Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los
Negocios
Inclusivos
Documento
elaborado
por
Oscar
Licandro
Revisión
general
y
edición:
Carlos
Valdivieso
Adaptación
pedagógica:
Nicna
Camargo
Copyright
©
2012
Programa
de
las
Naciones
Unidas
para
el
Desarrollo
1. INTRODUCCIÓN
En
los
últimos
10
años
han
surgido
en
América
Latina,
Asia
y
Africa
experiencias
de
inclusión
social,
basadas
en
la
creación
de
emprendimientos
(pequeñas
empresas,
cooperativas,
etc.)
protagonizados
por
comunidades
indígenas,
pequeños
campesinos,
clasificadores
de
residuos1,
personas
sin
trabajo
que
viven
en
los
barrios
pobres
de
las
grandes
ciudades,
etc..
Son
experiencias
en
las
que
sus
protagonistas
lograron
mejoras
significativas
en
su
calidad
de
vida.
Y,
más
importante
aún,
mediante
su
participación
en
esos
emprendimientos,
estas
personas
comenzaron
un
proceso
de
inclusión
económica,
social
y
política.
La
inclusión
económica
ocurre
porque
esos
emprendimientos
les
permiten
acceder
a
a
un
trabajo
estable
y
a
mejores
ingresos.
De
la
mano
de
esos
mejores
ingresos,
estas
personas
están
en
mejores
condiciones
para
mejorar
sus
viviendas,
acceder
a
servicios
básicos
como
la
atención
de
salud
o
la
educación,
mejorar
la
alimentación
de
sus
familias,
etc.
Esa
inclusión
económica
genera
inclusión
social,
porque
estas
personas
adquieren
los
derechos
derivados
de
la
formalidad
(seguro
de
desempleo,
jubilación,
etc.),
salen
del
aislamiento
ya
que
ahora
forman
parte
de
una
organización,
obtienen
una
mejor
capacitación
para
el
mundo
del
trabajo
y
empiezan
a
desarrollar
lo
que
se
denomina
capital
social.
Finalmente,
la
inclusión
económica
y
social
les
permite
ejercer
mejor
sus
derechos
ciudadanos.
Al
estar
mejor
informados,
al
tener
la
posibilidad
de
organizarse
y
tener
acceso
al
Estado
(y
a
los
servicios
que
éste
brinda
a
los
ciudadanos),
estas
personas
están
en
mejores
condiciones
para
ejercer
sus
derchos
ciudadanos.
Es
decir,
la
participación
en
estos
emprendimientos
facilita
también
su
inclusión
política.
La
población-‐objetivo
de
los
Negocios
Inclusivos
En
los
libros
y
artículos
sobre
Negocios
Inclusivos
se
utilizan
distintos
términos
para
referirse
a
sus
protagonistas
o
beneficiarios:
personas
pobres,
excluidos
socialmente,
sectores
de
bajos
ingresos,
personas
1
Son personas que recogen residuos urbanos, seleccionan los materiales que se pueden vender (plástico, papel, cartón, etc.) y
luego los comercializan a intermediarios, quienes a su vez los venden a las empresas de reciclaje. En Argentina se llaman “cartoneros”,
Brasil “catadores”, en Uruguay “hurgadores”.
Escuela
Virtual
del
PNUD
|
DRALC
|
www.escuelapnud.org
1
marginadas,
etc..En
este
manual
se
optó
por
utilizar
la
expresión:
Base
de
la
Pirámide
(BDP),
que
fue
acuñada
por
el
Prof.
C.
H.
Prahalad
a
comienzos
de
los
2000.
Se
ha
elegido
este
término
por
varias
razones.
En
primer
lugar,
porque
evita
toda
connotación
peyeroativa.
En
segundo
lugar,
porque
hace
referencia
a
un
concepto
universalmente
utilizado,
que
es
el
de
Pirámide
Social.
Y,
en
tercer
lugar,
porque
no
presenta
las
complejidades
conceptuales
de
los
otros
términos.
Por
ejmplo,
¿qué
significa
efectivamente
el
término
“pobreza”?
BASE
DE
LA
PIRÁMIDE
Este
término
describe
la
población-‐objetivo
de
la
estrategia
de
negocios
inclusivos.
Esta
población
varía
según
los
continentes,
los
países
y
los
contextos
particulares
dentro
de
cada
páis.
Incluye,
entre
otros,
a
comunidades
indígenas,
trabajadores
rurales
informales,
campesinos,
pequeños
productores
agrícola-‐ganaderos
con
economías
de
subsitencia,
personas
que
residen
en
asentamientos
urbanos
irregulares,
clasificadores
de
residuos,
etc.
2. Primeros
ejemplos
A
continuación
se
describen
tres
experiencias
de
negocios
inclusivos.
Léalas
detenidamente
y
conteste
las
preguntas
que
se
formulan
al
final
de
cada
caso.
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá.
Paraguay.2
Una
comunidad
en
Paraguay
ha
logrado
el
acceso
a
agua
potable
sin
depender
de
donaciones
o
subsidios
estatales.
Este
ingenioso
modelo
de
“agua
comunitaria”
está
demostrando
que
al
usar
un
modelo
basado
en
mecanismos
de
mercado
es
posible
llevar
el
agua
a
las
personas
de
bajos
ingresos.
La
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá,
dirigida
por
Mirta
Páez,
socia
de
AVINA,
está
proveyendo
desde
el
año
1974
agua
potable
a
los
habitantes
de
la
comunidad.
La
Junta
es
gerenciada
por
los
mismos
usuarios,
permitiendo
la
participación
de
las
personas
de
bajos
ingresos
en
la
toma
de
decisiones.
Un
aspecto
destacable
de
la
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá
es
que
ha
logrado
proveer
el
servicio
sin
pérdidas
de
capital.
De
hecho,
lleva
más
de
una
década
con
rendimientos
positivos,
llegando
a
más
de
50,000
dólares
por
año
en
el
pasado
quinquenio.
La
Junta
se
ha
constituido
como
una
organización
sin
fines
de
lucro,
y
sus
ganancias
son
juiciosamente
reinvertidas
para
mejorar
el
servicio
y
expandir
su
cobertura
a
más
usuarios.
Por
otra
parte,
la
Junta
es
consciente
de
la
importancia
de
la
sostenibilidad
en
su
actividad.
