Está en la página 1de 12

página 1

Nota: Alrededor de dos horas son necesarias para completar este módulo.

MÓDULO 10: LA PROTECCIÓN DE LAS OBTENCIONES


VEGETALES

Objetivos
Al final de este módulo habrá aprendido usted lo siguiente:

1. La función que desempeña la Unión Internacional para la Protección de las


Obtenciones Vegetales (UPOV)

2. Las razones que justifican la protección de las obtenciones vegetales

3. Los requisitos necesarios para que una obtención vegetal sea apta a la
protección

4. Los derechos de que goza el titular de la obtención protegida

5. La duración del derecho del obtentor

© WIPO/OMPI
página 2

Introducción

La protección de las obtenciones vegetales es una dimensión más de la propiedad


intelectual, y como tal, es una forma de reconocer los logros de los obtentores de nuevas
variedades vegetales mediante la concesión, durante un plazo limitado, de un derecho
exclusivo. Para beneficiarse de protección, las obtenciones deben satisfacer una serie de
criterios específicos.

La Organización que se encarga de velar por la protección de las obtenciones


vegetales es la UPOV, conocida así por su sigla en francés, a saber, Union internationale
pour la protection des obtentions végétales.

© WIPO/OMPI
página 3

¿Por qué es necesario proteger las obtenciones vegetales?

La protección de las obtenciones vegetales tiene por finalidad salvaguardar los


intereses de los obtentores como incentivo para el fitomejoramiento a los fines de la
agricultura, la horticultura y la silvicultura. El fitomejoramiento es un elemento necesario y
sumamente eficaz en función de los costos para aumentar la calidad de todos los tipos de
plantas.

La obtención de nuevas variedades vegetales exige importantes inversiones en


conocimientos técnicos, trabajo, recursos materiales, dinero y tiempo. La concesión de
derechos exclusivos respecto de una obtención representa una verdadera oportunidad
para que el obtentor recupere sus costos y reúna los fondos necesarios para realizar
nuevas inversiones. A falta de protección de los derechos del obtentor, esas finalidades
son más difíciles de alcanzar puesto que nada impide que terceras partes tomen la
iniciativa de multiplicar las semillas u otro material de reproducción del obtentor y vendan
la variedad en el mercado, sin prever retribución alguna para el obtentor.

© WIPO/OMPI
página 4

¿Cómo se protegen las obtenciones?

En el Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual


relacionados con el Comercio (Acuerdo sobre los ADPIC) se prevén tres tipos de
protección:

1. mediante patentes
2. mediante un sistema especial (“sui generis”)
3. mediante una combinación de ambos sistemas

Por lo general se considera que la mayor parte de las obtenciones vegetales no


responden al requisito de no evidencia del sistema de protección por patente, por cuanto
se derivan de actividades emprendidas con objetivos previamente determinados y
recurriendo a tecnologías conocidas. De ahí la dificultad de utilizar el sistema de
protección por patente. Por consiguiente, la mayor parte de los países suelen contar con
un sistema especial (“sui generis”) para la protección de las obtenciones vegetales.

© WIPO/OMPI
página 5

PREGUNTA DE AUTOEVALUACIÓN (PAE)

PAE 1 : ¿Qué finalidad tiene la protección de los derechos de los obtentores?

1. Velar por la disponibilidad continua de la obtención, salvaguardando los


intereses del obtentor
2. Velar por la pureza y el buen estado de las semillas disponibles

Escriba la respuesta aquí :

Haga clic aquí para ver la respuesta

PAE 1 Respuesta:

La Nº 1 es la respuesta correcta. La respuesta 2 tiene que ver con el control de


calidad de la producción de semillas y plantas.

© WIPO/OMPI
página 6

¿Qué condiciones son necesarias para que la obtención pueda


beneficiarse de protección?

En virtud del Acta de 1991 del Convenio de la UPOV, la variedad deberá reunir los
requisitos siguientes:

1. novedad
2. distinción
3. homogeneidad
4. estabilidad
5. denominación conforme

El requisito de novedad tiene por finalidad velar por que la variedad no haya sido
objeto de explotación comercial. Se trata de una evaluación puramente jurídica y no
técnica. Se exige también que la variedad sea designada por una denominación
destinada a ser su designación genérica. Se llevan a cabo tres exámenes técnicos: el
examen de la distinción, el examen de la homogeneidad y el examen de la estabilidad
(examen DHE). Detengámonos un poco en cada uno de ellos.

© WIPO/OMPI
página 7

Distinción

Se considerará distinta la variedad si se distingue claramente de cualquier otra variedad


cuya existencia, en la fecha de presentación de la solicitud, sea notoriamente conocida.
La definición técnica exacta de la distinción reside en la descripción biológica de la
variedad y no está comprendida entre las finalidades de estudio de este módulo. Basta
con saber que es necesaria la opinión de un experto técnico para determinar esa
cuestión.

Homogeneidad

Se considerará homogénea la variedad si es suficientemente uniforme en sus caracteres


pertinentes, a reserva de la variación previsible habida cuenta de las particularidades de
su multiplicación vegetativa.

Eso significa, en pocas palabras, que las plantas de una variedad deben ser iguales o
muy similares, y que el grado de similaridad depende del método de multiplicación
seleccionado.

