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Astrofísica - Teoría referencial

Teoría Referencial 4. MOVIMIENTO PLANETARIO 21

4.1 Las leyes de Kepler 21


1ª Ley (1605), del movimiento planetario 21
2ª Ley (1602), de la velocidad areolar 21
3ª Ley (1618), de los períodos y los semiejes 21
1. SISTEMAS DE REFERENCIA EN 4.2 El problema de los dos cuerpos 21
ASTRONOMÍA 3
Conservación del momento angular y de la energía 22
Justificación de las leyes de Kepler 22
1.1 La esfera celeste: referencias y otras definiciones 3
Nociones de trigonometría esférica 3 4.3 Órbita elíptica: ecuación del Kepler 23
Definiciones fundamentales de la esfera celeste 4 Distancias apsidales 23
Velocidad y distancia. Componentes de la velocidad
1.2 Tipos de coordenadas 5 23
Coordenadas horizontales 5 El problema dinámico 23
Coordenadas horarias 5 La ecuación de Kepler 24
Coordenadas ecuatoriales 6
Coordenadas eclípticas 6 4.4 Órbita parabólica 24
Coordenadas galácticas 6 4.5 Órbita hiperbólica 25
Coordenadas plano-tangentes 7
Variación de las coordenadas 7 4.6 Órbita en el espacio: elementos orbitales 26
Elementos orbitales 26
1.3 Transformación de coordenadas 7 Transformación de coordenadas 26
Relaciones matriciales de transformación 7
Relaciones triangulares esféricas 7
Aproximaciones y unidades 8 5. MOVIMIENTO GEOCÉNTRICO 27
Horizontales - Horarias 8
Horarias - Ecuatoriales 9 5.1 Efemérides geocéntricas 27
Ecuatoriales - Eclípticas 9 Planetas interiores 27
Galácticas - Ecuatoriales 9 Planetas exteriores 27
Plano tangentes - Ecuatoriales 10
5.2 Movimiento geocéntrico aparente 28

2. MOVIMIENTO DIURNO 11 5.3 Fase y brillo de los planetas 29


Fase 29
2.1 Ortos y ocasos 11 Albedo, brillo y defecto de iluminación 30

2.2 Culminaciones y pasos por el primer vertical 11 5.4 Coordenadas planetográficas 30


2.3 Crepúsculo 12 5.5 Coordenadas heliográficas 31
2.4 Cuadrantes solares 12
6. REFRACCIÓN 33
3. EL TIEMPO Y SU MEDIDA 15
6.1 Refracción en primer orden de aproximación 33
3.1 Sistemas de tiempo rotacional 15 6.2 Refracción en segundo orden de aproximación 33
El tiempo sidéreo 15 Integración 33
El tiempo solar 15 Aproximación de Gladston-Dale 34
Relación entre las dos escalas 16 6.3 Método práctico: tablas de refracción 35
3.2 Escalas de tiempo universal 16 6.4 Efecto sobre las coordenadas ecuatoriales 35
Escala de tiempo de las efemérides 16
Sistema de tiempo atómico 16 6.5 Efecto en la duración del día 35

3.3 El año. El calendario 17 6.6 Efecto en la dispersión del horizonte 35


Tipos de año 17
El calendario y su historia 17 7. PARALAJE 37
La fecha juliana 18
Épocas astronómicas 19 7.1 El potencial terrestre 37
7.2 Latitudes geodésica y geocéntrica 38

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Astrofísica - Teoría referencial

7.3 Paralaje geocéntrica 39 10. MOVIMIENTOS PROPIOS 57


Paralajes geocéntricas 39
Paralaje geocéntrica y distancia cenital 39 10.1 Conceptos generales 57
Coordenadas geocéntricas y de superficie 40 Cinemática estelar y movimiento propio anual 57
7.4 Paralaje lunar 40 Componentes ecuatoriales 57
Paralaje lunar y refracción 40 10.2 Cambios en el movimiento propio 58
Distancia lunar 41 Cambios intrínsecos 58
Radio lunar 41 Cambios precesionales 59
7.5 Paralaje solar 41 Fórmulas aproximadas para cambios precesionales 59
Determinación de la unidad astronómica 41 Velocidad radial baricéntrica y paralajes 59
Paralaje geocéntrica solar 42 10.3 Movimiento propio paraláctico 60
7.6 Paralaje anual 42 Análisis del movimiento propio paraláctico de una
Paralaje estelar; el pársec 42 estrella 60
Tipos de coordenadas (por paralaje) 43 El problema de la separación de movimientos.
Elipse de paralaje 43 Paralajes estadísticas. 60
Cálculo del movimiento solar 61
7.7 Efecto de la paralaje anual sobre las coordenadas 43
Efecto en la coordenadas ecuatoriales 43
Medición de la paralaje 44 11. REDUCCIÓN DE COORDENADAS 63

11.1 Tipos de coordenadas 63


8. ABERRACIÓN 45
11.2 Procedimientos de cálculo 63
8.1 Aberración estelar 45 Método A 63
Método B 63
8.2 Aberración anual 45
11.3 Un ejemplo 64
Aberración anual; elipse de aberración anual 45
Corrección para órbita elíptica 46
Aberración anual en coordenadas ecuatoriales 46 12. DISTANCIAS 65
Obtención de la constante de aberración anual 47
8.3 Aberración diurna 47 12.1 Indicadores primarios 65
Paralaje trigonométrica 65
8.4 Aberración planetaria 48
Paralaje espectroscópica 66
Aberración por el movimiento de los planetas 48 Paralaje dinámica 66
Otras correcciones 48 Método de los cúmulos 66
Movimientos propios paralácticos 66
Propiedades espectrales 66
9. MOVIMIENTO DE LOS PLANOS
Cúmulos globulares 67
FUNDAMENTALES 49 Relación período-luminosidad 67
Novas y supernovas 67
9.1 Precesión lunisolar 49
12.2 Indicadores secundarios 67
9.2 Precesión planetaria 50
12.3 Indicadores terciarios 68
9.3 Precesión general: método riguroso 51
Limitaciones de la primera aproximación 51
Variación de los elementos orbitales 51
Cálculos rigurosos: ángulos precesionales 52
Formulación vectorial 53
Aproximación de alcance medio 53
9.4 Nutación 54
Efecto nutacional solar 54
Efectos nutacionales de origen lunar 54
Teoría actual de la IAU 55
Efecto de la nutación sobre las coordenadas
ecuatoriales 55
Método matricial aproximado 56
Método matricial riguroso 56

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

⎧ x = r sin θ sin ϕ
1. Sistemas de referencia en Astrono- ⎪
⎨ y = r sin θ cos ϕ
mía ⎪ z = r cos θ

Para las representaciones en la esfera celeste, en base a la visión
proyectada con dos ángulos, se toman por convenio para simplifi-
car r = 1. Al establecer relaciones entre distintos tipos de coorde-
La mecánica celeste es la parte de la astronomía que trata de los nadas esféricas se hace necesario conocer las relaciones geométri-
procesos de posición de los cuerpos celestes (distintos tipos de cas existentes entre los parámetros de un triángulo esférico (situa-
coordenadas y sus relaciones) y de los fenómenos de movimiento do sobre una superficie esférica, la celeste). La superficie esférica
a ellos asociados. es una variedad de espacio bidimensional, con una geometría dis-
tinta de la euclídea (plana). Dicha diferencia entre las métricas del
plano y la esfera se escribe en notación tensorial como

1.1 La esfera celeste: referencias y otras defini- ⎛1 0⎞ ⎛1 0 ⎞


g ij (plano) = ⎜⎜ ⎟⎟ g ij (esfera ) = ⎜⎜ ⎟⎟
⎝ 0 cos θ ⎠
2
ciones ⎝0 1⎠
Esto explica por ejemplo, que el producto de los vectores de dos
direcciones en una superficie esférica varíe con su separación.
En Física, un sistema de coordenadas es un sistema de referen- Pasamos entonces a ver algunas definiciones referentes a la geo-
cia espacio-temporal que sirve para describir los acontecimientos, metría esférica:
con una posición y un instante. Para establecer las posiciones de
los astros resulta cómodo imaginar que se encuentran fijos sobre • Un círculo máximo es la intersección de la superficie esféri-
una esfera de radio infinito que gira en torno al eje polar terrestre ca con un plano que pase por su centro. En nuestro caso son
(si se considera sólo el movimiento aparente por la rotación te- círculos de radio unidad. Un círculo menor es la intersección
rrestre); esta es la llamada esfera celeste. En esta esfera celeste se de la esfera celeste con planos no centrados, y como su
definen distintos sistemas de coordenadas, según conveniencia, nombre indica son círculos de radio menor.
para situar los astros, del mismo modo que sobre la esfera terres- • Los polos de un círculo máximo son las intersecciones de la
tre se emplean las coordenadas geográficas, situando un punto por esfera celeste con un eje perpendicular a y centrado en el
su longitud y latitud. círculo máximo. Hay dos por círculo.
La descripción clásica del Universo está basada en la mecánica • Los nodos son las intersecciones de dos círculos máximos,
de Newton, con sus leyes del movimiento, en un tiempo y espa- los cuales forman entre si un determinado ángulo de inclina-
cios absolutos. Como sabemos, existen fenómenos verificados en ción de uno respecto al otro.
los cuerpos astronómicos que no responden a una descripción tan
• Las geodésicas en esferas son las líneas que unen dos puntos
simple. Por ello, hoy en día se considera de base una visión más
con la mínima distancia, y se corresponden con sectores de
amplia, relativista, con su interpretación geométrica del continuo
círculos máximos. Geométricamente son arcos sobre la esfe-
del espacio-tiempo, en un espacio llamado de Riemann de cuatro
ra. Por dos puntos diametralmente opuestos pasa un único
dimensiones, en el que el intervalo de acontecimientos (de espacio
círculo máximo, que es también geodésica.
y tiempo) viene dado por una expresión métrica de la forma

dτ 2 = g µν dx µ dxν

donde los índices µ y ν varían desde 0 hasta 3 (0 para el tiem-


po, el resto para las dimensiones espaciales). gµν es el tensor mé-
trico fundamental, que da la métrica o distorsión del continuo es-
pacio-tiempo (relacionada con la gravedad y la velocidad) y que
depende en última instancia de la distribución de materia.
Para los estudios más generales de posición y salvo excepciones,
se trabaja con un espacio relativo a un tiempo absoluto, por la
despreciable influencia de los efectos relativistas, y separando
espacio del tiempo para aproximar a un espacio euclideo tridi-
mensional (como el de Newton). En el caso que no sea así, se es-
pecificará.
En superficies esféricas las relaciones triangulares no son las mis-
mas que en el plano. Un triángulo esférico es la intersección de tres
Nociones de trigonometría esférica círculos máximos, y se caracteriza por tener tres lados curvos, que se
miden no como distancias, sino como ángulos desde el centro de cur-
vatura.
Desde un punto de vista geométrico, las coordenadas a emplear
consisten casi siempre en dos ángulos y una distancia, con diver-
sos orígenes de las mismas, es decir, se emplean sistemas de co-
ordenadas esféricos. Dado que se trabajará con proyecciones so-
bre una esfera, las coordenadas generalmente serán dadas de la
forma

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

• Se llama primer vertical al círculo máximo que contiene los


siguientes puntos de dirección: cenit (z), nadir (n), oeste (W)
y este (E). Da los hemisferios visuales hacia el norte y el sur.
Las correspondencias de estas definiciones pueden observar-
se en la figura adjunta.
• El horizonte astronómico es el círculo máximo perpendicu-
lar a la vertical astronómica; sería la proyección del suelo
del observador.
• El meridiano del observador es el círculo máximo que pasa
por los polos y por el cenit y el nadir; da la línea norte-sur de
la Tierra, y es perpendicular al primer vertical. Teniendo en
cuenta el movimiento de rotación terrestre (el Sol y el resto
Se cumplen las siguientes reglas generales: de objetos salen por el este o levante y se ponen por el oeste
o poniente), marca los puntos de máxima altura de los astros
• Un lado es mayor que la diferencia de los otros dos, y mayor en el movimiento aparente diurno. Es intercambiable con la
que la suma. longitud terrestre. La meridiana es la proyección sobre el
• La suma de los tres lados es menor que 2π, y la suma de los horizonte del meridiano del observador. Da la dirección nor-
tres ángulos es mayor que π y menor que 3π. te-sur sobre el suelo.
Queda claro entonces que las dimensiones a emplear en los
triángulos esféricos son siempre angulares, por lo que debemos
tener claro que tipos hay:
• Sistema fundamental o coherente: en radianes; permite la
transformación inmediata en distancias por multiplicación
con otras distancias.
• Sistema sexagesimal: las subdivisiones de una vuelta son
360°, cada grado tiene 60 minutos, y cada minuto tiene 60
segundos de arco: 360° = 360·60’ = 360·60·60’’
• Sistema horario: una vuelta tiene 24 horas, cada hora tiene
60 minutos, y cada minuto tiene 60 segundos: 24h = 24·60
m = 24·60·60 s . Es coherente con el ciclo solar diario.

La relación entre las unidades de los dos últimos sistemas está


en un factor de 15. Las coordenadas de posición terrestre mun-
dialmente aceptadas son la longitud y la latitud, y responden a
este tratamiento horario. La longitud es el ángulo de meridiano
respecto del que pasa imaginariamente por la ciudad de Green-
wich, y se mide de 0 a 180 grados, positivos hacia el este y nega-
tivos hacia el oeste. Las latitudes de 0 a 90o desde el ecuador En la figura: M es meridiana, PN y PS son los polos norte y sur, VA
hacia los polos (negativas para el hemisferio sur). es la vertical astronómica, z y n son el cenit y el nadir, y N, S, E, W
son los puntos cardinales.

Definiciones fundamentales de la esfera celeste


Definiciones referentes al ecuador terrestre:
• La latitud astronómica es el ángulo agudo entre la vertical
Es evidente que cuerpos situados a distancias finitas del obser-
astronómica y el ecuador; equivale a la latitud terrestre del
vador tendrán posiciones relativas distintas según la posición del
observador. El eje de los polos es la línea que pasa por el lu-
observador: esto se conoce como paralaje. Por ello no sólo es im-
gar de observación paralela al eje de rotación terrestre.
portante definir un determinado sistema de coordenadas, sino que
según donde esté situado el centro de referencia de la esfera celes- El ángulo entre el eje de los polos y el cenit cumplen la relación
te también se tienen los tipos de coordenadas: con la latitud geográfica 90°- φ, esto es, son suplementarios. Se
• Topocéntricas: están referidas a un punto de la superficie te- desprecian anomalías gravimétricas locales que pudieran provocar
rrestre. diferencias entre la plomada y la vertical a la superficie terrestre.
Así por ejemplo, para un observador en el polo coinciden, y para
• Geocéntricas: referidas al centro terrestre. un observador en el ecuador vale 90°.
• Heliocéntricas: referidas al centro solar.
• Los almucantarat son los círculos menores paralelos al hori-
• Baricéntricas: referidas al baricentro del sistema solar. zonte; dan la altura en grados de un objeto. Los paralelos ce-
lestes son los círculos menores paralelos al ecuador, y dan la
Definiciones referentes al lugar de observación: altura respecto al ecuador.
• Se llama vertical astronómica a la línea definida por la di- • Los círculos horarios o meridianos celestes son los círculos
rección de la plomada en el lugar de observación; da la di- máximos perpendiculares al ecuador. Estos y los paralelos
rección arriba-abajo para un punto de la tierra. Las intersec- celestes son la proyección celeste de los paralelos y meri-
ciones de la vertical astronómica con la esfera celeste son dianos terrestres.
llamadas cenit (superior, sobre la cabeza) y nadir (inferior,
opuesta en la esfera celeste). Definiciones referentes al plano orbital terrestre:

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

• El plano de la eclíptica es el que contiene el centro del Sol y sistema levógiro (a izquierdas; inverso o no directo, al contrario
la órbita terrestre. Por la eclíptica se desplaza el Sol en su de los usuales). Entonces
movimiento aparente anual. La oblicuidad o inclinación de
la eclíptica es el ángulo entre el plano de la eclíptica y el ⎧ x = cos A cos a = cos A sin z
ecuador terrestre; da la inclinación del eje terrestre, respon- ⎪
⎨ y = sin A cos a = sin A sin z
sable de las estaciones anuales. Los paralelos eclípticos o ⎪
menores de latitud son los círculos menores paralelos a la ⎩ z = sin a = cos z
eclíptica. Los meridianos eclípticos o máximos de longitud
son los círculos máximos que contienen a los polos de la
eclíptica, los cuales se suelen notar como K y Ḱ’.
• El nodo ascendente o punto Aries (γ) es la intersección de
los planos ecuatorial y eclíptico; es el punto del Sol en el
equinoccio de primavera. El nodo descendente o punto libra
(Ω) es la otra intersección de los planos ecuatorial y eclípti-
co, correspondiendo al momento que el Sol entra en el otoño
(equinoccio de otoño).
• La línea equinoccial o línea de nodos une los dos puntos an-
teriores, llamados equinocciales. La línea de los solsticios
une los puntos de los solsticios de verano e invierno, que es-
tán respectivamente en cáncer y capricornio. Equidistan de
los anteriores en el ecuador celeste y en la eclíptica. Los tró-
picos de cáncer y capricornio son los paralelos celestes que
pasan por sus respectivos puntos de solsticio. Tienen una la-
titud igual a la inclinación del eje terrestre (23°26’). El zo-
díaco es una banda de 17° (±8,5) centrada en la eclíptica, El empleo de referencias cartesianas es útil al hacer los cambios
que contiene los planos de los movimientos planetarios. de tipos de coordenadas. Las coordenadas horizontales son pro-
pias de cada lugar de observación (por la orientación hacia el sur
y por el cenit), y cambian de una latitud y longitud terrestres a
otras, para el mismo objeto en el mismo momento. Son las que se
miden directamente con un sextante o cuadrante.

Coordenadas horarias

Los planos de referencia son el ecuador y el meridiano del ob-


servador, de modo que cambia el plano de origen horizontal res-
pecto de las coordenadas anteriores. Las coordenadas son:
• El ángulo horario (h), que es el ángulo sobre el ecuador me-
dido desde el sur hacia el oeste (esto en el hemisferio norte,
desde el N al W en el hemisferio sur). Se mide en el sis-
tema horario: vale entre 0 y 24 h.
• La declinación (δ), que es el ángulo vertical desde el ecua-
dor hacia el polo. Se mide en el sistema sexagesimal: vale
entre 0 y -90° hacia el polo sur, y entre 0 y 90° para el norte.
1.2 Tipos de coordenadas

Coordenadas horizontales

Con cada tipo de coordenadas esféricas que veremos, habrá que


determinar el origen de los ángulos, generalmente refiriéndolos a
planos de referencia. En este caso son el horizonte y el meridiano
del observador, de forma que:
• el acimut (A), que es el ángulo sobre el horizonte medido
desde el sur hacia el oeste. Se mide en el sistema sexagesi-
mal: vale entre 0 y 360°.
• la altura (a), que es el ángulo vertical desde el horizonte
hacia el cenit. Vale entre 0 y 90°. Las alturas negativas que-
dan por debajo del horizonte, y corresponden por tanto a as-
tros no visibles. De forma equivalente se define la distancia
Con una referencia cartesiana el eje X va hacia el sur, el Y
cenital como la suplementaria de la anterior z = 90° - a.
hacia el oeste, y el Z hacia el polo norte terrestre (celeste). Como
Si se emplea un sistema de coordenadas cartesianas, el eje X va el anterior, es un sistema levógiro, y entonces
hacia el sur, el Y hacia el oeste, y el Z hacia el cenit. Este es un

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

⎧ x = cos h cos δ • La latitud eclíptica (β), que es el ángulo vertical desde la


⎪ eclíptica hacia el polo eclíptico K. También se mide en gra-
⎨ y = sin h cos δ dos.
⎪ z = sin δ

Estas coordenadas tienen la ventaja de ser las mismas para cual-
quier observador en el mismo meridiano (para objetos de distan-
cia infinita; cuando no sea así aparecerá con cualquier sistema de
coordenadas el error de paralaje). Difieren para otros puntos de la
tierra en una cantidad llamada tiempo sidéreo, que es el ángulo
horario del punto Aries.

Coordenadas ecuatoriales

Los planos de referencia son el ecuador y la línea equinoccial, es


decir se mide atendiendo a los mismos planos que las coordenadas
horarias, pero de otra forma (sentido y origen). Con ellos las co-
ordenadas son:
• La ascensión recta (α), que es el ángulo sobre el ecuador Con referencias cartesianas, el eje X va hacia el punto γ , y el
medido desde el punto Aries (γ) en sentido antihorario Z hacia el polo norte de la eclíptica, describiendo un sistema dex-
(hacia el este). Se mide en el sistema horario (entre 0 y 24 trógiro. Entonces
h).
• La declinación (δ), que es el ángulo vertical desde el ecua- ⎧ x = cos λ cos β

dor hacia el polo. Vale entre -90° (hacia el polo sur) y 90° ⎨ y = sin λ cos β
(norte). Es la misma que para las coordenadas horarias. ⎪ z = sin β

Estas coordenadas tienen la ventaja de ser las mismas para cual-
quier observador en el sistema solar y alrededores (salvo parala-
je). Se emplean también en los catálogos de objetos, pero menos
que las anteriores.

Coordenadas galácticas

El plano de referencia es el galáctico, y como origen la dirección


de su centro. Las coordenadas son:
• La longitud galáctica (l), que es el ángulo sobre el plano
medido desde su centro (en la constelación de Sagitario), en
sentido antihorario. Se mide con el sistema sexagesimal (en
grados).
• La latitud galáctica (b), que es el ángulo vertical desde el
Con coordenadas cartesianas, el eje X va hacia el punto γ , y el plano hacia el polo galáctico. También se mide en grados.
Z hacia el polo norte terrestre (en el cielo), en un sistema de dis-
posición dextrógira o directa. Entonces

⎧ x = cos α cos δ

⎨ y = sin α cos δ
⎪ z = sin δ

Estas coordenadas tienen la ventaja de ser las mismas para cual-
quier observador en la tierra (para objetos a distancia infinita), por
lo que son las más empleadas en los catálogos estelares y en la
astronomía en general.

Coordenadas eclípticas

Los planos de referencia son el eclíptico y la línea equinoccial.


Notar que en la notación se emplean letras latinas para diferen-
Las coordenadas son:
ciar de las coordenadas eclípticas (con letras griegas). Con refe-
• La longitud eclíptica (λ), que es el ángulo sobre la eclíptica rencias cartesianas, el eje X va hacia el centro galáctico, y el Z
medido desde el punto Aries (γ) en sentido antihorario hacia el polo norte galáctico, en un sistema dextrógiro. Entonces
(hacia el este). Se mide en grados.

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

⎧ x = cos l cos b no en cuanto a la forma de referirlas, sino por distintas causas que
⎪ se tratarán en temas sucesivos y que mencionamos brevemente:
⎨ y = sin l cos b
⎪ z = sin b • Por razones geométricas, como es el hecho de situar los dis-
⎩ tintos orígenes de los sistemas de referencia junto con las
Estas coordenadas tienen la ventaja de ser las mismas para cual- distancias finitas de los objetos. Este es el efecto de paralaje.
quier observador en la galaxia y alrededores, pero siempre es ne- • Por causas físicas. La refracción atmosférica es el efecto de
cesario corregir de las distancias (paralaje). Las posiciones acep- lente producido por la atmósfera. La aberración es debida a
tadas del centro y del polo norte galáctico, en coordenadas ecuato- la velocidad finita de la luz y el movimiento de observador y
riales son objeto.
Centro → α1950 = 17h 42,4m / δ1950 = 28º 55’ • Por el movimiento de los planos fundamentales de referen-
cia (el ecuador y la eclíptica), que son la razón de los fenó-
Polo → α1950 = 12h 49m / δ1950 = 27º 24’ menos de precesión, nutación, y movimiento del polo.
El centro se sitúa en la zona de Sagitario, y el círculo galáctico • Por último, por los movimientos intrínsecos o propios de las
tiene una inclinación respecto del ecuador bastante considerable, estrellas, y de cualquier astro en general.
de 90° - δK = 62°36’. La posición de los nodos respecto del ecua-
dor está dada por αK ± 6h.

Coordenadas plano-tangentes 1.3 Transformación de coordenadas

Este es un sistema de coordenadas para referencias locales. Es-


tán definidas en un punto de la esfera celeste para un pequeño sec- Relaciones matriciales de transformación
tor de la misma, de forma que se toma la posición polar desde un
cierto punto tomando la aproximación plana para los alrededores
del punto. Esta aproximación conduce a errores tanto mayores Para cambiar de un sistema de coordenadas a otro existen dos
cuanto más se aleje del punto de tangencia. Como se ha dicho, las procedimientos:
coordenadas están referidas a un sistema cartesiano local en un a) por relaciones triangulares esféricas
punto, de tal modo que se tienen dos ejes, uno η apuntando al b) por transformaciones matriciales de coordenadas (rotaciones)
polo norte y el otro ξ que apunta según el paralelo en sentido
Las transformaciones de coordenadas en disposición cartesiana
antihorario.
(que hemos visto en función de los distintos tipos de coordenadas)
se realizan a través de giros planos sucesivos. Las matrices de ro-
tación que representan dichos giros, cuando los giros se producen
según los ejes del sistema de referencia escogido, son de la forma

⎛1 0 0 ⎞
⎜ ⎟
R x (θ ) = ⎜ 0 cos θ sin θ ⎟
⎜ 0 − sin θ cos θ ⎟
⎝ ⎠
⎛ cos θ 0 − sin θ ⎞
⎜ ⎟
R y (θ ) = ⎜ 0 1 0 ⎟
⎜ sin θ 0 cos θ ⎟
⎝ ⎠
⎛ cos θ sin θ 0 ⎞
⎜ ⎟
R z (θ ) = ⎜ − sin θ cos θ 0 ⎟
⎜ 0 0 1 ⎟⎠

Cualquier astro se sitúa con dos coordenadas polares (θ,φ) me- Los giros combinados sucesivamente se representan por la mul-
didas como ángulos, descritas desde el punto origen al del astro. tiplicación matricial. Este procedimiento está especialmente indi-
La coordenada φ da la distancia radial entre ambos puntos (en cado con los métodos numéricos de programación.
realidad es la tangente del ángulo de separación), y la coordenada
θ da el ángulo entre el vector de posición anterior y el eje polar η
(ver figura: se muestran las coordenadas ecuatoriales para el pun- Relaciones triangulares esféricas
to y la estrella).
Estas coordenadas se emplean en el estudio del movimiento re-
lativo de sistemas estelares binarios o múltiples. La otra forma de entresacar relaciones de transformación entre
distintos tipos de coordenadas es aprovechando las propiedades o
relaciones fundamentales que se cumplen en los triángulos esféri-
cos. A dichas relaciones se las suelen denominar como Bessel.
Variación de las coordenadas

Hemos visto los distintos tipos de coordenadas, y su facilidad o


conveniencia para usarlas a la hora de situar unos u otros aconte-
cimientos o cuerpos en la esfera celeste según unas u otras refe-
rencias. El problema con las coordenadas reside en su variación,

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Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

Horizontales - Horarias

Especificamos las relaciones entre los distintos ángulos y coor-


denadas a través de las relaciones de Bessel, atendiendo al dibujo
siguiente.

Sea el triángulo esférico de la figura, con la notación de mayús-


culas {A, B, C} para los ángulos, y la de minúsculas {a, b, c}
para los lados, opuestos a los ángulos. El llamado teorema de los
senos es

sin A sin B sin C


= =
sin a sin b sin c
Los teoremas de los cosenos son
cos a = cos b cos c + sin b sin c cos A
cos A = cos B cos C + sin B sin C cos a
y hay otras relaciones mixtas Se llama ángulo paraláctico (p) al ángulo opuesto en el triángulo
al suplementario de la latitud. Cuando se trabaja en el hemisferio
sin a cos B = cos b sin c − sin b cos c cos A sur, el ángulo paraláctico se define sobre el triángulo con el polo
sur. Aplicando las relaciones de los senos se tienen las siguientes
sin a cot b = cot B sin C + cos a cos C
sin A cot B = cot b sin c − cos A cos c ⎧ cos δ sin h = cos a sin A

A partir de todas las anteriores se obtienen las relaciones dife- ⎨cos δ sin p = cos ϕ sin A
renciales ⎪ cos ϕ sin h = cos a sin p

⎧sin b sin C ⎫
da = cos C ⋅ db + cos B ⋅ dc + ⎨ ⎬ ⋅ dA
⎩sin c sin B ⎭
⎧sin b sin C ⎫
dA = cos b ⋅ dC + cos c ⋅ dB + ⎨ ⎬ ⋅ da
⎩sin c sin B ⎭
sin C ⋅ da = sin b ⋅ dA + cos C sin a ⋅ dB + sin A cos b ⋅ dc
cot a ⋅ da = cot b ⋅ db + cot A ⋅ dA − cot B ⋅ dB

Aproximaciones y unidades

Para los casos de ángulos muy pequeños, como ocurre al tratar Asimismo, con las otras relaciones se tienen
las variaciones de las coordenadas o la separación de objetos, se
emplean las siguientes aproximaciones
sin δ = sin a sin ϕ − cos a cos ϕ cos A
sin a = sin δ sin ϕ + cos δ cos ϕ cos h
sin θ ≈ θ
cos h = sin p sin A sin a − cos p sin A
cos θ ≈ 1
cos δ cos h = sin a cos ϕ + cos a sin ϕ cos A
tan θ ≈ θ
Si se desean emplear matrices de rotación con referencias carte-
que se sobreentiende están dadas en radianes. Para pasar de ra- sianas, la transformación se representa por un giro desde el cenit
dianes a segundos de arco se utilizará la relación z hasta el polo norte PN según el eje que pasa por el oeste
sin θ ( ′′)
sin θ (rads) = ≈ θ ( ′′) ⋅ sin 1′′ ⎛X⎞ ⎛X⎞
206265 ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ Y ⎟ = RY (ϕ − 90º ) ⋅ ⎜ Y ⎟
Como unidades de distancia se emplean usualmente la unidad ⎜Z⎟ ⎜Z ⎟
astronómica o distancia media Tierra-Sol (1,496·108 km) y el pár-
⎝ ⎠ hδ ⎝ ⎠ Aa
sec (206.275 u.a.s.), distancia correspondiente a la paralaje de 1’’. y para la transformación inversa se emplea un giro de ángulo
90° - φ.

Página 8
Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

Horarias - Ecuatoriales Matricialmente la transformación se representa por un giro se-


gún el eje de equinoccios desde el PN hasta el K
Entre estas coordenadas sólo cambia el origen y sentido de una ⎛X⎞ ⎛X⎞
de las coordenadas. La declinación es la misma, y la relación en- ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
tre los ángulos horario (h) y la ascensión recta α la da el tiempo ⎜ Y ⎟ = Rγ (ε ) ⋅ ⎜ Y ⎟
sidéreo ⎜Z⎟ ⎜Z ⎟
⎝ ⎠ λβ ⎝ ⎠ αδ
H = TS - α ⎛1 0 0 ⎞
⎜ ⎟
Si se emplean matrices debe tenerse en cuenta que se produce Rγ (ε ) = ⎜ 0 cos ε sin ε ⎟
una inversión del sistema de coordenadas, pues se pasa de una ⎜ 0 − sin ε
disposición directa a otro indirecta ⎝ cos ε ⎟⎠

⎛X⎞ ⎛X⎞ ⎛X⎞ y con un ángulo de 90°- ε para la transformación inversa.


⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ Y ⎟ = R Z (−TS ) ⋅ Inv ⋅ ⎜ Y ⎟ = Inv ⋅ R Z (TS ) ⋅ ⎜ Y ⎟
⎜Z⎟ ⎜Z⎟ ⎜Z ⎟
⎝ ⎠ αδ ⎝ ⎠ hδ ⎝ ⎠ hδ Galácticas - Ecuatoriales

La relación entre estos dos tipos de coordenadas no es simple en


Ecuatoriales - Eclípticas base a triángulos esféricos, por lo que conviene emplear la rela-
ción matricial.
Aquí únicamente se tiene una inclinación del eje del plano a tra- En el dibujo se representan los planos ecuatorial y galáctico, que
vés de la línea equinoccial, siendo la separación entre ambos ejes se cruzan en la línea de nodos N-N’. L es la posición del centro
la inclinación de la eclíptica o del eje terrestre (ε). La disposición galáctico y γ es el punto Aries, orígenes respectivos de cada sis-
es la del dibujo: tema coordenado. El ángulo entre los polos G y PN es 90°-δG ,
siendo δG la declinación del polo norte galáctico.

Con el procedimiento matricial, para pasar de coordenadas ecua-


toriales a galácticas deben seguirse sucesivamente los siguientes
giros:
1) giro -negativo- según el eje PN de una cantidad δG
2) giro según el eje de nodos desde PN a G
3) giro según el eje G desde N hasta L

En la notación matricial sería

⎛X⎞ ⎛X⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ Y ⎟ = RG (− NL) ⋅ R N (90º −δ G ) ⋅ R PN (−γN ) ⋅ ⎜ Y ⎟
Aplicando las distintas relaciones al triángulo se tienen ⎜Z⎟ ⎜Z⎟
⎝ ⎠ lb ⎝ ⎠ αδ
cos α cos δ = cos λ cos β
Con los datos que se tienen del plano galáctico y su centro, los
sin β = cos ε sin δ − sin ε cos δ sin α
ángulos empleados en esta operación son
sin δ = cos ε sin β + sin ε cos β sin λ
γN = 24h – (αG + 6h) = 5h 11m
cos β sin λ = sin δ sin ε + cos δ cos ε sin α
NL = PGL – 90º = 33º
cos δ sin α = cos β cos ε sin λ − sin β sin ε

Página 9
Teoría referencial - Sistemas de referencia en Astronomía

Plano tangentes - Ecuatoriales

Las coordenadas plano-tangentes definían un sistema local de


referencia plano en un punto de coordenadas ecuatoriales (A,D).
Tomábamos en ese punto el eje η hacia el polo y el eje ξ según
el paralelo en sentido directo. Un astro en las proximidades queda
con su posición determinada con dos ángulos (θ,φ) en el referen-
cial polar anterior.
∆η = tan φ cos θ
∆ξ = tan φ sin θ

Para encontrar las relaciones con las coordenadas ecuatoriales


del astro (α,δ) , se cogen las relaciones triangulares esféricas en el
triángulo de la figura anterior.

