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EL EROTISMO EN EL ARTE GRIEGO

En todas las culturas, unas más otras menos, se ha utilizado como tema de inspiración para los artistas el
concepto del amor; cómo no va a suceder eso en una cultura que ensalzó de tal manera la belleza del
cuerpo humano, donde las competencias deportivas se llevaban a cabo con atletas completamente
desnudos, que colocó estatuas de cuerpos totalmente desnudos en plazas y templos, los griegos
inventaron el desnudo artístico y su influencia en el arte occidental ha sido monumental.

La cultura griega, además, está llena de leyendas de dioses, héroes y humanos que se interrelacionan
con leyendas de amor, con infidelidades, con raptos de esposas que causaron guerras importantes,
hasta la imaginería creó un pueblo, solo de mujeres guerreras, que secuestraban a hombres para
engendrar descendientes en ellas, una vez logrado esto los mataban, el erotismo entre dioses. Entre los
griegos el concepto de amor no se conocía como lo conocemos ahora, han pasado demasiados siglos
desde aquella como para que nuestros conceptos no hayan sido modificados, afectados si se quiere y se
diferencien de manera importante. Para los griegos las relaciones sentimentales tenían varias aristas,
pero básicamente el dios Eros (de donde se deriva la palabra erotismo) era el que gobernaba dichas
relaciones, aún entre los dioses del Olimpo. En lo relativo a la intimidad, los griegos tenían costumbres
que para el occidental actual pueden parecer incómodas, la relación del hombre con la mujer (que era
un ciudadano de nivel inferior al hombre, por más que Sócrates y Platón quisieron implantar la idea que
la mujer y el hombre en el matrimonio eran iguales, no así Aristóteles) era puramente reproductiva,
aunque la figura de la prostituta ya existía en esos tiempos por lo que el sexo por placer con las mujeres
era común también. La mujer al ser inferior tenía una posición pasiva, si se quiere llamar de esta
manera, era la que recibía lo que el hombre le daba, sim embargo, eso no impidió que se produjera la
infidelidad, la encontramos en los poemas de Esquilo (la mujer siempre fue tema de sus tragedias)
donde el poeta nos narra historias de mujeres que se ven a escondidas con sus amantes; las relación
homosexual hasta pederasta también se presentaba y era aceptada en ciertas condiciones, los varones
jóvenes, en su etapa de iniciación, tenían a un hombre adulto, un maestro, con el que mantenían
relaciones sexuales, también de tipo pasivo, se creía entonces que las virtudes y la fuerza del maestro
eran recibidas por el joven a través de su semen, era parte de su preparación para ser hombre. Pero no
hay que equivocarse, entre los griegos, no estaba bien vista la homosexualidad entre varones adultos,
había leyes muy claras respecto a la homosexualidad, lo que no significa que no sucediera, al igual que
las relaciones lésbicas, tanto así que esta palabra se deriva de Lesbos, isla griega, cuna de Sappho.

Numerosas manifestaciones artísticas de la época nos muestran cómo era la vida sexual griega; es
importante destacar que no se busca juzgar las costumbres de los antiguos griegos, con este trabajo se
busca mostrar esa faceta no tan extendida y tratarla de poner en contexto con las costumbres de la
época, esto nos permitirá conocer un poco más de cerca el modelo griego que muchos admiramos.

Unos de las manifestaciones del arte griego fueron las cerámicas, la exquisitez de sus dibujos no se
comparaban con ningún otro pueblo cercano, se han encontrado desde Africa hasta Europa, en la
cenefa del mediterráneo que los griegos colonizaron. La característica arcillosa de los suelos griegos, lo
económico y fácil de fabricar cerámicas utilitarias junto al amor por la belleza que caracterizó siempre a
la cultura griega dieron origen a todo tipo de cerámicas utilitaria bellamente decoradas.

En estas cerámicas el arte griego plasmó muchas de sus costumbres y el erotismo no se quedó atrás;
mitos y leyendas, así como escenas explícitas también, el erotismo se presenta de muchas maneras y de
todas ellas encontramos ejemplos en las cerámicas.

Flautista y Bailarina profesional probablemente en una fiesta privada

Las escenas con dioses no son explícitas pero contienen una carga erótica que viene con la misma
leyenda conocida por adultos y jóvenes. Zeus, en la mitología griega fue todo un conquistador, se
conocen infinidad de encuentros sexuales entre Zeus y otras diosas del Olimpo así como humanas,
resalta el encuentro entre Zeus que tomó el físico del esposo de Alcmena, Anfitrión, de esta unión nació
Heracles o Hércules como lo conocemos actualmente.

Así encontramos una cerámica con el mito de Zeus y Danae (en griego antiguo “sedienta”), hija del rey
de Argos, Acrisio, y Eurídice. La leyenda dice que Zeus se presento ante Danae como una lluvia de oro,
fertilizándola, de esta unión salió Perseo.
Zeus, en forma de lluvia de oro fecunda a Dánae, concibiendo a Perseo

Otro mito muy reflejado en el arte griego y después en el romano es el de Leda y el cisne: Leda, esposa
de Tindáreo, rey de Esparta iba paseando por el río Eurotas cuando de repente Zeus en forma de cisne,
fingiendo ser perseguido por un águila, se posa sobre ella; de esta unión nace la bella Helena de Troya.

