EL FUTURO DEL PLANETA ESTÁ EN NUESTRAS MANOS

Texto presentado por: Alexa Fayad Puche

Nuestro mundo existe hace alrededor de cuatro mil millones de años, y en ese
mundo la existencia del hombre es relativamente un evento nuevo que surgió
gracias al equilibrio y evolución de diversas especies; esta “chispa de vida” se dio
gracias a la posición perfecta de la tierra en cuanto a su distancia con respecto al
sol, distancia óptima que permite conservar el agua en estado líquido y propiciar
vida.
La adquisición de conocimientos en el hombre le ha permitido construir grandes
civilizaciones organizadas política, económica y socialmente pero ante todo
descubrir estrategias de supervivencia tales como la agricultura, actividad a través
de la cual suple una de sus mayores necesidades: El hambre.
Desde que el hombre era nómada explotaba los recursos de su entorno pero con
la llegada de la agricultura el hombre se asienta y comienza una explotación
desmedida con tal de satisfacer sus necesidades y mantener su confort.
La energía del astro sol llega con tal imponencia a la tierra que por millones de
años ha sido y será el mayor generador de vida del planeta, en compañía del
agua, el aire y la misma tierra, sostienen lo orgánico; “Todo está vinculado” nada
es rueda suelta en este planeta llamado Tierra. Es de ese vínculo que surgen las
bolsas de sol, concepto utilizado en el documental para referirse a energía que el
sol ha captado en la tierra por millones de años en la tierra y que se encuentra en
forma de carbón, gas o petróleo, siendo este último el recurso más explotado por
una minoría poblacional que solo brinda beneficios económicos a unos pocos y
que trae como consecuencia que los países con mayores recursos resultan ser los
más pobres del mundo.
Tal ha sido la explotación y abuso desmedido de los recursos del planeta que en
promedio en los últimos 60 años el hombre ha llevado al planeta a un desequilibrio
del que NO hemos tomado conciencia de que estamos agotando los recursos que
la naturaleza nos ofrece.
Otro factor que sin duda ha conllevado al agotamiento de los recursos es la
superpoblación, la deforestación de selvas y bosques para construir grandes
ciudades ha conllevado a desparecer incluso a comunidades enteras como es el
caso de la Isla de Pascua.

El uso inadecuado de la riqueza que nos proporciona la naturaleza ha afectado

tanto al planeta que el calentamiento global ha reportado la temperatura más alta
del planeta en los últimos 15 años; vivimos expectantes con el deshielo de la
banquisa que en los últimos 40 años ha perdido su espesor en un 40%, sufrimos
la ausencia de muchas especies ya extintas por la caza indiscriminada o por la
destrucción de su hábitat, tres cuartos de los recursos del planeta ya están
agotados y vivimos la inclemencia del clima por el efecto invernadero. Pero aún
estamos a tiempo de actuar para salvar nuestro “HOGAR”, cada uno puede actuar
en favor de la madre tierra, dejando de invertir en armas y guerra, haciendo
inversión en educación y desarrollo de los pueblos.

Dejemos de excavar el suelo y demos una mirada al cielo para aprender a

domesticarlo con moderación, inteligencia y equilibrio y así en un futuro no muy
lejano dejar una verdadera herencia a las futuras generaciones, entregarles un
planeta al que puedan llamar verdaderamente “HOGAR”