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Liberar al Líder

Por David Leonardo Beltrán

Durante los últimos años, hemos visto cómo vienen proliferando cantidad de charlas y seminarios
donde se presentan importantes “gurús” del mercadeo, la publicidad, las comunicaciones, el
emprendimiento, etc., al punto que se puede afirmar que hay de todo para todos los gustos, porque al
parecer, estamos inmersos un momento histórico en el que se hace necesario crear sociedades
perfectamente amalgamadas que den respuesta a los desafíos del nuevo siglo, donde el reto es poder
superar las dificultades tradicionales que venimos padeciendo desde hace décadas, sobre todo, en los
países que integran nuestra región.

Para nadie es un secreto que el nuevo milenio busca hombres y mujeres que sean capaces de dar
un giro de 180 grados a las realidades que se vienen desarrollando en América Latina, bajo la figura de
personas altamente calificadas para dirigir eficientemente a otros con el fin de alcanzar metas y objetivos
que hagan de nuestros países, mejores lugares para vivir y no quedarnos tan rezagados respecto a los que
se han denominado por años “países del primer mundo”; el asunto es que, al parecer, hay una leve
sensación de que es difícil encontrar el perfil perfecto que asuma tales responsabilidades, lo que nos
conduce a pensar si es que hay una crisis de liderazgo, tal y como lo plantea la ex ministra Cecilia López
en su más reciente columna en el periódico El Tiempo, o es que hay un error en el concepto que se tiene al
respecto.

Generalmente, para hablar de liderazgo es necesario hablar del líder que es quien ejerce tal figura
y, en ese sentido, se define líder como aquella persona capaz de motivar, guiar o influenciar a otros, con el
fin de que el grupo pueda alcanzar metas u objetivos; concepto puede llegar a tener múltiples
consideraciones, de acuerdo al contexto en el que se ubica, pero que sin importar la definición, tiende a
llevarnos a la idea de una imagen corporativa que trabaja con un grupo de personas bajo su cargo en un
espacio en común.

Teniendo en cuenta lo anterior, es comprensible tener entonces una concepción similar sobre el
liderazgo, idea que puede ser debatida, primero porque no se debería limitar el concepto de liderazgo a la
figura de una persona dirigiendo a otras que trabajan para un mismo fin y segundo, porque hay personas
que sin ocupar cargos de liderazgo o sin mostrar un marcado liderazgo, son capaces de motivar o guiar a
otros. Así las cosas, se puede afirmar que el liderazgo es el resultado de múltiples características
condensadas en la figura de un líder, quien es capaz de influenciar o incidir, positiva o negativamente, en
el comportamiento o pensamiento de otra persona.

Con base en lo anterior, lo que se pretende desde éstas líneas es establecer que el liderazgo y la
figura de líder, debe ampliarse considerablemente a partir de la influencia, sacándolos del escenario
meramente corporativo u organizacional en el que se ocupan cargos directivos, dado que “el líder, sin
disponer necesariamente de esta autoridad jerárquica, tiene también capacidad de decidir la actuación del
grupo en base a la influencia que ejerce, que viene determinada por la autoridad moral que ejerce sobre el
resto del equipo” (David Ulloa, 2013), una autoridad moral que puede encontrarse en todas las instancias
de la cotidianidad, debido a que no necesariamente se puede ejercer tal influencia solamente cuando se
convive en un mismo espacio físico; por ejemplo, periodistas, políticos, deportistas, cantantes, actores,
etc., son líderes, aunque no estemos en contacto cercano con ellos, porque en mayor o menor instancia,
pueden llegar a influir el comportamiento o el pensamiento de otros, muchas veces sin proponérselo. Es
así que vemos un cantante que use un estilo de vestuario que le hace sentir bien, puede influir en otros que
buscan copiar su estilo pese a que ésa no fue la intención inicial del artista.

Cuando se habla de liderazgo, automáticamente se suele pensar en una corporación e imaginamos


a una persona al frente de otros… sin embargo, creo que el liderazgo está presente en todas las instancias
de la vida y en esa vida, hemos sido tenido que líderes por un instante, porque, de hecho, todos los seres
humanos nacemos con características propias del liderazgo; pero en diferentes niveles; simplemente hay
quienes fortalecen esas características; adoptan unas nuevas y es lo que les hace visibles ante los demás.

De hecho, a inicios del siglo pasado se hablaba de la teoría del “gran hombre”, donde se afirmaba
que los líderes debían tener características innatas como “masculinidad”, la “inteligencia”, el “dominio”,
la “energía”, etc. Sin embargo, dicha teoría fue rebatida y hoy día se puede establecer que el líder no
solamente nace, sino que es posible que ese líder se construya.

