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Los pesos de marcos y de elementos, mostrados en las gráficas, representan una guía para la
toma de decisiones y son aproximadamente e indicativos dado que dependen de muchas
variables.
En la Fig. 10.1.1 se muestran la geometría del marco analizado. Las columnas extremas (Eje E
y B) y las trabes son de sección variable, y las dos columnas centrales son de sección
constante.
E D C B
1
35
30
w (kg/m²) 25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
En las Gráfica 10.1.2 a la Gráfica 10.1.4 se muestra la influencia del sismo tomando diferentes
valores de la carga de granizo.
35
30
w (kg/m²)
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
2
35
30
w (kg/m²)
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
35
30
w (kg/m²)
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
10.1.1.1.1 Comentarios:
Se observa en la Gráfica 10.1.1 que al variar las cargas de granizo existe un aumento en el
peso del marco con la carga de 100 kg/m2, mientras que para las cargas de 70 kg/m2 y 0 kg/m2
resultan valores muy semejantes dado que rige la carga gravitacional.
Por otro lado se aprecia, al disminuir la magnitud de las fuerzas sísmicas al 50%, no hay un
cambio importante en el peso.
3
10.1.2 Marco rígido de una crujía
En la Fig. 10.1.2 se muestra la geometría del marco analizado, tanto las columnas como las
trabes son de sección variable.
A B
45
40
35
w (kg/m²)
30
25
20
15
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
10.1.2.1.1 Comentarios:
Se obtuvieron variaciones semejantes a las del marco de tres crujías al aumentar la carga de
granizo. No se realizó el análisis cambiando la magnitud de las fuerzas sísmicas debido a que
esta condición no es crítica en ninguno de los elementos del marco.
4
10.1.2.2 Comparativa entre el marco de una y de tres crujías
Se realiza una comparación entre los pesos obtenidos para los marcos de tres y una crujía con
las diferentes cargas de granizo. En las Gráfica 10.1.6, Gráfica 10.1.7 y Gráfica 10.1.8 se
muestran los dos curvas comparativas entre el marco de una y de tres crujías.
45
40
35
w (kg/m²)
30
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
30
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
5
45
40
35
w (kg/m²) 30
25
20
15
10
20 25 30 35 40 45 50
L (m)
10.1.2.2.1 Comentarios:
Se observa un aumento en el peso de la estructura cuando se tiene una sola crujía debido a
que en el marco de tres crujías existe continuidad lo que implica que disminuya el momento
positivo en el centro del claro.
6
La influencia de la variación de la longitud del claro y la carga de granizo se muestra en la
Gráfica 10.1.9.
18
16
14
w (kg/m²)
12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
Gráfica 10.1.9 Marco formado por armaduras con cuatro crujías, sismo 100%
En las Gráfica 10.1.10 y Gráfica 10.1.11 se muestra la influencia del sismo tomando en cuenta
diversos valores de la carga de granizo.
18
16
14
w (kg/m²)
12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
7
18
16
14
w (kg/m²) 12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
10.1.3.1.1 Comentarios:
En la Gráfica 10.1.9 se observa que el granizo tiene influencia en el peso para valores
superiores a 70 kg/m2, debajo de este no es una condición que influya en el diseño.
Con lo que respecta al sismo, para coeficientes sísmicos superiores a 0.20 y claros a 20m, es
una variable que influye directamente en el peso. Para claros pequeños, menores a 15 m, la
solución con armaduras no es económica.
8
18
16
14
w (kg/m²) 12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
Gráfica 10.1.12 Marco formado por armaduras con dos crujía, sismo 100%
En las Gráfica 10.1.13 y Gráfica 10.1.14 se muestra la influencia del sismo tomando en cuenta
diversos valores de la carga de granizo.
18
16
14
w (kg/m²)
12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
9
18
16
14
w (kg/m²) 12
10
6
10 15 20 25 30
L (m)
10.1.3.2.1 Comentarios:
Se obtuvieron variaciones semejantes a las del marco de cuatro crujías tanto para el aumento
en la carga de granizo, Gráfica 10.1.12, como para el sismo, Gráfica 10.1.13y Gráfica 10.1.14.
10
20
18
16
w (kg/m²) 14
12
10
8
10 15 20 25 30
L (m)
Gráfica 10.1.15 Marco formado por armaduras con una crujía, sismo 100%
En las Gráfica 10.1.16 y Gráfica 10.1.17 se muestra la influencia del sismo tomando diversos
valores de la carga de granizo.
20
18
16
w (kg/m²)
14
12
10
8
6
10 15 20 25 30
L (m)
11
20
18
16
w (kg/m²)
14
12
10
8
6
10 15 20 25 30
L (m)
10.1.3.3.1 Comentarios:
Se obtuvieron variaciones semejantes a las de los marcos de cuatro y dos crujías tanto para el
aumento en la carga de granizo, Gráfica 10.1.15, como para la disminución de las fuerzas
sísmicas, Gráfica 10.1.16 y Gráfica 10.1.17. Para claros menores a 15 m el peso aumenta para
algunas condiciones de carga.
Se realiza una comparativa entre los pesos obtenidos para los marcos de una, dos y cuatro
crujías con las diferentes cargas de granizo. En las Gráfica 10.1.18, Gráfica 10.1.19 y Gráfica
10.1.20 se muestran las curvas para diferentes valores de la carga de granizo.
20
18
16
w (kg/m²)
14
12
10
8
10 15 20 25 30
L (m)
12
20
18
16
w (kg/m²) 14
12
10
8
10 15 20 25 30
L (m)
20
18
16
w (kg/m²)
14
12
10
8
10 15 20 25 30
L (m)
10.1.3.4.1 Comentarios:
Se observa un aumento en el peso de la estructura cuando se tiene una sola crujía debido a
que la distribución de fuerzas en la armadura cambia al tener diferentes condiciones de
continuidad en los extremos, siendo más desfavorable para el caso de una sola crujía.
Igualmente se observa que para algunas condiciones de carga que el peso de la estructura
aumentó para longitudes de claro menores a 15 m aproximadamente.
10.1.4 LARGUEROS
Se estudian tres tipos de largueros, utilizados frecuentemente, para diferentes longitudes y
condiciones de apoyo. Los tipos de largueros y acero son:
13
Sección CF A-500 F y = 3,235 kg/cm2
Sección ZF A-500 F y = 3,235 kg/cm2
Joist A-36 F y = 2,530 kg/cm2
Es importante señalar que para largueros de sección CF (monten) y tipo joist se consideraron
simplemente apoyadas, esto es:
𝑊𝑊𝐿𝐿2
𝑀𝑀 = (10.4.1)
8
5𝑊𝑊𝐿𝐿4
∆= (10.4.2)
384𝐸𝐸𝐸𝐸
Mientras que para las secciones ZF se consideró continuidad en los apoyos, esto es:
𝑊𝑊𝐿𝐿2
𝑀𝑀 = (10.4.3)
12
𝑊𝑊𝐿𝐿4
∆= (10.4.4)
384𝐸𝐸𝐸𝐸
Los largueros ZF tienen la gran ventaja que es posible traslaparlos para general continuidad,
mientras que los largueros tipo monten, aunque posible, no es práctico.
10.1.4.1 LARGUERO CF
24
22
20
18
W (kg/m)
16
14
12
10
8
6
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
14
10.1.4.2 LARGUERO ZF
10
9
8
7
6
5
4
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
14
12
10
8
6
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
Se muestra una comparación en las Gráfica 10.1.24, Gráfica 10.1.25 y Gráfica 10.1.26 entre los
pesos obtenidos para los diferentes tipos de larguero considerando carga de granizo de 100
kg/m2, 70 kg/m2 y sin carga.
15
24
22
20
18
W (kg/m)
16
14
12
10
8
6
4
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
24
22
20
18
W (kg/m)
16
14
12
10
8
6
4
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
24
22
20
18
W (kg/m)
16
14
12
10
8
6
4
8 9 10 11 12 13 14 15 16
L (m)
16
10.1.4.5 Comentarios
Al incrementar la carga de granizo en todos los perfiles analizados se tiene un efecto similar al
de los marcos, estos es, se incrementa el peso del larguero para la carga de granizo de 100
kg/m² y se encuentran valores muy semejantes para los casos de 70 kg/m² y sin carga, Gráfica
10.1.21 a Gráfica 10.1.23.
Comparando los tres tipos de larguero, Gráfica 10.1.24 a Gráfica 10.1.26, se observa la
conveniencia de usar largueros de sección ZF para claros mayores a 14 m. La particularidad de
estos largueros es que se pueden traslapar en los apoyos por lo que el diseño se hace, en
claros extremos, para 𝑀𝑀 = 𝑊𝑊𝐿𝐿2 ⁄12 y ∆= 𝑊𝑊𝐿𝐿4 ⁄384𝐸𝐸𝐸𝐸 en lugar de 𝑀𝑀 = 𝑊𝑊𝐿𝐿2 ⁄8 y
∆= 5𝑊𝑊𝐿𝐿4 ⁄384𝐸𝐸𝐸𝐸. Se señala que generalmente el diseño de los largueros CF (monten) queda
regido por la deformación.
17
CAPÍTULO 10.2
COMENTARIOS CARGAS Y
ACCIONES DE DISEÑO
10.2.1 CARGAS MUERTAS
En este caso de carga se incluye el peso de todos los elementos que conforman la Nave
industrial metálica, esto considerando el peso volumétrico de cada material. En naves
industriales usualmente existen equipos y maquinarias permanentes que serán
soportados por la estructura y deben ser considerados como carga muerta permanente.
Estos equipos pueden ser representados como carga uniforme sobre toda el área, pero
los puntos de conexión están usualmente sujetos a cargas concentradas en los cuales
deben considerarse un análisis detallado para tomar en cuenta los efectos locales.
En este tipo de estructura, hay que evaluar si se debe considerar una distribución no
uniforme alternada de la carga viva en los tableros de pisos cuando existen entrepisos o
áreas de almacenamiento. Este estado de carga puede llegar a ser más desfavorable que
el estado de carga viva máxima uniformemente repartida. En caso de los elementos
(largueros, perfiles doblados en frio, etc.) de la cubierta y entrepisos se debe considerar
una carga concentrada en la posición más crítica.
1
Con respecto a los contravientos tanto de fachada como de cubierta, cuando estos
trabajan solo a tensión, se acumulan deformaciones permanentes al hacer incursiones en
el rango no lineal, las cuales van aumentando con los ciclos de carga, ver Fig. 10.2.1. Por
tanto, cuando estos elementos se diseñan con el criterio de que trabajen solo a tensión,
se deberá garantizar que ante acciones sísmicas permanezcan en el rango elástico
utilizando un factor de Q = 1.0 para su diseño.
Existe una reducción de la presión por área tributaria para el diseño de estos elementos
que es tomada en cuenta mediante el factor de reducción de presión por tamaño de área.
Para el diseño de la estructura principal el factor de reducción de presión por tamaño de
área solo se aplica a los muros laterales y al techo, adopta el valor de uno para la revisión
de los muros de barlovento y sotavento.
Cuando se considere succión por viento se deberá combinar con la carga muerta mínima
que deberá ser multiplicada por un factor de carga menor a la unidad. Es importante
considerar que si el viento produce succiones mayores a la acción de la carga
permanente puede haber inversiones de esfuerzos.
Para tomar en cuenta el efecto de granizo los reglamentos establecen una carga
uniformemente repartida sobre el techo y una acumulación en los valle considerando a
está como una acción accidental para fines de combinaciones de carga. En sitios donde
existe una alta probabilidad de ocurrencia de este fenómeno, como el Distrito Federal y el
Estado de México, se ha reportado la falla de un gran número de naves industriales por
este tipo de carga (CENAPRED). Un valor de 100 kg/m2 se considera conservador en
2
algunos lugares pero puede llegar a subestimar esta carga en otros, por lo que se
necesita mayor investigación en cuanto al tema.
Fig. 10.2.2 Números de días con granizo al año, Atlas Nacional de México Instituto de Geografía
3
10.2.7 FATIGA
La Fatiga no es una carga propiamente dicha sino que es un estado de falla frágil
generado por la aplicación de la carga de servicio un número elevado de veces durante la
vida útil de la estructura, la cual puede general una grieta que se propaga hasta general la
falla por fractura de un elemento. Este no es un estado último de la estructura sino que se
considera un Estado Límite de Servicio para fines de evaluación. Para esto se consideran
las cargas verticales y laterales, sin factor de carga, generadas por el sistema móvil sobre
el elemento a evaluar, así como también el número de ciclo de aplicación de estas cargas
durante la vida útil de la estructura.
Para el cálculo del intervalo de esfuerzo se debe considerar la diferencia entre el esfuerzo
máximo y mínimo, si ambos tienen el mismo signo, o la suma de los máximos esfuerzos,
si estos tienen signos contrarios (tensión y compresión) o están en dirección opuesta en el
caso del cortante.
Las especificaciones para diseño por fatiga se establecen para ciclos de carga de
amplitud constante, mientras que para una estructura real lo ciclos de carga son de
amplitud variable. Cada amplitud de carga contribuye con un número de ciclos a daño por
fatiga de la estructura. Por tanto, solo se puede llegar a un estimado de número de ciclos
equivalente con la carga total de diseño.
Distribución de esfuerzos
Esfuerzo máximo, σ
σ1 Curva S-N
σ2
σ3
n1 n2 n3 N1 N2 N3
Número de ciclos hasta la falla, N
Fig. 10.2.3 Ley de daño de Miner.
4
Un método empírico desarrollado para evaluar el daño acumulado a los componentes
estructurales sometidos a ciclos de diferentes amplitudes de carga es la llamda “Ley de
daño de Miner”, ver Fig. 10.2.1. Minier propone que la falla de la estructura debido a fatiga
ocurrirá cuando:
𝑛𝑛𝑖𝑖
� = 1.0 (10.4.1)
𝑁𝑁𝑖𝑖
donde,
El daño total o acumulado por fatiga que resulta de la aplicación de ciclos de cargas de
diferentes amplitudes también puede expresarse como:
1/3
∆𝜎𝜎𝑒𝑒 = �� 𝛼𝛼𝑖𝑖 ∆𝜎𝜎𝑖𝑖3 � (10.4.2)
donde,
En naves industriales la carga de fatiga más frecuente se debe al uso de grúas viajera. El
número de ciclos para el diseño de la estructura soporte de la grúa viajera debe de estar
basado en un análisis de ciclos de servicio de está. La Asociación de Fabricantes de
Grúas Viajeras de América (CMAA) establece en sus normas un número de ciclos de
carga completa para el diseño por fatiga de la grúa viajera durante su vida útil de acuerdo
a su clasificación (CMAA, 2002) (CMAA, 2000), este no debe ser confundido con el
número de ciclos de amplitud constate para el diseño de la estructura soporte de la grúa.
Este último debe ser obtenido de un análisis de ciclos de servicios. Para esto se debe
calcular el espectro de carga, ver Fig. 10.2.4, y en base a esto calcular el número de
ciclos equivalente para una amplitud de carga constante utilizando la ley de Minier.
73%
47%
40%
Carga%
Carga%
Carga%
Carga%
33%
20%
10%
10 40 50 17 17 17 50 50 50 90 10
Tiempo% Tiempo% Tiempo% Tiempo%
5
El número de ciclos equivalente, N e , para la carga que produce el máximo intervalo de
esfuerzo sobre la estructura soporte de la grúa viajera, ∆σ m , será igual a:
donde,
El número de ciclo para una amplitud de esfuerzo constante igual al 100% de la carga
máxima recomendado en la Tabla 10.2.5 se tomó de la Guía de Diseño de Estructura
Soporte de Acero para Grúas Viajeras (MacCrimmon, 2004) de la Instituto Canadiense
para la Construcción en Acero (CISC) y está en función de la clasificación de las grúas
viajera considerando el nivel de servicio que hace la CMAA. Este procedimiento puede ser
estudiado con detalles en MacCrimmon (2004) donde también se presentan ejemplos.
Las acciones de Sismo, Viento e Impacto no generan fatiga en los elementos ya que,
aunque son cargas variables, son de corta duración y por tanto no se aplican un número
elevado de veces.