Por
ello,
ejecuta
programas
para
promover
el
consumo
racional
del
agua,
y
está
construyendo
una
planta
de
tratamiento
de
aguas
residuales
usando
bio-‐filtros
innovadores
y
de
bajo
costo,
con
el
fin
de
proteger
a
las
fuentes
hídricas
de
la
contaminación.
En
la
actualidad
más
de
6.800
familias
de
la
ciudad
de
Itaugua
-‐
la
mayoría
de
la
población
-‐
reciben
agua
de
la
Junta,
la
cual
está
planeando
adquirir
empresas
privadas
de
distribución
de
agua
potable
que
también
operan
en
la
ciudad,
con
el
fin
de
expandir
la
cobertura
de
sus
servicios,
beneficiando
a
más
familias
de
bajos
ingresos,
con
mejores
servicios
y
costos
más
accesibles.
Fuente:
Fundación
AVINA3
2
Se puede ampliar información sobre este caso en http://jsitaugua.org.py/2011/historia.html
3 El texto de este caso fue extraído del documento de trabajo de Fundación AVINA, titulado: Utilizando mecanismos de mercado para
conseguier acceso económico a agua potable. Una versión más actualizada de este caso puede leerse en
http://www.avina.net/esp/wp-content/uploads/2012/05/13.-Ficha-Junta-de-Saneamiento-copia.pdf
Preguntas:
P1.
Este
emprendimiento,
¿Mejora
la
calidad
de
vida
de
las
personas?
¿En
qué
la
mejora?
P3.
¿Es
éste
un
emprendimiento
ambientalmente
responsable?
¿Por
qué?
Cooperativa
de
trabajo
LUCI
VID.
Córdoba.
Argentina
LUCI-‐VID
es
una
Cooperativa
de
Trabajo
que
ofrece
servicios
de
mantenimiento
edilicio
a
distintos
comercios
y
particulares
en
la
zona
céntrica
de
la
ciudad
de
Córdoba.
Sus
nueve
socios
están
de
acuerdo
en
que
trabajan,
desde
el
inicio
de
la
actividad,
con
el
claro
objetivo
de
salir
de
la
pobreza
y
poder
mejorar
la
situación
social
y
económica
de
sus
núcleos
familiares..
Los
socios
de
LUCI-‐VID
se
conocieron
a
través
de
Fundación
La
Luciérnaga,
una
organización
de
la
ciudad
de
Córdoba
que
trabaja
para
mejorar
la
calidad
de
vida
de
los
niños,
adolescentes
y
jóvenes
trabajadores
en
situación
de
calle
y
sus
familias.
Antes
de
conformar
la
cooperativa,
estos
jóvenes
trabajaban
en
la
calle,
limpiando
vidrios
de
autos
y
vendiendo
las
revistas
que
se
producen
en
la
Fundación.
Cooperativa
LUCI-‐VID
realiza
diversos
servicios
de
mantenimiento
edilicio,
principalmente
en
comercios
de
la
ciudad.
Entre
los
más
importantes
se
encuentran
la
limpieza
de
vidrieras,
toldos,
carteles,
persianas
y
pisos;
limpieza
de
alfombras
y
tapizados;
pulido
de
pisos
parquet;
y
pintura
en
paredes,
techos
y
persianas.
Gracias
a
algunos
créditos
conseguidos,
la
cooperativa
cuenta
con
máquinas
y
herramientas
que
les
facilitan
el
trabajo.
De
los
nueve
socios-‐miembros
de
la
cooperativa
dos
son
mujeres.
Todos
ellos,
jóvenes
de
entre
20
y
30
años,
viven
en
barrios
marginales
de
la
Ciudad
de
Córdoba
y
del
Gran
Córdoba.
La
cooperativa
representa
casi
la
totalidad
del
ingreso
que
perciben
los
socios
y
sus
familias
-‐esposas,
hijos
y,
en
algunos
casos,
los
padres-‐
lo
que
resulta
en
beneficios
directos
para
un
total
de
25
personas
aproximadamente.
Este
Negocio
Inclusivo
resulta
distintivo,
entre
otras
cuestiones,
porque
fue
ideado
por
los
propios
jóvenes
en
situación
de
calle.
Ellos
tuvieron
la
idea
y
utilizaron
todas
las
herramientas
a
su
alcance
para
hacer
progresar
su
negocio.
El
negocio
genera
valor
económico
mediante
la
prestación
de
un
servicio
de
buena
calidad
a
un
precio
accesible
en
relación
a
otras
empresas
que
brindan
el
mismo
servicio.
Esto
permite
a
la
cooperativa
competir
en
el
mercado
de
las
empresas
del
rubro
y
seguir
creciendo.
Asimismo,
incorpora
a
la
economía
formal
a
nueve
jóvenes
que
anteriormente
se
encontraban
trabajando
en
la
calle,
y
a
sus
respectivas
familias.
Ellos
a
su
vez,
tienen
el
objetivo
de
hacer
que
este
emprendimiento
crezca
para
poder
incorporar
a
más
socios,
y
lograr
así
que
más
personas
puedan
beneficiarse
por
medio
de
esta
iniciativa.
Fuente:
IARSE.
Negocios
Inclusivos.
Casos
nacionales
de
buenas
prácticas.
Córdoba.
2009
Preguntas:
P1.
Este
emprendimiento,
¿mejora
la
calidad
de
vida
laboral
y
familiar
de
sus
jóvenes
protagonistas?
¿En
qué
la
mejora?
P2.
En
base
a
la
escasa
información
que
se
brinda,
¿cree
Ud
que
este
emprendimiento
es
viable
desde
el
punto
de
vista
económico?
¿Por
qué?
UNION
DE
CLASIFICADORES
DE
POLIETILENO
(UCAP).
Montevideo
Uruguay
UCAP
es
una
cooperativa
integrada
por
seis
personas
que
anteriormente
se
desempeñaban
como
clasificadores
de
basura
en
las
calles.
A
principios
de
los
2000,
la
Obra
San
Vicente
(OSV),
una
ONG
de
larga
trayectoria
de
trabajo
en
uno
de
los
barrios
más
pobres
de
Montevideo,
puso
en
marcha
apoyo
financiero
del
BID,
un
programa
que
tenía
como
cometido
sacar
a
los
clasificadores
de
las
calles
y
nuclearlos
en
emprendimientos
asociativos.
