas personas la gente que presentan diferencias funcionales a ellas o

que resulta incompatible con una imagen socialmente compartida, la cual
determina no solo la manera en que nos vamos a desenvolver en dicha sociedad
sino además la manera en como vamos a hacer tratados, tiende a ser catalogado
como anormal, deficiente o retardado palabras que en realidad no tienen un
significado universal debido a que dicho significado esta en función de la base
sociocultural de una sociedad dada, pese a ello en toda sociedad esa persona es
vista como un desajustado que presenta diversas limitaciones para su desarrollo
en áreas como el aprendizaje, la interrelación con otras personas y para la
productividad.
Si bien es cierto que es necesario contar con un equipamiento biológico para
poder desenvolvernos en un medio en particular y que esto posibilita el desarrollo
psicológico mediante la interacción con otras personas, esto no resulta una regla
general que pueda ser aplicada al pie de la letra, en otras palabras, la limitaciones
que bilógicas que presente alguna persona no son condición necesario para que
su desarrollo psicosocial también presente un limite, debido a que ,por ejemplo, si
se presenta algún trastorno ocular el cual implique complicaciones para el
desarrollo del lenguaje, el desciframiento de símbolos o para la representación de
los objetos que nos rodean, esta limitación puede ser cubierta con la estimulación
de los otros sentidos que cubran las restricciones presentadas por el órgano
dañado.

Sin embargo, la concepción social es diferente ya que esa persona es todavía más
limitada al ser tratada como algo menos que una persona que no presenta daños
biológicos. De esta manera se va construyendo una condición de vida para esa
persona la cual la restringe de las relaciones con otras personas y de un desarrollo
intelectual, emocional y social que le permita un proceso de individualización o de
realización personal al ser descalificada su naturalidad de sociabilidad. Esta
condición de vida no resulta ser otra cosa que una situación carente de elementos
de orden interactivo con los que el individuo pueda desarrollarse, dentro de la cual
se tiene el supuesto de que la persona no es mas que un problema con el que se
ha de cargar hasta que el se pueda valer por si mismo, es decir, hasta que se
pude integrar de manera normal a la sociedad, sin embargo se le priva de
estímulos u oportunidades así como de la función familiar de ideologizar al
individuo para que suceda tal integración.

Como se habría de esperar en toda persona con un problema, la familia con un

hijo que presente deficiencias busca una solución para él. Resulta permitente en
este punto aclarar que se concibe a una persona como un problema desde el
ámbito familiar en el momento que una pareja cae en cuenta de que existe una
incompatibilidad entre el hijo que ellos esperaban (el hijo ideal) y el hijo que en
realidad tienen (el hijo catalogado como anormal). En este sentido, el hijo “no
esperado”, no es anormal o implica ser un problema; es el padre, el adulto o la
sociedad en general la que lo atribuye como un problema; y como todo problema
aceptado por la persona, debe ser solucionado (aunque esta aceptación implica
una paradoja debido que al etiquetarlo como anormal o como un problema aun se
le sigue negando).
De esta manera la condición de vida de la persona señalada se amplia en el
momento en que la tarea de ideologizarlo dejada de lado por la familia y entregada
a una institución educativa, esta ampliación en el sentido que podrá valerse por si
mismo y aunque será etiquetado de la misma manera, ahora podrá cumplir con
uno de los aspectos mas importantes, o por lo menos de mayor interés para uno
de los grupos de poder interesados en el consumismo y la mano de obra, esto es:
que la persona sea productiva, competente, eficiente, competitivo y obediente en
el mundo laboral.

De acuerdo a lo anterior son las escuelas de Educación Especial las encargadas

no solo del problema de la familia sino además de ideologizar al niño anormal. En
la actualidad existen diferentes programas escolares que buscan la integración e
inclusión desde el punto de vista físico, psicológico y social del niño con
limitaciones los cuales están elaborados en función de las diferencias de los
alumnos, es decir, toma en cuanta las necesidades educativas especiales de
cada alumno, de sus posibilidades y limitaciones y de cómo poder superarlas
mediante los apoyos específicos que requiere cada niño; así es como se plantean
estrategias de aprendizaje y enseñanza de acuerdo a la situación y necesidad de
cada niño logrando de esta manera la ampliación de la condición de vida antes
mencionada.

Desde edades muy tempranas se empieza a trabajar con los niños con
dificultades. Cabe aclarar que el termino dificultad utilizado aquí nada tiene que
ver con anormalidad, deficiencia mental o con algunos de los otros términos que
califican popularmente al individuo que no cumple con las características de lo que
convencionalmente se considera como normal, y su uso refiere a las dificultades
que tiene el niño para desarrollarse en diferentes aspectos a causa de algún
padecimiento biológicas y no se asume que esto sea una limitación.