Los requisitos establecidos en los reglamentos para cada región, son los mínimos a
satisfacer para un factor de seguridad adecuado de la estructura, y por tanto no podrán
ser disminuidos. Además de que no pueden mezclarse las especificaciones de distinto
reglamento, como son cargas, combinaciones de cargas, parámetros para diseño por
6
viento y sismo, ya que esto podría dar a contrasté con la seguridad mínima de la
estructura. Por ejemplo, no se puede adoptar las combinaciones con factores de cargas y
resistencia de un reglamento extranjero, por ejemplo Código Internacional para Edificios
(IBC), y las cargas especificadas ó establecidas localmente.
7
8
CAPÍTULO 10.3
COMENTARIOS ANÁLISIS
ESTRUCTURAL
10.3.1 MÉTODO DE ANÁLISIS
A partir de los resultados del análisis se deberá evaluar los estados límite de servicio y de
resistencia. Cuando se utiliza un análisis elástico lineal se debe tomar en cuenta la
existencia de elementos que solo trabajan a tensión (contraventeos esbeltos) así como
también la rigidez relativa cimentación-suelo, estos dos puntos pueden influir de manera
importante en la respuesta en la estructura (distribución de elementos mecánicos y
desplazamientos).
Cuando los elementos diagonales muy esbeltos son sometidos a compresión tienden a
pandearse en el rango elástico y por tanto no aportan rigidez a la estructura, ver Fig.
10.3.1. Si se hace un análisis no lineal elástico esta condición se puede aplicar
directamente en el modelo y resolver el sistema de ecuaciones por interacciones.
Cuando se realiza un análisis elástico lineal se tienen dos elementos diagonales, uno
trabaja a tensión mientras que el otro lo hace a compresión. Si se considera la mitad del
área para cada elemento, la rigidez lateral total de las diagonales va a ser igual a la
rigidez total cuando se considera que solo uno de los elementos diagonales aporta rigidez
lateral a la estructura. Así la fuerza axial obtenida para la diagonal en tensión se multiplica
por dos para obtener el valor de diseño, mientras que a la fuerza axial en las columnas
donde llega la diagonal debe sumarse la componente vertical del incremento de fuerza en
la diagonal para que el sistema este en equilibrio. La fuerza de la diagonal a compresión
será igual a cero.
9
10.3.3 MODELACIÓN DE CIMENTACIÓN
Uno de los métodos de cálculo de vigas de cimentación y losas flexibles es el de la
hipótesis de cimentación flexible llamada también cimentación de Winkler. El método será
más adecuado cuanto más 'flexible' sea el elemento, lo cual dependerá
fundamentalmente de las dimensiones de éste, y especialmente de la relación entre su
espesor y las dimensiones de la base en cada dirección. La rigidez considerada en los
resortes, denominada módulo de reacción (k), se relaciona con el cociente entre la
presión de contacto (q) y el desplazamiento vertical (δ):
𝑘𝑘 = 𝑞𝑞⁄𝛿𝛿 (10.4.1)
k = Módulo de reacción
Sin embargo, el uso indiscriminado de la teoría del módulo de reacción puede inducir a
error dado que para el cálculo de cualquier losa o viga de cimentación en una estructura
este método no siempre supone una modelización correcta del problema. Entre las
limitaciones se tienen:
- El valor del módulo de reacción no es función exclusiva del terreno sino que depende
también de las características geométricas de la cimentación.
- Supone que cada punto del suelo se comporta independientemente de las cargas
existentes en sus alrededores, lo cual no ocurre en la realidad (ver Fig. 10.3.3).
Por ello, algunos autores recomiendan hacer un estudio para varios valores de k. El ACI
(1993), por ejemplo, sugiere variar el valor de k desde la mitad hasta cinco o diez veces
del calculado y basar el diseño estructural en la condición más crítica obtenida de ésta
manera.
(a) (b)
Fig. 10.3.3 Comportamiento cimentación estructura: a) según modelo de Winkler b) aproximación
más cercana a la realidad.
10
Además de considerar el modulo de reacción con un valor mayor en las zonas extremas,
por ejemplo el doble del valor en el contorno que en la zona central. También el ancho de
las zonas se hace disminuir al acercarse a los extremos, todo ello con el objeto de
aumentar las tensiones en los bordes de las cimentaciones ya que se comprobó que el
modelo de Winkler obtiene tensiones más bajas que las constatadas con otros métodos
en dichos puntos.
El módulo de balasto vertical para una zapata o una losa se puede definir de tres
maneras:
El efecto P-∆ es una no linealidad geométrica que puede ser despreciada cuando el índice
de estabilidad de entrepiso, I, es menor a 0.08, lo que equivale a decir que los efectos de
segundo orden no incrementan a los de 1er orden en más de un 10%. Cuando el índice
de estabilidad de entrepiso tiene un valor mayor de 0.30 no es aplicable el procedimiento
de amplificación de momento y por tanto deberá aumentarse la rigidez de la estructura,
como una forma de garantizar la estabilidad de está, ó realizar un análisis elástico que
tomen en cuenta la no linealidad geométrica o de segundo orden donde pueda verificarse
la estabilidad de la estructura.
11
Fig. 10.3.4 Efecto de la carga vertical en la resistencia
En general, cuando un edificio es bien concebido, existe una buena relación entre rigidez
y carga en cada columna, los efectos P-∆ son despreciables. Esto lo debe tener muy en
cuenta el diseñador a la hora de proyectar su estructura.
12
CAPÍTULO 10.4
COMENTARIOS DISEÑO
ELEMENTOS PRINCIPALES
10.4.1 CRITERIOS GENERALES DE DISEÑO
Para el diseño de los elementos principales que conforman una nave industrial se fijan criterios
de acuerdo a la filosofía de diseño por estados límites que se establecen en el capitulo C.1.1
Métodos de Diseño. Se establecen dos clases de estados límite de diseño para la estructura:
Estados Límite de Falla y Estados Límite de Servicio. Los primeros relacionados con la
seguridad de la estructura y los segundos relacionados con el funcionamiento adecuado de la
misma.
Para los miembros sometidos a flexión o flexocompresión en los cuales el pandeo lateral no es
crítico, la resistencia y capacidad de rotación será función de la geometría de la sección y de las
relaciones ancho/grueso de las placas que la componen.
σy > y
M
σ> σy
σy
Mp
σy Sec. Tipo 2
My
(compacta) Sec. Tipo 1
Sec. Tipo 3 (diseño plástico)
(no compacta)
σy
σ< σy
σ< σy
Sec. Tipo 4
(esbelta)
V
Fig. 10.4.1 Curvas momento-deflexión para diferentes tipos de vigas (El pandeo lateral no es crítico).
Para las secciones tipo 1 ó plástica la viga puede alcanzar su momento plástico, M p , y
mantenerlo constante hasta alcanzar deflexiones inelásticas importantes con incursiones dentro
del intervalo de endurecimiento por deformación del acero. Esto permite una redistribución de
fuerza para estructuras hiperestática.
Para las secciones tipo 2 ó compactas, igualmente, la viga puede alcanzar M p llegando a
plastificarse completamente, pero la falla por pandeo local se presenta poco después de que el
momento alcanza este valor. La capacidad de deformación inelástica bajo momento constante
es mucho menor que la de secciones tipo 1.
13
Para las secciones tipo 3 ó elásticas la viga sólo llega a alcanzar el momento de fluencia, M y ,
presentándose el pandeo local para un momento inferior a M p . Este tipo de secciones alcanzan
el esfuerzo de fluencia, F y , pero no tienen capacidad de rotación inelástica.
Para secciones tipo 4 ó esbeltas la viga no llegan alcanzar M y , el pandeo local de las placas
que conforman la sección se presenta para un esfuerzo menor que F y . La resistencia a flexión
va a depender de las relaciones ancho/grueso de las placas que conforman su sección.
El pandeo local de las placas que conforman una sección va a depender de su relación
ancho/grueso. Se establecen límites en la relación ancho/grueso máximas para cada tipo de
sección, que definen si las placas pueden alcanzar el momento M y , M p ó ingresar al intervalo de
endurecimiento por deformación sin pandearse localmente.
Se pueden establecer las relaciones b/t máxima para secciones Tipo 3 empleando la ecuación
de pandeo elástico, suponiendo que está es válida hasta que el esfuerzo crítico llega al límite
de fluencia en la placa:
𝜋𝜋 2 𝐸𝐸 𝑡𝑡 2
𝑓𝑓𝑐𝑐𝑐𝑐 = � � 𝑘𝑘 = 𝐹𝐹𝑦𝑦 (10.4.1)
12(1 − 𝜈𝜈 2 ) 𝑏𝑏
de donde,
𝑏𝑏 𝜋𝜋 2 𝐸𝐸𝐸𝐸
≤� (10.4.2)
𝑡𝑡 12(1 − 𝜈𝜈 2 )𝐹𝐹𝑦𝑦
𝑏𝑏 𝐸𝐸𝑘𝑘𝑝𝑝
≤ 0.951� (10.4.3)
𝑡𝑡 𝐹𝐹𝑦𝑦
El valor de factor de placa, k p , depende de las condiciones de borde del elemento plano, que
teóricamente puede adquirir los valores establecidos en la Tabla 10.4.1. Los valores de la tabla
se han obtenidos suponiendo que no existe pandeo local bajo esfuerzos menores al de fluencia
y corresponden a secciones tipo 3 de elementos planos sometidos a compresión pura.
Tabla 10.4.1 Valores teóricos relaciones b/t máximos para evitar el
pandeo local de placas en miembros comprimidos.
b/t
Tipo de apoyo en los kp
máximo
bordes longitudinales (mínimo)
(ec. 10.4.3)
𝐸𝐸
0.425 0.62�
𝐹𝐹𝑦𝑦
(articulado-libre)
𝐸𝐸
4.00 1.90�
𝐹𝐹𝑦𝑦
(articulado-articulado)
14
b/t
Tipo de apoyo en los kp
máximo
bordes longitudinales (mínimo)
(ec. 10.4.3)
𝐸𝐸
1.277 1.07�
𝐹𝐹𝑦𝑦
(empotrado-libre)
Los límites de las relaciones ancho/grueso de los elementos planos que conforman las
secciones de columnas sometidas a compresión pura, son iguales para los tres tipos de
secciones. Esto se debe a que este tipo de miembros no necesitan capacidad de rotación, solo
se necesita alcanzar su esfuerzo de fluencia, F y , sin pandeo local prematuro. Por lo tanto, para
columnas esbeltas, se permiten relaciones ancho/gruesos mayores que permitan alcanzar el
esfuerzo crítico de pandeo lateral, F n , del miembro.
Los límites en las máximas relaciones ancho/grueso de los elementos planos tipo 4 se toman
de las pruebas experimentales realizadas en la década de los 60 en la universidad de Cornell
en perfiles de acero doblados en frío (Winter, 1970). Con esto se logra delimitar rangos
prácticos aplicables que no invaliden las ecuaciones de cálculo especificadas para las
secciones con elementos planos tipo 4.
Los elementos planos que conforman las secciones del tipo 4, como por ejemplo las secciones
de perfiles de acero doblados en frio, son de espesor pequeño y las relaciones ancho/grueso
son elevadas en comparación con otros tipos de secciones. Estos elementos planos de poco
15
espesor pueden alcanzar un estado de equilibrio inestable y pandearse localmente antes de
que fallé la pieza en forma integral cuando son sometida a esfuerzos de compresión en su dos
bordes opuesto, o cortante uniformemente distribuido alrededor de todos su bordes, o una
combinación de estos. Aunque estos elementos planos alcancen su esfuerzo de pandeo estos
pueden soportar carga adicional debido a la redistribución de esfuerzos. Este fenómeno se
conoce como resistencia posterior al pandeo de los elementos comprimidos y es más
importante en los elementos comprimidos que se encuentran apoyados en su dos bordes
paralelos a la carga con relaciones b/t elevadas (Von Karma, Sechler, & Donnell, 1932).
Para ilustrar este fenómeno considere una retícula ortogonal de barras como la mostrada en la
Fig. 10.4.2(a). Cuando se alcanza la carga de pandeo de las barras comprimidas, la retícula
empieza a deformarse; las barras horizontales representan su forma de trabajo en dirección
perpendicular a la compresión. Cuando se inician las deflexiones laterales de las barras
verticales comprimidas, las horizontales trabajando en tensión y flexión, se oponen a que
crezcan, con lo que la resistencia de los puntales sube por encima de la que tendrían si fuesen
columnas ordinarias.
(a)
Fig. 10.4.2 Resistencia posterior al pandeo: (a) Modelo de retícula ortogonales equivalente a placa (b)
Distribución de esfuerzo en un elemento apoyado en dos de sus bordes paralelo a la carga.
La influencia de las barras horizontales es mayor en los elementos verticales más próximos a
los bordes que en los que están lejos, por lo que la faja central de la placa se deforma
lateralmente con más rapidez que las dos fajas cercanas a los bordes. En un principio, cuando
las cargas son pequeñas, los esfuerzos de compresión son iguales en todo el ancho y se
conservan así hasta que se alcanza el esfuerzo crítico; a partir de entonces la faja central no
acepta cargas adicionales y hasta es posible que transfiera parte de las que soportaba a las
zonas laterales, que son las que resisten los incrementos de la fuerza exterior, ver Fig.
10.4.2(b).
16
Empleando la ecuación para esfuerzo crítico de placas comprimidas apoyadas libremente en
los bordes paralelos a la dirección de la carga, y suponiendo comportamiento elástico hasta el
límite de fluencia, Von Karma obtuvo una expresión para determinar el ancho efectivo en el
instante en que se alcanza la resistencia última:
𝜋𝜋 2 𝐸𝐸 𝑡𝑡 2
𝑓𝑓𝑐𝑐𝑐𝑐 = � � 4.0 = 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 (10.4.4)
12(1 − 𝜐𝜐 2 ) 𝑏𝑏𝑒𝑒
De donde:
𝑏𝑏𝑒𝑒 4.0𝜋𝜋 2 𝐸𝐸 𝐸𝐸
=� 2
= 1.90� (10.4.5)
𝑡𝑡 12(1 − 𝜐𝜐 )𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚
𝑏𝑏𝑒𝑒 𝐸𝐸 0.415 𝐸𝐸
= 1.9� �1 − � � (10.4.6)
𝑡𝑡 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 𝑏𝑏/𝑡𝑡 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚
Esta ecuación se puede expresar en términos de la relación 𝑓𝑓𝑐𝑐𝑐𝑐 /𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 de la siguiente manera:
𝑏𝑏 𝑓𝑓𝑐𝑐𝑐𝑐 𝑓𝑓𝑐𝑐𝑐𝑐
=� �1 − 0.22� � (10.4.7)
𝑤𝑤 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 𝑓𝑓𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚
𝑏𝑏 = 𝜌𝜌𝜌𝜌 (10.4.8)
Este formato es el adoptado por las Especificaciones AISI (AISI, 1996) y es el que se adopta en
el presente manual para fines de cálculo de la resistencia post-pandeo de elementos placa
esbeltos para secciones tipo 4. En la Fig. 10.4.3 se presenta la curva del factor de reducción, ρ,
en función del factor de esbeltez, λ. Se observa que cuando λ ≤ 0.673 entonces ρ = 1.0.
17
1.20
1.00
0.80
0.40
0.20
0.00
0.00 0.673 1.00 2.00 3.00 4.00 5.00 6.00 7.00 8.00
λ
Se ha demostrado experimentalmente que el método del ancho efectivo de diseño utilizando los
conceptos de factor de reducción, ρ, y factor de esbeltez, λ, son válidos para el caso de
elementos no rigidizados comprimidos uniformemente y elementos rigidizados con variación en
los esfuerzos, pero variando el factor de placa, k p , para el cálculo del factor de esbeltez en cada
caso.
Para el caso de los elementos no rigidizados con un gradiente de esfuerzos el reglamento AISI
adopta un criterio conservador por la falta de pruebas experimentales. Este da el mismo
tratamiento que al caso de elementos no rigidizados comprimidos uniformemente, considerando
un esfuerzo 𝑓𝑓 como el máximo esfuerzo de compresión sobre el elemento. En este manual se
adopta la propuesta del Eurocódigo 3 (Comité Europeo de Normalización, 1992) que da un
criterio considerando el ancho efectivo solo en el área comprimida sin tomar en cuenta la parte
en tensión. Además, el cálculo del factor de placa, k p , se basa en la variación del gradiente de
esfuerzo, 𝜓𝜓, que usualmente es mayor que el valor recomendado por el AISI (1996) de 0.43. Así
el valor del factor de placa, k p , coincide con el valor encontrado en la literatura. En la Tabla
10.4.2 se muestra el valor del factor de placa para algunos casos de carga de flexo-compresión.