UCAP
es
uno
de
los
emprendimientos
inclusivos
que
se
crearon
en
el
marco
del
programa.
Este
grupo
se
propuso
desarrollar
un
emprendimiento
que
se
dedicara
al
reciclaje
de
polietileno
y
produjera
bolsas
de
resíduos.
En
esos
momentos,
CONAPROLE,
la
principal
industria
láctea
de
Uruguay,
tomó
conocimiento
del
programa
y
se
acercó
la
OSV
para
ofrecerle
a
UCAP
la
gestión
de
los
residuos
plásticos
que
genera
en
su
Centro
Industrial
de
Montevideo.
UCAP
se
constituyó
como
cooperativa
en
noviembre
de
2004,
y
comenzó
a
operar
el
24
de
junio
de
2005.
Está
integrada
por
seis
socios
y
participan
de
su
actividad
otras
ocho
personas,
entre
los
que
se
incluyen
empleados
y
serenos
que
trabajan
en
la
planta
de
clasificación
y
los
choferes
del
camión
contratado.
La
cooperativa
opera
en
una
planta
de
clasificación
que
se
encuentra
en
un
predio
cedido
en
comodato
por
la
OSV.
Dicho
local
posee
una
explanada
para
clasificar,
un
galpón,
comedor
y
vestuarios.
La
cooperativa
cuenta
con
equipamiento
para
el
tratamiento
de
los
residuos,
entre
los
que
destacan
balanza
e
hidrolavadora.
Para
el
trasporte
de
la
basura
emplean
contenedores
de
un
metro
cúbico
con
ruedas,
que
fueron
cedidos
en
comodato
por
la
Intendencia
de
Montevideo
y
un
camión
con
plataforma,
que
es
contratado
a
un
tercero.
Cuenta
además
con
una
mesa
especial
que
permite
la
recolección
de
líquidos,
que
se
utiliza
para
el
tratamiento
de
los
residuos
orgánicos.
En
los
hechos,
UCAP
opera
en
tres
negocios:
1)
el
servicio
de
recolección
y
eliminación
de
residuos
industriales
que
brinda
a
CONAPROLE;
2
la
clasificación
y
comercialización
de
materias
primas
recuperadas
de
esos
residuos;
y
3)
se
destina
una
parte
del
polietileno
a
la
producción
de
bolsas,
que
es
subcontratada
a
un
tercero,
las
que
luego
son
vendidas
a
la
OSV,
que
las
utiliza
los
convenios
de
recolección
de
resíduos
en
la
vía
pública,
que
posee
con
la
IMM.
La
conformación
del
emprendimiento
asociativo
representa
una
mejora
sustancial
de
la
actividad
económica
con
respecto
a
la
recolección
y
clasificación
en
la
calle.
La
cooperativa:
1)
vende
un
servicio
por
el
cual
CONAPROLE
paga
un
precio;
2)
concentra
en
un
solo
lugar
la
recolección
de
las
materias
primas
que
luego
clasifica
y
vende
en
la
cadena
de
reciclaje;
3)
Mejora
la
calidad
de
la
materia
prima
(resíduos)
y
se
asegura
un
volumen
importante
y
4)
En
cooperativa,
los
clasificadores
tienen
mayor
escala
para
vender
las
materias
primas,
lo
que
les
permite
saltear
a
los
pequeños
intermediarios
de
barrio
(quienes
establecen
relaciones
cuasi-‐feudales
con
los
clasificadores)
y
vender
directamente
a
los
grandes
acopiadores
y/o
a
las
empresas
que
reciclan.
Fuente:
elaboración
del
Prof.
Oscar
Licandro
Preguntas:
P1.
Este
emprendimiento,
¿mejora
la
calidad
de
vida
laboral
y
familiar
de
los
clasificadores?
¿En
qué
la
mejora?
P2.
¿Es
este
un
emprendimiento
económicamente
viable?
P3.
¿Es
éste
un
emprendimiento
ambientalmente
responsable?
¿Por
qué?
3. ¿Qué
son
los
negocios
inclusivos?
A
continuación
se
presenta
una
definición
del
concepto
de
Negocios
Inclusivos:
b) Deben
ser
rentable
por
sí
mismos
(al
menos
en
el
mediano
plazo)
a
efectos
de
garantizar
su
sustentabilidad.
Veamos
una
explicación
del
significado
de
cada
uno
de
esos
requisitos.
No
es
posible
la
inclusión
social
sin
inclusión
económica.
La
adquisición
de
servicios
básicos
de
salud
y
educación,
el
tener
vivienda
propia
y
el
acceder
a
una
alimentación
adecuada
requieren
que
las
personas
reciban
ingresos
económicos.
Como
en
nuestras
economías
no
se
ha
podido
resolver
el
problema
de
ofrecer
empleo
en
relación
de
dependencia
a
todas
las
personas,
un
camino
alternativo
es
la
creación
de
emprendimentos
protagonizados
por
esas
mismas
personas.
Como
la
economía
que
rige
la
casi
totalidad
de
las
transacciones
económicas
es
la
denominada
economía
de
mercado,
no
resulta
viable
diseñar
emprendimientos
que
operen
fuera
de
ella.
Pero,
¿qué
quiere
decir
“operar
dentro
de
la
economía
de
mercado”?
Simplemente
significa
que
los
emprendimientos
inclusivos,
para
generar
inclusión
real
y
duradera,
tienen
que
desarrollar
la
capacidad
de
producir
bienes
o
servicios
que
satisfagan
necesidades
del
mercado
(grupos
de
compradores)
y
que
sean
capaces
de
competir
en
precio
y/o
calidad
con
otros
productores.
No
se
trata
de
una
postura
ideológica
sino
de
una
constatación
empírica.
Para
obtener
clientes
esta
cooperativa
tiene
Está
considerando
comprar
empresas
que
salir
a
competir
con
las
empresas
ya
privadas
de
agua
para
expandirse
y
llevar
instaladas,
que
brindan
los
mismos
servicios
su
servicio
a
más
familias
de
la
base
de
la
dirgidos
en
el
mismo
mercado
pirámide
que
viven
en
su
localidad.
