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ATENCIÓN PREHOSPITALARIA, PROCEDIMIENTOS DE EMERGENCIA Y

SISTEMA NACIONAL PARA LA ATENCIÓN DE DESASTRES

La atención prehospitalaria se define como un servicio operacional y de


coordinación para los problemas médicos urgentes y que comprende todos los
servicios de salvamento, atención médica y transporte que se presta a enfermos o
accidentados fuera del hospital y que constituye una prolongación del tratamiento
de urgencias hospitalarias. La atención prehospitalaria debe constituirse en un
sistema integrado de servicios médicos de urgencias y no entenderse como un
simple servicio de traslado de pacientes en ambulancias, atendidos con
preparación mínima.

La APH requiere posibilidades de comunicación entre los usuarios y la red de


atención de urgencias, estas interacciones deben ocurrir a través de números de
marcado rápido para la comunidad, tal como se está implementando en Colombia
el número 125 (Santafé de Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga, Cartagena, etc.).
Es necesario contar adicionalmente con adecuados sistemas de comunicaciones,
transporte y coordinación tal como ocurre en los llamados centros reguladores de
urgencias CRU.

El objetivo fundamental es ubicar el paciente en el lugar más indicado para su


patología y realizar durante el transporte una serie de actividades médicas de
reanimación y/o soporte que requieren capacitación específica al respecto, con lo
cual se logra una mejor condición de ingreso del paciente al hospital y por tanto
mayor sobrevida frente a la causa del evento urgente. En síntesis la filosofía de la
APH se resume en "llevar al paciente adecuado, al lugar adecuado, en el tiempo
adecuado".

Varios estudios han demostrado que la intervención oportuna de muchas


patologías potencialmente letales especialmente las cardiovasculares, pero
también las relacionadas con trauma, produce disminución de la mortalidad y
reduce considerablemente las secuelas, en igual forma está documentado el
aumento de las posibilidades de recibir el tratamiento apropiado.

La implementación de la APH exige motivación y participación activa de los


médicos, cooperación entre las instituciones prestadoras de servicios y educación
a la comunidad sobre las ventajas, objetivos, forma de utilización de los recursos
disponibles, etc.
Varias situaciones se pueden presentar cuando se realiza APH, el transporte
puede surgir como resultado de un llamado al número de marcado rápido, al
servicio de ambulancias de una institución, etc. y responder a situaciones de
traslado individual, por ejemplo un herido en la vía pública, o una situación de tipo
colectivo por ejemplo un choque múltiple, un desastre, etc. En uno u otro caso es
deseable que existan sistemas de regulación que permitan definir el tipo de
ambulancias requerido y las características del traslado. Las diferencias entre
traslado primario y secundario son evidentes, en el traslado primario el personal
dispone de información parcial sobre el caso mientras que en el secundario la
tripulación puede preparar con antelación todo lo requerido. En los casos de
desastre el transporte de heridos debe tener como etapa previa un trabajo de
clasificación o triage que es muy importante, existen diferentes cartillas sobre el
tema y mecanismos concretos como el uso de tarjetas, etc., que deben ser
conocidos y aplicados por quienes asuman el manejo del CACH (centro de
atención y clasificación de heridos), normalmente ubicado en una zona segura en
las inmediaciones del sitio de ocurrencia del desastre. En algunos casos
infortunadamente frecuentes, se desplazan un número importante de medios de
transporte de heridos a las zonas de desastre pero esto no siempre significa el
traslado de los pacientes graves.

Las condiciones de traslado varían según una gama muy alta de factores que
deben ser tenidos en cuenta, por ejemplo las condiciones de presión atmosférica y
su cambio, oxigenación, etc., especialmente en enfermedades cardiovasculares o
pulmonares. Estas condiciones se hacen más críticas en el caso de los traslados
aéreos de este tipo de pacientes por lo cual se recomienda implementar guías
específicas para esos casos. La dotación de las ambulancias también tiene
variación en el caso de las ambulancias fluviales y se requiere tener en cuenta
detalles técnicos, por ejemplo el doble motor, las luces de emergencia, las
señales, etc.

Como ya se mencionó el transporte de pacientes se ha dividido tradicionalmente


en dos tipos: primario desde el lugar de ocurrencia del evento urgente hasta la
institución receptora y secundario entre instituciones o hacia el domicilio del
paciente. También es importante tener en cuenta la clasificación de las
ambulancias terrestres en cuanto a su ámbito de servicio: traslado simple,
asistenciales básicas o asistenciales medicalizadas, pues de esta clasificación se
desprende también el tipo de personal que debe tripular los vehículos y que varía
desde auxiliares con formación en el tema hasta personal médico debidamente
capacitado.

A pesar de los esfuerzos de los últimos años, tanto del sector público como del
privado el desarrollo de la APH es limitado en Colombia, se calcula que hasta un
90% de todos los traslados son secundarios y la capacidad de respuesta en
términos del traslado primario es escasa, por lo cual puede decirse que solo
recientemente se han realizado esfuerzos en este sentido por parte de varios
grupos (Cruz Roja) brigadistas de Cali, grupos de atención medicalizada adscritos
a los CRU, etc.). Un dato todavía más desalentador es que, con mucho la forma
más frecuente de traslado de pacientes en nuestro país continúan siendo los taxis.

En el documento sobre centros reguladores de urgencias, hemos planteado estos


lugares como instancias de coordinación, que integran el transporte, las
comunicaciones y la capacidad de respuesta de las instituciones, lo cual en
últimas, es la forma correcta de operativización de la APH.