18
Tabla 10.4.2 Factor de placa para elementos planos sometidos a compresión y flexión (Galambos, 1998).
Factor de placa mínimo, k p *
Relación
entre Borde superior libre Borde inferior libre
esfuerzo a Borde no
Caso de Carga Borde no Borde Borde
flexión y cargado Borde Borde
cargado inferior superior
esfuerzo a simplemente inferior superior
empotrado simplemente simplemente
compresión apoyado empotrado empotrado
apoyado apoyado
∞
(flexión 23.9 39.6 0.85 2.15
pura)
5.00 15.7
2.00 11.0
0.50 5.8
0.00
(compresión 4.0 6.97 0.42 1.33 0.42 1.33
pura)
*El valor dado está basado en que las placas tienen el borde cargado simplemente apoyado y son valores conservadores para placas con
bordes cargados empotrado.
La falla de un elemento en tensión, para una sección lejos de la conexión, se presenta cuando
ocurre la plastificación total de la sección al alcanzar el esfuerzo de fluencia en todos los puntos
de la sección que ocasiona elongaciones grandes e incontrolables que provoquen la falla de la
estructura de la que forma parte. En las secciones cerca de la conexión del elemento en tensión
se pueden presentar otros tipos de falla que se ven más adelante en la sección de conexiones.
La falla de una columna puede ocurrir por pandeo lateral del miembro en conjunto, asociado a
uno de los tres modos de falla: flexión, torsión ó una combinación de ambos; ó por pandeo local
de los elementos planos que conforman la sección.
19
Cuando el pandeo local no es crítico la clasificación se hace en función de su esbeltez, que se
define como la relación entre la longitud y las dimensiones transversales de está. Cuando la
esbeltez es pequeña no hay problema de pandeo y se puede llegar a alcanzar el esfuerzo de
fluencia del material llegando a la plastificación de la sección. Las columnas con esbeltez
grande fallan por inestabilidad en el intervalo elástico debido a flexión, torsión o una
combinación de ambas; los niveles de esfuerzos en el que se presenta la falla no llegan al límite
de proporcionalidad. Las columnas con esbeltez intermedia fallan por inestabilidad en el
intervalo inelástico, en el cual parte de la sección transversal está plastificada por la presencia
de esfuerzos residuales.
En la fig se muestra de manera cualitativa los esfuerzos de falla para una columna aislada a
compresión pura en función de su relación de esbeltez. En el tramo AB la falla ocurre por
aplastamiento pudiendo llegar al intervalo de endurecimiento por deformación, tramo BE, esto
ocurre en las columnas cortas. El tramo CD la falla ocurre por pandeo elástico y describe el
comportamiento de las columnas esbeltas, este tramo queda descrito con la fórmula de Euler
para pandeo de columnas. El punto C representa el límite entre la falla por pandeo elástico y la
falla por pandeo inelástico y va a depender del nivel de esfuerzos residuales en la columna. El
tramo BC describe el comportamiento de las columnas intermedia que fallan por pandeo
inelástico, este tramo se representa por curvas semi-empirica que unan los puntos A y C.
Para este manual se adopta la ecuación propuesta por las NTC-Acero del RCDF-2004 que
corresponde a una sola curva que representa el comportamiento de columnas de cualquier
esbeltez y toma en cuenta las imperfecciones iníciales que pueda presentar la columna.
𝜋𝜋 2 𝐸𝐸
𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 = (10.4.13)
(𝐾𝐾𝐿𝐿𝑥𝑥 ⁄𝑟𝑟𝑥𝑥 )2
𝜋𝜋 2 𝐸𝐸
𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 = 2 (10.4.14)
�𝐾𝐾𝐿𝐿𝑦𝑦 ⁄𝑟𝑟𝑦𝑦 �
F ez es el esfuerzo que ocasiona el pandeo de la columna si solo se permite pandeo por torsión
igual a:
𝜋𝜋 2 𝐸𝐸𝐶𝐶𝑎𝑎 1
𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 = � 2
+ 𝐺𝐺𝐺𝐺� 2 (10.4.15)
(𝐾𝐾𝑧𝑧 𝐿𝐿𝑧𝑧 ) 𝐴𝐴𝑟𝑟𝑜𝑜
20
Cada una de las raíces de la ec. 10.4.14 que se han obtenido para secciones sin ningún eje de
simetría es una función de F ex , F ey y F ez , lo que indica que no puede haber pandeo por flexión o
torsión pura, si no los tres posibles modos son flexión y torsión combinadas (flexotorsión). El
menor de los tres esfuerzos críticos obtenidos al resolver la ec. 10.4.14, que es el que ocasiona
el pandeo de la columna, es siempre menor que el más pequeño de los esfuerzos críticos
individuales F ex , F ey y F ez .
En el caso de secciones con un eje de simetría el término x 0 será igual a cero y por tanto la ec.
10.1.14 se reduce a:
�𝑟𝑟𝑜𝑜2 �𝐹𝐹𝑒𝑒 − 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 �(𝐹𝐹𝑒𝑒 − 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 ) − 𝐹𝐹𝑒𝑒2 𝑦𝑦𝑜𝑜2 �(𝐹𝐹𝑒𝑒 − 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 ) = 0 (10.4.16)
La ec. 10.4.15 tiene tres soluciones: La primera F e = F ex , que corresponde a pandeo por flexión
alrededor del eje normal al de simetría, que en este caso es x. Las otras dos soluciones son las
raíces de la ecuación de segundo grado que se obtiene al igualar a cero la expresión contenida
en el paréntesis rectangular; son dos cargas críticas de pandeo por flexotorsión. La menor de
ellas es siempre más pequeña que F ey y F ez , pero puede ser mayor o menor que F ex . La
solución para el pandeo por flexotorsión, tomando la menor de las raíces de la ecuación, será:
1 2
𝐹𝐹𝑒𝑒 = ��𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 + 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 � − ��𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 + 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 � − 4𝐻𝐻𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 𝐹𝐹𝑒𝑒𝑒𝑒 � (10.4.17)
2𝐻𝐻
Esta es la ecuación que se recomienda en el manual para el cálculo del esfuerzo crítico para el
pandeo por flexotorsión en columnas con un solo eje de simetría.
En el caso de columnas con secciones transversales con dos ejes de simetrías los centros de
gravedad y de torsión coinciden, de manera que x 0 = 0 y y o = 0 y la ec. 1 se reduce a:
El pandeo local de los elementos planos que componen una sección del tipo 4 puede ocurrir
para un esfuerzo mucho menor que el esfuerzo crítico de pandeo de la columna en su conjunto
pero, como se menciono anteriormente, aunque el elemento plano haya alcanzado su esfuerzo
de pandeo no colapsarán sino que le queda una reserva de resistencia posterior al pandeo. Por
lo que podemos tomar en cuenta este fenómeno calculando el esfuerzo crítico de la columna en
su conjunto y luego en base a esto calcular los anchos efectivos de la sección transversal.
Si los esfuerzos críticos de pandeo de conjunto de la columna son menores que los esfuerzos
críticos de pandeo de los elementos planos que conforman la sección entonces el factor de
reducción, ρ, será igual a uno. En caso contrario habrá una reducción en el ancho a considerar
para cada elemento y por tanto en el área total para el cálculo de la resistencia a compresión de
la columna.
Al igual que en las columnas, las vigas en flexión pueden fallar por pandeo lateral acompañado
de una rotación de la sección, flexotorsión, ó por pandeo local de alguno de sus elementos
planos.
21
MR / FR
Mp
Tipo 2 Tipo 1
My
Tipo 3
Tipo 4
x
Posición
descargada
Posición
deformada
Peso muerto
carga aplicada
verticalmente φ
(a) (b)
Fig. 10.4.5 Ménsula de acero sometida a una carga vertical puntual en su extremo: (a) posición pandeada
lateralmente (b) desplazamiento lateral y giro para un segmento de la viga.
22
En el caso de una viga sometida a flexión alrededor de su eje de mayor inercia que no tiene
ningún tipo de restricción lateral la falla puede ser debida al pandeo lateral por flexotorsión. La
Fig. 10.4.5 ilustra el fenómeno sobre una viga a la cual se le aplica una carga puntual vertical en
su extremo libre.
0.67 Mcr
Mp
0.00 0.0 L
Fig. 10.4.6 Curva momento resistente vigas en flexión.
Al igual que en el caso de columna, para el pandeo inelástico por felxotorsión se utiliza una
curva de transición semiempirica entre el punto que representa el límite de proporcionalidad y el
punto de intersección de la resistencia máxima a flexión de la viga con la longitud máxima sin
soporte lateral para la cual la viga desarrolla su resistencia máxima, ver Fig. 10.4.6.
El momento crítico elástico de pandeo lateral para una viga con un eje de simetría simplemente
apoyada, con un par de momento aplicado en sus extremos y flexionada alrededor del eje
centroidal perpendicular al eje de simetría, se puede obtener estudiando el equilibrio de la barra
deformada, obteniendo la ecuación característica y determinando el momento crítico:
23
𝜋𝜋 2 𝛿𝛿�𝐸𝐸𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐺𝐺𝐺𝐺 𝜋𝜋 𝜋𝜋𝜋𝜋 2 𝜋𝜋𝜋𝜋 2
𝑀𝑀𝑐𝑐𝑐𝑐 = + ��1 + � � � 𝐸𝐸𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐺𝐺𝐺𝐺 + � � 𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐶𝐶𝑎𝑎 (10.4.20)
2𝐿𝐿 𝐿𝐿 2 𝐿𝐿
donde,
1
𝛽𝛽𝑥𝑥 = �� (𝑥𝑥 2 𝑦𝑦 + 𝑦𝑦 3 )𝑑𝑑𝑑𝑑� − 2𝑦𝑦0 (10.4.22)
𝐼𝐼𝑥𝑥 𝐴𝐴
En el caso de secciones con dos ejes de simetría el parámetro β x es igual a cero y, por tanto, la
ec. 10.4.21 se reduce a:
𝜋𝜋 𝜋𝜋𝜋𝜋 2
𝑀𝑀𝑐𝑐𝑐𝑐 = �𝐸𝐸𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐺𝐺𝐺𝐺 + � � 𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐶𝐶𝑎𝑎 (10.4.23)
𝐿𝐿 𝐿𝐿
Estas son las ecuaciones para el cálculo del momento crítico elástico para secciones con un eje
de simetría y doblemente simétrica, respectivamente, utilizadas como parte de este manual,
modificada para diferentes condiciones de cargas en la viga.
La ecuación 10.4.23 es la solución para flexión uniforme sobre la viga no arriostrada, para
tomar en cuenta diferentes estados de carga se introduce un coeficiente C cuyo objetivo es
transformar el diagrama generado por está en uno de flexión uniforme equivalente:
𝜋𝜋 𝜋𝜋𝜋𝜋 2
𝑀𝑀𝑐𝑐𝑐𝑐 = �𝐸𝐸𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐺𝐺𝐺𝐺 + � � 𝐼𝐼𝑦𝑦 𝐶𝐶𝑎𝑎 (10.4.24)
𝐶𝐶𝐶𝐶 𝐿𝐿
El valor del coeficiente C se puede obtener de manera aproximada con la siguiente ecuación:
24
El signo ± se toma positivo para curvatura simple y negativo para doble curvatura. Este factor va
a depender de los valore extremos del momento en la viga y da un valor aproximado del
momento crítico elástico para otras condiciones de cargas diferentes al caso de flexión pura
estudiado. El coeficiente C sustituye el momento variable real sobre la viga que ocasionaría su
pandeo por un momento uniforme equivalente, que produce el mismo efecto. En la Tabla 10.4.3
se presentan los valores para el coeficiente real obtenidos de la solución numérica de la
ecuación de equilibrio (M cr /M Ocr ) y el C propuesto en la ec. 10.4.25 para diferentes condiciones
de carga.
Tabla 10.4.3 Tablas de valores para el coeficiente C.
Viga y Momento
M max M cr /M Ocr 1/C
cargas flector
M 1.00 1.00
M 1.879 1.67
M 2.752 2.50
En vigas de paredes delgadas, secciones tipo 4, la interacción del pandeo local de los
elementos comprimidos con el pandeo lateral de conjunto puede ocasionar una disminución en
la resistencia al pandeo lateral. El efecto del pandeo local en el momento crítico se toma en
cuenta con la siguiente relación (AISI, 1996):
𝑆𝑆𝑒𝑒
𝑀𝑀𝑛𝑛 = 𝑀𝑀𝐶𝐶 � � (10.4.26)
𝑆𝑆𝑓𝑓
25
En esta ecuación F N = M C /S f , que es el esfuerzo nominal de la fibra extrema en compresión
que multiplicado por el modulo elástico, S ex , nos da el momento nominal, M n , que aparece en la
ec. 10.4.26.
10.4.2.4 Cortante
La falla a cortante de las almas de las vigas puede ocurrir por fluencia o por pandeo,
dependiendo de la relación altura/grueso del alma y propiedades mecánicas del acero. Cuando
el alma es robusta, relaciones h/t pequeñas, la falla ocurre por fluencia del alma bajo una fuerza
cortante igual a:
En perfiles laminados y trabes armada podemos tomar en cuenta el efecto benéfico del
endurecimiento por deformación, ya que la falla por fluencia del alma corresponde a
deformación excesiva y no a falla catastrófica, se recomienda tomar la resistencia máxima a
corte igual a:
Para vigas diseñadas plásticamente el cortante resistente disminuye porque existe una
plastificación del alma por flexión.
Para vigas con una relación h/t elevada, la falla ocurre por pandeo elástico del alma, su
resistencia nominal a cortante se determina calculando el esfuerzo crítico de pandeo elástico,
τ cr , de un elemento plano sometido a cortante puro, según la teoría de placas, multiplicado por
el área del alma, se tiene que la resistencia nominal a cortante es igual a:
𝑘𝑘𝜋𝜋 2 𝐸𝐸𝐴𝐴𝑎𝑎
𝑉𝑉𝑛𝑛 = 𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐 𝐴𝐴𝑎𝑎 = (10.4.30)
12(1 − 𝜐𝜐 2 )(ℎ⁄𝑡𝑡)2
donde k es el coeficiente de placa para pandeo por cortante puro, E es el módulo de elasticidad,
υ es el coeficiente de Poisson, h es la altura del alma y t es el espesor del alma. Si υ=0.30 se
simplifica la expresión anterior a:
0.905𝐸𝐸𝐸𝐸
𝑉𝑉𝑛𝑛 = 𝐴𝐴 (10.4.31)
(ℎ⁄𝑡𝑡)2 𝑎𝑎
Para vigas con esfuerzos por encima del límite de proporcionalidad, en cortante τ pr = 0.80τ y , la
falla ocurre por pandeo del alma pero en el intervalo inelástico. No existe ningún tratamiento
teórico para reducir por inelasticidad el esfuerzo crítico para placas con una relación de h/t
intermedia. La resistencia por cortante en el intervalo inelástico se determina con la siguiente
ecuación empírica (De Buen López de Heredia, 2000):
26
de donde τ cre es el esfuerzo crítico de pandeo en el intervalo elástico y τ pr es el límite de
proporcionalidad del acero en cortante, sustituyendo los valores en la ecuación anterior, para τ cr
≤ 0.80 τ y la resistencia por cortante es igual a:
0.65�𝐸𝐸𝐹𝐹𝑦𝑦 𝑘𝑘
𝑉𝑉𝑛𝑛 = 𝐴𝐴𝑎𝑎 (10.4.33)
(ℎ⁄𝑡𝑡)
Esta ecuación representa una línea recta que es también válida para el intervalo de
plastificación del alma que va desde la fluencia, ec. 10.4.28, hasta el endurecimiento por
deformación, ec. 10.4.29. Por lo que la relación h/t hasta la que el alma falla en el intervalo de
endurecimiento por deformación, se obtiene de la ecuación anterior:
0.65�𝐸𝐸𝐹𝐹𝑦𝑦 𝑘𝑘
𝑉𝑉𝑛𝑛 = 𝐴𝐴𝑎𝑎 = 0.66𝐹𝐹𝑦𝑦 𝐴𝐴𝑎𝑎 (10.4.34)
(ℎ⁄𝑡𝑡)
ℎ 𝐸𝐸𝐸𝐸
= 0.98� (10.4.35)
𝑡𝑡 𝐹𝐹𝑦𝑦
0.65�𝐸𝐸𝐹𝐹𝑦𝑦 𝑘𝑘 ℎ 𝐸𝐸𝐸𝐸
𝐴𝐴𝑎𝑎 = 0.577𝐹𝐹𝑦𝑦 𝐴𝐴𝑎𝑎 ⇒ = 1.12� (10.4.36)
(ℎ⁄𝑡𝑡) 𝑡𝑡 𝐹𝐹𝑦𝑦
Por lo que, para 0.98�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 < ℎ⁄𝑡𝑡 ≤ 1.12�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 la falla ocurre por plastificación del alma bajo
un esfuerzo comprendido entre 0.66F y y 0.577F y . Para determinar la relación h/t a partir de la
cual la falla del alma ocurre por pandeo elástico igualamos la ecuación del esfuerzo crítico por
pandeo elástico al límite de proporcionalidad en cortante, 𝜏𝜏𝑝𝑝𝑝𝑝 = 0.80𝜏𝜏𝑦𝑦 = 0.80𝐹𝐹𝑦𝑦 ⁄√3 = 0.462𝐹𝐹𝑦𝑦 ,
tenemos entonces que:
𝑘𝑘𝜋𝜋 2 𝐸𝐸 ℎ 2 ℎ 𝐸𝐸𝐸𝐸
𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐 = � � = 0.462𝐹𝐹𝑦𝑦 ⇒ = 1.40� (10.4.37)
12(1 − 𝜐𝜐 2 ) 𝑡𝑡 𝑡𝑡 𝐹𝐹𝑦𝑦
Tenemos entonces que para 1.12�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 < ℎ⁄𝑡𝑡 ≤ 1.40�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 la falla ocurre por pandeo
inelástico del alma y la resistencia se calcula con la ec. 10.4.33 que es válida en todo el
intervalo 0.98�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 < ℎ⁄𝑡𝑡 ≤ 1.40�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 ; si ℎ⁄𝑡𝑡 > 1.40�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 entonces la falla ocurre por
pandeo elástico del alma y su resistencia se calcula con la ec. 10.4.31.
