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UNIVERSIDAD ETAC

MAESTRÍA EN
DOCENCIA
LIDERAZGO Y GESTIÓN
TAREA 7

Tutor:
Lesly Ortiz Guzmán
Alumno:
Benjamín Aguilera Martínez

FECHA DE ENTREGA: 16 de diciembre de 2018


INTRODUCCIÓN

El desempeño de los líderes educativos es fundamental para lograr mejorar la calidad de la


educación, promoviendo la equidad y buscando ofrecer una respuesta oportuna a las
exigencias siempre cambiantes de nuestra sociedad, que como sabemos, cuando los tiempos
cambian, la sociedad cambia, la educación cambia y por lo tanto los funcionarios, directivos y
profesores también deben cambiar, por lo que hoy en día no es suficiente saber enseñar los
contenidos especializados si no liderar en todos los niveles para alcanzar una educación de
calidad.

Actualmente el éxito de una organización depende en gran medida del desempeño de sus
líderes, por lo que es tarea de dichas instituciones convertir a las personas en líderes, tomando
en cuenta que el liderazgo no solo atañe a quienes ocupan cargos directivos, sino a toda la
organización, ya que cada miembro debe estar dispuesto a colaborar para alcanzar cada una
de las metas propuestas.
DESARROLLO

Independientemente del estilo de liderazgo que se aplique, un buen líder confronta las
situaciones de trabajo con equidad, justicia y objetividad tratando de juzgar al trabajo y no a
las personas, siempre manteniendo y fomentando una comunicación abierta y franca con sus
subordinados, con el propósito de intercambiar ideas sobre el curso de acción que debe seguir
la organización y explicar la razón de sus decisiones.

En la actualidad, el papel del líder dentro de los grupos y las organizaciones es fundamental
para el logro de los objetivos y metas planteadas por las mismas, y en las instituciones
educativas esto no es la excepción.

Tocando el tema de las instituciones educativas, es importante identificar, que los cambios
constantes de la sociedad como producto de reformas económicas, sociales y empresariales
que se desarrollan en los últimos tiempos, obligan a estas instituciones a desarrollar una serie
de estrategias que le permitan la búsqueda constante de la mejora en la calidad educativa, en
beneficio de los alumnos y sociedad en general, una de estas estrategias es la implementación
del modelo de gestión de la calidad el cual es un referente permanente y un instrumento eficaz
en el proceso de toda organización ya que favorece la comprensión de las dimensiones más
relevantes de la organización, establece criterios de comparación con otras organizaciones y
el intercambio de experiencias.

Este modelo de gestión es aplicado a la calidad educativa, por lo que más bien es conocido
como modelo de gestión de la calidad educativa, donde la calidad educativa no se reduce
solamente al éxito escolar entendido como excelentes resultados académicos, es decir la
calidad educativa no resulta de los logros de excelencia de una sola de sus áreas, sino que
cada una de ellas afecta al resultado.

Ya que conocemos por una parte lo que es el liderazgo y sus características y por otra le
modelo de gestión de la calidad educativa, es momento de identificar la influencia que tiene el
liderazgo en la gestión de la calidad educativa, desde mi perspectiva esta influencia es amplia
e importante, ya que son los líderes los que conducen las instituciones educativas y para que
exista calidad es indispensable que la dirección ejerza un liderazgo claro y comprometido que
contagie al personal que tiene a su cargo para el logro de los objetivos.

Es claro que no es posible pensar en una mejora continua de la educación sin recursos
materiales y económicos, pero también es claro que no vamos a llegar a ella si no contamos
con directivos, maestros y profesores involucrados y comprometidos con los más altos valores
de la gestión educativa.

A la hora de plantear la eficacia de la escuela y la calidad de la educación se suele considerar


al liderazgo como uno de los factores clave, ya que existen diferencias claras entre el
funcionamiento y satisfacción de un grupo liderado y el de aquel en el que se produce ausencia
de líder, por lo que se sostiene que la actuación de los líderes afecta al ambiente y la cultura
de la organización escolar, y que ésta modela el sentido que los miembros del centro dan a su
trabajo y su predisposición hacia el cambio y la mejora.

En contraposición con décadas anteriores donde se le emparejaba con términos como


autoritarismo o burocracia; hoy se demanda un ejercicio del liderazgo caracterizado por su
visión de futuro y su capacidad de innovación y gestión de cambios. Esta nueva forma de
entenderlo recibe los calificativos de transformacional y visionario.

En los albores del siglo XXI, en un mundo con cambios tan vertiginosos, donde las tecnologías
y el conocimiento avanzan; las sociedades demandan a las instituciones educativas que
preparen a las nuevas generaciones para afrontar todos estos retos. Si las sociedades
cambian, las escuelas “fieles reflejos de la sociedad”, también deben cambiar. En este sentido,
Peter Senge (1990) señaló que las organizaciones deben adaptarse al entorno cambiante que
las rodea y esto exige líderes que motiven y dirijan a la organización y a sus miembros para
que estos aprendan a adaptarse a los cambios. Además, el liderazgo de la organización
también debe cambiar a medida que ésta se desarrolla y madura.

