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DIFICULTADES QUE TIENEN LOS MICROEMPRESARIOS PARA FORMALIZARSE

La informalidad es una de las principales barreras para que en el Perú se dé un crecimiento


económico inclusivo con beneficios para la mayor cantidad de ciudadanos.

La informalidad genera un círculo vicioso que afecta a las personas con escasos recursos,
pues no les ofrece capacitaciones, acceso a servicios públicos y los sueldos que paga son
bajos.

Se asume que en el Perú el 70% del empleo es informal y no menos del 40% también es
informal. En el primer caso se refiere a aquellos trabajadores que no tienen contrato laboral,
que no tienen beneficios sociales y que probablemente reciben salarios por debajo del mínimo
legal. En el segundo caso los productores no tienen un RUC, es decir no tienen un registro
tributario que los incorpore como contribuyentes.

Pero cuando una Mype desea formalizarse también se encuentran con varias trabas por parte
del Gobierno lo cual hace que sea casi imposible la formalización:

-Una razón es que el actual gobierno, que había prometido avanzar con la formalización,
hasta el momento ha fracasado, como lo han hecho gobiernos anteriores ya que los intentos
por formalizar las empresas en el país no han dado los resultados que se esperaban. Tal es el
caso de la Ley de Promoción y Formalización de la Micro y Pequeña Empresa (más conocida
como Ley Mype).

Las razón probablemente esté en que los incentivos que le otorga a las mypes no son vistos
como tales por los mismos micro y pequeños empresarios, frente a las ‘ventajas’ que
consiguen siendo informales: no pagar ningún tipo de impuesto ni beneficios sociales, ya que
en el momento que se formalizan: Sunat empieza a explotarles con impuestos que es,
claramente un problema para una empresa que recién esta iniciando ya que afectan
directamente la economía de la organización.

-Otra razón que impide la formalización, es la caótica burocracia que se les impone a los
pequeños empresarios puesto que todo el litigio que se plantea para su debida formalización
se convierte en un proceso de nunca acabar por las trabas que dan las diversas organizaciones.
La simplicidad de los trámites debiera ser un signo distintivo de los gobiernos.
-Los elevados costos que tiene cada tramite a realizar, este factor desanima a muchos
microempresarios ya que ellos recién están formando su empresa y desean precios flexibles
para realizar este proceso de formalización.

-El tiempo que demora realizar cada tramite ya que no es solo un papeleo a realizar para ser
una empresa formal; se requiere de varias procedimientos que pueden demorar días o hasta
semanas y como sabemos un empresario no puede perder tiempo ya que tiene que estar más
ocupado mejorando la competitividad de su organización; otra dificultad que hace desistir a
los pequeños empresarios de querer formalizar.

La tarea de formalizar a los microempresarios es muy compleja, claro está, pero quizás pueda
ser factible en el futuro si el gobierno propone crear un sistema de estímulos o beneficios
reales para ellos (por ejemplo, capacitación gratuita y acceso a otros servicios que se orienten
a aumentar su productividad y ventas en el mercado).

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