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EDUCACIÓN Y DESARROLLO ECONÓMICO


CLARA EUGENIA NÚÑEZ (*)

Se dice de la economía que es la ciencia el mundo, ni ha dado lugar a la desapari-


que estudia la relación del ser humano con ción de las diferencias entre unos países y
el medio que le rodea a fin de satisfacer otros. De ahí que una de las cuestiones
sus necesidades. Y, a pesar de que también clave que se plantean tanto economistas
se la conozca por su apelativo de •Adismal como historiadores económicos sea
science», no pueden negarse los numero- cómo explicar que unos países sean más
sos avances que en esa relación entre ricos que otros a fin de entender qué po-
hombre y medio han tenido lugar, en espe- dría hacerse para fomentar el crecimiento
cial durante los últimos dos siglos. Un solo en los más atrasados 2 . La complejidad del
dato bastaría para darnos idea de la mag- problema es tal, sin embargo, que pese a
nitud del éxito: los seres humanos son ser ésta la cuestión por antonomasia que
hoy día más numerosos que nunca lo ha- define a la economía —no hay más que fi-
yan sido con anterioridad y, además, viven, jarse en el título de la obra clásica de
por término medio, durante períodos muy Adam Smith Sobre la naturaleza de las
superiores a sus antepasados '. Ni uno ni causas de la riqueza de las naciones pu-
otro fenómeno podrían explicarse sin te- blicada por primera vez en 1776— y pese
ner en cuenta el crecimiento económico. Y a la proliferación de estudios durante las
sin embargo, el crecimiento económico no últimas décadas, aún no estamos en condi-
ha procedido de forma equilibrada en todo ciones de ciar una respuesta definitiva

() UNED.
(1) No vamos a entrar en las externalidades negativas que semejante aumento de la población, con el
consiguiente incremento en la presión sobre los recursos naturales, pueda tener a largo plazo. La idea es que
este aumento de la población es resultado de un espectacular descenso en las tasas de mortalidad y aumento
en la esperanza de vida, ambos avances en sí mismos.
(2) De ahí títulos como •Why Isn't the Whole World Developed?. de Ens-ruittiN (1981), o Rich Nations &
Poor Nations de ALDCR017 y CATITRALL (1996). La teoría del crecimiento se ocupa del crecimiento a largo plazo
y no a corto. A corto plazo se producen fluctuaciones, o cambios en la tasa de crecimiento, en torno a una ten-
dencia que se explican por las diferencias entre la capacidad productiva de una economía y su producción real.
A largo plazo, sin embargo, la capacidad productiva cambia dando lugar al crecimiento económico y lo que
importa es determinar qué la hace cambiar. De eso es precisamente de lo que se ocupa la teoría del crecimiento
económico.
(3) El interés por el problema de los determinantes del crecimiento económico, tema clave entre los eco-
nomistas clásicos, cobró nueva vida tras la II Guerra Mundial debido a los problemas que la reconstrucción
planteaba a escala mundial, y hasta la fecha no ha decaído.

Revista de Educación, núm. 318 (1999), pp. 9-33 9


LA EDUCACIÓN EN LA FUNCIÓN DE desarrollados. Es decir, se observa que la
PRODUCCIÓN producción no es sólo función de unos in-
puts determinados, sino de su productivi-
El núcleo en torno al cual se articula la teo- dad, es decir, del grado de eficacia con que
ría del crecimiento económico no es otro se utilicen. Partiendo de este sencillo prin-
que una función de producción, es decir la cipio se desarrolló en los años cincuenta lo
idea de que la producción (output] es una que se conoce como el método del growth
función, o lo que es lo mismo, depende de accounting, o la contabilidad nacional, a
unos factores de producción, tradicional- fin de determinar qué parte del crecimien-
mente tres: tierra, trabajo y capital, aunque to económico es atribuible a un aumento
la primera por lo general no es incluida en de los factores de producción y qué parte
los análisis 4 . Dicho en otras palabras, a de- a un aumento de su productividad. Para
terminadas cantidades de estos tres —dos— sorpresa de los investigadores, entre otros
factores corresponderían determinadas Abramovitz, Kendrick, Denison y Solow,
cantidades de producto, ya fuera éste trigo, era este último —el aumento de la produc-
automóviles o cualquier otro bien produci- tividad— el que explicaba la mayor parte
do. Como es lógico, la relación entre am- del crecimiento, lo que en la práctica equi-
bos factores de producción se basa en una valía a decir que el crecimiento no podía
serie de supuestos, en este caso consisten- ser explicado. El problema simplemente se
tes con la teoría de la competencia perfec- trasladaba: si no era un aumento en los
ta. En primer lugar se supone que existen factores de producción —(tierra) capital y
rendimientos constantes a la escala, es de- trabajo— el que originaba el crecimiento
cir, que si se dobla la cantidad de ambos económico, era un aumento en la producti-
factores se obtiene el doble de producto. vidad de estos factores. Ahora bien, ¿cómo
En segundo lugar, se supone igualmente se explicaban las diferencias en la producti-
que existen rendimientos decrecientes a vidad de los factores y, más concretamente
todo aumento en uno de los factores de su aumento en unos casos y no en otros?
producción siendo constante el otro, en o, lo que es lo mismo, ¿de qué dependía, o
otras palabras, si aumenta la cantidad de era función, la productividad de los facto-
capital por trabajador deberían obtenerse res? La cuestión de fondo simplemente se
aumentos cada vez menores de producto. había trasladado, no había sido resuelta.
En la realidad, sin embargo, esta fór- Había aparecido «el residuo» o lo inex-
mula no funciona. Así, pese a que el stock plicable, en palabras de Abramovitz «la
de capital crece más rápidamente que el medida de nuestra ignorancia»; un para-
factor trabajo en las economías desarrolla- guas bajo el que se agruparon el cambio o
das, las tasas de rendimiento a la inversión progreso técnico, el conocimiento en un
son hoy mayores que en el siglo xix y co- sentido aún más amplio e indefinido y, en
mienzos del xx. Y, a pesar de su bajo nivel definitiva, todas aquellas variables que di-
de capitalización, la inversión de capital en fícilmente podían medirse a través de cam-
países atrasados no ha resultado en tasas bios en los factores de producción 5 . De
de crecimiento superiores a las de países hecho lo que se admite es uno de los pro-

(4) ADRAmovrrz (1989a, p. 13).


(5) Así concebido el cambio tecnológico es todo aumento del output que no se corresponde con un au-
mento de los inputs, o que se produce mientras los inputs se mantienen constantes. El problema está en que a
corto y medio plazo hay inputs que son bastante inflexibles, como por ejemplo la tierra y el trabajo. 12 cantidad
de tierra se supone que es fija por definición, si bien puede cambiar en función de los conocimientos disponi-

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blemas cruciales de la economía: cómo es- son, la educación no ha dejado de figurar
timar correctamente las distintas variables en los estudios de tipo «contabilidad del
explicativas que se manejan. La hipótesis crecimiento», en sus dos versiones, la fun-
inicial es que las estimaciones de los dos fac- ción de producción tipo Cobb-Douglas en
tores claves de la función de producción, ca- la que la educación aparece como un atri-
pital y trabajo, eran incompletas y no medían buto de calidad del factor trabajo, y la fun-
adecuadamente su contribución al creci- ción de producción aumentada o tipo
miento económico que quedaba así «inexpli- Solow, en la que la educación es un factor
cado» en una gran medida. De ahí los de producción adicional 7. A este último
intentos de mejorar esas estimaciones. tipo pertenecen los intentos de Romer de
Entre las primeras variables que se ma- formalizar una nueva teoría del crecimien-
nejaron para explicar y reducir el tamaño to económico en la que a los dos factores
del «residuo« se encontraban las diferencias de producción tradicionales, capital y tra-
en la calidad del factor trabajo, que no ha- bajo, añade un tercero «el conocimiento»
bían sido adecuadamente recogidas en la que permite que la tasa de rendimiento de
estimación de este input, siendo Schultz las inversiones de capital aumente de for-
uno de los primeros en identificar al capi- ma sostenida, como veíamos que sucedía
tal humano —en concreto a la educación— en los países desarrollados. La escasez de
como uno de sus componentes 6 • Desde «conocimiento» en los países atrasados ex-
las estimaciones de Schultz relativas al gas- plicaría, por su parte, las bajas tasas de ren-
to en educación, hasta el uso de los sala- dimiento que el capital obtiene en estos
rios como indicadores de distintos niveles países y las dificultades a las que se en-
de educación a manos de Kendrick, Grili- frentan estos países para crecer S . El princi-
ches o Denison, pasando por la estimación pal problema, según esta interpretación, es
del output del sector educativo de Jorgen- que el «conocimiento» no existe porque sí,

bles que nos permiten darle un uso u otro y de la demanda de uno u otro tipo de productos. En términos más
amplios, «la oferta de tierra no es sólo una cuestión de área, sino de su valor en términos de fertilidad, contenidos
minerales, clima, topografía, todos aquellos factores que influyen sobre el acceso a ella». La cantidad de trabajo es
menos inflexible, sobre todo a largo plazo no a corto, ya que depende del tamaño de la población, su composición
por edades, salud, grado de participación, renta, urbanización y educación. ABRAmovrrz (1989b, p. 84).
(6) SCHULTZ (1968), a partir del análisis de las tasas de rendimiento de la educación establecía una com-
paración con tasas similares para el capital; GRILICHES (1970) y DENISON (1966).
(7) Los estudios de carácter empírico, en su mayor parte sobre el crecimiento económico en los Estados
Unidos y en algunos países europeos, dieron lugar a la modificación de la función de producción. En su for-
mulación original, debida a Douglas —de ahí la denominación de función de producción de tipo Cobb-Doug,las—,
sólo hay dos inputs —trabajo y capital— y no se tiene en cuenta la productividad, es decir, diferencias en la cali-
dad de los inputs. Esta última la incorporaron los trabajos posteriores de Kendrick, Abramovitz, Denison y So-
low entre otros, siendo este último el que dio nombre a una modificación de la tradicional función de
producción, la «función de producción aumentada» o «tipo Solow que considera que determinadas variables, en
su caso el cambio tecnológico, no son una fuente autónoma de crecimiento económico, sino que forman parte
de los distintos factores de producción, en este caso el capital. KENDRICK (1956); ABRAmovrrz (1956); DENISON
(1966); DENISON (1969); y SOLOW (1957).
(8) Sobre la complementariedad del capital físico y el humano, véase por ejemplo, SANDBERG (1993) y LAu
(1996). Clark ha estimado la productividad de los trabajadores en sectores industriales que utilizan tecnologías
similares y ha observado que ésta presenta fuertes diferencias por países. Si bien la educación de los trabajado-
res no parece explicar las variaciones en la productividad, sí parece hacerlo el componente cultural, en defini-
tiva la actitud ante el trabajo. Aunque este tipo de enfoque ha sido muy discutido y hayamos de ser cautos ante
las conclusiones —en especial cuando éstas se refieren a los trabajadores agrícolas ya que la comparabilidad de

