Está en la página 1de 109

Traducción de Josep M.

Pinto

Diseño de cubierta: Valerio Viano

Ilustraciones de cubierta: Héléne Crochemore

Distribución exclusiva:
Ediciones Paidós Ibérica, S.A.
Mariano Cubí 92 - 08021 Barcelona - España
Editorial Paidós, S.A.I.CE
Defensa 599 - 1065 Buenos Aires - Argentina
Editorial Paidós Mexicana, S.A.
Rubén Darío 118, col. Moderna - 03510 México D.E - México

Quedan rigurosamente prohibidas, sin la autorización escrita de los titulares


del copyright, bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción total
o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la
reprografía y el tratamiento informático, y la distribución de ejemplares de
ella mediante alquiler o préstamo públicos.

© 1999, editions Jean-Claude Lattés

© 2001 exclusivo de todas las ediciones en lengua española: Ediciones


Oniro, S.A.
Muntaner 261, 3.° 2.a - 08021 Barcelona - España (e-
mail:oniro@ncsa.es)

ISBN: 84-95456-51-6 Depósito


legal: B-6.046-2001

Impreso en Hurope, S.L. Lima, 3 bis -


08030 Barcelona

Impreso en España - Printed in Spain

Título original: Au coeur des emotions de ¡'enfant Publicado en


francés por Editions Jean-Claude Lattés
Dices que cansa estar con niños. Tienes razón. Añades que te
cansa porque tienes que ponerte a su nivel, agacharte, inclinarte,
arrodillarte, hacerte más bajito.Te equivocas. No es eso lo que cansa
más. Más bien es el hecho de verte obligado a elevarte hasta la altura
de sus sentimientos. Estirarte, alargarte, ponerte de puntillas. Para no
herirles.

A mi padre, JANUSZ KORCZAK


que militaba y sigue militando contra la utilización de la palabra «educar» y
prefería «acompañar» a sus hijos. Marcado todavía por la violencia de sus
padres hacia él, no siempre logró estar «con» sus hijos, pero ha sabido estar
«para» sus hijos. Me ha querido, respetado y considerado como una persona,
ha sabido darme lo que él no había recibido.

A Margot y Adrien,
que han hecho de mí una madre.

A Suos Pom, comadrona, al profesor Bíziau y a Corinne Drescher-Zaninger,


obstetras, que han acompañado los momentos de felicidad más intensos de
mi vida.

A la LLL Leche League* y a su presidenta, Claude Didierjean-Jouveau, que


me ayudó a dar el pecho a mis hijos y que de este modo me abrió la puerta a
una fabulosa dimensión de intimidad.

* «La Leche League» (LLL) es una asociación que desarrolla sus actividades
en ciertos países francófonos y cuya finalidad es promover la lactancia materna. La
LLL ha adoptado para su pmpio nombre la traducción en castellano del francés
«Le Lait», y asi se presenta en todos los países en los que actúa. (N. del T.)
ÍNDICE

Agradecimientos ................................................................. 13
Introducción ....................................................................... 15

1. ¿Podemos desarrollar el coeficiente emocional


de nuestros hijos? .................................................. 23
La inteligencia del corazón ..................................... 23
Desarrolla tu confianza ........................................... 24

2. Siete preguntas que puedes plantearte para


responder a (casi) todas las situaciones ... 29
¿Cuáles son sus vivencias? ...................................... 30
¿Qué dice? .................................................................... 34
¿Qué mensaje deseo transmitirle? ............................. 37
¿Por qué digo esto? ................................................. 40
¿Mis necesidades son incompatibles con las de
mis hijos? ............................................................ 44
¿Qué es lo más valioso para mí? ............................... 50
¿Cuál es mi objetivo? ............................................. 53
Siete preguntas para guardar en la memoria .... 57

3. La vida es moción ................................................. 59


¿Quién soy? Un ser de emoción ............................. 60
«Entonces, ¿se les debe dejar hacer de todo» ... 62
«No le entiendo» .................................................... 67
10 El mundo emocional del niño índice 11

La represión emocional ........................................... 74 El fracaso escolar, un síntoma .................................. 176


Contener sin reprimir ............................................... 84 ¿Es depresivo? ........................................................ 178
«¡Me irrita con sus tonterías!» ................................. 92
9. La vida no es un camino de rosas ........................... 181
4. El miedo ................................................................. 99 ¿Es preciso endurecerse para atravesar las experiencias
¿Debemos escuchar su miedo? ............................... 99 difíciles? ............................................................... 181
Los miedos más frecuentes ..................................... 102 Las separaciones ..................................................... 184
Atravesar el miedo ................................................... 116 La llegada de un recién nacido ............................... 195
Utilizar el «miedo escénico» .................................... 122 Las disensiones en la pareja ..................................... 197
¿Es miedoso? ............................................................ 124 El divorcio ............................................................... 198
Los accidentes, la enfermedad, el sufrimiento . . . 205
5. La cólera está al servicio de la identidad 129
La cólera es una reacción sana .................................. 129 10. Algunas ideas para vivir más feliz con tus
Descifrar la necesidad ............................................. 135 hijos ........................................................................ 207
Una reacción fisiológica que debe Sé feliz .................................................................... 207
acompañarse ...................................................... 137 Escucha ................................................................. 211
Cuando los padres están enfadados ......................... 141 Comunica con el cuerpo, el corazón, la cabeza,
Trucos para evitar la violencia en el momento en y de persona a persona ........................................ 215
que tenemos ganas de pegar ............................... 147 Siente la felicidad de ser padre ............................... 217
¿Es colérico? ........................................................... 148
Conclusión ........................................................................ 219
6. La alegría ................................................................ 153 Bibliografía ........................................................................ 221
¿Se puede aprender a sentir la felicidad de vivir? . 153 Apéndice ............................................................................ 223
El amor ................................................................... 157
Juegos, gritos y risas ................................................ 158
Acompañar la alegría ............................................. 160

7. La tristeza .............................................................. 163


Las lágrimas nos conmueven .................................. 163
La nostalgia ........................................................... 169
Acompañar la tristeza ............................................. 172

8. La depresión ............................................................ 173


¿Cómo detectarla? .................................................... 173
Agradecimientos

Gracias a todas las personas que han hecho este libro, a todas las que
me han inspirado, me han planteado preguntas y me han obligado a
pensar, a todos los padres que me han hecho partícipes de sus
experiencias, a todos los niños que me han confiado su historia. Los
ejemplos proceden de mi práctica profesional, de mi vida personal o
de la de mis amigos.
Gracias a Marianne Leconte, que ha creído en mí y me ha
ayudado, más de lo que imagina, a llevar a la luz y a perfeccionar mis
cualidades como escritora.
Gracias a mi padre y a mi madre por su relectura atenta del
manuscrito, pero sobre todo por haberme escuchado y respetado
siempre.
Gracias a Patrice Le Bon por su apoyo, su confianza y su exi-
gencia.
Gracias a Jean Bernard, a Adrien y a Margot Fried por su amor.
Introducción

Poseer la inteligencia del corazón es saber amar, comprender al


prójimo, realizarse, ser uno mismo en todas las circunstancias y re-
accionar en las situaciones emocionalmente difíciles: conflictos,
fracasos, duelos, separaciones, experiencias duras, pero también
éxitos, encuentros, triunfos de todo tipo. En suma, es la capacidad de
ser feliz, de no dejarse dominar por la adversidad, de elegir tu vida y
establecer relaciones armoniosas con los demás. ¿Quién no desearía
algo semejante para sus hijos?
¿Qué es lo que nos retiene en nuestra propia existencia y puede
impedirnos ser felices? ¿Qué es lo que puede provocar que un corazón
esté incapacitado? La memoria (a menudo inconsciente) de los
sufrimientos de la infancia y el miedo que se deriva: temor a ser
juzgado, herido, humillado, rechazado o ignorado, miedo a un fracaso
que cuestione nuestras capacidades de realización, miedo a un rechazo
que nos haga pensar que nuestro lugar no está entre los demás, temor
al otro, miedo a morir...
Puesto que son el miedo, el sufrimiento y la cólera adquiridos, y
no un defecto de nuestra constitución, los que pueden impedir que una
persona se muestre como es y establezca una relación justa con los
demás, puesto que es el temor o el dolor lo que inhibe, y no un
cerebro deficiente, podemos ayudar a nuestros hijos evitando herirles
y enseñándoles a confiar.
La sociedad actual ya no es la de ayer. Las fórmulas educativas
de ayer ya no son aptas.
16 El mundo emocional del niño Introducción 17

En la sociedad de hoy en día, y más aún en la de mañana, el heridos, intenciones mal entendidas, comportamientos mal inter-
camino del éxito pasa por la confianza en uno mismo, por la au- pretados... Las ocasiones de sufrimiento son numerosas en la relación
tonomía y la soltura relacional. Las aptitudes para comunicarse y el padres-hijos.
dominio de las emociones son ahora al menos tan importantes como El niño es una persona. La emoción se halla en el corazón del
las cualidades técnicas. Para triunfar en la vida personal o en la individuo, es la expresión de su Vida. Saber escucharla, respetarla, es
profesional, la inteligencia del corazón es más fundamental que escuchar a la persona, respetarla. A menudo, los padres se sienten
nunca. Alimentar el coeficiente intelectual de nuestros hijos es in- desamparados ante la intensidad de los afectos de sus niños, intentan
suficiente. Debemos preocuparnos de su coeficiente emocional. calmarlos, hacer callar sus gritos, sus lágrimas, la expresión de su
Además, numerosas dificultades intelectuales y escolares tienen su emoción. Ahora bien, la emoción tiene un significado, una intención.
origen en bloqueos emocionales. La emoción cura. Las descargas emocionales son el medio de liberarse
A ningún padre le gusta ver a su hijo apoltronado delante de la de las consecuencias de experiencias dolorosas. En cambio, tal como
tele o pegado ante la consola de videojuegos. ¿Cómo ayudar a ya expliqué en mi último libro, La inteligencia del corazón, la
nuestros hijos a resistir la invasión de las pantallas, a la proliferación represión de las emociones es nociva. Nos arrastra hacia toda clase de
de las consolas de juegos, televisores, videos, ordenadores, etc.? procesos defensivos, de repeticiones dolorosas, de compulsiones y de
¿Cómo ayudarles a resistir la violencia y el ritmo hipnótico del desfile síntomas físicos.
de imágenes de los juegos electrónicos, clips, anuncios, películas o Es urgente aprender a identificar, a nombrar, a comprender, a
programas de éxito, y hasta de los dibujos animados? expresar, a utilizar positivamente las emociones, so pena de con-
Ningún padre soporta la idea de que su hijo caiga en la violencia, vertirnos en esclavos de las mismas, por el bien de nuestros hijos y de
la bebida o la drogadicción. ¿Cómo armar a nuestros hijos frente a los adultos en que un día se convertirán.
estas tentaciones, cuando la violencia está presente hasta en las Hoy es sabido que todo lo importante pasa antes de los seis
escuelas, cuando el consumo de alcohol y de drogas afecta a los años... ¿Qué podemos hacer? ¿Qué no debemos hacer? ¿Y cómo?
jóvenes a una edad cada vez más temprana? Sobre todo, ¿cómo debemos ser? Los padres (responsables) se plan-
Ningún padre desea que su hijo se convierta en adepto a una tean muchas preguntas.
secta, y ceda su voluntad para seguir a ciegas a otra persona. ¿Cómo Desde el momento en que una mujer está embarazada, le llueven
dar a nuestros hijos la suficiente confianza en sí mismos, seguridad los consejos. Cada uno dice lo que piensa sobre la lactancia, sobre
interior y autonomía para que no haya riesgo de que sucumban a la cómo acostar y sobre «la manera de acostumbrar a los bebés» y, más
seducción de un gurú? tarde, sobre la autoridad, las bofetadas y los castigos... «Sobre todo no
Comportamientos violentos, dependencias relacionales, o debidas les dejes dormir en tu cama... Es preciso marcar los límites... Un bebé
a la televisión, a las drogas, a los medicamentos, son otros tantos necesita dormir... Un niño no debe jugar con muñecas... No debes
intentos de control de emociones que no se pueden administrar. Estos consolarles cuando se caen, pues de otro modo se convertirán en niños
síntomas arraigan durante la infancia. Ocultan carencias, heridas mal criados... Si le dejas hacer lo que quiere, le convertirás en un
relacionales, fracasos de comunicación. delincuente... Se tiene que hacer esto, no se tiene que hacer lo otro...»
La timidez, el menosprecio de uno mismo o, por el contrario, la Y esto no es más que el principio de una larga serie de «tienes que,
supervaloración, son los resultados de una historia. Sentimientos debes
18 El mundo emocional del niño Introducción 19
de...». Los padres acaban bien surtidos de consejos bien intencionados • Los padres pueden comprender a sus hijos y tener una actitud justa
y de «preguntas» llenas de segundas intenciones acerca de la con ellos, siempre que no obedezcan de manera automática a
educación que dan a sus hijos. principios educativos, que no sometan ciegamente su juicio a los
Se acaban recibiendo todos los consejos, y los consejos opuestos. expertos, que no se encierren en esquemas rígidos procedentes de la
Los padres reciben un montón de consejos... Pero en realidad, muy educación que han recibido, o que no permanezcan todavía
poca información, pues si cada uno tiene una idea propia y la afirma demasiado heridos por su propia historia.
en voz alta, la información objetiva brilla por su ausencia. Numerosas
opiniones acerca de la educación se pronuncian con tanta mayor ¿Podemos hablar de la educación de nuestros hijos sin hablar de
virulencia, e incluso violencia, cuanto más irracionales son y menos la que hemos recibido y de lo que nos haya podido marcar, de forma
descansan sobre un análisis serio. consciente o inconsciente? Cuando algunas situaciones o actitudes de
A los padres les cuesta dios y ayuda elegir entre las distintas nuestros hijos nos irritan o despiertan nuestra violencia... está claro
concepciones. En seguida se sienten desorientados, incluso desam- que necesitamos curarnos de nuestra historia personal para entender la
parados. Las ideas de los consejeros a menudo contienen amenazas realidad de hoy sin proyectar en ella nuestro pasado y de este modo
más o menos indirectas: «No te das cuenta, pero así acabarás con- actuar de manera más justa y eficaz. Cuando nuestras relaciones con
virtiéndole en drogadicto»; o bien una gran carga de culpabiliza-ción: nuestros hijos son demasiado difíciles, es probable que nuestras
«Ya se entiende, fíjate en su madre», o: «Esto pasa porque sus padres emociones, nuestra biografía, tengan algo que ver, y entonces es útil
se divorcian.» consultar a un psicoterapeuta.
Así que, me guardaré mucho de proponeros un enésimo libro de ¿Podemos ayudar a nuestros hijos a desarrollar su coeficiente
consejos. Los padres viven con sus hijos cada día. Los conocen mejor emocional? ¿Cómo podemos tener confianza en nuestra capacidad
que cualquier «experto», ya sea un pediatra o un psicoanalista para ser padres? Estas cuestiones serán el núcleo del primer capítulo.
prestigioso. Pero a veces, una serie de bloqueos y malentendidos En lo que se refiere a la educación, no hay una fórmula mágica.
puede obstaculizar una relación armoniosa y una verdadera Aunque hay leyes del desarrollo que sin duda es útil conocer, no
comprensión. De hecho, un «experto» sólo puede ayudarte a retirar existen los «es preciso», no hay solución milagrosa que proporcione
estas barreras. con toda seguridad un adulto «logrado», pues lo que es adecuado en
Este libro intenta iluminar la ruta para superar los posibles un momento dado ya no lo es poco tiempo más tarde. En lugar de
obstáculos, deshacer nudos y ayudarte a sortear algunas dificultades. buscar respuestas estereotipadas, fórmulas de aplicación infalible,
Una madre joven, un padre joven, necesitan referencias... pero no aprendamos a pensar y a decidir por y para nosotros mismos. En el
consejos... Necesitan aprender a confiar en ellos mismos y en sus segundo capítulo, te propongo siete preguntas que deberás plantearte
hijos. para responder a numerosas situaciones.
Esta obra se guía por dos postulados fundamentales: El sentimiento de identidad se basa en la consciencia de uno
mismo y de las emociones. En el capítulo 3 exploraremos el mundo de
• Los niños nos dicen lo que necesitan a cada etapa de su desarrollo, las emociones: ¿Qué son?, ¿para qué sirven?, ¿cómo responder?
por poco que sepamos escucharles y descodificar su lenguaje. ¿Debemos animar a nuestro hijo a reprimir los afectos para ser
20 El mundo emocional del niño
Introducción
21
«fuerte», o debemos prestar atención a sus temores, sus lágrimas o sus tar a tu hijo y a ti mismo, aprender a escuchar tus emociones y las
iras? ¿Cómo ayudarle a ser valiente y seguir siendo al mismo tiempo, suyas. Después de todo, son nociones muy nuevas.
sensible? Acordémonos... hasta hace poco todavía se podían dar unos azotes
En los capítulos 4, 5, 6 y 7 exploraremos las dimensiones res- a un niño con un sacudidor o dejarle en un cuarto oscuro durante horas
pectivas del miedo, de la ira, de la alegría y de la tristeza sin ningún problema. Nadie tenía nada que decir contra las amenazas,
Cuando no entendemos sus emociones, el niño puede encerrarse en los golpes, la distancia afectiva. Era preciso «enderezar» a estos
la depresión. Estudiaremos sus síntomas en el capítulo 8. monstruitos, educarles en los buenos modales. Todos los golpes
En la vida de un niño pueden sucederse dramas y experiencias estaban permitidos, los niños no podían decir nada, porque todo se les
dolorosas. En el capítulo 9 veremos cómo podemos actuar en caso de aplicaba «por su bien». Hasta hace dos generaciones, los niños sólo
duelos, separaciones, sufrimientos y enfermedades cómo ayudar a tenían deberes. Todos los derechos estaban del lado de los padres
nuestros hijos a superarlos. (incluso el derecho de pernada, de vida o de muerte). Nosotros lo
Finalmente, en el capítulo 10 plantearemos algunas ideas para hacemos mejor que nuestros padres, y nuestros hijos lo harán aún
incrementar el placer y la alegría de vivir con nuestros hijos. mejor. En esto consiste la evolución.
Antes de partir hacia la exploración del mundo de las emociones, ¿Te sientes culpable por una actitud hacia tus hijos? Fíjate de
una última cuestión: nuestros hijos no esperan que seamos perfectos, dónde vienes y lo que has sufrido durante tu infancia. Te ayudará a
sino tan sólo humanos. No podemos evitar todos los errores. Son
relativizar. Tus sentimientos de culpabilidad no aportarán nada a tus
inherentes al proceso de aprendizaje. Deja de preocuparte por ser «una
hijos. Opta más bien por la responsabilidad. El oficio de padre es re-
buena madre» o «un buen padre», y procura estar atento a las
almente difícil, imposible según Freud, pues nos enfrenta a nosotros
necesidades de tus hijos.
mismos, a nuestros límites, a nuestras heridas por curar, y los hijos nos
Algunos pasajes de este libro podrán sorprenderte, algunas reprocharán, inevitablemente, ciertas cosas, pues necesitan hacerlo
afirmaciones te parecerán quizá poco habituales... tómate tu tiempo y
para crecer, para sentirse diferentes a nosotros y separarse.
piensa en ellas, escucha las resonancias que despiertan en ti. Muchos de
Por otra parte, si te tienta juzgarte un mal padre, considera la
vosotros me lo habéis confiado a raíz de una conferencia o de un
realidad de la ayuda y el apoyo que recibes en esta función. ¿Sois al
cursillo: lo que cuento no tiene nada de extraordinario, es lo más obvio,
menos dos para ocuparos de este querubín? ¿Hay suficientes abuelos,
sólo que nunca habíais visto las cosas desde esta perspectiva.
tíos, tías, niñeras, cuidadores, chicas au pair, padrinos, madrinas o
Cuando un padre se preocupa por las consecuencias de sus amigos(as) para ayudaros y relevaros? Cuidar a un bebé significa estar
comportamientos sobre sus hijos, muchas veces se le dice que «se disponible día y noche, es imposible para una sola persona. Cuando el
complica demasiado la vida». Quienes le replican así suelen aplicar
peso de la responsabilidad recae sobre uno solo, y aún más si está
respuestas preestablecidas sin preocuparse por el coste afectivo que
aislado, es irreal esperar de él que pueda satisfacer las intensas
representarán. ¿Quién lo hace mejor? Cuestionarse las cosas es propio
necesidades de un pequeñín.
del hombre.
Así que no te pongas el listón demasiado alto, sé tolerante contigo
¿Tienes la impresión de que lo haces todo al revés? No te de- mismo y, sobre todo, expresa tus propias emociones y necesidades.
sanimes. Has comprado este libro. Deseas, pues, aprender a respe-
22 El mundo emocional del niño

Escucha a tu hijo, dale permiso para que libere sus tensiones,


ofrécele espacio para sus descargas emocionales, para que así pueda Capítulo 1
crecerse en todas las dificultades de la vida.
Espero que encuentres en este libro recursos para vivir más feliz
en familia. En cualquier caso, ésa es la intención que me ha guiado.
Buena lectura.
¿Podemos desarrollar

el coeficiente emocional

de nuestros hijos?

Cuando estaba embarazada de mi primer hijo, rogaba que fuera bueno


sin ser servil, que pudiera afirmarse y estar cómodo ante los demás sin
ser dominante, que fuera valiente y emprendedor sin ser orgulloso o
cínico... feliz consigo mismo y con los demás, que tuviera la
inteligencia del corazón.

LA INTELIGENCIA DEL CORAZÓN

La inteligencia del corazón es la capacidad para resolver los problemas


que plantea la vida, ya sea a causa de los demás, o porque sobrevienen
experiencias difíciles, o porque emerge el sufrimiento, la enfermedad,
o por la presencia de la muerte. Para que pueda ejercer plenamente,
exige un justo dominio de los temores, las iras y las tristezas que
aparecen a diario.
La inteligencia del corazón nos permite encarar las cuestiones del
ser humano, avanzar, dar un sentido a nuestra vida, facilitar las
relaciones a los demás, afrontar las dificultades cotidianas con valentía
y sabiduría. Nos ayuda a defender nuestros proyectos, a encontrar
nuestro camino y a realizarnos. Es importante en la vida de cada día y
en los grandes seísmos de la existencia.
24 El mundo emocional del niño ¿Podemos desarrollar el coeficiente emocional de nuestros hijos? 25

La inteligencia relacional está íntimamente vinculada a la in- jactaba de ser especialista en psiquiatría infantil. En unos minutos
teligencia emocional, pero en este caso prefiero separarlas. Trataré de surgió el veredicto, brutalmente: «Esta es la causa», me anunció. Mi
la capacidad para establecer vínculos y mantenerlos, amar, unirse y hija se dormía en mi pecho. Según ella, éste era el motivo de todas
separarse, comprender al prójimo y resolver los conflictos en otra nuestras preocupaciones. Ya había hecho su diagnóstico. Sólo me
obra. Por ahora, me concentraré en el coeficiente emocional. restaba someterme. Mi historia, la de mi hija, la de mi compañero, le
Respetar las emociones de un niño significa permitirle sentir importaban bien poco. ¡Lo realmente grave era la lactancia! Su
quién es, tomar consciencia de sí mismo aquí y ahora. Significa si- razonamiento era imparable: mi hija se dormía en mi pecho, y luego
tuarle en posición de sujeto, autorizarle a mostrarse diferente de yo la acostaba. Cuando se despertaba, el pecho ya no estaba, ella no lo
nosotros. Considerarle como una persona y no como un objeto, darle entendía y lloraba.
la posibilidad de responder a su manera particular a la pregunta: Su solución estaba bien clara (el lector la habrá comprendido en
¿quién soy? Significa también ayudarle a realizarse, permitirle seguida), debía suprimir la toma de la noche. Margot debía dormirse
percibir su «hoy» en relación con «ayer» y «mañana», ser consciente «sola». Ciertamente, lloraría, pero debía dejarla. La pediatra me
de sus recursos, de sus fuerzas y de sus carencias, y sentirse mientras tranquilizó, en tres o cuatro días, como mucho, dejaría de hacerlo...
avanza por un camino, su camino. Perdona, Margot, te pido perdón. Cuánto lamento ahora haber
El niño aprende principalmente de sus padres. La actitud educa- escuchado a aquella mujer. Así, pues, te dejé llorar. Lloraste cuarenta
tiva hacia el niño es determinante en el desarrollo de su coeficiente interminables minutos, sola en tu habitación, y luego terminaste por
emocional. El niño toma como modelos a sus padres, y tiene tenden- dormirte en los brazos de tu padre. Aquella noche te despertaste cada
cia a seguir de forma espontánea este ejemplo más que los consejos. dos horas. Por desgracia, la pediatra me había hecho sentir culpable y
Los mensajes inconscientes son tan poderosos, o más, que los reincidí al día siguiente, y al otro. Cuatro días más tarde, seguías
actos o las palabras conscientes. llorando para reclamar la última toma y, evidentemente, te despertabas
Ayudar a nuestros hijos a desarrollar su CE. nos obliga a de- mucho más por la noche. Entonces envié a la porra los consejos de los
sarrollar el nuestro. Ayudar a un niño a crecer significa crecer no- expertos y te escuché. Te di lo que reclamabas y lo que necesitabas,
sotros mismos. Nuestros hijos, espejos de nuestra realidad interior, contacto, leche, proximidad... una toma. Instalamos de nuevo tu cama
nos enfrentan a nuestros límites y nos enseñan a amar, son excelentes junto a la nuestra.Te dormiste en mi pecho dulcemente. Te sentías
guías espirituales por poco que les escuchemos. segura y dormiste mejor.
En realidad, tal como comprendí más tarde gracias a mis nu-
Poseer la inteligencia del corazón es saber amar y construirse a merosas lecturas y a la ayuda de un psicoanalista inteligente, no tenías
través de las experiencias difíciles de la vida. ningún problema de sueño. Te movías entre dos secuencias de sueño
profundo, sin despertarte del todo, intentabas volver a encontrar tus
límites de seguridad, tus referencias, mi olor, mi pecho. Sólo te
DESARROLLA TU CONFIANZA despertabas de verdad y llorabas si no me sentías cerca de ti. El
razonamiento de la pediatra no era erróneo, buscabas mi pe-
Margot tenía unos catorce meses. Se despertaba regularmente por la
noche. Yo estaba cansada, y fui a consultar a una pediatra que se
26 El mundo emocional del niño ¿Podemos desarrollar el coeficiente emocional de nuestros hijos? 27

cho. La solución sí era equivocada. ¡Bastaba, simplemente, que es- mos acerca de este temor a ser abandonados, tan difundido en nuestra
tuvieras cerca de mi por la noche, en una cama adyacente a la mía! sociedad?
Numerosos padres acuestan a su hijo con ellos en la cama. No se Por fortuna, la literatura infantil actual supera este tabú y pro-
atreven a decirlo en voz alta y a menudo se sienten culpables. Han porciona nuevas soluciones a los padres. En numerosos libros, los
aceptado la noción de que «no está bien». Temen que ello perturbe la ositos no quieren dormir solos y acaban pasando la noche pegadi-tos a
sexualidad posterior de su hijo, o que le impida desarrollarse con mamá osa o papá oso.
normalidad de un modo u otro. Los pediatras no pueden saber más que las madres. Han aprendido
En la mayoría de países del mundo no se da valor alguno al hecho la teoría.Tu bebé no es una abstracción, no es teórico. Es muy real. Y si
de que el bebé duerma toda la noche sin despertar ya a su madre para las teorías pueden abrir horizontes, es importante que ayuden a
mamar, y el niño duerme con ella mientras sigue dependiendo del escuchar mejor a los niños, en lugar de hacerles callar.
pecho, a veces hasta los dos o tres años. Algunos expertos reivindican ¿Un médico, un psicólogo, un experto titulado o tu suegra intentan
la cama como espacio de intimidad de los padres. ¡Por favor, un poco que te sientas culpable? ¡Libérate! Escucha sólo a quien te ayude a
de creatividad, no sólo se puede hacer el amor en la cama! escuchar a tu hijo.
Evidentemente, es muy importante que el niño no separe a sus Insisto tanto en ello porque las madres son particularmente
padres. Pero un bebé que duerme en una cama no tiene este poder. Si vulnerables, sobre todo con su primer hijo, pero también con los
los padres aprovechan su presencia nocturna para alejarse, el niño no siguientes, pues ningún niño es la copia idéntica de otro. La mayoría de
tiene ninguna culpa. Si una mujer invoca la presencia del pequeño para madres quieren hacerlo bien, se sienten responsables de esta vida que
evitar hacer el amor, no es más que una excusa, y encontraría otra si el han traído al mundo. Se sienten fácilmente desamparadas frente a la
niño no estuviera allí. intensidad de las demandas del bebé, pueden sentirse intimidadas por
El deseo del padre o de la madre por el cuerpo del hijo es nocivo. ese pequeñín que tienen entre sus manos. Encaran una nueva
La utilización perversa de la presencia del bebé para alejar a un responsabilidad, un nuevo oficio, la única formación que tienen es la
cónyuge o para satisfacer una necesidad de seguridad afectiva es educación que han recibido. Son, pues, presas fáciles para quienes dan
problemática, pero no los cuidados maternos considerados excesivos. lecciones de todo tipo. La educación es un tema delicado, muy
Un bebé ocupa sitio en una cama. Para que todo el mundo se delicado, que desencadena pasiones en seguida. Las polémicas causan
sienta bien, añadir una camita suplementaria pegada a la de los padres estragos y dividen a las familias.
resuelve muchos problemas. Es importante tener en cuenta a la vez esta vulnerabilidad de la
Imponer a un bebé que duerma sin los ruidos de la respiración de madre y la intensidad de los debates para invitarle a rodearse desde
sus padres, sin el olor de su madre, es una violencia que se le inflige en antes del nacimiento de personas positivas, que ayuden y se presten a
nombre de la tranquilidad del adulto. La separación precoz no conduce escuchar su realidad frente a ese bebé, en lugar de a su propia
a la autonomía, sino al miedo al abandono y a la dependencia ideología.
relacional. Es indiscutible que la autonomía se elabora en base a un Cuando hacemos algo obedeciendo las ideas de otra persona,
sentimiento de seguridad. ¿Y si nos preguntára- podemos equivocarnos. Plantéate la pregunta de forma simple y llana:
«¿Me convence o no me convence?» Si te convence, hazlo. Si no te
convence, ¡abstente!
28 El mundo emocional del niño

Confía en ti, escucha tu corazón, y confía en tu hijo, escucha lo


que te dice con sus gritos, pero también con sus comportamientos, sus Capítulo 2
actitudes, incluso sus turbaciones. Lo que no sabe decirte con palabras
lo expresará con síntomas. No temas, es un lenguaje, se dirige a ti, su
madre o su padre, y puedes aprender a comunicarte con él.
Ciertamente, el lenguaje del niño no siempre es fácil de entender.
Siete preguntas que puedes
Aunque detrás de su llanto o sus síntomas siempre hay una angustia,
ésta no suele ser de comprensión obvia. Puede venir de lejos, de su plantearte para responder
propia historia o de la de un antepasado. En efecto, los niños a veces
se convierten en espejo del inconsciente de sus padres (o abuelos). a (casi) todas las situaciones
Para entenderles mejor, se precisa entonces la ayuda de un
psicoterapeuta. Su papel es el de hacer mover lo que hay en tu interior,
indicarte las pistas que debes seguir para encontrar el origen de las
dificultades, ayudarte a formular tu historia para detectar los nudos Un periodista pregunta a Francoise Dolto:
afectivos que pueden permanecer activos en tu inconsciente o en el de —¿Ha tenido problemas de educación con sus hijos?
tu hijo. Te escuchará e iluminará el camino a seguir, pero tú debes —Sí, todos los niños tienen dificultades para comprender lo que
encontrar la respuesta. pasa en el mundo, puesto que lo interpretan de forma mágica. Antes de
Debes requerir la ayuda de un mediador, no de un consejero. No [que mis hijos tuvieran] cinco años, tuve que realizar un trabajo diario
aceptes las opiniones perentorias, las definiciones abruptas. Las para comprender lo que pasaba por la cabeza de un niño.1
certezas ajenas no te ayudarán. Encontrarás tus soluciones en el La respuesta de esta gran dama de la medicina educativa debería
diálogo con tu hijo, buscando a tientas, experimentando. ¡Cada re- inculcarnos humildad. Francoise Dolto ha escuchado, guiado y
lación es una creación única! ayudado a miles de niños y padres.Tenía una intuición fabulosa, una
profunda sabiduría y un gran conocimiento de los mecanismos psí-
quicos. Y sin embargo, frente a sus hijos tenía más preguntas que
respuestas. Cada niño es un individuo único, y nos interroga con su
especificidad. Aplicar respuestas sistemáticas en función de reglas
educativas predeterminadas significa negar al individuo como sujeto.
Plantearse preguntas ante un niño es testimoniar el deseo de res-
ponderle de forma individual.
¿Pero cuáles son estas preguntas?

I. François Dolto, Les Cheminss de l'éducation, Gallimard, 1994, p. 62.


30 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 31

¿CUÁLES SON SUS VIVENCIAS? Camille se dice: «Mis padres se han separado por mi culpa. Antes
de que yo naciera, estaban enamorados, sería mejor que yo estuviera
Un niño es una persona. Tiene sus propias ideas, emociones, fantasías muerto.» Enfermó de una leucemia gravísima y galopante, que reunió
e imágenes mentales. a sus padres junto a su cama de hospital.
Los padres se pueden encontrar desamparados ante la intensidad Denis teme a los demás. Sus padres no invitan a nadie, salen po-
de los afectos de un niño, pues están a flor de piel. Basta bien poca co, se encierran en su casa y en su familia. Ante esta situación, el niño
cosa (según el baremo de un adulto) para que su carita se crispe y tiene la siguiente idea: «El mundo es peligroso, la gente es mala.»
estalle en sollozos. La frustración más ligera puede conducir a una ira Estas conclusiones forman creencias sobre uno mismo, sobre los
inmensa. padres, sobre la vida. Estas creencias guiarán el comportamiento. Lo
Su cerebro está madurando y no le proporciona todavía las he- que el niño ve, lo que oye, lo que siente, puede crear nudos muy
rramientas mentales que más tarde le permitirán dominar sus emo- graves en su cabeza. Nudos que pueden herirle más o menos
ciones. Debido a su edad, aún no sabe formular hipótesis, deducciones profundamente, o bloquear su evolución en un terreno preciso.
lógicas, separarse de su punto de vista, tomar distancia o proyectarse El niño ve el mundo con sus propios ojos. Guardémonos de
hacia el futuro.Vive en el presente, aquí, y su razonamiento tiene su juzgar sus reacciones. Primero escuchemos. Intentemos identificar
propia lógica, egocéntrica y mágica. Su pensamiento se denomina cuáles son sus vivencias, cómo asocia las cosas, lo que siente y lo que
prelógico. se dice.
El niño es prisionero de la inmediatez de su respuesta emocional, ¿Le da miedo un caracol? ¿Qué representa un caracol en su es-
sin mediación del pensamiento para relativizar las cosas o establecer píritu?
jerarquías entre lo que está en juego. Se siente fácilmente invadido Después de haber aprendido esta actitud de escucha en ocasión de
por sus afectos y, en consecuencia, nos necesita para ayudarle a un cursillo, una cliente me refirió su aventura con un niño. Étienne
encontrar la salida. sollozaba, su globo había estallado entre sus manos. Con lo que había
Por otro lado, como es natural, intenta dar un sentido a lo que aprendido, Sophie prefirió evitar consolarle con excesiva rapidez
vive. Lo hace con los medios de que dispone. Organiza e interpreta mediante un «no pasa nada, voy a comprarte Otro». Se acercó a él y le
sus percepciones a su manera, a la luz de las informaciones, a menudo preguntó:
incompletas, a veces deformadas, que posee. Ello puede dar lugar a —¿Qué era este globo para ti?
emociones incomprensibles para los padres. Para su intensa sorpresa, el pequeño Étienne levantó los ojos
Arnaud es agresivo, se enfada a menudo «por nada». Sus padres hacia ella y le confió, entre sollozos:
están separados. En su cabeza, se dice: «Si papá se ha ido, es que no —¡Todo se muere! Mi abuelito se murió la semana pasada.
me quiere porque soy un niño malo.» Y nosotros, los adultos, consideramos que la pérdida de un globo
Bénédicte está triste, no participa en clase, no juega con los otros no es grave. Si hubiera minimizado, banalizado, como hacemos tan a
niños. Le cuesta encontrar su lugar. Siente que sobra en todas partes. menudo sin pensar, Sophie no se habría dado cuenta de Cita enorme
Sus padres se pelean mucho. Se dice: «Papá y mamá se enfadan por sensación de desamparo. Simplemente porque quiso escuchar, Étienne
mi culpa, si yo no estuviera allí, no se pelearían. Es culpa mía». pudo ser oído en su tristeza.
Como es obvio, no todos los niños que ven cómo explota su
32 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 33

globo entre sus manos acaban de perder a un abuelo. Pero ello no experimenta y le preguntes: «¿Qué pasa?» o «¿Qué te pone tan triste?»,
significa que la cuestión no pueda plantearse desde un punto de vista o incluso «¿De qué tienes miedo?»
metafísico. Los padres sólo ven el globo, y las pocas pesetillas que Su razonamiento puede parecer ilógico para un adulto, de hecho
cuesta. El niño tenía entre sus manos un globo y, de repente, sólo le es prelógico, pero él cree a pies juntillas en lo que dice. Si le
queda un trocito de goma minúscula entre los dedos. La acompañas en los meandros de sus pensamientos podrás ayudarle, le
transformación es, cuanto menos, sorprendente. Por otra parte, plantea proporcionarás la información que le falta, iluminarás la situación
el problema del poder del niño y de una eventual culpabilidad, sobre desde otro punto de vista.
todo si los padres añaden: «¿Lo ves?, ¡te había dicho que fueras con Juliette está en la guardería. Es el chivo expiatorio de la clase.
cuidado!» ¿Qué ha podido pasar para que los otros niños se muestren tan
No medimos lo que pasa en el espíritu de un niño. Procuremos no agresivos con ella y la desprecien tanto? No sirve de nada pedirles que
minimizar lo que siente. Un detalle que se nos escapa puede revestir la sean más buenos con ella. Un comportamiento es un síntoma. Hay
mayor importancia para él. unas causas. Busquémoslas.
¿Cómo escucharle y ayudarle a deshacer semejantes nudos La maestra se propone escuchar, y oye que a Juliette a veces la
afectivos? desprecian con este insulto:
Siempre debemos dejar que exprese su emoción, acompañar la —¡Tú ni siquiera tienes papá!
descarga de lloros, gritos, temblores, sin intentar calmarle. Llorar, Estas palabras son particularmente violentas para Juliette, que
gritar, temblar, son sus maneras de expresar su sufrimiento, de liberar hace apenas seis meses que ha perdido a su padre. La maestra se
sus tensiones, de recuperarse. Confía en sus capacidades. Sabe lo que acuerda entonces de las presentaciones del primer día. La niña había
es bueno para él. Si sabes estar presente, escuchar, acompañar las anunciado, de corrido:
lágrimas, después de la explosión vendrá la relajación, la confianza, el —Me llamo Juliette y mi papá ha muerto. —¡No es verdad! —replicó
bienestar corporal. al momento Matthieu. Para él, como para los otros niños, era
Un bebé llora porque tiene una necesidad o porque intenta decir imposible que un papá muriera. Imagínate, esto significaba que su
algo. Asegúrate en primer lugar de que ha satisfecho sus necesidades. papá también podía morir, ¡impensable! ¿De dónde venía esta niña
Si sigue llorando, simplemente escúchale. Te confía sus tensiones.Tal que clamaba este horror? ¿Quién era esta malvada que les sugería una
vez te expresa el miedo que ha tenido durante el parto, lo enfadado que aberración semejante? Era preciso castigarla, hacerle daño, destruirla.
está porque no estuvieras ahí cuando le tocaba mamar... Tal vez La señora hizo hablar a los niños, exploró los meandros de su
expresa su angustia por no sentirse aceptado por papá... Acaso dice pensamiento y aclaró con ellos algunos puntos: la verdadera razón de
que sufre a causa de la tensión familiar debida a la muerte del abuelo... la muerte de este hombre, su enfermedad, el contagio... Los alumnos
Siente multitud de cosas. Para no quedárselas dentro, necesita necesitaban saber con certeza que tratar con Juliette no iba a matar a
llorarlas. su propio padre. ¡Tener un papá muerto no es contagioso! La idea que
Cuando es un poco mayor y es capaz de hablar, escucha siempre les aterrorizaba era ésta, y luchaban contra ella intentando excluir a
sus emociones con prioridad y tómatelas en serio. No le preguntes Juliette.
«porqué» llora. Intentará darte una explicación racional, a veces
alejada de su dificultad. Es mejor que le acompañes en lo que
Siete preguntas que puedes plantearte... 35
34 El mundo emocional del niño
talón corto de deporte delante de los compañeros. Puede ser que no
¿Te sientes sorprendido y desamparado ante la intensidad de una
comprenda lo que cuenta el profesor, o, simplemente, que se
emoción de tu hijo? ¿No sabes qué puede desencadenar una reacción
aburra...Te necesita, precisa de tu escucha, de tu atención hacia sus
semejante? ¿No sabes cómo ayudarle a atravesar una experiencia
sentimientos, quizás de tu protección o de tu ayuda para resolver un
dura? Escúchale, ponte a su altura, mira con sus ojos, oye con sus
problema.
oídos, y plantéate esta pregunta:
Todo comportamiento exagerado y, sobre todo, sistemático, ya
sea de agresividad o de pasividad extrema, de dependencia excesiva
¿Qué es lo que vive?
de la madre o de celos abusivos, de incapacidad para concentrarse o
de oposición sistemática, tiene un motivo. Existe una emoción
bloqueada, una necesidad oculta.
¿QUÉ DICE?
Una vez más, no preguntes al niño porqué ha hecho tal cosa o tal
El maestro de Frédéric acaba de ingresar en prisión por abusar se- otra, a menudo no tiene la menor idea. Lo más seguro es que sus
xualmente de un menor. El niño ha sufrido abusos durante cuatro motivaciones profundas sean inconscientes. Si le preguntas porqué,
largos meses. La madre se sorprende de que su hijo no le haya dicho puede ser que se sienta obligado a responderte, y entonces construirá
nada. No obstante, delante del psicólogo se acuerda de lo siguiente: una razón plausible. Con toda probabilidad encontrará una, que
—Sí, es verdad, decía: «Me duele la barriga, no quiero ir al cole». raramente será la real.
Pensé que era un capricho. Hacía cuento para no ir a la escuela. Y El bebé no tiene palabras para decir las cosas. Su primer lenguaje
además, su maestro era tan amable... es el llanto. Poco a poco aprenderá a hablar, pero lo que no sabrá
Pues sí, los pedófilos a menudo son muy amables. Frédéric no decir, con palabras seguirá diciéndolo llorando, enfadándose, gritando
podía hablar con su madre, ella no escuchaba. Ella banalizaba su re- y mediante todo tipo de comportamientos de este tipo y rechazos a la
cooperación. No es tan simple formular lo que pasa dentro de uno. El
chazo, lo rebajaba al tratarle de cuentista, incluso le hacía sentirse
culpable cuando le decía que su profe era tan amable. Al oponerse a niño no siempre comprende lo que le sucede. Tiene la impresión de
que está prohibido hablar de ello. Le dan miedo las reacciones de sus
dar significado a ese rechazo a ir a la escuela, negaba las necesidades
de su hijo. padres, su cólera, teme apenarles.
Los padres llaman fácilmente «caprichos» o «comedia» a estos
Detrás de lo que los padres llaman «capricho», detrás de un
gritos que no saben interpretar. Para un niño es terrible que no le
comportamiento extraño, fuera de lugar, excesivo o simplemente poco
entiendan, que sus súplicas se reduzcan a estas palabras desvalori-
normal, busquemos la emoción, busquemos la necesidad. El niño dice
algo. zantes. No existen los caprichos. Se trata de un lenguaje, hay un
mensaje que se debe descodificar.
Si no quiere ir al colegio, existe una buena razón. Su maestro no
Ciertamente, no siempre resulta fácil captar la comunicación de
tiene porqué ser pedófilo, claro está, pero a lo mejor su amiga Suzon
un niño que no organiza sus ideas como nosotros. Sin embargo, me
ya no le habla, a lo mejor teme al niño de primero de secundaria que
parece que todos hemos sido niños. Con un pequeño esfuerzo
acaba de ver en el patio, tal vez le tiene miedo a la señorita, o a
deberíamos lograr acordarnos de lo que sentíamos y cómo lo
entregar unos deberes, o a mostrarse ridículo en pan-
comunicábamos.
36 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 37