Desde el punto de vista clínico deben tenerse en cuenta que las condiciones de
espacio en el interior de la mayoría de los vehículos son restringidas y que la
disponibilidad de elementos técnicos salvo en las ambulancias medicalizadas,
imponen conductas clínicas precisas optimizando los elementos disponibles.

En las ambulancias debe disponerse de elementos adecuados para la


inmovilización tales como collares cervicales y tablas rígidas largas las cuales
deben estar diseñadas de tal forma que permitan el levantamiento desde el piso.
Las camillas que permiten levantar el paciente sin necesidad de movimientos
excesivos tipo tijera son útiles especialmente en los casos en que se sospecha
lesión raquimedular, para lo cual debe pensarse siempre en que sean
radiotransparentes.

El paciente debe viajar en las condiciones mas cómodas y fisiológicas posibles de


acuerdo con su condición clínica, las camillas deben tener mecanismos para
asegurarse (portacamillas) y para sujetar al paciente mediante correas. En
relación con las necesidades de equipo en las ambulancias terrestres la resolución
009279 de 1993 expedida por el Ministerio de Salud, contiene una descripción
muy adecuada de los elementos mínimos que se deben disponer de acuerdo con
la complejidad de traslado. Un detalle aparentemente sin importancia es la
disposición de los elementos dentro del vehículo, la misma debe corresponder a
las necesidades del personal médico o auxiliar que realiza los traslados y no a las
conveniencias de disposición que señalan los fabricantes, esta recomendación es
importante en aquellos casos en que se decidan compras de vehículos, solo
participando en los traslados se puede precisar cual es el lugar más adecuado
para la colocación de monitores, maletines de reanimación, luces interiores,
banquetas, etc.

Igual que en cualquier tipo de atención debe existir un registro escrito de los
hallazgos clínicos iniciales, el tratamiento médico previo y durante el transporte,
del cual se debe entregar copia al médico incluye garantizar la vía aérea, bien sea
con cánulas orofaríngeas adecuadamente instaladas o intubación orotraqueal, si
las condiciones lo ameritan, en todos los casos es deseable colocar una sonda
nasogástrica pues el riesgo de broncorespiración aumenta dada la posición y el
movimiento dentro del vehículo, especialmente en caso de trauma
craneoencefálico.

Las ambulancias deben contar con cilindro de oxígeno con manómetro y vaso
humidificador de tal forma que se disponga de un método preciso para administrar
oxígeno, en igual forma se debe disponer de aspiración o succión para las
secreciones, para lo cual existen modelos prácticos y eficientes de aspiradores
portátiles.

En el caso de requerirse ventilación mecánica debe disponerse de un ventilador


con regulación de presión y volumen lo mas sencillo posible, pues en estos casos
debe preverse la necesidad de desmontar el equipo una vez se llegue a la
institución de destino y trasladar al paciente desde la ambulancia hasta el sitio
donde se conecte a otro ventilador, la experiencia nos ha enseñado que no
siempre el ventilador más complejo y con más funciones es el más adecuado.

En el caso de sangrado, la medida más recomendable es la presión sobre el o los


sitios con sangrado, para lo cual debe disponerse de abundantes compresas,
apósitos y esparadrapos, debe tenerse en cuenta la posibilidad de reacciones
alérgicas; está completamente proscrita la colocación de pinzas, o torniquetes
hemostáticos; en todo caso debe garantizarse una o dos líneas venosas con
catéteres gruesos, debe preferirse la infusión de cristaloides, en la práctica no
resulta fácil restaurar pérdidas sanguíneas, especialmente porque normalmente no
se dispone de la sangre requerida o porque no se hayan realizado las pruebas de
rigor, de todas maneras en traslados largos y si las medidas de seguridad han sido
contempladas no existe contraindicación formal para transfundir pacientes en las
ambulancias.
Además de tener en cuenta las condiciones mínimas de ventilación y control
cardiovasculares para lo cual puede ser necesario el manejo de algunos fármacos
entre menos mejor-, la tendencia actual de los traslados en el mundo entero es
realizar traslado lo más rápido posible, contando con un monitoreo mínimo de
signos vitales.

Existe un número importante de drogas recomendadas para los traslados todas


las cuales pueden ser utilizadas si el caso lo requiere, en todo caso los botiquines
en los cuales se transporte la droga deben prever compartimentos seguros,
adecuadamente dispuestos con los nombres de todas las drogas, debe disponerse
un compartimento para los recipientes vacíos de tal manera que se realicen
conteos de verificación posteriores; de todas maneras se debe anotar en el
registro especial para medicamentos el nombre de la droga y las dosis aplicadas
en la medida en que el procedimiento se realiza.

El uso de bombas de infusión en ambulancias medicalizadas contribuye sin duda a


la precisión de las dosis administradas pero su sensibilidad puede ocasionar
problemas de lectura durante el traslado, en la misma forma se requieren bombas
que tengan características de adaptación iguales a las que existen en las
instituciones, su uso debe restringirse por costo y la relación costo-beneficio debe
tenerse en cuenta cuando se decida comprar estos equipos para las ambulancias,
los glucómetros y los desfibriladores por el contrario resultan elementos altamente
costo-efectivos sobre todo si se tiene en cuenta la incidencia de fibrilación
ventricular y/o de coma asociado con desordenes metabólicos.