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sino que es un bien producido, es decir, ción, quedando la tecnología en un senti-
ha de ser financiado mediante restriccio- do muy amplio, que incluye el conoci-
nes al consumo u otros tipos de inversión. miento y la educación, como el
Es más, a diferencia del capital y como su- componente más importante del «residuo»
cede con el trabajo, la producción de co- (cuadro I). El capital humano, en toda su
nocimiento es un proceso a largo plazo complejidad, sustituye al cambio tecnoló-
—recordemos que en los países desarrolla- gico exógeno como variable explicativa
dos el período educativo de un individuo en los nuevos modelos del desarrollo
apenas termina cuando cumple los 25 arios, económico.
aproximadamente un tercio del total de su
vida— y es, además, intensivo en capital hu- EDUCACIÓN Y CONVERGENCIA
mano, es decir, depende de los niveles educa- ECONÓMICA
tivos alcanzados con anterioridad 9.
Así, el tamaño de lo inexplicable ha Durante las últimas décadas, a la «contabi-
ido reduciéndose, sin llegar a desaparecer lidad del crecimiento» se ha unido una am-
completamente, a través de mejoras en plia literatura que utiliza el análisis de
la estimación de los factores de procluc- regresión entre datos cruzados para un

CUADRO I
Las fuentes del crecimiento de la renta nacional, 1948-79, según Den ison y jorgenson

Puntos porcentajes anuales % de la tasa de crecimiento total

Denison Jorgenson Denison Jorgeson


1. Otitptita 3,49 3,42 100 100

2. Trabajo (total horas) 0,93 0,68 27 20

3. Calidad del trabajo 0,53 0,37 15 11


4. Stock de capital" 0,77 1,15 22 34
5. Calidad del capital 0,40 12

6. Total trabajo (2+3) 1,46 1,50 42 31


7. Total capital (4+5) 0,77 1,56 22 46
8. Input total (6+7) 2,23 2,61 64 76
9. Productividad total 1,26 0,81 36 24
de los factores (1+8)
a. Para Denison output es renta nacional neta; para Jorgenson es valor añadido bruto.
b. Incluye tierra.
Fuente: Abramovitz (1989: Cuadro 1.2).

los inputs entre regiones geográficas muy diversas es extremadamente difícil-, es interesante como comprobación
empírica de que la tecnología por sí sola no determina la productividad del trabajo. CLARK (1987); y CIARK (1987).
(9) Romer tiene distintas versiones de su modelo (véase por ejemplo ROMER 119901). En una de ellas, en
lugar de tres factores de producción -capital, trabajo y conocimiento-, habla de cuatro -capital, trabajo-no-cua-
lificado, capital humano (años de escolarización) e ideas (patentes)-.

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conjunto creciente de países a fin de deter- trabajadores innecesarios en la agricultura
minar qué variables políticas, institucionales y el pequeño comercio, por lo que cual-
o económicas determinan el crecimiento quier mejora en alguno de ellos —inversio-
económico a largo plazo o, dicho en térmi- nes en nueva tecnología, altas tasas
nos muy de actualidad, se ha producido la marginales de rendimiento del capital y
convergencia en términos de renta entre una reasignación del factor trabajo— daría
los países atrasados y los países líderes o lugar al crecimiento económico 12. En caso
desarrollados 10 • Este es el tema central de de que estos supuestos fueran ciertos, el
los estudios de Gerschenkron sobre los proceso de convergencia sería incondicio-
países de la periferia europea que se desa- nal, esto es, todos los países atrasados con-
rrollan más tarde que los primeros -indus- vergerían con los adelantados al
trializadores». Su hipótesis fue refinada, materializarse las ventajas del atraso, es de-
con mayor profundidad analítica de la que cir, básicamente mediante la importación
se le ha reconocido, por Sandberg quien de tecnología y la reasignación de los tra-
sugirió que el crecimiento económico no bajadores.
dependía tanto del nivel de pobreza inicial Se ha observado, sin embargo, que la
como del grado de ignorancia de la pobla- convergencia es condicional y no automá-
ción: a mayor nivel de capital humano ma- tica como se esperaba, debido a que ade-
yores tasas de crecimiento económico y más de las causas inmediatas que explican
viceversa ". diferencias en el nivel de productividad y
Como bien han señalado Abramovitz y que podrían ser fácilmente superables,
David existen otras de fondo cuya corrección es
la hipótesis de la convergencia se sustenta
más difícil y que explican el atraso de estos
sobre cuatro sólidos pilares —que a su vez países. Así, por ejemplo, Baumol Black-
flotan sobre una amplia suposición. La su- man y Wolff distinguen la existencia de
posición es que los países 1...1 tan sólo di- distintos -grupos de países- entre los que sí
fieren en sus niveles iniciales de hay convergencia en función del nivel educa-
productividad pero por lo demás son simi- tivo; a saber, aquellos países que tienen nive-
lares. Los cuatro pilares son las cuatro ven- les educativos similares tienden a converger
tajas relativas al potencial de crecimiento entre sí, pero no lo hacen con aquellos que
que posee una nación atrasada simple- tienen un nivel educativo mayor ".
mente por encontrarse detrás.
¿Por qué no es incondicional la con-
Esas ventajas son la obsolescencia del vergencia? o lo que es lo mismo, ¿qué obs-
capital físico, los bajos niveles de capital táculos se oponen a la difusión del
por trabajador, y la relativa abundancia de crecimiento económico entre distintos paí-

(10) Por ejemplo: BARRO (1990), BARRO (1991), BARRO (1995), BAUMOL (1986); BAUMOL, B1ACKMAN y WOUT
(1989). Un antecedente de los estudios de convergencia son los análisis de regresión, entre los que hay que
mencionar el de BOWMAN y ANDERSON (1963), hoy no muy de moda por establecer la existencia de unos -umbra-
les- educativos previos a determinados niveles de renta que no siempre se clan. A esta corriente habría que aña-
dir los estudios sobre la convergencia o el -catch-up- que no son sino una variante de los anteriores en tanto en
cuanto intentan explicar en qué medida y debido a qué factores se produce un acortamiento en términos abso-
lutos o relativos entre el nivel de renta de un país o conjunto de países adelantados y otros atrasados. Véase al
respecto ABRAmovrrz y DAVID (1996).
(11) GERSCIIENKRON (1965), SANDBERG (1993).
(12) ABRAmovrn y DAVID (1996, pp. 21-22).
(13) BAtimot, BIACKMAN y wouT (1989). BARRO (1991) obtiene conclusiones similares al estimar que la con-
vergencia se produce cuando se controla por los niveles educativos iniciales de la muestra de países.

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ses? Si considerarnos que la transferencia gía atómica, pasando por la máquina de
de tecnología, a través de las inversiones vapor y el motor de combustión. Y la tec-
en capital que a su vez van a dar lugar a nología no es neutral porque no es un re-
una mayor intensidad capital/trabajo y a curso más a la espera de ser utilizado sino
una reasignación del factor trabajo, es cla- que es un bien que hay que producir y
ve en la mejora de la productividad de los cuya generación depende, a su vez, del in-
países atrasados, tan sólo una tecnología genio y de los conocimientos disponibles,
«neutral», es decir, adecuada a distintas do- es decir, del capital humano 15 . He aquí un
taciones de recursos naturales y humanos primer ejemplo de la interrelación entre
por una parte, y para la que el tamaño del distintos factores (cambio tecnológico y
mercado fuera irrelevante por otra, daría educación) sobre el que volveremos más
lugar a una convergencia incondicional en- adelante 16.
tre países atrasados y desarrollados 14 • El El descubrimiento de que la conver-
problema es que la tecnología, en princi- gencia es condicional y depende en parte
pio, no es neutral, ya que los avances tec- del stock disponible de capital humano, in-
nológicos se producen por lo general cluyendo la capacidad de generar y adap-
corno respuesta a problemas específicos, tar nuevas tecnologías, ya lo había
tales como la relativa escasez o abundan- avanzado Sandberg al distinguir entre las
cia de algún recurso en concreto, un ejem- dos acepciones del concepto atraso: po-
plo clásico son los cambios técnicos breza, o bajos niveles de renta por habitan-
relacionados con la energía, que abarcan te, e ignorancia, o bajos niveles de
desde el aprovechamiento del viento o del educación por habitante, siendo las dife-
agua mediante los molinos, hasta la ener- rencias en esta última las que determinan,

