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Facebook debería seguir tratando de redefinir la privacidad,

no al revés
Por Hiram Enríquez (14 de marzo, 2019)

Nota del editor: Hiram Enríquez es estratega de medios digitales, periodista, ejecutivo y emprendedor. Ha
trabajado para empresas como Yahoo!!, Sony, MTV y USA TODAY Network. Fundador de Content Mist. Se
interesa por temas de innovación y transformación digital de la industria mediática y las comunicaciones.
Fue presentador del programa Zona Digital en CNN en español. Síguelo en redes sociales como
@DigitalHiram.

(CNN Español) — El fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, presentó una nueva visión para la
plataforma (y para las redes sociales en general) enfocada nada más y nada menos que en la privacidad.
El escepticismo ante la propuesta se hizo palpable inmediatamente, y el propio Zuckerberg lo adelantó
en su texto como algo que sería una reacción natural ante los escándalos en que se ha visto la empresa
en los últimos años, con problemas que van desde la influencia de actores externos en las elecciones de
EE.UU. hasta violaciones a la seguridad de los datos personales de sus usuarios.

No por ir contra la corriente, pero mi reacción inicial ante el anuncio, más que escepticismo me trajo un
componente de decepción. En esencia, Facebook es una compañía que ha revolucionado muchos
aspectos de la sociedad y los negocios sobre la base de contar con que la gente tiene un deseo inherente
de compartir su vida, en muchos casos a un ritmo mayor de lo que los demás quieren saber. Por eso me
remití a hacer un contraste con el emprendedor desafiante que creó una crisis de relaciones públicas
cuando en 2010 le dijo a Timé: “La forma en que la gente entiende la privacidad está cambiando un
poco… lo que la gente quiere no es completa privacidad. No quieren secreto. Lo que quieren es control
sobre lo que comparten y lo que no comparten”.

Quizás un movimiento para redefinir la privacidad puede resultar escandaloso, pero lo cierto es que es
necesario reacomodar ciertos conceptos y principios para que reflejen las nuevas realidades de un
mundo en donde las personas están cada vez más interconectadas entre sí que con los centros
tradicionales de poder y control.
Un examen más exhaustivo de la nota de Zuckerberg me hace pensar que esta nueva visión puede estar
alineada con la inspiración original. Además de referirse a aspectos técnicos y de seguridad, hace
énfasis en las interacciones privadas entre los usuarios de sus múltiples servicios. El texto reconoce que
“mucha gente prefiere la intimidad de las comunicaciones de persona a persona o con un grupo
limitado de amigos.” Esto es algo que confirman varios estudios internos de audiencia hechos por
empresas de medios masivos con las que he trabajado en los últimos años: los círculos de confianza se
han estrechado, y hay ciertos temas en los que preferimos compartir en ambientes seguros, donde no
estemos expuestos a potenciales reacciones negativas de una turba digital.

Sin embargo, cuando Facebook habla de potenciar esas conexiones privadas, salta a la vista un
elemento de tensión entre ese deseo y la realidad de su modelo de negocio basado en la recolección de
datos y percepciones sobre los usuarios. Éstos le posibilitan a la plataforma ofrecer a sus anunciantes el
acceso a audiencias específicamente inclinadas a comprar un producto o servicio, o a ejecutar
determinadas acciones. Queda por ver cómo se reconcilian ambas cosas, si no es algo que implique
continuar expandiendo las “escuchas” en esos círculos de comunicaciones privadas: piensa en que te
escribes con tus amigos sobre Cancún en Messenger e inmediatamente todos empiezan a recibir ofertas
de vuelos y hoteles.

¿El fin del mundo? No creo. En general, el agregado de nuestros datos y hábitos digitales conduce a que
tengamos mejores experiencias en múltiples productos digitales. En este punto me toca confesar que,
como usuario, la publicidad personalizada me parece una conveniencia de la vida moderna más que un
problema, y que a veces hasta hago clic en contenidos y anuncios sólo para recordarle al algoritmo que
en algún momento en el futuro podría interesarme.

Como profesional en el mundo de los medios, veo que es extremadamente necesario resolver esa
tensión para avanzar hacia nuevos modelos que puedan realmente servir de alternativa a los de la
maltrecha publicidad tradicional. Reconozcamos que seguir tratando a la audiencia como masa (aún en
los ambientes digitales) es, en el mejor de los casos, una actitud ingenua.

