Está en la página 1de 48

APUNTES DE CLASES

HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

HECHOS JURÍDICOS

No todos los acontecimientos tienen relevancia para el Derecho (trascendencia jurídica).


Es decir, no todos los hechos producen efectos o consecuencias jurídicas.

De la misma manera, como se explicará a continuación, no todos los hechos que


producen consecuencia jurídicas constituyen actos jurídicos.

En efecto, observemos las diferencias y semejanzas entre los siguientes hechos:

(i) Una hoja de árbol cae al suelo;


(ii) Una ventana se cierra;
(iii) Pedro Pérez nace;
(iv) Pedro Pérez cumple la mayoría de edad;
(v) Pedro Pérez compra una casa;
(vi) La hipoteca constituida por Pedro Pérez se alza;
(vii) Pedro Pérez reconoce un hijo;
(viii) Pedro Pérez hace un testamento;
(ix) Ocurre un fuerte sismo;
(x) Pedro Pérez fallece.

De los ejemplos mencionados, algunos no producen efectos jurídicos. Se entiende por


efectos jurídicos, la creación, modificación o extinción de derechos y obligaciones. Estos
hechos que no producen efectos jurídicos se denominan “hechos materiales”.

Así, constituyen hechos materiales los acontecimientos indicados en los números (i) y (ii)
precedentes. Con todo, no es posible calificar un hecho como material en términos
absolutos. Por ejemplo, puede ocurrir que al cerrar una ventana descuidadamente ésta se
quiebre y dañe a una persona, generándose la obligación de indemnizar los daños y
perjuicios causados (responsabilidad extracontractual, artículos 2.314 y siguientes del
Código Civil, en adelante C.c.).

Los hechos que producen efectos jurídicos se denominan “hechos jurídicos”1. De los
ejemplos mencionados constituyen hechos jurídicos los acontecimientos señalados en los
números (iii) a (x).
A su vez, los hechos jurídicos pueden corresponde a hechos de la naturaleza o a hechos
humanos. Es decir, no sólo los hechos voluntarios (humanos) producen efectos jurídicos.

Son hechos jurídicos de la naturaleza, por ejemplo, el nacimiento y la muerte de una


persona o un fuerte sismo que produce consecuencias jurídicas. El nacimiento da origen
al inicio de la existencia legal, la muerte, a la apertura de la sucesión2.
1
Los hechos jurídicos, por tanto, pueden definirse como aquellos hechos que producen
efectos o consecuencias jurídicas; o, desde un punto de vista positivista, como aquellos
hechos a los cuales la ley o el ordenamiento jurídico le atribuye efectos jurídicos.
2
..La muerte y el nacimiento de una persona constituyen hechos jurídicos de la naturaleza (y
no voluntarios), aún cuando se produzcan por la intervención de una persona, porque los

1
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Son hechos jurídicos humanos los indicados en los números (v), (vi), (vii) y (viii).

Los hechos jurídicos pueden clasificarse también como hechos jurídicos “simples” y
“complejos”. Son hechos jurídicos simples aquellos que para producir efectos jurídicos
requieren de un solo acontecimiento (el nacimiento, por ejemplo). Complejos, si para que
se produzcan los efectos jurídicos se requiere más de un acontecimiento (el matrimonio,
por ejemplo, que requiere consentimiento y declaración del funcionario del Registro Civil;
un contrato sujeto a condición suspensiva).

No obstante lo anterior, puede ocurrir que aún cuando no se hayan verificado todos los
acontecimientos necesarios se produzcan alguno efectos denominados “efectos
prodrómicos” (véase inciso final del artículo 1492 del C.c.).

De la misma manera, la regla general es que los efectos jurídicos se produzcan sólo una
vez que se produzcan los acontecimientos que comprende el hecho jurídico y sólo para el
futuro. Sin embargo, por excepción, un hecho jurídico (simple o complejo) produce efectos
retroactivos (véase artículo 1818 del C.c.).

Finalmente, los hechos humanos pueden ejecutarse con la intención de producir efectos
jurídicos o realizarse sin la intención de producir efectos jurídicos.

Los hechos voluntarios ejecutados sin la intención de producir efectos jurídicos pueden
ser lícitos o ilícitos, dependiendo de si se conforman con o contravienen el ordenamiento
jurídico.
Dentro de esa clasificación son ilícitos los delitos (dolo) y cuasidelitos (cuasidelitos) civiles
(véanse artículos 1.437, 2.314 y siguientes y 2.284 del C.c.). Son lícitos los cuasicontratos
(artículo 2.285 del C.c.).

Los hechos jurídicos voluntarios ejecutados con la intención de producir efectos jurídicos
se denominan actos jurídicos3.

HECHOS JURÍDICOS

efectos jurídicos de estos acontecimientos se producen con independencia de si participa o


no la voluntad humana. De la misma manera, si esos hechos voluntarios producen efectos
jurídicos determinados, ello no cambia la naturaleza jurídica de la muerte o del nacimiento.
Constituirán dos supuestos distintos necesarios para que se produzcan los efectos
jurídicos (recuérdense los ejemplos mencionados en clases).
3
Desde otro punto de vista, puede afirmarse que las personas, al celebrar actos
jurídicos, persiguen en realidad fines económicos prácticos.

2
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Materiales: Jurídicos:
Todos aquellos que no Creación, modificación y
producen efectos jurídicos extinción de d° y obligaciones

De la naturaleza Humanos
No dependen de la voluntad,
Son hechos como nacer o morir

Simples - Complejos

Requieren de un Se requiere más de un


solo acontecimiento acontecimiento

Efecto retroactivo
Efecto prodrómico
Produce efectos aún cuando no se
hayan verificado todos los acontecimientos

Con la intención de producir efectos


Unilaterales:
Expr. de la voluntad
de una sola parte Se les denomina: ACTOS JURIDICOS

Sin la intención de producir efectos


Bilaterales:
Son aquellas de
acuerdo de voluntades
de dos o más partes Lícitos: Ej: cuasicontratos Ilícitos: Ej: Dolo

Dependen de si forman o contravienen


normas del ordenamiento jurídico
Convenciones Contratos
Crea, modifica Sólo crea
o extingue

ACTO JURÍDICO

I. CONCEPTO.

3
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Una vez determinadas las características de los hechos materiales y jurídicos, y de los
hechos jurídicos naturales y voluntarios, puede comprenderse el concepto de acto
jurídico.

A continuación, se proporcionan dos definiciones clásicas o tradicionales del acto jurídico:

(i) “Manifestación de voluntad hecha con el propósito de crear, modificar o extinguir


derechos, y que produce los efectos queridos por su autor o por las partes, porque
el derecho sanciona dicha manifestación de voluntad”4.

(ii) “Manifestación unilateral o bilateral de voluntad ejecutada con arreglo a la ley y


destinada a producir un efecto jurídico que puede consistir en la creación, conservación,
modificación, transmisión, transferencia o extinción de un derecho”5.

Los elementos comunes a ambas definiciones, y que constituyen los aspectos


fundamentales del acto jurídico son: (i) la producción de efectos jurídicos; (ii) la voluntad
humana; y, (iii) la intención de producir esos efectos jurídicos (fines prácticos de orden
económico).

Numerosos actos de las más diversas clases, pueden calificarse como actos jurídicos. Así
por ejemplo, el contrato, la ratificación, el reconocimiento de un hijo, el testamento, el
pago, la tradición, la revocación del mandato, la ocupación, etc. La “Teoría del Acto
Jurídico”, precisamente, estudia los elementos comunes a todos esos actos.

II. ACTO JURÍDICO Y AUTONOMÍA DE LA VOLUNTAD. Recapitulación.

El principio de la autonomía de la voluntad, del cual el acto jurídico es su principal


manifestación, puede ser entendido como la facultad que se le otorga a la persona para
crear relaciones jurídicas, el poder para decidir si se obliga o no, determinar el contenido
de los actos que celebra, modificarlos y extinguirlos. Se expresa en el adagio “para el
Derecho está permitido todo lo que no está prohibido”.
Como consecuencia de este principio, la mayoría de las normas del Derecho Civil son
dispositivas, es decir, se aplican en silencio de la voluntad de las partes.

III. CLASIFICACIÓN DE LOS ACTOS JURÍDICOS.

Los actos jurídicos admiten numerosas clasificaciones. En esta oportunidad se analizarán


las clasificaciones más importantes.

A. ACTOS JURÍDICOS UNILATERALES Y BILATERALES

4
VIAL DEL RÍO, VÍCTOR. “Teoría General del Acto Jurídico”. Ediciones Universidad
Católica de Chile. 1998. P. 31.
5
ALESSANDRI RODRÍGUEZ, ARTURO. “De los Contratos”. Editorial Jurídica de
Chile. P. 1.

4
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Atendiendo al número de partes cuya voluntad es necesaria para que se forme el acto
jurídico, éste se clasifica en unilateral y bilateral.

Los actos jurídicos unilaterales son aquellos que para nacer a la vida jurídica requieren la
manifestación de voluntad de una sola parte (por ejemplo, el testamento, el
reconocimiento de un hijo, la revocación de un poder, etc.). Una parte pueden ser una o
muchas personas (ver artículo 1438 del Código Civil).

Desde este punto de vista, los actos jurídicos unilaterales pueden ser “simples” o
“complejos”. El acto jurídico “simple” emana de la voluntad de una sola persona (por
ejemplo, el testamento). Es decir, la parte está constituida por una sola persona. El acto
jurídico complejo emana de varias personas que manifiestan una voluntad común (por
ejemplo, la oferta de una comunidad para vender un objeto común). Una parte está
constituida por dos o más personas.

Los actos jurídicos bilaterales son aquellos que para nacer a la vida jurídica requieren de
la manifestación de voluntad de dos partes (por ejemplo el contrato, la tradición, el pago).
El acto jurídico bilateral se denomina “convención”.

La convención es, por tanto, el acuerdo de voluntades de dos partes que crea, modifica o
extingue derechos y obligaciones.

Paralelo entre contrato y convención. El contrato y la convención no deben confundirse.


Todo contrato es una convención (ya que el contrato crea derechos), pero no toda
convención es un contrato (el pago, por ejemplo, es una convención que extingue
derechos, pero no es un contrato). La relación entre ambos es de género a especie. Sin
embargo, el Código Civil confunde ambos términos (véanse artículos 1437 y 1438 del
Código Civil).

Algunos autores admiten una tercera clase de actos atendiendo al criterio de partes
necesarias para formar un acto jurídico, los actos jurídicos plurilaterales, entendidos éstos
como aquellos que para nacer requieren de la manifestación de voluntad de tres o más
partes (por ejemplo, la constitución de una sociedad).

Finalmente, existe también otra modalidad de actos jurídicos denominados “actos jurídicos
recepticios”. Se consideran actos jurídicos recepticios aquellos que para producir efectos
requieren de la manifestación de voluntad de una parte distinta del autor del acto (por
ejemplo, la oferta para celebrar un contrato que requiere la aceptación del destinatario de
la oferta, la fundación, que requiere la aprobación del Presidente de la República6).

B. ACTOS JURÍDICOS ENTRE VIVOS Y ACTOS JURÍDICOS POR CAUSA DE


MUERTE.

6
Véase artículo 546 del C.c. y Reglamento sobre Concesión de Personalidad
Jurídica a Corporaciones y Fundaciones.

5
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Actos jurídicos por causa de muerte son aquellos que para producir efectos requieren de
la muerte del autor o de las partes (por ejemplo, el testamento o el mandato otorgado para
ejecutarse después de la muerte7).

Actos jurídicos entre vivos son aquellos que para producir efectos no requieren la muerte
del autor o de las partes (por ejemplo, el contrato de compraventa, el contrato de
arrendamiento).

C. ACTOS JURÍDICOS A TÍTULO GRATUITO Y ACTOS JURÍDICOS A TÍTULO


ONEROSO.

Actos jurídicos a título gratuito son aquellos que se celebran en beneficio de una sola
parte (por ejemplo, el contrato de donación, el comodato por regla general).

Actos jurídicos a título oneroso son aquellos que producen la utilidad o beneficio de
ambas partes (por ejemplo, el contrato de arrendamiento, el contrato de compraventa).

D. ACTOS JURÍDICOS PUROS Y SIMPLES Y ACTOS JURÍDICOS SUJETOS A


MODALIDADES.

Actos jurídicos puros y simples son aquellos que producen sus efectos de inmediato y sin
limitaciones.

Actos jurídicos sujetos a modalidades son aquellos cuyos efectos están sujetos a una
modalidad. Son modalidades de los actos jurídicos, por ejemplo, la condición, el plazo y el
modo.

IV. REGLAMENTACIÓN.

El acto jurídico no se encuentra regulado expresamente en el Código Civil. Con todo, el


Libro IV de ese cuerpo legal (“De las obligaciones en general y de los contratos”),
específicamente su Título II (“De los actos y declaraciones de voluntad”) contiene muchas
normas que se aplican no sólo a los contratos, sino que a los actos jurídicos en general.

