Curso Adquisicion y Perdida de La Condicion de Personal Estatutario PDF

EL PERSONAL ESTATUTARIO Y SU RÉGIMEN JURÍDICO
CURSO ADQUISICIÓN Y
PÉRDIDA DE LA CONDICIÓN
DE FUNCIONARIO.

EL PERSONAL ESTATUTARIO Y SU RÉGIMEN JURÍDICO:
ADQUISICIÓN Y PÉRDIDA DE LA CONDICIÓN DE PERSONAL

ESTATUTARIO.
ÍNDICE
página
INTRODUCCIÓN .................................................................................. 1
BLOQUE I ......................................................................................... 19
EL NACIMIENTO Y LA EXTINCIÓN DE LA RELACIÓN FUNCIONARIAL
BLOQUE II ....................................................................................... 45
LA PROVISIÓN DE PLAZAS, LA SELECCIÓN Y LA PROMOCIÓN INTERNA
BLOQUE III ..................................................................................... 59
LAS CONVOCATORIAS EN EL DECRETO 136/2001
BLOQUE IV ....................................................................................... 77
EL CUERPO SUPERIOR FACULTATIVO DE INSTITUCIONES SANITARIAS DE LA

JUNTA DE ANDALUCÍA, ESPECIALIDADES DE FARMACIA Y VETERINARIA.
CASOS PRÁCTICOS ........................................................................... 89
TEST DE EVALUACIÓN FINAL .............................................................. 93
HOJA DE RESPUESTAS AL TEST DE EVALUACIÓN ................................. 99

INTRODUCCIÓN
Antes de comenzar con lo que es la materia propia de este curso sería

conveniente aclarar una serie de conceptos que nos van a ayudar a
comprender más fácilmente la misma.
En primer lugar, vamos a ver qué significado tiene el término
“NORMAS JURÍDICAS”
Cuando utilizamos este término nos estamos refiriendo a
Reglas dictadas por una autoridad competente, con el objeto de

ordenar las relaciones humanas y cuyo incumplimiento trae
aparejado, generalmente, una sanción.
De esta definición debemos destacar los siguientes elementos:
• Que estas normas emanan de una “autoridad competente”; esta

puede ser bien el poder legislativo o bien el ejecutivo.
• Que su finalidad solo busca ordenar las relaciones humanas.
• Que su incumplimiento puede traer como consecuencia la imposición

de sanciones.
Resumiendo, las normas jurídicas confieren derechos e imponen

deberes; su existencia y razón de ser tiene como consecuencia que
LA IGNORANCIA DE LAS LEYES NO EXCUSA DE SU CUMPLIMIENTO.
Este aforismo, que resulta fundamental en nuestra vida social, lo

encontramos instaurado en el artículo 6. 1 del Código Civil.
Hasta ahora hemos utilizado dos conceptos: Normas Jurídicas y Leyes;

pero si todas las leyes son normas jurídicas, no todas las normas jurídicas son
leyes, por lo que vamos a empezar a deslindarlos.
Lo primero que debemos saber es que el concepto “normas jurídicas” es

el más genérico de los dos y engloba a los siguientes tipos de Normas:
• Las Leyes, que son aquellas normas jurídicas dictadas por el poder
legislador.
• Los Reglamentos, como aquellas normas jurídicas de carácter
general dictados por el poder ejecutivo en desarrollo de una ley.
Lo cierto y verdad es que, en nuestra vida social nos vamos a encontrar

con una gran cantidad de normas jurídicas que constituirán lo que conocemos
como
ORDENAMIENTO JURÍDICO
Conjunto de leyes y otras normas jurídicas que son aplicables en un

determinado ámbito geográfico, personal o funcional.
Este ordenamiento jurídico va a integrar distintas ramas del derecho

como el Derecho Civil, el Penal, o el Administrativo, entre otras. Nosotros,
durante este curso, nos vamos a desenvolver dentro del Derecho
Administrativo.
I. DERECHO ADMINISTRATIVO
Rama del derecho mediante la que se regulan las actividades de las

Administraciones Públicas.
Este derecho se ocupa de las relaciones
• Internas de cada administración.
• Entre las propias administraciones publicas.
• Entre las administraciones y los particulares.
Así mismo, este derecho tiene las siguientes características:

• Es un derecho común; aplicable a todas las actividades de las

AA.PP.
Ley 30/92 Artículo 1. Objeto de la Ley.
La presente Ley establece y regula las bases del régimen jurídico, el

procedimiento administrativo común y el sistema de responsabilidad de las
Administraciones Públicas, siendo aplicable a todas ellas.
• Es un derecho autónomo; se rige por sus propios principios.
• Es un derecho de base territorial; está ligado al ámbito territorial

de la administración de la que emana.
• Solo existe donde esté presente una administración como tal, la que
estará siempre en un plano superior frente a los administrados.
EL DERECHO ADMINISTRATIVO Y EL PRINCIPIO DE LEGALIDAD
Como empleados públicos, y sobre todo como personal sometido a una

relación funcionarial especial, como personal estatutario de los servicios de
salud, vamos a encontrarnos ante un régimen muy especial respecto a las
“relaciones laborales” en general.
Estas diferencias van a venir marcadas por que nos encontramos ante
leyes especiales, que además se encuadran dentro del Derecho Administrativo,
en el que prima el principio de legalidad y en el que no tiene cabida la
autonomía de las partes a la hora de fijar las condiciones de las relaciones
laborales.
Es decir, si en el Derecho laboral el principio de autonomía de las partes

permite, a los intervinientes en un contrato de trabajo, establecer cualquier
condición que no esté prohibida por las leyes o atente contra la moral o el
orden público, en la relación funcionarial esta autonomía está vetada por el
Principio de legalidad, según el cual la administración está obligada a ceñirse a
lo establecido en la ley; es decir: lo que ésta no establezca, aunque no esté
prohibido, no se puede establecer; y de lo establecido se puede disponer sólo
en los términos instituidos en ella.
Por lo tanto, la actuación de la administración deberá estar siempre

ajustada a lo establecido por las leyes (P. de legalidad- de vinculación a la ley).
Este principio de legalidad conlleva a la aplicación de estos otros

principios:
• Principio de prohibición de la arbitrariedad.- Según este principio

las decisiones que adopte el órgano competente han de ajustadas al
reglamento de aplicación y nunca tomadas a capricho o voluntad del
titular del órgano decisorio; no obstante, no debemos confundir
arbitrariedad con discrecionalidad.
• Principio de objetividad.- Éste obliga a que las decisiones se

adopten ajustándose solo a los hechos reales, sin que tengan cabida
consideraciones subjetivas o sentimientos personales.
• Principio de igualdad, mérito y capacidad.
• Principio de imparcialidad.
• Principio de actuación través de procedimientos.
Otros principios que rigen la actividad de las administraciones públicas

son:
• Principio de publicidad de los actos.
• Principio de competencia del órgano.
• Principio cobertura presupuestaria.
• Principio de no contradicción de las normas superiores.
Todo ello va llevar a que el órgano administrativo competente deba

actuar de una forma REGLADA, según la cual, ante un supuesto de hecho
concreto ha de limitarse a aplicar la consecuencia prevista en norma, que
determina el contenido del acto, o de forma DISCRECIONAL, en la que, ante
un supuesto previsto en la norma, el órgano puede optar por una concreta
solución, de entre varias posibles igualmente válidas.
Obviamente no deberíamos confundir lo discrecional con lo arbitrario

II. FUENTES DEL DERECHO ADMINISTRATIVO
De forma general, nos referimos a FUENTES DEL DERECHO como aquello

de donde el Derecho surge o nace.
En nuestro ordenamiento estas fuentes del Derecho positivo o escrito

son:
• La ley,
• La Costumbre, que sólo regirá en defecto de Ley aplicable,

siempre que no sea contraria a la moral o al orden público y
que resulte probada.
• Los Principios Generales del Derecho, que se aplicarán en

defecto de Ley o costumbre, sin perjuicio de su carácter
informador del ordenamiento jurídico.
A esto hay que añadir:
1º. Que las normas jurídicas contenidas en los Tratados

Internacionales serán de aplicación directa en España en tanto
hayan pasado a formar parte del ordenamiento interno mediante su
publicación íntegra en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Aquí hemos de introducir Una salvedad sobre el Derecho Comunitario.

Actualmente, en nuestro Ordenamiento, este Derecho no tiene la
consideración de tratado internacional, sino que en base a los
Acuerdos de adhesión, determinadas normas como son los
Reglamentos Comunitarios tienen una aplicación directa, al integrarse
en nuestro ordenamiento desde su publicación en el Diario Oficiala de
la Comunidad Europea (DOCE).
2º. Que la Jurisprudencia complementará el ordenamiento jurídico con

la doctrina que, de modo reiterado, establezca el Tribunal Supremo al
interpretar y aplicar la Ley, la costumbre y los principios generales del
derecho.
3º. Que los Jueces y Tribunales tienen el deber inexcusable de resolver

en todo caso los asuntos de que conozcan, ateniéndose al sistema de
fuentes establecido.
4º. Que carecen de validez las disposiciones que contradigan otra de

rango superior.
Llegado este punto, hemos de plantearnos ¿cómo se determina el orden

de aplicación de las normas jurídicas?. A este respecto el Código Civil consagra
la primacía de la norma escrita, sobre cualquier otra fuente al establecer
que “la costumbre sólo regirá en defecto de ley aplicable” (art. 1.3) y que “los
principios generales del derecho se aplicarán en defecto de ley o
costumbre”(art. 1.4).
Ya hemos comentado que el Derecho Administrativo se constituye como

una rama del ordenamiento, y que como tal, además de los principios que ya
hemos comentado, tiene unas fuentes de Derecho totalmente vinculadas al
derecho escrito o positivo.
La clave sobre la afirmación que acabamos de realizar la vamos a

encontrar en los siguientes artículos:
103.1 de la Constitución Española
La Administración Pública sirve con objetividad los intereses generales y actúa de

acuerdo con los principios de eficacia, jerarquía, descentralización,
desconcentración y coordinación con sometimiento pleno a la ley y al
Derecho.
3.1 de la Ley 30/92
Las Administraciones Públicas sirven con objetividad los intereses generales y

actúan de acuerdo con los principios de eficacia, jerarquía, descentralización,
desconcentración y coordinación, con sometimiento pleno a la Constitución, a la
Ley y al Derecho.
En este sentido, por “norma escrita” tendríamos que citar:
1. La Constitución.
En nuestro Ordenamiento Jurídico, la Constitución se erige como la norma

suprema a la que se subordinan todas las leyes en sus diversas formas.
2. Las Leyes.
Entendiendo como tal aquellas normas escritas emanadas del poder

legislativo.
Las Leyes como tales van a presentar los siguientes caracteres:
a) Su supremacía; gracias a la que las leyes ocupan la posición más

elevada en el sistema normativo y sus mandatos requieren de actos
de idéntica naturaleza para ser modificados o alterados.
b) Su elaboración por los parlamentos legislativo.
c) Su contenido general.
d) La fuerza de la Ley; denota un carácter irresistible, que impide la

posibilidad de negar a su aplicación o cumplimiento.
e) El valor de la Ley: encierra la imposibilidad discutir su contenido,

salvo en los supuestos previstos y sólo ante el Tribunal Constitucional.
Pero hemos de tener presente que dentro de las Leyes, no existe una
gradación jerárquica entre las diferentes clases de normas con este rango.
Las relaciones entre Ley estatal y Ley autonómica o entre Ley ordinaria y
Orgánica derivan del principio de competencia, ya que todas las leyes
se sitúan en un mismo nivel jerárquico.
Para terminar con las normas de rango legal es necesario comentar las
Disposiciones del Ejecutivo con fuerza de Ley, como son:
• Los Decretos-leyes, que se tratan de disposiciones legislativas

provisionales que el Gobierno puede dictar en caso de extraordinaria y
urgente necesidad.
Los Decretos-leyes deberán ser inmediatamente sometidos a debate y

votación de totalidad al Congreso de los Diputados, convocado al
efecto si no estuviere reunido, en el plazo de los treinta días siguientes
a su promulgación. El Congreso habrá de pronunciarse expresamente

dentro de dicho plazo sobre su convalidación o derogación, para lo cual
el Reglamento establecerá un procedimiento especial y sumario.
• Los Decretos Legislativos, que tienen su origen en una delegación

legislativa, deberá otorgarse por el parlamento mediante una ley de
bases cuando su objeto sea la formación de textos articulados o por
una ley ordinaria cuando se trate de refundir varios textos legales en
uno solo.
3. LOS REGLAMENTOS.
Son normas jurídicas de carácter general dictadas en desarrollo de normas

legales por el poder ejecutivo en base a la existencia de una potestad
reglamentaria.
Los reglamentos se subordinan jerárquicamente a la Ley y dentro de ellos

sí existe a su vez una gradación jerárquica, como se verá.
Sobre los reglamentos podemos encontrar diversas clasificaciones

sustentadas en distintos criterio; a modo de ejemplo podríamos citar,
entre otras, las siguientes clasificaciones:
• Por la administración de la que emanan: estatales, autonómicos y locales
• Por el órgano concreto del que emanan: Reales Decretos, Órdenes

Ministeriales o Resoluciones.
• En las Corporaciones Locales, podemos encontrar Ordenanzas de la

Corporación y Bandos del Alcalde, entre otras.
Fijadas las fuentes del Derecho Administrativo, la siguiente cuestión que

hemos de plantearnos es la Jerarquía de las Fuentes o cómo se relacionan
entre sí las diferentes fuentes del Derecho Administrativo.
En este sentido hay que decir que estas relaciones están basadas en
gran medida, aunque no exclusivamente, en el Principio de Jerarquía
Normativa, consagrado por la Constitución en su artículo 9.3, junto a los de
legalidad, publicidad de las normas e irretroactividad de las disposiciones

sancionadoras no favorables o restrictivas de derechos individuales, entre otros
principios.
El Principio de Jerarquía Normativa aplicado a La jerarquía de las fuentes

determina:
a. El orden de aplicación de una determinada norma al caso concreto.
b. La invalidez de la norma inferior cuando contradiga lo dispuesto por la

superior (artículo 1.2 del CC).
Pero ¿Os imagináis que una situación concreta pudiera estar regulada por
más de una norma, y que, además, sus mandatos fuesen contradictorios?;
Sería una situación irracional. No es posible. Por lo tanto, teniendo en cuenta
el nivel competencial, podemos encontrarnos con diversas normas que, con
idéntico rango normativo, pudiesen ser aplicables. En este caso la cuestión
tendríamos que resolverla siguiendo el Principio de Especialidad, según el
cual sería de aplicación aquella que regule el tema concreto que nos interesa,
excluyendo a las demás.
Es decir, si queremos conocer un tema de retribuciones de personal

estatutarios de los Servicios de Salud tendremos que acudir a la Ley 55/2003,
del Estatuto Marco, en vez de acudir a la Ley 7/2007, del Estatuto Básico del
Empleado Público, ya que es un tema regulado de forma específica para este
colectivo en la primera de las normas citadas.
Por último, nos quedaría por recordar el Principio de ley posterior

(artículo 2.2 del CC: “Las leyes sólo se derogan por otras posteriores”).
Resumiendo, dentro de un ámbito concreto, ante dos regulaciones en

legales de un mismo supuesto de hecho; ¿Cómo sabremos, cuál de ellas
aplicar?. Para responder a esta pregunta tendremos que determinar cuál es la
ley más especial de entre todas ellas, lo cual nos lleva a plantearnos cómo y
dónde buscar para resolver este último dilema. En esta ocasión la solución a
nuestras dudas la podemos resolver fácilmente conociendo básicamente la
estructura de las normas jurídicas
Las normas jurídicas generalmente presentan la siguiente estructura:
• Preámbulo: es la parte que nos encontramos precediendo al

articulado y nos introducen en los antecedentes históricos y los
motivos que han llevado a la promulgación de las norma.
• Disposiciones Generales: constituida por los preceptos que

establece la norma y estructurada en el articulado propio de la
norma. Dentro de estas Disposiciones Generales, se encontrará su
ámbito de aplicación, que nos señalará con claridad a qué supuestos
va destinada esa regulación.
El ámbito de aplicación de una norma puede ser:
√ Personal: nos va a indicar a qué sujetos se destina la norma.
Veamos unos ejemplos:
Artículo 1. Ámbito de aplicación. E.T
1. La presente Ley será de aplicación a los trabajadores que voluntariamente

presten sus servicios retribuidos por cuenta ajena y dentro del ámbito de
organización y dirección de otra persona, física o jurídica, denominada empleador
o empresario.
Artículo 2. Ámbito de aplicación. Ley 7/2007
1. Este Estatuto se aplica al personal funcionario y en lo que proceda al

personal laboral al servicio de las siguientes Administraciones Públicas:
• La Administración General del Estado.

