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Pensamiento Económico

Rodrigo Luna
6to “D”
23/05/2019
Ensayo

La revolución industrial y los medios de comunicación

La humanidad ha tenido hitos históricos que han marcado el camino por el que iban a transitar
las sociedades de todo el planeta. Estos caminos condujeron a la conformación actual del
sistema mundo globalizado e interconectado. El hecho histórico que más marcó las actuales
sociedades, tanto del centro como de la periferia, fue la revolución industrial debido al
cambio de modo de producción y por ende de modos de interpretar el trabajo y la realidad en
general.

Originada en Inglaterra en el siglo XVII. La máquina de vapor supuso una reducción de


costes y de tiempo en la producción, lo cual significaba, en primer lugar, aumento en las
ganancias y, en segundo lugar, un aumento de producción que devendría en la masificación
justamente permitiendo un mercado internacional, y ya no solo limitado a mercados
locales.

La máquina de vapor seria desarrollada de tal manera que generaría un proceso de


industrialización, primero en Europa y posteriormente en todo el mundo. Este proceso trajo
consigo grandes trasformaciones, una de estas es la masificación de la producción. Esto
permitió crear mercancías suficientes para empezar a comercializárselas de manera
internacional, es así que el capitalismo se impone como un modo de producción mundial, a
diferencia de los modos de producción anteriores. Ahora las economías estaban ligadas.
(Zunkel & Paz, 1970)

La configuración que se originó a partir de esto fue la descrita por Prebisch de centros-
periferias, en donde los centros estaban generando una acumulación originaria derivada de
la colonización y con esto la implementación de relaciones capitalistas y la trasformación de
la esfera económica, científica y social. El modo de producir en el centro se configuró en el
modelo base para las relaciones económicas modernas; los trabajadores obtenían libertad, en
el sentido de poder vender su mano de obra a quien quisiese para obtener un salario (fuerza
de trabajo), y el avance técnico permite la adopción de medios de producción que conforman
el modo de producir moderno.

Sin embargo, la industrialización también trajo consigo problemas, problemas que ya se


identifican con la modernidad. Estos problemas se derivan del movimiento de la población
del campo a la ciudad, es decir, a los centros industriales. La problemática surge cuando la
población recién llegada del campo no puede entrar en la economía de la ciudad, es en este
momento cuando esta población es forzada a la mendicidad y a la prostitución como medio
de subsistencia.

La industrialización también pone en la palestra pública la cuestión tecnológica, haciendo


que el imaginario de tecnología se relacione con el desarrollo de la vida en la sociedad.
Avances como la radio y el cine apoyaran esta visión.

En América Latina el capitalismo llegará después, en el momento de industrialización


europea América Latina estará regida por relaciones de producción precapitalistas. La
industrialización no había llegado a esta región del mundo por una sencilla razón: la
desacumulación originaria. Desacumulación caracterizada por la explotación de los recursos
latinoamericanos y exportados a Europa produciendo así una salida de riqueza que se
convertirá en el capital europeo necesario para implementar la industrialización en las
sociedades europeas. Esta relación de intercambio desigual será el factor que marque las
futuras relaciones de estas economías, produciendo así la configuración de centro-periferia,
poniendo a Europa en el centro y a américa latina en la periferia.

La industrialización en América Latina querrá hacerse presente recién en el siglo XIX cuando
la región latinoamericana empiece su propio proceso de acumulación por medio de las
exportaciones de materias primas, estas exportaciones se caracterizarán por ser exportaciones
de productos únicos en cada país, en el caso de Ecuador será en un primer momento el cacao,
después el banano y posteriormente será el petróleo. Este tipo de exportación estará presente
en todos los países de Latinoamérica.

Todo este proceso está inscrito en lo que se denomina modernidad, el avance tecnológico
pone en el centro de atención al conocimiento y esto conlleva a la razón a ser el prisma por
el que se mirará la realidad. La modernidad trajo consigo el pensamiento económico
latinoamericano, el cual fue liderado por Prebisch. Este pensamiento se caracterizó por
analizar las relaciones económicas de Latinoamérica como bloque y sus opciones para
implementar el desarrollo a nivel regional. Las conclusiones de los distintos debates con
respecto a este tema fue que América Latina se tenía que industrializar, esto debido a que se
concluyó que la región debía estar al nivel de competitividad de las grandes economías, los
centros. Este concepto de competitividad se introduce en el pensamiento económico a partir
del establecimiento del neoliberalismo.

El neoliberalismo consistió en la liberalización de la economía, es decir que el estado no


controle o influya de ningún mercado, esto basado en la creencia de que el mercado se podía
autorregular. Esto conllevo al establecimiento de políticas a favor de las empresas y al
establecimiento de entidades como el FMI y el Banco Internacional, que será las entidades
que más influyan en las políticas de los países hasta la actualidad.

Como ya hemos podido ver, la economía será el eje motor de la modernidad. La idea del
progreso será el norte de las políticas de todos los países. Esta idea pasa a ser incorporada
por las sociedades gracias a la industria cultural creada a partir de la masificación de los
medios de comunicación. La industria cultural empieza a moldear ciertos imaginarios
sociales. Estados Unidos, gracias a su poder económico originado en la segunda guerra
mundial, utiliza su aparataje mediático para imponer nuevas formas culturales. Entra en juego
la globalización y el establecimiento del consumismo como forma de vida.