(14) Arriumovrrz y DAvrñ (1996, p. 47). Los historiadores económicos han insistido siempre en las dificul-
tades del proceso de difusión de nuevas tecnologías, con el consiguiente esfuerzo de adaptación a las condi-
ciones particulares de cada entorno, bien por diferencias en las materias primas, entre las que cabría destacar
las que afectan a las fuentes de energía, bien por diferencias en la mano de obra, muy especialmente, su com-
posición y calidad. Véanse al respecto PoLLAitñ (1982), LANDES (1969). Un estudio recientemente publicado su-
giere que la tecnología desarrollada en los Estados Unidos lurante la segunda mitad del siglo xix tenía un sesgo
sexual, es decir, favorecían el trabajo masculino o femenino en distintos períodos FIELD.IIENDREY (1999).
(15) Cuando se hace referencia a la importancia del «capital humano- en la generación y en la adaptación
y mejora de los avances técnicos que posibilitan el crecimiento económico, se está haciendo referencia al «co-
nocimiento. disponible que permite el cambio tecnológico, no como algunos autores parecen entender, en una
aplicación simplista y mecanicista de este concepto, al «nivel educativo formal, del inventor. El acuerdo parece
ser mayor en cuanto al establecimiento de dos períodos en el proceso de cambio técnico para los que los co-
mienzos del siglo x)<, en un sentido lato, sirven de divisoria. En principio, se ha dicho que el cambio técnico se
hace intensivo en capital humano a partir de este momento, al basarse de forma cada vez más estrecha en los
avances científicos. La revolución informática de las últimas décadas ha dado lugar, no obstante, a la aparición
de una paradoja que sirve para poner de manifiesto lo artificial de esta divisoria: grandes avances en la infor-
mática han sido producidos por Individuos que no llegaron a completar su «educación formal- a nivel universi-
tario, como Bill Gates. Para un repaso reciente sobre la complementariedad entre tecnología y capital humano
véase LAU (1996), para una discusión de sus orígenes GOLDIN y KATZ (1996).
(16) Los Estados Unidos, a comienzos del siglo xix ofrecen un ejemplo clásico de respuesta innovadora a
un aumento en el tamaño del mercado —determinado por el embargo comercial establecido por Inglaterra du-
rante las guerras napoleónicas que limitaba la llegada de productos del continente, por una parte, y por la aper-
tura de nuevas vías fluviales de comunicación con el interior del país que ampliaba el tamaño del mercado
nacional, por otra— que fue posible gracias a la existencia de una oferta relativamente elástica a corto plazo de
capital humano para la producción de innovaciones técnicas. SOKOLOIT y KilAN (1990).

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en su opinión, el potencial de crecimiento basados en el análisis de regresión entre
de una economía países 211 . Ante la creciente variedad de va-
La coherencia de los resultados obteni- riables utilizadas en este tipo de análisis,
dos, pese a diferencias de matiz y muy es- de las que contabilizan como significativas
pecialmente metodológicas, ha puesto unas 50, estos autores contrastan la robus-
claramente de manifiesto la importante tez de los resultados existentes mediante la
contribución de la educación al desarrollo introducción de alteraciones en la informa-
económico. Ahora bien, si este tipo de es- ción utilizada —número o definición de las
tudios —contabilidad del crecimiento o variables— y constatan que muy pocas ad-
convergencia— ha permitido identificar a la miten el test, es decir, son significativas,
educación como una de las «causas inme- por lo que parece arriesgado generalizar
diatas» del crecimiento económico, ha de- acerca de la influencia de la mayor parte
jado sin clarificar las «causas últimas», de ellas sobre el crecimiento económico.
planteando cuestiones tales como a qué se El problema de la interrelación entre las
debe el crecimiento de la educación y por distintas variables es especialmente serio y
qué un año más de educación tiene deter- los modelos actuales —función de produc-
minados efectos sobre el crecimiento eco- ción o análisis de regresión, básicamente—
nómico. Ni la «contabilidad del crecimiento» no hacen sino ponerlo de manifiesto sin
ni los análisis de regresión o de convergen- llegar a solucionarlo.
cia son concluyentes a la hora de explicar Un somero repaso a la contribución de
las causas últimas del crecimiento econó- la educación al crecimiento económico,
mico, en parte porque la teoría económica una de las variables más frecuentemente
no ha sido capaz aún de elaborar un mo- utilizadas en uno y otro tipo de análisis,
delo definitivo de este fenómeno en el que nos sirve para poner de manifiesto los pro-
se inserte el análisis empírico 18. Tanto una blemas a que hacíamos referencia con an-
como otra aproximación comparten una terioridad: definición y medición de la
serie de problemas y limitaciones que ha- educación, por una parte, y su interrela-
cen referencia a la propia naturaleza de los ción con otras variables, por otra.
conceptos (como se observa en el cuadro
1) 19 y de los datos empleados y, lo que es
PROBLEMAS DE DEFINICIÓN Y
más grave, ambas parten del supuesto de ESTIMACIÓN
que la contribución de cada variable al cre-
cimiento económico es independiente de Estrictamente hablando la educación no es
las demás, supuesto que en la realidad es sino uno de los distintos componentes de
difícilmente sostenible. Un ejemplo esta- lo que se conoce como «capital humano»,
dístico de este problema lo proporciona el según Schultz, el conjunto de atributos del
trabajo de Levine y Renelt relativo a la con- ser humano «que son valiosos y pueden ser
sistencia de los análisis de convergencia aumentados mediante las inversiones ade-

(17) SANDBERG (1993). El artículo, originalmente publicado en 1982, es una magnífica exposición de las
distintas vías a través de las cuales la educación contribuye al crecimiento económico.
(18) Quizá los avances más significativos hayan sido los intentos de Romer y Lucas de incluir el cambio
tecnológico como variable independiente en la función de producción tradicional, junto a la tierra, el trabajo y
el capital. La dificultad, sin embargo, estriba en la aplicación empírica de estos modelos teóricos.
(19) Así, mientras Denison mide el output a través de la renta nacional neta, Jorgenson lo estima a través
del valor añadido bruto, con resultados muy dispares como se observa en el cuadro 1 que reproducimos. Véase
ABRAMOVITZ (1989a, pp. 18-20).

(20) LE VINE y RENELT (1992).

15
cuadas». 21 Así,junto a la educación tanto res monetarios, mientras que en el segun-
formal como informal habría que conside- do se computan unidades físicas. En am-
rar la formación en el trabajo, la salud, la bos casos se tiene en cuenta el nivel
nutrición y otras variables que repercuten educativo; en ninguno de ellos se conside-
en la calidad y el tamaño de la población. ra, sin embargo, la «inversión» o el stock
Como es obvio, de la mera enumeración obtenido mediante la educación «no-for-
de las «cualidades» que determinan el stock mal», es decir, la obtenida al margen del
de capital humano de una determinada sistema educativo o lo que es lo mismo la
población, se deduce que su estimación relacionada con la formación en el em-
no es tarea fácil ". De ahí que, aunque pleo, la autoformación, etcétera. La utiliza-
haya habido algunos intentos de estimar un ción de una u otra estimación dependerá
indicador «completo» de las inversiones en del tipo de análisis que se pretenda llevar
capital humano, de hecho es la educación la a cabo y, en última instancia, de la natura-
que ha acaparado mayor atención 23. leza de los datos disponibles, siendo la se-
Los indicadores más frecuentemente gunda alternativa mucho más frecuente
utilizados para medir la educación tienen que la primera hoy por hoy 24.
en cuenta inputs y no outputs, y pueden Lo primero que hay que tener en
ser de dos tipos, monetarios y físicos. El cuenta a la hora de optar por una de estas
primero mide el gasto en educación, tanto estimaciones es que no miden lo mismo y,
público como privado, mientras que el se- por tanto, los resultados del análisis pue-
gundo calcula el número de estudiantes den variar según se utilice una u otra. Las
por grupos de edad —las tasas de escolari- inversiones en educación miden un input
zación. En el primer caso se utilizan valo- destinado a la producción de capital bu-

(21) Scuurrz (1981).


(22) En principio se admite que las diferencias Benéticas- que puedan existir entre distintos grupos hu-
manos no son significativas y se distribuyen de forma aleatoria, de forma que una determinada inversión desti-
nada a mejorar la «calidad. del capital humano tendrá los mismos efectos independientemente de la población
sobre la que se aplique. Este supuesto no es estrictamenté cierto, sin embargo, como demuestra el estudio de
la evolución a largo plazo de la estatura de la población I umana, la función del nivel de vida de la población
durante períodos cruciales para el crecimiento del cuerpo. Una mayor estatura indica una mejor alimentación y
una menor incidencia de enfermedades, y tiene como efecto inmediato una mayor esperanza de vida. Y una
población más sana y longeva incide positivamente sobre las inversiones en educación al mejorar el rendimien-
to de los niños, durante los primeros años de vida que normalmente se dedican a la educación, y al alargar el
período durante el cual estas inversiones rendirán su fruto. Si la salud influye positivamente sobre la educación,
no es menos cierto que ésta incide sobre aquélla al mejorar determinados hábitos alimenticios, sanitarios, re-
productivos, etc., como tendremos ocasión de ver en breve. Sobre la contribución al crecimiento económico de
la mejora de salud véase FOGI:l. (1990).
(23) El .indice de desarrollo humano- (HDI, Human Development lndex) desarrollado por el Banco Mun-
dial, un intento de estimar el nivel de bienestar como contrapunto al nivel de renta, puede también considerarse
como un estimador del nivel de capital humano, ya que sus distintos componentes —tasas de alfabetización, es-
peranza de vida, diferencial sexual— hacen todos referencia a distintos componentes del capital humano. Sin
embargo, este índice no ha resultado operativo, además de presentar notables insuficiencias como indicador de
las inversiones en capital humano, en especial en lo que a educación se refiere al no considerar sino tasas de
alfabetización cuya significación se limita a países atrasados y con niveles educativos relativamente bajos.
(24) Históricamente éste no es el caso. Los primeros estudios sobre la contribución de la educación al
desarrollo económico se basan en estimaciones de las inversiones en educación, Fisiii.ow (1971). No hay que ol-
vidar, sin embargo, que hay una elevada correlación entre estimadores monetarios y físicos de capital humano, si
bien estos últimos funcionan mejor al analizar su relación con otros indicadores del crecimiento económico.