• Las Administraciones de las Comunidades Autónomas y de las Ciudades
de Ceuta y Melilla.
• Las Administraciones de las Entidades Locales.
• Los Organismos Públicos, Agencias y demás Entidades de derecho público
con personalidad jurídica propia, vinculadas o dependientes de cualquiera
de las Administraciones Públicas.
• Las Universidades Públicas.
Artículo 2. Ámbito de aplicación. Ley 55/03
1. Esta Ley es aplicable al personal estatutario que desempeña su función en

los centros e instituciones sanitarias de los servicios de salud de las
comunidades autónomas o en los centros y servicios sanitarios de la

Administración General del Estado.
En el primero de los ejemplos que hemos visto, vemos que los

únicos sujetos cuyas relaciones se encuentran reguladas por esa
norma son aquellos que prestan sus servicios mediante un contrato
de trabajo.
En el segundo caso, la regulación de la que se ocupa afecta a los

empleados públicos y en especial aquellos sujetos a una relación
funcionarial.
El último de los ejemplos propuestos, la regulación de la que se

ocupa, dentro de los funcionarios, aquellos que están sometidos a
una relación funcionarial especial, de carácter estatutario de los
servicios de salud.
√ Geográfico: nos pone de manifiesto, en base al principio de

territorialidad, el territorio donde tiene vigencia plena esa norma.
Veamos unos ejemplos:
Ley 2/1998, de 15 de junio, de Salud de Andalucía.
Artículo 1.
La presente Ley tiene por objeto la ordenación general de las actividades

sanitarias de las entidades públicas y privadas en Andalucía.
Ley 5/2003, de 9 de octubre, de declaración de voluntad vital anticipada.
Artículo 1. Objeto.
La presente Ley tiene por objeto regular, en el ámbito territorial de la

Comunidad Autónoma de Andalucía, la declaración de voluntad vital
anticipada, como cauce del ejercicio por la persona de su derecho a decidir
sobre las actuaciones sanitarias de que pueda ser objeto en el futuro, en el
supuesto de que llegado el momento no goce de capacidad para consentir por
sí misma.
Obviamente, ninguna de estas norma despliegan sus efectos fuera

del territorio de la Comunidad Autónoma Andaluza.
√ Funcional: en este caso, el ámbito de aplicación nos indica el

sector o la actividad en la que la norma extiende sus efectos.
Ley 6/2006, de 24 de octubre, del Gobierno de la Comunidad Autónoma de

Andalucía Artículo 1. Objeto.
La presente Ley tiene por objeto la regulación de la Presidencia y del

Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, conforme a lo establecido
en el Estatuto de Autonomía para Andalucía.
• Disposiciones Adicionales, pueden no existir, y de aparecer tiene

la consideración de normas complementarias al articulado.
• Disposiciones Transitorias; Las normas jurídicas no pueden

desconocer la situación existente en el momento de su promulgación
y para ello, hay ocasiones en las que se utiliza esta técnica para
establecer una serie de reglas que eviten una ruptura total con al
situación anterior.
• Disposiciones Derogatorias; Necesariamente para derogar los

preceptos establecidos en una ley, necesitamos otra posterior. La
derogación de las normas vigentes preexistentes tendrá el alcance
que expresamente se disponga en la última, y se extenderá siempre
a todo aquello que en la norma nueva, sobre la misma materia, sea
incompatible con ella o la contradiga. Por otro lado, por el hecho de la
simple derogación de una Ley no recobran vigencia las que élla
hubiere derogado (art. 2.2.CC)
• Disposiciones finales suelen referirse a la entrada en vigor de

la norma; La “vacatio legis” es el término por el que técnicamente se
conoce el periodo que transcurre desde la publicación de una norma
hasta que ésta entra en vigor.
En nuestro ordenamiento Las Leyes entrarán en vigor a los veinte

días de su completa publicación en el Boletín Oficial del Estado, si en
ellas no se dispone otra cosa (art. 2.1 CC).
III. El Régimen Jurídico del Personal Estatutario.-
El régimen jurídico aplacable al personal estatutario es un sistema

complejo formado por un entramado legal, a veces, difícil de comprender por
los profesionales sanitarios, que generalmente han recibido una formación
jurídica escasa o nula.
Por todo ello, es conveniente aclarar algunos conceptos que podríamos

considerar básicos.
Normalmente sabemos distinguir entre empleados, públicos o no, y

dentro de los primeros llegamos a distinguir entre un funcionario y un personal
laboral; pero nos perdemos cuando nos encontramos con el término “personal
estatutario de los servicios de salud”. Generalmente, a este personal lo
encasillamos dentro del colectivo de empleados públicos, pero a partir de aquí
empiezan nuestras dudas: desde luego personal laboral no es, pero ¿es o no
funcionario? ¿Por qué se les aplica unas veces las normas de funcionarios y
otras no?
Para aclarar estas dudas vamos a aplicar las técnicas que hemos venido
comentando anteriormente, y para ello nos acercaremos en primer lugar a la
Ley 55/2003, de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del personal
estatutario de los servicios de salud, y las claves las vamos a encontrar en
los artículos 1, 2 y 3.
Esta Ley tiene por objeto establecer las bases reguladoras de la relación
funcionarial “especial” del personal estatutario de los servicios de salud que
conforman el Sistema Nacional de Salud, a través del Estatuto Marco de dicho
personal.
Artículo 2. Ámbito de aplicación.
1. Esta Ley es aplicable al personal estatutario que desempeña su función en

los centros e instituciones sanitarias de los servicios de salud de las
comunidades autónomas o en los centros y servicios sanitarios de la

Administración General del Estado.
2. En lo no previsto en esta Ley, en las normas a que se refiere el artículo

siguiente, o en los pactos o acuerdos regulados en el capítulo XIV, serán
aplicables al personal estatutario las disposiciones y principios generales sobre
función pública de la Administración correspondiente.
3. Lo previsto en esta Ley será de aplicación al personal sanitario funcionario y

al personal sanitario laboral que preste servicios en los centros del Sistema
Nacional de Salud gestionados directamente por entidades creadas por las
distintas comunidades autónomas para acoger los medios y recursos humanos y
materiales procedentes de los procesos de transferencias del Insalud, en todo
aquello que no se oponga a su normativa específica de aplicación y si así lo
prevén las disposiciones aplicables al personal funcionario o los convenios
colectivos aplicables al personal laboral de cada comunidad autónoma.
Artículo 3. Normas sobre personal estatutario.
En desarrollo de la normativa básica contenida en esta Ley, el Estado y las

comunidades autónomas, en el ámbito de sus respectivas competencias,
aprobarán los estatutos y las demás normas aplicables al personal estatutario
de cada servicio de salud.
Para la elaboración de dichas normas, cuyas propuestas serán objeto de

negociación en las mesas correspondientes en los términos establecidos en el
capítulo IV, DEL Título III de la Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto Básico
del Empleado Público, los órganos en cada caso competentes tomarán en
consideración los principios generales establecidos en el artículo siguiente, las
peculiaridades propias del ejercicio de las profesiones sanitarias, y las
características organizativas de cada servicio de salud y de sus diferentes
centros e instituciones.
Tras la lectura de estos artículos no podemos más que concluir que la

naturaleza jurídica de la relación por la que presta sus servicios el personal
estatutario de los servicios de salud que conforman el Sistema Nacional de
Salud tiene la condición de funcionarial, si bien con un carácter especial.
Lo cual se ve refrendado tanto en el apartado segundo, del artículo 2,

cuando nos dice que en lo no previsto en esa Ley, o en sus normas de
desarrollo, serán aplicables al personal estatutario las disposiciones y principios
generales sobre función pública de la Administración correspondiente, como en
el segundo párrafo del artículo 3, a la hora de referirse al procedimiento de
elaboración de los futuros estatutos de desarrollo de ese Estatuto Marco.
Pero si aún nos queda alguna duda, resulta sumamente clarificador los
artículos 1.1 y 2.4 de la Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto Básico del
Empleado Público, que transcribimos a continuación
1. El presente Estatuto tiene por objeto establecer las bases del régimen
estatutario de los funcionarios públicos incluidos en su ámbito de
aplicación.
Artículo 2. Ámbito de aplicación
4. Cada vez que este Estatuto haga mención al personal funcionario de carrera
se entenderá comprendido el personal estatutario de los Servicios de Salud.
Los preceptos transcritos, dejan claro que el objeto de esta Ley no es

otro que establecer las bases del régimen estatutario de los funcionarios
públicos incluidos en su “ámbito de aplicación”; y que dentro de ese ámbito se
encuentra el personal estatutario de los Servicios de Salud. O sea, estamos
ante unos funcionarios; especiales, pero funcionarios.
Una vez clarificada la naturaleza jurídica de la relación estatutaria de

este colectivo vamos a ver qué normas le son de aplicación. Para ello va a ser
suficiente poner en conexión el artículo 1 de la Ley 55/2003 con el artículo 2.3
de la Ley 7/2007: éste último, establece que al personal estatutario de los
Servicios de Salud, se les aplicará en primer lugar su normativa específica, la
comentada Ley 55/2003 y sus normas de desarrollo, y lo previsto en la propia
Ley 7/2007, con algunas salvedades.
Ley 7/2007; Artículo 2. Ámbito de aplicación

3. El personal docente y el personal estatutario de los Servicios de Salud se

regirán
• por la legislación específica dictada

o por el Estado y
o por las Comunidades Autónomas
en el ámbito de sus respectivas competencias
• por lo previsto en el presente Estatuto, excepto el Capítulo II del Título III,

salvo el artículo 20, y los artículos 22.3, 24 y 84.
A la luz de las normas comentadas, debe quedarnos meridianamente

claro que la primera norma de aplicación será la Ley 55/2003, de 16 de
diciembre, conocida como Estatuto Marco del personal estatutario de los
servicios de salud, y sus normas de desarrollo y en segundo término, la Ley
7/2007, de 12 de abril, y sus normas de desarrollo.
Por último, no podemos olvidar que las leyes comentadas, la Ley

55/2003 y la Ley 7/2007, han sido dictadas al amparo del artículo 149.1.18º
de la Constitución por lo que ambas constituyen las bases del régimen
estatutario personal de los servicios de salud y de los funcionarios
respectivamente.
Así mismo, no podemos dejar de lado las previsiones contenidas en la

Disposición Final Cuarta de la Ley 7/2007 que es del siguiente tenor:
1. El presente Estatuto entrará en vigor en el plazo de un mes a partir de

su publicación en el Boletín Oficial del Estado.
2. No obstante lo establecido en los Capítulos II y III del Título III,

excepto el artículo 25.2, y en el Capítulo III del Título V producirá efectos
a partir de la entrada en vigor de las Leyes de Función Pública que se
dicten en desarrollo de este Estatuto.
La disposición final tercera 2 del presente Estatuto producirá efectos en

cada Administración Pública a partir de la entrada en vigor del Capítulo
III del Título III con la aprobación de las Leyes de Función Pública de las
Administraciones Públicas que se dicten en desarrollo de este Estatuto.
Hasta que se hagan efectivos esos supuestos la autorización o

denegación de compatibilidades continuará rigiéndose por la actual
normativa.
3. Hasta que se dicten las Leyes de Función Pública y las normas

reglamentarias de desarrollo se mantendrán en vigor en cada
Administración Pública las normas vigentes sobre ordenación,
planificación y gestión de recursos humanos en tanto no se opongan a lo
establecido en este Estatuto.
Por lo que aquí nos interesa, lo que nos resulta más relevante es que, en
tanto no se opongan a lo establecido en ella, se mantienen, en cada
Administración Pública las normas vigentes sobre ordenación, planificación y
gestión de recursos humanos.
BLOQUE I
EL NACIMIENTO Y LA EXTINCIÓN DE LA RELACIÓN

FUNCIONARIAL.
I. Concepto y clases de Empleados Públicos.-
La Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto Básico del Empleado Público

(EBEP) nos da la siguiente definición de empleados públicos en su artículo 8:
Son empleados públicos quienes desempeñan funciones retribuidas

en las Administraciones Públicas al servicio de los intereses
generales.
Para a continuación clasificar estos empleados públicos en los siguientes

grupos:
a) Funcionarios de carrera.
b) Funcionarios interinos.
c) Personal laboral, ya sea fijo, por tiempo indefinido o temporal.
d) Personal eventual.
II. EL CONCEPTO DE FUNCIONARIO DE CARRERA.-
El Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP), esta vez en su artículo

9.1, define a los Funcionarios de Carrera como
Aquellos quienes, en virtud de nombramiento legal, están vinculados

a una Administración Pública por una relación estatutaria regulada
por el Derecho Administrativo para el desempeño de servicios
profesionales retribuidos de carácter permanente.
Por su lado, la Ley 55/2003, de 16 diciembre, Estatuto Marco del

Personal Estatutario de los Servicios de Salud (EM) se refiere al Personal
Estatutario Fijo como
Aquél que una vez superado el correspondiente proceso selectivo,

obtiene un nombramiento para el desempeño con carácter
permanente de las funciones que de tal nombramiento se deriven.
De estas definiciones podemos deducir las notas características que van

a distinguir la naturaleza de esta relación, apreciándose con total nitidez que
nos encontramos ante una relación de servicios profesionales y retribuidos,
regulada por el Derecho administrativo, y por tanto excluida de las relaciones
laborales.
Por otro lado, la necesaria existencia de un “Nombramiento Legal”, como

veremos más adelante, denota que estamos ante un acto administrativo típico,
cuyo contenido viene definido unilateralmente por el poder público mediante
normas legales, sin posibilidad de introducir ninguna modificación por los
sujetos actuantes, como sería posible de encontrarnos ante un contrato
característico laboral.
III. EL PERSONAL TEMPORAL.-
El concepto de personal temporal tiene distinto enfoque según veamos el

EBEP o el EM, por lo que vamos a ver las semejanzas y las diferencias de
supuestos entre ambas normas.
A. Los nombramientos temporales de funcionarios de

carrera en el EBEP.
El EBEP agrupa a todos los supuestos de nombramientos temporales bajo

la denominación de Funcionarios Interinos, a los que define en su artículo
10 con el siguiente régimen:
Son funcionarios interinos los que, por razones expresamente

justificadas de necesidad y urgencia, son nombrados como tales
para el desempeño de funciones propias de funcionarios de carrera,
cuando se dé alguna de las siguientes circunstancias:
• La existencia de plazas vacantes cuando no sea posible su

cobertura por funcionarios de carrera.
En este supuesto, las plazas vacantes desempeñadas por

funcionarios interinos deberán incluirse en la oferta de empleo
correspondiente al ejercicio en que se produce su
nombramiento y, si no fuera posible, en la siguiente, salvo que
se decida su amortización.
• La sustitución transitoria de los titulares.
• La ejecución de programas de carácter temporal.
• El exceso o acumulación de tareas por plazo máximo de seis

meses, dentro de un periodo de doce meses.
El cese de los funcionarios interinos se producirá, además de por las

causas de pérdida de la condición de funcionario de carrera, previstas con
carácter general en el artículo 63 del EBEP, cuando finalice la causa que dio
lugar a su nombramiento.
B. Los nombramientos temporales en el Estatuto