No escuchar los gritos o los comportamientos de rechazo, no ¿QUÉ MENSAJE DESEO TRANSMITIRLE?
respetarlos como un lenguaje, no intentar comprender su sentido,
rehusar entender o bien banalizar («A esta hora siempre llora», «Es Procura, pues, no tomártelo todo como un mensaje subliminal. Escribir
así, es torpe») encierra al niño en su interior. Estaba formulando una en las paredes, pintar tu agenda, cortar una cortina para hacer un
demanda, buscaba ayuda, manifestaba una necesidad... no le han oído, vestido de novia o dibujar un campo de fútbol en la moqueta nueva de
se ha visto forzado a elegir la vía de los síntomas para que le oyeran. su habitación no son obligatoriamente comportamientos con mensaje.
Otitis frecuentes, eccemas, alergias, rechazo a alimentarse, enu- Son exploraciones muy naturales. Si además estropean el entorno, las
resis, y más tarde dificultades escolares, agresividad, son otros tantos posesiones de los padres, ello no es forzosamente su intención
mensajes de llamada. El niño está dispuesto a sacrificar su cre- primordial. Es una cuestión de matices y de edad.
cimiento, su salud física y psíquica para que al fin le oigan. ¿Tu hija de tres años ha cortado con las tijeras una de tus cortinas? ¿Tu
Una vez dicho esto, no todos los comportamientos del niño tienen hija de ocho años ha hecho lo mismo? Resulta evidente que no tiene el
por qué ser forzosamente mensajes. No tiendas a intentar mismo significado. La primera explora lo que puede cortar con sus
descodificarlo todo y a buscar de forma sistemática un significado nuevas tijeras. Todavía no ha asimilado verdaderamente que una acción
oculto detrás de cada uno de sus gestos. Los excesos nunca son pueda ser irreversible, y cree que de todos modos no es grave porque
buenos. «papá lo arreglará». El segundo caso es distinto. Con toda probabilidad
¿Cómo saber si dice algo a través de una actitud, una enfer- se trata de un comportamiento pu- nitivo. Expresa seguramente una ira,
medad, un accidente, un fracaso escolar? Escúchale. contra ti, contra tu cónyuge, su hermano, un profesor. De todos modos,
Puedes estar seguro de que hay un mensaje cuando el com- si con el retal consigue hacer un vestido, ¡no estropees su genio
portamiento se repite, cuando hay síntomas que perduran a pesar de incipiente! Acaso sea una fu-• tura gran modista. La multimillonaria
los tratamientos, o que vuelven a aparecer. japonesa a quien le fabrican , pelotas de golf especiales de su color
Y no te traumatices con la idea de dejar pasar un mensaje de tu preferido, el rosa, como sus coches y todo lo que le rodea, comenzó así.
hijo. Hasta que su problema no se resuelva, se repetirá en todos los Cortó sus primeros vestidos, siendo niña, en las cortinas de su casa.
tonos, variando los síntomas... hasta que consiga provocar una Ulysse ha dibujado con todo lujo de detalles un soberbio campo de
respuesta. fútbol en la hermosa moqueta verde recién estrenada. ¡Qué bonito! No
sabía que no podía hacerlo, ¡era su habitación! Su madre ha sabido
Cuando un comportamiento te sorprende, te irrita, te interpela, reconocer su talento y le ha felicitado por su creatividad, pero su padre
cuando tu hijo o tu hija manifiestan una emoción que te parece le ha regañado y le ha obligado a borrarlo todo al momento. A decir
desproporcionada, una oposición sistemática, o síntomas variados... verdad, a este papá le habría gustado Comprarle una alfombra bien cara
antes que estos últimos sean alarmantes, plantéate esta pregunta: con un campo de fútbol estampado, pero no podía soportar que su hijo
lo dibujara por iniciativa propia. En su espíritu, «había estropeado» la
¿Qué dice? moqueta, no ha con-siderado ni siquiera un instante el resultado
objetivo.
38 El mundo emocional del niño
Siete preguntas que puedes plantearte... 39
Nuestras reacciones frente a las creaciones de nuestros niños
condicionaran sus creencias en si mismos. ¿Qué mensaje deseas ¿Un frente común?
transmitirle?
«Eres creativo, tienes ideas originales, sería interesante que te en- El niño tiene un padre y una madre. En teoría, pues, tiene el doble
contráramos un material adecuado para que ejercieras tu talento.» de posibilidades de recibir mensajes positivos. Por desgracia, a veces
O bien: los padres deciden «ponerse de acuerdo» y en general se alinean en
«¡Estás loco! ¡No tienes nada en la cabeza! ¡Lo que haces es una el aspecto más represivo. Numerosos padres creen que deben presentar
cochinada!» un frente común a los niños. ¿«Frente»? Estamos ya en una dinámica
El niño que reciba el primer mensaje, confiando en sus capa- de enfrentamiento, de juego de poder. No, los niños no
cidades, buscará apoyo para manifestar su creatividad. El que oiga el buscan el fallo en la pareja paterna. Buscan la verdad. Buscan ser fe-
segundo mensaje, en el que se le define como loco e inconsciente... lices, desarrollarse plenamente. No necesariamente se «aprovecharán»
seguirá siéndolo y tendrá ganas de vengarse, quizás no con la de una diferencia entre sus padres.Y cuando un padre asesta un
moqueta, sino con los jarrones de valor y las figuritas, a menudo mensaje nocivo, el otro puede proporcionar el antídoto. Los ni-
frágiles, que hay en la vitrina de papá. A menos que no se destruya a ños saben lo que es justo y lo que no lo es. Para el niño resulta muy
sí mismo desvalorizándose. incoherente que uno de sus padres adopte la actitud del otro y se
¿Quieres inculcarle el respeto por los objetos? Respeta al mismo comporte, pues, en oposición con sus valores.
tiempo su necesidad de expresarse. ¿Tu cónyuge humilla o hiere a tu hijo? Atrévete a decir lo que
Cuando vi aparecer trazos de rotulador en la pared de mi des- piensas, lo que sientes. Atrévete a ponerte a favor del niño, a ser un
pacho, de entrada me enfadé y volví a recordarles la prohibición: «Se testigo de su dolor, a defenderle. Sabrá que puede confiar en ti. En
dibuja en hojas de papel, no en las paredes». Las pintadas siguieron cambio, si no dices nada o si apoyas a tu cónyuge... le traicionas,
apareciendo, y encargué a cada uno de mis hijos que realizara un perderá la confianza en ti.
dibujo para decorar. Se aplicaron en la treintena de centímetros que Del mismo modo, acepta que tu cónyuge le defienda cuando
les concedí; aquel rincón ahora es muy bonito, y las agresiones eres tú quien le riñes. Nadie es perfecto, todos podemos equivocarnos,
anárquicas con rotulador cesaron. pronunciar palabras sin pensar o bien perder los nervios a causa del
Para mí era difícil mantener una prohibición acerca de la pintura cansancio, la exasperación o de algo que vuelve a resurgir desde
en las paredes. Mi hermana, que es pintora, ha realizado frescos nuestra propia infancia. Tu imagen no se verá enturbiada a los ojos del
espléndidos en las paredes de la escalera. ¿Por qué tendría derecho mi niño, porque él no busca una imagen, sino una persona real. Si aceptas
hermana y no mis hijos? Para ellos resultaba demasiado injusto.Tener reconocer tus errores le enseñarás a hacer lo mismo.
un espacio para ellos les valorizó y satisfizo, y no sintieron más la Los padres son personas, no tienen por qué estar forzosamente de
necesidad de pintar la pared. acuerdo en todo, y es importante que el niño lo viva. ¿Por qué imponer
Ante cada una de nuestras reacciones, podemos elegir entre los una visión única del mundo y de la vida? Es mucho más enriquecedor
mensajes de amor: «Te quiero, tú puedes hacerlo» y los mensajes constatar la coexistencia de numerosos puntos de vista. Gracias a ello
destructores: «Eres un inútil, no vales nada». se puede hablar, intercambiar impresiones y
resolver conflictos.
Siete preguntas que puedes plantearte... 41
40 El mundo emocional del niño
—Ten, te pongo una en tu bolsillo.
Así que, no establezcas un frente común, pero tampoco una
Comienzo a sentir cómo aumenta mi irritación... y entonces me
competición para ver quién es el mejor padre o madre, y no desplaces
pregunto: «¿Por qué diablos deseo que se suban al coche en seguida?»
otros conflictos al campo de la educación de los niños.
¿Porque yo lo he decidido? ¿Cuáles son mis razones? Hoy es
Con mucho respeto mutuo, los cónyuges expondrán sus dife-
domingo, estoy sola con ellos, he decidido dedicarles todo el día. Es
rencias, mostrando de este modo al niño que es posible vivir juntos y
mediodía, de acuerdo, pero no parece que tengan un hambre
quererse aunque no se piense siempre igual.
atroz...Así que, ¿por qué correr? ¿Qué diferencia hay entre recoger
castañas en la acera, jugar en el parque o montarse en el tiovivo? ¿Por
Nuestros hijos nos escuchan y nos observan qué no dejarles jugar a gusto en esta acera? Además, no Cuesta nada.
Finalmente nos quedamos veinte minutos recogiendo Unas castañas
Cada uno de nuestros actos, no sólo hacia él, sino hacia toda persona preciosas, lisas y brillantes.
y situación, le envía un mensaje. Estoy segura de que te has encontrado ya en este tipo de si-
Mira tu vida, y tu forma de vivirla. ¿De qué manera vives lo que tuación. Con frecuencia reaccionamos de forma automática, y ha-
te gustaría enseñar? ¿Llegas a mentir, a disimular, a transformar la ríamos bien en preguntarnos más a menudo lo siguiente:
realidad para que las cosas te encajen? ¿Respetas las reglas, las leyes? «¿Por qué? ¿Qué me impulsa a decir sí o no a las demandas de
¿Cruzas la calle cuando el semáforo está en rojo? ¿mis hijos? ¿Qué es lo que dicta mi actitud?»
Y en un sentido más general, ¿qué cantidad de alegría, de amor, La primera vez que Margot deseó comer un helado antes del primer
de felicidad manifiestas? ¿Estás en una empresa, un oficio o un plato, oí cómo yo misma le decía: «No, el helado es un postre, se come
matrimonio que no te conviene? ¿Qué mensaje le transmites sobre el al final». Alertada por el carácter automático de mi respuesta, me
trabajo, la libertad, la forma de llevar adelante su vida, la realización pregunté: «¿Por qué digo esto?» Pensando de forma real y científica en
personal y el amor? el problema, me acordé de la dietética y del funcionamiento del
estómago... el azúcar estimula la secreción de insulina, prepara la
Para guiarte en tus elecciones vitales y en tus actitudes hacia él, digestión... Si comemos algo dulce al final de la comida es porque
pregúntate lo siguiente: todavía queremos comer, aunque ya no tenemos hambre. Para poder
comer algo más, necesitamos engañar a nuestro organismo... Es un
¿Qué mensaje deseo transmitirle? hábito cultural, una costumbre agradable para la mayoría de nosotros,
pero, bien pensado, no es muy sano. Así que le di el helado a mi hija.
A continuación comió la mar de bien todo el almuerzo. Desde
¿POR QUÉ DIGO ESTO? entonces, de vez en cuando come una fruta, un helado o un pastel antes
de los macarrones o de las judías, pero cada vez es más raro a medida
—Margot,Adrien, venga, nos vamos. —Estoy junto al coche y los que se va haciendo mayor y va respetando con naturalidad las
niños cogen castañas en la acera. Hacen ver que no me oyen y siguen costumbres que ve a su alrededor. A veces prefiere tomarse el postre
recogiendo. en medio del almuerzo, o incluso ir picando un poco de pastel o una
—Allí, mira, ¡ésta es para mí! mandarina mien-
42 El mundo emocional del niño
Siete preguntas que puedes plantearte... 43
tras come otro plato... ¿Por qué prohibírselo, pues, cuando come de
todo y, en el conjunto de una semana, de manera equilibrada, y Una madre me confiaba lo mucho que debía pelearse con su hijo
además la ciencia le da la razón (salvo en el caso de las mandarinas, para que aceptara comer su yogur diario. Era víctima de la publicidad,
que son ácidas y muchas veces no combinan de forma armoniosa con y creía con sinceridad que era bueno, incluso necesario para el
los otros platos)? crecimiento de su hijo, que comiera productos lácteos. La voz de los
¿Es la salud o son las conveniencias sociales las que dictan mi ac- lobbies agroalimentarios era tan fuerte que no podía oír a su hijo.
titud? Como madre, soy responsable de la salud de mi hijo, pero tam- Cuando descubrió una información más neutra y, en consecuencia,
bién de su socialización. Podemos explicar a un niño que se trata de más objetiva, midió su error. Imponía cada día a su hijo un yogur
una conveniencia social, un hábito cultural, pero es importante no acidificante a su estómago, que aportaba claramente menos calcio que
mezclar los dos conceptos, por ejemplo, asestando a un niño que es las almendras y las avellanas que tanto le encantaban. En definitiva, lo
nocivo para su salud comer el postre al principio de la comida. que creía sano no lo era tanto.
Es evidente que no sería sano para un niño comer sólo helados. Si A raíz de nuestras últimas vacaciones, en un hotel, me quedé
el helado es demasiado grande, podría ser que el niño no tuviera ganas sorprendida ante una breve escena. Estábamos alrededor de un buffet,
de comerse la verdura... ¡No pienses que te estoy aconsejando que des y cada uno podía elegir su plato. Aquel día había salchichas de
el postre a tus hijos al principio de la comida! Frankfurt o escalopa cordon-bleu. Una niña a la que acompañaba su
Un temor frecuente de los padres cuando escuchan una demanda padre insistió en comer salchichas. Su padre rehusó, diciendo: «Mamá
original de su hijo es que ésta se convierta en «un capricho». Los ha dicho escalopa, y será escalopa.» Es cierto que las salchichas no
caprichos son inventos de los padres. Surgen cuando los padres se son un alimento particularmente dietético. Pero la escalopa cordon-
embrollan en los juegos de poder. Cuando Margot pidió un helado al bleu es una pechuga de pollo (y en este caso, no precisamente de pollo
comenzar la comida, no era un capricho, sino una exploración. Yo de granja) con una loncha de jamón y queso, todo ello empanado. Es
podría haberme enfrentado con dureza a esta idea, entrando así en el decir, nos puede gustar, pero tres proteínas asociadas de esta manera
juego de poder, y ella probablemente habría respondido desde este no se pueden defender demasiado desde el punto de vista dietético. Lo
juego de poder bloqueándose también en su posición. Creo que los que deseaba la niña, una salchicha, no era peor; ¿por qué no
juegos de poder los comienzan los padres, y no los hijos. La prueba es permitírselo? Uno se queda pasmado ante este absurdo, ante tanta
que a veces se dice que un bebé puede llegar a dominarte si te dejas inconsciencia. La niña aceptó su suerte en seguida, y sin embargo
someter por él. En realidad, el niño depende totalmente de ti y, como debía tener unos diez años. Su madre dirigía su vida, al parecer sin
es obvio, no tiene capacidad mental para someterte. preguntarse el significado de lo que imponía.
¿Tus comportamientos los dictan tu educación, los automatismos
cuyo origen desconoces, la evidencia? ¿O la razón? En este caso No se puede saber todo. Pero cuando nuestros niños nos piden
entiendo por razón no los prejuicios de tus padres o de tu médico de algo inusual, podemos escucharles y plantearnos la siguiente
familia, sino tu razonamiento en base a informaciones fiables. pregunta:
Ciertamente, debemos ir avanzando entre las informaciones
deformadas que nos presenta la publicidad. ¿Por qué digo esto?
44 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 45

¿MIs NECESIDADES SON INCOMPATIBLES todo el domingo y los días de fiesta. Los otros días resulta más difícil.
CON LAS DE MIS HIJOS? Reconozcámoslo, la situación es conílictiva por fuerza, y com-
plica la relación. Si no nos damos cuenta de este desfase, la com-
Nos gustaría que nuestros hijos no lloraran «por nada», que no se petición de necesidades puede llegar a ser violenta. En estos juegos de
enfadaran porque se les rechaza algo o porque tenemos la presunción poder hay un ganador, pero también un perdedor. Y en realidad, en el
de proponerles cambiar su pañal sucio. terreno de la relación, forzosamente hay dos perdedores. ¿Cómo
Nos gustaría que nuestros hijos cooperaran más, que se vistieran sentirse sinceramente apreciado por alguien que niega nuestras
cuando se les pide, que se sentaran a la mesa al mismo tiempo que todo necesidades?
el mundo, que se acostaran sin problemas, que ordenaran su habitación, Ser padre es, desde luego, aceptar apartar por un tiempo las ne-
que pusieran el abrigo en la percha adecuada y sus zapatos uno junto al cesidades propias para satisfacer las de estos seres vulnerables. Pero
otro en el armario. ello no es simple, ni fácil. Una madre joven me confiaba desesperada
Nos gustaría que fueran tranquilos y buenos, que no corrieran por que a veces se sentía al límite, incluso a punto de pegar. Ella misma se
todas partes chillando, que se estuvieran quietecitos en su silla para sorprendía, no se lo esperaba en absoluto. Antes de su maternidad,
comer, que comieran rápidamente sin hacer porquerías y con su tenedor consideraba a los niños seres maravillosos y perfectos a los que no
todo lo que hay en el plato, que bebieran sin derramar agua ni hicieran cesaba de admirar... Después, se sorprendía de verse exasperada por
experimentos de física sobre la conservación de los volúmenes... sus comportamientos, les detestaba.
¡Nos gustaría que nuestros niños no fueran niños! Sí, nos irritan, nos sacan de nuestras casillas. Todos los padres lo
Pero resulta que ¡son niños! Ejercen de niños cuando sacan todos padecen... y a veces lo hacen padecer a sus hijos.
los juguetes, cuando caminan descalzos sobre las baldosas, cuando se Según las edades, las noches se ven interrumpidas por las tomas
despiertan al amanecer para jugar, cuando gritan excitados hasta perder de pecho, los pipis en la cama o las pesadillas. De día, los niños
el aliento, cuando se ocultan en los armarios y se persiguen a través del reclaman una atención constante, los mayores se pelean... Es
salón o incluso cuando ensucian la cocina con sus botas llenas de barro. imposible enfrascarse en una novela, telefonear con calma a una
Honestamente, ¿no nos sentiríamos algo incómodos si se amiga, relajarse en la cama por la mañana, ni siquiera hacer pipí
comportaran siempre como adultos en miniatura, bien ordenados y tranquilamente.Vivir con un niño resulta realmente una experiencia
civilizados? Después de unos minutos de admiración teñida de envidia, dura. Si no lo reconocemos, acumularemos sin duda un rencor que
pronto nos asustaríamos ante su falta de naturalidad. proyectaremos sobre él a la menor extravagancia: «¡Tristan, eres
Pero es preciso decirlo con claridad, las necesidades de los padres insoportable!» O incluso: «¡Qué he hecho yo para merecer un niño
y las de los niños son del todo opuestas. A la mayoría de los padres les semejante!»
gustan los espacios ordenados, aprecian el silencio y las palabras Ser padre es una ocupación constante, las veinticuatro horas del
mesuradas, sueñan con la calma y con levantarse bien tarde el domingo. día. Algunos descansan las ocho o diez horas que dura el trabajo, pero
La gran mayoría de niños se siente cómoda en el mayor de los al volver a casa vuelven a su tarea. Resulta agradable ir a la oficina, se
desórdenes, adora el ruido y se levanta al alba, sobre nos reconoce, se nos considera, estamos entre adultos, no hay gritos,
lloros o peleas... Se puede respirar un poco. Las
Siete preguntas que puedes plantearte... 47
46 El mundo emocional del niño
Cuando un padre o una madre no reconocen sus emociones,
amas de casa no tienen este espacio para evadirse y recargar las ba- existe una fuerte tentación de proyectarlas sobre los niños. Ello sig-
terías. Sí, el trabajo a menudo es un alivio, salvo si uno no lo elige. En nifica cargarles con lo que no les concierne.
el ejercicio de la profesión, nos sentimos competentes, valorizados,
Patricia ha educado ella sola a sus dos hijos. Preocupada por la
aunque sea porque charlamos con los compañeros... recargamos la
falta del padre, ha querido «compensar», y ha multiplicado sus
confianza en nosotros mismos. Incluso cuando el trabajo en sí no es
atenciones. Cuando ha pensado un poco en ello, le ha aparecido otra
apasionante, proporciona ocasiones de intercambios y contactos con
realidad: a ella le faltaba un hombre. Durante mucho tiempo no quiso
los demás.
ser consciente de ello, y proyectaba esta falta hacia sus hijos,
Si no reconocemos nuestras necesidades, si carecemos de los redoblando las atenciones compensatorias. Hoy en día le cuesta mucho
elementos esenciales para nuestro propio desarrollo, es probable que
que sean autónomos. Les falta confianza en sí mismos y siguen
nos cueste dar a nuestros hijos lo que necesitan. En consecuencia, es
dependiendo mucho de ella.
un deber paterno escuchar y reconocer las propias necesidades,
Una madre, por muy atenta que esté, nunca reemplazará a un
conseguir los medios para satisfacerlas en la medida de lo posible.
padre. No es su papel. Los niños no esperan de ella que haga de-
Si existe un conflicto de necesidades, la competición no es la
saparecer la carencia, sino que les escuche en sus emociones, y que no
única opción. La cooperación siempre es más eficaz a largo plazo.
intente liberar las suyas. Si Patricia hubiera estado atenta a sus propias
Esta última exige la expresión auténtica de las necesidades de cada
necesidades habría dejado que sus niños crecieran con mayor libertad.
uno y el respeto mutuo. Reconocer sus necesidades y afirmar las
Acaso habría podido encontrar incluso un hombre con el que volver a
nuestras.
construir una pareja, una familia. Éste habría podido ejercer de padre,
Después de los primeros años, cuando sus necesidades son for-
ser el elemento masculino de equilibrio que tanto necesitaban sus
zosamente prioritarias, negocia. Los famosos límites que se deben
hijos...
establecer son los que imponen tus necesidades.
Escuchar las necesidades propias no significa comportarse de
«YO quiero comer en paz, ¿qué podrías hacer para respetar el
forma egoísta. Significa saber medir la situación e intentar responder a
tiempo de mi cena?»
la misma de manera apropiada. En general, todo el mundo acaba
será más eficaz que
ganando.
«Cállate, eres realmente insoportable.»
¿No quieren acostarse? Dales a entender que, de todos modos,
ahora es la hora de los padres, y que no les harás caso. Es inútil
Cuando nuestros padres constituyen un obstáculo
amenazar, regañar o castigar, protege simplemente tus necesidades.
Es importante descansar para no acabar agotado, recargar las
Si bien nuestra vida cotidiana nos aporta la correspondiente ración de
pilas para estar disponible, compartir las tareas equitativamente con
preocupaciones, la mayoría de nuestras necesidades más exigentes y
el cónyuge para no acumular un rencor inconsciente, reconocer la
más apremiantes no data del día de hoy. Las necesidades más difíciles
frustración y la ira en uno mismo cuando el otro no está y no pue
de controlar son las que proceden de nuestra propia infancia. No sólo
de asumir su parte, ya sea por una obligación exterior, por un re
se quedaron sin satisfacer en el pasado, sino que
chazo puro y simple o a causa de un divorcio. ,
48 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 49

a menudo no se identificaron como tales, por lo que perpetúan estas una niñera, competente, desde luego, pero a la que no había visto
carencias y basta con casi nada para que entren en competición con las nunca antes. Irene no ha comprendido porqué su pequeño Tom estaba
de nuestros hijos, para que nos impidan escucharles, comprenderles y, en un estado semejante de decaimiento cuando lo ha vuelto a ver. No
a menudo, actuar hacia ellos de manera apropiada. quería alimentarse, dormía mal. Había inhibido su desarrollo. A pesar
«¡Me irrita con sus tonterías!» Maryse es incapaz de dar ternura a de las apariencias, Irene no tuvo en cuenta sus propias necesidades
su hija, pues sus propios padres nunca la cogieron entre sus brazos. A cuando decidió irse a los Estados Unidos. Respondió a los reclamos
pesar de su deseo consciente, el bloqueo es demasiado poderoso, no de su infancia. Su madre la había «abandonado» a ella a la misma
puede lograrlo. Cuando Eve se le acerca y le pide una caricia, ella la edad.
rechaza. Darle esta caricia significaría ver cómo Éve la recibe, y Claire es madre de tres niños.Yves sólo tiene dos, pero ambos
concebir la imagen de ella misma, siendo niña, recibiéndola, es tienen tendencia a volver tarde del trabajo. Reconocen sin reparos que
imposible. Ha sufrido tanto por no recibir nunca una caricia que no detrás de la excusa del trabajo que deben terminar hay un deseo de no
quiere despertar el dolor de la carencia. Prefiere negar su propia enfrentarse con los niños, con sus demandas, sus emociones. Sin lugar
necesidad: «Yo no he tenido, y no me he muerto», y negar las de su a dudas, el trabajo es más fácil. Los chavales se las apañan como
hija para enterrarlo todo. Puesto que si ella reconoce que Éve las pueden entre consolas de videojuegos y la televisión. Sus padres les
necesita, debería pensar, con toda lógica, que todas las niñas las rehuyen porque temen el contacto con sus emociones infantiles.
necesitan, y en consecuencia, también ella cuando era pequeña... El bebé no puede satisfacer por sí solo sus necesidades. Cuando
Cuando mis emociones de la infancia permanecen reprimidas, no los adultos de los que depende no están a su disposición, porque son
puedo percibir la realidad de las necesidades de mi hijo. Así que prisioneros de su infancia, se halla en un profundo desconcierto. Para
proyectaré mis propias necesidades, forzosamente desmesuradas, sobrevivir, para que le acepten y le amen, los más pequeños acceden
porque están frustradas desde hace mucho tiempo, o bien negaré en seguida a doblegarse a la buena voluntad de quienes les cuidan.
cualquier necesidad para no sentir mi sufrimiento. Aprenden a no llorar más si no se les va a buscar. Incluso aprenden a
Cuando lo constato, puedo formularme la siguiente pregunta: mamar más despacio si perciben que la fuerza de su succión inquieta a
«¿Quiero realmente entrar en competición con mi hijo?» su madre. Reprimen sus necesidades, sus afectos, se vuelven muy
Quince días después de dar a luz, Nathalie se ha ido a esquiar, «buenos niños» y constituyen el orgullo de sus padres. Pero de esta
confiando el bebé a su abuela. Se justifica clamando que necesita manera anulan sus emociones, y aprenden que no pueden confiar y
reposo y encontrarse a sí misma después de una experiencia se- que el mundo exterior es, a priori, hostil.
mejante. No tiene la menor idea de lo que puede sentir su hija. En cambio, si el padre y la madre están atentos a sus auténticas
Después de hablar con ella, me entero de que también su madre se necesidades, a su relación de pareja, a él o a ella en tanto que hombre
separó de ella en una etapa muy precoz. Ha enterrado su dolor, la ira y o mujer, si sus antiguas heridas están curadas, podrán reconocer las
el terror, e inflige a su hija la misma experiencia difícil, como para necesidades de su hijo y satisfacerlas.
decir a su madre: «Tenías razón, ¿ves?, no he sufrido, hago lo mismo Ningún libro, ningún experto podrá dar jamás respuestas uni-
a mi hija.» versales. Cada niño es una persona, distinta a todas las demás per-
Irene se ha ido dos meses a los Estados Unidos por razones la-
borales, dejando su hijo de tres meses en Francia, en los brazos de
50 El mundo emocional del niño
Siete preguntas que puedes plantearte... 51
sonas de este mundo. Por otra parte, un niño cambia. Evoluciona. No
calza el mismo número de zapatos toda su vida, y no tiene las mismas mente habría debido oír un sermón del estilo: «Si guardaras las cosas
necesidades. A los dos años adorará los puerros, y a los tres los no te pasaría», ha preferido intentar repararlo solo... y ha llegado el
odiará... No hay nada sólido en lo que apoyarse, ni hay ninguna drama. Mientras trataba de mantener juntos los trozos de su camión, el
estrategia sistemática que pueda aplicarse, es preciso adaptarse de gato ha saltado sobre la mesa del despacho de su padre y ha
forma permanente. No es fácil cuando hemos olvidado nuestra propia derramado el frasco de cola líquida sobre los papeles, que han
infancia. quedado pegados entre sí.
Para vivir felices juntos, contengamos los excesos de nuestros Con excesiva frecuencia, los padres se lanzan con toda su fuerza
hijos dentro de límites que podamos tolerar, y aprendamos a soportar sobre sus hijos, olvidando sus prioridades. Por un jarrón que se ha
un poco más. Recordemos dependen de nosotros y que somos sus que roto, un vaso que se ha derramado, una prenda de vestir en el suelo del
proveedores. Curemos nuestras viejas heridas para poder dejar vivir a salón, un juguete perdido, gritan, echan pestes, arriesgándose a herir a
nuestros hijos a su ritmo. Ganaremos en tranquilidad y en placer. sus hijos. Anteponen los parterres de flores, el sofá del salón o el
jarrón de la abuela a sus propios hijos.
Cuando nuestros hijos nos exasperan, cuando somos incapaces de «¿Qué es lo más valioso para mí?», es la primera pregunta antes
responderles o nos vemos tentados a sobreprotegerles, si se muestran de intervenir. El padre o la madre son adultos, poseen un cerebro
«demasiado buenos niños» o, al contrario, excesivos, planteémonos la capaz de inhibir una reacción automática y de elegir su com-
siguiente cuestión: portamiento en función de sus valores y de sus objetivos. El cerebro
de un niño aún no es capaz de ello.
¿Mis necesidades son incompatibles Si contesto: «Lo más valioso para mí es el amor de mis hijos, su
con las de mis hijos? confianza en mí, no tener que ruborizarme jamás delante de ellos»,
protegeré este amor, esta confianza.
No reaccionaré del mismo modo que si contesto: «Lo más valioso
¿QUÉ ES LO MÁS VALIOSO PARA MÍ? para mí es lo que piense mi suegra, lo limpia que esté la cocina, o mi
tranquilidad personal»; me arriesgo entonces a proteger mi imagen de
buena madre o de buena ama de casa, o bien mi tranquilidad.
Bea (dos años) solloza, desesperada. Se le ha escapado el vaso de las Desde luego, esta elección raramente es consciente, y por ello es
manos y su madre llega gritando como una loca. ¡Y no lo ha hecho a más poderosa. ¡Tu hijo oye tu inconsciente! Para él, tus reacciones
propósito! tienen más significado que tus palabras. Si, exasperada por un vaso
Hubert (siete años) se encierra en su habitación. Intenta hacer el roto o una mancha en su camisa, le humillas, le hieres, pensará que el
menor ruido posible. Le aterroriza la idea de que su padre descubra vaso o la camisa son más importantes que él mismo. A pesar de todos
todos los papeles que ha pegado entre sí en el despacho. No es culpa tus «te quiero, cariño mío», susurrados en otros momentos, asimila el
suya, sólo quería pegar un juguete que había pisado y se había roto. mensaje «no soy importante para mamá», o «sólo me quiere si soy
Sabiendo que, si lo hubiera dicho a su padre, segura- perfecto, si no soy yo mismo».
Ser consciente de lo que provoca nuestras reacciones hacia
52 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 53

nuestros hijos puede hacer cambiar de forma radical nuestros com- se había derramado y tenía que agacharme otra vez para fregar el
portamientos. suelo.
Theodora mantiene una relación espantosa con su madre. Durante Pero una cosa está clara, lo más importante para mí es el amor de
toda su infancia, ésta la humilló y menospreció. Ahora, Theodora mis hijos y la confianza en sí mismos. También deseo que confíen en
tiene hijos, y su madre se comporta de manera intolerable con sus mí. Así que mi opción es clara: no herirles nunca, ni mentirles,
nietos. No hace el menor caso al mayor y manifiesta de forma humillarles, traicionarles, aterrorizarles; en cualquier circunstancia me
evidente sus preferencias por el pequeño. Le llena de regalos, le lleva mostraré honesta, mostraré lo que siento y escucharé lo que sienten,
al zoo o al cine...Theodora, que hasta entonces no se atrevía a levantar les ayudaré a amarse, a valorar sus capacidades, a asumir sus
la voz a su madre, no decía nada. Cuando se preguntó qué era lo más responsabilidades sin culpabilidad.
valioso para ella, se dio cuenta de que, con su comportamiento,
protegía a su madre o, más exactamente, la esperanza de que al fin Cuando nuestros hijos perturban nuestro espacio, cuando no
ésta la quisiera. Y ello en detrimento de sus propios hijos. Esta simple sabemos cómo actuar, cuando sentimos que no actuamos en función
toma de consciencia bastó. La felicidad de sus hijos era más valiosa de ellos, sino de nuestros propios padres o, más en general, de lo que
que la sumisión a su madre. Theodora tomó una posición clara hacia piensen otras personas, preguntémonos lo siguiente:
ésta, quien, ante la determinación de su hija, abandonó rápidamente su
juego destructor. ¿Qué es lo más valioso para mí?
Un niño trastorna forzosamente el orden establecido por sus
padres. Es lo más natural. Si éstos no le dejan trastocar su orden, si
continúan «viviendo como antes», es decir, como si él no estuviera, ¿CUÁL ES MI OBJETIVO?
sin cambiar nada ni en su modo de vida ni en sus ritmos de trabajo o
de salidas, el niño podrá llegar a la conclusión de que no es En términos absolutos, no existe un buen o un mal camino. Existe el
importante, incluso de que no tiene derecho a una existencia propia. que me lleva a mi destino y el que me aleja del mismo. No cogeré la
Podrá concebir un sentimiento de vergüenza («molesto») y de misma ruta si quiero ir a España o a Alemania. Luego hay otras vías
inferioridad («no estoy a la altura»). menos directas, más o menos rápidas.
Un niño necesita sentir que es valioso, que tiene su lugar, que es ¿Está «bien» o está «mal» dejar que el niño elija la ropa que de-
importante y que tanto sus necesidades como su realidad se tienen en sea llevar esta mañana?
cuenta. ¿Está «bien» o está «mal» satisfacer una petición?
«¿Qué es lo más importante para mí?» ¿Está «bien» o está «mal» dejarle llorar?
Esta pregunta me ha ayudado cuando me despertaban varias veces ¿Está «bien» o está «mal» acostarle a las ocho?
cada noche, cuando la peonía que había plantado en el jardín sufría los En realidad, no está ni bien ni mal, tan sólo nos acerca o nos aleja
ataques de dos piernas que no lograban detenerse, o cuando el trabajo de un objetivo. Un día contestarás sí, y al siguiente dirás no. En
que acababa de hacer en mi ordenador se borraba por obra y gracia de función de la evolución de tu hijo, de sus necesidades y de tu objetivo.
la manipulación de unas manitas de dos años... o simplemente cuando En la relación con los niños, más que consejos exteriores sobre lo que
estaba cansada y descubría que algo está «bien» o «nial», es primordial que el padre o la

lIlMUMii ..
Siete preguntas que puedes plantearte... 55
54 El mundo emocional del niño
secuencia, nuestra relación con el niño, y todavía más por el hecho de
madre sean conscientes de su destino final: «¿Cuál es mi objetivo hoy que permanecen inconscientes. Ser consciente de estos objetivos nos
en mi relación con mi hijo?» permite elegir y crear la relación que queremos.
A Karine le acaban de regalar un par de patines por su cum- Si mi objetivo es el de tener una cocina impecable, no me
pleaños. Géraldine, su hermana mayor, de ocho años, también quiere comportaré del mismo modo que si mi objetivo es enseñar a mis hijos
unos, en seguida. Suzanne, su madre, ha dicho que no. Se los regalará que pueden tener confianza en mí en todas las circunstancias.
cuando sea su cumpleaños, dentro de dos meses. Bueno, se acercan las Si mi objetivo es el de permitir que mis hijos sean autónomos y
vacaciones. Estaría bien que las dos niñas tuvieran patines para jugar piensen por sí mismos, no me comportaré del mismo modo que si mi
juntas. Pero entonces sería Karine quien consideraría que la situación objetivo fuera el de transformarles en niños sumisos y obedientes.
es injusta. Suzanne se pregunta qué debe hacer, sopesa los pros y los Si mi objetivo es el de dar seguridad a mi hijo acerca del amor
contras, y me pide que le dé mi opinión. Le propongo que piense en su que siento por él, no actuaré de la misma manera que si mi objetivo es
relación con Géraldine en este momento y de que se plantee la el de ayudarle a crecer y a superar la frustración.
pregunta: «¿Cuál es mi objetivo?» Si mi objetivo es el de probar a mi marido que soy una mujer
Su relación con su hija mayor es difícil. Géraldine está muy ce- perfecta e irreprochable, no me comportaré de la misma forma que si
losa de su hermana... con razón, confiesa la madre. Desde el principio, mi objetivo fuera el de estar atenta a las necesidades de mis hijos.
todo es más fácil con Karine. Es normal, es la segunda. Suzanne me Mientras me preocupe el juicio ajeno, sea o no real, no puedo
cuenta el parto difícil de su primera hija, la historia de ambas. Le centrarme en las necesidades reales del niño.
inquieta no haber podido, no haber sabido manifestar tanto amor por Considerar importantes las necesidades de un niño, ponerle en
Géraldine como más tarde por su hermanita. ¿Su objetivo? primer lugar, respetarle, no significa ni «dejárselo hacer todo» ni «no
¡Arreglarlo! Decir a Géraldine lo mucho que la quiere, lo importante decir nada cuando estropea o rompe algo», es mostrar mis emociones
que es para ella. Entonces, ¿qué hacer? Yo no dije nada. Suzanne pero seguir amándole profundamente, y manifestárselo.
compró los patines aquella misma tarde a su hija, y le explicó que se Me gustaba de forma particular un bonito vaso hecho a mano y
los regalaba como prueba de su amor por ella y como reparación por adornado con una serpiente azul, que me regaló mi compañero. A los
el pasado. Suzanne dejó hablar a su corazón, Géraldine oyó el niños les había prohibido tocarlo. Un segundo de despiste bastó para
mensaje. Fue un momento fuerte para ambas. que un día, Adrien (dos años) lo cogiera y... lo soltara. Cuando el vaso
Otra situación, otro objetivo, habría necesitado otra reacción. No se rompió sobre las baldosas de la cocina... estallé en sollozos.
hay respuesta universal, sino una respuesta para aquel niño, para aquel Adoraba aquel vaso... Pero seguí siendo consciente de mi amor por
padre, en aquel momento de su historia común. mis hijos y de mi objetivo: transmitirles el mensaje de que mi amor
De hecho, detrás de cada uno de nuestros actos hay objetivos, más era incondicional, y que podían confiar en mí. Así que expresé mi
o menos conscientes. Puede ser que, en la realidad, nos comportemos enfado sin acusar a mi hijo que, tal como vi a través de mis lágrimas,
contra nuestros objetivos conscientes. Como Pamela, por ejemplo, que estaba ya bien asustado con la rotura del vaso. Al ver mi reacción,
proclama desear que sus hijos crezcan y sean capaces de pensar por sí Adrien se puso a llorar. Pude tranquilizarle, decirle que le seguía
mismos, y que cada noche les prepara la ropa que deberán llevar al día queriendo, y que necesitaba llorar
siguiente.
Nuestros objetivos determinan nuestras reacciones y, en con-
56 El mundo emocional del niño Siete preguntas que puedes plantearte... 57

porque me entristecía que mi vaso se hubiera roto. Le hablé de mí, no per más que si se siente diestro. ¿Tu objetivo es el de enseñar a tu hijo
de él. Mostré mis sentimientos, no le juzgué. la destreza o la torpeza?
Después de aquello repitió varias veces: «Una vez rompí tu vaso,
y tú lloraste, y yo también lloré». Habló del tema, necesitaba evocar la En realidad, si proteges siempre a tu hijo como lo más valioso
situación, como para digerirla. para ti, tus objetos frágiles aún estarán más seguros. Un niño que se
Cada vez yo respondí: «Sí, lloré porque me gustaba mucho aquel siente valioso se muestra atento con el prójimo y con las con-
vaso, y estaba roto, ya no servía para beber, es natural llorar cuando se secuencias de sus actos, actúa no por temor a actuar «mal», sino con
está triste porque hemos perdido algo que nos gusta.» respeto por los sentimientos ajenos y con responsabilidad. Así que,
Unos meses más tarde, Adrien puso sobre la mesa, con atención, ¿cuál es tu objetivo?
un gran vaso: «No lo he roto, ¿ves, mamá?, porque la otra vez rompí
tu vaso, y tú lloraste. No me gusta cuando lloras.Y yo también lloré ¿Cuál es mi objetivo?
porque había roto tu vaso. Tú habías llorado, y yo también había
llorado.»
Ahora, Adrien va con más cuidado, en general, con lo que toca. SIETE PREGUNTAS PARA GUARDAR EN LA MEMORIA:
Se lo formula él mismo, se ha vuelto consciente de lo que podía
representar para otra persona, para mí, la rotura, la pérdida de un 1. ¿Cuáles son sus vivencias?
objeto querido. Se ha sentido culpable, pero con un sentimiento sano
de culpabilidad que equivale a atención hacia lo que viven los demás y 2. ¿Qué dice?
consciencia de las consecuencias de sus actos, y que le guía hacia una
toma de responsabilidad. 3. ¿Qué mensaje deseo transmitirle?
En cambio, si le hubiera regañado, si le hubiera tratado de torpe,
si hubiera gritado, me habría arriesgado a que se sintiera mal en su 4. ¿Por qué digo esto?
interior. Habría experimentado un sentimiento de vergüenza y de
culpabilidad insana, para defenderse de una humillación habría 5. ¿Mis necesidades son incompatibles con las de mis hijos?
dirigido contra sí mismo un enfado bien natural pero inconfesable,
porque era «culpa suya». En lo sucesivo, tras haber aceptado la 6. ¿Qué es lo más valioso para mí?
definición de «torpe» o de «nunca prestas atención», habría ido con
cuidado no con los vasos y otros objetos, sino con «no ser torpe»... 7. ¿Cuál es mi objetivo?
Tenso, concentrado en un posible fracaso, en la torpeza más que en su
objetivo, el de llevar el vaso, sin duda habría roto otras cosas. No
obstante, y sobre todo si la aventura se hubiera repetido, habría
conservado la idea de que era malo, torpe. Y cuando uno está
convencido de que es torpe... uno se arriesga a rom-
Capítulo 3