16
mano, educación en este caso, y pueden sión en educación —el factor tiempo o años
ser más o menos complejas. Desde el gasto de escolarización. En este caso estimamos
público destinado a la formación de los qué porcentaje de la población en edad es-
maestros, hasta los gastos en sueldos e in- colar se encuentra matriculada y obtenemos
fraestructura educativa, sin olvidar los gas- tasas de escolarización por niveles educati-
tos privados derivados de la propia vos. Pero al igual que en el caso del gasto en
escolarización, como el material escolar, y educación, las tasas de escolarización no mi-
del mantenimiento de los estudiantes, den la eficacia del sistema educativo. Una
como la alimentación y el vestido, e inclu- misma tasa de escolarización puede indicar
so el coste de oportunidad que la escolari- realidades muy distintas en función de mul-
zación puede suponer para la economía titud de variables, desde la duración del año
familiar, todos ellos son gastos que pueden escolar y la calidad de los profesores, hasta
ser calculados con mayor o menor preci- el grado de absentismo, de repetición de
sión. Ahora bien, una estimación del gasto curso, de abandono de los estudios, etc. In-
en educación, por completa que sea, no cluso en el caso de que todas estas variables
nos da información alguna sobre el grado se mantuvieran constantes —no hubiera ab-
de eficacia con que se gasta. Dicho de otro sentismo, no se repitieran cursos, todos los
modo, la educación es un bien que hay estudiantes terminaran el ciclo escolar es-
que producir y, por tanto, para obtener tablecido— el grado de aprovechamiento
una idea lo más correcta posible interesa y, por tanto, el nivel educativo alcanzado
saber no sólo cuánto se gasta sino cómo se no sería el mismo en todos los estudian-
gasta, es decir, cuál es la función de pro- tes. Es bien sabido que factores persona-
ducción en la que se sitúa ese gasto. les, tales como la salud del individuo o
Así, por ejemplo, dado que la produc- sus propias características genéticas y so-
ción de educación es una actividad intensi- ciales, tales como el nivel educativo de
va en capital humano, es decir, en los padres y en especial de la madre,
personal con determinados niveles educa- afectan claramente al nivel educativo que
tivos, la escasez de capital humano puede éste alcanza.
encarecer el coste de producción de una Ahora bien, pese a que ambos tipos
unidad educativa. Dicho en otras palabras, de indicadores presentan problemas si-
la escasez de maestros primarios, por milares —el más importante es que sean
ejemplo, puede encarecer el coste de este estimaciones de los inputs del sistema
tipo de instrucción de forma que a una educativo, bien en unidades monetarias
misma inversión corresponderá una mayor en el caso de las inversiones, bien en uni-
o menor producción de educación en fun- dades físicas, en el caso de las tasas de es-
ción del nivel de sueldo de los maestros, y colarización—, las diferencias son notables.
por tanto de su escasez relativa. No hay De los dos, el que más fácilmente nos per-
que olvidar, además, que un ajuste en este mite aproximarnos a una estimación del
tipo de costes, que son los más altos en toda producto educativo es el segundo, ya que
inversión en educación, no es posible a corto las dificultades relacionadas con los pro-
plazo dada la naturaleza misma de la forma- blemas de medición son fácilmente obvia-
ción en capital humano, que requiere de un das, como veremos a continuación y, lo
plazo relativamente largo para su producción. que es más importante, encierra una serie
El mismo problema se observa si en de ventajas que hacen posible la transfor-
lugar de utilizar el gasto en educación se mación de una información que mide un
utilizan las tasas de escolarización. En este flujo, en información que mide un stock.
caso el indicador monetario ha sido susti- De ahí que sea el indicador más frecuente-
tuido por un indicador físico de la inver- mente utilizado.

17
Los problemas relacionados con el di- señalar, además, la elevada correlación exis-
ferente significado de una misma tasa de tente entre distintos indicadores del stock
escolarización en función del grado de educativo medido a partir de tasas de esco-
aprovechamiento o abandono del sistema larización, tanto entre aquellos estudios que
educativo, son relativamente fáciles de so- utilizan el mismo tipo de datos y la misma
lucionar. Así, las tasas de escolarización pue- metodología, con un R 2 de un 0,92, como
den corregirse por la duración del año entre aquellos que siguen distintas técnicas,
escolar, la tasa de asistencia a la escuela y, en con un R 2 superior al 0,8 26.
especial, mediante el uso de las tasas de gra- El problema de la estimación del stock
duación que miden el paso de un nivel edu- educativo es, por tanto, serio pero no insu-
cativo a otro. En principio la diferencia entre perable y, lo que es más importante, no es
las tasas de escolarización y las de gradua- un problema único en economía. No justi-
ción será mayor en sociedades atrasadas fica, pues, el rechazo a la inclusión de esta
donde la implantación y arraigo del siste- variable en el análisis del crecimiento eco-
ma educativo es menor y donde el coste nómico a largo plazo. Puede y está siendo
de oportunidad de la escolarización au- mejorado siguiendo vías alternativas en
menta rápidamente con la edad. función de la naturaleza de los datos dis-
Las tasas de escolarización, más o me- ponibles. Veamos qué sucede con su posi-
nos refinadas en función de la información ble relación con otras variables utilizadas
disponible que siempre será mayor para en este tipo de estudios.
períodos recientes y países desarrollados,
se transforman en estimaciones del stock LAS EXTERNALIDADES DE LA
educativo disponible mediante el método EDUCACIÓN
del inventario perpetuo o alguna variante
de éste. En términos generales, el método EDUCACIÓN Y PRODUCTIVIDAD
consiste en calcular el número de años de
escolarización completados por cada gene- La relación positiva existente entre el nivel
ración mientras dura su vida activa. Para educativo de un individuo y su salario fue
un ario determinado se obtiene así la me- uno de los primeros indicios de la contri-
dia de años de educación recibidos por to- bución del capital humano al crecimiento
dos aquellos que se encuentran en edad económico. De ella parten dos interpreta-
de trabajar, por lo general los comprendi- ciones opuestas que han dominado la lite-
dos entre los 15 y los 65 arios de edad, te- ratura durante algunas décadas. La
niendo en cuenta la probabilidad de que primera, también conocida como la teoría
hayan sobrevivido 25 . Este método tiene del capital humano, supone que esta rela-
muchas variantes y ha sido y es uno de los ción indica que los trabajadores más edu-
utilizados con mayor frecuencia. Conviene cados son más productivos, y por ello

(25) Curiosamente el método del inventario perpetuo tiene en cuenta las -salidas- de la población produ-
cidas por muerte, calculadas a partir de las tablas de mortalidad por edades, pero no presta atención a otra for-
ma de «salida- no menos importante para determinados grupos de edad, en especial los que se encuentran en
lo que se considera la etapa más productiva del ser humano, la primera madurez, como es la emigración tanto
interregional como internacional. Como veremos más adelante, la emigración puede suponer una considerable
pérdida de capital humano por contribuir, precisamente al hacer descender la presión de la población, al desa-
rrollo económico de la región que experimenta la pérdida.
(26) Véanse por ejemplo, BARRO y LEE (1993) O NEIIRU, SWANSON y DUBEY (1995). Los R2 han sido calculados
por estos últimos para los trabajos de BARRO y LEE (1993), PSACIIAROPOULOS y ARRIAGADA, KYRIACOU y sus propias
estimaciones (pp. 391-92).

18
obtienen salarios más elevados 27 . El sala- que perciben los graduados universitarios
rio mide la productividad marginal del tra- frente a los de secundaria. Por oposición a
bajo y el individuo invierte en educación esta interpretación surgió la denominada
estudiando y dejando de trabajar y, por tesis credencialista según la cual el sistema
tanto, de obtener ingresos, pérdida que es- educativo es tan sólo el filtro que utilizan
pera compensar mediante unos ingresos los empresarios para seleccionar a los tra-
futuros mayores (esta tesis aparece refleja- bajadores, es decir, para resolver un pro-
da en el gráfico I donde se estima el coste blema de información en el mercado
de oportunidad de la educación superior laboral, y no tiene relación con la produc-
mediante la comparación de los salarios de tividad 28.
los graduados de secundaria y la universi- La teoría del capital humano ha dado
dad). El área cubierta por el signo menos lugar a numerosas estimaciones de las ta-
(-) en este gráfico representa el coste —en sas de rendimiento de la educación, tanto
términos de salario no percibido— en el privadas como públicas o sociales. Por lo
que incurren los estudiantes de universita- general, las tasas de rendimiento privadas
rios a diferencia de aquellos que empiezan comparan los beneficios en términos de
a trabajar al terminar los estudios secunda- salario con los costes individuales de la in-
rios. Por el contrario, el área cubierta por versión en educación, incluyendo tanto los
los signos más (+) representa el beneficio indirectos como el coste de mantenimiento
derivado de una mayor retribución salarial del estudiante y el coste de oportunidad
GRÁFICO 1
Tasa de beneficio de la educación universitaria
Salario
Graduadas Universitarios

Graduados Secundaria

Edad
CS
Tiempo (años)
-4 0
c (coste) n (beneficio)

Fuente: l'sa.charopoulos y Woodliall (1985)

(27) No vamos a entrar en el debate de estos primeros .economistas de la educación , sobre si la contri-
bución de la escuela reside en los conocimientos impartidos o en su efecto socializador, que dominó el debate
hasta los años setenta. Véase al respecto &nue. (1985). De hecho aún es frecuente que a falta de datos directos
sobre la educación —bien monetarios bien físicos— se estime el stock de capital humano a partir de las diferen-
cias salariales entre mano de obra cualificada (educada) y no-cualificada (sin educación), como ponen de ma-
nifiesto los trabajos de MULLIGAN y SALA-I-MAR-nN (1995). Los problemas de infravaloración que puede presentar
este método se discuten en las páginas siguientes al considerar la contribución de la educación al crecimiento
económico «fuera del mercado laboral..
(28) Esta tesis se encuentra muy desacreditada hoy en día debido, en gran parte, a estimaciones más pre-
cisas de la contribución de la educación en actividades realizadas al margen del mercado laboral, en especial
en la agricultura y entre las mujeres, como se discute en las páginas que siguen.

