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Capítulo 6.

Óptica Geométrica
6.1 Naturaleza de la Luz. Esbozo Histórico.

La óptica es la parte de la física que estudia la naturaleza de la luz, las leyes de los fenómenos luminosos
y la interacción de la luz con la sustancia.

Siglo XVII
Las primeras teorías conocidas acerca de la naturaleza de la luz datan de este siglo. Se destacan las
teorías de Huyghens, que consideraba la luz como una onda, y la de Newton, que en 1704 la describió
como un flujo de partículas, explicando la reflexión de la luz como los “choques” de esas partículas en un
espejo. No estaba claro qué era lo que vibraba en las ondas de Huyghens, ni tampoco como estaban
constituidas las partículas de Newton. La reputación que ya poseía éste último en la época hizo que ma-
yoritariamente se aceptara la luz como un flujo de partículas.
Siglo XIX
En este siglo se logra dar explicación a fenómenos tales como la interferencia, la difracción y la polariza-
ción de la luz sobre la base del modelo ondulatorio. Fueron importantes las aportaciones de Young y
Fresnel. En 1860 aparece la teoría de Maxwell del campo electromagnético, que relaciona la óptica con
el magnetismo. Según esta teoría, la velocidad de propagación de las ondas electromagnéticas en el
vacío tiene el valor
1
c= ~ 300 000 km/s
μo εo
que concuerda admirablemente con los resultados experimentales. A partir de este momento el modelo
ondulatorio gana una preponderancia absoluta sobre el modelo corpuscular.

James Clerk Maxwell. Se considera, junto a Newton y Einstein, uno de los pilares funda-
mentales de la física moderna, a causa de sus muchas contribuciones a la física. La más im-
portante es que introdujo el concepto de radiación electromagnética junto con las ecuaciones
del campo (1873), que condujeron posteriormente la teoría especial de la relatividad de Eins-
tein. Su obra más importante es el Treatise on Electricity and Magnetism (Tratado sobre
electricidad y magnetismo, 1873) donde, por primera vez, publicó su conjunto de cuatro
ecuaciones diferenciales en las que describe la naturaleza de los campos electromagnéticos
en términos de espacio y tiempo.

Fines del siglo XIX, Principios del XX

Se detectan fenómenos que no se pueden explicar sobre la base del modelo ondulatorio, tales como:
• la distribución de intensidades de los espectros de radiación de los sólidos a alta temperatura (radia-
ción del cuerpo negro)
• el efecto fotoeléctrico
• el efecto Compton

Estos fenómenos lograron explicarse posteriormente sobre la base de modelos que no consideraban el
carácter ondulatorio de la luz, sino que más bien lo rechazaban:

• la teoría cuántica de la luz (Planck, 1900)


• la teoría de los fotones de Einstein (1905)

Según este último modelo, la luz es un flujo de partículas, que Einstein denominó fotones, de energía ε =
hν donde ν es la frecuencia asociada al flujo de partículas.

Y el lector se preguntará ¿Qué frecuencia?¿No ha escrito Ud. que según el modelo de Einstein la luz es
un flujo de partículas y no una onda? ¿Qué es lo que oscila entonces? Esta ambigüedad es precisamen-
te la característica esencial de esta teoría, que le atribuye a la luz conjuntamente propiedades de onda y

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de partícula. ( A veces se habla de “la onda asociada al flujo de partículas”, lo que no esclarece en abso-
luto el problema).

Esta particularidad de la luz se conoce como dualidad partícula-onda.

Hasta el momento no existe una teoría unificada capaz de explicar todos los fenómenos conocidos en
que interviene la luz. Las teorías ondulatoria y corpuscular se complementan. Algunos fenómenos se
explican correctamente utilizando la teoría ondulatoria, mientras que otros necesitan de la teoría corpus-
cular para ser analizados satisfactoriamente. El punto de vista moderno es considerar que la luz no es
partícula ni es onda; se manifiesta como una o como otra en dependencia de la interacción específica
que se esté considerando, y se trabaja para encontrar una teoría que represente mejor sus propiedades.

6.2 Espectro Visible

El intervalo de longitudes de onda comprendido aproxima-


damente entre los 400 y 700 nm en el vacío se conoce como
espectro visible, porque el ojo humano tiene la capacidad de
detectar la radiación electromagnética en ese intervalo de
longitudes de onda. Las longitudes más pequeñas (y las
frecuencias más altas) corresponden a los tonos violetas,
mientras que las longitudes mayores corresponden a los
tonos rojos. Por encima del violeta, en frecuencia, se en-
cuentra la región del ultravioleta (UV) y por debajo del rojo el
infrarrojo (IR).

