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RESUMEN
En el presente trabajo, el autor resume los criterios adoptados para la clasificación de los depósitos
cuaternarios en el desarrollo de importantes proyectos hidroenergéticos como Mantaro, Olmos,
Majes, Chavimochic, entre otros. En base a dichos criterios y las experiencias propias se propone
un intento de clasificación, considerando e integrando especialmente los aspectos genéticos, edad,
composición litológica y granulométrica; de tal manera que dicha clasificación realizada a partir de
datos de campo y con criterios geológicos prácticos, pueda reunir información cuantificable y en-
tendible por especialistas de ramas afines de la ingeniería.
1. INTRODUCCIÓN
El estudio de los depósitos cuaternarios que cubren las rocas pre-cuaternarias, juega un rol impor-
tante en: El conocimiento de los fenómenos físico-geológicos, ocurridos durante los últimos 3 mi-
llones de años, el desciframiento de la historia del hombre primitivo, la interpretación de la pa-
leogeografía, así como lo relacionado a las actividades del hombre moderno como son los estudios
hidroenergéticos, proyectos viales, evaluación del peligro geológico para la defensa y protección de
centros poblados, etc.
(1)
Consultor en Geología y Geotécnia
esgrimiéndose conceptos a veces antagónicos y muchas veces de forma; por ejemplo se discute si
tal clasificación debería involucrar objetivos puramente geológicos o tener alcances geológico-
ingenieriles. En el presente trabajo el autor opta por proponer un sistema de clasificación con crite-
rio más práctico, es decir orientado hacia la geología aplicada, aprovechando los aportes del sistema
unificado de clasificación de suelos (SUCS), conseguido en la Ingeniería Civil especialmente en lo
concerniente a la clasificación granulométrica.
Finalmente en el presente trabajo se pone en consideración algunas tablas con las terminologías y
criterios comúnmente empleados en las descripciones geológico-geotécnicas de campo, de tal ma-
nera que el geólogo involucre en su objetivos de investigación asuntos de interés para los ingenieros
civiles y los describa empleando terminologías y lenguaje intelegible entre los especialistas afines.
A continuación se plantea los criterios de clasificación de los depósitos cuaternarios con objetivos
ingeniero-geológicos tomando como base los aspectos genéticos, litológico-granulométricos y geo-
cronológicos.
2. ASPECTOS GENETICOS
En otros casos, la identificación genética de los depósitos cuaternarios es un buen indicador para la
búsqueda de los materiales de construcción, ya sea para suelos finos, agregados para concreto, en-
rocados, afirmado de carreteras, etc.
Las clasificaciones existentes distinguen generalmente aquellos tipos de suelos de origen continen-
tal, marino e ígneo. Debido a que los suelos de origen continental son los más extendidos, en el
presente trabajo se pone énfasis en ellos y se complementa con la escasa variedad de los suelos de
diferente origen.
En el presente trabajo se propone la clasificación genética adoptada en base a la establecida para los
estudios del Proyecto Especial Olmos (1981) realizado por Hidroproyecto de Rusia. Dicha clasifi-
cación ha tenido aplicación en muchos otros proyectos del país, sufriendo adaptaciones y variacio-
nes, pero siguiendo los principios básicos de identificación y logrando el entendimiento y aproba-
ción de los especialistas polivalentes involucrados con los estudios y obras de ingeniería. Bajo tales
circunstancias, la clasificación genética propuesta en el presente trabajo debe entenderse como una
aclaración y precisión a los criterios y terminologías ya empleadas con anterioridad.
Los depósitos cuaternarios según su génesis pueden ser diferenciados en un gran número de suelos,
en el presente trabajo se proponen los siguientes tipos fundamentales:
Además, pueden ocurrir depósitos aún más complejos por su génesis, por ejemplo: Depósitos delu-
vial-coluvial-proluvial (Q-de/cl/pl).
Para la identificación de los depósitos cuaternarios se propone el uso de la letra mayúscula Q, se-
guido por un guión y la abreviatura del nombre genético, generalmente constituido por la primera y
última letra de la nomenclatura, por ejemplo la abreviatura del término aluvial es Q - al, deluvial Q
- dl, etc. constituyen la excepción los términos fluvio-glaciar Q - fgl, biogénicos Q - bi, etc. En el
caso de depósitos poligénicos se propone separar con una barra inclinada la abreviatura de los tér-
minos genéticos; por ejemplo Q – dl/cl.
Otra de las bases fundamentales para la clasificación de los depósitos cuaternarios es el estudio de
los componentes granulométricos que constituyen un determinado depósito, la relación porcentual y
ensamblado entre los ingredientes, yacencia y morfología.
Cuadro 1
RELACION DE LOS PRINCIPALES TIPOS GENETICOS DE DEPOSITOS CUATERNARIOS
Los criterios para la clasificación según el SUCS están resumidos en la tabla que se presenta en
el Anexo A al presente trabajo. Su aplicación es muy sencilla y servirá de gran ayuda para el
geólogo de campo, para identificar cualitativamente la granulometría de los componentes de un
determinado depósito.