Estabilidad

Se considerará estable la variedad si sus caracteres se mantienen inalterados después de


reproducciones o multiplicaciones sucesivas o, en caso de un ciclo particular de
reproducciones o de multiplicaciones, al final de cada ciclo.

Lo que esto significa, en pocas palabras, es que la variedad debe permanecer inalterada
tras un período de reproducciones sucesivas a partir de semillas o por otros métodos.

Es evidente que estos tres últimos criterios técnicos para la concesión del derecho de
obtentor deberán ser examinados antes de conceder esos derechos. De esos exámenes
técnicos se encargan examinadores autorizados.

© WIPO/OMPI
página 8

¿Qué derechos obtiene el titular de la protección?

En virtud del Acta de 1991 del Convenio de la UPOV, en el que se estipula la


protección que se concede a los obtentores, los siguientes actos exigen la autorización
previa del titular del derecho:

1. la producción o la reproducción (multiplicación)


2. la preparación a los fines de la reproducción o de la multiplicación
3. la oferta en venta
4. la venta o cualquier otra forma de comercialización
5. la exportación
6. la importación
7. la posesión para cualquiera de los fines mencionados anteriormente

Cabe destacar que no se requiere la autorización del titular de un derecho de


obtentor para los actos siguientes:

1. los actos realizados en un marco privado con fines no comerciales

2. los actos realizados a título experimental

3. los actos realizados a los fines de la creación y explotación de otras


variedades, salvo en el caso de las variedades esencialmente derivadas y
ciertas variedades que no podrán ser explotadas sin autorización del obtentor
de la variedad original.

Concretamente, la protección estipulada en el apartado 1) significa que los


agricultores precisarían la autorización del titular del derecho para conservar las semillas
de una cosecha a fin de plantar la siguiente cosecha.

Ahora bien, en el Acta de 1991 del Convenio de la UPOV se prevé una excepción
facultativa que permite que los Estados excluyan esas semillas conservadas del alcance
del derecho del obtentor y tomen soluciones sobre la cuestión específicamente adaptadas
a las circunstancias agrícolas nacionales. Prácticamente todos los países que se han
adherido al Acta de 1991 han adoptado ese “privilegio del agricultor” de una u otra forma.

© WIPO/OMPI
página 9

¿Qué duración tienen los derechos del obtentor?

En el Acta de 1991 se prevé que la duración mínima deberá ser:

• de 25 años para los árboles y las vides


• de 20 años para las demás variedades

Segmento sonoro 1 : ¿Puede obtenerse protección mundial para una obtención?

Análogamente a otros métodos de protección, en muchos casos, el derecho debe


ser concedido en cada uno de los Estados en los que el obtentor desea obtener
protección. Ahora bien, existen ya sistemas supranacionales en vigor (por ejemplo,
la Oficina Comunitaria de Variedades Vegetales para los miembros de la Unión
Europea) y otros tantos están en curso de elaboración. Sin embargo, la labor que
lleva a cabo la UPOV simplifica en gran medida este proceso pues incita a los
miembros a reconocer los exámenes técnicos realizados en otros Estados
miembros, lo que reduce considerablemente los costos y los esfuerzos necesarios
para obtener protección en varios países.

© WIPO/OMPI
página 10

Resumen

La protección que puede obtenerse en relación con las obtenciones vegetales tiene
por finalidad salvaguardar los intereses de los obtentores, como incentivo para el
mejoramiento de las variedades vegetales a los fines de la agricultura, la horticultura y la
silvicultura. El fitomejoramiento es un elemento necesario y sumamente eficaz en función
de los costos para el aumento de la calidad de todos los tipos de plantas.

La mayor parte de los países que han decidido proteger los derechos de los
obtentores han promulgado una legislación especial basada en el Convenio de la UPOV,
que está administrado por la Oficina de la Unión, cuya sede está en Ginebra.

Para que pueda beneficiarse de protección, la variedad debe ser:

• nueva
• distinta*
• homogénea* y
• estable*;
• tener una denominación adecuada

*
Objeto de examen técnico.

© WIPO/OMPI
página 11

Una vez que se concede la protección, el titular del derecho de obtentor tiene la
prerrogativa de prohibir los siguientes actos sin su autorización:

• la producción o la reproducción (multiplicación)


• la preparación a los fines de la reproducción o de la multiplicación
• la oferta en venta
• la venta o cualquier otra forma de comercialización
• la exportación
• la importación
• la posesión para cualquiera de los fines anteriormente mencionados

Numerosos países han aprobado leyes especiales que permiten que los agricultores
conserven las semillas o el material de multiplicación obtenido en una cosecha para la
plantación de la cosecha siguiente.

La duración mínima de la protección es:

• de 25 años para los árboles y las vides


• de 20 años para las demás variedades

Una de las funciones más importantes que desempeña la UPOV es ayudar a los
obtentores a obtener protección en varios países, entre otros medios, exhortando a los
países a aceptar los resultados de los exámenes que lleven a cabo otros países que son
miembros de la UPOV.

© WIPO/OMPI
página 12

Textos jurídicos:

• Convenio Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales

• Acuerdo sobre los ADPIC

© WIPO/OMPI

También podría gustarte