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Comentarios Arch Argent Pediatr 2009;107(6):483-485 / 483

El difícil diagnóstico de la simple neumonía


The difficult diagnosis of a simple pneumonia

Establecer un diagnóstico es una actividad El panorama es aún más complicado en pe-


básica de los médicos, pero con frecuencia pue- diatría dado que la semiología clásica de con-
de plantear dificultades, algunas relacionadas densación es muy poco frecuente en el niño
con la naturaleza de la enfermedad y otras con pequeño. Teniendo en cuenta esto, y ante la po-
la nomenclatura que se utiliza. Es muy frecuen- sibilidad de no contar con diagnóstico por imá-
te que los médicos utilicen diferentes términos genes en escenarios de muy bajos recursos y
para definir la misma entidad nosológica, de la limitado acceso a salud, se han desarrollado de-
misma manera que utilizan el mismo término finiciones muy simples. Tal es el caso de la sus-
para identificar cosas distintas. Este punto es tentada por la Organización Mundial de la Salud
particularmente importante cuando a partir de (OMS), donde la presencia de taquipnea y fiebre
ese término se adopta una conducta terapéuti- bastan para diagnosticar neumonía.2
ca específica, que sólo será adecuada para una Esta definición tiene una elevada sensibilidad
de las dos situaciones identificada por el mismo (alrededor de 80%), pero una limitada especifici-
término. Como dijo Sempere: “El uso apropiado dad (cercana a 40%).3 En otras palabras, la mayo-
y preciso de un vocabulario específico sobre un ría de los niños con neumonía tienen taquipnea y
área de conocimiento es crucial para la comuni- fiebre, sin embargo muchos niños con taquipnea
cación entre los especialistas en ese campo, y la y fiebre no tienen neumonía. Por otra parte, esta
medicina no es una excepción “.1 definición no hace diferencia en cuanto a la etio-
En pocas oportunidades esto es tan cierto co- logía, asumiendo que todas las neumonías son
mo en las infecciones respiratorias agudas del bacterianas, y por lo tanto las guías de práctica
niño. Términos como neumonía, neumonitis, clínica que de ella se desprenden indican antibió-
neumonía atípica, neumopatía, bronquitis, bron- ticos ante esta situación.3 Finalmente, la ecuación
quiolitis e incluso infección respiratoria baja agu- resulta en taquipnea + fiebre= antibióticos.
da (IRAB) son utilizados a diario, y no en pocas Si bien es cierto que el empleo de definicio-
oportunidades se suele confundir el alcance de nes tan amplias ha tenido un impacto satisfacto-
su significado. rio en ciertos escenarios (elevadísimas tasas de
Dentro de lo mencionado, un término que mortalidad infantil, difícil acceso a servicios de
merece especial atención es el de neumonía. Ten- salud, falta de personal capacitado y limitados
gamos en cuenta que si a un médico se le pide recursos diagnósticos), reduciendo hasta en un
una definición de neumonía, es muy posible que 40% la mortalidad específica por neumonía,4 su
inicialmente recurra a aquella aprendida duran- empleo puede llevar a un considerable uso in-
te sus estudios de grado en el libro de anatomía necesario de antibióticos. Hazir y colaboradores
patológica de Robbins: “…solidificación exu- encontraron que el 82% de los pacientes diagnos-
dativa (consolidación) del tejido pulmonar…”. ticados como “neumonía no-grave” de acuerdo
Claro que defender el empleo de esta definición a los criterios de la OMS tenían radiografías de
en la práctica diaria obligaría a efectuar estudio tórax normales.5
anatomopatológico de todos los pacientes en que Para tratar de limitar este inconveniente po-
se estableciera tal diagnóstico. Ante esta insal- demos introducir otros términos en la ecuación
vable dificultad se recurre a definiciones basa- (presencia o no de sibilancias, edad del paciente,
das en la clínica: “…cuadro que comprende una patrón radiológico) con lo que seguramente ga-
constelación de síntomas y signos (fiebre, esca- naremos en especificidad, aunque es posible que
lofríos, tos, dolor pleurítico, producción de espu- ello conspire contra su simplicidad.6
to, matidez a la percusión, respiración bronquial, Independientemente de las modificaciones
egofonía, estertores crepitantes, roce pleural) en que podamos sugerir a la definición de neumo-
combinación con, por lo menos, opacidades en nía, lo importante es ser concientes que no todo
los campos pulmonares en la radiografía de tó- lo que tiene fiebre y taquipnea es neumonía y, lo
rax.” (Harrison. Principios de Medicina Interna). que es mucho más importante, no todas las neu-
Además, es muy posible que el mismo profesio- monías son bacterianas. De hecho, en el lactan-
nal al que entrevistamos aclare que el término te son más frecuentes las neumonías virales que
neumonía, para él, implica etiología bacteriana. las bacterianas.7,8
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Estas consideraciones son contempladas en Dra. Hebe González Pena