19
que supone no trabajar a determinadas dos los niveles educativos, superior al ren-
edades, y corno los directos (matrícula, li- dimiento social —lo que sugiere que la edu-
bros, etc.). Las tasas públicas o sociales in- cación está subvencionada públicamente a
cluyen, además de los costes privados, el todos sus niveles 3°.
gasto público en educación (cuadro II) 29• En principio, pues, y a no ser que admi-
En términos generales, se ha observa- tamos que los empresarios son ineficaces
do que las tasas de rendimiento a este por definición y retribuyen a los trabajadores
tipo de capital son comparables con las por encima de su productividad, la teoría del
obtenidas en inversiones en capital físi- capital humano según la cual las diferencias
co, que el rendimiento es mayor para las salariales reflejan distintos grados de cualifi-
inversiones en instrucción primaria —indi- cación o educación de la mano de obra, pa-
cando probablemente un problema de rece sólidamente basada. Es más, esta tesis
sobreinversión en educación superior—, y se mantiene tanto en países desarrollados
que el rendimiento privado es, para to- como en países en vías de desarrollo.
CUADRO II
Tasas de rendimiento a la educación por nivel educativo, sexo y área geográfica
(en porcentaje)

Región/País Pública Privada

Primaria Secundaria Universitaria Primaria Secundaria Universitaria


África 26 17 13 45 26 32

Asia 27 15 13 31 15 18

América Latina 26 18 16 32 23 23

Intermedio 13 10 8 17 13 13

Avanzado --- 11 9 12 12

Varones Mujeres

Primaria Secundaria Universitaria Primaria Secundaria Universitaria


Todos los 19 16 15 17 21 14
países

Total Total
Países en vías 11 15
de desarrollo
Fuente Psacharopoulos (1985: Cuadros 1 y 5).

(29) De hecho todos los estudiosos reconocen que el método de estimación de las tasas de rendimiento
de la educación es más apropiado para las privadas que para las sociales, al no incluir éstas las posibles exter-
nalidades y otros efectos sobre el cambio técnico que pueda tener la educación a nivel agregado.
(30) Sobre las tasas de rendimiento de la educación véanse los trabajos de Psna IAROPOULOS (1973); (1981);
(1985); (1989) y (1993) donde se recogen y sistematizan los estudios particulares realizados para distintos países
y sectores de ocupación.

20
En este momento quizá sería conve- podría indicar la creciente complementa-
niente establecer una comparación entre riedad existente entre cambio técnico y
los resultados obtenidos del análisis de las educación. Así, se ha insistido repetida-
tasas de rendimiento a la educación y los mente que la tecnología de la primera re-
que en general se obtienen en los estudios volución industrial, y de hecho todo el
sobre la convergencia entre distintos paí- cambio técnico que la precede, se basaba
ses. Mientras los primeros destacan que la en su mayor parte en la experimentación
inversión en instrucción primaria obtiene directa, por lo que tanto la invención como
un rendimiento más elevado que la educa- la innovación y, lo que es casi tan impor-
ción superior, los segundos sugieren que tante desde el punto de vista de la difusión
es la educación secundaria la que facilita la del crecimiento económico, la adopción
convergencia de los países atrasados con de tecnologías desarrolladas en otros paí-
los líderes. En realidad no existe contradic- ses, no precisaba de grandes inversiones
ción alguna entre ambos resultados. Como en educación formal A partir de la se-
veremos a continuación, cada uno de ellos gunda revolución industrial, sin embargo,
ilustra un aspecto distinto de la contribu- la tecnología se ha hecho cada vez más
ción de la educación al crecimiento econó- compleja y su vinculación a los avances de
mico y pone de manifiesto la complejidad la ciencia más estrecha, es lo que la ha he-
de esa relación. cho más intensiva en capital humano ".
La elevada rentabilidad de la instruc- Esta creciente complementariedul en-
ción primaria recoge su contribución a un tre el capital físico y el capital humano la
proceso clave en las primeras etapas de la ponen de manifiesto tanto estudios del
modernización económica, en concreto, al tipo «contabilidad del crecimiento» como
aumento de la movilidad geográfica y ocu- estudios de convergencia, y se deduce,
pacional de la población imprescindible igualmente, de los análisis de las tasas de
para que mejore la productividad de la eco- rendimiento a la educación al mismo tiem-
nomía mediante la reasignación del factor po que explica el que en economías inten-
trabajo. Esa capacidad de «adaptarse al cam- sivas en capital, por lo general en países
bio», inherente al proceso de modernización, desarrollados, el nivel educativo más ren-
parece depender de una difusión equilibra- table sea el secundario 34.
da de la instrucción primaria, en especial
de la alfabetización, entre toda la pobla- EDUCACIÓN Y MOVILIDAD DE LA POBLACIÓN
ción 31 . Por su parte, la importancia que
parece adquirir la educación secundaria en Las diferencias salariales, que en teoría mi-
el proceso de convergencia de las econo- den diferencias en la productividad de los
mías atrasadas con las más desarrolladas, trabajadores y podrían ser atribuidas a di-

(31) Sobre la importancia de una difusión de la instrucción primaria equilibrada entre ambos sexos véase
NÚÑEZ (1992); NúÑez (1997).
(32) Sobre el cambio técnico que precedió y acompañó a la primera revolución industrial véase Mons
(1990), LANDES (1969), y un magnífico ejemplo para la Europa Moderna en VRIES y Woutpe (1997).
(33) Véase LAu (1996) para un repaso de la situación actual y GotDIN y Iürz (1996) para una discusión
sobre este fenómeno a comienzos del siglo xx.
(34) No hay que olvidar otro hecho poco destacado en la literatura al respecto. El proceso de educación
es un proceso de selección en el que sólo los mejor capacitados llegan a los niveles más altos. Cuando el acceso
a la instrucción primaria es muy restringido, o lo que es lo mismo, cuando los niveles de analfabetismo son
elevados, se está excluyendo de entrada a un sector de la población de ese proceso de selección, por lo que la
sociedad desaprovecha parte del -talento- disponible por falta de identificación.

21
ferentes niveles educativos según la teoría bajas, en la actividad económica o el país
del capital humano, serían uno de los de- que pierde población. La reasignación del
terminantes de las migraciones, es decir, factor trabajo tendría efectos positivos tan-
de la reasignación del factor trabajo entre to para los receptores como para los emi-
distintos sectores productivos y diferentes sores, independientemente de los costes y
regiones. La teoría económica nos dice beneficios individuales derivados de todo
que el desarrollo económico supone una cambio.
mejora en la asignación de los distintos ¿Cómo contribuye la educación a la
factores de producción, entre los que se reasignación del factor trabajo? En teoría
encuentra el trabajo. La reasignación del facilitando la movilidad tanto ocupacional
factor trabajo hacia actividades económi- como geográfica de la población, como ya
cas con un mayor grado de productividad señalara Sandberg o, lo que es lo mismo
conlleva un aumento de la renta mediante facilitando la «capacidad de hacer frente a
la mejora de la productividad del sector los desequilibrios» que conlleva el proceso
que pierde población y el aumento de ac- de crecimiento económico, en palabras de
tividad en aquellos sectores que tienen Schultz 35 . El cambio ocupacional supone
una productividad más alta. Así, el aumen- la capacidad de aprender nuevas técnicas
to de la productividad en la agricultura po- y procesos de producción mientras que el
dría verse favorecido por la disminución geográfico puede tan sólo implicar la capa-
de la ocupación en este sector, que se tra- cidad de aplicar unas técnicas ya conoci-
duciría, por ejemplo, en un aumento de la das a un medio similar pero alejado del
población dedicada a la industria o, sim- contexto familiar o, en un contexto más
plemente, en un aumento de la emigración extremo, implicar al mismo tiempo un
hacia otras regiones o países. Tanto el cambio ocupacional 36.
cambio estructural como el geográfico, En una serie de artículos recientes, Wi-
dentro de un mismo país o a escala inter- lliamson analiza el proceso de convergen-
nacional, son, por tanto, indicadores de cia que tuvo lugar entre algunos países
que se ha producido una reasignación del europeos y del continente americano en
factor trabajo. En ambos casos, cambio es- un contexto de globalización de la econo-
tructural o migración, las diferentes pro- mía entre 1870 y 1913, e intenta contrastar
ductividades que inicialmente habrían empíricamente algunas de las explicacio-
motivado el cambio o la migración acaba- nes que se han utilizado con mayor fre-
rían desapareciendo al disminuir allí don- cuencia 37. Con una muestra de países de
de inicialmente eran más altas, en el sector la periferia europea entre los que se en-
o país receptor, y mejorar donde eran más cuentran los países escandinavos, Irlanda,

(35) SANDBEKG (1993), SC111117, (1981). En principio, aunque hay pocos estudios definitivos sobre el tema,
se ha observado que en un mismo medio social los más educados emigran más.
(36) I.os patrones de asentamiento seguidos por los inmigrantes europeos en los Estados Unidos ponen
de manifiesto la importancia del capital humano en los procesos migratorios. Por lo general los nórdicos elegían
zonas geográficas que, por suelo y muy especialmente clima, se asemejaban a sus regiones de origen, lo que
les permitía aplicar sus conocimientos agrícolas sin grandes problemas de adaptación (véase una exposición de
esta tesis en NÚNEz119931).
(37) A nosotros nos interesa destacar aquellas que directa o indirectamente tienen que ver con el capital
humano, entre las que O'Rourke y Williarnson destacan a Barro, para quien la convergencia depende -de una
dotación de capital humano satisfactoria», Sandberg, quien sugiere que »una buena educación desempeñó un
papel importante en la convergencia sueca», o TORTELLA (1994), quien refiriéndose a los países latinos, ha seña-
lado que una »educación pobre ayuda a explicar [su] retraso». O'RouRKE y WILLIAMSON (1995, p. 1).