Esto
quiere
decir
que
la
JSI
pretende
competir
en
el
mercado
para
llevar
su
beneficio
a
más
familias
UCAP
b) Tienen
que
ser
rentables
por
sí
mismos
Esto
quiere
decir,
que
su
viabilidad
en
el
mediano
y
largo
plazo
no
puede
depender
de
subsidios
o
apoyos
externos
a
la
lógica
del
mercado
en
el
que
operan.
Dado
que
la
sustentabilidad
de
cualquier
negocio
depende
de
su
capacidad
para
producir
y
comercializar
bienes
o
servicios
que
otros
estén
dispuestos
a
comprar,
los
emprendimientos
inclusivos
tienen
que
estar
diseñados
para
competir
en
igualdad
de
condiciones
con
las
empresas
ya
existentes.
Aspectos
como
la
calidad,
el
cumplimiento
de
plazos
de
entrega,
el
diseño
de
los
productos
en
forma
acorde
con
,los
gustos
y
necesidades
de
los
compradores,
son
condición
necesaria
para
la
viabilidad
económica.
La
sustentabilidad
económica
depende
de
resolver
en
forma
adecuada
un
conjunto
de
temas,
entre
los
que
importa
destacar:
a) Tener
una
buena
gestión
administrativa
y
de
la
producción
b) Desarrollar
bienes
o
servicios
para
los
cuales
exista
una
demanda
efectiva.
Esto
implica
razonar
en
términos
de
“lo
que
puedo
vender”,
más
de
“lo
que
sé
hacer
o
lo
que
quiero
vender”.
c) Contar
con
la
capacidad
material
que
se
requiere
para
llevar
los
productos
hasta
los
compradores.
Uno
de
los
mayores
problemas
de
los
emprendimientos
de
personas
de
la
base
de
la
pirámide
es
su
dificultad
para
acceder
a
los
canales
habituales
de
comercialización
de
los
distintos
bienes
y
servicios.
d) Vender
a
un
precio
que
permita:
1)
recuperar
los
costos
operativos
del
emprendimiento;
2)
proveer
un
ingreso
adecuado
a
sus
integrantes
y
3)
generar
un
excedente
que
asegure
la
mínima
reinversión
que
necesita
el
emprendimiento.
Esto
significa
que
el
emprendimiento
es
rentable.
LUCI
VID
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá
El
emprendimiento
brinda
un
servicio
de
Lleva
más
de
una
década
con
rendimientos
calidad
para
conseguir
clientes
y
generar
positivos,
llegando
a
más
de
50,000
ingresos
para
los
cooperativistas
y
sus
dólares
por
año.
Y,
además,
reinvierte
sus
familias
(25
persona).
Los
cooperativistas
ganancias
para
mejorar
la
calidad
del
generan
un
excedente,
que
luego
reinvierten
servicio
y
llegar
a
más
familias.
en
equipos
e
insumos.
Además,
se
plantean
crecer
para
poder
incluir
más
cooperativistas.
UCAP
Capital
paciente
Cualquier
nuevo
emprendimiento
necesita
un
capital
inicial
que
le
sirva,
entre
otras
cosas,
para
invertir
en
infraestructura
o
equipos
y
para
financiar
la
actividad
de
la
empresa
mientras
las
ventas
no
equilibran
los
costos.
Ninguna
empresa
gana
dinero
desde
el
principio.
A
diferencia
de
los
emprendimientos
comunes
y
corrientes
(donde
los
emprendedores
cuentan
con
capital
o
tienen
la
capacidad
de
financiar
el
incio
de
las
actividades),
los
protagonistas
de
los
negocios
inclusivos
carecen
de
capital
inicial.
Más
aún,
estos
emprendimientos
requieren
inversiones
en
capacitación,
organización,
asistencia
técnica
y
apoyo
social,
que
sus
protagonistas
no
pueden
pagar
ni
financiar.
En
muchas
ocasiones
estos
proyectos
son
posibles
únicamente
si
existe
un
capital
inicial
aportado
por
otros
actores.
Expresiones
como
“capital
semilla”
o
“créditos
no
reintegrables”
refieren
a
mecanismos
de
apoyo
financiero
que
se
suelen
aplicar
en
el
desarrollo
de
negocios
inclusivos.
En
suma,
los
emprendimientos
inclusivos
requieren
una
inversión
inicial
que
no
la
pueden
asumir
sus
protagonistas.
Y,
por
lo
tanto,
alguien
tiene
que
asumirla.
En
ocasiones,
esa
inversión
está
a
cargo
de
la
sociedad,
mediante
aportes
de
capital,
programas
de
capacitación
o
asistencia
técnica
que
brinda
el
Estado.
En
otras
ocasiones,
son
ONGs
que
canalizan
fondos
de
la
cooperación
internacional.
c) Tienen
que
ser
ambientalmente
responsables.
Este
requisito
responde
al
hecho
comprobado
de
que
las
comunidades
y
colectivos
de
la
base
de
la
pirámide
son
los
más
perjudicados
por
el
impacto
ambiental
de
los
sistemas
productivos.
Es
el
caso
de
las
comunidades
indígenas
a
las
que
se
destruye
su
hábitat,
los
pequeños
agricultores
afectados
por
la
contaminación
industrial,
los
pobres
urbanos
que
residen
en
asentamientos
o
villas
miseria
donde
se
acumula
basura,
etc.
¿Qué
sentido
tiene
desarrollar
emprendimientos
que
mejoran
los
ingresos
pero
que,
al
mismo
tiempo,
destruyen
el
hábitat
en
donde
residen
y
de
donde
extraen
sus
recursos
las
personas
de
la
base
de
la
pirámide?
Existe
una
segunda
razón
para
este
requisito,
aunque
la
misma
no
lo
convierte
en
obligatorio.
Es
un
hecho
que
una
importante
fuente
de
oportunidades
para
el
desarrollo
de
negocios
inclusivos
se
encuentra
en
las
cadenas
de
reciclaje.
Esta
afirmación
es
avalada
por
múltiples
experiencias
de
clasificadores
de
residuos
y
de
pequeños
productores
que
reutilizan
desechos
para
alimentar
sus
animales,
abonar
sus
tierras
o
elaborar
prendas
de
vestir.
El
desarrollo
de
tecnologías
apropiadas
ha
permitido
utilizar
desechos
de
madera
para
construir
casas
y
ya
existen
artefactos
para
generar
energías
limpias
y
baratas
sobre
la
base
de
residuos
de
papel
y
cartón.