Las normas del Código Civil en general emplean los términos “acto” y “contrato”. El
primero para referirse a los actos jurídicos unilaterales. El segundo para aludir a los actos
jurídicos bilaterales (véanse artículos 1701 y 1453 del C.c.) 8.

V. ELEMENTOS DEL ACTO JURÍDICO.

7
Véase artículo 2.169 del C.c.
8
Los términos empleados por el legislador han generado discusiones doctrinarias en
aquellos casos en que la ley sólo alude a los actos y no a los contratos ¿Deben
comprenderse los actos jurídicos bilaterales o sólo los unilaterales? (véase artículo 1470
del C.c.).

6
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

De acuerdo a lo dispuesto por el artículo 1.444 del C.c. en todo acto jurídico se distinguen
los elementos de la esencia, de la naturaleza y accidentales. En realidad, puede afirmarse
que sólo los elementos de la esencia constituyen propiamente elementos. Los de la
naturaleza y accidentales son efectos del acto jurídico.

- Elementos esenciales.

Se distinguen dos tipos de elementos esenciales:

(i) Comunes o generales: Son aquellos sin los cuales el acto no produce efecto
alguno. Por ejemplo, son elementos esenciales del contrato de compraventa la
cosa y el precio. Los elementos esenciales son, conforme al artículo 1.445 del C.c.
el objeto, la causa y la voluntad.

(ii) Especiales o particulares: Son aquellos sin los cuales el acto degenera en otro
diferente. Así por ejemplo, constituye un elemento esencial particular del contrato
de compraventa el hecho que el precio consista en dinero. Si la cosa se paga con
otra cosa estamos frente a una permuta, con independencia de la designación que
las partes le otorguen al acto. Si en el arrendamiento no se pacta una renta,
estaremos frente a un comodato u otro acto jurídico.

- Elementos de la naturaleza.

Son aquellos que sin ser esencial al acto jurídico se entienden pertenecer a éste sin
necesidad de una cláusula especial.

Por ejemplo, la obligación de saneamiento de la evicción y de los vicios redhibitorios en la


compraventa. Si las partes nada dicen se comprende esta obligación del vendedor. Pero
las partes pueden también excluirla.

- Elementos accidentales.

Son aquellos que sólo pueden tener lugar si se incluyen por medio de cláusulas
especiales (condición, modo, plazo, solidaridad, etc.).

De esta manera, desde el punto de vista de la autonomía de la voluntad, ésta sólo puede
actuar tratándose de los elementos de la naturaleza y accidentales.

VI. REQUISITOS DEL ACTO JURÍDICO.

A. REQUISITOS DE EXISTENCIA.

Los requisitos de existencia son aquellos necesarios para que el acto jurídico nazca a la
vida del Derecho, es decir, para que adquiera existencia jurídica.

Son los siguientes (artículo 1.445 del C.c.):

7
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

(i) La voluntad;
(ii) El objeto;
(iii) La causa; y,
(iv) Las solemnidades que según algunos quedan incluidas en el requisito de voluntad.

B. REQUISITOS DE VALIDEZ.

Los requisitos de validez son aquellos necesarios para que el acto jurídico produzca
efectos en forma estable.

Son los siguientes (artículo 1.445 del C.c.):

(i) La voluntad exenta de vicios;


(ii) El objeto lícito;
(iii) La causa lícita; y,
(iv) La capacidad.

INEFICACIA DE LOS ACTOS JURÍDICOS

Un acto es ineficaz si se ha omitido un requisito de existencia o de validez en su


celebración. Es decir, la ineficacia se verifica cuando el acto jurídico o no produce efectos
o éstos son declarados inválidos.

Existen también sanciones de ineficacia que permiten dejar sin efecto un acto al cual no le
falta ningún requisito de existencia o de validez.

De esta manera, la ineficacia se produce en los siguientes casos:

(i) Si se omite un requisito de existencia de los actos jurídicos: En este evento, la


sanción de ineficacia es la “inexistencia jurídica”. Sin embargo, como veremos, en
nuestro derecho se plantea el problema de determinar si esta sanción está
contemplada en el Código Civil o, por el contrario, no es aceptada por ese cuerpo
legal, siendo aplicable en su lugar la nulidad absoluta.

(ii) Si se omite un requisito de validez de los actos jurídicos: Para este caso, la
sanción de ineficacia es la nulidad absoluta o relativa del acto.

(iii) Si se producen circunstancias posteriores a la celebración de un acto válido que


autorizan a dejarlo sin efecto. Por ejemplo, el incumplimiento de una obligación
contractual puede generar la resolución del contrato, la condición suspensiva
fallida, el cumplimiento de la condición resolutoria, la inoponibilidad por omisión de
medidas de publicidad, etc.

8
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

INEXISTENCIA DE LOS ACTOS JURÍDICOS

A. ANTECEDENTES.

Un acto es inexistente si se ha omitido el consentimiento, el objeto, la causa o las


solemnidades.

La teoría de la inexistencia jurídica como sanción tiene su origen en la institución del


matrimonio. Lo anterior, ya que se sostiene que este contrato contempla causales de
nulidad taxativas, dentro de las cuales no se recoge, por ejemplo, el matrimonio celebrado
entre dos personas del mismo sexo. En consecuencia, ese matrimonio no podría ser nulo,
menos aún válido. Es, por el contrario, inexistente.

Paralelo entre la inexistencia jurídica y la nulidad.

INEXISTENCIA NULIDAD
1. No requiere ser declarada por el tribunal Requiere de declaración judicial
2. El acto inexistente no produce efectos El acto nulo produce sus efectos hasta que
no se declare la nulidad por el tribunal.
3. El acto inexistente no puede sanearse El acto nulo puede sanearse
4. Sólo puede alegarse como excepción Puede alegarse como acción y como
excepción
5. Titulares no restringidos Titulares restringidos
6. Aprovecha a todos los interesados La nulidad declarada sólo aprovecha a
aquellos en cuyo favor se declaró (artículo
1.690 del C.c).
7. No puede convertirse Puede convertirse (ejemplo, artículo 1.701
del C.c.).

B. PROCEDENCIA DE LA DISTINCIÓN EN EL CÓDIGO CIVIL CHILENO.

1. DOCTRINA QUE NIEGA LA INEXISTENCIA JURÍDICA COMO SANCIÓN9.

Esta doctrina sostiene que la inexistencia jurídica no fue contemplada como sanción. La
omisión de los requisitos de existencia se sanciona con la nulidad absoluta.

Argumentos.

9
Don Arturo Alessandri.

9
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

a. El artículo 1.682 del C.c. referente a las causales de nulidad absoluta comprende
tanto a los requisitos de existencia como a los de validez.

b. La inexistencia no fue reglamentada por el C.c. Por el contrario, la nulidad fue


reglamentada en el Título XX del Libro IV.

c. Los actos de los incapaces absolutos son inexistentes atendido a que en esos
actos falta el consentimiento. Sin embargo, la ley los sanciona expresamente con la
nulidad absoluta (artículo 1.682 del C.c.).

2. DOCTRINA QUE ACEPTA LA INEXISTENCIA JURÍDICA COMO SANCIÓN10.

Argumentos.

a. La procedencia de la inexistencia jurídica como sanción se desprende de los


artículos 1.444 (“o no produce efecto alguno”), 1.681 (que no contempla la inexistencia
como causal de nulidad), 1.701 (“se mirarán como no ejecutados o celebrados”), 1.801
(“no se reputan perfectas”), 2.055 (“no hay sociedad”), entre otras normas.

b. Si el C.c. reglamentó únicamente la nulidad y no la inexistencia fue porque lo hizo


con ocasión de los modos de extinguir las obligaciones. La inexistencia no es un modo de
extinguir obligaciones porque un acto inexistente, precisamente no genera obligaciones.

c. El C.c. sanciona con la nulidad absoluta los actos celebrados por los incapaces
absolutos, porque si bien aquí falta el consentimiento, se trata de personas que
aparentemente pueden consentir.

NULIDAD DE LOS ACTOS JURÍDICOS

1. Definición. Sanción establecida para la omisión de los requisitos y formalidades


que se prescriben para el valor de un acto según su especie y la calidad o estado
de las partes (artículo 1.681 del C.c.).

2. Clases. Nulidad absoluta y relativa (artículo 1.681 del C.c.).

Nulidad absoluta es la sanción establecida para la omisión de los requisitos y


formalidades que se prescriben para el valor de un acto según su especie.

Nulidad relativa o rescisión es la sanción establecida para la omisión de los requisitos y


formalidades que se prescriben para el valor de un acto según la calidad o estado de las
partes.

3. Reglas comunes:

10
Don Luis Claro Solar.

10
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

a. La nulidad no puede renunciarse. Artículo 1.469 del C.c.


b. Las normas sobre nulidad son de orden público.
c. La nulidad es una sanción de derecho estricto. No puede aplicarse por analogía.
d. Si dos o más personas han contratado con un tercero, la nulidad declarada a favor
de una de ellas, no aprovecha a la otra (artículo 1.690 del C.c. en relación con el artículo
3º del C.c.).
e. La nulidad debe ser declarada por el tribunal.

NULIDAD ABSOLUTA

1. Causales. a) Objeto ilícito; b) causa ilícita; c) falta de solemnidades; d) actos de los


incapaces absolutos; e) falta de causa; f) falta de consentimiento; g) falta de objeto; y, h)
algunos agregan el error esencial (artículo 1.682 del C.c.).

2. Características. Se trata de una sanción establecida en interés de la moral y de la


ley. Es decir, protege los intereses generales de la sociedad.

3. Titulares. (Artículo 1.683 del C.c.)

La nulidad absoluta puede y debe ser declarada de oficio por el juez cuando aparece de
manifiesto en el acto o contrato, es decir, cuando de la sola lectura del instrumento se
desprende la existencia del vicio de nulidad. No puede recurrirse a otro antecedente.

Sin embargo el juez no es titular de la acción de nulidad.

Los titulares son:

a. Toda persona que tenga interés en ello. Se refiere a un interés pecuniario que
debe existir al momento de solicitarse la declaración de nulidad.

Sin embargo, no puede alegar la nulidad el que ejecutó el acto o celebró el contrato
sabiendo o debiendo saber el vicio que lo invalidaba. En relación con esta excepción,
“sabiendo” significa un conocimiento personal, real y efectivo del vicio de nulidad absoluta,
“debiendo saber” se refiere al conocimiento que el autor o la parte debería tener, atendido
que las circunstancias no permiten considerar como lógica su ignorancia. Es decir, no
basta el conocimiento presunto de la ley. El mismo concepto debe aplicarse al interpretar
el artículo 1.468 del C.c.

¿Pueden alegar la nulidad absoluta los herederos, si el causante contrató sabiendo o


debiendo saber el vicio que invalidaba el contrato?.

Se considera que ello no es posible, ya que si el causante no tenía derecho a solicitar la


nulidad no pudo transmitir ese derecho a los herederos (nadie puede transmitir lo que no
tiene). La ley lo prohíbe expresamente tratándose del acto de un incapaz que ha actuado
con dolo (artículo 1.685 del C.c.). Por tanto, con mayor razón debe entenderse que está
prohibido tratándose de una persona capaz.

11
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

b. Ministerio Público en el interés de la moral o la ley.

4. Saneamiento de la nulidad absoluta. La nulidad absoluta no puede sanearse por la


ratificación de las partes. Sólo puede sanearse por el lapso de tiempo: 10 años.

NULIDAD RELATIVA.

1. Causales. a) Actos ejecutados o celebrados por incapaces relativos; b) error; c)


fuerza, d) dolo determinante; y e) omisión de formalidades habilitantes, por regla general.

2. Características. Se trata de una sanción que protege el interés particular de las


personas en cuyo favor se ha establecido.

3. Titulares. (Artículo 1.684 del C.c.)

La nulidad relativa, sólo puede alegarse por aquellos en cuyo beneficio la han establecido
las leyes o por sus herederos o cesionarios.

Ello significa que sólo puede alegar la nulidad relativa el incapaz relativo (con las
precisiones del caso) o quien padeció el error, la fuerza y el dolo.

4. Saneamiento.

La nulidad relativa se sanea por el lapso de tiempo o por la ratificación.

Lapso de tiempo:

La nulidad relativa se sanea por el transcurso de 4 años (artículos 1.684 y 1.691 del C.c.).

En caso de violencia e incapacidad el plazo se cuenta desde el día en que ésta hubiere
cesado. En caso de error o dolo, el plazo de 4 años se cuenta desde el día de la
celebración del acto o contrato.

Ratificación: Artículo 1.684 del C.C. y artículos 1.693 y siguientes del C.c.

La ratificación es un acto jurídico unilateral por el cual se confirma el acto nulo. Constituye,
a su vez, una renuncia al derecho de alegar la nulidad (artículo 12 del C.c.).

Reglas:

- Artículo 1.693 del C.c.: La ratificación puede ser expresa o tácita. La


ratificación tácita es la ejecución voluntaria de la obligación contratada (artículo
1.695 del C.c.).
Por ejecución voluntaria se entiende aquella que se realiza con conocimiento del vicio.

12
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Respecto a la posibilidad de que existan otros casos de ratificación tácita la doctrina


mayoritaria es partidaria de la respuesta negativa. Cualquier otro caso podría implicar una
renuncia tácita a demandar la nulidad relativa.
- Debe emanar de la parte que tiene derecho a alegar la nulidad (artículo 1.696
del C.c.).
- La ratificación es irrenunciable y opera con efecto retroactivo.
- La parte que ratifica debe ser capaz de contratar (artículo 1.697 del C.c.).
- La ratificación debe hacerse con las solemnidades a que está sujeto el acto
que se ratifica (artículo 1.694 del C.c.).
- Debe efectuarse antes de la declaración de nulidad.

5. Nulidad de los actos celebrados por un incapaz: Véase artículo 1.685 del C.c.

Si de parte del incapaz ha habido dolo para inducir al acto o contrato ni él ni sus
herederos o cesionarios podrán alegar la nulidad (nadie puede aprovecharse del propio
dolo). Sin embargo, la aserción de mayor edad, o de no existir la interdicción u otra causa
de incapacidad, no inhabilitará al incapaz para obtener el pronunciamiento de nulidad.

Paralelo entre nulidad absoluta y relativa.

NULIDAD ABSOLUTA NULIDAD RELATIVA


Declaración de oficio por el Tribunal No procede
Titulares distintos
Sólo se sanea por el lapso de tiempo Se sanea por el lapso de tiempo y por la
ratificación

EFECTOS DE LA NULIDAD.

Como se señaló la nulidad debe ser declarada por el tribunal. Con todo, una vez
declarada, tanto la nulidad relativa como la absoluta producen los mismos efectos

Para analizar los efectos de la nulidad deben distinguirse los efectos de la nulidad entre
las partes y respecto de terceros.

A. EFECTOS DE LA NULIDAD RESPECTO A LAS PARTES.

Para analizar los efectos de la nulidad, debe distinguirse:

(i) Si el contrato no ha sido cumplido, la nulidad opera como un modo de extinguir las
obligaciones (artículo 1.567 Nº8 del C.c.). Excepción, contratos reales en que debe operar
el efecto retroactivo.
(ii) Si el contrato se cumplió por alguna de las partes o por ambas, opera el artículo
1.687 del C.c. Las partes deben ser restituidas al mismo estado en que se hallarían si no

13
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

hubiera existido el acto nulo, sin perjuicio de lo prevenido sobre el objeto o causa ilícita.
Es decir deberá procederse a las restituciones mutuas.

En ambos casos, puede limitarse a un solo efecto: la retroactividad.

Excepciones al efecto retroactivo:

- Poseedor de buena fe no está obligado a restituir los frutos percibidos mientras estuvo
de buena fe.
- Artículo 1.468 del C.c.
- Artículo 1.688 del C.c. Contrato celebrado con un incapaz. Para que se produzcan los
efectos contemplados en esa norma el acto debió anularse por incapacidad, no por
otra causal.

B. EFECTOS DE LA NULIDAD RESPECTO DE TERCEROS.

La nulidad declarada da acción reivindicatoria contra terceros poseedores de buena o


mala fe (artículo 1.689 del C.c.).

Excepciones:

- Lesión enorme. Artículo 1.895 del C.c. Las hipotecas y gravámenes no caducan. Por
otra parte, si se ha enajenado la cosa, no podrá anularse el contrato por lesión enorme
(artículo 1.893 del C.c.).
- Prescripción adquisitiva (el tercero adquirió el dominio de la cosa por prescripción,
artículo 2.517 del C.c.).
- Artículo 974.

Al respecto véanse artículos 898 y 900 del C.c.

Lo conveniente es interponer conjuntamente la acción personal de nulidad y la acción real


reivindicatoria, para no perder los plazos de prescripción.

PRESCRIPCIÓN DE LAS ACCIONES DE NULIDAD.

Como se señaló,

La acción de nulidad absoluta prescribe en 10 años.


La acción de nulidad relativa prescribe en 4 años.

- Suspensión de la prescripción (artículo 1.692 del C.c.).

La acción de nulidad relativa es de corto tiempo. La regla general es que estas acciones
no se suspendan (artículo 2.524 del C.c.). Sin embargo, la acción de nulidad relativa sí se
suspende en el caso de los titulares que son herederos menores de edad.

14
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

En efecto,

- Si el titular de la acción de nulidad relativa fallece antes de que el plazo de


prescripción hubiere empezado a correr o durante el transcurso de la prescripción, y
los herederos son mayores de edad, la prescripción no se suspende. Los herederos
gozarán del cuadrienio completo o del residuo, respectivamente.

- Si el titular de la acción de nulidad relativa fallece y los herederos son menores de


edad, la prescripción se suspende (únicamente si son incapaces en virtud de la
minoría de edad). El cuadrienio o el residuo empieza a correr desde que cumplen la
mayoría de edad.

Sin embargo, no puede pedirse la nulidad después de transcurridos 10 años desde la


celebración del acto o contrato (artículos 1.692 y 2.520 del C.c.). Al respecto, por la
ubicación de esta disposición, se discute si se aplica únicamente para el caso de los
herederos menores de edad o a cualquier heredero sea menor o mayor de edad11.

NULIDAD TOTAL Y NULIDAD PARCIAL

Si el vicio sólo afecta a una o a algunas cláusulas del acto jurídico o a parte de una
cláusula, la declaración de nulidad ¿afecta a todo el acto o sólo a la parte que adolece del
vicio?

En general, se le da plena aplicación a la nulidad parcial. Es decir, sólo se anula la


cláusula inválida o la parte de la cláusula que es inválida (reducción de la cláusula). Sin
embargo, si la parte inválida tiene carácter esencial, es decir, si de no haber existido no se
hubiere celebrado el contrato, o bien, es de tal importancia que todas las demás cláusulas
del contrato dependen de esa parte, deberá declararse la nulidad absoluta.

Casos expresos en que se admite expresamente la nulidad parcial: artículos 966, 1.058 y
2.344 del Código Civil, entre otros.

OBJETO

I. CONCEPTO.

Existen dos conceptos de objeto:


11
Sobre este tema, revísese bibliografía.

15
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

1. Derechos y obligaciones que el acto jurídico crea, modifica o extingue (efectos),


esto es, objeto del contrato.
2. Prestación: cosa que debe darse o entregarse o el hecho que debe ejecutarse o no
ejecutarse, esto es, objeto de la obligación.

Concepto que acoge el C.c. chileno: Objeto de la obligación (artículo 1.460 del C.c.).

II. REQUISITOS DEL OBJETO: Artículo 1.461 del C.c.

1. Si el objeto consiste en una cosa que debe darse o entregarse.

a. Debe ser real.

“No sólo las cosas que existen pueden ser objeto de una declaración de voluntad, sino las
que se espera que existan”

Es decir, el objeto puede ser una cosa presente o futura (salvo en los contratos reales). El
artículo 1.813 del C.c. sobre la compraventa se refiere a las cosas futuras. La venta de
cosas que no existen, pero se espera que existan, se entenderá hecha bajo la condición
(suspensiva) de existir (por ejemplo, “te compro 20 sacos de trigo de la futura cosecha o el
pez que pesques”), salvo que se exprese lo contrario o que por la naturaleza del contrato
aparezca que se compró la suerte (“te compro en $100 lo que pesques”). Es decir, este
contrato puede ser conmutativo condicional o aleatorio

En cambio, si el objeto se supone existente y no existe no hay obligación. Véase artículo


1.814 del C.c.

b. Debe ser comerciable.

Una cosa es incomerciable cuando no puede ser objeto de dominio o posesión privada.

Las cosas pueden ser incomerciables por: a) su naturaleza (por ejemplo, las cosas
comunes a todos los hombres); o, b) su destinación (por ejemplo, bienes nacionales de
uso público).

c. Debe ser determinado.

El objeto debe ser determinado al menos en cuanto al género. Pero el género debe ser
determinado (por ejemplo, especificar que se trata de un caballo, pero no referirse a un
animal) y limitado (la cantidad puede ser incierta con tal que el acto o contrato fije reglas o
contenga datos que sirvan para determinarla. Se ha entendido que los datos deben
constar en el contrato y no en otros antecedentes ajenos).

Véase artículo 1.809 del C.c.

16
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

2. Si el objeto consiste en un hecho que debe ejecutarse o no ejecutarse.

a. Determinado.
b. Físicamente posible. Es físicamente imposible el objeto que es contrario a la
naturaleza (me obligo a vaciar el mar). Debe tratarse de una imposibilidad objetiva
(para todos) y no subjetiva (sólo para algunos).
c. Moralmente posible. Es moralmente imposible, el objeto prohibido por las leyes, o
contrario a las buenas costumbres o al orden público (acá se plantean dudas sobre
si el hecho moralmente imposible da origen a la falta de objeto o al objeto ilícito).

III. OBJETO ILÍCITO.

De los artículos 1.462 y siguientes del C.c. se desprende un concepto de objeto ilícito.
Objeto ilícito es todo acto prohibido por la ley o contrario al orden público o a las buenas
costumbres.

Sin embargo, la ley no define al objeto ilícito. Señala únicamente los casos de objeto
ilícito.

IV. CASOS DE OBJETO ILÍCITO.

A. ARTÍCULO 1.462 DEL C.C.

El artículo 1.462 del C.c. señala que hay objeto ilícito en los actos que contravienen el
derecho público chileno. De esta manera, la promesa de someterse en Chile a una
jurisdicción no reconocida por las leyes chilenas adolece de nulidad por objeto ilícito.

B. ARTÍCULO 1.463 DEL C.C.

El acto por el cual se ceda o done el derecho de suceder a una persona viva adolece de
objeto ilícito.

Los pactos que se prohiben son los siguientes:

a. Pacto de renuncia a una sucesión futura (artículos 956 y 1.226 del C.c.).
b. Pacto por el cual se instituye heredero
c. Pacto de disposición de sucesiones futuras.

Lo único que la ley permite es el pacto de no disponer de la cuarta de mejoras (artículo


1.208 del C.c.). En ningún caso se autoriza como se desprende del artículo 1.463 del C.c.,
el pacto entre el legitimario y el que debe una legítima.

C. CASOS DEL ARTÍCULO 1.464 DEL C.C.

El artículo 1.464 del C.c. señala que hay objeto ilícito en la enajenación de las cosas
enumeradas en esa disposición.

17
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Al respecto debe, precisarse:

Concepto de enajenación.

Existe un concepto amplio y restringido de enajenación.

Concepto amplio: transferencia del dominio o constitución de otro derecho real (usufructo,
hipoteca, etc.).

Concepto restringido: Transferencia de dominio.

El C.c. muchas veces hace la distinción entre enajenar y gravar. A veces no.

En este caso, se entiende el concepto amplio de enajenación.

¿Pueden venderse las cosas enumeradas en el artículo 1.464 del C.c.?

La venta no constituye enajenación. No transfiere dominio. En estricto rigor, por tanto, no


debería quedar incluido en el artículo 1.464 del C.c.
Sin embargo, el artículo 1.810 del C.c. señala que no pueden venderse las cosas cuya
enajenación esté prohibida por la ley

La tesis de don Eugenio Velazco sostiene que sólo los Nºs 1 y 2 del artículo 1.464 del C.c.
son normas prohibitivas. Sólo las ventas de esas cosas, por tanto, adolece de objeto
ilícito. Los Nºs 3 y 4 no son prohibitivos, por lo cual la venta de las cosas ahí
contempladas es válida.

Se critica esta teoría ya que la distinción entre normas prohibitivas e imperativas tiene
importancia por la sanción, pero aquí la sanción está señalada por la ley, la nulidad
absoluta.

1. Artículo 1.464 Nº1 del C.c.

Hay un objeto ilícito en la enajenación de las cosas incomerciables.

Surge la discusión sobre si las actos sobre cosas incomerciables generan falta de objeto
según el artículo 1.461 del C.c. u objeto ilícito conforme a esta norma. Se une esta
discusión con la contradicción entre el concepto de hecho moralmente imposible y de
objeto ilícito.

Teorías al respecto:

(i) Todos los casos del artículo 1.461 del C.c. son causales de objeto ilícito.
(ii) El hecho moralmente imposible ocasiona objeto ilícito. Las cosas incomerciables
generan falta de objeto. Una cosa, además, no puede ser ilícita, los hechos sí. (tesis de la

18
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

cátedra, salvo la enajenación sobre una cosa incomerciable que por expresa disposición
de la ley se sanciona con objeto ilícito). Para quienes son partidarios de la teoría de la
inexistencia, sería ilógico sostener objeto ilícito tratándose de cosas incomerciables (la
venta del mar chileno, trasncurridos 10 años, se sanearía).
(iii) Constituyen objeto ilícito los actos sobre cosas incomerciables y sobre hechos
moralmente imposibles.

b. Artículo 1.464 Nº2 del C.c.

Hay un objeto ilícito en la enajenación de los derechos o privilegios que no pueden


transferirse a otra persona como el derecho de alimentos o el de uso y habitación.

Se trata de cosas inalienables no de cosas incomerciables. Toda cosa incomerciable es


inalienable, pero no toda cosa inalienable es incomerciable, ya que pueden ser objeto de
relaciones privadas.
c. Artículo 1.464 Nº3 del C.c.

Hay un objeto ilícito en la enajenación de las cosas embargadas por decreto judicial.

Se aplica un concepto amplio de embargo. En este sentido, la norma no sólo se refiere al


embargo del juicio ejecutivo sino que también incluye las prohibiciones de enajenar y
gravar decretadas por un tribunal.

Incluso, por mandato del artículo 296 del Código de Procedimiento Civil, la norma se
extiende a las prohibiciones de celebrar actos y contratos.

¿Desde cuándo existe embargo?. (i) Entre las partes, desde que se notifica la resolución
respectiva; (ii) entre terceros, si se trata de bienes inmuebles, desde su inscripción en el
Conservador de Bienes Raíces; si son bienes muebles, desde que los terceros toman
conocimiento del embargo.

En relación con la enajenación forzada que se produce en un juicio respecto de un bien


que ha sido reembargado, cabe señalar que se admite que su enajenación es válida ya
que el Código de Procedimiento Civil dispone de otros medios para proteger los intereses
de los acreedores (la tercería de pago o de prelación).

No habrá objeto ilícito si el juez autoriza la enajenación o el acreedor consiente en ella.


Esta autorización debe darse antes de la enajenación, porque la nulidad absoluta no
puede sanearse por la ratificación de las partes.

d. Artículo 1.464 Nº4 del C.c.

Hay un objeto ilícito en la enajenación de las cosas cuya propiedad se litiga sin permiso
del juez que conoce en el litigio.

19
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

El artículo 296 del Código de Procedimiento Civil señala que se requiere que el juez
decrete prohibición respecto de los bienes, aplicándose a la prohibición el artículo 297 del
Código de Procedimiento Civil en relación con la fecha desde la cual se considera que hay
prohibición.

¿Puede autorizar el acreedor la enajenación? Si se entiende que el artículo 296 del


Código de Procedimiento Civil amplía el concepto de embargo, el Nº4 del artículo 1.464
del C.c. se incluye en el Nº3 de ese artículo y, por tanto, procede la autorización del
acreedor.

D. ARTÍCULO 1.465 DEL C.C.

Materia tratada en apuntes de dolo.

E. JUEGOS DE AZAR.

En el juego las partes actúan para que se realice el evento. En la apuesta, el evento se
produce con independencia de las partes.

Reglas:

- Juegos de azar y apuestas sobre juegos de azar: objeto ilícito (artículo 2.259 del C.c.),
con prevención de lo dispuesto por el artículo 1.468 del C.c.
- Juegos en que prima la habilidad intelectual y otras apuestas: Sólo dan excepción
para retener lo pagado, pero no otorgan acción para exigir su cumplimiento.
Constituyen obligaciones naturales (artículo 1.470 del C.c.).
- Juegos en que prima la destreza corporal: son obligaciones civiles perfectas. Otorgan
acción y excepción.

F. OTROS CASOS DEL ARTÍCULO 1.466 DEL C.C.

Interesa destacar de esta norma la regla de clausura: hay objeto ilícito en todo contrato
prohibido por la ley.

V. SANCIÓN.

La falta de objeto y el objeto ilícito se sancionan con la nulidad absoluta (artículos1.682 y


10 del C.c.).

CAUSA
Artículos 1.467 y 1.468 del C.c.

La teoría de la causa constituye un tema complejo y oscuro de gran discusión. Ello,


atendido fundamentalmente a los distintos conceptos de causa y a las distintas teorías

20
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

existentes al respecto. En este apunte se esbozan únicamente los aspectos básicos de la


teoría de la causa

I. DIFERENCIA CON OBJETO.

El objeto es “lo que se debe”. La causa es “porqué se debe”.

II. CONCEPTOS DE CAUSA Y TEORÍAS.

1. Causa ocasional. Teoría de los móviles

Para esta teoría la causa como requisito de existencia, la constituye la causa ocasional,
es decir, los móviles o motivos que inducen a contratar. Este concepto se refiere a la
causa del acto o contrato.

Así, la causa de un contrato de compraventa para el vendedor puede ser la necesidad de


dinero, la intención de comprar otra cosa con el precio recibido, etc.

La causa ocasional varía de un contrato a otro aunque sea del mismo tipo, porque los
móviles siempre pueden ser distintos.

2. Causa final. Teoría clásica de Domat y Pothier.

Para esta teoría la causa como requisito de existencia la constituye la causa final, es
decir, el fin inmediato y directo que se persigue al obligarse. Este concepto se refiere la
causa de la obligación y es siempre la misma en todos los contratos del mismo tipo.

Al respecto se distinguen 3 tipos de contratos:

a. Contratos bilaterales. La causa de la obligación es la obligación de la otra parte.


Así, la causa de la obligación del vendedor de entregar la cosa es la obligación del
comprador de pagar el precio.

Si no hay obligación de pagar el precio hay falta de objeto de la obligación del comprador
y falta de causa de la obligación del vendedor.

b. Contratos reales. La obligación de restituir tiene su causa en la entrega de la cosa


que se hace por el acreedor.

c. Contratos gratuitos, La causa de la obligación del deudor es la mera liberalidad.

III. TEORÍA ACOGIDA POR EL C.C. CHILENO.

Para el estudio de esta materia y sin perjuicio de la gran discusión que genera la
interpretación del artículo 1.467 del C.c., ésta se resume de la siguiente manera:

21
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Inciso 1º de la norma: La redacción de este inciso se acerca a la teoría de la causa final,


causa de la obligación. Este inciso además señala que no es necesario expresar la causa,
lo que según algunos autores permite sostener que la existencia de causa se presume.
Su falta debe probarse por quien la alega.

Inciso 2º: Este inciso permite sostener que el C.c. siguió la teoría de la causa ocasional.

Inciso 3º: Da un ejemplo de causa final (el primero) y otro de causa ocasional (el
segundo).

Conclusión: Para determinar si un acto tiene o no causa debe atenderse a la causa de la


obligación, causa final. Para analizar la ilicitud de la causa, se atiende a la causa del acto
o contrato, causa ocasional. Es la solución que da también la jurisprudencia francesa.

IV. SANCIÓN.

La falta de causa y la causa ilícita se sanciona con la nulidad absoluta (artículo 1.682 del
C.c.).

VOLUNTAD

Una de las características del acto jurídico consiste en que éste debe ser voluntario y
ejecutado o celebrado con la intención de producir efectos jurídicos.

En este sentido, la voluntad constituye un requisito de existencia de los actos jurídicos. De


la misma manera, si la voluntad concurre, pero ésta se encuentra viciada, el acto jurídico
carecerá de un requisito de validez.

A. ELEMENTOS Y REQUISITOS DE LA VOLUNTAD.

Los elementos de la voluntad son dos:

(i) Voluntad interna (elemento subjetivo).

El elemento subjetivo comprende dos aspectos. El acto debe ser voluntario, es decir,
producto de una decisión. Por eso se afirma que la fuerza física excluye la voluntad. En
segundo lugar, el acto debe ejecutarse o celebrarse con la intención de producir efectos
jurídicos. En este sentido el acto simulado no es voluntario.

(ii) Voluntad externa (elemento objetivo).

La voluntad debe comunicarse de algún modo. Es decir la voluntad debe ser manifiesta.

De esta manera, los requisitos de la voluntad como requisito de existencia de los actos
jurídicos, se resumen en dos:

22
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

1) La voluntad debe ser seria, es decir, debe existir una intención de producir efectos
jurídicos; y,
2) La voluntad debe ser manifiesta.

B. MANIFESTACIÓN DE VOLUNTAD.

La regla general en materia de voluntad es que basta que ésta se exprese de algún modo.
Este criterio sin embargo sólo es aplicable en términos absolutos tratándose de los
contratos consensuales. En los contratos reales y solemnes el consentimiento se expresa
a través de la entrega de la cosa o de la solemnidad respectivamente (véase artículo
1.443 del C.c.).

Desde el punto de vista de las formas en que puede manifestarse la voluntad, esta puede
clasificarse de la siguiente manera:

(i) Voluntad expresa: La voluntad es expresa si se manifiesta en forma oral o escrita,


incluso por gestos. Al respecto, recuérdese que hasta antes de la dictación de la Ley
Nº19.904 (publicada en el Diario Oficial con fecha 3 de octubre de 2003), la ley declaraba
incapaces absolutos a los sordomudos que no podían darse a entender por escrito. En
este sentido, la ley no admitía que estas personas pudieran manifestar su voluntad de otra
forma. Producto de la modificación de la norma, actualmente se consideran incapaces
absolutos a los sordos y sordomudos que no pueden darse a entender claramente. Se
admite, por tanto, que estas personas manifiesten su voluntad, por ejemplo, a través del
lenguaje de señas (véase artículo 1.447 del C.c.).

(ii) Voluntad tácita: Es aquella que se infiere de una determinada conducta. Con todo,
esa conducta debe ser concluyente, es decir, debe conducir inequívocamente a la
conclusión de que constituye una manifestación de voluntad. Ejemplos: artículos 2.164,
1.904, 1.241 y 1.245 del C.c.

(iii) Voluntad presunta: Parte de la doctrina admite esta tercera clasificación. Voluntad
presunta sería aquella que la ley deduce de ciertos hechos (véanse artículos 1.244 y
1.654 del C.c.). Sin embargo, es posible afirmar que es una clase de manifestación de
voluntad tácita.

La regla general es que la voluntad pueda manifestarse de cualquiera de las formas antes
indicadas, reconociéndosele el mismo valor. Sin embargo, existen casos en que sólo se
admite la manifestación de voluntad expresa. Por ejemplo, artículos 1.635, 1.981, 1.511
del C.c. Además, las partes pueden estipular que sólo tendrá valor la manifestación de
voluntad expresa (por ejemplo, pueden estipular que los acuerdos deben contar por
escrito).

C. VALOR JURÍDICO DEL SILENCIO.

23
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Conforme a los principios que inspiran nuestro C.c., puede afirmarse que el silencio no
puede constituir una manifestación de voluntad, ni en sentido afirmativo ni en sentido
negativo. Es decir, no puede entenderse como consentimiento en ningún aspecto.

Excepcionalmente, el silencio puede constituir una manifestación de voluntad en los


siguientes casos:

(i) Si la ley le atribuye efectos al silencio: Ejemplos, artículos 2.125 y 1.233 del C.c.
(ii) Si las partes le atribuyen efectos al silencio: Ejemplo, tácita reconducción. Es
frecuente que en aquellos contrato de duración determinada, por ejemplo, se estipula que
la vigencia del contrato será de 1 año, las partes estipulen que si ninguna de ellas
manifiesta su intención de no perseverar en el contrato, este se renovará
automáticamente por 1 año más.
(iii) Si el juez, atendida las circunstancias de hecho, le otorga valor jurídico al silencio:
Debe tratarse, por tanto, de un silencio circunstanciado. Por ejemplo, el juez podrá
atender a las relaciones anteriores entre las partes.

No existe abundante jurisprudencia relativa al valor jurídico del silencio. Sin embargo, los
juzgados de policía local se han pronunciado en el sentido que el silencio no constituye
una manifestación de voluntad, al resolver, en el ámbito de la Ley del Consumidor, que la
aceptación de los servicios adicionales ofrecidos por las empresas a sus clientes no
puede deducirse por el hecho de que dentro de cierto tiempo éstos no manifiesten su
rechazo.

En el proyecto de ley que introduce modificaciones a la Ley del Consumidor, actualmente


en tramitación en el Congreso, se contempla introducir una norma que niega
expresamente valor jurídico al silencio.

SIMULACIÓN

I. ANTECEDENTES.

La voluntad como requisito de existencia de los actos jurídicos presenta un elemento


interno o subjetivo y un elemento externo u objetivo. En la mayoría de los casos, el
elemento subjetivo y el objetivo coinciden. En este sentido se dice que la voluntad real
coincide con la voluntad declarada.

Sin embargo, puede ocurrir que se manifieste algo distinto a lo querido. Esa contradicción
puede ser causada por un error, por fuerza o por dolo. Puede suceder también que esa
disconformidad sea intencional (simulación).

En los casos de contradicción, surge la pregunta sobre qué voluntad debe primar, ¿la
voluntad real o la voluntad declarada?

Existen argumentos para sostener que en nuestro C.c. prima la voluntad real. Así se
desprendería de los artículos 1.445 Nº2 (“que consienta en dicho acto o declaración”),

24
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

1.437 (“concurso real de las voluntades”), 1.069 (“prevalecerá la voluntad del testador
claramente manifestada”, “se estará más a la substancia de las disposiciones que a las
palabras de que se haya servido”) y 1.560 del C.c. (“conocida claramente la intención de
los contratantes, debe estarse a ella más que a lo literal de las palabras”).

No obstante lo anterior, debe tenerse en cuenta que es necesario que la voluntad real se
manifieste de alguna forma.

II. CONCEPTO, CLASIFICACIÓN Y ALCANCE.

La simulación es “la declaración de un contenido de voluntad no real, emitida


conscientemente y de acuerdo entre las partes, para producir con fines de engaño la
apariencia de un negocio jurídico que no existe o que es distinto de aquel que realmente
se ha llevado a cabo”12.

Ejemplos.

1. Con la intención de aparentar un patrimonio menor frente a los acreedores, se


simula un contrato de compraventa con un tercero por el cual se le venden a éste
cuantiosos bienes.

2. Se quiere hacer una donación a un hijo mayor de edad, pero para evitar el trámite
de insinuación se simula la celebración de un contrato de compraventa.

Sin embargo, la simulación no siempre es ilícita. La simulación es ilícita cuando persigue


el perjuicio de terceros. Si no se persigue el perjuicio de terceros, la simulación es lícita
(por ejemplo, se ocultan bienes para que terceros no soliciten donaciones).

En el primer ejemplo, la simulación es absoluta. Se celebra aparentemente un acto


jurídico que no existe.

En el segundo ejemplo, la simulación es relativa. El negocio celebrado es diferente del


que realmente se ha llevado a cabo, ya sea total o parcialmente. Se distingue un acto
simulado y un acto oculto.

Hay simulación relativa parcial, por ejemplo, cuando se simula la fecha de un contrato (se
antedata el contrato para que sus efectos se produzcan a partir de una fecha anterior a la
real).

Se distingue también la simulación por interpósita persona. Aparece como parte en un


contrato alguien que en realidad no lo es. Quien en verdad actúa es otra persona.

La jurisprudencia ha señalado que para alegar la simulación debe atacarse el acto


simulado por la vía de la acción de nulidad. Se podría alegar la simulación de un acto
12
Definición de F. Ferrara, citada por VIAL DEL RÍO, VÍCTOR, “ACTOS JURÍDICOS Y
PERSONAS”, Volumen I, Ediciones Universidad Católica de Chile, pág.105.

25
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

jurídico y el tribunal declararla, pero ello no implica que se produzca la nulidad del acto (la
nulidad debe ser declarada por el Tribunal).

Al respecto y tal como se señaló al comentar jurisprudencia relativa a la simulación, no


hay unanimidad en cuanto al vicio que debe invocarse como fundamento de la nulidad.

Según algunos la causa del acto simulado sería ilícita (perjudicar a los terceros, entendida
la causa ilícita como los motivos que inducen a contratar), según otros habría falta de
causa (no existe obligación alguna de la contraparte). Sin embargo, la tesis más aceptada
y, a la vez, la más recurrida, es la de la falta de consentimiento. Las partes no han querido
celebrar el acto simulado, sino otro, o bien, ninguno (existe consentimiento para la
simulación pero no para el acto simulado).
No obstante, como en todos los casos mencionados la sanción es la misma (la nulidad
absoluta según la tesis mayoritaria), generalmente se invocan todos los vicios
conjuntamente.

La tesis de la nulidad como vía para atacar el acto simulado (que es la posición de la
cátedra), presenta una debilidad. ¿Como podrían las partes atacar el acto simulado por la
vía de la nulidad absoluta si la mayoría de las veces las partes sabían o debían saber el
vicio que lo invalidaba?. Es posible afirmar que la limitación del artículo 1.683 del C.c.
para la titularidad de la acción de nulidad absoluta no se aplica, en función de que la
primacía de la voluntad real entre las partes está contemplada en el artículo 1.707 del C.c.
Sin embargo, debe reconocerse que se trata de un punto débil.

Otros autores aceptan la existencia de una acción de simulación distinta a la acción de


nulidad.

Lo claro es que en la simulación relativa, una vez levantado el velo de la simulación, debe
determinarse posteriormente si el acto oculto adolece o no de un vicio de nulidad, es decir,
si es válido o no.

III. EFECTOS DE LA SIMULACIÓN.

¿Qué ocurre si después de simularse la celebración de un contrato de compraventa, mi


contraparte me pide el precio? ¿Qué voluntad prima frente a los terceros?.

Para ello deben distinguirse los efectos de la simulación entre las partes y respecto de
terceros, tema que se estudia en relación con las contraescrituras. Recuérdese, que el
C.c. no regula la simulación, sólo lo hace implícitamente al reglamentar el efecto de la
contraescrituras.

Por otra parte, la contraescritura, documento por el cual se aclara o modifica una
declaración anterior, no supone necesariamente la existencia de una simulación. La
contraescritura puede, por ejemplo, ser utilizada para modificar o resciliar un contrato real
no simulado.

26
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

A. EFECTOS DE LA SIMULACIÓN ENTRE LAS PARTES.

De acuerdo al artículo 1.707 del C.c., interpretado a contrario sensu, entre las partes
prima la voluntad real de las partes.

Así se desprende también del artículo 1.545 del C.c.

B. EFECTOS DE LA SIMULACIÓN FRENTE A LOS TERCEROS.

Conforme al artículo 1.707 del C.c. respecto de terceros prima la voluntad declarada de
las partes. Esta norma dispone que las contraescrituras privadas que alteren lo declarado
en una escritura privada no pueden hacerse valer frente a terceros. En cambio, las
contraescrituras públicas producen efectos respecto de terceros siempre que se anoten al
margen de la escritura que se modifica y esta anotación conste en la copia con que obra
el tercero (por tanto, en definitiva, no afectará a los terceros que hayan actuado antes de
la suscripción de la contraescritura).

Los terceros pueden aprovecharse también de la voluntad real.

- Terceros que quieren aprovecharse de la voluntad declarada, por ejemplo, los


terceros que compraron a un falso adquirente.
.
- Terceros que quieren aprovecharse de la voluntad real, por ejemplo, acreedores
del deudor que simula la enajenación de sus bienes.

Si existe un conflicto entre los terceros que quieren aprovecharse de la voluntad real y los
que quieren aprovecharse de la voluntad declarada, según algunos prefieren los terceros
de buena fe. Según otros, priman los terceros que quieren aprovecharse de la voluntad
declarada, ya que ésta es la regla general del artículo 1.707 del C.c.

IV. PRESCRIPCIÓN.

Existen varias teorías sobre la prescripción de la acción.

a. Según algunos, la acción de simulación es imprescriptible.


b. Para otros, se aplica la prescripción general del C.c. de 5 años.
c. Finalmente, se sostiene que puede aplicarse la prescripción de la acción de
responsabilidad extracontractual de 4 años.

Si se sostiene en cambio, que la simulación se alega por la vía de la acción de nulidad,


deberán aplicarse sus plazos de prescripción.

27
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

V. PRUEBA.

La jurisprudencia está conteste en que la simulación no se acredita por pruebas directas,


sino que indirectas, principalmente en base a presunciones. Por ejemplo, origen de los
fondos, entrega de las cosas, precio ilusorio, relación de parentesco, época en que se
celebra el contrato, etc. En general se trata de una prueba muy difícil.

FORMACIÓN DEL CONSENTIMIENTO

Tratándose de los actos jurídicos bilaterales, la voluntad recibe el nombre de


consentimiento. Se trata de una denominación doctrinaria que, en general, no es usada
por el Código Civil.

Puede definirse el consentimiento, por tanto, como el acuerdo de voluntades de dos o


más partes13.

El artículo 1.445 Nº2 del C.c. da a entender que para que se forme el consentimiento
basta la voluntad del deudor (al referirse a la persona que se obliga). Se trata de un error
terminológico. Se requiere efectivamente el acuerdo de todas las partes. Así se desprende
además del artículo 1.437 del C.c.

A. REGULACIÓN DE LA FORMACIÓN DEL CONSENTIMIENTO.

El Código Civil no contiene normas relativas a la formación del consentimiento. Este vacío
vino a ser superado por el Código de Comercio que en sus artículos 97 y siguientes regula
la formación del consentimiento.

Existe consenso en la doctrina y jurisprudencia que estas normas son aplicables no sólo a
los actos de comercio sino que también a los actos jurídicos de naturaleza civil.

B. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL CONSENTIMIENTO.

Para que el consentimiento se forme, se requiere la concurrencia de dos actos jurídicos


unilaterales:

(i) La oferta, propuesta o policitación.


(ii) La aceptación del destinatario de la oferta.

C. LA OFERTA.

1. Concepto: Acto jurídico unilateral por el cual una parte propone a otra celebrar
una determinada convención.

13
Recuérdese la distinción de actos jurídicos unilaterales, bilaterales o multilaterales.

28
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

2. Requisitos: La oferta debe reunir los siguientes requisitos.

(i) La oferta debe cumplir los requisitos de existencia y validez de todo


acto jurídico.
(ii) La oferta debe ser completa. Una oferta es completa cuando basta la
aceptación del destinatario para que se forme el consentimiento 14. La oferta
será completa si, al menos, contiene los elementos esenciales de la
convención que se propone. Obviamente, esta puede contener elementos
accidentales o una alteración de los elementos de la naturaleza. Si es el
destinatario de la oferta, el que incluye estos elementos, estaremos, como
se verá, frente a una contraoferta.

3. Clasificación: La oferta puede clasificarse de la siguiente manera:

(i) Oferta expresa y oferta tácita. Constituye una oferta tácita, por ejemplo, la
exhibición de productos en las vitrinas, las máquinas automáticas de
bebida, etc.

(ii) Oferta hecha a persona determinada y oferta hecha a persona


indeterminada. Constituye oferta hecha a persona indeterminada aquellas
mencionadas en el número (i) precedente, los avisos económicos
publicados en el diario, etc.

El artículo 105 del Código de Comercio contempla esta última clasificación en el siguiente
sentido:

“Las ofertas indeterminadas contenidas en circulares, catálogos notas de precios


corrientes, prospectos, o en cualquiera otra especie de anuncios impresos, no son
obligatorias para el que las hace.

Dirigidos los anuncios a personas determinadas, llevan siempre la condición implícita de


que al tiempo de la demanda no hayan sido enajenados los efectos ofrecidos, de que
no hayan sufrido alteración en su precio, y de que existan en el domicilio del
oferente”.

D. LA ACEPTACIÓN.

1. Concepto: La aceptación es un acto jurídico unilateral por el cual el destinatario de


la oferta manifiesta su conformidad con ella.

2. Clasificación: La aceptación del destinatario admite la siguiente clasificación.

14
Tratándose de los contratos reales y solemnes no basta la aceptación del
destinatario. Será necesario que se materialice la entrega de la cosa o la solemnidad.

29
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

(i) Aceptación expresa y aceptación tácita. Conforme al artículo 103 del


Código de Comercio, la aceptación tácita produce los mismos efectos y
está sujeta a las mismas reglas que la expresa.

(ii) Aceptación pura y simple y aceptación condicional. La aceptación es


pura y simple si la oferta es aceptada en los mismos términos en que se
formuló. La aceptación condicional es aquella por la cual se introducen
modificaciones o reservas a la oferta (se ofrece comprar un mueble en
$100, pero el aceptante ofrece comprarlo en $80). Esta aceptación
constituye una contraoferta o una nueva oferta, por lo que debe reunir los
requisitos de ésta. Para la formación del consentimiento se requerirá la
aceptación del oferente original, que ahora será aceptante. El artículo 102
del Código de Comercio estable que la aceptación condicional será
considerada como una propuesta.

3. Requisitos: La aceptación, para formar el consentimiento, debe reunir los


siguientes requisitos.

(i) La aceptación debe ser pura y simple. Así lo disponen los artículos 101,
102 y 106 del Código de Comercio.

(ii) La aceptación debe ser oportuna.

La aceptación, en primer lugar, debe darse en el plazo que hayan fijado las partes o el
oferente.

Si no se ha fijado plazo, se aplican los términos establecidos por la ley, la cual efectúa la
siguiente distinción (artículos 97 y 98 del Código de Comercio): (i) Si la oferta es verbal, la
aceptación debe darse en el acto de ser conocida la oferta por la persona a quien se
dirige. (ii) Si la oferta es escrita, debe distinguirse nuevamente: a) Si oferente y aceptante
residen en el mismo lugar, la oferta debe ser aceptada dentro de 24 horas; b) Si oferente
y aceptante residen en distintos lugares, la oferta debe ser aceptada a vuelta de correo.

Efectos de la aceptación extemporánea.

La aceptación extemporánea no forma el consentimiento. Sin embargo, como es


esperable que el aceptante crea que el oferente persiste en su oferta, el artículo 98 del
Código de Comercio dispone que, igualmente, en caso de aceptación extemporánea, el
proponente será obligado, bajo responsabilidad de daños y perjuicios, a dar pronto
aviso de su retractación15.

Debe considerarse, que la obligación de dar pronto aviso de la retractación y, en


consecuencia, la responsabilidad de indemnizar no es procedente si el oferente dio plazo
15
Parte de la doctrina estima que la aceptación extemporánea debe considerarse
como una nueva oferta y, por tanto, el pronto aviso debe darse en los plazos establecidos
en los artículos 97 y 98 del Código de Comercio.

30
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

para dar la aceptación. De la misma manera, el oferente pude allanarse a cumplir el


contrato.

(iii) La aceptación debe darse mientras la oferta esté vigente.

Casos en que la oferta deja de estar vigente. La oferta deja de estar vigente por (i)
caducidad; o, (ii) retractación.

Caducidad de la oferta. La caducidad de la oferta se produce por muerte o por


incapacidad legal sobreviniente del oferente anterior a la aceptación, se haya dado o no
plazo para la aceptación (artículo 101 del Código de Comercio)16-17.

Retractación de la oferta (artículos 99 a 101 del Código de Comercio). Por la


retractación, el oferente revoca o deja sin efecto la oferta18.

La regla general es que el oferente puede retractarse libremente y sin expresión de causa
mientras la aceptación no haya sido dada. El artículo 99 del Código de Comercio
establece que el oferente puede arrepentirse entre el envío de la propuesta y la
aceptación. La oferta, por tanto, no obliga a su autor. Esta retractación oportuna se
denomina retractación tempestiva.

El arrepentimiento no se presume.

La retractación tempestiva impone al proponente la obligación de indemnizar los gastos


que la persona a quien fue encaminada la oferta hubiere hecho, y los daños y perjuicios
que hubiere sufrido, a menos que el oferente se allane a cumplir la convención propuesta.
Se trata de una obligación que tiene su origen exclusivamente en la ley.

El oferente no puede retractarse de la oferta en los siguientes casos:

a) Si el oferente, al realizar la oferta, se ha obligado a esperar contestación; o,


b) Si el oferente, al realizar la oferta, se ha obligado a no disponer del objeto del
contrato, sino después de desechada o de transcurrido un determinado plazo.

En estos casos de retractación intempestiva, aunque el oferente se retracte, si la


aceptación es oportuna, el consentimiento queda formado.

16
Lo anterior es consecuencia del sistema adoptado por nuestro Código Civil según
el cual la oferta no obliga.
17
De esta manera, la oferta no se transmite a los herederos. Tampoco da origen a la
obligación de indemnizar que contempla el artículo 100 del Código de Comercio, porque se
trata de una obligación legal excepcional que no puede ampliarse a más casos que los
contemplados en la norma.
Tampoco se forma el consentimiento si la muerte o incapacidad le sobreviene al aceptante
antes de la aceptación.
18
Véase nota 4.

31
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

E. MOMENTO EN QUE SE FORMA EL CONSENTIMIENTO.

Existen 4 teorías relativas al momento en que se forma el consentimiento:

(i) Teoría de la aprobación: El consentimiento se forma una vez dada la


aceptación con independencia de que la aceptación haya sido enviada,
recibida o conocida por el oferente.
(ii) Teoría del envío o expedición: El consentimiento se forma cuando el
aceptante envía la aceptación.
(iii) Teoría de la recepción: El consentimiento se forma cuando el aceptante
recibe la aceptación.
(iv) Teoría del conocimiento o información: El consentimiento se forma cuando
el oferente toma conocimiento de la aceptación.

Aparentemente, nuestra legislación admite la teoría dela aprobación, conforme los


artículos 99 y 101 del Código de Comercio. Según el primero de ellos el proponente
puede retractarse de la oferta entre el envío de la propuesta y la aceptación, no entre el
envío de la oferta y el envío de la aceptación. La segunda de las normas citadas dice
dada la contestación.

Determinar el momento en que se forma el consentimiento tiene importancia para


determinar, por ejemplo, las leyes aplicables al contrato (artículo 22 de la Ley sobre Efecto
Retroactivo de las leyes), si las partes eran capaces al momento de celebrarse el contrato,
etc.

F. LUGAR EN QUE SE FORMA EL CONSENTIMIENTO.

Determinar el lugar en que se forma el consentimiento tiene importancia para determinar


en ciertos casos el tribunal competente para conocer de un asunto (véanse por ejemplo,
artículos 135 Nº1 y 138 del Código Orgánico de Tribunales).

Si oferente y aceptante residen en distintos lugares el consentimiento se forma en el


domicilio del aceptante (artículo 104 del Código de Comercio).

VICIOS DEL CONSENTIMIENTO

La voluntad exenta de vicios constituye un requisito de validez de los actos jurídicos.

Los vicios del consentimiento están indicados en el artículo 1.451 del C.c.

Según esa norma los vicios de que puede adolecer el consentimiento son error, fuerza y
dolo.

ERROR

32
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

A. TRATAMIENTO DEL ERROR EN EL CÓDIGO CIVIL.

El error está tratado en el Código Civil de la siguiente manera:

(i) Como vicio del consentimiento (artículos 1.451 y siguientes del C.c.);
(ii) En las asignaciones testamentarias (artículo 1.057 del C.c.);
(iii) En la tradición (artículo 677 del C.c.); y,
(iv) En la transacción (artículo 2.455 del C.c.).

B. ERROR DE DERECHO Y ERROR DE HECHO.

Se distinguen dos clases de error:

(i) Error de derecho.

Existe error de derecho cuando se ignora la existencia de una norma legal, su contenido o
su alcance.

El error de derecho entendido en ese sentido no constituye un vicio del consentimiento.


Así lo dispone expresamente el artículo 1.452 del C.c. (“El error sobre un punto de
derecho no vicia el consentimiento”).

De esta manera, no puedo invalidar un acto jurídico, no puedo sustraerme a las


consecuencias del acto jurídico ejecutado o celebrado alegando que padecí un error de
derecho, alegando, por tanto, la ignorancia de la ley.

Esta prohibición es consecuencia de la ficción de conocimiento de la ley establecida en


los artículos 8º y 706 del C.c. El artículo 8º del C.c. establece que nadie podrá alegar
ignorancia de ley después de que ésta haya entrado en vigencia. Por su parte, según el
artículo 706 del C.c., relativo a la buena fe como requisito de la posesión regular,
establece que el error en materia de derecho, constituye una presunción de mala fe, que
no admite prueba en contrario.

La prohibición de alegar ignorancia de la ley reconoce una excepción en algunos caso,


por ejemplo, en las situaciones previstas en los artículos 2.297 y 2.299 del C.c.19.

(ii) El error de hecho.

El error de hecho constituye una falsa representación de la realidad producida por la


ignorancia o por la equivocación. Ignorancia y equivocación constituyen para el Derecho
un error de hecho.

19
En estos casos, sin embargo, no se alega ignorancia de la ley para eximirse del
cumplimiento de una obligación legal. Se actúa en la creencia de que existe una norma
que impone una obligación.

33
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

En doctrina se distinguen dos clases de error de hecho:

1. Error esencial o error vicio. El error esencial constituye un vicio del consentimiento.
En esta clase de error existe una diferencia entre lo querido y lo declarado por una parte.
Por ejemplo, una parte cree comprar un anillo de platino y, en realidad está comprando
una joya de plata.

2. Error obstáculo u obstativo. Esta clase de error no constituye propiamente un vicio


del consentimiento, porque en este caso en realidad no hay consentimiento. Existe una
diferencia entre lo querido y declarado por una parte y lo querido y declarado por la otra
parte. Este error puede recaer sobre la naturaleza del acto que se ejecuta o celebra o
sobre la identidad de la cosa objeto del acto. Por ejemplo, una persona cree comprar un
caballo y la otra cree estar vendiendo una vaca. Una persona cree estar celebrando un
contrato de mutuo y la otra cree que se le está efectuando una donación.

El Código Civil, como veremos, califica ambas clases de error como vicios del
consentimiento.

C. CLASES DE ERROR DE HECHO EN EL CÓDIGO CIVIL.

No cualquier error de hecho vicia el consentimiento. Sólo los errores relevantes y que
cumplan con los requisitos que la ley señala pueden constituir un vicio del consentimiento.

El Código Civil contempla 4 clases de error:

1. Error esencial u obstáculo;


2. Error sustancial;
3. Error accidental; y,
4. Error en la persona.

1. ERROR ESENCIAL.

El error esencial está contemplado en el artículo 1.453 del C.c.

El error esencial puede recaer sobre: (i) La especie del acto o contrato que se ejecuta o
celebra; o, (ii) La identidad de la cosa específica de que se trata. Véanse los ejemplos
dados para el caso de error obstativo.

Respecto a la sanción aplicable a los actos jurídicos ejecutados o celebrados con error
existen 3 posiciones20:

(i) Para parte de la doctrina estima que, como en los casos de error esencial no se
forma el consentimiento, la sanción sería la inexistencia del acto. Sin embargo,
recordemos que la doctrina que admite esta sanción de ineficacia es minoritaria en Chile.
20
Recuérdense las explicaciones de clases sobre las principales diferencias entre la
inexistencia, la nulidad relativa y la nulidad absoluta.

34
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

(ii) Los autores que coinciden en que en esta clase de error no hay consentimiento,
pero que niegan la inexistencia como sanción de ineficacia, estiman que la sanción es la
nulidad absoluta.

(iii) Finalmente, una tercera corriente doctrinaria, que es la de la cátedra, opina que la
sanción es la nulidad relativa, en base a los siguientes argumentos: a) El artículo 1.454
que contempla el error sustancial y accidental sancionados en su caso con nulidad
relativa, parte señalando el error de hecho vicia asimismo el consentimiento; b) El
artículo 1.682 del C.c. inciso final, dispone que cualquier otro vicio distinto a los señalados
en el inciso 1º produce la nulidad relativa; y, c) La sanción de nulidad absoluta protege los
intereses generales. En este caso no hay un interés general comprometido.

2. ERROR SUSTANCIAL.

El artículo 1.454 del C.c. inciso 1º establece que el error de hecho vicia asimismo el
consentimiento cuando la sustancia o calidad esencial del objeto sobre que versa el
acto o contrato, es diversa de lo que se cree.

Para el legislador, por tanto sustancia y calidad esencial son conceptos sinónimos.
Sin embargo, existe consenso en cuanto a que el error sobre las calidades esenciales de
una cosa distintas a la sustancia o materialidad de ésta, también vicia el consentimiento.
Además, se comprende que la terminología calidad esencial es la principal de la norma,
de manera que no todo error en la sustancia puede constituir un vicio del consentimiento,
sólo si la materialidad de la cosa constituye una calidad esencial de la cosa.

Así, el error sobre la marca de una cosa o sobre sus elementos técnicos puede constituir
también un vicio del consentimiento. Por el contrario si la materialidad de la cosa no es
una calidad esencial de la cosa no existirá vicio del consentimiento (por ejemplo, el hecho
de que un lápiz sea de plástico o de goma, puede no constituir un vicio si no constituye un
elemento determinante para contratar).

La calificación de una calidad como esencial o no, debe determinarse en el caso concreto
analizando lo que para una persona razonable de juicio medio constituiría una calidad
esencial en las mismas circunstancias.

El error sustancial no puede confundirse con el error esencial cuando recae sobre la cosa
objeto del acto o contrato. En este último caso las partes creen estar celebrando un acto
sobre un objeto distinto. En el error sustancial, no existe divergencia sobre la cosa objeto
del contrato, sino que una de las partes yerra sobre su materialidad o sobre sus calidades.

De la misma manera, tampoco cabe suponer que el error sustancial debe ser provocado
por un engaño de la otra parte. En ese caso, si concurren los requisitos legales, podremos
estar frente al vicio denominado dolo.

35
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Finalmente, tampoco debe confundirse el error sustancial con los vicios redhibitorios u
ocultos de la cosa que pueden dar origen a la resolución del contrato de compraventa o a
la rebaja del precio. Tratándose de los vicios redhibitorios, la cosa no sirve para su uso
natural y ello puede dar origen a los efectos antes mencionados. En el caso del error
sustancial, la cosa sirve para su uso natural pero se yerra sobre el alcance de esas
utilidades (o sobre otras calidades esenciales de la cosa)21.

La sanción aplicable al error sustancial es la nulidad relativa (artículo 1.682 del


C.c.).

3. ERROR ACCIDENTAL

Conforme al artículo 1.454 inciso 2º del C.c., el error sobre las calidades accidentales de
la cosa (no esenciales) no vicia el consentimiento, a menos que: a) esas calidades
constituyan el principal motivo de una de las partes para contratar; y, b) este motivo ha
sido conocido de la otra parte.

En aquellos casos en que el error accidental vicia el consentimiento, la sanción es


la nulidad relativa (artículo 1.682 del Código Civil).

4. ERROR EN LA PERSONA.

El error acerca de la persona con la que se tiene la intención de contratar no vicia el


consentimiento, a menos que la consideración de esa persona sea la causa principal del
contrato (artículo 1.455 del C.c.).

El error en la persona puede recaer sobre las cualidades o sobre la identidad física de la
persona (salvo en el matrimonio que sólo acepta el error en la identidad de la persona).

El error en la persona vicia el consentimiento tratándose de los actos intuito personae.


Son actos de este carácter, en general, los actos de familia y los actos a título gratuito
(comodato por ejemplo). Sin embargo, también son actos intuito personae algunos actos
onerosos como el mandato, la sociedad de personas, el arrendamiento de servicios.

La sanción para el caso en que el error en la persona vicie el consentimiento es la


nulidad relativa (artículo 1.682 del C.c.).

Además la persona con quien erradamente se ha contratado, tiene derecho a solicitar la


indemnización de los perjuicios, en que de buena fe haya incurrido por la nulidad del
contrato.

21
Véanse artículos 1.857 y 1.858 del C.c.

36
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

De esta manera, sólo los errores determinantes constituyen un vicio del consentimiento,
es decir sólo aquellos que inducen a contratar o dicho de otro modo, aquellos sin los
cuales no se hubiere contratado.

ERROR COMÚN

El error común es aquel en que incurre un considerable número de personas. Esta clase
de error, en la medida que cumpla con los requisitos que se señalarán, impide que se
produzca la nulidad del acto jurídico celebrado no obstante el error.

Lo anterior se expresa en el adagio “error communis facit jus”: el error común constituye
derecho.

El error común debe reunir los siguientes requisitos:

(i) Debe ser compartido por la generalidad de las personas de la localidad en que se
ejecuta el acto o se celebra el contrato;
(ii) Debe ser excusable, es decir, el error debe fundarse en un título que tiene
apariencia de válido; y,
(iii) Debe padecerse de buena fe.

El error común encuentra su origen en el principio de protección de la buena fe y de la


apariencia jurídica.

El error común está contemplado en nuestro Derecho, en algunas disposiciones


particulares, pero no está recogido de una manera general. Véanse artículos 1013, 704
Nº4, 1576 y 2.058 del Código Civil.

Sin embargo, el problema se plantea al determinar si las disposiciones mencionadas


constituyen un principio general o una excepción. El primer criterio es el aceptado por la
doctrina y la jurisprudencia.

FUERZA

Se define la fuerza (o violencia) como la presión o coacción física o moral ejercida sobre
la voluntad de una persona para determinarla a ejecutar o celebrar un acto jurídico.

De esta manera, la fuerza puede ser física o moral.

La fuerza física o “vis absoluta” excluye la voluntad. Es decir, no corresponde propiamente


a un vicio del consentimiento.

37
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

La fuerza moral sí constituye un vicio del consentimiento. Se define la fuerza moral la


amenaza de un mal futuro que produce en la víctima un miedo o temor 22. En el caso de
fuerza moral hay consentimiento, pero éste no es libre y espontáneo, está viciado.

a. Requisitos.

Para que la fuerza vicie el consentimiento debe reunir los siguientes requisitos: (i) debe
ser grave; (ii) debe ser injusta; y, (iii) debe ser determinante (artículos 1456 y 1457 del
C.c.).

- Grave.

La fuerza es grave cuando es capaz de producir una impresión fuerte en una persona de
sano juicio, atendidos su edad, sexo y condición.

Es indiferente que el mal se realice. Puede recaer en la persona o en sus bienes. Y puede
provenir de la otra parte o de un tercero.

La determinación de la gravedad de la fuerza se efectúa analizando el caso en concreto.

La ley considera como grave todo acto que infunde a una persona un justo temor de verse
expuesta ella, su consorte o alguno de sus ascendientes o descendientes a un mal
irreparable y grave23.

Se trata de una presunción que no excluye otros casos de fuerza. Por ejemplo, si el mal
que se amenaza recayera sobre otras personas cercanas a quien presta su
consentimiento. Con todo, habrá que acreditar que se produjo una impresión fuerte.

- Injusta.

La fuerza debe consistir en un hecho ilícito, contrario a derecho. Con todo, no es


necesario que constituyan un delito penal.

Por tanto, el ejercicio legítimo de un derecho no se considera fuerza, a menos que sea
abusivo. Tampoco el temor reverencial.
22
Existen casos difusos o dudosos. En efecto, para algunos autores existen casos de
fuerza física que constituyen un vicio del consentimiento para nuestro Derecho. El vicio del
consentimiento estaría configurado también por un mal presente (por ejemplo, la tortura) y
no sólo por la amenaza de un mal futuro, ya que la ley sólo exigiría que la fuerza cause
una impresión fuerte para viciar el consentimiento y ello ocurriría en los dos casos
propuestos.
El tema puede resolverse distinguiendo los casos en que existe consentimiento pero
viciado de aquellos en que no existe.
23
Para algunos autores esta norma no excluye los males presentes. Véase nota anterior.

38
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Véase inciso 2º del artículo 1456 del C.c.

- Determinante.

La fuerza debe ser empleada con el objeto de obtener el consentimiento. El


consentimiento debe ser consecuencia de la fuerza.

b. Efectos.

La fuerza, cuando reúne los requisitos señalados, produce nulidad relativa (artículo 1.682
del C.c.)24-25.
DOLO

A. TRATAMIENTO DEL DOLO EN EL DERECHO CIVIL.

En el Código Civil, el dolo se contempla en 3 sentidos:

(i) Como un vicio del consentimiento (artículo 1458 del C.c.);


(ii) Como un agravante de la responsabilidad contractual (artículo 1.558 del C.c.); y,
(iii) Como un supuesto de la responsabilidad extracontractual (artículos 1.437, 2.284,
2.314 del C.c.).

B. CONCEPTO.

El artículo 44 del C.c. define al dolo como la intención positiva de inferir injuria a la
persona o propiedad de otro26.

Desde otro punto de vista, puede definirse como las maquinaciones fraudulentas
destinadas a que una persona preste su consentimiento para la ejecución o celebración
de un acto o contrato.

Es decir, en el caso del dolo hay un error provocado por el engaño. Se utilizan
procedimientos fraudulentos para engañar a una persona.
24
En relación con la fuerza en los actos jurídicos unilaterales, véanse artículos 1.007,
1.234 y 1.237 del C.c.
25
La doctrina discute si el estado de necesidad puede comprenderse en la fuerza
como vicio del consentimiento. La opinión de la cátedra es negativa. Una opinión
semejante destruye el sistema en que se funda la lesión enorme, la cual no sólo no vicia el
consentimiento, sino que está construida en base a criterios objetivos (sólo en los casos
expresamente determinados y en la medida que se exceda de los límites fijados por el
legislador), a diferencia de como sucede en el Derecho Comparado en que los casos de
estado de necesidad (tales como la necesidad económica) pueden quedar comprendidos
en la figura de la lesión, lo que se reitera no se admite en nuestro Derecho.
26
Para parte de la doctrina el concepto de dolo que da el Código Civil en su artículo
44 está referido al dolo como requisito de la responsabilidad extracontractual.

39
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Sin embargo se diferencia del error. El error no es obra del otro contratante, el dolo sí. Aún
cuando el error no sea relevante, si existe dolo hay vicio del consentimiento.

C. CLASIFICACIÓN.

(i) Dolo positivo y dolo negativo.

El dolo puede consistir en hechos como las maniobras fraudulentas, las mentiras,
ocultación de antecedentes (dolo positivo).

Puede consistir también en guardar silencio cuando en virtud de la ley, de las costumbres
o de las circunstancias se está obligado a proporcionar una información (dolo negativo o
reticencia).

(ii) Dolo malo y dolo bueno.

Existe dolo malo si hay intención positiva de inferir un daño. El dolo bueno obedece a la
exageración, pero no hay intención de producir daño.

(ii) Dolo determinante e incidental.

El dolo es determinante o principal cuando es obra de una de las partes y aparece


claramente que sin él no se hubiere contratado (artículo 1.458 del C.c.).

El dolo es incidental o accidental cuando no reúne alguno de esos requisitos.

El dolo determinante vicia el consentimiento. El dolo incidental sólo puede dar origen a
indemnización de perjuicios.

D. REQUISITOS DEL DOLO PARA VICIAR EL CONSENTIMIENTO.

Para que el dolo vicie el consentimiento debe cumplir los siguientes requisitos:

(i) El dolo debe ser obra de una de las partes (artículo 1.458 del C.c.).

Esta exigencia denota que el artículo 1.458 del C.c. se esta refiriendo a los actos jurídicos
bilaterales. Sin embargo, se admite el dolo en los actos jurídicos unilaterales (véanse
artículos 1.234, 1.237, 1.782 y 968 Nº4).

No es necesario en todo caso que la otra parte sea el autor directo del dolo (véase
artículo 2.316 del C.c.).

De la misma manera, debe ser obra de una sola de las partes y no de ambas.

40
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

(ii) Debe aparecer claramente que sin él no se hubiera contratado (artículo 1.458 del
C.c.).

Si el dolo vicia el consentimiento la sanción es la nulidad relativa (artículo 1.682 del


C.c.).

E. EFECTOS DEL DOLO INCIDENTAL.

El dolo que no cumple con los 2 requisitos antes mencionados sólo da lugar a la acción de
indemnización de perjuicios contra la persona que lo ha fraguado o que se ha
aprovechado de él, por el monto total de los perjuicios o hasta concurrencia del provecho
que han reportado del dolo (artículo 1.458 del C.c.).

¿Es posible demandar indemnización de perjuicios en el caso del dolo determinante? De


acuerdo a los términos del inciso 2º del artículo 1.458 del C.c. (sólo da derecho [...]), debe
entenderse la respuesta afirmativa.

Finalmente se hace presente que los perjuicios no son necesarios para que el dolo
determinante vicie el consentimiento. Sí constituyen un elemento necesario para
demandar indemnización de perjuicios.

F. PRUEBA DEL DOLO.

El dolo no se presume sino en los casos especialmente previstos por la ley (artículos 968
Nº5 y 1301 del C.c.). En los demás casos debe probarse (artículo 1.459 del C.c.).

Es una consecuencia del principio contemplado en el artículo 707 del C.c. (la buena fe se
presume).

G. CONDONACIÓN.

La condonación del dolo futuro no vale (objeto ilícito). La condonación del dolo ya
cometido debe ser expresa (artículo 1465 del C.c.).

LESIÓN ENORME

I. CONCEPTO.

La lesión enorme puede definirse como el perjuicio o daño patrimonial que la celebración
de un acto jurídico le irroga a una persona.

En definitiva la lesión enorme se verifica por una desigualdad económica entre las
prestaciones de las partes. Por ello es posible afirmar que sólo tiene cabida en los
contratos onerosos conmutativos, pero no en los contratos onerosos aleatorios o en los
contratos gratuitos. Recuérdense los ejemplos dados en clases a raíz de los contratos de
donación y de seguro.

41
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

La definición de contrato oneroso y gratuito y de contrato conmutativo y aleatorio se


contempla en los artículos 1.440 y 1.441 del C.c.

A través de la institución de la lesión enorme se pretende sancionar el lucro indebido


obtenido por una parte a consecuencia del perjuicio recíproco de la otra. Básicamente se
trata de sancionar la falta de equidad en el contrato.

Con todo, la lesión enorme no constituye un vicio del consentimiento en nuestro


ordenamiento jurídico. En efecto, no se encuentra considerado como tal en el artículo
1.451 del C.c., el cual sólo contempla el error, la fuerza y el dolo. En efecto, la lesión
propiamente constituye un vicio objetivo del contrato, pero no un vicio del consentimiento.
En ese sentido, es perfectamente posible que la parte que se ve perjudicada por la lesión
haya consentido en la celebración del acto jurídico con conocimiento de la existencia de la
lesión enorme e igualmente ésta podrá ser alegada.

En nuestro ordenamiento jurídico, la lesión se contempla con un criterio estrictamente


objetivo. Ello desde tres puntos de vista:

(i) Como se señaló, la lesión enorme puede ser alegada incluso por aquel que
consintió en la celebración de un acto jurídico con conocimiento de su existencia.
(ii) Procede únicamente en los casos especialmente previstos por la ley.
(iii) La lesión sólo puede ser alegada cuando es enorme o grave, es decir, cuando
supera los límites de desproporción económica admitidos por la ley.

II. CASOS EN QUE SE ADMITE LESIÓN ENORME.

Nuestro legislador admitió la figura de la lesión enorme en casos excepcionales,


contemplando en cada uno de ellos la sanción aplicable. Es decir no existe una sanción
única para todos los casos de lesión enorme aceptados por el legislador.

La lesión enorme es irrenunciable. Así lo señala el artículo 1.892 del C.c. para el contrato
deL contrato de compraventa, disposición que se extiende a todos los actos en que se
admite la lesión.

A. COMPRAVENTA Y PERMUTA DE BIENES RAÍCES.

La lesión enorme procede en la compraventa voluntaria de bienes raíces (artículo 1.888


del C.c.). No se aplica a la compraventa de bienes muebles ni a la compraventa que se
efectúa por ministerio de la justicia o ventas forzadas (artículo 1.891 del C.c.).

Lesión enorme del vendedor.

El vendedor sufre lesión enorme cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del
justo precio de la cosa que vende. En tal caso, el comprador podrá a su arbitrio consentir

42
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

en la rescisión (nulidad relativa) o completar el justo precio con deducción de una décima
parte (artículos 1.889 y 1.890 del C.c.).

Ejemplo: J.J. (vendedor) y L.L. (compradora) celebran un contrato de compraventa sobre


un inmueble cuyo justo precio es de $10.000.000. Acuerdan que L.L. pagará por el
inmueble la suma de $4.000.000.

El precio es inferior a la mitad del justo precio de la cosa. L.L. puede optar por consentir
en que se declare la nulidad relativa de la compraventa o completar el justo precio con
deducción de una décima parte ($9.000.000), es decir, debe pagar $5.000.000.

Obsérvese que de haberse vendido el inmueble en $1.000.000 más, no habría existido


lesión. Existiendo lesión si L.L. no quisiera la nulidad relativa del acto, debe pagar una
diferencia de $5.000.000. Podría afirmarse entonces que para determinar la existencia de
la lesión, el legislador admite una desproporción mayor que la que acepta para aplicar la
sanción.

Lesión enorme del comprador.

El comprador sufre lesión enorme cuando el justo precio de la cosa que compra es inferior
a la mitad del precio que paga por ella. En tal caso, el vendedor podrá a su arbitrio
consentir en la rescisión (nulidad relativa) o restituir el exceso del precio recibido sobre el
justo precio aumentado en una décima parte (artículos 1.889 y 1.890 del C.c.).

Ejemplo: J.J. (vendedor) y L.L. (compradora) celebran un contrato de compraventa sobre


un inmueble cuyo justo precio es de $4.000.000. Acuerdan que L.L. pagará por el
inmueble la suma de $10.000.000.

El justo precio es inferior a la mitad del precio que se paga por la cosa. J.J. puede optar
por consentir en la nulidad relativa o restituir el exceso del precio recibido sobre el justo
precio aumentado en una décima parte ($4.400.000). Es decir debe restituir $5.600.000.

En virtud del artículo 1.900 del C.c., la lesión enorme también se aplica a la permuta de
bienes raíces.

B. CLÁUSULA PENAL ENORME.

Se entiende por cláusula penal la avaluación anticipada que las partes hacen de los
perjuicios derivados del incumplimiento o del cumplimiento tardío de una obligación. Se
trata de una avaluación convencional y anticipada de perjuicios.

Por ejemplo, en un contrato de compraventa cuyo precio, ascendente a $6.000.000, se


pagará dentro de 2 años, las partes pueden establecer que el incumplimiento en el pago
del precio dará derecho a solicitar una indemnización de $10.000.000.

43
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Tratándose de los contratos conmutativos en que la obligación principal es de cantidad


determinada y la pena también consiste en una cantidad determinada, la pena no puede
exceder al duplo de la obligación principal incluida ésta en él. En el ejemplo anterior, la
pena no podría superar los $12.000.000 (artículo 1.544 del C.c.)27.

Tratándose de obligaciones de valor inapreciable o indeterminado, toca al juez moderar la


pena, cuando atendidas las circunstancias pareciere enorme (artículo 1.544 del C.c.).

En caso de superarse los límites admitidos, la pena deberá rebajarse.

C. ACEPTACIÓN DE UNA HERENCIA.

Conforme al artículo 1.234 del C.c., si por disposiciones testamentarias de que no se tenía
noticia al momento de aceptar la herencia, la asignación se disminuye en más de la mitad,
podrá declararse la nulidad relativa de la aceptación.

D. PARTICIÓN DE BIENES.

De acuerdo al artículo 1.348 del C.c., quien en una partición es perjudicado en más de la
mitad de la cuota puede alegar la nulidad relativa del acto.

E. MUTUO CON INTERESES.

El máximo de interés que se puede estipular en el mutuo es el interés corriente


aumentado en un 50% (interés máximo convencional). Si se pacta un interés superior a
éste se rebaja al interés corriente (artículo 2.206 del C.c. y artículo 8 de la Ley
Nº18.010)28.

F. ANTICRESIS.

A la estipulación de intereses en la anticresis (definida en el artículo 2.435 del C.c.) se le


aplica la misma regla del mutuo (artículo 2.443 del C.c.).

Cabe señalar que algunos autores incluyen como caso de lesión el contrato de sociedad
en virtud de lo señalado por el artículo 2.067 del C.c.

Finalmente se hace presente que en algunas legislaciones del Derecho Comparado la


lesión se concibe con un criterio subjetivo, calificándose como un vicio del consentimiento.
En tales casos, existe lesión siempre que la desigualdad de las prestaciones provenga de
la inexperiencia, ignorancia o necesidad de una de las partes.

27
Se hace presente que existen varias teorías en cuanto a la interpretación de la norma. Se ha
optado por la posición mayoritaria.
28
El artículo 1.544 del C.c. da una regla diversa. Señala que el interés se rebaja al máximo
convencional. Se ha dicho que esa norma se refiere a los intereses que se cobran por la mora del
deudor. Los intereses por el uso se rebajarían al interés corriente.

44
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

CAPACIDAD DE EJERCICIO

I. INTRODUCCIÓN.

Previo al estudio de la capacidad como requisito de validez de los actos jurídicos debe
recordarse la distinción entre capacidad de goce y capacidad de ejercicio.

La capacidad de goce (o capacidad adquisitiva) es la aptitud para adquirir derechos (para


ser titular de éstos) y ser sujeto de obligaciones. La capacidad de goce y la personalidad
son dos conceptos que se confunden.

No debe ser confundida con la capacidad de ejercicio, también denominada capacidad de


obrar, que consiste en la capacidad o aptitud para ejercer los derechos y contraer
obligaciones por sí mismo.

De acuerdo al artículo 1445 del Código Civil, la capacidad de ejercicio se concibe como el
poder obligarse por sí mismo sin el ministerio o autorización de otra persona.

En general se traduce en la capacidad de contratar.

La capacidad debe existir al momento de celebrar el contrato o de ejecutar el acto.

La capacidad de ejercicio supone la de goce. En cambio, la capacidad de goce no supone


la de ejercicio. La capacidad de ejercicio no es un atributo de la personalidad como lo es
la capacidad de goce.

II. LA CAPACIDAD DE EJERCICIO ES LA REGLA GENERAL.

La capacidad de ejercicio constituye en nuestro derecho la regla general. La incapacidad


es la excepción.

Así está expresado en el artículo 1446 del Código Civil al señalar que “toda persona es
legalmente capaz, excepto aquellas que la ley declara incapaces”. Esta norma es
reiterada en otras disposiciones del Código Civil relativas a contratos particulares, por
ejemplo, en la compraventa (artículo 1795).

En razón del carácter excepcional de la incapacidad, los autores concluyen que ella no
puede presumirse y que debe interpretarse de manera restrictiva.

III. CLASES DE INCAPACIDAD.

Las incapacidades son de dos tipos: (i) incapacidad absoluta; e; (ii) incapacidad relativa
(artículo 1447 del Código Civil).

45
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Tanto la incapacidad absoluta como relativa son incapacidades generales. Estos


incapaces no pueden celebrar válidamente ningún acto jurídico, salvo los que la ley
exceptúa. Existen también incapacidades particulares o especiales.

A. INCAPACIDADES GENERALES.

A.1 INCAPACES ABSOLUTOS.

Son incapaces absolutos los dementes, los impúberes y los sordos o sordomudos que no
pueden darse a entender claramente.

Los actos que estas personas ejecuten o celebren adolecen de nulidad absoluta (artículo
1682 del Código Civil), no producen obligaciones naturales ni admiten caución (artículo
1447 del Código Civil).

Los incapaces absolutos deben actuar representados (artículo 43 del Código Civil).

(i) Dementes.

Para la siquiatría la demencia es una forma particular de enajenación mental. Sin


embargo, nuestro legislador no consideró el sentido técnico del término (artículo 21 del
Código Civil).

Por tanto, por demente debe entenderse todo individuo que adolezca de una enajenación
mental que lo prive de razón, de su sano juicio y discernimiento.

No es necesario que el demente esté en interdicción. Sin embargo, el decreto de


interdicción tiene importancia para efectos de la prueba (artículo 465 del Código Civil).

Si existe decreto de interdicción, quien alega la nulidad de un acto ejecutado por un


demente no necesita probar la demencia. De lo contrario se presume que el acto del
incapaz es válido y quien solicita su nulidad deberá probar que el individuo estaba
demente al momento de ejecutarlo. Los efectos de la interdicción subsisten durante los
intervalos lúcidos y aún después que ha cesado la enfermedad mientras el demente no
obtenga su rehabilitación por sentencia firme (artículo 468 del Código Civil).

Podría estimarse que la expresión demente comprende, por ejemplo, a quienes se


encuentran en estado de ebriedad, sonambulismo, etc. Pero propiamente aquí hay falta
de consentimiento para celebrar el acto y no demencia (el efecto, en todo caso es el
mismo, la nulidad absoluta).

(ii) Impúberes.

Son impúberes los varones que no han cumplido catorce años y la mujer que no ha
cumplido doce (artículo 26 del Código Civil).

46
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Se relaciona supuestamente con la capacidad de procreación.

Los infantes son una especie de impúberes (menores de siete años, artículo 26 del
Código Civil)29.

(iii) Sordos o sordomudos que no pueden darse a entender claramente.

Hasta el día 3 de octubre de 2003, el artículo 1447 del Código Civil declaraba incapaces a
los sordomudos que no pueden darse a entender “por escrito”. De esta manera, los
sordomudos que podían darse a entender por lenguaje de señas o de cualquiera otra
forma estaban imposibilitados de actuar en la vida del derecho.

La ley Nº 19.904 publicada en el Diario Oficial el 3 de octubre de 2003 modificó esta


norma en el sentido indicado, derogando disposiciones que se estimaban discriminatorias
y anacrónicas con la realidad de los tiempos.

A.2 INCAPACIDAD RELATIVA.

Son incapaces relativos (i) los menores adultos; y, (ii) los disipadores que se hallen en
interdicción de administrar lo suyo.

Los incapaces relativos pueden ejecutar ciertos actos por sí mismos, por ejemplo, el
matrimonio (aunque discutible), el testamento, el reconocimiento de un hijo, etc.

El artículo 1447 establece además que sus actos pueden ser válidos si los celebran en
ciertas circunstancias y bajo ciertos respectos determinados por las leyes. De lo contrario
sus actos adolecen de nulidad relativa y producen en ciertos casos obligaciones naturales
(artículo 1470 Nº1 del Código Civil).

Los incapaces relativos actúan representados o autorizados por sus representantes


legales.

(i) Menores adultos.

Son menores adultos los varones mayores de 14 y menores de 18 años y las mujeres
mayores de 12 y menores de 18 años (artículo 26 del Código Civil).

(ii) Disipadores que se hallen en interdicción de administrar lo suyo.

29
El concepto de impúberes tiene importancia en materia posesoria y en materia de
responsabilidad extracontractual (artículos 723 y 2.319 del Código Civil).

47
APUNTES DE CLASES
HECHOS JURÍDICOS
DERECHO CIVIL II 2004
PROF. ASTRID SCHUDECK D.

Pródigo o disipador es el que dilapida o malgasta sus bienes en forma imprudente. El


artículo 445 del Código Civil nos da algunos ejemplos.

Es indispensable que se halle en interdicción de administrar lo suyo.

B. INCAPACIDADES PARTICULARES.

Artículo 1447. Prohibición que la ley ha impuesto a ciertas personas para ejecutar ciertos
actos.

Esa incapacidad puede importar una prohibición absoluta para ejecutar ciertos actos o
bien la exigencia de celebrarlos con determinados requisitos. En el primer caso la sanción
es la nulidad absoluta (artículos 1466 y 1468 del Código Civil), en el segundo la relativa
(artículo 1682 del Código Civil).

Ver artículos 412 inciso 2, 1796, 1798 y 2144 del Código Civil.

La sanción puede ser otra si la ley así lo establece (artículo 10 del Código Civil). Véase
artículo 114 del Código Civil.

48

También podría gustarte