Los símbolos empleados por el SUCS para los diferentes tipos de suelos básicos provienen de
las letras iniciales de sus nombres en inglés (ejem: sand = s, clay = c, etc.).
Aquí conviene puntualizar que, debido a que los fragmentos rocosos mayores a 3” ó 76 mm no
tienen simbología ni tamices para su clasificación y porque resulta impracticable realizar mues-
treos para el análisis de laboratorio; por lo tanto es muy importante la descripción en campo de
los fragmentos “sobredimencionados”, de no ser así se incurre en clasificaciones no representa-
tivas, con la consiguiente distorsión de las características litológicas y propiedades ingenieriles
del suelo bajo análisis.
4. ASPECTOS GEOCRONOLOGICOS
Los depósitos cuaternarios conforman los horizontes más superficiales de la envoltura terrestre
y por ello también son los más jóvenes de la historia geológica, cuyos inicios se encuentran en
discusión, R. FOSTER (1976) señala unos 3 millones de años, G. LAZYKOV et. al. (1976)
estima solamente los últimos 700 mil años, el Instituto Geofísico del Perú (1981) asigna al cua-
ternario los últimos 5 millones de años.
Para objetivos del presente trabajo, se usa como referencia la división geocronológica utilizada
por R. FOSTER (1976) y que se presenta en el Cuadro 4 y se propone dividir el cuaternario en
cuatro pisos o edades; identificando el símbolo “Q” con números romanos, del más reciente al
más antiguo como sigue:
DIVISIONES SUB DIVISIÓN GRUPO SÍMBOLO TAMAÑO DE LA DETERMINACIÓN EN CAMPO MEDIANTE SEPARADO POR COMPARACIÓN
PARTÍCULA O LA VISTA O EL TACTO TAMICES ASTM
FRAGMENTO (mm)
Limos M 0.074 – 0.002 Distinguible con lupa, ligeramente áspero Polvo de cemento
Finos < N° 200
al tacto, ligeramente cohesivo
Arcilla C < 0.074 m Cohesivos a muy cohesivos, plástica en
FINOS estado húmedo
Gruesa 4.75 – 2.00 Visible, tamaño mensurable N° 4 a N° 10 Grano de arveja
Arena Media S 2.00 – 0.425 Visible, tamaño mensurable N° 10 a N° 40 Grano de quínua
Fina 0.425 – 0.74 Visible, áspero al tacto N° 40 A N° 200 Polvo
Gruesos
Gruesa 75.00 – 19.05 Mensurable 3” a ¾” Uva – manzana
Grava G
Menuda 19.05 – 4.75 Mensurable ¾” a N° 4 Grano de maíz
No tienen grupo ni símbolo
Cantos 7.6 cm (3”) y Si el contenido es mayor al 5% del volu- Tamaños mayo- Naranja, melón
definido en la clasificación
< 30 cm men de la masa, se debe describir sobre res a 3”. Su gra-
unificada de suelos.
FRAGMEN- sus formas, dimensiones, constitución, nulometría sale
Bolos 30 cm y < 1 m Sandía
TOS DE RO- Se asume como fragmentos etc., y complementar a los resultados de fuera del SUCS.
CA sobredimensionados laboratorio Su evaluación
Bloques >1m visual es impor-
tante.
CUADRO 3
Frente a las limitaciones y dificultades antes señaladas, en el mapeo de los depósitos cuaterna-
rios y determinación de su edad, resulta de gran utilidad el principio paleoclimático y la posi-
ción altimétrica de los depósitos en relación a las formaciones más jóvenes, que generalmente
ocupan las partes altimétricamente más bajas, así por ejemplo, en el valle del río Rímac el cauce
actual corresponde al Holeoceno (QIV), mientras que algunas terrazas colgadas en las cabeceras
del valle tales como Cocachacra, San Mateo, etc., podrían representar estadíos del cuaternario
superior y medio incluso (QIII y QII). Los depósitos del cuaternario inferior generalmente están
erosionados. Aquí se aclara que los criterios de superposición estratigráfica y posición altimé-
trica son criterios diferentes y ambos son válidos en el mapeo de los depósitos cuaternarios.
Es decir, en el cauce actual del río se puede diferenciar hasta tres niveles de inundación y depo-
sitación, identificados por números arábigos como exponente de los números romanos. El de-
pósito aluvial más joven es el que se encuentra inundado por las aguas del río (QIV3 – al). La
playa o lecho anegadizo es la parte que se cubre y sedimenta solamente en temporadas de lluvia
o de crecida del río; es decir ocurre sedimentación anual (QIV2 – al), también puede darse el caso
de existencia de terrazas con elevación de 4 a 5 m con respecto al lecho del río, pero que en
períodos largos, por ejemplo coincidentes con el fenómeno de El Niño pueden ser inundados
(QIV1 - al).
Las terrazas laterales o superiores. Son aquellas que están “colgadas” en los flancos de los va-
lles y frecuentemente son ocupadas como áreas de cultivo, por asentamientos humanos, etc.
(QIII-al).