UCAP
d) Tienen
que
generar
una
mejora
en
la
calidad
de
vida
de
sus
protagonistas.
No
alcanza
con
que
un
emprendimiento
permita
generar
ingresos
económicos,
si
en
el
mediano
y
largo
plazo
perpetúa
la
situación
de
partida
de
sus
protagonistas.
De
igual
forma,
no
son
inclusivos
aquellas
actividades
económicas
fomentadas
por
grandes
empresas
únicamente
para
reducir
costos
sobre
la
base
de
la
explotación,
como
es
el
caso
de
la
maquila.
Los
emprendimientos
inclusivos
mejoran
la
calidad
de
vida
de
varias
formas.
En
primer
lugar,
porque
la
mejora
o
la
estabilidad
en
los
ingresos
económicos
impacta
sobre
la
capacidad
de
las
personas
para
adquirir
bienes
y
servicios
básicos.
En
segundo
lugar,
porque
pueden
disponer
de
dinero
para
educar
a
sus
hijos,
desplazarse
a
otros
lugares
y
comenzar
LUCI
VID
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá
La
cooperativa
permitió
a
los
jóvenes
salir
Al
brindar
acceso
al
agua
potable
a
precios
de
la
venta
informal
en
las
calles,
la
que
se
que
las
comunidades
de
la
BDP
pueden
hacía
en
condiciones
precarias
para
su
salud
pagar,
la
JSI
está
contribuyendo
y
su
seguridad
física.
Además
les
permitió
fuertemente
a
la
mejora
en
la
calidad
de
generar
un
ingreso
para
sus
familias
e
vida
de
esas
comunidades.
ingresar
en
la
formalidad
UCAP
Los
miembros
de
UCAP
dejaron
de
trabajar
en
las
calles
y
pasaron
a
hacerlo
en
un
local
cerrado,
con
equipamiento
adecuado
y
mejores
condiciones
para
la
salud
y
la
seguridad.
Al
comenzar
a
trabajar
en
la
formalidad,
tienen
acceso
a
la
cobertura
integral
de
salud
que
brinda
el
Estado
a
todos
los
trabajodores
formales
y
adquieren
derecho
a
la
jubiliación.
Ya
no
llevan
la
basura
a
sus
casas
para
allí
clasificarla.
Los
hijos
ya
no
trabajan
en
la
clasificación
y
pueden
ir
a
la
escueala.
El
clasificador
de
la
calle
es
una
persona
socialmente
discriminada,
razón
por
la
cual,
el
integrar
la
cooperativa
contribuye
a
una
mejora
en
la
autoestima
de
estas
personas.
4. Formato
de
los
Negocios
Inclusivos
Si
se
observan
con
detenimiento
los
tres
casos
anteriores,
se
puede
ver
que
en
dos
de
ellos
(LUCI
VID
y
UCAP)
la
población
de
la
BDP
ocupa
el
lugar
de
productores,
que
en
ambos
casos
se
trata
de
servicios.
En
cambio,
en
el
caso
de
la
Junta
de
Saneamiento
de
Itauguá,
las
población
de
la
BDP
desempeña
los
dos
roles:
administran
la
JSI
(lo
que
los
convierte
en
productorees
del
servicio),
pero
tambien
son
los
clientes
de
servicio.
LUCI
VID
UCAP
Junta
de
Saneamiento
de
Itaiguá
Los
jóvenes
cooperativistas
Los
cooperativistas
proveen
crearon
un
emprendimiento
el
servicio
de
gestión
de
La
JSI
es
una
institución
que
provee
servicios
a
residuos
a
CONAPROLE
y
de
los
usuarios
(productores
del
empresas,
edificios,
etc.
venden
materias
primas
servicio)
que
vende
el
agua
a
reciclables
a
acopiadores
y
los
usuarios
(consumidores
del
fabricantes.
servicio)
Estos
tres
ejemplos
muestran
que
los
“protagonistas”
de
negocios
inclusivos
(tal
como
se
definió
este
concepto)
pueden
ocupar
dos
lugares
diferentes:
actuar
como
“productores”
(quienes
fabrican
y/o
comercializan)
o
como
“consumidores”
(quienes
compran).
Veamos
a
continuación
otros
dos
casos.
ENKASTRABLE
–
Muebles
para
armar
–
MASISA.
Argentina
Masisa
es
una
gran
empresa
de
América
Latina,
que
se
dedica
a
la
producción
y
comercialización
de
tableros
de
madera
para
muebles
y
arquitectura
de
interiores.
Opera
en
México,
Colombia,
Brasil,
Chile
y
Argentina.
Masisa
Argentina
no
fabrica
muebles,
pero
en
2004
puso
en
marcha
un
proyecto
llamado
ENKASTRABLE,
mediante
el
cual
se
comenzaron
a
fabricar
muebles
para
encastrar
de
bajo
costo,
dirigidos
a
la
BDP.
Eran
fáciles
de
armar,
de
lindo
diseño
y
buena
calidad.
Masisa
fabricaba
los
muebles
y
los
vendía
a
pequeños
locales
de
venta
de
muebles
económicos.
En
estos
locales,
los
muebles
se
venderían
por
exhibición
y
catálogo.
La
idea
era
generar
una
red
de
distribución
ubicada
en
las
zonas
donde
reside
la
BDP.
Al
poco
tiempo
de
iniciada
la
experiencia,
los
ejecutivos
de
Masisa
se
dieron
cuenta
que
este
modelo
de
negocios4
no
funcionaba
adecuadamente
por
dos
razones
principales:
1º)
los
costos
de
producción
de
Masisa
implicaban
precios
altos
para
la
BDP
y
2º)
el
canal
de
distribución
elegido
no
era
el
adecuado.
Entonces
decidieron
cambiar
el
model
de
negocios.
A
partir
de
2006,
Masisa
se
concentró
en
la
fabricación
de
los
tableros
y
traspasó
la
fabricación
de
los
4 Vea en el Glosario la definición del término Modelo de Negocios
muebles
a
pequeños
carpinteros
de
la
BDP.
Mediante
alianzas
con
fundaciones
y
ONGs,
se
convocó
a
personas
sin
alternativa
laboral.