Marco
El EM comienza por definir en su artículo 9 una serie de supuestos, que
vienen a coincidir con los casos establecidos para las interinidades en el EBEP,
ante los que se pondrán realizar nombramientos temporales (por razones de
necesidad, de urgencia o para el desarrollo de programas de carácter
temporal, coyuntural o extraordinario), diferenciando los siguientes supuestos:
C. El nombramiento de carácter Interino
Se expedirá este tipo de nombramiento para el desempeño de una

plaza vacante de los centros o servicios de salud, cuando sea
necesario atender las correspondientes funciones.
Se acordará el Cese cuando:
• Se incorpore personal fijo, por el procedimiento

establecido,
• Dicha plaza resulte amortizada.
D. El nombramiento de carácter Eventual

Se expedirá en los siguientes supuestos:
• Cuando se trate de la prestación de servicios

determinados de naturaleza temporal, coyuntural o
extraordinaria.
• Cuando sea necesario para garantizar el funcionamiento

permanente y continuado de los centros sanitarios.
• Para la prestación de servicios complementarios de una

reducción de jornada ordinaria.
Se acordará el cese
• Cuando se produzca la causa o venza el plazo que

expresamente se determine en su nombramiento,
• Cuando se supriman las funciones que en su día lo

motivaron.
Para este tipo de supuesto el EM realiza la siguiente previsión: Si

se realizaran más de dos nombramientos para la prestación de los
mismos servicios por un período acumulado de 12 o más meses en un
período de dos años, procederá el estudio de las causas que lo
motivaron, para valorar, en su caso, si procede la creación de una plaza
estructural en la plantilla del centro. Pero no debemos olvidar que esta

advertencia, solo obliga a la administración sin que suponga ningún
derecho para los profesionales que prestan sus servicios bajo este tipo
de nombramiento.
E. El nombramiento de Sustitución
Se expedirá cuando resulte necesario atender las funciones de

personal fijo o temporal, durante los períodos de
• vacaciones,
• permisos y
• demás ausencias de carácter temporal que comporten la

reserva de la plaza.
Se acordará el cese
• Cuando se reincorpore la persona a la que sustituya,
• Cuando ésta pierda su derecho a la reincorporación a la

misma plaza o función.
F. El Régimen de los funcionarios con nombramientos

temporales
En cualquier caso, tanto una norma como la otra coinciden en que a los
funcionarios con nombramientos temporales les será aplicable, en cuanto sea
adecuado a la naturaleza de su condición, el régimen general de los
funcionarios de carrera.
G. La Selección de personal temporal

La selección de este personal temporal se realizará, en cualquier caso
mediante procedimientos agiles basados en principios de igualdad, mérito,
capacidad y publicidad, a los que añade el EM el de competencia.
EBEP 10.2.
La selección de funcionarios interinos habrá de realizarse mediante

procedimientos ágiles que respetarán en todo caso los principios de
igualdad, mérito, capacidad y publicidad.
EM
La selección del personal estatutario temporal se efectuará a través

de procedimientos que permitan la máxima agilidad en la selección,
procedimientos que se basarán en los principios de igualdad, mérito,
capacidad, competencia y publicidad y que serán establecidos previa
negociación en las mesas correspondientes.
IV. PRINCIPIOS Y CRITERIOS DE ORDENACIÓN DEL

RÉGIMEN ESTATUTARIO APLICABLES A LA
ADQUISICIÓN Y PÉRDIDA DE LA CONDICIÓN DE
FUNCIONARIO.
De los principios y criterios que regulan el régimen del personal

estatutario de los servicios de salud hemos de destacar con carácter general
los siguientes:
• Sometimiento pleno a la Ley y el derecho.
• Igualdad, mérito, capacidad y publicidad
• Tanto en el acceso a la condición de personal estatutario,
• Como en la promoción profesional.
• Igualdad de trato entre mujeres y hombres
• Publicidad de las convocatorias y de sus bases
• Estabilidad en el empleo y en el mantenimiento de la condición de

personal estatutario fijo.
• Transparencia.
• Adecuación entre el contenido de los procesos selectivos y las

funciones o tareas a desarrollar.
• Agilidad, sin perjuicio de la objetividad, en los procesos de

selección.
Y de cara a la actuación de los órganos de selección:
• Imparcialidad y profesionalidad de los miembros de los órganos de

selección.
• Independencia y discrecionalidad técnica en la actuación de los

órganos de selección.
V. PLANES DE ORDENACIÓN DE RECURSOS HUMANOS.-
Las administraciones públicas se sirven de la planificación de los recursos

humanos para dimensionar adecuadamente sus efectivos, con el objetivo de
alcanzar la eficacia en la prestación de los servicios, así como la eficiencia en la
utilización de los recursos económicos disponibles.
Para ello cada Administración Pública planificará sus recursos humanos

de acuerdo con los sistemas que establezcan las normas que les sean de
aplicación.
De esta forma, se conciben los Planes de Ordenación de Recursos

Humanos como el instrumento básico de planificación global de los mismos,
bien dentro de cada administración o bien en el ámbito que en los mismos se
precise.
A estos efectos, las Administraciones Públicas podrán aprobar Planes

para la ordenación de sus recursos humanos, que incluyan, entre otras,
algunas de las siguientes medidas:
• Análisis de las disponibilidades y necesidades de personal, tanto

desde el punto de vista del número de efectivos, como desde los
perfiles profesionales o niveles de cualificación de los mismos.
• Previsiones sobre los sistemas de organización del trabajo y

modificaciones de estructuras de puestos de trabajo.
• Medidas de movilidad, entre las cuales podrá figurar la suspensión

de incorporaciones de personal externo a un determinado ámbito
o la convocatoria de concursos de provisión de puestos limitados
a personal de ámbitos que se determinen.
• Medidas de promoción interna y de formación del personal y de

movilidad forzosa.
• La previsión de la incorporación de recursos humanos a través de

la Oferta de empleo público.
De esta forma, el Estatuto Marco considera los Planes de Ordenación de

Recursos Humanos como el instrumento básico de planificación global de los
mismos dentro de los servicios de salud o en el ámbito que en los mismos se
precise.
Estos Planes de Ordenación especificarán los objetivos a conseguir en

materia de personal y los efectivos y la estructura de recursos humanos que se
consideren adecuados para cumplir tales objetivos. Asimismo, podrán
establecer las medidas necesarias para conseguir dicha estructura,
especialmente en materia de cuantificación de recursos, programación del
acceso, movilidad geográfica y funcional y promoción y reclasificación
profesional.
Estos Planes de Ordenación de Recursos Humanos serán objeto de

negociación en las mesas correspondientes, con anterioridad a su aprobación y
publicación o, en su caso, notificación, según se determine en cada servicio de
salud.
VI. LAS OFERTAS PÚBLICAS DE EMPLEO.-
Los Planes de Ordenación de Recursos Humanos que acabamos de

estudiar pueden poner de manifiesto necesidades de recursos humanos, con
asignación presupuestaria.
Cuando esas necesidades de recursos humanos han de proveerse

mediante la incorporación de personal de nuevo ingreso, éstas serán objeto de
una Oferta de Empleo Público (OPE).
Por ello las ofertas de empleo público se erigen como un instrumento

necesario de gestión en la provisión de las necesidades de personal, lo que
comportará:
• La obligación de convocar los correspondientes procesos selectivos

para las plazas comprometidas y hasta un diez por ciento
adicional
• Un plazo máximo para la convocatoria de los mismos.
De conformidad con lo establecido en el artículo 4 del Decreto 136/2001,

de 12 de junio, la Oferta de Empleo Público de los centros sanitarios del
Servicio Andaluz de Salud determinará el número de plazas que vayan a ser
objeto de provisión mediante los sistemas selectivos de personal estatutario;
sin olvidar que entre una Oferta y la siguiente no deberán transcurrir más de
tres años.
VII. Las Convocatorias.-
La sustanciación de una OPE se realizará mediante convocatoria pública

para la selección de personal a través de procedimientos que garanticen los
principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, así como el de
competencia.
Estas convocatorias se anunciarán en el boletín o diario oficial de la

correspondiente Administración pública.
Los procedimientos de selección, sus contenidos y pruebas que sean de

aplicación en cada convocatoria se adecuarán a las funciones a desarrollar en
las plazas que se pretenden cubrir.
No debemos olvidar que las convocatorias y sus bases vinculan a:
• La Administración convocante
• Los tribunales encargados de juzgar las pruebas
• Quienes participen en las mismas.
Las convocatorias y sus bases, una vez publicadas, solamente podrán ser
modificadas con sujeción estricta a las normas de la Ley 30/1992, de 26 de
noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del
Procedimiento Administrativo Común.
Las convocatorias de selección de personal estatutario fijo:
• Deberán identificar las plazas convocadas indicando, al menos, su número

y características
• Especificarán:
o Las condiciones y requisitos que deben reunir los aspirantes
o El plazo de presentación de solicitudes
o El contenido de las pruebas de selección
o Los baremos y programas aplicables a las mismas
o El sistema de calificación.
En las convocatorias para la selección de personal estatutario fijo se

reservará un cupo no inferior al cinco por ciento, o al porcentaje que se
encuentre vigente con carácter general para la función pública, de las plazas
convocadas para ser cubiertas entre personas con discapacidad de grado igual
o superior al 33 %, de modo que progresivamente se alcance el 2 % de los
efectivos totales de cada servicio de salud, siempre que superen las pruebas
selectivas y que, en su momento, acrediten el indicado grado de discapacidad
y la compatibilidad con el desempeño de las tareas y funciones
correspondientes.
El acceso a la condición de personal estatutario de las personas con

discapacidad se inspirará en los principios de igualdad de oportunidades, no
discriminación y compensación de desventajas, procediéndose, en su caso, a la
adaptación de las pruebas de selección a las necesidades específicas y

singularidades de estas personas.
VIII. LA ADQUISICIÓN DE LA CONDICIÓN DE PERSONAL

ESTATUTARIO FIJ0.-
Según se establece en el artículo 62 del EBEP y en el artículo 20 del EM,

la condición de personal estatutario fijo se adquiere por el cumplimiento
sucesivo de los siguientes requisitos:
 Superación de las pruebas de selección; si bien, superar las

pruebas de selección no es obtener una determinada calificación
en el total de las pruebas realizadas por los aspirantes, sino, en
base a la calificación total conseguida por cada uno de los
interesado, alcanzar un lugar en la relación final de los aspirantes
presentados, ordenada de forma decreciente, que se encuentre
entre en el número de plazas convocadas.
 Nombramiento conferido por el órgano competente que será

publicado en el Diario Oficial correspondiente; tras acreditar
el interesado, una vez superado el proceso selectivo, que reúnen
los requisitos y condiciones exigidos en la convocatoria, como el
Acto de acatamiento de la Constitución y, en su caso, del Estatuto
de Autonomia correspondiente y del resto del ordenamiento
jurídico.
 La Toma de Posesión o Incorporación a una plaza del servicio,

institución o centro que corresponda dentro el plazo determinado
en la convocatoria.
La Toma de Posesión del funcionario es el requisito definitivo

por el que se le reconoce plenamente al interesado la cualidad de
funcionario. Con la toma de posesión se produce, por parte del nuevo
funcionario, la aceptación de su condición de tal, así como el
sometimiento a la situación que la misma conlleva. A este respecto
tiene vital importancia llevar a efecto este último y esencial tramite

dentro del “plazo posesorio”, ya que de no suceder esta toma de
posesión dentro del mismo, la Ley lo considera como una renuncia
tácita al nombramiento y ello conlleva la consiguiente pérdida de
todos los derechos.
IX. LA PÉRDIDA DE LA CONDICIÓN DE PERSONAL

FUNCIONARIO DE CARRERA O DE PERSONAL
ESTATUTARIO FIJO.
Una vez que se ha adquirido la condición de personal funcionario de

carrera, ésta sólo se puede perder por las causas tasadas en la Ley. De esta
situación se ocupan tanto el artículo 63 del EBEP, como el artículo 21 del EM,
que si a primera vista pueden parecernos no coincidentes, son idénticos como
veremos a continuación.
Inicialmente podemos enumerar los siguientes supuestos de pérdida de

la condición de funcionario:
• La renuncia a la condición de funcionario.
• La pérdida de la nacionalidad.
• La jubilación total del funcionario.
• La sanción disciplinaria de separación del servicio que tuviere

carácter firme.
• La pena principal o accesoria de inhabilitación absoluta o especial

para cargo público que tuviere carácter firme.
Estas causas podemos clasificarlas en dos tipos, según vengan

determinadas por la voluntad del funcionario o por imperativo legal.
H. Causas imputable a la voluntad del funcionario
1º. La Renuncia del interesado
La renuncia voluntaria del funcionario a su condición es un acto

voluntario que tiene carácter irreversible; si bien no inhabilita para un nuevo
ingreso en la función pública.
La renuncia presentada por el funcionario tiene el carácter de acto

voluntario y deberá ser solicitada por el interesado con una antelación mínima
a la fecha en que desee hacerla efectiva (15 días, establece el Art. 22 de la Ley
55/03).
El reconocimiento de esta renuncia por parte de la Administración es un

acto plenamente reglado - será aceptada expresamente por la Administración-
por lo que tras la constatación de la presentación del escrito, ésta aceptará de
pleno la misma, salvo que el interesado esté sujeto a expediente disciplinario o
haya sido dictado, contra él, auto de procesamiento o de apertura de juicio
oral por la presunta comisión de un delito en el ejercicio de sus funciones.
I. Causas no imputables a la voluntad del funcionario.
Dentro de supuestos encuadrados en este grupo están las siguientes:
a) La PÉRDIDA DE NACIONALIDAD ESPAÑOLA o de la

nacionalidad tomada en consideración para el nombramiento. Si
bien no habrá lugar a ello cuando simultáneamente se adquiera
la nacionalidad de otro Estado que otorgue el derecho a acceder
a tal condición.
b) Por SANCIÓN DISCIPLINARIA FIRME DE SEPARACIÓN DEL

SERVICIO; en este supuesto la pérdida de la condición de
funcionario tiene carácter definitivo.
c) Por haber sido CONDENADO MEDIANTE SENTENCIA JUDICIAL

con pena principal o accesoria de inhabilitación absoluta y, en su
caso, la especial para empleo o cargo público o para el ejercicio
de la correspondiente profesión, siempre la pena de

inhabilitación especial para la correspondiente profesión, exceda
de seis años (último supuesto previsto en Ley 55/03. Art. 25).
d) Por JUBILACIÓN
Con carácter general podemos decir que la jubilación de los funcionarios

podrá ser forzosa o voluntaria, y a su vez total o parcial.
2º. La Jubilación Forzosa
Se establece que la jubilación forzosa de los funcionarios públicos se

declarará de oficio al cumplir los sesenta y cinco años de edad.
No obstante, se reconoce el derecho a prolongar voluntariamente su

permanencia en la situación de servicio activo hasta la edad de setenta años.
En estos supuestos la declaración de jubilación no se producirá hasta el
momento en que los funcionarios cesen en la situación de servicio activo por
cumplimiento de la citada edad. A tales efectos las Administraciones Públicas
dictarán las normas de procedimiento necesarias para el ejercicio de este
derecho.
De estas previsiones quedan exceptuados los funcionarios de aquellos

cuerpos y escalas que tengan normas específicas de jubilación.
Para el personal estatutario el EM establece algunas salvedades que

vemos a continuación.
La posibilidad voluntaria de prolongar el interesado su permanencia en

servicio activo hasta cumplir, como máximo, los 70 años de edad se supedita
al requisito de reunir la capacidad funcional necesaria para ejercer la
profesión o desarrollar las actividades correspondientes a su nombramiento, y
estará supeditada a las necesidades de la organización articuladas en el marco
de los planes de ordenación de recursos humanos.
Así mismo, reuniendo la capacidad necesaria procederá la prórroga en el

servicio activo, a instancia del interesado, cuando, en el momento de cumplir
la edad de jubilación forzosa, le resten seis años o menos de cotización
para causar pensión de jubilación. En este supuesto la prórroga no podrá

prolongarse más allá del día en el que el interesado complete el tiempo de
cotización necesario para causar pensión de jubilación, sea cual sea el importe
de la misma, y su concesión estará supeditada a que quede acreditado que
reúne la capacidad funcional necesaria para ejercer la profesión o desarrollar
las actividades correspondientes a su nombramiento.
En el ámbito del Servicio Andaluz de Salud hemos de tener presente la