Para vigas con alma esbelta rigidizada por medio de atiesadores transversales de resistencia y
rigidez suficiente, espaciados de manera adecuada, la resistencia por cortante se obtiene
sumando la resistencia por cortante directo, obtenida con las ecuaciones anteriores, con la
resistencia del campo de tensión diagonal.
27
a a
a a
S
t
E.N.
h
(a) (b)
Fig. 10.4.7 Campo de tensión diagonal.
El campo de tensión diagonal se forma después de que se inicia el pandeo del alma, ℎ⁄𝑡𝑡 >
1.12�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 , por lo que la resistencia por cortante directo es igual a:
𝜎𝜎𝑡𝑡 𝜎𝜎𝑦𝑦
𝑉𝑉𝑛𝑛 = �𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐 + � ℎ𝑡𝑡 (10.4.40)
2𝜎𝜎𝑦𝑦 �1 + (𝑎𝑎⁄ℎ)2
√3 𝜎𝜎𝑦𝑦
𝑉𝑉𝑛𝑛 = �𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐 �1 − �+ � ℎ𝑡𝑡 (10.4.41)
2�1 + (𝑎𝑎⁄ℎ)2 2�1 + (𝑎𝑎⁄ℎ)2
Esta ecuación es válida tanto para la resistencia en el intervalo elástico como en el intervalo
inelástico. Sustituyendo el valor del esfuerzo crítico de pandeo inelástico, 𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐 = �𝜏𝜏𝑝𝑝𝑝𝑝 𝜏𝜏𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐 ,
obtenemos la resistencia nominal a cortante en el intervalo inelástico, 1.12�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 < ℎ⁄𝑡𝑡 ≤
1.40�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 , considerando el aporte del campo de tensión diagonal:
0.65 E F k
=
VN y 1 − 0.870 + 0.50 Fy A (10.4.42)
a
h/t 1+ (a / h) 1+ (a / h)
2 2
28
Igualmente, sustituyendo el valor del esfuerzo crítico de pandeo elástico en la ec. 10.4.41
obtenemos la resistencia nominal a cortante en el intervalo elástico, ℎ⁄𝑡𝑡 > 1.40�𝐸𝐸𝐸𝐸⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 ,
considerando el aporte del campo de tensión diagonal:
VN =
0.905 Ek 1− 0.870 + 0.50 Fy A (10.4.43)
( h / t )2 a
1+ (a / h) 1+ (a / h)
2 2
Todas Las ecuaciones presentadas anteriormente son las consideradas en este manual para el
cálculo de la resistencia a cortante tomadas de las NTC-Metálicas. En la Fig. 10.4.8 se resumen
las ecuaciones utilizadas para el cálculo de la resistencia a cortante en los diferentes intervalos
y los límites considerados para cada intervalo.
1.12 Ek / Fy
1.40 Ek / Fy
0.905 Ek
Vn= Aa
(h / t) 2
0
200
230
260
300
322
101
110
126
140
160
180
h/t
88
29
5.00
𝑘𝑘 = 5.00 + (10.4.44)
(𝑎𝑎/ℎ)2
Se ha visto experimentalmente que los tableros extremos que no tienen continuidad en la trabe,
aunque se coloquen atiesadores de apoyo, no llegan a desarrollar las fuerzas de membrana
necesaria para el campo de tensión diagonal . Por lo que en el tablero extremo no se puede
considerar la resistencia a cortante debido al campo de tensión diagonal, solo su resistencia
debido a la acción de viga en el intervalo de plastificación ó pandeo del alma; el mismo requisito
se debe cumplir para tableros adyacentes a agujeros grandes. Cuando la trabe armada está
conectada directamente a una columna de resistencia y rigidez adecuadas no se requiere
ninguna medida especial.
Columna
Deformación
30
Diseño por Fatiga
Cuando un elemento es sometido a cargas variables repetitivo un número elevado de veces
puede fallar a un esfuerzo menor que el de resistencia. Se considera como un estado límite de
servicio porque se genera durante su operación normal y continua, por lo que se estudia
considerando las cargas sin amplificar.
El método más común para estudiar los efectos de los ciclos de carga en un componente
estructural es mediante la llamada “Curva S-N”. Esta consiste en una gráfica del nivel de
esfuerzo constante requerido para causar una falla por fatiga de un componente dado un
número de ciclos de carga repetitiva. En la Fig. 10.4.10 se ilustra una curva S-N típica, a medida
que se disminuye la amplitud de esfuerzo, S N , aumenta el número de ciclo resistente, N, a
fatiga hasta llegar a una amplitud limite, S TH , tras lo cual una nueva disminución en la amplitud
de esfuerzo no tendrá ningún efecto aparente sobre la vida a fatiga.
DISPERSIÓN
S max
Amplitud de esfuerzo - S
SN Resultados pruebas
(escala aritmetica
No hay falla
ó logaritmica)
S TH
N ciclo de carga - N
(escala logaritmica)
Fig. 10.4.10 Curva S-N típica.
donde m=3 para esfuerzo axial y m=5 para esfuerzo tangencial. En el código europeo se dan
valores de la amplitud de esfuerzo resistente para 2x106 ciclos de carga basado en ensayos de
fatiga sobre probetas a gran escala que incluyen los efectos geométricos y de imperfecciones
estructurales debidas a la fabricación y montaje de la estructura. En este manual se adopta el
formato del AISC utilizado también por CISC para el cálculo de la amplitud de esfuerzo
resistente equivalente. En este formato se da directamente el valor de la constante C F que
depende del tipo de detalle estudiado a fatiga. Para 2x106 ciclos de carga la constante C f tendrá
un valor de:
31
Si evaluamos el valor C F con los valores de la amplitud de esfuerzo resistente recomendado por
las normas europeas para 2x106 ciclos de carga nos dan los mismos valores que recomienda el
AISC para los diferentes detalles.
Fig. 10.4.11 Áreas de incremento local de presión del viento para naves industriales.
Cuando la cubierta de techo no tiene un buen drenaje es importante que el sistema tenga una
rigidez adecuada para evitar la acumulación de agua que podría generar el colapso de la
misma. La acumulación de agua en el techo se convierte en un problema de inestabilidad
cuando no existe una rigidez adecuada de la cubierta.
10.4.5 TRABES
Las trabes son miembros en flexión, de sección I, con al menos un plano de simetría paralelo al
alma de la sección sobre el cual se encuentran ubicadas las cargas. Por tanto, se deben revisar
todos los estados límites de falla asociados a la flexión y el cortante.
32
Los momentos flexionantes son resistidos principalmente por los patines; el alma soporta la
fuerza cortante, por lo que conviene tener un peralte los más grande posible para disminuir el
tamaño de los patines. Cuando la trabes es armada conviene tener un grueso mínimo del alma
para un diseño económico, pudiendo llegar a ser del tipo 4, los patines pueden ser de
cualquiera de los tipos 1 a 3.
Cuando la trabe poseen un alma muy esbeltas, tipo 4 (h/t a mayor a 5.60�𝐸𝐸 ⁄𝐹𝐹𝑦𝑦 ) se debe tener
en cuenta la posible reducción del momento resistente por esbeltez del alma y/o el pandeo del
alma comprimida por la fuerza que le transmiten los patines.
El primer fenómeno se debe a las deformaciones laterales del alma debido a su esbeltez que
hacen disminuyen los esfuerzos normales correspondiente y resista un momento menor que el
predicho por la teoría ordinaria, ya que el patín debe tomar la fuerza de compresión que
soportaba inicialmente el alma.
El segundo fenómeno se debe a que el patín comprimido trabaja como una columna que tiende
a pandearse verticalmente debido a su poca rigidez para flexión alrededor del eje principal
horizontal, por lo que el alma debe proporcionarle un apoyo continuo con una resistencia
adecuada. De la condición de que la resistencia al pandeo del alma comprimida no sea menor
que la fuerza que le transmiten los patines, se llega al límite de la relación h/t a (De Buen López
de Heredia, 2002):
ℎ 𝜋𝜋 2 𝐸𝐸 𝐴𝐴𝑎𝑎 1
≤� 2
(10.4.47)
𝑡𝑡𝑎𝑎 24(1 − 𝜐𝜐 ) 𝐴𝐴𝑝𝑝 𝜎𝜎𝑝𝑝 𝜀𝜀𝑝𝑝
donde,
Para que se alcance el esfuerzo de fluencia, F y , en todo el patín comprimido antes de la falla, la
deformación unitaria considerando que se deben eliminar los esfuerzo residuales de tensión, F rt
= 1150 kg/cm2, debe alcanzar el valor de (F y + F rt )/E. sustituyendo estos valores en la ecuación
anterior y haciendo A a /A p igual a 0.5, que es el valor mínimo típico para trabes, tenemos que:
ℎ 0.48𝐸𝐸
≤
𝑡𝑡𝑎𝑎 (10.4.48)
�𝐹𝐹𝑦𝑦 �𝐹𝐹𝑦𝑦 + 1150�
Cuando existen atiesadores transversales con una separación no mayor de 1.5 veces el peralte
del alama, experimentalmente se ha observado que un valor conservador para esta relación es
igual a:
ℎ 𝐸𝐸
≤ 11.7� (10.4.49)
𝑡𝑡𝑎𝑎 𝐹𝐹𝑦𝑦
33
Cuando existen cargas concentradas, aplicadas en una longitud muy pequeña, se deben
considerar en el diseño ya sea que se coloque atiesadores o no. Estos se comenta en la
siguiente sección.
Las cargas parciales aplicadas en una longitud pequeña, cargas concentradas, producen
esfuerzos transversales distribuidos en el intervalo elástico, Fig. 10.4.12, que se sustituyen por
esfuerzos uniformes en una longitud L.
σ max
Dependiendo de la relación de esbeltez del alma la falla puede ocurrir por: flujo plástico en la
parte superior del alma ó por inestabilidad del alma, ver Fig. 10.4.13: abolladura de una zona
reducida localizada cerca de la carga, y el pandeo del alma acompañado por una distorsión
pronunciada de la sección transversal con desplazamiento lateral del patín.
a) Abollamiento
b) Pandeo
Fig. 10.4.13 Falla por inestabilidad del alma bajo carga concentrada.
Cuando el alma es robusta la falla ocurre por flujo plástico en la zona de terminación de las
soldaduras, en caso de trabas armadas, ó donde terminan las curvas, en caso de trabes
laminadas, que unen el alma con el patín. Este se obtiene considerando la longitud L
multiplicada por el espesor del patín y el esfuerzo de fluencia del alma. La longitud L se
considera tomando una pendiente 1:1 desde el punto de aplicación de la carga a través de la
placa de asiento que la transmite, cuando la hay, y de 1:2.5 en el patín más la soldadura ó radio
de la curva con el alma, Fig. 10.4.14.
34
1:1
k
p 1:2.5 p
k
r
0.5Sy Ss 0.5S
a a
S s +S y
Cuando el alma es muy esbelta la falla se produce por abolladura del alma. Esta resistencia se
evalúa de acuerdo a expresiones semiempiricas que van a depender de la distancia al extremo
del miembro y de la relación entre la longitud de la placa de asiento que transmite la carga y el
peralte de la trabe (De Buen López de Heredia, 2002).
Las almas con una esbeltez intermedia fallan frecuentemente por pandeo acompañadas de un
desplazamiento lateral del patín a tensión, Fig. 10.4.15. Este tipo de falla se observo
experimentalmente y en base a esto se desarrollo un criterio para revisar este estado límite (De
Buen López de Heredia, 1987). Se observo que el pandeo no se presentó cuando se
cumplieron las condiciones siguientes:
Contraventeo
Patín en tensión
Fig. 10.4.15 Pandeo del alma con desplazamiento lateral.
donde,
35
Este tipo de falla se puede evitar colocando un soporte lateral a los patines en tensión ó unos
atiesadores con una longitud igual, por lo menos, a la mitad del peralte de la viga que estén en
contacto con el patín que recibe la carga.
10.4.5.2 Atiesadores
Cuando los atiesadores son utilizados para aumentar la resistencia a cortante de la trabe la
fuerza normal es nula hasta que se inicia el pandeo al alma, por lo que hasta entonces basta
con que posean rigidez lateral suficiente para que se formen líneas nodales a lo largo de sus
intersecciones con el alma, y ésta se pandee en semiondas de longitud igual a la separación
entre ellos. En cambio, al formarse el campo de tensión diagonal los atiesadores tienen que
soportar las componentes verticales de las fuerzas inclinadas que aparecen en el alma y
transmitirlas de uno a otro de los patines, conservándose rectos durante todo el proceso; su
trabajo es semejante al de los montantes de una armadura.
Caso D A at I at
t
(2𝑏𝑏+𝑡𝑡𝑎𝑎 )3
b
1.0 2𝑏𝑏𝑡𝑡𝑎𝑎𝑎𝑎
12
b
y
1.8 𝐴𝐴 𝐼𝐼𝑥𝑥 + 𝐴𝐴(𝑦𝑦 + 0.5𝑡𝑡𝑎𝑎 )2
b 𝑡𝑡𝑎𝑎𝑎𝑎 (𝑏𝑏+0.5𝑡𝑡𝑎𝑎 )3
2.4 𝑏𝑏𝑡𝑡𝑎𝑎𝑎𝑎
3
t
36
y
3.0 𝐴𝐴 𝐼𝐼𝑥𝑥 + 𝐴𝐴(𝑦𝑦 + 0.5𝑡𝑡𝑎𝑎 )2
Cuando los atiesadores son utilizados para evitar que se arrugue o pandee el alma,
transmitiendo fuerzas exteriores al alma deben de ser diseñados como columna de sección
transversal formada por un par de atiesadores y una faja de alma de ancho no mayor que 25
veces su grueso, colocada simétricamente respecto al atiesador, cuando éste es intermedio, y
de ancho no mayor que 12 veces su grueso cuando está en el extremo del alma. Los requisitos
fijados se colocan para una buena transmisión de la carga entre el patín y los atiesadores.
10.4.6 ARMADURAS
Las armaduras son miembros estructurales utilizados para librar grandes claros entre columnas
que transforman los momentos flexionantes en cargas axiales, un par de fuerzas actuando en la
cuerda superior e inferior. Las armaduras con una geometría a base de triángulos, cargas
aplicadas en los nudos de la estructura y sin excentricidades entre los elementos del alma,
todos los elementos mecánicos son fuerzas axiales.
Lx
Punto soportado
Ly Lz lateralmente
A
relaciones de esbeltez:
Kx L x, Ky L y, Kz L z
rx ry rz
CORTE A - A
Fig. 10.4.16 Relación de esbeltez en una armadura con doble ángulos.