22
Italia, España y Portugal, O'Rourke y Wi- que veíamos afecta a los estudios de con-
lliamson miden la contribución de la emi- vergencia al igual que a los de función de
gración y de la escolarización (primaria) a producción, cuando las conclusiones del
la convergencia salarial que se produce en- estudio apuntan a la existencia de una es-
tre estos países atrasados y los líderes eco- trecha relación entre educación y emigra-
nómicos, Inglaterra y los Estados Unidos, ción, que explicaría la relación existente
convergencia que según la teoría económi- entre salarios y productividad °.
ca debería haberse producido. Puesto que la emigración es una de las
Entre sus conclusiones, los autores vías de reasignación del factor trabajo y la
destacan la enorme variabilidad de situa- educación es un indicador de la calidad de
ciones que se observan entre países muy ese factor, el estudio de la relación entre am-
educados (escandinavos) y escasamente bas variables puede resultar iluminador 41 . ¿Es
educados (la Península Ibérica), así como la emigración función del nivel educativo de
en el grado de participación en las fuertes la población?, ¿hay un nivel educativo por
corrientes migratorias del momento, alto debajo del cual la movilidad de la población,
entre los nórdicos y bajo entre los penínsu- y en consecuencia su capacidad de benefi-
lares, con Irlanda o Italia situándose entre ciarse de las oportunidades que se le abren
unos y otros dependiendo de la variable a en otros países o regiones, se reduce?
analizar. Ante esta variedad de situaciones
a los autores no les extraña que los resul- LA CONTRIBUCIÓN DE LA EDUCACIÓN FUERA
tados del análisis de regresión sean tam- DEL MERCADO LABORAL
bién dispares y se obtengan explicaciones
distintas a los comportamientos atípicos, La utilización del salario como indicador
buenos o malos, que se observan en unos de diferencias en la productividad del fac-
y otros países ". La emigración, por su par- tor trabajo presenta algunas limitaciones.
te, aparece como la responsable de •toda Entre otras fuentes de error este tipo de
la convergencia» que experimentaron Ir- análisis introduce un sesgo en las caracte-
landa e Italia, mientras que los españoles y rísticas de la muestra con la que se trabaja:
portugueses «quienes se hubieran benefi- ésta sólo incluirá a aquellos trabajadores
ciado más de la emigración en masa» fue- que perciben un salario, lo que excluye del
ron «incapaces de explotar» esta vía ". En cómputo a aquellos cuyo trabajo no se ve
el caso escandinavo tanto la educación remunerado de igual forma, por lo que el
como la emigración explican parte del pro- sesgo será tanto mayor cuanto mayor sea
ceso de convergencia con los líderes. Am- el peso de los trabajadores no asalariados
bas variables, educación y emigración en una determinada economía 42 • Este fe-
aparecen como independientes, problema nómeno es más frecuente en sociedades

(38) Así, la baja escolarización explica -casi toda 'la desviación a la baja [del crecimiento económico] en
Italia», entre el 11 y el 75%, de la desviación negativa en la Península Ibérica y nada de la »desviación al alza-
irlandesa, que sí explica, para sorpresa de los autores, los buenos niveles de alfabetización de este país. OROUR-
KE y WILUAMSON (1995, p. 19).
(39) O'ROURKE y WILUAMSON (1995, pp. 22-23) .
(40) Al preguntarse -¿Qué hubiera ocurrido si la tasa de emigración española hubiera sido similar a la de
O'Rourke y Williamson concluyen que se hace necesario estudiar las conexiones existentes. OROURKE y
WininmsoN (1995, p. 44 y cuadro 10).
(41) Un estudio reciente que confirma esta relación, es el de PÉREZ y SERRANO (1998).
(42) Otros sesgos pueden ser debidos a imperfecciones en el mercado laboral, falta de competitividad y
transparencia, etc.

23
atrasadas donde la agricultura tradicional o La selección de un grupo concreto de
de subsistencia y el pequeño comercio tie- trabajadores, los asalariados, puede dar lu-
nen una mayor presencia que actividades ta- gar a otros problemas de infravaloración
les como la industria o los servicios. El de la contribución de la educación al creci-
crecimiento económico se debe en parte a la miento económico. Entre ellos cabría seña-
reasignación del factor trabajo de actividades lar, el impacto de la educación sobre las
poco productivas, como la agricultura o el tasas de participación laboral y las tasas de
pequeño comercio, a otras de mayor produc- desempleo. Como en el caso anterior, el
tividad, como la industria o el sector servicios. sesgo sería mayor en sociedades atrasadas
Pero, si algo distingue a un tipo de actividades en las que la divisoria entre la economía
de otro es la importancia del autoempleo en- de mercado y la economía tradicional es
tre las primeras y de los mercados laborales en altamente permeable y poco definida. El
las segundas 43. Es decir, en sociedades atrasa- ejemplo más claro de este problema es el
das el mercado laboral tiene una presencia trabajo femenino tradicionalmente adscrito
mucho menor que en sociedades desarro- a la producción de bienes y servicios en el
lladas, por lo que la estimación de la con- marco de la familia —incluida la produc-
tribución de la educación al crecimiento ción de hijos— y por tanto ausente en los
económico mediante el análisis de las tasas estudios de capital humano basados en la
de rendimiento privado —relacionando ni- relación entre salarios y educación. A este
vel educativo y salario— supone dejar fuera respecto conviene destacar el hecho de
de análisis a un sector económico muy im- que, en sociedades atrasadas, la participa-
portante ". El desarrollo económico supo- ción laboral de la mujer a lo largo de su
ne un desplazamiento progresivo de vida activa presenta una forma de U deter-
actividades previamente realizadas en el minada, en gran parte, por su papel como
marco de la unidad familiar hacia el merca- procreadora: la tasa de participación es
do, por lo que el aumento en la tasa de ac- elevada antes de la maternidad y en las
tividad económica puede tan sólo reflejar etapas finales de su vida, cuando este pa-
una mejora del cómputo derivada del ma- pel pierde importancia 45. Si la tasa de ren-
yor peso alcanzado por actividades realiza- dimiento privado a la educación de la
das en este último. Si lo que se trata es de mujer se calcula exclusivamente a partir de
explicar el desarrollo económico a largo los salarios percibidos, es decir, durante el
plazo estos cambios son cruciales y la teo- período de »participación en el mercado la-
ría del capital humano, estrictamente defi- boral» al principio y al final de su vida ac-
nida como la relación entre educación y tiva, se están excluyendo del cálculo los
salarios, es insuficiente en la medida en años supuestamente más productivos —de
que no puede integrarlos en su análisis. mayor remuneración— según la función sa-

(43) Igualmente se ha observado que la tasa de autoempleo es mayor entre la población de más edad, lo
que quizá podría reflejar el proceso de modernización económica con el consiguiente aumento del trabajo asa-
lariado entre los más jóvenes y, supuestamente, más educados Salan (1988) o bien el mayor recurso al au-
toempleo corno método de pensión en la vejez frente a la fuerte competencia existente en los mercados
laborales RANSOM y St I (1986).
(44) Estudios recientes indican, no obstante, que el salario es un buen indicador de la tasa de rendimiento
de la educación no a título individual, es decir, del perceptor de esta renta, sino de la unidad familiar. El salario
es considerado parte de los ingresos totales de la familia que invierte en la educación de sus miembros en fun-
ción de sus propias necesidades de mano de obra y de ingresos externos, CIIISWICK (1983).
(45) Véase el desarrollo de esta hipótesis con más detalle en NÚÑEZ (1997), donde se recoge la bibliografía
específica sobre este tema.

24
larial de un trabajador normal. Es decir, se tendrían que darse una serie de supuestos
está infravalorando la tasa de rendimiento que en la realidad no se clan: mercados la-
de la educación de la mujer al no valorarse borales transparentes e integrados, compe-
su «trabajo» fuera del mercado laboral. tencia perfecta, alta movilidad del factor
La educación también contribuye, ade- trabajo, etc. 47
más, a facilitar el acceso a puestos labora- Quizá uno de los sectores en los que
les fuera de la unidad familiar, con lo cual la contribución de la educación al desarro-
no es sólo el salario percibido el que deter- llo económico escapa más claramente a la
mina la tasa de rendimiento de la inversión mera relación salarial sea la agricultura. Y
en educación sino la probabilidad de tener sin embargo, numerosos estudios coinci-
un empleo frente a la alternativa de perma- den en señalar que la educación contribu-
necer involuntariamente inactivo, es decir ye positivamente a la mejora de la
desempleado. Este problema se observa productividad en este sector ' 8. En la ex-
tanto en países atrasados, donde el empleo plotación tradicional o familiar, tanto la
tiene un fuerte componente cíclico en fun- toma de decisiones —actividad propia del
ción de la distribución de las tareas agríco- empresario— como el trabajo en sí mismo
las a lo largo del año, como en sociedades —actividad propia del obrero o trabajador
desarrolladas, donde las tasas de ocupa- asalariado—, pueden ser provistos por los
ción están muy segmentadas en función distintos miembros de la unidad familiar.
del nivel educativo, siendo más altas entre De ahí que la contribución cle la educación
los mejor educados 46. Es decir, la educa- a la mejora de la productividad agrícola
ción afecta a la elección de empleo, de for- tenga dos componentes distintos y com-
ma que la movilidad de la población, tanto plementarios y, por tanto, íntimamente co-
geográfica como ocupacional, es en parte nectados entre sí: los que se derivan de
función cíe la educación. mejoras en la asignación de recursos y los
Podría, sin embargo argüirse que las que afectan a la eficiencia del trabajador.
diferencias salariales recogen de hecho to- Entre estos últimos se incluyen todos aque-
das estas situaciones a las que hemos he- llos relacionados con la calidad del trabaja-
cho referencia. Así, por ejemplo, los dor en sí mismo en el marco de unos
salarios serán bajos si el desempleo, y por recursos naturales dados y de una tecnolo-
tanto la oferta de trabajo, es alto. Y lo mis- gía determinada. Entre los primeros cabría
mo podría argumentarse en relación con distinguir dos aspectos, la selección cle los
cada uno de los problemas señalados con inputs y su asignación, siendo quizá el pri-
anterioridad. Pero para que los salarios re- mero, la selección de los inputs —entre los
cogieran realmente todas estas peculiarida- que habría que incluir tanto tipo de culti-
des —desempleo, participación, etc.— vos y de tecnología como la introducción