La vida es moción

No siempre es fácil escuchar las emociones de los niños. Nos alteran,


amenazan nuestro sentimiento de ser una «buena madre» o un «buen
padre». Minan nuestra seguridad: «¿Qué debo hacer?» Ponen en jaque
nuestro papel de protector, nos enfrentan a nuestra función de
proveedor. Atrevámonos a decirlo, a veces nos gustaría que nuestros
hijos no lloraran, no chillaran, no tuvieran rabietas. Preferiríamos que
no manifestaran tantas emociones.
Pero resulta que sus afectos son lo más valioso que tienen, en
ellos residen su sentimiento de identidad, la sensación de su propia
existencia.
Un niño bueno como una estampa es tranquilo, pero en alguna
parte de su interior está muerto. La vida es el movimiento. Una
estampa es inmóvil. Para parecerse a una estampa, el niño ha tenido
que matar el movimiento que había en él. E-moción, e = hacia el
exterior, moción = movimiento. La emoción es el movimiento de la
vida en sí misma. Es un movimiento que parte del interior y se expresa
en el exterior. Es el movimiento de mi vida que me dice y dice a mi
entorno quién soy.
El miedo ayuda a prepararse y a protegerse. La tristeza acompaña
los duelos, la alegría es expansión, nos dinamiza. La ira define
nuestros límites, nuestros derechos, nuestro espacio, nuestra in-
tegridad, es reacción a la frustración. El amor nos vuelve a vincular al
prójimo.
Llorar, gritar, temblar, son remedios a las tensiones inevitables
60 El mundo emocional del niño La vida es moción 61

de la vida. La existencia de un niño está llena de frustraciones, de aprovechar para dar la lección:
preguntas, de miedo, de iras... Todos los bebés necesitan llorar, por «Tienes que dormir para estar bien mañana por la mañana»,
muy acompañados que estén. La emoción permite recuperarse, re- explicar:
construirse después de una herida. Un acontecimiento que hiere, un «¿Sabes?, tengo que irme a trabajar...»
accidente, una experiencia difícil, una injusticia, sólo se convierten en Damos respuestas, intentamos dar por terminado el asunto, re-
traumas si no se deja vía libre a la expresión de los sentimientos que solver el problema... y no escuchamos al niño. En realidad, en estas
suscitan. La fluidez emocional es la garante de la salud psíquica. expresiones no nos pide nada. ¡Sólo intenta decir YO!
Nuestras emociones tienen mala prensa, pero son útiles. Son las Expresa sentimientos, formula lo que siente, muestra su ser in-
que nos dan nuestra consciencia de Ser. terior, se dice y nos dice quién es y qué vive. Está sintiendo que existe
por sí mismo, ¿y nosotros le hablamos de otra cosa? Al contestarle
sobre el contenido en lugar de entender la emoción, le expresamos
¿QUIÉN SOY? UN SER DE EMOCIÓN claramente que sus sentimientos no tienen importancia, que su YO no
es nada. Detrás de nuestras explicaciones racionales, sólo oye que se
La llave que abre la puerta de la consciencia de sí mismo es la equivoca al sentir lo que siente.
emoción. ¿De dónde nos viene esta forma tan insensible de reaccionar?
—¡Hola hombretón! Hemos encerrado nuestras propias emociones tan lejos que preferimos
—No soy un hombretón, soy Adrien. no ir a buscarlas. No queremos dejarnos conmover... ¿Acaso tenemos
Adrien, con dos años y dos meses (precoz, desde luego), no le miedo a que nuestras emociones reprimidas vuelvan a surgir y nos
gusta que le definan. Desde hace unos días, reivindica su nombre. desborden? ¿Qué vivimos, pues, a su edad? Cuando tememos
Cuando, jugando, le acerco su plato y le digo: «El señor está servido», despertar un pasado probablemente demasiado doloroso, acabamos
contesta: «No soy un señor, soy Adrien.» negándonos a oír los gritos de nuestros hijos. De este modo los
Adrien existe. Afirma su identidad, su individualidad, su vida, encerramos detrás de los mismos barrotes que nosotros.
expresando lo que quiere y lo que no quiere, lo que siente, lo que vive. ¿Y si en lugar de esto lo aprovecháramos para seguir la dirección
«Yo estoy muy enfadado, irritado, estoy pero que muy enfadado.» que proponen, salir de nuestra prisión y dejarles su libertad de ser?
«Yo no tengo ganas de dormir.» Escuchar, acoger y otorgar validez a los sentimientos de nuestros hijos
«Yo estoy triste si te vas, no quiero que te vayas.» significa ayudarles a construirse en tanto que personas, a existir en
«¡Oh mamá, qué contento estoy yo de que hayas vuelto!» tanto que individuos. ¿Quién soy yo? YO.
«Cuando yo me metí toda la sal del salero en la boca, picaba El sentimiento de sí mismo reposa en la consciencia de las
mucho, yo lloré.» propias emociones. Soy aquel que yo me siento ser.
Cuando se expresa así, nos puede tentar contestar: Si el niño no puede expresar lo que siente, si nadie le escucha en
«Es así, y no de otra manera», sus lágrimas, sus rabietas o sus terrores, si nadie considera válidos sus
sentimientos, o no le confirma que lo que siente es justo y
62 El mundo emocional del niño
La vida es moción 63
que tiene derecho a sentir exactamente lo que siente, entonces el niño
puede llegar a borrar la consciencia de lo que experimenta en realidad. Vamos al circo. En la entrada venden toda clase de gorras lu-
O bien ya no siente nada más en su interior o bien experimenta... otra minosas intermitentes y objetos fluorescentes. Margot me tira del
emoción «autorizada» en lugar de su verdad. brazo y, enseñándome un bastón fosforito con el dedo, me dice:
Cuando al niño no se le permite sentir por sí mismo, queda... lo —Mamá, mira, ¡me apetece uno de estos!
que definen sus padres, sus profesores... los demás. Le dicen quién es, —No, no quiero comprar este chisme, me parece demasiado caro
encarna un papel. Ya no se siente Ser. —contesto de forma desafortunada...
Los adultos no siempre saben lo que es importante para un niño. Ella, exasperada, me replica:
Para nosotros, el ratón Mickey o Tom y Jerry dibujados en un plato —Ya sé que no me lo comprarás, pero al menos tengo derecho a
¿qué importancia tienen? Para un niño de tres años, es casi existencial. que me apetezca.
Coge rabietas terribles porque quería el plato de Mickey, el vaso azul, Pues claro que sí, estaba en su derecho. Me he dejado llevar por
el tenedor rosa, la mantequilla que aún está dura, o no quiere la parte una vieja respuesta automática.
quemada de la pizza... Nos podemos sentir exasperados, porque a su La cuestión de la frustración se plantea sin cesar en el acom-
edad no podíamos elegir entre tantas cosas.Y ello nos complica la vida pañamiento de la evolución de un niño. Entre los «permisivos» que
en ese momento. Todos estos «detalles» revisten para él una gran intentan frustrar lo menos posible y los «autoritarios» que frustran
importancia, escucharle es realmente útil para ayudarle a elaborar sus mucho más, ¿cuáles son las necesidades del niño?
gustos y preferencias. Incluso durante el inevitable período durante el
cual le encantan las setas un día y las aborrece al día siguiente.
Resistir a la tentación
A través de sus elecciones, se busca. Tiene preferencias y las ex-
presa. Toma consciencia de lo que le diferencia de los demás. Cons-
En su libro La inteligencia emocional, Daniel Goleman cita una ex-
truye su sentimiento de identidad. ¡Cuántos adultos de hoy no saben
periencia llevada a cabo por un psicólogo, Walter Mischel, con niños
decidirse, dudan entre los caminos a seguir, no saben expresar una
de cuatro años. A los niños se les planteaba la siguiente proposición:
preferencia por la pizzeria o el restaurante chino, dejan la elección en
«Te dejo en esta habitación, hay un caramelo de miel en esta caja. O
manos de los demás... les cuesta afirmar una identidad clara!
lo coges y sólo tendrás uno o esperas pacientemente el tiempo que
tarde en ir a hacer unas compras y te daré dos.»
«ENTONCES, ¿SE LES DEBE DEJAR HACER Aproximadamente una tercera parte de los niños saltó sobre el
DE TODO?» caramelo justo cuando salió el investigador. Los otros dos tercios es-
peraron su regreso y obtuvieron dos caramelos. Dado que esta ex-
Con esta frasecita se pretende reducir a la nada lo anteriormente dicho. periencia se llevó a cabo en una guardería de la universidad de
Refleja una incomprensión de lo que son las emociones y las Stanford, fue posible seguir a los niños en el curso de su escolaridad.
necesidades de los niños. No, la escucha respetuosa de las emociones Doce o catorce años más tarde, las diferencias en el terreno
no implica la satisfacción sistemática de las demandas. psicológico y social entre los impulsivos y los demás eran especta-
culares. Los que habían resistido a la tentación tenían mucha mayor
confianza en sí mismos, eran más sólidos, eficaces y capaces de
64 El mundo emocional del niño La vida es moción 65

superar los obstáculos. Eran menos vulnerables ante la duda, el miedo trolar mediante una dependencia (alcohol, droga, tabaco, pareja,
y el fracaso, resistían mejor el estrés y sabían perseguir sus objetivos a comportamientos compulsivos...) y/o se blinda, aprende a negar sus
pesar de eventuales dificultades. necesidades.
Los niños que se habían comido el caramelo de miel inme- Algunas personas, que veían cómo daba el pecho a mis hijos
diatamente presentaban un perfil psicológico más perturbado. Eran cuando me lo pedían, es decir, cómo respondía a sus necesidades y
más testarudos, indecisos, evitaban el contacto con los demás, se rehusaba dejarles llorar solos en una habitación, nos certificaron que
contrariaban con facilidad cuando las cosas no se desarrollaban según los convertíamos en seres debiluchos incapaces de administrar su
sus deseos y tendían a abandonar ante las dificultades. frustración. En realidad, constato que ambos administran su frustra-
Al final de los estudios secundarios, los primeros eran netamente ción de forma muy eficaz, e incluso sorprendente para su edad.
mejores alumnos. Obtenían resultados un veinte por ciento superiores En Suecia, un estudio ha puesto en evidencia una reducción
a los de sus compañeros. Saber resistir a un impulso, retrasar la notable del número de caries gracias a la instauración de un «día de
satisfacción de una pulsión, es muy importante para el futuro. A partir caramelos». El niño puede comer golosinas un día por semana, y
de los cuatro años, las aptitudes de un niño permiten predecir sus ninguna el resto de la semana. Me interesó la idea, por lo de las caries,
capacidades futuras. pero también para poner límites no represivos al consumo de
Los toxicómanos, los delincuentes, principalmente, son personas golosinas. Propuse la idea a mis hijos de cuatro y dos años.
que no soportan la frustración. El menor obstáculo a sus deseos se Elegimos el sábado. Informamos de ello al resto de familiares.
vive como una perjuicio grave. Era preciso evitar que una abuela o un tío los tentaran de manera
La aptitud para administrar la frustración, para diferir una satis- exagerada. Si recibían caramelos otro día, podían guardárselos para el
facción, para subordinar el presente a un futuro, es un elemento fun- sábado. Si se los comían de todos modos, allá ellos. Sabían que yo no
damental de la capacidad para ser feliz, pues es útil en la vida para re- estaría contenta. En general, esto bastaba para limitar los abusos.Yo
alizar proyectos y alimentar relaciones armoniosas con los demás. expresaba tan sólo mi desaprobación, ni los castigaba ni los reñía.
Sabían que no se trataba de «obedecerme», sino que era un contrato de
mutuo acuerdo.
¿Cómo aprende el niño a administrar la frustración? Muy a menudo, cuando a Margot le daban golosinas, me las con-
fiaba para «el sábado». A veces, veía cómo se apresuraba a ponerse un
Frustrar a un niño a propósito es un acto condenado al fracaso. Dejar caramelo en la boca o salía disparada hacia su cuarto para disimularlos
llorar a un bebé, rehusar tomarle entre nuestros brazos, privar a un en un rincón... Uno o dos caramelos comidos no son nada en
niño mayor de caricias o de regalos, fueron estrategias utilizadas por comparación con la importancia de este aprendizaje. Ahora bien, ella
los padres de antaño para «no mimar» y educar para la frustración. debía sentirse libre en su elección entre comer o guardar. De otro
Estos métodos han demostrado su ineficacia. modo, la frustración se la habríamos impuesto desde fuera.
El niño alimenta de este modo una sensibilidad particular a la Incluso Adrien, de dos años y medio, había disimulado cuida-
frustración, y cualquier demora en la satisfacción de una pulsión se dosamente tres caramelos que le había dado la persona que lo cuidaba
convierte en intolerable, la carencia crea angustia que intenta con- hasta el sábado siguiente. Otra vez logró conservar una piru-leta que
le habían dado en un restaurante durante todo el camino
66 El mundo emocional del niño La vida es moción 67

de regreso en coche, y me la confió como su hermana al volver a casa. Recordando su reproche cuando entramos en el circo, he mirado
En cambio, el sábado (cuatro días más tarde), al levantarse, sus los globos. También a mí me han gustado, y he exclamado:
primeras palabras fueron: «Quiero mi piruleta.» —El que me gusta más es el loro. Oh no, también está Simba con
su papá.
Y ella me ha seguido el hilo:
Necesidades y deseos —¡A mí me gusta más la sirena rosa!
Así que hemos dicho todo lo que nos gustaba. Un niño que estaba
Gracias a Francoise Dolto sabemos que demasiadas frustraciones cerca ha participado en el juego. «Mickey tampoco está mal»...
pueden traumatizar, pero también que la frustración es necesaria y Hemos pasado un buen rato hablando juntos, soñando... ya no
ayuda a crecer. Sabemos que hay deseos y necesidades, y que no necesitaba comprar el globo. El deseo expresado de tener un globo ha
podemos ponerlos a ambos en el mismo saco. desaparecido ante la necesidad satisfecha (la necesidad de sentirse
Los niños no necesitan el coche rojo o la muñeca rubia, sino que vinculada, de compartir algo).
les apetece. En cambio, necesitan absolutamente que su enfado, Todo lo dicho no tiene nada de sistemático. Satisfacer las ganas
expresión de su frustración, se respete y oiga. Está claro que es im- dando caramelos o regalos no es tóxico en sí mismo. Rechazar cual-
portante no decir sí a todo, resulta positivo que se les rechace algo de quier compra con la excusa de que no las necesitan sería una injusticia.
forma justificada. Los niños correrían el riesgo de deducir que se les prohibe el placer,
¿Que coge una rabieta de cuidado? En realidad no necesita el ca- con todas las consecuencias que ello puede tener sobre su alegría de
ramelo, aunque tenga muchas ganas. Necesita expresar su frustración. vivir presente y futura. Es bueno recordar que los caramelos o los glo-
Intenta que oigamos su furor. Es importante para él, porque necesita bos que se dan o se niegan no son tan sólo una golosina o un jugue-
comprobar que tu rechazo no significa una ruptura. Le has dicho que tito, sino pretextos para un aprendizaje de la relación. No dejemos que
no, la relación está en peligro, en seguida se siente superado por la in- unas cuantas golosinas alteren nuestras relaciones con nuestros hijos.
tensidad de lo que siente. Chilla, pero obsérvalo, intenta pegarte, busca La frustración es inevitable en la vida, así que es inútil poner más
el contacto. Si lo esquivas, pega la pared, un objeto, se arrastra por el de nuestra parte. Un día, para que el niño respete tus necesidades, para
suelo, necesita reparar la relación. No lo prives, pues, del contacto en protegerle, para garantizar su salud, le vas a frustrar.
el momento en que lo necesita más. La cuestión, pues, es la siguiente: ¿cómo acompañar la aparición
Durante el intermedio, Margot mira con ganas un grupo de globos de la frustración? Acepta escuchar su enfado.
que pasa entre las hileras de asientos.
—¡Mamá, quiero un globo!
Habría podido decirle no, y cantarle la lección: «NO LE ENTIENDO»
—No puedo estar siempre comprando, estos globos son caros,
o mentirle: El mensaje está desplazado
—-No me queda dinero,
despistar su atención: Margot se pelea con su hermano. Juegan a indios con muñequitos.
—Miremos juntas el programa, enséñame lo bien que sabes leer. Ella quiere el caballito gris que su hermano aprieta celosamente
68 El mundo emocional del niño La vida es moción 69

en su mano, y no el marrón que él le propone. La crisis estalla. Ella do le dice «tú».Y sin embargo, Lucile tiene razón. Martine, su madre,
llora, quiere de todas todas el caballo que no puede tener. ¿Qué su- no logra relacionarse de forma profunda. Es de carácter muy sociable,
cede? superficialmente extrovertida, pero en realidad no se gusta. Una vez
Amplío mi mirada al conjunto de la escena: su madrina está establecido el primer contacto, prefiere alejarse, por miedo a que la
sentada en el sofá y charla con el padre de Margot. Unos minutos antes gente descubra quién es en realidad, es decir, quién cree ser: alguien
había subido a ponerle el pijama, y me había confiado: «Voy a llenar muy poco interesante que no tiene nada que decir.
de besos y mimos a mi madrina, porque no la veo muy a menudo.» Martine y Lucile han ido juntas de vacaciones. Se han reído y han
Cuando hemos vuelto a bajar, su madrina estaba enfrascada en la compartido buenos momentos. La niña ha visto que su madre estaba
conversación. Margot no se ha atrevido a interrumpirla y se ha puesto alegre, que salía de esta tristeza en la que se hunde con demasiada
a jugar tranquilamente, cerca de allí. Esperaba una señal de su madrina frecuencia. No quiere dejarla sola una vez más con el pretexto de que
para ir hacia ella. Pero la señal no ha llegado. Estaba frustrada. Es vuelve a empezar la escuela.
imposible expresar el verdadero origen de la frustración sin arriesgarse Ha intentado darle a entender a su madre que le iría bien tener
al rechazo. Entonces ha expresado su frustración de forma indirecta, amigos, amigas... Pero su madre le ha contestado banalizan-do: «He
transfiriéndola al caballo. Ha entrado en conflicto con su padre, en tenido amigos, y bien, hoy ya no tengo, así es la vida». Entonces, ante
lugar de con su madrina, pero el mensaje estaba claro: «No me das lo la duda de si irse a la escuela sin decir nada más, ha intentado un
que quiero.» último mensaje, cargando ella con el problema. Su madre no ha
entendido nada. Claro que tiene amigas.Y ella intentaba decir a su
madre que le gustaría que ella también tuviera.
Ella traduce lo que no me confieso Una vez más, los caprichos no existen. Si no entiendes lo que tu
hijo te presenta, intenta ir un poco más lejos, reflexionar acerca de lo
Al regresar de las vacaciones de Navidad, Lucile llora: que puede vivir. ¿Qué está diciendo acerca de sus necesidades? ¿Está
—No quiero ir al cole, no tengo amigas. expresando algo que no le pertenece?
Su madre no lo entiende. Escucha el mensaje y amplía tu mirada para abrazar el conjunto
—Claro que sí, ¿por qué lo dices? Tienes un montón. Alexandra, de la situación. ¿A quién o a qué puede dirigirse el mensaje?
Chloé, Nuria, Saida, Camille, son amigas tuyas, ¿no?
—Ya no quieren jugar conmigo.
—No es verdad, Chloé te invitó a su casa el miércoles pasado, vas Mi bebé llora sin razón
a ir a casa de Camille la semana que viene, y cuando llego a la escuela
te encuentro enfrascada en tus juegos con una o con la otra. Los lloros se asocian al sufrimiento. En realidad, tal como explica
Lucile se traga sus lágrimas y, resignada, se dispone a ir a la es- muy bien la doctora e investigadora Aletha Solter, son el esfuerzo del
cuela. Ampliemos una vez más nuestra mirada al conjunto de la si- organismo para reconstruirse, son el proceso terapéutico. «Llorar es
tuación. una herramienta natural de reparación», nos dice. Llorar hace bajar la
Lucile dice que no tiene amigos. Pero en realidad sí tiene. ¡A lo tensión arterial, permite eliminar toxinas, relaja las tensiones
mejor no habla de ella! Dice «yo» porque su madre no la oye cuan- musculares, restablece la respiración. Después de haber
70 El mundo emocional del niño La vida es moción 71

llorado, pero llorado de verdad, sollozando profundamente, uno se Mi hijo lloriquea por todo
siente distendido, liberado.
El trabajo de psicoterapia consiste en gran parte en expresar Los lloriqueos por cualquier cosa de un niño algo mayor pueden ser
emociones enterradas en el pasado para encontrar el ser verdadero. intentos de encontrar un medio de llorar de verdad. Sus afectos están
Una vez se ha vuelto a encontrar el recuerdo de una experiencia bloqueados y necesita una ocasión para liberarlos. El niño busca un
dolorosa, yo invito a las personas a «llorar hacia afuera» lo que nos permiso, un pretexto para dejar salir sus lágrimas o su enfado. Incluso
duele. Los bebés, como todo el mundo, necesitan llorar hacia afuera lo el niño mayor que tiene acceso a la verbalización, o el adulto,
que les hace sufrir. necesitan llorar, gritar, temblar, para liberarse de emociones fuertes.
En consecuencia, el llanto no tiene siempre por motivación las De todos modos, hay lloros que curan y otros que mantienen el
necesidades inmediatas, puede ser simplemente la expresión de ten- problema. Los lloros inútiles empiezan en la parte alta del pecho, y
siones acumuladas, de quejas relacionadas con el pasado. Cuando, por pueden ser sin lágrimas. Son sentimientos de sustitución y sirven para
ejemplo, el parto ha sido difícil, el bebé puede necesitar quejarse, a la represión emocional, y no para la liberación. Los lloros de
veces varias semanas más tarde, por un nacimiento que ha vivido en el liberación suelen ir acompañados de sollozos y lágrimas.
miedo o el dolor. Aprieta al niño contra ti con firmeza y ternura hasta que libere la
Los bebés tienen enormes necesidades de ternura, de contacto, de emoción contenida. A menudo comenzará rechazando el abrazo, y
que les lleves contigo, de olores, de caricias. Un bebé plantado luego se pondrá a sollozar.
durante horas en una cuna acumula tensiones que necesitará «llorar
hacia afuera».
Cuando las emociones suscitadas por los sufrimientos, las ca- Sueños y pesadillas
rencias, las frustraciones, no pueden expresarse inmediatamente o
nadie las oye, se graban en el cuerpo. Desde el momento en que el Margot (cinco años) me viene a ver en plena noche:
niño percibe una ocasión para liberarse de todas estas tensiones, por —Mamá, he tenido una pesadilla, quería contártela. Había un lobo
ejemplo cuando su madre vuelve a casa por la noche, la aprovecha y que ha atrapado una cabra. Ha encerrado a la cabra en una jaula.Yo,
se pone a sollozar. Así expresa su sentimiento de desamparo. Se con mis amigas, queríamos soltar a la cabra. Pero le teníamos miedo al
descarga de lo que llevaba en su interior. Entonces necesita lobo. He logrado abrir la jaula, la cabra ha salido, pero el lobo me ha
acompañamiento, respeto por lo que vive, contacto, para aceptarse en saltado encima y me ha mordido la mano.
esta emoción sin sentirse amenazado de destrucción. No intentes hacer Todos los personajes del sueño representan distintas partes, dis-
callar los llantos, al contrario, favorécelos para que el niño se sienta tintas emociones, de quien lo sueña.
liberado. El día antes, por la noche, nos habíamos peleado. Ella quería que
El pediatra T. B. Brazelton coincide con Aletha Solter a la hora yo le hiciera un nudo en los cabellos con un pañuelo. Dado que el
de hablar de una necesidad de descargar tensiones acumuladas resultado no estaba a la altura de lo que esperaba, y que el nudo no era
durante el día. Según ellos, la mayoría de bebés llora un promedio de «como el de su amiga», se había enfadado de lo lindo. Gritó, me pegó,
una hora al día como mínimo. quiso tirar por el suelo mis papeles...
72 El mundo emocional del niño La vida es moción 73

Volvamos al sueño. Podemos oír que una parte de los senti- Los monstruos pueden ser imágenes de la realidad, o que se
mientos de Margot (la cabra) han sido encerrados en una jaula. Ella hayan visto en la televisión y no se hayan comprendido o identificado,
reprimía sus emociones. Una cabra es testaruda, tiene cuernos, sabe lo o imágenes de las sombras que el miedo deforma, o bien proyecciones
que quiere. La cabra personifica probablemente deseos frustrados. Al de emociones inconscientes. Busca lo que sucede en este momento en
fin ha logrado (con la ayuda de sus amigas = con el pretexto del la vida cotidiana de tu hijo, en su vida de familia, pero también en el
pañuelo) liberar la cabra. Pero le teme al lobo. Este lobo es la pasado reciente y, si se repite la pesadilla, en el pasado más lejano.
personificación de su agresividad. Cuando ha liberado la cabra, el ¿Tu hijo ha tenido miedo de algo en ese día o en los días pre-
lobo le ha saltado encima = cuando ha manifestado su emoción, su cedentes? ¿Tiene motivos para estar enfadado? ¿Tiene una carencia?
agresividad la ha invadido. Tiene miedo de lo que ha hecho, ha ¿Una frustración? ¿Uno de los padres está ausente? ¿Los padres se
orientado contra ella misma su agresividad. ¡Y aquella mano que pegó han peleado? ¿Le han pegado? ¿Hay un secreto en la familia, algo que
a su mamá se la ha mordido el lobo! nadie ha querido o pensado decirle? ¿Ha vivido acontecimientos
Margot tiene tres años. Le cuesta dormirse y a veces se despierta dolorosos? ¿pérdidas, frustraciones, injusticias, choques susceptibles
por la noche: le tiene miedo al lobo. Hemos terminado por darnos de crear un trauma? (hospitalizaciones, mudanzas, accidentes...)
cuenta de que este pánico la visitaba regularmente cuando durante el A veces, hechos muy antiguos vuelven a subir de esta manera a la
día había pegado a su hermano. superficie varios meses o incluso varios años más tarde. Las
Cuando Margot pega a su hermano, se siente mala. No quiere emociones habían sido enterradas, esperaban un pretexto para des-
sentirse mala, y entonces proyecta esta maldad fuera de ella. No es pertarse e intentar reaparecer en el sueño para hacerse oír.
ella, la mala, es el lobo, desde luego. Pero este lobo malo da miedo. Además de la verbalización, el dibujo es una herramienta ex-
¡«Castigará» al niño por su maldad! celente. Propon a tu hijo que dibuje su pesadilla. Ello le permitirá
«Estoy enfadada, no debería estarlo, soy mala, no, el malo es el tomar distancia, tener la sensación de poder dominarlo. Dibujar es
lobo y me castigará, tengo miedo.» identificar, poner límites. En su dibujo, el niño combate el sentimiento
Así, con frecuencia el miedo es el síntoma de que el niño dirige de impotencia: me atrevo a mirar mi pesadilla y la encierro en una
contra sí una ira indecible. De hecho, Margot está furiosa con su hoja de papel, soy más poderoso que ella, tengo un poder sobre ella.
hermanito que, decididamente, llama demasiado la atención de todo el Durante las noches siguientes, antes de acostarle, invítale a di-
mundo. Necesita que sus padres le hagan sentirse segura. bujar todas sus preocupaciones «para que no vengan a molestarle por
Los lobos, los monstruos, los ogros... sirven de soporte de pro- la noche». Cuidado, no interpretes su dibujo. No intentes «psi-
yección a este enfado que es preciso situar fuera de sí para no coanalizarle», es una historia entre él y él. El dibujo de una pesadilla
arriesgarse a que nos destruya. El niño puede tenerle miedo al ogro no te dará la ocasión de descubrir la causa. Esta técnica es útil para
que hay debajo de la cama, al monstruo del armario o al lobo que le ayudar al niño en una primera aproximación, pero si el problema es
comerá... cuando está despierto. También puede verlos aparecer importante, no bastará, evidentemente, para curarlo. La emoción
cuando duerme, en sus pesadillas. bloqueada debe liberarse.
Todas las pesadillas deben tomarse en serio. Escucha a tu hijo,
intenta, junto a él, comprender lo que representan las imágenes. El
hecho de nombrar a los monstruos ya les quita poder.
74 El mundo emocional del niño La vida es moción 75

Si tu hijo no tiene ganas de dibujar, o si quieres variar la panoplia sentido cuando su madre le ha propuesto que se disculpara con su
de soluciones, puedes proponerle que imagine en su cabeza una caja hermano... y se otorga el derecho a llorar porque se ha hecho daño
de preocupaciones. La decora mentalmente como quiere. Antes de con la mesa. Aunque, por desgracia, siempre puede haber alguien que
dormirse, pone todas sus preocupaciones del día en la caja, la cierra le diga: «¡Podrías ir con más cuidado!»
bien y no la vuelve a abrir hasta el día siguiente. Reconocer las emociones propias, sean o no sentimientos agra-
También puedes regalarle una muñequita o un peluche, que hará dables, sean o no pensamientos agradables, sean o no comporta-
las funciones de muñeca de preocupaciones. Al acostarse le confia sus mientos adaptados, significa aceptarse como uno es, construir la
inquietudes, y ella las guardará toda la noche. Desde luego, es muy confianza en sí mismo.
importante volver a abrir la caja o descargar de nuevo a la muñeca de La consciencia de sí mismo se construye a medida que se van
preocupaciones al día siguiente. De otro modo estas técnicas no adquiriendo experiencias, y siempre que las emociones se oigan, se
funcionarían mucho tiempo. Las preocupaciones necesitan que las aprueben y se hablen. En cambio, cuando el entorno (padres,
escuchen, y las soluciones deben irse adaptando. profesores...) niega sistemáticamente los sentimientos, rehusa oír,
ridiculiza las emociones... el niño llega a pensar que lo que siente,
piensa y hace no está de acuerdo con lo que sus padres esperan.
LA REPRESIÓN EMOCIONAL Los padres de Máxime, de Alexandre y de Corinne a lo mejor
están orgullosos de ver que sus niños son tan valientes, fuertes o
«Yo no tengo miedo», dice Máxime para hacerse valer delante de su dóciles, pero no se dan cuenta del precio que pagan.
amiga. Pero no se acerca al gusano que ella sujeta en su mano. Todos tenemos emociones.Y todos sentimos las mismas emo-
«No me has hecho daño», dice Alexandre a su padre, que le acaba ciones en las mismas circunstancias. Todos los humanos son parecidos
de dar una buena tunda. desde un punto de vista fisiológico. Todos nosotros algún día nos
«Perdona», dice Corinne a su hermano pequeño, reprimiendo la hemos sentido tristes, cansados, turbados, aterrorizados, furiosos,
intensa ira que siente. Unos minutos más tarde, se da un golpe contra encolerizados, culpables, avergonzados, excluidos, celosos, en-
un mueble. vidiosos, aliviados, o felices... Pero como nadie habla nunca de sus
Máxime, Alexandre y Corinne niegan sus afectos. Componen un sentimientos profundos, cada cual se siente solo viviendo lo que vive.
personaje que no es ellos. Durante toda su vida les faltará seguridad Cada cual se cree distinto a los demás, porque siente emociones que
interior, porque no podrán confiar en lo que sienten dentro de sí. los demás no parecen vivir. Se siente mal por tener semejantes
Como Corinne, que se ha dado un golpe contra la mesa, se darán sentimientos, se cree inútil, malo, insoportable... Se juzga
golpes contra los acontecimientos de sus vidas. negativamente y se trastorna con la idea de que los demás hagan lo
¿Por qué Corinne ha chocado con esta mesa? Es un proceso mismo. En consecuencia, disimula sus afectos, se pone una máscara
inconsciente muy corriente en nuestra experiencia cotidiana. Ha que le parece que corresponde a lo que los demás esperan de él. Tiene
sentido una inmensa herida al verse obligada a tragarse su verdadera un miedo incesante a que alguien descubra que no es lo que parece, y
emoción. Para defenderse de este sufrimiento, ha preferido infligirse trabaja cada vez más en su disimulo.
otro, más físico y, en consecuencia, más «objetivo», que le permite Todos tenemos fantasmas «impíos», pensamientos «impuros», o
expresar dolor. No ha podido llorar la humillación que ha mejor dicho, que nosotros definimos como impíos o impuros, por-
76 El mundo emocional del niño La vida es moción 77

que nuestros padres no han querido confesar nunca que tenían los son una pulsión inherente al ser humano, son un mecanismo de
mismos. protección contra la emoción. Para no sentir que «siento» dolor,
Todos tenemos fantasmas. Un fantasma es una imagen mental prefiero dirigir mi rabia contra otro. La represión de la emoción hacia
relacionada con un deseo, con una emoción. Puede ser un fantasma de el inconsciente es lo que a veces lleva al individuo a estar sumergido y
omnipotencia, veo a mi enemigo atado a un poste mientras le miro actuar de forma violenta.
riendo... un fantasma de ira, veo a mi enemigo herirse, caer, sufrir... Si reconocemos nuestros afectos, aceptándolos, aprendiendo a
un fantasma enamorado, veo cómo el chico que me gusta viene a tolerarlos sin tener miedo a quedar destruidos por ellos, otorgándoles
buscarme y se me lleva sobre su fogoso caballo... un fantasma de palabras, podemos ser conscientes de la totalidad de nosotros mismos
miedo, veo a un monstruo que me persigue para comerme. .. un sin tener que vivirlos realmente.
fantasma de desprecio, imagino que cuando voy a tomar la palabra, Es importante mostrar al niño que el reconocimiento y la ex-
los demás me mirarán con aire condescendiente y despreciativo. presión verbal de sus impulsos más violentos no destruyen ni la re-
¿Quién habla de sus temores, sus sueños secretos, sus deseos? lación ni a nadie.
¿Quién habla de su soledad o de su frustración, sus celos o incluso su «Comprendo que estés enfadado, y te sigo queriendo.» Si los padres
amor y su placer? Así que, de forma muy obvia, la conclusión es no autorizan la expresión de su cólera, la reprimirá con culpabilidad e
simple: lo que pasa en el interior de uno es sospechoso, extraño, es inquietud. Si la madre rompe a llorar, el niño asimilará la fantasía de
mejor silenciarlo. que puede destruir a su madre. Si recibe una paliza, puede quedar
A menudo se cree que la represión de las pulsiones sirve para la aterrorizado ante la idea de que le destruyan, sobre todo si es pequeño
vida en colectividad y que, si todo el mundo «se escuchara», ya no y todavía no diferencia bien entre él mismo y los demás, pues
podríamos vivir todos juntos. Observemos la realidad, el índice de
entonces percibe los golpes de su padre o de su madre como la
violencia nos muestra que la ruta de la represión no es la buena. La
continuidad natural de su propio enfado.
negación, el no tomar en cuenta, la no escucha de las emociones, sólo
Cuando el niño (y más tarde el adulto, si no ha resuelto esta
consigue encerrarlas en una olla a presión. Cuando las válvulas son
angustia en la infancia) debe reprimir su rabia, puede tener miedo a
insuficientes, la tapa salta.
quedar destruido desde el interior por ella. Contiene la rabia con
Ciertamente, si concretáramos nuestros impulsos de pegar, es-
determinación, puesto que si deja que ésta se exprese... ¡correría el
trangular, matar, torturar, cada vez que tuviéramos esta fantasía, la
riesgo de estallar en pedazos! Teme perder la consciencia de los lí-
vida se volvería imposible. De hecho, se apagaría en seguida, pues nos
mites de su ser, de su cuerpo, cuando en realidad, la expresión de su
mataríamos rápidamente entre nosotros. ¿El único modo de no matar
cólera le permitiría tener el sentimiento de su contorno, afirmar su
al prójimo es reprimir la ira? ¿No podemos aprender a reconocer
nuestros afectos sin que éstos se conviertan en nuestros amos? identidad.
Cuando los padres permanecen insensibles frente a la emoción del
Freud mostró ya que volverse consciente de las pulsiones des-
niño, cuando le mandan a su habitación para que llore o «se le pase su
tructoras, lejos de convertirnos en seres destructivos permitía re-
enfado en otra parte», cuando no se ocupan de él, el niño está
construirse. Las ganas de destruir, de hacer daño a los demás, no
desesperado. Comprende que sus emociones amenazan la relación.
Apenas tiene elección. No puede permitirse romper el vín-
78 El mundo emocional del niño La vida es moción 79

culo, pues está en juego su supervivencia. Sus padres le protegen, le Mi bebé quiere su chupete
alimentan... Para conservar la relación y, en consecuencia, sobrevivir,
es preciso que borre lo que siente, que se insensibilice. La función de los chupetes es, a menudo, la de evitar los llantos, son
El psicólogo Harold Bessell emplea una imagen muy gráfica. útiles para la represión emocional. Cuando un bebé llora, los padres
«Cuando uno trabaja con sus manos, ve cómo aparecen los callos. no tienen reparos a la hora de afirmar que necesita su chupete para
Éstos protegen las manos y evitan que se cubran de ampollas. Cuando dormirse, para calmarse. En realidad, los padres no soportan los gritos
uno se siente herido en sus emociones, se forma algo que parece un del niño, así que le piden que se calle. Le ponen el chupete en la boca,
callo, algo que protege a los tejidos contra la irritación que se avecina; impidiéndole liberarse de las tensiones que él reprimirá un poco más
pero evidentemente, como los callos de las manos, este algo no es tan lejos, un poco más en su interior.
sensible ni flexible como la piel original. Una persona que estuviera Tu bebé siente una emoción, reflejo de una necesidad. Intenta
completamente cubierta de callos afectivos no percibiría el mundo de comunicártela. Tú interpretas que es una necesidad de succión. Le das
manera plena, abundante, ni siquiera adecuada.» un chupete. Le estás enseñando a tu hijo a necesitar algo en su boca
Esto es exactamente lo que sucede. Nosotros mismos nos for- cada vez que vive una emoción. ¿No crees que más tarde tendrá
mamos callos afectivos durante la infancia, que alteran en seguida tendencia a estar picando todo el día o a comerse las uñas cada vez
nuestra percepción del mundo y nos ocasionan numerosos problemas. que se sienta emocionado?
Se trata de callos, protecciones contra la emergencia de las emociones
de nuestra infancia, que nos impiden ser tan sensibles como
podríamos ante lo que viven nuestros hijos. Es el bebé ideal, siempre está durmiendo
Para acompañar a un niño en la consciencia de sí mismo, el adulto
debe estar libre de cualquier «callo psíquico» o, cuanto menos, ser ¿Nunca has oído esta frase? Muchos bebés duermen para no llorar. Es
consciente de los mismos a fin de poder ponerse en el lugar de su hijo otra manera de no sentir cuando no se le permite sentir. Dormir es una
sin proyectarse él mismo, poder sentir sus sentimientos sin filtrarlos o reacción de defensa contra el estrés.
interpretarlos. Me quedé estupefacta las primeras veces que veía a mi hija caer
El miedo, los sollozos, la expresión emocional son sanadores. El en un sueño profundo cuando entraba con ella en una galería co-
problema no es el de jamás herir o jamás mostrarse injusto hacia un mercial. Demasiado ruido, demasiada tensión... ¡mejor dormirse!
niño. La cuestión es la de dejarle «decir», proporcionarle espacio para Los bebés que lloran duermen menos. Están menos cansados por
vivir emocionalmente y liberarse de las tensiones ocasionadas por la sus tensiones, relajados por sus sollozos, y a menudo se interesan más
herida o la injusticia. por su entorno y permanecen despiertos más tiempo.

¡No se expresa!

1. Dr. Harold Bessell, Le Développement socio-affectif de l'enfant,


Éd. Actua-lisation. Matthieu no llora nunca. No le teme a nada. Acepta las frustraciones
sin inmutarse. En su entorno, se dice de él que es fuerte, que
80 El mundo emocional del niño La vida es moción 81

es valiente. Satisface el ideal social de virilidad y, sobre todo, ¡no alteración de la persona. Alexandra se anestesió. No sintió nada
molesta a los adultos! Lo que pasa es que Matthieu es, en cualquier cuando su madre le anunció que su padre se iba, pero se juró en su
caso, una persona, con sentimientos humanos. Si no muestra nada, interior que nunca amaría, para no tener que sufrir después.
ello significa únicamente que ya ha aprendido a retener sus afectos, a Pedro se burla fácilmente de su hija Amalia, y ella no replica. No
enterrar en el fondo de sí mismo sus emociones, a hacer callar su ser se enfada, porque sabe que su padre bromearía acerca de su
interior. susceptibilidad. A pesar de las alegaciones de su padre: «Lo digo por
Acaso imita a uno de sus padres, o incluso a los dos. Tal vez ha decir, no puede tener ninguna consecuencia», siente dolor, y cali-
sufrido una grave injusticia, un abandono, una falta que no ha podido ficativos como «atontada» u otros por el estilo resuenan en su cabeza
comunicar. Quizás percibe un peligro si expresa lo que siente. Tal vez y se graban como definiciones de sí misma.
sus emociones han sido reprimidas de forma sistemática desde que era La emoción es sana. Su represión es peligrosa para la persona.
un bebé, o bien el sufrimiento interior es tan intolerable que prefiere Los niños pueden disimular sus sentimientos, incluso pueden de-
no sentirlo. De cualquier forma, necesita ayuda para salir de su fenderse de ellos hasta el punto de no sentirlos, pero en detrimento de
caparazón, para atreverse a renacer en sí mismo. Su negación es sus plenas capacidades emocionales y sociales .Y en igual medida
proporcional al sufrimiento del que se defiende. disminuyen su coeficiente emocional.
Julien soportó a la perfección el nacimiento de su hermano pe- Para permitirse sentir y expresar las emociones, los niños ne-
queño, al menos ésta es la certeza de sus padres. Nunca se ha mostra- cesitan que los padres se lo permitan. Para que esta autorización sea
do celoso de Máxime. Le ha acogido con placer, le ha cuidado mucho válida, debe ser verbal y no verbal, es decir, manifestarse en
y, por otra parte, su comportamiento no ha cambiado en absoluto. Los comportamientos concretos, y sobre todo ir provista de protección.
padres no han visto que, simplemente, Julien no se ha dado permiso Nadie puede expresarse si teme que le ridiculicen o infravaloren. Para
para sentir ningún tipo de celos. Pensaba que no tenía derecho a confiar en un adulto, el niño necesita estar seguro de que este último
sentirlos, que no era lo bastante importante. Al adoptar un papel de le protegerá contra eventuales burlas.
hermano mayor le han reconocido, aceptado. Para confiar realmente en sus padres, los niños también necesitan
Cuando su madre le anunció su divorcio y que papá se iba, estar seguros de la potencia personal de aquéllos. La potencia no es ni
Alexandra no dijo nada. Se fue a su habitación, abrió un libro y se la fuerza que obliga, ni el control o el poder, es un sentimiento de
puso a leer. Su madre se sintió aliviada, con la impresión de que seguridad interior y una aptitud para vivir sus propias emociones.
Alexandra se lo había tomado muy bien. ¿Pero acaso es posible to- Mostrarse fuerte, ocultar los temores o los dolores a los niños no les
marse bien el anuncio de la separación de los padres? Sí, si uno de los da seguridad, sino que les transmite el mensaje de que es preciso
dos se muestra realmente violento o si las peleas son continuas. En el comportarse así en la vida. Ser potente no significa mostrarse
caso de los padres de Alexandra, no sucedía nada de esto. A pesar de insensible, significa mostrar que no se teme a las propias emociones
sus divergencias, habían mantenido hasta el final una imagen de viviéndolas.
pareja unida. Según la madre, Alexandra no tenía porqué saber que Cuando observes que tu niño no muestra la intensidad de sus
sus padres ya no se entendían. sentimientos ante un acontecimiento determinado, díselo. Ayúdale a
Lo que se suele llamar «tomarse bien las cosas» equivale a re- identificar lo que siente: «Estás furioso porque no he jugado como tú
primir los afectos. Y esta represión no puede manifestarse sin una querías.»
82 El mundo emocional del niño La vida es moción 83

¿Acaso sus padres temen las emociones? ¿Tal vez no se expresa niño pequeño, pues, al cabo de unos minutos ve hacia él con ter-
para no ponerles en un compromiso? Dale permiso para que su peso nura: «Bueno, cariñito, ¿aún estás enfadado?» Abrázale, bésale y llé-
no recaiga sobre sus espaldas: vale con naturalidad hacia una nueva actividad.
«No eres responsable de tus padres, ni de sus sentimientos.» «Tu Si es mayor, atráele hacia otra actividad que le guste sin volver a
madre no expresa lo que siente, tú tienes miedo de sus emociones. Lo aludir a su enfado.
entiendo, pero no te alejes. Ayúdala a salir de sí misma, ¡atrévete!» No olvides nunca que el niño debe encontrar una salida positiva.
No le obligues a salir humillado de este enfado. La humillación es
un auténtico veneno para su psiquismo.
¿Está de morros?

El enfado es un lenguaje. Dice que hay sufrimiento, y que éste no es ¿Es demasiado «buen niño»?
escuchado, y el niño prefiere encerrarse en sí mismo.
Evita todo lo que pueda dificultar la salida de este enfado; las ¿Cuida de maravilla a su hermanito o a su hermanita?, ¿nunca, pero
observaciones del tipo: «¡Estás de morros!» o, «cuando dejes de estar nunca tiene un movimiento de enfado hacia él o ella? ¿Te parece de-
de morros podrás sentarte a la mesa», subrayan inútilmente este enojo. masiado «buen niño»? Es probable que se esté defendiendo de unos
Decir o manifestar mediante la actitud algo como: «No me interesa un celos que percibe como prohibidos o peligrosos en virtud de un me-
niño que está de morros», es como decirle: «No me interesa tu canismo que los psicoanalistas denominan «formación reaccional». El
sufrimiento.» sentimiento que manifiesta es una inversión del sentimiento real. Se
Tienes varias opciones: muestra extremadamente bueno para no dejar aparecer su «maldad».
No puede reconocer en sí mismo sus sentimientos agresivos y celosos,
• Intenta descubrir la emoción que disimula detrás de su enfado. se sentiría malo, y esto es intolerable. Su amabilidad impide el
Formúlala: «Veo que te has sentido herido cuando he dicho a contacto con su cólera, y restaura su imagen de niño bueno.
Julie que...» Dale permiso para estar celoso o enfadado. Dile hasta qué punto
«Estás realmente furiosa porque no te doy helado...» Ayúdale a sus sentimientos son naturales y normales. Evoca, si es preciso, tu
expresarse: «Tienes todo el derecho a decir que no estás contento, propia infancia y tus celos.
¿sabes?», «Es verdad que no es justo, puedes decirlo»... «Me odias Los celos no reconocidos en la infancia alterarán las relaciones
de verdad cuando no te doy helado. Lo comprendo, ¿sabes?» con los demás en la edad adulta. Si se miran de frente y se aceptan, los
• Mostrar una cierta indiferencia, por supuesto no hacia el niño, sino celos pueden superarse, curarse.
hacia su comportamiento cerrado: sigue haciendo lo que hacías co
mo si no pasara nada. La indiferencia debe ser breve. No debes de
jar que un niño esté de morros más de unos minutos. El enfado se ¿Acusa a otros?
autoalimenta y cada vez es más difícil para él salir indemne. Si es un
Asumir la responsabilidad de una tontería, de un error, le dará el
sentimiento de ser malo... No quiere que le perciban de este mo-
84 El mundo emocional del niño La vida es moción 85

do. Es bueno. Así que el malo es otro. El niño proyecta hacia un trarse sobre otra persona, las zonas corticales superiores que permiten
hermano, un compañero, un amigo imaginario o incluso sobre ti la apoyar las emociones, es decir, nombrarlas con palabras, darles
responsabilidad de lo que acaba de hacer, o la emoción que no sentido, se están construyendo. El cerebro límbico ordena temores,
soporta. risas o lágrimas sin la mediación de las áreas llamadas superiores.
Sobre todo no le eches las culpas. Su imagen ya es demasiado En consecuencia, el niño necesita el acompañamiento del adulto
frágil. Por esta razón no puede tolerar la emoción. Ayúdale, pues, a para que no le invadan y superen sus afectos, para canalizar su
solidificar su imagen de sí mismo, confírmale que le quieres de forma energía, para aprender a expresar sus necesidades de manera so-
incondicional, es decir, incluso cuando se equivoca, cuando rompe un cialmente aceptable, para saber que no corre peligro si da vía libre a lo
juguete, derrama la leche o pega a su hermana... Puedes reprobar su que siente. Así, es preciso no dejarle solo con sus emociones cuando
comportamiento, pero sigues queriéndole, sigue siendo tu hijo. Dale todavía no dispone de herramientas mentales para administrar de
seguridad, todo el mundo siente alguna vez la ira, los celos o la rabia. forma eficaz lo que vive. Significaría entregarle al registro de las
Muchos niños de tres a cinco años se inventan amigos imagi- defensas psíquicas arcaicas, como la negación, la anulación, la
narios a los que atribuyen sus travesuras. No les acuses de mentiro- disociación, la proyección hacia otra persona, la formación
sos... Intentan administrar como pueden un acceso demasiado im- reaccional... que ciertamente son medios eficaces para dejar de sentir
portante de culpabilidad. Tranquilízales acerca de tu amor y tu estima (los callos aludidos con anterioridad) pero a cambio de alterar el
hacia su persona. En cambio, puedes pedirle (respetuosamente) a tu contacto con la realidad.
hijo que ayude a su amigo a que se porte bien. Confíale la tutela de su En lugar de dejar que nuestros hijos se enfrenten solos con sus
compañero imaginario. No te inquietes, tu hijo sabe que su amigo no monstruos interiores, podemos estar allí. Los padres tienen la res-
existe «de verdad», aunque afirme lo contrario.Y sabe que tú sabes ponsabilidad de la seguridad afectiva de los niños.
que él sabe... Martin te pega y te dice: «¡Ya no te quiero!» Si te sientes herido,
y si entonces escuchas tu herida en lugar de intentar escuchar la suya,
si le contestas: «Yo tampoco te quiero», o bien: «Vete a tu habitación,
CONTENER SIN REPRIMIR
ya volverás cuando estés calmado», Martin se sentirá terriblemente
abandonado. Te necesitaba, te lo enseñaba pegándote, puesto que
Interesarse realmente por los sentimientos y las ideas de un niño le
pegar es buscar el contacto, te gritaba poniendo enjuego su amor por
ayuda a ser él mismo. Acompañar a un niño en su consciencia de sí
ti... ¿y tú le rechazas?
mismo significa ante todo escucharle de verdad, sin juzgarle, sin
Un niño es un niño, y todavía no sabe decir bien las cosas. El
aconsejarle, sin intentar dirigirle, simplemente permitiéndole nombrar
papel de un padre es, justamente, el de ayudarle a expresarse con las
lo que vive, ayudándole a identificar, a aceptar y a comprender lo que
palabras adecuadas y no el de entablar una competición emocional. El
pasa dentro de él.
adulto puede controlar sus impulsos. Es natural que las emociones de
El cerebro del adulto es completamente maduro, y le da la po-
los niños sean prioritarias frente a las de sus padres.
sibilidad de administrar solo su emoción. El cerebro del niño no ha
Desde luego, a medida que el niño crece, el padre se retira. Pero
terminado su desarrollo. Las áreas frontales que ayudan a cen-
si se ha ausentada demasiado pronto, el niño no ha podido
86 El mundo emocional del niño La vida es moción 87

aprender y está desamparado, entregado a sus mecanismos de defensa Cuanto más esperas, más difícil le resulta reorganizarse en su
de control de la angustia. interior.
Para comprender mejor lo que pasa, fijémonos en el bebé. Es muy ¿Qué sucede, según el bebé, si nadie viene cuando llora? No es
pequeño, y aún no tiene ninguna consciencia de sí mismo en tanto que capaz de decirse «ya pasará».Todo él es dolor. No puede decirse que
sujeto separado de su madre. Nosotros, los adultos, sabemos que mamá vendrá «más tarde», cuando termine de fregar los platos, de
sentimos dolor, existimos fuera de nuestro dolor. En cambio, el bebé llamar por teléfono, de hacer otra cosa. Está mal... nadie viene. Esta
está mal. Se encuentra invadido del todo por la angustia y necesita madre que debería socorrerle, protegerle, no lo hace. ¡Así que ella es
terriblemente una intervención de su mamá. Necesita su presencia, sus capaz de hacerle daño! Es peligrosa, ya no puede confiar más en ella.
palabras, su amor, su amparo. Dado que sus límites corporales y Es imposible, ¿cómo puede retirar la confianza a su madre? ¿A la
psíquicos aún son borrosos, el contacto arropador de su madre le persona de la que depende para sobrevivir? Entonces, el pequeñín
permite contener sus afectos y sentirse seguro. conserva la confianza en su madre, y prefiere alterar su percepción
Los niños están en el momento presente. Todavía no han de- interna, anular su sufrimiento, sus emociones, ¡son ellas las que son
sarrollado la capacidad de proyectarse hacia el futuro, por lo que la peligrosas! Su dependencia respecto a su madre aumenta, puesto que
intensidad de lo que viven adquiere mayor envergadura. No «saben» ha perdido sus referencias internas, y ella sigue siendo la persona que
que su dolor pasará, que el enfado se terminará, que podrán volver a sabe lo que él necesita y cuándo.
encontrar de nuevo sus sensaciones de comodidad. Son pequeños y se En cambio, si los padres manifiestan amor a su hijo, sean cuales
siente invadidos por la emoción. Nosotros, los adultos, sabemos que el sean sus emociones, él aprende que éstas no son peligrosas. Está
presente pasa. preparado para escucharlas y saber lo que dicen, porque sus padres
El niño necesita sentir la solidez de sus padres cuando vive una están preparados para oirías. Esto es lo que permitirá que, poco a
emoción y también necesita ver cómo éstos atraviesan emociones, poco, el niño constituya un sentimiento de su permanencia. Esté triste,
aunque sean fuertes, sin ser destruidos. alegre o enfadado, sigue siendo el mismo niño o la misma niña.
¿Qué te parece? ¿Debemos coger en brazos a un bebé que llora o
crees que si lo hacemos lo vamos a «malcriar»?
¿Qué hacer?