La expresión analítica de una onda monocromática


(una sola λ) puede expresarse como

E = Eosen(kx - ωt)

donde ω = 2πf y k = 2π/λ. La luz natural o “blanca”


proveniente del sol está compuesta por un continuo
de frecuencias (o longitudes de onda) que contiene
prácticamente todos los colores del espectro.

6.3 Óptica Geométrica

Existe un conjunto de fenómenos que se pueden describir satisfactoriamente utilizando el concepto de


onda electromagnética, pero sin necesidad de tomar en cuenta las propiedades de los campos E y H que
la componen (por ej., sus relaciones de fase y amplitud). Estos fenómenos son:

• la reflexión, refracción y dispersión de la luz


• las propiedades de las lentes

Para estudiar las leyes que rigen estos fenómenos solo es necesario el concepto de rayo luminoso. Un
rayo luminoso es simplemente la representación de la onda por un vector a lo largo de la dirección de
propagación. Usualmente representa luz monocromática, pero también puede representar varias fre-
cuencias o luz blanca.

En general, la velocidad de propagación de la radiación electromagnética depende del medio considera-


do. Cuando el medio de propagación no es el vacío, la teoría de Maxwell proporciona el siguiente valor
(y la realidad experimental lo confirma):
1
vp = . (6.2.1)
μ r μ o εr ε o

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El valor máximo se obtiene en el vacío, cuando μr = εr = 1, y es aproximadamente 300 000 km/s.

La velocidad de la luz es una velocidad increíblemente alta, capaz de dar unas 8 vueltas a nuestro plane-
ta por el ecuador en 1 segundo. No obstante, actualmente existen medios adecuados para medir la velo-
cidad de la luz con extraordinaria precisión. Tan precisas han llegado a ser estas mediciones que, en
1983, se redefinió nuevamente el patrón de longitud (metro) y junto con el se le asignó un valor exacto a
la velocidad de la luz en el vacío. Así,

c = 299 792 458 m/s exactamente

Este valor es el mismo en cualquier sistema de referencia que se mida, tanto si está en reposo como en
movimiento (éste el precisamente uno de los postulados de Einstein que condujo a la teoría especial de
la relatividad, comprobado innumerables veces en la práctica).

El metro se redefinió en 1983 como la longitud que la luz viaja en el vacío durante 1/( 299 792 458) de
segundo, mientras que el segundo se definió en 1967 como el tiempo que tardan en ser emitidas 9 192
631 770 vibraciones de la radiación de los átomos de Cs 133 en determinadas condiciones.

6.4 Leyes de la Reflexión y la Refracción


rayo rayo
Cuando un rayo luminoso atraviesa la superficie de separación de incidente reflejado
dos medios, aparece un rayo reflejado y otro refractado (ver figura).
Una parte de la luz se refleja y la restante pasa al otro medio, des-
viándose de la dirección original. Considere que el medio 1 es aire, θ1 θ1’
medio 1
y que el medio 2 es vidrio.

Para el vidrio εr y μr son mayores que la unidad, mientras que para medio 2
el aire εr ~ μr ~ 1. Por tanto, según (6.2.1), la velocidad de propaga- θ2
ción de la luz en el vidrio será menor que su velocidad en el aire, y
el comportamiento de la propagación será en general diferente. rayo
refractado
Para caracterizar las particularidades de la propagación de la luz en
los medios se introduce el índice de refracción n = c/v, donde:

c: velocidad de la luz en el vacío


v: velocidad de la luz en el medio considerado

Como consecuencia de la definición, n ≥ 1 siempre, y sólo será igual a 1 en el vacío. En la tabla siguien-
te se muestran algunos valores típicos de n. Note que n, cociente de dos velocidades, es adimensional.

n (medido con luz de sodio λ


medio
= 589 nm)
aire 1.003
H2O 1.33
etanol 1.36
NaCl (sólido) 1.53
polietileno 1.50 – 1.54

La frecuencia de la radiación no varía al pasar de un medio a otro, pero como la velocidad varía, la longi-
tud de onda λ = c/ν si variará.

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c λν
n= =
v λ' ν
λ
por tanto: λ' = . La longitud de onda de la radiación se reduce al pasar a un medio de mayor n (mayor
n
densidad óptica). Una vez establecidas las propiedades del índice de refracción, las leyes de la óptica
geométrica, obtenidas a partir de la evidencia experimental, y que también pueden ser deducidas a partir
de las ecuaciones de Maxwell, se expresan de la forma siguiente:

• El rayo incidente, el reflejado y el refractado siempre están en un mismo plano.