(46) La mayor ocupación entre los de mayor educación, unida a tasas de rendimiento estables o crecien-
tes, nos lleva a otro tema que ya hemos señalado con anterioridad: la complementariedad entre capital humano
y tecnología.
(47) Uno de los problemas clave al que se enfrenta el análisis de las tasas de rendimiento es el peso del
gobierno y de las empresas estatales dentro del sistema de retribuciones salariales, tratándose, sin embargo, de
un sector que no se somete a las reglas del mercado laboral ya que su tamaño no viene exclusivamente deter-
minado por las razones de eficacia y productividad que caracterizan a la empresa privada.
(48) Para una comparación histórica véase HAYAMI y RUMN (1970) o un clásico en este tema como GRILI-
CIIES (1964). Para un repaso de los estudios sobre países en vías de desarrollo véase LOCKIIEED (1987), LOCK/IEED,
JAmisoN y LAU (1980), y PuittiPs y NIARI3LE (1986).

25
de nuevas semillas o fertilizantes— el más que ha de enfrentarse. De ahí que, en con-
importante. En definitiva, por tanto, se diciones de estancamiento y falta de dina-
considera que la educación del agricultor mismo o cambio económico, la importancia
no sólo mejora su grado de eficacia como de la educación se reduzca y, viceversa,
trabajador —efecto dominante en los análi- aumente cuando el ritmo de cambio se
sis que relacionan salario/educación— sino acelera. La agricultura cíe subsistencia, ce-
también, y muy especialmente, su capaci- rrada en sí misma, sería un caso típico de
dad para tomar decisiones en lo que res- estancamiento y atraso en el que la educa-
pecta tanto al producto final como al ción tendría escaso valor, mientras que la
proceso productivo. Esto equivale a tener agricultura de mercado, por su parte, su-
en cuenta una serie de cualidades que nor- pone un aumento de las posibilidades de
malmente no forman parte de aquéllas que crecimiento y cambio económico a través
distinguen a un obrero cualificado de otro de la especialización, momento a partir del
no especializado. El agricultor, como em- cual la educación empieza a tener rendi-
presario, tiene que tomar decisiones que mientos positivos. Y al contrario, la falta de
abarcan campos tan distintos como el análi- educación puede ralentizar el proceso de
sis de los costes y beneficios de introducir de- cambio económico dificultando la adop-
terminados cambios en la explotación ción de nuevas formas de producción. La
—técnicos, organizativos o de cualquier otro educación, por tanto, no determina el cre-
tipo— y la comprensión de nuevas técnicas o cimiento económico sino que lo facilita
formas de producción, todo lo cual requiere cuando las condiciones para que éste ten-
tina mejora cle su capacidad para adquirir e ga lugar —ampliación de mercados, mejo-
interpretar nueva información. Es decir, el ras técnicas, etc.— se clan 5('. El que una
agricultor no es sólo trabajador, en el sen- sociedad se beneficie en mayor o menor
tido de productor, sino también empresa- medida de sus «posibilidades» de creci-
rio y responsable de la toma de decisiones, miento dependerá no sólo de su nivel de
y la educación le hace más eficaz, y por atraso, y por tanto de su «potencial» cíe cre-
tanto más productivo en ambos casos 49. cimiento, sino de su nivel cíe capital huma-
Así, ha sido posible establecer que son ne- no, que determina su capacidad para
cesarios un mínimo de 3-4 años de estu- beneficiarse del atraso. De nuevo nos en-
dios primarios para que la educación del contramos con la tesis desarrollada por
agricultor tenga efectos positivos, y que su Sandberg como variación a la tesis de las
contribución puede estimarse en torno a ventajas del atraso económico de Gers-
una mejora de la productividad de la agri- chenkron: la ignorancia, y no la pobreza,
cultura alrededor del 8% de media. determinarán el ritmo de crecimiento eco-
Una vez más, nos encontramos con el nómico una vez que las condiciones para
hecho de que la educación es importante crecer se den. Una variación de esta tesis,
como determinante del acierto con que el en la que la educación ocupa un papel
individuo reacciona ante los cambios a los menos claro, es la de la «capacidad social»

(49) Sobre este tema véanse los trabajos de LOCKI IEED, inmisoN y LAu (1980); JAmisoN y 1.Au (1982) que sin-
tetizan numerosos estudios particulares sobre países en vías de desarrollo hoy en día. La estimación directa del
producto agrícola, y su relación con el nivel educativo, es quizá la única que ha sido proseguida con éxito; en
la mayor parte de los casos, sin embargo, se siguen utilizando los salarios como indicador de la productividad
del factor trabajo, suponiendo, por tanto, que el mercado laboral funciona correctamente y los salarios son fun-
ción de la productividad del trabajador.
(50) La contribución media de cuatro años de instrucción primaria se estima en un 1,3% del alimento total
de la productividad en la agricultura tradicional y un 9,5% en una agricultura moderna o de mercado.

26
desarrollada por Abramovitz para explicar un hecho fundamental: la demanda priva-
por qué unos países crecen más rápida- da de educación no es neutral, sino que
mente que otros pese a tener niveles de tiene un fuerte sesgo en función del sexo.
desarrollo económico similares 51 . Podría, Conviene señalar, antes de proseguir, que
pues, afirmarse que la teoría del capital hu- la demanda de educación la ejerce una ge-
mano, representada por el análisis de las neración en beneficio de la siguiente, es
tasas de rendimiento privadas de la educa- decir, son los padres los que deciden la
ción —basadas en la supuesta relación en- cantidad así como el tipo de educación
tre salarios y productividad— estudia que ha de recibir «cada uno de sus hijos»,
situaciones de equilibrio estático y no in- siendo por lo general el criterio de eficien-
corpora completamente el efecto que la cia —en términos de renta futura para la
educación tiene en situaciones de desequi- unidad familiar— y no el de equidad —entre
librio, que son la esencia misma de todo los distintos hijos— el que determina la de-
proceso de crecimiento económico. manda de educación. Teóricamente existe
una relación inversa entre el número de hi-
LA CONTRIBUCIÓN DE LA EDUCACIÓN AL
jos y la cantidad de educación que reciben:
CRECIMIENTO ECONÓMICO SEGÚN EL SEXO
a mayor número de hijos menor será la in-
versión en capital humano —salud, educa-
Según Lawrence Summers ción, etc.— que cada uno recibe y
viceversa. Mientras el primer caso —exceso
cuando se tienen en cuenta todos sus be- de hijos— es un «círculo vicioso» que no
neficios, la educación de las mujeres posi- permite la acumulación de capital humano
blemente tenga tasas de rendimiento y que dificulta, por tanto, el crecimiento
superiores a cualquier otro tipo de inver- económico, el segundo —fecundidad mo-
sión posible en los países en vías de desa-
derada— es un «círculo virtuoso» que lo fa-
rrollo 52.
vorece 5'1 . La transición de uno a otro
Esta afirmación puede resultar excesi- estadio se realiza mediante el aumento de
va o propia de los tiempos en que vivimos, las inversiones en educación, proceso que
con un énfasis quizá empíricamente injus- tiene lugar a muy largo plazo. Ahora bien,
tificado en la igualdad entre los sexos. Y se ha observado que, independientemente
sin embargo no lo es. Es, junto con la con- del número de hijos, las mujeres reciben
tribución de la educación a la mejora de la menos educación que los varones ". La deci-
productividad agrícola, el caso que mejor sión de invertir en la educación de los varones
ilustra la complejidad del análisis de la rela- más que en la educación de las mujeres está
ción entre educación y desarrollo económico. basada en la estimación de las tasas cíe rendi-
Para comprender adecuadamente el miento privadas de la educación realizada por
problema, así como la rotundidad de la los padres en función de la información de
afirmación de Summers, hay que partir de que disponen —probabilidad de obtener un

(51) ABRAMOVITZ (1989).


(52) SUMMERS (1992).
(53) Este es el modelo desarrollado por BECKER, MURI'll y y TAMURA (1990).
(54) Sobre el diferencial sexual en las tasas de alfabetización véase NÚÑEZ (1992) para España, NÚÑEZ
(1997) para una estimación a largo plazo en diversas áreas del mundo. Schultz ha estimado la elasticidad de las
tasas de escolarización por sexos a distintas variables, tales como la renta, el precio relativo de los maestros, el
tamaño relativo de la población en edad escolar y el grado de urbanización. En todos los casos la elasticidad es
mayor para las mujeres que para los varones (0,43 para las mujeres y 0,24 para los varones en la instrucción
primaria; 0,65 y 0,30 respectivamente en la educación secundaria en el caso de la renta) Scifirrz (1988).