Se
comenzaron
a
dictar
cursos
para
capacitarlas
en
la
fabricación
de
los
muebles
y
en
la
gestión
de
sus
pequeños
emprendimientos.
El
corte
de
los
tableros
se
hace
en
los
locales
donde
Masisa
comercializa
sus
placas,
denominados
Placacentros.
De
este
modo,
Masisa
desarrolló
carpiteros
que
agregan
valor
a
su
producto
(las
placas),
mediante
la
fabricación
y
comercialización
para
la
BDP.
Además
de
la
capacitación,
estos
carpinteros
reciben
de
Masisa
la
infraestructura
para
el
corte
de
los
tableros,
por
lo
que
no
tienen
que
invertir
en
maquinaria.
Entre
2007
y
2009
se
incorporaon
506
carpinteros.
Fuente:
Grupo
Nueva5.
En
este
caso
encontramos
que
la
población
de
la
BDP
es
considerada
como
consumidora
de
los
muebles
encastrables.
Pero
también
hay
dos
nuevas
formas
de
involucrarla
en
el
negocio.
Los
carpinteros
de
la
BDP
son
empresarios,
pero
no
actúan
como
proveedores
de
Masisa,
sino
que
se
ubican
en
otro
lugar
dentro
de
la
cadena
de
valor6
de
esa
empresa.
Ellos
toman
como
insumo
las
placas
de
madera
que
fabrica
Masisa,
para
fabricar
a
su
vez
los
muebles,
que
ellos
mismos
comercializan
a
la
base
de
la
pirámide.
Cuando
esto
ocurre,
se
dice
que
el
emprendimiento
inclusivo
se
ubica
“hacia
adelante”
en
la
cadena
de
valor
de
la
empresa.
En
cambio,
cuando
el
emprendimiento
inclusivo
vende
bienes
o
servicios
a
la
empresa
(o
sea,
es
su
proveedor),
se
dice
que
se
encuentra
“hacia
atrás”
en
la
cadena
de
valor.
Veamos
a
continuación
la
cadena
de
valor
de
CONAPROLE
y
la
de
MASISA,
a
los
efectos
de
identiricar
el
lugar
que
UCAP
y
los
carpinteros
ocupan
en
sus
cadenas
de
valor.
5 Este caso fue elaborado en base a información de Grupo Nueva, el grupo al que pertenece Masisa.
6
La cadena de valor de una empresa está constituida por el conjunto de empresas que: 1)participan en el proceso de fabricación de bienes
y servicios que son utilizados por la empresa para su proceso productivo; 2) participan en el proceso de comercialización de los bienes y
servicios que produce la empresa (distribuidores, mayoristas, minoristas, etc.)
El
siguiente
caso
ilustra
sobre
otra
forma
de
ubicarse
“hacia
adelante”
en
la
cadena
de
valor
de
una
empresa.
ASTA:
Red
vendedores
de
la
BDP.
Río
de
Janeiro.
Brasil
Alice
Freitas,
contacto
cercano
de
AVINA,
y
su
organización
Instituto
Realice,
en
alianza
con
los
socios
de
AVINA
Rudolf
Hohn
y
Helio
Mattar,
están
desarrollando
un
innovador
modelo
para
la
venta
de
artesanías
que
busca
resolver
problemas
de
pobreza
urbana:
la
Red
Asta.
Esta
red
está
adaptando
el
modelo
de
ventas
puerta
a
puerta
mediante
redes
sociales,
inventado
por
compañías
como
Avon
y
Natura,
para
vender
productos
elaborados
por
cooperativas
populares
y
grupos
productivos
comunitarios
en
el
área
metropolitana
de
Río
de
Janeiro.
En
este
modelo,
Asta
distribuye
artesanías
y
otros
productos,
fabricados
por
veinticinco
productores
socialmente
responsables
y
ubicados
en
sectores
de
bajos
ingresos,
prefiriendo
los
productores
que
se
ocupan
de
problemas
de
raza
y
género.
Todos
estos
productores
son
sociedades
cooperativas
dedicadas
a
productos
artesanales
de
alta
calidad.
Los
vendedores
son
profesionales,
y
trabajan
por
comisión,
obteniendo
el
22%
de
las
utilidades
de
sus
ventas.
A
pesar
de
que
Asta
se
encuentra
en
una
fase
inicial,
la
organización
se
ha
propuesto
metas
ambiciosas
de
ganancias
para
los
dos
primeros
años.
Además,
la
red
ha
esbozado
un
plan
agresivo
de
expansión
a
tres
años.
Asta
trabaja
hoy
con
24
grupos
proveedores.
El
plan
de
negocios
de
Asta
incluye
un
aumento
de
más
de
100%
en
el
número
de
grupos
beneficiados.
El
crecimiento
de
las
ventas,
con
el
que
se
estima
habrá
un
margen
de
utilidad
amplio,
permitirá
financiar
la
expansión
a
futuro.
La
propuesta
de
Asta
es
aplicar
este
modelo
de
ventas
que
cuenta
con
probada
eficacia
y
con
gran
crecimiento
en
todo
mundo,
generando
así
más
ingresos
para
las
personas
de
los
grupos
productivos,
contribuyendo
a
la
reducción
de
la
pobreza
urbana.
AVINA
considera
que
el
modelo
innovador
de
Asta
es
una
nueva
manera
de
comercializar
productos
sociales,
con
gran
potencial
de
replicación,
y
propone
apoyar
el
crecimiento
de
la
red
contribuyendo
a
su
consolidación
como
negocio
y
la
obtención
de
fuentes
de
financiamiento.
Fuente:
AVINA7.
ASTA
es
una
organización
a
que
nuclea
vendedoras
de
la
BDP.
Esta
empresa
se
dedica
a
la
comercializaión
productos
elaborados
por
cooperativas
de
artesanos
de
la
BDP.
Este
modelo
de
negocios
permite
potenciar
dos
actividades
económicas
de
personas
de
la
BDP:
los
productores
artesanales
de
productos
elaborados
y
las
vendedoras
de
la
BDP.
En
este
caso
aparece
una
nueva
forma
de
participar
en
cadenas
de
valor,
consistente
en
la
comercialización
de
productos.
El
modelo
no
es
nuevo,
ya
que
fue
inventando
por
AVON
y
es
utilizado
por
grandes
empresas
regionales,
como
NATURA
(Brasil)
o
NUVO
(Uruguay).
