Capítulo 10

“Bienestar espiritual y afrontamiento de la muerte en personas mayores”

Hacia el final del ciclo vital, las personas mayores comienzan a envejecer la satisfacción de su
historia de vida y producto de esta evaluación, experimentan la tensión hacia los sentimientos
de integridad o de desesperanza.

Según Erikson, todas las personas atraviesan por distintas normativas a lo largo del ciclo vital,
estas crisis en el adulto mayor suele ocurrir entre los polos de integridad y desesperanza y se
relaciona con la evaluación que hace la persona de su vida. Se presenta la Tanatofobia o temor
a la muerte en distintos grados según sea la historia de vida. Se ha conceptualizado el
bienestar espiritual en base a dos componentes:

a) Vertical: se refiere al sentido de bienestar en la relación con Dios

b) Horizontal: Se refiere a la satisfacción con el sentido y propósito de vida, sin mayor
tipo de referencia religiosa.

Se considera el bienestar espiritual como un factor protector de la salud mental, que se

entiende como un conjunto de creencias y practicas acerca de un propósito y significado
último de la visa y del propio hogar de ellos por lo que las personas que presentan esta
condición tiene una noción acerca del significado último de la vida que orienta su conducta y le
entrega un soporte de seguridad personal. Considerando lo anterior se realizó una estudio
para ver la relación que existe entre el afrontamiento de la muerte y el bienestar espiritual de
las personas mayores, la muestra fue de 95 sujetos mayores de 70 años, en donde 48
pertenecían a clubes de adulto mayor y 47 no participaban en ningún club del adulto mayor, el
criterio de exclusión fueron los adultos mayores que tuvieran deterioro cognitivo y depresión
severa. Se realizó un cuestionario de 131 preguntas, en donde estaban datos generales, nivel
educacional, composición del hogar, autopercepción de salud, situación laboral e ingresos,
evaluación de funciones cognitivas, síntomas depresivos, escala de bienestar y afrontamiento
de muerte.

Se comprobó que le bienestar bajo se asocia significativamente con el mal afrontamiento de la

muerte, pero no está condicionada por el bienestar espiritual de los sujeto. La posibilidad de
tener un bajo temor a la muerte en personas mayores estaría favorecido por participar en
clubes, por tener menor edad y en mayor medida, por tener un alto bienestar espiritual.