Circular 1/2004, de 2 de junio, de la Dirección General de Personal y
Desarrollo Profesional sobre procedimientos para la tramitación de los
expedientes de jubilación y prolongación en la situación de servicio activo del
personal estatutario del Servicio Andaluz de Salud, para todos los centros e
instituciones del S.A.S., afectado por la delegación de competencias producidas
por Resolución de 24 de mayo de 2004 (BOJA número 112, de 9 de junio), y
por la Circular 4/2004, de 29 de octubre.
En este sentido hay que comenzar señalando que la competencia para

dictar la resolución correspondiente en los procedimientos de jubilación
forzosa, los de prolongación de la permanencia en el servicio activo y los de
prolongación de la edad de jubilación están atribuidas al Director General de
Personal y Desarrollo Profesional en virtud del Decreto 241/2004, de 18 de
mayo, si bien por Resolución de 24 de mayo de 2004 (BOJA número 112,
de 9 de junio), estas competencias han quedado delegadas en los Directores
Gerentes de los Hospitales, Directores de Áreas de Gestión Sanitaria,
Directores de Distrito y de Centros de Transfusión Sanguínea el ejercicio de las
siguientes competencias respecto del personal estatutario adscrito a sus
centros.
Como venimos comentando, la posibilidad de prórroga en el servicio

activo al llegar la edad establecida para la jubilación forzosa está supeditada
siempre a la solicitud del interesado y a la previa acreditación de que
reúne la capacidad funcional necesaria para ejercer la profesión o
desarrollar las actividades correspondientes a su nombramiento, previendo el

artículo 26 del EM dos supuestos claramente diferenciados.
La simple voluntad del interesado, que aun no haya cumplido los 65 años
de edad, de prolongar su vida laboral hasta cumplir los 70 años de edad,
manifestada mediante la presentación de la correspondiente solicitud.
En este caso el Servicio Andaluz de Salud, previa acreditación de que el

solicitante posee los requisitos de capacidad funcional para el ejercicio o
desarrollo de las actividades propias de su nombramiento, podrá autorizar
dicha prolongación si es acorde con las necesidades de la organización
articuladas en el marco del Plan de Ordenación de Recursos Humanos.
La solicitud de prolongación voluntaria en el servicio activo deberá

presentarse, junto con la fotocopia del D.N.I. del interesado, con una
antelación mínima de tres meses, y máxima de 6, a la fecha del cumplimiento
de los 65 años de edad, e irá dirigida al Director Gerente del Hospital, Director
de Distrito, Director de Centro de Transfusión Sanguínea o Gerente de Área de
Gestión Sanitaria correspondiente que, en el supuesto de que dicha
prolongación sea acorde con las necesidades de la organización articuladas en
el Plan de Ordenación de Recursos Humanos, deberá instar al Servicio de
Medicina Preventiva para que se pronuncie sobre la referida capacidad con
antelación al cumplimiento de esa edad.
En el supuesto de que un personal estatutario que, al cumplir los 65 años

de edad, le resten 6 años o menos de cotización para tener derecho a pensión
de jubilación, tendrá derecho a solicitar una prórroga con este fin, la cual se
concederá, hasta el día preciso que el interesado complete el tiempo necesario
de cotización para causar derecho a dicha pensión.
En este caso la solicitud para la prolongación de la edad de jubilación, se

deberá presentar con una antelación mínima de tres meses, y máxima de 6, a
la fecha del cumplimiento de la edad de 65 años y vendrá necesariamente
acompañada del correspondiente documento expedido por el Instituto Nacional
de la Seguridad Social como consecuencia de la "Solicitud de Información
Previa a la Jubilación" que debe requerir el interesado, donde se refleje el

cómputo del tiempo de cotización a efectos del reconocimiento de la pensión
de jubilación y de la fotocopia del D.N.I., debidamente compulsada, con la que
se procederá a comprobar la edad del interesado.
La resolución que, a la vista de la acreditación de la capacidad, decida

autorizar la prolongación en servicio activo podrá disponer la permanencia
hasta, como máximo, la fecha de aprobación del siguiente Plan de Ordenación
de Recursos Humanos con el límite, en cualquier caso, del cumplimiento de los
70 años de edad.
No obstante, la aprobación de los Planes de Ordenación de Recursos

Humanos conllevará la revisión de las prolongaciones en el servicio activo,
existentes hasta esa fecha, de conformidad con lo que en ellos se disponga.
Asimismo, el plazo de la prolongación en la situación de servicio activo

habrá de aparecer siempre condicionado al mantenimiento de los requisitos de
capacidad citados.
En ambos de los supuestos que hemos visto, la acreditación de la

capacidad funcional de los interesados que hayan solicitado la prolongación
en el servicio activo, al amparo de alguno de los apartados del artículo 26, se
llevará a cabo por los Servicios de Medicina Preventiva de los distintos
Hospitales, dentro del Área Hospitalaria de referencia correspondiente al
Centro de destino del solicitante y de conformidad con los protocolos
asistenciales que, al efecto, se establezcan en los referidos Servicios.
El personal estatutario que haya optado por la permanencia en el servicio

activo o por la prolongación de la edad de jubilación, podrá poner fin a las
mismas mediante escrito dirigido a los órganos competentes para decretar la
prorroga.
En cualquier caso, cuando no se cumplimente la solicitud de prórroga en

el servicio activo en los plazos señalados, los órganos que, de conformidad con
la Instrucción Segunda, están habilitados para resolver, iniciarán de oficio el
procedimiento de jubilación forzosa. A tal efecto requerirán de forma
fehaciente al interesado para que, si es de su interés y sin perjuicio de la

resolución que proceda, presente la solicitud de prolongación, advirtiéndole de
que de no hacerlo se procederá a declarar su jubilación forzosa al
cumplimiento de los 65 años de edad.
Un supuesto específico de jubilación forzosa viene representado por el

hecho de haber sido DECLARADO EN INCAPACIDAD PERMANENTE.
La incapacidad permanente, cuando sea declarada en sus grados de

incapacidad permanente total para la profesión habitual, absoluta para todo
trabajo o gran invalidez conforme a las normas reguladoras del Régimen
General de la Seguridad Social, produce la pérdida de la condición de
funcionario.
3º. La Jubilación Voluntaria
De conformidad con la previsión establecida en el artículo 67.2 del EBEP,

procederá la jubilación voluntaria, a solicitud del interesado, siempre que el
funcionario reúna los requisitos y condiciones establecidos en el Régimen de
Seguridad Social que le sea aplicable. En idéntico sentido se pronuncia a este
respecto el EM en su artículo 26.
A esta previsión añade el EBEP, que por Ley de las Cortes Generales,
con carácter excepcional y en el marco de la planificación de los recursos
humanos, se podrán establecer condiciones especiales de las jubilaciones
voluntaria y parcial.
Por último, tanto el Estatuto Básico del Empleado Público, como el

Estatuto Marco prevén que el personal funcionario o estatutario, que reúna
los requisitos establecidos en la legislación de Seguridad Social, podrá optar a
la Jubilación Voluntaria, total o parcial.
X. La recuperación de la condición de personal

estatutario fijo.-
LEY 7/2007. Artículo 68. Rehabilitación de la condición de

funcionario.
1. En caso de extinción de la relación de servicios como consecuencia de

pérdida de la nacionalidad o jubilación por incapacidad permanente para el
servicio, el interesado, una vez desaparecida la causa objetiva que la
motivó, podrá solicitar la rehabilitación de su condición de funcionario, que
le será concedida.
2. Los órganos de gobierno de las Administraciones Públicas podrán

conceder, con carácter excepcional, la rehabilitación, a petición del
interesado, de quien hubiera perdido la condición de funcionario por haber
sido condenado a la pena principal o accesoria de inhabilitación,
atendiendo a las circunstancias y entidad del delito cometido. Si
transcurrido el plazo para dictar la resolución, no se hubiera producido de
forma expresa, se entenderá desestimada la solicitud.
Ley 55/2003. Artículo 28.
1. En el caso de pérdida de la condición de personal estatutario como

consecuencia de pérdida de la nacionalidad, el interesado podrá recuperar
dicha condición si acredita la desaparición de la causa que la motivó.
2. Procederá también la recuperación de la condición de personal

estatutario cuando se hubiera perdido como consecuencia de incapacidad,
si ésta es revisada conforme a las normas reguladoras del Régimen
General de la Seguridad Social.
Si la revisión se produce dentro de los dos años siguientes a la fecha de la

declaración de incapacidad, el interesado tendrá derecho a incorporarse a
plaza de la misma categoría y área de salud en que prestaba sus servicios.
3. La recuperación de la condición de personal estatutario, salvo en el caso

previsto en el último párrafo del apartado anterior, supondrá la simultánea
declaración del interesado en la situación de excedencia voluntaria. El
interesado podrá reincorporarse al servicio activo a través de los

procedimientos previstos en el artículo 69, sin que sea exigible tiempo
mínimo de permanencia en la situación de excedencia voluntaria.
Con carácter general, la legislación funcionarial establece que es posible

recobrar la condición de funcionario de forma reglada, en dos supuestos:
 El de pérdida de nacionalidad,
 El de jubilación por incapacidad permanente.
En cualquier caso, será necesario que lo solicite el interesado mediante el

procedimiento que reglamentariamente se establezca.
En este sentido el EM dispone que, si la revisión de la declaración de

incapacidad se produce dentro de los dos años siguientes a la fecha de la
declaración de incapacidad, el interesado tendrá derecho a incorporarse a
plaza de la misma categoría y área de salud en que prestaba sus servicios.
Por último, las normas establecen con carácter excepcional y

discrecional la posibilidad de conceder la rehabilitación a petición del
interesado en los casos de que la perdida se hubiese debido a una condenado a
la pena principal o accesoria de inhabilitación, atendiendo a las circunstancias
y entidad del delito cometido (art.68.1 EBEP). En cualquier caso, si
transcurrido el plazo para dictar la resolución, no se hubiera producido de
forma expresa, se entenderá desestimada la solicitud.
La recuperación de la condición de personal estatutario, salvo en el caso

previsto de revisión de la declaración de incapacidad dentro de los dos
primeros años, supondrá la simultánea declaración del interesado en la
situación de excedencia voluntaria.
El interesado podrá reincorporarse al servicio activo a través de los

procedimientos previstos de movilidad del personal, sin que sea exigible
tiempo mínimo de permanencia en la situación de excedencia voluntaria
XI. El Personal Emérito.-
La figura del Personal Emérito la encontramos regulada en el Estatuto

Marco en su artículo 77.3 y en su Disposición Adicional Cuarta.
Los nombramientos de personal emérito podrán ser concedidos por los

Servicios de salud, con carácter excepcional, a licenciados sanitarios jubilados
cuando los méritos relevantes de su currículo profesional así lo aconsejen
El personal emérito sólo podrá desempeñar actividades de consultoría,

informe y docencia.
La situación del personal emérito será compatible con la percepción de

pensión de jubilación por un régimen público de Seguridad Social, si bien las
retribuciones percibidas por tal condición, sumadas a su pensión de jubilación,
no podrán superar las retribuciones que el interesado percibía antes de su
jubilación, consideradas, todas ellas, en cómputo anual.
En el ámbito de Servicio Andaluz De Salud, es de aplicación el Decreto

155/2005, de 28 de junio, por el que se regula el procedimiento para el
nombramiento de personal emérito en el Servicio Andaluz de Salud y se crea el
registro de personal emérito en el mismo.
En este sentido el Decreto 155/05 define como personal susceptible de

ser nombrado personal Emérito a personas licenciadas sanitarias jubiladas, que
acrediten una trayectoria especialmente distinguida en la asistencia, la
docencia o la investigación en el campo de las ciencias de la salud, y que
estuvieran prestando sus servicios en el momento de su jubilación en el
Servicio Andaluz de Salud.
Según este Decreto los requisitos para poder ser nombrado serán:
 Tratarse de persona licenciada sanitaria jubilada que estuviera

prestando sus servicios en el momento de su jubilación en el
Servicio Andaluz de Salud.
 Haber prestado, al menos, diez años de servicio activo en el

Sistema Sanitario Público de Andalucía.
 Haber destacado por sus méritos asistenciales, investigadores,

docentes o por sus especiales servicios prestados en el Sistema
Sanitario Público de Andalucía.
Considerándose a estos efectos como méritos relevantes:
• Los años de servicio en el Sistema Nacional de Salud, en el

Sistema Sanitario Público de Andalucía y, especialmente, los
prestados en el Servicio Andaluz de Salud.
• La labor desempeñada en el ámbito asistencial, docente y de

investigación, así como los resultados de las evaluaciones
correspondientes.
• El diseño, asesoría, dirección o coordinación y participación

en proyectos, planes o iniciativas que hayan contribuido con
su puesta en marcha a mejorar los servicios del Servicio
Andaluz de Salud.
• El desempeño de cargos intermedios o directivos.
• Las estancias en instituciones sanitarias, científicas y

académicas extranjeras, siempre que hayan repercutido
favorablemente en el funcionamiento del Sistema Sanitario
Público de Andalucía
 Reunir la capacidad funcional necesaria para desempeñar las

actividades de consultoría, informe y docencia que se le asignen,
entendiendo por tal la capacidad suficiente para el desempeño de
sus funciones, debidamente acreditada por las Unidades de
Prevención de Riesgos Laborales y Salud Laboral del Servicio
Andaluz de Salud.
Los nombramientos de personal emérito en el Decreto 155/2005
J. Procedimiento para efectuar los nombramientos.-
Establece el Decreto que, de forma periódica, en los meses de de enero y

julio de cada año, la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del
Servicio Andaluz de Salud, procederá a publicar las convocatorias de
nombramiento de personal emérito del Servicio Andaluz de Salud.
Los interesados que cumplan con los requisitos establecidos o vayan a

cumplirlos antes de dictarse la Resolución de nombramiento, podrán presentar
su solicitud para ser nombrado como personal emérito.
A los efectos de estudiar las solicitudes, comprobar los requisitos y

valorar los meritos alegados se constituye una Comisión de Eméritos como
órgano colegiado adscrito a la Dirección Gerencia del Servicio Andaluz de
Salud, y constituida por la persona titular de la Subdirección de Personal del
Servicio Andaluz de Salud, que ejercerá la presidencia; Siete vocalías,
nombradas por la persona titular de la Dirección Gerencia del Servicio Andaluz
de Salud entre profesionales que ostenten la condición de personal emérito del
Servicio Andaluz de Salud y entre personas licenciadas sanitarias en activo en
el Servicio Andaluz de Salud de reconocido prestigio profesional y la Secretaría
será ejercida por persona que tenga la condición de personal estatuario fijo.
La persona titular de la Dirección General de Personal y Desarrollo

Profesional del Servicio Andaluz de Salud, en el plazo máximo de quince días a
contar desde la recepción de la propuesta de la Comisión de Eméritos,
procederá, en su caso, al nombramiento del personal emérito.
En el caso de que no se proceda al nombramiento de las personas

propuestas por la citada Comisión, la Resolución que al efecto se dicte deberá
estar suficientemente motivada.
El plazo máximo para resolver este procedimiento será de seis meses y

los efectos de la falta de resolución expresa serán desestimatorios, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 44.1 de la citada Ley 30/1992, de

26 de noviembre.
K. Duración del nombramiento.
El nombramiento como personal emérito se hará por un período de un

año prorrogable por períodos de la misma duración, hasta un máximo de cinco
años.
L. Prórroga de los nombramientos.

