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EL REY DE LA CORRUPCIÓN… EL FINAL ANUNCIADO DE QUIEN

CONTROLA LOS PODERES DEL ESTADO

Corrompiste y corrompes la esperanza de todo un pueblo, convirtiéndola en creciente


decepción de muchos, y vil oportunismo y acomodo de unos pocos.

Corrompiste y corrompes la lucha social, de indígenas, trabajadores, maestros,


estudiantes… la llamas terrorismo, la persigues, la encarcelas.

Corrompiste la ideología de la izquierda revolucionaria cantando letras de Silvio


Rodríguez, de Víctor Jara, mientras en secreto tranzas con los grupos monopólicos de
siempre: la iglesia católica romana, los banqueros y empresarios corruptos.

Corrompiste y corrompes la participación ciudadana, haciendo de esta el baile burdo de


ridículas marionetas movidas por las manos de tus perros sabidos.

Corrompiste y corrompes el derecho de todo ciudadano de participar activamente en


política, dijiste “partidocracia” y de esa reciclaste las más inmunda basura,
acomodándola en tu palacete presidencial… social cristianos son tus consejeros;
mercenarios del marketing son tus hadas madrinas, capaces de disfrazar tu rapaz
ambición con una sonrisa afeminadamente hipócrita.

Corrompiste y corrompes con tu ironía estúpida, la libertad y el derecho que tenemos


todos los (las) ecuatorianos (as) de criticarte, de analizar tus obras y no solo tus palabras
adobadas con frases trilladas, pero llenas de veneno y odio.

Corrompiste y corrompes los derechos que tiene nuestra naturaleza, nuestra Pacha
Mama. Solo te mueve la ambición de la comisión de los contratos petroleros o mineros,
has llegado a llamar a los que aman la Naturaleza “ecologistas infantiles”, sin percatarte
que tú te has convertido en un ogro depredador.

Corrompiste y corrompes la Constitución de Montecristi, con tu hipocresía afirmando


que era la mejor y que duraría trescientos años, para luego violarla reiteradamente en
actos públicos de aberración insufrible, irrespetando la laicidad de nuestro Estado,
sometiéndolo a Arbitrajes en territorio extranjero, manteniendo la vigencia del Modus
Vivendi… y ahora con tu mayor locura e irresponsabilidad, con la mas tenebrosa obra
de tu vanidad y ambición, no solo violas a la madre de nuestra Revolución Ciudadana
(la Constitución de Montecristi), sino que invitas en un acto de demencial suicidio a que
la violen sus millones de hijos.

Y tu soberbia no termina, y tu ambición no tiene límite, pues llegas a corromper con tu


ignorante arrogancia al mismo Evangelio de Cristo: ¿Quién te hiso maestro y luz de
nuestro pueblo? ¿Quién te ordenó como Ministro de la Iglesia de Cristo?... aprendiz de
tirano, te has desquiciado.

Rey de la Corrupción, has sido pesado y medido por quien resiste al soberbio y humilla
al altivo… y has sido hallado falto. Si no te arrepientes (cosa imposible por tu terco
corazón y hueca cabeza) tu fin será la hoguera barbará o el exilio ignominioso.

RNG.

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