Facebook y Google controlan más de la mitad del mercado de publicidad digital en EE.UU., en algo que
la industria ha llamado un “duopolio” y al que ahora Amazon le pisa los talones. Como dicta la lógica de
los superhéroes, el poder viene acompañado de responsabilidades. Mientras la gente siga necesitando
productos y servicios, y las empresas los provean, la ecuación tiene que ajustarse y en este caso la
intención de Mark Zuckerberg de redefinir la privacidad en lugar de adaptarse a las normas
tradicionales, parecía un camino más lógico.

Sin embargo, tampoco se puede dejar atrás al otro “superhéroe” de la historia: el consumidor
interconectado, quien ahora goza de un nuevo poder, pero también tiene nuevas responsabilidades. En
su nota, Zuckerberg hace referencia a la importancia de conectar en el contexto público con otras
gentes, ideas y contenidos. El foco en los círculos más cerrados podría ir en contra de ese objetivo si
cada quien tiende a encerrarse más en su propia burbuja. Este es el caldo de cultivo de las teorías
conspirativas y la información falsa, lo cual dice más de la actitud de los usuarios que de la capacidad de
los algoritmos.

Es por eso que cualquier estrategia, además de regular, necesitaría un fuerte componente educativo,
consistente con la intención de darle mayor control al individuo. Una seguidora de Zuckerberg lo pone
de forma colorida en uno de los comentarios más populares en la nota. Dice Tracy Johnson: “No me
importa si un anuncio me dice por quién votar (lo ignoraré como ignoro toda la publicidad sobre
pantalones de yoga y ropa interior y fajas), pero podrías dejarme ver las publicaciones de todos mis
amigos en el orden en que las publican. No puedes seleccionar mis amigos, no eres mi madre”.

Con tantas cosas aún por definir, lo interesante es que al parecer vamos a ser espectadores del proceso.
La nota promete transparencia y colaboración. Después de todo, compartir es parte del ADN de
Facebook, ¿o no?

Referencias
Enríquez H. (2019). Facebook debería seguir tratando de redefinir la privacidad, no al revés. Marzo 16,
2019, de CNN Sitio web: https://cnnespanol.cnn.com/2019/03/14/facebook-deberia-seguir-tratando-
de-redefinir-la-privacidad-no-al-reves/
Plataformas tecnológicas: Dejen de dar lugar a quienes se
oponen a las vacunas
Por Megan García (4 de marzo, 2019)

Nota del editor: Megan García es una investigadora sénior de New América y directora de crecimiento
para la Red Nacional de New América, especializada en inteligencia artificial y ética, ciberseguridad e
innovación. Las opiniones expresadas en este artículo son propias de la autora.

(CNN) — Los grupos contra las vacunas con nombres sutiles como Centro Nacional de Información
sobre Vacunas y menos sutiles como Ira Contra las Vacunas, han usado por décadas investigaciones
desmentidas para alimentar los miedos de los padres sobre la vacuna contra el sarampión, paperas y
rubeola, y generado el aumento de los niños no vacunados en Estados Unidos.

En consecuencia, los estados de Washington, Texas y Nueva York han sufrido brotes de sarampión y allí
deben luchar para mantener a raya la enfermedad .Jay Inslee, el gobernador de Washington, donde el
7,9% de los niños de edad preescolar no están vacunados, declaró el estado de emergencia en enero y
se refirió a la debacle como a un “riesgo extremo de salud pública”.

El debate continuo y cada vez más contencioso sobre si las empresas tecnológicas tienen la
responsabilidad de moderar el contenido dañino toma una nueva dimensión al enfrentarse a una
emergencia urgente de salud pública nacional e internacional. La pregunta que deberíamos plantearnos
en este caso es si las empresas tecnológicas son responsables de moderar su contenido cuando existe
un riesgo para la salud pública.

Este mes, varias empresas tecnológicas grandes han implícita y correctamente respondido que sí.
Todas las empresas en cuestión deberían sumarse a esta respuesta afirmativa y explorar dos métodos
posibles de ocuparse de la información errónea en sus plataformas. The Guardian desató una
vehemente actividad en torno a las vacunas con una investigación sobre cómo es calificado y difundido
en línea el contenido anti vacunación. The Guardian halló que una búsqueda neutral de la palabra
“vaccine” (“vacuna”, en inglés) por un nuevo usuario sin amigos ni clics en “me gusta”, arrojó un
abrumador contenido contra las vacunas, no respaldado por la ciencia, tanto en Facebook como en
YouTube.
Los algoritmos de ambas empresas orientan a los usuarios hacia páginas y videos contra la vacunación,
incluso cuando los usuarios inicialmente consumen recursos médicos reconocidos, como un video
subido por la Mayo Clinic sobre la vacuna triple viral SRP (MMR, en inglés).