El
modelo
de
negocios
de
estas
empresas
consiste
en
la
contratación
de
emprendimientos
individuales
de
personas
de
la
BDP
para
comercializar
sus
productos.
De
modo
que
ésta
es
otra
forma
de
inclusión
económica,
pero
esta
vez
no
lo
hace
mediante
la
producción
sino
de
la
comercialización.
En
suma,
si
consideramos
cada
una
de
las
formas
en
que
emprendimientos
inclusivos
participan
en
la
actividad
economica
en
relación
a
cadenas
de
valor,
se
puede
vera
que
existen
básicamente
cinco
formas
de
hacerlo.
En
la
gráfica
siguiente
se
representan
esas
cinco
formas
y
se
ubican
los
casos
anteriores
en
cada
una
de
ellas.
7 Este caso es una transcripción textual del documento de la Fundación AVINA, titulado:”Un modelo innovador de ventas para generar
ingresos para personas de bajos ingresos”. Se puede bajar de:
http://red.negociosinclusivos.org/resource/items/H/o/Hoja%20Caso8%20Rede%20Asta%20Brasil.pdf
Fuente:
elaboración
del
autor.
A
continuación
se
presenta
una
breve
explicación
de
cada
uno
de
estos
cinco
formatos
en
que
se
pueden
dividir
los
negocios
inclusivos
que
considean
a
la
BDP
como
agente
productor
de
bienes
o
servicios.
a) Negocios
inclusivos
que
operan
como
proveedores
exclusivos
de
una
empresa
o
institución.
Se
trata
de
emprendimientos
que
producen
insumos
(materias
primas,
productos
semi-‐elaborados)
o
servicios,
los
que
son
comprados
exclusivamente
por
una
empresa
grande
o
mediana
(privada
o
estatal),
un
organismo
público
o
inclusive
una
OSC.
En
el
caso
de
las
empresas,
éstas
operan
como
“ancla”
que
incluye
los
NI
dentro
de
su
cadena
de
valor.
En
general
esa
empresa
“ancla”
participa
en
la
creación
del
emprendimiento
inclusive
y
contribuye,
mediante
distintos
activos
tangibles
y/o
intangibles
(aporta
infraestructura,
materiales,
know
how,
capacitación,
etc.),
al
desarrollo
de
las
capacidades
organizacionales,
de
producción,
acceso
a
insumos,
etc.
Es
el
caso
de
UCAP,
que
gestiona
los
residuos
de
CONAPROLE
b) Negocios
inclusivos
que
operan
como
proveedores
compartidos
de
varias
empresas
o
instituciones.
Se
trata
generalmente
de
emprendimientos
nacidos
de
programas
implementados
por
organizaciones
sociales
o
por
el
Estado.
En
algunas
ocasiones,
puede
surgir
por
iniciativa
de
las
personasd
de
la
BDP,
como
ocurrió
con
LUCI
VID.
En
estos
casos,
el
NI
desarrolla
un
servicio
o
produce
un
bien
que
se
comercializa
a
diversas
empresas,
organismos
públicos
y
OSC.
c) Negocios
inclusivos
que
operan
como
emprendimientos
que
agregan
valor
a
los
productos
de
empresas
grandes
o
medianas.
Refiere
a
NI
ubicados
“hacia
adelante”,
en
la
cadena
de
valor
de
empresas
que
no
producen
bienes
terminados.
Al
igual
que
en
la
segunda
categoría,
estos
emprendimientos
reciben
el
apoyo
del
productor
de
bienes
o
servicios,
que
puede
canalizarse
por
diferentes
medios,
como
ser,
transferencia
de
tecnología,
capacitación,
acceso
a
créditos,
etc.
Todos
estos
apoyos
redundan
en
el
desarrollo
de
capacidades
en
el
negocio
inclusivo,
las
que
resultan
fundamentales
para
su
desarrollo
y
sostenibilidad.
El
caso
de
los
carpinteros
de
Masisa
ilustra
este
tipo
de
NI.
d) Negocios
inclusivos
que
producen
y/o
comercializan
directamente
productos
finales.
Incluye
NI
que
fabrican
y
comercializan
sus
productos
directamente
a
los
consumidores
finales,
tal
como
ocurre
con
la
Junta
de
Saneamiento
de
Iauguá
en
Paraguay.
Pero
también,
se
incluyen
casos
en
los
que
el
emprendimiento
comercializa
sus
productos
a
través
de
los
canales
tradicionales
de
ventas,
como
los
supermercados8
o
pequeños
comercios.
e) Negocios
inclusivos
que
actúan
como
vendedores
que
acercan
el
producto
al
consumidor
final.
Se
trata
de
emprendimientos,
generalmente
individuales,
mediante
los
cuales
personas
de
la
base
de
la
pirámide
operan
como
agentes
comerciales
de
productos
elaborados
por
empresas
grandes
o
pequeñas
y
que
están
dirigidos
a
su
propio
segmento
socio-‐económico
y/o
a
segmentos
medio-‐bajos
de
la
población.
El
caso
ASTA
ejemplifica
este
formato
de
NI,
al
igual
que
redes
como
las
de
AVON
o
NATURAL.
5. Los
negocios
inclusivos
como
estrategia
en
la
lucha
contra
la
pobreza
Las
estrategias
tradicionales
de
lucha
contra
la
pobreza
James
Austin
y
Michael
Chu
(2006)
sugieren
que
la
“necesidad
de
nuevos
marcos
conceptuales
con
respecto
a
la
pobreza
es
hoy
tan
urgente
como
nunca”.
Tradicionalmente,
la
pobreza
ha
sido
conceptualizada
como
“la
carencia
de
recursos
materiales”
(Gutiérrez
y
Lobo,
2006).
En
función
de
ello,
se
han
empleado
dos
tipos
de
estrategias
para
enfrentar
este
probleam.
Por
un
lado,
las
que
han
estado
dirigidas
a
proveer
a
los
pobres
de
esos
recursos
y,
por
otro,
las
procuran
ayudarlos
a
desarrollar
la
habilidad
de
conseguirlos
por
sí
mismos.
La
primera
de
estas
estrategias,
predominante
por
cierto,
se
ha
materializado
a
través
de
diversas
formas
de
asistencialismo.