La prórroga será solicitada por la persona interesada a la Comisión de
Eméritos del 1 al 15 de abril o del 1 al 15 de octubre de cada año natural,
debiendo acompañar a su solicitud proyecto de actividades para el período en
el que se solicita la prórroga.
La Comisión de Eméritos en un plazo de quince días examinará la

solicitud de prórroga en función de la capacidad funcional de la persona
interesada y del informe del servicio o centro en el que la misma haya
prestado sus servicios y, en particular, valorará el plan de actividades
presentado por la persona interesada.
M. Extinción del nombramiento.-
El nombramiento de personal emérito o cualquiera de sus prórrogas

podrá finalizar en los siguientes supuestos:
 La terminación del período de nombramiento o de sus prórrogas.
 La renuncia de la persona interesada.
 La revocación de su nombramiento por perdida sobrevenida de la

capacidad funcional, acordada por Resolución de la Dirección
General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio Andaluz
de Salud, previo informe preceptivo de la Unidad de Prevención de
Riesgos Laborales y Salud Laboral del centro donde la persona

interesada esté desempeñando sus funciones.
N. Funciones del personal emérito.
El personal emérito realizará actividades de consultoría, informe y

docencia, de acuerdo con lo previsto en la Disposición adicional cuarta de la
Ley 55/2003, de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del Personal Estatutario
de los Servicios de Salud.
O. Gratificación al personal emérito.
De conformidad con lo dispuesto en el artículo 77.3 de la Ley 55/2003,

de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios
de salud, la percepción de pensión de jubilación por un Régimen Público de
Seguridad Social será compatible con la situación del personal emérito a que
se refiere la Disposición adicional cuarta de la citada Ley.
P. Carácter vitalicio de la condición de emérito.

Una vez extinguido el nombramiento, la condición de personal emérito
será vitalicia con carácter honorífico y no se percibirá por ello gratificación
alguna.
En cualquier caso, y siempre que el servicio afectado así lo acuerde, una

vez extinguido su nombramiento, las personas licenciadas sanitarias eméritas
podrán seguir prestando su colaboración voluntaria y gratuita, utilizando para
ello los medios disponibles.
Q. Incompatibilidad.
Las incompatibilidades serán las propias que se deriven de su jubilación,
de acuerdo con lo previsto en el artículo 77 de la citada Ley 55/2003, de 16 de
diciembre
R. Registro del personal emérito.
Se crea el Registro de personal emérito del Servicio Andaluz de Salud,

donde se realizarán las inscripciones de los nombramientos de personal
emérito, así como las prórrogas y ceses del mismo
BLOQUE II
LA PROVISIÓN DE PLAZAS, LA SELECCIÓN Y LA

PROMOCIÓN INTERNA
I. LA PROVISIÓN DE PLAZAS EN EL ESTATUTO MARCO
Las herramientas que la ley ha establecido para la cubrir las plazas

vacantes de personal estatutario se conocen como mecanismos de
provisión.
Los mecanismos fijados en el Estatuto Marco para la provisión de plazas

del personal estatutario son los siguientes:
Ý Selección de personal
Ý Promoción interna
Ý Movilidad
Ý Reingreso al servicio activo, en los supuestos y mediante el
procedimiento que en cada servicio de salud se establezcan.
Ý Libre Designación, en los puestos que se determinen por cada servicio
de salud
Ý Reordenaciones: funcionales, organizativas o asistenciales
Veamos ahora cada uno de estos mecanismos.
II. LA SELECCIÓN DE PERSONAL.-
La selección del personal es el mecanismo de provisión de plazas por

excelencia, ya que es el único por el que el personal de nueva incorporación
adquiere la condición de Personal Estatutario Fijo.
Vamos a comenzar estudiando este mecanismo comentando la

regulación establecida sobre la misma en la Ley 7/2007, del Estatuto Básico
del Empleado Público (EBEP).
Sobre los Sistemas selectivos, el EBEP advierte que los procesos

selectivos tendrán carácter abierto y garantizarán la libre concurrencia, sin
perjuicio de lo establecido para la promoción interna y de las medidas de
discriminación positiva que él mismo prevé.
Así mismo, el EBEP ordena a los órganos de selección que velen por el
cumplimiento del principio de igualdad de oportunidades entre sexos.
Al referirse esta Ley a los procedimientos de selección, se ocupa de

señalar que éstos habrán de cuidar especialmente la conexión entre el tipo de
pruebas a superar y la adecuación al desempeño de las tareas de los puestos
de trabajo convocados, incluyendo, en su caso, las pruebas prácticas que sean
precisas.
En este sentido, esta Ley nos indica que las pruebas a superar podrán
consistir en:
Ý la comprobación de los conocimientos y la capacidad analítica de los

aspirantes, expresados de forma oral o escrita,
Ý la realización de ejercicios que demuestren la posesión de habilidades
y destrezas,
Ý la comprobación del dominio de lenguas extranjeras
Ý y, en su caso, la superación de pruebas físicas.
Así mismo, estos procesos selectivos, además de las preceptivas pruebas

de capacidad que acabamos de comentar podrán incluir la valoración de
méritos de los aspirantes, si bien, sólo se podrá otorgar a dicha valoración una
puntuación proporcionada que no determinará, en ningún caso, por sí misma,
el resultado del proceso selectivo.
A estos efectos, el EBEP posibilita a las Administraciones Públicas la

creación de órganos especializados y permanentes para la organización de
procesos selectivos, pudiéndose encomendar estas funciones a los Institutos o

Escuelas de Administración Pública.
Por último, para asegurar la objetividad y la racionalidad de los procesos

selectivos, el EBEP establece la posibilidad de completar estas pruebas con:
Ý la superación de cursos y/o de periodos de prácticas

Ý la exposición curricular efectuada por los propios candidatos
Ý pruebas psicotécnicas
Ý la realización de entrevistas
Ý igualmente podrán exigirse reconocimientos médicos.
En cuanto a los sistemas selectivos establecidos con carácter general

para los funcionarios de carrera, el EBEP fija que estos serán de dos tipos:
Oposición y Concurso-Oposición, que deberán incluir, en todo caso, una o
varias pruebas para determinar la capacidad de los aspirantes y establecer el
orden de prelación.
No obstante, y sólo en virtud de ley podrá aplicarse, con carácter

excepcional, el sistema de Concurso, que consistirá únicamente en la
valoración de méritos.
A partir de este punto vamos a centrarnos en la regulación que sobre

esta materia presenta la Ley 55/2003, del Estatuto Marco del personal
estatutario de los servicios de salud (EM), y en especial en las normativas
aplicables al personal que presta sus funciones en el Servicio Andaluz de
Salud.
En primer término el EM establece que los procedimientos de selección,

sus contenidos y pruebas se adecuarán a las funciones a desarrollar en las
correspondientes plazas, incluyendo, en su caso, la acreditación del
conocimiento de la lengua oficial de la respectiva comunidad autónoma en la
forma que establezcan las normas autonómicas de aplicación.
En los procesos de selección de personal van a ser fundamentales los

siguientes aspectos:
S. La convocatoria y sus contenidos.-
La selección del personal estatutario se efectuará, con carácter periódico,

en el ámbito que en cada servicio de salud se determine, a través de
convocatoria pública.
Las convocatorias se llevarán a cabo mediante procedimientos que

garanticen los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, así
como el de competencia.
Estas convocatorias se anunciarán en el boletín o diario oficial de la

correspondiente Administración pública, y tanto éllas mismas como sus bases
vincularán a
• La propia Administración que las realiza

• Los Tribunales encargados de juzgar las pruebas
• Quienes participen en las mismas.
Una vez publicadas las convocatorias y sus bases, solamente podrán ser
modificadas con sujeción estricta a las normas de la Ley 30/1992, de 26 de
noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del
Procedimiento Administrativo Común.
Así mismo, estas convocatorias deberán:
• Identificar las plazas convocadas indicando, al menos, su número y

características
• Especificar las condiciones y requisitos que deben reunir los
aspirantes
• Establecer el plazo de presentación de solicitudes
• Definir el contenido de las pruebas de selección
• Fijar los baremos y programas aplicables a las mismas y el sistema
de calificación
a) Los requisitos de los aspirantes.-
Los interesados en participar en los procesos de selección de personal

estatutario fijo deberán reunir los siguientes requisitos:
• Nacionalidad: Poseer la Nacionalidad Española o la de un Estado

miembro de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo, u
ostentar el derecho a la libre circulación de trabajadores conforme al
Tratado de la Unión Europea o a otros tratados ratificados por España, o
tener reconocido tal derecho por norma legal.
• Titulación: Estar en posesión de la titulación exigida en la convocatoria
o en condiciones de obtenerla dentro del plazo de presentación de
solicitudes.
Están exentos de este requisito, quienes, sin ostentar el

correspondiente título académico, se encuentren legal o
reglamentariamente autorizados o habilitados para el ejercicio de una
determinada profesión, que podrán acceder a los nombramientos
correspondientes y se integrarán en el grupo de clasificación que a tal
nombramiento corresponda (Disposición Adicional Séptima, del EM).
• Capacidad Funcional: Poseer la capacidad funcional necesaria para el

desempeño de las funciones que se deriven del correspondiente
nombramiento.
• Edad: Tener cumplidos 18 años y no exceder de la edad de jubilación
forzosa.
• No estar sujeto a Inhabilitaciones: No haber sido separado del
servicio, mediante expediente disciplinario, de cualquier servicio de
salud o Administración pública en los seis años anteriores a la
convocatoria, ni hallarse inhabilitado con carácter firme para el ejercicio
de funciones públicas ni, en su caso, para la correspondiente profesión.
En el caso de los nacionales de otros Estados, éstos deberán no

encontrarse inhabilitado, por sanción o pena, para el ejercicio
profesional o para el acceso a funciones o servicios públicos en un
Estado miembro, ni haber sido separado, por sanción disciplinaria, de
alguna de sus Administraciones o servicios públicos en los seis años
anteriores a la convocatoria.
b) La reserva para personas con discapacidad.-
En las convocatorias para la selección de personal estatutario se

reservará un cupo no inferior al cinco por ciento, o al porcentaje que se
encuentre vigente con carácter general para la Función Pública, de las plazas
convocadas para ser cubiertas entre personas con discapacidad de grado igual
o superior al 33 %, de modo que progresivamente se alcance el 2 % de los
efectivos totales de cada servicio de salud.
Las personas que se acojan a esta reserva deberán:
• Superar las pruebas selectivas

• Acreditar, en el momento adecuado, el indicado grado de
discapacidad y la compatibilidad de éste con el desempeño de las
tareas y funciones encomendadas a la categoría de las plazas
ofertadas.
• Concurrir necesariamente por el sistema de acceso libre.
En el caso del Servicio Andaluz de Salud, en virtud de lo establecido en

el artículo 4, apartados 3 y 4 del Decreto 136/2001, de 12 junio, por el que se
regulan los sistemas de selección del personal estatutario y de provisión de
plazas básicas en los Centros Sanitarios del Servicio Andaluz de Salud, esta
reserva mínima del cinco por ciento podrá desglosarse, cuando lo fije la
correspondiente convocatoria, de la siguiente forma:
a) Un mínimo del 4 por ciento de las plazas vacantes se reservará para

ser cubiertas por personas con discapacidad física, sensorial o
psíquica que no tenga origen en retraso mental leve o moderado.
b) Un mínimo del 1 por ciento de las plazas vacantes se reservará para

ser cubiertas por personas con discapacidad que tengan origen en
retraso mental leve o moderado
Por último hay que señalar que el acceso a la condición de personal

estatutario de las personas con discapacidad se inspirará en los principios de:
• Igualdad de oportunidades
• No discriminación
• Compensación de desventajas
Por lo que, en su caso, habrá que proceder a la adaptación de las

pruebas de selección a las necesidades específicas y singularidades de estas
personas.
T. Sistemas de Selección.
Los sistemas de selección de personal fijo previstos en el Estatuto Marco

son los siguientes:
a) La Oposición.-
La selección podrá realizarse a través del sistema de oposición cuando

así resulte más adecuado en función de las características socio-
profesionales del colectivo que pueda acceder a las pruebas o de las funciones
a desarrollar.
La oposición consiste, según prevea la convocatoria, en la celebración de

una o más pruebas dirigidas a evaluar la competencia profesional, entendida
esta como la aptitud e idoneidad de los profesionales para el desempeño de las
correspondientes funciones; es decir la capacidad para integrar y aplicar los
conocimientos, habilidades y actitudes asociadas a las buenas prácticas de su
profesión para resolver los problemas que se puedan plantear en el desempeño
de las funciones propias de la categoría y, en su caso, especialidad, de la plaza
que se oferta en la convocatoria.
Tales ejercicios podrán consistir en pruebas de conocimientos generales

o específicos, o cualquier otro sistema que resulte adecuado para asegurar la
objetividad y racionalidad del proceso selectivo, y su adecuación a las
funciones a realizar.
Cuando las convocatorias prevean que sean varios los ejercicios a

superar, éstos podrán ser eliminatorios en los términos que en las mismas se
disponga.
Cada convocatoria podrá establecer criterios o puntuaciones para superar

la oposición o cada uno de sus ejercicios.
Los resultados de las pruebas o ejercicios realizados otorgarán a cada

uno de los aspirantes unas puntuaciones que servirán para establecer el orden
de prelación entre ellos.
b) El concurso.-
Como vimos al comentar el EBEP, este permite con carácter excepcional,

y siempre que una Ley lo prevea este sistema de selección. En el caso del
personal estatutario, podemos ver como la previsión legal la encontramos en el
EM, que así mismo la establece con carácter excepcional, ya que la selección
de personal podrá realizarse por el sistema de concurso, cuando las
peculiaridades de las tareas específicas a desarrollar o el nivel de cualificación
requerida así lo aconsejen.
El concurso consiste en la evaluación de la competencia, aptitud e

idoneidad de los aspirantes para el desempeño de las correspondientes
funciones a través de la valoración con arreglo a baremo de los aspectos más
significativos de los correspondientes currículos, así como a establecer su
orden de prelación.
Las convocatorias podrán establecer criterios o puntuaciones para

superar el concurso o alguna de sus fases.
Los baremos de méritos que sean de aplicación en las pruebas selectivas

para el acceso a nombramientos de personal sanitario se dirigirán a evaluar las
competencias profesionales de los aspirantes a través de la valoración, entre
otros aspectos, de su currículo profesional y formativo, de los más
significativos de su formación pregraduada, especializada y continuada
acreditada, de la experiencia profesional en centros sanitarios y de las
actividades científicas, docentes y de investigación y de cooperación al
desarrollo o ayuda humanitaria en el ámbito de la salud.
c) El concurso-oposición.-
Dentro de los sistemas señalados en el EM, éste sistema será el utilizado

con carácter general para la selección del personal estatutario fijo.
El concurso-oposición consistirá en la realización sucesiva, y en el orden

que la convocatoria determine, de los dos sistemas que acabamos de
comentar, si bien deberán respetar las siguientes premisas:
• La valoración de méritos de los aspirantes sólo podrán otorgar a

dicha valoración una puntuación proporcionada, que no
determinará, en ningún caso, por sí misma el resultado del
proceso selectivo.
• La puntuación máxima de la fase de oposición habrá de ser como
mínimo, igual a la máxima total del baremo de la fase de
concurso.
• La puntuación obtenida en la fase de concurso no podrá ser
aplicada, en ningún caso, para superar la fase de oposición.
No obstante, podrán superar la fase de oposición un número de personas

aspirantes superior al de plazas convocadas, sin que ello implique la
superación de la convocatoria.
d) Sistemas extraordinarios y excepcionales.-
Los Servicios de Salud determinarán los supuestos en los que será

posible, con carácter extraordinario y excepcional, la selección del personal a
través de un concurso, o un concurso-oposición, consistente en la evaluación
no baremada de la competencia profesional de los aspirantes;
evaluación que realizará un tribunal, tras la exposición y defensa pública por
los interesados de su currículo profesional, docente, discente e investigador, de
acuerdo con los criterios señalados para el sistema de concurso.
U. El Periodo de prácticas.-
De acuerdo con la regulación legal que hemos visto, es posible que se

establezca en la convocatoria, y como parte del proceso selectivo, que los
aspirantes seleccionados en la oposición, concurso o concurso-oposición deben
superar un período formativo, o de prácticas, antes de obtener nombramiento

como personal estatutario fijo.
Durante este período, que no será aplicable a las categorías o grupos

profesionales para los que se exija título académico o profesional específico,
los interesados ostentarán la condición de aspirantes en prácticas.
V. Los Nombramientos de personal estatutario fijo.