• El ángulo de incidencia es igual al ángulo de reflexión (θ1 = θ1’)
• El ángulo de incidencia y el de refracción cumplen la ley de Snell: n1senθ1 = n2senθ2 .

En la refracción, cuando n2 > n1 el rayo refractado se acerca a la normal. Efectivamente, según Snell,

senθ2 = (n1/n2)senθ1

y si n2 > n1 entonces senθ2 < senθ1, y de aquí sigue que θ2 < θ1. En
caso contrario, cuando la luz pasa de un medio de mayor índice a otro
de menor índice, n1 > n2 y el rayo refractado se aleja de la normal.

En la figura se muestra la trayectoria de un rayo de luz que atraviesa


varios medios con superficies de separación paralelas. El índice de
refracción del agua es superior al del aire, y más bajo que el del vidrio,
por lo que el rayo refractado se acerca cada vez más a la normal. Al
pasar del vidrio al aire el rayo se pasa de un medio con mayor índice a
otro de menor índice, y tiende a alejarse de la normal. Como el índice
de refracción del primer y el último medio es el mismo, el rayo emerge
observador
en dirección paralela al rayo incidente AB, pero resulta desplazado. rayo
refractado
La refracción de la luz hace que los objetos sumergidos se vean más
cercanos a la superficie cuando se observan desde el exterior. El rayo imagen
de luz que sale del objeto en el fondo del recipiente se aleja de la nor-
mal al atravesar la separación de los medios (nagua > naire). Un obser-
vador fuera del recipiente verá venir la luz de un punto (imagen) que se
objeto
encuentra más cercano a la superficie que el objeto.

Espejismos. Un espejismo no es una ilusión óptica como a veces se afirma. Es un fenómeno físico que consiste
en que un objeto distante se observa desplazado de su verdadera posición. Tiene su origen en la reflexión y refrac-
ción de la luz en capas atmosféricas que presenten grandes gradientes de temperatura.

La imagen puede aparecer derecha, invertida, o haciendo ondulaciones. Usualmente los espejismos se presentan
en los lugares muy fríos o en la arena caliente de los desiertos, y se caracterizan porque aparece al menos una
imagen invertida de algún objeto, aunque pueden aparecer dos, tres o más imágenes derechas e invertidas.

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Un espejismo muy común es el espejismo de las carreteras, cuando en días soleados se observa a lo lejos el pavi-
mento aparentemente mojado, aunque la humedad aparente siempre desaparece antes que logremos alcanzar el
punto en cuestión.

6.5 Dispersión de la Luz


luz blanca
Se llama dispersión de la luz al fenómeno que tiene lugar cuando la luz blan-
ca se refracta en un medio tal que su índice de refracción varía apreciable-
mente con la frecuencia (n = n(ν)). En este caso, de acuerdo a la ley de
Snell, el ángulo refractado variará ligeramente de una a otra frecuencia, ob-
teniéndose la separación de los correspondientes rayos luminosos. En la
figura adjunta, la luz se dispersa al pasar por un medio donde el valor del
índice de refracción es diferente para cada frecuencia. Suponiendo que la luz dispersada
luz incide desde el aire, n1 ≈ 1, y de acuerdo a la ley de Snell, (coloreada)
senθ2 = (1/n2)senθ1

Como n2 depende de la frecuencia, θ2 también variará con ν, y el ángulo de refracción será ligeramente
diferente para cada frecuencia. La dispersión se llama normal cuando n aumenta con ν, mientras que
cuando n disminuye con ν la dispersión es anómala. La dispersión normal es característica de la mayo-
ría de los medios transparentes incoloros, mientras que la anómala se presenta en algunos medios colo-
reados.

El arco iris se origina cuando llueve por la refracción de la luz solar en las mi- 1
núsculas gotas de agua que quedan en la atmósfera. Lo que da belleza al fenó-
meno es la dispersión de la luz blanca dentro de las gotas de agua, ya que el ín-
dice de refracción del agua no es el mismo para todas las longitudes de onda ( n 2
= n(ν)). En la figura se ha representado la refracción correspondiente a una sola
frecuencia. Al ocurrir dos refracciones (en 1 y 3) el ángulo dispersado se hace
mayor. El efecto combinado de los procesos de refracción – reflexión – refrac- 3
ción que tienen lugar en cada gota respecto a un observador colocado en posi-
ción favorable (el sol debe estar siempre detrás del observador) da lugar a la o
138
formación del arco iris.

Es posible demostrar que, de acuerdo a la geometría de los procesos involucrados en el fenómeno, el ángulo en-
tre la dirección del observador al sol y la dirección entre éste y cualquier punto del arco iris siempre será igual
138°. Usualmente es posible observar un segundo arco iris, más tenue y mayor que el primero, con los colores
invertidos, que se origina por los rayos que son reflejados doblemente dentro de la gota.

