de abjetividad que levaba a Ferenczi a tales conclusio
Aller coinciit lobiolégico eon lo psiquico, bajo e! mi
de aso, sequin el equema energético propio de esa
1 Vso quedaba ubizado como alguien que debia cuidar
‘apial fico abstensindose de cualquier deseo que pert
Segunda parte
__ reac del pcoanlisis con la veer debe sr
lizada de acuerdo cn su contexto sociohistérico, a fin
‘ottiendr el rigs de muchas de sus nocions. En
‘sentido, 1a biologia tuvo una importancia central, ya fi
n ls eonsidernién de Ia incapacidad fiona
¢Revolucién sexual
en la vejez?
Desmitificaciones y continuidades
Unas décadas mis tarde, el psicoanalisis fue refor
Jando algunas de lasconcepciones que habian dejado (vel
el anglisis a esta peblacion, aunque en ciertas lineas ai
Jes myehos de estos onceptos eontindan vigentes.
126lidad nos presenta un conjuntode lecturas paraddjicas
de la eétiea en la vejez, Mientras una sere de discurses
‘incitan y promucven la sexualidad en esta etapa
{a vida, ain continian vigentes eiertaslimitaciones con
1 io placere yal deseo sensual. En los eapitulos que
bordaremos algunos de esos discursos.iRevolucién sexual en la vejez?
“Diseursos en torno al eue-rpo y el sexo
de los viejos en la ultima mitad del siglo XX
Un hombre sin manos o sin sexualidad es tan
inconcebible como un hombre sn ponsamiento
"Maoaee Meza Pore
No hay ninguna condue~ta humana que sex mis
fitosinerasca que la respuesta seal.
Rouser Scots
_ Desde la sogunda mitad del siglo XX se ha producido
serie de transformaciones en lau moral social que han
Tugar a la denominada “revolucisén sexual, El erotismo
Jayejez noha sido un tema de profwunda reflexin cultural
ha tenido la misma dinamiea CBurnside, 1973); sin
‘iscursos, jha variado la perspectiwa de la sociedad con
‘elacion a esta temética?
1, Cabe aclarar que no peoenia tendo. a acare ae
‘ton por proc, goon, cm sheen de
fons maperes que lneamente ven eontfetende na nose ecg
(ct en Ia denominada “moderiscon de Ist eto an ogra 9
‘ya parc en tne rere rancor
zai