Mito de Leda y el Cisne


Además de las aventuras sexuales de Zeus, hay seres mitológicos de menor grado, que también hacen
de las suyas en la mitología griega, de hecho, era lo que los caracterizaba frente a los humanos, entre
estos seres se encuentran los sátiros, el dios Pan, esfinges aladas y ninfas.

El mito de Pan y Daphnis, pastor del que se enamoró Pan.

Nótese lo explícito de la pintura, cerámica de figuras rojas del 450 a.C., además del falo de Pan, hay una
figura menor con un falo mayor que el de Pan, más adelante hablaremos de la simbología y las
creencias asociadas al Falo como elemento protector contra el mal de ojo y generador de vida entre los
griegos y los romanos.

En la siguiente figura se muestra la banda decorativa de una copa de vino, data del siglo V a.C. y en ella
se muestran a varios sátiros teniendo relaciones sexuales entre ellos y una esfinge alada.
Sátiros manteniendo relaciones sexuales entre ellos y con esfinges aladas. S V a.C.

O en la siguiente, donde un sátiro inicia a una mujer en los placeres sexuales, figuras rojas.

Detalle en Jarro Corintio de un Sátiro con mujer


También en la escultura, en el caso de la figura es en bronce, se muestra a un sátiro con el pene erecto

El erotismo en las muestras anteriores está presente por el conocimiento del mito, así como por algunas
imágenes totalmente explícitas aunque no involucran dioses mayores, también se encontraron algunas
cerámicas con imágenes explícitas donde se muestran relaciones sexuales entre hombre y mujer.

Fondo de copa con escena erotica 450 a.C.


Cátera griega s. IV a.C.

Jarro con relación sexual explícita entre hombre y mujer, s V aC


Jarro con escena erótica entre hombre y mujer, s IV a.C.

En cuanto a la homosexualidad, como ya se mencionó, está relacionada con el entrenamiento de los


jóvenes, los maestros transferían su “areté” (la excelencia del maestro, la virtud) a los jóvenes con su
semen. En la siguiente imagen se muestra un detalle, con figuras negras, de hombre con joven.
Entre las festividades al dios Dioniso (dios de la fertilidad y el vino, Baco para los romanos), por lo
general de consumo excesivo de vino y de alto nivel erótico, existía una de orden más privado llamada
Como, relacionadas con banquetes y matrimonios, en ellas también se excedían en el consumo
alcohólico, llegándose en algunos casos a relaciones sexuales grupales, a los participantes los llamaban
“comastas”, de estas celebraciones también dejaron prueba los artistas de la época, las dos siguientes
imágenes muestran ejemplos de celebraciones (las mujeres siempre eran heteras o hetairas, prostitutas)

Copa de los Comastas, figuras negras, s 575 a.C.

Anfora Atica de figuras negras, escena de Comastas y heteras. 560 a.C.


En gran cantidad de culturas, el símbolo fálico, o pene erguido, se presenta en sus esculturas y pinturas y
se refiere al sentido viril y al sentido de la fecundidad. En el mundo antiguo, la necesidad que una
cultura se mantuviera viva dependía del éxito que pudieran tener en las batallas con las que se
enfrentaban eventualmente como a la fecundidad de la sociedad para generar guerreros que defiendan
y cazadores que consigan el alimento para la población, más adelante con la agricultura, el pene erecto
era un símbolo de la fecundidad en el campo. Tanto en la cultura india, donde abundan ejemplos, como
en la escandinava, la china, la ibérica o la japonesa, por nombrar algunas, se presentan ejemplos de
representaciones itifálicas en seres y dioses; los griegos, al igual que los romanos posteriormente, no
fueron diferentes. Gran cantidad de esculturas, pinturas y cerámicas utilitarias se han encontrado al
respecto.

La cultura griega le daba al falo erecto, un carácter mágico, de protección contra el mal de ojo, por ello
era común encontrar falos erectos como amuletos hasta en niños, toda suerte de cerámica utilitaria con
forma de falos, tazas, cuernos, frascos de perfume, hasta se hacían falos alados, falos antropomorfos y
falos con falos a su vez…

Cerámica roja con falo gigante


Vaso de terracota faliforme, 500 a.C.

Cuerno de terracota en forma de falo. 400 a.C.


La imaginería griega mezclaba también escenas campestres con el falo, probablemente por el sentido de
fertilidad del mismo, en la siguiente cerámica observamos a una dama cuidando unas plantas
sospechosamente similares a falos, el vaso data del 430 al 420 a.C.