Una vez concluidos los procesos selectivos, para adquirir la condición de
funcionario de carrera o de personal estatutario fijo, es necesario que el
órgano competente proceda a expedir los correspondientes nombramientos
como tal a favor de los aspirantes que hayan obtenido mayor puntuación en el
conjunto de las pruebas y evaluaciones.
Estos nombramientos serán publicados en la forma que se determine en

cada servicio de salud.
En el nombramiento se indicará expresamente el ámbito al que

corresponde, conforme a lo previsto en la convocatoria y en las disposiciones
aplicables en cada servicio de salud.
III. La Promoción interna.
La promoción interna se regula en el EM como un derecho más del

personal estatutario fijo, a cuyos efectos:
• Los Servicios de Salud están obligados a facilitar la promoción interna del

personal estatutario fijo a través de las convocatorias previstas en el EM
y en las normas correspondientes del Servicio de Salud.
• El Personal Estatutario Fijo podrá acceder, mediante promoción interna y
dentro de su servicio de salud de destino, a nombramientos
correspondientes a otra categoría, siempre que el título exigido para el
ingreso en esta nueva sea de igual o superior nivel académico que el
exigido en la categoría de procedencia, y sin perjuicio del número de
niveles existentes entre ambas categorias.
• Los procedimientos para la promoción interna se desarrollarán de

acuerdo con los principios de igualdad, mérito y capacidad y por los
sistemas de oposición, concurso o concurso-oposición.
No obstante, estos procedimientos podrán realizarse a través de

convocatorias específicas, si así lo aconsejan razones de planificación
o de eficacia en la gestión.
A este respecto el Decreto 136/2001, establece en relación con la

Promoción Interna los siguientes criterios generales:
• De las plazas acordadas en las Ofertas de Empleo Público podrá

reservarse hasta un 50 por 100 de cada categoría y, en su caso,
especialidad para su provisión por el sistema de promoción interna.
• Las pruebas selectivas de promoción interna podrán realizarse mediante
convocatoria conjunta con las del sistema de acceso libre o a
través de convocatorias específicas si así lo aconsejan razones de
planificación o de eficacia en la gestión, y previa negociación en la
Mesa Sectorial de Negociación de la Administración Sanitaria de la
Comunidad Autónoma.
• Cuando dentro de una convocatoria conjunta, las plazas ofertadas por el
sistema de promoción interna no se cubran totalmente, las
excedentes se acumularán a las convocadas por el sistema general
de acceso libre.
• Las personas aspirantes que por este sistema accedan a nombramiento
de distinta categoría y, en su caso, especialidad, tendrán preferencia
para la elección de plaza en la correspondiente convocatoria
conjunta, sobre las personas aspirantes que no procedan de este
sistema.
El personal estatutario fijo podrá participar en los procesos selectivos

para la promoción interna siempre que cumpla con los siguientes requisitos:
• Pertenecer, como personal estatutario fijo, a una categoría en la que el

título exigido para el ingreso sea de igual o inferior nivel académico
al requerido en la categoría a la que se pretende acceder, y sin

perjuicio del número de niveles existentes entre ambas categorías.
• Ostentar nombramiento como personal estatutario fijo y estar en servicio
activo durante, al menos, dos años en la categoría de procedencia.
• Encontrarse en servicio activo en el momento de la convocatoria
• Ostentar la titulación requerida para el acceso a la categoría a la que se
aspira o en condiciones de obtenerla dentro del plazo de
presentación de solicitudes.
No obstante se establece una excepción a este requisito de titulación, y

por lo tanto, no se exigirá titulación para el acceso a las categorías de
Personal de formación profesional (Técnicos superiores o personal con
título equivalente y Técnicos o personal con título equivalente), salvo que
sea necesaria una titulación, acreditación o habilitación profesional
específica para el desempeño de las nuevas funciones, siempre que el
interesado haya prestado servicios durante cinco años en la categoría de
origen y ostente la titulación exigida en el grupo inmediatamente inferior
al de la categoría a la que aspira a ingresar.
Los procesos selectivos para la promoción interna se efectuarán a través

de los sistemas establecidos con carácter general para el personal estatutario.
En el caso de convocatoria conjunta, los procesos selectivos tendrán el

mismo contenido que el previsto para el sistema de acceso libre; no obstante,
en el caso de que una convocatoria de oposición o concurso-oposición
comprender más de un ejercicio, la persona titular de la Dirección General de
Personal del Servicio Andaluz de Salud podrá disponer la exención de uno o
varios de ellos a aquellas personas aspirantes que procedan de categorías de la
misma especialización funcional que las plazas a proveer y siempre que el
ejercicio o los ejercicios de los que se les exima guarden adecuada relación con
la función desempeñada por éstos.
BLOQUE III
LAS CONVOCATORIAS EN EL DECRETO 136/2001
El artículo 3 del Estatuto Marco instaura que en desarrollo de la

normativa básica contenida en esa Ley, el Estado y las comunidades
autónomas, en el ámbito de sus respectivas competencias, aprobarán los
estatutos y las demás normas aplicables al personal estatutario de cada
servicio de salud.
Dentro del procedimiento de elaboración de dichas normas, cuyas

propuestas serán objeto de negociación en las mesas correspondientes en los
términos establecidos en el capítulo IV, del TítuloIII de la Ley 7/2007, de 12 de
abril, del Estatuto Básico del Empleado Público, los órganos en cada caso
competentes tomarán en consideración los principios generales establecidos en
el artículo 4 de dicha Ley, las peculiaridades propias del ejercicio de las
profesiones sanitarias, y las características organizativas de cada servicio de
salud y de sus diferentes centros e instituciones.
De conformidad con estas previsiones, en el ámbito del Servicio Andaluz

de Salud los sistemas de selección del personal estatutario fijo y en concreto
las convocatorias de pruebas selectivas para de personal estatutario para la
cobertura de las plazas básicas vacantes, está regulado expresamente en el
Decreto 136/2001, de 12 de junio (BOJA de 14 de julio), modificado en parte
por el Decreto 176/2006, de 10 de octubre (BOJA de 27 de octubre), norma
que pese a ser anterior a la promulgación del EM, es compatible con misma,
por lo que vamos a estudiar el procedimiento de las convocatorias de plazas
bajo el prisma de esta regulación.
El primer acto administrativo que ha de producirse para poder cubrir de

forma permanente las vacantes existentes en la plantilla de una Administración
u organismo público, consistirá en la aprobación de una Oferta de Empleo
Público (OPE) y su preceptiva publicación en el Boletín Oficial correspondiente.
El artículo 70 del EBEP define el término “Oferta de Empleo Público” en

una Administración Pública como aquel instrumento de gestión de la provisión
de las necesidades de recursos humanos, con asignación presupuestaria, que
deban proveerse mediante la incorporación de personal de nuevo ingreso, lo
que comportará la obligación de convocar los correspondientes procesos
selectivos para las plazas comprometidas y hasta un diez por cien adicional,
fijando el plazo máximo para la convocatoria de los mismos, pudiendo
contener medidas derivadas de la planificación de recursos humanos. En todo
caso, la ejecución de la OPE o instrumento similar deberá desarrollarse dentro
del plazo improrrogable de tres años.
Esta OPE o instrumento similar, que se aprobará anualmente por los

órganos de Gobierno de las Administraciones Públicas, deberá ser publicada en
el Diario oficial correspondiente.
Generalmente, una OPE deberá establecer:
• La cuantificación y la distribución de las plazas que se ofertan,

fraccionada por categorías, especialidades y, en su caso, por
plazas diferenciadas.
• El sistema selectivo mediante el que proveerán se Las plazas que

se ofertan.
• El cupo del total de plazas ofertadas en cada categoría por el

sistema de acceso libre que se reservara para su cobertura por
personas que acrediten un grado de discapacidad igual o
superior al 33%.
• El porcentaje de plazas que se reserva para su cobertura por el

sistema de acceso de promoción interna.
• La Habilitación al Órgano competente para adoptar cuantas

medidas sean necesarias en cumplimiento de la norma que
aprueba la correspondiente OPE.
I. LAS CONVOCATORIAS.
El siguiente paso para incorporar profesionales a las vacantes anunciadas

en la OPE correspondiente es las convocatorias de las pruebas selectivas.
A este respecto, el Artículo 22 del Decreto 136/91 regula los siguientes

aspectos:
• La competencia para efectuar las convocatorias de pruebas selectivas

de personal estatutario para la cobertura de las plazas básicas
vacantes de uno o más centros sanitarios dependientes del Servicio
Andaluz de Salud le corresponde a la persona titular de la Dirección
General competente en materia de personal del Servicio Andaluz de
Salud, actualmente, la Dirección General de Personal y Desarrollo
Profesional.
• Las convocatorias se efectuaran mediante Resolución que será

publicada en el “Boletín Oficial de la Junta de Andalucía”, en la que se
aprobarán Bases generales en las que se determinen:
o Los requisitos de las personas aspirantes
o El sistema selectivo
o Las pruebas a superar
o Los sistemas de calificación aplicables
• Las convocatorias deberán contener, al menos, las siguientes

especificaciones:
o Número y características de las plazas convocadas.
o Condiciones y requisitos que deben reunir las personas aspirantes.
o Modelo de solicitud y documentación requerida.

o Centro o dependencia al que deben dirigirse las solicitudes y plazo

para presentar las mismas, que habrá de ser como mínimo de 15
días hábiles, a contar desde el día siguiente al de la publicación de la
convocatoria en el “Boletín Oficial de la Junta de Andalucía”.
o Sistema y contenido de los procesos selectivos, programa aplicable,

baremo de méritos, que habrán de ajustarse a las Líneas Básicas
contempladas en el Anexo del Decreto136/2001, y sistema de
calificación.
o Fórmula mediante la que se resolverán los empates que se

produzcan en la puntuación total.
o Lugar donde se realizarán las sucesivas publicaciones a que se

refiere este Decreto.
o Número de plazas que se reservan para ser cubiertas por personas

que acrediten un grado de discapacidad igual o superior al 33 por
ciento.
En el caso de categorías y, en su caso, especialidades de personal

estatutario propias tanto del nivel de Atención Primaria como del nivel de
Atención Especializada, los procesos selectivos que les afecten se podrán
realizar indistintamente de las siguientes formas:
o Convocatoria única para ambos niveles,
o Convocatorias específicas para uno de estos niveles o para ámbito

más reducido.
De conformidad con el principio de sometimiento pleno a la Ley y el

Derecho, las convocatorias de pruebas selectivas de personal estatutario para
la cobertura de las plazas básicas vacantes y sus bases vinculan:
o A la Administración,
o A los Tribunales encargados de juzgar las pruebas selectivas
o A quienes participen en las mismas.

Como ya hemos visto, una vez publicadas las convocatorias y sus bases
solamente podrán ser modificadas con sujeción estricta a las normas de la Ley
30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones
Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.
II. REQUISITOS QUE HAN DE CUMPLIR LOS

ASPIRANTES.
El artículo 23, de este Decreto fija que para poder participar en los
procesos de selección del personal estatutario fijo, los aspirantes deberán
reunir el último día de plazo para la presentación de solicitudes, y mantenerlos
a lo largo del proceso selectivo hasta, en su caso, el momento de la toma de
posesión de la plaza adjudicada, los siguientes requisitos, además de los
establecidos por la correspondiente convocatoria:
a) Poseer la Nacionalidad Española o la de un Estado miembro de la

Unión Europea o del espacio económico europeo, u ostentar el derecho a
la libre circulación de trabajadores conforme al Tratado de la Comunidad
Europea.
En este sentido hay que señalar que de conformidad con lo establecido

en el Decreto 299/2002, de 10 de diciembre, por el que se regula el
acceso al empleo público de la Administración de la Junta de Andalucía
de los nacionales de los demás estados miembros de la Unión Europea,
los nacionales de los demás Estados miembros de la Unión Europea
podrán acceder en igualdad de condiciones que los españoles a todos los
empleos públicos de la Administración de la Junta de Andalucía, siendo
esto asimismo de aplicación al cónyuge de los españoles y de los
nacionales de otros Estados miembros de la Unión Europea, siempre que
no estén separados de derecho, así como a sus descendientes y a los de
su cónyuge, siempre que no estén separados de derecho, menores de 21
años o mayores de dicha edad que vivan a sus expensas. Igualmente se
extenderá a las personas incluidas en el ámbito de aplicación de los
Tratados internacionales celebrados por la Unión Europea y ratificados
por España, en los que sea de aplicación la libre circulación de

trabajadores.
b) Estar en posesión de la titulación exigida en la convocatoria o en

condiciones de obtenerla dentro del plazo de presentación de solicitudes.
c) Poseer la capacidad funcional necesaria para el desempeño de las

funciones que se deriven del correspondiente nombramiento.
d) Tener cumplidos dieciocho años y no exceder de la edad de jubilación

forzosa.
e) No haber sido separado mediante expediente disciplinario del

servicio de cualquier Servicio de Salud o Administración Pública en los
seis años anteriores a la convocatoria, ni hallarse inhabilitado con
carácter firme para el ejercicio de funciones públicas ni, en su caso, para
la correspondiente profesión.
En el caso de los nacionales de otros Estados mencionados en la letra

a), no encontrarse inhabilitado, por sanción o pena, para el ejercicio
profesional o para el acceso a funciones o servicios públicos en un Estado
miembro de la Unión Europea o espacio económico europeo, ni haber
sido separado, por sanción disciplinaria, de algunas de sus
Administraciones o Servicios Públicos en los seis años anteriores a la
convocatoria.
f) Haber abonado las tasas correspondientes a los derechos de

participación en los procesos selectivos, estando exentos de dicho abono
los solicitantes que acrediten una discapacidad en grado igual o superior
al 33 por 100, conforme a la Ley 9/1996, de 26 de diciembre, por la que
se aprueban Medidas Fiscales en materia de Hacienda Pública y
Asistencia Jurídica a Entidades de Derecho Público.
g) Aquellas personas aspirantes que concurran por el cupo de reserva a

personas con discapacidad habrán de estar en posesión de la certificación
que acredite dicha condición en grado igual o superior al 33 por 100.
En cualquier caso y con carácter general, al presentar la solicitud de

participación, las personas aspirantes habrán de acreditar documentalmente
reunir los requisitos contemplados en los apartados a), b), d) y f) que
acabamos de ver; y de forma particular, aquellos que concurran por el cupo de
reserva a personas con discapacidad habrán de aportar, además de los
anteriores, los contemplados en los apartados c) y g).
III. Los Sistemas de Acceso.
A lo largo de estos temas hemos venido viendo que las convocatorias

podrán ofertar plazas para su cobertura por los sistemas de promoción
interna y/o acceso libre.
Por ello, cuando en una convocatoria se oferten conjuntamente vacantes