Página 10
Mecánica celeste - Movimiento diurno
En la situación general de ortos y ocasos la altura se anula a =
0, y se cumplen las siguientes relaciones con las coordenadas
2. Movimiento diurno horarias
cos h = − tan δ tan ϕ
sin δ = − cos ϕ cos A

2.1 Ortos y ocasos obteniendo dos posibles soluciones, de los cuales los menores
valores de A y h corresponden al ocaso, y los mayores al orto.
El Sol, para ciertas latitudes y en épocas del año pasa por las tres
situaciones (circumpolar, con ocultaciones de horizonte, e invisi-
ble), y en su caso sabemos que siempre tiene latitud eclíptica nula
El movimiento diurno es el movimiento aparente de los objetos β = 0 por definición.
celestes como consecuencia de la rotación terrestre. Como la rota-
ción es directa o antihoraria (la Tierra gira hacia el este, en el sen-
tido contrario a las agujas del reloj en el hemisferio norte), los
objetos astronómicos describen aparentemente círculos paralelos 2.2 Culminaciones y pasos por el primer vertical
al ecuador en sentido horario.
Para las latitudes intermedias, la mayoría de los objetos (no to-
dos) salen o aparecen por encima del horizonte por el este (levan-
La culminación es el paso de un astro por el meridiano del ob-
te) y se ponen u ocultan por el horizonte hacia el oeste (poniente).
servador. Hay dos pasos, y coinciden con los momentos de máxi-
El orto es la salida de un astro respecto al horizonte, mientras que
ma y mínima altura en el movimiento diurno. El de máxima altura
el ocaso es la ocultación por el horizonte. En consecuencia, todos
o culminación superior es siempre visible salvo si el cuerpo es
los ortos siempre son por el este y los ocasos por el oeste. En las
invisible, mientras que la culminación inferior es invisible salvo
coordenadas horizontales ambos fenómenos están caracterizados
que sea circumpolar. En el hemisferio norte la culminación supe-
por un valor nulo de la altura del objeto, en posiciones simétricas
rior es siempre hacia el sur desde el polo norte (hacia el ecuador),
de acimut (y en el ángulo horario).
y la inferior por el norte. En la figura se representa un corte de la
No todos los objetos celestes tienen ortos y ocasos, pues para esfera celeste por el meridiano del observador y las culminacio-
ello debe cumplirse que en algún momento del período diurno su nes, que es útil para ver la relación de altura, latitud y declinación
altura alcance un valor nulo: algunos no se ocultan nunca mientras un objeto.
que otros nunca son visibles. Por ello, dependiendo de la latitud
del observador, los astros van a ser distintos en cuanto a su visibi-
lidad:
• los cuerpos circumpolares son aquellos que son visibles
durante toda la rotación (a > 0), y no tienen ni ortos ni oca-
sos. Como puede verse gráficamente, con ellos se cumple
siempre que
δ ≥ 90º - φ
• los cuerpos no circumpolares tienen ortos y ocasos, y hay
períodos durante los cuales son invisibles para un observa-
dor. Cumplen la condición
90º - φ ≥ δ ≥ φ – 90º
• los cuerpos circumpolares invisibles tienen un movimiento La altura de la culminación en el hemisferio norte viene enton-
aparente por debajo del horizonte (a < 0), sin ortos ni oca- ces dada por
sos; cumplen
a = δ ± (90º-φ)
δ ≤ φ – 90º
El signo positivo es para la culminación superior y el negativo
para la inferior. Notar que la culminación superior, por definición,
es siempre de ángulo horario nulo (en el hemisferio norte, con φ >
0), y la inferior con h = 12h.
El paso por el primer vertical, como su nombre indica, es el pa-
so por las direcciones este y oeste, por lo que se caracteriza por un
acimut de valores A = ±90°. Para que ocurra debe cumplirse que
culmine superiormente (hacia el sur) más allá del cenit, lo cual se
traduce en
|φ| > |δ|
Como en ese momento se cumple que A = 90° (oeste) y A = -
90° (este), las relaciones entre coordenadas quedan como

⎧ sin δ = sin a sin ϕ



⎨ cos δ cos h = sin a cos ϕ
⎪ tan δ = cos h tan ϕ

Página 11
Mecánica celeste - Movimiento diurno

La máxima disgresión o máxima elongación es la situación en S y S’ son los puntos de principio y fin del crepúsculo vesper-
que el ángulo paraláctico tiene un valor de 90°. Sólo es posible si tino. En la figura de la derecha introducimos un cenit ficticio Z’
dicho ángulo alcanza valores p ≥ 90°, que equivale a tal que forma un ángulo de 90° con S’ y otro de 90°- φ con el
polo (o nos vamos a la longitud terrestre donde nuestro S’ coinci-
de con su S). Con las relaciones en los dos triángulos de esa figu-
|δ| ≥ |φ| ra
Las relaciones que se cumplen entonces son ⎧sin ϕ sin ϕ + cos ϕ cos ϕ cos(h − h0 )
cos( ZZ ' ) = ⎨
⎧ sin ϕ = sin a sin δ ⎩ cos( p − p0 ) cos a⊕

⎩ tan ϕ = cos h tan δ con h-h0 por supuesto en tiempo sidéreo. Por tanto

cos( p − p0 ) cos a⊕ − sin 2 ϕ


cos(h − h0 ) =
cos 2 ϕ
2.3 Crepúsculo
Por la relación del ángulo doble podemos tomar esa expresión y
escribir
El crepúsculo es el intervalo de tiempo entre la oscuridad total y x 1 − cos x
la salida o puesta del Sol. La luz disminuye gradualmente por sin 2 =
causas diversas: refracción atmosférica, dispersión, o dimensiona- 2 2
lidad solar. Al crepúsculo matutino se le llama el alba, y ocurre al ⎛ h − h ⎞ 1 − cos a⊕ cos( p − p0 )
sin 2 ⎜ 0 =

este (como todos los ortos), y el crepúsculo vespertino o anoche- ⎝ 2 ⎠ 2 cos 2 ϕ
cer al oeste. Hay diferentes criterios sobre la altura que tiene el
Sol para decir que hay oscuridad: El valor mínimo para el que hay crepúsculo hace en la expresión
anterior p = p0, e implica
• civil, con au = -6°
• náutico au = -12° a
sin ⊕
⎛ h − h0 ⎞ 2
• astronómico au = -18° sin ⎜ ⎟ =
⎝ 2 ⎠ min cos ϕ
Vamos a calcular las relaciones de duración del suceso en el ca-
so astronómico, y los límites a la latitud para que se pueda dar el que nos da la duración del crepúsculo en ese caso según la lati-
crepúsculo. Esto es importante porque delimita el tiempo noctur- tud. Como el primer término es menor o igual que uno debe ser
no para la observación astronómica. Hacemos la siguiente cons-
trucción geométrica del dibujo. φ ≤ 90º - au
y en consecuencia, hay crepúsculo astronómico siempre que la
latitud sea φ ≤ 81°

2.4 Cuadrantes solares

El cuadrante solar es lo que se conoce como reloj de Sol, es de-


cir, un dispositivo que relaciona el tiempo a través de la posición
relativa del Sol o de sus sombras. Vamos a estudiar el caso gene-
ral del cuadrante horizontal, consistente en un plano horizontal y
un estilete vertical.
Sea el estilete de una longitud L, que en un momento y disposi-
ción dada produce una sombra, concretamente de longitud s con
orientación opuesta a la Sol de Au -180° (ver figura).

Tomemos un referencial {X,Y} según los puntos cardinales que


nos da la posición de la punta de la sombra

Página 12
Mecánica celeste - Movimiento diurno

s = x 2 + y 2 = L cot a⊕
En base al triángulo esférico del dibujo se cumplen las relacio-
Se cumplen asimismo las siguientes relaciones geométricas nes

tan a⊕ L ⎧ − sin χ sin h⊕ = sin( A⊕ − 180º )


sin a⊕ = = ⎨
1 + tan a⊕ 2 2
L +x +y 2 2
⎩ sin χ cos h⊕ = sin ϕ cos( A⊕ − 180º ) − sin( A⊕ − 180º ) cos ϕ cos 90º

1 x2 + y2
cos a⊕ = = que combinadas llevan a
1 + tan 2 a⊕ L2 + x 2 + y 2
tan( A⊕ − 180º ) = cos h⊕ sin ϕ
y
cos A⊕ =
x2 + y2 relación de la posición del Sol (Au representado en el plano)
con la hora solar (dada por hu) y la latitud del lugar. Veamos más
que llevadas a la relación entre las coordenadas horizontales- tipos de cuadrantes solares. Por ejemplo el solar ecuatorial, o el
horarias solar vertical (paralelo al primer vertical). Ambos tienen el estilete
paralelo a la línea de los polos. Todos los verticales son variantes
sin δ = sin a sin ϕ − cos a cos ϕ cos A del vertical declinante, que se caracteriza por un acimut u orienta-
ción horizontal de la pared variable.
nos da la ecuación de una cónica, que es la trayectoria descrita
por la sombra

x 2 sin 2 δ ⊕ + y 2 (sin 2 δ ⊕ − cos 2 ϕ ) +


+ 2 Ly cos ϕ sin ϕ − L2 (sin 2 δ ⊕ − sin 2 ϕ ) = 0

Según los valores de la declinación solar (que varía lentamente a


lo largo del año), la curva es una parábola (cuando δ = 90°-φ), una
elipse (δ > 90°-φ), una hipérbola (δ < 90°-φ), o rectas coinciden-
tes (δ = 0). Como va cambiando a lo largo del año, la traza tam-
bién lo hace. Una variante o adaptación del cuadrante horizontal
puede ser el cálculo del ancho de la sombra de un muro (estilete
con anchura). Puede verse que dicha anchura está dada por
D = ± L cot a⊕ sin( A − A⊕ )

siendo A el acimut longitudinal del muro. Otro tipo de cuadrante


horizontal es el cuadrante solar horizontal, que tiene un plano
horizontal y el estilete paralelo al eje polar. Los datos importantes
son representados en las figuras subsiguientes. En la figura anterior un esquema de cuadrante vertical, que
cumple la siguiente relación
tanη = − cosη tan h⊕

El analema o reloj analémico es un cuadrante horizontal de esti-


lete vertical que permite cambiar la posición de éste sobre un eje
norte-sur a lo largo del año, para que así continúen siendo válidas
las marcas periféricas de las horas.

Se tiene dibujada una elipse en la que hay marcadas las divisio-


nes de las horas. El eje menor (b) tiene la dirección norte-sur, y el
mayor (a) la dirección este-oeste.
Veamos qué relaciones geométricas cumple para poder emplear-
lo. Se definen unas coordenadas polares elípticas para hacer los
cálculos auxiliares en la figura x = a·sinθ, y = a·cosθ

Página 13
Mecánica celeste - Movimiento diurno
y por la relación de transformación de coordenadas horizontales-
horarias
cot A⊕ = sin ϕ cot h⊕ − cos ϕ tan δ ⊕ cosec h⊕

Si se escoge la relación de los ejes en función de la latitud en la


forma
b
= sin ϕ
a
que implica además que la excentricidad de la elipse sea e =
cos(φ) , al comparar se obtiene la posición que debe tener el esti-
lete con la declinación solar es
d
= cos ϕ tan δ ⊕
a
y entonces
y+d b d
cot A⊕ = = cot θ + cosecθ
x a a

Página 14
Mecánica celeste – El tiempo y su medida
más útil que el anterior por su evidente regularidad, y cuando
habitualmente se habla de tiempo sidéreo se refiere al uniforme,
3. El tiempo y su medida mientras no se indique lo contrario. Los relojes de tiempo sidéreo
se regulan también de acuerdo al tiempo sidéreo medio. Recordar
que el tiempo sidéreo medio está referido a un equinoccio medio
y a un polo medio (que no son reales), compensando o ignorando
los efectos de la nutación y tomando un valor medio de precesión.
El tiempo en Física se define como una variable que describe los El equinoccio medio se dispone tabulado, y generalmente está
cambios medidos en el mundo de la experiencia física. Basándo- dado para los valores de una determinada época astronómica.
nos en un fundamento o en una determinada forma de medirlo
experimentalmente (ciertas efemérides o sucesos astronómicos) En consecuencia, si medimos el tiempo sidéreo respecto a una
tendremos distintos sistemas de tiempo. Las escalas de tiempo, o estrella fija, como el período entre dos tránsitos o culminaciones
simplemente los distintos tipos de tiempos, son las formas de es- sucesivas de la misma, tenemos el período rotacional de la Tierra
tructurar un determinado sistema de tiempo, eligiendo un origen y en tiempo sidéreo. Este valor es distinto del día sidéreo medio,
unas unidades. Generalmente se usa indistintamente uno u otro pues como ya hemos dicho el último simplifica la precesión o la
término. Para casi todos los propósitos se hace evidente que es nutación. Podemos ver que, tomando un punto γ fijo (sin los co-
necesario poder disponer de una escala de tiempo regular. Vere- mentados efectos), con el desplazamiento antes comentado, éste
mos los problemas que plantea la forma de referir las escalas de se separa en ascensión recta en unos 0.0084s por día sidéreo del
tiempo al no haber unas efemérides que en la experiencia sean anterior. Por tanto esa será la diferencia entre el día sidéreo medio
exactamente regulares. y el período rotacional terrestre. La relación entre los tiempos si-
déreo medio y verdadero la da la llamada ecuación de los equi-
noccios:
TSv - TSm = EE < 1,180 s
3.1 Sistemas de tiempo rotacional
y sus valores se encuentran tabulados en los almanaques astro-
nómicos. Es debida a la nutación.

Los sistemas de tiempo rotacional son los que se basan en las


efemérides del movimiento rotacional diurno terrestre. Fueron los El tiempo solar
empleados en la etapa histórica entre los siglos XVIII y XIX. Son
dos: el tiempo sidéreo y el tiempo solar.
La otra forma más obvia de construir un sistema de tiempo es
respecto al proceso natural que rige el ciclo más importante en la
El tiempo sidéreo Tierra, es decir, el ciclo diario del Sol. Se define el día de tiempo
solar como el período de tiempo entre dos culminaciones conse-
cutivas del Sol.
Cuando se estudian los fenómenos celestes, la mayoría de los as- Sabemos que la órbita terrestre no es circular sino elíptica, lo
tros parecen fijos o no sufren variaciones apreciables en su posi- que provoca que el movimiento de la Tierra sea más rápido y cer-
ción día a día, por lo que se busca un sistema de tiempo cuya uni- cano al Sol en unos instantes más que en otros, es decir, la dura-
dad esté relacionada con el intervalo entre dos posiciones celestes ción del día solar no es uniforme. Por ello se habla de un tiempo
consecutivas tras una rotación terrestre. El tiempo sidéreo se defi- solar verdadero, medido directamente de la posición solar, y que
ne en un instante y lugar dados como el ángulo horario del punto es irregular. También por dicho motivo se define entonces un
Aries (o punto de equinoccio vernal). Vimos como relacionaba las tiempo solar medio referido a un Sol ficticio que se mueve a lo
coordenadas horarias (propias de cada lugar) y las ecuatoriales, y largo de la eclíptica, o paralelamente al ecuador cada día, con una
es distinto para las distintas longitudes terrestres. La escala de velocidad angular media y constante durante todo el año. Ambos
tiempo sidéreo se define respecto al día sidéreo, que es el interva- tiempos se relacionan con la llamada ecuación del tiempo
lo de tiempo entre dos culminaciones consecutivas del punto
Aries. Se divide en 24h con 60m y estos con 60s sidéreos. hu - TM = ET = αmu - αvu
Como ya sabemos, la referencia del punto Aries está definida en que es semejante a la ecuación de los equinoccios, y cuyos valo-
la intersección de los planos eclíptico y ecuatorial. Puesto que los res también se encuentran tabulados. Cuando además se conside-
fenómenos de precesión y nutación afectan a la orientación del eje ran los efectos de la precesión y la nutación, el Sol medio ficticio
terrestre, el ecuador no puede ser considerado con fijo, y ello pro- se sitúa respecto del ecuador verdadero, de tal modo que su ascen-
voca que dicho punto Aries varíe, complicando las cosas. En con- sión recta verdadera es igual a la longitud media (eclíptica) del
creto la precesión hace que el polo describa aproximadamente un Sol en cualquier momento.
círculo alrededor del polo de la eclíptica, en un período de unos
La hora cero solar corresponde al ángulo horario de la culmina-
25000 años. La nutación por su parte, provoca un pequeño des-
ción del Sol, esto es, a mediodía. Es evidente la importancia que
plazamiento, cíclico cada 18 años. Estos son los fenómenos pe-
tiene el conocimiento de las efemérides solares para la determina-
riódicos más importantes, a los que se superponen otros de menor
ción de los tiempos solares. Newcomb estimó hace más de dos
entidad. Tenemos por tanto que el tiempo sidéreo verdadero es
siglos que su posición en el tiempo estaba dada por
irregular, al estar afectado de precesión y nutación, y está referido
a un equinoccio y ecuador verdaderos variables en cada instante. αm = 18h 38m 45,836s + 8640184,452s T + 0,0929s T2
Las posiciones y tiempos verdaderos son los observados directa-
mente en un instante determinado, y casi siempre son variables e siendo T el número de siglos julianos transcurridos desde la fe-
irregulares por diversos factores. cha 1900-Ene-0 a mediodía medio de Greenwich. La ecuación del
tiempo se daba antiguamente en las efemérides náuticas, y repre-
Si se ignora la corrección de la nutación, considerando sólo un sentada tiene la forma de una curva sinusoide oscilante (arriba y
efecto medio de la precesión, se tiene lo que se llama un tiempo abajo), por el efecto de la nutación. En concreto:
sidéreo medio o uniforme, referido a un ecuador y equinoccio
medios. Se comprueba mediante la observación que el movimien- • se anula: 25-Dic, 16-Abr, 15-Jun y 25-Sept
to medio del punto γ por la eclíptica es de unos 50,2 por año. Es • tiene máximos: 11-Feb (14m26s) y 27-Jul (6m24s)

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Mecánica celeste – El tiempo y su medida

• tiene mínimos: 15-May (3h22s) y 4-Nov (16m24s) ► La TU1, que es la anterior corregida del movimiento del po-
lo. La mide el Bureau International de ĺheure de París y sigue
un comportamiento analítico de la forma
Relación entre las dos escalas ϕ
TU 1 = TU 0 + ( x sin L − y cos L) tan
15
En 1978 se adoptó como patrón del tiempo sidéreo la expresión
donde x e y son las coordenadas del polo instantáneo respecto
de Newcomb, de forma que el tiempo sidéreo medio de Green-
al medio. Es la que se sigue como patrón del movimiento terrestre
wich vendría dado en cualquier momento, a partir de las 0h de TU
y solar. Cuando se habla de corregida significa más cercana a la
de 1900,0, por la ecuación
real (verdadera) viniendo de una media. En la escala de tiempo
TSGm = 18h 38m 45,836s + 8640184,452s T + 0,0929s T2 TU1, el tiempo sidéreo de Greenwich desde las 0h de TU1, es
donde T está en siglos julianos. Según esto, la variación de TSG = 6h 41m50,54841s + 8640184,812866 s T +
tiempo sidéreo por día es de
+ 0,093084 s T 2 − 6,2 ⋅ 10− 6 T 3
dTSGm
= 236,5553605s y T cuenta desde Ene-1-2000-12h TU1 en siglos julianos.
dt d

en segundos sidéreos, lo cual significa que un día solar medio es


► La TU2, que está corregida de los efectos estacionales o pe-
mayor que el día sidéreo medio en esa cantidad. Esto también
riódicos terrestres.
puede verse por el hecho de que el año sidéreo tiene una vuelta
más que el solar (las vueltas diarias más la de traslación alrededor
del Sol). En consecuencia el día sidéreo es 3m y 56s más corto que
el solar. La relación entre ambas escalas de tiempo es pues Escala de tiempo de las efemérides

t . sidéreo 86400
= = 0,997269566414 La escala de tiempo de efemérides es una escala dinámica muy
t . solar 86400 + 236,...
conveniente para grandes períodos, que suele emplearse para fe-
char la posición del los astros. Se define en base al período de re-
volución terrestre alrededor del Sol en un año determinado, que es
fijo. Es como un año trópico escogido arbitrariamente. Es una es-
3.2 Escalas de tiempo universal cala uniforme que no depende del movimiento terrestre de prece-
sión y nutación. Tiene la ventaja de ser el que mejor se ajusta a la
mecánica newtoniana, como la variable absoluta y regular tomada
como independiente en las ecuaciones del movimiento de los
Las escalas de tiempo universal aparecen sobre 1900 con la in-
cuerpos del sistema solar. Con la expresión de Newcomb para la
troducción del meridiano origen y la telegrafía. Se basan en el
longitud media solar
tiempo solar (no en el sidéreo, que sólo se emplea en astronomía)
y tratan de uniformizarse para todo el mundo. Son las siguientes:
Lm ⊕ = 279º 41′ 48,04′′ + 129602768,13Te + 1,089Te2
• El tiempo civil es el tiempo solar medio, pero desplazado o
con origen en la medianoche en vez del mediodía con Te desde 1900-Ene-0-12h TE , en siglos julianos. La épo-
h ca fundamental del tiempo de efemérides es la del 12h-Ene-0-
TC = TM + 12 1900, o bien Ene-0,5d-1900 , o 2415020 de fecha juliana. Su
La medianoche pasa a ser la hora cero. unidad es el segundo de efemérides, definido en términos del año
trópico en su época fundamental
• El tiempo universal es el tiempo civil de Greenwich
TU = TCG = TMG + 12h = TSGm - αm + 12h 1
1s (TE ) = del año trópico 1900
31556925,97474
• El tiempo local es el tiempo civil adaptado a cada longitud
terrestre En 1989 la diferencia con el tiempo universal era de 57s, y en
ascensión recta
TL = TCG ± L
Vemos que por acuerdo histórico se toma como referencia mun- α m ⊕ (TE ) − α m ⊕ (TU ) = 8640184,54 s ∆T
dial el tiempo civil de Greenwich, y se emplea el criterio geográ-
fico de los husos horarios (una hora cada 15° sobre un paralelo
terrestre), con el signo + hacia el este y - hacia el oeste, en acuer- Sistema de tiempo atómico
do a la rotación terrestre: cuando es mediodía en Greenwich, son
las 11h en un punto a 15° de longitud oeste, pues falta una hora
para que allí sea mediodía. La escala de tiempo atómico aparece en una tercera etapa con la
aparición de los relojes atómicos. Hasta 1967 se tomó como uni-
► El tiempo oficial es el tiempo civil corregido de diversos cri-
dad de medida del tiempo el segundo, siendo éste la fracción
terios nacionales de utilidad, como aprovechar luz diurna,
1/86400 del día solar medio. Tras la precisión comprobada de los
división administrativa en grandes países, o consonancia con
relojes de cuarzo queda claro que la rotación de la Tierra no es
la vecindad.
uniforme durante los 365 días del año. Además, el día cada vez
Según el tipo de las mediciones (exactitud, efectos considerados, dura algo más por efecto del alejamiento lunar (en la época roma-
y promedios), se disponen de distintas variantes de la escala de na duraba algunos segundos menos). En 1967 se define el segun-
tiempo universal: do internacional atómico como la duración de 9192631770 perío-
dos de la radiación correspondientes a la transición entre los dos
► La TU0, obtenida de la observación de la longitud solar. estados hiperfinos del estado fundamental del Cs133. Tiene una

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Mecánica celeste – El tiempo y su medida

precisión de 10-13. Hoy en día se define respecto a la velocidad do de precesión y nutación (o sea, que no es regular). Con un gran
de la luz; es el llamado segundo-luz. Esta escala fue introducida número de pasos los efectos periódicos de la nutación pueden ser
en 1972, es rígida, dependiendo sólo de influencias gravitatorias. ignorados, y ese valor medio es el escogido como año trópico.
De esta forma hemos llegado a una época en que se han conse- Analíticamente el año trópico es el tiempo tomado por el Sol para
guido formas de secuenciar el tiempo con una regularidad que describir 360° menos el desplazamiento precesional que hemos
hace innecesaria la referencia a las bases originales (el día o el visto. Con ello
año), y que se han mostrado generadoras de diversos problemas 1 año trópico = 365,2422 días solares medios
de exactitud. Pero de otro lado siguen siendo necesarios sistemas
temporales ligados a los fenómenos observables, que son la reali- Por tanto la duración regular de este año es de 365d, 5h ,48m y
dad, por lo menos para emplearlos con ellos (el hombre y la natu- 45s . La relación entre el año trópico y el sidéreo es
raleza se acoplan a esos ciclos). No tendría sentido emplear una
año sidéreo 360º
escala de tiempo que acabara dando, p.e. las 12 del mediodía por =
la tarde. año trópico 360º −50,2′′
El segundo de tiempo internacional aceptado hoy en día es del y por ello un año sidéreo tiene
tipo atómico, y es con relojes atómicos con los que se mide el
tiempo. La duración del segundo internacional difiere en menos 1 año sidéreo = 365,2564 días solares medios
de 2/1012 del segundo de efemérides (que también es exacto o
que equivale a 365d, 6h, 9m y 9,5s en unidades solares medias
fijo). Se ha concertado que entre ambos, a partir de 1972, la dife-
(son siempre las unidades por defecto), mientras que en días sidé-
rencia es de
reos es uno más, pues se da otra vuelta alrededor del Sol. Gene-
ET = TAI + 32,184s ralmente, cuando se emplea el término año, en las escalas de
tiempo civil, se refiere al trópico, pues es al que se tiende cuando
El tiempo universal coordinado (TUC) es una escala de tiempo se ajusta el calendario. La diferencia entre uno y otro es debida
atómico internacional, coordinada con el tiempo universal TU1 , únicamente a la precesión de los equinoccios.
de tal forma que la diferencia sea entera y se aparte poco (menos
de 1s) del TU1 El año anómalo es el tiempo que transcurre desde que la Tierra
alcanza el perihelio dos veces consecutivas. Dura 365,2596413d
TU1 - TUC < 0.9s ó 365d, 6h, 13m y 53s. Su nombre proviene de la palabra anomalía,
que es el nombre histórico del ángulo del radio vector terrestre
Esto significa que se emplea un reloj atómico al servicio de la
respecto al perihelio.
rotación terrestre, y se cambia de acuerdo con las observaciones.
La diferencia arrastrada entre el TAI y el TUC era de 24s en El año ficticio, besseliano o de Bessel es el intervalo en el cual
Enero de 1988. El TUC es el que se da por las señales horarias, y la ascensión recta solar aumenta en 24h, se cuenta a partir de la
lo lleva el Bureau International de ĺheure de París. Cada cierto ascensión recta de valor 18h40m o 270°; dura lo que el año trópico.
tiempo hay un salto de 1s en Junio o Diciembre, para acompasarlo Otro tipo de años es el año juliano es de 365,25d, y se llama así
como hemos dicho al TU1. en honor de Julio César; es el valor medio de incluir 1 año bisies-
Partiendo de la escala de tiempo atómico internacional TAI se to cada 4.
accede a otras escalas: El año de eclipses es el tiempo transcurrido entre dos pasos con-
• La TDT ó tiempo dinámico terrestre, es el tiempo de efe- secutivos por el nodo lunar, y dura 346,6201d; da la repetición del
mérides en base a relojes atómicos. Es una variante del ciclo de los eclipses.
tiempo universal, pero que no está ligada a la rotación te-
rrestre. Esta escala es uniforme, independiente de la dura-
ción del día medio terrestre, el cual (como se ha comenta- El calendario y su historia
do) se va alargando con el tiempo debido al efecto de ma-
rea de la Luna y el Sol. Por ello la emplean los astrónomos.
La diferencia TDT-TUC sólo se conoce con exactitud El calendario es una división o estructuración de la escala tem-
desde 1900. En 1972 era de 32,184s, y en 1990 de aproxi- poral para datar acontecimientos y medir intervalos de tiempo.
madamente 1m. Por referencias naturales y/o históricas tiene a estructurarse en
períodos semejantes a los de la Luna y el Sol: días, meses y sema-
• El tiempo dinámico baricéntrico ó TDB , es más exacta nas (fases y lunaciones), años,... Por razones obvias, el año civil
que la del TDT al incluir los efectos relativistas orbitales debe contener un número entero de días solares medios, pero co-
periódicos mo hemos visto, la naturaleza se empeña en contrariarnos, ofre-
ciendo una cantidad fraccionaria de días, y lo mismo puede decir-
TDB = TDT + 0,001658 s sin M ⊕ + 0,000014 s sin 2 M ⊕
se en la cantidad de semanas o meses. Es decir, la relación natural
entre los distintos períodos a emplear no es de número enteros. A
través de la historia los pueblos y civilizaciones han tratado el
problema de encuadrar los tres períodos inconmensurables de los
3.3 El año. El calendario días, lunaciones y años estacionales (trópicos).
Los pueblos antiguos consiguieron medir los acontecimientos
astronómicos a través del orto heliaco de estrellas o constelacio-
Tipos de año nes, esto es, la aparición sobre el horizonte en el crepúsculo. Esto
era de importancia fundamental para elegir el momento apropiado
de siembra o recolección en la agricultura.
El año sidéreo es el tiempo requerido por el Sol para completar Los egipcios tenían 1 año de 12 partes de 30d, agrupados en tres
una vuelta completa en la eclíptica, es decir, el intervalo entre el décadas, lo que daba 360d, en consonancia con los 360° del círcu-
paso por un punto fijo de la eclíptica y el siguiente paso. No es lo. Este era un año regular pero inútil. A partir del 4236 a.C. se
uniforme, pero se suele referir a él como su valor promediado. añadieron 5d. Este sistema se empleo durante 4000 años, aunque
El año trópico o estacional es el intervalo medio entre dos pasos no tuviera correlación. Como no servía para la agricultura, se em-
consecutivos del Sol por el equinoccio vernal, el cual está afecta- pleó otro estelar. Las estaciones en Egipto eran 3 según las creci-

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Mecánica celeste – El tiempo y su medida

das del Nilo, que dividieron en 4 meses. La normativa quedaba a mer plenilunio tras el equinoccio de primavera (21 de Marzo).
cargo de los sacerdotes. Como el año retrasaba 0,24d, el calenda- Para compensar el desfase del año juliano con el trópico, entonces
rio volvía a concordar cada 1460 años; éste es el llamado ciclo de 3 días, pusieron el equinoccio de primavera el 21 de Marzo,
sotíaco. Conocían que la duración del año era de aproximadamen- pensando que era debido a un erróneo inicio en tiempos de Julio
te 365,25 días. César.
Los caldeos (sumerios y babilonios) empleaban calendarios fun- La nomenclatura de los días de la semana quedo ya establecida
damentalmente lunares, con un año de 12 meses o lunaciones, de durante la Edad Media, con el método romano de los planetas en-
29 y 30 días alternados. Así se conseguía un año de 354d, por lo tonces conocidos (el Sol, la Luna y los planetas), junto con un día
que cada 3 años incluían un mes más. Como la datación quedaba del Señor. También se empleaba una división del día en horas se-
en manos de sacerdotes y/o ministros, no se siguió una rigidez mejante a la de los hebreos.
histórica, llegando a haber varios años seguidos de 13 meses. Di- Los mayas y demás mesoamericanos empleaban dos calendarios
vidían el día en 12h, empezando a la salida del Sol, y empleaban conjuntamente de tipo lunar, uno civil de 365d y otro religioso de
el meridiano de día y la clepsidra de noche. 260d. La combinación de ambos se repetía al cabo de 73 años (52
Los hebreos se basaron en el anterior, comenzando el mes en trópicos), y era el ciclo llamado giro del calendario, con gran sig-
cuanto se observase el creciente lunar. Al 13er mes le llamaron nificación religiosa, de eras y renovación. El mes tenía 20d. Los
embolístico. La ventaja que tenían estos calendarios lunares era ciclos más importantes que consideraban eran de:
que los eclipses de Sol eran al principio o final de mes, y los luna- • 11960 días = 405 lunaciones = 46 años lunares (de 260d)
res el 14 o el 15. Dividían el día en 8h, contando desde el crepús-
culo. La semana es un invento suyo, y empezaba el Sabba (vier- • 18980 días = 73 años lunares = 52 años solares
nes por la tarde). Los romanos cambiaron el nombre de los días • 5128 años = 5125 trópicos = 203·18 días; esta era la llama-
con los de los planetas, debido a creencias astrológicas. Su era da cuenta larga.
empezaba hacia el 3761 a.C. en concordancia con la tradición del Conocían la duración del año trópico con una diferencia de 17s
Génesis. del conocido en la actualidad, y el período sinódico, de la rela-
Los griegos tenían sistemas distintos en cada polis. Tenían me- ción: 81 lunaciones = 2392 días, que coincide con el dato actual
ses de 29 y 30d que dividían en 3 décadas. Luego empezaron a hasta en 10-5 parte del día.
emplear calendarios lunisolares, en los que se intenta cuadrar un Al cabo del tiempo, la diferencia acumulada entre el año trópico
número de años con un número de lunaciones. El octaectéride era real y el adoptado juliano se convirtió en días. Se dieron cuenta de
un período de 8 años, ó 99 lunaciones (se intercalaban 3 meses), ó la naturaleza del problema y encargaron su solución a una delega-
2422d. En dos ciclos acumulaba 4 días de desfase. El ciclo metó- ción papal. En 1582 el Papa Gregorio introdujo las correcciones
nico era de 19 años, con 235 meses, ó 6940d. Era más exacto. El vigentes en el calendario hasta hoy en día. La corrección consis-
ciclo Calipo contaba 76 años, con 940 meses (28 intercalados), ó tía, de una parte, en desplazar la fecha en 10 días, compensando el
27759d. desfase; del 4 de Octubre (jueves) se pasaba al 15 (viernes). De
Los romanos tenían un año lunar de 10 meses que empezaba el otra, dejaban de ser años bisiestos los finales de siglo, salvo si son
equinoccio de primavera. Los meses empezaban cuando lo anun- múltiplos de 400. Así, el 1700, 1800 y 1900 no son bisiestos pero
ciaba el calata (de donde proviene el término calendario). El em- el 2000 sí. Es el llamado método de los años seculares, con el que
perador Numa introdujo uno lunisolar, de 354d en 12 lunaciones, se consigue un año medio de 365,2425d. Primero se adoptó en
con dos meses nuevos: enero y febrero, de 28 días. Cada 2 años España, y poco a poco en el resto de países católicos. Los protes-
intercalaba otro de 22 o 23d, llamado mercedonio. Como el cóm- tantes se resistieron hasta 2 siglos después, y China y los países
puto estaba sometido a los pontífices, acabó en confusión, y en el ortodoxos hasta entrados en el siglo XX.
46 a.C. había 3 meses de desfase con las estaciones.
Julio César, asesorado por Sosígenes, separa el año civil del lu-
nar, y lo establece en 365,25d. El año juliano comenzaba con el La fecha juliana
1er plenilunio tras el solsticio de invierno, y el primer día del año
es el 1 de enero. Renombró los meses quintillius y sextius como
Julius y Augustus. Prácticamente, tras su reforma es el sistema y La fecha juliana fue introducida en 1853 por Joseph Justus Sca-
nomenclatura que empleamos hoy día en occidente. El mes tenía liger. El cero del nuevo calendario se fijó convencionalmente en
tres fechas señaladas: calendae (1º), nonae (5º ó 7º) e idi (hacia el una fecha muy remota del pasado, con la idea de que cualquier
15º). Se contaban los días en cada mes que faltaban para llegar al acontecimiento histórico quedara incluido en el sistema. El origen
siguiente día señalado. En el Calendario Juliano, como el año tró- establecido es el 1 de Enero del año 4713 a.C. a las 12h (medio-
pico tenía 365,25 días, cada 4 años, tres tenían 365 días y el cuar- día) en Greenwich, contando en siglos julianos. La única división
to, denominado bisiesto (el divisible por 4), 366. El día extra se que reconoce es la de los días, sin órdenes superiores. Este méto-
ponía en Febrero. do resulta cómodo de utilizar porque se tiene cualquier fecha con-
vertida en una cantidad matemáticamente operable, y no reconoce
Los musulmanes emplean un calendario lunar, con un año de 12
los problemas de situar años, bisiestos o meses. Además es muy
meses, de 20 y 30d alternados, que hacen 354d. Este año islámico,
útil en el estudio de las estrellas variables, cuyo rango de estudio
todavía en uso, vuelve a encajar cada 33 con el trópico. La luna-
se extiende sobre días. El algoritmo más típico para calcularla es
ción real es 44m mayor que el mes, por lo que cada 30 años islá-
micos hay 11 con un día más, que se pone en el último mes. La FJ = FJ0 – C + N - 0,5d + FD
era musulmana empieza con la Hégira o huida de Mahoma de La
Meca (653 d.C.). • FJ0 = (A + 4712) · 365,25 , que da el número de días de los
años transcurridos; se toma entero
Los chinos también empleaban un año lunar de 12 meses de 29
y 30d, divididos a su vez en décadas. La división más importante • C es la corrección a los bisiestos; 1 si FJ0 es entero, más 13
era sin embargo los ciclos de 60d, divididos en 60h. Tenían tam- para el intervalo 1901-2100
bién un ciclo metónico, de repetición lunar. El año empezaba en • N es el número de días del año considerado, convirtiendo
el solsticio invernal. Las correcciones se daban por decreto. meses más días
En el concilio de Nicea (325 d.C.) se dejó establecida la fecha • FD es la fracción del día, convirtiendo horas y minutos en
de la Pascua (Semana Santa), como el domingo siguiente al pri- días