27
puesto de trabajo remunerado fuera del sólo se alcanza en algunos países a finales
ámbito de la familia o bien de hacerse car- del siglo xtx y que sigue siendo un objetivo
go cle la explotación familiar—, pero da lu- pendiente en la mayor parte del mundo ".
gar a una insuficiente inversión en la Con anterioridad a la implantación del siste-
educación de las mujeres, como hemos se- ma educativo actual, en la medida en que
ñalado con anterioridad, pues no tiene en los hijos recibían algún tipo de instrucción,
cuenta numerosas extemalidades de la ésta se impartía en el hogar familiar y de
educación. Así, en función de las tasas de ahí la importancia del nivel educativo de la
rendimiento privadas, la inversión en la madre. Ahora bien, el aumento de la edu-
educación de los varones es correcta; en cación de la mujer conlleva un incremento
función de la contribución de la educación en su tasa de participación laboral, lo que
al desarrollo económico, cuyos beneficios supone que el coste de oportunidad de te-
también repercuten sobre el bienestar de ner hijos también aumenta, al ser su cuida-
la familia, es incorrecta. Veamos cómo se do y educación tareas intensivas en mano
articulan las externaliclades a la educación de obra femenina. La escuela suple, al me-
de la mujer que no captura adecuadamen- nos en parte, el esfuerzo de la madre en la
te la tasa de rendimiento privada a la inver- tarea de tener una familia; la guardería o la
sión en educación. escolarización preescolar surge como res-
En principio, la educación de la mujer puesta a este creciente coste de oportuni-
tiene los mismos efectos que la educación dad del tiempo femenino, supliendo a la
de los varones en términos de aumento de madre en el cuidado de sus hijos a edades
la participación laboral o mejora de los sa- cada vez más tempranas.
larios, lo cual justificaría por sí solo este La escuela, no obstante, no es un sus-
tipo de inversión. Sus efectos inmediatos tituto perfecto de la familia. De ahí que al
exceden, no obstante, este ámbito y afec- aumentar el coste de oportunidad de tener
tan a una tarea en la que el trabajo femeni- hijos la demanda de este bien se reduzca y
no es clave: la producción de hijos, tarea el tamaño de las familias se adapte en con-
que sólo muy recientemente en países de- secuencia. La educación de la mujer influ-
sarrollados ha pasado de la esfera familiar ye, en primer lugar, sobre el número total
a la de mercado. La salud y la educación de hijos, es decir, sobre la fertilidad, pero
de los hijos son dos actividades intensivas también sobre su capacidad de sobrevivir a
en capital humano que tradicionalmente la edad adulta %. Un tamaño más reducido
han sido provistas por la familia, en espe- de la descendencia permite, a igualdad de
cial por las mujeres. Si nos ceñimos a la renta, un aumento del gasto por niño —tanto
educación, no hay más que recordar que la en términos monetarios como en tiempo de
escolarización primaria universal es un fe- dedicación a su cuidado y formación por
nómeno relativamente reciente que tan parte de la madre— con lo que se incre-

(59 Véase NINE/. (1992) para una comparación de la situación en España y algunos países de su entorno;
CotriouGif y LEWIN (1993) para un panorama reciente en aquellos países en los que aún no se ha alcanzado.
(56) La educación influye sobre la fertilidad a través de complejos mecanismos que incluyen factores que
determinan la demanda de hijos –como la función de coste/beneficio de tener hijos, o las preferencias por un
determinado tamaño de familia–, factores que determinan la oferta de hijos –como la edad de contraer matri-
monio, la salud de padres e hijos y la esperanza de vida de los recién nacidos– y factores que regulan la ferti-
lidad —como los distintos mecanismos de control de la natalidad y las actitudes sociales relativas a su uso–.
Véase PsAcitAIMPOUIDS y W(X)Dlint.t. (1985). Sobre la interacción de estos factores con el nivel de instrucción pri-
maria de la madre véase CCX:IIKANE, LESLIE y °TIARA (1980), Scituurz (1989), y a nivel secundario SUBIMItA0 y FUI-
NEY (1993).

28
mentan sus probabilidades de sobrevivir a Hoy día no puede negarse que la edu-
la edad adulta 57. Y un aumento en la espe- cación es un factor clave en el proceso de
ranza de vida al nacer supone, al mismo crecimiento económico, más importante, si
tiempo, una mejora de su salud, lo que cabe, que la dotación de recursos natura-
hace más rentable no sólo su vida adulta les. Los avances técnicos que nos permiten
sino también toda inversión que se haga independizarnos del medio nos hacen más
en su educación. Todo esto explica, por dependientes de la dotación de capital hu-
tanto, la alta rentabilidad de la educación mano sin el cual no es posible el cambio
femenina. La educación de la mujer permi- técnico. De ahí la importancia que la tec-
te la transición entre los dos círculos —vi- nología, el conocimiento y, en definitiva, la
cioso y virtuoso— relativos al crecimiento educación, han adquirido en los modelos
de la población establecidos en el modelo tradicionales de desarrollo y que han per-
de Becker y Murphy. Si en el primer caso mitido una reducción paulatina y significa-
el número de hijos es elevado y su calidad, tiva cíe aquel «residuo» identificado por los
en términos tanto de salud como de edu- primeros economistas que aplicaron el mé-
cación, es baja, en el segundo sucede todo empíricamente. De ahí, también, que
exactamente lo contrario: el número de hi- la educación sea una de las variables siste-
jos se reduce pero aumenta su capital hu- máticamente utilizada en los estudios so-
mano, es decir, gozan de una mejor salud bre la convergencia entre países atrasados
y de un mayor nivel educativo. y desarrollados, convergencia que se ha
demostrado está condicionada por una se-
»WHERE ARE WE NOW ("... EN LA RELA- rie de características entre las que podría
CIÓN ENTRE EDUCACIÓN Y DESARRO- encontrarse la educación.
LLO ECONÓMICO? Ahora bien, identificar a la educación
como variable explicativa del proceso de
En 1985 Mark Blaug se preguntaba dónde crecimiento económico no equivale a en-
se encontraba la economía de la educación tender de forma exhaustiva cómo influye
después cle décadas cle investigación. Su la educación sobre este proceso cle creci-
respuesta era un tanto pesimista y alertaba miento. Aquí, una vez más, los estudios
contra los peligros cle generalizaciones fá- microeconómicos difieren de los enfoques
ciles a partir cíe información incompleta o macro y los estudios de un tipo cíe especia-
inadecuada. El breve repaso realizado en listas —los economistas de la educación— se
estas páginas sobre la relación entre edu- apartan de los de otros —los economistas
cación y desarrollo económico nos permite del desarrollo. A los problemas de medi-
ser moderadamente optimistas, sin llegar a ción y estimación cíe las distintas variables
descartar completamente los peligros a a analizar, hay que añadir la complejidad
que se refería Blaug. de un proceso tal que el desarrollo econó-

() (dónde estamos ahora).


(57) La reducción de la mortalidad parece estar vinculada a dos factores: •el nivel de los conocimientos
disponibles para combatir las enfermedades, y los medios disponibles para poner en práctica estos conocimien-
tos-. PSACI IAIZOPOULOS y WooDi tAu. (1985). La educación determina claramente el primero y tiene, por tanto, efec-
tos inmediatos sobre la mejora de la salud de la familia. Numerosos estudios en distintos países sugieren que
como media cada año adicional en la educación de la madre da lugar a una reducción de entre un 5 y un 10 %o
en la tasa cle mortalidad infantil. No sólo un mejor conocimiento de cómo controlar las enfermedades —median-
te la utilización de agua potable, por ejemplo— sino una mejor comprensión de la calidad nutritiva de los dis-
tintos alimentos puede contribuir a la reducción en las tasas de mortalidad ya la mejora en la salud de los niños,
cuya evolución atestigua la evolución de la estatura de la población a largo plazo.

29
mico y la dificultad de interrelacionar entre — «Resource and Output Trendes in the Uni-
sí las distintas variables que lo explican. ted States Since 1870», en American Eco-
Así, por lo general cada enfoque analítico nomic Review, 46, 2 (1956), pp. 5-23.
considera la contribución de la educación — Thinking About Growth. Cambridge,
a un aspecto concreto del crecimiento eco- Cambridge University Press, 1989.
nómico, pero encuentra dificultades para — »Thinking About Growth», en Thinking
integrar en el modelo de análisis propues- About Growth, M. ABRAMOVITZ, Cam-
to otros posibles efectos. La educación, al bridge, Cambriclge University Press,
tratarse de una forma de capital muy parti- 1989a, pp. 3-79.
cular, personificada en un individuo o so- ABRAMOVITZ, M. y DAVID, P. A.: »Convergen-
ciedad y no transferible o apropiable con ce and Deferred Catch-Up: Proclucti-
la misma facilidad que otras formas de ca- vity Leadership and the Waning of
pital, es quizá el ejemplo paradigmático de American Exceptionalism», en 71.2e Mo-
esta complejidad si bien no es el único. saic of Economic Growth, R. LANDAU,
Algunas hipótesis parecen, sin embar- T. TAYLOR y G. WRIGHT. Stanforcl, Stan-
go, confirmarse. Entre ellas cabría destacar ford University Press. 1996, pp. 21-62.
la creciente complementariedad que se ha ALDcRovr, D.H. y CATTERALL, R. E.: Rich
observado a lo largo cle este siglo entre las Nations-Poor Nation. The Long Run
inversiones en capital físico, capital huma- Perspective. Cheltenham, UK, Edward
no y tecnología de forma que cada uno de Elgar. 1996.
ellos afecta a la efectividad –o productivi- BARRO, R.J. y LEE, J. W.: »International Com-
dad— de los demás. Ahora bien, en países parisons of Eclucational Attainment»,
atrasados el problema no se reduce a un en National Bureau of Economic Re-
mayor o menor desfase tecnológico, sino search, 4349 (1993).
que se ve agravado por una población ex-
BARRO, R. J.: «Economic Growth and Con-
cesivamente joven y poco capitalizada,
cuya mejora educativa, necesaria para la vergence», en An International Center
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cle una reducción drástica de su tasa de
crecimiento que permita mejorar un au- — »Economic Growth in a Cross Section of
mento del gasto en educación por habitan- Countries», Quaterly Journal of Econo-
te. Y una cle las vías más eficaces para mics, 106 (1991).
reducir el crecimiento de la población es la •Government Spencling in a Simple
mejora en el nivel educativo de las muje- Model of Endogenous Growth», en
res. Dado que la formación de capital huma- Journal of Political Economy, 98
no es un proceso a largo plazo, y que no (1990).
admite soluciones a corto plazo como la im- BAUNIOL, W. »Procluctivity Growth, Con-
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