¿Debemos acudir al menor lloro? Cuando un niño experimenta una emoción, tu pregunta es «¿Cómo
puedo ayudarle a tener consciencia de lo que pasa en su interior?»
Un recién nacido llora. Tiene hambre. Su madre tarda noventa se- En el caso de un recién nacido, interven lo más rápidamente
gundos en responder, y el bebé se calma en cinco segundos. Si su posible. Intenta identificar su necesidad y dale satisfacción. Sabe
madre no contesta hasta tres minutos más tarde, el niño tardará mejor que tu médico o que tu reloj si tiene hambre. Acompáñale en la
cincuenta segundos en calmarse. expresión de sus afectos. Si todas sus necesidades fisiológicas parecen
Cuando multiplicas por dos el tiempo de intervención, multiplicas satisfechas, entonces se trata de una necesidad psicológica.
por diez la duración del llanto del niño.
88 El mundo emocional del niño La vida es moción 89

Permanece a la escucha de tu corazón. Déjale que te confíe su queja, A la frase:


su protesta, su angustia. —¡No tengo ganas de dormir!
Cuanto más crece el niño, más autónomo es en la administración responde:
de sus emociones. Puedes tomarte unos instantes antes de precipitarte —¡No tienes ningunas ganas! en
para observar cómo se las apaña con lo que vive. Si no te pide nada, lugar de:
confía en él. —Es preciso que duermas para estar bien mañana.
Déjale espacio para expresar. Tenemos tendencia a «consolar», y Y puedes seguir diciendo algo así como:
yo la primera. Pero me aguanto. Cuando uno de mis hijos llora, —Puedes no tener ganas, es verdad, preferirías seguir jugando,
intento escucharle antes de consolarle: «¡Ya veo que sientes dolor!» Si puedo entenderlo (mientras continúas acostándole...).
se ha hecho mucho daño, incluso le animaré para que llore: «¡Llora, ¿No crees que funcione? Pruébalo. Si ya has entablado un juego
cariño, llora todo lo que quieras, abrázame y llora, tienes daño!» de poder con tus hijos, es probable que, los primeros días, Martin o
La pregunta «¿Por qué?» debe evitarse a toda costa. «¿Por qué Amélie resistan. ¿Realmente es tan dramático que se duerman algo
lloras?» puede vivirse como una culpabilización o una infravalora- más tarde? El aprendizaje del respeto de sus propios ritmos merece
ción, puede dar a entender que no hay razón alguna. Y luego, la una cierta elasticidad en la regularidad de las horas de sueño. Cuando
pregunta invita a reflexionar, y el niño no está en ello. Necesita ex- hayan comprendido que respetas sus sentimientos sin entrar en un
presar su emoción antes de poder hablar de la misma. Además, si juego de poder, aceptarán que se sienten cansados, y se acostarán con
supiéramos porqué llora tendríamos la tentación de resolver su pro- mayor facilidad a la hora conveniente. A menudo podemos confiar en
blema, de proponerle soluciones. No lo necesita. Probablemente es nuestros niños para saber lo que es bueno para ellos, salvo si nos
capaz de enfrentarse solo con su problema, únicamente necesita que se hallamos en una relación de fuerza con ellos.
escuche su emoción. Cuidado, en tus reformulaciones, tu actitud interior es más
En lugar de este «porqué», intenta «¿qué pasa?» o «¿qué sien- importante que las palabras que emplees. Una frase absolutamente
tes?», que acompañan la experiencia interior. perfecta en el terreno sintáctico y que detecte con precisión la ex-
periencia del niño puede ser totalmente ineficaz. Se trata de COM-
PADECERSE, de mostrar una escucha EMPÁTICA. Es decir, escuchar
La escucha empática la resonancia emocional en lo que dice el niño, ponerte por un
momento en su lugar, sentir lo que siente, escuchar desde su interior
La escucha empática consiste en reflejar lo que entiendes en lo que lo que está viviendo.
acaba de decir el niño, quedándote con los aspectos significativos, es —Mamá, ¿voy al fútbol o me quedo a trabajar? —
decir, la emoción, el sentimiento o el deseo. No se trata tanto de Estás dudando, ¿qué tienes? —No tengo ganas de ir
escuchar las palabras como de entender lo que hay debajo de las al examen de mates. —Estás inquieto.
mismas. Al reformular, no juzgas, no comentas, no intervienes, simple-
Céntrate en el movimiento interior del niño más que en los he- mente acoges el sentimiento del niño. Entonces se siente recono-
chos. Acompaña a tu hijo, y no a los acontecimientos exteriores.
90 El mundo emocional del niño La vida es moción 91

cido, validado. Adquiere el sentimiento de que tiene derecho a sentir tamientos del niño, sino de ayudarle a expresarse con palabras cuando
por sí mismo, a expresarse, y de que puede confiar en lo que siente. sea necesario, es decir, para poder salir de una situación
No puedes imaginar lo bien que irá esta actitud para ti, para él, comprometida o para acompañar un acontecimiento doloroso.
para vuestra relación.
De todos modos, procura respetar su jardín secreto. Es inútil
intentar obtener una confidencia a cualquier precio. Es importante no Las etapas del acompañamiento emocional
forzar la palabra. Como en todas las cosas, los excesos son malos.
Estar de forma sistemática y permanente a la escucha podría 1. Acoger no verbalmente mediante la mirada. Estar presen
te en tu respiración, en tu actitud interior.
provocar el efecto inverso, y convertir a tus niños en dependientes o
Eventualmente, según la edad del niño, cogerle entre tus brazos.
agresivos para defenderse de tu intrusión constante. Puedes confiar en
2. Expresar con palabras lo que siente:
tus hijos.Tu papel no es el de resolver sus problemas o allanar las «¡Veo que estás enfadado! ¡Oh, estás triste! ¡Tienes miedo!»
dificultades de su camino, sino el de proporcionar recursos, o más bien 3. Permitir que la emoción vaya hasta su resolución.
de ayudarles a construir la confianza en su capacidad para encontrar 4. Cuando la respiración del niño vuelva a ser normal, es el momento
recursos en cualquier circunstancia. de hablar.
Tampoco caigas en la «lectura de pensamiento» o en la inter-
pretación. En virtud de un mecanismo de proyección, de contami-
nación de nuestras propias emociones, a veces podríamos ponernos a
Desde luego, esta escucha empática podría llegar a ponerte en
pensar en lugar del niño. La decodificación de la emoción debe ser
contacto con tus propias emociones, despertar las carencias, las an-
muy respetuosa respecto a los matices que vive. Interpretar en función
gustias de tu propio pasado...
de nosotros mismos, pensar en su lugar, representaría de nuevo
Es difícil respetar la ira de un niño cuando uno mismo no sabe
encerrarle en una definición y no estar dispuesto a escucharle.
encolerizarse de manera sana. Es casi imposible coger a un niño en los
En conclusión, para acompañar las emociones de un niño, como, brazos para acompañarle en la travesía de una tristeza si ésta nos
de hecho, de cualquier persona, ejerce simplemente tu capacidad de recuerda con demasiada fuerza una desesperación que jamás
compasión. Ponte en su lugar, intenta sentir lo que sentirías en la escucharon nuestros padres...
misma posición y en las mismas circunstancias. Nada de lo que es Si tus hijos no pueden confiarse en su verdad, terminarán por
humano es ajeno a lo humano. Tú también has sido un niño o una extraviarse, o incluso por cortar el contacto contigo. A menos que sus
niña. Puedes comprender lo que pasa en su interior. alas hayan quedado tan estropeadas que se vean obligados a
Procura no «psicologizar» a ultranza. La verbalización no siem- permanecer dependientes de ti durante toda la vida.
pre es necesaria, y tampoco es suficiente. La respuesta mediante el Cuántos padres hay que no entienden porqué sus hijos, una vez ya
contacto físico, la caricia, la satisfacción de la necesidad, es funda- son adultos, dejan de ir a verles, cuando resulta que «lo han hecho
mental. No se trata de explicar de forma permanente los compor- todo por ellos». Lo que pasa es que olvidaron respetarles en sus
afectos.
92 El mundo emocional del niño La vida es moción 93

«¡ME IRRITA CON SUS TONTERÍAS!» rro inofensivo de su abuela, que Pierre se enfade con su hermano por
una fruslería?
A veces, las emociones de tus retoños te exasperan. Existen varias Escucha tu intuición. Reaccionas ante una distorsión. La ver-
hipótesis posibles: dadera emoción de Marthe era la cólera. El miedo de Olivier disimula
otro temor, el de separarse durante unos días de su madre. Está
1. Simplemente estás cansado y una emoción resulta demasiado. inquieto ante la idea de que ella no vuelva, y no se atreve a decir que
2. Tienes tus propias emociones y necesidades, que no reconoces, no está de acuerdo. Pierre tiene miedo de su examen de mates. Tu
y te sientes en competición con tu hijo. irritación te indica que la emoción que han mostrado oculta otra. Hay
3. La emoción que expresa no es justa, es una manifestación otra herida, otro problema, otra carencia probablemente más crucial
pantalla que disimula el verdadero sentimiento. que se debe escuchar.
4. Es una emoción que no te permites. Cuando las emociones no pueden decirse en su autenticidad, se
5.Te recuerda tu propia infancia. disfrazan, se desplazan hacia objetos de substitución (un perro, un
caracol, las mates...), se reemplazan por otras. Disimulan la verdad y
ocultan la auténtica necesidad, indecible.
Cuando se supera el límite

Cuando un niño llora «por cualquier cosa», probablemente está


Haz como yo...
cansado. En el caso de los adultos sucede lo mismo: cuántos padres se
irritan «por cualquier cosa» (eligen con mayor facilidad esta ma-
¿Cómo soportar que tu hija chille de rabia cuando tú no te has
nifestación que el llanto), y tal vez tan sólo están cansados.
atrevido nunca siquiera a decir no a tu propia madre? ¿Cómo aceptar
Demasiados padres se niegan a reconocer que están agotados.
que tu hijo llore cuando tú misma nunca has derramado una lágrima?
Quieren seguir dando una y otra vez, hacer la vajilla y la colada, leer
Un padre que no muestra sus emociones esperará de buena gana
un cuento y jugar con las Barbies, ser «buenos padres». Tarde o
de sus hijos que sean «fuertes» como él. A una madre que no expresa
temprano estallan, y un plato que se derrama o unos calzoncillos
lo que siente le costará soportar los gritos de sus hijas...
tirados por el suelo desencadenan su furor.
¿Prohibes una emoción a tus hijos? Tus padres te la han
Reconocer la fatiga y formularla a los niños puede permitirles
prohibido, o tú la has enterrado porque te parecía demasiado pe-
identificar la verdadera causa de tu furia. No son «insoportables», sino
ligrosa... Aceptar oiría procedente de tu hijo o de tu hija chocaría con
que tú has alcanzado tu límite. Tu tolerancia ante el ruido y el caos es
las decisiones inconscientes que tomaste en tu infancia... Te obligaría
mínima, necesitas calma y reposo.
a cuestionar la educación que recibiste de tus padres... No quieres oír
a tu hijo para proteger la imagen de tus padres.
Cuando una emoción oculta otra

¿Te exaspera que Marthe estalle en sollozos cuando su falda le aprieta


demasiado, que Olivier se muestre aterrorizado por el pe-
94 El mundo emocional del niño La vida es moción 95

¡No tiene derecho a estar enfadado, eres tú quien lo miento de tu hijo? ¿Eres incapaz de escuchar los llantos de tu bebé,
está! las rabietas de tu hijo mayor o el desespero de tu hija? ¿Les insultas
sin poder evitarlo?
Quería sus macarrones con salsa de tomate, y tú has puesto man- Plantéate estas preguntas: ¿Qué razón podría tener yo en este
tequilla. .. Se pone a chillar. Tu adolescente critica a su profesor de momento para sentirme irritado? ¿Existe en mi vida una carencia, una
geografía e historia, tu hija le grita a su hermano que pone la mi- frustración, un sentimiento de impotencia? ¿Me han herido? ¿Tengo
nicadena a tope... Generalmente eres paciente, pero hoy, NO. Echas un problema que no sé resolver?
pestes, estás fuera de tus casillas.
Por una razón X, estás irritada. Refunfuñas interiormente contra
tu marido que lee tranquilo el periódico y lo deja todo en tus manos, «Cuando hace esto, me pongo violento»
contra tu esposa que sólo piensa en ella misma, contra tu jefe, contra
el fontanero, contra tu madre... ¿y tu hijo coge una rabieta? Es la gota Cuando Paul o Arielle nos recuerdan nuestra propia infancia nos
que hace derramar el vaso, ¡y proyectas tu ira hacia este culpable! cuesta mucho más conservar el control de nosotros mismos.
¿Sus macarrones no le gustan? Tus razones son mucho más im- «Cómete la sopa.» Martine echa pestes. Rémy le da un empujón
portantes que una simple salsa de tomate, que unos deberes de ge- al plato, la sopa sale despedida por toda la cocina y sobre su madre,
ografía o que una minicadena. que estalla. Le coge brutalmente por el brazo, le inflige una buena
Es raro constatar cuántas de nuestras propias emociones pueden paliza y le trata de «malo» y de «niño feo».
permanecer desconocidas .Y sin embargo, se manifiestan en esta «Sentí cómo me invadía la violencia de mi propia madre», me
exasperación desmesurada hacia nuestros hijos. Es preciso señalar confió Martine más tarde.
que, a menudo, éstos nos excitan... ¿Es casualidad que estén ¿Qué ha pasado? Normalmente su hijo come sin dificultad. Aquel
particularmente nerviosos el día que menos lo aguantamos? Parece día, Martine estaba estresada. Rémy sintió su estrés y... como todos
casi como si intentaran hacernos estallar. Sí. Los niños son extre- los niños, se puso al servicio de sus necesidades emocionales. Le dio
madamente sensibles a lo que viven sus padres. Mediante una suerte la ocasión de sacar su rabia, de «desahogarse».
de telepatía, captan las emociones que no se dicen, las tensiones. Se Martine sintió a la perfección que le invadía un furor que la
sienten inseguros y reaccionan con comportamientos que provocarán superaba. Revivía la violencia de su madre, pero esta vez al otro lado
la exasperación de las tensiones de papá o de mamá, hasta su de la barrera. Cuando era niña, su papel era el de víctima. Siendo
liberación. adulta, ella adoptaba el de perseguidora y su pequeño Rémy asumía el
«¡Parece como si les gustara que les chille!», dice sorprendida de víctima. La madre de Martine no toleraba que su hija
Valérie. desobedeciera sus órdenes terminantes. Se ponía violenta y la pegaba.
Cuanto más inconsciente sea el padre de sus propias emociones, Paula tiene un hijo de dos años y medio. Al cabo de unos minutos
más recaerán en sus hijos, que intentarán expresarlas en su lugar y las en el parque, ya tiene bastante, y sin embargo se queda cada jueves
llevarán hasta el límite. por la tarde, y se siente culpable porque no está a gusto. Se ha cogido
¿Te sientes demasiado nervioso por un deseo o un comporta- un día de fiesta por semana para estar con su hijo, y le
96 El mundo emocional del niño

dedica todas las noches y los fines de semana. Cuanto más tiempo intenta pasar con él más se irrita consigo misma por aburrirse de este modo.
¿Por qué se aburre con su hijo? El aburrimiento significa que Paula reprime emociones, pone sobre sus sentimientos la tapadera del aburrimiento para no
sentirlos (véase La inteligencia del corazón). ¿Cuál puede ser la naturaleza de estos afectos reprimidos y de dónde vienen?
Los padres de Paula nunca jugaron con ella. No tiene ningún recuerdo de intimidad alegre ni con su padre ni con su madre. No obstante, se niega a mirar
lo mucho que ha sufrido por ello. Se dice que no podía ser de otro modo... Por el hecho de haber negado sus emociones de niña, ahora es incapaz de jugar y de
reír con su hijo.
Para compensarlo, hace de todo por él, para darle gusto, para su bien. Le lleva al parque, al tiovivo, a montar en poney... Reprime sus emociones, se niega
a oír su propia frustración. Cuando vuelve a casa... su rabia inconsciente la guía hacia un acto de destrucción. Sin pensarlo, pone el jersey de cachemira en la
lavadora. Cuando sale, encogido y arrugado, se siente culpable. Es su manera de orientar hacia ella misma su agresividad y de permitirse sentir la
culpabilidad.
Cualquier padre o madre revive su propia infancia a través de sus hijos. De ahí nace toda suerte de problemas. Proyecciones de su propia experiencia,
reactualización de sentimientos dolorosos enterrados, pulsiones de odio que resurgen desde la infancia, celos, cosas nunca dichas, secretos de familia,
recuerdos de humillaciones o de frustraciones, sentimientos de vergüenza, de culpabilidad, todo este pasado está ahí, inconsciente la mayor parte de las veces,
y nos impide reaccionar de manera apropiada en relación con nuestros hijos.
Cuando este pasado no está curado, el padre o la madre reproducen de manera automática, incluso compulsiva, el comportamiento de sus propios padres
hacia ellos.
La vida es moción 97

La repetición de los comportamientos abusivos y violentos de nuestros padres hacia nuestros hijos tiene la finalidad de encerrar el dolor lo más lejos
posible de uno mismo, de negarlo... Hago como mi madre porque a mí me ha ido bien, no me ha ido mal. El mecanismo es complejo. Identificarse con el
padre o la madre abusivos es, a la vez, un intento inconsciente de comprender lo que pasaba dentro de aquél y un medio de vengarse en otra persona del
sufrimiento experimentado, de permitir que la intensa rabia reprimida se exprese al fin. La venganza se ejerce sobre una persona substitutiva, el propio hijo, o
bien sobre cualquier otra persona vulnerable y dependiente de uno. Dado que no es el auténtico culpable, esta venganza es insaciable.
Cuando, consciente de haber sido traumatizado, se aplica a actuar en sentido inverso, el padre desolado e impotente constata a menudo que a pesar de él,
parecen producirse los mismos efectos. Lo opuesto es tan sólo la otra cara de la misma carta. Hacer «lo contrario» que los padres significa seguir actuando en
función de ellos, y continuar sin ver a su hijo.

Curar la propia infancia

Existe un solo camino para escuchar de verdad a nuestro hijo: curar nuestra propia infancia. Para liberarnos del pasado, nosotros también necesitamos soltar
nuestras emociones. Nuestros padres no supieron estar atentos a nuestras necesidades emocionales, no escucharon nuestros temores y nuestros enfados. Las
heridas han quedado marcadas porque no hemos sabido llorarlas. Acaso ni siquiera hemos podido identificar lo que nos hacían como heridas o injusticias, de
tanto que nos aseguraban que era «por nuestro bien». No había ningún testigo para restablecer la verdad. Enterramos nuestras tensiones, y hoy vuelven a salir
frente a nuestros hijos.
Para curar, se trata de mirar la realidad de nuestra propia infancia. Dejar de idealizar a los padres y atreverse a ver que nos han
98 El mundo emocional del niño

podido hacer daño o que tal vez han sido injustos. Recordar.
Otorgarse el derecho de sentir las emociones a las que cuando éramos
Capítulo 4
niños tal vez ni siquiera tuvimos acceso.
Cuando hayas expresado la ira contra las injusticias que has su-
frido, cuando hayas llorado con compasión por el niño que hay en ti,
podrás escuchar a tu hijo en su verdad.
¿Despierta en ti un sentimiento inaguantable? Allí existe un nudo. El miedo
Puedes afrontarlo. Mira simplemente cómo ascienden los recuerdos.
Escucha al niño que hay en ti, dale lo que no ha recibido jamás,
atención hacia sus sentimientos. Encuentra de nuevo imágenes del
niño o de la niña que eras, y ábrele un espacio en tu corazón.
Cuando arranca la noria, una niña de ocho años llora.
íntimamente, tú, el adulto de hoy, imagina que vas a encontrarte —¡No quiero ir, tengo miedo!
de nuevo con ese niño que eras. Imagina un encuentro entre el tú de —No hay ningún peligro. Venga, no seas gallina, no nos fastidies
ayer y el tú de hoy. El adulto se sienta junto al niño y le escucha, le el día.
acaricia. Le comprende y le ama.
La niña solloza con más fuerza. Un hombre de la cola interviene:
Para ayudarte en este trabajo puedes recurrir a un psicotera-peuta «Tiene derecho a tener miedo. No vale la pena que os fastidiéis
o escuchar un cassette de relajación dirigida, que te ayudará a dejar
vosotros, id y dejad que ella os espere.»
que tus recuerdos vuelvan a aparecer y se curen.1
La niña esboza una gran sonrisa. ¡La han escuchado! El resto de
la familia monta en la cabina... Ella se queda en el suelo mirándoles, y
encuentra a una amiguita para charlar. Está radiante.
Forzar a afrontar algo es inútil, y en general refuerza el miedo.
Ayudar a alguien, sea niño o adulto, a superar un temor precisa su
tiempo, el tiempo que se necesita para que el miedo deje su lugar al
deseo. Cuando la decisión de afrontar algo viene de ti, el niño lo hace
por dependencia y no por elección, no moviliza sus propios recursos,
no se siente responsable. Ser dependiente aumenta el miedo.

¿DEBEMOS ESCUCHAR SU MIEDO?

En la playa, Thomas, de dos años, está aterrorizado. Se niega a entrar


1. Cassette Trouper son propre chemin, volumen 1, cara 1. En venta en algunas en el agua, incluso con el hermoso flotador en forma de pato. Su papá
librerías especializadas o escribiendo a Isabelle Filliozat.
también se ha gastado el dinero en una soberbia barca hin-chable, pero
Thomas chilla cuando intenta instalarle dentro.
100 El mundo emocional del niño El miedo 101
Los padres, contentos ante la idea de chapotear con su querubín, ¡Pero se muerde las uñas! Cuando, a los cuarenta años, se pone a bus-
compran bonitos juguetes multicolores y de formas atractivas... y él se car en una terapia lo que puede motivar este comportamiento, des-
queda aterrorizado ante la idea de mojarse la punta del pie en el agua cubre... angustia. Una angustia que le sorprende, que no casa con su
o de instalarse sobre ese objeto inestable. A los pequeños les cuesta imagen. Cuando acepta reconocer esta nueva verdad, se acuerda de la
comprender las razones que impulsan a sus padres a querer ponerles a falta de atención de sus padres, de su angustia ante la ausencia de diá-
cualquier precio en una situación tan poco confortable. logo y de su inmensa soledad cuando era un niño. Estupefacto por la
¡Qué frustración para el padre! Una humillación para algunos. No intensidad del terror que le invade, se vuelve consciente. Había tanto
soportan que su prole no esté a la altura de sus esperanzas y se ponen miedo en él que ha preferido no sentirlo. Cuando borró todos los te-
agresivos. No comprenden: «El año pasado le encantaba el agua», y mores, para sentir que existía precisaba de un lado buscar sensaciones
lanzan miradas de envidia sobre aquellos cuyos hijos saltan, se y, del otro, probar sin cesar sus capacidades de control enfrentándose
sumergen y se salpican con todas las ganas. con el miedo. El temor enterrado en las profundidades del incons-
Algunos padres, que no miden la importancia de los temores de ciente le llamaba a través de los peligros.
su hijo, y los juzgan exagerados, le tiran al agua a pesar de sus
Después de permitirse experimentar y, sobre todo, expresar este
chillidos.
terror de niño que permanecía en él desde hacía tanto tiempo, se ha
¿Por qué no tomarse un poco de tiempo? ¿Por qué no dejar que el sentido manifiestamente liberado. Para gran alivio de su mujer, su
niño se acostumbre a su ritmo a un elemento tan raro como el agua?
respiración nocturna es más tranquila, no salta mientras duerme y sus
¿Para enseñar a los otros padres que el heredero ya sabe nadar? ¿Para
ronquidos, testigos del esfuerzo de represión emocional, han
no ser el padre de un «gallina»?
disminuido de forma notable.
Forzar al niño no es un método eficaz para ayudarle a superar sus
Los niños cuyo miedo despreciamos de modo sistemático no se
temores y puede tener consecuencias importantes a largo término.
convierten en adultos abiertos y valientes. Ciertamente, pueden negar
«¿Mi hijo? No le teme a nada.» Un niño que niega todos los
el miedo y volverse temerarios. En este caso tenderán a arriesgarse
temores, en realidad le tiene tanto miedo... a su miedo, que prefiere no
cada vez más para, al fin, experimentar algo, y probar sus capacidades
sentirlo. Lo reprime hacia las profundidades de su inconsciente. El
de control y de dominio de sí mismos.
miedo volverá a surgir tarde o temprano en su vida, más o menos
Pero también pueden quedarse anulados para toda su vida,
disfrazado o desplazado. Es natural y normal que un niño tenga miedo,
abonándose al Valium o a otras drogas menos lícitas para vencer una
y es importante que nosotros, los adultos, no les incitemos a una
angustia que no tiene derecho a ser proclamada y que, en con-
«valentía» excesiva.
secuencia, cuesta superar.
Alain se muerde las uñas. Por la noche, cuando está en su cama,
También puede costarles abandonarse en una relación, vivir la
tiene sobresaltos y ronca. Pero para él, no se trata de angustia. Sim-
intimidad. ¿Cómo llegar a confiar? Sus propios padres se mostraron
plemente piensa que él es así. El miedo no tiene nada que ver con él.
insensibles. Cualquier dependencia hacia otra persona se vuelve
En su vida se arriesga mucho. Le gustan los deportes peligrosos, los
peligrosa. ¿Cómo atreverse a amar?
viajes de aventura en países en guerra, y las películas de suspense. En
Otros, sobre todo si se les ha prohibido la cólera, se defienden
definitiva, flirtea con el miedo... pero no lo siente. En la mayor parte
construyendo una reacción fóbica. Limitan el miedo, lo focalizan
de las situaciones que intimidan a los demás, él se siente cómodo.
sobre un objeto. Éste puede ser el desencadenante original, el agua
102 El mundo emocional del niño El miedo 103

a la que los tiraron, el cuarto oscuro o el sótano con el que los niño. Es normal a cierta edad, y sólo se vuelve problemático si adopta
amenazaban, o incluso donde los encerraban. Puede desplazarse hacia una excesiva amplitud y molesta al niño en su vida, y/o si se instala
otra cosa, un ascensor, un medio de transporte, un gato, una araña, una durante un período largo.
serpiente... Exploremos juntos algunas de las clases más comunes de miedo.
El miedo, pues, puede regatearse, negarse, ahogarse mediante las
drogas, proyectarse hacia el exterior, puede invadirnos, pero en
cualquier caso estos niños cuyas emociones habremos negado tendrán Los ruidos fuertes
una relación perturbada ante la emoción del miedo.
En definitiva, un temor tiene una razón de ser, aunque ésta sea Un ruido fuerte nos sobresalta. En un niño pequeño, puede de-
oscura para el adulto. El miedo debe respetarse, escucharse, acogerse. sencadenar un pánico auténtico. Me parece que esta reacción per-
Una persona valiente no es alguien que no siente el miedo, sino tenece a los reflejos de protección de la especie. El ruido es la ex-
alguien que lo vive en él, lo reconoce, lo acepta y extrae del mismo las presión de un peligro potencial, es preciso escaparse en seguida... pero
enseñanzas que le aporta. No sentir miedo es peligroso. el bebé no puede escaparse solo, y grita.
Fundamentalmente, es una emoción muy sana. Nos informa de la Lucie tiene veinte meses. Están haciendo obras en la casa de al
presencia de un peligro, moviliza nuestro cuerpo para afrontarlo, nos lado. Bruscamente, comienza el ruido, ensordecedor. Parece una
enseña a prepararnos ante lo desconocido. Es natural, debe perforadora neumática, la pared tiembla. El ruido desencadena un
atravesarse, utilizarse. verdadero terror en la niña, que chilla, patalea, solloza.
Una vez dicho esto, también existen temores desproporcionados, Su madre la coge en brazos, se aleja muy rápido con ella de la
desfasados, inhibidores, paralizantes, y estos son, efectivamente, fuente del ruido. En un lugar más tranquilo, acoge la intensa emoción
inútiles. De todos modos, deben escucharse como mensajes. Dicen de su hija abrazándola contra su corazón.Tiernamente, le deja sollozar
algo acerca de tu hijo, o tal vez tu hijo intenta decirte algo a través de todo lo que necesita. Armonizando su respiración con la de la niña, le
ellos. habla suavemente al oído.
Existen temores sanos, hay temores desmesurados, desplazados. —Tienes miedo, este ruido era muy fuerte, a mí también me ha
Hay clases de miedo que deben atravesarse, otras deben superarse, dado miedo (¡era verdad!). Da miedo cuando no te lo esperas... de
pero todas deben respetarse, acompañarse. golpe y porrazo «¡patapum!». No se sabe qué es. ¿Sabes qué es lo que
hace este ruido?
LOS MIEDOS MÁS FRECUENTES —No —contesta la niña, entre dos sollozos.
—¿Quieres ver lo que es?
Existen distintas clases de miedo típicas que todos los humanos —No.
atraviesan más o menos en el curso de su infancia. Por ejemplo: La madre ha ido un poco de prisa. Lucie todavía siente demasiado
miedo a caerse, a los ruidos fuertes, a los rostros desconocidos, a la miedo como para poder afrontar la fuente de este ruido.
separación, al baño, al agua en los ojos, a la oscuridad, a los animales,
a los lobos, fantasmas, brujas y otros ogros... El miedo aparece y
desaparece. Refleja las etapas de la maduración del psiquismo del 1. Las separaciones se tratarán en el capítulo 9, p. 184.
104 El mundo emocional del niño El miedo 105
Entonces, su madre le habla de las obras, le explica lo que los obreros contornos reales de los objetos si se despierta en medio de la noche,
están haciendo, le dice porqué vibra toda la casa aunque nadie la esté pero no sustituye la presencia del padre o la madre.
tocando.
Dormir también significa soltar el control, dejarse ir, entrar en
Dado que las obras deben durar unos quince días, y que no es Otro mundo, soñar o tal vez arriesgarse a tener pesadillas... Es agra-
posible estarse todo el tiempo en el parque o en otra parte durante el dable estar acompañado.
día, es importante dotar a Lucie de recursos para poder afrontar este Después de contar el cuento, un masaje ayuda a sentirse seguros y
estrés. Ella y su madre se ponen a chillar en dirección a la pared tras la garantiza una buena noche. Tocar al niño, acariciarle, le da la
cual trabajan los obreros: «¡Parad con este ruido, que me molesta!» impresión de estar amparado. Sentir los contornos del cuerpo infunde
Lógicamente, esto no cambia nada en cuanto al ruido, pero sí en seguridad.
cuanto a la experiencia de Lucie. Expresar cólera, afirmar el propio La hora de acostarse es un momento privilegiado para hablar de
poder, permite que el miedo disminuya. lo que ha pasado durante el día, es un momento para «cerrar» las
Durante cerca de un mes después de finalizar las obras, Lucie historias inacabadas, las cuestiones suspendidas, confiar las pre-
permaneció atenta a todos los ruidos. Cuando un perro ladraba a lo ocupaciones.
lejos, decía: «Un perro me da miedo.» Esta frase no esperaba res- ¿Tiene pesadillas? ¿Existe en la habitación algún objeto que se
puesta, sólo ser acogida: «Te da miedo el ruido.» Evocar el recuerdo transforme de noche? ¿La lucecita forma sombras sospechosas?
del ruido y del miedo, volver a hablar del mismo tanto como sea Presta atención. Tal vez, simplemente, te está diciendo que te ne-
necesario, permite reconstruirse, recobrar la seguridad. Lucie aprende cesita a su lado. No es un «capricho», es la expresión de una necesi-
a administrar su emoción. dad. Si te acuestas unos minutos a su lado, le das un sentimiento de
seguridad que le acompañará durante toda su vida. Si te niegas a sa-
tisfacer esta demanda, le obligas a enfrentarse solo con la oscuridad,
Miedo a dormir con el paso hacia el sueño. Ciertamente, aprenderá a dormirse solo,
pero utilizando una energía psíquica que, de repente, ya no estará dis-
A través de los postigos, los rayos de luz penetran en la habitación y ponible para otras experiencias. Las angustias de abandono reprimidas
forman manchas sobre el papel pintado. La farola de la calle ilumina pueden originar, sobre todo, retrasos en la adquisición del lenguaje,
los árboles. El viento agita las ramas. Estas sombras que se mueven dificultades para articular o pronunciar ciertas sílabas...
pueden volverse terribles para un niño que no sabe de qué se trata. Su Los terrores nocturnos, que despiertan al niño asustado en plena
padre le coge en sus brazos, abre los postigos, mira durante un buen noche, traducen las emociones mal administradas durante el día.
rato con él cómo oscilan las ramas bajo el viento ante la farola. Luego
vuelven a cerrar los postigos y observan las sombras. El padre se
acuesta unos minutos junto a su hijo, que se duerme. ¿Se debe tener miedo a los cuentos de hadas?
Para dormir necesitamos sentirnos seguros. Ir a ver al niño cuan-
do llama le da seguridad. El niño sabe entonces que puede contar con Margot, de dos años y medio, se despierta en plena noche, chilla, le
sus padres. Se puede dejar encendida una lucecita para que encuentre teme al lobo. Descubro que su abuela le ha regalado durante el día un
con mayor facilidad sus referencias en el espacio y perciba mejor los libro que cuenta la historia del lobo que quería comerse a
106 El mundo emocional del niño El miedo 107
las cabritillas. Hemos hablado de ello. Le he contado el cuento muy modo los artistas curarían sus heridas mediante el arte. Pintar, escribir,
despacio, explicándoselo todo, y volviendo a explicar si era necesario. esculpir, les ayuda a sobrevivir manteniendo la represión. Se puede
Luego le he dicho que no me gustaba este cuento que daba miedo. mirar una pintura como se escucha un sueño, y utilizar colores y
¿Qué podíamos hacer con este libro? Le he propuesto cuatro cosas: formas aplicadas a una tela para reseguir el hilo de las emociones. La
quedárnoslo, quemarlo, romperlo o tirarlo a la basura. Ha pensado un terapia por el arte es una forma de terapia muy poderosa. La escultura,
poco y luego ha anunciado, con tono decidido: «Lo rompemos», cosa la pintura, el collage, etc., son mediadores. La persona se habla a sí
que ha hecho concienzudamente: misma, se da cita con su inconsciente que se expresa a través del arte.
—Estoy rompiendo al lobo en trocitos, así no se comerá a las Estos símbolos hablan porque son la expresión del inconsciente de la
cabritillas.
persona. La palabra es sanadora, porque da vida a los afectos. Permite
A menudo, los cuentos tradicionales son violentos. Son los re- describir lo que pasa dentro de uno, tomar consciencia y estructurar la
flejos de una época en la que se daba miedo a los niños para obtener experiencia íntima.
obediencia y sumisión. Basta escuchar las nanas antiguas para hacerse En cambio, leer un cuento raramente hace progresar la cons-
una idea del ambiente que reinaba en la mayor parte de las familias. ciencia. Los cuentos antiguos son reflejos de la vida psíquica. ¿Pero
En Francia, por ejemplo, existía la siguiente nana: son útiles para nuestros hijos? Pienso que no. Mi práctica clínica me
«Duerme, mi cariñín, o el señor malo te comerá... Duerme, ha indicado que podían resultar nocivos. Un niño que vive justamente
duerme, pequeñín. Se oye como un ruido de cadenas que se arrastran las dificultades de las que se habla en el cuento puede encontrar en el
por las piedras, es el gran ogro que no para de pasar, que pasa y que se mismo la confirmación de sus creencias negativas y conservar su
irá, llevándose en sus alforjas a todos los muchachitos que no miedo durante mucho tiempo. El cuento pone imágenes a las fantasías
duermen. ¿Cuál es esta voz demente que atraviesa las ventanas? No, del inconsciente, imágenes susceptibles de reforzar las angustias.
no es la tormenta que juega con las piedras, es el ogro malo que Juliane le ha tenido miedo durante años a la madrastra de
refunfuña, que refunfuña y que pronto reirá, llevándose consigo a Blancanieves. Estaba tan aterrorizada que intentaba ocultar el libro. Su
todos los muchachitos que no duermen...» hermano, que lo sabía, le abría el libro ante los ojos, justo en la página
Lobos, monstruos y otras brujas aparecen por doquier. Ciertos de la bruja, por el gusto de verla estremecerse. En realidad, Juliane le
psicoanalistas, que defienden los cuentos, han analizado su simbo- temía a su propia madre. Sentía una gran cólera, inconsciente en
lismo y han evidenciado su universalidad... Ciertamente, los cuentos aquella época, contra aquella mujer que a menudo se comportaba
son portadores de símbolos. Pero los símbolos que no son explícitos como una bruja. Leer la historia de Blancanieves no le ayudó. Se
no ayudan a curar, e incluso pueden ser un instrumento de represión sentía confortada en su miedo. Durante mucho tiempo idealizó a su
emocional. Las emociones se proyectan sobre los símbolos, y así madre, rehusó sentir sus auténticas emociones. Vivió en el bosque
adquieren distancia, se evitan. Coincido con Alice Miller cuando lejos de su castillo (exilada de ella misma). Un príncipe azul la llevó
piensa que los símbolos ayudan a permanecer inconsciente. No hay lejos de su madre... Hasta someterse a una psicoterapia, encontrar de
catarsis1 mediante la pura simbolización, pues de otro nuevo sus sentimientos y osar expresarlos, y volver a recuperar la
confianza en sí misma.
1. Catarsis: vocablo griego que significa purificación, purgación. Descarga
Rosalda tenía un problema incestuoso con su padre... Volvió
liberadora de emociones reprimidas.
108 El mundo emocional del niño El miedo 109

cinco veces al cine a ver la película Peau d'áne* Oyó que en ella ¿Pero de qué sirve? ¿Y por qué no elegir historias actuales? Existen
aparecía una cuestión que la preocupaba, pero en realidad no encontró algunas muy bonitas y bien escritas.
la solución que requería.
Durante años, a Thémie le daba miedo encontrarse sola en medio
del frío como la pequeña vendedora de cerillas. Para no arriesgarse a ¿A los niños les gusta tener miedo?
que la rechazaran, se adecuó a los deseos de los demás, olvidándose
de ser ella misma. Ahora, con más de cincuenta años, todavía llora Hay quien lo dice. El miedo ejerce una especie de fascinación. Ello no
cuando piensa en esta historia. significa que a los niños les guste lo que da miedo.
Bambi, La cenicienta, Pulgarcito... ¿Por qué tantas madres mueren o En el avión que nos lleva hacia nuestro lugar de vacaciones
abandonan a sus hijos en los cuentos? Observemos que estas historias proyectan una película de ciencia ficción. Mi hijo Adrien, de dos años,
las han escrito hombres... ¿Acaso nos dicen lo difícil que era para ellos se levanta sobre su asiento para ver, mientras murmura: «Este
abandonar a su madre? Existe otra interpretación: tenían madres de- monstruo no me gusta, no quiero verlo.» Intento que se siente, lo cual
masiado duras, demasiado autoritarias y frustrantes. Como cualquier bastaría para que la imagen desapareciera de su campo visual, pero es
niño, soñaron con una mamá buena y dulce. Dado que la ira contra su imposible. Está fascinado. Me doy la vuelta. Margot, de cuatro años,
verdadera madre les estaba prohibida, se quedaron fijados en la ide- también está de pie, literalmente hipnotizada por la hidra monstruosa
alización de una madre buena, cuyo duelo nunca han hecho. Ella que se mueve por la pantalla. No se habían levantado para mirar la
muere y su imagen puede permanecer intacta. La cólera se ha pro- película en ningún otro momento y no tenían auriculares que les
yectado sobre la bruja, sobre la madrastra, sobre la malvada que les permitiera oír el sonido. En aquel caso les subyugaba lo raro de la
martiriza y les aterroriza. Se puede matar a una bruja sin excesiva cul- imagen.
pabilidad. El mensaje de los cuentos es claro: el niño no tiene derecho Cuando se tiene miedo, es preciso llegar a vencer la emoción,
a sentir cólera contra su madre. Estas historias encierran la rabia comprender. Para sentirse seguro, es mejor mirar, afrontar, ver lo que
impotente en un lugar aún más profundo. Numerosos cuentos están al pasa, identificar. Adrien ha vuelto a hablar varias veces de la hidra:
servicio de la educación dura y autoritaria, protegen la imagen ide- «Yo no quería ese monstruo, era malo.» Y sin embargo, en aquel
alizada de los padres y deforman la realidad. momento, no podíamos despegarle de la pantalla.
¿En qué puede ayudar al niño este tipo de historia para acceder a Por una casualidad desdichada, al día siguiente a Adrien le rega-
su construcción? ¿Por qué dar imágenes que puede ser terroríficas? laron el libro de Hércules, de Walt Disney. Una historia llena de
¿Por qué no dejar a los niños la elección de sus propios símbolos? Por monstruos, entre los cuales una hidra que se parecía a la de pantalla.
supuesto, sólo vivirán los cuentos de manera dramática los niños para Adrien quería leer el libro, una y otra vez. Le «gustaban» particular-
los que existe la problemática en cuestión. mente las páginas con monstruos. De hecho, necesitaba verlos para
sentirse seguro, para dominarlos. Comenzó a tener pesadillas cada no-
che hasta que identifiqué al responsable. Entonces invité a Adrien a
* Peau d'áne (Piel de asno) es una película dirigida en 1970 por Jacques Démy
dibujar su pesadilla, y retiré discretamente el libro hasta que fugra lo
y protagonizada por Catherine Deneuve y Jean Marais. Se basa en el cuento
homónimo de Charles Perrault, e insinúa intenciones incestuosas hacia la protagonista bastante mayor como para mirar al monstruo sin tener miedo. Las pe-
por parte de su padre. (N. del T.) sadillas cesaron instantáneamente.
110 El mundo emocional del niño El miedo 111

El dragón en los túneles Poco a poco, Adrien dominó su temor hablando de todo lo que le
haría al dragón.Ya no estaba desamparado... pero no tenía muchas
El verano siguiente, fuimos a visitar unas grutas. ganas de encontrarse con un dragón, y seguía sin estar seguro de que
—No, no quiero ir, no quiero al dragón—. Adrien se me pegaba estos monstruos pertenecían al mundo de la imaginación.
desesperadamente. Después de la visita a la gruta, y sobre todo después de hablar
Aunque unos minutos antes, ante la idea de la visita, estaba ex- otra vez del dragón de Disney, Adrien pudo entrar en un túnel sin
citado, cuando se abrió la puerta y apareció la negra cueva, se negó a inquietud. Desde entonces se fija en cada túnel, lo comenta, pero ya
entrar. En una gruta hay un dragón, resulta evidente. Estaba no tiene miedo.
aterrorizado e intentaba subirse a mis brazos. Entré, llevándole en
brazos y hablándole continuamente. Un baño de palabras dulces y
acogedoras ayuda al niño a sentirse seguro. Un poco más tarde, al Miedo a las arañas, los insectos, los perros, los
descubrir que no había dragón en la gruta, se enfadó: gatos y otras fobias
—¡Quiero al dragón! No quiero esta gruta, ¡no me gusta!
Esta aventura me permitió de forma incidental identificar la Las imágenes más anodinas pueden desencadenar fobias. El niño no
fuente de sus temores ante los túneles. Un mes antes habíamos ido a siempre sabe poner límites a las imágenes, no identifica bien los
Disneylandia. Había una gruta con un dragón articulado que movía la contornos, y por poco que el ritmo de presentación sea demasiado
cabeza y sacaba humo. Parecía tan real que, a los ojos de Adrien, es- rápido, o la música demasiado fuerte, aparece el miedo. En un libro
taba vivo. A pesar de mis esfuerzos por enseñarle la maquinaria, que- anterior, La inteligencia del corazón, conté cómo una mujer de-
dó convencido de que el monstruo era real. En aquel momento, con- sarrolló una fobia contra las arañas al mirar sola un documental en la
fieso que no me di cuenta de la importancia de la historia. Adrien televisión cuanto tenía cuatro años.
quería volver a ver al dragón, y para que no tuviera miedo otra vez, En nuestro entorno, las arañas que se pueden encontrar en la
preferí que no fuera. ¡Había tantas cosas por ver! naturaleza no son peligrosas. Al contrario, nos protegen de las moscas
Lo que pasa es que a partir de aquel día empezó a tener miedo en y los mosquitos.Y sin embargo, tienen mala reputación. La araña teje
los túneles cuando íbamos en coche. Cuando entrábamos en uno, su tela, paraliza a sus presas. Puede simbolizar a una madre invasora
lloraba: ante la que es difícil huir.
—¡Quiero salir de aquí, no quiero estar encerrado, no quiero el Habitualmente, los niños no temen a los insectos. Pueden co-
túnel! gerlos con la mano, observar que hacen cosquillas. Todo depende de
—¿Qué hay en este túnel que no te guste? la actitud del entorno hacia estos insectos, puesto que el miedo es
—Hay dragones. A mí no me gustan los dragones. extremadamente contagioso. Si el otro tiene miedo, significa que debe
Ante la imposibilidad de que admitiera que los dragones no son ser peligroso, o sea que es mejor que yo tenga miedo.
de verdad, intenté otra opción, la exploración de su fuerza: Los temores injustificados o desproporcionados a menudo son
—¿Qué harías, si vieras un dragón? proyecciones de otras angustias relacionadas con objetos alejados del
—Le mataría, le cortaría la barriga, le daría un regalo, le do- objeto real del miedo o de la cólera reprimida.
mesticaría. Vas a ver, te va a dar miedo...
112 El mundo emocional del niño El miedo 113