Los halos son anillos de color blanco o de una tonalidad pálida que se forman alre-
dedor del Sol o de la Luna. El mecanismo que los produce tiene que ver con proce-
sos de reflexión y refracción en los pequeños cristales de hielo que constituyen las
nubes altas de tipo cirros. El tipo más común es el generado por procesos de re-
fracción en cristales de hielo hexagonales. En este caso el diámetro del círculo que
forma el halo es tal que, si uno apunta con un brazo en la dirección del Sol (o de la
Luna) y con el otro en la dirección de cualquier punto del halo, el ángulo entre los
brazos será siempre de 22°.

Los espectrógrafos son instrumentos que sirven para anali-


zar la distribución de longitudes de onda proveniente de
objetos luminosos. Para dispersar la luz y obtener su es-
pectro se hace que la luz proveniente del objeto pase por un
prisma, donde la doble refracción que tiene lugar en las
fronteras ocasiona una mayor dispersión del haz. En óptica,
un prisma es un bloque de vidrio u otro material transparen-
te que tiene la misma sección transversal (generalmente un

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triángulo) en toda su longitud. Los dos tipos de prisma más frecuentes tienen secciones transversales
triangulares con ángulos de 45º ó 60o.

El análisis de los espectros permite obtener información de las características internas de la sustancia
que emite la radiación. Por ejemplo, es posible obtener información acerca de la composición de las
estrellas analizando la luz que nos llega de ellas, incluyendo la radiación proveniente del sol. En el es-
pectro solar que aparece a continuación, las líneas oscuras se denominan líneas de absorción, y se de-
ben a la absorción de la radiación por elementos presentes en la atmósfera solar. Comparando esas
líneas con las de los espectros obtenidas en el laboratorio bajo condiciones controladas es posible identi-
ficar los elementos que existen en el Sol.

La línea intensa en el extremo del rojo del espectro es una de las líneas del hidrógeno, y el doblete ama-
rillo corresponde al sodio. Las líneas del hierro y el calcio aparecen en el extremo violeta.

6.6 Reflexión Total Interna

Analicemos en detalle el caso en que la luz pasa de un medio óptica-


mente más denso a uno menos denso, donde el rayo refractado se θ1
aleja de la normal (n1 > n2 según la notación anterior). Si el ángulo de medio 1
incidencia θ1 es lo suficientemente grande, es posible lograr que θ2 =
90o. El valor de θ1 que hace θ2 = 90o se puede calcular a partir de la medio 2 θ2 = 90o
ley de Snell. Ese ángulo se denomina ángulo crítico (θc)

n1senθc = n2sen(90o) = n2

senθc = n2/n1

Cuando θ1 > θc el rayo refractado desparece, y toda la luz incidente es reflejada en la superficie. El fe-
nómeno se conoce como reflexión total interna, y tiene muchas aplicaciones. Las más importantes están
relacionadas a los prismas y a la transmisión de señales por fibra óptica.

Prisma. Cuando un rayo de luz incide sobre el prisma con un ángulo adecuado, el
ángulo de incidencia sobre la cara interna del prisma es mayor que el ángulo crítico,
por lo que el rayo experimenta una reflexión total interna y no hay pérdidas de ener-
gía. Esto hace que el prisma actúe como un espejo muy eficiente, un efecto que se
utiliza en muchos instrumentos ópticos como periscopios y binoculares o prismáticos
(de ahí este último nombre).

Fibra óptica: fibra o varilla de vidrio u otro material transparente con un índice de refracción alto que se emplea
para transmitir luz. Cuando la luz entra por uno de los extremos de la fibra, se transmite con muy pocas pérdidas
incluso aunque la fibra esté curvada. El principio en que se basa la transmisión de luz es la reflexión total inter-
na; la luz que viaja por el centro de la fibra incide sobre la superficie externa con un ángulo mayor que el ángulo

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crítico, de forma que se refleja sin pérdidas hacia el interior. Así, la luz se transmite a largas distancias, refleján-
dose miles de veces en el interior de la fibra.

La aplicación más sencilla de la fibra óptica es la transmisión de luz a lugares que serían difíciles de iluminar de
otro modo, como la cavidad perforada por el rotor de un dentista. También puede emplearse para transmitir imá-
genes. En este caso se utilizan haces de varios miles de fibras muy finas, situadas exactamente una al lado de
la otra y pulidas en sus extremos. Cada punto de la imagen proyectada sobre un extremo del haz se reproduce
en el otro extremo, con lo que se reconstruye la imagen, que puede ser observada a través de una lupa o en una
pantalla. Este procedimiento es muy utilizado en instrumentos médicos para examinar el interior del cuerpo
humano y para efectuar cirugía láser. También se han desarrollado fibras que transmiten rayos láser de alta po-
tencia para cortar y taladrar materiales.