Debido a que los elementos en compresión pueden fallar por pandeo antes de alcanzar la carga
máxima resistente estos resultan ser los más críticos en una armadura. El tratamiento de los
elementos de la armadura a compresión es igual que para una columna aislada sometida a
compresión.
37
Cuando en la armadura existen cargas aplicadas directamente sobre las cuerdas y/o la
geometría difiere mucho de una triangular, las fuerzas axiales de sus elementos van
acompañadas de momentos flexionantes. Los elementos se encuentran sometidos a flexo-
tensión o flexo-compresión y es necesario revisar la interacción entre las fuerzas axiales y los
momentos flexionantes.
Mo Mo
vo
P P
vmax
Mo
Mo + Pvmax
Fig. 10.4.17 Elemento barra flexo-comprimido.
donde,
1 + 𝜓𝜓 𝑃𝑃⁄𝑃𝑃𝐸𝐸
𝑀𝑀𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 = � � 𝑀𝑀𝑜𝑜 = 𝐵𝐵1 𝑀𝑀𝑜𝑜 (10.4.51)
1 − 𝑃𝑃⁄𝑃𝑃𝐸𝐸
38
de la sección 10.3.4 sabemos que el factor de amplificación B 1 deducido para barras con pares
en los extremos es igual a:
𝐶𝐶𝑚𝑚
𝐵𝐵1 = (10.4.53)
1 − 𝑃𝑃⁄𝑃𝑃𝐸𝐸
Caso 𝝍𝝍 Cm
0 1.0
10.4.7 COLUMNAS
Las columnas son los miembros estructurales que están sometidos a cargas axiales,
generalmente acompañada de momento de flexión en las dos direcciones principales. Cuando
la columna está sometida a momentos en sus extremos hay que tomar en cuenta el efecto
geométrico de segundo orden que se debe a la deformación lateral respecto al eje recto
original, efecto P-δ, fig. . Este efecto debe ser tomando en cuenta siempre que la columna está
sometida a flexo-compresión.
39
M+Pδ
PM M1 M1
(M1 - M 2 )/h 1
M Pδ Pδ M
(M1 - M 2 )/h
P M2
M2 M2
(a) (b) (c) (d)
Fig. 10.4.18 Efectos geométricos de segundo orden en columnas con extremos fijos linealmente.
𝐾𝐾𝐾𝐾⁄𝑟𝑟 (10.4.55)
donde,
40
(a) (b) (c) (d) (e) (f)
La linea punteada
indica la forma de
la columna pandeada
Fig. 10.4.19 Valores de K para columnas aisladas con diversas condiciones de apoyo.
Cuando los extremos de la columna están fijos linealmente el valor de K se encuentra entre las
condiciones de barra bi-articula y barra bi-empotrada, o sea entre 1.0 y 0.5 para condiciones
ideales; si uno de los extremos puede desplazarse linealmente con respecto al otro, el valor de
K es siempre mayor a la unidad.
Por ejemplo, en el caso de la nave industrial mostrada Fig. 10.4.20, compuesta por una serie de
marco paralelos entre si cuyo cabezal es una armadura y un sistema de contraventeos en la
dirección perpendicular a los marcos y estudiamos los modos de pandeo de un marco tenemos
que: el pandeo en su plano, alrededor del eje x, está acompañado de un desplazamiento, K es
igual o mayor a 1.0 dependiendo de la restricción dada por la armadura y en la base de la
columna, y su longitud libre de pandeo es igual a la altura h; el pandeo en el plano
perpendicular no existe desplazamiento lateral debido a la restricción dada por los
contraventeos, K es igual o menor a 1.0 dependiendo de las restricciones en los extremos de la
columna, y su longitud libre de pandeo se disminuye a la mitad, h/2, debido a el soporte lateral
brindado por los largueros de la fachada. En este caso se deben revisar las dos formas posibles
de pandeo, y utilizar para el diseño la relación de esbeltez mayor.
41
Marcos rígidos
y
A
x
L y
A S x
B B
d d
L/2 h/2
h
L/2 h/2
S S
L
Pandeo alrededor del eje x Pandeo alrededor del eje y
(c) CORTE A - A (d) VISTA B - B
x
A A d
L d
s
CORTE A - A
Kx L Ky L
rx = ry ; rx = ry
,
Kz s
rz
d
Fig. 10.4.21 Relación de esbeltez de una columna compuesta.
42
10.4.8 DISEÑO PERFILES DOBLADOS EN FRIO
En general, la resistencia para perfiles doblados en frio se calcula de manera similar a como se
calcula la resistencia de los perfiles de acero laminados. La diferencia es que para cada estado
límite debe de tomarse en cuenta el ancho efectivo de los elementos que conforman la sección
y utilizar las propiedades efectivas para el cálculo de la resistencia. El ancho efectivo de cada
elemento va a depender de la relación de esbeltez, las condiciones de bordes y el esfuerzo
máximo a compresión que actúa sobre cada elemento plano.
Los principales limite de falla para perfiles doblados en frío sometidos a flexión son: fluencia por
flexión, inestabilidad lateral elástica ó inelástica, fluencia ó pandeo de alma por cortante y
fluencia ó pandeo del alma por abolladura. La viga debe ser estudiada y diseñada contra estos
tipos de falla o combinación de estos.
El cálculo de la resistencia a flexión para perfiles doblados en frio se hace obteniendo el módulo
elástico efectivo con respecto al eje de flexión para el esfuerzo a compresión de falla. El
esfuerzo a compresión de falla puede deberse a fluencia por flexión ó por inestabilidad lateral
de la viga en el rango elástico ó inelástico. El módulo elástico efectivo se calcula obteniendo los
anchos efectivos de los elementos planos que conforman la sección.
La resistencia al corte de las almas de las vigas está determinada ya sea por la fluencia o por el
pandeo, dependiendo de la relación de aspecto de está (h/t) y de las propiedades mecánicas
del acero. Esta será calculada de acuerdo a las especificaciones utilizadas para los perfiles
laminados de acero.
(a) (b)
Debido a que el desarrollo teórico de la resistencia a la abolladura del alma para miembros
flexionados de acero doblado en frío es bastante complicado, dado que involucra muchas
variables, los requisitos de diseño actuales se basan en exhaustivas investigaciones
experimentales realizadas por el AISI durante las décadas de los años 40´s y 50´s.
43
1. Carga en el extremo sobre un ala
2. Carga interior sobre un ala
3. Carga en el extremo sobre dos alas
4. Carga interior sobre dos alas
La resistencia a compresión para perfiles doblados en frío se debe calcular de acuerdo a las
especificaciones para el cálculo de la resistencia para el estado límite de pandeo por torsión o
por flexo-torsión pero utilizando el área efectivas, 𝐴𝐴𝑒𝑒 , de la sección calculada para el esfuerzo
de pandeo lateral a compresión. Las propiedades efectivas se calculan utilizando los anchos
efectivos calculados de acuerdo a los criterios generales presentados al principio del capítulo.
Para flexión se utiliza el mismo concepto que para compresión. Se considera la misma ecuación
para calcular la resistencia a flexión que para miembros de sección constante pero utilizando
los factores h s y h a para modificar la longitud para la resistencia a la torsión de Saint Vernant y
la resistencia al alabeo, respectivamente.
44
CAPÍTULO 10.5
COMENTARIOS ELEMENTOS
ADICIONALES
10.5.1 ELEMENTOS DE ARRIOSTRAMIENTO
El uso más eficiente de los elementos a compresión se logra cuando se utiliza
arriostramiento para prevenir el pandeo o inestabilidad lateral de los miembros o la
estructura completa. Su función es disminuir la longitud de pandeo.
1 Establecer los puntos de soporte lateral y calcular la resistencia a pandeo lateral del
elemento en compresión considerando los arriostramiento.
2 Estimar el coeficiente β basado en el número de segmento de igual longitud sin
soporte lateral.
3 Calcular rigidez teórica necesaria, 𝑘𝑘𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖 = 𝛽𝛽𝑃𝑃𝑐𝑐𝑐𝑐 /𝐿𝐿.
4 Seleccionar un área para el arriostramiento lateral tal que su rigidez sea mayor o igual
a 2𝑘𝑘𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖𝑖 .
5 Revisar que la fuerza requerida pueda ser resistida por el arriostramiento.
(a) (b)
Fig. 10.5.1 Pandeo Lateral sistema de piso o techo (Salmon & Johnson, 1990).
Para ampliar más acerca de arriostramiento por estabilidad lateral ver la publicación de
Lutz y Fisher (1985) ver también Fisher (1983). Para arriostramiento lateral de cuerdas en
compresión de armaduras ver Nair (1988).
45
El arriostramiento para carga lateral generalmente se coloca en los techos de naves
industriales con grandes relaciones largo ancho y como sistema resistente en la dirección
perpendicular al sistema principal de carga. Típicamente se utiliza elementos en
diagonales esbeltos que solo trabajan en tensión para dar arriostramiento lateral a los
elementos principales. Este sistema es muy eficiente para aumentar la rigidez lateral de la
estructura pero siempre se debe tomar en cuenta que este permanezca en el rango
elástico para evitar grandes deformaciones laterales. En la sección 10.3.2 se emiten
recomendaciones sobre el análisis y diseño de elementos diagonales de arriostramiento
diseñados solo a tensión.
Aún así, existen situaciones donde es necesario el uso de perfiles laminados en caliente.
Los perfiles laminados en caliente generalmente son usados cuando:
46
10.5.3 MUROS DE CERRAMIENTO
La elección del tipo de fachada de una nave industrial va a depender de diversos factores,
siendo muy variable el costo relativo de estos. Entre los factores que pueden influir la
elección del sistema de fachada podemos citar:
1. Costo
2. Apariencia
3. Facilidad de construcción
4. Rapidez de construcción
5. Propiedades de aislamiento
6. Aislamiento contra fuego
7. Aislamiento acústico
8. Facilidad de mantenimiento y limpieza
9. Facilidades para futura ampliación
10. Durabilidad del terminado del muro
Existe una gran variedad de tipos de muros de cerramiento utilizados en este tipo de
construcción. Estos los podemos clasificar en tres grandes grupos: Muros de
revestimiento metálico, muros de panel prefabricado y muros mampostería.
Los paneles metálicos tienen ventajas en cuanto a los requerimientos de servicio por dos
razones principales: 1) su perfil corrugado les permite acomodar la deformación fuera de
su plano, y 2) el material utilizado y los elementos de sujeción son dúctiles. Por tanto los
límites de distorsión para este tipo de fachada pueden ser mayores.
Los límites de distorsión para marcos recomendados en naves industriales con fachadas
en muros de mampostería son fijados para limitar el tamaño de las grietas inevitables en
la base del muro. Los muros de mampostería reforzados se consideran que tienen un
comportamiento similar a los paneles prefabricados, simplemente apoyado articulados en
la base. Por tanto se fija los mismos límites de distorsión que para los paneles
prefabricados.
10.5.4 FIRME
10.5.4.1 Espesor mínimo
Este es el espesor mínimo especificado por las NTC-Concreto (Gobierno del Distrito
Federal, 2004c) para zapatas de concreto reforzado. También se ha visto en la práctica
de la experiencia en este tipo de estructuras que un espesor de 15 cm es el mínimo
recomendado cuando se utiliza concreto simple en firme para naves industriales.
47
10.5.4.2 Refuerzo mínimo
Las losas industriales se construyen algunas veces sin refuerzo de ningún tipo, pero se
recomienda a menudo la utilización de una malla de alambrón o un refuerzo ligero con
barras para controlar el agrietamiento, o bien fibras metálicas.
El refuerzo mínimo para losas industriales con refuerzo es el mínimo especificado por las
NTC-Concreto (Gobierno del Distrito Federal, 2004c) por cambios volumétricos en
elementos estructurales expuestos a la intemperie.
Las losas de naves industriales a menudo soportan cargas importantes con una
distribución no uniforme sobre la superficie debido al almacenamiento de material. Estas
cargas pueden provocar grandes esfuerzo de tensión en la parte superior de la losa de
concreto a lo largo de los pasillos. Esto puede provocar el rápido deterioro y
desintegración de la losa debido al tráfico de personas y equipos de manejo de
materiales.
48
Por tanto se propone una ecuación desarrollada por Rice (1957) para el momento flector
negativo crítico en la línea central del pasillo basado en la distribución de cargas y juntas
mostrado en la Fig. 10.5.2.
El ancho crítico de pasillo se define como el ancho que maximiza el momento flector
negativo en la ecuación propuesta por Rice. Existen tablas disponibles (CRSI, 1983) que
dan el ancho crítico del pasillo y momento flector negativo para diferentes espesores de
losa y valores del módulo de la sub-rasante.
Otras cargas que pueden llegar a ser crítica en losas de naves industriales es la que
transmiten las patas de estantes altos de almacenamiento o las ruedas de equipos para
manejar los materiales, como montacargas.
Los métodos de diseño varían desde aquéllos puramente empíricos hasta los que se
fundamentan en análisis teóricos como las ecuaciones de Westergaard (Nilson & Winter,
1997).
Fig. 10.5.3 Carga concentrada y transmitida por una rueda: (a) deformación y agrietamiento (b)
variación del momento flector.
Existen gráficas de diseño publicadas por la Portland Cement Association (PCA) que
permiten una evaluación rápida de los esfuerzos de tensión por flexión debido a cargas
concentradas (Spears, 1978). También se pueden encontrar detalles y gráficas de diseño
en el libro de Ringo y Anderson (1992) para este tipo de losas y diferentes condiciones de
carga.
49
10.5.4.5 Juntas
Es usual que se incluyan juntas en las losas para tener en cuenta la contracción del
concreto o para aislar cimentaciones de maquinarias o muros, o simplemente por
conveniencia en la construcción.
Existen juntas de contracción o control que se colocan para asegurar que las grietas
debido a la contracción se formen de manera recta y tengan un patrón regular. Esta se
corta con un disco una vez que el concreto ha fraguado y se hace a una profundidad de
un cuarto del espesor de la losa, ver Fig. 10.5.4. Si estás no se hacen en el tiempo
adecuado se corre el riesgo de que se figure el firme.
Las juntas de aislamiento permiten el movimiento entre la losa de piso y elementos fijos
como base de maquinarias o muros evitando esfuerzo por flexión debidos al
desplazamiento vertical de la losa, ver Fig. 10.5.5. También se utilizan alrededor de
columnas para evitar agrietamiento incontrolado de la losa sobre la base de la columna. El
material de contracción en la junta permite la expansión de la losa debido a cambios
térmicos o por fraguado sin inducir esfuerzo en esta.
50
Fig. 10.5.6 Junta de aislamiento en Columna (diamante).
Por último tenemos las juntas de construcción que son colocadas a conveniencia del
constructor para interrumpir el vaciado y poder reiniciar posteriormente, ver Fig. 10.5.7.
Para evitar movimientos desplazamientos relativos entre losas de diferentes vaciado se
coloca una barra de amarre y se incluye una llave en forma de cuña para que haya una
transferencia eficaz de la carga.
En la Fig. 10.5.8 se muestra una planta típica de una nave industrial donde se señala los
tres tipos de juntas utilizadas en la construcción de este tipo de estructura.
1 2 3 4 5 6 7
L L L L L L
ETAPA 2
JUNTA CONSTRUCTIVA
JUNTA CONTRACCIÓN
B JUNTA AISLAMIENTO
JUNTA CONSTRUCTIVA
B
JUNTA AISLAMIENTO
51
Finalmente se comenta que la calidad de la base del firme es muy importante para que el
firme no tenga deterioro. También el curado es trascendental para lograr una calidad
adecuada; al respecto se recomienda colocar una lona con yute de tal forma que
conserve el agua y por ende la humedad.
En Concrete Floors on Ground (Spears, 1978) y Designing Floor Slabs on Grade (Ringo &
Anderson, 1992) se abunda sobre detalles y sugerencias para la ubicación de las juntas.
Tradicionalmente la calidad superficial del piso es medida con una regla de 3 metros (10
pies) a lo largo de la superficie. La diferencia en elevación entre los puntos extremos de la
regla indicaba la calidad de la superficie. Si la diferencia era pequeña, el piso se
consideraba plano, y si existía una diferencia muy grande se consideraba como piso no
plano. Está metodología se aplicaba en varios puntos de la superficie del firme en todas
direcciones para asegurar que fuera lo más plana posible. Este sistema no toma en
cuenta las ondulaciones del piso existente entre los puntos extremos de la regla.