El sótano y el cuarto oscuro pie, desde luego. Cada fallo significaba unas horas de más. Cuando el
castigo era demasiado largo, le llevaban un poco de pan para que no
Del mismo modo que el miedo a las arañas, este temor es típico de un se muriera de hambre. Llorar o hacer ruido desencadenaba nuevas iras
miedo transmitido por los padres o por otros niños (primos, etc.). paternas, no había límites a la hora de emplear el látigo.
Dicho esto, reconozcamos que el sótano es un lugar extraño. Cuando se han vivido historias semejantes, ¿cómo se puede
Contrariamente a la mayoría de habitaciones de la casa, no se pasa por transmitir a un niño el placer de explorar los sótanos?
el sótano. Sólo se va al mismo a buscar algo, no es un lugar en el que
uno se quede, o sea que es un lugar del que se debe huir. Además, ¿Es tímido?
hace frío, está húmedo. Y el ambiente es más bien sombrío. Está
oscuro, no hay ventana. Los adultos denominan timidez a estos minutos que la mayoría de
La mejor manera de evitar el miedo es afrontarlo uno mismo. Los niños se toma antes de establecer un contacto. De este modo disimulan
niños se dan cuenta en seguida de que uno de sus padres intenta que su malestar ante aquel niño que aún no sabe respetar los códigos
ciertas tareas las haga sistemáticamente el otro. Si uno evita ir al sociales. El «hola» que no acude de forma automática desestabiliza a
sótano... ¡debe haber una serpiente escondida! Es misterioso, los adultos, y le toca al pequeño que lo tilden de tímido. No dejes que
peligroso. esta etiqueta se le pegue a tu hijo, pues podría hacerle creer que no es
Muchos padres de hoy han vivido horas horribles en el sótano normal, y convertirle en tímido de verdad. Si alguien le llama tímido,
cuando eran niños. Era un castigo clásico. replica lo siguiente: «No, sólo que necesita un tiempo para entrar en
A Géraldine la encerraban regularmente en el sótano, mientras contacto.»
que sus padres vivían ¡en el cuarto piso! ¿Puedes imaginarte su Cada niño necesita un rato para asimilar lo que pasa y sentirse
espanto, el terror sin nombre que experimentaba durante las horas que seguro. Tal vez es más agradable para los adultos que los niños digan
pasó en aquel sótano? Sabía que era inútil gritar, pues ella ni siquiera hola sin prestar atención a lo que dicen, pero es un signo de sumisión
oía los ruidos de la casa... sólo algunos ratones, arañas que se pegaban y de automatismo más que de responsabilidad y de verdadera
a sus cabellos y la humedad. educación.
A Hubert le dejaron olvidado toda una noche, cuando tenía quince Este tiempo de observación necesario varía según los niños, la
años, en el sótano de la escuela. Le había llevado allí el director actitud de los adultos y el momento. Puede durar hasta veinte minutos.
porque no había hecho el trabajo como era debido. El director tenía El niño necesita ir hacia el otro a su propio ritmo, en el momento que
otras cosas en la cabeza, antes que acordarse de sacarle de allí al fi- juzgue oportuno.
nalizar las clases. Los padres estaban en ascuas al ver que el chico no
llegaba, pero la escuela estaba cerrada... Hace treinta años de todo es-
to, al director no le pasó nada, el chico siguió yendo a la misma es- Qué hacer ante el miedo a la escuela, al
cuela. En cualquier caso, nunca más le enviaron al sótano. profesor, a las notas...
Por cualquier fruslería, Hervé iba a parar al sótano o al cuarto os-
curo del granero, con la orden de permanecer abajo de todo de la es- Escucha su realidad. ¿De qué tiene miedo? ¿De tu reacción? ¿De la de
calera para no percibir el rayo de luz que pasaba bajo la puerta, y de tu cónyuge? ¿Del profesor? ¿De los otros niños?
114 El mundo emocional del niño El miedo 115

Actualmente, las evaluaciones han adquirido una importancia que era mongólico porque no había comprendido una explicación. Los
desmesurada. Numerosos padres reaccionan mal ante las malas notas. «¡idiota, inútil, subnormal, cállate!» son demasiado frecuentes. Estos
En el momento en el que su hijo más necesita que le escuchen en sus insultos y descalificaciones son intolerables. A menudo los niños no
dificultades, que le apoyen, que le animen, le lanzan la amenaza del se atreven a decirlo a sus padres. No es fácil confiar que nos han
desempleo. Un «0» banal evoca para ellos la perspectiva de un humillado.
porvenir malogrado. Todo esto no ayuda a los hijos a sentirse No banalices el autoritarismo, la injusticia, la ironía o las ame-
confiados ante un examen. nazas de un profesor. Ponte claramente del lado de tu hijo. Ningún
Detrás de la angustia de las notas, el niño puede temer, de hecho, adulto, ni siquiera un profesor, tiene derecho a hacerle daño, a herirle,
a su profesor, su mirada, sus observaciones, su juicio. Demasiados a ridiculizarle, ni, desde luego, a pegarle. Según las circunstancias y la
profesores juegan con la desvalorización. Para algunos, la humillación gravedad, ayuda a tu hijo (o a tu hija) a encontrar respuestas a las
es un método pedagógico. observaciones desatinadas, ve a ver al maestro y pídele que modifique
¿Le tiene miedo al profe? ¿No quiere volver a la escuela? su actitud, presenta una queja, retira a tu hijo de la clase, o incluso de
Escucha a tu hijo. Sobre todo, no te pongas sistemáticamente de parte la escuela.
del profesor. Si tiene miedo, seguro que ha vivido mal alguna Hay demasiados padres que no intervienen. Se dicen que la si-
situación, y es importante saber cuál para ayudarle a afrontarla o a tuación no durará, que sólo faltan unos meses para el curso que vie-
protegerle. ne... Lo que pasa es que si no se hace nada, su hijo procesará la hu-
No temas desestabilizar a tu hijo si expresas un desacuerdo con su millación. Incluso cuando ya no esté en contacto con este maestro,
profesor. Aunque tenga que sufrir todo el año a una maestra mala con seguirá llevándola en su cabeza y oyendo las frases desvalorizantes.
él, saber que tú piensas que es injusto le ayudará a no desvalorizarse, a Christophe tenía muy malas notas en matemáticas. Tres años an-
conservar su confianza en sí mismo. Sentir tu apoyo le ayudará a tes, su profesor gritaba mucho y le humillaba con regularidad delante
tomar distancias y a no dejarse destruir. de toda la clase. En consecuencia, sus notas habían bajado. De resultas
Los castigos físicos están prohibidos en las escuelas, pero por de ello había adquirido la convicción de que era un mal alumno. Su
desgracia, numerosos profesores confiesan que todavía tiran de las madre intentaba apoyar al profesor, y le explicaba que éste gritaba
orejas, o dan bofetadas digamos «bien merecidas». para estimularle y para que superara sus malos resultados. La madre no
¡Los golpes de vara y las filas indias, los castigos humillantes, veía que se trataba exactamente de lo contrario.
están prohibidos en Francia desde 1890! Tres años más tarde, había cambiado de profesor, pero seguía te-
¿Cómo pedirle que respete la ley cuando sus propios profesores niendo resultados deplorables, pues las frases hirientes del primer ma-
no la respetan? estro se le habían quedado en la cabeza. Además, de vez en cuando se
Si su maestro se excede, actúa. Exige que se respete la ley. No lo encontraba en la calle. Era su obsesión. Cuando le veía venir, cam-
dejes que tu hijo acumule en su interior sentimientos de injusticia e biaba de acera y jamás se atrevía a levantar sus ojos hacia él.
impotencia. Esta atmósfera interior no es buena ni para sus estudios ni Ayudé a Christophe a pensar y a ver a su profesor en su realidad.
para su desarrollo emocional. ¿Qué le impulsaba a gritar de este modo a un niño, a humillarle?
A Clara (doce años), su profesor, con una evidente falta de res- Resultaba evidente que no estaba bien consigo mismo. Para restable-
peto, la ha tratado de «vaca gorda». A Paul (cinco años) le ha dicho cer el equilibrio, construimos una visualización en la que invité a
116 El mundo emocional del niño El miedo 117

Christophe a imaginar al profesor disfrazado con una nariz roja, dis- —¿Te acuerdas, en la Martinica, lo mucho que te gustaba nadar
frazado con un pantalón de colorines... En dos sesiones, recuperó sus con tus flotadores? íbamos lejos, donde ni siquiera tocabas, y te
capacidades en matemáticas. Le bastó restablecer la verdad. No era él, soltabas.
el malo, o el que no estaba a la altura, sino el profesor. Liberado del ¡Cuidado con el tono que se utilice! El mío es de admiración. En este
peso de estas creencias negativas y de las secuelas de las humillacio- caso, la intención no es, en ningún caso, el de hacer sentir culpable, sugi-
nes, volvió a encontrar sus aptitudes intelectuales. riéndole que ahora es tonta porque antes iba la mar de contenta, sino de
Ayuda a tu hijo a relajarse y a visualizar una pelicula para ex- ayudarle a acordarse, a ponerse en contacto con sus recursos y con el placer
pulsar los sentimientos negativos acumulados y ayudarle a restablecer que sentía, de modo que nazcan las ganas de hacerlo.
su integridad. En la mente, en la fantasía, se puede cortar al otro en —Sssssí.
trocitos, tirarle un cubo de agua a la cabeza, pintar su nariz de color Oscila entre el deseo y el miedo. El recurso es insuficiente. Busco otra
rojo y sus cabellos de color azul, verle desnudo o vestido con un traje cosa en su pasado.
verde con topos rosas... todo está permitido, y libera muchísimo. —¿Recuerdas una vez que tenías miedo y superaste este miedo?
Los compañeros también pueden motivar la aparición de temores. —Sí, sí...
Frédéric estaba aterrorizado ante la idea de obtener notas demasiado —¿Cómo lo hiciste, aquel día para superar el miedo? ¿Te
buenas. Para él era importante no superar a Uzi, muy susceptible acuerdas de lo orgullosa que estabas? ¿Sientes en ti este orgullo?
acerca de quién era el mejor de la clase. —Sí.
A un niño le pueden intimidar en el patio o en la clase, puede Compartir su miedo para que se sienta segura.
tenerle miedo a alguien, adulto o niño, o a algo, puede temer fracasar, —¿Sabes? Yo también tengo miedo, me da miedo ir al tobogán
hacer pipí en unos servicios sucios, ir a pedir papel higiénico... Cada gigante. Ya lo has visto, papá ha ido, pero yo no. Me da demasiado
miedo requiere un tratamiento específico. ¡Escucha! miedo.Y sin embargo sé perfectamente que no hay peligro, como tú
con los flotadores.
Animar, motivar para superar.
Atravesar el miedo —A veces se tiene miedo, pero igualmente se hacen las cosas. Se
pueden hacer con miedo, superarlo.Vamos a animarnos las dos.Tu su-
Margot tiene cuatro años y medio. Estamos en la piscina, tomando el peras tu miedo y vas a nadar a la piscina grande con tu traje de baño
sol. Lleva un traje de baño con flotadores. Hace seis meses, en el mar, con flotadores, y yo supero mi miedo y voy al tobogán gigante.
le encantaba chapotear en sitios donde no hacía pie. Pero aquí, al —¡Quiero salir!
tercer día, sigue pegada a mí. De acuerdo. ¡No insistir jamás!
—Tengo miedo, ¡no me dejes! Necesita tiempo para decidir realmente por sí misma, y no para darme
Ante todo, acoger. gusto. En este caso, resulta más fácil, pues me da miedo de verdad el tobogán, y
—Comprendo que tengas miedo. Hace mucho tiempo que no ella lo sabe. Sabe que si se va a nadar a la piscina grande, me obliga a en-
puedes ir a nadar. frentarme a algo difícil para mí. El miedo es una anticipación negativa, y te-
Luego, ayudar al niño a entrar en contacto con sus recursos. nemos que transformarlo en deseo, en anticipación positiva. Este paso de la una a
la otra sólo es posible si el niño se siente libre en su elección.
118 El mundo emocional del niño El miedo 119

Se saca el traje de baño y nos secamos. ne razón ni deja de tenerla, existe una razón (o varias) para ese miedo,
Unos minutos más tarde, dice: aunque tú no la (las) conozcas todavía.
—¡Ponme el traje de baño con flotadores, mamá!
Es fundamental que sea Margot quien elija ir. La decisión «voy»
Escuchar
marca el desencadenante que transforma el miedo inhibidor en miedo
motor. «¿Qué te da miedo?»
Le ayudo a ponerse el traje de baño, se va al agua, muy decidida. «¿Qué es lo que te da más miedo?»
Valiente y, aparentemente, sin grandes dificultades, supera el miedo, Recuerda que: «Me da miedo el perro» es muy vago. ¿El ladrido
baja la escalera de la piscina grande y se aventura hacia el medio. del perro? ¿Sus movimientos bruscos? ¿Su lengua? ¿Su cara? ¿Su
Pedalea con sus piernas, se impulsa con los brazos. ¡Está nadando! mirada? ¿Teme que el perro le muerda o salte a su alrededor para
Además, se ve que le gusta. Un rato más tarde, me increpa: jugar, o que le lama con su gran lengua mojada?
—¡Ahora tú te vas al tobogán, mamá! Escuchar no significa sólo prestar atención, también significa
—De acuerdo, me toca a mí. ayudar al niño a expresar su verdad. Procura no poner en movimiento
Después de bajar chillando por el tobogán acuático gigante, me su intelecto utilizando una formulación con el modo «¿por qué?», que
siento orgullosa de mí. Se lo digo, y ella me contesta: le incitaría a darte una razón ciertamente plausible... pero que no
—Yo también, estoy contenta de haberme bañado en la piscina estaría vinculada forzosamente a la realidad. Parte del principio de que
grande. Ahora me encanta la piscina grande. ¿Volvemos a bañarnos? el niño no conoce las motivaciones reales de su miedo. Escuchándole
El orgullo arraiga el éxito y la confianza en sí mismo, es importante le ayudarás a descubrirlas. Acompáñale en su búsqueda mediante
que se sienta orgullosa de su logro. reformulaciones y preguntas que empiecen por «qué, cómo, de qué».
Lo que da confianza a un niño no es que su entorno no tenga (Este tipo de preguntas se describe con mayor precisión en el capítulo
nunca miedo, sino al contrario, saber que todo el mundo —incluso los 10, «Algunas ideas para vivir más feliz con tus hijos», p. 207.)
adultos, incluso los padres— a veces tiene miedo.
Un niño que cree ser el único que tiene miedo, que imagina que Aceptar y comprender
su padre y su madre son ajenos a esta emoción, con facilidad se sentirá
«anormal». Y, desde luego, esto agrava su sentimiento de inseguridad. «Comprendo que tengas miedo. Este perro hace mucho ruido cuando
ladra.»
Reconoce la emoción del niño. Manifiéstale tu aprobación, tiene
Recuperemos las distintas etapas del derecho a sentir lo que siente. No te pongas a intentar «curarle» su
acompañamiento de la emoción miedo, ni resolver su problema en su lugar. Da muestras de
compasión, de empatia, es todo lo que necesita.
Respetar la emoción Le acompañarás para intentar vencer este miedo, pero sólo según
su propio deseo. Toda expectativa de tu parte bloquearía el proceso.
Es la condición para que tu hijo confíe en ti. Respeta siempre su
emoción, aunque te parezca irracional. El niño tiene miedo, ni tie-
120 El mundo emocional del niño El miedo 121

«Yo también» (desdramatizar) Si no lo logra, si se siente demasiado inhibido para atreverse a


chillar, propónle que piense en alguien que no tendría miedo en la
Una vez haya podido expresarte su experiencia, podrás hablarle de tus misma situación, un amigo, el padre de un amigo, el carnicero, el
propias emociones de hoy o de ayer, cuando tú eras un niño o una mecánico... o Tarzán, James Bond, Robert Redford... Invítale a verle
niña. ¿Tenías el mismo miedo? ¿otro? Comparte. No finjas, di la actuar... Luego a que se imagine que está en el interior del personaje.
verdad a tu hijo. Elige preferentemente un temor que tu hijo no tenga, Ayúdale a sentirse fuerte, poderoso, cómodo en este nuevo papel.
de modo que se sienta más fuerte que tú en este punto, lo cual le «¿Sientes la sensación de confianza y de fuerza? ¡Creo que
ayudará a superar sus temores. puedes decidir que esta fuerza es tuya!»

Buscar sus recursos, interiores y exteriores Satisfacer la necesidad de información


Todos hemos pasado por la experiencia de atravesar y superar un Tu hijo ha entrado en contacto con sus recursos. También le hace falta
temor. recibir información, si es preciso, saber si este perro es o no peligroso.
«¿Te acuerdas del miedo que tenías, y que luego ya no tuviste?» Quien tiene miedo necesita que le tranquilicen, que le informen.
Si el niño no se acuerda espontáneamente, puedes ayudarle: Pero si le das la información demasiado pronto, simplemente no la
«Por ejemplo, la primera vez que te invitaron a ir a dormir a casa
escuchará. Por esta razón, a menudo las explicaciones son vanas. Ante
de Stéphane.»
todo es preciso escuchar la emoción, acompañar al niño en la toma de
Déjale tiempo para que se acuerde y evoque las sensaciones que ex- contacto con sus recursos personales. Sólo entonces, el niño estará
perimentó entonces.
atento a tus explicaciones. Aun así, es preferible que las encuentre por
«Y luego decidiste ir. ¿Te acuerdas de cómo te decidiste? ¿Y te sí mismo.
acuerdas de cómo te lo pasaste? Volviste a casa encantado. ¿Te
«¿Qué puedes hacer para saber si es peligroso?» Ayúdale a
acuerdas?»
reflexionar. Por ejemplo, id juntos a la biblioteca para coger un libro
«¿Lo ves?, ya tuviste miedo otra vez y lo superaste. ¿Ves de qué
sobre perros, y dale las informaciones que necesita y que no puede
modo podrías utilizar esta experiencia para el miedo que te da el
encontrar solo con facilidad. Así podrá trasladar esta dinámica a otras
perro?»
circunstancias. Cuanto más autónomo sea en su búsqueda, más sólido
Déjale unos minutos para que piense en ello.
se sentirá frente a sus temores.

Ayudarle a liberar su energía


Facilitar la elaboración de distintas respuestas
Cuando uno tiene miedo, el diafragma se contrae. Todo lo que posibles frente al miedo
permite relajarlo ayuda a evacuar el miedo: respirar profundamente,
cantar, gritar, reír. Invita a tu hijo a respirar profundamente hasta que Según el contexto y las circunstancias, puedes detenerte en una so-
evacué esta sensación de opresión. Canta, grita con tu hijo, ayúdale a lución satisfactoria, o pedirle que formule varias opciones. Procura
que saque su voz. Se sentirá poderoso, y listo para afrontar la
adversidad.
122 El mundo emocional del niño El miedo 123

no calificar sus ideas de «buenas» o «malas», es el niño quien debe una se siente así, significa que el cuerpo se prepara para hablar. Pasan
evaluar su alcance. muchas cosas en el cuerpo para que tengamos energía para bailar,
«Sí, puedes preguntar al amo del perro si puedes acariciarle, es cantar o hablar. ¿No has notado nada de esto en tu cuerpo?
una opción. ¿Qué más puedes hacer?» —Cuando un perro ladra también me palpita el corazón. —Son
Evoca y evalúa una a una las distintas respuestas que propone el manifestaciones del miedo. El miedo permite llenarse de energía para
niño: enfrentarse a un peligro o para prepararse. De hecho, el miedo que se
«Y si haces esto, ¿qué pasará? ¿Tendrás menos miedo?» «¿Qué podría siente para prepararse es normal. Todo el mundo lo siente en este tipo
darte ganas de acariciar al perro y superar el miedo?» de circunstancias. Cuando subas al escenario, tendrás miedo, porque tu
¿MIEDO? Piensa GANAS. ¿Qué puede darle las suficientes ganas cuerpo se preparará para dar lo mejor de sí mismo. Cuando yo siento
como para afrontarse al perro, al agua o al tobogán y que no le domine esto, estoy contenta. Sé que mi cuerpo se prepara. Respiro
el miedo? Es fundamental que no haya ninguna presión en tu espíritu. profundamente. Siento que mis pies están bien sólidos sobre el suelo y
Que no desees que el niño supere el miedo delante de ti. De otro miro a la gente. Me digo que les quiero, que me siento feliz por
modo, se sentirá obligado por tu deseo... y la obligación engendra hablarles y, en mi mente, les envío rayos de luz para sentirme en
miedo. Sólo la libre elección proporciona el sentimiento de tener contacto con ellos. Es mi solución, he tenido esta idea que me ayuda a
poder sobre el entorno y pone en condiciones de superar el miedo. ralentizar mi corazón cuando va demasiado de prisa.Tú puedes tener tu
propia idea, probar cosas diferentes. De todos modos, desde el momento
en que empiezo a hablar, utilizo la energía que hay en mi cuerpo y todo
UTILIZAR EL «MIEDO ESCÉNICO» el miedo se va. Y tú, ¿tienes una idea de lo que puedes hacer para
sentirte mejor?
Estamos en vísperas del espectáculo de fin de curso de la escuela, que —Sí, tengo una idea—, dice, radiante, después de unos minutos
se celebra en el ayuntamiento. Se espera a trescientas personas. de reflexión.
Margot no me ha hablado de nada, pero sé que actuar en público es No me dijo nada más, pero unos días más tarde estaba mani-
impresionante para todo el mundo, y aún más para una niña de cuatro fiestamente contenta de encontrarse en el escenario. Sentía el placer
años que subirá al escenario por primera vez. ¿Cómo prepararla lo de bailar mirando realmente a la gente. Su maestra tuvo que recordarle
mejor posible para esta experiencia? que había llegado el momento de abandonar el escenario porque su
—¿Tienes un poco de miedo a bailar delante de la gente o te actuación ya había terminado y debía dejar que continuara el
sientes bien?
espectáculo.
—Tengo un poquito de miedo.
—Sí, es normal tener un poquito de miedo. Quería hablarte de Algunos miedos son útiles (preparan el cuerpo para una acción,
ello, porque, cuando celebro una conferencia delante de mucha gente, anuncian un peligro). Otros son exagerados (las arañas no son malas
yo también tengo miedo. El corazón me palpita, tengo el vientre en nuestro entorno, las perforadoras neumáticas que usan los obreros
encogido, la garganta seca y las manos húmedas. De hecho, cuando en la calle hacen mucho ruido pero no son amenazantes, los perros
encerrados detrás de verjas no pueden atacarnos, cuando llevamos
flotadores en la cintura no podemos ahogarnos...).
124 El mundo emocional del niño El miedo 125

Los miedos útiles deben respetarse y escucharse, es inútil Por un momento, intentemos medir lo que puede vivir un niño
arriesgarse. Los otros, se pueden superar... cuando lo ha decidido uno ante estas obligaciones dobles.
mismo, y estar orgulloso de sí mismo después. Un amigo suyo puede morderle o pegarle, el niño puede hacerse
un morado, tener una marca durante unos días... Puede caer del
columpio, o de lo alto de la tapia... se hará daño, ¿y qué? Hay muy
¿ES MIEDOSO? pocas posibilidades de que sea grave. A veces, unos morados
permiten aprender mejor que todos los consejos bienintencionados de
¿El miedo se instala de forma casi permanente? ¿El niño está in- prudencia.
quieto, incluso inhibido, en múltiples situaciones? ¿Siente pánico por A fuerza de querer evitar las heridas, se puede provocar una
nada? ¿Está forjándose hábitos emocionales o, dicho de otro modo, un mucho mayor, que resquebraja el narcisismo, mancha la imagen de sí
«carácter» miedoso? Es urgente ayudarle. mismo y altera el sentimiento de la propia capacidad.
Las raíces de este miedo que se está imponiendo sobre el resto de Ahora, los parques están protegidos, aunque nunca se puede
emociones pueden ser múltiples. descartar del todo el riesgo de una herida. Es mejor enseñar al niño a
sostenerse, a saltar, a caer, a probar su equilibrio y sus recursos que
mantenerlo sentado en un banco. De otro modo, existe el riesgo de
Una reacción a una sobreprotección de los que permanezca sentado toda su vida.
padres Los morados del alma pueden ser más graves que las pupas del
cuerpo.
«Cuidado, vas a caerte. No camines por ahí.» La sobreprotección paterna lleva a la inhibición... o al riesgo.
Cuando el padre o la madre intentan evitar que su hijo se enfrente Excesivas prohibiciones pueden llevar paradójicamente al niño a la
al peligro, transmiten paradójicamente a su niño la siguiente necesidad de explorar sus límites. Cuando al fin se le da la libertad o
información: «el mundo es peligroso» y «tú solo no puedes». cuando él se la toma, se arriesga a mostrarse mucho más atolondrado
Seamos coherentes; los niños reciben a menudo mensajes con- que otros que han tenido la ocasión de enfrentarse de forma
tradictorios. Sus padres les inundan de «venga, no tengas miedo», progresiva a sus límites y han podido adquirir un sentimiento de
pero a la que cogen un poco de autonomía, empiezan con sus responsabilidad.
«cuidado», lanzados en tono ansioso. ¿Cómo salir de este lío? Por un Dejar de sobreproteger a menudo basta para que el niño perciba
lado, «venga, dale un besito a esta señora», por el otro, «sobre todo, que se le permiten cosas nuevas. Confía en él, se sentirá digno de
no hables con desconocidos». confianza.
Del niño que se toma su tiempo cuando conoce a una persona Cuidado, dejar de sobreproteger no significa abandonar al niño
nueva, que espera ver con quién se las está teniendo antes de lanzarse solo con sus dificultades, significa elegir entre las angustias de los
en sus brazos, se dirá que es tímido, que tiene miedo de la gente. padres y la realidad del peligro.
Del que se precipita sin vergüenza hacia cualquier adulto que se Para ayudar a este niño, toma consciencia de tus actitudes y
le acerque, los padres dirán «es capaz de irse con cualquiera», en tono frasecitas sobreprotectoras o desvalorizadoras... y aguántate un poco.
de reproche. Confía en él.
126 El mundo emocional del niño El miedo 127

La represión de la cólera Ciertamente, no son lugares donde los niños se sientan particular-
mente a gusto, pero forman parte de la vida cotidiana en la sociedad
Su rabia es intensa, pero el niño se prohibe, o sus padres le prohiben, actual y, sin que sea necesario visitarlos con los niños cada día,
que la muestre, incluso que la experimente. Entonces, el niño se siente evitarlos de forma sistemática plantea un problema.
malo al sentir rabia, la dirige contra sí mismo, se juzga, se siente Para aliviar a un niño miedoso de un temor que no le pertenece
ridículo, pequeño, inepto. propiamente, sino que parece ser el reflejo del nuestro, es útil hablarle
Muchos hermanos mayores son más tímidos que los menores. de nosotros y señalarle que no debe cargar con nuestras emociones.
Son aquéllos los que no se otorgan a sí mismos el derecho a ma- Desde luego, resulta más eficaz (y mucho más confor-
nifestar sus celos. Rechazan su cólera contra su hermanito o su table después) curarse uno mismo.
hermanita que les ha quitado a su mamá. Yolaine vino a mi consulta a causa de su hija, aterrorizada du-
El niño encolerizado que no puede expresar su cólera teme su rante la hora de patio. En realidad, era Yolaine quien tenía miedo.
propia violencia y la venganza de los demás. Para protegerse de estas Temía que su hija reviviera lo que ella había vivido en la escuela. Una
emociones demasiado intensas que le harían sentir culpable, rehusa vez hubo identificado este miedo, le habló espontáneamente a
sentir su rabia, la atribuye a su entorno. Tiene miedo de los demás, Daphne de sus terrores pasados y le dijo claramente que ella no tenía
portadores de su violencia, de la gente (quieren hacerme daño), de sus porqué cargar con sus temores. Al día siguiente, al volver de la
amigos (se burlarán), de los perros (me morderá), de los gatos (me escuela, Daphne, contenta como unas pascuas, anunció a su madre: —
arañará)... Te devuelvo tus miedos, mamá. A partir de ese día, su transformación
fue espectacular. Daphne
'ha vuelto a ser una niña alegre. La inquietud desapareció. ¿Magia?
La expresión del miedo negado o No, pero la respuesta adecuada libera muy pronto la energía entre
reprimido de los padres f los niños.

Los niños están extremadamente atentos a lo que da miedo a sus


padres. Si te sobresaltas al ver en la calle a alguien a quien tu hijo no ¿Cómo ayudar a un niño miedoso?
conoce, si te sientes inquieto ante la idea de encontrártelo, tu hijo lo
sentirá inmediatamente. Si es consciente de lo que sucede, te 1. ¡Deja de juzgarle como miedoso! Sólo es un niño que tiene
preguntará: «¿Qué te pasa, mamá?» Si no, mirará a su alrededor con muchos miedos o que no se atreve a enfadarse. ¿Tal vez eres tú quien
aire inquieto, se sentirá atemorizado sin poder identificar realmente la le prohibe la rabia?
causa.
Guillaume tiene tres años. Tiene miedo de todo lo nuevo, no se 2. Para que adquiera confianza:
atreve a ir hacia los demás. En seguida comprobamos que los padres
de Guillaume tenían pocos amigos. Salían poco, evitaban llevar a • Propón actividades a la medida de sus posibilidades.
Guillaume a las tiendas, al metro, a las galerías comerciales... Le • Autoriza vías de expresión de la cólera.
protegían, convencidos de que no eran lugares positivos para él. • Favorece su creatividad.
128 El mundo emocional del niño

• Encuentra actividades, lugares, juegos, en los que esté excluido todo


Capítulo 5
juicio, toda evaluación. Hoy en día existen cada vez más talleres
variados en los que el niño puede aventurarse, realizar, expresarse,
sin que se formule ningún juicio (positivo o negativo). El taller de
expresión de Arno Stern (véase bibliografía) es un modelo en este
género. En él se puede pintar sin que a uno le juzguen. El respeto La cólera está al servicio
por el niño, por su ritmo, su proceso, sus necesidades, es total. Se le
otorga una gran atención. de la identidad
3. El contacto con los animales de gran tamaño a menudo es de
gran ayuda. Los poneys, los perros, no juzgan, no exigen, permiten
que el niño se acerque a su ritmo, confían en él y el niño, de repente, Cuántos padres han sufrido, en el parque o en el supermercado,
se siente seguro. cuando su querubín se revolcaba por el suelo, chillando bajo la mirada
llena de reproches de los adultos presentes.
4. Los ordenadores tampoco juzgan y demuestran una paciencia Y sin embargo, la cólera es una reacción natural y sana ante la
infinita. El niño puede hacer y hacer y repetir mil veces la operación frustración.
sin que el ordenador haga un solo movimiento de irritación. Siempre
que ningún adulto vigile el «resultado», el niño puede sentirse a gusto
explorando, puede aventurarse solo con el ratón, ir cogiendo LA CÓLERA ES UNA REACCIÓN SANA
confianza, poco a poco e inconscientemente, en sus capacidades.
La cara de Lucie, de tres años, se crispa: «No es justo, ¡quiero montar
5. Mide tu propio miedo y cúralo. yo!» Se pone toda roja, aprieta los puños. Está encolerizada. Se niega
a aceptar el veredicto del juego del «pito pito colorito» que ha
En resumen: designado a su hermana para subir en la bici. A los tres años, aunque
No obligues al niño a afrontar su miedo demasiado directamente. el «pito pito colorito» lo haya dicho, Lucie tiene ganas de subir en la
Dale los medios para afrontarlo a su ritmo y de superarlo sólo cuando bici, y está muy frustrada.
él lo elija. La única ventaja del «pito pito colorito» es que la elección no la
realiza un adulto. Es arbitrario, y descansa sobre el azar, por lo que no
implica preferencia del padre o la madre por uno u otro hijo. Pero los
padres no pueden esperar que un pequeño tan pequeño acepte su
suerte sin protestar.
—Por favor, mamá, he terminado mi helado. Quiero otro.
—No, uno solo basta.
Imagina que un niño de tres años te dice:
130 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 131

—De acuerdo, mamá, comprendo que un helado es suficiente. pero con la cólera pasa todo lo contrario. Es la expresión de una ne-
¿Qué sentirías? cesidad, una demanda del otro para que restablezca un equilibrio.
Te sentirías vagamente incómoda. No sólo el niño deja de afirmar
su deseo, sino que lo anula.
Ese niño se arriesga más tarde a que le cueste saber lo que quiere. Una etapa del trabajo de duelo
A menudo se preguntará lo que debe hacer, lo que está bien o mal,
pero ya no tendrá la menor idea de lo que tiene ganas de hacer Se trata también de la primera etapa del trabajo de duelo. Cuando un
realmente... Con frecuencia dejará que los demás orienten su vida, niño se enfada porque no puede tener algo, su emoción le permite
necesitará la opinión de Fulanito o Menganito para tomar sus reconstruirse y... aceptar la frustración. Algunos padres se exasperan
decisiones. cuando han explicado bien a su hijo que algo es rigurosamente
Cuando el niño insiste, grita, chilla, hace una escena para tener un imposible... y que éste se encoleriza. No saben que es una etapa
helado, afirma su deseo, y esto es muy importante. necesaria, natural y normal del trabajo de duelo que el niño tiene que
Desde luego, resulta un escándalo, agotador para los padres can- hacer para aceptar. Rememoremos las etapas de la aceptación (aspecto
sados por el trabajo y/o que ya han olvidado sus propias cóleras. La desarrollado en La inteligencia del corazón):
violencia puede ser la respuesta a la angustia del niño, que le confirma
que la expresión de su cólera no es bienvenida, que es peligrosa. 1. La negación
Decir: «¡Sí, quiero más!», significa seguir afirmando que estoy 2. La cólera
aquí y que tengo mis derechos. Si el otro se niega, es su problema, 3. La negociación
pero yo sé que tengo derecho a desear. El niño no siempre necesita 4. La tristeza
que sus ganas se satisfagan, sólo quiere que se le reconozcan, que sus 5. La aceptación
emociones se escuchen.
El feto se alimenta mediante el cordón, recibe automáticamente Son movimientos naturales e importantes. La aceptación pasa por
satisfacción a sus necesidades nutricionales. Constituye una la cólera.
continuidad con su madre, ni siquiera siente la emergencia de su Dar satisfacción a una demanda antes de dejar que emerja puede
necesidad (así, al menos, lo creemos hasta ahora). impedir que el niño, de un lado, sienta sus necesidades y, del otro, que
Después del nacimiento, la comida ya no viene con tanta re- realice un aprendizaje sano de la frustración. Una madre demasiado
gularidad. Grita cuando siente un malestar en su cuerpo. Todavía no atenta a la prevención de los menores deseos de su prole (suelen ser
sabe identificarlo, pero su madre lo llamará «hambre». Le alimenta. Él más las madres que los padres las que caen en la trampa) puede difi-
se calma, se siente bien. cultar la construcción de su sentimiento de identidad. La frustración,
Si su madre no acude, grita más fuerte. Protesta porque quiere con mesura, es estructuradora. Afortunadamente, es imposible satisfa-
que acuda. Su cólera es una llamada, insiste en su necesidad, intenta cer siempre a un niño. A veces, todas las tiendas están cerradas y ya no
que su madre venga, que restablezca el vínculo. nos quedan más helados en la nevera, puede pasar que sólo haya una
Demasiado a menudo, la cólera se interpreta como un distan- bici para dos, que el plato preferido se rompa, que mamá se vaya a tra-
ciamento respecto a la otra persona. Esto sucede con la violencia, bajar, que el amigo Julien esté en casa de sus abuelos...
132 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 133

Una cierta dosis de frustración es, pues, inevitable, y también es Proporciona la fuerza para afirmarse, para decir NO, para sentirse uno
útil, siempre que las emociones y, principalmente, la cólera del niño mismo. Quien no sabe sentir y no sabe expresar su cólera a menudo se
se escuchen. siente víctima e impotente en la vida. Expresar la cólera es necesario
Una frustración injusta, arbitraria o demasiado importante puede para sentir el poder de uno mismo, hacerse respetar, afrontar la
ser destructiva. frustración sin que nos destruya el sufrimiento de la carencia,
El bebé depende de su madre, no puede sobrevivir sin ella. Si no restablecer la armonía en las relaciones.
acude lo bastante de prisa (¡unos minutos!), el terror sustituye a la có- Armonía es una diosa griega, la hija de Hares y Afrodita. Hares
lera, el terror del abandono, de la ruptura del vínculo. Para el peque- (Marte en el panteón romano) es el dios de la guerra, del conflicto.
ñín, el tiempo no existe. Vive en el instante. Cinco minutos le parecen Afrodita (Venus) es la diosa de la belleza y de la comunicación. La
una eternidad. No tiene medios para representarse lo que retiene a su armonía se obtiene mediante la confrontación y el diálogo, y no
madre. Al cabo de un rato, diferente según sus experiencias anteriores, mediante el silencio y la negación de sí mismo.
si nadie viene, se resigna. Se calla, se recoge sobre sí mismo. Su cuerpo Si tú me niegas lo que te pido, algo se rompe en nuestra rela-
imprime algo así como «no tengo derecho a llamar», «no soy ción.Yo me enfado para que tú midas hasta qué punto era importante
importante», incluso «soy malo», pues lo que sí es necesario es en- para mí. La cólera intenta restablecer el vínculo. No lo rompas.
contrar una explicación al hecho de que mamá no se ocupe de él. Aún Conserva el vínculo, mantente presente, atento, respetuoso.
no es capaz de elaborar una deducción consciente. El proceso En la mayoría de espíritus reina una gran confusión entre cólera y
permanece inconsciente, pero si se repite demasiado a menudo, esta violencia. La violencia es destructiva, en cambio la cólera es
creencia le puede marcar toda la vida. constructiva. Nos falta vocabulario para aclarar esta distinción.
Dejar llorar solo a un niño pequeño significa hundirle en Aunque la palabra agresividad tiene una etimología positiva (ir hacia),
emociones terroríficas. hoy en día su connotación es netamente negativa. En este caso yo
Necesidad/demanda/satisfacción es la secuencia que debe ser más conservo el vocablo «cólera» para nombrar la manifestación de la
frecuente para que el niño asimile el sentimiento de que le quieres, de agresividad biófila, la que está al servicio de la protección de la vida.
que es importante para ti, de que sus demandas pueden recibirse, en La cólera es la afirmación de uno mismo frente al otro, precisión de
definitiva, que cuenta para ti, que está seguro. los límites que no deben cruzarse, rechazo de lo que nos hace sufrir.
A veces, sus demandas no pueden satisfacerse, pero es funda- Cuando no sabemos administrar la cólera, entramos en la vio-
mental que siempre se escuche su cólera. lencia. La violencia es muy distinta a la cólera, de hecho es su
opuesto. Mi cólera sólo habla de mí, de mis necesidades.
La violencia habla del otro, acusa, intenta herir, destruir. Siento
Enfrentarse a una injusticia una necesidad, la expreso y no obtengo satisfacción. En este caso,
siento un vacío en mi interior, me falta algo. Estoy mal. La violencia
La cólera también sirve para enfrentarse a una injusticia, es una re- es el resultado de un intento de protección contra la intensidad de los
acción frente a una invasión, es una protesta contra lo que no que- afectos mediante la proyección sobre el prójimo, la atribución del
remos tolerar. La cólera está al servicio de la identidad, permite de- malestar al otro mediante la acusación.
fender el territorio, el cuerpo, las ideas, los valores, la integridad.
134 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 135

Cuando el malestar es demasiado intenso, comienzo a temer que Reprimir la cólera del niño sirve para mantener la tapadera sobre
me destruya. Entonces intento proyectar sobre otra persona mi sus propias emociones de cuando eran niños, sobre su niño interior.
sensación, y acuso: «¡Eres mala!» De hecho, la violencia es el resul- La cólera, herramienta para la gestión de la frustración, no debe
tado de la represión de la cólera, de la incapacidad de tolerar en uno borrarse, sino vivirse, sentirla en sí mismo, atravesarse.
mismo una carga afectiva fuerte, de una acumulación de sentimientos Existen, pues, cóleras sanas, no violentas, que estructuran, y có-
de impotencia, pero también de miedo. Aunque, en definitiva, siempre leras desfasadas, excesivas, violentas, destructivas. Las primeras de-
es la expresión de una necesidad, disfraza más de lo que desvela. ben escucharse, las segundas, deben descifrarse.Todas se tienen que
La violencia es un último intento para que se escuche un mensaje, respetar, pues todas señalan una necesidad.
pero entonces el mensaje está tan disfrazado que son bien pocos
quienes lo comprenden. ¿Quién oye la angustia del alumno de instituto
que ataca a su profesor? ¿Quién oye el desespero de un joven de los DESCIFRAR LA NECESIDAD
suburbios que pinta graffitis y atraca a los ricos? Sin embargo, ambos
intentan atraer la atención sobre lo que viven. Dicen que su vida Mi hijo Adrien manifestó su mayor cólera hacia los dieciocho meses,
cotidiana es intolerable. ¿Quién les escucha? en una tienda cercana a la estación de Montparnasse, en París. Nos
La reacción de proyección es un mecanismo de defensa primaria íbamos unos días de vacaciones. Eran las dos del mediodía, y Adrien
universal: «Eres malo(a)» marca la dificultad del niño para tolerar el se había quedado dormido en el taxi. Cuando le despertamos, al llegar
malestar de la frustración. Poco a poco, si recibe la atención adecuada, a la estación, su siesta había quedado interrumpida al cabo de una
el respeto de sus deseos y de sus necesidades (y no su satisfacción media hora demasiado corta. Interesado de inmediato por su entorno,
sistemática) el niño ya no necesitará proyectar sobre otra persona. miró por todas partes sin expresar en ese momento ningún tipo de
Sabrá, porque lo habrá experimentado, que puede estar encolerizado y desaprobación. Como era temprano, fuimos a comprar revistas.
dejar de estarlo, que su cólera no le destruye, que no ha destruido el En la tienda, se fijó en seguida en una bolsa de caramelos de-
vínculo con sus padres. masiado artificiales para mi gusto. Como no deseaba comprárselos,
Si a menudo los padres dudan a la hora de escuchar las cóleras, es intenté negociar. Le propuse todo tipo de cosas, cochecitos, motos, en
porque las inscriben en la dinámica de un juego de poder. Viven en vano. Chilló, se revolcó por el suelo, pataleaba si yo intentaba tocarle,
competición con su hijo, y olvidando que poseen un cerebro más estaba «fuera de sí». Nunca le había visto así. ¿Qué actitud cabía
desarrollado que el de éste, entran en: «tú aquí no mandas», «no va a tomar?
ser un mocoso como tú quien me va a fastidiar»... Comprarle los caramelos habría podido ser una opción, pero me
Dado que ellos mismos no tuvieron derecho a expresar sus pareció más que nada destructiva. De un lado, realmente no eran
cóleras, sus rabias antiguas han permanecido ancladas en ellos, listas sanos para su cuerpo, pero sobre todo su cólera era tan intensa, tan
para volver a salir, lo cual les aterroriza. Sobre todo porque, bajo la desmesurada, que no podía estar relacionada con los caramelos. Si se
cólera, está el sufrimiento del niño que fueron, el sufrimiento de que los regalaba, habría producido un cortocircuito en su descarga
no les comprendan, de que no les oigan, de que no les amen. emocional. Chillaba que quería caramelos, pero en reali-
136 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 137
dad no podía aguantarse los nervios, no había dormido lo suficiente y Es posible que la rabia del niño nos permita medir hasta qué punto
se mostraba intolerante ante cualquier frustración. tiene ganas o necesidad de lo que pide. En función de estas nuevas
Todos los padres lo saben, las mayores cóleras aparecen cuando coordenadas, podemos revisar una decisión y darle lo que le habíamos
el niño está agotado, cuando ya no es capaz de administrar la menor rechazado de entrada. No temamos parecer inconsecuentes. Una vez
frustración. Siente en su interior un vago malestar (su cansancio) y más, siempre que no sea sistemáticamente, el niño verá tan sólo que se
busca las razones del mismo. Se agarrará a la primera ocasión que se presta atención a sus necesidades. El capricho sólo está en la idea del
presente. No le gusta el coche verde, quiere un caramelo, desea jugar adulto. El niño raramente comienza un juego de poder con sus padres.
con el oso que sostiene su hermana, la sopa no está buena... Necesita Cuando desciframos durante la terapia este tipo de juego, con mayor
encontrar una razón sobre la cual enfocar su energía y evacuarla. frecuencia es el padre quien descubre su responsabilidad en la historia.
Las capacidades neuronales han sido superadas. Resulta inevi- Ha comenzado de forma involuntaria a situarse en el juego al
table una descarga tónica. Es útil, y el niño ya no sabe contener la interpretar una demanda del niño como una exigencia, o al usar su
excitación. poder para obtener algo. Es natural que el niño intente resistirse, y
Reñirle no sería apropiado, no es capaz de actuar de otro modo. entonces, numerosos adultos sacan la siguiente conclusión: «Me está
Interpretar la crisis diciéndole: «Estás cansado» lo sentiría como una probando, me está llevando al límite.»
humillación, y el único efecto sería multiplicar su rabia. Descifra la Yo creo que el niño hace lo que puede para intentar atraer nuestra
verdadera necesidad y ayúdale simplemente a satisfacerla. atención hacia sus necesidades. Todavía no sabe formular bien las
Así que acompañé a Adrien en su crisis de rabia, permaneciendo cosas, todavía no sabe identificar lo que le pasa, pero si está furioso es
presente cerca de él, mirándole. En seguida que pude, le cogí evitando que le pasa algo.
los golpes para ayudarle a contener su cuerpo. Le hablé. Me disculpé Nuestro papel de adulto no es el de poner límites autoritarios,
por haber elegido un horario tan malo para él, por no haber sabido como se dice demasiado a menudo, sino de garantizarlos. Nuestro
respetar su tiempo de sueño, le dije que estaba enfadado con razón. papel es el de utilizar nuestro cerebro más desarrollado, nuestra in-
Dado que su hermana había elegido un juguete, cogimos para él teligencia, para identificar la necesidad del niño, ayudarle a canalizar
una pequeña moto. Era incapaz de elegir en aquel estado, pero ya en su energía, ayudarle a restaurar su sentimiento de integridad, a
el tren le encantó... después de acabar su siesta interrumpida. Negarle repararse a pesar de la carencia, o a afirmarse frente a la injusticia.
un regalo y decirle «peor para ti, haberte calmado» en el momento en
el que su hermana abriría el suyo estaba fuera de lugar, sobre todo
porque no tenía posibilidad fisiológica alguna de calmarse. UNA REACCIÓN FISIOLÓGICA QUE
Su cólera parecía excesiva porque la había desplazado hacia los DEBE ACOMPAÑARSE
caramelos. Chilló hasta satisfacer su verdadera necesidad, dormir,
unos cinco minutos más tarde. La cólera es una reacción fisiológica del organismo. Descarga de
De este ejemplo no debe deducirse que sea nocivo satisfacer la adrenalina, dilatación de los vasos sanguíneos, aflujo de azúcar a los
demanda formulada por un niño cuando esté enfadado. miembros... El niño encolerizado se siente invadido por una energía
inmensa, patalea y da golpes con las manos, se revuelca por el
138 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 139

suelo. Es muy pequeño, sus gestos son desordenados, y para no per- lo que vivía. Por la noche, cuando vuelve a casa, estalla. Les «mues-
derse necesita que le contengan. Para no temer sus propios gritos, su tra» a sus padres todo lo que no ha sido durante el día. Se descarga de
dolor, sus pulsiones, necesita poder anclarse en el amor de un padre o todos los esfuerzos de control, los suelta por fin. Todavía no sabe
una madre presente, que acoja las pulsiones agresivas y vuelva a dar identificar las causas de su irritación, y aún menos verbalizar-la.
ternura, transmitiéndole este mensaje: «Tu cólera no es peligrosa. Confía en sus padres, puede arriesgarse a mostrarse encolerizada, cosa
¿Ves?, no me hace daño, sigo estando aquí y sigo amándote. Sigues que no puede hacer con su maestra.
siendo el mismo niño (niña).»
Más tarde, a medida que el cerebro madure, la cólera seguirá EN CONCRETO:
invadiendo sus músculos, pero el niño sabrá encontrar las causas
reales y expresarlas con palabras. Sabrá contener sus impulsos en el • Acoger la emoción.
marco de su pensamiento, dejará de estar desamparado frente a su A veces es difícil, sobre todo en público, pero piensa que trabajas
experiencia interior, pues será capaz de organizar sus vivencias, podrá por su futuro. Una cólera escuchada dura unos minutos como
dar sentido, elaborar mentalmente a partir de lo que siente. Será capaz máximo.
de otorgar palabras a lo que vive, de expresarse verbal-mente. • Aceptar la emoción, eventualmente formularla con palabras.
Planteo una hipótesis, según la cual un niño al que se haya Apoyar la expresión reforzando mediante frases cortas según las
contenido y acompañado correctamente en sus cóleras, cuando sea circunstancias: «es verdad, es injusto», «comprendo que te sientas
padre o madre ya no tendrá impulsos violentos irreprimibles hacia su enfadado», «es difícil aceptarlo»... «estás furioso porque tenías ga
descendencia. nas de venir conmigo».
Dentro de dos generaciones podremos confirmar o refutar esta • Cuando se trate de un niño pequeño: contener, mantener el
hipótesis. Vistas las dificultades bastante generalizadas de los adultos contacto.
de hoy en día para administrar sus cóleras de manera eficaz y no
violenta, podemos pensar que ha llegado el momento de tratar de Las cóleras de un niño de dos años son fuertes, ruidosas.Te re-
forma diferente la cólera de los niños. chaza violentamente cuando intentas tocarle. Intenta alejarte, chilla a
Así, pues, el pequeño todavía no tiene medios suficientes como grito pelado.Te persigue, intenta morderte, pegarte. Busca ma-
para organizar sus afectos. Estas capacidades se construyen poco a nifiestamente el contacto. Conténtate con impedir que te haga daño y
poco. Quedan fácilmente superadas por la fatiga o por una quédate allí, atento. Cuando sientas que el climax de la crisis ha
acumulación de tensiones. pasado, tiende los brazos. Él tenderá los suyos. Si aún no está
Los padres de Anna no comprenden nada. En la guardería, parece acostumbrado a esta manera de terminar una cólera, cógele tier-
que todo va bien, la niña está sonriente, concentrada, interesada. Pero namente en tus brazos conteniendo sus golpes, poco a poco se soltará
por la noche está «infernal». Llora por cualquier cosa, se enfada por en una gran caricia tranquilizadora. De este modo asimilará un
un pequeño detalle... Durante todo el día ha tenido que controlarse, sentimiento de seguridad que le permitirá disminuir la intensidad de
acomodarse, permanecer sentada, mostrarse como una buena alumna. sus cóleras.
Ha acumulado tensiones sin atreverse a decir La cólera, a menudo, proporciona al niño el sentimiento del
poder personal.
140 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 141