La fibra óptica se emplea cada vez más en las comunicaciones, debido a que las
ondas de luz tienen una frecuencia muy alta y la capacidad de una señal para
transportar información aumenta con la frecuencia. En las últimas décadas se han
ido sustituyendo las líneas de transmisión que utilizan conductores metálicos por
redes de fibra óptica, que proporcionan conexiones telefónicas, correo electrónico e
Internet transcontinentales y transoceánicas.

Una ventaja de los sistemas de fibra óptica es la gran distancia que puede recorrer
una señal antes de necesitar un repetidor para recuperar su intensidad. En la ac-
tualidad, los repetidores de fibra óptica están separados entre sí unos 100 km, fren-
te a aproximadamente 1.5 km en los sistemas eléctricos convencionales. En la fi-
gura se observa una porción de fibra óptica compuesta de muchas hebras delgadas
de vidrio o plástico con diámetro de 50 a 125 micras cada una. El conjunto de nú-
cleo y revestimiento está a su vez rodeado por un forro o funda de plástico u otros
materiales que lo resguardan contra la humedad, el aplastamiento, los roedores, y
otros riesgos del entorno.

6.7 Espejo Plano

Un espejo ideal es cualquier superficie plana capaz de refle-


jar la mayor parte de la luz incidente. En la figura, constru-
yendo los rayos reflejados en el espejo a partir de las leyes
de la reflexión (θ1’ = θ1), se ve inmediatamente que un ob-
servador en E ó D verá el reflejo de A en el punto F, ya que
los rayos de luz parecen salir de allí. Mediante considera-
ciones geométricas se llega fácilmente a la conclusión de
que la distancia objeto (o) y la distancia imagen (i), definidas
como las perpendiculares desde el objeto y la imagen hasta
el espejo, respectivamente, cumplen la condición
o i
i=-o

La imagen que se forma en el espejo es una imagen aparente o imagen virtual, pues detrás del espejo no
hay ninguna fuente de luz. La imagen aparenta estar allí, pero no está en realidad. Utilizando esta sim-
ple ecuación es posible analizar la formación de imágenes en espejos complejos.

Ejemplo
1
Dos espejos planos están colocados perpendicularmente. Se coloca
un punto luminoso P en la bisectriz. Localice las imágenes que se
forman.

Respuesta. Se forman 3 imágenes. La tercera se puede considerar


formada a partir de las imágenes virtuales 1 y 2, tomándolas como
objeto respecto a la prolongación de los espejos (señaladas con línea 3 2
de puntos en la figura).

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6.8 Lentes Delgadas

Una lente es un dispositivo óptico transparente (vidrio, plástico) limitado por dos superficies esféricas, que
pueden ser cóncavas o convexas respecto al plano que pasa por el centro de la lente. En la figura se
muestran algunos ejemplos:
d

biconvexa plano-convexa bicóncava cóncavo-convexa

Llamaremos d al espesor de la lente, y r al radio de curvatura de su superficie. Una lente delgada es


aquella en que d << r. En las lentes delgadas el análisis de la trayectoria de los rayos luminosos se sim-
plifica grandemente. En lo que sigue se considera solamente este tipo de lentes.

Las lentes hacen uso de la refracción para concentrar o dispersar los rayos de luz. aire
Si la luz atraviesa un vidrio plano, es posible comprobar, aplicando la ley de Snell,
que el rayo emergente sale paralelo al rayo incidente (ver figura). Sin embargo, si vidrio
la inclinación de las superficies varía, se puede lograr la concentración o disper-
sión de los rayos luminosos.

En la figura se muestran los esquemas para una lente convergente y otra divergente.

Propiedades de las Lentes

Llamaremos eje óptico de la lente a la recta perpendicular que pasa por el centro de la lente. Es posi-
ble comprobar en la práctica las siguientes propiedades:

• Cuando un grupo de rayos paralelos inciden sobre la lente, éstos (o sus prolongaciones) se con-
centran en un punto del espacio. El plano formado por el conjunto de esos puntos es el plano fo-
cal. La intersección del eje óptico con el plano focal es el foco de la lente (ver figuras).

foco
foco

eje óptico eje


plano
focal p. focal

• Cada lente posee dos focos, situados a igual distancia de la lente. La distancia del foco al

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centro de la lente es la distancia focal.
• El rayo de luz que pasa por el centro de la lente no se desvía, cualquiera sea su ángulo de in-
cidencia.
• El rayo que incide perpendicular la lente pasa por uno de los focos.
• El rayo que pase por un foco sale perpendicular a la lente.

