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Muriel era una profesora recién recibida.

Ella vivía en una chica de ciudad y


esperaba que su primer destino fuera una ciudad con el mejor colegio. Pero le
asignaron un pueblucho ni siquiera aparecía en el mapa.
Llego a la casa en la que conoció a las dos niñas de la casa las cuales iban
a ser alumnas suyas. Después subió a su habitación oyó una conversación en
la cual se enteró de que estaba allí porque el cura dejo esa habitación porque
nadie quería tenerla en su casa y el cura le ofreció su habitación.
La llegada la hizo sentirse muy mal se pasó la noche llorando porque nadie
la quería tener en su casa, echaba de menos a sus padres.
Al día siguiente se levantó y fue a ver su escuela, la que iba a ser su zona de
trabajo ese trimestre. Al llegar se encontró la escuela hecha un desastre y ella
no sabía qué hacer, lo único que se lo ocurría era ponerse a trabajar.
Fue a casa del alcalde y le pidió un listado de los niños del pueblo que
estaban en edad escolar, pero el alcalde respondió con una negativa y la chica
volvió a la casa con una desilusión muy grande; entonces se encontró en la
puerta al hombre con el que en la noche anterior estaba hablando la familia y
hablaron de cosas y de que las cosas le irían mejor a partir de ahora y él dijo
que igual el alcalde no le quería dejar la lista para que no viera su mala letra. A
la mañana siguiente cuando fue a la escuela fue una chica también y le
propuso su ayuda y entre las dos se pusieron a limpiar y a ordenar la escuela.
Ya habían empezado las clases y había muchos chicos mezclados unos eran
de una edad considerable otros de cinco o seis años, también había algunos de
catorce; la profesora los ordeno por edades había dos chicas que como le dijo
el cura no fueron porque estaban trabajando en el campo con su padre.
Ya llevaba mes y medio en Beirechea cuando recordó que su intención era
quedarse un mes y pedir el traslado a una ciudad pero decidió quedarse hasta
navidad. Ya no estaba tan mal.
Empezó a entender a la gente hizo nuevos amigos.
La primera nevada anuncio la época en la que los escolanos no iban a clase
por enfermedades.
La nieve retuvo a Muriel en el pueblo durante las navidades.
Tras las navidades vuelve a su escuela con sus alumnos y volvieron todos
sus escolanos excepto Marta Arive una chica a la que los niños no habían visto
jamás entonces se decidió a ir para saber lo que le pasaba a aquella chica que
nunca había ido a ninguna de sus clases y fue a buscar a José Mari que era su
orientador en el pueblo pero se encontraba fuera. Entonces fue a visitar al
alcalde pero este estaba enfermo entonces les pregunto a unos escolanos que
le señalaron un camino fue y se encontró una casa muy bonita preciosa y llamó
a la puerta pero nadie atendió a la puerta asomó la cabeza y a pasar a la casa
se encontró con un hombre y hablaron de Marta Arive pero él no lo entendió.
Luego Muriel descubrió que Marta Arive ya no estaba en edad escolar.
También en el regreso al hogar se vio envuelta en un rebaño de vacas y casi la
aplastan entonces Javier Arive y unos escolanos la ayudaron.
Entonces se le ocurrió una nueva idea para su escuela y era pedir unos
libros para que sus alumnos leyeran pidió ayuda a casa y pidió libros de Julio
Verne, literatura infantil y clásicos de la literatura adaptados para niños. se lo
pidieron el mismo día y mira que a ella no le gustaba verles reñir pero cuando
les vio reñir por el libro le gusto.
Luego va conociendo mejor a Javier Arive y se hacen novios sus hermana le
propone un trabajo en un nuevo colegio de directora mucho mas prestigioso y
le contesta que no y al final se hace de Beirechea

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