Al revolcarse por el suelo, manifiesta su impotencia. Si recibe el curso de la vida familiar. Si su cólera iba dirigida contra un
permiso para expresarse, gritar, hacer ruido... va retomando poco a miembro de la familia, ahora vuelve a ser capaz de formular una
poco contacto con su poder. demanda clara. Si su cólera tenía otro origen, si era excesiva, des-
Al chillar, el niño se siente vibrar de rabia. Es un momento muy proporcionada o desplazada, la habrá puesto de nuevo en su lugar.
importante para él. Es fundamental dejarle hacer SIN JUZGARLE, ni ¿Cuándo es lo bastante mayor un niño como para seguir esta técnica?
siquiera de forma admirativa. «Qué enfado tan magnífico» no lo vive Algunos están listos a partir de los tres años, pero en cualquier caso es
el niño mejor que si oyera «cuando te enfadas te pones muy feo» o preciso que sea capaz de objetivizarse a sí mismo, que hable a la
«para inmediatamente». perfección y que organice bien sus ideas. Además, sólo puede estar
¡No empeores la situación! Una cólera escuchada y respetada es listo si ha sido preparado, es decir, lo suficientemente contenido en
breve. No es útil reactivarla cuando ves que el niño ya está en otra brazos acogedores como para poder acogerse a sí
cosa. mismo.
Si está superado por la fatiga, un masaje tierno le ayudará más a Si te falta espacio puedes contentarte con un «almohadón de la
dormirse que el aislamiento forzado en su habitación. cólera». Será un almohadón reservado únicamente a la expresión del
enfado. Nadie puede sentarse en él, ni utilizarlo para echarse. Es el
• Para un niño mayor. almohadón en el que se pega, se increpa, es el que se tira contra la
pared.
Cuando el furor le invade y le supera, invítale a ir a gritar a otra Cuando existe una tensión en la familia, demasiados conflictos
habitación, por ejemplo su cuarto, o el salón, o el cuarto de baño. En entre niños, se puede organizar una guerra de almohadones. Después
esta habitación, aislado de los otros miembros de la familia, el niño de apartar las figuritas, padres y niños se reparten en dos equipos y...
escucha su rabia, la siente en él, la expresa gritando, incluso ¡empiezan a volar los cojines! Se libera energía y la risa sustituye en
golpeando las almohadas, hasta que restablece la calma en su interior.
seguida a la rabia. La batalla vuelve a establecer la complicidad.
No tiene nada que ver con el «ve a calmarte a tu habitación»,
lanzado con tono autoritario o exasperado. No se trata de alejarle, sino
de una manifestación de respeto hacia aquella emoción que necesita CUANDO LOS PADRES ESTÁN ENFADADOS
un espacio para expresarse. Sobre todo, no se trata de un castigo, sino
de una técnica que todos los miembros de la familia utilizan. Por otra Un día, exasperada, estallo, sacudo a Margot y le grito. Ella llora, y
parte, tú mismo mostrarás el ejemplo, irás a gritar y a calmarte a tu luego se enfada: «¡Mamá, tú no puedes enfadarte!»
habitación o al cuarto de baño. En algunas familias, existe una Me detuve al instante. Tenía razón, yo no podía sacudirla de ese
habitación reservada a tal efecto, dotada de un punching-ball o de un modo, atemorizarla. Ciertamente, estaba irritada, pero realmente no
montón de almohadones. Preferentemente un cuarto insonorizado, en era una razón para herirla. (Puesto que sentir temor frente a su propia
el que uno puede dar vía libre a sus emociones, reflexionar, meditar, madre representa una gran herida psíquica.)
centrarse. Escuché a mi hija. Mi rabia se esfumó, me disculpé y tomé a
Al salir de esta habitación, el niño vuelve a ocupar su lugar en Margot en mis brazos para que se tranquilizara.
142 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 143

Otro día, ya no me acuerdo por qué razón, le dije, bruscamente: Una cólera justa que habla de sí
«¡Qué pesada eres!»
Me miró y replicó: Algunos padres, por miedo a traumatizar a su hijo, nunca se enfadan.
—No puedes decirme esto, mamá. Niegan sus necesidades, rechazan sus emociones. El mayor in-
—Tienes razón, cariño, tienes razón-. Me senté a su lado y seguí conveniente de esta actitud es que entonces el niño carga de forma
hablando: —No puedo decirte estas palabras «piedra».1 Lo he dicho inconsciente con la cólera no expresada de sus padres, y la
porque estoy cansada. Pero era mi irritación; tendría que haber dicho exteriorizará... sin saber identificar de dónde viene esta rabia, puesto
«estoy irritada», en lugar de decirte cosas a ti. Si te digo que eres pe- que no le pertenece. Los niños pueden convertirse en auténticos
sada, te hiero, y esto no arregla mi necesidad de calma. Perdóname. tiranos, irritados ante la menor frustración. Contrariamente a lo que a
Nadie es perfecto, y estamos tan acostumbrados a proyectar hacia menudo se suele oír, no se trata de una falta de castigos o de severidad
otra persona nuestras dificultades personales que es ilusorio imaginar por parte de los padres, sino de una represión de su cólera.
que no nos pasará nunca más. Pero es fundamental que el niño tenga Podemos, debemos aprender a decir YO. Haz este experimento,
permiso para sentir y decir que es injusto. Su cólera justificada nos aunque sea una vez o dos, y fíjate en lo que pasa en tu interior, en lo
devuelve entonces a la realidad, podemos tomar consciencia de lo que que le pasa a él.
ha pasado en nuestro interior y disculparnos. No hay nada de malo en Estás enfadado:
ello.
En cambio, si el niño no puede o no se atreve a responder cuando 1. Siente la energía de la cólera dentro de ti y déjala que inva
un adulto (u otro niño) le desvaloriza, le hiere, le humilla, le da tu cuerpo. Quédate en la sensación del cuerpo, sin fijarte en las
ridiculiza, si no se enfada, permanece desvalorizado, humillado o ideas.
ridiculizado, y puede llevar esta herida durante mucho tiempo. 2. Identifica la verdadera causa de tu cólera. El comporta
Si el respeto por el niño domina en la relación, todos los insultos miento del niño es un desencadenante, pero ¿cuál es la causa? ¿Te
proferidos en un momento de exasperación no le traumatizarán de sientes impotente? ¿Te da miedo la mirada de la maestra, de tu hi
forma automática, pero una sola palabra torpe pronunciada en un jo o de tu jefe si llegas tarde a la escuela y luego al trabajo? ¿Estás
período sensible puede quedar marcada durante años. Mejor no correr harta de hacerlo todo en casa mientras que tu marido se lo toma
ese riesgo. con calma cuando tiene que volver del trabajo? ¿Tu madre te ha
Por otra parte, permanecer en contacto con nuestras emociones en vuelto a llamar para quejarse de su soledad o de sus varices? ¿Estás
lugar de proyectarlas hacia el niño permite al padre o a la madre cansado y te gustaría poder ver el partido por la tele?
seguir centrado en su persona, consciente de sí mismo. Puede ser que la simple consciencia de la causa apague ins-
Paradójicamente, si queremos atribuir las culpas al niño, ¡nos ago- tantáneamente tu cólera reorientando tu energía hacia lo adecuado, y
tamos en seguida! entonces verbaliza al niño lo que ha pasado en tu interior. Así
aprenderá a hacer lo mismo.
Pero también puede ser que la rabia continúe construyéndose en
1. Me gusta esta fórmula expresiva de Catherine Dolto-Tollich. Las palabras tu interior y:
dulces son dulces y suaves, las palabras «piedra» son duras y duelen.
144 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 145

a) No tiene relación con tu hijo: pasa al punto 3. 4. Estás realmente irritado con tu hijo. Quieres que modifique un
b) Se dirige directamente a tu hijo: pasa al punto 4. comportamiento que choca con tus necesidades. No olvides que, una
3. Informa a tus hijos de que estás irritado por... dales la auténtica vez más, tu actitud es un modelo consciente e inconsciente para él.
razón, no temas enturbiar la imagen de tu compañera, compañero, Sobre todo, procura formular tus necesidades sin entrar en
madre, padre o suegra... Protege más bien la imagen de sí mismos que acusaciones. He aquí la estructura de una frase tipo:
tienen tus hijos evitando atribuirles lo que no les concierne.
Di a tus hijos que necesitas unos minutos de aislamiento para
soltar tu irritación, ve a otra habitación, si es preciso al lavabo, ¡y Cuando tú... (comportamiento preciso del otro)
grita! Ellos también irán a ese cuarto cuando lo necesiten. Instálate siento... (mi emoción, mi sentimiento)
porque... (mi necesidad)
delante de tu «almohadón de la cólera».Visualiza frente a ti la imagen
y te pido que... (demanda precisa de comportamiento aquí
de aquél cuyo comportamiento causa tu tormento. Grita, llora, y ahora que me permite reparar la relación con el otro)
dirigiéndote a él (ella) como si estuviera allí; si lo necesitas, golpea el para que... (motivación para el otro)
almohadón para descargar tu tensión.
Gritar, expresarse en voz alta, resulta agradable y sobre todo li-
berador, siempre que se haga conscientemente y no nos supere la Por ejemplo:
aparición incontrolada de un impulso. Cuando me pides que te haga macarrones, y yo los hago y tú no te
Si no puedes ir a otra habitación, procura no chillar mirando a tus los comes, me siento irritada
hijos, avísales: «Estoy muy irritado, no es culpa vuestra, es por culpa porque cocino para ti y necesito que sea útil, y te pido que comprendas
de... (razón verdadera) pero necesito gritar ahora.» Grita: «¡Estoy lo que siento cuando hago algo para ti y tú ya no lo quieres, para que
harto, harto, harto...!» dándoles la espalda. yo siga teniendo ganas de hacer lo que me pides.
Una vez te hayas desahogado, tómate tu tiempo para hablar de
ello: Cuando dejas tus calzoncillos sucios en el suelo, me
«¿Qué has sentido cuando gritaba? ¿Has tenido miedo? Sí, enfado
cuando alguien grita tenemos miedo. ¿Pero tú sabías que no era por tu porque estoy harta de recoger tu ropa, prefiero hacer otras cosas
culpa? ¿Qué me ha hecho gritar?» contigo, antes que recoger tu ropa sucia,
La expresión de la cólera es un aprendizaje importante para ellos. y te pido que entiendas mis sentimientos y vayas a llevar tus cal-
Corrige los errores de interpretación. Si dicen: «Has gritado
zoncillos a la cesta de la ropa sucia,
porque he derramado el vaso», responde claramente la verdad: «No.
para que yo me sienta bien contigo y podamos jugar juntos y con-
Me he irritado en ese momento, pero el vaso sólo era una pequeña
tentos.
contrariedad más. Ya estaba irritado porque el banquero no ha
aceptado concedernos un préstamo. Todo el mundo puede derramar el
A pesar de su aparente facilidad, esta frase es compleja y necesita
agua, no pasa nada. Y si el banquero no quiere prestarnos dinero, esto
una consciencia de sí mismo, aunque también del otro. De en-
no es culpa tuya.»
146 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 147

trada, no es tan fácil identificar el comportamiento preciso de otra La exigencia de esta frase nos impide abusar. Nos enfrenta a
persona sin entrar en una generalización, una globalización o un nuestros límites. En efecto, ¿qué razón se puede encontrar a unas
juicio. En seguida aparecen frases del tipo «cuando te hablo nunca me frases como las siguientes:
escuchas», «cuando te portas mal» o «cuando estás insoportable». «Cuando rehusas obedecerme, me irrito, porque... porque siento
Por otra parte, estamos tan poco acostumbrados a formular la necesidad de sentirme más fuerte que tú.»
nuestras emociones que a menudo nos faltan palabras para decir con «Hijo mío, cuanto llevas pendientes, me enfado porque... tengo
precisión lo que sentimos. Nos puede tentar poner una emoción en miedo del que dirán.»
lugar de otra: «Cuando vuelves a las dos de la madrugada, estoy
enfadado» en lugar de «Cuando vuelves a las dos de la madrugada, Sólo puedo mostrarme irritado por algo que me concierne. De
temo que te haya pasado algo.» En este caso, la cólera sólo puede otro modo, la historia desembocaría en el control.
justificarse si había un contrato específico establecido entre el Todo esto exige ejercicio. No te enfades con tus hijos cuando te
adolescente y sus padres. Pero la inquietud es probablemente lo que dicen «eres mala». Descifra, te están diciendo:
domina. «Cuando me pides que apague el televisor, me enfado porque
Peor aún, detectar la auténtica necesidad y expresarla es extre- tenía ganas de ver la película.»
madamente difícil. Enseñémosles, por ejemplo, a formular su cólera...
Formular una demanda que se pueda recibir aquí y ahora sin
entrar en el futuro y en las promesas no es tan simple.
En definitiva, escuchar en uno mismo las consecuencias del TRUCOS PARA EVITAR LA VIOLENCIA EN EL
comportamiento frustrante o hiriente sobre la relación y centrarse lo MOMENTO EN QUE TENEMOS GANAS DE PEGAR
bastante en el otro para motivarle a satisfacer nuestra demanda es todo
un arte. Esta frase final «para que...» puede presentar el aspecto de un • Respira hondo para volver a ti mismo y no estar «fuera de ti».
chantaje, pero sólo es la respuesta a la pregunta: • Sabes que tienes derecho a tener ganas de pegar, pero no de ha-
cerlo. Escúchate: «Tengo ganas de romperle la cabeza con un
«¿Qué cambiará para mí, para nuestra relación, si el otro accede a martillo»... Eventualmente, visualízalo en una pantalla mental.
mi demanda?» Puedes verbalizarlo ante el niño: «Tengo ganas de pegarte. No lo
Es importante que el otro vea un beneficio, pues de otro modo, haré porque no quiero hacerte daño. No tengo derecho a pegarte,
¿por qué aceptar modificar uno de sus comportamientos? pero tengo derecho a tener ganas.»
De todos modos a menudo las tres primeras frases («Cuando tú..., • Escucha tu necesidad. Procúrate los medios para satisfacerla, o
siento... porque...») son suficientes. proyecta esta satisfacción en el futuro.
«¡Cuando pegas a tu hermano me irrito porque no me gusta que • Céntrate en el niño y toma consciencia de lo que pasa en su interior,
se haga daño a nadie!» de sus necesidades, y si es preciso de lo que ha causado su
«¡Cuando entras con tus zapatos llenos de barro me enfado comportamiento.
porque acabo de limpiar!» • Imagínate cuando eras niño, a la misma edad, y toma conscien
cia de lo que sentías en aquella época.
148 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 149

• Recuerda el amor que sientes por él evocando imágenes de felicidad vivir con un grupo de niños que le llaman a la regresión, y por esto les
con él. Su nacimiento, por ejemplo, tu admiración ante sus primeros odia.
pasos, el día que te hizo un regalo por tu cumpleaños... ¿Qué ha hecho madurar tan de prisa a Stéphane? ¿Quién le ha
• ¡Pasa el relevo a tu cónyuge! incitado a profundizar en su intelecto, a ser el mejor de la escuela y a
Si crías solo (a) a tu hijo, llama por teléfono a un amigo (a) para acercarse de este modo a su hermano mayor?
permitir que la presión de tu interior disminuya. Stéphane no ha visto a su padre desde hace años. A falta de pa-
dre, su hermano mayor le reemplaza. Es su guía. A los niños de su
edad, les reprocha no ser padres, y probablemente, les reprocha tam-
¿ES COLÉRICO? bién que tengan padres. La agresividad siempre oculta carencias.
Finalmente, el padre llamó por teléfono. Vive lejos. Pero Sté-
Una madre me trae a su hijo. Stéphane está en tercero de primaria. En phane ahora sabe que le va a ver durante las vacaciones. El impacto
la clase se muestra agresivo, responde a las profesoras, los padres se de esta llamada es inmediato. Se muestra claramente menos agresivo.
quejan de él porque pega a sus hijos. Se siente seguro. Su padre le quiere.
¿Cuál es mi análisis? Una de sus necesidades no se ha satisfecho. Desgraciadamente, muchos padres separados no telefonean muy a
Siempre hay una intención positiva detrás de un comportamiento. menudo, a veces desaparecen totalmente de la vida de su hijo. Para
Stéphane intenta comunicar algo, probablemente del orden de las éste resulta muy duro. Para que no se destruya desvalorizándose o
carencias, de la frustración, de la injusticia. deprimiéndose, ni proyecte sus impulsos agresivos hacia otra persona,
Después de una breve entrevista, resulta evidente que Stéphane se necesita poder verbalizar su carencia, compartir sus sentimientos de
aburre enormemente en clase. ¡Tiene un promedio de sobresaliente! miedo, de cólera, de tristeza, acaso de culpabilidad. Necesita liberar su
¿Por qué debería aceptar sin rechistar el permanecer sentado desespero en los brazos de alguien, para realizar poco a poco el duelo
durante horas escuchando lecciones que no son de su nivel? A él nadie de esta pérdida.
le escucha, nadie se muestra atento a sus necesidades. Las tensiones se Cuando una agresividad parece gratuita y sin objeto... el objeto
acumulan, y debe encontrarles una salida. Habría podido deprimirse o debe buscarse algo más lejos.
bloquear su aprendizaje, es decir, optar por la autodestrucción, pero
elige (inconscientemente) desviar sus impulsos destructivos hacia el
exterior. El claro de tierra sobre la luna1
Stéphane tiene un hermano tres años mayor que él, que le incluye
en sus juegos. Los compañeros que vienen a buscarle le aceptan para Philippe y Catherine me llevan a su hijo. Fulbert tiene dos años, la
jugar con ellos, incluso cuando su hermano mayor no está. Nunca se edad de los enfados, pero él se muestra excesivamente colérico.
pelea con ellos.
Con los amigos de su hermano, Stéphane es «mayor». Con los de 1. La terminología es de Alain Crespelle. Fue mi primer psicoterapeuta, mi
su clase, se siente pequeño. Ahora bien, a nadie le gusta sentirse profesor y mi modelo durante años. Murió en 1999, y en este libro le rindo homenaje
pequeño. Stéphane no sólo se aburre, sino que se ve obligado a utilizando estas palabras que evocan tan bien el reflejo de nuestras emociones en los
comportamientos de nuestros hijos.
150 El mundo emocional del niño La cólera está al servicio de la identidad 151

Sus rabietas son múltiples y diarias, y duran incluso más de una hora, ¿Un niño es particularmente colérico cuando ninguna carencia o
los padres ya no pueden más y han decidido consultar a un es- injusticia parece trastornar su vida? Tal vez sea la expresión de una
pecialista. cólera rechazada de sus padres. El padre está tan desamparado ante
Cuando planteo algunas preguntas acerca de la historia de Fulbert esta emoción que la rechaza en él y encuentra un beneficio incons-
y de sus padres, sobre todo acerca de las condiciones de su ciente en el hecho de que sea su hijo quien la exprese.
nacimiento, me entero de que la madre de Catherine falleció durante
el embarazo. Cuando exploro un poco más, resulta que este duelo
dista mucho de haberse realizado. A raíz de la muerte de su madre, En resumen, ¿las cóleras son numerosas,
Catherine se sintió invadida por la desesperación. Su madre se había excesivas o parec en gratuitas?
ido sin haber sido jamás una auténtica madre. Catherine nunca había
podido enfadarse con ella, y en consecuencia no pudo entrar en la fase Se trata:
• de una acumulación de tensiones,
de rebelión del trabajo de duelo. Reprimió, rechazó su rabia y su
• de una cólera desplazada,
desespero...
• de la expresión de una cólera inconsciente o no dicha de
Como todos los niños pequeños que quieren a su madre y no
un padre,
pueden soportar verla sufrir, Fulbert cargó sobre sus espaldas las
• de otra emoción (miedo o tristeza) camuflada bajo las
emociones no expresadas. Los niños son auténticas esponjas. Absor- apariencias de la ira porque la expresión de la verdadera
ben las cóleras, los miedos, las tristezas, las tensiones no expresadas emoción es imposible o está prohibida: «Eres un chico ma-
de sus padres. Al no estar informados acerca del origen de sus sen- yor», «Sólo lloran las niñas», «¡No me dirás que tienes mie-
saciones, las atribuyen a algo de su entorno y «se irritan por nada». do!», etc.
¿Por nada? Para evacuar la tensión de algo no dicho, de una emoción
no reconocida, no asumida por sus padres.
Catherine habló con su hijo. Le dijo, con toda claridad, lo que La respuesta a la cólera es la escucha, el respeto, la empatia.
había vivido a raíz del fallecimiento de su madre y cómo él había
podido sentirse responsable de sus emociones rechazadas, y sobre
todo: «Tu no debes cargar con mi cólera, con mis emociones. Yo me
ocuparé de ellas.» Fulbert escuchó. Sus rabietas irreprimibles e
interminables cejaron, con la sorpresa, pero también con el alivio, de
todo el mundo.
La madre decidió realizar el duelo de su madre mediante una
terapia. Sobre los almohadones, expresó su rabia, sus frustraciones,
sus sufrimientos... Miró la realidad de sus padres, con otra mirada
dirigida hacia ella misma, se restauró en su persona. Fulbert, aliviado
del peso del inconsciente de su madre, pudo expresar sus propias
cóleras.
Capítulo 6

La alegría

Domingo 11 de julio de 1998, a las diez y treinta y siete de la noche:


explosión en toda Francia. «¡Campeones!» La selección francesa, cam-
peona del mundo. Sobre el césped, los futbolistas se abrazan, se besan,
se felicitan y se abalanzan sobre el jugador que acaba de marcar el úl-
timo gol. En todo el país, la gente sale a la calle. Los Campos Elíseos
están atestados de gente.Todo el mundo canta, chilla, salta, baila, se be-
sa, agita banderas, celebra el acontecimiento bebiendo champaña o
cerveza. La alegría se vive con otras personas, se comparte.
La alegría es la emoción que acompaña al triunfo y al amor. Es
expansiva, nos impulsa a abrazarnos los unos a los otros. ¿Acaso por
esto resulta tan sospechosa?
La aptitud para la alegría es una dimensión importante de la
inteligencia del corazón... y de la felicidad.

¿SE PUEDE APRENDER A SENTIR LA


FELICIDAD DE VIVIR?

A Roland, de cuarenta años, le cuesta vivir. Se siente deprimido,


cansado de todo. Le cuesta tomar decisiones, incluso, simplemente,
salir de su casa. Ríe poco, ya no sabe divertirse. Me habla de él, del
juicio permanente de su padre, de la sobreprotección de su madre... y
de la muerte de su hermano. Patrick tenía un año más que él. Murió a
los diecinueve años. En aquel momento no pudo asi-
154 El mundo emocional del niño La alegría 155

milar este fallecimiento. ¿Cómo es posible morirse a los diecinueve afrontar la realidad con ánimo. La explosión de alegría de la Copa del
años? No puede ser. Su vida ha proseguido sin que se diera cuenta de Mundo no fue un azar que cayó sobre Francia. Era el resultado de un
que una parte de él había permanecido atrás. Sigue sin haber realizado trabajo cotidiano de cada jugador, de la valentía de un entrenador que
el trabajo de duelo. Un trabajo casi imposible de efectuar, porque prosiguió su camino a pesar de las críticas, de la determinación de to-
implica cuestionarse demasiadas cosas personales. Sus padres les do el mundo.
trataban como gemelos, se parecían, llevaban ropa idéntica. A partir ¿Cómo hacerse con todas las bazas para «ganar» en la vida de
del día de la muerte de Patrick, las risas quedaron desterradas de los cada uno? Sin duda no perdiéndola intentando ganarla, sino eligiendo
encuentros familiares. «¡Cómo puedes reírte, si tu hermano ya no un trabajo que tenga sentido, escuchando siempre la voz o las voces
está!» Roland comprendió en seguida que a partir de entonces se le del corazón, más que una, digamos, razón que a menudo es poco
prohibía la alegría, la vida. razonable.
Como Roland, muchas personas inician una psicoterapia para ¿Es razonable seguir casado con un hombre al que no se ama y
volver a encontrar el gusto por la vida. La alegría está ausente de su desarrollar un cáncer para escapar a una situación que se ha con-
vida cotidiana. vertido en intolerable?
¿Qué se puede hacer para que un niño conserve su aptitud natural ¿Es razonable seguir en el negocio de papá, cuando nos habría
para la alegría? En primer lugar, estar atento a no reprimirle como gustado hacer cualquier otra cosa, y morir de un infarto a los cuarenta
hicieron los padres de Roland, y luego construir la vida propia de y cinco años? ¿O sufrir de dolores atroces de espalda durante muchos
modo que uno mismo sea lo más feliz posible, que uno mismo pueda años porque se sigue llevando un peso que no se quiere soltar para no
amar y realizarse. cuestionar a los padres?
Cuando los niños tienen que cargar con las tristezas, las frus- Todos los afectos rechazados, los nudos emocionales y las heridas
traciones, los sentimientos de insatisfacción de sus padres... no son no curadas impiden el acceso a la alegría. Libera tus emociones, deja
libres para ser felices. que tus angustias hablen, suelta las lágrimas, grita las cóleras... y la
He conocido a demasiados niños de unos doce años a quienes la alegría renacerá, pues es la naturaleza profunda de lo humano. Existe
vida ya no les interesaba. Sus padres a menudo están ausentes, alegría simplemente en sentirse vivir.
agobiados de trabajo, estresados en su vida cotidiana. ¿Para qué vivir, La vida no es un camino de rosas, pero la alegría tampoco surge
cuando no hay amor o alegría a nuestro alrededor? de la tranquilidad. Si bien es cierto que nos penetra de buena gana
La Copa del Mundo de fútbol de 1998 nos hizo redescubrir la mientras contemplamos tranquilamente una puesta de sol, también
alegría. Los sondeos evidenciaron que la moral de los franceses había nace del esfuerzo coronado por el éxito, del reencuentro después de la
mejorado netamente durante las semanas que siguieron a la final.Y sin separación.
embargo, aunque parecía que la economía empezaba a recuperarse, no
había habido ningún cambio importante en la vida cotidiana de la
Valorizar, animar
mayoría de la gente... salvo en su manera de abordar la existencia.
Es responsabilidad de los padres ser felices, transmitir o al menos ¿Cómo ayudar a nuestros hijos a conservar sus aptitudes para la
no alterar el apetito de vida del niño. Ser feliz es una elección. No se alegría? Felicitándoles, animándoles. Más que concentrarte en lo que
trata de fingir, de sonreír todo el día acallando las dificultades, sino de hacen mal, vigílales... ¡y sorpréndeles haciendo algo bien!
156 El mundo emocional del niño La alegría 157

¿Ha logrado subir solo hasta lo alto del armario? ¡Bravo! Hemos aprendido que el aprendizaje es aburrido y que se lleva a cabo
¿Estaba prohibido? ¡Desde luego! Pero porque era peligroso y tú con penas y sufrimientos.
no sabías que era capaz de hacerlo sin hacerse daño. Si demuestra que Y sin embargo, como lo demuestran los estudios, se aprende
ha sabido hacerlo sin lastimarse, ¡felicítale! mucho peor bajo la obligación que en el placer, peor en la concen-
Sea cual sea la disciplina que elija para ser un campeón (deporte, tración, sentados sin movernos, con la cabeza enfrascada en los libros,
música, matemáticas, letras o ciencias) te hará feliz verle cómo se que en la tranquilidad y la relajación, con la cabeza levantada.
atreve y triunfa. ¡Empieza hoy mismo a preparar estos éxitos! ¿El niño es demasiado feliz en la escuela? Sus padres se dicen que
No temas que se duerma en sus laureles. Nunca he visto a alguien no trabaja en serio.Y sin embargo, los métodos de aprendizaje más
dormirse en sus laureles. En general, el éxito da ganas de ir más lejos. efectivos pasan por el juego o el teatro. ¿Cuál es el único defecto de
Los laureles son ánimos para continuar. Es el fracaso lo que nos frena. estos métodos? A los padres, e incluso a ciertos profesores, les
El miedo al fracaso adormece nuestras aptitudes. parecen demasiado lúdicos y, en consecuencia, ineficaces.
Ayúdale a sentirse orgulloso de sí mismo, incluso en las cosas Las experiencias duras llegarán cuando toque. Lo que arma re-
más banales. ¿Qué es lo que constituye la diferencia entre un futuro almente frente a las experiencias no es la capacidad para someterse y
campeón olímpico y otra persona? El orgullo, la alegría que se siente obligarse como querrían hacer creer algunos, sino la aptitud para ver
con el éxito. El futuro campeón es aquél que disfruta de sus logros las cosas con buenos ojos, para reír, para permanecer en contacto con
minúsculos. Cuando se les pregunta, nuestras figuras del deporte los recursos interiores de cada uno, para inventar soluciones. No es
recuerdan. casualidad que los payasos frecuenten hoy en día los hospitales para
«Cuando era pequeño, salté dos peldaños de la escalera de una niños. Alivian el sufrimiento, tranquilizan mediante la risa y refuerzan
vez. Me dije: «¡Estupendo! Y ahora tres peldaños. ¡Sí!, ¡bravo!, ahora la curación ayudando a los niños a reír, a imaginar.
cuatro...»»
Y así sucesivamente. El éxito conlleva la motivación para un
nuevo desafío. Quienes no sienten este sentimiento de orgullo, EL AMOR
quienes minimizan sus logros («está chupado»...) no cuentan con el
motor necesario para perseverar. La alegría es la emoción del éxito, pero también es la del amor, del
encuentro y el reencuentro, de la relación.
Atrévete a pronunciar más a menudo estas palabras dulces:
Salir del culto del sufrimiento «Qué bien estamos juntos.»
«Me siento realmente feliz de vivir con vosotros.»
Aprender a superarse resulta siempre una fuente de satisfacción ya sea «Me encanta desayunar con vosotros tres.»
en el terreno físico o en el intelectual. El ser humano es curioso por Cuando expreso de este modo mis alegrías y mi felicidad, me
naturaleza. La sed de aprender es real, se trata de una auténtica siento aún más feliz, y también veo el placer que siente toda la fa-
necesidad de conocimiento, de comprensión, de significado. milia. Observo en voz alta lo que me digo en mi interior. «Qué bien,
Pero hemos aprendido que la curiosidad es un defecto feo. ser feliz», y degustamos juntos esta felicidad que pasa.
158 El mundo emocional del niño La alegría 159

Cuando uno está demasiado absorto en la colada, la vajilla, el Adrien y Margot hasta la habitación de los niños, y allí me senté en la
aspirador, los deberes, la costura, uno olvida esta necesidad cotidiana, moqueta y empecé a hacer «brrrum, brrrum» con un avión. Había
este mínimo de higiene relacional, como dice Jacques Salomé. Pero el juguetes soberbios, coches transformables, Batmans y otros
polvo emocional puede acumularse, forma enormes pelusas en los monstruos del espacio que yo no conocía. Descubrí, me exclamé,
corazones y desencadena alergias con tanta seguridad como lo hacen manipulé cada juguete y lo hacía rodar o volar. Me lo pasé bomba. Un
los ácaros. niño de seis años me observaba, alucinado. Le costaba mucho dejar de
Qué bueno resulta sentarse (o correr) con los niños, sin proyecto, tratarme de usted y abandonar el «señora» para llamarme «Isabelle».
simplemente para sentir cómo pasa la vida por nuestro interior. Al cabo de un momento, ya no pudo más:
A veces, el comportamiento de mis hijos me exaspera, tengo que —¿Está jugando? Pero si usted es un adulto. ¡Los adultos no
terminar un trabajo, quiero que se duerman de prisa, me tienta juegan!
irritarme a la menor demanda... Entonces respiro, les miro y me digo: —Pues fíjate, yo sí. Hay adultos que juegan. A mí me encanta
«Tienen cuatro y dos años. Crecerán, Nunca más tendrán cuatro y dos jugar.
años. ¡Disfruta!» —Mi padre y mi madre nunca juegan.
Mi corazón se derrite. Les observo y les quiero. La irritación ha Qué lástima. Jugar significa penetrar en el mundo de los niños,
desaparecido porque son más importantes para mí en este momento navegar con ellos en lo imaginario, penetrar en su terreno, «figura que
que los informes que me esperan. Cuando sea muy vieja, recordaré mi yo era la vendedora y tú me comprabas cosas...».
pasado y no quiero darme cuenta demasiado tarde de que no me tomé Los hay que dicen que no son cosas de su edad. En realidad, se
mi tiempo para verles crecer. Así que les miro crecer y mi corazón se sentirían incómodos, ridículos, vulnerables. Rechazan la tentación de
llena de la simple alegría de vivir juntos. la regresión. Se enfrentarían a la intimidad con sus hijos, a su propio
pasado, a sus emociones de niño o de niña. Si jugaran, si se atrevieran
a entrar en el mundo imaginario de los niños, sentarse en el suelo y
JUEGOS, GRITOS Y RISAS hacer ruido con ellos... se arriesgarían a entrar en contacto con un in-
menso sufrimiento en su interior, pues se despertaría la angustia de la
«¡Parad de gritar! ¡Callaros! ¡No hagáis tanto ruido! ¿Qué es todo este carencia. Sus padres no jugaron nunca con ellos, tal vez ni siquiera les
jaleo?» dejaban jugar, reír o correr gritando, hacer ruido. Quizás les ha faltado
Los adultos calman los ardores gozosos de los alegres alborotado- tanta ternura y/o juguetes que aún hoy no pueden coger en sus brazos
res ¿Pero por qué? Cuando los niños crezcan, cuando se hayan ido de una muñeca o un osito y acariciarlo.
casa, los padres empezarán a lamentar la época en la que resonaban ri- Es preciso que nos curemos de nuestras infancias heridas para
sas alegres, carreras desenfrenadas por las escaleras y gritos de júbilo. acceder a la capacidad de jugar a simples juegos de niño, darnos
Un niño necesita sentirse alegre para sentirse libre de existir y de permiso para soltarnos, devolvernos la libertad para reír, para mo-
crecer. ¿Cómo puede tener ganas de crecer en un mundo triste? vernos en lo imaginario, para revolearnos.
¿Cómo puede tener ganas de ser un adulto permanentemente serio que Reír no es sólo un placer, es un reflejo de salud física y psíquica.
ya no sabe siquiera jugar y reír? La risa libera las tensiones del diafragma. Es un excelente ejercicio de
Una vez me invitaron a casa de unos amigos, y acompañé a relajación. Una buena dosis de risas podrá evitar mu-
160 El mundo emocional del niño La alegría 161

chos lloros. Organiza juegos del escondite, de peleas de almohadas, No temas hacer ruido. Manifiesta tus alegrías ruidosamente,
para partiros de risa todos juntos. gritando, saltando, abrazando a tus hijos, haciéndoles saltar por el
El niño existe en primer lugar en su relación con los demás, y su aire. La alegría es un intercambio físico. Recuerda a los jugadores
alegría será en primer lugar la compartida, una alegría por estar con franceses cuando sonó el silbato final del Mundial de fútbol, que
alguien. El niño ríe porque comparte, porque está con alguien. Ahí significaba su victoria.
radica el gran éxito de los juegos de aparición y desaparición. También podemos despertarles a las alegrías estéticas, ense-
El pequeño sabe reír con otra persona, aún no sabe reírse de. Esta ñándoles a ver la belleza:
última risa distancia.Ya no es alegría, sino sensación de poder, porque Poder oír «¡Mira, mamá, la luna, qué bonita!», suena tan dulce en
la alegría de la intimidad se ha perdido. Al reírse de..., uno se la boca de un niño.
solidariza en torno a la disminución de una tercera persona. La burla Nombra lo que veas a tu alrededor. Comparte. Obtendrás como
surge de un sentimiento de inferioridad, de un sufrimiento, una gratificación este tipo de pregunta profunda y deliciosa, como la que
humillación experimentada que busca revancha y reparación a través Adrien, a los diecinueve meses, en pleno período de «porqué», me
del sentimiento de superioridad que confiere el poder de herir a otro. dirigió un día de tormenta, en bicicleta, mientras contemplábamos los
Esta embriaguez de poder no es más que una ilusión de alegría. La rayos a lo lejos, que desgarraban el cielo:
burla es tóxica para el niño que la profiere, tanto como para quien la «Di, mamá, ¿por qué el sol también tiene rayos pero no tiene
recibe. Las palabras «piedra» son duras y hacen daño tanto a quien las relámpagos?»
recibe como a quien las envía. Los adultos deberían preocuparse más El amor y la alegría son la tierra abonada del crecimiento del
de esta forma de violencia. individuo. Nunca se dicen demasiado los «te quiero» o «estoy feliz de
El niño ríe con nosotros, en el contacto físico, en la complicidad, vivir contigo».
en la relación, en el amor y la ternura. No eches a perder estas palabras dulces, dilas tanto como quieras,
El niño siente alegrías puramente físicas (placer de experimentar varias veces por día, pero siempre mirando a tu hijo a los ojos, o
con su cuerpo, alegría de manipular la tierra, el agua, los objetos, estableciendo un contacto físico, manteniendo un contacto de amor y
alegría de la caricia y de las cosquillas, de la experiencia de sus de ternura con lo que sientes.
propios movimientos), alegrías más intelectuales, placer de aprender, Un «Que sí, claro que te quiero» sin levantar los ojos de la vajilla
de conocer, de compartir, de preguntar. no llena de alegría el corazón de quien lo recibe.
El niño se maravilla al descubrir sus posibilidades. Sus adqui- Por supuesto, no podemos estar contentos permanentemente, y
siciones son fuente de alegrías intensas, de grandes orgullos que le sobre todo, no se trata de fingirlo. Pero si no estás alegre al menos el
procuran felicidad y que conviene compartir. ochenta por ciento de tu tiempo de vigilia, hay algo que debería
cambiar en tu vida.
¿Existen nudos emocionales más o menos antiguos que te
ACOMPAÑAR LA ALEGRÍA prohiben la felicidad? ¡Deshazlos! Es tu responsabilidad como padre o
madre. De otro modo, tus hijos se pondrán inconscientemente al
Compartir, sonreír, reír, gritar, exclamarse, besar, abrazar... estos son servicio de tus sufrimientos ocultos, incluso (y sobre todo) si no les
los verbos de la alegría. hablas nunca de ellos. Los niños están listos para
162 El mundo emocional del niño

abdicar de una gran parte de su personalidad para intentar devolver la


sonrisa al rostro de un padre demasiado triste o que se enfada
demasiado a menudo. Capítulo 7
Busquemos dentro de nosotros mismos fuentes de alegría interior.
No nos dejemos arrastrar por la depresión, la rutina o la seriedad. No
es tan difícil ser feliz. Lo podemos ser a pesar de que las
circunstancias exteriores sean difíciles. Si no lo logramos solos,
podemos pedir ayuda.
La tristeza
Un padre lleno de alegría interior la transmite a sus hijos, y es la
herencia más hermosa que éstos puedan recibir.
Aumentando el nivel de alegría en las familias y en las escuelas
La cara de Pomme (cuatro años) se cierra, aprieta los labios, su frente
podemos acompañar a nuestros hijos por un camino de crecimiento y
se arruga, las lágrimas empiezan a caer, y de repente estalla en
de placer de vivir.
sollozos. Acompañada por su madre, que le da la mano, Pomme mira
Basta con una nadería. Una margarita silvestre, una castaña en el
al gato que ya no se mueve sobre la almohada. Estaba muy enfermo.
suelo, una pasta de arena y agua, un regalito sorpresa, velas para la
Ha muerto. La niña llora un buen rato con su madre, mirándole.
cena, jugar con una pelota, hacer burbujas de jabón... amor, ternura.
¡Adiós, Jules!
La tristeza es la emoción que acompaña a una pérdida.
Es natural estar triste cuando uno pierde a su gato, a un animal, a
un ser querido, pero también un juguete, una casa, un jardín, una
escuela... Llorar permite expulsar las toxinas que libera la pena.