Estos rayos se conocen como rayos notables, y se pueden utilizar para analizar la for-
mación de imágenes, como se verá en los ejemplos a continuación. Representaremos
las lentes convergentes y divergentes por los siguientes símbolos.
C D
Imágenes Reales y Virtuales

La propiedad más importante que poseen las lentes es que permiten obtener imágenes reales y virtua-
les de los objetos, aumentados o disminuidos.

La imagen es real cuando se forma del lado contrario a donde incide la luz. Si se forma del mismo
lado, entonces la imagen es virtual.

Considere en la figura la formación de una imagen real a partir de los rayos notables

lado V lado R A
f i

o f
f
f i o

imagen real imagen virtual

La imagen de la izquierda es real porque los rayos de luz llegan verdaderamente a ese punto. Si se
coloca una pantalla, es posible ver la imagen. La imagen de la derecha es virtual porque un observa-
dor situado a la derecha y mirando hacia la lente ve salir los rayos del punto A, donde no hay nada en
realidad.

Sea o: distancia del objeto a la lente; i: distancia de la imagen a la lente. Mediante consideraciones
geométricas es posible demostrar que estos dos parámetros se relacionan con la distancia focal f de la
lente por la fórmula de Gauss

1 1 1
+ =
o i f

El aumento m de la lente se define por la relación (tamaño imagen)/(tamaño objeto) y resulta ser igual
a:
i
m= −
o

Estas expresiones son válidas para todas las lentes delgadas, siempre y cuando se considere el si-
guiente convenio de signos:

• o es siempre positivo
• i es (+) si la imagen está en el lado R, y (-) si está en el lado V
• f es (+) para lentes convergentes y (-) para lentes divergentes.

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Ecuación del Fabricante de Lentes

La siguiente expresión relaciona la distancia focal de una lente con el índice de refracción del material
con que está hecha y los radios de curvatura de sus superficies. Se conoce como la ecuación del fa-
bricante de lentes.
⎛ 1 1 ⎞⎟
= (n − 1) ⎜
1

⎜ ⎟
f ⎝ R1 R2 ⎠

En esta expresión,
luz
• n: índice de refracción R1
• f: distancia focal R2
• R1 : radio de curvatura de la superficie de la lente más
cercana al origen de luz lado V lado R
• R1 y R2 son (+) si el centro de curvatura está en el lado
R, y (-) si está en el lado V.
• En el ejemplo que se muestra, R1 y R2 son positivos.
Además R1 > R2. Por tanto,
1 1
− <0
R1 R2
y, según la ecuación del fabricante, f < 0. Significa que la lente del ejemplo es una lente divergente.

Aberraciones de las Lentes

Se denominan así a las deformaciones de las imágenes que forman las lentes a causa de determina-
das imperfecciones en su construcción. Se destacan dos tipos fundamentales de aberraciones: la
aberración esférica y la aberración cromática.

Aberración esférica. Causada por la falta de esfericidad de la superficie (las superficies de la lente no
son perfectamente esféricas). En este caso los rayos que pasan por una parte de la lente, digamos,
por los bordes, se desvían más que los que pasan por el centro. Trae por consecuencia que las imá-
genes se ven borrosas o “desenfocadas”.

Aberración cromática. Se debe al hecho de que el índice de refracción no es el mismo para diferentes
longitudes de onda; n = n(λ). La luz proveniente de un objeto iluminado con luz blanca se descompone
al atravesar la lente, y los bordes se ven difusos, con una cierta coloración.

Para corregir las aberracio-


nes de las lentes se utilizan
comúnmente combinaciones
de lentes convergentes y
divergentes, usualmente
bastante complejas. Entre
las aplicaciones más comu-
nes de las lentes se encuen-
tran los binoculares, micros-
copios, periscopios y teles-
copios.

Telescopio astronómico re-


fractor. El tipo de telescopio
astronómico más sencillo tiene
dos lentes. Ambas lentes son

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convexas. La lente más cercana al objeto se llama objetivo. La luz de una fuente distante pasa por esta lente y
llega a un foco como una imagen ‘real’ e invertida dentro del tubo del telescopio. La lente del ocular aumenta la
imagen formada por el objetivo. En un telescopio astronómico, la imagen ‘virtual’ formada por el ocular queda
invertida. Los oculares incluyen a menudo varias lentes, pero su acción es esencialmente la misma que la de las
lentes convexas sencillas.

En un telescopio para observación terrestre se inserta una tercera lente para invertir la imagen por segunda vez, de
modo que se pueda ver un objeto distante de forma correcta.