Todo esto da pie a que la cultura empiece a tener más importancia que los aspectos
económicos en cuanto a formas de construir sociedades. Este hecho marca el paso a la
posmodernidad, aparecerán varios autores hablando sobre el rol de la cultura en torno a la
construcción de las sociedades y se evidenciará que la cultura dicta hábitos sociales, los
cuales influyen y configuran la economía y los ritmos de vida.

Una característica importante de la iniciada posmodernidad es la virtualización entendida


como el “cambio en los modos de significación” impulsada por los avances tecnológicos que
implican una nueva manera de relacionarse e interpretar la realidad. Y es en este punto donde
surge una nueva manera de dictar los modelos culturales: la palabra hablada y la imagen
serán las encargadas de las nuevas formas de diseñar estos modelos, gracias al creciente
alcance de los medios de comunicación y a la industria cultural.

La cultura en Latinoamérica va a ser influenciada y moldeada por las industrias culturales, la


de Estados Unidos principalmente. Es en este contexto en donde los medios de comunicación
juegan un papel importantísimo en la construcción de las sociedades. Pasan a ser
herramientas que permiten la reproducción de modelos culturales, herramientas que serán
usadas y beneficiarán a las grandes industrias, lo que devendrá en un mayor interés en el
desarrollo de nuevas tecnologías de comunicación, en el estudio del funcionamiento de
estos medios de comunicación, y en implementar un mayor alcance de estos mismos
medios.

Es así que aparecerán varios autores estudiando la cultura, y el papel de los medios de
comunicación en la construcción de está. Se empieza a definir a los medios como
“dispositivos tecnológicos de producción – reproducción de mensajes asociados a
determinadas condiciones de producción y a determinadas prácticas de recepción de
mensajes”. Y también se añade a esto que los fenómenos que determinan la comunicación
mediática son: “la rápida evolución de la tecnología y los cambios en la demanda”. Sin
embargo, un factor importante a tomar en cuenta cuando se estudian el rol de los medios es
la producción de nuevos modos de significación, es decir, la virtualización, ya que la
virtualización fue el resultado del avance tecnológico de los medios de comunicación
mientras que los avances tecnológicos fueron impulsados por una necesidad como resultado
de la creciente virtualización. A este desarrollo en conjunto Cuadra lo llamará “la ciudad
virtual”.

Esta ciudad virtual será, en la posmodernidad, la que diseñe los modelos culturales de
Latinoamérica mediante los medios de comunicación, creando así nuevas identidades. En
este contexto aparecerá un nuevo lenguaje político: la publicidad.

Con respecto al rol de la publicidad en este nuevo escenario, Cuadra examina el texto de
Dominique Quessada en donde se señala que la publicidad es el discurso de la sociedad
posmoderna. Discurso posible debido a la apropiación que hace la sociedad de esta
publicidad. Esto produce que la publicidad se encargue de las necesidades de la sociedad,
reemplazando a la política tradicional.

En la actualidad el modelo cultural diseñado por los mass media ha sido el consumista,
modelo que no implica que todos sean consumistas, más bien significa que el consumo nos
afecta a todos. En este sentido, Latinoamérica no ha escapado de este modelo; sin embargo,
el surgimiento de una nueva sociedad posmoderna basada en las comunicaciones hace
posible la pluralidad de visiones.

De todo este análisis podemos deducir que la revolución industrial posibilitó el


establecimiento del capitalismo, modo de producción que da como resultado el consumismo.
Esta configuración no podría sostenerse sin la intervención de los medios de comunicación
y de la publicidad que entra en la cotidianidad de toda la sociedad y marca ritmos de vida
desde las industrias. Los medios de comunicación son, bajo esta perspectiva, los facilitadores
para un establecimiento de modo de vida, en la actualidad el consumista, sin embargo, los
avances en comunicación abren nuevas perspectivas que en la actualidad están
empezando a cobrar fuerza y que en el futuro puede significar otro modo de interpretar la
realidad.
Bibliografía:
Barón, D. F. (2012). Pensamiento económico en América Latina (1950-2010).
Antecedentes y perspectivas. trabajo de investigación desarrollado por el autor para obtener
el título de Economista en la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, 37-72.
Cuadra, Á. (2003). América Latina: de la ciudad letrada a la ciudad virtual. Los procesos de
virtualización en las nuevas sociedades de consumo. En Á. Cuadra, De la ciudad letrada a
la ciudad virtual (págs. 96- 105). Santiago de Chile: Manuscrito Inédito.
Cueva, A. (1977). Las estructuras precapitalistas, antesala del subdesarrollo. En A. Cueva,
El desarrollo del capitalismo en América Latina (págs. 11-30). Buenos Aires: Siglo XXI.
Prebish, R. (1986). Renovar el pensamiento económico latinoamericano: un imperativo.
Apuntes del CENES, 96-102.
Zunkel, O., & Paz, P. (1970). El marco histórico del proceso de desarrollo y subdesarrollo.
En O. Zunkel, & P. Paz, El subdesarrollo latinoamericano y la teoría del desarrollo (págs.
43-80). México: Siglo XXI.

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