Finalmente el traslado de pacientes incluye los mismos criterios de bioseguridad


que la atención hospitalaria, la comunicación con la institución receptora es una
necesidad del traslado, para que se disponga lo requerido para la atención, un
axioma en el traslado primario es retardar lo menos posible las intervenciones
definitivas, como siempre las consideraciones éticas, la información oportuna al
paciente y a los familiares acerca de las intervenciones que se deban realizar, las
complicaciones, los tiempos posibles del traslado, etc. Brinda confianza al receptor
del servicio y disminuye las cada vez más frecuentes demandas por supuestos
errores de manejo durante el traslado.
NÚCLEO PROBLEMICO 1: ¿Se tienen establecidos protocolos y mecanismos
de regulación para la atención de emergencias y primeros auxilios en
Colombia?

En Colombia es de vital importancia garantizar la continuidad en la prestación de


los servicios de salud a las comunidades afectadas por situaciones de emergencia
o desastre a través del fortalecimiento de las instituciones de salud del país en
temas relacionados con su preparación para la atención de emergencias y
desastres, por todo esto se establecieron los protocolos para atención de
desastres y emergencias.

Problemas:

1. ¿Cómo se atienden las emergencias y los primeros auxilios en las


empresas de nuestra región?

1 ANTES DE LA EMERGENCIA

 Conocer las instalaciones y los riesgos que puedan generar una


emergencia.

 Tener claro conocimiento de los planes normativos y operativos de la


universidad, de la ubicación y capacidad exacta de los diferentes equipos
para el control de emergencias.

 Elaborar y actualizar permanentemente el manual de procedimientos para


la prevención y control de emergencias.

 Retroalimentar permanentemente los esquemas operativos para la atención


de emergencias.

 Hacer revisión permanente extintores y otros equipos para emergencia


ubicados en los edificios y bodega de emergencia.

 
DURANTE LA EMERGENCIA

 Activar la cadena de llamadas de la brigada.

 Designar un coordinador para conformar el puesto de mando unificado.

 Organizar el esquema operativo para la atención de la emergencia.

 Hacer un diagnóstico de la situación de emergencia, para determinar la


acción a seguir.

 Realizar control en la zona de impacto.

 Evacuar personal lesionado de la zona de impacto de acuerdo a la prioridad


de atención.

 Tener informado al puesto de mando unificado del desarrollo de la


operación en la zona de impacto.

 Orientar y apoyar las acciones de los cuerpos de ayuda externos.

  DESPUES DE LA EMERGENCIA

 Participar en las labores de recuperación y evaluación de daños.

 Realizar un inventario de los recursos utilizados en el control de la


emergencia para determinar su recuperación.

 Evaluar el desempeño de la brigada en el control de la emergencia, para


determinar correctivos y ajustes a los procesos.

 Presentar informe detallado de las acciones desarrolladas.  

2. ¿Las atenciones de primeros auxilios y de emergencia ante eventos como


accidentes de trabajo cumplen con protocolos y normatividad básica
establecida?
En mi institución Hospital Federico Lleras Acosta se elaboro el protocolo de
accidente de trabajo teniendo en cuenta la normatividad y quedo de la
siguiente manera:

 Reportar el accidente al jefe inmediato del área.

 Asista a urgencias y preséntese al médico de planta para su valoración.

 Lleve fotocopia de la cédula y del carne de la A.R.P. (en nuestro caso


Positiva S.A.).

 Con el coordinador de salud ocupacional diligencie el formato de reporte de


accidente y llévelo a la A.R.P. para colocarle el sello en un espacio de 48
horas una vez ocurrido el accidente y cuando es fin de semana 78 horas,
junto con la fotocopia de la historia clínica.

 Si se ordenan exámenes y/o medicamentos llevar las ordenes originales


para que lo entreguen o lo autoricen.

 Si se expide incapacidad tramítela por la EPS a la cual pertenece. Entregue


copia de la misma al coordinador o jefe de área para su respectivo tramite
ante la Unidad Funcional de Recursos Humanos.

Conocimientos:

1. Conceptos sobre emergencia, tipos de emergencias, reportes de alarma,


evacuación, terminología general de primero auxilios.

a) Emergencia: Fenómeno o suceso que causa daños o alteraciones en las


personas, los bienes, los servicios o el medio ambiente, sin exceder la
capacidad de respuesta de la comunidad afectada. A nivel hospitalario,
implica que hay un precario equilibrio entre los recursos disponibles y la
demanda de servicios.

b) Tipos de emergencia:

Emergencia ecológica de importancia mundial


Situación derivada de actividades humanas o fenómenos naturales que al
afectar severamente a sus elementos, pone en peligro a uno o varios
ecosistemas.

Por ejemplo:

 Derrame de petróleo;
 Alteraciones en las barreras caloríferas causadas por el
calentamiento global.

Emergencia causada por intervenciones andrógenas

Situaciones derivadas de la ocurrencia de fenómenos hidro-meteorológicos


extremos, en locales donde existen obras construidas por el hombre.

Por ejemplo:

 La llegada de una avenida excepcional a un embalse que tiene


limitaciones en sus descargas para no causar daños aguas abajo, y el
operador se ve obligado a sobrepasar este límite para no poner en
riesgo la presa, cuya ruptura causaría una catástrofe aun mayor;
 El desarrollo de incendios forestales en bosques próximos a áreas
pobladas.