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Mecánica celeste – El tiempo y su medida

La fecha juliana aparece tabulada en los almanaques. Algunas además la diferencia en la duración del año empleado. Para pasar
fechas julianas señaladas: de fecha juliana a una de estas épocas se hace
• FJ(1900-Ene-0-12h TU) = FJ(1900,0) = 2415020 ; sirve pa- FJ (T ) − FJ ( B1900,0)
ra operar más rápidamente desde una época astronómica B (T ) = B1900,0 +
365,2422
señalada.
FJ (T ) − FJ ( J 2000,0)
• FJ(1858-Nov-17-0h TU) = 2400000,5 ; la fecha juliana sue- J (T ) = J 2000,0 +
le darse a partir de esta fecha como una cantidad de cinco 365,25
cifras, a la que hay que sumar esta.
Notar que contra lo aparente, es más fácil emplear uno de estos
sistemas o la fecha juliana, que tener que considerar la estructura
convencial del calendario y los ajustes históricos. Algunas épocas
Épocas astronómicas usuales en fecha juliana:
• FJ(1900,0) = 2415020,31352
Una época astronómica es una fecha señalada de referencia, da- • FJ(2000,0) = 2451451,545
da en años de Bessel (trópicos) o julianos. Como hemos dicho, la
• FJ(B1990,0) = FJ(1900-Ene-0,813d ET) = 2415020,313
variación de los planos fundamentales y orígenes de coordenadas
se dan tabulados o mediante expresiones referidas a los valores de • FJ(B1950,0) = FJ(1950-Ene-0,923d ET) = FJ(1949-Dic-31-
una determinada época. 22h09m ET) = 2433282,423
Las épocas civiles estándar se notan en la forma 2000.0 (2000- • FJ(J2000,0) = FJ(2000-Ene-1,5d TDB) = 2451545,0
Ene-0-12h TU), mientras que las besselianas o julianas tienen una • J1950,0 = 1950-Ene-1d
letra delante, J1900,0 ó B2000,0, por ejemplo. Estas épocas tienen

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Mecánica celeste – Movimiento planetario

• r es la distancia del Sol al planeta. El vector entre ambos es


4. Movimiento planetario el radio vector. El punto más cercano al Sol es el perihelio,
y el más lejano el afelio (pericentro y apocentro de forma
general para otros cuerpos centrales).
• a es el semieje mayor y b el menor de la cónica.
• e es la excentricidad, definida por la relación en el dibujo
En este tema se va a sintetizar casi toda o la mayor parte de la e = CS / a , y que cumple la relación trigonométrica b2 +
formulación que se emplea para describir el movimiento planeta- (ae)2 = a2 . La órbita es circular si e = 0. Da el achatamien-
rio. Empezaremos con las tres leyes de Kepler, se dará un repaso to o distorsión de la cónica respecto del círculo.
al problema dinámico de los dos cuerpos y como se deducen de él
• θ es la llamada anomalía verdadera (el ángulo de fase o
las leyes de Kepler. Posteriormente se analizan los diferentes tipos
polar), contado desde el perihelio.
de cónicas y los elementos de una órbita en el espacio.
• la constante p recibe el nombre clásico de latus rectum.y
geométricamente es la distancia “vertical” en la posición
del Sol. Se determina con θ = 0 , dando
4.1 Las leyes de Kepler
b2
p = SA(1 + e) = a (1 + e 2 ) =
a
Las tres leyes de Kepler son el resultado empírico más impor-
tante de la historia de la Astronomía. Son un conjunto de tres re-
glas cinemáticas, deducidas empíricamente por Kepler (1571- 2ª Ley (1602), de la velocidad areolar
1630), a partir de los datos del movimiento de los planetas compi-
lados durante años por las observaciones de Tycho Brahe. La re- El radio vector barre áreas iguales en tiempos iguales. Esto se
gularidad de esos movimientos los interpretó de forma geométrica puede expresar como
(mayormente al modo pitagórico) desde la hipótesis heliocéntrica
de Copérnico. Inicialmente no encontró ni divulgó las tres leyes dA πab
de forma simultánea ni en el orden en el que las conocemos. Parte = cte =
dt T
de la nomenclatura moderna le pertenece, como los términos foco
de la órbita, satélite o inercia. Relacionó la causa del movimiento El valor de la constante lo hemos obtenido tomando el área para
de los planetas con alguna acción del Sol. Setenta años más tarde un período (el área de la elipse es πab). Esta ley implica que la
de su publicación Newton las demostraría como una consecuencia velocidad de los planetas es variable a lo largo de las órbitas, sal-
natural y lógica de la ley de la gravedad, y las delimitaría en sus vo sin son circulares, y son más rápidos en las proximidades del
hipótesis. Representan una solución al problema del mutuo mo- perihelio, y más lentos cerca del afelio.
vimiento de dos cuerpos aislados, atraídos gravitatoriamente.

3ª Ley (1618), de los períodos y los semiejes


1ª Ley (1605), del movimiento planetario
El cociente entre el período al cuadrado y el semieje al cubo, es
Los planetas se mueven en órbitas elípticas, con el Sol en uno de una constante para el sistema solar. Esto es válido siempre que
sus focos. Según esto, el movimiento describe una cónica (curva despreciemos las masas de los planetas frente a la solar. Se expre-
obtenida por la intersección de un plano con un cono), dada analí- sa como
ticamente por la expresión general en forma polar
T2
p = cte ⇔ n 2 a 3 = cte′
r= a3
1 + e cosθ
siendo n = 2π / T. Notar que órbitas de distinta excentricidad
En las figuras siguientes la cónica es una elipse, y pueden ob- pueden tener el mismo período.
servarse e identificarse los distintos términos:

4.2 El problema de los dos cuerpos

Tratamos el problema del movimiento de dos cuerpos que inter-


accionan mediante fuerzas del tipo central, como pueden serlo la
gravitatoria o la electrostática. Aquí sólo nos interesa la gravitato-
ria. Lo hacemos desde la mecánica de Newton, pudiendo hacerse
también mediante la de Lagrange.
Tomemos coordenadas esféricas o polares (r,θ) situadas en el
centro de masas del sistema. Dada la naturaleza de la fuerza, ra-
dial de un cuerpo hacia el otro, no se producen efectos dinámicos
sobre las otras coordenadas, que son angulares, y en consecuen-
cia, se conserva el momento angular total del sistema. Además
como no hay fuerzas externas, el momento cinético total del sis-

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Mecánica celeste – Movimiento planetario

tema también se conserva, y sigue un movimiento uniforme del que es también una constante. La energía total del sistema es
que prescindimos, pues nos interesa sólo el movimiento mutuo. otra constante del movimiento
Aplicando la ecuación fundamental de la dinámica podemos te-
ner la conocida fórmula del movimiento de un cuerpo alrededor ⎛ v2 m ⎞
E = T +V = µ ⎜ − ⎟
del origen de un campo de fuerzas fijo (de masa M) ⎜ 2 r ⎟⎠

r k GMm r r
F = − 2 rˆ = − 3 r = ma Desde un punto de vista clásico, se compara la energía mecánica
r r total con el valor del potencial en el infinito (nulo por conven-
r ción) para saber si tiene posibilidad de sustraerse o si por el con-
d 2 r GM
+ 2 rˆ = 0 trario la dinámica va a estar ligada al potencial. Así con E ≥ 0 se
dt 2 r tiene órbitas no ligadas (parabólicas e hiperbólicas), y con E < 0
Cuando se trata de un sistema de dos cuerpos en interacción, se tienen las órbitas ligadas, cerradas, y de movimiento periódico
ninguno de los dos es fijo, pero se consigue una relación semejan- (elípticas y circulares), que son las que realmente más interesan
te, combinando la ecuación de cada cuerpo y empleando la dis- en este tema. En el caso planetario y más general las órbitas van a
tancia mutua ser elípticas, mientras que con los cometas hay más variedad.
r r
Fi = mi ai
r Justificación de las leyes de Kepler
d 2 r G ( M + m)
+ rˆ = 0
dt 2 r2
Tomemos coordenadas polares planas, en el plano orbital, y cen-
Es decir, la dinámica de un sistema de dos cuerpos interactuan- tradas en el foco solar. El vector de posición del planeta es enton-
tes es equivalente a la de un cuerpo de masa reducida moviéndose ces r = r·êr . Si derivamos sucesivamente dos veces respecto al
alrededor de un punto fijo de masa M. La masa reducida está da- tiempo, tenemos
da como
r
mm r& = r& ⋅ eˆr + rθ& ⋅ eˆθ
µ= 1 2 &rr& = (&r& − rθ& 2 ) ⋅ eˆ + (2r&θ& + rθ&&) ⋅ eˆ
m1 + m2 r θ

En astronomía es usual emplear la variable o la notación Al comparar la última expresión con la ecuación de la dinámica
identificamos y vemos
m = G(m1+m2)
m
y entonces a) &r& − rθ& = −
r2
r r
d 2r r
= −m 1 d 2&
dt 2 r3 b) 2r&θ& + rθ&& = (r θ ) = 0
r dt
La constante de gravitación G suele darse bajo la forma de la
La primera, al integrarla, conduce inmediatamente a la ecuación
constante de Gauss KG , de tal modo que G = KG2. Su valor está
de las cónicas vista en la primera ley de Kepler
establecido en
p
uas3 / 2 r=
K G = 0,01720209895 1 + e cos α
M ⊕ día
con las equivalencias
y se ajusta el valor de la unidad astronómica manteniendo cons-
tante este valor. A partir de ello se deduce el valor del semieje Ah 2
α = θ −ω e=
mayor de la órbita terrestre, con la 3ª ley de Kepler m
T2 h2
at3 = KG2 ( M ⊕ + mt ) 2 p= A = π ab
4π m
at = 1,00000018 uas
donde A es el área de la órbita, cuyo valor se indica para el ca-
so elíptico. ω es el argumento del perihelio, o ángulo desde un
origen libremente escogido hasta el perihelio; la anomalía verda-
Conservación del momento angular y de la energía dera v empieza a contar desde el perihelio. La segunda relación
es igual a la conservación del momento angular
Como hemos dicho, la dependencia del potencial o la fuerza es r
h = h = cte = r 2θ&
causa de la conservación del momento angular. Luego el movi-
miento va a estar constreñido a un plano, y puede describirse to-
talmente por un par de coordenadas como son las polares planas y ahora veremos que implica la segunda ley de Kepler. Como el
(r,θ). En astronomía se suele hablar indistintamente de momento y área recorrida en un intervalo diferencial dt es
velocidad angular (por un factor de masa reducida). Está relacio- 1 r r r r2
nada con la velocidad areolar h dA = r × (r + dr ) = dθ
2 2
r r r
⎛ r dr ⎞ entonces
L = µ ⋅h = µ ⋅⎜r × ⎟
⎝ dt ⎠
dA r 2θ& h π ab n 2
= = = cte = = a 1 − e2
dt 2 2 T 2

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Mecánica celeste – Movimiento planetario

donde hemos vuelto a poner la expresión del caso elíptico. La Esto conlleva además que la energía del sistema valga
tercera ley de Kepler se deduce operando con las relaciones que
acabamos de hallar; por un lado, de lo anterior m G ( m1 + m2 )
E = T +V = − =−
2a 2a
h 2 = n 2 a 4 (1 − e 2 )
Nótese que depende sólo del semieje mayor. Ahora buscamos
y de otro, como las relaciones de la dirección del vector velocidad; para ello nos
basamos en la figura. Consideramos la dirección radial desde el
h 2 = m ⋅ p = m ⋅ a ⋅ (1 − e 2 ) Sol y la perpendicular a ésta (que coincide con el vector êθ). En-
tonces
se tiene entonces que
r&
sin φ =
n 2 a 3 = cte = m = G (m1 + m2 ) v
a3 G (m1 + m2 ) rσ&
= cos φ =
T2 4π 2 v
r&
n está dado en radianes por día (las unidades circulares coheren- tan φ =
rσ&
tes siempre por defecto). Quedan por tanto ya justificadas las tres
leyes de Kepler.

4.3 Órbita elíptica: ecuación del Kepler

Distancias apsidales

En el caso genérico de una órbita elíptica, se tendrá una energía


menor que cero, E < 0, y una excentricidad entre 0 y 1. Los ápsi-
des o puntos de inversión del movimiento son dos: el pericentro
(punto de máximo acercamiento y velocidad) y el apocentro (pun-
to de mínimo acercamiento y velocidad). En el caso de los plane- Otra propiedad geométrica interesante de la velocidad orbital se
tas del sistema solar son llamados perihelio y afelio, y para órbitas puede derivar de esto. En la órbita elíptica, la velocidad puede ser
terrestres perigeo y apogeo. Veamos como se caracterizan: descompuesta en dos componentes constantes en módulo que di-
• en el perihelio es σ = 0° , que implica para la distancia r = fieren en el ángulo. En concreto, una es paralela al eje menor de la
a(1-e) elipse, y la otra perpendicular al radio vector, pues
• en el afelio es σ = 180° , e implica para la distancia r = r eh h eh h
a(1+e) v = r&eˆr + rθ& eˆσ = sin σ eˆr + eˆσ = eˆb + eˆσ
p p p p

La cantidad h / p vale
Velocidad y distancia. Componentes de la velocidad
h na 2π a
= =
p 1 − e2 T 1 − e2
Pasamos a relacionar la velocidad orbital con la posición de pla-
neta. El módulo de la velocidad cumple

v 2 = r& 2 + (rθ&) 2 El problema dinámico

Buscamos despejar las derivadas temporales en cantidades co-


nocibles. Por un lado El problema de mayor interés en la mecánica planetaria es el del
cálculo de las posiciones en función del tiempo. La forma mate-
pe sin σ r 2e mática usual es la de tomar la ecuación del movimiento (del tipo
r& = 2
σ& = σ& sin σ diferencial) e integrarla. Podemos coger para ello la conservación
(1 + e cos σ ) p
de la energía mecánica, despejar la velocidad radial e intentar in-
De otro, por el momento angular tenemos h = r2, y entonces tegrar t(r)

h dr 2 l2
a) σ& = 2 = r& = (E − U ) −
r dt µ µ 2r 2
eh y emplear también la conservación del momento angular para
b) r& = sin σ
p integrar el ángulo θ(r)

Ya podemos despejar, obteniendo para el módulo de la veloci- dθ lµ r 2


dad orbital =
dr r&
⎛2 1⎞ obteniendo la solución de la cónica, y a través de ésta t(θ). Pero
v 2 = m⎜ − ⎟
⎝r a⎠ el problema aparece al intentar obtener precisamente lo recíproco,

Página 23
Mecánica celeste – Movimiento planetario

es decir r(t) o bien θ(t), ya que darles la vuelta a esas expresio- σ 1+ e E


nes es sumamente difícil. Se podría recurrir a métodos aproxima- tan = tan
dos y reiterativos, pero Kepler ideó una solución ingeniosa de tipo 2 1− e 2
geométrico que hoy en día se da de forma algebraica. La clave es La integración de la ecuación de la trayectoria a través de la
emplear variables auxiliares. anomalía excéntrica es más simple, y da la expresión conocida
como ecuación de Kepler

La ecuación de Kepler M = E − e sin E


Se halla de otra forma integrando la ley diferencial de las áreas
Se llama anomalía media (que notaremos como M) al ángulo con la distancia en función de la anomalía excéntrica. Nuevamen-
de movimiento angular medio medido desde el perihelio. Si τ es te los argumentos están dados en radianes. Aparentemente parece
el tiempo de paso por el perihelio y t es un tiempo dinámico (re- que hemos vuelto a caer en el problema original, teniendo t(E)
gular y rígido, para los cálculos) se tiene en vez de E(t). Para hallar la anomalía excéntrica en función de la
media deben emplearse aproximaciones e iteraciones, pero la cosa
2π es simple, disponiendo de más de 120 formas de operar. Por
M = n(t − τ ) con n = ejemplo, con excentricidades menores que 0.2 , el segundo tér-
T
mino es una pequeña corrección al primero, por lo que puede
Se llama anomalía excéntrica (E) al ángulo de posición de la hacerse iterativamente, tomando recursivamente un valor anterior
prolongación vertical sobre la circunferencia excéntrica. Dicha para calcular uno más exacto.
circunferencia se define: excéntrica a la elipse orbital (mismo cen- Si e > 0,2 se emplea el método de Newton-Raphson, que para
tro y tangente por fuera), y de radio igual el semieje mayor (a), una función f(E) = 0 toma iterativamente f(Ek+1) = f(Ek) +
medido desde el perihelio. Así, dada una anomalía verdadera σ, h·f́(Ek) , siendo h la corrección
la anomalía excéntrica E es el ángulo en el centro, que da la
misma proyección sobre el eje mayor. Para mejor visualización f ( E ) = M − E + e sin M = 0
observar la figura. M − Ek + e sin Ek
Ek +1 = Ek +
1 − e cos Ek

Si e > 0,9 lo más cómodo es por intersección gráfica o equiva-


lente.

4.4 Órbita parabólica

Veremos ahora las órbitas abiertas, en las que el segundo cuerpo


se aproxima al primero desde el infinito hasta alcanzar una míni-
ma distancia, alejándose después. En la órbita parabólica la ex-
centricidad vale la unidad, la energía total es nula, y el semieje
mayor es infinito. La ecuación polar respecto al foco, y la canóni-
ca (o cartesiana), son
p
S representa la posición del Sol, P la del planeta, y R es la r= y 2 = 2 px
proyección sobre el eje mayor. Tomemos una referencia (x,y) en 1 + e cos σ
S . Por definición tenemos que CR = CS + SR = ae + x , es decir
x = ae + r cos σ = a cos E
De otro lado se cumple que
y PR b sin E b
= = = = 1 − e2
QR QR a sin E a

y como también es y = PR = r sinσ

r sin σ = b sin E = a 1 − e2 sin E

Operando con las dos relaciones

r 2 = x2 + y2
r = a (1 − e cos E )

es nada menos que la expresión de la distancia radial del planeta


en función de la anomalía excéntrica, en una forma bien simple.
Operando con estas relaciones también disponemos de la relación
La fórmula de la velocidad con la distancia sigue siendo válida,
entre la anomalía verdadera y la excéntrica
y da

Página 24
Mecánica celeste – Movimiento planetario

2m 4.5 Órbita hiperbólica


v2 =
r
Debe tenerse en cuenta que la velocidad parabólica es por defi-
nición igual a la velocidad de escape, de tal modo que si tenemos En el caso de una órbita hiperbólica la excentricidad es mayor
una órbita circular o elíptica y se le da la velocidad de órbita pa- que la unidad, y la energía mecánica total positiva. En el dibujo
rabólica, el cuerpo escapa del pozo gravitatorio. La relación entre identificaríamos e = SP / PM . Las ecuaciones de la hipérbola, en
la velocidad de escape y la circular está dada siempre por un fac- forma polar y canónica, son
tor constante
p a (e 2 − 1) x2 y2
r= = − =1
vesc = 2 ⋅ vc 1 + e cos σ 1 + e cos σ a2 b2
Veamos el movimiento en función del tiempo. Con e = 1 po-
demos poner la ecuación de la órbita como
σ
cos σ = 2 cos 2 −1
2
p σ
r= sec2
2 2
La ley de las áreas se escribe como

p 2σ& σ
h = r 2σ& = sec4
4 2
y como h2 = pm tenemos

m σ
4 3
= σ& sec 4
p 2

Por relación trigonométrica se puede poner como


De forma estricta estas ecuaciones describen dos ramas separa-
2 2 das de hipérbolas, de las cuales sólo una tiene sentido en el mo-
sec x = 1 + tan x
vimiento de los dos cuerpos. Una consecuencia inmediata es que
m σ⎛ σ⎞ la anomalía verdadera está limitada, ya que cuando r → ∞ se
4 = σ& sec 2 ⎜1 + tan 2 ⎟ verifica un movimiento asintótico con
p3 2⎝ 2⎠
⎛ 1⎞
Integrando se obtiene σ lim = arccos⎜ − ⎟
⎝ e⎠
m σ⎛ 1 σ⎞
2 (t − τ ) = tan ⎜1 + tan 2 ⎟ por lo que el intervalo de variación del argumento es [ -π + arc-
p3 2⎝ 3 2⎠ cos () , π - arccos() ] . Para el módulo de la velocidad se hace un
desarrollo análogo al del caso elíptico, y se llega a
Con el cambio de variable
⎛2 1⎞
m σ v 2 = m⎜ + ⎟
α= D = tan ⎝r a⎠
p3 2
Con esto podemos calcular el valor de ese semieje mayor a, sin
queda como mas que tomar la velocidad (no nula) en el infinito. El ángulo en-
tre el radio vector y el vector velocidad es
⎛ D 2 ⎞⎟
2α∆t = D⎜1 +
⎜ 3 ⎟⎠ a 2 (e 2 − 1)
⎝ φ = 90º − arccos
r ( 2a + r )
que es la llamada ecuación de Barker. Se resuelve introduciendo
las dos variables auxiliares s y θ dadas como La descripción del movimiento en función del tiempo se formula
paralelamente al caso elíptico. Se definen los parámetros ν y F
σ s de forma que
2 cot(2θ ) = tan cot = cot 3 θ
2 2
r = a (e cosh F − 1)
y de ese modo queda
ν 2a3 = m
cot s = 3α∆t
Entonces, de forma análoga a la del caso elíptico
El ángulo que forma el vector velocidad con el vector de posi-
dt
ción planetaria es ν = e sinh F − 1
dF
rσ&
φ = 90º − ar cos p = 2r sin 2 φ Integrando
v
e sinh F − F = M = ν∆t

Página 25
Mecánica celeste – Movimiento planetario

que es análoga a la ecuación de Kepler. Además se cumple una L0 = ω~ + M 0


relación semejante
Por lo general, cuado hablamos de un argumento medio quiere
σ e +1 F decir que contado desde el punto Aries y pasando por el nodo.
tan = tanh
2 e −1 2

Transformación de coordenadas

4.6 Órbita en el espacio: elementos orbitales Ahora empleemos coordenadas rectangulares a partir de las po-
lares para manipular la órbita en el espacio. El eje X apunta
hacia el perihelio y el Z como el momento angular. Entonces el
Elementos orbitales radio vector planetario es

⎛ cos σ ⎞
r ⎜ ⎟
Los elementos orbitales caracterizan y sitúan las órbitas. Par- rorb = r ⎜ sin σ ⎟
tiendo de las coordenadas orbitales polares (r,σ) permiten el cam- ⎜ 0 ⎟
bio a cualesquiera otra. En la figura tenemos una órbita proyecta- ⎝ ⎠
da (interiormente) sobre la esfera celeste y los distintos elementos Para pasar a coordenadas eclípticas deben hacerse una serie de
orbitales. rotaciones, expresadas en función de los elementos orbitales como
r r
rec = R3 (−Ω) Rn ( −i ) R3 (ω ) rorb = S ⋅ rorb

y entonces la matriz de cambio S es

⎡cos Ω cos ω − sin Ω sin ω cos i



Si1 = ⎢sin Ω cos ω + cos Ω sin ω cos i
⎢⎣ sin ω sin i
− cos Ω sin ω − sin Ω cos ω cos i
Si 2 = − sin Ω sin ω + cos Ω cos ω cos i
cos ω sin i
− sin Ω sin i ⎤

Si 3 = cos Ω sin i ⎥
cos i ⎥⎦

En resumen queda
La longitud del nodo ascendente (Ω) es el ángulo γN entre el ⎛ cos(σ + ω ) cos Ω − sin(σ + ω ) sin Ω cos i ⎞
punto Aries y el nodo (punto de intersección eclíptica-plano orbi- r ⎜ ⎟
rec = rorb ⎜ cos(σ + ω ) sin Ω + sin(σ + ω ) cos Ω cos i ⎟
tal) ascendente. El argumento de longitud del perihelio (ω) es el ⎜ ⎟
ángulo NA entre el nodo ascendente y el perihelio, sobre el pla- ⎝ sin(σ + ω ) sin i ⎠
no orbital. La inclinación orbital (i) es el ángulo entre la eclíptica
y el plano orbital, menor que 90° en sentido directo. Otros ele- El proceso también puede hacerse a la inversa, pero no es lo
mentos son la excentricidad, el semieje mayor, el período, etc que usual. Debe tenerse en cuenta la probable corrección geocéntrica
ya conocemos. Los dados ahora permiten transformar entre las (ver en tema correspondiente), ya que el sistema de coordenadas
distintas coordenadas. empleado está centrado en el Sol (centro del movimiento orbital),
y normalmente necesitamos pasarlo a la Tierra. Para ello, si ρ es
En las tablas se suela dar la longitud media, definida como para el vector Tierra-Sol
ω~ = ω + Ω r r r
rT = ρT + r⊕
Con órbitas de poca inclinación vale casi lo que el ángulo <γA>.
y este razonamiento vale tanto en coordenadas ecuatoriales co-
La longitud verdadera es ωm + σ. La anomalía media suele darse,
mo en eclípticas.
para una época determinada, en función de la longitud media co-
mo

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Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico

ρ = a−b
5. Movimiento geocéntrico El = 0º
L=l
φ = 180º

Por movimiento geocéntrico entendemos el que se observa des-


de la Tierra (más estrictamente desde su centro) y que resulta de
la combinación de los movimientos del observador por la trasla-
ción terrestre y el propio de los planetas, sus satélites, el Sol u
otro cuerpo en el ámbito planetario.

5.1 Efemérides geocéntricas

En este apartado estudiamos las efemérides geocéntricas de los


planetas, simplificando con órbitas circulares y coplanarias. A
pesar de ello, los siguientes conceptos siguen siendo válidos:
• Se llama configuración planetaria a la posición relativa del
Sol, del planeta observado, y de la Tierra (en la que se sitúa
el observador).
• El período sinódico es el intervalo de tiempo en el que se • Se dice que está en conjunción superior si se tiene la ali-
repite una determinada configuración. neación p-S-T. Se cumplen las relaciones
• La elongación es el ángulo Sol-Tierra-planeta, que notare- ρ = a+b
mos por El El = 0º
• El ángulo de fase es el ángulo Sol-planeta-Tierra, que nota- L = l + 180º
remos por φ
φ = 0º
• De forma habitual emplearemos la siguiente notación: a
para la distancia Sol-Tierra y L para la longitud eclíptica • Se dice que está en la máxima elongación, este u oeste,
de esa línea, b para la distancia Sol-planeta con ángulo l , oriental u occidental, cuando el valor del ángulo de elonga-
y ρ para la distancia Tierra-planeta con longitud λ . ción El es máximo. Las relaciones que se cumplen

ρ 2 = a 2 + b2
b
El = arcsin
a
l = L + (90º − El )
φ = 90º
Hemos dicho que el período sinódico es aquel en el que vuelve a
repetirse una configuración. Veamos como lo calculamos para un
planeta interior. Para que se repita una configuración en un tiem-
po s la Tierra recorre un cierto ángulo χ, menor que 360°, y el
planeta además da una vuelta, por tanto un ángulo 2π + χ
∆ϕt = nt s = χ
∆ϕ p = n p s = 2π + χ

Manipulamos ambas expresiones para eliminar χ , y consegui-


mos para el período sinódico
Planetas interiores
1 1 1
= 2π (n p − nT ) = −
s T p TT
En el caso de los planetas interiores a la Tierra (Mercurio y Ve-
nus), la relación de radios es b < a, y para las velocidades angula-
res se cumple np > nT . Ahora vamos a ver las configuraciones
planetarias señaladas de los planetas interiores y el período sinó- Planetas exteriores
dico.
• Se dice que un planeta está en conjunción inferior si se tie- Con los planetas exteriores, como Marte, Júpiter o Saturno, la
ne la alineación S-p-T. Se cumplen entonces las relaciones relación de radios y velocidades angulares es la inversa b > a, y
np < nT . La nomenclatura y relaciones es parecida pero no igual.
• Se dice que un planeta está en oposición si se tiene la ali-
neación S-T-p. Por consiguiente se cumplen las relaciones

Página 27
Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico

ρ =b−a Como la Tierra, lugar de observación, se mueve, la combinación


El = 180º del movimiento de traslación junto con el del planeta produce
movimientos de apariencia curiosa en la esfera celeste. Así puede
L=l parecer que de noche en noche avanzan en un sentido sobre el
φ = 0º fondo de estrellas fijas, y luego invierte su movimiento. En la rea-
lidad además, las órbitas no son exactamente coplanarias y hay
también algo de movimiento perpendicularmente a la eclíptica,
dando un resultado total como de diversos tipos de bucles. Esto
produjo gran confusión en los tiempos antiguos, y uno de los ob-
jetivos y dificultades de la astronomía era que los modelos del
universo dieran cuenta de ellos. Sólo se pudo tener alguna expli-
cación satisfactoria a partir de la acepción de la teoría heliocéntri-
ca de Copérnico.

• Se dice que están en conjugación si se tiene la alineación


p-S-T. Se cumplen las relaciones
ρ = a+b
El = 0º
L = l + 180º En la figura se describe el movimiento aparente sobre la bóveda ce-
φ = 0º leste de un planeta interior no coplanario con la órbita de la Tierra.

• Se dice que están en la cuadratura este u oeste, oriental u


occidental, cuando el valor del ángulo de elongación El es
de 90°. Las relaciones son

ρ 2 = b2 − a 2
El = ?
L = l + (90º −φ )
a
φ = arcsin
b
El período sinódico lo hallamos con el mismo razonamiento, só-
lo que los papeles de externo e interno se intercambia entre el pla-
neta y la Tierra. Para que se repita una configuración en un tiem-
po s el planeta recorre un ángulo χ, menor que 360°, mientras
que la Tierra da además una vuelta 2π + χ
Tomemos el mismo diagrama de posiciones relativas y la misma
∆ϕ p = n p s = χ notación que anteriormente. Entonces por geometría tenemos que
∆ϕt = nt s = 2π + χ r r r
b =a+ρ
Restando obtenemos para el período sinódico b sin l = a sin L + ρ sin λ
1 1 1 b cos l = a cos L + ρ cos λ
= 2π ( nt − n p ) = −
s Tt T p
El movimiento aparente estará dado por la posición del planeta
visto desde la tierra en el tiempo, es decir dλ / dt. Derivando res-
pecto al tiempo las dos expresiones anteriores

5.2 Movimiento geocéntrico aparente b l&cos l = a L& cos L + ρλ& cos λ + ρ& sin λ
b l&sin l = a L& sin L + ρλ& sin λ − ρ& cos λ

Vamos a hacer un estudio tanto cualitativo como cuantitativo, Despejamos y multiplicamos la expresión resultante por ρ
del movimiento aparente de adelanto o retraso de los planetas vis-
ρ 2 ρ& = − aρ L& cos( L − l ) + bρ l&cos(l − λ )
tos desde la Tierra. Seguimos en la hipótesis de órbitas circulares
y coplanarias.