Después del frenesí inicial de la prensa sobre la información en The Guardian, Facebook, YouTube -
propiedad de Google- y otras plataformas emitieron respuestas que se ubican en el espectro que va
desde una prohibición total del contenido (Pinterest) hasta modestas medidas para tratar la
información no científica sobre las vacunas (YouTube) a mantenerse a flote mientras examinan el tema
(Facebook).

Adam Schiff, representante demócrata por California, les envió una carta a principios de febrero a
Facebook y Google expresando su preocupación de que las empresas estén “resaltando y
recomendando” contenido contra las vacunas. Cuando Amazon debió responder a CNN sobre la
prevalencia del contenido contra las vacunas, refirió a los reporteros a su página de pautas, donde dice
que les brinda a los clientes una “variedad de puntos de vista” pero se reserva el derecho a “no vender
cierto contenido, como pornografía y otro contenido inapropiado”.

Una búsqueda reciente en Amazon de “vaccine” arrojó resultados dominados por el contenido anti
vacunación. Parte de lo que ha provocado esta reacción de la prensa, de las empresas tecnológicas y de
legisladores es el rápido aumento reciente de múltiples brotes de enfermedades prevenibles como el
ocurrido en el estado de Washington. Después de un aumento mundial del 30% de los casos de
sarampión, la Organización Mundial de la Salud tomó una medida extraordinaria al incluir “la
indecisión vacunatoria” en su lista de las 10 máximas amenazas a la salud mundial en el 2019.

Washington es uno de los muchos estados en los que hay brotes, donde los padres tienen permitido no
vacunar a sus hijos por una objeción personal o filosófica. Ha habido brotes similares en varios estados
por la difusión en línea de contenido que vincula las vacunas al autismo, si bien los Centros de Control y
Prevención de Enfermedades de EE.UU. e incontables autoridades médicas lo refutaron por completo.

Las grandes empresas tecnológicas históricamente han dicho no ser responsables por el impacto de la
información en línea, ya sea por la existencia de las leyes de libertad de expresión, porque
correctamente se preocupan del callejón sin salida de moderar cierto contenido peligroso podría
conllevar la responsabilidad de moderar mucho más, o porque han sido duramente criticadas por
prohibir contenido considerado político. Pero en años recientes, comenzaron a trabajar para combatir
la diseminación de contenido considerado nocivo, como la propaganda terrorista y la pornografía
infantil. Hay dos métodos que podrían usar las grandes empresas tecnológicas —algunas ya aplicadas a
otros temas— para responder a las crisis de salud pública.

La primera está tomada de Tech Against Terrorism, una colaboración entre las Naciones Unidas y las
empresas tecnológicas que optan participar en el proyecto. Este esfuerzo lanzado en 2017 es una forma
de que tanto las grandes empresas como las más pequeñas puedan compartir las mejores prácticas y
operar con cierto grado de información compartida sobre los esfuerzos internos por remover el
contenido que apoya los ideales terroristas. En el caso de la salud pública, la OMS podría liderar un
esfuerzo internacional similar para compartir prácticas que las empresas usan para extirpar
información desmentida de salud de las plataformas en línea.

La segunda opción es que cada empresa modere su propio contenido y cree mecanismos claros para
advertir a los usuarios cuando hallan contenido no científico que potencialmente podría ser dañino.
Facebook y otras empresas ya usan una versión más extrema de este método para encontrar y remover
propaganda terrorista de sus sitios. Los impresionantes esfuerzos combinan el uso de la inteligencia
artificial con verificadores humanos para hallar publicaciones que apoyan el terrorismo y removerlas,
en promedio, 18 horas después de que son posteadas.

Un programa similar, aunque mucho más pequeño, sobre información errónea de salud no requeriría
necesariamente sacar el contenido, la práctica usada para el contenido terrorista y la pornografía
infantil, ni la tan temida clasificación más baja. Una opción intermedia sería usar prácticas similares de
inteligencia artificial y personal verificador, pero etiquetar el contenido sospechoso no científico de un
modo similar a lo que se hace con los programas dañinos. Cuando los usuarios buscaran información
sobre las vacunas y surgieran sitios sospechosos, verían una gran etiqueta de advertencia.