Emergencia sanitaria

Se denomina emergencia sanitaria a situaciones de epidemias o pandemias

Emergencias complejas

Situaciones de desastre que envuelven innumerables factores de violencia


o turbación de tipo político, militar civil.

c) Reportes de alarmas: actividad que se realiza a través de la red telefónica


instaurada por el departamento, municipio y gobierno.

d) Evacuación: conjunto de procedimientos y acciones tendientes a que


personas amenazadas por un peligro protejan sus vidas e integridad física,
mediante su desplazamiento hasta y a través de lugares seguros. Cuando
es necesario evacuar:

• que amenace simultáneamente a varias personas


• que puedan amenazar a varias personas en forma secuencial

• incendios declarados

• posibilidad de explosión

• escape de vapores tóxicos

• falla de estructuras

• sismos

• inundaciones

• amenazas colectivas

• siempre que existan riesgos colectivos inminentes

e) Primeros auxilios:

Se entiende por primeros auxilios a las técnicas y procedimientos de


carácter inmediato, limitado, temporal, profesional o de personas
capacitadas o con conocimiento técnico que es brindado a quien lo
necesite, víctima de un accidente o enfermedad repentina.

Su carácter inmediato radica en su potencialidad de ser la primera


asistencia que esta víctima recibirá en una situación de emergencia.
Limitado porque de todas las técnicas, procedimientos y concepciones que
existen en la Medicina de emergencias y desastres, solo utiliza una
pequeña parte de estas, por esto el socorrista nunca debe pretender
reemplazar al personal médico, pueden ser de primera instancia o de
segunda instancia.

Los principales pasos seguidos en un primer auxilio son los siguientes:

1. Evaluación del área


• Seguridad.

• Escena.

• Situación.

• ¿Es segura?

• ¿Cuántos lesionados hay?

• Solicitar ayuda.

• ¿Cuento con el equipo de protección necesario?

Por ejemplo, al encontrar a una persona inconsciente y con sospecha de


haber recibido una descarga eléctrica o electrocución. La persona que va a
atender debe estar segura que no será otra víctima. Si es seguro, brindará
la atención. De otro modo, debe llamar al personal especializado en ayuda,
sin exponerse.

2. Evaluación inicial del paciente

1. Valoración de la consciencia: Se preguntará a la víctima cómo está,


como se encuentra. Si contesta es símbolo inequívoco de que respira y
tiene pulso. En caso que no conteste pellizcar levemente en los hombros, si
reacciona, seguir la conducta anterior; en caso negativo, llamar a los
servicios de emergencias cuanto antes.

Una manera rápida de valorar la conciencia es determinar si responde o no

• Alerta. Está despierto, habla.

• Verbal. Responde al llamado, cuando alzamos la voz y lo llamamos


¡¿Cómo esta?!

• Dolor. Responde al dolor, le pellizcamos y reacciona con gestos o


gruñidos.

• Inconsciente. No responde.

2. Valoración neurológica mediante la escala de Glasgow: evaluación de la


respuesta motora
 Tiene los ojos abiertos.

a) Nunca. 1
b) Solo al estimulo doloroso. 2
c) Con estimulo verbal. 3
d) De manera espontánea. 4

 respuesta verbal.

a) Sin respuesta. 1
b) No comprensible. 2
c) Incoherencia. 3
d) Habla desorientado. 4
e) Habla orientado. 5
 respuesta motora.
a) No responde. 1
b) Extensión ante el estimulo. 2
c) Flexión anormal. 3
d) Retira ante el estimulo. 4
e) Localiza el foco doloroso. 5
f) Respuesta voluntaria. 6

• Valoración de la escala

15 puntos............paciente en estado normal.


15-14 puntos.........traumatismo craneal leve.
13-9 puntos..........traumatismo craneoencefálico moderado.
Inferior a 9 puntos.....traumatismo craneoencefálico grave.

3. Valoración de la respiración.

Nos acercaremos a la boca de la víctima con la mejilla e intentaremos sentir


el aliento a la vez que dirigimos la mirada al tórax (si respira se moverá). Es
importante destacar que en caso de que exista respiración, hará falta
explorar el pulso ya que puede o no tenerlo.

 Ver: Miramos el tórax, se eleva o no, si se eleva y baja respira.

 Escuchar: Con el oído escuchamos el sonido de la respiración.


 Sentir: Con los dedos índices y medio sentimos el pulso carotídeo (a un
lado de la tráquea) de la víctima.

Activar el sistema médico de emergencias o urgencias.

3. Solicitar ayuda a personal de la emergencia. Números de teléfono de


emergencias:

VALORACION DEL PULSO.

Existen múltiples lugares donde buscarlo, se dividen en dos grupos:

Pulso central: Las arterias carótidas, situadas a ambos lados de la nuez de


Adan en una pequeña depresión, en la garganta; para sentirlo presionar
levemente con los dedos índice y mayor, nunca con el pulgar (sentiríamos
nuestro propio pulso). Las arterias femorales

Pulso periférico: Otros lugares para identificar el pulso pueden ser las
arterias radiales, en la cara interna de la muñeca. Menos recomendables ya
que en caso de accidente y pérdida del conocimiento, la sangre se
redistribuye hacia los órganos vitales, y no a las extremidades por lo que a
veces este método puede resultar engañoso.

En caso de no encontrar pulso, iniciar el masaje cardiaco, es decir la


reanimación cardiopulmonar.

Que hacer en caso de emergencia:

• Reporte inmediatamente Informe la situación con la mayor claridad


posible.

• Puede también avisar a un vigilante.

• Mantenga la calma.

¿Qué hacer en caso de Exposición a los gases lacrimógenos?:

• Mantenga la calma, respire normalmente y evite tomar “bocanadas “de


aire.

• Camine con cuidado, mirando siempre a su alrededor.


• En caso de no ver utilice los brazos como guía.

• Nunca corra ciego, puede caerse o accidentarse.