Página 28
Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico

Ahora volviendo a las dos primeras ecuaciones, se pueden tomar Se producirá una inversión del movimiento en los puntos en que
de otra manera cos α = cos (L-l), o bien L-l = ±α. Los puntos estacionarios están
situados entre oposiciones y cuadraturas, ya que
[1ª× sin l ] + [2ª× cos l ]
[1ª× sin L] + [2ª× cos L] sin E sin(α + E )
= → tan E = −
b
<0
b a a + b2
2
Obteniendo
Es fácil ver entonces la duración de los movimientos retrógrados
ρ cos(l − λ ) = b − a cos( L − l )
es de
ρ cos( L − λ ) = b cos( L − l ) − a
180º −α α
y sustituyendo los términos de los cosenos en la expresión de ∆td = s ∆tr = s
180º 180º
antes

[ ] [
ρ 2λ& = b 2 − ab cos( L − l ) l& + a 2 − ab cos( L − l ) L& ]
Identificamos las derivadas temporales con velocidades angula- 5.3 Fase y brillo de los planetas
res, y las ponemos en función de los radios respectivos con la
ayuda de la 3ª ley de Kepler
Fase
m m
l& = n p = L& = nT =
b3 a3
La fase de un planeta es la fracción del área iluminada vista des-
con lo que queda de la tierra. De este concepto geométrico se derivan otros o rela-
cionan otros referentes a la observación planetaria o de otros

(
ρ 2λ& = m ⎢ a + b − ⎜⎜ + ) ⎛ a b ⎞
⎟ cos( L − l )⎥ =
a ⎟⎠
⎤ cuerpos como asteroides o satélites. Por definición depende de las
posiciones relativas de los tres astros: Sol (fuente de luz), planeta
⎢⎣ ⎝ b ⎥⎦
(o cuerpo reflectante) y Tierra (posición del observador).
b ⎞⎡ ⎤
⎛ a
= m ⎜⎜ + ⎟⎢ a + b
a ⎟⎠ ⎢⎣
( ) ab
− cos( L − l )⎥
⎥⎦
Sobre el disco o la superficie del planeta se llama punto subsolar
a la intersección del eje planeta-Sol con la superficie del planeta,
⎝ b a 3 + b3
y marca el punto del planeta en el cual el Sol está en el cenit. De
El término entre corchetes formado por radicales que está resta- la misma forma se habla de un punto subterrestre, que es la inter-
do por el coseno es menor que 1, y constante para cada planeta, sección del eje planeta-Tierra con la superficie planetaria (análogo
por lo cual se define un ángulo α tal que al anterior). El ángulo de fase (φ), que tenemos definido en los
apartados anteriores como S-p-T, es el comprendido entre ambos
cos α =
( a + b ) ab puntos. Salvo en los casos de alineación, desde la Tierra se ve una
fracción de la superficie iluminada por el Sol, menor que la uni-
a 3 + b3 dad, habiendo una zona del disco visible para el observador en
Ahora analizamos la expresión obtenida sombras, como ocurre con las fases de la Luna.
Para operar escogeremos el sistema de referencia de la figura,
m⎛ a b ⎞ centrado en el planeta observado, con el eje Z desde la Tierra
λ& = ⎜ + ⎟(cos α − cos( L − l ) )
2 ⎜
a ⎟⎠
hacia el planeta, y el X hacia el norte eclíptico. Como la eclíptica
ρ ⎝ b
es el plano Tierra-planeta-Sol, este eje X da la intersección de
El tipo de movimiento aparente lo distinguimos en dos tipos: los planos de los discos solar y terrestre. Las coordenadas serán
las esféricas, para las cuáles introduciremos unos ángulos (χ,θ)
• movimiento directo, con nλ > 0, en el que el planeta aparen-
ta moverse hacia el oeste. Esto ocurre si cos α > cos (L-l) x = sin χ cosθ
• movimiento retrógrado, con nλ < 0, en el que el planeta y = sin χ sin θ
aparenta moverse hacia el este. Esto ocurre si cos α < cos z = cos χ
(L-l). En la figura representamos los casos para un planeta
exterior.

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Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico

El terminador es la línea sobre el planeta que delimita el área m p = V (1,0) + 5 log(rp ρ ) − 2,5 log f (φ )
iluminada de la que no lo está. Depende de la posición del Sol. En
la referencia visual que tenemos es el círculo máximo que cumple La función de fase también f(φ) se da en las tablas, y de forma
las relaciones más general se da incluyendo un factor con características no sólo
geométricas, sino también con otras atmosféricas y/o superficia-
les. Algunos ejemplos:
• para un espejo plano: f(φ) = 1 ; suele tomarse para los as-
teroides.
• para un disco plano reflectante: f(φ) = φ ; suele tomarse
para Venus.
• para un difusor perfecto
1
f (φ ) = [sin φ + (π − φ ) cosφ ]
π
Las llamadas leyes de Muller dan log f(φ) en base a observa-
ciones empíricas.
El brillo es la magnitud promediada para el área (en segundos de
arco al cuadrado)

π α 2F
B = m + 2,5 log
4
z = y tan φ
El defecto de iluminación (Q) es el ancho del trozo de sombra.
x 2 + y 2 sin 2 φ = 1 Lo calculamos en función de parámetros geométricos que hemos
ido viendo. Por relación trigonométrica podemos ver que
que dependen del ángulo de fase. La segunda expresión repre-
senta en concreto como una elipse en el plano XY perpendicular
a la visual. El área iluminada dentro de ese límite (con r = 1) es
π
A= (1 + cos φ )
2
De forma analítica la fase se define como el factor angular o
geométrico del área iluminada
1
F= (1 + cos φ )
2
Ver como en las alineaciones se cumple F(0) = 1 y F(180°) = sin θ sin ξ sin ξ R
= = → sin θ = sin ξ
0, correspondientes p.e. a las clásicas fases llena y nueva de la R ρ′ ρ ρ
Luna.
Como el semidiámetro aparente es α/2 = R/ρ , y los ángulos son
pequeños, podemos tomar
Albedo, brillo y defecto de iluminación α
θ (′′) = sin ξ
2
El albedo está definido como la relación entre energía la recibi- Finalmente, como el ángulo ξ es el suplementario del ángulo de
da y la emitida (no sólo la reflejada). La energía recibida para un fase
observador terrestre de un planeta es
α (′′)
2 Q(′′) = (1 − cos φ )
R⊕2 F⊕ AR p 2
E= f (φ )
rp2 ρ2

donde los términos comprendidos son sucesivamente: el flujo


solar en el planeta (proporcional a la potencia emisora solar y su 5.4 Coordenadas planetográficas
superficie, e inverso a la distancia), la parte reenviada a la Tierra
(incluyendo el albedo, el área y la distancia a la Tierra), y la fun-
ción de fase. Esta función de fase incluye a la fase antes definida,
e incluye factores ópticos adicionales. Según esto, la magnitud del Las coordenadas planetográficas son las escogidas en un plane-
planeta es ta para la situación de observaciones, hechas desde la Tierra o
desde el espacio. Se escoge el sistema de referencia atendiendo al
⎛ rp ρ ⎞ ecuador y polo norte del planeta, siendo éste el más próximo de
m p − m⊕ = −2,5(log A + log f (φ ) ) + 5 log⎜ ⎟ los dos al plano invariante de Laplace, que es el determinado por
⎜ Rp ⎟
⎝ ⎠ el momento angular total del sistema solar. En concreto, en
J2000.0 tenía las coordenadas ecuatoriales αiL = 273,85° y δiL =
En las tablas se suele dar la magnitud del planeta V(1,0) corres- 66,99°. Según este criterio, todos los planetas del sistema solar
pondiendo a f(φ) = 0 y rp·ρ = 1 , en cuyo caso se deberá hacer tienen un movimiento de rotación directo, salvo Venus y Urano.
Las coordenadas planetográficas son dos:

Página 30
Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico

• la latitud planetográfica (β), que es el ángulo desde el ecua-


dor hacia el polo norte
• la longitud planetográfica (λ), que es el ángulo desde un
meridiano origen escogido en sentido horario.

R ⎛ r dA ⎞
dA = sin θ → θ = arcsin⎜ ⎟
r ⎝ R ⎠
R es el radio planetario, θ es el ángulo desde el centro del pla-
neta, y r la distancia al planeta. En esta referencia, el ángulo del
polo planetario sería
La notación es igual a la de las coordenadas eclípticas. En el di-
bujo se representan sobre el planeta las coordenadas ecuatoriales cot p0 = cos δ tan δ 0 cosec(α 0 − α ) − sin δ cot(α 0 − α )
terrestres y del planeta (planetográficas). Hay definido un meri-
diano origen cuya posición se nota por O. Con las relaciones triangulares esféricas las transformaríamos en
Las coordenadas del punto subterrestre (λE , βE) en función de las coordenadas planetográficas
las ecuatoriales del planeta (α , δ) y las del polo (α0 , δ0) se cal- sin β = sin β E cosθ + cos β E sin θ cos( p0 − p )
culan con las relaciones triangulares esféricas aplicadas al triángu-
lo cos β cos(λ − λE ) = cos β E cosθ − sin β E sin θ cos( p0 − p )
cos β sin(λ − λE ) = ± sin θ sin( p0 − p)
sin β E = sin δ 0 sin δ − cos δ 0 cos δ cos(α − α 0 )
cos β E cos(λE ± ω ) = cos δ sin δ 0 cos(α − α 0 ) − sin δ sin δ 0
cos β E sin(λE − ω ) = − cos δ sin(α − α 0 )
5.5 Coordenadas heliográficas

De forma análoga a las planetográficas, las coordenadas helio-


gráficas sirven para situar los acontecimientos de la superficie
solar, principalmente las manchas. El referencial es el ecuador y
el polo de rotación solar, que en J1989.0 tenía i = 7,25° y Ω =
75,5°. Las coordenadas son:
• la latitud heliográfica (B), que es el ángulo desde el ecua-
dor hacia el polo norte
• la longitud heliográfica (L), que es el ángulo desde un me-
ridiano origen escogido en sentido horario. El meridiano
origen está definido para 1-Ene-1854-12h, y evoluciona
desde el nodo con la eclíptica según

Es usual referir las observaciones directas sobre el disco planeta-


rio atendiendo al disco aparente o visual del momento, con el eje
subterrestre en el centro, como lo ve cualquier observador desde
la Tierra. Se toman entonces dos coordenadas polares (p , dA) ,
siendo p el ángulo de giro del vector de posición desde el norte,
y dA la distancia angular sobre el disco desde el punto subterres-
tre (central) al acontecimiento, cumpliendo

Página 31
Mecánica celeste - Movimiento geocéntrico
y de modo similar, refiriendo al eje subterrestre
360º p = arctan(− cos λ0 tan ε ) + arctan[− cos(Ω − λ0 ) tan i ]
ω= ∆t
25,38d
Tener en cuenta que para el disco solar no vale la aproximación
Con las relaciones de Bessel, el punto subterrestre se sitúa con angular, pues ρ’ ≠ ρ, debiendo hacerse

sin BE = sin(λ0 − Ω) sin i r 2θ


sin(θ + ξ ) = sin θ ≈
cos BE sin( L0 + ω ) = sin(Ω − λ0 ) cos i R α
cos BE cos( L0 + ω ) = − cos(Ω − λ0 )

Página 32
Mecánica celeste - Refracción astronómica

y entonces la refracción es proporcional a la tangente de la dis-


tancia cenital aparente
6. Refracción
R = α tan z′
siendo α = n0 - 1. En condiciones estándar (0° C y 760 mm.Hg)
n0 vale 1,00029555. Si se toma α proporcional a la densidad (∝
La información luminosa que llega a un observador terrestre re- ρ) se tiene
sulta afectada por el medio intergaláctico, el interestelar, el inter-
P(mm) 273
planetario, y por la atmósfera terrestre. Sabemos que el aire tiene α = α0
una ciertas propiedades ópticas, y que las características o condi- 760 273 + T (º C )
ciones del aire varían continuamente con la altura (y también lo-
calmente, de la meteorología). Esto, combinado con una geome-
tría esférica da como resultado diversos efectos sobre la luz., en
concreto variaciones tanto en la intensidad de la luz recibida (ex- 6.2 Refracción en segundo orden de aproxima-
tinción o absorción atmosférica) como en la dirección (refracción ción
atmosférica), al actuar como si fuese una lente. Este efecto en par-
ticular es el que estudiamos en este tema. Como ejemplo del mis-
mo se tiene el achatamiento del disco observado en la puesta del
Sol. Con un grado más alto de aproximación, se considera también
para una atmósfera estacionaria y homogénea, la curvatura terres-
tre. Por ello se supone la atmósfera como un conjunto continuo de
capas esféricas concéntricas de distinto índice de refracción.
6.1 Refracción en primer orden de aproximación

Consideremos una atmósfera estacionaria y homogénea. En


primera aproximación se considera que se desprecia la curvatura
terrestre, suponiendo que está constituida por una geometría de
capas plano-paralelas.
Debido al efecto de refracción habrá una diferencia entre la altu-
ra o la distancia cenital medida de un objeto y la real que tendría
sin efecto atmosférico. Por ello se define la refracción como la
diferencia angular R = z – z’, siendo z la distancia cenital real
(en ausencia de atmósfera), y z’ la observada.
La luz, para llegar a nosotros, atraviesa zonas cada vez más in-
ternas de la atmósfera, cuyo índice de refracción va en aumento
(es un gradiente positivo). Por ello se produce una curvatura de su El rayo luminoso procedente del infinito (por tanto sin paralaje,
trayectoria, y se verifica siempre que z > z’ (ver en el dibujo). y con la misma posición tanto para el observador en la superficie
como para el del centro del planeta), cuya distancia cenital real es
z, se va curvando al entrar en la atmósfera hasta llegar al observa-
dor con una distancia cenital aparente z’.

Integración

Analicemos detenidamente las variables geométricas en esta


aproximación, considerando las diferencias entre cada punto del
recorrido y la referencia del centro de la Tierra, para poder inte-
grar.

La ley de la refracción da
n∞ sin z = sin z = n0 sin z′

siendo n∞ el índice de refracción del vacío, de valor la unidad.


También disponemos de la relación trigonométrica
sin z = sin( R + z′) = sin R cos z′ + cos R sin z′

En la aproximación de primer orden que tomamos, válida hasta


z’ < 45°, se puede hacer
R << sin R ≈ R
z ≈ z′ cos R ≈ 1

Página 33
Mecánica celeste - Refracción astronómica

sin ξ n0 r0 sin z′
tan ξ = =
Para cada punto p de la trayectoria, se tendrá una distancia ce- 1 − sin ξ 2
(nr ) − (n0 r0 ) 2 sin 2 z′
2
nital zp en el centro de la Tierra, un ángulo xp entre la tangente a
la trayectoria y la vertical, y otro ξ entre la tangente a la trayecto- y queda
ria y la recta de zp, cumpliéndose en todo momento que xp = zp +
ξ. La refracción es la curvatura del rayo luminoso acumulada en 1
d ln n
cada punto de la trayectoria, por lo que se toma R = −n0 r0 sin z′ ∫
n0 (nr ) − (n0 r0 ) 2 sin 2 z′
2
∞ z
dR p = x p − z′ → R= ∫ dR p = ∫ dx p Para calcularla se tienen diversas aproximaciones al comporta-
obs z' miento del índice
Ahora debemos introducir la ley de la refracción como relación • de Lorentz-Lorentz, con βρ ∝ 10-4, y entonces
entre las capas, en función de estas u otras variables intermedias.
Para ello nos fijamos en la siguiente figura. n2 − 1 2
= βρ
n2 + 1 3

• de Newton-Laplace, con la cual n2 - 1 = 2βρ


• de Gladston-Dale, que da n - 1 = βρ

Aproximación de Gladston-Dale

Tomamos la última aproximación, la de Gladston-Dale con ρ0 =


1. Entonces
n0 − 1 = α 0 = βρ 0 = β → n = 1 + α0 ρ

Diferenciando
dn α 0 dρ
=
n 1 + α0 ρ
Entre dos capas sucesivas por las que pasa la luz, de índices n y
n + dn, con la notación indicada, la ley de refracción en el punto Tenemos pues que se cumple
B, refiriendo al centro terrestre (θ = zp) es
nr (1 + α 0 ρ )(r0 + h)
(n + dn) sin(ξ + dξ ) = n sin(ξ + dθ ) =
n0 r0 (1 + α 0 )r0
y por relación geométrica esférica
y con las aproximaciones h/r0 « 1 , α0 < 1 , α0ρ « 1
sin(ξ + dθ ) sin ξ
= nr ⎡h ⎤
r r + dr ≈ 1 + ⎢ + α 0 (1 − ρ )⎥ = 1 + u
n0 r0 ⎣r ⎦
Entonces
con u < 1 , y además
nr sin ξ = (n + dn)(r + dr ) sin(ξ + dξ ) = cte
2
es la expresión de la ley de la refracción en las nuevas variables ⎛ nr ⎞
⎜ ⎟
que inicialmente hemos introducido. El valor de la constante se ⎜ n r ⎟ ≈ 1 + 2u
⎝ 00⎠
puede calcular con los valores del observador, que son conocidos
(n0 , R0, y z’). Con esto ya podemos operar. Diferenciando y divi- Llevamos todo esto a la fórmula de la refracción
diendo por la misma ecuación tenemos
α0
1 dρ
d (nr ) 1 + α0ρ
+ cot ξ dξ = 0 R ≈ tan z′∫ =
nr 2u
0 1+
expresión de la que debemos despejar el ángulo ξ en otras can- cos2 z′
tidades más manejables. Como 1 1
tan z′ ⎡h ⎤
= α 0 tan z′∫ (1 + α 0 ρ ) dρ − α 0 ∫ ⎢ − α0 (1 − ρ )⎥⎦ dρ
r dr dr cos 2
z′ ⎣ r0
dz p = dθ = dθ = tan ξ 0 0
dr r r
donde se ha empleado el desarrollo de Newton para la raíz hasta
entonces, como por definición era dxp = dzp + dξ , con las dos los tres primeros términos. Para una atmósfera en equilibrio
últimas expresiones hidrostático se tiene dP = -ρg dh
dn 1 0 h
dx p = − tan ξ
∫ h dρ = [hρ ]0 − ∫ ρ dh = 0 + ∫ ρ dh
1
n
0 h 0
Para conocer el valor de la refracción total resta operar una ex-
presión para la tangente en función de los índices y cantidades Integrando
conocidas. Para eso, con la ley de la refracción modificada

Página 34
Mecánica celeste - Refracción astronómica

⎛ l ⎞ ⎛l α ⎞ siendo s la distancia angular al punto O . Si lo aplicamos a la


R ≈ α 0 ⎜⎜1 − 0 ⎟⎟ tan z′ − α ⎜⎜ 0 − 0 ⎟⎟ tan 3 z′ = refracción atmosférica, el punto O es el cenit, e identificamos s
⎝ r0⎠ r
⎝ 0 2 ⎠
= z, ds = R (la propia refracción), la declinación del polo es la
= A tan z′ − B tan 3 z′ latitud φ, su ascensión recta es el TS (pues h = 0), y la diferencia
en ascensión recta es el ángulo horario, quedando
En condiciones estándar de 0° C y 1 atm valen A = 58,27’’ y
B = 0,067’’. Esta aproximación es válida para distancias cenitales cos δ dα = cosϕ sin h cosec z R
menores que 75°. Viendo el comportamiento en primera y segun- dδ = [sin ϕ cos δ − cosϕ sin δ cos h] cosec z R
da aproximaciones, se puede generalizar
Las verdaderas coordenadas se calculan iterando, pues se necesi-
R = a1 tan z′ + a2 tan 3 z′ + a3 tan 5 z′ + ... tan para calcular sus propias correcciones.

Para el horizonte la corrección es de 35’. En algunos modelos de


atmósferas se emplea una ecuación de equilibrio hidrostático y ley
de los gases perfectos 6.5 Efecto en la duración del día
GM
dP = − ρ dr
r2
ρRT Como ya sabemos, la refracción tiene como efecto neto el au-
P= mento aparente de la altura de los objetos. La porción geométrica
µ
de cielo visible sigue siendo la misma (180° de un lado a otro pa-
y en otros componentes adicionales al aire, como aerosoles, con- sando por el cenit), lo que produce que los objetos a baja altura
taminación, etc. En el modelo de Garfinkel la parte que más con- estén más "comprimidos", al permitirnos ver algunos objetos un
tribuye en el óptico es la atmósfera, y la temperatura disminuye poco por debajo del horizonte. En el caso del Sol provoca un alar-
con la altura según dT/dr = -0,007 K/m (U.S.S.A). gamiento de su tiempo de visibilidad (aparte de un evidente acha-
tamiento, típico imagen de las puestas y salidas). Diferenciando la
relación de Bessel
sin a = sin δ sin ϕ + cos δ cos ϕ cos h
6.3 Método práctico: tablas de refracción

cos a δa = − cos δ cos ϕ sin h ∆h

Lo habitual es considerar diversos desarrollos polinómicos o de tenemos la variación del ángulo horario con la altura. Cuando a
potencias en la distancia cenital para calcular la refracción, con = 0, el aumento total diario en tiempo sidéreo es
una serie de constantes que se dan tabuladas. Dichas constantes de
refracción se determinan por observaciones de estrellas circumpo- Rhor + S⊕
∆h = 2 sec δ secϕ cosec h
lares, en las dos culminaciones. En ese caso 15
z1 = ϕ − δ = z1′ + R ( z1′ )
z2 = 180º −(ϕ + δ ) = z′2 + R( z′2 )
6.6 Efecto en la dispersión del horizonte
y despejando
z1′ + z′2 R1 + R2
δ = 90º − +
2 2 Por las mismas razones expuestas en el apartado anterior, el
horizonte visual aumenta llegando a distancias más lejanas. Va-
Teniendo como datos de partida la latitud φ, la declinación de la mos a estudiar también este efecto. Sea ∆ el incremento en altura
estrella δ, y las distancias cenitales z’i aparentes, se pueden cal- por debajo del horizonte (astronómico) que ve un observador que
cular con la relación anterior. En los almanaques, una tabla prin- se encuentra a una altura h respecto de la superficie terrestre,
cipal contiene la refracción normal para unas condiciones especí- debido a los efectos de su altura y de la refracción atmosférica. La
ficas de presión y temperatura. Otras tablas auxiliares tienen los situación queda representada por el dibujo.
coeficientes que dependen de las condiciones atmosféricas de pre-
sión y temperatura. El observador puede ver los objetos situados hasta la distancia
del punto P. Consideremos el triángulo simétrico definido por los
vértices P-O-T, donde T es el punto de intersección de la tan-
gente a P (su línea de horizonte astronómico) con el horizonte
visual del observador. Llamemos β = TPO = TOP.
6.4 Efecto sobre las coordenadas ecuatoriales

Hemos visto que la refracción no afecta al acimut pero si a la al-


tura, y en consecuencia al resto de las coordenadas. Como se ha
visto en el problema 2.3.1 del tema 1, para desplazamientos infi-
nitesimales hacia un punto O de coordenadas (α0,δ0) , las coor-
denadas ecuatoriales varían según
cos δ dα = cos δ 0 sin(α − α 0 ) cosec s ds
dδ = [sin δ 0 cos δ − cos δ 0 sin δ cos(α − α 0 )] cosec s ds

Página 35
Mecánica celeste - Refracción astronómica

h
∆2 = 2(1 − 2 β )
Entonces se cumple R
cos β cos(β + ∆) cos β h y como β es aproximadamente 1/13 , queda
= → = 1+
R+h R cos( β + ∆) R
∆ (′) = 1,78 h(mts )
Con las propiedades de las funciones trigonométricas con suma
de argumentos
h cos β cos β − cos β cos ∆ + sin β sin ∆
= −1 = =
R cos(β + ∆) cos(β + ∆ )
∆ ∆ ∆ 2 sin ∆ sin ⎛⎜ ∆ + β ⎞⎟
2 cos β sin 2 + 2 sin β sin cos
2 2 2 = 2 ⎝2 ⎠
=
cos(β + ∆) cos(β + ∆ )

Con ángulos pequeños se puede tomar la aproximación

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Mecánica celeste - Paralaje

7. Paralaje

La paralaje es la dependencia en la medida de las distancias y/o


posiciones de la situación relativa entre observador y objeto. El
concepto de la paralaje se sustenta pues en la diferencia en la ob-
servación de un mismo objeto desde dos lugares distintos, por lo
que también es conocida por paralaje trigonométrica. Tiene un
fundamento similar al fenómeno de la visión estereoscópica.
Para un punto P situado a una distancia r del centro de masas
También resulta evidente en la experiencia cotidiana a escala
terrestre, el potencial gravitatorio es por definición
humana cuando vemos que un objeto no se sitúa en la misma po-
sición relativa si nos movemos. r dm dm
V (r ) = −G ∫ r r = −G ∫
En el caso astronómico, observadores en distintos puntos de la r−x r′
M M
superficie terrestre también tendrán, para los mismos cuerpos del
sistema solar relativamente cercanos, diferencias en cuanto a sus Parece evidente que para conocer la forma y distribución terres-
mediciones de distancias y posiciones. Así es evidente en los es- tre a través de la distribución de densidad deberíamos conocer el
tudios de la Luna, el Sol, asteroides y cometas, o satélites. Por potencial efectivo, pero para tener éste necesitamos la densidad a
ello, para relacionar o corresponder distintas observaciones debe- través del potencial gravitatorio. Vamos a ver una forma analítica
mos corregir del error de paralaje estas diferencias. de escribir el potencial gravitatorio que nos será útil y cutos valo-
res pueden calcularse más fácilmente. En base a la relación geo-
métrica expresada en la figura
r r r 1 1 1
r′ = r − x → =
r′ r 2 rr
x 2r x
1+ −
r2 r2
Matemáticamente aquí podemos tomar un desarrollo en serie de
potencias como el dado por la expresión
1 ∞
− 1
(1 − 2 zx + z 2 ) 2 = = ∑ Pn ( x) z n
1 − 2 zx + z 2 n =0

Atendiendo a diversos factores de posición o movimiento po- que se verifica siempre que |z| < 1 ; los términos Pn(x) son los
demos distinguir entre distintos tipos o causas de paralaje, como polinomios de Legendre
pueden ser: la distinta posición o movimiento sobre la Tierra (pa-
ralaje geocéntrica y paralaje rotacional terrestre o diurna, respec- 1 dn
Pn ( x) = ( x 2 − 1) n
tivamente), por posición en el sistema solar o movimiento orbital 2 n! dx n
n
terrestre (paralaje baricéntrica y paralaje anual), o a mayor escala
(paralaje local y galáctica). Según esta progresión vamos a ir es- En nuestro caso como variable x deberemos coger r·x/rx . En-
tudiando todos los tipos, empezando por la de ámbito terrestre. tonces, como r·x = rx cos θ tendremos
También iremos viendo como el efecto de paralaje es un indicador P0 (cosθ ) = 1
de distancias. rr
rx
P1 (cosθ ) = = cosθ
rx
rr 2
3 ⎛ rx ⎞ 1 3 1
7.1 El potencial terrestre P2 (cosθ ) = ⎜ ⎟ − = cos2 θ −
2 ⎝ rx ⎠ 2 2 2

que son los tres primeros polinomios de Legendre. Aplicando al


Cuando notamos diferencias paralácticas en las coordenadas por caso que nos ocupa
las distintas posiciones relativas sobre la superficie terrestre, se n
1 1 ∞ ⎛ x⎞
hace evidente como primer paso, el conocer la forma y dimensio- = ∑ ⎜ ⎟ Pn (cosθ )
nes de la Tierra, para poder así trabajar con las paralajes asociadas r ′ R n = 0⎝ r ⎠
a la misma. El estudio teórico de la forma terrestre se hace en base
a su potencial efectivo gravitatorio. y el potencial gravitatorio se escribe como
Tomemos la Tierra como un sólido rígido. En principio su forma ∞ n
r G dm G ⎛ x⎞
vendría descrita, salvo por los detalles orográficos (que son de
escala muy pequeña comparando con el radio terrestre), por un
V (r ) = −
r ∫ rr
=−
r ∫ ∑ ⎜⎝ r ⎟⎠ Pn (cosθ ) dm
M x2 2r x M n =0
figura de revolución acorde con el potencial efectivo de gravedad 1+ −
más la rotación (término centrífugo) r2 r2

r I r En consecuencia el potencial se puede desarrollar en una suce-


Vef = V (r ) + (Ω × r )2 sión de términos de la forma
2

Página 37
Mecánica celeste - Paralaje
r r r r
V (r ) = V0 (r ) + V1 (r ) + V2 (r ) + ... • G·M = 3,986005·1014 cm/s
• J2 = 108263·10-8
siendo los dos primeros en particular
• J3 = -254·10-8
r G GM
V0 (r ) = ∫ dm = • J2 = -161·10-8
r r
r
r Gr r
V1 (r ) = 3 ∫ x dm = 0
r
El segundo término se anula por coincidir con la definición de
centro de masas de la Tierra (hemos escogido ese punto como re- 7.2 Latitudes geodésica y geocéntrica
ferencia). Para el tercero
r r 2
G ⎡3 ⎛ r ⋅ x ⎞ 1 ⎤⎛ x ⎞
2
r Se llama geoide a la superficie terrestre definida por el nivel
V2 (r ) = ∫ ⎢ ⎜ ⎟ − ⎥⎜ ⎟ dm
r ⎢ 2 ⎝ rx ⎠ 2 ⎥⎝ r ⎠ oceánico. Para los propósitos astronómicos suele ser aproximada
⎣ ⎦ por un volumen de revolución, llamado elipsoide de referencia.
que en notación tensorial se puede escribir como Éste queda matemáticamente definido, según lo visto, por una
superficie equipotencial de la forma
r r 2 r r rr
⎛r⋅x⎞ ( x 2 Id − x ⋅ x ) : r r
⎜ ⎟ = 1− M ⎡ ⎤ 1
∞ n
⎛a ⎞
⎝ rx ⎠ r 2 x2 W (rs ) = cte = ⎢1 − ∑ J n ⎜ 0 ⎟ Pn (cosθ )⎥ + ω 2 r 2 sin 2 θ
rs ⎢ n = 2 ⎝ r ⎠ ⎥⎦ 2

El término completo no deja de ser un escalar, aunque tenga
cantidades tensoriales. El denominador es formalmente la con- La latitud geocéntrica φ es el ángulo referido al cenit geocéntri-
tracción doble de un tensor de grado dos, por lo que da un escalar. co de un lugar. Dicho de otro modo, es el ángulo entre el polo y la
Por dinámica sabemos que el tensor sin contraer del denominador línea que pasa por el centro terrestre y el lugar de la superficie. La
es el tensor de inercia latitud geodésica φ es el ángulo referido a la normal del elipsoide
r r de referencia. Puede verse fácilmente que si la superficie no es
∫ (x
2
I= Id − x ⋅ x ) dm circular, las dos anteriores no coinciden. La latitud astronómica es
M la dada por la plomada, y es casi igual a la geodésica. La diferen-
cia entre ambas es llamada deflexión de la vertical, y en valor es
∫ ( x δ ij − xi x j ) dm
2
I ij =
menor de 20’’, por lo que suelen considerarse iguales. Todas estas
M
definiciones son necesarias pues su confusión causa errores, y
escrito vectorialmente y en coordenadas, que al ser contraído asimismo se dispondrán de distintas distancias cenitales conside-
dos veces (en el denominador) con el vector da el momento de rando una u otra vertical.
inercia según ese eje
t rr
I : rr = Ir

Con todo queda


r G ⎛I ⎞
V2 (r ) = 3 ⎜ r2 − traza(I ) ⎟
2r ⎝ r ⎠
Si el tensor de inercia terrestre fuera esférico, con los ejes prin-
cipales I1 = I2 = I3, se verificaría V2 = 0, y también se anularían
todos los términos impares del desarrollo (de la forma V2n+1). En
la práctica podemos suponer una simetría axial I1 = I2 ≠ I3 con la
cual

I r = I1 ( r12 + r22 ) + I 3r32 = I1 (r 2 − r32 ) + I 3r32


traza(I ) = 2 I1 + I 3

habiendo escogido el sistema de coordenadas según los ejes Considerando el meridiano del observador sobre la superficie te-
principales. Se obtendría así rrestre, que distará poco de una elipse, un punto de la superficie se
representa con la latitud geocéntrica por dos coordenadas en la
2⎛ ⎞ forma
r
V2 (r ) =
GM ⎛ a0 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ I 3 − I1 ⎟ P2 (cosθ )
r ⎝ r ⎠ ⎜ Ma 2 ⎟
⎝ 0 ⎠ ⎧ x = rs cosϕ

Se pueden calcular el resto de los términos del desarrollo y ver ⎩ y = rs sin ϕ
que el potencial total sigue una ley
estando rs dado para la gravedad al nivel del mar, mientras que
con la latitud geodésica se cumple
GM ⎡ ⎤
∞ n
r ⎛a ⎞
V (r ) = − ⎢1 − ∑ J n ⎜ 0 ⎟ Pn (cosθ )⎥
r ⎢ n =2 ⎝ r ⎠ ⎥⎦ dx
⎣ tan φ = −
dy
Este modelo de potencial es el oficialmente aceptado para el te-
rrestre, y las constantes que se toman son: Otras expresiones de la elipse de referencia son
• a0 = 6378140 m

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Mecánica celeste - Paralaje

y2 x2 y2
x2 + = A2 + =1
(1 − f ) 2 A2 B2

siendo A y B los radios ecuatorial y polar del elipsoide de re-


ferencia terrestre, y f el achatamiento. Diferenciando tenemos
una relación entre las dos latitudes
y dy tan ϕ
x dx + 2
=0 → tan φ =
(1 − f ) (1 − f ) 2

El achatamiento vale
En el dibujo O es la posición del observador en la superficie, p
B 1 es el ángulo de paralaje, zc es la distancia cenital geocéntrica des-
f = 1− =
A 298,257 de el centro terrestre y zs la distancia cenital geocéntrica desde la
superficie.
Si por analogía entre las latitudes se toma para la geodésica Por simple relación trigonométrica se tiene
⎧ x = C cos φ x
⎨ sin p = sin zs p = z s − zc
⎩ y = S sin φ r
se encuentra que Resulta evidente que con dos observaciones en el mismo meri-
diano se pueden calcular las distancias. Esta es la principal utili-
S A dad de una paralaje, la determinación de distancias. Teniendo la
C= =
(1 − f ) 2 1 + ( f − 2 f ) sin 2 φ
2 diferencia en posición (paralaje) y la relación de posición entre
dos observaciones (siempre que la geometría del sistema O-Ó-p
Se llama ángulo de la vertical a la diferencia entre las latitudes esté en un mismo plano), podemos calcular rápidamente r. La
geodésica y geocéntrica χ = Φ - φ. Con las relaciones vistas hasta exactitud depende de la capacidad de medida angular, es decir, la
ahora podemos calcularlo exactitud en la distancia así calculada dependerá de la exactitud
instrumental en la determinación del ángulo de paralaje. Por ello
tan φ − tan ϕ (2 f − f 2 ) tan ϕ (2 f − f 2 ) tan φ la paralaje geocéntrica sirve hasta unas pocas unidades astronómi-
tan χ = = = cas.
1 + tan φ tan ϕ (1 − f ) + tan ϕ 1 + (1 − f ) 2 + tan 2 φ
2 2
Se tiene la paralaje horizontal cuando la disposición es tal que
Para los puntos no situados en la superficie del elipsoide de refe- zs = 90° (como cuando se mide un objeto y desde el observatorio
rencia se tienen (ver dibujo) se ve justo en el horizonte), por lo tanto
x
sin ph =
r
Se tiene la paralaje horizontal ecuatorial si además x corres-
ponde al radio ecuatorial. Es la que se mide en el ecuador cuando
el objeto está sobre el horizonte
a
sin p0 =
r
En el caso del Sol, la Luna, u otros objetos con órbitas elípticas,
se tiene la paralaje ecuatorial media si se toma el radio medio or-
bital
a
sin Π = ~0
r
⎧ x = (C + h) cosφ = rs cosϕ + h cosφ = ρ cosψ

⎩ y = ( S + h) sin φ = rs sin ϕ + h sin φ = ρ sinψ
Paralaje geocéntrica y distancia cenital

Veamos la relación que existe entre la distancia cenital geocén-


7.3 Paralaje geocéntrica trica y la geodésica, ambas en la superficie. Observemos la figura.

Paralajes geocéntricas

Se llama paralaje geocéntrica a la diferencia en la medida de la


posición de un objeto que se obtiene desde el centro terrestre y
desde un punto de la superficie. Se define el ángulo de paralaje
como el sostenido desde el objeto y limitado por las direcciones
de la paralaje.