Regresando al tema de la educación “especial” esta procura, como ya se

menciono, la futura integración del individuo a tareas sociales (tales como:
actividades productivas, hábitos motores y psicológicos para la resolución de
problemas; y participar en diferentes grupos) y a su participación activa en la
esfera de la vida humana, educación que en su mayoría es llevada a cabo por
psicólogos especializados en el tratamiento de estas personas, esto ultimo nos da
pie a uno pregunta de gran importancia: ¿Qué papel juego el psicólogo en la
construcción de la condición de vida de la persona señalada? Lo cual implica la
manera en como aborda el tema de las personas consideradas anormales y como
estudia a estas e intenta darles solución a los considerados como problema.
Antes de responder a esa pregunta es necesario señalar que el psicólogo debe de
identificar que es aquello que las personas califican como anormal y de esta
manera encontrar no una solución, un tratamiento o hacer normal al niño con
dificultades, sino más bien desarrollar en el niño habilidades que le permitan
ajustarse al contexto donde se le etiqueta. Cuando se evalúa a un niño con
dificultades, se puede observar alteraciones orgánicas o funcionales a nivel
bilógica condiciones con las cueles nació, sin embargo aunado se pude apreciar
la mala atención y dirección pedagógica por parte de los padres debido a la
ausencia de una educación positiva producto de sus juicios valorativos que
descalifican al niño, por estas razón el papel del psicólogo no solo es al análisis de
las condiciones físicas y sociales del medio en el cual esta inmerso el niño y que
determinan su conducta, además es eliminar de su vocabulario los juicios
valorativos y enfocarse en especifico en las habilidades con las que no cuenta el
niño y que le permitan desarrollarse o comportarse en un contexto en particular.
Por último, el psicólogo debe de establecer las condiciones necesarias que le
permitan al niño cubrir la limitación biológica que presenta y para que después e
pueda desarrollar psicológicamente de una manera más o menos parecida a la
que un niño sin dificultades puede hacerlo.

Lo que se menciono anteriormente es en cuanto al comportamiento especifico del

niño, sin embargo la importancia del psicólogo en la construcción de una condición
de vida para niño señalado, va mas allá de eso, pues si se trabaja bajo el
supuesto de que el que da el juicio valorativo y califica al niño es el adulto y de
manera general la sociedad, entonces la labor del psicólogo debe abarcar también
esos aspectos, es decir la modificación de la perspectiva social que se tiene del
niño con dificultades para su desarrollo, empezando con el contexto mas cercano
al niño: La Familia, pues es en el primer vinculo que tiene el niño y el primer
contexto en el que se le ve limitado. En este sentido no basta con desarrollar
habilidades en el niño para que se relacione con las demás personas de su
entorno y se desarrolle psicológicamente, recordemos que la familia es el
mediador entre el individuo y la sociedad, es por es que resulta importante
primeramente desmitificar a la familia sobre la concepción que tiene del niño,
además desarrollar en ella habilidades que le permitan relacionarse con el niño y
que este pueda desarrollar un comportamiento cada vez mas complejo y
evolucionar psicológicamente hablando y de esta manera el niño pueda dar el
salto de la familia a la relación social. De lo contrario la manera en que el niño será
concebido y tratado será la misma y aunque se puede integrar el niño de manera
adecuada al ámbito social y lograr que este sea productivo, la forma en que será
tratado seguirá siendo la misma.

En resumen el psicólogo debe asumir que el niño “retardado” es aquel que

presenta limitaciones resultantes de condiciones bilógicas y/o socioculturales que
obstruyen el desarrollo y evolución psicológica del niño debido a los juicios
valorativos y a la concepción que se tiene de el por parte de la sociedad; por lo
que resulta importante analizar como se va relacionando el niño con los objetos,
personas y las situaciones que se le presentan en su medio, lo que permitirá
ubicar de manera precisa los elementos que participan en su desarrollo y los
elementos que lo limitan. Elementos dentro de los que localiza la familia por lo que
también se debe modificar las concepciones de esta hacia el niño y propiciar
ambientes en los que la familia pueda interactuar con el niño para favorecer su
desarrollo, debido a que esta puede no tener las habilidades necesarias para
promover al niño.

Así el labor del psicólogo encaminado a la modificación de la interacción de los

patrones familiares y el diseño de una intervención en la que compense la
limitación biológica, favorezca el desarrollo del niño enfocado a la necesidades de
cada niño y lo haga a niveles de estimulación temprana comprende el papel de
mayor importancia del psicólogo en la manera de abordar el problema de la
“anormalidad” y la forma en como delinea un estilo de vida para el niño
desaventajado: