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AMPLIA TU PERSPECTIVA

Cómo ampliar tu alcance estratégico

Tu jefe sabe que eres bueno, pero te ha dicho que, para ascender, tienes que
ser más estratégico. ¿Qué quiere decir eso? Vamos a analizar tu dimensión
de negocios actual.Seguro que ya eres experto en un campo concreto. Te
has esforzado y ahora tienes un punto fuerte. Sin embargo, tanta
especialización puede ser la que te esté perjudicando. La perspectiva de los
líderes es más panorámica. Saben tomar distancia y ver la totalidad.
Para ser un líder estratégico, debes entrenar tu cerebro para que piense con
una lente gran angular. Veamos algunos ejemplos sobre este contraste. Los
jefes centran su atención en el rendimiento de sus empleados directos. Los
líderes buscan estrategias para desarrollar las habilidades de otros equipos
local y globalmente. Los jefes se ensimisman con los detalles y los plazos de
entrega. Los líderes entienden el nivel del detalle, pero lo equilibran con una
visión a largo plazo, las metas anuales y los planes de futuro.
Los jefes sienten un compromiso personal con el proyecto. Los líderes se
comprometen con el proyecto, los miembros del equipo y toda la
organización. De jefe a líder, la dimensión de trabajo sufre una gran
transformación. Para demostrar que ya eres un líder estratégico, amplía la
dimensión de tus procesos cognitivos en estas cuatro áreas. La primera es la
perspectiva organizativa. En vez de concentrarte en las actividades
cotidianas, ten en cuenta el plan general de la empresa.
Trata de pasar de concentrarte en los movimientos tácticos a participar en
las iniciativas estratégicas, como la sustitución de un sistema o la
implementación de un nuevo programa de compensaciones. Si quieres tener
más ocasiones para mostrarte como un estratega, tendrás que alterar las
cosas un poco. Busca un proyecto en el extranjero, postúlate para
completar un programa rotativo, ofrécete para gestionar una red de
proveedores.
Es decir, amplía tus horizontes.
La segunda área es la perspectiva de mercado. Conoce a fondo la posición
de la empresa en el mercado. Estudia a los competidores: su tamaño, su
participación en el mercado y sus propuestas de valor. ¿Hasta dónde llegó tu
empresa? Conviértete en la persona que quiere llevarla más allá. La tercera
es la perspectiva del cliente. Profundiza en la comprensión de tus clientes.
Ponte en su lugar. Observa cómo utilizan tus productos, cómo aplican tus
servicios y cómo interactúan con tus empleados. ¿Qué significa para ellos
hacer negocios con tu empresa? Sabiendo esto, antes de sacar la nueva
versión de tu producto, te anticiparás a las necesidades de cambio del
cliente. La última área es el contexto económico. Considera las
consecuencias financieras de tus gastos más allá del impacto que causan en
el presupuesto trimestral de tu departamento.
Piensa en tus gastos como si fueras el director ejecutivo. ¿Existe alguna
forma de ahorrar mediante las economías de escala? ¿Podrías gastar más
ahora para aumentar los beneficiosa final de año? Si cambias la envergadura
de tus razonamientos sobre el presupuesto, dejarás ver que estás listo
para tener éxito a un nivel superior. Si amplías tu perspectiva en estas
áreas, mostrarás un perfil más estratégico, y los que te rodean te verán como
un líder.

Aprende a innovar

Los juegos de realidad virtual y los drones que entregan tus pedidos, por
ejemplo, son grandes innovaciones, pero ¿qué quiere decir ser un líder
innovador? Veamos los atributos de los líderes innovadores, y cómo puedes
incorporarlos a la estrategia para ampliar tu perspectiva a gran
angular. Primero, debes tener en cuenta que la innovación no es una
tarea que puedas programar. «El martes tenemos una reunión a las tres para
ser innovadores». Pueden hacer una lluvia de ideas, pero la
verdadera innovación no funciona así.
Es una forma de pensar que influye en toda nuestra actitud. Un líder
innovador está dispuesto a ver cualquier elemento desde una nueva
perspectiva, incluso si tiene que olvidarse de lo que sabía y probar lo
novedoso. Nada se excluye. Segundo, un líder innovador se siente cómodo
pensando en el futuro. No le da miedo dejar que su imaginación fluya. Así
tiene una visión clara de lo qué pasará en un año, en cinco o en 10.
Es un pensamiento creativo, pero enfocado a los objetivos
empresariales. Tercero, los líderes innovadores también saben ver el valor de
una nueva idea sin atascarse en los detalles. Muchas veces, mientras un
gerente considera un nuevo enfoque, su lado práctico interviene
automáticamente: «No encaja con nuestro presupuesto, con nuestra fecha o
nuestros recursos». El problema logístico no le deja ver las ganancias
potenciales. Un líder innovador sabe cómo acallar ese lado práctico mientras
analiza las opciones e identifica las oportunidades con más fácilidad.
Donde los demás solo ven obstáculos, él encuentra cómo dar un
rodeo. ¿Cómo cambiar tu actitud para convertirte en un líder
innovador? Primero, date el espacio para identificar las ideas
innovadoras. Lee, haz preguntas, piensa en los problemas más allá de tu
fecha de entrega. Esfuérzate por traspasar los límites y conviértete en esa
persona innovadora que fomenta los grandes cambios dentro de la
organización.
Segundo, no trates de crear lo nunca antes visto. Algunas de las mejores
innovaciones surgen de la reutilización de estrategias, metodologías y
soluciones ya demostradas. Tercero, arriésgate más y persiste. Traspasa
los parámetros usuales para dar con ideas inesperadas. No todas
funcionarán, pero no pasa nada. Ajústalas y sigue intentándolo.
El fracaso puede acercarte a tu próximo éxito. Cuarto, comparte y optimiza
la información. Recopila todos los datos que puedas y conéctalos de
forma inesperada. Comparte con tus compañeros lo que haces y aprende
de sus éxitos y sus errores. La comunicación abierta y el intercambio de
información continuo te ayudarán a estimular el pensamiento inventivo.
Quinto, vincula tus ideas innovadoras a los objetivos empresariales.
Ocúpate de que los cambios en el producto y los nuevos procesos se
relacionen con las metas y el posicionamiento de marca de tu
organización. ¿Esta idea ayuda a crear consciencia, a aumentar la
participación en el mercado y a ganar la fidelidad del cliente?Asegúrate de
que las ideas estén arraigadas en los beneficios comerciales. Sexto, al
presentar tus ideas, sé persuasivo. Enfatiza los beneficios que se
conseguirán.

Mejora tu proceso de toma de decisiones

En la película «Moneyball», un equipo de béisbol bastante mediocre tiene


éxito gracias a su sabia toma de decisiones. Los otros equipos medían el
éxito con indicadores tradicionales como los homeruns y las carreras
impulsadas. Ellos introdujeron un patrón nuevo de medida
que estadísticamente debía llevar a ganar más partidos y funcionó. Es una
película, pero nos muestra una importante lección empresarial. Solo porque
una decisión se haya tomado siempre de la misma forma no quiere decir
que sea la mejor forma de hacerlo.
Una de tus tareas como jefe es tomar decisiones. Los líderes se enfrentan a
las elecciones de forma distinta. No posponen ni procrastinan. No se
obsesionan con el miedo a cometer errores. Aquí tienes las cuatro medidas
que adopta un líder al tomar una decisión. Primera, un líder tiene en
cuenta un amplio rango de posibilidades, basadas en su perspectiva
más amplia. Si se esforzó para posicionarse como líder, tendrá mucho
conocimiento de causa, lo que supone una gran ventaja.
Segunda, un líder piensa en el impacto que causan sus decisiones, tanto
en la empresa, como en los resultados, los clientes, los empleados, e
incluso los competidores. ¿Cuál es el impacto inmediato? ¿Cuáles son las
implicaciones y las consecuencias a largo plazo? Tercera, al tomar
decisiones, un líder es decisivo y atrevido pero sabe también detenerse
si una pausa supone una ventaja. Quizás conviene esperar a tener nueva
información, al anuncio de un competidor o a un avance tecnológico.
Esa pausa podría ser trascendental. Cuarta, un líder aplica un proceso o un
modelo estructurado que orienta su forma de pensar y su toma de
decisiones, pero se atreve a cambiar los los indicadores sin miedo o a
enfocar el análisis de manera innovadora, si es necesario. Estos son algunos
modelos que existen para tomar buenas decisiones. El más popular es el
análisis de rentabilidad o de costo-beneficio, que consiste en evaluar la
viabilidad financiera de la elección potencial o la iniciativa que estés
considerando.
Analiza los posibles resultados. Económicamente, ¿esta elección tiene
sentido? El análisis de los riesgos es un planteamiento estructurado que
evalúa los problemas potenciales de una opción particular. Te permite
calcular la probabilidad de un resultado negativo y estimar el costo de
resolverlo o de gestionar una solución. La matriz de toma de decisiones o el
árbol de decisiones son formas exactas y fiables de visualizar los
factores relacionados con la decisión.
Si deseas tener más información sobre estos modelos, en nuestra biblioteca
tienes varios cursos, como «Gestión de proyectos: Riesgos» y «Pensamiento
crítico». Además de utilizar estos modelos, un líder exitoso tiene la
disciplina de plantear las alternativas con un alcance estratégico. Siempre
toma decisiones inteligentes haciendo las preguntas adecuadas. Estas son
algunas de ellas. Las tienes disponibles en los archivos base. ¿Esta iniciativa
concuerda con nuestra misión, nuestra marca y nuestro
posicionamiento competitivo en el mercado?¿Existen implicaciones legales,
regulatorias o contractuales? ¿Cuáles son los beneficios y los riesgos
potenciales asociados a esta decisión? La transición de jefe a líder implica
que actualices tus procesos de toma de decisiones.
Si amplías tu perspectiva con un perfil más estratégico e innovador, estarás
preparado para tomar el tipo de decisiones que te llevarán al éxito.
Despliega tu talento

Está claro que para ser un estratega más innovador, tienes que esforzarte,
pero la prueba de fuego de un líder es su capacidad de conseguir que los
demás tengan éxito, de ayudarlos a fortalecer sus habilidades para
que formen un equipo fuerte y una empresa productiva. Un buen líder sabe
cómo desplegar el talento. Vamos a verlo. Un buen líder tiene una gran
habilidad para atraer, contratar y capacitar empleados que formarán equipos
dinámicos. Un jefe tiende a dedicar más tiempo a corregir o formar, mientras
que un líder sabe cuándo pasar a ser un asesor.
Invierte mucho más en sus empleados, y como consecuencia, en el
rendimiento del equipo. Que un equipo destaque, innove y tenga éxito es un
indicativo de que detrás tiene un gran líder.

¿Cómo puedes convertirte en un líder que asesora y guía a sus


empleados para que tengan más éxito? Vamos a ver cinco consejos.
Primero, conoce a tus empleados y demuéstrales que te preocupas por ellos.
Identifica sus puntos fuertes y los más problemáticos. Interésate por sus
objetivos y aspiraciones. Escúchalos cuando hablan y hazles preguntas
sobre sus deseos y necesidades. Con esta información, podrás personalizar
tus sesiones de desarrollo con cada empleado. Tu objetivo es generar
confianza y ayudar a tus empleados a impulsar su carrera.

Segundo, en tus sesiones de asesoramiento, utiliza estas tácticas


específicas. Hazle preguntas para asegurarte de que entiendes el contexto
de sus problemas. Incítalo a identificarlos y explorar sus oportunidades. No
juzgues, y muestra una actitud positiva. Juntos, establezcan objetivos de
progreso. Utiliza estas tácticas, pero adapta el enfoque dependiendo del
empleado al que asesores.

Tercero, desafía su forma de pensar. Evita la tentación de decirle


exactamente lo que tiene que hacer. Puedes dirigirlo hacia la solución
haciendo preguntas inteligentes. Impúlsalo a desarrollar sus propios
enfoques y comportamientos, y ten paciencia mientras implementa las
nuevas estrategias.

Cuarto, después de la sesión de asesoramiento, dale los recursos que


necesita para reforzar su crecimiento. Por ejemplo, acceso a cursos de
desarrollo profesional, seminarios web, grupos rotativos, otro mentor o más
tiempo de tu parte.
Tiene que seguir trabajando, y es fundamental que cuente con lo que
necesita para mejorar sus capacidades.

Por último, vincula el proceso de asesoramiento con los resultados. Deja


claro que los resultados son importantes, y ayúdalo a hacer un seguimiento
de su progreso. Tu tarea es ofrecer un feedback continuo. Así el proceso no
se detiene. Aquí tienes algunas preguntas que puedes utilizar como
guía para la sesión de asesoramiento.

Lo que consigues con la sesión es ir a la inversa al abordar un problema con


el empleado. Guíalo para llegar a conocer el resultado deseado, y vayan
retrocediendo para saber con qué medidas conseguirá ese resultado. Estas
son algunas de las preguntas que puedes hacer. ¿Puedes hablarme de esta
situación? ¿Cuál crees que es el problema? ¿Qué resultado quieres
conseguir? Estas son algunas opciones para iniciar la conversación. Si quieres
profundizar más, descarga el archivo con la lista de preguntas para asesores.
Cambiar de jefe a líder incluye muchos elementos de autoconocimiento y
disciplina, pero cuando seas un experto y ayudes a los demás a crecer
asesorándolos para ampliar su rendimiento, estarás bien encaminado hacia
el éxito como líder.

Consigue las condiciones propicias para el éxito del equipo

No es suficiente con que un emprendedor tenga una buena idea. Su éxito


dependerá de la calidad del equipo de desarrollo, de una oferta competitiva,
un marketing que conecte con el cliente y un modelo de negocio
escalable. para que se dé el éxito, las condiciones tienen que ser las
apropiadas. Lo mismo ocurre cuando lideramos un equipo exitoso. Aunque
los empleados de nuestro grupo tengan mucho talento, si queremos que
crezcan y prosperen como equipo, tenemos que propiciar las condiciones
adecuadas.
¿Qué conseguimos si hacemos bien esto? Más colaboración, un mejor
rendimiento y unos resultados óptimos. Los gerentes no siempre entienden
esto, pero los líderes sí.

Veamos seis formas de cultivar esas condiciones que permiten que el equipo
tenga éxito. Primero, comunícate con tus empleados de manera
abierta, personalmente y como grupo, y sé coherente con tus palabras, el
tono y el lenguaje corporal.
Envía el mismo mensaje verbal y no verbal, y que sea coherente con tus
valores. Implícate en tus conversaciones. Demuestra que escuchas y
comprendes. Un líder debería ser auténtico, pero también debe mostrar una
conducta firme que ofrezca estabilidad en cualquier situación. Todos
tenemos un mal día. La diferencia es que el líder debe mostrar siempre
profesionalismo. Al interactuar con tu equipo, sé sincero y transparente.
Explica por qué se tomó esa decisión o se cambió esa
estrategia. Compartiendo más contexto conseguirás confianza y respeto, y
si tus empleados entienden por qué quieres que hagan algo y no solo les
pides que lo hagan, aprobarán tus objetivos.

Segundo, anima e inspira a los miembros de tu equipo para que


actúen. Puede resultar difícil, sobre todo si eres introvertido. No te digo que
de repente seas gritón y sobreexcitado.
Muéstrate como eres, pero sal de tu zona de confort lo suficiente como para
transmitir tu propio tipo de entusiasmo, que le dé al equipo el impulso que
necesita.
Tercero, descubre qué motiva a cada uno de tus empleados. Puede que
necesitan felicitaciones, un apoyo silencioso, o saber que tendrán más
responsabilidades. Todos tenemos un lenguaje de recompensas
distinto. Habla ese idioma fluidamente.
Muestra tu agradecimiento de manera que cada uno de ellos se sienta
valorado. Uno de los motivadores suele ser la flexibilidad. La opción de
trabajar desde casa, de reducir horas y evitar la hora pico con un horario
flexible… Tus empleados serán más productivos si se pueden centrar en los
objetivos y no en las horas de trabajo.

Cuarto, fomenta la voluntad de arriesgarse. Dale a tu equipo la libertad de


implementar nuevas estrategias y soluciones, aunque alguna pueda fracasar.
Cuando le das espacio al pensamiento creativo, aunque salga mal, es más
probable que tu equipo descubra soluciones únicas. No siempre es
fácil. Muchas veces los riesgos son elevados y tendrás que intervenir, pero
un entorno que permite el fracaso es tierra fértil para el crecimiento.

Quinto, busca la diversidad para inculcar perspectivas frescas en tu


equipo. Contrata y apoya a la gente que no siempre comparte la opinión o
las habilidades de tu equipo.
Permite que se cuestione el enfoque de tu equipo para ampliar su
pensamiento. Pon a prueba sus razonamientos. Obtener otras perspectivas
puede ser la chispa que tu equiponecesita para innovar a gran escala. Por
último, compórtate como ejemplo para tu equipo.Dirígelo con pasión y sirve
como modelo del tipo de comportamiento que quieres que
imiten. Prepárate y comprométete con estas medidas. Trabaja para sentirte
cómodo hablando delante de ellos, con un tono que aúne la autoridad con
la humildad.
Y cuando el equipo se enfrente a las adversidades, recuérdales que su
trabajo hace la diferencia, que agradeces su contribución, valoras sus
habilidades y confías en su esfuerzo.Si desarrollas las condiciones propicias
para que el equipo crezca, serás un líder respetado que sabe lo que se
necesita para llevar el éxito al máximo nivel.

Crea conexiones significativas


Analiza la diferencia. Eliges la oferta básica del servicio de distribución por
cable y tienesacceso a seis canales locales. Después, te decantas por la oferta
premium, y pasas a tener 5000 canales. Películas, música, aplicaciones
interactivas. Todo el paquete. Ya no tienes límites. Tienes acceso a todo,
todo un mundo de información y entretenimiento. Así funciona con los
líderes.
No se limitan a sus contactos básicos. Quieren ir más allá de los límites y
obtener los beneficios de una red mucho más amplia.

Un jefe se concentra en formar equipos de alto rendimiento. Un líder


también lo hace, pero además amplía su compromiso con el personal y las
relaciones más allá. Establece conexiones más significativas con sus
compañeros, con los que deciden, con sus mandos superiores y otros
empleados de dentro y fuera del sector.

¿Por qué esto es fundamental? Tener una red de contactos permite a los
líderes ampliar sus niveles de conocimiento. Estimula su pensamiento de
formas inesperadas, les da acceso a recursos importantes que de otra
manera no tendrían, y establece una base más amplia de apoyo para
alcanzar sus metas.
Aquí tienes cuatro formas de ampliar tu red de contactos para ser un líder
con recursos. Primero, invierte tiempo en establecer contacto con gente
externa a tu equipo y piensa estrategicamente.
Asiste a conferencias y seminarios, participa en los eventos del sector. No
seas tímido y preséntate, habla y participa en las conversaciones. Aumenta
tu visibilidad más allá de los confines de tu organización. Segundo,
desarrolla y nutre tus relaciones profesionales, las nuevas y las
antiguas. Comenta las publicaciones de LinkedIn de tus contactos, y cuando
los asciendan, dales la enhorabuena. Mantente presente en su radar.
Cuanta más gente esté entre tus conexiones, mayor será tu red de
conocimiento y de oportunidades. Tercero, cuando llegue la hora de pedir
ayuda o consejo a un contacto, sé respetuoso y amable. Esto es
importante. Ten en cuenta sus tiempos y compromisos, y si no pueden
ayudarte, no dejes que la relación se deteriore. Si manejas las situaciones de
manera profesional, darás una impresión positiva y será más probable que te
apoyen.
También ocurre lo contrario. Cuando tus contactos te llamen para pedirte
ayuda, esfuérzate para hacerlo. Sé el tipo de líder que está dispuesto a
compartir y devolver. Por último, aprovecha la sabiduría de un consejero de
confianza. Relaciónate con un profesional de nivel superior o un
compañero que te pueda orientar para hacer avanzar tu carrera. No
subestimes el valor de una persona que te ayude a navegar en las aguas
políticas, a tomar decisiones estratégicas sobre las oportunidades, que te
ofrezca feedback cuando lo necesites y te anime continuamente.
Un consejero de confianza, alguien que se preocupa por ti y tu éxito puede
prepararte para el liderazgo mejor que nadie. Si amplías tu red de contactos
y priorizas las relaciones,estarás asentando las bases para el éxito.

TEST COMPROMÉTETE CON LAS PERSONAS Y LAS RELACIONES

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