• Si se encuentra en un espacio cerrado salga de inmediato.

• Si no puede salir abra las puertas y ventanas para ventilar el área.

• Recuerde que el mejor tratamiento es aire y agua fría.

¿Qué hacer en caso de incendio?

• Utilice los extintores siguiendo las instrucciones básicas para el manejo


de extintores:

• Ubique el extintor más próximo a su lugar de trabajo o su ubicación.

• Retire el pasador o pin de seguridad.

• Presione el gatillo o manija superior dirigiendo la descarga a la base de


las llamas en forma de abanico.

• Ubíquese a favor del viento para que las llamas y el humo no le afecten.

• Si no es posible contener el incendio, evacue el lugar

2. Identificación del marco regulativo de la atención pre hospitalaria en


Colombia.

 Declaración Universal de los Derechos Humanos  (ONU 10 de Diciembre


de 1948).

 Ley 9ª. de 1979: Código Sanitario Nacional. Art. 80 Literal E: “Proteger a


los trabajadores y a la población de los riesgos para la salud, provenientes
de la producción, almacenamiento, transporte, uso o disposición de
sustancias peligrosas para la salud pública”.

 Decreto 919 de 1989. Artículo 1: “Todas las entidades públicas y privadas


que financien estudios para la formulación de planes, programas y
proyectos de desarrollo regional y urbano, incluirán en los contratos
respectivos el componente de prevención de riesgos”.
 Resolución 1016 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social: exige a las
empresas, en materia de salud e higiene ocupacional, que cuenten con
planes de emergencias en sus ramas preventiva, pasiva o estructural y
activa de control.

3. Actitudes de un auxiliador frente a un accidentado

PRINCIPIOS BÁSICOS

Todo socorrista en sus actuaciones debe conocer y aplicar siempre en este orden
los siguientes principios básicos:

1º PROTEGER: en primer lugar, a él mismo y después a la víctima. Podemos


evitar nuevos accidentes, si señalizamos el lugar del accidente. SÓLO si hay
peligro para el accidentado se le desplazará, manteniendo recto el eje cabeza-
cuello-tronco.

2º AVISAR: es decir dar el SOS, indicando: el número y estado aparente de los


heridos, si existen factores que pueden agravar el accidente (caídas de postes
eléctricos) y el lugar exacto dónde se ha producido el accidente. Saber que de la
información que nosotros demos, va a depender tanto la cantidad como la calidad
de medios humanos y materiales, que allí nos lleguen.

3º SOCORRER: Esta es la finalidad principal de los primeros auxilios, pero para


hacerlo correctamente previamente hace falta realizar la evaluación del herido.

PRINCIPIOS GENERALES

Estar tranquilo, pero actuar rápidamente.- Con tranquilidad se da confianza a la


víctima y a aquellos que se encuentren cerca. Los testigos suelen tener miedo,
con frecuencia pánico o están sobreexcitados. El auxiliador ha de dar ejemplo
mostrando su tranquilidad.

Hacer una composición de lugar.- Cuando se llega al lugar del accidente no se


debe comenzar a actuar curando al primer herido que se encuentre. Pueden haber
otros heridos más graves y que, por tanto, necesiten atenderse en primer lugar.
Hacer, pues, un rápido examen del lugar. Debe intentarse saber si existen heridos
ocultos. Hay que darse cuenta también de las posibles fuentes de peligros que
aún existan: amenaza de derrumbamiento, ruptura de canalizaciones de gas o de
agua, fuego, etc.
Mover al herido con gran precaución.- Jamás se cambiará de sitio al
accidentado antes de cerciorarse de su estado y haberle proporcionado los
primeros cuidados. Además, un herido grave, no debe ser movilizado excepto por
estas tres razones:

 Para poderle aplicar los primeros auxilios

 Evitar el agravamiento de sus heridas

 Protegerle de un nuevo accidente

Examinar bien al herido.- Investigar si respira, si tiene pulso, si está consciente,


si sangra, si tiene una fractura, si presenta quemaduras, si ha perdido el
conocimiento. Estar bien seguros de no haber dejado escapar nada.

No hacer más que lo indispensable.- Si se intentan hacer demasiadas cosas, se


retrasará el traslado de la víctima. El papel del auxiliador no es el de reemplazar a
los servicios sanitarios, sino que se ha de limitar a proporcionar aquellas medidas
estrictamente necesarias para un correcto transporte del herido.

Mantener al herido caliente.- Evitar, no obstante, un calor excesivo,


manteniéndole a una agradable temperatura. Si hace frío, todo el cuerpo debe ser
calentado; para ello lo mejor será envolverlo en una manta.

No dar jamás de beber a una persona inconsciente.- En este estado no podrá


tragar y existirá peligro de ahogarla al penetrar el líquido en las vías aéreas. Si la
víctima conserva la conciencia y no presenta una herida profunda en el vientre, se
le puede dar de beber, lentamente, y solo a pequeños sorbos. No darle alcohol, es
preferible café o té caliente, sobre todo si hace frío.

Tranquilizar a la victima.- El accidentado tiene miedo. Hay que hablarle ya que


está angustiado; el curso de su vida se ha visto truncado bruscamente y padece
por los que le acompañan o por su familia. Hay que tranquilizarle, calmar sus
temores y levantarle el ánimo. Hay que decirle que hay gente cerca que se ocupa
de él, que los servicios de urgencias han sido avisados y que vendrán pronto. No
se le debe dejar ver su herida.

No dejar nunca solo al accidentado.- El estado del mismo puede gravarse en un


corto espacio de tiempo.

