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Atlantic Africa and the Spanish

Caribbean, 1570-1640, de David Wheat*


Alejandro García Montón
Universidad Pablo de Olavide

El fenómeno de la esclavitud africana en


América tuvo al imperio español como uno
de sus principales protagonistas. Los pri-
meros cautivos africanos llegaron a Améri-
ca de la mano de este imperio que, a su vez,
fue el último del mundo atlántico en abolir
la trata de esclavos. De esta forma, Hispa-
noamérica se convirtió en el territorio que
recibió esclavos africanos de manera más
prolongada en el tiempo. Por otro lado, y de
acuerdo a los datos disponibles, las colo-
nias españolas también fueron el segundo
destino americano al que llegaron más cau-
tivos africanos, solo por detrás de Brasil. En
este contexto, Atlantic Africa and the Spa-
nish Caribbean supone una contribución
fundamental a un tema como el de la escla-
vitud en Hispanoamérica que tradicional-
mente no ha recibido la atención merecida
por parte de la historiografía. Esto se hace
evidente al comparar el estado de nuestros
conocimientos con el caso de las colonias
angloamericanas del que, además, muchas
veces se han importado modelos interpre-
tativos o imágenes históricas que en poco ga el papel que tuvieron las poblaciones de
o nada ayudan a entender mejor la especi- origen africano, tanto libres como esclavas,
ficidad de los mundos sociales vinculados en el desarrollo de las colonias españolas
a la esclavitud en Hispanoamérica. Así las del Caribe entre 1570 y 1640. Ello se hace
cosas, la monografía de David Wheat, pro- prestando especial atención a los estrechos
fesor en Michigan State University, interro- lazos que vincularon y retroalimentaron la
expansión portuguesa en África occidental
* Es reseña de David Wheat, Atlantic Africa and the Spanish
Caribbean, 1570-1640, Chapel Hill, University of North Ca- y Angola con la presencia hispánica en el
rolina Press, 2016.

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Lecturas

Caribe a través del hilo de la trata transat- territorio. Esto equivale a reconocer que las
lántica. sociedades emergentes en el Caribe, si bien
Este libro se organiza en seis capítulos se forjaron sobre los pilares de la esclavitud
más introducción y conclusiones. Los argu- y la migración forzada, también se definie-
mentos de la obra se sustentan sobre un ex- ron a través de la participación de africanos
celente manejo de la bibliografía existente libres y esclavizados en ellas.
en español, portugués e inglés, y sobre un La economía del Caribe español donde
ímprobo trabajo de investigación en diver- se inserta la trama del libro se define al-
sos archivos en Colombia, Cuba, México y rededor de una red de ciudades portuarias
España. El contraste y cruce de las fuentes y sus respectivos hinterlands ­—con Car-
permite a Wheat elaborar desde diferentes tagena, La Habana, Panamá y Santo Do-
observatorios locales una serie de viñetas mingo como principales escenarios— más
históricas representativas del papel que orientada a la producción diversificada de
jugaron las poblaciones de origen africano materias primas y servicios y al comercio
en el espacio caribeño y las relaciones es- regional de productos básicos que a la ex-
tablecidas con los colonos españoles aten- portación hacia España. En este sentido,
diendo a las dinámicas heredadas y trans- el entramado económico que se describe
feridas desde el mundo luso-africano. Uno remite a una realidad que dista mucho de
de los principales méritos de este trabajo es las imágenes vinculadas a las grandes ex-
la atención viva y detallada que se da a las plotaciones mineras de México o Potosí o
interacciones cotidianas y a las vidas ordi- al monocultivo intensivo del XIX alrededor
narias de las personas. de la caña de azúcar, por ejemplo. En este
De manera más concreta, el libro plan- marco, la centralidad de las poblaciones de
tea dos tesis principales. Primero, que las origen africano se hace evidente en lo de-
poblaciones de origen africano, bien escla- mográfico, muchas veces representando el
vas o libres, fueron la principal fuerza colo- ochenta por ciento de la población de las
nizadora del Caribe. Sin estas poblaciones, zonas urbanas y sus entornos rurales —tal
la construcción, desarrollo y defensa de la fue el caso de Panamá a comienzos del siglo
colonia habría sido, simplemente, inviable. XVII—, y, como no podía ser de otra mane-
A pesar de que esto pudiera parecer una ra, también en lo laboral.
obviedad, no lo es tanto pues, precisamen- Las formas de organización y participa-
te, permite rescatar y repensar de manera ción de las poblaciones de origen africano
abierta el protagonismo de unos actores que en el trabajo de las pequeñas explotaciones
tradicionalmente han jugado un papel se- agrícolas y ganaderas del Caribe hispánico,
cundario, cuando no ausente, en las narra- el comercio y la manufactura local, en las
tivas sobre la colonización de Hispanoamé- milicias urbanas, los transportes terrestres,
rica. La crisis demográfica desatada entre fluviales o marítimos, se desgranan en el
las poblaciones indígenas tras la llegada de quinto capítulo titulado «Black Peasants».
los primeros europeos y el déficit de mano Ello se hace desde los diferentes puntos
de obra europea dio pie a una demanda es- de vista que aporta la experiencia de ac-
tructural de mano de obra, esclavizada y de tores africanos e individuos afrocaribeños,
origen africano, desde el principio de la co- mulatos y criollos, en sus múltiples face-
lonización. En este sentido, la colonización tas como esclavos, humildes negociantes,
del Caribe conllevó un inexorable a la par trabajadores asalariados, regentes de ta-
que profundo proceso de africanización del bernas y posadas, o también como posee-