Actualmente el éxito de una organización depende en gran medida del desempeño de sus
líderes, por lo que es tarea de dichas instituciones, convertir a las personas en líderes tomando
en cuenta que el liderazgo no solo atañe a quienes ocupan cargos directivos sino a toda la
organización, ya que cada miembro debe estar dispuesto a colaborar para alcanzar cada una
de las metas propuestas.

De acuerdo con lo establecido por John Adair, existen siete principios que deben tomar en
cuenta las organizaciones para el desarrollo de un líder, estos principios se adaptan y aplican
a cualquier contexto, por lo que están enfocados también al ámbito educativo, y son los
siguientes:

1. Entrenamiento para el liderazgo. El líder siempre debe recibir una formación y


entrenamiento adecuado para las funciones que tendrá que desempeñar. En principio, debe
conocer el papel genérico de líder de equipo, lo cual le proporcionará las herramientas
necesarias para aplicarlas al contexto y situación que le toque gestionar en cada momento.

En ocasiones las organizaciones cometen el error de actuar de forma precipitada y sin una
planeación adecuada del desarrollo de las cualidades que se requieren de los líderes, o se
concibe al liderazgo como la formación de un gerente, estos errores producen consecuencias
como la falta de claridad en el concepto de liderazgo o una falta de compromiso hacia este.

Por lo anterior, Adair recomienda que los cursos de Liderazgo de equipo sean breves, de dos
o tres días de duración como máximo, dirigidos por un entrenador capacitado y apoyados por
material de e-learning. El entrenamiento debe ser simple, práctico, relevante, diversificado
(ofrecer variedad en los ejercicios y en la dificultad de estos, casos de estudios, películas) y,
sobre todo, tener un carácter completamente abierto a la participación de quienes lo realizan.

2. Selección de líderes. Hay cuatro formas por las cuales los miembros de una organización
se convierten en líderes, son: emergente, designación, elección y hereditaria.

La forma emergente es cuando una persona se convierte en líder cuando no existe en líder en
el grupo y la mayoría de los miembros lo eligen, la designación surge cuando los superiores
eligen a la persona que será líder, la elección se da cuando por medios democráticos el grupo
elige a su líder y por último la hereditaria cuando un hijo ostenta el derecho de líder por legado
de nacimiento.

Para calibrar el potencial de una persona para transformarse en líder se pueden considerar
determinadas competencias en cinco áreas que son básicas, estas son:

-El liderazgo y el trabajo en equipo.


-La toma de decisiones.
-Las habilidades comunicativas.
-Auto-management.
-Cualidades personales.

3. El mentor como maestro de líderes. Las personas pueden convertirse en líderes si


cuentan con la guía de un maestro líder. La relación maestro – alumno es más productiva que
un curso o lectura de manuales, algunos elementos claves de este principio son:

-El mentor es un guía o consejero de confianza que asiste a una persona para apoyarla en el
cumplimiento de su rol y de sus responsabilidades.
-La manera más natural de aprender a ejercer el liderazgo es en la práctica laboral bajo la
instrucción del maestro líder.
-Los mentores de liderazgo constituyen un principio, no un sistema, se trata de un proceso
natural y no necesitas ser organizado ni propiciado.
-El mentor debe ejercer una influencia veraz y rigurosa en el momento justo para que el
aprendiz obtenga la confianza y el coraje necesario para afrontar el desafío del liderazgo.
-Los mejores maestros también son alumnos y tienen que saber escuchar para superarse en
su función como mentores.

4. Ofrecer oportunidades de liderar. Es importante que la institución educativa brinde la


oportunidad a sus profesores de liderar ya sea en el salón de clases o en los puestos directivos.
En el desarrollo del liderazgo es necesario plantear desafíos cada vez más difíciles, brindar
oportunidades para ejercer el liderazgo y capacitar y entrenar a los líderes seleccionados.
Para enfrentar desafíos es necesaria una preparación específica por lo que se debe tomar en
cuenta la profesión de cada uno de los miembros de la institución. Adair considera que se debe
hacer una revisión una vez por año haciendo al personal las siguientes interrogantes:

-¿Quiere ser un líder del negocio?


-Si quiere ser un especialista, ¿cuáles son sus metas específicas?
-¿Piensa seguir en la organización o está barajando la posibilidad de cambiar de aires?
-¿Estaría interesado en trabajar en el exterior?