4. Valoración primaria y secundaria


Valoración Primaria

El proceso de valoración consiste en la recogida de datos sobre el paciente


que pueden ser de utilidad para facilitar la correcta actuación del auxiliador.
Esta valoración ha de ser sistemática y precisa. Entendemos dos formas
complementarias y consecutivas de valoración: la primaria y la secundaria.

En una situación de urgencia, a pesar que la reacción instintiva de cualquier


persona es emprender alguna acción, no se ha de caer en este error, pues la
valoración primaria requiere pocos minutos y de su realización puede depender
la vida del accidentado.

La valoración primaria se inicia con la primera impresión que el auxiliador tiene


al ver al herido, que se forma a partir de lo que vemos y oímos, seguida de la
evaluación primaria propiamente dicha, que consiste en identificar problemas
que amenazan la vida del individuo, resumidos en el ABC:

A.- AIRWAY ----------> Permeabilidad de las vías aéreas, necesaria para que el
aire llegue a los pulmones.

B.- BREATHING -----> Existencia de respiración espontánea.

C.- CIRCULATION --> Existencia de latido cardiaco y ausencia de grandes


hemorragias.

La alteración de estos tres puntos se da en la parada cardio-respiratoria, que


será tratada posteriormente.

VALORACIÓN SECUNDARIA

Sólo después de realizar la valoración primaria y las debidas actuaciones


(reanimación cardio-pulmonar, apertura de vías, etc.), si las hubo, se realiza la
valoración secundaria.

Ésta consiste en la valoración del estado del accidentado de pies a cabeza,


tanto por delante, por detrás y por ambos laterales. Se han de buscar:

 fracturas de miembros o de la columna vertebral,


 golpes recibidos en la cabeza, tórax, abdomen y/o espalda que puedan
producir hemorragias internas,
 lesiones, contusiones, quemaduras, dolor, etc.

Durante este proceso se interrogará al enfermo, si está consciente, intentando


obtener la mayor cantidad de información posible por si dejara de estarlo. Se
anotaran, y posteriormente se trasmitirán a los servicios sanitarios, los
siguientes datos:

 nombre y apellidos
 edad
 constantes vitales (pulso y respiración)
 enfermedades que padezca o halla padecido
 medicación que toma habitualmente (anticoagulantes, insulina,.)
 alergias a algún medicamento
 si lleva algún informe médico encima
 localización del dolor
 hormigueos, "descargas eléctricas", entorpecimiento de las piernas
 actuaciones de primeros auxilios realizadas y respuesta del paciente a
ellas,
 SI existe hemorragia la cantidad aproximada y el origen,
 SI se está realizando la Reanimación Cardio-Pulmonar, tiempo desde la
parada y tiempo que se está realizando la maniobra.
SI existe intoxicación por fármacos o productos tóxicos, cuándo y qué cantidad,
y si hubo vómitos.

5. Signos Vitales
Se denominan signos vitales, las señales o reacciones que presenta un ser
humano con vida que revelan las funciones básicas del organismo. Los Signos
Vitales son:

 Respiración

 Pulso

 Reflejo Pupilar

 Temperatura

 Prensión Arterial

Al prestar primeros auxilios es importante valorar el funcionamiento del


organismo y detectar las alteraciones que son frecuentes en caso de
accidentes; para ello es necesario controlar la respiración y el pulso.

La determinación de la Temperatura y Prensión Arterial se realiza a nivel


institucional debido a que casi nunca poseemos los equipos para la medición
de estos dos signos vitales. En primeros auxilios su utilización es limitada.

El control de la respiración y el pulso, además de ser necesario para


determinar los cambios que se presenten como consecuencia del accidente,
orientan al personal de salud para iniciar el tratamiento definitivo.
RESPIRACIÓN

Es el intercambio gaseoso entre el organismo y la atmósfera. La respiración


consta de dos fases: la inspiración y la espiración.

Durante la inspiración se introduce el oxigeno a los pulmones proveniente de la


atmósfera y en la espiración se elimina bióxido de carbono. En la respiración
además de los órganos del aparato respiratorio, intervienen la contracción de
los músculos del tórax y los movimientos de las costillas.

Por eso en caso de lesiones a este nivel , es indispensable el control de este


signo vital.

Cifras Normales de la Respiración

Hay factores que hacen variar el número de respiraciones, entre ellas:

 El ejercicio; la actividad muscular produce un aumento temporal de la


frecuencia respiratoria.
 El sexo; en la mujer la respiración tiende a ser más rápida que en el
hombre.
 La hemorragia; aumenta la respiración.
 La edad; a medida que se desarrolla la persona la frecuencia
respiratoria tiende a disminuir.

Las cifras normales son:

Niños de meses: 30 a 40 respiraciones por minuto Niños hasta seis años: 26 a


30 respiraciones por minuto
Adultos: 16 a 20 respiraciones por minuto
Ancianos: menos de 16 respiraciones por minuto

Procedimiento para Controlar la Respiración

Para controlar la respiración, usted como auxiliador, debe contar los


movimientos respiratorios, tomando la inspiración y la espiración como una
sola respiración.
 Coloque el lesionado en posición cómoda (acostada) en caso de vomito
con la cabeza hacia un lado.
 Afloje las prendas de vestir.
 Inicie el control de la respiración observando el tórax y el abdomen, de
preferencia después de haber tomado el pulso, para que el lesiona do
no se dé cuenta y evitar así que cambie el ritmo de la respiración.
 Cuente las respiraciones por minuto utilizando un reloj con segundero.
 Anote la cifra para verificar los cambios y dar estos datos cuando lleve el
lesionado al centro asistencial.