Binoculares. Los binoculares o prismáticos presentan una visión distinta para


cada ojo; sus dos elementos funcionan de forma independiente, permitiendo al
usuario una percepción profunda. En cada anteojo se utilizan frecuentemente dos
prismas para desviar el recorrido de la luz. Esto impide la inversión de la imagen
que se formaría con la utilización única de dos lentes, y permite que el anteojo
pueda ser más pequeño. La percepción de profundidad aumenta cuando aumenta
la distancia entre los objetivos

6.9 Curva de Sensibilidad Espectral

El ojo humano no posee la misma sensibilidad para todas Vλ


las frecuencias de la radiación electromagnética visible.
Tiene un máximo para el verde de longitud de onda 555 nm.

En la figura se muestra la curva de sensibilidad espectral del


ojo humano. El coeficiente de visibilidad Vλ se define por la
expresión
W
Vλ = m ⋅ 100

donde:
Wλ : potencia emitida por una fuente monocromática de
longitud de onda λ.
Wm: potencia emitida por una fuente con λ = 555 nm que
produce en el ojo la misma sensación de brillantez.

El coeficiente de visibilidad es una magnitud subjetiva, pues depende directamente de las sensaciones
psicofisiológicas del observador. Y algunas personas poseen un rango de visión más amplio que otras.
Por esta razón la curva se calcula no para una, sino para muchas personas, y se toma un promedio
estadístico. Las curvas que usualmente se reportan en los textos son el resultado de este procedimien-
to, llevado a convenios internacionales.

La curva de sensibilidad del ojo humano difiere bastante de la de muchos animales. Por ej., las abejas
no distinguen la luz roja, pero son capaces de ver el ultravioleta, mientras que los pájaros son más sen-
sibles a la luz roja.

El ojo humano es un sistema complejo que permite la Músculo ciliar


formación de imágenes en la retina con el auxilio de un
lente convexa capaz de variar automáticamente su dis-
tancia focal (cristalino), haciendo uso de los músculos
ciliares. También posee un diafragma (iris + pupila) que
regula la entrada de luz, también en forma automática.

El ojo es un instrumento muy sensible. Se ha señalado


que el ojo humano en condiciones óptimas es capaz de
detectar, en una noche oscura y sin estrellas, la luz de Cristalino
una vela a 100 km de distancia.

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6.10 Absorción de la Luz

Cuando la luz atraviesa un medio semi-transparente, una parte se difunde (sec- A


cuón 6.11) y la restante es parcialmente absorbida por el medio. Para determinar
las características de este proceso, definamos la intensidad de la luz como la
energía que atraviesa la sección de área transversal en la unidad de tiempo (tam-
bién conocido como flujo luminoso ó flujo de energía). En notación analítica:

I= Unidades: [J]/[m2][s].
At
x
Una vez definida la intensidad de la luz, consideremos el si-
guiente experimento. Si se calcula la relación entre la inten-
sidad transmitida y la incidente (I/Io) en función del espesor de
la lámina (añadiendo láminas de diferentes espesores), se Io
fuente I
encuentra que el cociente disminuye exponencialmente. detector
Cuando se grafica el logaritmo del cociente (I/Io) en función de
x, se obtiene una dependencia lineal como la que se repre- ln(I/Io)
senta en la figura.

Es posible expresar esta dependencia en forma analítica se-


gún

⎛I⎞
ln ⎜ ⎟ = − kx
⎜ ⎟
⎝ Io ⎠
x
La expresión se conoce como Ley de Lambert – Beer. El
parámetro k se denomina coeficiente de absorción lineal, y tiene dimensiones de longitud inversa (L-1).
Usualmente se expresa en cm-1. La ley de Lambert-Beer puede ser escrita en forma exponencial. En
ese caso se obtiene
- kx
I = Ioe .

La expresión se cumple para cualquier tipo de radiación luminosa, incluyendo los rayos X y los rayos γ.
En la tabla siguiente aparecen algunos valores típicos de k para radiación visible (en realidad, el coefi-
ciente k varía en dependencia de la frecuencia de la radiación. Usualmente la penetración de la radia-
ción aumenta con la frecuencia.

Sustancia k(cm-1)
aire 10-5
vidrio 10-2
metal (capa delgada) 104

Los metales en capas muy delgadas, del orden de μm, dejan pasar la luz. En los sólidos se cumple
que k = αρ, donde ρ es la densidad de la sustancia. El parámetro α es el coeficiente de absorción
másico y se usa comúnmente para caracterizar la absorción a los rayos X y la radiación γ de alta ener-
gía.