De acuerdo a la teoría de las competencias y destrezas, es posible que se tengan todas las
habilidades necesarias para dirigir, producto del aprendizaje de las mismas. Lo que nos dice ésta teoría, es
que puedes prepararte cognoscitivamente para desempeñar un cargo; es decir, puedes aprender o
prepararte para ser líder, pero para ello, en el marco de un modelo en el que deben existir unos criterios
que determinan la calidad de la organización y que ayudan a desarrollar las competencias para ser líder.
(Cardona – García Lombardía 2005)
Parámetros Talentos Directivos C. Directivas
Liderazgo Por Competencias

Eficacia Talento Estratégico De Negocio

Atractividad Talento Ejecutivo Interpersonales

Unidad Autoliderazgo Personales

Fuente: Cardona, P., y García-Lombardía, P. (2005). Cómo desarrollar las competencias de liderazgo. Eunsa, Pamplona, p. 40.

Criterios: Eficacia – Atractividad – Unidad


Los cuales a su vez, requieren de unos talentos directivos:
Talento Estratégico – Telento Ejecutivo – Talento de Autoliderazgo

Entonces, la teoría de las competencias y destrezas nos dice que en la medida en que podamos
desarrollar y cumplir con los elementos del modelo anterior, muy probablemente seremos líderes… sin
embargo, creo que ésta afirmación merece ser rebatida, en el sentido que no se hace énfasis en el que,
considero yo, es el elemento clave del liderazgo y es la influencia.

El liderazgo se compone de muchos elementos, pero sin lugar a dudas, mostrar interés por los
otros puede llevarnos a un nivel de liderazgo excepcional. De nada te sirve saber todo sobre el
funcionamiento de una organización (teoría de las competencias) si no tienes el carisma para trabajar con
quienes son parte clave de esa organización o, siendo consecuente con lo planteado al inicio de la
exposición, es muy difícil influenciar en otros si te comportas con indiferencia o desinterés ante tus
potenciales seguidores.
Veamos un experimento. (Segmento Nat Geo 2)
https://www.youtube.com/watch?v=LXcR7xksj2Q

En efecto, cuando se demuestra interés por el otro, hay una conexión que logra conseguir cosas
que de otra forma sería impensable. Preguntar al auditorio de quién serían amigo…

Resultados del Experimento (Nat Geo 3) https://www.youtube.com/watch?v=LXcR7xksj2Q

El resultado tiene que ver con un factor crucial, no solamente en las organizaciones, sino en la
vida misma: La Comunicación, pero no cualquier clase de comunicación… una comunicación asertiva.

En ese sentido, se puede afirmar que la influencia puede ser verbal o no verbal y cuando hablamos
de lo no verbal, estamos hablando de un estilo, una forma de ser, una forma de actuar; en otras palabras,
hablamos del comportamiento. Por ello, es que existen teorías que explican la existencia de líderes a
partir del comportamiento o el estilo, donde la comunicación no verbal es sumamente importante.

Según el Psicólogo alemán Albert Mehrabian, el 93% de lo que comunicamos, lo hacemos sin
usar palabras…. Es decir que, cuando estamos frente a otra persona, el impacto de un mensaje depende tan
sólo de un 7% del contenido (verbal, la palabra en sí), un 38% del tono (vocal) y un 55% de señales y
gestos. ¡Y esto ocurre no solamente cuando estamos interactuando comunicativamente con otra persona…
sucede en todo momento!

Piense, por ejemplo, en un acto tan sencillo como vestirse. El ejercicio de escoger
cuidadosamente, un tono, un diseño, un accesorio, un calzado, lleva implícito el hecho de cómo me siento
hoy o a qué evento voy… Estoy comunicando muchas cosas solamente con mi vestuario porque a cada
elemento escogido, le doy un valor significativo y de la misma forma, quienes me ven, están valorando
significativamente.

Cuando Ud. va a un encuentro con alguien que le gusta, busca vestirse lo mejor posible para
causar una buena impresión en el otro… no necesariamente necesita decirle verbalmente a la otra persona
que hay un gusto… eso se puede hacer con una forma de mirar, un juego furtivo con las manos, el cabello
o el tono de voz… y eso es otra forma de comunicar…
Así mismo, el líder puede llegar a influenciar en otros a partir de su comportamiento… su forma
de vestir, el tono con que habla a los demás, la forma de solicitar las cosas, una palmada en el hombro o
un gesto de Ok, pueden ser mucho más persuasivos que la palabra misma… sin decir que sobren… Dicho
de otra forma, el ejemplo puede llegar a ser muy efectivo en los seguidores y aún más si impregnamos
ciertas dosis de humildad en el ejercicio.