PULSO

Es la expansión rítmica de una arteria, producida por el paso de la sangre


bombeada por el corazón.

El pulso se controla para determinar el funcionamiento del corazón. El pulso


sufre modificaciones cuando el volumen de sangre bombeada por el corazón
disminuye o cuando hay cambios en la elasticidad de las arterias; tomar el
pulso es un método rápido y sencillo para valorar el estado de un lesionado.

Cifras Normales del Pulso

El pulso normal varía de acuerdo a diferentes factores; siendo el más


importante la edad.
NIÑOS DE MESES: 130 A 140 Pulsaciones por minuto
NIÑOS: 80 A 100 Pulsaciones por minuto
ADULTOS: 72 A 80 Pulsaciones por minuto
ANCIANOS: 60 O menos pulsaciones por minuto

Sitios para tomar el Pulso

El pulso se puede tomar en cualquier arteria superficial que pueda comprimirse


contra un hueso. Los sitios donde se puede tomar el pulso son:

En la sien (temporal)
En el cuello (carotídeo)
Parte interna del brazo (humeral)
En la muñeca (radial)
Parte interna del pliegue del codo (cubital)
En la ingle (femoral)
En el dorso del pie (pedio)
En la tetilla izquierda de bebes (pulso apical)
En primeros auxilios en los sitios que se toma con mayor frecuencia es el radial
y el carotídeo.

Recomendaciones para tomar el Pulso

 Palpe la arteria con sus dedos índice, medio y anular. No palpe con su dedo
pulgar, porque el pulso de este dedo es más perceptible y confunde el suyo.
 No ejerza presión excesiva, porque no se percibe adecuadamente.

 Controle el pulso en un minuto en un reloj de segundero.

 Registre las cifras para verificar los cambios.

Manera de tomar el pulso carotídeo

En primeros auxilios se toma este pulso porque es el de más fácil localización y


por ser el que pulsa con más intensidad.
La arteria carotídea se encuentra en el cuello a lado y lado de la tráquea para
localizarlo haga lo siguiente:
- Localice la manzana de Adán
- Deslice sus dedos hacia el lado de la tráquea
- Presione ligeramente para sentir el pulso
- Cuente el pulso por minuto.
Manera de tomar el pulso radial:

Este pulso es de mayor acceso, pero a veces en caso de accidente se hace


imperceptible.

- Palpe la arteria radial, que está localizada en la muñeca, inmediatamente


arriba en la base del dedo pulgar.
- Coloque sus dedos (índice, medio y anular) haciendo ligera presión sobre
la arteria.
- Cuente el pulso en un minuto.

Manera de tomar el pulso apical:

Se denomina así el pulso que se toma directamente en la punta del corazón.


Este tipo de pulso se toma en niños pequeños (bebès).

 Coloque sus dedos sobre la tetilla izquierda.


 Presione ligeramente para sentir el pulso.

 Cuente el pulso en un minuto.

REFLEJO PUPILAR

Normalmente las pupilas se contraen al estímulo de la luz. Si ambas pupilas


están más grandes de lo normal (dilatadas), la lesión o enfermedad puede
indicar shock, hemorragia severa, agotamiento por calor, o drogas tales como
cocaína o anfetaminas.

Si ambas pupilas están más pequeñas de lo normal (contraídas), la causa


puede ser una insolación o el uso de drogas tales como narcóticos. Si las
pupilas no son de igual tamaño, sospeche de una herida en la cabeza o una
parálisis.

Manera de tomar el Reflejo Pupilar

Si posee una linterna pequeña, alumbre con el haz de luz el ojo y observe
como la pupila se contrae. Si no posee el elemento productor de luz, abra
intempestivamente el párpado superior y observe la misma reacción.
Si no hay contracción de una o de ninguna de las dos pupilas, sospeche daño
neurológico grave.

Temperatura Corporal

La temperatura normal del cuerpo de una persona varía dependiendo de su


sexo, su actividad reciente, el consumo de alimentos y líquidos, la hora del día
y, en las mujeres, de la fase del ciclo menstrual en la que se encuentren. La
temperatura corporal normal, de acuerdo con la Asociación Médica Americana
(American Medical Association), puede oscilar entre 97,8° F (o Fahrenheit,
equivalentes a 36,5°C, o Celsius) y 99°F (37,2°C). La temperatura corporal se
puede tomar de las siguientes maneras:

 Oral
La temperatura se puede tomar en la boca utilizando el termómetro clásico
o los termómetros digitales más modernos que usan una sonda electrónica
para medir la temperatura.

 Rectal
Las temperaturas que se toman en el recto (utilizando un termómetro de
vidrio o digital) tienden a ser de 0,5 a 0,7° F más altas que si se toman en la
boca.
 Axilar
La temperatura se puede tomar debajo del brazo utilizando un termómetro
de vidrio o digital. Las temperaturas que se toman en esta zona suelen ser
de 0,3 a 0,4°F más bajas que las que se toman en la boca.

 En el oído
Un termómetro especial puede medir rápidamente la temperatura del
tímpano, que refleja la temperatura central del cuerpo (la temperatura de los
órganos internos).

¿Qué es la fiebre?

La fiebre (también llamada pirexia) se define como una temperatura del cuerpo
mayor que la normal en una determinada persona. Generalmente indica que
existe algún proceso anormal en el cuerpo. La gravedad de una condición no
se refleja necesariamente en el grado de fiebre. Por ejemplo, la gripa puede
causar fiebre de 104° F (40° C), mientras que una persona con neumonía
puede tener una fiebre muy baja o no tener fiebre. Consulte con su médico
para aclarar cualquier pregunta sobre si su fiebre es o no importante.