Superficie de piso
Nivelación
inclinación del piso no paralela
a la rasante de diseño
Rasante de
Diseño
Planicidad
Superficie de piso no plana
Debido a las exigencias de los nuevos equipos utilizados en área de almacén que
requieren de pisos más planos y estadares más confiables para su medición se ha
desarrollado, en los últimos años, el sistema de número F.
El sistema de número F ó “números fase del perfil del piso”, consiste en utilizar dos
números adimensionales que describen la calidad superficial del piso, el primero indica la
planicidad, F f , y el segundo número indica la nivelación, F l . La manera de realizar las
mediciones y de calcular los números F se detallan en la norma ASTM D-1155 (método
estándar para la determinación de la planicidad y nivelación del piso, empleando el
sistema de números F). Existen dispositivos utilizados para medir los números f pero este
también se puede hacer de manera óptica siguiendo la formulación de la norma (CEMEX,
2002).
Los valores dados para la tolerancia y terminado para firme están en función del grado de
la calidad superficial requerido, que depende de las necesidades que nos dicte el uso del
piso y de las exigencias de los equipos a utilizar durante la operación de la estructura. Por
lo que para evitar costos de construcción y para facilitar la construcción los pisos no
deben ser más planos o nivelados de lo necesario.
52
CAPÍTULO 10.6
COMENTARIOS CONEXIONES
10.6.1 CRITERIOS GENERALES
El diseño de los conexiones entre los elementos estructurales de una nave industrial metálica
debe estar de acuerdo a la filosofía de diseño por estados límites de falla que se establecen en
el capitulo C.1.1 Métodos de Diseño. Por lo que la resistencia nominal de la conexión
multiplicada por un factor de resistencia, menor ó igual a la unidad, debe ser mayor que la suma
de las cargas de diseño multiplicadas por factores de cargas.
Las conexiones están conformadas por un elemento de unión (placas, ángulos, ménsulas,
atiesadores) y conectores o sujetadores (remaches, tornillos, soldadura). Los remaches fueron
los elementos de unión que frecuentemente se usaban en el siglo XIX hasta mediados del XX.
En la actualidad ya no se emplean, por lo que no será tratada la evaluación de la resistencia de
los remaches en este trabajo.
La falla de un elemento de conexión (placas) en tensión se puede presentar de dos manera: por
la plastificación total cuando se alcanza el esfuerzo de fluencia en todos los puntos de la
sección que ocasiona elongaciones grandes e incontrolables que provoquen la falla de la
estructura de la que forma parte, y cuando existe reducción del área de la sección por la
presencia de tornillos o remaches que ocasionan la falla por fractura bajo un esfuerzo menor
que el que ocasiona el flujo plástico de la sección total. La falla por fractura se puede presentar
también cuando el miembro estructural en tensión no está conectado de manera total, sino por
algunos de sus componentes, ver fig.
Para el cálculo de la resistencia al flujo plástico se utiliza el área total de la sección transversal.
Los agujeros no se tienen en cuenta cuando se revisa el estado límite de flujo plástico dado que
existe una concentración de esfuerzos en la vencida de estos (ver Fig. 10.6.1) que ocasiona
que rápidamente entren dentro del intervalo de endurecimiento por deformación sin que se
presente una plastificación de la sección completa, por lo que no representa un estado límite de
falla.
Area total, A t
Fy Fy
Area neta, A n
53
10.6.2.1.2 Estado límite de fractura en la sección neta:
• El ancho del agujero se toma 1.5 mm mayor que el tamaño nominal del tornillo.
• El ancho neto de cada parte se obtiene restando al ancho total la suma de los anchos de
los agujeros.
• Cuando los agujeros están dispuestos en una línea diagonal respecto al eje de la pieza,
o en zigzag, deben estudiarse todas las trayectorias posibles para determina el ancho
neto menor, ver Fig. 10.6.2. El ancho neto se obtiene restando del ancho total la suma
de los anchos de todos los agujeros de la trayectoria seleccionada y sumando la
cantidad s2/4g por cada diagonal. En esta ecuación s es la separación longitudinal,
centro a centro, entre agujeros (paso) y g es la separación transversal, centro a centro,
entre ellos (gramil).
Diametro agujero, d
1,2,3
g P
B
g
Cuando el elemento se encuentra conectado solo por uno de sus componentes, además de
considerar el área neta, se debe considerar la eficiencia de la sección que va a depender de
diversos factores, ver Fig. 10.6.3. El área neta efectiva se puede determinar a partir de la
siguiente expresión empírica:
𝑥𝑥̅̅
𝐴𝐴𝑒𝑒 = 𝐴𝐴𝑛𝑛 �1 − � (10.4.1)
𝐿𝐿
donde,
An área neta del elemento, para elemento soldado el área neta es igual al área total de la
sección;
L longitud de la junta; y
𝑥𝑥̅ distancia entre el plano de corte y el eje centroidal del elemento conectado.
54
Placa de conexión
_
x
G
Material que
no trabaja
G _
x
L= Longitud de
la conexión
Placa de conexión
Fig. 10.6.3 Distribución de esfuerzos en una sección "H" conectada por los patines.
En la Tabla 10.6.1 aparecen como considerar la distancia 𝑥𝑥̅ para diferentes tipos de perfiles
conectados solo por una de las partes que los conforman.
�.
Tabla 10.6.1 Determinación de 𝑥𝑥
Conexión �
Distancia 𝒙𝒙
L es igual a la
distancia entre
tornillos extremos
55
Se trata como un angulo
El área neta efectiva también se puede calcula de manera aproximada utilizando un factor de
eficiencia, U, que dependerá de la forma como están conectadas las partes. De esta forma el
área neta efectiva será igual a:
a. Secciones laminadas o soldadas “H” o “I” con patines de ancho no menor que 2/3 del
peralte, y tés estructurales obtenidas de ellas o formadas por dos placas soldadas,
conectadas por los patines, con tres o más conectores en cada línea en la dirección de
la fuerza: U=0.90.
b. Secciones laminadas o soldadas “H” o “I” que no cumplan las condiciones del párrafo
anterior, tés estructurales obtenidas de ellas o formadas por dos placas soldadas, y
todas las secciones restantes, incluidas las hechas con varias placas, con tres o más
conectores en cada línea en la dirección de la fuerza: U=0.85.
c. Todos los miembros que tengan sólo dos sujetadores en la dirección de la fuerza:
U=0.75.
d. Para ángulos conectados por una sola ala con cuatro o más conectores en la dirección
de los esfuerzos: U=0.80.
e. Para ángulos conectados por una sola ala con menos de cuatro conectores en la
dirección de los esfuerzos: U=0.60.
En conexiones soldadas se proponen los siguientes criterios para el cálculo del área efectiva:
a. Cuando la transmisión se hace sólo con soldaduras transversales el área neta se toma
igual al área de los elementos conectados directamente con U = 1.0.
56
b. Cuando la fuerza de tensión se transmite a una placa por medio de soldaduras
longitudinales colocadas a lo largo de los dos bordes, en el extremo de la placa, el área
neta se toma igual a área de la placa y el coeficiente U es igual a:
Si L > 2w U=1.00
Si 2w > L > 1.5w U=0.87
Si 1.5w > L > w U=0.75
La falla ocurre cuando una de las fuerzas, cortante ó tensión, alcanzan la resistencia de ruptura
mientras que la otra fuerza puede provocar fluencia plástica o romper parte de la sección. El
tipo de falla va a depender de la relación entre las resistencia a la ruptura, que es proporcional a
las longitudes que trabajan a tensión y cortante, ver Fig. 10.6.4.
Po
Po
Fuerza de
Fuerza de
tensión
tensión
pequeña
grande
Fuerza Po Fuerza
cortante cortante
grande grande
Po
57
Como se observa en la Fig. 10.6.5 el área de ruptura va a estar limitada por los agujeros de los
tornillos en una zona que puede sufrir desprendimiento en la conexión. La longitud paralela a la
fuerza estará sometida a cortante mientras que la longitud perpendicular a la fuerza estará
sometida a tensión.
zona
despatinada
Cortante
b
d
Cortante
Tensión
Las áreas total y neta se calculan de acuerdo a los criterios establecidos en los elementos
sometidos a tensión.
10.6.3 TORNILLOS
La transmisión de la fuerza en una conexión por pasador ó tornillo se muestra en la Fig. 10.6.6.
Placa A Pasador
a
Placa B
P
P
Diagrama de cuerpo libre
de la placa A
P P
Diagrama de cuerpo
a a Diagrama de cuerpo libre
libre de pasador
P de dos partes del pasador,
P P se muestra la transmisión
b
P b P de fuerza cortante
P
P P
Diagrama de cuerpo libre
de la placa B
58
En estructuras de acero se emplean dos tipos de tornillos: ordinarios (ASTM A307) y de alta
resistencia (ASTM A325 y A490). Los tipos de falla que se pueden presentar en los tonillos se
muestran en la Fig. 10.6.7. La falla puede ser en el tornillo o en el material conectado.
e) Falla de tornillos en
f) Falla de tornillos por flexión g) Falla de la placa por tensión
tensión
Fig. 10.6.7 Tipos de falla que se pueden presentar en conexiones atornilladas
Las conexiones son generalmente clasificadas de acuerdo a los esfuerzos que actúan en ellas,
estos son de tensión, cortante o una combinación de ambos.
Al apretar las tuercas durante la colocación de los tornillos se genera la unión y por ende
fricción entre las partes unidas, además se desarrolla una tensión en el vástago del tornillo, que
impide el movimiento del material conectado en la dirección del eje del tornillo.
Las conexiones que trabajan por fricción, donde el deslizamiento no es aceptable, desarrollan la
resistencia al deslizamiento dependiendo de la magnitud de la fuerza de apriete. Para los
tornillos que trabajan a cortante por aplastamiento solo es necesario llegar hasta el “apriete
íntimo”, esto es cuando todas las partes en conexión están en contacto firme.
Existe varios métodos para medir la fuerza de pre-esfuerzo en los tornillos: método de la vuelta
de tuerca, llave de tuerca calibrada, arandelas indicadores de tensión directa, tornillos de
tensión controlada, etc.
59
10.6.3.2 Tornillos sujetos a tensión
Al apretar los tornillos se generan esfuerzos combinados de tensión y torsión. En la Fig. 10.6.8
se muestra que los esfuerzos por torsión no influyen significativamente en la resistencia a
tensión del tornillo. La figura hace referencia a los tornillos A325, siendo análogo para los
tornillos A490.
Por otro lado, se ha estudiado el efecto que produce la variación en la longitud de la cuerda
encontrándose que tampoco afecta las características de la curva carga-alargamiento del
tornillo.
Fuerza de tensión
especificada
Tensión directa después de 21 de vuelta
60 Tensión directa
50
Tensión por torsión
40 Tensión
mínima
30
4 81 in.
20
10
7
8 in. A325
Elongación (in)
La resistencia nominal del tornillo a tensión es igual a la resistencia última a tensión del acero
del tornillo, F U , multiplicado por un área crítica de la sección transversal de la parte roscada, la
cual se denomina “área de esfuerzo” y se define como:
𝜋𝜋 2.4747 2
𝐴𝐴𝑠𝑠𝑠𝑠 = �𝐷𝐷 − � (10.4.3)
4 𝑛𝑛
Donde D es el diámetro nominal del tornillo y n es el número de hilo por pulgada de rosca dado
por el fabricante. Las normas utilizan un valor promedio para calcular A st igual a 0.75 veces el
área que corresponde al diámetro nominal. De donde, la resistencia nominal a tensión, F U A st ,
se puede escribir como F U (0.75A b ), de donde F t = 0.75F U y la resistencia a tensión es igual a:
donde,
60
FR factor de resistencia, igual a 0.90;
Ab área nominal del tornillo; y
FU resistencia última a tensión del acero del tornillo.
Las conexiones con tornillos de alta resistencia sometidos a cortante en las que las placas
conectadas se traslapan se pueden clasificar en dos tipos, de acuerdo con su comportamiento.
El proceso de carga se muestra en la Fig. 10.6.9 para una junta traslapada, el cual se divide en
cuatro etapas:
4. Los tornillos, las placas o ambos se deforman plásticamente hasta que, finalmente,
se presenta la fractura de alguno de ellos.
80
Esfuerzo cortante promedio en tornillos (klb/pulg 2 )
50
Calculada
40
Transferencia de carga
por cortante + aplastamiento
30
Deslizamiento
20 Transferencia de carga
por fricción
10
0
0.10 0.20 0.30 0.40 0.50 0.60 0.70 0.80 0.90
Deformación conexión (pulg.)
1. Fricción.
2. Cortante y aplastamiento.
61
Los tornillos A490 cuentan con mayor resistencia a tensión y a cortante que los tornillos A325,
aunque presentan un ligero decremento en la capacidad de deformación. La resistencia a
cortante es aproximadamente el 62% de la resistencia a tensión para un sujetador, sin importar
el tipo. Las pruebas en uniones atornilladas han demostrado que la fuerza de apriete no tiene
relación con la resistencia última a cortante, como se muestra en la Fig. 10.6.10 (Kulak, Fisher,
& Struik, 2001).
80 120
100 1 1 21vuelta
apriete 2 vuelta
60
80
P
40 60
Tensión por torsión
Tornillo prueba
40
20 A 490
1 20
4" 8"
0 0
0 .02 .04 .06 .08 0 .02 .04 .06 .08
Deformación (pulg.) Deformación (pulg.)
La resistencia a cortante está afectada directamente por el área a cortante de los tornillos. Se
ha visto experimentalmente que la relación entre la resistencia a cortante de la parte roscada y
la resistencia a cortante de parte no roscada se encuentra entre los valores de 0.70 a 0.83.
62
. En la Fig. 10.6.11 se muestra la influencia de la localización de los planos de corte en la
gráfica carga–desplazamiento de los tornillos A325. Cuando los planos de corte pasan por el
vástago, la fuerza cortante y la capacidad de deformación se maximizan. Cuando ambos planos
pasan por la parte roscada se obtiene la menor fuerza cortante y la menor capacidad de
deformación. Los reglamentos consideran una reducción de 0.80 (Kulak G. , 2002).
Todas las conexiones con tornillos de alta resistencia pretensados transmiten originalmente la
carga por fricción entre las superficies de falla. Las conexiones que trabajan por fricción reciben
el nombre de “críticas al deslizamiento”. La resistencia al deslizamiento es directamente
proporcional al producto de la fuerza inicial de apriete por el coeficiente de deslizamiento. Por lo
que, suponiendo una tensión igual en todos los tornillos (Kulak G. , 2002), se tiene la siguiente
relación para determinar la resistencia:
donde,
donde,
63
fricción usado con respecto a su valor medio, la relación entre la fuerza de apriete
medida a la mínima especificada, y el nivel de deslizamiento probable, igual a 0.80; y
φ factor que toma en cuenta las condiciones del agujero.
La constante 1.13 toma en cuenta que la fuerza de apriete siempre es mayor que la mínima
especificada. El factor de resistencia toma en cuenta las condiciones del agujero.
Para evaluar la resistencia al deslizamiento se utilizan las cargas de servicio dado que es un
estado límite de servicio. La resistencia al deslizamiento también se puede determinar
considerando un esfuerzo cortante equivalente, F v , por lo tanto tenemos que:
donde,
Para F v se puede deducir de igualar la ec. 10.4.8 a la ec. 10.4.6, considerando tornillos
estándar (φ = 1.00) y la resistencia de un tornillo (N b =1.00), tenemos:
𝜇𝜇𝜇𝜇𝑇𝑇𝑏𝑏
𝐹𝐹𝑣𝑣 = (10.4.9)
𝐴𝐴𝑏𝑏
Se sabe que T b corresponde al 70% de la carga de falla del tornillo (T b = 0.70A st F U ) donde A st
es el área de esfuerzo a tensión y F U la resistencia última del tornillo. Sustituyendo en la
ecuación anterior tenemos:
𝜇𝜇𝜇𝜇0.70𝐴𝐴𝑠𝑠𝑠𝑠 𝐹𝐹𝑈𝑈
𝐹𝐹𝑣𝑣 = (10.4.10)
𝐴𝐴𝑏𝑏
De acuerdo con los datos experimentales de tornillos sujetos a tensión y cortante combinado
una curva de interacción elíptica representa adecuadamente el comportamiento (Fig. 10.6.12a).