Las agencias de inteligencia trabajaron mucho para convencer a las grandes empresas tecnológicas, en
particular a Facebook y a YouTube, de que el contenido en sus sitios era un elemento clave de
reclutamiento de ISIS y de otros grupos terroristas, y las empresas respondieron adecuadamente. En
este caso, la información no científica está causando una crisis de salud pública que daña
principalmente a los niños. Las empresas tecnológicas tienen una que asumir su responsabilidad. La
única cuestión es cómo hacerlo.

Referencias

 García M. (2019). Plataformas tecnológicas: Dejen de dar lugar a quienes se oponen a las
vacunas. Marzo 16, 2019, de CNN Sitio web:
https://cnnespanol.cnn.com/2019/03/04/plataformas-tecnologicas-dejen-de-dar-lugar-a-
quienes-se-oponen-a-las-vacunas/
China pone multimillonaria multa a una compañía por
vacunas defectuosas
Por Ben Westcott (19 de octubre, 2018)

(CNN) — Un fabricante chino que lanzó cientos de miles de vacunas defectuosas, incluyendo una gran
cantidad para ser usadas en niños, fue multado con 1.320 millones de dólares por el gobierno de ese
país.

Las noticias alrededor de las vacunas defectuosas provocaron un escándalo en China a principios de
este año, incluyendo protestas inusuales alrededor de edificios del gobierno, mientras los padres se
preguntan cómo pueden confiar en las autoridades para proteger a esos niños.

Las autoridades descubrieron un lote de cientos de miles de vacunas defectuosas.

La prensa estatal china dijo que Changchun Changsheng Biotechnology había sido multada por crear al
menos 100.000 vacunas antirrábicas defectuosas, de las cuales las autoridades han insistido que son
inefectivas, no peligrosas.

“Las violaciones incluyen la mezcla de diferentes lotes de fluido de vacunas, falsificación de fechas de
producción y usar fluido vencido para producir algunos de los lotes”, escribió la agencia estatal Xinhua
el martes.

Las vacunas antirrábicas defectuosas fueron una de las dos grandes controversias en golpear la
compañía de vacunas en el último año.

Cerca de 250.000 vacunas para niños contra la difteria, tos ferina y tétano (DPT), también producidas
por Changchun Changsheng Biotechnology, también eran defectuosas, según encontraron los
investigadores chinos en noviembre.

El número se duplicó en agosto cuando la prensa estatal anunció un segundo lote que había sido
identificado como defectuoso, para un total de 500.000.
La más reciente multa se suma a otra de 507.843 dólares impuesta a la compañía por el gobierno chino
en julio por su lote original de vacunas infantiles defectuosas.

No se hizo mención en la prensa china de otras drogas defectuosas, ni tampoco si habrá más multas en
el futuro.

El escándalo de las vacunas solo agravó aún más las preocupaciones en China sobre la seguridad de los
alimentos y medicinas producidas localmente, después de una serie de controversias de alto perfil en la
última década.

En julio y agosto, más de una docena de padres de familia enojados y activistas se reunieron frente a la
Comisión Nacional de Salud y la Administración Nacional Estatal de Drogas, pidiéndole al gobierno
“darle una oportunidad justa a las víctimas de las vacunas”.

A raíz del escándalo, el gobierno chino se ha enfrentado con fuerza a la compañía y los funcionarios de
alimentos y drogas.

En una rara respuesta a la presión pública, el presidente Xi Jinping, prometió una acción rápida,
incluyendo una investigación inmediata.

Al menos 18 personas fueron arrestadas por la Policía tras el escándalo y Xinhua dijo el miércoles que
la compañía había revocado la licencia de producción farmacéutica.

Referencias

 Ben Wescott. (2018). China pone multimillonaria multa a una compañía por vacunas
defectuosas. Marzo 16, 2019, de CNN Sitio web:
https://cnnespanol.cnn.com/2018/10/19/china-pone-multimillonaria-multa-a-una-
compania-por-vacunas-defectuosas/
Instituto Tecnológico Superior de Misantla

Asignatura: Taller de Ética


Titular: C. P. Alicia Córdova y López
Nombre del Trabajo: Artículos
Unidad N.: 2
(La ética en la ciencia y la tecnología)
Tema: Implicaciones éticas en el desarrollo de
la tecnología
Periodo: Enero 2019 – Junio 2019
Opción: Primera oportunidad
Carrera: Ingeniería Electromecánica
Semestre: 2 Grupo: 204 B
Presenta:
Perez Hernández Alejandro

Fecha de entrega
19/03/2019

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