Página 39
Mecánica celeste - Paralaje

Con las coordenadas ecuatoriales cambia el eje X, que está diri-


gido hacia el punto aries

⎛ cos δ c cos α c ⎞ ⎛ cos ϕ s cos TS ⎞ ⎛ cos δ s cos α s ⎞


⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
r ⎜ cos δ c sin α c ⎟ = x⎜ cos ϕ s sin TS ⎟ + r ′⎜ cos δ s sin α s ⎟
⎜ sin δ ⎟ ⎜ sin ϕ ⎟ ⎜ sin δ ⎟
⎝ c ⎠ ⎝ s ⎠ ⎝ s ⎠

7.4 Paralaje lunar

Un objeto, respecto al cenit geodésico es visto con unas coorde- Paralaje lunar y refracción
nadas horizontales (AGD , ξs) , y respecto al geocéntrico con las
(AGC , zs). Ambos están separados por el ángulo de la vertical χ.
Entonces, dado que la separación es pequeña (χ«), se puede to- Debido a la cercanía de la Luna y a su tamaño intrínseco, se nos
mar presenta en el cielo con un relativamente gran tamaño. El efecto y
diferencia de la refracción atmosférica entre distintos puntos del
z s = ξ s + χ cos AGD disco no es despreciable por el tamaño. Por su relativa proximi-
dad tampoco lo es para los mismo puntos del disco observados
desde distintos sitios de la Tierra, al tener que pasar la luz por dis-
Coordenadas geocéntricas y de superficie tintas partes de la atmósfera terrestre. Esto significa que la refrac-
ción afecta a la medida de la paralaje.
Hablamos de paralaje lunar cuando nos referimos a la paralaje
Ahora interesa conocer las relaciones que nos permitan pasar de geocéntrica en la observación de la Luna. En las figuras y relacio-
coordenadas en la superficie al centro de la Tierra y/o viceversa. nes vistas para explicar el fenómeno de la paralaje, se establecía
Para ello se emplean relaciones vectoriales para trasladar sistemas una relación triangular entre punto observado y puntos de obser-
de referencia. vación. La refracción curva los rayos y distorsiona la geometría
Primero procedemos con las coordenadas horizontales. Sea el por el vértice del observador en superficie. Esto implica que el
sistema de referencia con el eje Z según el cenit geodésico, y el resultado directo de una paralaje para calcular la distancia lunar se
eje Y perpendicular al plano observador-centro-objeto (que por ve seriamente afectado.
conveniencia suele ser el del meridiano); entonces a partir de la Debemos ver qué cálculos son pertinentes para compensar o co-
relación rregir de ese efecto. En vez de tomar el sistema de referencia del
observador en la superficie, el "truco" geométrico consiste en to-
mar otra posición equivalente O’ desplazada a una altura h , de
modo que con ella se vuelve a establecer la relación triangular en
base a los otros dos puntos y ángulos.

r r r
r = x + r′
se tendrá, entre las coordenadas horizontales geocéntricas del
centro terrestre y las geodésicas en superficie

⎛ sin zc cos Ac ⎞ ⎛ cos χ ⎞ ⎛ sin ξ s cos As ⎞


⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ Vemos que escogiendo como vértice la intersección de la verti-
r ⎜ sin zc sin Ac ⎟ = x⎜ 0 ⎟ + r ′⎜ sin ξ s sin As ⎟
⎜ cos z ⎟ ⎜ sin χ ⎟ ⎜ cos ξ ⎟ cal geocéntrica y la dirección inicial del rayo luminoso se mantie-
⎝ c ⎠ ⎝ ⎠ ⎝ s ⎠ ne la lógica vista hasta ahora. zs es la distancia cenital observada,
afectada de refracción. zR es la distancia cenital corregida de re-
El segundo término representa el llevar el referencial de O a C.
fracción, que corresponde al nuevo punto. T es una prolongación
Con un razonamiento similar procedemos con las coordenadas
para hacer rectángulo el triángulo C-P-T. Por la relación de los
horarias. El sistema de referencia tiene el eje Z hacia el polo nor-
senos para C-O’-T
te, y el eje X hacia el sur. Se tiene
x+h CT
⎛ cos δ c cos hc ⎞ ⎛ cos ϕ s ⎞ ⎛ cos δ s cos hs ⎞ =
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ sin 90º sin z R
r ⎜ cos δ c sin hc ⎟ = x⎜ 0 ⎟ + r ′⎜ cos δ s sin hs ⎟
⎜ sin δ ⎟ ⎜ sin ϕ ⎟ ⎜ sin δ ⎟ y con la misma para el C-T-P
⎝ c ⎠ ⎝ s⎠ ⎝ s ⎠

Página 40
Mecánica celeste - Paralaje

CT r r sin p interpolación de valores en el tiempo. Por eso debe tenerse en


= → x+h = cuenta el efecto del cambio de la declinación lunar durante el in-
sin p sin 90º sin z R
tervalo entre los tránsitos entre meridianos. La paralaje ecuatorial
La ley de la refracción nos da nr·sin(η) = cte , es decir horizontal lunar es

nr sin p = n0 r0 sin z s x r0
sin Π l = sin p sin z s
a r
y con n = 1 , x = r0 , y zR = zs + R
y se encuentra un valor de esta constante de 3422,7’’. La dis-
n x sin zs tancia media a la luna es de 384.400 km. Hoy en día se emplean
x+h = 0
sin( zs + R) determinaciones por láser, con aparatos allí dejados.

Tenemos así la altura que supone la corrección de la refracción


para la paralaje, que depende de la distancia cenital aparente (ig-
Radio lunar
norando diversas condiciones atmosféricas) y de x.

Para calcular el semidiámetro o radio lunar se necesitan las ob-


Distancia lunar servaciones de la posición geocéntrica de su centro zs y su semi-
diámetro aparente ss con respecto a la posición del borde. Desde
el centro y la superficie terrestre, la relación de semidiámetros es
Para calcular la distancia lunar a través de la paralaje se observa
la culminación lunar desde dos lugares en un mismo meridiano, y
con latitudes opuestas, aunque no necesariamente iguales.

R⎫
sin ss =
rs ⎪⎪ r
⎬ → sin ss = sin sc
R rs
En la figura se tiene la disposición de los observadores (sobre un sin sc = ⎪
rc ⎪⎭
meridiano y en distintos hemisferios), el punto de la Luna y el
centro terrestre (pues se hace en una culminación). Observacio-
Para las distancias cenitales se tiene
nalmente se conocen las distancias cenitales astronómicas (que
serán geodésicas) en superficie ξsi , las geocéntricas (con el ángu- sin zs sin zc
lo de la vertical, de las anteriores) zsi , y las latitudes. Dado que se =
r rs
observa en la culminación, es AGD = 0, y se tienen pues la rela-
ciones y con lo anterior
zsi = ξ si − χi sin ss sin zs
=
pi = zsi − zci sin sc sin zc
Sumando Con la paralaje tenemos que zs = zc + p. Con los datos, y con la
paralaje (o la distancia) puede entonces calcularse Sc y el radio.
θ = p1 + p2 = ξ s1 + ξ s 2 − (φ1 + φ2 )

Con las dos relaciones triangulares de la paralaje


xi x 7.5 Paralaje solar
sin pi = sin(ξi − χ i ) = i sin z si
r r
se tiene que
Determinación de la unidad astronómica
x1 sin θ sin zs1
tan p1 =
x1 cosθ sin zs1 + x2 sin zs 2
Además de diferencias paralácticas por la posición sobre la su-
Por tanto, con los datos observacionales antes comentados perficie o en el centro de la Tierra, también podemos tenerlas por
(habiendo corregido de la refracción), tenemos así el ángulo de tomar la posición de la Tierra en vez del Sol o del baricentro solar
paralaje, y con la relación triangular paraláctica la distancia r . (paralaje heliocéntrica o baricéntrica), o por el movimiento orbi-
Debe indicarse que el tener dos observatorios justo en el mismo tal de la Tierra alrededor del Sol, dándose el caso de que cuerpos
meridiano se hace prácticamente imposible, y se suele recurrir a la observados en intervalos de seis meses muestran posiciones apa-

Página 41
Mecánica celeste - Paralaje

rentes diferentes (paralaje anual). Para tratar este tipo de paralaje ⎧ x


lo primero que se necesita conocer es la distancia entre la Tierra y ⎪⎪∆α ≈ − r cos ϕ sec δ sin h
el Sol, la unidad astronómica. Esto se hace calculando la paralaje ⎨
geocéntrica del Sol o paralaje solar. ⎪∆δ ≈ − x (sin ϕ cos δ − cos ϕ sin δ cos h)
En el apartado anterior hemos visto un método para la determi- ⎩⎪ r
nación de la distancia Tierra-Luna en base a la paralaje por causa En el llamado método diurno el planeta es observado varias
geocéntrica. El mismo método pierde eficacia con el caso solar, horas antes y después del paso por el meridiano, en el mismo ob-
por su mayor distancia y dificultad observacional. La medida de servatorio. El registro se hace fotográficamente, y se toma como
la distancia al Sol se hace de forma indirecta, y está basada en la referencia una o varias estrellas fijas. Tomando como diferencia
medida de la distancia de un planeta exterior o un asteroide, co- en ascensión recta con la estrella d = αs - α* , y entonces el des-
mo Marte o Eros, y la aplicación de la tercera ley de Kepler. Tan- plazamiento por paralaje es
to para uno de estos, como para la Tierra se cumple por la misma
∆α = α s − α c = d + (α* − α c )
4π 2 ai3
= G ( M ⊕ + mi ) Combinando para los dos instantes observados
Ti2
⎛ sec δ 2 sin h2 sec δ1 sin h1 ⎞
y despreciando la masa respecto a la solar, tenemos entre la Tie- d 2 − d1 = (α c 2 − α c1 ) − x cos ϕ ⎜⎜ − ⎟

rra y otro planeta ⎝ r2 r1 ⎠
3 2 La cantidad (αc2 - αc1) se debe al movimiento orbital del plane-
⎛a ⎞ ⎛ ⎞
⎜ T ⎟ = ⎜ TT ⎟ ta durante en intervalo de las dos observaciones. Se puede
⎜ ap ⎟ ⎜ Tp ⎟ aproximar r1 ≃ r2 para así poder conseguir la distancia r objeto-
⎝ ⎠ ⎝ ⎠
Tierra
Como la relación de períodos es bien conocida, la relación de
radios se puede determinar con gran exactitud, y teniendo la dis- x
d 2 − d1 = (α c 2 − α c1 ) − cos ϕ sec δ sin ∆h
tancia del planeta se tiene la unidad astronómica. El momento r
más favorable para la medida es la oposición, que da la máxima
cercanía. Con observaciones sobre tiempos mayores que el perío- en función de diversos valores medibles, y así tener la escala del
do se tiene una determinación de la órbita más fiable y exacta. sistema solar. Otros métodos para obtener la paralaje solar son:
• por el tránsito de Venus
• métodos gravitacionales (la perturbación del movimiento
Paralaje geocéntrica solar respecto al teórico se expresa en relaciones que contienen
el semieje mayor de la Tierra)
Para conseguir lo antes expuesto veamos el efecto en las coor- • por la constante de aberración; ver tema siguiente
denadas horarias de la paralaje geocéntrica. Sea Ms la posición • espectroscópicamente, en base a la velocidad radial
del planeta para la superficie, y Mc para el centro terrestre. En la
figura tenemos posiciones y distancias sobre la esfera celeste.
Aplicamos las relaciones de Bessel
7.6 Paralaje anual

Paralaje estelar; el pársec

La paralaje geocéntrica es causada por la diferencia en posición


sobre la superficie terrestre y su centro. La paralaje anual es debi-
da a la diferencia en posición del observador terrestre (que toma-
remos en su centro) por el movimiento de la Tierra en su órbita
alrededor del Sol.
Para este estudio supondremos que la órbita terrestre es circular,
y que la estrella estudiada es estacionaria respecto al Sol. En el
dibujo se representa una situación de este tipo.

⎧ x sin h cos ϕ
⎪tan ∆h = r x
⎪ cos δ − cos h cos ϕ
⎪ r

⎨ ⎛ x ⎞
⎪ tan δ + tan(∆δ ) cos(h + ∆h)⎜ sin δ − sin ϕ ⎟
⎪ ⎝ r ⎠
=
⎪1 − tan(∆δ ) tan δ x
cos δ cos h − cos ϕ
⎪⎩ r

Como Ms y Mc se refieren al mismo objeto en el mismo mo-


mento, se tiene que ∆h = ∆α. Aproximando para valores peque-
ños de x / r

Página 42
Mecánica celeste - Paralaje

La Tierra (T), el Sol, y la estrella forman un triángulo en un pla-


no (que no tiene por que ser perpendicular al orbital). Sea d la
distancia de la estrella al Sol, y los ángulos de la figura. Por trigo-
nometría se cumple que
a
sin(θ − θ1 ) = sin θ1
d
Se define la paralaje anual o estelar como el ángulo en la estrella
en el caso θ = 90°; de forma analítica
a
π = arcsin
d
Geométricamente la paralaje estelar no se define como la geo-
céntrica, no es el ángulo tendido desde la estrella en cualquier ca-
so, sino sólo en el descrito (en disposición rectangular). Los valo-
res de la paralaje estelar suelen ser pequeños, debido a que d » a,
lo que nos permite poner la relación triangular como La esfera celeste está centrada en la Tierra. Sean las correccio-
nes por paralaje en coordenadas eclípticas ∆λ y ∆β. Por lo que
sin(θ − θ1 ) ≈ θ − θ1 ≈ π sin θ1
hemos visto antes es XS = θ y XX1 = θ - θ1. Por geometría se
Resulta evidente que si se dispone de la paralaje estelar y de la tiene
unidad astronómica, se pueden determinar distancias estelares ⎧∆λ cos β = XX1 cos ξ
(mientras el margen instrumental sea aceptable). No podemos ⎨
medir la posición desde el Sol, pero podemos tomar dos medidas ⎩∆β = XX1 sin ξ
con una diferencia de seis meses, teniendo una relación angular
doble con las dos posiciones terrestres y el astro. Cuando la para- y como ya se vio, con la paralaje
laje está dada en segundos de arco, y la distancia Tierra-Sol en
⎧∆λ cos β = π sin θ cos ξ
unidades astronómicas (1 u.a.), la distancia estelar al Sol d se ⎨
dice que está en pársecs (pc). Por esta definición, un pársec equi- ⎩∆β = −π sin θ sin ξ
vale a 3,26 años-luz, o 31·1012 km.
Si aplicamos las relaciones de Bessel al triángulo S-X-K (polo
de la eclíptica), se tiene
Tipos de coordenadas (por paralaje) ⎧sin θ cos ξ = sin(λ⊕ − λ )
⎨ →
⎩sin θ sin ξ = sin β cos(λ⊕ − λ )
Ahora que hemos visto la dependencia paraláctica de las posi- ⎧∆λ cos β = π sin(λ⊕ − λ )
ciones y distancias, es propio y necesario hablar de direcciones y → ⎨
coordenadas: ⎩∆β = −π sin β cos(λ⊕ − λ )
• topocéntricas: referidas a la superficie terrestre Obtenemos así el efecto de la paralaje anual en las coordenadas
• geocéntricas: referidas al centro terrestre eclípticas (longitud y latitud) de una estrella. Si asociamos coor-
denadas relativas cartesianas a los desplazamientos en longitud y
• heliocéntricas: Sol
latitud, tenemos la llamada elipse de paralaje
• baricéntricas: lo cual es más real, ya que la tierra gira alre-
dedor del baricentro, pero como se encuentra dentro del Sol x = π sin(λ⊕ − λ ) ⎫ x2 y2
se suele tomar indistintamente. ⎬ → + =1
y = π sin β cos(λ⊕ − λ )⎭ π2 π 2 sin 2 β
Es la figura descrita por X1 alrededor de X debida al fenóme-
Elipse de paralaje no de la paralaje a lo largo del año. El semieje mayor es indepen-
diente de la latitud de la estrella, es igual a la paralaje anual, y
sólo depende de la distancia estelar.
Veamos el efecto sobre las coordenadas de la paralaje anual o
por movimiento orbital terrestre. Referimos a la esfera celeste; si
X denota la posición de la estrella vista desde el Sol, y X1 cuando
es vista desde la Tierra, entonces X , X1 , T y S están en el 7.7 Efecto de la paralaje anual sobre las coorde-
mismo plano (la Tierra en el centro de la esfera celeste), y X1
está siempre sobre el arco entre X y S. nadas

Efecto en la coordenadas ecuatoriales

Vamos a estudiar el efecto de la paralaje anual sobre las coorde-


nadas ecuatoriales, en base a la descripción de la esfera celeste
centrada en la Tierra, semejante a la hecha antes. Nos fijamos en
el detalle del triángulo de la figura, por lo cual se tiene

Página 43
Mecánica celeste - Paralaje

r ′( sˆ × sˆ′) = − R ( sˆ × nˆ )

r ′sˆ × ( sˆ × sˆ′) = r ′[sˆ( sˆsˆ′) − sˆ′( sˆsˆ)] = − Rsˆ × ( sˆ × nˆ )

R
sˆ( sˆsˆ′) − sˆ′ = − [sˆ( sˆnˆ ) − nˆ ( sˆsˆ)]
r
Como tenemos las siguientes aproximaciones
sˆsˆ′ = cos(θ − θ1 ) ≈ 1
r ≈ r′
sˆ 2 = 1
⎧UX = ∆α cos δ = XX1 cosη
⎨ la expresión anterior se convierte en
⎩UX1 = − ∆δ = XX1 sinη
sˆ′ − sˆ = dsˆ = π [sˆ( sˆnˆ ) − nˆ ]
Como ya se vio, era XS = θ y XX1 = θ - θ1, y con la paralaje
Las coordenadas heliocéntricas de la estrella son
⎧∆α cos δ = π sin θ cosη
⎨ ⎛ cos α cos δ ⎞
⎩∆δ = −π sin θ sin η ⎜ ⎟
sˆ = ⎜ sin α cos δ ⎟ →
y las últimas cantidades trigonométricas se hallan con relaciones ⎜ sin δ ⎟
⎝ ⎠
triangulares
⎛ − cos α sin δ dδ − sin α cos δ dα ⎞
⎧sin θ cosη = cos δ ⊕ sin(α ⊕ − α ) ⎜ ⎟
→ dsˆ = ⎜ cos α cos δ dα − sin α sin δ dδ ⎟

⎩sin θ sin η = cos δ ⊕ sin δ cos(α ⊕ − α ) − sin δ ⊕ cos δ ⎜
⎝ cos δ dδ ⎟

También podemos ponerlas en relación a las coordenadas eclíp- y sustituyendo ŝ , dŝ , y R⊙ en la ecuación se obtienen las ex-
ticas solares, que se dan tabuladas
presiones conocidas
x = cos λ⊕ = cos δ ⊕ cos α ⊕
⎧∆α cos δ = π ( x⊕ sin α − y⊕ cos α )
y = sin λ⊕ sin ε = sin δ ⊕ ⎨
⎩∆δ = π ( x⊕ cos α sin δ + y⊕ sin α sin δ + z⊕ cos δ )
z = sin λ⊕ cos ε = cos δ ⊕ sin α ⊕

obteniendo
Medición de la paralaje
⎧∆α cos δ = π ( y cos α − x sin α )

⎩∆δ = π ( z cos δ − x cos α sin δ − y sin α sin δ )
Como hemos visto
Las coordenadas del vector de posición terrestre desde el Sol
∆α cos δ = π ( x⊕ sin α − y⊕ cos α ) = π Fp
(x,y,z) generalmente se hallan tabuladas de forma inversa, es de-
cir como posición del Sol desde la Tierra. Hay otro método para donde el término corrector Fp es el llamado factor de paralaje.
hallar estas relaciones, tanto para las coordenadas ecuatoriales Se escogen dos estrellas, la estudiada (A) de coordenadas (α,δ), y
como para las eclípticas, y es empleando vectores. otra considerada como fija para la paralaje (B), de coordenadas
Para el triángulo Tierra-Sol-planeta tenemos la identidad (α0,δ0). En un cierto instante inicial ti , la diferencia en ascensión
recta de ambas es
di = α i − α 0 = (α i − α ) + (α − α 0 ) = π Fi sec δ + (α − α 0 )

Con mediciones en dos momentos distintos, si se restan


( d 2 − d1 ) cos δ
π =
F2 − F1

Como puede verse, así pueden calcularse las paralajes. El error


calculado será mínimo cuando el denominador F2 - F1 sea máxi-
mo. Esto equivale a la condición (ver ejercicio)
cot λ⊕ = tan α sec ε

que implica que se hagan con 6 meses de diferencia (F2 = -F1) ,


como podía intuirse.
r ′sˆ′ = rsˆ − R nˆ

donde los vectores ŝ , ŝ’ y n son unitarios. Multiplicando vecto-


rialmente por ŝ dos veces

Página 44
Mecánica celeste - Aberración
donde k es la constante de aberración, que sólo depende de la
velocidad del observador. Como hemos visto que la aberración es
8. Aberración causada por el movimiento del observador, podemos distinguir
para la aberración estelar, atendiendo a los distintos movimientos:
• la aberración anual, por el movimiento de orbital de trasla-
ción de la Tierra alrededor del Sol
8.1 Aberración estelar • la aberración diurna, por el movimiento de rotación sobre
su eje, que depende de la latitud
• la aberración baricéntrica o secular, por el movimiento del
El fenómeno de la aberración fue descubierto en 1728 por Brad- sistema solar en la galaxia
ley, como resultado de series de observaciones meridianas de la La posición corregida de aberración se refiere a una posición
estrella de segunda magnitud γ Draconis, consistente en una des- aparente en el pasado (θ), pues la información luminosa que tra-
viación aparente de la posición real. No tardó en ser interpretado tamos se refiere siempre al momento y posición en que fue emiti-
como una consecuencia de la velocidad finita de la luz. Dicho fe- da. Cuando la fuente también se mueve, se tiene otro caso de abe-
nómeno se hizo más evidente en la observación de las posiciones rración, que es tratado en el apartado de aberración planetaria.
de las lunas de Júpiter.
La posición de la estrella en el cielo estaba desplazada en una
cantidad que dependía de la razón entre la velocidad orbital de la
Tierra y la de la luz. El efecto de la luz para un telescopio es se- 8.2 Aberración anual
mejante al del paseante en la lluvia con un paraguas: dado que la
lluvia cae con velocidad finita (en su caso la luz), cuanto más rá-
pido se camine, más hay que inclinar el paraguas para no mojarse. Aberración anual; elipse de aberración anual
En observaciones con un telescopio, hay que inclinarlo un poco
hacia adelante (según el movimiento) para que la imagen que en-
tra por el tubo quede bien en el foco. La aberración anual es la causada por el movimiento orbital de
la Tierra. Supondremos que la órbita terrestre es circular, ya que
el considerar la órbita elíptica real no supone una corrección sig-
nificativa. Esta aproximación implica que la velocidad orbital es
constante. Por dicho movimiento, el observador tiene una cierta
velocidad en una dirección, que en la esfera celeste centrada en la
Tierra, es el punto de dirección del movimiento terrestre de coor-
denadas eclípticas (λF = λ⊙-90°, βF = 0°). Hecho este razonamien-
to, el efecto y descripción de la aberración es semejante al de la
paralaje anual.

En el dibujo de la figura se representa la situación. Sea C el


centro de la apertura del telescopio, y T el centro de la parte pos-
terior, donde llega la luz de la estrella para ser recogida. Sea X la
dirección de la luz que proviene de la estrella que queremos anali-
zar, y que se corresponde con una cierta altura o inclinación θ.
Debemos calcular la dirección dada por θ1 de tal forma que el te-
lescopio apunte bien a la estrella, teniendo en cuenta que mientras
la luz entra por C y llega a T el telescopio se mueve de forma so-
lidaria con la Tierra. Así corregiríamos del efecto de aberración
Como hemos expuesto, para un observador externo, el telesco-
pio se mueve, y mientras la luz recorre la longitud CT en un tiem- Supongamos que tenemos un astro en la posición real X, de co-
po ∆t, la placa del instrumento se mueve de T a T1, y la luz incide ordenadas eclípticas (λ,β) . Por aberración anual lo observaremos
en T1. Por tanto, se cumple la relación geométrica hacia adelante, sobre el arco XF (y en el plano T-F-X), en la po-
sin(θ − θ1 ) sin θ1 v sición X1. Por lo expuesto en el apartado anterior
= → sin(θ − θ1 ) = sin θ1
v∆t c∆t c XX1 = k sin θ
Dado que la relación v/c es pequeña, el ángulo θ-θ1 también lo Descomponiendo en componentes de latitud y longitud eclípti-
es, y podemos tomar cas
v ⎧∆λ cos β = XU = k sin θ cos ξ
θ − θ1 ≈ k sin θ con k (′′) = cosec(1′′)
c ⎨
⎩∆β = X1U = k sin θ sin ξ

Página 45
Mecánica celeste - Aberración

Aplicando relaciones e identificando arcos y ángulos

⎧∆λ = − k sec β cos(λ⊕ − λ )



⎩∆β = − k sin β sin(λ⊕ − λ )
Esto significa que la corrección por aberración es periódica y se
repite cada año (al depender del movimiento terrestre, a través de
la posición solar λ⊙), si el astro observado es fijo (λ y β fijos). De
modo similar a lo que ocurría con la paralaje anual, llamando x
al desplazamiento en longitud e y al desplazamiento en latitud se
tiene la ecuación de la llamada elipse de aberración anual

x2 y2
2
+ =1
k k sin 2 β
2

Está centrada en la posición verdadera de la estrella, y el semieje


mayor es una constante para todas las estrellas.

Corrección para órbita elíptica ⎧ XU = ∆α cos δ = XX1 cosη



⎩ X1U = − ∆δ = XX1 sin η
De modo más riguroso y real, tomaríamos la órbita terrestre co-
mo elíptica. Como se describe en el tema del movimiento planeta- Por definición es XX1 = k sin(θ) y entonces
rio, la velocidad puede tomarse en dos componentes, una según el
semieje menor y otra perpendicular al radio vector ⎧∆α cos δ = k sin θ cosη

r eh h h 2π a ⎩∆δ = − k sin θ sinη
v= eˆb + eˆσ con =
p p p T 1 − e2 Por las relaciones referidas al triángulo

Con la aberración anual también tomaríamos dos contribucio- ⎧sin θ cosη = cos δ ⊕ sin(α ⊕ − α )

nes, correspondiendo a cada una de las componentes ⎩sin θ sin η = cos δ ⊕ sin δ cos(α ⊕ − α ) − sin δ ⊕ cos δ
∆λ = ∆λb + ∆λσ Introducimos las coordenadas eclípticas solares
∆β = ∆βb + ∆βσ
sin λ⊕ = cos δ F cos α F
Para la componente lateral (en σ) es − cos λ⊕ sin ε = sin δ F
⎧∆λ1 = − kσ sec β cos(λ⊕ − λ ) 2π a cosec(1′′) − cos λ⊕ cos ε = cos δ F sin α F
⎨ con kσ (′′) =
⎩∆β1 = − kσ sin β sin(λ⊕ − λ ) cT 1 − e 2 obteniendo

⎧∆α cos δ = − k (cosα cos λ⊕ cos ε + sin α sin λ⊕ )


y para la otra (según el eje menor) ⎨
⎩∆δ = − k cos λ⊕ cos ε (tan ε cos δ − sin α sin δ ) − k cos α sin δ sin λ⊕
⎧∆λ2 = −ekσ sec β cos(ω~ − λ )
⎨ ~
⎩∆β 2 = −ekσ sin β sin(ω − λ ) El otro procedimiento es el vectorial; nos basamos en la figura
de la explicación del efecto de aberración por movimiento del te-
siendo <ω> la longitud del perihelio. Esta última corrección es lescopio.
independiente de la posición del Sol, y constante para una estrella
durante siglos. Por eso suele convenirse que estas últimas canti-
dades son constantes, y que λ+∆λ2 es la longitud verdadera de la
estrella (y lo mismo con la latitud).