LAS LÁGRIMAS NOS CONMUEVEN

Adrien juega en el coche con un muñequito. Se pelea con su hermana,


golpea el juguete contra el asiento... y lo rompe. Cree que su
muñequito está roto y estalla en sollozos.
—¡Para, me das dolor de cabeza!—grita su hermana.Yo inter-
vengo para decir:
—Tiene derecho a llorar-, y me dirijo a él: —Estás triste porque
tu personaje está roto, llora.
Qué dolor para un niño. Le encantaba este juguetito, y lo ha roto
por culpa de un gesto torpe.
164 El mundo emocional del niño La tristeza 165

Pero solemos soportar mal el llanto de un niño: cuando sea adulto, estará endurecido hasta el punto de no comprender
«¡No llores!» las lágrimas de su mujer o de sus hijos y ya no sabrá reír y divertirse
«No pasa nada, te compraré otro.» sin haber bebido un vaso de vino...
«Venga, ya verás, tendrás otros amigos.» Las lágrimas encerradas bloquean el paso hacia el amor. ¿Por qué
«Vamos, ya eres un chico mayor, venga, sécate las lágrimas, pa- la naturaleza nos habría dotado de lágrimas si fueran inútiles?
reces una niña.» Etcétera. Son las nueve en el club de equitación de poneys, la hora en que
todo el mundo se reúne para elegir la actividad de cada uno y su
Las lágrimas de nuestros hijos nos conmueven. Para mucha
gente, son sinónimo de dolor. Si el niño llora, le duele algo. Es decir, montura. Los niños están todos sentados. La directora les invita a
que si no llora, ¿ya no le duele nada? ¡Parece pura magia! respirar profundamente, y empieza a reinar el silencio. Comienza a
El llanto es el testimonio del trabajo de reparación del organismo hablar:
después de una pérdida. Las lágrimas alivian, curan. Lo que resulta —Hoy ha pasado una cosa muy triste. Pedro, el Shetland bayo, ha
paradójico es que sean las mismas personas que intentan consolar al muerto. Esta noche se ha peleado con otros, ha recibido un golpe de
niño las que otro día, desbordadas por las lágrimas, estallarán también pezuña en la cabeza, en un lugar fatal.Y ha muerto.
en sollozos y después de la explosión, dirán: Hay niños con lágrimas en los ojos, y ella prosigue:
«¡Qué bien sienta llorar!» —A veces hay acontecimientos alegres, a veces acontecimientos
Sí, llorar sienta bien, y sobre todo llorar en los brazos de alguien tristes. Aquí hay nacimientos, pero también hay muertes. Así es la
que sepa escuchar las lágrimas sin pararlas, llorar ante un testigo que vida.
sepa acoger sin juzgar, sin aconsejar, sin bajar la mirada. Hay niños que lloran. Algunos ya habían ido a verlo.
Como no nos autorizaron a derramar lágrimas cuando teníamos la —Podéis llorar. Si alguien lo desea, iremos a ver al poney en
edad de nuestros hijos, ahora intentamos que cesen las suyas. grupitos. Quienes no quieran subir y prefieran quedarse para velarlo,
Honestamente, ¿qué deseamos? ¿Que no sufran, o no verles sufrir? esta mañana pueden hacerlo, se llevarán el cuerpo al mediodía.
«No llores» en Los niños han desfilado junto al cuerpo del caballito con gran
realidad significa: respeto. Algunos han ido espontáneamente a coger flores. Pronto, el
«Carga conmigo, me duele cuando te veo llorar, así que deja de poney que yacía en su cabina estaba cubierto de flores. Una atmósfera
ponerme delante de este aprieto.» de recogimiento, algunas caras enrojecidas por el llanto, caricias para
Las necesidades del niño pasan entonces a un segundo plano. Y sin un último adiós. Fue una hermosa muerte para un poney y una
embargo, las lágrimas son útiles para que la tristeza no se quede en el hermosa experiencia para los jóvenes jinetes.
fondo de uno mismo. Una tristeza que no puede llorarse se quedará La muerte forma parte de la vida. Permitir que un niño vea o
bloqueada durante años. toque (si lo desea) un animal muerto, permitirle que sienta su pena,
Un niño que reprime su llanto para agradar a mamá o a papá que se tome el tiempo necesario para despedirse de él, de darse cuenta
conservará su dolor en el fondo de su interior, completándolo con una antes de su partida de que no le verá más, resulta muy constructivo.
pizca de soledad y de no adecuación de sus verdaderos sentimientos.
Tal vez tendrá aspecto de ser un «tipo auténtico» pero,
166 El mundo emocional del niño La tristeza 167

¿Qué decir? Si insistes y persistes en la negación de la verdad, el niño puede


empezar a dudar de sus percepciones o a construirse creencias ne-
Marine adopta una gran prudencia para anunciar a su hijo Antoine gativas. Dado que le niegas una realidad que percibe de forma con-
(cinco años) que su abuela ha muerto: fusa, deducirá que no tiene derecho a saber... Lo cual puede plantear
—Se ha ido muy lejos, ya no volverá más.—-Antoine mira a su problemas de otra índole. Para enseñarnos que es obediente también
madre y, con aire de experto, dice: puede impedirse a sí mismo aprender en la escuela.
—¡Ah, se ha muerto! Hoy en día los psicólogos aseguran que la verdad siempre duele
Desde el momento en que un niño ha vivido un otoño sabe que menos. Siempre, incluso aunque escucharla resulte doloroso.
hay hojas muertas. Ha visto una mosca muerta, flores marchitas, acaso ¿Su padre se ha suicidado? ¿Su madre ha fallecido en un acci-
una paloma aplastada sobre el asfalto, o incluso ha podido encontrarse dente de coche? ¿Su hermana ha muerto a causa de un cáncer? Es
a su hámster inmóvil. Según la edad, la palabra muerto no representa importante que lo sepa. Habíale de lo que ha pasado permaneciendo
exactamente lo mismo. Se dice que los niños no adquieren la idea de atento a las imágenes que el niño puede estar formando en su cabeza.
la irreversibilidad de la muerte hasta los nueve años. No es razón para Escúchale, pregúntale qué imagina. La emoción sitúa un filtro ante
contarles necedades. sus orejas. Aunque hayas hablado con toda claridad, puede deformar
Es raro pasar los diez primeros años de la vida sin experimentar tus palabras.
la muerte de un ser más o menos querido. Puede producirse la muerte Permítele que evoque el fallecimiento varias veces, que cuente lo
de un pececillo rojo, de un perro, de una abuela, de una amiga del que experimenta, su imaginación, y que pregunte todo lo que le
cole, de un amigo de nuestros padres, de un hermano o de una apetezca, incluso las preguntas que te parecen descabelladas.
hermana, o incluso del padre o de la madre. Por supuesto, no todos Escucha y corrige sólo cuando sea necesario rectificar una in-
tienen la misma importancia. ¿Qué se debe decir? ¡La verdad! terpretación errónea o imágenes demasiado violentas.
Decir la verdad no significa asestar brutalmente al niño una re- Explícale bien los motivos de este gesto de su padre, las con-
alidad que no podría asimilar, ni presentarle imágenes violentas. Es diciones del accidente, y hasta el punto que creas necesario las causas
importante tomar tiempo, seguir el ritmo de su comprensión y de sus de la enfermedad. Los niños se sienten fácilmente responsables de
capacidades de asimilación. todo lo que sucede en su entorno. Subraya bien y repítele que él no
El fallecimiento de los abuelos también es el fallecimiento de tus tiene nada que ver, y que tiene derecho a sentir todas sus emociones,
padres. La muerte de una amiga de la escuela te transtorna, la pérdida desde la cólera hasta la tristeza.
del pececillo rojo te incomoda. El niño está en contacto directo con Sí, tiene derecho a sentirse muy enfadado hacia ese hombre que
tus emociones, sobre todo si no las expresas. era su padre y que ha decidido irse, o sea, que le ha abandonado. Sean
Los niños sienten, saben. Es inútil ocultarles algo. Si lo haces, de cuales sean las razones del fallecimiento, suicidio, enfermedad o
un lado corres el riesgo de que les invada el pánico, y del otro, pueden accidente, el niño se siente abandonado por aquél al que amaba y
perder la confianza que tienen depositada en ti. Una cosa oculta, necesitaba. Es fundamental que sienta y pueda expresar su ira.
secreta, da mucho más miedo que una cosa que puede decirse. Los Elisabeth Kübler-Ross era una doctora de origen suizo. Desde el
niños perciben de forma confusa que no les dices la verdad. En principio de su práctica y hasta su propio fallecimiento, en ene-
resumen, pierden la confianza en ti y también en ellos.
168 El mundo emocional del niño La tristeza 169
ro de 1999, escuchó a decenas de miles de adultos y de niños a las «Yo no voy a morir, cariño, y tú tampoco, sólo mueren las per-
puertas de la muerte, acompañó a decenas de miles de personas en sonas muy viej as...»
este paso y guió a sus familias en el trabajo de duelo. En sus obras nos Pues será capaz de decirte:
entregó lo que estas personas le confiaron, testimonió lo que ella «El poney ha muerto y no era viejo.»
observó. Actualmente, las etapas del duelo son bien conocidas. Ella Lo cual te obligará a aclarar:
fue la primera en describirlas. Veamos, pues, las fases por las que «Ha sido un accidente.»
pasamos, cuando nos enfrentamos con nuestra propia muerte o con la El niño no es tonto. Ha comprendido que uno puede morir de
pérdida de un ser querido. accidente, pero siente que su madre se resiste a hablar de ello... lo cual
La primera etapa es la de la negación. significa que ella tiene miedo... lo cual significa ¡que existe un riesgo
«No, no ha muerto, no es posible.» real! La verdad es menos angustiosa, porque de este modo el niño
Luego viene la ira: puede hablar libremente, encontrar referencias, plantear las preguntas
«No es justo, papá, eres malo, no cuidaste al hámster.» que necesita plantear para comprender, identificar, aclarar.
«¿Por qué te has ido, mamá, yo no quería, no es justo» Los niños abordan la muerte con mayor serenidad que nosotros.
En esta etapa, es tóxico intentar calmar la emoción con frases del A menos que se trate de ellos, en el caso de una grave enfermedad, no
tipo: «Ya sabes que tu hámster era muy viejo», o: «Ya te compraré tienen una representación muy clara hasta los nueve años. No
otro», o querer moralizar: «Tu mamá no podía hacer otra cosa, dramatizan y pueden preguntar, sin turbarse, a su abuela: «Dime,
¿sabes?, te quería...» ¿cuándo te morirás?» O anunciar a su madre: «¿Sabes, mamá? cuanto
El niño necesita su ira. estés muerta me quedaré todas tus joyas» (Margot, cuatro años). Un
ESCUCHA y acoge: «Querías a tu hámster», «Que desdichada te poco más tarde, me pregunta si su abuela está muerta, y añade: «Si
sientes», «Estás enfadada, habrías querido que mamá se quedara está muerta, podremos enviarle una postal a su alma. Todos los días la
contigo.» veremos si ponemos una carta sobre su corazón.»
A continuación viene una fase de depresión. El niño entra en un Los niños gravemente enfermos se acercan a la muerte con una
período de retraimiento, ya no se interesa por lo que le rodea. Está serenidad sorprendente. Saben cuándo van a morir, y hablan de ello
sumergido en el pasado. Piensa en su relación con la persona con facilidad si sabemos escucharles sin mezclar nuestras propias
fallecida. Acompáñale permitiéndole llorar y hablar. Es el trabajo angustias. Cuando el entorno no puede oír, se callan. Son
nostálgico necesario antes de la aceptación. extremadamente sensibles y están preparados para sacrificar sus ne-
Después de la aceptación de la pérdida es posible establecer un cesidades de intercambio y de tranquilidad para no apenar a sus
nuevo vínculo, que marca el fin del trabajo del duelo. padres. ¿Tenemos derecho a obligarles a controlarse tanto, cuando
La muerte de alguien o de un animal será la ocasión de hablar de resulta que están enfermos y necesitan tanto nuestra protección?
la muerte eventual de otras personas a las que se ama. Preguntar no es
sinónimo de angustia, a menos que el adulto no responda, o conteste
de forma evasiva. La no respuesta a las preguntas sí es angustiante. LA NOSTALGIA
Debes saber que tranquilizar de forma excesiva tampoco funciona:
Mientras Pomine se está duchando, su padre mete al gato muerto en
una bolsa de plástico y luego en una gran caja de cartón. Se lo

inIltaÉÉÜÜiaülÜHll
La tristeza 171
170 El mundo emocional del niño
paración, paso revista a mis fronteras con el ser querido que he
va a llevar a la clínica veterinaria para que lo incineren. La niña baja a
perdido, tapono las brechas, descubro los sentimientos disimulados,
despedirse de su querido Jules. Pomme llora con ganas en los brazos
exorciso, asimilo poco a poco la realidad de la pérdida en mi iden-
de su mamá, sus sollozos son profundos.
tidad, remiendo los desgarrones.
Durante varios días, Pomme habla mucho de su gato.
Esta inmersión en los recuerdos es, ciertamente, dolorosa, las
«Le gustaba ponerse sobre el sofá... Si Jules estuviera aquí, co-
lágrimas la acompañan. Es importante llorar cada recuerdo para
rrería tras esta pelota... Qué triste me pone que haya muerto.»
Poco a poco, la presencia de Jules se difumina. asimilarlo, situarlo en el corazón, incorporarlo. El otro ha muerto,
«Pero siempre le llevaré en mi corazón, no le olvidaré nunca», pero nos deja huellas.
dice.
Esta fase de nostalgia es una etapa natural del proceso de duelo.
Aceptar lo ineludible
Después del choque, la negación (un rechazo a ver), la cólera (una
rebelión contra lo inaceptable), la negociación (último intento de
El bebé come del pecho de su madre, se siente bien, la vida es her-
regatear con el destino), llega la tristeza.
mosa, el paraíso. Este pecho es «totalmente bueno». Un poco más
A menudo oímos a los padres decir: «Deja de pensar en ello, te
tarde, tiene hambre otra vez, le duele la barriga, está mal, grita, su
haces daño», «Mira hacia adelante», «¿Qué sacas con remover todo
madre no viene. El pecho se convierte en algo «totalmente malo»
esto?». Algunos padres llegan incluso a comprar otro gato o un
porque le frustra. Los primeros días de su vida están marcados por
hámster a la semana siguiente.
estas oscilaciones entre un pecho totalmente bueno y uno totalmente
malo. Esta etapa recibe el nombre de fase esquizo-paranoi-de. Esquizo
porque el mundo se corta en dos. Paranoide porque el niño teme la
«Remendar» su identidad
intensidad de sus sentimientos agresivos.
A continuación llega la fase llamada «depresiva», aunque no se
Y sin embargo, el trabajo de nostalgia es fundamental. Uno no se
trata en absoluto de depresión patológica, sino de una tristeza justa.
sumerge de este modo en los recuerdos para «hacerse daño», sino para
Esta etapa marca la asimilación del objeto bueno y malo, del pecho
asimilar la realidad de la pérdida y repararse, reconstruir la totalidad
bueno y malo. Mi madre no es ni totalmente buena ni totalmente mala,
después de haber perdido una parte de sí.
a veces es buena, a veces es mala, realizo el duelo del todo negro, todo
Un niño se aferra naturalmente a lo que le rodea. Las personas,
blanco, para mirar la realidad con todos sus niveles de blanco, negro y
pero también los objetos, los muebles, las paredes, son referencias.
gris. Es triste, porque debo abandonar a esta madre ideal que siempre
Cuando son pequeños, las cosas son como prolongaciones de ellos
es buena y nunca resulta frustrante. Abandono la idea de un paraíso
mismos. Lo que les rodea forma parte de su identidad. Toda pérdida
para volver a caer en el suelo, y entrar en relación con una madre que a
es una pérdida de un trozo de sí.
veces da, a veces frustra, una persona real que tiene sus propios
He perdido a alguien, nunca más estará en mi vida, reconsidero
deseos, que existe fuera de mí y que no es la prolongación de mis
los momentos que hemos pasado juntos para apropiarme de lo que me
deseos.
ha ofrecido con su presencia en mi vida. Su ausencia de hoy me Hay personas que nunca realizan este trabajo de asimilación y
amputa una parte de mí. La nostalgia es un trabajo de re-
172 El mundo emocional del niño

permanecen en la dualidad. Las cosas son blancas o negras, no ven la


inmensa paleta de grises intermedios. Capítulo 8

ACOMPAÑAR LA TRISTEZA

Para acompañar la tristeza, simplemente deja lugar para el llanto.


La depresión
Anímalo con palabras simples:
«Es muy duro...», «estás triste de verdad porque...», «es triste
pensar que no se verá nunca más a alguien»...
La depresión es muy diferente a una «depre» pasajera, natural y
En general, cuando alguien llora, tócale sólo si vuestra intimidad
es suficiente para que tu contacto no detenga sus lágrimas. normal. Es una atmósfera que se instala durante varias semanas,
Puedes acoger, pues, a tu hijo en los brazos. Pecho contra pecho. meses o incluso años.
Mientras tú respiras tranquilamente, profundamente desde la pelvis, La depresión adopta el color de la tristeza, pero no es una tristeza
siente su respiración, y acoge a tu hijo en tu corazón. Anímale a sanadora. Es un bloqueo de emociones mezcladas.
hartarse de llorar: «¡Llora, cariño, llora todo lo que tengas que llorar!» Indica un problema insoluble para el niño, un profundo senti-
El llanto ayuda a aceptar el fracaso, así que, cuando acabe el miento de desamparo que no se ha oído.
juego, evitemos decir a Ludivine, si no ha ganado: «No llores, la
próxima vez serás tú», sino más bien: «Te comprendo, amor mío,
perder es muy duro.» ¿CÓMO DETECTARLA?
¿Te parece exagerado? Pruébalo. Las lágrimas están allí de todos
modos, y observarás que duran mucho más si no las respetas. En un adolescente que pone mala cara de la mañana a la noche, es
fácil de advertir. Pero en el caso de un joven, la depresión a menudo
está oculta. Se disimula bajo distintos disfraces, excesiva sensatez,
conformismo, o agitación, y puede pasar desapercibida.
Cuando un niño es demasiado sensato o demasiado brillante en la
escuela, pocos adultos se alarman.Y sin embargo es uno de los rostros
de la depresión. Un niño es algo vivo. Si es demasiado dócil, de-
masiado sensato, está reprimiendo una parte de la vida que lleva.
Francois tiene once años. Es muy tranquilo, y le va muy bien en
la escuela. Pero nada le interesa realmente, no hace proyectos. No
sabe dónde quiere ir de vacaciones, ni lo que hará el próximo fin de
semana. Aparte de su ordenador refugio, tiene pocas pasiones.
Francois no es un ser emotivo. Es un poco soñador y su vida
174 El mundo emocional del niño
La depresión 175
fluye tranquilamente. No se hace cargo de ella. Como si no le per-
tos y niños, le ven como a un monstruo. En el parque, las otras mamas
teneciera.
apartan a sus hijos. Nunca le invitan a casa de sus amigos, y éstos no
Levantemos el velo. Los padres de Francois se pelean a menudo.
vienen a la suya. Martin es un monstruo. Está convencido de ello.
El marido engaña a su mujer. Según sus padres, el niño no lo sabe.
Pero su madre termina por creerlo. ¿Es genético? ¿Se puede hacer
Siempre han procurado que no pudiera sorprender una conversación...
algo?
No obstante, cuando Francois está solo conmigo, en seguida me
Pido a su madre que me hable de la historia de su hijo desde la
resulta evidente que sabe que hay otra mujer en la vida de su padre, y
concepción. Así, me entero, al mismo tiempo que Martin, que está
que su madre es desgraciada. Sin embargo, no puede hablar de ello.
escuchando, que su padre se fue mucho antes de nacer él, desde que
Nunca evoca su sensación de desamparo ante las riñas de sus padres.
supo que había sido concebido. No quiso ser padre.
Se encierra en sí mismo. Dado que sus padres no le hablan de ello, él
Pongámonos por un momento en el lugar de Martin. ¿Cómo va a
no tiene porqué hacerlo. Además, teme desencadenar una separación
comprender que su padre se haya ido? Mientras no oyera las
si pone las cartas sobre la mesa.Y lo que menos desea un niño es
verdaderas razones que motivaron que su padre desertara, la única
sentirse la causa de una separación de sus padres. ¡Le gustaría tanto
explicación plausible era que él mismo era un monstruo. Para excusar
ver cómo se quieren!
a papá, para no cargarle con la responsabilidad de su partida, asume
Cuando los padres le hablen de ello, al fin podrá expresar cómo lo
esta responsabilidad, él es el culpable. A partir de ahí, no tiene más
vive, sentir su cólera, decirla, formular su miedo, llorar... liberarse de
que confirmar esta creencia. Puesto que es un monstruo, se comporta
todo este peso que lleva en su interior. Un niño depresivo es un niño
como un monstruo.
que sufre. Un niño frustrado, que vive carencias pero que no puede
Una sola sesión bastó para transformar radicalmente el com-
expresarlas, que no tiene derecho a hacerlo. Los cimientos de la
portamiento de Martin. Su propia madre no le reconocía. Una sesión
depresión son la imposibilidad de hablar, de decir lo que se siente en
durante la cual comprendió de dónde le venía esta convicción de que
el corazón.
era un monstruo, una sesión durante la cual se le dijo que no tenía
Otra cara de la depresión, insospechada por la mayoría de padres,
ninguna responsabilidad en la partida de su padre, que éste no se había
es la agitación. La hiperactividad es una lucha contra la depresión. A
ido porque Martin fuera un monstruo, sino porque tenía problemas,
menudo propicia que el problema subyacente pase desapercibido. Los
porque se sentía incapaz de criar a un niño.
padres regañan, castigan, acusan al niño que, además, se encierra cada
Martin dejó de oponerse a todo lo que le proponía su madre.
vez más profundamente en su angustia. Los padres preferirán incluso
Incluso el baño, verdadero suplicio hasta entonces, se convirtió en una
administrar Valium u otro calmante antes que mirar la realidad: su
fuente de placer. Dejó de ser violento... salvo un día, al salir del cole.
hijo es desgraciado y es bien posible que ellos tengan algo que ver en
Su madre se preguntó entonces qué había podido pasar durante el día,
ello.
y se enteró de que la maestra había obligado a Martin a realizar un
Si nadie se preocupa de escuchar las necesidades del niño, la
regalo para el día del padre.
agitación puede convertirse en violencia.
Cuando un niño no se siente querido, en seguida se dice que debe
Esta es la razón que ha llevado a Martin a visitarme con su
haber una razón. No puede permitirse cuestionar a sus padres, así que
madre. Acaba de pegar a un amigo en la guardería y la directora ha
prefiere acusarse. Si sus padres le pegan, no es que sean violentos, es
estado a punto de expulsarle. Tiene cuatro años, pero todos, adul-
que él es malo.
176 El mundo emocional del niño La depresión 177

Por otra parte, es lo que dice la mayor parte de padres: «Te pego este caso). Sobre todo no empeores las cosas haciéndole sentirse
porque has hecho algo mal, una falta». Para corregirte a «ti» y no para culpable, insultándole o desvalorizándole.
corregir la falta, pues ciertamente no se comprende de qué modo un ¿Cuáles son las causas del fracaso? No creas jamás que tu hijo es
golpe podría corregir una falta. La corrección se dirige, pues, a la tonto, incapaz, anormal, inútil en matemáticas o lo que sea. En este
persona, es la propia persona del niño que es «falta». Todo está claro. momento algo le impide aprender, eso es todo. Falta encontrar qué es
Si mis padres me pegan, es que soy malo. Es preferible auto- lo que inhibe su aprendizaje.
despreciarse que cuestionar a mis padres. Les necesito, cómo podría ¿Se trata de otro niño que le domina o incluso le pega? ¿De un
permitirme considerarles vulnerables, incapaces de controlarse, profesor injusto, severo, frío o simplemente incompetente? ¿Hay
capaces de hacerme daño, peligrosos. Prefiero pensar que la culpa es alguna cosa que no se haya dicho en la familia? ¿Un padre enfermo o
mía. Yo soy el culpable. Yo soy un monstruo. depresivo? ¿Está en conflicto con su padre o su madre? ¿O con las
expectativas inconscientes de su padre?
Una vez más, la escucha es la primera respuesta.
Los síntomas de la depresión en un niño: En cuanto a la escuela, tu deber es el de defender a tu hijo, tomar
partido por él de forma decidida en tus encuentros con los profesores.
• no ríe
Su vida entera está en juego. No es banal que le consideren un inútil
• no se interesa por nada. «No sé qué hacer»
• se aburre en cuarto de primaria o en primero de secundaria. Será difícil
• parece muy buen niño, casi demasiado recuperarse. Es fundamental explicar al niño que no es inútil. Si no
• está agitado logra seguir el curso, existen buenas razones para ello:
• problemas de sueño, de alimentación
• trastornos de comportamiento • En su cabeza hay un nudo de preocupaciones, no le queda lugar
• necesidad de estímulos violentos, de adrenalina: coca-co- para aprender.
la, azúcar, dibujos animados violentos...
• Su profesor no ha sabido encontrar el modo de aprendizaje que le
• fracaso escolar
• regresión de los aprendizajes escolares, o dedicación ex- conviene. Procura no psicologizar a ultranza a un niño so pretexto
cesiva... ¡cuidado cuando las notas siempre son demasia- de que es disléxico o simplemente más visual que su profesor.
do buenas! • ¡Se aburre!
• a menudo se queja de que está cansado • Para interesarse en su escolaridad, sería necesario que la institución
• enfermedades que se repiten escolar se interesara por él. Necesita sentirse responsable de sí
mismo, de sus elecciones.

En todos los casos, el niño tiene emociones que no pueden ex-


EL FRACASO ESCOLAR, UN SÍNTOMA presarse y que alteran sus aptitudes escolares. Escúchale, ayúdale a
nombrar con palabras los sentimientos y las ideas que le preocupan,
El fracaso escolar es muy doloroso para un niño, incluso si parece que hasta que sus capacidades se liberen y su motivación vuelva a aparecer.
no le da la menor importancia (quizás es aún más doloroso en
La depresión 179
178 El mundo emocional del niño
—No lo sé, todo me irrita.
¿ES DEPRESIVO?
—¿Qué puede irritarte en tu vida en este momento? ¿Tienes una
idea al respecto?
He aquí algunas pistas que se pueden explorar:
—Lo que me irrita es el profesor de matemáticas, no puedo
seguir, siempre tengo malas notas.
• ¿Le falta tu presencia en casa, o la de tu cónyuge? Cuando tú estás,
Sigue planteándole algunas preguntas abiertas, en términos de
¿estás disponible para pasar tiempo con él (aparte del tiempo
dedicado a los deberes, que no cuenta en el balance afectivo puesto «Qué...».
que tú estás a su lado para lo que es importante para ti, y no «¿Qué sientes cuando no puedes seguir al profesor?»
forzosamente para él)? «¿Qué dices?» Etcétera.
• ¿Es víctima de violencia? ¿o testigo de violencia hacia uno de sus Dale permiso para expresarse, y prepárate para no ponerte formal,
hermanos o contra su padre o su madre? para no sentirte culpable, para no hundirte.
• ¿Tiene un profesor que se muestra violento (física o verbalmen-te), ¡Escucha! y haz preguntas en la forma «Qué...», «Cómo...», «De
malo, excesivamente despreciativo, autoritario o incluso in- qué...», hasta que el problema sea evidente, o quede resuelto. Es
diferente? importante que las emociones se expresen, y no forzosamente que
• ¿Existe uno o varios secretos en la familia, algo que no le dices? todas las dificultades se resuelvan. No le agobies durante una hora.
• Vosotros, padres, ¿estáis cerca el uno del otro, os amáis, os respe- Habla y escucha unos minutos... Cuando se sature, déjalo, aclarándole
táis? Tanto si estáis separados como si vivís bajo el mismo techo, la que volveréis a hablar del tema. Déjale tiempo para digerir, para
distancia afectiva es lo más duro que puede vivir un niño. reflexionar, para elaborar.
• ¿No vive con sus padres? Por tu lado, reflexiona. Conoces bien a tu hijo, su entorno y las
• ¿Ha sufrido un abuso sexual? circunstancias que le rodean... ¿Qué puede haber originado su estado?
Dale una mayor cantidad de presencia auténtica, escucha, pero
• Uno o ambos padres sufren una depresión (consciente o no).
también de juegos, de actividades juntos.
Ayúdale a enfadarse de forma sana cuando sorprendas injusticias,
¿Cómo ayudarle? invasión de su territorio o insulto a su persona. «Claro, Max, claro que
puedes decirle a tu hermano que no estás de acuerdo con que te haya
Dile que ves que no está bien y que deseas ayudarle. A menudo, el cogido la bici», «Venga, contéstale cuando te dice que eres un
niño lo negará: gallina.»
—Claro que no, estoy muy bien. ¿De-presión? Es el contrario de ex-presión. La energía vital está
Manten tu punto de vista y desarróllalo: encerrada. La ira, ex-presión de la frustración, de la carencia, de la
—Cuando veo cómo te irritas todo el rato con tus amigos, me herida, está reprimida. Cuanto más se ex-presa la cólera, más se alivia
digo que no eres feliz. Algo te preocupa, y te incomoda hablar de ello. la de-presión.
Acaso temes nuestra reacción, tal vez lo que pasa es que no sabes Ayuda a tu hijo a reconstruir un sentimiento de poder personal,
nombrar lo que no funciona. Pero yo no quiero dejarte así. Para mí es de control sobre su propia vida. Acoge con placer sus cóleras.
importante que seas feliz. ¿Qué pasa?
180 El mundo emocional del niño

Escucha su opinión sobre todo tipo de cosas que conciernan a toda la


familia, las salidas, las vacaciones, y sigúele, no de forma sistemática,
Capítulo 9
pero sí a menudo.
Si aún no tiene el control de su indumentaria, dáselo. Si, en
cambio, te abstienes de cualquier comentario acerca de su ropa,
comienza a decirle lo que te gusta y lo que no te gusta. La vida no es un camino de
No pierdas ninguna ocasión de mostrarle que él es tu prioridad.
Que es importante para ti, que le encuentras lo bastante interesante rosas
como para tener ganas de pasar tu tiempo con él. Dale tiempo.
Y, si es posible, coge el toro por los cuernos en lo que concierne a
tus problemas de adulto. Si aún no lo logras, habíale. No dejes que
cargue con ellos. Dile que él no tiene nada que ver y que tú tienes que El fracaso, el dolor, la enfermedad, la muerte, no dejan de aparecer en
arreglarlos solo, entre adultos. Deja que se desahogue. Escucha sus la vida de todo ser humano. ¿Qué podemos hacer para que las
emociones, sus pensamientos, sus necesidades. experiencias difíciles sean constructivas en lugar de destructivas?
¿Cómo ayudar a nuestros hijos a superar el sufrimiento que atraviesan
en la infancia, los duelos, las separaciones, las enfermedades? ¿Y
cómo ayudarles a convertirse en adultos capaces de afrontar las
dificultades de su vida con ánimo?

¿ES PRECISO ENDURECERSE PARA ATRAVESAR LAS


EXPERIENCIAS DIFÍCILES?

Decimos que los niños que han crecido en una burbuja son frágiles. Si
se les encierra en una burbuja, es muy probable que tengan
dificultades a la hora de afrontar la vida. Me acuerdo de los primeros
experimentos de burbuja aséptica en los hospitales. Habían puesto en
ella a un niño desde que nació, y se aprestaba a salir después de varios
años. Estaba aterrorizado ante cualquier cosa, y muy poco preparado.
Pero esta burbuja aséptica tiene pocos puntos en común con una
infancia normal en casa.
Al hablar de burbuja, la gente evoca más bien una infancia de-
masiado confortable. Nacer en una familia feliz, en condiciones
óptimas, en el seno de una pareja unida y que se ame, con padres
182 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 183
atentos, que den mucho amor y libertad, sin graves problemas ma- el aquí y el ahora. Estas emociones deben descifrarse, pero su ex-
teriales, ¿acaso esto propicia niños más frágiles? presión agrava el problema.
¿Una nimiedad podría destruirles? Hay quien lo afirma, para A raíz de una conferencia en la que yo abordaba este tema, una
justificar sus métodos pedagógicos. Según ellos, es preciso enseñar a mujer joven tomó la palabra para decir que, en su empresa y en el
los niños qué es «la vida», o sea, las obligaciones, la injusticia, los mundo del trabajo en general, las emociones no se escuchaban. Puso
castigos, el sufrimiento. ¿Es esta la imagen de la existencia que que- como ejemplo lo que le acababa de pasar. En respuesta a una
remos transmitir a nuestros hijos? Cuando mi hija estaba en la injusticia, había llorado de angustia delante de su jefe, y él lo había
guardería su profesora me explicó lo importante que era prepararse utilizado contra ella.
para obedecer las reglas y someterse a las obligaciones, puesto que iba De este modo nos vamos convenciendo de que las emociones no
a encontrarse con todo esto durante toda su vida. ¡Tenía tres años! son acogidas. Ella creía haber expresado, pero ante la injusticia lo
Esta no es mi concepción de la existencia, la retiramos de la escuela apropiado es la cólera. Los lloros son una invitación a un juego de
que insistía más en el conformismo social que en el desarrollo pleno poder a partir de una posición de víctima, y el patrón respondió al
de cada uno. juego.
Los niños a los que no se imponen obligaciones excesivas, a los Necesitamos dominar mejor la gramática emocional. Expresar las
que no se pega, a los que no se intenta coaccionar o herir, ciertamente emociones no significa dar rienda suelta, sin filtro ni freno, a lágrimas
no se han «endurecido», es decir, no han desarrollado un caparazón. que no tienen sentido, salvo si traducen nuestro pasado, en este caso la
Si se encuentran con dificultades graves, su primera reacción quizás impotencia de una niña ante su padre.
no será la de protegerse o huir. Tal vez llorarán más que los otros. Las emociones justas nos devuelven nuestro poder. Las emo-
¿Pero acaso no es esta la prueba de una buena salud psíquica? Son ciones desplazadas, desproporcionadas, excesivas, sustitutivas, elásti-
más sensibles, y esto es bueno. cas... nos vuelven más vulnerables.
¿Deploramos la insensibilidad de este mundo y querríamos que En el espíritu de la mayor parte de la gente, los llantos se asocian
nuestros hijos se adaptaran a ella? con el dolor. Si una persona solloza, significa que le duele algo. Y en
Interpretar la manifestación de emociones como una debilidad, un intento mágico de suprimir el dolor, exigimos que acalle sus
una inaptitud para asumir, ya es obsoleto. La realidad nos demuestra lágrimas. Si no llora, le duele menos.
que es exactamente lo contrario. Si bien acallar los afectos contribuye Es cierto, resulta duro oír sufrir a alguien. Pero somos adultos.
al juego del poder y, en consecuencia, puede ser útil para manipular al ¿Acaso no es injusto obligar a una persona, y sobre todo a un niño, a
prójimo y ganar una batalla... a largo plazo, la represión emocional es acallar su dolor, a administrarlo solo, simplemente porque estamos
lo que vuelve frágil, y no la expresión, siempre que esta última sea desarmados?
justa y proporcionada. Un niño que ex-presa no se lo queda dentro. Le duele, cierta-
Las rabias que ofuscan nuestros cerebros, las lágrimas que nos mente, pero el dolor no tiene poder para destruirle. Con la ayuda de
hunden en un abismo de dolores, los miedos que nos paralizan, no son las lágrimas, lo atraviesa.
emociones que expresen de forma directa su significado, tal como has Un niño que debe acallar sus lágrimas encierra el dolor en su
podido leer a lo largo de este libro. Son afectos parásitos que tienen interior. Está solo con él. Se recoge sobre su mal. Una parte de su
un sentido, pero sólo raramente están relacionados con energía psíquica la emplea para dar sentido a este dolor, contener
La vida no es un camino de rosas 185
184 El mundo emocional del niño
La separación en el nacimiento
las emociones, sufrir menos. Toda esta energía deja de estar dispo-
nible para desarrollarse, aprender, trabajar en la escuela o establecer
A veces, una separación madre-hijo es ineludible a partir de que éste
relaciones con amigos. Corre el riesgo de salir disminuido de la
nace. Una serie de problemas de salud puede precisar cuidados,
experiencia. Tarde o temprano, expresará su sentimiento de de-
competencias y un material específicos que sólo están disponibles en
samparo mediante un síntoma. Desgraciadamente, sus padres no lo
el hospital. Cada vez más, las maternidades se organizan para
identificarán siempre como tal. Eczemas, pipí en la cama, rechazo de
mantener el vínculo madre-hijo, pero esto no siempre es posible. En
la comida, malas notas, violencia o depresión son algunos de estos
cualquier caso, cuando te digan: «Es imposible», insiste y
síntomas posibles... Las emociones pueden permanecer ocultas
compruébalo. Al entrar en el hospital te conviertes en un «paciente»,
durante años y no buscar salida hasta la edad adulta. Al alterar la
lo cual no es razón para someterse.
percepción de la realidad, inducen a fracasos profesionales, matri-
Mi primer hijo nació mediante cesárea. Después de que me
monios desdichados, errores y conflictos. Las emociones estallan
cosieran, me bajaron hasta la habitación y me enteré de que no po-
entonces ante un despido o un divorcio, o bien desembocan en un
drían traerme a mi hija hasta una hora más tarde. Margot, que estaba
cáncer o un infarto.
fría y pesaba poco, «debía» permanecer en la incubadora. Era mi
Las experiencias duras jalonan la vida de todo ser humano, es
primer bebé, no estaba preparada para resistir la invasión médica.
inútil provocar su aparición para blindarle. Al contrario, ayudar a un
Ante la frase categórica «mientras su temperatura siga baja, debe
niño a permanecer sólido ante la experiencia difícil, a atravesarla sin
permanecer en un sitio cálido», no supimos oponernos. Y sin
daño, significa acompañarle en la construcción de una base de
embargo, ¡mi cuerpo o el de su padre estaban tan calientes como la
confianza en sí mismo, en los que le rodean y en la capacidad de
incubadora!
liberación de sus emociones.
¿Pero por qué era «imposible» bajar la incubadora?
La negación de las emociones, el blindaje, nos dan una ilusión de
«¡Las incubadoras no pueden salir de la planta! La persona que
protección, pero hoy sabemos hasta qué punto esta represión
prepara las incubadoras en su planta no empieza su turno hasta dentro
emocional es tóxica para la salud física y psíquica. Las emociones son
de una hora.»
las herramientas que nos ha dado la naturaleza para enfrentarnos a las
¡Increíble! Jean Bernard cogió la incubadora, perseguido por las
dificultades de la vida, ¿por qué privarse de ellas?
enfermeras, que chillaban:
Repasemos conjuntamente algunas experiencias difíciles que
—¡No puede hacer esto!
aparecen corrientemente en la infancia. No evocaré aquí los malos
—Pues lo hago. ¡Ustedes no pueden dejar a este bebé solo aquí,
tratos graves, cosa que haré en otro libro.
mientras su madre está en el piso de arriba!
Bajó la incubadora y, desde luego, no hubo problema alguno.
Nathan nació mediante cesárea con un problema cardíaco. Le
LAS SEPARACIONES
llevaron urgentemente a un hospital competente. A causa de su
operación, su madre no pudo acompañarle. El padre sí le siguió. Le
Para un niño pequeño, la experiencia dura por excelencia es la se-
hablaba a su bebé, le tomaba en brazos. Cuando el personal le pidió
paración.
por la noche que saliera, simplemente se negó. Dejar a su be-
186 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 187

bé sufriendo solo en este universo extraño, ni pensarlo. Quería ausencia. Hay que tener presente que un niño no es un paquete que se
acostarse allí, a su lado. Durmió sobre las baldosas, debajo de la cuna. deposita y que se recoge, es una persona que tiene derecho a tener su
Lo intentaron todo para desanimar al padre de que se quedara junto a opinión.
su hijo. Pero su determinación era tal que el personal capituló. Al día ¿Le llevas a la guardería porque tienes que volver a tu puesto de
siguiente, por la noche, le dejaron un colchón delgado. Si todos los trabajo? No tiene elección, pero tiene derecho a expresar sus
padres y madres tuvieran esta firmeza, desde hace años los hospitales emociones.
se habrían visto obligados a actualizarse y habrían inventado Si al cabo de las primeras veces el niño sigue llorando cuando te
estructuras de acogida respetuosas con las necesidades de una familia. vas, intenta decirte algo. No creas que «ya se le pasará». Los llantos
Si la separación es realmente inevitable, habla con él. ¡Sí, habla indican un sufrimiento.
con el bebé! El bebé oye. No comprende las palabras, pero capta la Resulta tentador interpretar las lágrimas como un rechazo a
intención. Es sorprendente ver a un bebé calmar su llanto o abandonar permanecer en la guardería mientras tú trabajas. No saques con-
su huelga de hambre porque simplemente se le ha explicado lo que clusiones precipitadas. Considera lo que vive tu hijo, e intenta
pasaba. identificar su necesidad. ¿Tiene relación con la profesora? ¿Con el
Un bebé es bastante más que un tubo digestivo. La ciencia nos lo lugar? ¿Con la presencia de otro niño? ¿Es una reacción a tu propia
ha demostrado hoy en día (han sido precisas pruebas científicas, angustia? Y tú, ¿te sientes abandonada en tu vida?
porque éramos ciegos y sordos). Habíale. Y sobre todo, ¡nada de mentiras! ¿Te gusta el trabajo y
El bebé es una persona, y se le debe respeto. estás contenta por volver a empezar? Esto no significa que le quieras
Si bien aún no formula sus necesidades mediante palabras, habla menos. Explícale lo feliz que eres en el trabajo. A un niño le gusta ver
con su cuerpo, con sus gritos. Intenta comunicar. Tiene derecho a un a su madre feliz. Si desplazas la responsabilidad de la separación (a la
significado. Su cerebro graba ya todo lo que oye. Necesita empresa, al jefe...), intentas evitar la confrontación con las emociones
información sobre lo que pasa. del niño. El niño no aceptará mejor tu ausencia si se la presentas como
una obligación independiente de tu voluntad, al contrario. Asumir las
responsabilidades es más gratificante a largo plazo y más sano para el
La separación en la edad de la guardería niño. Del mismo modo, cuando no quiera ir a la escuela, no le asestes:
«Todos los niños van a la escuela a tu edad, es obligatorio.» ¡No es
Más tarde, cuando mamá vuelve a trabajar, llega la hora de ir a la verdad! La escuela no es obligatoria en Francia. A los seis años, la
guardería o a la escuela. Según Francoise Dolto, la acogida de la in- instrucción es obligatoria, pero no la escuela. Si quieres puedes optar
fancia más temprana se ha transformado. Casi en todas partes, el por enseñarle a leer en casa. Preferir la escuela es tu elección, una
personal de las guarderías está atento a las necesidades del niño. Casi elección dictada tal vez por tus horarios de trabajo, pero que depende
en todas partes, se propone una preparación, un período de adaptación de ti, y no de la ley. ¿Cómo no nos vamos a sorprender si más tarde
durante el cual se acepta la presencia del padre, hasta que el niño se nuestros hijos nos mienten y rehuyen sus responsabilidades si nosotros
sienta lo bastante cómodo. Casi en todas partes, te ayudarán a hablar mentimos e intentamos cargar a otros con la responsabilidad de
con tu hijo y el personal le hablará de ti en tu nuestras elecciones?
188 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 189

¡Avisa siempre! Recuerda que no basta comentarlo una sola vez. Se debe hablar a
menudo, repetir, aunque a él no le guste oír hablar de ello. A medida
Si bien es cierto que los bebés no tienen noción del tiempo, no por que se acerca el día, las emociones varían.
ello es menos importante informarles con la suficiente antelación. Un • Habíale de la persona que le cuidará.
pequeñín también necesita tiempo para prepararse. Si te dispones a Nunca confíes tu hijo a una persona a la que no conozca.
salir una hora, basta con hablar con tu hijo la misma mañana (pero no Algunos niños pueden necesitar tiempo para tener confianza de
dos minutos antes). En cambio, si tienes previsto ausentarte una verdad. No basta haber visto a alguien una hora para conocerle. En
semana, informa a tu hijo al menos un mes antes. la medida de lo posible, si debes confiar tu hijo a una niñera que él
A decir verdad, ¿por qué no empezar a hablar de ello el mismo no conoce bien, permíteles que se conozcan de veras y que se
día en que tomes la decisión? Una separación concierne a dos preparen mutuamente y juntos para tu ausencia.
personas. Comunicar pronto da tiempo a los dos para escuchar las • Evoca con tu hijo lo que hará durante tu separación. De este
emociones, anticipar, construir un puente entre el momento de la modo se construye referencias. Sigue existiendo durante la sepa
partida y el del regreso, ponerse a la escucha prospectiva de las ne-
ración.
cesidades de cada uno y elaborar las estrategias adecuadas para seguir
• Describe tu proyecto. Explica. Dile siempre las auténticas razones
sintiéndose vinculados.
de la separación. No mientas jamás y no finjas que lo que es una
A lo mejor, una camiseta que conserve tu perfume es lo que le irá
elección tuya representa una obligación impuesta desde el exterior.
mejor, o una cosita tuya que coja de tu bolso. O una foto. Si lo
• Habla de ti, de tus sentimientos:
preparáis juntos, os sentiréis más cerca el uno del otro. Durante tu
«Me entristece dejarte, te echaré de menos.»
ausencia, al mirar la foto, al oler la prenda, al tocar la cosita, volverá a
• Escucha las emociones del niño. Tiene derecho a manifestar su
entrar en relación con estos momentos de proximidad contigo.
Si es él quien se va, el muñeco preferido o una prenda im- cólera, su tristeza o su miedo.
• Evoca cómo puede ser el reencuentro.
pregnada de tu olor siguen siendo las mejores bazas. Déjale elegir a él
mismo lo que le ayude, fotos de los padres, un osito, un objeto de la
casa, un juguete familiar, que también pueden ayudar a sentir que
papá, mamá y la casa siguen existiendo aunque uno no esté allí.
El aprendizaje de la separación
Con un niño mayor, puedes construir un gran cuadro con casillas
• Jugad al escondite.
que representen los días y que podrá ir tachando a medida que vayan
Freud describió el juego del carrete, en el que un niño lanza un
pasando. Puedes prepararle uno del tipo calendario de adviento, con
carrete a lo lejos sosteniendo el hilo y diciendo «fori» (que en ale-
puertecillas que se abren cada día para descubrir un mensaje de amor,
mán significa lejos), luego tira del hilo y lo acerca a él: «da» (aquí es-
un caramelo o un regalito. Deja volar tu imaginación.
tá). Fort da, «se ha ido, ya ha vuelto». Este juego, como, algo más tar-
de, el juego del escondite, ayuda al niño a aprender a gestionar la
ausencia y los reencuentros. A un niño pequeño sólo le gusta jugar
La vida no es un camino de rosas 191
190 El mundo emocional del niño
• ¡Telefonea! ¡Escribe! ¡Envía un fax! Manifiesta tu existencia.
al escondite en ciertas condiciones. Se oculta de manera que tú le
¿Prefieres no llamarle para que no llore? Si quieres, evita llamarle a
encuentres en seguida, vuelve a ocultarse veinte veces en el mismo
la hora sensible de acostarse, pero llama. Si llora después de colgar,
lugar, y llora si tu escondite es difícil de encontrar.
ello le permite exteriorizar su sufrimiento. Comprueba que la
• Lee cuentos que describan la partida de un padre, la inquietud
persona que cuida de él sabrá acompañar sus lágrimas y no le
del niño, el retorno y el alivio. Siempre se puede hablar en base
pedirá que demuestre que es un hombrecito.
al libro:
¿Está demasiado ocupado jugando? Ha oído tu deseo de hablarle,
«Tú también tuviste miedo, ayer, cuando me fui, como los bebés
ya sabe que no le olvidas.
mochuelo de este cuento.Y luego volví. Las mamas siempre
En cambio, si no le llamas, podrá preguntarse qué pasa, y sin
vuelven. La semana que viene me voy a ir otra vez, dos días. A lo
decírselo a nadie. La persona que se ocupe de él dirá que todo ha
mejor te sentirás un poquito solo, como los bebés mochuelo. Habrá
ido muy bien. No ha preguntado por ti ni una sola vez. No ha
dos noches que no estaré para darte las buenas noches. Pero luego
volveré.» derramado una sola lágrima... Ha comprendido que debía disimular
su angustia. No hablará de su sentimiento de desamparo hasta
• Acostúmbrale de forma progresiva.
veinte años más tarde, con su psiquiatra.
En la medida de lo posible, planifica separaciones de duraciones
respetuosas con las capacidades del niño. Evita separarte más de Imagina una ausencia de tu amado durante un mes o dos (pro-
veinticuatro horas de un niño de menos de dos años. Después, él porcionalmente, corresponde a lo que vive tu hijo en una semana).
sabrá hablar y decir lo que le conviene. Escúchale. La distancia es cruel, te gustaría poderle abrazar. Cuando le hablas
por teléfono, te sientes conmovida, te cuesta colgar y derramas más
¿Cuándo se deben organizar las primeras vacaciones fuera de
o menos lágrimas. Pero imagina que, para no oír tus lágrimas,
casa? En mi opinión, cuando el niño es capaz de expresar lo que
inquieto ante la idea de apenarte, no te llamara durante toda su
deseea. Resulta sensato comenzar por una noche en casa de la
abuela o de un amigo y aumentar progresivamente la duración de ausencia. ¿Qué te parecería?
las ausencias. Tu hijo tiene derecho a las mismas consideraciones que tú, al
• ¡No te vayas JAMÁS sin despedirte! mismo respeto de sus necesidades, y aún más porque es pequeño y no
Tal vez evitarías enfrentarte a las lágrimas, pero la traición puede satisfacerlas por sí mismo. • ¿Te quedas con el niño? Escúchale
quedaría como una mancha en vuestra relación. Aprende más bien a hablar del ausente.
acoger y a compartir los llantos. Acompañan una sana ad- —¿Dónde está papá?— me pregunta Margot (dos años y medio)
ministración de la separación. veinte veces seguidas. Cada vez le contesto:
—En la oficina, cariño. —Al cabo de un momento me doy cuenta
de que contesto de forma mecánica, y entonces le pregunto—:Y tú,
¿Estar en contacto durante la separación? ¿qué crees? ¿dónde está papá?
—Está en su oficina, trabaja con el ordenador, o a lo mejor está
Quince días le parecen cortos a un adulto, pero para un niño de dos con un cliente.
años son una eternidad. De hecho, al plantear la pregunta, no buscaba respuesta. Era su
manera de decirme que estaba evocando la imagen de su padre.
192 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 193

«Estás pensando en papá» habría sido una respuesta más com- En lugar de:
prensiva y adecuada. «Cuando se te pasen las ganas de hacer morros ya vendrás a jugar»
Para no suscitar una emoción indeseable, el entorno a veces evita Sé directo y franco:
mencionar al ausente. Una aplicación excesiva para rodear el tema «Me muero de ganas de jugar a los cochecitos contigo.»
puede parecerle sospechosa al niño. Permite que hable de ello, que
formule lo que siente, lo que se dice.