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dores de esclavos y gestores de pequeñas blaciones locales en Guinea superior —es


haciendas. En este marco, hay que llamar decir, la costa entre el actual Senegal hasta
la atención sobre el importante esfuerzo Sierra Leona y que incluye la de Gambia,
que hace el autor por arrojar luz sobre los Guinea-Bisáu y Guinea— y Angola, zona
grupos de africanos libres y cuya importan- que desplazó a la anterior como principal
cia estuvo lejos de ser discreta en el día a región de abastecimiento de esclavos a par-
día. Por ejemplo, en lugares como La Ha- tir de la década de 1580. En ellos se analiza
bana representaron entre el quince y el de qué manera las dos regiones se vincula-
treinta por ciento de la población libre de ron con el Caribe a través de un tráfico de
la ciudad a comienzos del siglo XVII. En esclavos y viceversa atendiendo a las diná-
concreto, hay que destacar que este acerca- micas propias de cada contexto.
miento se realiza desde las especificidades En estos capítulos también se pone el
que ofrecen las vidas de las mujeres libres énfasis en la manera en la que el conoci-
de origen africano y mestizo, a las que se miento luso de la amplia variedad de gru-
dedica el cuarto capítulo «Nharas and Mo- pos sociales, geográficos, étnicos y lingüís-
renas Horras». Estas mujeres, tanto solte- ticos africanos que de sus manos llegaron
ras como casadas, no sólo superaron a sus esclavizados al Caribe, fue transferido a las
pares varones en número, sino que también poblaciones ibéricas del Caribe. Ello dio pie
pudieron incorporarse más fácilmente que a que los colonos españoles interactuaran
aquellos en tanto que sujetos libres en las y reconocieran a los forzados africanos a
principales ciudades del Caribe hispánico. partir de las especificidades de sus orígenes
La segunda tesis que propone este libro etnolingüísticos. A su vez, los esclavos y
plantea que la colonización del Caribe en libertos africanos también hicieron uso de
tanto que proceso de africanización resul- tales diferencias en el momento de descri-
tó ser en buena medida una extensión del birse y auto representarse frente a los colo-
mundo luso-africano emergente desde me- nos españoles. Al plantear la discusión en
diados del siglo XV. Hay que recordar que, estos términos, el autor propone «explorar
durante la edad moderna, el imperio es- el papel que las identidades africanas juga-
pañol careció de una presencia directa en ron en la formación de las condiciones so-
África que le permitiera controlar todos los ciales de la colonia, en vez de al contrario»
eslabones de la cadena comercial vinculada (p. 66).
a la trata transatlántica de esclavos, des- Tal y como se analiza en el tercer capítu-
de la captura y compra de los cautivos en lo, «Tangomãos and Luso-Africans», detrás
África hasta su comercialización en Hispa- de estos tráficos transatlánticos de per-
noamérica. Durante el periodo estudiado, sonas se encontró un multifacético com-
fueron los comerciantes portugueses los fa- pendio de personajes que iba mucho más
cilitadores de mano de obra esclava africa- allá de las grandes compañías de negocios
na a las colonias caribeñas. En este sentido, asentadas en Lisboa y Sevilla y que incluía
el enfoque del libro adopta una perspectiva a humildes capitanes de barco, marineros y
que trasciende las fronteras políticas para comerciantes de baja estofa de origen luso-
abrazar una historia conectada del mun- africano. Precisamente, la abultada presen-
do atlántico. Los capítulos uno y dos, «The cia de estos personajes también en el Cari-
rivers of Guinea» y «The kingdoms of An- be hispánico y su asentamiento fue la que
gola», interrogan las diferentes dinámicas llevó consigo un conocimiento y familia-
establecidas entre los portugueses y las po- ridad de y con los esclavos africanos entre

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las sociedades locales. Desde otra perspec- el lector. Una nota sobre la problemática
tiva, en el capítulo seis «Becoming Latin» vinculada a las fuentes, un amplio glosa-
se estudia el papel que también jugaron los rio de siete páginas y un índice de nombres
esclavos y libertos ladinos, conocedores de y materias culminan y complementan el
las sociedades caribeñas, usos, costumbres cuerpo del texto. En este sentido, solamen-
y lengua, como facilitadores de la acultu- te se echa en falta una relación final de la
ración de los esclavos recién llegados de bibliografía citada a lo largo de las páginas.
África. En concreto, el énfasis aparece en su Por último, otra de las grandes virtudes de
papel como mediadores culturales en tanto este trabajo tiene que ver con son su prosa.
que traductores y padrinos en el momento Por un lado, amena y, por otro, accesible a
de la obligada conversión a la fe católica. un público general interesado, no necesa-
En un contexto donde los recortes en riamente especializado en el tema.
personal lastra sobremanera la calidad del Sin caer en la dulcificación de los ho-
proceso editorial cabe destacar el pulcro y rrores de la esclavitud africana en Hispa-
detallado trabajo llevado a cabo por la edi- noamérica, Atlantic Africa and the Spanish
torial a cargo del libro. El aparato crítico se Caribbean, se presenta como un libro clave
ubica a pie de página y se incluyen cinco que permite conocer en detalle, entender
prolijos apéndices que permiten profundi- mejor y desgranar la complejidad y las es-
zar en varias de las tesis esgrimidas a lo lar- pecificidades de las sociedades emergentes
go del texto y las fuentes archivísticas que en el Caribe hispánico a partir de las viven-
los sustentan. El libro está salpicado de úti- cias y la contribución de las poblaciones de
les mapas y reproducciones de época, ade- origen africano al desarrollo de las socieda-
más de tablas con información valiosa para des locales.

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