Aberración anual en coordenadas ecuatoriales

Como pasó con la paralaje, vamos a ver dos procedimientos,


análogos a los de entonces, para calcular la corrección por aberra-
ción en las coordenadas ecuatoriales. Basándonos en la esfera ce-
leste tenemos

Con el detalle sintético de la derecha tenemos la identidad de ve-


locidades

Página 46
Mecánica celeste - Aberración
r trella que culmina cerca del cenit para así aminorar los efectos de
c′sˆ′ = csˆ − v
la refracción. En el momento de la culminación (hacia el sur) te-
donde ŝ es el vector unitario de la dirección de la luz para un ob- nemos
servador exterior, ŝ́ es el correspondiente a la dirección aparente,
o de inclinación del telescopio por aberración, y es la velocidad ZX = ϕ − δ a = ϕ − δ − kx
de la Tierra. Multiplicando vectorialmente por ŝ dos veces, y
aproximando c’ ≃ c, y ŝ’ŝ ≃ 1 siendo ZX la distancia cenital de la estrella, φ la latitud, δa la
declinación aparente (sin corregir de la aberración), y x es lo que
1 multiplica a la constante de aberración. Con otra estrella que cul-
sˆ − sˆ′ = dsˆ = − [sˆ × ( sˆ × vr )] mina al norte del cenit será
c
Tomando coordenadas ecuatoriales ZX 2 = δ a 2 − ϕ = δ 2 − ϕ − kx2

⎛ cos α cos δ ⎞ ⎛ x& ⎞ Para corregir de refracción será ZX = z + r , donde z es la dis-


⎜ ⎟ r ⎜ ⎟ tancia cenital observada, y r la corrección por refracción. Com-
sˆ = ⎜ sin α cos δ ⎟ v = ⎜ y& ⎟ binando para las dos estrellas
⎜ sin δ ⎟ ⎜ z& ⎟
⎝ ⎠ ⎝ ⎠
2ϕ = (δ1 + δ 2 ) + ∆z + ∆r + k ( x1 + x2 )
y diferenciando se obtienen las expresiones
Con la misma observación, seis meses después (∆λ⊙ = 180°), los
⎧ 1 valores de x se invierten, y restando las dos combinaciones
⎪⎪∆α cos δ = c ( y& cos α − x& sin α )
⎨ 2k ( x1 + x2 ) + ∆z (t1 ) − ∆z (t2 ) + ∆r (t1 ) − ∆r (t2 ) = 0
⎪∆δ = 1 ( z& cos δ − x& cos α sin δ − y& sin α sin δ )
⎪⎩ c que es una relación de cantidades observadas en la que podemos
despejar la constante k . Si se pretende una gran precisión apare-
Tomamos la velocidad terrestre como la opuesta a la velocidad ce un pequeño problema, y es que transcurridos los seis meses, la
solar v = -v⊙ que es la que se suele encontrar tabulada. Esto im- latitud no es exactamente constante, por los movimientos del polo
plica que no tomamos el baricentro sino el centro solar, por lo que terrestre. Se dice por ello que la determinación exacta de la cons-
se dice que son las fórmulas de baja precisión. Suele ser habitual tante de aberración está afectada del problema de la variación de
expresar las relaciones en la forma latitud. Si se tiene esto en cuenta, se obtiene un valor de 20,445’’.
⎧∆α = cC + dD

⎩∆δ = c′C + d ′D
8.3 Aberración diurna
siendo

⎧C = − k cos ε cos λ⊕ D = − k sin λ⊕ ⎫


⎪ ⎪ La aberración diurna es la causada por el movimiento de rota-
⎪ 1 1 ⎪
⎨c = cos α sec δ d = sin α sec δ ⎬ ción terrestre sobre su eje. A distintas latitudes corresponden dis-
⎪ 15 15 ⎪
⎪⎩c′ = tan ε cos δ − sin α sin δ tintas velocidades, siempre menores que la de traslación (que cau-
d ′ = cos α sin δ ⎪⎭
saba la aberración anual). Como un lugar de latitud φ describe un
C y D que son llamados números besselianos estelares, sólo de- circulo de 2πρ·cos(φ) en un día, la velocidad circular de rotación,
penden de la longitud solar y de ε, y se suelen tabular en forma para un paralelo dado, depende de la latitud según la expresión
logarítmica. Los otros coeficientes dependen de la estrella y de la 2πρ cos ϕ
inclinación de la eclíptica. En otras tablas también se suelen dar v(km / s ) =
86164
los números estelares (i,h), de forma que
y se tendrá una constante de aberración diurna de valor
⎧ 1
⎪∆α = h sin( H + α ) sec δ
⎨ 15 v 0,464 cos ϕ
k (" ) = cos ec(1" ) = cos ec(1" ) = 0,32" cos ϕ
⎪∆δ = i cos δ + h cos( H + α ) sin δ c c

donde habiendo tomado ρ = 6.378 km. La dirección del movimiento
del observador es hacia el este, y analizando el efecto en la esfera
h cos H = − k sin λ⊕ celeste, la posición aparente X1 es sobre el arco XE (E de este), y
h sin H = − k cos ε cos λ⊕ la corrección en coordenadas horarias es
i = − k sin ε cos λ⊕ ⎧∆h = − k cos h sec δ

⎩∆δ = k sin h sin δ

Obtención de la constante de aberración anual Puede verse que cuando la estrella está sobre el meridiano, el
efecto en declinación es nulo. El efecto en ángulo horario es un
desplazamiento hacia el este que lleva a considerar los pasos por
Hemos visto que la constante de aberración anual es meridianos con retrasos, en cantidades dadas por la anterior ex-
presión. El desplazamiento debido a aberración diurna es tan pe-
2π a cosec(1′′) queño que suele ser despreciado.
k (′′) =
cT 1 − e 2
y tomando a = 149,5·106 km , T = 31558149,5 s , c = 299792
km/s , y e = 0,01674 , se tiene un valor de 20,47’’. Veamos el
proceso práctico observacional para obtenerla. Se escoge una es-

Página 47
Mecánica celeste - Aberración
r
8.4 Aberración planetaria d ' sˆ' = dsˆ + r
Multiplicamos vectorialmente por ŝ dos veces, y aplicamos las
aproximaciones d’ ≃ d = cτ, r ≃ vτ, quedando
Aberración por el movimiento de los planetas
1
∆s = sˆ − sˆ′ = − [sˆ × ( sˆ × rr)]
c
Hemos visto que la aberración es un fenómeno causado por la
velocidad finita de la luz combinada con el movimiento del ob- El efecto de la aberración planetaria debe sumarse a los ya vistos
servador. También puede ocurrir que sea la fuente emisora de la de aberración anual y diurna. Podemos reunir el planetario con el
radiación que observemos la que esta en movimiento. Entonces la anual haciendo
posición de un cuerpo observado no se corresponde con la que
realmente tiene, pues mientras nos llega la luz, éste se ha movido ∆s = sˆ − sˆ′ = −
1
c
( [ ( r r
sˆ × sˆ × r& − vT )])
cambiando su posición. Donde esto se hace más evidente es en el
ámbito planetario, que mientras llega la imagen y posición de un
planeta en unas horas a la Tierra, el planeta se ha movido en una
cantidad, que por ejemplo no se puede despreciar en los cálculos Otras correcciones
de navegación para sondas, y por ello se habla de aberración pla-
netaria; ésta es pues, el efecto combinado de la velocidad finita de
la luz con el movimiento del cuerpo observado. La aberración solar es la causada por el movimiento del Sol o
del baricentro respecto del resto de estrellas. Sólo afecta a las es-
trellas, y es más tratado en el tema de movimiento relativo o pro-
pio.
Hemos visto como los fenómenos de aberración se deben a la
velocidad finita de propagación de la luz. Otro fenómeno que de-
be tenerse en cuenta es el de la corrección relativista, consistente
en la deflexión luminosa causada por la presencia de un cuerpo
muy masivo en las cercanías de su trayectoria. Esto sólo ocurre en
la práctica cuando el Sol (como agente deflector) pasa cerca de
una zona estelar o astro observado. La teoría de la relatividad ge-
neral predice una desviación del rayo luminoso, en primer orden,
al pasar a la distancia del radio solar
4m
En el dibujo, el planeta exterior es observado en un instante t en ∆ψ ≈ ≈ 1,78"
la dirección ŝ’, que es donde estaba cuando emitió la luz que nos R⊕
llega (en el instante t-τ), mientras que realmente debe estar en la
dirección ŝ. Tenemos la identidad triangular Este efecto angular a 1 ua se convierte en 0,008”.

Página 48
Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales
Como las fuerzas causantes, debidas a estos dos astros, se ins-
criben en la eclíptica y el ecuador (que hemos tomado como un
9. Movimiento de los planos fundamen- promedio), la dirección del momento medio de las fuerzas de am-
tales bos (sobre algún polo), responsable del efecto, se sitúa entre los
planos ecuatorial y eclíptico, y según la línea de equinoccios, en
dirección γ. En consecuencia, este momento causa el desplaza-
miento del polo siempre en perpendicular al arco que une los po-
los eclíptico y ecuatorial. Consideraremos por ello que el polo
Los planos fundamentales, que sirven de referencia a los siste- eclíptico es fijo, que el ecuatorial varía, y que lo hace girando al-
mas de coordenadas, son dos: el ecuador y la eclíptica. Compa- rededor del primero. Físicamente, si n es la dirección del polo ins-
rando las posiciones registradas de estrellas en varios años, Hipar- tantáneo de rotación, y k la del polo eclíptico, la variación del po-
co pudo observar hacia el siglo -II que las longitudes de las estre- lo de rotación estaría dada por una expresión de la forma1
llas parecían incrementarse en unos 36” por año (actualmente en r r r
unos 50”), mientras que las latitudes no parecían tener cambios n& = ψ (n × k )
apreciables.
siendo ψ el rango de variación anual, que actualmente vale unos
La explicación era que, o todas las estrellas tenían idéntico mo- 50,3843” . Al cabo de un tiempo y por este efecto, el polo va des-
vimiento propio en longitud, de forma paralela a la eclíptica (lo cribiendo un círculo alrededor del polo de la eclíptica, que com-
cual era lógicamente muy improbable), o bien el punto fundamen- pleta en unos 26.000 años. La descripción hecha es aproximada,
tal de referencia (γ) desde el que se medían no era un punto fijo. porque el polo de la eclíptica tampoco es fijo, debido a la prece-
Dicho punto, el punto aries o equinoccio vernal, está definido co- sión planetaria, pero se puede aceptar que es más o menos así para
mo la intersección de los planos ecuatorial y eclíptico. Hiparco cortos intervalos de tiempo.
interpretó bastante bien que el ecuador, y en consecuencia el pun-
to γ se movía sobre la eclíptica, produciendo el efecto observado. Como ya hemos dicho, la eclíptica es tomada fija, el polo ecua-
El movimiento del equinoccio vernal por la eclíptica es la llamada torial se desplaza en un tiempo t desde P1 a P2 según un arco
precesión del equinoccio. circular alrededor de K, siempre de longitud ε, y como conse-
cuencia de todo el punto aries va de γ1 a γ2. Se cumple entonces
Considerando este único fenómeno, vemos que el polo norte te- que
rrestre gira alrededor del de la eclíptica con una inclinación cons-
tante, y da una vuelta en unos 26.000 años. Hubo que esperar has- P1KP2 = ψ t = γ 1γ 2
ta Newton, que dio una explicación dinámica correcta del fenó-
meno tomando la Tierra como un sólido rígido que precesiona
como una peonza (precesión en el sentido físico de la palabra).
Así la atracción del Sol y la Luna producen un momento sobre la
Tierra (porque ésta es asimétrica), y en consecuencia un giro so-
bre un eje no perpendicular a la eclíptica.
Las fuerzas gravitatorias aplicadas entre los cuerpos del sistema
solar, en el caso de la Tierra, producen un momento debido a su
forma no esféricamente simétrica (principalmente por el achata-
miento de rotación), y en consecuencia aparece un movimiento
del eje de rotación o polo. El momento causado por dichas fuer-
zas, es proporcional a las masas implicadas, e inverso al cubo de
las distancias. Por ello el efecto de Júpiter y Venus es 105 veces
menor que el solar y el lunar, que son los principales agentes de
estos fenómenos. Podemos así simplificar el problema estudiando
los momentos resultante del Sol y de la Luna, pero en seguida nos
damos cuenta que como dependen con la cambiante configuración
y las distancias de los tres cuerpos, se hace complicado.
Por tradición, a los cambios regulares de gran duración o secu-
lares se les llama de precesión, y los términos periódicos de corta
duración (menos de 18 meses) de oscilación alrededor del polo
La interpretación visual geométrica es que el equinoccio vernal
medio, nutación. Esta distinción aceptada es históricamente arbi-
γ se retrasa sobre la eclíptica de modo uniforme en una cantidad
traria, pero útil al enfocar algunos problemas. Proviene de la dis-
ψ. Por ello el efecto en las coordenadas eclípticas es
tinción entre esos dos tipos genéricos de movimientos del polo (y
de la eclíptica): unos periódicos y de corta duración y otros que ⎧ dβ = 0
no. ⎨
⎩ dλ = ψ t
sin que varíe la latitud, sólo la longitud. Para el efecto en las co-
ordenadas ecuatoriales se deben emplear las relaciones esféricas
9.1 Precesión lunisolar de Bessel y las relaciones diferenciales. Debemos tomar
sin δ = cos ε sin β + sin ε cos β sin λ
La precesión lunisolar consiste en un movimiento medio del po- y como hay variación respecto de la longitud
lo considerando la eclíptica fija, causada como su nombre indica
por el Sol y la Luna. Cuando se dice que se toma el polo medio se
ignora o se promedia la nutación (efectos periódicos cortos). Esta 1
es una separación arbitraria del efecto total de precesión y nuta- Con polos instantáneos aparecerían otro términos periódicos
ción útil en el tratamiento, y que luego podemos combinar para despreciables, por lo que más estrictamente se tomarían polos
tener una descripción general. medios.

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

cos δ dδ = sin ε cos β cos λ dλ sección entre la nueva y la anterior eclíptica es NN’. El movi-
miento de la eclíptica puede describirse como una lenta rotación
Introduciendo la relación de los senos del plano de referencia sobre el eje NN’, que irá variando. Esta
rotación se denota por π, vale unos 0,5” por año, y se cumple que
cos β cos λ = cos δ cos α → dδ = ψ t sin ε cos α
γNγ ' = π t
También diferenciando está última relación tenemos una expre-
sión para la variación en ascensión recta

cos δ sin α dα = ψ t (cos β sin λ − sin ε sin δ cos 2 α )



dα = ψ t (cos ε + sin ε sin α tan δ )

Estas ecuaciones son válidas para cortos intervalos de tiempo,


del orden de un año o menos, por la naturaleza de las aproxima-
ciones hechas: se derivan en primer orden de una representación
geométrica aproximada. El rango de precesión lunisolar es un
término de Mecánica de Newton que sólo necesita de una pequeña
corrección relativista (≃ 0,02”), conocida como precesión geodé-
sica. Esto es causado porque el intervalo inercial terrestre tiene
una pequeña rotación respecto al intervalo inercial heliocéntrico.
El valor de ψ depende de varios parámetros, como son la forma de
la Tierra, la inclinación de la eclíptica, las masas de la Luna y del En la figura aparece un detalle del dibujo anterior. La posición
Sol, y sus elementos orbitales. De hecho es proporcional al cos ε , del eje de rotación se especifica por su longitud sobre la eclíptica
y como esto varía por precesión planetaria, no es una constante. original a través del arco Π = γN.
Su valor es Los efectos de la precesión planetaria en las coordenadas ecua-
toriales son los siguientes. Como el polo no está afectado, la de-
ψ = 50,3878"+0,0049"T clinación no varía. Hay desplazamiento del punto Aries, en una
donde T es el tiempo en siglos desde J2000,0. cantidad λ’t, donde λ’ es el rango anual de precesión planetaria.
Por tanto la ascensión recta de una estrella disminuye en la canti-
dad λ’t

⎧ dα = − λ ' t
9.2 Precesión planetaria ⎨
⎩ dδ = 0
Con las fórmulas de Bessel, para el triángulo γNγ’
En este apartado tratamos la influencia del resto de planetas del
sin Π sin(π t ) = sin(λ ' t ) sin(ε + dε )
sistema solar en los planos fundamentales, siempre de forma
aproximada o simplificada. Dicha influencia, en la dirección del y cuando t es pequeño
eje de rotación terrestre es despreciable, al estar situados prácti-
camente en el plano de la eclíptica. En cambio, sus perturbaciones λ ' = π sin Π cosec ε
afectan a la órbita terrestre alrededor del Sol, es decir, a la eclípti-
ca. La eclíptica está definida como el plano medio orbital del ba- Para el cambio en la eclíptica, como
ricentro Tierra-Luna. Estos efectos no son variaciones periódicas cos ε cos(λ ' t ) = sin(λ ' t ) cos Π + sin ε cot(ε + dε )
de corto período, sino cambios seculares. Por definición, para los
efectos planetarios, no hay pues términos nutacionales. tomando la aproximación de ángulos pequeños, queda
dε = π t cos Π

Hallar los cambios que se producen en las coordenadas eclípti-


cas de cualquier estrella es más complicado. Del triángulo esféri-
co KPX se tiene
sin β = cos ε sin δ − sin ε cos δ sin α

y diferenciando respecto a los parámetros que varían


cos β dβ = −(sin ε sin δ + cos ε cos δ sin α )dε −
− sin ε cos δ cos α dα

Ahora se aplica la fórmula del seno, junto con las aproximacio-


nes de primer orden
dβ = π t sin(Π − λ )

El efecto en longitud sale diferenciando la fórmula de los senos,


y se encuentra

Ignoramos otros efectos y tomamos el ecuador y el polo como dλ = λ ' t cos ε + π t tan β cos(Π − λ )
fijos. En un tiempo t la eclíptica se ha movido, y el eje de inter-

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

Los parámetros Π y π se derivan o calculan en otros apartados Las tres constantes vistas m , n y p no son tales realmente, su-
de la mecánica celeste, como el de perturbaciones planetarias. friendo pequeños cambios seculares. Esto demuestra que se trata
Ninguno de los dos es estrictamente constante. π tiene una varia- de una aproximación. Con los valores numéricos y expresiones
ción secular pequeña. Π además de un desplazamiento intrínseco que se han dado
secular tiene una variación precesional debido al movimiento del
equinoccio, por lo que necesita de una definición más precisa; por p = 50,2910"+0,0222"T
ello se toma como la longitud (referida al equinoccio medio de la m = 3,07496 s + 0,00186s T
fecha) del nodo ascendente de la eclíptica instantánea en su posi-
ción precedente. Los valores numéricos calculados de los dos pa- n = 1,33621s − 0,00057 s T = 20,0431"−0,0085"T
rámetros son
Π = 174,8764º +0,9137 º T
Variación de los elementos orbitales
π = 0,4700"−0,0007"T
con T en siglos desde J2000,0. Con ellos se tiene también que Además de alterar las coordenadas de los objetos celestes, la
λ ' = 0,1055"−0,0189"T precesión general (siempre en la aproximación vista) produce
cambios en la medida de los elementos orbitales de cualquier ór-
ε = 23ª 26'21,45"−46,81"T bita heliocéntrica, al cambiar los puntos y planos de referencia.
Como ya se ha dicho, estos parámetros son aproximados. Para Consecuencia directa de ello es que resultan afectados la inclina-
mayor precisión, ver los métodos rigurosos tratados en apartados ción orbital (i), la longitud del nodo ascendente L0(Ω), y el ar-
posteriores a este. gumento del perihelio (ω).

9.3 Precesión general: método riguroso

Limitaciones de la primera aproximación

En los apartados anteriores hemos hecho un estudio artificioso


de la precesión, separando en dos partes (precesión y nutación,
lunisolar y planetaria), y tomando hipótesis de trabajo que real-
mente no se verifican, como la de que el ecuador o la eclíptica
estén fijos. Se ha ignorado también el hecho de que la precesión
lunisolar es considerablemente mayor que el desplazamiento de la
eclíptica observado.
La precesión general, en un sentido más estricto, debe reunir los
efectos combinados del movimiento del ecuador y la eclíptica,
superponiendo las precesiones luni-solar y planetaria. Con inter-
valos de tiempo pequeños (menos de un año), este principio de
suma de los efectos anteriores es válido, y no hay más que sumar A es el punto orbital del perihelio. En un intervalo de tiempo t
los estudios de los dos apartados por separado. En cualquier otro se pasa de una eclíptica y unos elementos (con subíndices 0) a la
caso deberemos hacer una descripción con mayor rigor. Para una nueva. Con las magnitudes definidas y las variaciones introduci-
estrella de coordenadas ecuatoriales (α,δ), considerando los efec- das y visibles en la figura, tenemos
tos lunisolar y planetario por separado
γ 0N = Π
⎧dα = mt + nt sin α tan δ γN = Λ

⎩dδ = nt cos α LN = Π − Ω
donde esas nuevas constantes introducidas m y n se refieren a L' N = Λ − (Ω + dΩ)
los comentados efectos anuales de precesión en ascensión recta y
Si aplicamos el efecto de precesión general para el nodo N en-
declinación, que según los apartados anteriores son
tre las eclípticas desde la original, se tiene dλ = pt, y entonces
m = ψ cos ε − λ '
Λ = Π + dλN
n = ψ sin ε
L' N = Π + pt − (Ω + dΩ)
Con las coordenadas eclípticas tenemos un tratamiento similar;
así
dλ = pt + π t tan β cos(Π − λ )
dβ = π t sin(Π − λ )

donde p es la precesión anual general (en longitud), definida


como
p = ψ − λ ' cos ε

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

Como paso intermedio, en el triángulo LL’N introducimos un


punto Q sobre el arco L’N, tal que Podemos poner las coordenadas de cualquier estrella en función
QN = Π − Ω de las de una época y de los ángulos precesionales empleando las
relaciones triangulares. Consideramos la figura cuyos vértices son
LQL'= 90º los dos polos y la posición de la estrella (X)
es decir, el dado por la intersección de ese arco con el círculo de
longitud LN y centro en N. Refiriéndonos al nuevo triángulo
LQL’, que es pequeño y casi plano, tenemos
dω = LQ cosec(i + di )
pt − dΩ = LQ cot(i + di )

y sustituyendo, para el arco LQ ≃ πt sin (Π-Ω)

⎧dω = π t cosec i sin(Π − Ω)



⎩dΩ = pt − π t cot i sin(Π − Ω)
El incremento en la inclinación orbital sale con relaciones de
Bessel aplicadas al triángulo L’LN, y aproximando
− cos(dω ) cos i = sin(dω ) cot(Π − Ω) − sin i cot(i + di ) cos δ cos(α − z ) = cosθ cos δ 0 cos(α 0 + ζ ) − sin θ sin δ 0
↓ cos δ sin(α − z ) = cos δ 0 sin(α 0 + ζ )
2
sin( di ) + f (dω ) = − dω sin i cot(Π − Ω) + f (dω di ) sin δ = sin θ cos δ 0 cos(α 0 + ζ ) + cosθ sin δ 0
↓ y de modo recíproco, también ponemos las coordenadas de la
di = −π t cos(Π − Ω) época en función de las otras

Como ya se ha dicho, estas fórmulas son válidas para cortos in- cos δ 0 cos(α 0 + z ) = cosθ cos δ cos(α − ζ ) + sin θ sin δ
tervalos de tiempo, generalmente menores de un año. Lo siguiente cos δ 0 sin(α 0 + z ) = cos δ sin(α − ζ )
es la formulación rigurosa. sin δ 0 = − sin θ cos δ cos(α − ζ ) + cosθ sin δ

En las definiciones y relaciones anteriores no se ha hecho nin-


Cálculos rigurosos: ángulos precesionales guna aproximación, por lo que estas expresiones son en principio
exactas y siempre válidas. El único problema que hay es el de la
determinación de la evolución de los ángulos precesionales, que
Cuando es necesario comparar observaciones hechas con sepa- debe sacarse de alguna teoría precesional, que hace todo los cál-
ración temporal de varios o muchos años, como suele ser habitual, culos de perturbaciones planetarias, lunar y solar sobre la Tierra.
se hace referencia a las épocas estándar. Éstas son instantes histó- En la práctica se recogen en forma de series de potencias de inter-
ricos o futuros para los cuales se tienen definidos o conocidos los valos temporales hasta un tercer orden. Los coeficientes de estas
valores de todos los parámetros de la esfera celeste. Nosotros los series dependen poco de la época inicial escogida. Por ejemplo,
denotaremos con subíndice 0: γ0, P0, K0, etc. para J2000,0 se tienen
Por el estudio de la mecánica de los sistemas, sabemos que toda
rotación de un sistema sólido puede describirse a través de tres ⎧ζ = 0,6406161º T + 0,0000839º T 2 + 0,0000050º T 3
⎪⎪
ángulos, como pueden ser los de Euler. Vamos a aplicar el mismo 2 3
razonamiento para referir los planos y puntos vernales. Para un ⎨ z = 0,6406166º T + 0,0003041º T + 0,0000051º T
⎪ 2 3
tiempo posterior, caracterizado por otros parámetros, definimos ⎪⎩θ = 0,5567530º T − 0,0001185º T − 0,0000116º T
los ángulos precesionales de la siguiente forma
donde T es el intervalo (t-t0) en siglos julianos de 36.525 días.
⎧θ = P0 P Para la época B1950,0
⎪⎪
⎨ζ = PP0γ 0 ⎧ζ = 0,6402633º T + 0,0000839º T 2 + 0,0000050º T 3
⎪ ⎪⎪
⎪⎩ z = γPP0 − 180º 2
⎨ z = ζ + 0,0002197 º T

θ = 0,5567536º T − 0,0001183º T 2 − 0,0000117 º T 3
⎩⎪
Aquí T es el tiempo desde B1950,0 expresado en siglos trópicos
de 36.524,22 días. Con los tres ángulos precesionales se dispone
de la posición del polo y del equinoccio respecto de sus posicio-
nes iniciales, y se determinan los cambios en las coordenadas
ecuatoriales de una estrella. Con las coordenadas eclípticas se ne-
cesita además conocer el valor de la oblicuidad de la eclíptica.
Con las mismas teorías precesionales se tiene

ε = 23º 26'21,448"−46,815"T − 0,001"T 2 + 0,002"T 3


con T en siglos julianos desde J2000,0. Con esto y la transfor-
mación de coordenadas se pueden calcular las eclípticas a partir
de las ecuatoriales. La formulación es exacta, estando la precisión

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

determinada por el orden de los términos tomados de la teoría ⎛x⎞ ⎛x⎞ ⎛x⎞
precesional (en este caso hasta el tercero). ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
y
⎜ ⎟ = M y
⎜ ⎟ = R3 ( − Λ ) R1 (π ) R3 ( Π )⎜ y⎟
⎜x⎟ ⎜x⎟ ⎜x⎟
⎝ ⎠λβ ⎝ ⎠λ 0 β 0 ⎝ ⎠λ 0 β 0
Formulación vectorial
También aquí tenemos otros tres ángulos precesionales, los Λ, π
y Π. Con ambos sistemas se nos plantea una alternativa para cal-
Veamos ahora la formulación vectorial o matricial, que es la cular la corrección por precesión. Aplicando a las coordenadas
más conveniente para los cálculos matemáticos sistemáticos. La eclípticas (λ0,β0) la rotación -ε0 tenemos las coordenadas ecuato-
transformación desde un ecuador y un equinoccio de una época a riales (α0,δ0), que transformamos con la matriz P para tener (α,δ),
otra se toma como una operación matricial sobre el vector de po- y con la rotación ε resultan finalmente las (λ,β). De forma análo-
sición de una estrella cualquiera. Sea s0 el vector unitario de posi- ga, aplicando a las coordenadas ecuatoriales (α0,δ0) la rotación ε0,
ción estelar referido a un sistema de ejes ecuatorial, en una época tenemos las coordenadas eclípticas (λ0,β0), que transformamos
t0 con la matriz M para tener (λ,β), y con la rotación -ε resultan las
(α,δ). Tenemos en suma la identidad matricial siguiente
⎛ x ⎞ ⎛ cos δ 0 cos α 0 ⎞
r ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ P = [ε 0 ]M [−ε ] ↔ M = [−ε 0 ]P[ε ]
s0 = ⎜ y ⎟ = ⎜ cos δ 0 sin α 0 ⎟
⎜ z ⎟ ⎜ sin δ ⎟
⎝ ⎠ ⎝ 0 ⎠
De modo similar tendríamos el vector de posición s para una Aproximación de alcance medio
época posterior o anterior t. De las tres relaciones que nos daban
la variación en coordenadas ecuatoriales en función de los ángu-
los precesionales, tomamos la tercera e identificamos términos de En el apartado anterior se tiene todo el aparato matemático para
los vectores de posición calcular los efectos precesionales en cualquier intervalo temporal,
en una formulación matricial elegante, pero de utilización larga y
sin δ = z = x0 cos ζ sin θ − y0 sin ζ sin θ + z0 cosθ trabajosa. Veamos ahora un procedimiento para calcular los cam-
bios de modo aproximado para rangos mayores de un año.
De modo similar, con las otras dos podríamos poner La modificación consiste en sustituir el valor de los parámetros
x = x0 (cos ζ cos z sin θ − sin ζ sin z ) − precesionales por el valor correspondiente a la mitad del intervalo
temporal, en las fórmulas aproximadas que se vieron en el aparta-
− y0 (cos ζ sin z + sin ζ cos z cosθ ) − z0 cos z sin θ do 3.1. Notamos con subíndice m para los valores medios co-
y = x0 (sin ζ cos z + cos ζ sin z cosθ ) + rrespondientes al tiempo τ/2 = (t0+t) /2. Sean los nuevos paráme-
+ y0 (cos ζ cos z − sin ζ sin z cosθ ) − z0 sin z sin θ tros que definimos como

Ahora tomamos la notación vectorial M = mmτ


r r N = nmτ
s = Ps0 xi = Pij x0 j
a = pmτ
e identificamos cada elemento de la matriz de efecto precesio- b = π mτ
nal a
c = 180º −Π m +
P11 = − sin ζ sin z + cos ζ cos z cosθ 2
P12 = − cos ζ sin z − sin ζ cos z cosθ a
c' = 180º −Π m −
P13 = − cos z sin θ 2
P21 = sin ζ cos z + cos ζ sin z cosθ Entonces, a partir de los datos de una época fundamental la va-
P22 = cos ζ cos z − sin ζ sin z cosθ riación en coordenadas y de los elementos orbitales se puede dar
como (en la forma x-x0)
P23 = − sin z sin θ
P31 = cos ζ sin θ ∆α = M + N sin α m tan δ m
P32 = − sin ζ sin θ ∆δ = N cos α m
P33 = cosθ ∆λ = a − b tan β 0 cos(λ0 + c )
∆β = b sin(λ0 + c )
La matriz P es llamada la matriz de rotación. Examinando geo-
∆i = b cos(Ω0 + c )
métricamente la transformación se puede ver además, que la
transformación puede resolverse como el producto de tres rota- ∆Ω = a − b cot i0 sin(Ω0 + c)
ciones: una rotación sobre el eje P0 de valor -ζ, rotación sobre el ∆ω = b cosec i0 sin(Ω0 + c)
eje resultante y de valor θ, y una rotación sobre el eje resultante P
de valor -z Como ejemplo de como se han obtenido, tomamos las coorde-
nadas eclípticas que estaban dadas (3.1)
P = R3 (− z ) R2 (θ ) R3 ( −ζ )
dλ = pmτ + π mτ tan β m cos(Π m − λm )
Dado el pequeño valor de los ángulos (para intervalos de tiempo dβ = π mτ sin(Π m − λm )
humanos), las cantidades de la matriz son pequeñas, tendentes a la
matriz unidad. Para obtener la transformación inversa se aplica la La rotación de la eclíptica π es una centésima parte de la prece-
matriz inversa, y así se tendría s0 = P-1s. Para la transformación sión general p, y entonces la contribución de Π a λm puede ser
con coordenadas eclípticas se hace el mismo razonamiento, con lo ignorada. Se reemplaza tan βm por tan β0, y λm por λ0 + pmτ /2.
que la transformación matricial es Así es como se obtienen. Las expresiones dadas en los almana-
ques difieren ligeramente, pero tienen el mismo orden de preci-

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

sión. Los valores de los parámetros los ponemos en función de los ⎛ cos ε (1 − cos(2λ⊕ )) ⎞
que parten, y así r ⎜ ⎟
k = k0 sin ε ⎜ − sin( 2λ⊕ ) ⎟
⎜ ⎟
M = 1,281232º T + 0,000388º T 2 ⎝ 0 ⎠
N = 0,556753º T − 0,000119º T 2 El vector de momento angular terrestre (rotación diurna típica)
a = 1,396971º T + 0,000309º T 2 está dirigido hacia el polo. El momento es perpendicular a esta
dirección, no pudiendo afectar a su modulo, sólo a su dirección,
b = 0,013056º T − 0,000010º T 2 en un movimiento de tipo precesional, que implica el continuo
c = 5,1236º +0,2416º T cambio de localización del polo. Todavía no hemos hecho refe-
rencia a diferencias entre precesión y nutación.
c' = 5,1236º −1,1553º T
con T en siglos julianos desde J2000,0 . Para obtener los datos
de una época (en la forma x0-x) se invierte la transformación (y
se realizan aproximaciones justificables de segundo orden)
∆α = M + N sin α m tan δ m
∆δ = N cos α m
∆λ = a − b tan β cos(λ + c' )
∆β = b sin(λ + c ' )
∆i = b cos(Ω + c ' )
∆Ω = a − b cot i sin(Ω + c ' )
∆ω = b cosec i sin(Ω + c' )

Los valores medios αm y δm se pueden tomar


1
α m = α − ( M + N sin α tan δ )
2
1
δm = δ − N cos α m
2 Sea ŝ = (x,y,z) el vector de posición del polo celeste referido a
Todas estas fórmulas dan una precisión esperada mejor que un los ejes ecuatoriales de una época inicial en la cual λ⊙ = 0. Físi-
segundo de arco para intervalos de hasta 50 años. camente las componentes de k son proporcionales a (dx/dt, dy/dt,
0). Conectamos con la expresión anterior, e integrando se puede
expresar

⎡ 1 ⎛ dλ ⎞ −1 ⎤
9.4 Nutación x cosec ε = ψ 1 ⎢t − ⎜ ⊕ ⎟ sin(2λ⊕ )⎥
⎢⎣ 2 ⎝ dt ⎠ ⎥⎦
−1
ψ 1 ⎛ dλ⊕ ⎞
Efecto nutacional solar y= ⎜ ⎟ tan ε cos(2λ⊕ )
2 ⎝ dt ⎠
z =1
Debido al complicado movimiento del polo se hace natural la
separación convencional o arbitraria en términos descriptivos de donde ψ1 es una constante, que dependerá del módulo del mo-
precesión lunisolar y nutación. La nutación está definida como la mento angular, del momento solar medio, y de la oblicuidad de la
variación periódica de la posición del polo verdadero sobre su eclíptica. Como interpretamos que x cosec ε es el avance del po-
posición media. Por ello cuando se habla de nutación, con la lo celeste en longitud, e y es el incremento en la oblicuidad, reco-
misma base dinámica de efectos perturbativos con los que se ra- nocemos ψ1 como la contribución solar a la precesión lunisolar
zona la precesión, se consideran aquellos efectos que en su carác- (que es aproximadamente un tercio del total). Además se ha esta-
ter son periódicos y del orden del año. La teoría básica al respecto blecido la existencia de dos términos nutacionales, uno en longi-
es la de Woolard (1953), que toma la hipótesis de la Tierra como tud y otro en la oblicuidad. Como son causados por el Sol, cada
un sólido rígido, con simetría axial. uno debe tener y tiene un período de seis meses.
Consideremos el momento ejercido sobre la Tierra por el Sol en Podemos considerar efectos con una mayor precisión, y así hay
un instante determinado, teniendo de coordenadas las (α⊙, δ⊙). La otros términos de causa solar teniendo en cuenta la variación de la
magnitud de ese momento, para un modelo simple de una Tierra distancia Tierra-Sol por la órbita eclíptica, también con períodos
rígida, es proporcional a sin 2δ. Se representa por un vector de año (tomando en un primer orden). Además, de la combinación
perpendicular a la línea Tierra-Sol y al eje polar. Con ello, en co- con los anteriores, aparecen términos nutacionales de un año y
ordenadas rectangulares ecuatoriales es cuatro meses. Generalmente se tienen en cuenta términos de algún
orden de precisión mayor.
⎛ cos(α ⊕ − 90º ) ⎞ ⎛ sin α ⊕ cos δ ⊕ ⎞
r ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
k = k0 sin( 2δ ⊕ )⎜ sin(α ⊕ − 90º ) ⎟ = 2k0 sin δ ⊕ ⎜ − cos α ⊕ cos δ ⊕ ⎟
⎜ 0 ⎟ ⎜ 0 ⎟ Efectos nutacionales de origen lunar
⎝ ⎠ ⎝ ⎠
que podemos tomar también en coordenadas eclípticas como
La contribución lunar a la nutación es mayor y más complicada.
Aplicando el mismo argumento que con el Sol, e ignorando la
excentricidad, el momento producido en la Tierra es