para su cobertura por los sistemas de promoción interna y acceso libre, las
personas aspirantes habrán de señalar expresamente en su solicitud el sistema
por el que concurren a los procesos selectivos, no pudiendo concurrir por
ambos. De no indicarse en la solicitud el sistema por el que se concurre, los
solicitantes serán admitidas de oficio en el sistema de acceso libre, sin
perjuicio de presentar las alegaciones que estimen oportunas dentro del plazo
establecido tras la publicación del listado provisional de admitidos.
A este respecto hemos de tener presente las siguientes consideraciones

recogidas en el artículo 24 de este Decreto.
4º. Personas con discapacidad
Las personas aspirantes que se acojan a este cupo de reserva:
• Concurrirán necesariamente por el sistema de acceso libre.
• Deberán hacerlo constar en su solicitud, pudiendo indicar en la

misma las adaptaciones que, en su caso, precisen para la
realización de las pruebas, que no podrán desvirtuar el carácter de
las mismas, cuya finalidad es valorar la aptitud de las personas
aspirantes para el desempeño de las funciones propias de la
categoría y, en su caso, especialidad convocada.
Las adaptaciones solicitadas se otorgarán únicamente en

aquellos casos en que la discapacidad guarde relación directa con
la prueba a realizar, y en su caso consistirán en:
 La puesta a disposición de las personas aspirantes de los

medios materiales y humanos y de las asistencias, apoyos y
ayudas técnicas o tecnológicas asistidas que precisen para la
realización de las pruebas en las que participen,
 Así como en la concesión del tiempo adicional que necesiten.
A estos efectos, el órgano convocante garantizará:
 La accesibilidad a los recintos o espacios físicos donde se

desarrollen las pruebas selectivas
 El acceso a la información y comunicación que se genere en

las mismas.
En aquellas convocatorias en que exista reserva de plazas para ser

cubiertas por personas con discapacidad que tengan origen en retraso mental
leve o moderado, el contenido de las pruebas que realicen las personas que
opten por acogerse a dicha reserva estará dirigido a comprobar que las
mismas poseen los conocimientos imprescindibles que les permitan el ejercicio
de las funciones propias de la categoría a la que optan, asimismo, se podrá
establecer para dichas personas la exención de algunas de las pruebas o la
modulación de las mismas.
5º. Promoción interna
Respecto a las personas aspirantes que solicitasen participar por este

sistema y fuesen excluidas del mismo en la resolución provisional por:
• No reunir
• No acreditar los requisitos necesarios para participar por dicho

sistema
Se establece que serán admitidas en el sistema de acceso libre en la

resolución definitiva de admitidos y excluidos, salvo en el caso de las
convocatorias específicas por el sistema de promoción interna, siempre que:
• Así lo hubieran manifestado en su solicitud
• Reúnan los requisitos exigidos para ser admitidas en dicho sistema

de acceso libre.
En cualquier caso, si en el transcurso del proceso selectivo llegara a

conocimiento del Tribunal que alguna de las personas aspirantes carece de uno
o varios de los requisitos necesarios para participar por el sistema de
promoción interna, o por el cupo de reserva a personas con discapacidad, se
procederá, previa audiencia y conformidad de la persona interesada, a su
inclusión en el sistema de acceso libre, si reuniese los requisitos para ello.
IV. Las listas de Admitidos y Excluidos.
Una vez finalizado el plazo de presentación de solicitudes, y tratándose

de los sistemas selectivos de concurso-oposición u oposición, la persona titular
de la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio
Andaluz de Salud hará pública la relación provisional de personas aspirantes
admitidas y excluidas, con expresión, en su caso, de las causas de exclusión, al
menos en los tablones de anuncios de los Servicios Centrales del Servicio
Andaluz de Salud y de las Delegaciones Provinciales de la Consejería de Salud.
Las personas aspirantes dispondrán de un plazo de quince días hábiles,

contados a partir del día siguiente al de la publicación de la relación, para
presentar alegaciones contra la misma.
Dichas alegaciones serán admitidas o rechazadas mediante Resolución

de la persona titular de la Dirección General de Personal y Desarrollo
Profesional del Servicio Andaluz de Salud, por la que se aprobará la relación
definitiva de personas aspirantes admitidas y excluidas, la cual se publicará en
el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía y en los lugares determinados en la
convocatoria. En la misma Resolución se anunciará la fecha, lugar y hora del
examen, salvo que la convocatoria expresamente determine otra cosa. Esta
publicación servirá de notificación a las personas interesadas.
En caso de que el proceso selectivo constase de varias pruebas, los

anuncios de celebración de los sucesivos ejercicios serán publicados por el
Tribunal en los lugares que determine la convocatoria.
V. Los Tribunales Calificadores.
Cada uno de los procesos selectivos que se convoquen será evaluado por
un Tribunal Calificador, al que corresponden las funciones relativas a:
• La determinación concreta del contenido de las pruebas
• La calificación y valoración de las personas aspirantes,
• En general, la adopción de cuantas medidas sean precisas en orden

al desarrollo de las pruebas selectivas.
• Adoptar las medidas oportunas en orden a que los ejercicios

escritos, de la fase de oposición en el sistema selectivo de concurso-
oposición y del sistema de oposición, sean corregidos a la mayor
brevedad posible y sin conocimiento de la identidad de las personas
aspirantes.
Los miembros de los Tribunales deberán ostentar la condición de:
• Personal funcionario de carrera o estatutario fijo de las

Administraciones públicas o de los servicios de salud,
• Personal laboral de los centros vinculados al Sistema Nacional de

Salud, en plaza o categoría para la que se exija poseer titulación del
nivel académico igual o superior a la exigida para el ingreso
En cualquier caso, los miembros de los Tribunales ajustarán su

actuación a lo dispuesto en la normativa vigente reguladora de los órganos
colegiados, debiendo abstenerse de intervenir cuando concurran alguna de las
circunstancias previstas en el apartado 2 del artículo 28 de la Ley 30/1992, de
26 de noviembre, o cuando en los cinco años anteriores a la fecha de
publicación de la convocatoria hubieran realizado tareas de preparación de
personas aspirantes a pruebas selectivas de la categoría y, en su caso,
especialidad convocada. Asimismo, las personas aspirantes podrán recusar en
cualquier momento a los miembros del Tribunal, en los casos previstos
anteriormente.
Estos Tribunales Calificadores estarán sometidos al siguiente régimen:
• Estarán compuestos por un mínimo de cinco miembros,
• Sus miembros serán nombrados por la persona titular de la

Dirección General de Personal y D.P. del Servicio Andaluz de Salud,
conforme a lo dispuesto en la convocatoria.
• Su composición, que se determinará en la correspondiente

resolución de convocatoria, incluirá necesariamente un Presidente y
un Secretario, debiendo designarse el mismo número de miembros
titulares que suplentes.
• Todos los miembros del Tribunal, tanto titulares como suplentes,

deberán ostentar la condición de:
 Personal funcionario de carrera o estatutario fijo de las

Administraciones públicas o de los servicios de salud,
 Personal laboral fijo de los centros concertados vinculados al

Sistema Nacional de Salud, en plaza o categoría para la que
se exija poseer titulación del nivel académico igual o superior
a la exigida para el ingreso
 Estar en posesión de titulación académica de nivel igual o

superior a la exigida para el ingreso en la categoría o

especialidad convocada.
Los Tribunales podrán proponer a la persona titular de la Dirección

General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio Andaluz de Salud la
incorporación a sus trabajos de Asesores Especialistas, que limitarán su
colaboración al ejercicio de sus especialidades técnicas. A dichos asesores les
será de aplicación lo dispuesto en los supuestos de abstención y recusación,
así como los requisitos establecidos para los miembros de los tribunales sobre
su condición de personal fijo y titulación.
Por último y en base al principio de transparencia, las organizaciones

sindicales miembros de la Mesa Sectorial de Negociación de la Administración
Sanitaria de la Junta de Andalucía, tendrán derecho a estar representadas en
las sesiones de los Tribunales Calificadores.
VI. Las Relaciones Provisionales de aprobados.
Concluido el proceso selectivo, el Tribunal Calificador confeccionará la

Relación Provisional de personas aspirantes que han superado la fase de
oposición, tanto por el sistema de acceso libre, como por el de promoción
interna.
Estas Relación Provisional estarán ordenadas alfabéticamente,

especificando la puntuación total obtenida por cada uno de los aspirantes y, en
el caso de que el procedimiento que se hubiese llevado a cabo mediante el
sistema selectivo de concurso-oposición, la puntuación correspondiente a cada
una de las fases.
Las Relación Provisional así confeccionadas serán elevadas a la persona

titular de la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio
Andaluz de Salud, quien las hará pública en la forma y lugares que la
convocatoria determine.
A partir del día siguiente al de su publicación, y dentro del plazo de los

quince días hábiles siguientes, las personas aspirantes podrán presentar las
alegaciones que estimen pertinentes, las cuales no tendrán carácter de

recurso.
VII. LA RESOLUCIÓN DEFINITIVA DE LA CONVOCATORIA.
Una vez estudiadas por el Tribunal Calificador las alegaciones planteadas

por las personas interesadas contra las relaciones provisionales, estos
confeccionarán la Relación Definitiva de personas aprobadas en el proceso
selectivo, tanto por el sistema de acceso libre como por el de promoción
interna, dándose con la misma por admitidas o rechazadas aquellas
alegaciones.
Como en el caso de las Relaciones Provisionales, estas Relaciones

Definitivas serán elevadas por el mismo Tribunal a la persona titular de la
Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio Andaluz de
Salud, ordenada por la puntuación obtenida.
Estas Relaciones Definitivas tienen carácter vinculante, salvo que se

hubiera incurrido en algún defecto esencial del procedimiento.
En orden a garantizar el cupo de plazas reservadas a personas con

discapacidad, y en el supuesto de que, siguiendo el orden de puntuación de las
personas aspirantes que concurren por el sistema de acceso libre, no se
cubriera el total de vacantes inicialmente ofertadas a través del mismo, se
procederá a incluir, si hubiera candidatos para ello, en los últimos puestos con
derecho a plaza, por el orden de la puntuación obtenida y hasta completar el
montante de plazas no cubiertas a las personas aspirantes que, habiendo
optado por acogerse al cupo de discapacitado, hayan aprobado los procesos
selectivos.
La persona titular de la Dirección General de Personal y y Desarrollo

Profesional del Servicio Andaluz de Salud dictará resolución, que se publicará
en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, por la que se aprobarán:
• La relación definitiva de personas aprobadas en el proceso selectivo
• La relación de plazas básicas vacantes que se ofertan a las mismas,

Así mismo, esta resolución ordenará la publicación de dicha relación

definitiva en la forma y lugares que la convocatoria determine.
En cualquier caso, el número de personas aprobadas no podrá superar el

número de plazas convocadas. Cualquier resolución que contravenga lo
anteriormente establecido será totalmente ineficaz en la parte en que exceda
del número de plazas convocadas.
VIII. La Opción de plaza.
Publicada la relación definitiva de personas aprobadas en el proceso

selectivo, las personas que figuren en la misma, en la forma y plazos
determinados en la convocatoria, habrán de:
• Presentar la documentación acreditativa de los requisitos
• Efectuar opción sobre las plazas ofertadas.
Las personas aspirantes que concurran por el cupo de plazas reservadas

a personas con discapacidad podrán solicitar la alteración del orden de
prelación establecido para la elección de plaza y demandar un ámbito territorial
concreto, alegando para ello:
• Motivos de dependencia personal,
• Dificultades de desplazamiento
• Otros análogos.
El órgano convocante resolverá, en cada caso, en función de la

discapacidad acreditada y los cuidados que requiera la persona discapacitada,
limitando la alteración del citado orden de prelación al mínimo requerido para
posibilitar la elección de la plaza de la persona con discapacidad.
El órgano convocante podrá solicitar a la persona aspirante los informes

y certificados que estime precisos, así como requerir informe a órganos
técnicos, sanitarios o asistenciales.
IX. La adjudicación de plazas.
El siguiente paso en el proceso de las convocatorias es la adjudicación

de las plazas ofertadas.
Esta adjudicación de plazas se efectuará entre las personas que figuren

en la relación de aprobados según:
1º. El orden de la puntuación obtenida en el conjunto de las pruebas
2º. La opción efectuada sobre las plazas ofertadas, respetando en todo

caso lo establecido respecto a las personas aspirantes que concurren
por el sistema de promoción interna.
No obstante, si alguna de las personas aprobadas:
• No efectuasen su opción sobre las plazas ofertadas,
• No les correspondiese plaza alguna de entre las efectivamente

solicitadas,
A éstas se les adjudicará alguna de las plazas ofertadas que resten

vacantes, tras la adjudicación que acabamos de comentar, siempre que
hubiesen acreditado los requisitos exigidos en la correspondiente convocatoria.
En cualquier caso, las personas aspirantes que no acrediten reunir los

requisitos exigidos dentro del plazo establecido para ello, perderán los
derechos derivados de su participación en el proceso selectivo y no podrán ser
nombradas, sin perjuicio de la responsabilidad en que pudieran haber incurrido
por falsedad en su solicitud.
X. Los Nombramientos.
Concluida la fase de adjudicación de plazas, la persona titular de la

Salud dictará Resolución, que agota la vía administrativa, por la que se
acordará el nombramiento de las personas seleccionadas, con indicación de
la plaza que les hubiere correspondido, y ordenará su publicación en el Boletín
Oficial de la Junta de Andalucía.
XI. La Toma de posesión.
El plazo de toma de posesión será de un mes, improrrogable, contado a

partir del día siguiente al de la publicación de la resolución contemplada en el
artículo anterior, en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía.
Transcurrido el plazo de toma de posesión, quienes no se hayan

incorporado a su destino, salvo causa justificada así apreciada por la persona
titular de la Dirección General de Personal y Servicios del Servicio Andaluz de
Salud, perderán los derechos derivados de su participación en los procesos
selectivos.
XII. La Promoción Interna.
1º. Criterios generales.
Hemos visto, como el art. 34 del EM permitía el acceso del personal

estatutario fijo, dentro de su servicio de salud de destino, mediante promoción
interna a nombramientos correspondientes a otra categoría, siempre que el
título exigido para el ingreso sea de igual o superior nivel académico que el de
la categoría de procedencia, y sin perjuicio del número de niveles existentes
entre ambos títulos
En este sentido el Decreto 136 establece en su Capítulo IV que de las

plazas acordadas en las Ofertas de Empleo Público podrá reservarse hasta un
50 por 100 de cada categoría y, en su caso, especialidad para su provisión por
el sistema de promoción interna.
Las pruebas selectivas de promoción interna podrán realizarse mediante

convocatoria conjunta con las del sistema de acceso libre o a través de
convocatorias específicas, si así lo aconsejan razones de planificación o de
eficacia en la gestión, y en cualquier caso, previa negociación en la Mesa
Sectorial de Negociación de la Administración Sanitaria de la Comunidad
Autónoma.
Las plazas que no se cubran por el sistema de promoción interna, se

acumularán a las convocadas por el sistema general de acceso libre, salvo en
el caso de las convocatorias específicas previstas en el apartado anterior.
De conformidad con lo establecido en el apartado 6 del artículo 34 de la