La
segunda
ha
estado
orientada
a
ayudar
a
los
pobres
para
que
puedan
desarrollar
“la
habilidad
para
conseguir
las
cosas
por
ellos
mismos”
(Gutiérrez
y
Lobo,
2006).
Así,
por
ejemplo,
los
grandes
programas
de
capacitación
para
la
inserción
laboral,
la
asistencia
técnica
destinada
a
la
creación
de
micoremprendimientos
o
el
desarrollo
del
microcrédito,
de
los
últimos
veinte
años,
ilustran
esta
segunda
estrategia.
Por
su
propia
definición,
la
primera
estrategia
nunca
estuvo
enfocada
a
“sacar”
a
los
probres
de
su
situación
estructural.
Por
su
parte,
la
segunda
estrategia
se
carácterizó
por
un
gran
simplismo
y
voluntarismo.
El
simplismo
le
impidió
identificar
y
actuar
sobre
las
grandes
restricciones
estructurales
que
8 Las cooperativa uruguaya de alimentos envasados Delicias Criollas es un buen ejemplo de este formato de negocios inclusivos.
dificultan
la
salida
de
la
pobreza
(básicamente,
la
falta
de
competencias
y
activos
sociales
mínimos).
Y,
el
voluntarismo
indujo
al
diseño
de
estrategias
de
inclusión
económica
que
suponían
la
viabilidad
económica
de
emprendimientos
que
no
cumplían
con
requisitos
mínimos
de
la
economía
de
mercado
(acceso
a
mercados
e
insumos,
calidad
de
los
productos,
etc.).
La
nueva
estrategia
de
los
negocios
inclusivos
A
fines
de
los
años
noventa
se
empezó
a
concebir
la
pobreza,
como
“la
inhabilidad
de
controlar
las
circunstancias
propias”,
más
que
como
la
“carencia
de
recursos
materiales”.
Esta
forma
de
definir
la
pobreza
sirve
para
identificar
los
principales
factores
que
la
generan.
Además
de
la
falta
de
recursos
materiales,
los
pobres
poseen
serias
dificultades
para:
1)
organizarse
y
llevar
adelante
acciones
colectivas;
2)
trabajar
en
red
y
3)
interactuar
en
los
espacios
públicos
de
negociación
(en
particular
con
los
instituciones
gubernamentales).
Se
trata
de
un
abordaje
socio-‐cultural,
complementario
del
económico.
En
paralelo
comenzó
a
madurar
la
idea
de
que
no
es
posible
la
inclusión
social
sin
inclusión
económica.
Es
decir,
la
posibilidad
de
tener
las
necesidades
básicas
cubiertas
y
de
disponer
de
los
recursos
materiales
e
intangibles
mínimos
para
ejercer
plenamente
los
derechos
de
ciudadanía,dependen
de
la
incorporación
real
al
único
sistema
económico
vigente:
la
economía
de
mercado.
En
ese
marco
de
ideas
se
consolidó
conceptualmente
la
tercera
estrategia.
Esta
estrategia
se
propone
generar
inclusión
económica
mediante
acciones
focalizadas
en
la
incorporación
de
comunidades
y
familias
pobres
a
la
economía
de
mercado.
Si
bien
la
idea
de
crear
emprendimientos
protagonizados
por
estos
segmentos
de
la
población
formó
parte
de
la
segunda
estrategia
ya
mencionada
,
lo
que
sí
resulta
novedoso
son
los
supuestos
que
dan
el
fundamento
a
este
fenómeno
emergente
que
ha
dado
en
llamarse
Negocios
Inclusivos.
Dichos
supuestos
son:
1) la
inclusión
social
requiere
la
transformación
de
los
pobres
en
agentes
económicos
integrados
dentro
de
la
economía
de
mercado;
2) convertirse
en
agentes
económicos
integrados
implica
que
estos
segmentos
tengan
la
posibilidad
de
acceder
a
bienes
y
servicios
que
mejoran
su
calidad
de
vida
(visualizar
a
los
pobres
como
consumidores)
y
de
incorporarse
a
los
sistemas
de
producción
y
comercialización
existentes
(visualizar
a
los
pobres
como
empleados
o
empresarios);
3) para
convertirlos
en
agentes
económicos
integrados
es
necesario
levantar
las
restricciones
socio-‐
culturales
que
limitan
la
capacidad
de
estos
segmentos
para
actuar
dentro
de
los
parámetros
de
la
economía
de
mercado
(formas
tradicionales
de
producción,
resistencia
al
trabajo
asociativo,
bajos
estándares
de
calidad,
etc.);
4) es
imprescindible
la
participación
del
sector
privado
como
motor
de
ese
proceso
de
inclusión,
ya
sea
mediante
el
desarrollo
de
bienes
y
servicios
destinados
a
la
mejora
de
la
calidad
de
vida
de
los
pobres,
como
a
través
de
la
incorporación
de
emprendimientos
de
personas
pobres
a
la
cadena
de
valor
(proveedores,
actores
que
agregan
valor
a
sus
productos,
agentes
dentro
de
la
cadena
de
distribución,
etc.)
de
las
empresas.
En
la
tabla
siguiente
se
resumen
tres
aspectos
asociados
a
cada
una
de
esas
tres
estrategias:
1)
el
concepto
sobre
la
pobreza
subyacente
a
cada
una
de
ellas;
2)
la
finalidad
última
de
cada
estrategia
y
3)
el
rol
del
Estado,
las
Organizaciones
de
la
Sociedad
Civil
(OSC)
y
la
empresa
privada
en
cada
una
de
ellas.
Tal
como
puede
observase
allí,
a
medida
que
se
pasa
de
la
primera
a
la
tercera
estrategia,
se
registra
un
cambio
sustancial
en
el
rol
de
esos
tres
actores;
destacando
el
hecho
que
recién
en
la
tercera
se
otorga
a
la
empresa
privada
un
papel
activo
y
claramente
importante.
Tabla:
estrategias
para
el
abordaje
de
la
pobreza
Tipo
de
Concepto
de
Finalidad
Papel
de
los
actores
institucionales
estrategia
pobreza
Asistencialismo
Aportar
recursos
materiales
Estado:
financia,
diseña
y
ejecuta.
Carencia
de
para
cubrir
necesidades
OSC:
participa
en
la
ejecución
de
recursos
básicas
algunos
programas
materiales
Empresa
privada:
no
participa