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

⎛ cos I (1 − cos(2 L)) ⎞ porales en longitud y oblicuidad. El desplazamiento del polo ce-
r ⎜ ⎟ leste verdadero del polo medio, en longitud es ∆ψ y es ortogonal
k L = k L 0 sin I ⎜ − sin( 2 L) ⎟ al desplazamiento ∆ε. Son llamados nutación en longitud y en la
⎜ 0 ⎟
⎝ ⎠ oblicuidad, respectivamente. Corresponden a los términos {x co-
sec ε, y} en la notación anterior. La teoría contempla desarrollos
donde I es la inclinación del plano orbital lunar (sobre el ecua- en serie de la forma
dor), y L es la distancia angular desde el nodo (M, sobre el ecua-
dor; ver figura anterior). En este sistema de referencia ecuatorial ∆ψ = ∑ aijlm sin(iM '+ jM + kF + lD + mΩ)
para el efecto lunar, el eje x no está dirigido hacia γ , sino hacia el
nodo M. Del mismo modo, podemos intuir la presencia de térmi- ∆ε = ∑ bijlm cos(iM '+ jM + kF + lD + mΩ)
nos nutacionales de 14 días (la mitad del período lunar). Aunque
el momento lunar en módulo es casi el doble que el solar, en la donde los índices {i,j,k,l,m} son números enteros. Las cantida-
integración el factor (dL/dt)-1 es 12 veces menor, por lo que estos des {M’, M, F, D} son características de la órbita lunar: M’ es la
no son los términos más importantes. anomalía media lunar, M la anomalía media solar, F = LL - ΩL
es el argumento medio lunar desde el nodo, y D = LL - L⊙ la
Hemos comentado el efecto mensual, pero hay más. El nodo N
elongación lunar media desde el Sol. Todas cambian con el tiem-
de la órbita media lunar progresa sobre la eclíptica, completando
po, y en 1980 la teoría daba (para J2000,0)
una vuelta en 18,6 años. Esto significa que el nodo lunar M sobre
el ecuador (el eje x) oscila sobre el equinoccio con ese período, y ∆ψ = −17,1996"sin Ω − 1,3187"sin 2( F − D + Ω) −
la inclinación I alrededor del valor medio de ε (no mucho, porque − 0,2274"sin 2( F − Ω)
la orbital lunar casi está sobre la eclíptica. Este término cuasi-
precesional (por su duración) en el momento contiene pequeñas ∆ε = 9,2025" cos Ω + 0,5736" cos 2( F − D + Ω) +
variaciones en el módulo y en la dirección. Tenemos entonces + 0,0927" cos 2( F − Ω)

⎛ cos(γM ) ⎞ El coeficiente de ∆ε (de 9,2025”) suele ser referido como la


r kL0 ⎜ ⎟
kp = sin( 2 I )⎜ sin(γM ) ⎟ constante de nutación. Los coeficientes del desarrollo tienen pe-
2 ⎜ ⎟ queñas variaciones seculares en 15 de los 106 términos. Suele ser
⎝ 0 ⎠ conveniente separar los términos de largo período de los de corto,
siendo los primeros los que no dependen de la longitud media lu-
Con la relación de los senos, y aproximando
nar. Los términos de largo período tienen todos más de 90 días,
sin(γM ) sin I = sin Ω sin i → sin(γM ) ≈ i sin Ω cosec ε mientras que los de corto no más de 35. Los de corto período se
suelen notar con dψ y dε.
y también cos (γM) ≃ 1 . De otro lado
cos(γM ) cos ε = sin(γM ) cot Ω + sin ε cot I
Efecto de la nutación sobre las coordenadas ecuatoriales
y con los resultados que hemos ido estableciendo
sin( I − ε ) ≈ sin i cos Ω Analicemos por separado los efectos en longitud y oblicuidad.
La nutación en longitud suma un término periódico a la precesión
que en primer orden es I = ε + i cos Ω. Sustituimos todos estos lunisolar. La latitud eclíptica no se ve afectada, y la longitud
resultados y eclíptica verdadera excede su longitud media en una cantidad ∆ψ.
En las coordenadas ecuatoriales, de forma análoga a como se vio
⎛ sin ε cos ε + i cos Ω cos(2ε ) ⎞ con la precesión lunisolar, se cambia el factor y entonces
r ⎜ ⎟
k p = k L0 ⎜ i sin Ω cos ε ⎟
⎜ ⎟ dα = ∆ψ (cos ε + sin ε sin α tan δ )
⎝ 0 ⎠
dδ = ∆ψ sin ε cos α
Procedemos a integrar y sacar el desplazamiento del polo (rela-
tivo a una posición inicial en que Ω = 0) Por emplear los mismos razonamientos e hipótesis, se tiene la
misma precisión que en aquel caso. Para el desplazamiento en
⎡ −1 ⎤ oblicuidad, de la relación de transformación de coordenadas te-
⎛ dΩ ⎞ nemos
x cosec ε = ψ 2 ⎢t + 2i cot(2ε )⎜ ⎟ sin Ω⎥
⎢⎣ ⎝ dt ⎠ ⎥⎦
sin δ = sin β cos ε + cos β sin ε sin λ
−1
⎛ dΩ ⎞
y = −ψ 2 i ⎜ ⎟ cos Ω y diferenciando
⎝ dt ⎠
cos δ dδ = (cos β cos ε sin λ − sin β sin ε ) ∆ε = cos δ sin α∆ε
Aquí ψ2 es una constante escogida que representa el término

precesional en longitud. Podemos identificar la precesión lunar en
longitud y los términos nutacionales en longitud y oblicuidad, con dδ = ∆ε sin α
un período de 18,6 años. De hecho son los términos nutacionales
De forma similar, con la fórmula del coseno
más largos, diez veces más largos que los solares de seis meses
(que son los segundos en importancia). cos α cos δ = cos λ cos β →
sin α cos δ dα + cos α sin δ dδ = 0

Teoría actual de la IAU El resultado final por la nutación en oblicuidad es

⎧dα = − ∆ε cos α tan δ


Una nueva teoría de la nutación fue aceptada por la IAU en ⎨
⎩dδ = ∆ε sin α
1982, basada en un modelo más realista de Tierra no rígida y no
axialmente simétrica. Esta teoría contemplaba 106 términos tem-

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Mecánica celeste - Movimiento de los planos fundamentales

y también son fórmulas de ecuaciones en primer orden, suficien- Método matricial riguroso
temente aproximadas porque los ángulos nutacionales son peque-
ños. El efecto nutacional total es la suma de las dos contribucio-
nes. Hay una forma exacta de calcular la matriz de nutación conside-
rando coordenadas eclípticas. La transformación desde el polo
medio al verdadero implica el incremento de la longitud estelar en
∆ψ, y un incremento en la oblicuidad de la eclíptica en ∆ε. Para ŝ’
Método matricial aproximado se tiene, de modo riguroso
⎛ cos β cos(λ + ∆ψ ) ⎞
Por lo general suele ser más conveniente expresar los resultados r ⎜ ⎟
s ' = ⎜ − sin β sin(ε + ∆ε ) + cos β cos(ε + ∆ε ) sin(λ + ∆ψ ) ⎟
de forma vectorial, con coordenadas rectangulares. Si ŝ es el vec- ⎜ sin β cos(ε + ∆ε ) + cos β sin(ε + ∆ε ) sin(λ + ∆ψ ) ⎟
tor unitario de posición de una estrella, referido al sistema de ejes ⎝ ⎠
cartesiano definido por el polo medio, sea ŝ’ el mismo vector refe- Desarrollando cos (λ+∆ψ) y sin (λ+∆ψ) e identificando coor-
rido al ecuador y equinoccio verdaderos. Entonces denadas se tiene
⎛ − sin α cos δ ⎞ ⎛ − cos α sin δ ⎞ ⎛ x' ⎞ ⎛x⎞
r r r ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
ds = s '− s = dα ⎜ cos α cos δ ⎟ + dδ ⎜ − sin α sin δ ⎟ r ⎜ ⎟ r ⎜ ⎟
s ' = ⎜ y'⎟ = N s = N ⎜ y ⎟
⎜ 0 ⎟ ⎜ cos δ ⎟ ⎜ x' ⎟ ⎜x⎟
⎝ ⎠ ⎝ ⎠ ⎝ ⎠ ⎝ ⎠
y viendo las expresiones anteriores (aproximadas) se tiene y los elementos de la matriz N son
dx = −( y cos ε + z sin ε )∆ψ
P11 = cos ∆ψ
dy = x cos ε ∆ψ − z ∆ε
P12 = − cos ε sin ∆ψ
dz = x sin ε ∆ψ + y ∆ε
P13 = − sin ε sin ∆ψ
Este resultado se puede poner de forma matricial ŝ’ = N ŝ, sien- P21 = cos(ε + ∆ε ) sin ∆ψ
do N la matriz de rotación para nutación P22 = cos ε cos(ε + ∆ε ) cos ∆ψ + sin ε sin(ε + ∆ε )
⎛ 1 − ∆ψ cos ε −∆ψ sin ε ⎞ P23 = sin ε cos(ε + ∆ε ) cos ∆ψ − cos ε sin(ε + ∆ε )
⎜ ⎟
N = ⎜ ∆ψ cos ε 1 − ∆ε ⎟ P31 = sin(ε + ∆ε ) sin ∆ψ
⎜ ∆ψ sin ε ∆ε 1 ⎟ P32 = cos ε sin(ε + ∆ε ) cos ∆ψ − sin ε cos(ε + ∆ε )
⎝ ⎠
P33 = sin ε sin(ε + ∆ε ) cos ∆ψ + cos ε cos(ε + ∆ε )
Los efectos conjuntos de precesión y nutación se pueden combi-
nar del modo siguiente, primero precesión y luego nutación Con ella la precisión en su empleo sólo depende de los desarro-
r r r llos tomados en ∆ψ y ∆ε.
s ' = Rs0 = NPs0

Los elementos de esa matriz resultante R suelen venir tabulados.


El uso de matrices de rotación (que en sí no supone aproximación
ninguna) contrasta con la precisión de las fórmulas empleadas.

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Mecánica celeste - Movimientos propios

1 dr
vr = v sin θ =
10. Movimientos propios n dr
1 dθ
vT = v cosθ = r
n dr
estando las velocidades en km/s, el tiempo t en años, las distan-
En este tema se discute el movimiento de las estrellas respecto al cias r en km, los ángulos θ en radianes (ángulo entre el plano vi-
Sol y sus consecuencias observacionales, es decir los efectos apa- sual y la velocidad v), y n = 3,156·107 es el número de segundos
rentes por movimiento reales propios de las estrellas respecto al que hay en un año. El movimiento propio anual de una estrella
Sol. En el último apartado buscamos determinar el intervalo de está definido como su desplazamiento angular total en un año (dθ
referencia, que depende de la observación estadística de muchas /dt), en la esfera celeste, referido a un ecuador y equinoccio fijos.
estrellas. Se asume que el sistema de referencia a utilizar se centra Generalmente se mide en segundos de arco por año
en el baricentro del sistema solar, que es casi inercial. En particu- dθ
lar el objetivo es estudiar los movimientos de las estrellas indivi- µ (" / año) = cosec(1" )
duales cercanas, que son los que en la práctica pueden ser tratados dt
con una precisión aceptable. La distancia estelar puede expresarse en términos de su paralaje
π (dada en segundos de arco). La distancia en km es
a
r (km) = cosec(1" )
10.1 Conceptos generales π
siendo a la unidad astronómica en km (1,496·108). La velocidad
tangencial se puede poner
Cinemática estelar y movimiento propio anual
aµ µ
vT (km / s ) = = 4,74
nπ π
Supongamos que una estrella tiene una velocidad v respecto al
Sol (más exactamente, respecto al baricentro), y es observada en
una dirección ŝ.
Componentes ecuatoriales

El movimiento propio anual estelar µ puede resolverse en com-


ponentes de coordenadas ecuatoriales: en ascensión recta µα y de-
clinación µδ.

Por un criterio práctico o instrumental podemos separar dicha


velocidad en dos componentes: una radial que notamos como vr y
otra transversal vT
r
r r ⎧v = v ⋅ sˆ
v = vr sˆ + vT con ⎨ rr r
⎩vT = sˆ × (v × sˆ)
Si X representa la posición de una estrella en la esfera celeste en
En principio, la velocidad radial puede medirse por efecto Döp-
un instante t, y X’ su posición un intervalo de tiempo dt después,
pler del espectro estelar. El movimiento tangencial no se puede
será XX’ = µt. El ángulo PXX’, denotado por φ, es llamado ángu-
medir directamente. Su dirección o desplazamiento posicional
lo de posición del movimiento propio. Observando el dibujo, que-
aparente, conocido como movimiento propio, se puede conocer,
dan claras las siguientes relaciones
pero su magnitud sólo si se conoce su distancia al Sol. Medidas de
paralaje dan esta información para algunas estrellas (las más cer- 1 ⎫
canas), pero para la mayoría no se tienen efectos apreciables. El µα = µ sin φ sec δ ⎪
15 ⎬ → µ 2 = µα2 + µδ2
movimiento propio es un efecto secular que se evidencia en las
µδ = µ cos φ ⎪
mediciones con largos intervalos de tiempo. ⎭
La escala de variación temporal de la velocidad estelar es del Notar que no hemos usado la condición de constancia de la ve-
orden del período de una rotación galáctica (unos 2·108 años), por locidad, por lo que estas expresiones son siempre válidas.
lo que es una buena y realista aproximación el tomar la velocidad
estelar respecto al Sol como una constante. Empleando coordena-
das polares centradas en el Sol podemos poner

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Mecánica celeste - Movimientos propios

10.2 Cambios en el movimiento propio dµ 2nµ vr


=−
dt r
y sustituyendo r como medida paraláctica, la aceleración en
Cambios intrínsecos perspectiva es
dµ 2n
Hemos visto que las componentes del movimiento propio están = − vr µπ sin(1" ) = −0,422 vr µπ sin(1" )
dt a
definidas como las derivadas primeras de las coordenadas estela-
res, y por ello no son en realidad más que velocidades. Si quere- Reemplazando las derivadas de µ y φ nos queda
mos tener una descripción cinemática más completa, necesitare-
mos de más términos. Es como tomar un desarrollo en serie de dµα
= −0,422 vr µα π sin(1" ) + 2 µα µδ tan δ sin(1" )
Taylor y truncarlo en el primer orden. Esto es suficiente para mu- dt
chas estrellas, pero con las cercanas o con movimientos importan- dµδ
tes se hace necesario incluir los términos de segundo orden, que = −0,422 vr µδ π sin(1" ) − 225µα2 sin δ cos δ sin(1" )
dt
serán derivadas de µα y µδ
Estas variaciones se miden en segundos de arco por año, la para-
En la derivación se mantienen fijos el ecuador y el equinoccio,
laje π en segundos de arco, y vr en km/s. Estas derivadas se apli-
para que así los cambios en µ sólo se deban al movimiento estelar.
can cuando el movimiento propio es relativamente importante,
Tampoco se considera movimiento del sistema solar. A estos
como con las estrellas de la vecindad solar. Entonces la correc-
cambios se les refiere como cambios intrínsecos en las compo-
ción en las coordenadas por movimiento propio intrínseco es
nentes del movimiento propio. Tomamos así las derivadas de las
componentes que antes vimos ⎛ t dµα ⎞
α = α 0 + ⎜ µα + ⎟t
dµα 1 dµ 1 dφ ⎝ 2 dt ⎠
= sin φ sec δ + µ cos φ sec δ +
dt 15 dt 15 dt ⎛ t dµδ ⎞
δ = δ 0 + ⎜ µδ + ⎟t
1 dδ ⎝ 2 dt ⎠
+ µ sin φ sec δ tan δ
15 dt
dµδ dµ dφ Este desarrollo es lo suficientemente aproximado para todas las
= cos φ − µ sin φ estrellas en un intervalo del orden de cien años o menos. Sólo en
dt dt dt ciertos casos habría que incluir las segundas derivadas de µ.
Algunos de estos términos pueden ponerse en función de otros En este apartado se ha hecho uso de la hipótesis de que la velo-
que se conocen. Las derivadas de φ y δ están en unidades circula- cidad estelar respecto al Sol era constante (al calcular la velocidad
res coherentes (radianes), y por eso con la de δ se deberá tomar en perspectiva), lo cual permite una solución exacta para el des-
plazamiento estelar; comprobémoslo. Sea ŝ = (x,y,z) el vector uni-
dδ tario en la dirección de la estrella en un sistema cartesiano de co-
= µδ sin(1" )
dt ordenadas ecuatoriales. El movimiento propio se considera por un
vector µ donde
Retomando las expresiones originales de µα y µδ tenemos
⎛ cos α cos δ ⎞
dµα 1 dµ 1 dφ r r d ⎜ ⎟
= sin φ sec δ + µδ sec δ + µ = s& = ⎜ sin α cos δ ⎟
dt 15 dt 15 dt dt ⎜ ⎟
1 ⎝ sin δ ⎠
+ µα µδ tan δ sin(1" )
15 Las tres componentes de µ se pueden expresar en términos de µα
dµδ dµ dφ y µδ
= cos φ − 15µα cos δ
dt dt dt
µ x = −15µα sin α cos δ − µδ cos α sin δ
Para usar estas expresiones será necesario conocer el movimien-
µ y = 15µα cos α cos δ − µδ sin α sin δ
to propio (en sus componentes) y su ángulo de posición Φ. Para
éste último, volviendo a la figura del apartado anterior, como µ z = µδ cos δ
cos δ sin φ = cos δ ′ sin φ ′ La velocidad tangencial, y la velocidad total, son
encontramos que la cantidad cosδ·sinφ siempre se conserva, por aµ r a r
el movimiento estelar sobre el arco XX’. Entonces vT = v = vr sˆ + µ
nπ nπ
d Si r da la posición inicial de la estrella, t años después lo da r’
(cos δ sin φ ) = 0 →
dt r r
dφ dδ r ' = rsˆ + v nt
= tan φ tan δ = 15µα sin δ sin(1" )
dt dt y tomando r’ = k·ŝ’, donde k es una constante (= a·cosec (1”/π))
se tiene
La variación de µ es lo que se conoce como aceleración en
perspectiva. Sale diferenciando la ecuación de la velocidad tan- ⎛ πt ⎞ r
gencial (que ya vimos en coordenadas polares) sˆ' = sˆ⎜⎜1 + vr sin(1" ) ⎟⎟ + µ t sin(1" )
⎝ 4,74 ⎠
dθ 1 dr dθ r d 2θ
− v sin θ = + Como se ve, en el razonamiento se emplea la constancia de la
dt n dr dt n dt 2 velocidad respecto al Sol.
Empleando simplificaciones y notación ya vistas, se transforma
en

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Mecánica celeste - Movimientos propios

Cambios precesionales Se tiene que KPP’ ≃ 90°, y que P’PX = α. Aplicando la fórmula
del seno al triángulo PP’X
Hemos visto los cambios intrínsecos tomando un ecuador y sin(dφ ) cos δ ' = sin( n dt ) sin α
equinoccio fijos. Ahora también se considerarán los efectos pre-
cesionales. Las coordenadas de una estrella en una observación o Cuando dt tiende a cero
efemérides (tabla) están siempre referidas al ecuador y equinoccio

de una época, que no corresponde con la fecha de observación. Lo (" ) = n sin α sec δ sin(1" )
mismo pasa con las componentes del movimiento propio, con lo dt
que el problema se reduce en transformar las componentes de una
estando n en segundos de arco. Sustituyendo todo esto en las de-
época precesional a otra. El método más rápido y preciso es apli-
rivadas
car la matriz de rotación vista en el tema anterior, que representa
el efecto precesional; entonces dµα ⎛ µ ⎞
r r = n⎜ µα cos α tan δ + δ sin α sec2 δ ⎟ sin(1" )
µ = Pµ0 dt ⎝ 15 ⎠
dµδ
Las componentes de µ son las vistas antes (en coordenadas ecua- = −15 nµα sin α sin(1" )
dt
toriales), y que podemos poner como
Sólo hemos incluido la precesión lunisolar. Esto se justifica por-
xµ y − yµ x µz que la precesión planetaria afecta sólo al polo eclíptico K, no
µα = µδ =
15(1 − z 2 ) 1 − z2 afectando al polo celeste. Por eso no afecta a la declinación o al
ángulo de posición. Para un resultado total deben combinarse los
Este procedimiento, matemáticamente elegante, tiene el mismo cambios en el movimiento propio intrínsecos con los de precesión
problema explicado entonces de la larga resolución., a menos que (3.1 + 3.2). En el siguiente tema se trata la reducción de coorde-
empleemos sistemas numéricos con ordenadores. Dado que las nadas. La constante precesional n (≃ 20”) es mayor que el movi-
componentes del movimiento propio son cantidades pequeñas, y miento propio, y por eso el efecto precesional es el más evidente.
sus cambios precesionales son cantidades de segundo orden, se
puede sacrificar un poco de precisión y emplear las fórmulas
aproximadas, que pasamos a ver.
Velocidad radial baricéntrica y paralajes

Fórmulas aproximadas para cambios precesionales Respecto a la velocidad radial, al estar afectada de paralaje por
la posición del observador, debe distinguirse entre topocéntrica
(vt) , geocéntrica (vg) y baricéntrica (vb) . El módulo de la velo-
Consideremos solamente precesión lunisolar. Las expresiones de cidad radial se deduce por el efecto o desplazamiento Döppler en
las derivadas temporales de las componentes del movimiento pro- las líneas espectrales. Al comparar las frecuencias de las líneas
pio son válidas cualquiera que sea la causa. Por ello nos ha de espectrales con las de laboratorio se tiene
bastar interpretarlas adecuadamente para dar cabida a los efectos
precesionales. En este caso ν
1+ z =
ν0

=0
dt y así tenemos el valor del corrimiento o desplazamiento z. Dicho
corrimiento que medimos está referido a la velocidad topocéntrica
pues la precesión no afecta al movimiento propio total, sólo a su radial, que en la aproximación clásica (no relativista) del efecto
dirección. El cambio precesional del ángulo de posición φ es dφ = Döppler, es
PXP’ (ver figura).
vtr
z=
c
Por convención, las velocidades de recesión (alejamiento) son
positivas. Como se necesita tener la velocidad baricéntrica, debe-
mos corregirlas de paralaje. Sea ŝ el vector de posición geocéntri-
co de la estrella, v’ la velocidad del observador respecto al centro
terrestre, y v la del centro respecto al baricentro solar. Entonces
r
vgr = vtr + v '⋅sˆ
r
vbr = vgr + v ⋅ sˆ

Calculamos la velocidad geocéntrica radial geocéntrica vgr. La


velocidad v́ fue calculada en el estudio de la aberración, y valía
v' ( km / s ) = 0,465 cos φ '

́siendo φ’ la latitud geocéntrica del observador. Aplicando la fór-


mula del coseno al triángulo polo-estrella-este
Por precesión lunisolar el polo describe un arco PP’ alrededor
del polo eclíptico, y ese arco es v' sˆ = v' cos XE = −v' cos δ sin h
PP′ = ψ sin ε dt = n dt
donde (h,δ) las coordenadas horarias de la estrella. Con todo, la
velocidad radial geocéntrica es

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Mecánica celeste - Movimientos propios

vgr = vtr − 0,465 cos φ ' cos δ sin h

Las componentes ecuatoriales de la velocidad v de la Tierra res-


pecto al baricentro del sistema solar están tabuladas en los alma-
naques en (ua/día). Así

vbr = vgr + 1731,5( X& cos α cos δ + Y& sin α cos δ + Z& sin δ )

Podemos tomar otra expresión para las velocidades, en coorde-


nadas eclípticas. Como ya se vio, la velocidad terrestre se puede
resolver en dos velocidades, una transversal y otra paralela al eje
menor orbital, que puestas en términos de la constante de aberra-
ción son v0 = kc y v1 = ekc. Si tenemos la posición estelar en
coordenadas eclípticas

⎛ cos λ cos β ⎞
⎜ ⎟
ŝ = ⎜ sin λ cos β ⎟ Si λ = AE es la separación angular del ápex y la estrella, y λ0
⎜ sin β ⎟ para la época de referencia, entonces es µp = λ - λ0. Sea u la velo-
⎝ ⎠ cidad solar. Por relación triangular de senos se tiene
y si combinamos con la velocidad radial baricéntrica el resultado sin µ p sin λ0
es =
nµ r
v = v + 29,79 cos β sin(λ − λ ) + 0,50 cos β sin(λ − ω~ )
br gr ⊕
siendo n el número de segundos en un año y r la distancia (en el
La precisión de este formulación es sin embargo inferior a la instante t) del Sol a la estrella. Entonces
otra, porque no se ha distinguido entre el punto baricéntrico y

heliocéntrico (para la órbita terrestre). Sin embargo es útil para µp = sin λ0
muchos casos. El último término de la expresión es análogo al de 4,74
la aberración anual, casi constante e ignorable, como en la deter-
Al factor uπ /4,74 se le llama paralaje secular, y corresponde al
minación de variaciones de velocidades radiales estelares. No es
efecto de movimiento propio paraláctico máximo observable (a
así por ejemplo en la determinación de movimientos medios en
90° del ápex). De modo análogo al estudio hecho en el movimien-
dinámica galáctica, donde su omisión supone errores sistemáticos
to propio intrínseco, tomando desplazamientos en ascensión y de-
del orden de 0,5 km/s en latitud y longitud. También se ha em-
clinación se puede poner
pleado esta expresión para la determinación de posición de púlsa-
res, pues a lo largo del año la velocidad radial observada oscila µp 1 uπ
con una amplitud de 29,79 cos β (km/s). Pα = sin χ sec δ 0 = sin χ sin λ0 sec δ 0
15 15 4,74

Pδ = µ p cos χ = cos χ sin λ0
4,74
10.3 Movimiento propio paraláctico
Para situar el ápex, de coordenadas (A,D), se emplean las rela-
ciones de Bessel

Análisis del movimiento propio paraláctico de una estrella cos λ0 = sin D sin δ 0 + cos D cos δ 0 cos(α 0 − A)
sin λ sin χ = sin(α 0 − A) cos D
El movimiento propio paraláctico es el debido al movimiento − sin λ cos χ = sin D cos δ 0 − cos D sin δ 0 cos(α 0 − A)
del sistema solar en el seno de la galaxia. Así parece que el Sol se
Podemos deducir la velocidad radial paraláctica haciendo vr = -
dirige hacia un punto de la esfera celeste, el ápex, viniendo del
vucosλ.
punto opuesto o antiápex. En consecuencia, las estrellas más cer-
canas tienen un movimiento aparente de retraso hacia el antiápex.
La esfera celeste está centrada en el Sol. En un instante o época
t0 una estrella es vista en la posición E0, y tras un tiempo dt apare- El problema de la separación de movimientos. Paralajes estadísti-
ce desplazada a otra posición E, sin que tenga movimiento intrín- cas.
seco. Los puntos E, E0 y A (ápex) son coplanarios. La separación
anual entre E y E0 es el movimiento propio paraláctico. Los movimientos paralácticos no son fáciles de obtener, pues las
estrellas tienen movimientos intrínsecos que se superponen a los
mismos. Tampoco hay objetos sin movimiento propio paraláctico,
esto es, situados en el ápex o antiápex. Por ello debemos recurrir a
una solución estadística. Se define el sistema local de reposo
(LSR) como el sistema de referencia caracterizado por el movi-
miento promediado de las estrellas del entorno solar, hasta unos
100 pc. El movimiento solar queda referido al LSR, y hace que las
estrellas tengan un movimiento aparente de convergencia o diver-
gencia hacia los puntos de movimiento. Este es el movimiento
propio secular o paraláctico, mientras que el movimiento intrínse-
co respecto al LSR es el movimiento propio peculiar.
La mejor forma de trabajar con los movimientos paralácticos es
escogiendo un par de coordenadas adecuadas de forma que sólo

Página 60
Mecánica celeste - Movimientos propios

sea significativo el movimiento en una. Se define así un sistema • ζ es ortogonal a los anteriores (radial y hacia fuera de la
de coordenadas (ν,τ) sobre el plano de la esfera celeste de una es- bóveda celeste)
trella observada, de tal modo que el vector unitario ν está en la Supongamos que se tienen las componentes de la velocidad so-
dirección del movimiento paraláctico de la estrella, y τ perpendi- lar en la referencia cartesiana ecuatorial (X,Y,Z). En el sistema
cular y ortogonal al anterior. Según esto, el movimiento paralácti- particular de cada estrella se pondría como
co sólo está en la primera. Para el movimiento propio intrínseco
se tendría ⎛χ⎞ ⎛X⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ η ⎟ = G1 (−90º +δ ) G3 (α + 90º ) ⎜ Y ⎟
⎜ζ ⎟ ⎜Z ⎟
⎝ ⎠⊕ ⎝ ⎠
Para el movimiento paraláctico de las estrellas vimos
πχ
Pα cos δ = ( µα tot − µα pro ) cos δ =
4,74
πη
Pδ = µδ tot − µδ pro =
4,74

Podemos despejar el movimiento solar y tomar promedios de


forma que
N
4,74 µ
ξ = − X sin α + Y cos α = cos δ ∑ α = Kµ~α
π⊕ i N
η = − X cos α sin δ − Y sin α sin δ + Z cos δ = Kµ~δ
⎧⎪ν µ = µ cos(ϕ − χ ) = µα cos δ sin χ + µδ cos χ

⎪⎩τ µ = µ sin(ϕ − χ ) = µα cos δ cos χ − µδ sin χ siendo π⊙ la paralaje estadística. Notar que el promedio estadísti-
co de los movimientos peculiares (intrínsecos) es nulo (al suponer
Cuando se considera el movimiento propio total, combinando el aleatoriedad y simetría). Con esas ecuaciones se pueden tener las
de paralaje e intrínseco, la componente en τ sólo tiene propio. Con siguientes
gran número de estrellas podremos aplicar relaciones y sacar re-
sultados estadísticos. El método de las paralajes estadísticas sirve X ∑ sin 2 α + Y sin α cos α = − K ∑ µ~α sin α cos δ
para calcular distancias promedio a grupos de estrellas, como los
− X ∑ sin α cos α + Y ∑ cos 2 α = K ∑ µ~α cos α cos δ
cúmulos. Para la componente ν del movimiento total de una es-
trella X ∑ cos 2 α sin 2 δ + Y ∑ sin α cos α sin 2 δ − Z ∑ cos α sin δ cos δ =
π v⊕ = − K µ~ cos α sin δ
∑ δ
ν =νµ + sin λ
4,74
X ∑ sin α cos α sin δ + Y ∑ sin 2 α sin 2 δ − Z ∑ sin α sin δ cos δ =
2

Como suponemos que el movimiento peculiar de cada estrella = − K µ~ sin α sin δ


∑ δ
del cúmulo es aleatorio y simétrico, despejando y promediando se
tiene una distancia media − X ∑ cos α sin δ cos δ − Y ∑ sin α sin δ cos δ + Z ∑ cos 2 δ =
N = − K µ~ cos δ
∑ δ

4,74
∑ν i sin λi
π~ν = i
N
v⊕ y también se dispone de estas otras
∑ sin 2 λi
i ζ = v⊕ cos λ = ρ − ρ ' = X cos α cos δ + Y sin α cos δ + Z sin δ
pues la contribución propia total es nula, y con la otra compo- ↓
nente tendremos otro promedio X ∑ cos α cos δ + Y ∑ sin α cos α cos 2 δ + Z ∑ cos α sin δ cos δ =
2

N = ∑ ρ cos α cos δ
π v*
∑ τi
X ∑ sin α cos α cos 2 δ + Y ∑ sin 2 α cos 2 δ + Z ∑ sin α sin δ cos δ =
τ = → π~τ = 4,74 N
i
4,74 = ∑ ρ sin α cos δ
∑ vR −i + v⊕ cos λi
i
X ∑ cos α sin δ cos δ + Y ∑ sin α sin δ cos δ + Z ∑ sin 2 δ =
= ∑ ρ sin δ
Cálculo del movimiento solar
Se tiene así un sistema de ecuaciones que debe resolverse para
Pasamos a la formulación de la determinación del ápex solar, obtener la posición del ápex y la velocidad solar, que se calculan
con el método estadístico ya comentado. Dadas las coordenadas con
ecuatoriales (α,δ) de una estrella sea el triedro cartesiano de coor-
denadas (ξ,η,ζ) tal que:
• ξ está dirigido según el avance de la ascensión recta α
• η según el avance de la declinación δ

Página 61
Mecánica celeste - Movimientos propios

Y 4,74 µα cos δ = − X sin α + Y cos α


tan A =
K 4,74 rµδ = − X sin δ cos α − Y sin α sin δ + Z cos δ
Z ρ = X cos δ cos α + Y sin α cos δ + Z sin δ
tan D =
X2 +Y2
con
v⊕ = X 2 +Y2 + Z2
⎧ X = v cos D cos A
Los resultados encontrados en estudios de 1900,0 son: ⎪
⎨Y = v cos D sin A
• v⊙ = 19,7 km/s = 4,15 ua /año ⎪Z = v sin D

• posición en coordenadas ecuatoriales A = 271° , D = 30°
Entonces eliminando r
• en galácticas L = 56° , B = 22°
X m ∑ ai2 + Ym ∑ aibi = ∑ ai ci
Los resultados dependen de la muestra estelar escogida; así los X m ∑ aibi + Ym ∑ bi2 = ∑ bi ci
cálculos de:
• Yale emplean estrellas hasta la magnitud 8 o 8,5. Su velo- donde se ha empleado la notación
cidad solar = (10,2 , 15,1 , 7,4) km/s
ai = µα sin δ cos δ cos α − µδ sin α
• tipo básico, emplean estrellas cercanas, con pocas gigantes. bi = µα sin δ cos δ sin α + µδ cos α
Velocidad (9 , 12 , 7) km/s
ci = µα cos 2 δ
En la tabla siguiente se dan los resultados para el movimiento Xm = X
Z
solar según el tipo espectral de las estrellas escogidas
Ym = Y
Z
espectro V⊙(km/s) A(°) D(°) L(°) B(°) y se cumple que
B0 22 274 +28 56 +19 Ym
tan A =
A0 16 267 +23 48 +22 Xm
F0 16 267 +22 48 +21 Ym
sin A =
G0 20 272 +28 55 +18 X m2 + Ym2
K0 22 275 +32 61 +18
tan D = X m2 + Ym2
M0 25 278 +38 66 +19
ai X m + biYm = ci

Con pequeñas variaciones, el método descrito sirve también para


el cálculo de radiantes, vértices y velocidades de cúmulos. Las
ecuaciones a emplear en ese caso son

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Mecánica celeste - Reducción de coordenadas
entre instante considerado y época de referencia. Se considera por
defecto una época de paso, la J2000,0.
11. Reducción de coordenadas
1º - Corregir de movimiento propio desde Ts (estándar) a
T. Dependiendo del intervalo de tiempo se utilizará el método ri-
guroso o el aproximado. Tendremos así las coordenadas medias y
En los temas anteriores se han visto los tipos de coordenadas componentes del movimiento propio en T, pero referidas a Ts.
empleadas en Astronomía, y los factores que producen modifica-
ción de las mismas, como son el movimiento diurno, anual, re-
2º - Si Ts es distinto de J2000,0 corregiremos de precesión
fracción atmosférica, paralaje, aberración, movimiento de los pla-
general desde Ts a J2000,0. Utilizando la misma matriz de prece-
nos fundamentales (precesión y nutación) y movimiento propios.
sión general podemos corregir las componentes del movimiento
En este tema se trata del procedimiento a emplear para corregir
propio. Así se tienen las coordenadas medias en T referidas a la
las coordenadas dadas en una cierta época a otra distinta. Habrá
época J2000,0, corregidas de movimiento propio y precesión.
por tanto efectos de precesión + nutación y movimiento propio.
Es lo que se conoce por reducción de coordenadas.
3º - Corregir de paralaje y aberración usando las componen-
tes de R y dR/dt de la Tierra respecto al baricentro del sistema
solar, que se tabulan para cada día del año en las efemérides as-
11.1 Tipos de coordenadas tronómicas referidas a J2000,0. Así tendremos las coordenadas
aparentes (medias) en T referidas a J2000,0.
Como paso previo, hemos de verificar si las coordenadas catalo-
En Astronomía se emplea una nomenclatura concreta para cier- gadas incluyen los términos de excentricidad de la aberración, en
tos tipos de coordenadas: cuyo caso han de descorregirse. El método más rápido es tomar en
la corrección de aberración anual dR/dt - vE en lugar de R, don-
• Las coordenadas medias son baricéntricas, referidas al de vE viene dada para el caso B1950,0 por el vector (-0,000281 ,
ecuador y equinoccio medios de la fecha. Varían por prece- -0,000055 , -0,000024).
sión general y movimiento propio (no por nutación: me-
dios).
4º - Aplicar la corrección completa por precesión general y
• Las coordenadas verdaderas son baricéntricas, referidas al
nutación, desde J2000,0 a la fecha T , usando los elementos de la
ecuador y equinoccio verdaderos de la fecha. Son las coor-
matriz que se tabulan para cada día del año en las efemérides as-
denadas medias afectadas de nutación. Se emplean en con-
tronómicas. Se tienen así las coordenadas aparentes (verdaderas)
tadas ocasiones.
en T y referidas a T.
• Las coordenadas aparentes son geocéntricas, referidas al
ecuador y equinoccio verdaderos de la fecha. Se obtienen
de las coordenadas verdaderas corrigiendo de aberración y
paralaje anual. También se podría hablar de coordenadas
aparentes medias. Método B
• Las coordenadas observadas son topocéntricas, referidas al
ecuador y equinoccio verdaderos de la fecha. Se obtienen 1º - Corregir de movimiento propio desde Ts hasta la mitad
de las anteriores (las aparentes) corrigiendo de aberración del año trópico (T’) correspondiente al año civil de la fecha de-
diurna, paralaje geocéntrica y de refracción. seada, y obtener las componentes del movimiento propio en T’.
Se dispone así de las coordenadas medias en T’ referidas a Ts.

