Está en la página 1de 2

MM, enero 1903, p. 13. Toca el Quinteto con el cuarteto Parent.

Dice que “a la inversa


de la mayoría de los pianistas, su toque es discreto y untuoso que se armoniza y se
funde, sin aplastarlos con los instrumentos de cuerda.

MM, diciembre 1903, p. 383. Ya ha dado tres sesiones, y va a durar todos los martes
hasta el mes de mayo. Sesiones (17 en la Schola sobre la obra de Bach)

MM, diciembre 1903, p. 384. En Montpellier da obras de Bach, Rameau, Senaille y


Loeillet, junto con una violinista y otra violinista.

MM, enero 1904, p. 28. El concierto en sol de Bach?

BRET, Gustave. «La quinzaine musicale. Schola Cantorum». Le Courrier Musical, París, 1-II-
1904, p. 85.

6 Sesiones históricas de la música de Bach de Selva en la Schola Cantorum, desde el 16


de enero, 30 de enero, 13 febrero,

MM, enero 1906, p. 15. Toca Fantasía cromática y fuga de Bach y piezas de Couperin,
aparte de Beethoven, Bordes, d’Indy, Albéniz, Franck….

MM, mayo 1906, p. 142. Selva toca en Rouen, donde es súper conocida. Dio obras de
Rameau, Couperin, Bach Dandrieu y Scarlatti.

12/03/1907: Da un concierto histórico en la Sala Pleyel dedicado a la Fantasía. Toca


fragmentos de la primera sonata de las escenas bíblicas de Kuhnau (El combate entre
David y Goliath, Fantasía) y la fantasía en La M de C. Ph. E. Bach. Luego Mozart,
Beethoven, Schumann… MM, 1907, 13/79 del doc de las portadas.

Da un concierto en febrero/marzo 1907, una sesión dedicada a la variación, en la que


tocó las 30 variaciones de Bach (recordemos que las había estrenado), las 33 variaciones
de Beethoven, y variaciones de Dukas sobre un tema de Rameau. (marzo 1907, p.73).
Hay reseña, en la que dice que un día tenía que tratar la manera de tocar de Selva,
porque tiene una técnica muy curiosa, muy inteligente y que no se parece apenas a las
que admiramos generalmente (p. 73).

Dice que es humana como músico, esto no quiere decir que exprese sentimientos
humanos, sino que no busca la individualidad musical, sin reparar en que somos
hombres antes que individuos. Realiza la verdadera belleza musical, la que los
individuos más diferentes reconocen por unanimidad cuando están dotados
musicalmente.

Sobre las variaciones Goldberg, el crítico recuerda a sus lectores que es el perfecto
modelo de equilibrio entre las diferentes parámetros, de belleza única. Las de
Beethoven, menos agitadas, menos profundamente emocionantes, menos interesantes,
menos finamente musicales, menos perfectas, seguramente, más “atrayentes”, quizás.
Las de Dukas, de una firmeza increíble en nuestra época. Nosotros estamos bien lejos de
las seducciones exquisitas de debussystas, que apasionan un instante pero que se va
rápido: el músico verdadero no sabría entretener durante mucho tiempo, ni a menudo. El
hombre sano solo disfruta un tiempo bastante breve a su albedrío/libertinaje, incluso
delicados y refinados. Dukas es, al contrario, un compositor potente, viril, sobrio y
conmovedor. He leído detenidamente sus variaciones y son las más bonitas que se han
podido escribir. Selva toca maravillosamente los pasajes fuertes, con energía rítmica y
de ternura. No obstante, habría querido un más fino análisis en la ejecución de ciertas
páginas donde refinamientos exquisitos adornan con sobriedad las arquitecturas
sonoras, llenas de firmeza y de grandeza. Dukas es uno de los compositores cuyas obras
consuelan, en una época de vergonzosa fealdad o de bonita tontería y la esperanza de un
renacimiento de la moral musical y el buen gusto. Escrito por Jean Huré. Marzo 1907.

Marzo 1907, p. 88: Jean Huré habla sobre el concierto de la fantasía. Reseña sobre la
manera de tocar de Selva y sobre el repertorio. Habla mucho y mal de C. Ph. E. Bach

También podría gustarte