La ecuación propuesta es la siguiente (Kulak, Fisher, & Struik, 2001):
64
x2
+ y2 =
1.0 (10.4.11)
( 0.62 )
2
donde:
1.2
A325 A54BD
Rosca en plano de cortante
Vástago en plano de cortante
1.0
.8
Resistencia tensión
C - Rf v ≤ Ft
Esfuerzo tensión
.6
.4
.2
0
0 .2 .4 .6 .8 1.0
Esfuerzo cortante
Resistencia a tensión
(a) (b)
Fig. 10.6.12 Curva Interacción para tornillos de alta resistencia bajo la combinación de tensión y cortante:
(a) Curva elíptica ajustada a datos experimentales, (b) aproximación mediante tres líneas rectas.
Como una regla de cálculo más sencilla se sugiere el uso de tres líneas rectas (Fig. 10.6.12b),
para fines prácticos, que se ajusta a los datos experimentales. La ecuación de la línea recta es:
donde,
65
𝐹𝐹𝑡𝑡
𝑓𝑓𝑡𝑡 = 1.30𝐹𝐹𝑡𝑡 − 𝑓𝑓 ≤ 𝐹𝐹𝑡𝑡 (10.4.14)
𝐹𝐹𝑅𝑅 𝐹𝐹𝑣𝑣 𝑣𝑣
donde,
Por lo que el esfuerzo de tensión resistente con esfuerzo cortante combinado para tornillos con
parte roscada fuera del plano de corte será igual a:
Para el caso de juntas que trabajan a fricción cuando están sometidas a cortante y tensión
combinados la resistencia al deslizamiento se multiplica por un factor de reducción igual a:
1 − 𝑇𝑇⁄𝑇𝑇𝑏𝑏 (10.4.17)
donde,
Esta reducción se debe a que la fuerza de apriete disminuye en la misma proporción que la
pretensión en el tornillo.
Después de un deslizamiento importante, uno o más de los sujetadores se apoya en un lado del
borde del agujero de la placa. Desarrollándose una presión de contacto entre el sujetador y el
material adyacente. Cuando el tornillo se encuentra cerca del borde de la placa o de otro
agujero puede ocurrir un desgarramiento del material; Considerando un modelo simple donde la
resistencia del material a lo largo de la separación entre el agujero y el borde, Fig. 10.6.13, es
igual a 2(𝜏𝜏𝑢𝑢 × 𝐿𝐿𝑐𝑐 × 𝑡𝑡) y tomando la resistencia a cortante última igual a 0.75F U para tener en
cuenta el endurecimiento por deformación, la resistencia al desgarramiento de la placa será
igual a:
donde,
66
S Le
Lc
t1
t2
Si el tornillo se encuentra lejos del borde de la placa la falla ocurre cuando el material fluye
plásticamente y el sujetador se incrusta, generándose una ampliación del área de contacto.
Experimentalmente se ha demostrado (Kulak, Fisher, & Struik, 2001) que la relación entre el
esfuerzo de aplastamiento y la resistencia última de la placa se puede expresar como:
𝜎𝜎𝑎𝑎𝑎𝑎 𝐿𝐿𝑒𝑒
𝑝𝑝𝑝𝑝 = (10.4.19)
𝜎𝜎𝑢𝑢 𝑑𝑑
donde,
Q
d
Q
P { fuerza aplastamiento
en el tornillo
P
P/2 t
P
Esfuerzo de aplastamiento
P/2
promedio = P/A = P/(txd)
Note que esta fuerza es igual y
opuesta a la fuerza de aplastamiento
en el tornillo
67
𝑝𝑝𝑝𝑝 𝐿𝐿𝑒𝑒
𝑅𝑅𝑛𝑛 = �𝜎𝜎𝑢𝑢 � 𝑑𝑑𝑑𝑑 (10.4.20)
𝑑𝑑
Experimentalmente se ha observado que para valores de L e ≥ 3d el aplastamiento del material
controla la resistencia (Kulak, Fisher, & Struik, 2001). Tomando el menor valor de L e para el
cual controla la resistencia al aplastamiento, es decir L e = 3d, y sustituyendo en la ecuación
𝑝𝑝𝑝𝑝
anterior para 𝜎𝜎𝑢𝑢 = 𝐹𝐹𝑈𝑈 , la resistencia al aplastamiento del material será igual a:
Que representaría el límite para el cual controla la resistencia al desgarramiento, por tanto la
revisión por desgarramiento y aplastamiento del material en una conexión atornillada se debe
calcular considerando una resistencia igual a:
Esta expresión es válida para tornillos con agujeros estándar, sobredimensionados, alargados
cortos ó alargados largos paralelos a la dirección de la carga, en los cuales la deformación del
tornillo bajo carga de servicio no es una consideración de diseño. Para que la deformación del
agujero del tornillo bajo carga de servicio no sea excesiva, la resistencia anterior se multiplica
por un factor de 0.80, por lo que la resistencia al desgarramiento y aplastamiento del material
será igual a:
Para tornillos en una conexión con agujeros alargados largos perpendiculares a la línea de
fuerza la resistencia, dada por la ec. 10.1.22, se disminuye en un 66%.
10.6.4 SOLDADURAS
10.6.4.1 Procesos de soldadura
Los cuatros procesos de soldadura más comunes son de arco eléctrico con electrodo
recubierto, la de arco eléctrico sumergido, la protegida con gases y la que se efectúa con
electrodo con corazón fundente. A continuación se describe cada una de ellas:
Soldadura de arco eléctrico con electrodo recubierto (SMAW): En este proceso la unión
entre las partes por soldar se logra por medio del calor generado por un arco eléctrico que se
forma entre la punta de un electrodo de metal recubierto y el metal base, Fig. 10.6.15. El calor
del arco funde simultáneamente el metal base y el electrodo, y el campo electromagnético
conduce el metal fundido del electrodo hacia el metal base.
68
Fig. 10.6.15 Soldadura de arco eléctrico con electrodo recubierto (SMAW).
Soldadura de arco eléctrico sumergido (SAW): La unión se logra por medio del calor
producido por uno o varios arcos eléctricos formados entre uno o varios electrodos de metal y el
metal base. La soldadura se protege con una capa de material granular fusible, al que se da el
nombre de fundente, que se coloca sobre el metal, ver
Placa de conexión
_
x
G
Material que
no trabaja
G _
x
L= Longitud de
la conexión
Placa de conexión
Fig. 10.6.3.
69
Para el alimentador
automatico de alambre
cable
conductor
Placa de
Metal de soldadura respaldo
solidificado
Fig. 10.6.16 Soldadura de arco eléctrico sumergido (SAW).
Soldadura de arco eléctrico protegida con gases (GMAW): La unión de las partes por soldar
se logra mediante el calor producido por un arco eléctrico que se forma entre un electrodo de
metal y el metal base; el arco se protege con un gas. El gas fluye de una copa invertida
colocada alrededor del electrodo y protege a éste, al arco y al metal fundido, de los efectos
adversos del oxígeno y el nitrógeno del aire, ver
Fig. 10.6.17.
Soldadura de arco eléctrico con electrodo con corazón fundente (FCAW): El metal de
aportación se proporciona por medio de un electrodo tubular continuo que contiene, en su parte
central, ingredientes que generan todo el gas necesario para proteger el arco, o parte de él; ó,
como alternativa, se usa un gas auxiliar, que se introduce en el proceso de manera similar a
como se hace en la soldadura protegida con gases, ver Fig. 10.6.18.
Entrada gas
de protección
Escoria
fundida
Fig. 10.6.18 Soldadura de arco eléctrico con electrodo con corazón fundente (FCAW).
70
La Sociedad Americana de Soldadura (AWS, 2000) ha publicado especificaciones referentes a
los electrodos, fundentes y gases que se utilizan en los cuatro procesos.
Dado que el metal base en una soldadura no puede cambiar, es el metal de aportación quien
proporciona una manera efectiva de controlar la composición final y las propiedades mecánicas
de la soldadura.
Para que una soldadura sea compatible con el metal base, tanto el esfuerzo mínimo de fluencia
como el esfuerzo mínimo de ruptura en tensión del metal de aportación depositado, sin mezclar
con el metal base, deben ser iguales o ligeramente mayores que los correspondientes al metal
base.
Los símbolos de soldadura son la manera de representar a emplear. En las Fig. 10.6.19, Fig.
10.6.20 y Fig. 10.6.21 se muestra algunos detalles típicos de soldadura con sus respectivos
símbolos.
71
(d) Soldadura con preparación de doble bisel reforzada con filete
D D
2
72
(b) Soldadura de filete intermitente
73
(c) soldadura de filete a todo alrededor (4 lados)
Fig. 10.6.21 Soldadura de filete en diagonal armadura.
E 7018
Indica electrodo
Resistencia mínima a la
ruptura en tensión en lb/pulg2
Indica la posición en la cual
el electrodo puede ser usado
Designación para describir la
tipo de revestimiento, corriente
soldadura y propiedades CVN
Fig. 10.6.22 Sistema de clasificación electrodo (SMAW).
Existen otros sistemas de clasificación para los demás proceso de soldadura utilizados. En la
Tabla 10.6.2 se muestran algunas designaciones de los electrodos utilizados en la soldadura
SMAW clasificados de acuerdo al tipo de recubrimiento utilizado.
Tabla 10.6.2 Electrodos SMAW clasificado de acuerdo al tipo de recubrimiento.
(1)
Las primeras “XX” en estas abreviaturas de la clasificación de los electrodos designa la resistencia, la
cual puede ser 70, 80, 90, 100, 110 ó 120, y corresponde a la resistencia a la tensión mínima
2
especificada del metal de aportación en unidades inglesas (Klb/pulg ).
74
10.6.4.5 Tipos de Soldaduras
Dependiendo del tipo de junta por emplear en la conexión se utiliza uno de las cuatro formas de
soldadura: penetración, filete, tapón y de ranura. Los tipos de juntas soldadas que son más
empleadas en estructuras de acero se muestran en la Fig. 10.6.23, que son: a tope,
traslapadas, en té, de esquina y de borde. El empleo de algún tipo de está va a depender de
consideraciones de diseño, de los costos relativos y de los equipos disponibles.
A tope
Esquina
Traslapada Borde
Fig. 10.6.23 Tipos de juntas soldadas.
En el caso de las soldaduras, las juntas a tope entre placas del mismo grueso sólo pueden
hacerse con soldaduras de penetración; en las traslapadas se pueden utilizar filetes, tapones o
ranuras, y en las juntas en té o en esquina de penetración o de filete, lo mismo que en juntas en
tope entre placas de espesores diferentes.
En la Fig. 10.6.24 se muestran las características geométricas con las terminologías usadas
para referirse a cada parte de la soldadura de penetración completa (CPJ).
Cara de soldadura
Refuerzo Pie
Zona afectada
Garganta
por fusión
Placa respaldo
Raiz
Abertura de la raiz
Como el metal de relleno sustituye al metal base, las soldaduras de penetración completa
quedan sometidas a las mismas solicitaciones que los elementos que los unen. Si se utiliza un
metal de aportación que al combinarse con el material base produce una soldadura de
resistencia cuando menos igual a la de este, no se necesita hacer ningún análisis de esfuerzos,
75
y el diseño se reduce a escoger un metal de aportación adecuado al tipo de acero que se esté
soldando y a utilizar las preparaciones y procedimientos de soldaduras calificados, esto es,
aquellas que han sido avaladas (Fig. 10.6.25).
Cuadrada Bisel
muesca en J muesca en U
Los tamaños mínimos de soldaduras para penetración parcial no están basados en una carga
mínima de diseño sino más bien en cuestiones que están relacionados con el proceso de
soldadura (fusión y agrietamiento) tratado en la siguiente sección.
En la Fig. 10.6.26 se muestran las características geométricas con las terminologías usadas
para referirse a cada parte de la soldadura de filete.
Cara soldadura
Pie
Pierna
Raiz Garganta
El tamaño mínimo especificado para la soldadura de filete no está relacionado con cuestiones
de diseño sino más bien con cuestiones relacionadas con la fusión y agrietamiento de la
76
soldadura. Con el fin de lograr una buena soldadura de arco, hay una mínima cantidad de
energía térmica que debe ser introducida a la junta. La energía térmica introducida en la junta
está directamente relacionada con el tamaño de la soldadura aplicada a la junta. Por lo tanto,
para asegurar un nivel adecuado de energía térmica se especifica un tamaño mínimo de la
soldadura. Aunque el tamaño mínimo se especifica en función de la parte más gruesa
conectada de la junta, este nunca debe exceder el espesor más pequeño de las partes
conectadas.
El tamaño máximo se especifica para soldadura a lo largo del borde, Fig. 10.6.27a, debido a
que es posible que el soldador funda el borde superior de la placa cuando se suelda. Esto crea
una soldadura aparentemente del tamaño especificado pero con una profundidad de garganta
mucho menor (Fig. 10.6.27b). La eliminación del borde superior no es crítica si se toman
medidas para lograr la profundidad de garganta especificada por el diseñador. Para evitar esto
se especifica, en placas de espesor mayores a 6 mm (1/4 pulg.), que el tamaño máximo de la
soldadura sea el espesor de la placa disminuida en 1.6 mm (1/16 pulg), ver Fig. 10.6.27c.
BORDE SUPERIOR
DERRETIDO 1.6 mm MIN.
(1/16" pulg)
Las soldaduras de ranura y tapón son únicamente aplicables a juntas del tipo traslapadas.
Generalmente las soldadura de ranura y tapón son usadas para trasferir cargas de cortante o
para evitar el pandeo de placas traslapadas. No son usadas para la transferencia directa de
carga de tensión.
Los requerimientos de dimensionados para este tipo de soldadura son con el objetivo de facilitar
una fusión uniforme del material fundente en la raíz de la junta.
Para el caso de las demás tipo de soldadura (PJP, filete, ranura y tapón) su resistencia va a
depender de la resistencia nominal del tipo de soldadura multiplicada por el área efectiva. La
resistencia nominal en este tipo de soldadura será igual a:
donde F EXX es igual a la resistencia del electrodo utilizado. El área efectiva va a depender de
cada tipo de soldadura. Para efectos de diseño se considera que el esfuerzo es uniforme, lo
que no es cierto. En la fig. se muestran la distribución de esfuerzo para soldadura de filete
paralela y perpendicular a la acciones de las fuerzas,
77
En la soldadura PJP la resistencia está controlada por la falla de la garganta, en el metal de
soldadura depositado. La tamaño de la garganta, en este tipo de junta, es igual a la longitud de
la cara fundida del metal base como se muestra en la Fig. 10.6.28. El área efectiva será igual al
producto de la longitud de la soldadura por el tamaño efectivo de la garganta (“E”).
60°
En el caso de las soldaduras de tapón y ranura el área efectiva será igual al área nominal del
agujero o ranura en el plano de falla de la conexión.
donde,
78
10.6.5 CONEXIONES DE PERFILES HSS
Los tipos de fallas que se pueden presentar, en este tipo de conexiones entre elementos de
armadura por ejemplo, se muestran en la Fig. 10.6.29.
(c) Fluencia ó ruptura por tensión de elemento (d) Pandeo local elemento del alma en
del alma o soldadura compresión
(e) Falla por fluencia a cortante zona de la (f) Pandeo o fluencia local de las paredes laterales
cuerda entre elementos del alma de cuerda
79
10.6.5.1 Tipos de nudos ó conexión
P P
P
P=0 Ø
Ø Ø
Ø
Ø
Separación
P
(a) Conexión tipo “K” (b) Conexión tipo “Y” ó “T” (c) Conexión tipo “X”
Fig. 10.6.30 Esquema de tipos de nudos ó conexiones de perfiles HSS en armaduras.
Siempre que la geometría de los nudos permanezca dentro del campo de validez, las
resistencias de los nudos pueden determinarse aplicando las fórmulas dadas. Estas ecuaciones
están basadas en resultados experimentales de ahí sus limitantes de diseño; más allá de estos
límites los resultados no han sido verificados ni validados.
Para los nudos que queden fuera del campo de validez dado, debe realizarse un análisis más
detallado, considerando los momentos secundarios en los nudos provocados por su rigidez a
flexión.
A igual que en el caso de las conexiones con perfiles circulares HSS, las ecuaciones
presentadas aquí tienen un intervalo de validez basado en los límites establecidos por los datos
experimentales más allá del cual debe verificarse con pruebas experimentales ó un análisis
racional más detallado.