la Clasificación Internacional de Enfermedades Servicio de Neumonología
Hospital de Pediatría “Prof. Dr. Juan P. Garrahan”
(CIE-10), al establecer taxativamente códigos
para neumonías bacterianas (J13 a J15), neumo-
nías virales (J12), neumonías por Mycoplasma Dr. Fernando Ferrero
Docencia e Investigación
pneumoniae (J15.7) y clamidias (J16.0). Más aún, Hospital General de Niños “Dr. Pedro de Elizalde
dicha clasificación reserva el nombre de “Neu- ”
monitis” para las enfermedades pulmonares de- Referencias
bidas a sustancias extrañas (J60 a J70), como en 1. Sempere J. Problemas terminológicos en medicina: ¿algu-
el caso de la hipersensibilidad al polvo orgáni- na novedad? Papeles Médicos 2001;10(3):136-143.
2. World Health Organization, Programme for the control of
co (J67), inhalación de gases, humos, vapores y acute respiratory infections. Technical basis for the WHO
sustancias químicas (J68.0) o debida a sólidos y recommendations on the management of pneumonia in
líquidos (J69).9 Por lo contrario, esta clasificación children at first level health facilities. Geneva: WHO; 1991.
no contempla los términos neumonía atípica ni 3. March M de F, Sant’Anna CC. Signs and symptoms indica-
tive of community-acquired pneumonia in infants under
neumopatía. Sería conveniente utilizar más fre- six months. Braz J Infect Dis 2005;9(2):150-5.
cuentemente la nomenclatura mencionada a fin 4. Sazawal S, Black RE. Effect of pneumonia case management
de expresar los diferentes diagnósticos con un on mortality in neonates, infants, and preschool children:
criterio más uniforme. a meta-analysis of community-based trials. Lancet Infect
Dis 2003;3(9):547-56.
Teniendo en cuenta todo lo expresado, se de- 5. Hazir T, Nisar YB, Qazi SA, et al. Chest radiography in chil-
bería emplear el término neumonía para iden- dren aged 2-59 months diagnosed with non-severe pneumo-
tificar toda afección infecciosa respiratoria baja nia as defined by World Health Organization: descriptive
aguda acompañada de infiltrados radiológicos multicentre study in Pakistan. BMJ 2006;333(7569):629.
6. Moreno L, Krishnan JA, Duran P, Ferrero F. Development
compatibles con la presencia de un proceso infla- and validation of a clinical prediction rule to distinguish
matorio a nivel del espacio alveolar, intersticial o bacterial from viral pneumonia in children. Pediatr Pul-
ambos. Posteriormente se deberá considerar si di- monol 2006;41(4):331-7.
cha entidad es “presumiblemente viral” o “presu- 7. Weissenbacher M, Carballal G, Ávila M, et al. Etiologic
and clinical evaluation of acute lower respiratory tract in-
miblemente bacteriana”. A partir de este enfoque fections in young Argentinian children: an overview. Rev
seguramente contribuiremos a un uso más ade- Infect Dis 1990;12 Suppl 8:S889-98.
cuado de antibióticos. 8. Michelow IC, Olsen K, Lozano J, et al. Epidemiology and
Parafraseando a R. Stein, este mensaje no es clinical characteristics of community-acquired pneumonia
in hospitalized children. Pediatrics 2004;113(4):701-7.
sólo para aquellos profesionales que actúan en 9. World Health Organization. International Statistical Clas-
escenarios con limitados recursos, ya que el uso sification of Diseases and Related Health Problems. 10th
innecesario de antibióticos en neumonías virales Revision. Version for 2007. [Acceso: 19/5/2009 19]. Dis-
y el empleo de antibióticos de segunda línea en ponible en: http://apps.who.int/classifications/apps/
icd/icd10online/
neumonías bacterianas no complicadas, es fre- 10. Stein RT, Marostica PJ. Community-acquired pneu-
cuente en todos los niveles de atención.10 n monia: a review and recent advances. Pediatr Pulmonol
2007;42(12):1095-103.