Absorción en Disoluciones

En una disolución no electrolítica suficientemente diluida, de forma tal que las moléculas del soluto
prácticamente no interaccionen entre sí, se encuentra en la práctica que

k = βC

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donde C es la molaridad de la disolución y β un coeficiente que depende de la frecuencia y del tipo de
disolución. La ley de Beer es la base de muchos métodos de análisis para determinar la concentración
de solutos en disoluciones de composición desconocida, utilizando luz visible o ultravioleta.

Efectos de la Absorción de la Luz

• En la piel humana
La luz visible e infrarroja causan el calentamiento superficial. La ultravioleta da origen a una reacción
fotoquímica superficial, formando melanina, un pigmento oscuro que actúa como protección al absorber
los rayos UV. La radiación UV es benéfica en dosis moderadas, pero es muy perjudicial en exceso.
Tiene efecto acumulativo a lo largo de toda la vida.
• Acción bactericida
La radiación UV con λ < 290 nm mata las bacterias. Se usa en lámparas de cuarzo para descontami-
nar el aire, ya que el vidrio común absorbe fuertemente el UV en esa región de frecuencias. La com-
ponente de la radiación solar con λ < 290 nm es muy nociva para el organismo, pero es absorbida to-
talmente por la capa de ozono, y de ahí la importancia de la protección de esa capa.
• Fotosíntesis
La fotosíntesis es una reacción de oxidación-reducción de varios pasos o etapas, que puede represen-
tarse simbólicamente de la siguiente forma:

nCO2 + nH2O + luz + clorofila → (CH2O)n + nO2

donde n es un número entero que se corresponde con la fórmula de algún hidrato de carbono (por
ejemplo, para la glucosa, n = 6). La clorofila es el catalizador de la reacción.

La absorción de la luz en las plantas es muy selectiva. Prácticamente no se absorbe radiación en la


región correspondiente a 520 < λ < 600 nm (verde-amarillo-naranja) ni tampoco para λ > 700 nm
(infrarrojo). Los máximos de absorción en la fotosíntesis se observan para λ = 410-450 nm (violeta) y
para λ = 640-680 (rojo). La absorción en la fotosíntesis también depende de la temperatura. La tempe-
ratura óptima es de 25 a 28o C. El proceso se detiene totalmente a los 45oC.

6.11 Difusión de la Luz

Cuando la luz atraviesa cualquier medio, conjuntamente con la absorción tiene lugar el fenómeno de
difusión (scattering 1 ).

Consiste en que al atravesar un medio sólido, líqui-


do o gaseoso, la radiación electromagnética se es-
parce o difunde en todas direcciones, en mayor o
menor grado. El fenómeno se debe a que la radia-
ción incidente es capaz de excitar los átomos y mo-
atmósfera
léculas que forman el medio en cuestión; los áto-
mos excitados son capaces entonces de emitir on-
das electromagnéticas de diferentes frecuencias en
todas direcciones.

Parte de la energía de la radiación incidente pasa así a ser radiada en otras direcciones, con la corres-
pondiente disminución de la intensidad de la radiación incidente. Los modelos matemáticos basados
en la teoría electromagnética de la luz, cuando se aplican a sustancias en fase gaseosa, muestran que
la intensidad de la luz difundida en la región visible del espectro aumenta con la frecuencia de la radia-
ción incidente. Si ID es la intensidad difundida por unidad de longitud a lo largo de una dirección deter-
1
En los textos en español a veces se traduce “scattering” como “dispersión”, lo cual es totalmente correcto desde el
punto de vista del idioma, pero tiende a confundir el fenómeno de difusión con el de la dispersión de la luz, estudiada
en 6.5.

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minada e Io la intensidad incidente a lo largo de esa dirección, entonces:

ID
∝ ω4
Io

De aquí que en la atmósfera, por ejemplo, la radiación de alta frecuencia (tonos verdes y azules) se di-
funda mucho más que los tonos rojos y naranjas. Esta particularidad es la que hace que el sol se vea
rojizo al amanecer y al atardecer. Cuando el sol está cercano al horizonte, los rayos emitidos deben
recorrer una gran distancia a través de la atmósfera, y un observador en tierra, al mirar hacia el sol o
hacia una nube donde incida la luz solar, no verá los tonos azules fuertemente atenuados por la difusión.

Si no existiera la difusión, en un día claro sin nubes el cielo se vería negro, tal como se ve en un vehí-
culo orbital, y no azul como se ve comúnmente. Este color azul también tiene su origen en la difusión,
pues mientras que la radiación de baja frecuencia viaja esencialmente en línea recta, un observador
casual verá la radiación de mayor frecuencia incidiendo desde cualquier dirección.

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