La temperatura del cuerpo puede ser anormal debido a la fiebre (temperatura


alta) o a la hipotermia (temperatura baja). De acuerdo con la Asociación
Médica Americana, se considera que hay fiebre cuando la temperatura corporal
es mayor de 98,6° F (37° C) en la boca o de 99,8° F (37,6 ° C) en el recto. La
hipotermia se define como una disminución de la temperatura corporal por
debajo de los 95° F (35° C).

PREGUNTAS GENERADORAS

1. ¿Qué representa para el profesional de salud ocupacional tener


conocimientos, habilidades y destrezas para brindar adecuadamente la
atención pre hospitalaria a la víctimas de un accidente de trabajo?

Representa el poder actuar de manera correcta para brindar apoyo a la


victima para su atención oportuna salvaguardando la integridad en la salud
y en la persona, esto de acuerdo al tipo de accidente.

2. Ante la ocurrencia de un accidente de trabajo, ¿cuales serian las primeras


acciones que usted debería realizar como responsable de la salud
ocupacional de una empresa?

De acuerdo al tipo de accidente si esta en peligro la vida de la víctima, lo


primero que se haría es prestar los primeros auxiliar para estabilizar a la
víctima, después llevarlo a urgencias para que terminen de darle la atención
que necesite.

Si el accidente no pone en peligro la vida de la víctima, realizaría el reporte


correspondiente a la A.R.P elegida y al jefe inmediato.

3. ¿Cómo evidencia un paro cardio respiratorio?

El paro cardiorespiratorio es el cese brusco e inesperado de la función


circulatoria y respiratoria eficaz. Es una situación generalmente inesperada
capaz de sorprender, en un instante, a personas en aparente estado de
salud. La falta de conocimiento, lo imprevisto del suceso y la lentitud en la
implementación de las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica
hacen que, muchas veces, se fracase en los intentos por recuperar la vida.

A continuación, detallamos cómo realizar la reanimación cardiopulmonar en


adultos, que no es otra cosa que cumplir con las funciones del corazón y los
pulmones hasta la llegada de ayuda médica.

Es importante que tenga en cuenta que la información que aquí


presentamos no suplanta la capacitación sistemática necesaria para ser
rescatador entrenado e intervenir ante un paro cardiorespiratorio. De todas
maneras, no dudamos que ayudará a saber cómo proceder en los primeros
instantes.

¿Qué es la Reanimación Cardiopulmonar?

Consiste en la combinación de respiración boca a boca y compresiones


sobre el pecho (masaje cardíaco).

En el caso de encontrar una persona en estado de inconsciencia, verifique


si respira; de no ser así, solicite ayuda de inmediato e inicie la respiración
boca a boca.

Luego verifique el pulso; de no hallarlo, inicie el masaje cardíaco.

Si no hay respiración ni pulso deberá administrar primero 2 exhalaciones


profundas y luego 15 compresiones sobre el pecho. Repita alternativamente
este proceso hasta que la persona afectada se recupere o llegue ayuda
profesional.

Respiración boca a boca

Recueste a la persona afectada boca arriba. Retire cualquier tipo de


obstrucción de su boca. Ubique luego la mano en la frente y apriete la nariz
mientras le coloca 2 dedos debajo del mentón e inclina su cabeza hacia
atrás.
Retire cualquier tipo de obstrucción de la boca

Coloque su boca sobre la boca de la persona sellándola con firmeza. Sople


en forma constante hasta que se levante el pecho, luego separe su boca.
Inhale aire fresco y repita este paso administrando 10 exhalaciones por
minuto.

Cubra la boca de la persona totalmente para que no se escape el aire


Verifique si el pecho se hunde

Continúe el paso anterior hasta que la persona respire sin ayuda o hasta
que llegue ayuda profesional. Si no tiene pulso, empiece el masaje
cardíaco.

Masaje Cardíaco

Siga la costilla inferior hasta el esternón

Eche la cabeza hacia atrás para abrir las vías respiratorias


Acueste a la persona sobre una superficie firme. Para focalizar el área de
aplicación de las compresiones, busque la costilla inferior con los dedos
índice y mayor. Deslice los dedos hacia arriba hasta que el mediano
encuentre el lugar donde la costilla se une al esternón: puede haber un
pequeño hueco allí.

Su dedo índice debe estar apoyado sobre el esternón del enfermo.


Deslice la parte trasera de su otra mano por el esternón hasta que
llegue al punto en el que está apoyado su dedo índice. La parte trasera
de su mano está ahora apoyada en el área exacta donde deben
aplicarse las compresiones.

Aplique las compresiones aquí Presione y suelte sin mover sus manos.
No doble los codos.
Mantenga la parte trasera de su mano (palma) en posición, ubique la
otra arriba y luego entrecruce los dedos. Inclínese sobre la persona
manteniendo los brazos derechos. Presione de manera de hundir el
pecho 5 cm, luego suelte sin mover sus manos. Interrumpa y verifique si
sospecha que el pulso y la respiración volvieron.
PLAN EMERGENCIA

MARIA NAYIVER MEDINA MONTEALEGRE


CURSO 2

DOCENTE CESAR AUGUSTO RODRIGUEZ

UNIVERSIDAD DEL TOLIMA


INSTITUTO DE EDUCACIÓN A DISTANCIA
PROGRAMA SALUD OCUPACIONAL
2010

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