Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
D PDF
D PDF
alta
productividad
Oratoria
1
Reuniones de alta
productividad
La reunión como herramienta de comunicación y
productividad
Román Ceriani (como se cita en Di Bartolo et al., 2009) nos propone
repasar el concepto de reunión:
2
Nuestro trabajo busca desarrollar un nuevo enfoque en el cual el
conductor y los participantes son partes interesadas de este proceso y en el
que todos los integrantes de la organización hacen uso de esta herramienta
de comunicación conociendo las técnicas que optimizan la utilización del
recurso.
3
Participantes: los principios de una participación
productiva
Estos son:
Las salas de reuniones están hechas para trabajar. Las personas se reúnen
para resolver problemas, informar o hasta para persuadir, pero de ninguna
manera para entablar una lucha de poderes, aunque implícitamente esto
exista.
4
objetivo. Debemos formar personas que tengan la capacidad de renacer
luego de una ardua discusión y que se despojen de efectos de arrastre que
no les permitan abordar otro tema o acompañar una decisión por
encontrarse anclados a un hecho anterior.
5
en alguna de sus exposiciones, en referencia a diferentes técnicas de la
materia:
6
el resto, sino acompañar la decisión, aunque esta implique un voto sobre
un punto que no cuenta con nuestro convencimiento absoluto.
¡Eso es! Así es como debería ser en todos los casos, pero, sin ser
terminantes y muy a pesar nuestro, nos animamos a decir que la gran
mayoría de las veces las decisiones se ven trabadas por la falta de
consenso, es decir, falta de tolerancia, apoyo o acompañamiento y
obligadas a ser liberadas por un proceso de votación. Es decir, se fija una
expectativa de acuerdo total y, ante el disenso, se vira el timón
bruscamente hacia un método de desempate. Lógicamente, de esta forma
será muy difícil lograr consenso en la sala de reuniones si concebimos a
este como el hecho de compartir posiciones, más aún considerando que la
toma de decisiones es algo común y constituye el objeto de reunión que
más interacción requiere y en el que mayor número de componentes
emocionales y personales entra en juego.
7
Los participantes deben facilitarle al conductor el manejo de la
interacción, aportando con mesura y dedicando tiempo a escuchar otras
intervenciones.
Desterremos el acto reflejo de votar para decidir.
Como dice Roberto Serra, una orquesta en la que cada uno de sus músicos
ensayara por separado, aun bajo el mando del mejor director, nunca
sonará tan bien al reunirse como una que lleve mucho tiempo tocando
junta, en la que los músicos llegan a conocerse y a entenderse sin hablar
siquiera.
8
que opera en ellos en relación con su grupo. Existe una connotación
positiva y una negativa en esta situación. Siempre apreciaremos las buenas
relaciones dentro de un grupo, pero participar de una reunión en la que
cada participante se incorpora como el representante de o el gerente de
tiene resultados negativos o de rendimiento menores a los esperados. Hay
que evitar bajo todo aspecto la lucha o el enfrentamiento entre áreas, cual
lucha entre clases o barrios.
9
Prepararse previamente sobre el tema que se va a tratar debería ser un
acto reflejo en cada uno de nosotros como integrantes de reuniones
productivas. Si la reunión es convocada correctamente, debes conocer con
mucha anticipación el propósito de la convocatoria, los temas que se van a
tratar durante ella y los resultados esperados.
10
ni menos que evitar poner en riesgo la relación que nos une a esa persona,
omitiendo presentar nuestra opinión, por más valiosa que esta fuera.
“Nada que ver con el amor”, solía decir Marcelo Aguirre, colega y amigo,
quien jugó un papel preponderante en mi formación profesional. Cada vez
que detectaba un error en mi trabajo, hacía la observación pertinente
señalando a modo de elemento neutralizador: “Quédate tranquilo, ¡nada
que ver con el amor!”.
11
Referencias
Ander Egg, E. y Aguilar, M. (2006). Cómo aprender a hablar en público. Buenos
Aires, AR: Lumen.
Di Bartolo, I., Bustamante, A., Henry, E. L., Llabrés, C. G., Malatesta, N. O.,
Vilches, M. A.,… y Di Bartolo, I. (h). (2009). Para aprender a hablar en público.
Buenos Aires, AR: Corregidor.
12