5. La educación para el liderazgo es algo más que enseñar a dirigir empresas. Cuando
se habla de entrenar managers o gerentes, management es el proceso educativo a través del
cual las personas aprenden técnicas modernas de administración, finanzas, marketing, teoría
organizacional, técnicas de planificación y control, análisis de casos de estudio y vías para
motivar a los subordinados. Los métodos para aprender son:

-Enseñar.
-Entrenar.
-Educar.
-Instruir.
-Tutoría.
-Coaching.
-Mentor.

Los líderes trascienden a las organizaciones y son las sociedades quienes forman a sus
líderes. Las familias, las escuelas y las universidades son las grandes matrices de los líderes,
ellos son testigos de cómo se expanden los horizontes de los jóvenes al tiempo que observan,
reflexionan, practican, experimentan, discuten y exploran sobre el buen liderazgo. A este
respecto, los valores morales (la integridad y probidad, sobre todo) son intrínsecos al ejercicio
del liderazgo.

Las escuelas y universidades brindan a los líderes el conocimiento general y los medios para
adquirir conocimientos técnicos o profesionales que necesitarán para ejercer el liderazgo, una
buena educación transmite deseos de aprender, capacidad para pensar con claridad y
estimulación para usar la creatividad, virtudes esenciales que un líder debe poseer.

6. Una estrategia para el desarrollo del liderazgo. El concepto de estrategia se fundamenta


en las siguientes condiciones:

-Largo plazo.
-Importancia.
-Multi-componente.

Al elaborar un plan estratégico para desarrollar líderes se debe estipular que tipo de líder se
necesita y que cambios se requiere introducir en la cultura de la organización. Desde una visión
estratégica, el conjunto siempre tendrá más relevancia que las partes, también se debe tomar
en cuenta cuál es la estructura de la organización a fin de conceder a los líderes la mayor
libertad posible para la toma de decisiones, dentro de las restricciones propias de la
organización.

7. El director ejecutivo como vehículo de formación. Aquí debemos tener en cuenta que
como director ejecutivo podemos considerar al director de la institución o al supervisor,
etcétera, dependiendo del área en la cual te desenvuelves.

Él es quién adquiere el rol de líder estratégico y debe seleccionar y desarrollar líderes a través
del ejemplo, también el líder estratégico debe conocer a los líderes operacionales y de los
equipos ya que al conocer profundamente lo que hacen contará con la información necesaria
para elaborar una estrategia apropiada para la organización.

El rol del director ejecutivo, respecto de sus líderes, será de un asesor o guía del liderazgo, a
través del dialogo entablará un intercambio de saberes, logrará sostener relaciones
interpersonales valiosas con los otros líderes, enseñando y aprendiendo a la vez.

El líder estratégico se distingue del manager, en que busca una oportunidad para enderezar el
rumbo del negocio en toda ocasión, es quien se debe focalizar en cómo se están llevando a
cabo las tareas comunes, cómo se puede trabajar como equipo de manera sobresaliente y
cómo cada individuo (incluido el mismo director y los distintos niveles de liderazgo) pueden
hacer aportaciones al bien común de la organización.
CONCLUSIONES

Las empresas en estos tiempos de globalización y constantes cambios dependen en gran


manera de la actuación de sus líderes para lograr el cumplimiento de sus metas y objetivos.
Por esta razón, las mismas empresas deben ser las principales interesadas en la preparación
y el desarrollo de líderes que mediante su participación permitan una mejora en la calidad de
los productos y servicios ofrecidos, y lo mismo aplica para las instituciones educativas, por lo
tanto, la preparación de líderes es un aspecto crucial para cualquier organización moderna.

El liderazgo es un elemento fundamental para el correcto funcionamiento de cualquier tipo de


empresa, cualquier organización que no cuente con un buen líder que dirija sus pasos, estará
destinada eventualmente al fracaso, por el contrario las empresas que cuentan con personal
con potencial de liderazgo y son capaces de desarrollarlos y escucharlos, tendrán altas
probabilidades de ser exitosas, un elemento importante a considerar respecto a este liderazgo,
es que no hay algún estilo de liderazgo que sea superior a los demás o que sea el más
recomendado para usar, considero que el estilo correcto, es aquel que se adecua a las
necesidades específicas de una situación en particular, por lo que un líder debe ser capaz de
manejar los diversos estilos e identificar las situaciones en las cuales es conveniente
aplicarlos.
BIBLIOGRAFÍA

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desarrollo de los líderes. Consultado el día 12 de diciembre de 2018 en:
http://etac.clientes.tralcom.com/tc-
etac/cursos/LIDERAZGO_C/s7_01.html?id_examen_act=1&id_inscripcion=679713

Cuevas, M. y Díaz, F. e Hidalgo, V. (2008). Liderazgo de los directores y calidad de la


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Consecución de la Calidad en Instituciones de Educación Media Superior. Consultado el día
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http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=76102318.pdf

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