UNA UNCION CON ACEITE FRESCO

Salmos 92:10
INT: “Pero tu aumentaras mis fuerzas como las del búfalo: Seré ungido
con aceite fresco.”

Es un día especial cuando David alaba al Señor, es un cántico para el día de

reposo. David le alaba, de hecho, dice que es bueno para él alabarle. Su
alabanza le lleva a proclamar Su misericordia cada mañana y Su fidelidad cada
noche.

David alaba al Señor, porque Él le ha alegrado a través de Sus maravillas.

David resalta que el hombre necio no sabe y el insensato no entiende, pero que
él esta seguro que Su Dios le aumentara sus fuerzas como las del búfalo y que
será ungido con aceite fresco.

El tema de esta conferencia es con respecto al fuego de Dios, pero tengo que
decirles que no puede haber fuego en nuestras vidas a menos que seamos
ungidos con aceite fresco.

En la Palabra de Dios podemos leer sobre ciertos ungimientos con aceite

fresco, las ocasiones eran especiales. Estas ocasiones se entendían como un
ungimiento para una fortaleza espiritual, éxito y prosperidad la cual Dios
confería a aquel que Él escogía, y lo hacia a través de Su Providencia, Palabra
y Espíritu.

Aquellos que ponen su confianza en Dios recibirán nuevas fuerzas para llevar a
cavo la tarea que Él les ha encomendado.

El Salmista adopta al búfalo como su emblema.

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“Aceite fresco” El salmista habla en primera persona, y así quisiera que todos y
cada uno de los que estamos aquí, tomemos esta porción Bíblica. Tú y yo
somos los invitados a la fiesta, El Señor nos dará una hermosa bienvenida, Él
quiere, no-solo ungirnos de manera parcial, sino que quiere refrescarnos de
una manera copiosa con el aceite celestial fragrante, si venimos a Él, nuestro
espíritu será gentilmente empapado, refrescado y revitalizado.

“Ungirás mi cabeza con aceite” Salmos 23:5

“Te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría” Salmos 47:7

Cuando Dios desechó a Saúl, escogió a David. Cuando El Señor envió a

Samuel para ungir a David, David era un muchacho joven, (la mayoría de los
comentaristas están de acuerdo en que tendría algunos 15 años de edad)
rubio, ojos hermosos y de buen parecer.

Tu y yo quizás no seamos de ojos hermosos, ni jóvenes y mucho menos

apuestos, pero el Dios de David es el mismo Dios nuestro, y el mismo que le
ungió, es el mismo que en este día nos quiere ungir con el mismo aceite fresco.

Cuando David fue ungido Dios lo cualifico para gobernar a Su pueblo, lo doto
con gracia, prudencia, sabiduría, consejo, animo, liberalidad y magnanimidad.

Isaí tenía 8 hijos y solo uno fue ungido, la bendición nuestra es que no importa
que seamos 500 personas reunidas en un solo lugar ¡Todos podemos ser
ungidos!

El aceite fresco de la unción no estaba reservado solamente para los reyes,

profetas y sacerdotes, sino para aquellos que Él escogía.

Algunas cosas sobre el tema:

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1.- SOMOS UNGIDOS CUANDO CUMPLIMOS CON LOS
REQUERIMIENTOS DE DIOS.

Cuando venimos a Jesús, Él puso Su Espíritu Santo en nosotros. Pero no cave

duda que las circunstancias bajan nuestras baterías y necesitamos de aceite
fresco.

• ¿Te acuerdas de la fe, animo, alegría y vitalidad que teníamos cuando

Jesús nos salvó y nos llamó al ministerio? Seguimos siendo salvos y
llamados como aquel primer día, pero quizás algunos de nosotros no
tenemos la misma fe, alegría, vitalidad y disponibilidad como la que
teníamos el año pasado, por lo tanto, ¡Necesitamos aceite fresco!

Debemos de creer como el salmista cuando dijo: “Seré ungido con aceite
fresco”

• Tal y como Pablo se sintió ante los corintios, así debemos de sentirnos
nosotros en esta noche: Confirmados entre aquellos a quienes servimos,
no importa que tan corrupta este la sociedad e inclusive las iglesias “El
que nos ungió, es Dios” 2ª Corintios 1:21

Dejemos que el Espíritu Santo haga Su obra y nos unja con aceite fresco.

• Una de las cosas que debemos hacer antes de ser ungidos es confesar
y olvidar cada pecado en nuestra vida.

David clamaba el perdón de aquellos secretos que aun para él le eran secretos.
Tu y yo tenemos pecados tan secretos que nadie sabe, ni tu mama, ni tu
esposo (a) ni tu amigo, etc. ¡Pero Dios los conoce! Y mientas no los
confesemos y haya un arrepentimiento genuino en nosotros, estaremos dando
patadas de ahogado en el ministerio, él animo será fingido, el aroma será
rancio, el mensaje será hueco y los resultados transitorios.

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 • Hay hierba amarga que crece junto con el pasto y cuando las vacas
lecheras la confunden con el pasto y la tragan, la leche sale amarga y
los lecheros tienen que tirarla.

Como predicadores en muchas ocasiones confundimos aquello que comemos

y cuando menos lo esperamos lo que ponemos a la mesa de quienes servimos
está amargo y rancio, y en vez de deleite a sus vidas causamos que nunca
más deseen tomar la Palabra de Dios.

En este día vengamos y dejemos en el altar nuestras cargas, nuestro orgullo,

nuestra amargura y encontraremos la frescura que necesitamos.

Si queremos aceite fresco debemos de orar. El individuo debe de orar y la

iglesia también. Creo que cada iglesia debe de tener una lista de oración, creo
que cada uno de los que estamos aquí debe de tener una lista en la cual estén
incluidos todos aquellos que amamos, incluyendo a aquellos que están
perdidos sin Cristo.

2.- CUANDO SEAMOS UNGIDOS CON EL ACEITE FRESCO DE DIOS LOS

RESULTADOS SERAN DESBORDANTES.

Cuando la lluvia cae sobre la huasteca y sobre las montañas que rodean a
Monterrey, toda la ciudad puede ver las aguas correr a través del lecho del Rió
Santa Catarina.

• El aceite fresco es como los rayos del sol que caen sobre un témpano
de hielo y lo derrite.

Debemos mantener en mente que la unción con aceite fresco hace que lo
secular venga a ser sagrado y los días malos son transformados en buenos.

• Nadie como el Espíritu Santo para sacarnos de una depresión y

llevarnos del fracaso y la desesperación a la alegría, él animo y el gozo.

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Cuando el aceite fresco cae sobre nosotros aun los cantos de los sapos en una
noche lluviosa nos parecen como un canto de un coro de 500.

CON: No sé cuál sea tu condición en este día, pero estas aquí porque recibiste
la invitación de Jesús y le aceptaste, si ya viniste de tan lejos, no te vallas de
aquí sin la unción del aceite fresco del Señor.

• Este es aceite fresco, no rancio como el que usan algunos para ungir, es
gratis, no tienes que enviar ni traer ninguna ofrenda, es celestial.

• Este aceite fresco sanará tus heridas.

• Endulzará vuestras amarguras.

• Fortalecerá tus debilidades.

• Te ayudará a superar las decepciones.

• Te dará sabiduría para las decisiones que tienes que tomar.

• Llenará cada poro de ti con el poder de Dios.

• Ablandará tu corazón.

Misionero Rubén Murillo