Las primeras rupturas afectiva*


El reencuentro
El padre y la madre son las personas fundamentales. A continuación
• No esperes que te salte al cuello inmediatamente. viene el resto de la familia, abuelos, tíos y tías. Pero tu hijo también se
Déjale tiempo para procesar la información. Unos minutos aferra a otras personas. Los padres a menudo tienen tendencia a
pueden ser necesarios para asimilar esta nueva realidad: mamá ha desconocer la importancia de las primeras relaciones extrafamiliares.
vuelto. ¡A lo mejor necesita terminar lo que está haciendo! No Si hay alguien que se ocupe del niño, una monitora de guardería o
interpretes este tiempo como un desinterés de su parte. Al contrario. una niñera en casa, a veces es preciso cambiar. La niñera que tienes
Para volver a estar contigo, necesita sentirse entero, acabar de contratada se jubila, la persona que cuidaba de tu hijo ha terminado
guardar las canicas o terminar su dibujo. sus estudios y ha encontrado trabajo, la au-pair regresa a su país...
• Procura no precipitarte sobre él para comértelo a besos. No Avisa al niño en el momento en que te enteres. Haz fotos para
conviertas este momento del reencuentro en un momento de acompañar el recuerdo. Pide a la persona que le hable y que le dé las
inseguridad. En efecto, incluso los besitos pueden infundir inse- razones de su partida. En la medida de lo posible, haz durar las
guridad si no se dan a su ritmo. Abre los brazos, agachado para despedidas.
estar a su altura, y déjale venir hacia ti. Por todo tipo de razones, los amiguitos que uno hace en los
• ¿Es adorable en la guardería e infernal en casa? primeros años de escuela, raramente seguirán siéndolo. Nuestra so-
Acumula todo el día tensiones que no se permite liberar ante ciedad cada vez es más móvil. Los amigos se mudan, se van a otra
gente extraña. Te las reserva porque sabe que tú sabrás contenerlas. provincia, cambian de escuela. Si tu hijo de tres o cuatro años parece
Tú sigues amándole incluso si es un gruñón. no hablar de ello, es más porque no sabe cómo hacerlo que porque no
• ¿Tu hijo te hace mala cara cuando llegas? sienta nada.
¿Acaso te va bien, porque tenías ganas de estar tranquilo y rá-
pidamente te dices «no tiene ganas de estar conmigo», y pasas a
otra cosa? Acabas de perderte un buen momento. ¿Os mudáis?
Tu hijo está enfadado porque tú no estabas allí. Te ha echado de
menos, es su manera de decirlo. Escúchale. Para r'eparar esta Una mudanza también ocasiona una ruptura afectiva. El niño la vivirá
ausencia, quiere comprobar tu amor, tu interés, tu deseo de jugar mucho mejor si posee suficiente seguridad en sí mismo. Si tie-
con él. ¡No le decepciones!
194 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 195

ne poca seguridad interior, perder sus referencias habituales puede


resultar traumático. Acompañar los cambios

• Ayuda a tu hijo a visualizar su futuro, a anticipar. En la medida de 1. El duelo del pasado


lo posible, llévale varias veces a visitar contigo el lugar en el que Las etapas del duelo son: la negación, la cólera, la negocia-
vivirá a partir de ahora. Tú mismo lo necesitas, ¿no? Piensa que se ción, la tristeza y, al final, la aceptación. Deja espacio a cada
una de estas emociones. Acompaña la nostalgia. Revisa fo-
siente menos seguro que tú por el cambio, aunque no se deba
tos del pasado, evoca recuerdos...
preocupar por los aspectos materiales de la mudanza (tal vez,
justamente, a causa de esto). 2. La «cámara de aire»
• Hazle participar al máximo. Entre dos mundos, dos apartamentos, dos épocas de una vi-
Siempre que sea posible, confíale responsabilidades. Con el da, es útil prepararse una «cámara de aire», un espacio pro-
pretexto de evitar a nuestros hijos molestias inútiles o, más pro- pio que permita tomarse tiempo para sentir lo que perma-
saicamente, no estar tropezando con ellos mientras empaquetamos nece constante. La «cámara de aire» permite construir un
las cosas, les alejamos, con lo cual les quitamos algo muy puente entre el pasado y el porvenir, sentir la continuidad de
importante. la vida entre lo viejo y lo nuevo. Se observan las semejanzas
y las diferencias y de qué modo pueden resultar constructi-
Las tareas materiales relativas a una mudanza ayudan al trabajo vas estas diferencias.
de duelo de lo antiguo y preparan para afrontar lo nuevo. En la «cámara de aire», se trata de sentirse vivir en sí, de sentir
Empaquetar las cosas, ordenar, también significa comprobar el la confianza en sí mismo, en los recursos personales propios.
apego que sentimos por los objetos, revisar su historia. Evoca otros cambios que ya se hayan atravesado con éxito.
Cuando el niño es pequeño, puede ocuparse de poner todos sus
muñecos de peluche en una caja. Si es mayor, puede tener la 3. La anticipación
Visualiza el futuro. Imagina lo que será. Proyéctate en el por-
responsabilidad de cerrar todas las cajas, de numerarlas, de escribir
venir y decide lo que quieres.
su contenido en cada una...
Salvo si todavía no sabe andar, no es bueno que cierre los ojos,
que confíe totalmente en ti y se deje llevar. Ayuda a tu hijo a LA LLEGADA DE UN RECIÉN NACIDO
construir sus recursos y a vivir el cambio de forma consciente.
Acompáñale 1) en el duelo del pasado, 2) en la consciencia de sí
Pues sí, resulta una experiencia realmente difícil, que a algunos niños
mismo y de lo que permanece constante en este cambio, 3) en la
les cuesta superar. Mamá está menos disponible, «siempre» está
anticipación mediante la representación de sus actividades futuras
cuidando al bebé. Está cansada, incluso agotada, por culpa de las
en este lugar nuevo.
noches en blanco. El hermano mayor debe esperar para que se ocupen
de él. A veces incluso le riñen a causa de este recién llegado. Y sin
embargo, todavía necesita las atenciones de mamá, se le pide que sea
mayor antes de lo que le toca. De él se esperan todos los esfuerzos,
todas las adaptaciones, bajo el pretexto de que el otro
196 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 197

no es más que un bebé. Y además, le habían dicho que sería un Con el pretexto de no infligir esta angustia a su hijo, Cyrille ha
compañero de juegos. Descubre que no puede jugar, que este bebé decidido no concebir un segundo hijo. ¡Pero ser hijo único no es una
sólo sabe llorar y dormir. Mamá le cubre de besos, recibe un montón panacea! Verse destronado por un hermanito o una herma-nita no es
de regalos... «No es justo». fácil, pero es interesante y fructífero para el futuro. ¿Debemos evitarle
Cuanto mayor es el niño, mejor administra esta irrupción en su la experiencia, o bien ayudarle a atravesarla?
vida. No obstante, esperar mucho entre un hijo y el siguiente presenta Las llamadas a la razón, a la moral, son inútiles e hirientes.
otros inconvenientes. No hay solución ideal. Tener hermanos y Muéstrale que comprendes su angustia. Escucha toda la gama de
hermanas es una dura prueba, que si se supera se convierte en una emociones de tu hijo, acompáñale en este largo trabajo de aceptación.
gran riqueza. Antes que cantarle la lista de las ventajas de tener un hermano o
Ser el hermano mayor no es simple, ser el menor tampoco, y no una hermana, deja que sea él quien haga la lista, sin omitir los
hablemos de la posición intermedia del «mediano». En resumen, inconvenientes.
ninguna posición es confortable, y ninguna de nuestras frases El recién llegado perturbador también puede ser un padrastro, una
tranquilizadoras, y sobre todo «os quiero a todos igual», servirá para hermanastra... Cualquier persona nueva suscita un trastorno en el
cambiar la situación. equilibrio familiar y, en consecuencia, en las emociones. Las
En este libro centrado en las emociones, no evocaré las relaciones recomposiciones familiares no siempre son simples. Tu niño debe
fraternales, el amor y la rivalidad, la imitación y los conflictos, me aceptar a un nuevo papá, una nueva mamá, nuevos hermanastros o
contentaré con subrayar este cambio importante en la vida del niño. hermanastras... No tienen porqué quererse. Has elegido a un nuevo
Debe efectuar el duelo de su posición de último en llegar, aceptar compañero, a una nueva compañera. Vuestros hijos respectivos no se
compartir el tiempo de los padres, y a menudo incluso la habitación y han elegido. No obstante, todo el mundo puede llegar a apreciarse lo
los juguetes. Es la mar de natural, incluso sano, que tu hijo te exprese suficiente como para vivir juntos, siempre que las cosas se digan y las
cólera por haber traído al mundo un nuevo bebé. Este nacimiento emociones de cada uno se entiendan y respeten.
puede constituir para él una amenaza de separación. Puede sentirse
angustiado, abandonado, tener miedo de perder tu amor:
«Mamá quiere otro niño = ¡yo no le basto!» o LAS DISENSIONES EN LA PAREJA
bien
«Soy demasiado mayor, ella prefiere un bebé, ya no me quiere.» ¿Te peleas a menudo con tu cónyuge? ¿El rencor reina en vuestras
Puede temer perderte de verdad: relaciones? ¿Crees que es mejor no decir nada a los niños para no
«No volverá de la clínica.» inquietarles?
(Esta convicción es muy frecuente.Ver cómo vuelve mamá re- Cuidado, no son tontos. Sienten las cosas incluso si has procu-
presenta un alivio inmenso.) rado no discutir jamás delante de ellos (y sobre todo en este caso, pues
Forzosamente dispones de menos tiempo para él, debe aceptar tu cuidado en disimular les subraya hasta qué punto hay un
pasar a segundo plano, está triste.
peligro.Todos sus sentidos están al acecho).
Incluso cuando duermen, una parte de ellos sigue captando lo que
pasa alrededor. Y lo que pasa alimenta sus sueños, sus pesadillas,
198 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 199

sus imágenes mentales inconscientes. Si no son conscientes cuando muchos padres que simplemente prefieren no decir nada... hasta la
reciben estas imágenes y, en consecuencia, son incapaces de nombrar- víspera, incluso hasta el mismo día de la partida. Los hay que aban-
las, sí pueden sentirse perturbados. Cuando se pueden identificar las donan el domicilio sin decir nada. Los argumentos son numerosos:
cosas, se pueden situar a distancia y nos invaden menos. «No quiero que sufran.»
Los niños sufren a causa de las disputas paternas. Sobre todo si «Si les digo que me separo y que todavía me quedo un mes o una
no las comprenden, si sólo ven la superficie, si no penetran en las semana, no entenderán nada.»
causas profundas. Escúchales y habíales. Atrévete a abordar el tema. «Es inútil traumatizarles antes de hora.»
Hazlo con un espíritu de respeto hacia tu cónyuge, aunque estés «Hasta que no esté seguro de haber encontrado otra casa y pueda
enfadado con éste. Sigue siendo su padre, o su madre. irme es inútil hablarles.»
En primer lugar, escucha, sin juzgar, sin tomar partido, sin jus- «No quiero mostrarles mis dudas.»
tificarte o excusar a tu cónyuge, escucha simplemente lo que siente tu «Es una historia de adultos, es inútil mezclar a los niños»...
hijo. El adulto olvida que ha madurado su decisión durante mucho
«¿Qué sientes cuando papá y yo nos peleamos?» tiempo antes de tomarla. Una separación implica una profunda
«Cuando mamá y yo nos enfadamos no es agradable para ti...» transformación de la vida del niño, así que, ¿por qué no puede él
«¿Estás inquieto cuando oyes que nos discutimos? ¿Qué te dices también prepararse para este hecho?
a ti mismo?» «Espero a tomar una decisión», me confía Anne, madre de tres
No te justifiques. Él no es tu juez, es tu hijo. No lleves la con- niños. No quiere alarmarles por nada.
versación hacia ti o hacia tu cónyuge. Permanece centrado en él. Ciertamente, anunciar cambios de rumbo cada tres minutos es
Necesita un espacio para las palabras. Necesita sentirse importante. tóxico. Pero fíjate cuánto tiempo necesitas para tomar una decisión
Escucha sus sentimientos, sus ideas, sus dudas. semejante, para hacerte a la idea de una separación. ¿Y no se la
Responde a sus preguntas cuando sean auténticas preguntas, y no anunciarás hasta que sea seguro? Para ellos todo irá demasiado rápido.
cuando las lance como anzuelos para pescar algún retazo de verdad. Es mejor hablar a los niños lo más pronto posible, incluso de
No le mientas. Sé honesto. Tienes derecho a no saber y a decírselo, nuestras dudas, y sobre todo escucharles. ¿Tememos infundirles in-
pero no a fingir que no sabes. seguridad al evocar nuestras propias incertidumbres? En realidad, la
En definitiva, tranquilízale: si tú no puedes entenderte con su experiencia muestra que verse enfrentado a una decisión de divorcio
padre o su madre no es culpa suya, y tú le querrás siempre. sin haberla visto venir desestabiliza mucho más que poder compartirla
con los padres. Habla con el corazón y tu hijo se sentirá seguro. Verá
EL DIVORCIO que le tienes en cuenta. Le mantienes al corriente. No lo vivirá como
una decisión precipitada e incomprensible. Sufrirá, desde luego, pero
«No puedo imaginarme reunirles a todos o incluso hablarles uno a uno tendrá permiso para sufrir en voz alta, en lugar de ahogar su inquietud
y anunciarles, mirándoles a los ojos: «Pues sí, papá y yo ya no nos en silencio.
entendemos, nos vamos a divorciar.»» En realidad, si no decimos nada a los niños no es para evitarles
Hablar honestamente con los niños de lo que nos pasa, afrontar que sufran, sino para evitar enfrentarse con sus emociones... o
sus miradas, sus reacciones, sus emociones, es tan difícil para
nimÜliliHÉ........
La vida no es un camino de rosas 201
200 El mundo emocional del niño

La verdad sale de la boca de los niños


con sus observaciones (impertinentes. No nos atrevemos a afrontar la
mirada de nuestros hijos, su juicio. Cuando los padres no se entienden, los niños lo saben. Lo huelen,
En lugar de mentir, ¿y si utilizáramos su mirada para no meter la aunque no sepan decirlo con palabras. Aunque los padres procuren
pata? por todos los medios no discutirse delante de los niños, no vale la
Detrás de la duda a menudo se disimula un sentimiento de cul- pena, éstos lo notan.
pabilidad hacia el niño. La creencia en la idea de que un divorcio per- Cécile pensaba separarse de su marido desde hacía un tiempo,
turba gravemente a los niños es tenaz. No se puede negar que es pre- pero no le había dicho nada. Intentó convencerme de que los niños no
ferible vivir con un papá y una mamá que se quieren y que mantienen lo sabían. Le propuse escuchar con más atención lo que éstos decían.
una relación armoniosa. Pero, ¿y cuando ya no se quieren? ¿y cuando Aquella noche, con gran sorpresa suya, su hijo de seis
se pelean, se enfadan, se desprecian o se destruyen? años le pidió:
Numerosos adultos cuentan en la psicoterapia lo mucho que «Dime, mamá, si te divorcias, ¿yo con quién iré?» Afortunadamente,
sufrieron a causa de las disensiones entre sus padres, sus disputas, sus habíamos preparado juntas las respuestas. Ella supo escuchar.
juegos de poder, el sufrimiento que se infligían... y les reprochan no Después de esta conversación, el niño volvió a sacar buenas notas en
haber tenido la valentía de separarse, de haberse sometido ante actos o matemáticas. Entonces Cécile se dio cuenta de la situación. Su hijo
palabras inaceptables, les reprochan esta imagen negativa de la pareja. estaba tan lleno de preguntas sin respuestas que había frenado su
Les ha marcado profundamente, y ha dificultado sus relaciones aprendizaje, sobre todo las divisiones. En efecto, ¿cómo abordar esta
amorosas. operación cuando uno siente de forma confusa que su familia corre el
Cuando se ha intentado todo lo posible para reconciliar a la pareja, riesgo de dividirse?
cuando el amor ya se ha ido, la separación puede ser liberadora para Los niños sienten, pero no se atreven a hablar, pues temen hacer
todo el mundo. La cuestión, pues, no es saber si el divorcio es estallar el secreto, agravar las cosas, incluso acelerar una separación
destructor en sí mismo, sino: «¿Cómo separarse en un clima de efectiva. Lo cual no significa que no necesiten hablar de ello. El
comunicación y respeto mutuo?» Lo que destruye es la imposibilidad adulto es quien debe dar el primer paso.
de hablar o de expresar las emociones, la cólera o la tristeza, el miedo.
Debemos enfrentarnos a la realidad de hoy en día. Los hombres y
las mujeres ya no soportan vivir relaciones alienantes. Si no están ¿La separación es un trauma?
felices juntos, prefieren separarse. En Francia, el quince por ciento de
las familias son monoparentales (porcentaje total de los hogares con Salvo en el caso de violencia hacia él o entre los padres, o de que sea
niños menores), y son hasta el veintitrés por ciento en Gran Bretaña.1 víctima de abusos sexuales, ningún niño desea que sus padres se
separen. Pero es importante comprobar que, cuando sean adultos, les
reprocharán que hayan seguido desgarrándose mutuamente, que
hayan vivido una vida de pareja triste y sin amor, que estén
1. Courrier international n° 431, del 4 al 10 de febrero de 1999, p. 48. deprimidos o que sean desgraciados, mucho más que si se hubieran
separado. Lo que los hijos del divorcio reprochan en ma-
202 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 203

yor medida a sus padres no es la separación en sí misma, sino que no gracia, algunos padres desaparecen para siempre después de una se-
les hayan escuchado, considerado, informado. paración.
La separación puede resultar dolorosa, pero dista mucho de ser El deber más importante que tenemos hacia nuestros hijos, des-
sistemáticamente tóxica. Ciertamente, hay niños que quedan muy pués del de alimentarles y protegerles, es el de ser felices. Si un divor-
perturbados por un divorcio, pero también los hay que se sienten cio puede contribuir, será bienvenido para el niño. Bienvenido no
aliviados porque las cosas están claras por fin. Podrán hablar con los significa fácil. Tómate el tiempo necesario para escuchar sus emocio-
dos, con su padre o con su madre, de este tema, lo cual tal vez no se nes, y para acompañarle en el trabajo de duelo de su familia, y luego
permitían antes. Vuelven a estar sonrientes y libres. en la construcción de nuevos vínculos con su padre y su madre.
Cuando los padres de Sylvia se separaron al fin, ella ya tenía La separación no es traumática per se. El trauma de un divorcio
treinta años. Y sin embargo, el hecho la trastornó. Se desvelaron procede de la imposibilidad de expresar los sentimientos, de la
numerosos secretos. Se abordaron algunos temas que hasta entonces prohibición de la cólera, del miedo, de la tristeza, de la negación de
eran tabú en la familia. Fue consciente de que casi toda su infancia la las emociones.
había vivido en la mentira. En realidad, lo que presentía en la relación No obstante, criar a un niño sola (mayoritariamente son las
entre sus padres era cierto. Nunca había logrado creer en esta fachada mujeres las que se quedan con los niños en las familias monopa-
que ellos presentaban, sentía que no eran felices el uno con el otro,
rentales) es muy duro. Sería bueno reformular el tejido social para
pero nunca se había atrevido a desvelar la realidad. Debido a esta
romper el aislamiento de estas madres.
imagen deformada del amor, se había topado con serias dificultades en
sus aventuras amorosas. La separación de sus padres resultó una
experiencia dolorosa, pero verdaderamente beneficiosa. Después de la Vuestros hijos quieren que estéis felices y serenos
separación, y sobre todo después de haber entrevisto la realidad de sus
A menudo concedemos a nuestros hijos un juicio que no es más que el
padres, pudo liberarse del peso de su pasado y conocer a un hombre
de nuestros padres.
con el que vive hoy en día.
Patricia vivía sola con sus hijos desde hacía años. Nunca había
De pequeña no le habría gustado que sus padres se separaran.Y
aceptado a otro hombre en su vida, pues imaginaba que los niños no
sin embargo, hoy piensa que si su padre se hubiera ido antes, muchas
soportarían que ella quisiera buscar un «sustituto» de su padre. Al fin,
cosas le habrían ido mejor a ella. Sylvia creía que su padre hacía
se atrevió a hablarles y a escucharles, y descubrió con estupefacción
infeliz a su madre, le reprochaba su comportamiento, y le reprochaba a
que, por el contrario, sus hijos (ocho y doce años) tenían muchas
su madre su sumisión y su ausencia de alegría. Verles separadamente
ganas de que ella iniciara una relación amorosa.
le habría permitido establecer relaciones más profundas tanto con su
Paula, que vivía sola con su hijo de dieciséis años, no se atrevía a
padre como con su madre. Su padre se iba con frecuencia de casa,
salir de noche. Temía disgustarle y quería reparar el abandono del pa-
regresaba tarde, no se iba de vacaciones con ellos.
dre. ¡Ella nunca le abandonaría! En realidad, él deseaba verla salir y di-
Paradójicamente, un divorcio puede permitirles a algunos niños
vertirse. No sabía decírselo, pues temía que ella lo interpretara como
descubrir a su padre. Gracias a los días de visita, le ven más tiempo.
un desamor. Cada uno por su parte, al querer proteger al otro, se en-
Hasta entonces, llegaba tarde a casa, se pasaba los fines de semana
cerraba en sí mismo. La agresividad aumentaba entre ellos de forma
durmiendo, o trabajando en informes urgentes. Por des-
proporcional, inexorablemente. Se peleaban... para no expresarse.
204 El mundo emocional del niño La vida no es un camino de rosas 205

¿Se puede sustituir a un padre ausente? ¿Cómo anunciar una separación?

Existe un porcentaje muy elevado, demasiado elevado, de padres que • Tómate tu tiempo y no anuncies de golpe la noticia. Habla de ti, de
ya no ven a sus hijos después de un divorcio. Para no afrontar el dolor, tus sentimientos. Una vez se haya dicho todo, comparte emociones
o su sentimiento de culpabilidad, simplemente intentan borrar el con los niños. No dudes en llorar junto a ellos (sin apoyarte en ellos
pasado. ¡Incluso existen agencias que ayudan a la gente a huir! Les para que te consuelen).
borran del mapa, y todo el mundo acaba considerándoles • No contestes por adelantado a preguntas que los niños no te han
desaparecidos. Se les proporciona una nueva identidad, a menudo en hecho y que, en consecuencia, acaso no se hacen todavía. Déjales
otro país. Pero, ¿qué sienten los niños? que vengan a su ritmo. De ahí la importancia de hablarles desde el
Cada padre o madre es responsable de sí mismo y de la imagen principio.
que da a los niños, de los mensajes que les dirige mediante sus • ¡Escúchales! Sin juzgar, sin justificarte... Escucha sus percepciones,
comportamientos, en mayor medida que mediante sus palabras. lo que sienten, lo que se dicen, lo que imaginan.
Yo no pienso que deba ser la madre quien encarne la imagen del • Acoge y acompaña sus sentimientos de cólera, de miedo, de tris-
padre. Ciertos psicoanalistas han imputado a la madre toda la teza. Se trata de reacciones sanas y útiles.
responsabilidad de la imagen del padre, puesto que la ausencia real del
padre no era, dicen, importante. Lo único significativo era la ausencia
de la imagen del padre en el lenguaje de la madre. ¡Fíjate de qué modo LOS ACCIDENTES, LA ENFERMEDAD, EL
han llegado a racionalizar los padres! ¡Hasta qué punto se han visto SUFRIMIENTO
obligados a inventarse teorías para justificar su ausencia en la casa!
Ciertamente, su posición es confortable, pues al estar ausentes se Aunque somos responsables de nuestra salud a través de nuestro
les idealiza de buena gana, mientras que la presencia en casa expone modo de vida, nuestra alimentación, nuestra capacidad para admi-
de forma inevitable a los conflictos. La ausencia aleja las críticas y los nistrar el estrés y las emociones, no somos todopoderosos. Nadie está
cuestionamientos. protegido contra una enfermedad o un accidente. No siempre
«¡Mi padre era como Dios!» Y luego, en voz baja: «Nunca estaba podemos evitar el dolor a nuestros hijos. El sufrimiento de un niño es
en casa.» Estas palabras hablan claro acerca de la imagen de omnipo- una experiencia muy dura para un adulto. Éste le pide entonces al
tencia que se le había conferido. A Sandrine le cuesta ahora com- niño que se muestre valiente, que se trague las lágrimas... que no
prender de qué modo, entre una madre «santa» que se entregaba en muestre su sufrimiento para no ponerle en un aprieto.
cuerpo y alma, y un padre que era Dios, ella podía ser tan depresiva, Pero negarse a escuchar el llanto y a oír el dolor puede herir al
tan pasiva ante la vida, tan sumisa ante los demás, tan infeliz. niño muy profundamente, y provocar catástrofes en su futuro.
Los niños no necesitan padres idealizados. Necesitan padres de Marcel tiene unos cincuenta años. Está hospitalizado en urgencias
verdad. Aunque la realidad no sea muy atractiva, siempre será más a causa de una peritonitis aguda. La infección ya se estaba incubando
sana para la construcción de su personalidad que una imagen ideal desde hacía semanas, pero él no había notado nada... porque había
distorsionada. En este caso, las emociones necesitan ser oídas. aprendido a no sentir nada desde su primera infancia.
El niño no puede permitirse perderte, y hará todo lo que pue-
206 El mundo emocional del niño

da para aliviarte (de verdad, incluso cuando te vuelve tarumba. En


este caso, éste resulta su único medio de expresión, pero sigue siendo Capítulo 10
para protegerte).
Un niño sólo expresa lo que siente que tiene derecho a expresar.
Incluso puede aprender a dejar de sentir el sufrimiento si percibe que
es más confortable para ti. Se recogerá en su dolor, o se
insensibilizará.
Algunas ideas para vivir más feliz
Abstente, pues, de otorgar valor a la ausencia de lágrimas. Si una con tus hijos
enfermera le pide que se muestre fuerte o le miente dicién-dole que la
inyección no duele, ¡debes intervenir! Dile directamente a tu hijo que
es el único que está en su cuerpo y, en consecuencia, el único que
sabe lo que le duele o no le duele. Puede decirlo y manifestarlo. Del Más allá de tu función de padre o madre, eres una persona. El niño
mismo modo, si un visitante, ya sea un amigo, tu suegra o tu propio también es una persona. Tú tienes necesidades, y el niño también. El
padre, le dice: conflicto de necesidades puede engendrar una competición, a menudo
«Eres un chico mayor»... inconsciente, pero en cualquier caso malsana, entre el padre y el hijo.
Replica: «No tiene porqué cargar con las dificultades que tienen Las páginas que siguen te presentan algunas ideas importantes y
los adultos para administrar sus afectos; es importante que llore y se
herramientas concretas para ayudarte a evitar los juegos de poder y
queje si tiene daño.»
ser aún más tú mismo.
Si recibes sus lágrimas, si te mantienes atento a su lamento, tu
hijo se sentirá oído, comprendido, acompañado. Y cuando uno se
siente apoyado de este modo, es más fácil soportar el dolor. SÉ FELIZ
Si le hospitalizan y tú no estás allí, explícale que las otras per-
sonas no saben comportarse muy bien frente al sufrimiento, y que por Los niños aprecian una cierta rutina en la vida cotidiana, pues en ella
esta razón valoran la ausencia de emociones. Enséñale a replicar: «El encuentran sus referencias. Pero cuando sus padres viven sumisos y
enfermo soy yo, es mi cuerpo, soy yo quien siente lo que duele y lo no felices la rutina del «metro, trabajo, tele y a la cama», les miran y
que no, y tengo derecho a sentir dolor y a decirlo.» se plantean interrogantes. ¿Por qué crecer, trabajar en la escuela y ser
Ayuda a tu hijo a llorar, a gemir, incluso a gritar si tiene mucho un día adulto? ¿para terminar entrando en semejante sistema
dolor. Tal vez molestará a los médicos y a las enfermeras, pero para ti alienante? Somos modelos para nuestros hijos.
es más importante que ellos. Es inútil que te sacrifiques por ellos, tu felicidad es uno de los
elementos fundamentales de su pleno desarrollo. Porque da ganas de
crecer y les libera de la carga de hacerte feliz. Además, un padre feliz
está más disponible afectivamente para su hijo.
Las necesidades del recién nacido son prioritarias, es cierto.
208 El mundo emocional del niño Algunas ideas para vivir más feliz con sus hijos 209

Pero más allá de esta prioridad, tu sacrificio será un auténtico veneno dad lo que le dolía, Mireille acabó pensando que la responsable era
para él. Sin duda acabarás reprochándoselo. Estarás cansa-do(a), te ella. En su confusión, imaginaba que sobraba, e intentaba justificar su
faltará espacio, y cada vez te costará más dárselo a él. Descansar, presencia pidiendo lo menos posible y haciendo reír.
recargar las pilas, ver a tus amigos, hacer deporte, salir, cuidarte lo Mireille se controlaba permanentemente para no tener demasiadas
suficiente son cosas necesarias para no sentirte exasperado (a) a la necesidades, disimulaba sus emociones bajo una sonrisa permanente.
menor pega.
Había cargado con la misión imposible de hacer feliz a su mamá. Ha
El sacrificio es más bien una tentación femenina. Pero también conservado la sonrisa toda su vida, fueran cuales fueran las
hay hombres que sacrifican su vida por la idea que se forman acerca circunstancias. Siempre alegre, nada parecía afectarle, perpetuamente
de las necesidades de sus hijos. El sacrificio raramente es gratuito, el
al servicio del prójimo; sistemáticamente, atendía a las necesidades de
padre espera que se le pague... y el niño descubre desesperado que era
los demás antes que a las suyas. Su vida se ha guiado por sus
un trato, y no un don.
convicciones: «No tengo necesidades, no tengo derecho a tener una
Para no sentir la frustración subyacente al sacrificio, muchas vida propia» y «un niño es una carga».
mujeres utilizan la técnica de la sobrecompensación. Olvidan, no Mireille se realiza profesionalmente en un oficio de servicio al
escuchan sus necesidades o emociones y se centran enteramente en sus
prójimo, como resulta obvio, y le ha costado lo suyo mantener una
hijos. Miman a los pequeños, les protegen en exceso, se muestran
relación estable y armoniosa con un hombre. A los cuarenta y ocho
hiperatentas e indispensables, preparadas para darlo todo, para
años, no ha tenido hijos.
satisfacer el menor deseo... prohibiendo así al niño no sólo toda
¿Cómo podemos evitar cargar a nuestros hijos con nuestras di-
autonomía, sino también su cólera. Esta cólera que ellas se reprimen a
ficultades para vivir? Disimularlas es inútil, el niño lo siente. Lo
sí mismas con tanta fuerza. De este modo alimentan en él una intensa
primero es hablar honestamente con él. Si la madre de Mireille hu-
rabia inconsciente, que no explotará hasta más tarde, o que se volverá
biera compartido con ella las razones por las que estaba tan triste,
contra él mismo.
Mireille no se habría sentido culpable. No se habría lanzado en esta
Vive tu vida, en lugar de vivir por delegación a través de tus
hijos. misión peligrosa e imposible de intentar curar a su madre, ella
también habría tenido derecho a tener necesidades.
Hasta que intervino Francoise Dolto, la idea comúnmente ad-
El niño intenta aliviar a su padre mitida era que no se debía decir nada a los niños para no inquietarles.
No tenían edad para comprender las cosas de los mayores. No era de
Cuando uno de los padres está deprimido, angustiado, infeliz, lo
su incumbencia... Hoy sabemos que los niños lo pueden entender todo
muestre o no, el niño lo siente e intenta aliviarlo.
por poco que se les explique. Hablarles les tranquiliza porque les
Mireille fue una niña adorable y sin problemas. Siempre sonreía y
permite nombrar con palabras sus impresiones. Les ayuda a
pronunciaba la palabra justa para hacer reír. Era divertida, hacía una
considerarse personas separadas de sus padres y, en consecuencia, a
gracia tras otra, un auténtico payaso. En apariencia, pues, la infancia
no cargar con ellos.
de Mireille fue feliz. En realidad, Mireille nunca sintió que tuviera el
Debemos saber que nuestros hijos o nuestros nietos cargarán con
derecho a ser ella misma. Su madre era depresiva. Ella sentía su
todos los problemas que nos negamos a afrontar. ¿Es esto lo que
infelicidad. Además, dado que mamá nunca decía de ver-
queremos para ellos?
210 El mundo emocional del niño Algunas ideas para vivir más feliz con tus hijos 211

Timidez excesiva, falta de confianza en sí mismo, vergüenzas, sientes por todos los que te rodean y por tus hijos, para notar que
sentimientos de culpabilidad, angustias, malas relaciones en la pareja, avanzas sobre tu camino, que eres feliz con la vida que llevas. ¿No
fracasos profesionales, no están programados genéticamente y, sin eres feliz en tu vida? El cáncer, un infarto o una depresión no aliviarán
embargo, se transmiten, a veces saltándose una generación. a tus hijos.
¿Cómo va tu pareja? ¿Cómo te realizas en tu trabajo? ¿Tu vida Adopta medidas para cambiar, solicita ayuda, y comunica con tus
tiene sentido? hijos.
No entierres estas cuestiones, so pena de ver más tarde cómo tus
hijos se debaten con ellas.
Estás pasando un período económico difícil, estás en el paro, bajo ESCUCHA
amenaza de despido, o mantienes una relación difícil con tu jefe...
habla de ello. Sin mostrarte excesivamente alarmista, comparte tus «¡Escuchar, escuchar!, ¡ya me gustaría escuchar, pero no me dice
vivencias, tus sentimientos, a fin de aliviar el peso que llevan los nada!»
niños. ¡Cuántas veces he oído esta letanía desesperada en la boca de
Los secretos siempre son tóxicos. ¿Tu hijo no es de su padre? padres desengañados. La cuestión es que no basta abrir el corazón y
Díselo. ¿Te violaron a los diecisiete años? Díselo. ¿Estás en la ruina? las orejas para que el niño hable.
Díselo. ¿Has estado en la cárcel? Díselo. ¿Nunca lograste aprobar el Para entregarse, necesita tener la certeza de que se le oirá y se le
bachillerato? Díselo. ¿Tu padre te pegaba? Díselo. aceptará sin juzgar sus sentimientos. Ahora bien, confesémoslo, a
Habíale también de todo aquello que haya sido bonito, pero no veces es difícil contentarse con oír un problema sin tomar partido, dar
evites los episodios sombríos de tu vida. Si te los callas, incons- soluciones o nuestra opinión, escuchar una emoción sin intentar
cientemente quedará marcado. Te sorprenderá verle pasar por las tranquilizar, infundir seguridad, reparar.
mismas experiencias que tú, sufrir una violación a la misma edad (o Las órdenes varias, amenazas, sermones, lecciones, consejos,
relacionarse con una mujer a la que hayan violado, o violar él mismo a críticas, humillaciones o culpabilizaciones, pero también los halagos,
una chica), arruinarse, estar a punto de ir a la cárcel, fracasar en sus la reiteración de frases tranquilizadoras o las diversiones, deben
estudios, hacer tonterías hasta exasperarte y provocar tus golpes... proscribirse. Todo lo que entiende al final el niño es que sus
Este proceso de repetición tiene la función de permitirle sentir emociones no son bienvenidas y que tú crees que es incapaz de salir
desde dentro lo que tú has pasado, para comprenderte y encontrar otra airoso él solo de sus aventuras.
salida al mismo problema. Si expresas de forma simple tus Cada vez que solucionamos un problema en su lugar, le robamos
emociones, nombrando con palabras lo que has vivido, puedes una posibilidad de desarrollar su autonomía. Cada vez que le
liberarle de este peso. explicamos algo que ya sabe, se siente humillado, disminuido.
Otra cosa... procura entrar en contacto con la parte alegre de ti Escuchar consiste en erigirse en eco de la emoción, para que el
mismo. Respira, siente la vida que hay en ti, recuérdate la simple niño se sienta aceptado tal como es y se oiga en profundidad. No se
alegría de vivir. No te dejes invadir por la vida cotidiana y su lote de trata tanto de escuchar las palabras que pronuncia como de oír su eco
dificultades. Tómate tu tiempo para sentir el amor que afectivo.
¿Te cuenta un altercado con un amigo o un profesor? ¿Relata
212 El mundo emocional del niño Algunas ideas para vivir más feliz con tus hijos 213

un fracaso o anticipa una dificultad? ¿Se queja de su padre o de su Respira profundamente (por la nariz), imaginando que inspiras el
hermano? ¡Escucha las emociones, y no los hechos! aire hasta la pelvis, hasta el coxis.
No intentes solucionar el problema, sino ayudar a tu hijo a ex-
presar lo que él siente. Acoge sus emociones, como si fueras un
Escucha con tu cuerpo cuenco que acoge agua.
Sé un contenedor de sus afectos, sin interrumpirlos. Ayúdale a
Todos llevamos nuestras vivencias interiores en nuestra postura física. derramarse en ti.Y a cambio, envíale sólo ternura, ni miedo, ni cólera,
Si te colocas en una postura semejante a la del niño, te pones a su ni tristeza por él... ternura, para darle solidez, la confianza necesaria
alcance y escuchas mucho mejor. para afrontar su dificultad.
Haz el experimento, instálate bien hacia atrás, en tu silla, con las Ayúdale a precisar su vivencia con la ayuda de los siguientes
piernas separadas y los brazos balanceándose: así no puedes sentir términos.
miedo. Algunas posiciones imposibilitan simplemente las emociones.
Tu cuerpo envía mensajes inconscientes al niño. ¿Cómo puede confiar
en tu capacidad para comprenderle, si estás confortablemente hundido Palabras que puedes utilizar
en tu butaca mientras él te confía su timidez ante una amiga? En ese
momento no puedes estar en contacto con su sentimiento, Es duro para ti... Es
psicológicamente es imposible. En consecuencia, él sabe que no le difícil...
escuchas «de verdad». Escuchas las palabras, pero no sus vivencias. Veo que... (estás triste, hoy no estás muy bien...)
Imagino que...
Comprendo que debes sufrir por... Estás... (triste, enfadado,
Escucha con el corazón inquieto...) Te entristece la idea de... (no volver a ver la casa...) Tienes
ganas de... (vengarte, no verle nunca más, llamarle por teléfono...)
Atrévete a dejar que el eco de sus vivencias resuene en ti. Te gusta(n)... (la música, los pájaros, los animales...)
Es inútil ponerte a llorar tú también. No se trata de dejarse
contagiar por sus emociones. Tu niño necesita tu compasión, necesita
que sientas lo que siente, que comprendas lo que vive, no con tu Para ayudarle a ir un poco más lejos
cabeza, sino en tu corazón, pero no necesita que te hundas con él. Aún plantéale también preguntas abiertas
peor, si lloras, parará para no herirte.
Atención, si tu infancia te ha dejado un gusto amargo, si un buen Prescinde del «¿por qué?», que puede vivirse como una culpabili-
montón de emociones del pasado sigue estando sin expresar, estos zación y que apela a la reflexión más que al sentimiento que nos
afectos antiguos y reprimidos podrían mezclarse con estas nuevas interesa, e intenta preguntar en términos de «qué...», «cómo» o «de
sensaciones y formar nudos. Identifica y aparta tus propios qué». Haz el experimento, y verás la diferencia.
sentimientos de niño, ya te ocuparás de ellos en otro momento.
214 El mundo emocional del niño Algunas ideas para vivir más feliz con tus hijos 215

¿Qué podemos hacer?


¿Qué pasa? ¿Qué notas...? ¿Qué
sientes cuando...? ¿Qué ¿Cómo puedo ayudarte?
experimentaste cuando...? ¿Qué
pensaste cuando...?
COMUNICA CON EL CUERPO, EL CORAZÓN, LA
¿Qué te entristece más? ¿Qué te irrita más? (cuando esta emoción
CABEZA, Y DE PERSONA A PERSONA
es manifiesta)
¿Qué echas más de menos?
¿Qué te preocupa más?
Caricias, besos
¿Qué piensas... (de la actitud de esta persona, de este compor-
tamiento...)? Y masajes, cosquillas, peleas, carreras y persecuciones a ver quien se
¿Cómo sientes (este acontecimiento, feliz o desgraciado)? pilla... son contactos irreemplazables para decir «te quiero», «te
¿Cómo estás viviendo... (esta situación)?
acepto tal como eres», y ayudar al niño a construir un sentimiento
¿Cómo entiendes esto? (esta dificultad)
profundo de confianza en su cuerpo y en él, siempre, desde luego, que
¿Qué te imaginas?
respetes los límites que te ponga. Interrumpe de inmediato las
¿De qué tienes miedo?
cosquillas o los besos cuando el niño te pida que pares.
¿Qué es lo que te da más miedo?
Es muy tentador hacer cosquillas o besuquear a un niño... ¿pero
¿Qué necesitas?
lo hacemos para nuestro placer o para su bienestar? Si nuestro placer
Cuando tu hijo te haya confiado suficientes elementos, puedes coincide con el suyo, todo va bien, pero en caso contrario, ¡detente! El
intentar una reformulación completa (cuidado, no se trata de una adulto no tiene ningún derecho a utilizar el cuerpo del niño para su
interpretación surgida de quién sabe dónde, sino de la reformulación placer personal, y es fundamental que el niño sepa que su cuerpo es
de lo que te ha dicho). suyo y que se respetarán sus límites.
Cuando... tú te sientes... porque...
Veamos dos ejemplos de este tipo de frase:
«Cuando preguntas algo y tu profesor te dice que eres un inútil, te Soñad juntos
enfadas porque necesitas que te ayude a comprender.»
«Cuando tu hermana recibe en casa a sus amigas, te sientes solo y Tu hija se detiene extasiada ante un soberbio vestido de novia; en
triste porque te recuerda que tu mejor amigo se ha mudado.» lugar de «devolverla a este mundo», vete con ella hasta el país del
Hasta que no se haya hablado largamente de la situación y no se sueño... Imagina:
hayan expresado todas las emociones, no puedes llegar a: «Llevaré flores en el pelo, hará sol y estará lleno de gente... tú
¿Qué solución imaginas? te pondrás este vestido, comeremos canapés...»
¿Qué puedes hacer? Tu hijo sueña con un coche eléctrico, pues sueña con él: «Te
¿Qué puedo hacer yo? encanta conducir, ¿eh?.Ya te imagino en el jardín, brrrum,
brrrum, ¡será estupendo!»
216 El mundo emocional del niño Algunas ideas para vivir más feliz con tus hijos 217

Los deseos siempre pueden hablarse, expresarse, apoyan la vida Habla de todo
imaginaria.
Escucha sus sueños y comparte los tuyos. Los niños son más inteligentes de lo que creemos, nos sorprenden por
la pertinencia y sensatez de sus observaciones y, sin embargo, les
disimulamos muchas cosas bajo el pretexto de que no tienen la edad
Habla de tus sentimientos necesaria.
Con la ayuda de la televisión, hoy en día están mejor informados
Habla de lo que sientes en tu vida cotidiana. ¿Tienes un sentimiento que nosotros a su edad. Es importante tener en cuenta este dato y no
de injusticia en el trabajo? ¿Una frustración después de llamar a tu dudar en profundizar en los temas, de modo que las informaciones
madre? ¿Una emoción de rebelión porque uno de tus amigos, demasiado superficiales no den lugar a interpretaciones más o menos
demasiado joven para morir, acaba de fallecer? ¿Celos hacia un extravagantes.
colega? Comparte tus emociones con tus hijos. Se sentirán más cerca
de ti y más seguros de sí mismos.
Comunica de alma a alma

Evoca tu infancia No olvides ver a veces en tus hijos algo más que a tus hijos. Son
enteramente personas, con una existencia propia y un destino propio.
Pero no para culpabilizarles con frases del estilo «en mi época no Les has conocido en esta vida, incluso tienes una misión, una función
teníamos todo esto y vivíamos bien», sino para permitirles conocerte en relación con ellos, pero tienen su individualidad.
mejor, y de este modo encontrar sus raíces. Habla de hechos,
anécdotas, acontecimientos, comportamientos de unos y otros, pero «Tus hijos no son tus hijos.
sobre todo de tu vida interior, de lo que sientes, de lo que te dices, de Son los hijos y las hijas
lo que imaginas. De la llamada que se hace a sí misma la Vida
Cuando Eric supo que su padre también sacaba malas notas en el Vienen a través de ti, pero no de ti
cole, y sobre todo porqué razones este último no lograba aprender (su Y, aunque estén contigo,
propio padre le pegaba y le despreciaba mucho), pudo sentirse más No te pertenecen.»
seguro y sus notas subieron.Y por cierto, ante la gran sorpresa de su
padre, que tenía la impresión de haberlo probado todo para KHALIL GIBRAN, El profeta
motivarle...
Todo lo que no hayas resuelto, tus hijos lo afrontarán de una u
otra manera. SIENTE LA FELICIDAD DE SER PADRE

Rodéate de fotos y de dibujos para mantener el recuerdo de tu amor


por ellos, para despertar tu ternura adormecida cuando man-
218 El mundo emocional del niño

chan el sofá, se niegan a quitar la mesa o sacan malas notas en la


escuela.
Atrapados por las tareas cotidianas, la colada, la casa, la cocina,
las obligaciones., a veces olvidamos que somos felices porque vivimos
juntos. Todos los padres lo dicen, la infancia pasa rápidamente,
demasiado de prisa. ¡No faltemos a la cita!
Más tarde ya habrá tiempo para lustrar la casa, cuando se hayan
ido y cuando las cuatro paredes nos parezcan vacías, sin gritos ni
CONCLUSIÓN
risas...
Las emociones no son peligrosas. No sólo son la sal de la
existencia, sino su propia esencia. Cada vez que acallas tu corazón o
el de tu hijo, cada vez que dudas es si confiar en tu voz interior, cada
vez que no escuchas lo que intenta decirte tu hijo, limitas tu propia
vida y la suya.
El fin está en los medios, decía el Mahatma Gandhi. Escuchemos
a nuestros hijos para que sepan escuchar. Respetémosles, sabrán
respetar al prójimo. Aceptemos sentir y liberar nuestras propias
emociones, dejaremos de proyectarles nuestros sufrimientos y
sabremos aceptar sus lágrimas. Acompañémosles en el camino hacia
ellos mismos, siguiendo las etapas de su crecimiento. Ayudémosles a
expresar lo que llevan dentro, a tener conciencia de su identidad,
confianza en sus capacidades, en sus gustos, deseos y necesidades…
En una palabra, ayudémosles a sentir, nombrar y utilizar sus
emociones.
Preocuparse de las emociones es algo muy nuevo. Respetar a los
niños y considerarlos como personas también es algo muy nuevo. No
nos sintamos culpables si no lo logramos siempre.
Debemos modificar nuestras estructuras sociales para dar
mayores medios y más apoyo a los padres.

También podría gustarte