80
COLUMNA ACERO
SOLDADURA
DE FILETE
PLACA BASE
TUERCA Y ARANDELA
GROUTING
DADO DE
ANCLA
CONCRETO
TUERCA ANCLA
Cuando en la base de la columna solo actúa carga axial a compresión, la placa base debe tener
el área necesaria para transferir los esfuerzos de aplastamiento desde la columna hacia la
cimentación, una rigidez suficiente para transferir los esfuerzos de manera uniforme y una
resistencia a flexión adecuada.
Para la revisión de la flexión de la placa se asume una distribución uniforme de la presión, Fig.
10.6.32a, y que la sección critica a flexión se encuentra a una distancia desde el centro del
perfil de 0.475d en la dirección longitudinal y 0.40b f en la dirección transversal, ver Fig.
10.6.32b. El momento último se calcula con respecto a esta sección, Fig. 10.6.32c.
món
n
Línea flexión
0.8bf
bf
Pu asumida
n
tp tp
fp m 0.95d m
fp
N
Para un cálculo más preciso se puede determinar la distancia en voladizo desde el alma ó el
patín de la columna utilizando la teoría de líneas de fluencia en la placa. Esta distancia se
puede calcular como 𝜆𝜆𝑛𝑛′ = 𝜆𝜆 �𝑑𝑑𝑏𝑏𝑓𝑓 ⁄4, donde λ se calcula como:
2√𝑋𝑋
𝜆𝜆 = ≤1 (10.4.28)
1 + √1 − 𝑋𝑋
Donde X se puede calcular mediante la siguiente expresión:
81
4𝑑𝑑𝑏𝑏𝑓𝑓 𝑃𝑃𝑢𝑢
𝑋𝑋 = � 2 � 𝐹𝐹 𝑃𝑃 (10.4.29)
�𝑑𝑑 + 𝑏𝑏𝑓𝑓 � 𝑅𝑅 𝑡𝑡
�𝑑𝑑𝑏𝑏𝑓𝑓
𝑛𝑛′ = (10.4.30)
4
Para el diseño de placa base sometida a tensión se determina el número de anclas en función
de la resistencia a la ruptura en tensión del acero y el diámetro supuesto. Luego se hace una
revisión de la flexión en la placa base y de la resistencia a los diferentes modos de falla del
anclaje en concreto. La flexión se revisa suponiendo líneas de fluencia a 45° desde el centro del
ancla. Por lo que la sección crítica en flexión tendrá un ancho crítico igual a 2c, donde c es la
distancia desde el eje del ancla hasta una distancia de 0.475d desde el eje del perfil de la
columna, ver Fig. 10.6.33.
Anclas en tensión
Línea de flexión
c
asumida
2c
Ancho critico
2c 45°
0.95d
Para la trasferencia del cortante desde la placa base a la cimentación existen varios método:
por fricción entre placa base y cimentación, mediante una llave de cortante, por ahogamiento de
la columna y placa base dentro de la cimentación ó por cortante y aplastamiento del ancla. En
la Fig. 10.6.34 se muestran los diferentes mecanismos utilizados para transferir el cortante
desde las columnas hasta la cimentación de concreto.
donde,
82
FR es el factor de resistencia consistente con los recomendados por el ACI 318-05, igual a
0.60;
A1 es el área ahogada de la llave de cortante sin incluir la parte que se encuentra dentro
del mortero de alta resistencia y baja contracción.
donde,
Cimentación
en concreto
(b) Detalle columna ahogada en concreto
Cimentación
en concreto
83
Existe un incremento en la resistencia a cortante cuando la carga se transmite por
aplastamiento directo contra el concreto debido al efecto de confinamiento que brindan las
anclas a tensión en combinación con la carga externa (ACI 349-01, 2001). Esta resistencia se
puede tomar igual a:
donde,
Cuando el cortante se transmite por aplastamiento de la placa base contra las anclas se utiliza
el criterio dado más adelante en la sección 10.6.6.4. Los tres métodos de transferencia de
cortante no pueden ser empleados simultáneamente debido a las diferencias de rigidez lo que
impide que se desarrolle su resistencia al mismo tiempo.
x
PU e PU
Pr
A
f p xB
T
ε
Y/2 Y/2
N C=f p xBxY
84
Considerando el diagrama de fuerza de la Fig. 10.6.35, asumiendo una distribución uniforme del
esfuerzo en el lado a compresión, tenemos que la excentricidad de la fuerza a compresión, C,
es igual a:
𝑁𝑁 𝑌𝑌
𝜀𝜀 = − (10.4.35)
2 2
Es evidente que a medida que Y disminuye ε se incrementa. El valor mínimo de Y ocurre
cuando el concreto alcanza su máximo esfuerzo de aplastamiento, 𝑓𝑓𝑝𝑝 = 𝑓𝑓𝑝𝑝𝑝𝑝 . Para momentos
pequeño C = P U , despejando a Y, tenemos que:
𝑃𝑃𝑈𝑈
𝑌𝑌𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚𝑚 = (10.4.36)
𝐵𝐵 × 𝑓𝑓𝑝𝑝𝑝𝑝
Para que la sección este en equilibrio, la línea de acción de la fuerza axial P U debe coincidir con
la línea de acción de la fuerza de aplastamiento C; por lo que e = ε. Para valores de e < ε max los
esfuerzos de aplastamiento, f p , son menores a f pu y las sección puede ser equilibrada solo con
los esfuerzos de aplastamiento. Cuando e > ε max entonces f p = f pu y la línea de acción de las
fuerzas no coinciden, por lo que se necesita tensión en las anclas para equilibrar la sección. De
donde el valor de la excentricidad crítica será igual a:
𝑁𝑁 𝑃𝑃𝑈𝑈
𝑒𝑒𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐𝑐 = − (10.4.38)
2 2𝐵𝐵𝑓𝑓𝑝𝑝𝑝𝑝
Para momentos pequeños, e ≤ e crit , el valor de Y se puede tomar de la ec. 10.4.31 con ε = e, de
donde:
𝑌𝑌 = 𝑁𝑁 − 2𝑒𝑒 (10.4.39)
Para valores de momento muy grande, e > e crit , haciendo sumatoria de momento con respecto
al punto A, ver Fig. 10.6.35, tenemos que:
𝑁𝑁 𝑌𝑌
𝑓𝑓𝑝𝑝𝑝𝑝 𝐵𝐵𝐵𝐵 � − + 𝑑𝑑� − 𝑃𝑃𝑈𝑈 (𝑒𝑒 + 𝑑𝑑) = 0 (10.4.40)
2 2
Arreglando los términos en función de Y, llegamos a la ecuación cuadrática:
𝑁𝑁 2𝑃𝑃𝑈𝑈 (𝑒𝑒 + 𝑑𝑑)
𝑌𝑌 2 − 2 � + 𝑑𝑑� 𝑌𝑌 − =0 (10.4.41)
2 𝑓𝑓𝑝𝑝𝑝𝑝 𝐵𝐵
De donde, para placa base con momento muy grande, tenemos que:
85
Para ciertas combinaciones de fuerza, momento y geometría no se puede obtener una solución
real de la ecuación anterior, por lo que en esos casos hay que incrementar las dimensiones de
la placa. Esto se puede verificar revisando los términos dentro de la raíz para que la ecuación
tenga solución real siempre. Para obtener la fuerza en las anclas se verifica la sumatoria de
fuerzas verticales, por lo que:
Obtenidas las fuerzas se procede a calcular el momento de diseño sobre la placa en las
secciones críticas tomando los esfuerzos y fuerzas calculadas utilizando los mismos criterios
que para placas sometidas a compresión ó tensión axial, siguiendo el esquema de la Fig.
10.6.35.
La resistencia nominal del concreto al aplastamiento es igual a 0.85f’ c A 1 , pero está resistencia
se incrementa debido al confinamiento que pueda tener este (Park & Paulay, 1975). Para tomar
en cuenta el efecto benéfico del confinamiento en la resistencia al aplastamiento que genera el
concreto que rodea el área de transferencia de la carga desde la placa base se utiliza el término
�𝐴𝐴2 ⁄𝐴𝐴1 , por lo que la resistencia al aplastamiento del concreto será igual a:
𝐴𝐴2
𝑃𝑃𝑛𝑛 = (0.85𝑓𝑓′𝑐𝑐 𝐴𝐴1 ) �� � (10.4.44)
𝐴𝐴1
Existe un límite a partir del cual ya no es efectivo este confinamiento. Cuando A 2 , que es el área
que brinda confinamiento, es igual ó mayor que cuatro veces A 1 , que es el área de la placa
base, no se considera aumento en la resistencia, por lo que para �𝐴𝐴2 ⁄𝐴𝐴1 ≥ 2 la resistencia se
limita a:
Que define el límite para la resistencia al aplastamiento del concreto, y es el límite fijado a la ec.
10.4.27 en este manual.
Para el cálculo del la resistencia a flexión se toma el momento plástico, 𝑀𝑀𝑝𝑝 = 𝑍𝑍𝑥𝑥 𝐹𝐹𝑦𝑦 de una
sección rectangular con una altura igual al espesor de la placa base por un ancho igual a la
unidad. El módulo plástico, Z x , será igual a:
86
4𝑀𝑀𝑈𝑈
𝑡𝑡𝑝𝑝 = � (10.4.48)
𝐹𝐹𝑅𝑅 𝐹𝐹𝑦𝑦
En la Fig. 10.6.36 se presentan los principales tipo de falla por tensión de los anclajes de acero
en concreto. Se pueden presentar cinco tipos de falla: Ruptura de la barra de acero, arranque
completo del anclaje con desprendimiento de concreto en los bordes, desprendimiento del cono
de concreto por encima del anclaje mecánico (tuerca, placa), desprendimiento lateral de cono
de concreto asociado a poca distancia del borde y agrietamiento del concreto por falta de
separación entre anclaje ó el borde.
Para el diseño de los anclajes a tensión se debe revisar la resistencia de este ante cada uno de
los posibles modos de falla que se puedan presentar. Las fallas asociadas a poca distancia al
borde y el agrietamiento del concreto por falta de separación entre anclaje ó el borde, Fig.
10.6.36d y e, se pueden controlar dando requerimientos mínimo de separación eje a eje de los
anclajes y su separación con el borde de concreto.
Nm Nm
Nm Nm
87
Nm
Nm Nm
Nm Nm
La resistencia a la ruptura de la barra de acero, Fig. 10.6.36a, se calcula con la misma ecuación
utilizada para el cálculo de la resistencia a tensión de los tornillos. Se considera la zona más
débil que es la parte roscada del ancla. La resistencia máxima que puede alcanzar un anclaje
de acero es la que desarrolla antes de llegar al estado límite de ruptura del acero, por lo que
está representa un límite superior de la resistencia.
En la falla por desprendimiento del cono de concreto a tensión, Fig. 10.6.36c, se considera que
la superficie de falla se forma en un ángulo aproximado de 35° (una pendiente de 1:1.5). Por
88
simplicidad se considera un cono cuadrado para el cálculo del área en vez de redondo, como se
muestra en la Fig. 10.6.38.
Tu
3hef
A A
1.5
1.0
h ef 3hef
ft f t = esfuerzo de rotura
del concreto a lo largo
de la superficie del cono
1.5hef 1.5h ef de esfuerzo
Vista A-A
Fig. 10.6.38 Ruptura Cono de concreto en tensión (Fisher & Kloiber, 2006).
El esfuerzo de rotura del cono de concreto, f t , se considera que disminuye con el aumento del
área del cono. Por lo que, la resistencia del cono de concreto es proporcional a la profundidad
de anclaje elevado a un exponente de 1.5, y para anclajes muy profundo (mayor a 28 cm)
elevado a un exponente de 5/3. Estas ecuaciones son válidas para anclas con un diámetro
menor o igual a 50 mm (2”) y una longitud de anclaje no mayor de 63 cm.
Las ecuaciones para el cálculo de la resistencia del concreto a los diferentes modos de falla del
anclaje a tensión fueron deducidas para carga aplicadas en el eje de la barra para un concreto
lejos de los borde considerando una reducción por agrietamiento del concreto, por lo que se
aplican los factores Ψ i para tomar en cuenta situaciones diferente que se pueden presentar en
la práctica (ACI318-05, 2005).
Cuando se utilizan las anclas para transmitir el cortante a la cimentación es muy importante
tener en cuenta el modo de transferencia de la carga desde la placa base hacia las anclas. El
tamaño de los agujeros recomendados para las anclas es sobredimensionado para que el
constructor tenga una tolerancia en la colocación de las placas bases y columnas en obra.
Antes de que la placa transfiera la carga por aplastamiento al ancla puede ocurrir un
deslizamiento de esta, por lo que es posible que el cortante no se reparta de manera uniforme
en todas las anclas. Una opción para lograr un cortante uniforme en todas las anclas es soldar
la tuerca de cada ancla a su respectiva arandela y esta a su vez a la parte superior de la placa
base (Fisher & Kloiber, 2006).
En la Fig. 10.6.39 se muestran los diferentes modos de falla por cortante de los anclajes de
acero en concreto. Se pueden presentar tres tipos de falla ante carga lateral: ruptura del acero
con desprendimiento del concreto frente al ancla, descantillado del concreto delante del anclaje
por una acción de palanca cuando este se encuentra lejos de los bordes y desprendimiento del
cono de concreto lateral cuando este se encuentra cerca de los bordes.
89
Vm Vm Vm
(a) Ruptura del acero (b) Descantillado del concreto (c) Desprendimiento cono
Fig. 10.6.39 Modos de falla de anclaje a cortante (ACI318-05, 2005).
El diseño se hace revisando cada uno de los posibles modos de falla que puedan ocurrir en el
anclaje de acuerdo a su ubicación y geometría. Para la revisión de la resistencia a cortante del
acero, Fig. 10.6.39a, se utiliza la ecuación propuesta para tornillos considerando dos casos:
cuando la parte roscada se encuentra fuera del plano de corte y cuando se encuentra en el
plano de corte.
La falla por descantillado del concreto, Fig. 10.6.41b, ocurre en las anclas que se encuentran
bastante alejadas del borde donde la falla por ruptura lateral del cono de concreto no es posible.
Para el cálculo de la resistencia del concreto ante este tipo de falla se toma en cuenta la
resistencia del cono de concreto ante carga de tensión. Para anclas con una longitud de
anclaje, h ef , mayor a 6.35 cm (2 ½ pulg.) esta puede llegar a valer el doble (ACI318-05, 2005).
La falla por desprendimiento del cono de concreto a cortante ocurre cuando el ancla o un grupo
de anclas se encuentran cerca del borde de concreto, como se muestra en la Fig. 10.6.40.
Vm
Vm Vm Vm Vm Vm
Fig. 10.6.40 Falla por desprendimiento del cono de concreto cerca de borde (ACI318-05, 2005).
La resistencia a la ruptura lateral del cono de concreto va a depender del área proyectada
considerando una inclinación de la superficie de falla de 1.5 es a 1.0 desde el nivel superior
hasta encontrar el borde libre del concreto, ver Fig. 10.6.41. La resistencia es proporcional a la
raíz del diámetro de la barra, d o , y a la 0.2 potencia de la relación entre la longitud de anclaje, l,
y el diámetro de la barra. La ecuación semi-empirica propuesta por el ACI (ACI318-05, 2005) es
la siguiente:
𝑙𝑙 0.2
𝑉𝑉𝑛𝑛 = 1.85 � � �𝑑𝑑𝑜𝑜 �𝑓𝑓′𝑐𝑐 𝐶𝐶11.5 (10.4.49)
𝑑𝑑𝑜𝑜
donde,
90
f’ c es la resistencia a compresión del concreto, en kg/cm2;
C1 es la distancia al borde libre de concreto, en cm;
do y l son diámetro y longitud de anclaje del perno respectivamente, en cm.
C1 1.5C1 1.5C1
Nivel superior
A concreto
Vu
Medio Cono
de esfuerzo
1.5 1.5C1
1.0
Como el valor máximo que puede tener l es 8d o y la longitud mínima del anclaje es igual a 12d o ,
entonces la relación 𝑙𝑙 ⁄𝑑𝑑𝑜𝑜 = 8, por lo que la resistencia nominal a cortante del cono es:
Esta es la resistencia que se especifica multiplicada por el área del cono proyectada del
concreto, el factor de resistencia y los factores Ψ i para tomar en cuenta excentricidad, distancia
al borde perpendicular a la dirección de la fuerza y agrietamiento del concreto.
donde,
91
T
FR Tn
Curva eliptica
Aproximación
trilineal
interacción
0.2FR Tn
V
0.2FR Vn FR Vn
92