La Clínica de la Palabra
The Clinic of the Word

Cierta vez, en una consulta, una mamá me di- diagnóstico en una “persona”.
jo: “lo que pasa es que Ud. nos trata como perso- Esto marcó el desarrollo de mi profesión. Me
nas”, lo cual me llevó a preguntarme “¿y qué son, llevó a descubrir que tampoco me hacía más mé-
si no?”… ¡Personas! Tomé conciencia entonces dica el dirigirme a los pacientes “en difícil”. Por
de lo que me habían enseñado mis maestros de el contrario, era más difícil ser clara y sencilla... la
la facultad, cuando un examen se terminaba por sencillez de un niño… “Bajar la información”. Ahí
no saber el nombre del paciente. Ser observadora estaba mi “saber”. La sencillez no amenguaba el
de todo, hasta de la vestimenta. Y sobre todo, del grado de importancia. Contrariamente, lograba aún
saludo, la expresión, el habla, la forma de cami- más la adhesión de los padres en el seguimiento y
nar, el aseo personal… todo nos podía indicar un aprendizaje de pautas nuevas. La disponibilidad
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cambiaba. Los miedos de ambos se atenuaban… Sí, Y, si bien en este mundo “moderno” de pre-
el de los padres y también el mío. Nadie me quita- pagas y obras sociales, muchas veces no nos dan
ba los conocimientos ni era menos eficiente por dar tiempo para hacerlo, está en nosotros el ejercer
información sobre los diagnósticos. no sólo la Clínica del diagnóstico y el tratamiento
La tecnología y la ciencia podrán ayudarnos a aprendida en los libros, sino la Clínica de la Pa-
controlar, mantener o mejorar en parte la salud de labra, así, con mayúscula. Es menester volver a
nuestros pacientes, pero hay otra cosa. El “sostén descubrir lo que tanto escuchamos: no sólo hay
personal” es lo que la lleva más allá, lo que nos da enfermedades que estudiamos, sino enfermos que
aquellas “sorpresas” lindas e inexplicables, ines- atendemos… sólo debemos recordarlo…
peradas o poco probables científicamente. Es lo ¿Nos damos cuenta de cuánto le ayuda a una
que hizo ese “imposible” en Alejandro, un prema- madre una simple sonrisa acogedora ante la aflic-
turo, quien abandonado por su mamá al nacer, se ción... o la esperanza de que se pueda empezar de
había autoabandonado él también en la incuba- nuevo o que no buscamos juzgarla sino compren-
dora a “estar” y no a “ser”… Ni siquiera lloraba derla ante los errores y corregirlos con la firmeza
con los procedimientos invasivos. Pero, las manos que se merece, pero con caridad…?
y las voces de las enfermeras y los médicos que a La dignidad de la vida es un don gratuito; por
diario lo tocaban y le hablaban, le comunicaron lo tanto, un derecho que debemos siempre defen-
más importante: que existía… entonces, abrió sus der. Corresponde volver a nuestros comienzos,
ojitos y nos miró. a nuestros orígenes, donde a pesar de cualquier
Hemos perdido la empatía, es verdad, aunque experiencia negativa pasada, su base se funda en
me niego a darme por vencida. Quizás, debamos lo más bello que tenemos y que es el principio de
sentarnos un momento cuando vemos que algo no la Vida misma.
va bien, recapacitar y volver a tomar conciencia La Clínica de la Palabra…
de que estamos atendiendo a personas. Y que el Ser médicos…
hacerlo también nos forma a nosotros como tales. Ser humanos…
Tal cual se define, la Medicina es ciencia y es Ser personas…
arte. Ambos componentes no van separados, pe- Ser humanidad…
ro cuando no funcionan juntos pueden hacer la Construir y ayudar a construir así nuestro pro-
gran diferencia entre asistencia y asistencialismo. pio mundo en el que vivimos, desde el momento
Todos estudiamos la ciencia, pero no todos tene- más básico, que es el nacimiento. Dignificar la vi-
mos el arte. Todos nos recibimos de médicos, pe- da desde nuestro trabajo diario.
ro no todos lo somos… Somos humanos, tratemos Como decía la Beata Madre Teresa de Calcu-
de ser médicos. ta, premio Nobel de la Paz en 1979, “la vida es la
Ciertamente, debemos hacerlo con la pruden- Vida… ¡defiéndela!” No vamos a poder cambiar
cia necesaria, sin transformarnos en padres de los la realidad así nomás, pero sí la forma de vivirla,
padres ni de sus hijos. Pero sí debemos considerar recuperando nuestros propios valores.
a los pacientes nuestra responsabilidad, porque La Vida…
la ciencia que ellos buscan y necesitan, que su- Es cuestión de encontrarla, comenzando por
puestamente nosotros poseemos, no les sirve de la nuestra.
nada si no encuentran a alguien con el “arte” pa- El querer hacerlo, ya es el comienzo. Los pa-
ra implementarla. Como médicos, nos competen dres, ciertamente, lo agradecerán. n
sus vidas por completo, queramos o no. Cuando
un niño se enferma, se transforma en una familia Dra. Flor Tobar
enferma, porque los padres no van a trabajar, los Hospital Ana Goitía, Avellaneda,
Provincia de Buenos Aires.
hermanos se desarticulan de los padres, la eco- Consultorio de Niño Sano y Programa de Seguimiento
nomía familiar sufre, comienzan o se agravan las del Neurodesarrollo
culpas y las heridas conyugales… flortobar@intramed.net

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