Para el siguiente caso, tomemos como referencia precisamente el texto Liderazgo y Humildad de
Carlos Llano Cifuentes. De acuerdo con el autor, hay una diferencia clara entre ser un captador de
seguidores y trabajar en torno a una meta en común y tal diferencia la da la humildad, pues lo importante
no debe ser el líder, sino el objetivo. El asunto aquí es que, en la medida en que el líder sea capaz de usar
su comportamiento y su estilo como herramientas de persuasión a través de la comunicación no verbal, el
porcentaje de éxito a la hora de hacer llegar un mensaje con un propósito definido, es más alto, ya que, a
través del ejemplo, el líder tiene más autoridad para pedir lo que se quiere y, de paso, el líder se convierte
en una figura robusta que tendrá a su favor la facilidad de poder influenciar a nuevos seguidores. Así las
cosas, y siendo consecuentes con Llano Cifuentes, aunque lo importante no es el líder, éste termina siendo
vital en la organización. Veamos…

Papa Franciso Sorprende con sus muestras de humildad


(https://www.youtube.com/watch?v=y5SW5mX-Pvw)

Ahora podemos entender un poco la razón por la cual, por ejemplo, un “silencio por favor” en el
aula de clase, no basta, si ésta frase no va acompañada de una actitud que logre el objetivo comunicativo.

Según Mehrabian, no cabe duda de que en el trabajo una buena Comunicación No-Verbal puede
llevarnos al éxito o al fracaso. A que nos entiendan o a que nos mal interpreten, eso sin pasar por alto el
hecho que; como decía David Livingstone, (médico y misionero británico) ‘es muy difícil suprimir los
signos no verbales que traicionan nuestros auténticos sentimientos’; en otras palabras, nuestro
comportamiento no verbal muestra realmente lo que deseamos expresar.

Entonces, la teoría del comportamiento y el estilo, se puede entender como que un líder se puede
formar también a partir de la observación de un modelo a seguir y lo que se aprenda a partir del
comportamiento de éste, afirmación que podemos equiparar a lo que en teorías de enseñanza como el
aprendizaje social, la cual establece que se aprende más por el ejemplo que por la orden como tal.
¿Con qué autoridad moral se exigen cosas si con el ejemplo hacemos todo lo contrario?

Kenyi… “Mentir es malo”… “Diga que no estoy”


https://www.youtube.com/watch?v=yL4_MMR4KYE

Así como en el caso anterior, donde se afirma que nuestros hijos aprenden solamente el 30% de
los que les decirmos y el resto lo hacen por imitación, los seguidores actúan conforme las actitudes del
líder… Muchas veces, quien está en un cargo directivo, exige cosas que

Conclusiones:

Hemos visto que las teorías del liderazgo han sufrido cambios significativos de acuerdo al
momento histórico en el que se han producido tales postulados y que esas teorías se pueden agrupar en
fases de acuerdo a su desarrollo epistemológico. En ese sentido, en ésta presentación vimos que la
primera fase de ésas teorías se compone de:

 Teoría de Los Rasgos


 Teoría de Las Competencias
 Teoría del Comportamiento

Es necesario tomar lo mejor de cada una de éstas teorías para formar un líder completo.

Comunicación Persuación Influencia

Actuar o Pensar
Verbal (7%) No Verbal (93%) Comportamental Mental como deseo o
necesito
Líder es aquella persona que logra incidir sobre el comportamiento y/o el pensamiento de otros, a
través de herramientas como la comunicación, la semiótica, la persuasión, la humildad y el ejemplo y, en
la medida en que sepa combinar estratégicamente éstos elementos, será potencialmente un buen líder.

El Siglo XXI requiere de personas que, sin olvidar el cumplimiento de metas o alcance de
objetivos, sean capaces de interesarse por los demás, ya sean superiores, colegas, seguidores o clientes,
pues en esa medida, el porcentaje de éxito puede incrementarse.

https://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/cecilia-lopez-montano/liderazgo-en-crisis-
columna-de-cecilia-lopez-montano-335786

http://dspace.uib.es/xmlui/bitstream/handle/11201/3638/Zuzama_Covas_Juana_Maria.pdf?sequen
ce=1

https://jdavidulloa.files.wordpress.com/2013/05/que-es-un-lider.pdf

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