CUADRO 4
CUADRO COMPARATIVO DE DATACIÓN ESTRATIGRÁFICA DEL CUATERNARIO
ESQUEMA ESTRATIGRÁFICO PARA LA CLASIFICACIÓN DE DEPÓSI- GENERALIZACIÓN ESTRATIGRÁFICA APROXIMADA DEL CUATERNARIO
TOS CUATERNARIOS ANTROPOGÉNICOS EN EL TERRITORIO RUSO PARA EL TERRITORIO NORTEAMERICANO
10
HOLOCENO HOLOCENO
HOLOCENO 10 HOLOCENO
(QIV)
C14
(QIV)
30
ANTROPOGENO
PLEISTOCENO 50
CUATERNARIO
CUATERNARIO
SUPERIOR 170 SUPERIOR
DATACIÓN
70
INDIREC-
(QIII) (QIII)
(Q)
TA
100
PLEISTOCENO
PLEISTOCENO
CUATERNARIO PLEISTOCENO
MEDIO 500 MEDIO
(QII) (QII)
CUATERNARIO PLEISTOCENO
INFERIOR 700 INFERIOR
(QI) (QI)
3000?
EDADES FORMACIONES
GLACIACIONES RECIENTES
Morrenas históricas de la Pequeña Edad Glaciar
XIII – XIX Glaciación G1: Morrenas con formas bien preservadas.
Siglos • Fusión de los glaciares y formación de terrazas fluvio-torrenciales: tT1a.
CUATERNARIO
• Los arcos morrénicos de este estadio (G1a) los más recientes son los más
RECIENTE
Blanca - Huaraz
GLACIACIONES ANTIGUAS
• Acumulación fluvio-glaciar y depósitos fluvio-torrenciales: Ejemplo
Ancocala (Puno), San Sebastián (Cuzco), lago Junín, Mantaro.
• Terrazas marinas antiguas: Tablazo de Máncora, Cañete.
• Relleno fluvio-lacustre
PLIOCENO
Fuente: Instituto Geofísico del Perú (1981). Observaciones acerca de la Neotectónica del Perú,
elaborado por M. Serbier et.al. con adaptaciones de W. Tinta (2000)
5. INTEGRACIÓN DE LOS ASPECTOS GENÉTICOS, LITOLÓGICOS – GRANU-
LOMÉTRICOS Y GEOCRONOLÓGICOS – SU REPRESENTACIÓN Y DESCRIP-
CIÓN EN DOCUMENTOS
Tales particularidades, resultan difíciles de representarlas con el detalle que exige la naturaleza,
recomendándose en dichas circunstancias esquematizar su representación, sacrificando algunos
detalles. Pretender lo contrario traería a confusión y disminución del valor práctico de los docu-
mentos. Por ello en caso de procesarse documentos muy detallados, se recomienda efectuar los
levantamientos sobre bases topográficas a gran escala (1:200 a 1:500) o efectuar algunas represen-
taciones fuera de escala.
Otra gran ayuda para la diferenciación de los tipos genéticos de suelos y sus variaciones de las fases
litológicas, resulta ser la intensidad de los colores o los achurados.
Para la leyenda de los planos y cortes es importante identificar todos los tipos genéticos y sus com-
binaciones, seguido de una descripción resumida de sus características litológicas y principales pro-
piedades.
La secuencia de presentación de la columna litoestratigráfica en los planos debe ser asumiendo el
orden de presentación en la naturaleza, es decir los suelos más jóvenes deben ir primero, seguido de
los más antiguos; sin embargo en el texto, es decir en la memoria descriptiva, el orden de descrip-
ción empieza de los más antiguos terminando en los más recientes. A modo ilustrativo se propone
el siguiente ejemplo de leyenda.
En la memoria descriptiva se debe efectuar una descripción más detallada y completa de los suelos,
siguiendo el orden que se propone:
6. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Lo tratado en el presente trabajo es solo una propuesta para intentar la unificación de los criterios de
clasificación de los depósitos cuaternarios con objetivos ingeniero – geológicos. Recomendándose
la formación de un comité u organismo encargado de centralizar y promover la elaboración del Có-
digo Estratigráfico y Geocronológico del Cuaternario.
7. ANEXOS
8. BIBLIOGRAFÍA
ANEXO C
TÉRMINOS PARA LA DESCRIPCIÓN DE COLORES Y TONALIDADES DE SUELOS
ANEXO D
PRUEBAS DE CAMPO PARA DETERMINAR LA CONSISTENCIA DE LOS SUELOS
ARCILLOSOS E INFERIR ALGUNOS PARÁMETROS
Tieso No puede ser moldeado con los dedos, 8 – 15 1.92 – 2.08 1.0 – 2.0
puede ser punzado con el dedo pulgar
Muy tieso Puede ser penetrado con la uña del 15 – 30 2.08 – 2.4 2.0 – 4.0
dedo pulgar
Duro Difícil de penetrar > 50 > 2.00 > 4.0
ANEXO E
CLASIFICACIÓN DE LOS SUELOS SEGÚN SU ÍNDICE DE PERMEABILIDAD
(K = cm/s)
ANEXO F
RESUMEN DE ALGUNAS PROPIEDADES INGENIERILES DE SUELOS