Vaso con figuras rojas mostrando mujer con plantas fálicas

La ciudad jónica de Mileto, actualmente Turquía, cuna del famoso matemático Tales de Mileto, así como
los filósofos Anaximandro y Anaxímenes, anteriores a Sócrates y de Aspasia, que fue la esposa de
Pericles, fue también el fabricante más importantes de consoladores sexuales, que estaban permitidos
en la cultura griega pues el acto de la masturbación era totalmente aceptado en la Grecia antigua.
Dichos consoladores, llamados Olisbos, eran fabricados de cuero o de piel de perro que luego mojaban
en aceite de oliva. Los romanos los llegaron hacer de cera también. La exportación de Olisbos llegó hasta
Egipto, donde se encontró, en una urna funeraria egipcia con antigüedad datada entre el 600 al 300 a.C.,
la siguiente cerámica que muestra a una hetera manipulando olisbos.
Hetera con Olisbos

En el siguiente detalle de una cerámica griega, se muestra una escena homosexual entre un hombre y un joven
(maestro y aprendiz quizás) donde el joven a la vez de participar en el acto sexual con el hombre, mantiene en sus
manos un olisbo.
A pesar del culto al falo por sus poderes de protección mágica, viriles y de fecundidad, el ideal físico del
hombre griego lo muestra con un pene pequeño, la proporcionalidad según entendían los griegos
requería que el símbolo de la belleza griega lo tuviera pequeño, por ello todas las estatuas lo presentan
así; el falo grande era asociado con lo ordinario, lo campestre; probablemente esa concepción les venía
de los tiempos Pelasgos y Aticos donde al dios Hermes, que se le asociaba con la fertilidad y protección
de los campos, se le asociaba con un falo grande, erecto en muchos casos; fue con el pasar del tiempo
que a Hermes se le asoció con la astucia, como mensajero de los dioses, servía de enlace entre los dioses
y los hombres. Esta función, importante también como enlace entre el mundo terrenal y el mundo de
los muertos, lo convertía en un psicopompo, servía de guía a los muertos que se dirigían al Hades,
también guió al Hades a ciudadanos griegos vivos, hay un pasaje en la Odisea donde Homero lleva a
Ulises al Hades para buscar a Tiresias adivino griego que ya había muerto para que lo ayudara en su
regreso a Itaca, indicándole el camino y los obstáculos que encontraría. Esa característica de Hermes, de
guía, de protector, conocía los secretos de los caminos a los dioses y al Hades, mensajero de los dioses,
protector de los caminos fue la razón para la aparición en el siglo V a.C. de un estructura de piedra,
básicamente un pilar de base cuadrada (el número 4 se relaciona con Hermes), generalmente con la
cabeza de Hermes en el tope y con un falo erecto en su base que se la llamó Herma.

Herma griega arcaica

La Herma tenía un significado muy importante para los griegos, en Atenas se encontraba en todas
partes, en los caminos, en las encrucijadas, en las viviendas, en los templos, en la calle, en los gimnasios,
en las tumbas, bibliotecas, lugares públicos, etc. Se asociaba la Herma con protección contra el mal de
ojo, contra las desventuras, a la vez que se supone ayudaba en la fertilidad de la mujer. Era común que
en la mañana se tocara el pene erecto para ahuyentar la mala suerte y el mal de ojo y garantizar así un
buen día. Era tal la creencia en estas figuras que en mayo del 413 a.C., el día anterior a la partida de la
flota ateniense hacia Siracusa (expedición a Sicilia) durante la guerra del Peloponeso, en la noche todas
las hermas atenienses fueron vandalizadas lo cual significó un muy mal augurio para la expedición en
ciernes. La investigación sobre el daño a las hermas terminó llevando indirectamente la muerte a
Sócrates con cicuta. Y para darle a la Herma, aunque sea el beneficio de la duda, la expedición a Sicilia
resultó en un fracaso total.
BIBLIOGRAFIA

Enrique Martínez-Salanova Sánchez, EROTISMO EN EL ARTE GRIEGO ANTIGUO,


http://educomunicacion.es/arte_erotico/grecia_antigua_arte_erotico.htm no se indica fecha de
creación.

Antonio Marco Martínez, El consuelo venía de Mileto. 17 de agosto de 2015,


http://es.antiquitatem.com/olisbos-consolador-sexualidad-antiguedad

Grupo de Historia del Arte, ARTE CLASICO Y EROTISMO. Sin fecha de creación
http://www.historiadelarte.us/arte-y-erotismo/arte-clasico-y-erotismo/

César Cervera M, ABC.es, PRIAPO, EL DIOS MALDECIDO CON UN FALO GIGANTE, 21 junio 2016.
https://www.abc.es/cultura/abci-priapo-dios-maldito-falo-gigante-adoraba-poblacion-rural-
201606190434_noticia.html

ABC.es, sin autor definido en publicación, LAS PRACTICAS SEXUALES MAS PERTURBADORAS DE LA
HISTORIA, 19 de noviembre de 2018. https://www.abc.es/historia/abci-practicas-sexuales-mas-
perturbadoras-historia-201811181541_noticia.html

Susana Reboreda Morillo, Ensayo LOS REENCUENTROS DE ODISEO EN ITACA, Univ. De Vigo. Sin Fecha

Marcos Martínez Hernández, EROTISMO EN HOMERO (I), Universidad Complutense de Madrid.


29/11/2011

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