2º - Corregir de precesión general desde Ts a T’, tanto las


11.2 Procedimientos de cálculo
coordenadas como las componentes del movimiento propio. Se
consiguen de esta forma las coordenadas medias en T’ referidas a
T’.
Supongamos que tenemos las coordenadas medias (α,δ) de una
estrella, las componentes de su movimiento propio (µα , µδ) , la
3º - Corregir de nutación, movimiento propio, y precesión
paralaje (π) , y la velocidad radial (ρ) , todas ellas referidas a una
general, en la fracción de año trópico correspondiente, τ = T – T’,
cierta época, que por lo general será alguna estándar de las em-
utilizando por ejemplo los números de Bessel que se dan en las
pleadas en tabulaciones (B1900,0 , B1950,0 , J2000,0). A conti-
efemérides astronómicas
nuación se resumen dos posibles procedimientos para obtener las
coordenadas aparentes correspondientes a una fecha T, depen- ⎧∆α (τ ) = Aa + Bb + J tan 2 δ + µατ + E
diendo de las tablas de que se disponga. ⎪
⎪ 2
⎨∆δ (τ ) = Aa′ + Bb′ + Cc′ + Dd ′ + J ′ tan δ =

⎪⎩ = Aa′ + Bb′ + J ′ tan 2 δ + µδ τ
Método A
Los términos J y J’ son correcciones de segundo orden necesa-
Este es el procedimiento a emplear por defecto. Sigue los pasos rias en el caso de declinaciones altas. Con ello se tienen las coor-
lógicos para ir desde las coordenadas medias (baricéntricas) refe- denadas verdaderas en T referidas a T.
ridas a una época estándar (que es la empleada en los datos) a las
coordenadas aparentes (verdaderas) referidas al instante buscado.
4º - Por último, corregir de movimiento propio y de paralaje
La otra clave (además del tipo de las coordenadas) es la diferencia
anual en la fracción de año. Debe tenerse presente que el R de la

Página 63
Mecánica celeste - Reducción de coordenadas

Tierra en este caso ha de referirse al ecuador y equinoccio medio ⎛ x⎞ ⎛ x⎞ ⎛ cos δ cos α ⎞


de T’ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
y
⎜ ⎟ = P y
⎜ ⎟ = P ⎜ cos δ sin α ⎟ =
⎧ ⎜z⎟ ⎜z⎟ ⎜ sin δ ⎟
⎛ πY ⎞ ⎛ πX⎞ ⎝ ⎠ J 2000,0 ⎝ ⎠ B1950,0 ⎝ ⎠ B1950,0
⎪∆α (τ ) = 2 µα + Aa + Bb + ⎜ C − ⎟c + ⎜ D − ⎟d + E
⎨ ⎝ 15 ⎠ ⎝ 15 ⎠
⎛ − 0,4099642 ⎞
⎪∆δ (τ ) = 2 µ + Aa′ + Bb′ + (C − π Y )c′ + ( D − π X )d ′ ⎜ ⎟
⎩ δ = P⎜ 0,5635879 ⎟
⎜ 0,7171457 ⎟
⎝ ⎠ B1950,0

para obtener
11.3 Un ejemplo
α = 8h 27 m36,77 s
δ = 45º39′13,88′′
Como ejemplo, sea la estrella HD 71148. Calcular las coordena-
das aparentes para el 2 de Junio de 1990 a las 0h de tiempo de que son coordenadas medias para T referidas a J2000,0 .
efemérides. Se parte de las coordenadas medias B1950,0 publica-
das en los almanaques junto a sus movimientos propios. Como 3º - Aplicar las correcciones por paralaje y aberración. Con
paso previo se consultará el catálogo Beckar. las coordenadas baricéntricas de la Tierra para la fecha
x = 0,324086494
Datos: Para B1950,0 , α = 8h24m07,981s , δ = 45°49’23,88’’ , π
= 0,046’’ , µα = -0,0025s , µδ = -0,354’’ , v = 34 km/s. Matriz de y = −0,881263292
precesión + nutación tabulada (de la época hasta la fecha) z = −0,382141037

⎛ − 3,861 ⋅ 10−5 208864 ⋅ 10−8 90771 ⋅ 10−8 ⎞⎟ y las expresiones de la corrección por paralaje anual

R = ⎜ − 208862 ⋅ 10−8 − 4,587156 ⋅ 10−5 − 2829 ⋅ 10−8 ⎟ ⎧cos δ dα = π ( x sin α − y cos α )
⎜ ⎟
⎜ − 90776 ⋅ 10−8 2640 ⋅ 10−8 − 2,439 ⋅ 10− 6 ⎟ ⎨
⎝ ⎠ ⎩dδ = π ( x cos α sin δ + y sin α sin δ − z cos δ )
se obtiene α = 8h 27m 36,77s y δ = 45°39’13,88’’. Para corre-
Realización: gir por aberración, se tiene tabulado

x& = 1,6027152 ⋅ 10−2


1º - Se corrige de movimiento propio; de T0 = B1950,0 (JD u.as
y& = −5,098493 ⋅ 10−3
= 2433282,423) a T = 2-Jun-1990 (JD = 2448044,5), que es un −3 año
intervalo de 40,416 años julianos. Aplicamos corrección con va- z& = −2,210214 ⋅ 10
riaciones de segundo orden, para lo cual se tiene
y se aplican las fórmulas
dµα
= −0,422πρµα sin(1′′) + 28µα µδ tan δ sin(1′′) = 8,32 ⋅ 10−10 ⎧ sec δ −5
dt ⎪⎪dα = c ( y& cos α − x& sin α ) = −8,0601 ⋅ 10 rads
dµδ ⎨
= −0,422πρµδ sin(1′′) + 225µα2 sin δ cos δ sin(1′′) = −114 ⋅ 10−6 ⎪dδ = 1 ( z& cos δ − x& cos α sin δ − y& sin α sin δ ) = 4,76661 ⋅ 10−5
dt rads
⎩⎪ c

y entonces
con la velocidad de la luz c = 173,14 ua./día . Las coordenadas
⎛ ∆t dµα ⎞ así corregidas de aberración (aparentes) y referidas a la época es-
α = α 0 + ∆t ⎜ µα + ⎟ = 8h 24m7,88s tándar J2000,0 son
⎝ 2 dt ⎠
⎛ ∆t dµδ ⎞ α = 8h 27 m37,78s
δ = δ 0 + ∆t ⎜ µδ + ⎟ = 45º 49′09,57′′
⎝ 2 dt ⎠ δ = 45º39′04,15′′
que son datos para el 2 de Junio de 1990 referidos a B1950,0. 4º - Referir al ecuador y equinoccio verdaderos del 2-Jun-
1990. Para ello se emplea la matriz de precesión general+nutación
2º - Referir α y δ a la época estándar J2000,0. Para ello se tabulada
aplica la matriz de precesión general desde B1950,0 a J2000,0, ⎛ x⎞ ⎛ x⎞ ⎛ −0,4197812 ⎞
con los datos de que se dispone en el tema correspondiente ⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
y
⎜ ⎟ = R y
⎜ ⎟ = R ⎜ 0,5589453 ⎟
⎛ 0,9999256 − 0,0111823 − 4,85796 ⋅ 10−3 ⎞⎟ ⎜z⎟ ⎜ z⎟ ⎜ 0,715097 ⎟
⎜ ⎝ ⎠ 2 − Jun −1990 ⎝ ⎠ J 2000,0 ⎝ ⎠
R = ⎜ 0,0111823 0,9999374 − 2,7165 ⋅ 10−5 ⎟
⎜ ⎟
⎜ − 4,85796 ⋅ 10−3 − 2,71603 ⋅ 10−5 0,9999882 ⎟ obteniendo
⎝ ⎠
Aplicando a las coordenadas cartesianas ecuatoriales referidas a α = 8h 26m59,06 s
B1950,0 δ = 45º 40′56,96′′

Página 64
Mecánica celeste - Distancias
El segundo sería el de los indicadores fotométricos, basados en
la identificación de la luminosidad de ciertos objetos, a los que se
12. Distancias llaman candelas estándar. Este calificativo se refiere a objetos de
luminosidades conocidas y visibles a grandes distancias. Entre
estos procedimientos están las relaciones período-luminosidad de
las estrellas pulsantes (principalmente cefeidas), la identificación
de características en líneas espectrales, el método de los cúmulos
El conocimiento de las distancias en Astrofísica es fundamental, globulares, y las novas y supernovas.
pues permiten establecer la estructura tridimensional del Universo
y conocer luminosidades y masas. Dada la gran escala del campo Los indicadores se pueden ver afectados del error llamado pre-
de estudio que ofrece la Astrofísica, y nuestra imposibilidad de juicio de Malmquist, causado por la selección misma de la mues-
escoger distintos puntos de referencia, nos vemos obligados a re- tra, es decir, por la discriminación de los objetos intrínsecamente
currir a procedimientos más o menos indirectos que nos permitan más tenues. A las distancias que se quiera trabajar, nos vemos
estimar las distancias. A tales procedimientos o a las característi- obligados a emplear necesariamente los objetos más notables,
cas en que se basan, se les denomina indicadores de distancias. despreciando así factores de variabilidad o representatividad.
Sólo hay una forma directa de obtener medidas de las distancias,
basada en la paralaje trigonométrica. Fuera del exiguo rango que
este método nos ofrece, debemos emplear otros (todos los demás) Paralaje trigonométrica
de una forma indirecta. Hay diversos indicadores indirectos, con
distintos rangos de aplicación según sus características. Debido a
Se llama paralaje (en femenino) al efecto de variación posicional
su carácter indirecto y a sus limitaciones, nos vemos obligados
aparente producido por un efecto de desplazamiento relativo del
primero a emplear varios de ellos, encadenando unos con otros,
observador con respecto al objeto. La paralaje trigonométrica es el
según sus rangos de aplicación. En segundo lugar no queda más
ángulo bajo el cual se ve la distancia Tierra-Sol desde el objeto.
remedio que calibrarlos a unos con otros, llegando en último ex-
Dicho de otro modo, equivale a la amplitud angular resultante del
tremo a basarlos en la paralaje trigonométrica, que es el único di-
movimiento anual de la Tierra alrededor del Sol.
recto. Es por ello que se habla de una cadena de indicadores de
distancias o escala de distancias. Por desgracia no hay alternati- La distancia correspondiente a una paralaje de segundo de arco
va. es por definición un pársec (de segundo-paraláctico)1. Equivale a
3.1·1018 cm, o 3,26 años-luz, o 206.265 ua. Puede expresarse de
Esto supone una cierta diversidad de procedimientos, y lo más
forma analítica y directa la relación entre el ángulo (en segundos
importante, una interdependencia y acumulación de los errores.
de arco) y la distancia (en pársecs) como
Las inexactitudes de un indicador se acumulan para los indicado-
res que se calibran con él, que son los aplicados para mayores dis- 1
tancias. Si de hecho, la paralaje trigonométrica llega a trabajar con π ( s) =
d ( pc)
cierto orden de error, para las distancias galácticas llegan a un
25%, y para las extragalácticas más extremas son equiparables a Con la distancia también aumentan los errores; por ejemplo, pa-
la propia estimación de la distancia. ra π < 0"05 es mayor del 20%. Sirve hasta unos 100 pc, más allá
Según el rango de aplicación de los indicadores, es usual agru- el efecto es tan pequeño que no se consiguen mediciones. Su pre-
parlos en tres categorías. Se habla así de unos indicadores prima- cisión es fundamental como base de toda la escala de indicadores.
rios, a escala galáctica y basados en propiedades estelares; indica- El método de la paralaje trigonométrica tiene su origen en los
dores secundarios, referentes a propiedades locales de las ga- procedimientos de topografía, y tiene el mismo fundamento que la
laxias; y terciarios, empleados a escala cosmológica. visión estereoscópica. El primero en publicar la medición de una
paralaje estelar fue Friedrich Wilhelm Bessel (1784-1846) en
1838, para la estrella 61 Gygni (a 11 años-luz)2. El efecto paralác-
tico estelar o paralaje anual es continuo, describiendo una elipse
12.1 Indicadores primarios aparente, y se ha descrito en el apartado correspondiente.

Están basados en la observación de estrellas individuales. Sirven


para el ámbito de nuestra Galaxia o Grupo Local, por lo que son
llamados también indicadores locales. Se calibran con objetos
cercanos determinados por trigonometría y, de manera telescópi-
ca, se emplean los de bajo rango como base para los otros. Toda
la pirámide de los indicadores reposa sobre las frágiles bases de
una metodología que impone comparaciones en cadena, con la
consiguiente propagación de las imprecisiones de cada indicador
hacia todos los que de él dependen.
A una mayor escala asumen el atrevido postulado de la homo-
geneidad de la naturaleza atribuido a Hubble (sobre los valores de
las constantes y leyes en todo el Universo), lo que no tiene porqué
ser necesariamente exacto.
Dentro de los indicadores primarios puede hacerse una clasifica-
ción en dos grandes grupos, según su fundamento: de un lado los 1
Unidad introducida por Herbert Hall Turner (1861-1930).
indicadores dinámicos, basados en propiedades relacionadas con
2
el movimiento de los objetos, del observador o de ambos. En este Thomas Henderson (1798-1844) acabó antes sus trabajo sobre
grupo entraría la paralaje trigonométrica, la dinámica, el método α Cen, pero lo publicó más tarde, a su vuelta a Inglaterra desde
de los cúmulos y el del movimiento propio paraláctico. Sudáfrica. Friedrich Wilhelm Von Struve (1793-1864) estudiaba a
Vega (α Lyr) y publicó en 1840.

Página 65
Mecánica celeste - Distancias

La paralaje es el efecto que manifiesta la dependencia de las obser- de las relaciones masa-luminosidad, que debe hacerse mediante
vaciones con las posiciones relativas de objeto y observador. Lo que otro tipo de indicadores o con sistemas binarios cercanos y medi-
en la experiencia humana es usual, en Astronomía es el único método dos trigonométricamente. Con los sistemas menos usuales, de ma-
directo para medir distancias. La paralaje trigonométrica emplea el sas superiores a las 3 unidades solares, se puede proceder previa-
movimiento de la Tierra alrededor del Sol. Las variaciones de posición mente a identificar el tipo estelar, para partir de un mejor valor
se miden respecto a un fondo de "estrellas fijas", objetos muy lejanos inicial de la masa.
y no afectados por el mismo efecto que se quiere medir.

Método de los cúmulos


Una variante basada en el mismo principio es la paralaje ecuato-
rial, que aprovecha la "amplitud de miras" del diámetro terrestre.
Permite la estimación de distancias para las cercanías de la Tierra. En el método de los cúmulos abiertos o de las Híades, se consi-
La misma idea es la base que permitió a Eratóstenes estimar el dera el desplazamiento de las estrellas del cúmulo respecto al ob-
tamaño de la Tierra, observando la posición del Sol en distintos servador, así como su tamaño aparente. El principio es que todo el
lugares. En un futuro quizás puedan alargarse sus prestaciones cúmulo de estrellas, sobre todo los jóvenes, participa de un mismo
empleando un observatorio ligado a otro planeta o un instrumento movimiento principal, lo que a su vez es indicativo de un origen
extraplanetario. común. Si se conoce el punto de convergencia del cúmulo y su
velocidad radial, se puede deducir su velocidad tangencial, que
comparada con el movimiento propio da la distancia. Como la
dirección espacial del cúmulo no es fácil de saber, se procede de
Paralaje espectroscópica
otra forma. Supongamos una región circular definida por algunas
de las estrellas del cúmulo. Debido a su movimiento, es cuestión
La paralaje espectroscópica se basa en la comparación de la de tiempo apreciar alguna variación en el tamaño aparente del
magnitud aparente de una estrella con la absoluta en un diagrama círculo. Dado que se asume que el cúmulo conserva en todo mo-
HR. Partiendo de la relación entre magnitudes aparente y absoluta mento su identidad, el tamaño real del mismo no cambia, tamaño
que identificamos con el anterior circulo.
m − M = 5 − 5 log d

es fácil ver que la distancia (en pársecs) puede calcularse si se


conocen ambas. De hecho, a la cantidad m-M se le llama módulo
de distancia. La única dificultad consiste en determinar con preci-
sión la magnitud absoluta. Para ello se recurre a la identificación
de la estrella considerada, a través de un diagrama HR: conocida
su clase y temperatura efectiva se dispondría de su luminosidad.
Para ello se necesita un diagrama HR bien calibrado. Dicho dia-
grama descansa sobre el conocimiento de la distancia a algunas
estrellas, obtenidas por paralaje trigonométrica. El problema es En un momento dado se tiene R = d·sinθ ≈ dθ, y en otro poste-
que las estrellas accesibles de la vecindad solar no son todo lo rior R = (d+vt)·sinθ́ ≈ (d+vt)θ́ . Es fácil ver entonces que la dis-
representativas que se necesita. En su ayuda acude nuestro cono- tancia se puede expresar como
cimiento de las estrellas a través de los modelos de que dispone-
mos de ellas, modelos que dan también su luminosidad (pero que vtθ vθ
d= =
en última instancia comprobamos y mejoramos por paralaje). Por ∆θ θ&
ello es muy importante la exactitud de los modelos estelares. Los
errores típicos son del 20%. donde v es la velocidad radial (medible por efecto Döppler), θ es
el ángulo de anchura visual.

Paralaje dinámica
Movimientos propios paralácticos

La paralaje dinámica se basa en el cálculo de la tercera ley de


Kepler para sistemas binarios. Con dichos sistemas se cumple Procedimiento ideado por Harlow Shapley que le permitió cal-
cular la distancia a las cefeidas. El método del movimiento propio
3 galáctico se basa en que el desplazamiento aparente en el cielo
⎛ a (′′) ⎞
⎜⎜ ⎟⎟ = P 2 ( M1 + M 2 ) debido a su velocidad con respecto al Sol se debe a la rotación
⎝ π (′′) ⎠ galáctica. Se toma una muestra estelar y se miden sus movimien-
tos propios y velocidades radiales. Se asume que tienen todas una
Si se conoce el período, la separación angular y las masas, se
misma velocidad media, como las cercanas al Sol. A partir de los
puede calcular la distancia. Los dos primeros datos son propor-
desplazamientos se dispone de una distancia media. Es un proce-
cionados por las observaciones. Las masas pueden ser estimadas a
dimiento poco fiable, con desplazamientos reducidos, por lo que
través de la identificación de las componentes estelares, si bien lo
las mediciones deben ser muy precisas y es necesario repetirlas
usual es emplear una iteración. La fórmula anterior depende poco
con varias decenas de años de intervalo.
de las variaciones de la masa, y la aplastante mayoría de las estre-
llas visibles tienen masas entre 0,3 y 3 veces la solar. Esto signifi-
ca que tomar masas iguales a la solar da la distancia con un mar-
gen de error de no más del 40%. Con la distancia así calculada se Propiedades espectrales
calculan las magnitudes absolutas de las dos estrellas, mediante
una relación masa-luminosidad se tiene una mejor estimación de
La luminosidad es un factor que influye en las condiciones ter-
las masas, y se vuelve a calcular así la distancia, repitiendo el re-
modinámicas de las regiones estelares formadoras del espectro
sultado hasta conseguir la convergencia apetecida. Un inconve-
observado. Algunas estrellas evidencian ciertas propiedades en
niente: aparece una nueva dependencia, la necesaria calibración

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Mecánica celeste - Distancias

sus espectros que están relacionadas con su brillo. Por ejemplo las lo) son más viejas de la población II y casi 6 veces más tenues a
supergigantes de los tipos A o B presentan propiedades espectra- igualdad de período. Actualmente, la relación entre período y lu-
les relacionadas con su luminosidad, lo que permite identificarlas minosidad se considera la misma para las cefeidas de los cúmulos
con cierta precisión. abiertos de la Vía Láctea y para las variables de las galaxias veci-
El efecto Wilson-Bacu se debe a la presencia de una cierta re- nas, y se las denomina cefeidas de disco. Se emplean hasta una
gión atmosférica en estrellas de tipos avanzados. Consiste en la distancia de 5·106 pc = 20·106 al (más con el HST), pero como
aparición de un pico central de emisión en las líneas de absorción estrella típica de población joven aparecen asociadas a polvo, y su
relacionado con la magnitud absoluta (o luminosidad). En concre- brillo depende de la composición química, que varía de una ga-
to en las líneas H y K del CaII y las del Mg (2800 Å). laxia a otra (lo que no ocurre con las de los cúmulos globulares).
Por ejemplo, para cefeidas magallánicas está la relación:

M bol = −2,25 log P − 1,5


Cúmulos globulares
M vis = −2,8 log P − 1,43

En el llamado método de superposición de cúmulos globulares, Otros tipos de variables empleadas en la estimación de distancia
se emplea el principio de que son unos objetos muy semejantes, son las variables de largo período. Tiene la ventaja de que emiten
con pequeñas variaciones en cuanto a su luminosidad. Bajo la su- fuertemente en el infrarrojo, pudiendo estudiarse en regiones con
posición de que tienen las mismas luminosidades que los de nues- gran extinción, pero el inconveniente de que son menos regulares
tra galaxia, podemos atribuir sus diferencias de brillo a la distan- que las cefeidas.
cia, y calcular ésta sin más que emplear la relación M - m = 5 -
5·log d - A (notar que se incluye efecto de la absorción). La dis-
tancia a los cúmulos de referencia se calcula como hizo Shapley, Novas y supernovas
con variables cefeidas (de población II, RR Lyr).

Las novas son variables explosivas que en el máximo de luz


Relación período-luminosidad pueden alcanzar las 106 L⊙. Muy regulares en su decaimiento,
visibles a largas distancias, y se presentan en todo tipo de ga-
laxias, con magnitudes absolutas entre -6,7 y -8,2, resultan visi-
Genéricamente conocido como método de las cefeidas. El méto- bles hasta a 20 Mpc. El margen de error es del 20%, y la relación
do de las variables supone conocida la relación período- se ha establecido a partir de las novas observadas en M31, en la
luminosidad de ciertas familias de estrellas variables, como son que estallan alrededor de 30 al año.
las cefeidas, RR Lyrae o W Virginis. Estas estrellas se caracteri- Las supernovas son variables catastróficas que se ven a grandes
zan por tener períodos de variabilidad dados por su brillo intrínse- distancias que se estiman del estudio de su curva de luz, que es
co (o su masa, según se prefiera). Responden al patrón general de más amplia, lenta y luminosa (-16 a -20) que las de las novas, pe-
que a mayor período mayor masa y luminosidad (mayor inercia). ro también son más raras. La luminosidad en el máximo es de 109
En 1912 Henrietta Leavitt descubrió una relación muy precisa L⊙. Se utilizan hasta distancias de 109 pc, con errores del 25%.
entre período y luminosidad de ciertas estrellas, según la cual las
más luminosas tienen mayor período. Sobre la base de esta rela-
ción, el conocimiento de la distancia de una sola cefeida (y por
tanto de su magnitud absoluta) permitiría el cálculo de todas las 12.2 Indicadores secundarios
semejantes a ella. En la época sólo se empleaba el método de la
paralaje trigonométrica, y el problema quedó en suspenso, hasta
que fue resuelto por Shapley, empleando el método de los movi-
mientos propios paralácticos. No sólo era importante el conoci- Los indicadores secundarios o intermedios se basan en las pro-
miento de la relación descubierta por Leavitt, sino que también piedades locales de las galaxias, y con ellos se calculan distancias
era conveniente que las estrellas pulsantes fueran muy luminosas, a otras galaxias. No por ello son necesariamente de un orden su-
para poder distinguirlas a la mayor distancia posible. Las cefeidas perior a los primarios, la diferencia se debe al objeto de estudio.
son entre 500 y 10.000 veces más luminosas que el Sol. Mediante Si bien la tendencia de una mayor amplitud de miras y distancias
las cefeidas se establecieron las distancias a los cúmulos globula- por tratar con galaxias, se complementan con algunos fotométri-
res (contienen cefeidas) de nuestra galaxia, lo que permitió a Sha- cos: cefeidas, novas y supernovas.
pley revelar nuestra posición excéntrica en la misma, y a Hubble De forma general se expresan a través de una relación de tipo
estimar una distancia para la galaxia de Andrómeda. Debe hacerse analítico, de la forma M = a·log(x) + b, donde x es un valor re-
notar que hay varias familias de estrellas pulsantes con relaciones lacionado con el parámetro de cada método en particular. Puede
período-luminosidad distintas. ser:
Las RR Lyrae son estrellas de edad avanzada que se encuentran • la velocidad máxima de la curva de rotación en galaxias
en una fase de inestabilidad, en las cuales la luminosidad varía con disco (método del mismo nombre)
rápidamente, cumpliendo una oscilación en menos de un día. En
• una potencia de la velocidad de dispersión de elípticas (mé-
cambio su luminosidad media es constante (unas 50 veces mayor
todo de Faber-Jackson)
que la del Sol) o ligeramente dependiente de la composición. Es-
tas candelas estándar están bien caracterizadas por su curva de • la anchura de la línea de 21 cm
luz, cuyo desarrollo las distingue bien de los otros tipos de estre- • el parámetro λc, definido como λc = (Lc+t)/10, donde Lc es
llas variables. Son típicas variables o cefeidas de los cúmulos glo- la luminosidad corregida y t el tipo morfológico (de -6 a
bulares, como las empleadas por Shapley. Con las actuales tecno- 11 según Vaucouleurs).
logías es posible descubrirlas y observarlas hasta en los confines
del Grupo Local (-1.5·106 pc).
Como ejemplo, una relación ya calibrada es la de Tully-Fisher,
Las cefeidas son estrellas pulsantes jóvenes de la población I,
que demuestra la relación de proporcionalidad entre la luminosi-
mientras que las W Virginis (llamadas también variables de cúmu-

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dad total de una galaxia espiral y la velocidad de rotación máxima como los valores cz (de desplazamiento al rojo) que no dan por
observada (según la línea de 21 cm del hidrógeno neutro) sobreentendida ni la métrica ni la constante.
log ∆v 21 = −0,0780 M IR + 0,820 ± 0,017 La ley de Hubble es la causa de las teorías de expansión del
Universo, y de hecho abrió las puertas a la cosmología moderna.
log ∆v 21 = −0,08M bol + 0,88 ± 0,005 Si las galaxias se están alejando, ello significa que en el pasado
debieron estar más próximas, y por consiguiente el Universo era
Otros métodos son de superposición: se guían otorgando unos más denso y pequeño. De otro lado, como nuestra galaxia no ocu-
tamaños o luminosidades dadas a galaxias o partes de ellas: pa un lugar preferente, la recesión no debe ser un fenómeno local,
• el tamaño de ciertas galaxias (Sidney van den Bergh, para sino que afecta a toda la estructura del Universo, como una dilata-
las Sc hasta 200 Mpc, o las D peculiares) ción del espacio-tiempo. Por ello se deduce que H0 no tiene por-
• de los cúmulos que ser una constante (con el tiempo el Universo cambia), y su
valor está relacionado (de forma inversamente proporcional) a la
• de las regiones gigantes HII (tienen una luminosidad prácti- edad del Universo.
camente igual)
La ley de Hubble no se puede utilizar para distancias inferiores a
• o por el tamaño de los anillos de las barradas. 5·107 pc, pues por debajo de este orden las galaxias que conoce-
Un curioso método es el de la técnica de granulación estelar. mos están sometidas a fuertes vínculos gravitatorios que compen-
Cuanto más lejana es una galaxia, más lisa y homogénea aparece san e invierten el natural efecto de separación de unas de otras.
su imagen, a igualdad de otras condiciones como tipo o tamaño. Recalcamos que su uso implica aceptar los desplazamientos al
Calibrando dicho efecto, se ha conseguido la distribución tridi- rojo como cosmológicos, por la expansión del Universo, lo que en
mensional de algunos cúmulos de galaxias. Podría relacionarse el caso de algunos objetos no está muy claro. Deben tenerse pues
con los indicadores de tipo analítico (a través de ciertos algorit- en cuenta los movimientos propios; en la observación hay que
mos de los instrumentos). corregir de los movimientos de la Tierra, del Sol y de la galaxia
respecto del fondo de microondas.
La constante de Hubble debe ser determinada empíricamente.
Como no funciona en el interior de la Vía Láctea ni en las cerca-
12.3 Indicadores terciarios nías, por los pequeños valores de recesión frente a los movimien-
tos peculiares, debe engancharse o calibrarse con otros procedi-
mientos: los indicadores secundarios. Se han examinado diversos
procedimientos, y para valores elevados de la velocidad (los más
Con los indicadores terciarios o globales se calculan las distan-
importantes) se encuentra una molesta y casi insalvable dispersión
cias a los objetos más lejanos. Dos rasgos caracterizan a las dis-
de los puntos. Los problemas que afectan su estimación son mu-
tancias de esta escala: la dependencia con la geometría del Uni-
chos: los errores acumulados, ignorar las velocidades peculiares,
verso, y el efecto de expansión cosmológico. El método estrella es
absorción del polvo y materias no controladas, efectos de selec-
ley de Hubble, que establece una proporcionalidad directa entre
ción, distintas condiciones (homogeneidad, metalicidades, objetos
distancia y velocidad de recesión cosmológica
idénticos), y el riesgo de la cadena (si uno va mal, todos los suce-
v = cz = H 0 d sivos también). Es por ello que H0, y con ella todas las distancias
extragalácticas fuera de nuestro Grupo y Supercúmulo locales, se
Dicha velocidad se determina a partir del desplazamiento al rojo conocen con un margen de error de casi el 50%. Se admiten valo-
de líneas espectrales, que para valores de velocidades no relativis- res entre 42 y 100 km/s·Mpc y suele tomarse normalizada como h
tas puede expresarse a través de la relación = H0/100.
∆λ v Hay procedimientos alternativos, como el del retardo de la va-
z= = riabilidad en los cuásares dobles tomados como son casos de len-
λ c tes gravitatorias. Por este método se ha obtenido H0 = 77 ±5
Si el desplazamiento de las líneas espectrales es muy grande, lo km/s.
que ocurre con las galaxias, para determinar la velocidad de las
galaxias es necesario aplicar el efecto Döppler relativista

c+v
z= −1
c-v

La ley de Hubble es una ley experimental, y en principio basta-


ría con determinar el valor de la constante de proporcionalidad, la
constante de Hubble H0, lo cual no es fácil. Sin embargo, los es-
tudios teóricos de cosmología infieren que la constante no es tal
(aunque se acepte en cualquier caso esa denominación), y la rela-
ción de proporcionalidad depende de un parámetros como el
tiempo y/o grado de evolución del Universo. Los objetos más le-
janos, que son los que definirían mejor su valor, se encuentran a
distancias comparables a la edad del Universo, por lo que no hay
forma de sortear este factor. Además de su desconocimiento, la Principales métodos para las distintas secuencias de distancias, que
cosmología indica que la distancia depende de la métrica que se se indican en escala logarítmica.
considere. Por ello se suelen emplear sinónimos de la distancia

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