Ley 55/2003, las personas aspirantes que por este sistema accedan a
nombramiento de distinta categoría y, en su caso, especialidad, tendrán
preferencia para la elección de plaza en la correspondiente convocatoria
conjunta, sobre las personas aspirantes que no procedan de este sistema.
2º. REQUISITOS.
El personal estatutario fijo del Servicio Andaluz de Salud que pretenda

concurrir a las pruebas selectivas por el sistema de promoción interna deberá
reunir y acreditar los requisitos que exijan en cada convocatoria, así como los
que se relacionan a continuación:
a) Pertenecer a grupos de clasificación inferiores, sea inmediato o no, o a

diferentes categorías y/o especialidades del mismo grupo.
b) Encontrarse en situación administrativa de servicio activo, y con

nombramiento como personal estatutario fijo durante, al menos,
dos años en la categoría de procedencia
c) Estar en posesión de la titulación exigida en la convocatoria o en

condiciones de obtenerla dentro del plazo de presentación de
solicitudes.
No obstante, de conformidad con lo dispuesto en el apartado 5, del

artículo 34 de la Ley 55/2003, no se exigirá el requisito de titulación
para el acceso a las categorías incluidas en el artículo 7.2.b de la misma
Ley, salvo que sea necesaria una titulación, acreditación o habilitación
profesional específica para el desempeño de las nuevas funciones,
siempre que el interesado haya prestado servicios durante cinco años
en la categoría de origen y ostente la titulación exigida en el grupo
inmediatamente inferior al de la categoría a la que aspira a ingresar
Es decir en aplicación de esta previsión, al personal no sanitario, no

se exigirá el requisito general de titulación para el acceso por el sistema
de promoción interna a los Grupos C y D, a quienes hayan prestado
servicios como personal estatutario fijo en el grupo inmediatamente
inferior durante más de cinco años, salvo que sea exigible una
titulación, acreditación o habilitación profesional específica para el
desempeño de las nuevas funciones, conforme se determine en la
correspondiente convocatoria.
3º. Sistemas de selección.
Los procesos selectivos para la promoción interna se efectuarán a través

de los sistemas establecidos con carácter general en el Decreto 136/2001.
4º. Contenido de los procesos selectivos.
En el caso de convocatoria conjunta, los procesos selectivos tendrán el

mismo contenido que el previsto para el sistema de acceso libre.
No obstante, en el caso de que una convocatoria de oposición o

concurso-oposición conste de más de un ejercicio, la persona titular de la
Salud podrá disponer la exención de uno o varios a aquellas personas
aspirantes que procedan de categorías de la misma especialización funcional
que las plazas a proveer y siempre que el ejercicio o los ejercicios de los que
se les exima guarden adecuada relación con la función desempeñada por
éstos.
BLOQUE IV
EL CUERPO SUPERIOR FACULTATIVO DE

INSTITUCIONES SANITARIAS DE LA JUNTA DE
ANDALUCÍA, ESPECIALIDADES DE FARMACIA Y
VETERINARIA.
El DECRETO 70/2008, DE 26 DE FEBRERO.
Desde la creación del Cuerpo Superior Facultativo de Instituciones

Sanitarias de la Junta de Andalucía, especialidades de Farmacia y Veterinaria,
por medio de la Ley 8/1997, el personal funcionario del mismo, tiene como
centros de destino los Distritos de Atención Primaria del Servicio Andaluz de
Salud, por lo que vamos a proceder a un somero estudio de sus procesos
específicos de selección según la regulación contenida en el Decreto 70/2008,
de 26 de febrero.
A. La Oferta de Empleo Público.

Establece el citado Decreto que será objeto de Oferta de Empleo Público
las vacantes de la plantilla orgánica cuya cobertura se considere necesaria y
que no puedan ser cubiertas con los efectivos de personal existentes.
B. Los Sistemas Selectivos.
La Norma a la que nos estamos refiriendo fija que el acceso a la

condición de personal funcionario de carrera del Cuerpo Superior Facultativo
de Instituciones Sanitarias de la Junta de Andalucía, especialidades de

Farmacia y Veterinaria, se llevará a efecto:
• Mediante convocatoria pública

• A través del sistema de concurso-oposición libre, en el que se
garanticen, en todo caso, los principios constitucionales de
igualdad, mérito y capacidad, así como el de publicidad
Hoy en día estos procesos selectivos se regirán de acuerdo con las

previsiones establecidas en la Ley 7/2007, de 12 de abril, por la Ley 6/1985,
de 28 de noviembre, en lo que no se oponga a la primera, y por lo establecido
en el Decreto 70/2008 y demás normativa de aplicación.
Como ya hemos visto, a lo largo de curso, el concurso-oposición,

consiste en la sucesiva celebración de la fase de oposición, en la que se
realizará una o más pruebas al objeto de determinar la capacidad y la aptitud
de las personas aspirantes, y de la fase de concurso, mediante la
comprobación y calificación de los méritos de las mismas, para que con la
suma de ambas valoraciones, se fije el orden de prelación de los aspirantes
que superen el proceso selectivo.
En cualquier caso, el Decreto nos señala que la puntuación máxima de

la fase de oposición habrá de ser, al menos, igual a la máxima total del
baremo de la fase de concurso, sin que en ningún caso la puntuación obtenida
en la fase de concurso pueda ser aplicada para superar la fase de oposición.
C. La Convocatoria.
Establece el Decreto 70/2008, que la competencia para realizar las

correspondientes convocatorias para la cobertura de puestos vacantes de las
especialidades de Farmacia y Veterinaria del Cuerpo Superior Facultativo de
Instituciones Sanitarias de la Junta de Andalucía, la Dirección General
competente en materia de personal del Servicio Andaluz de Salud;
actualmente la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional.
Estas convocatorias se sustanciarán mediante la oportuna Resolución

que deberá ser publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, y que,
como contenido necesario, deberá señalar:
1º. Las especificaciones mínimas establecidas en el artículo 38 de la Ley

6/1985, de 28 de noviembre; a saber:
a) número y características de las vacantes
b) requisitos exigidos para presentarse a las pruebas
c) sistema selectivo y forma de desarrollo de las pruebas y de

su calificación
d) programas, si es que se trata de oposición o concurso-

oposición
e) baremos de valoración, si es que se trata de oposición o

concurso-oposición
f) composición del órgano de selección
g) calendario para la realización de las pruebas, que habrá de

concluir en todo caso antes del 1 de octubre del año en curso
h) indicación de la oficina pública donde estarán de manifiesto

las sucesivas comunicaciones, sin perjuicio de que puedan
publicarse en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía o
notificarse directamente a los interesados
2º. Las propias señaladas en el Decreto:
a) Modelo de solicitud y documentación requerida, si procede.
b) El plazo para la presentación de solicitudes, que será, como

mínimo de quince días hábiles contados desde el día
siguiente al de la publicación de la convocatoria en el Boletín
Oficial de la Junta de Andalucía.
c) Titulación exigida para el acceso.

d) Baremos de valoración, con sujeción a los criterios generales

del baremo de méritos que se recoge como Anexo III de este
Decreto.
e) Fórmula de desempate.
D. Comisiones de Selección.
Como es lógico, el proceso selectivo será evaluado por una Comisión de

Selección cuya composición y funcionamiento se ajustará a lo previsto en el
artículo 60 de la Ley 7/2007, de 12 de abril, y en lo que no se oponga en los
artículos 40 y 41 de la Ley 6/1985, de 28 de noviembre; en concreto:
Ý Los órganos de selección serán colegiados

Ý La composición de las Comisiones de selección deberá ajustarse a los
principios de imparcialidad y profesionalidad de sus miembros, y se
tenderá, asimismo, a la paridad entre mujer y hombre
Ý La Comisión de selección designada en la convocatoria estará integrada
por personas, funcionarios o no, idóneas para enjuiciar los
conocimientos y aptitudes exigidos, y que, en todo caso, habrán de
poseer titulación académica igual o superior a la exigida a los
candidatos y que sea del área de conocimientos necesaria para poder
enjuiciarlos
Ý Los miembros de las comisiones de selección, cuyo número no podrá ser
inferior a cinco, serán nombrados por la persona titular de la Dirección
General competente en materia de personal del Servicio Andaluz de
Salud, debiendo designarse el mismo número de suplentes
Ý No podrá ser miembros de los órganos de selección el personal de
elección o de designación política, los funcionarios interinos y el
personal eventual
Ý Los miembros de los órganos de selección pertenecerán a estos siempre
a título individual, no pudiendo ostentarse esta condición en
representación o por cuenta de nadie
Ý Los miembros de las Comisiones de selección son personalmente

responsables del estricto cumplimiento de las bases de la convocatoria
y de la sujeción a los plazos establecidos para la realización y
valoración de las pruebas y para la publicación de sus resultados
Ý Las Comisiones de selección podrán disponer la incorporación a sus
trabajos de Asesores Especialistas, quienes se limitarán al ejercicio de
sus especialidades técnicas, que son la única base de su colaboración
con el órgano de decisión
Ý Las Comisiones de Selección no podrán aprobar ni declarar que han
superado las pruebas respectivas un número superior de aspirantes al
de vacantes convocadas. Las propuestas de aprobados que
contravengan este límite serán nulas de pleno derecho.
No obstante, cuando el proceso de selección tenga de una fase
complementaria de cursos o prácticas podrá admitirse a la misma mayor
número de asistentes que el de plazas convocadas. En este caso, la
limitación del número total de aprobados se refiere a los resultados
definitivos del curso o prácticas, que serán valorados bien por la
Comisión inicial o por otra que reglamentariamente se determine, de
acuerdo con lo que hubiese establecido la convocatoria
Ý Por último, hay que señalar que es función de estas Comisiones la
determinación concreta del contenido de las pruebas y la calificación y
valoración del personal aspirante, así como la adopción de cuantas
medidas sean necesarias para asegurar el correcto desarrollo de las
pruebas selectivas
E. Las Solicitudes.
Las solicitudes para participar en los procedimientos de acceso deberán

dirigirse a la persona titular de la Dirección General competente en materia de
personal del Servicio Andaluz de Salud.
Para ser admitidos y tomar parte en las pruebas selectivas

correspondientes, bastará con que los aspirantes:
Ý Manifiesten en sus solicitudes de participación que reúne todas y cada

una de las condiciones exigidas, referidas siempre a la fecha de
expiración del plazo de presentación, sin perjuicio de la responsabilidad
en que pudiera incurrir por inexactitudes o falsedades en la misma
Ý Abonen la tasa de inscripción de la convocatoria antes de la finalización
del plazo de presentación de solicitudes
F. Listas de aspirantes admitidos y excluidos.
Concluido el plazo de presentación de solicitudes, la persona titular de

la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional dictará resolución,
declarando aprobada la relación provisional de aspirantes admitidos y
excluidos.
La citada resolución se publicará en el Boletín Oficial de la Junta de

Andalucía y deberá señalar:
a. Los lugares en que se encuentran expuestas al público las listas

provisionales de aspirantes admitidos y excluidos.
b. El plazo de alegaciones contra la misma, que no podrá ser inferior

a diez días hábiles.
Las alegaciones presentadas a la relación provisional de aspirantes

admitidos y excluidos, serán admitidas o rechazadas mediante resolución de la
Dirección General competente en materia de personal del Servicio Andaluz de
Salud, por la que se aprobará la relación definitiva de personas admitidas
y excluidas y se publicará en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, e
indicará la fecha, lugar y hora del primer ejercicio, o en su caso, único
ejercicio.
G. Relación de aspirantes que superan el proceso

selectivo.
La convocatoria anunciará que, una vez finalizadas las distintas fases
del proceso selectivo, la Comisión de Selección confeccionará la relación
provisional de aspirantes que hayan superado el proceso selectivo, reflejando

la puntuación obtenida por éstos en las fases de concurso y de oposición, que
será elevada a la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del
Servicio Andaluz de Salud, para proceder a su publicación, en la forma y
lugares que la misma se determine.
En el plazo de quince días hábiles, contados a partir del día siguiente al

de la publicación de la relación provisional, las personas aspirantes podrán
presentar las alegaciones que estimen pertinentes, las cuales en ningún caso
tendrán carácter de recurso.
Como en los otros procedimientos de selección que hemos estudiado,

las alegaciones planteadas por los interesados contra las relaciones
provisionales serán admitidas o rechazadas por la Comisión de Selección en la
relación definitiva de aspirantes que hayan superado el proceso selectivo, la
cual será elevada a la Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional
del Servicio Andaluz de Salud, ordenada, en esta ocasión, por la puntuación
toal obtenida por cada persona aspirante.
La Dirección General de Personal y Desarrollo Profesional del Servicio

Andaluz de Salud dictará Resolución, que agota la vía administrativa, por la
que se aprobará dicha relación definitiva, publicándose la misma en el Boletín
Oficial de la Junta de Andalucía e indicando:
a. Relación de puestos de trabajo vacantes que se ofertan a las

personas aspirantes que hayan superado el proceso selectivo y el
procedimiento para que puedan efectuar su opción de puesto de
trabajo.
b. El plazo para que las personas aspirantes aporten los documentos

acreditativos de las condiciones de capacidad y requisitos exigidos
en la convocatoria que no podrá ser inferior a veinte días hábiles.
Las Comisiones de Selección no podrán proponer el acceso a la

condición de personal funcionario de carrera de un número superior de
personas aspirantes que de puestos de trabajo convocados, excepto cuando

así lo prevea la propia convocatoria.
No obstante lo anterior, siempre que las Comisiones de Selección hayan

propuesto el nombramiento de igual número de personas aspirantes que el de
puestos de trabajo convocados, y con el fin de asegurar la cobertura de las
mismas, cuando se produzcan renuncias de los aspirantes seleccionados, antes
de su nombramiento o toma de posesión, el órgano convocante podrá requerir
de las comisiones de selección relación complementaria de las personas
aspirantes que sigan a las propuestas, para su posible nombramiento como
personal funcionario de carrera.
H. Aportación de documentación.
Quienes dentro del plazo indicado en la Resolución por la que se

aprueba la relación definitiva de aspirantes que hayan superado el proceso
selectivo, salvo causas de fuerza mayor, no presentasen la documentación
requerida, o de la misma se dedujese que carecen de alguno de los requisitos
exigidos para su nombramiento como personal funcionario de carrera, no
podrán ser nombrados como tales, quedando anuladas todas sus actuaciones,
sin perjuicio de la responsabilidad en que pudiera haber incurrido por falsedad
en sus solicitudes de participación.
Por su lado, quienes ya tuvieran la condición de personal funcionario

estarán exentos de justificar las condiciones y requisitos ya acreditados para
obtener su anterior nombramiento, debiendo presentar únicamente
certificación de la Consejería de Justicia y Administración Pública u Organismo
o Administración Pública en que presten su servicio, acreditando su condición
funcionarial y demás circunstancias que consten en su expediente personal.
I. Los Nombramientos.
Concluido el proceso selectivo, el personal aspirante que lo hubiera

superado será nombrado personal funcionario de carrera por la Consejería
competente en materia de Función Pública.
Dichos nombramientos serán publicados en el Boletín Oficial de la Junta

de Andalucía.
J. La Reserva para personas con discapacidad.

En las Ofertas de Empleo Público, como venimos viendo, se reservará
un cupo para personas con discapacidad, no inferior al cinco por ciento de las
vacantes ofertadas.
El personal aspirante que se acoja a este cupo de reserva concurrirá

necesariamente por el sistema de acceso libre.
Esta reserva mínima que estamos comentado podrá desglosarse,

siempre que la Oferta de Empleo Público lo permita de la siguiente forma:
a. Un mínimo del 4% de los puestos vacantes se reservará para ser

cubiertos por personas con discapacidad física, sensorial o psíquica
que no tenga origen en retraso mental leve o moderado.
b. Un mínimo del 1% de los puestos vacantes se reservará para ser

cubiertos por personas con discapacidad que tengan origen en
retraso mental leve o moderado.
Las personas aspirantes que concurran por el cupo de reserva para

personas con discapacidad deberán:
Ý Hacerlo constar en su solicitud

Ý Adjuntar a la misma certificación de los órganos competentes de la
Consejería competente en materia de Igualdad y Bienestar Social,
Ministerio competente en materia de Asuntos Sociales u Organismo
competente en aquellas Comunidades Autónomas que tengan
transferidas las competencias en la materia, que acredite tal condición
y que se pronuncie expresamente sobre la capacidad para desempeñar

las funciones y tareas que correspondan a los puestos de trabajo
objeto de la convocatoria
Ý Deberán indicar las adaptaciones que, en su caso, precisen para la
realización de las pruebas, que no podrán desvirtuar el carácter de las
mismas, cuya finalidad es valorar la aptitud del personal aspirante para
el desempeño de las funciones propias del puesto de trabajo
convocado.
Por último, las personas con discapacidad de grado igual o superior al

33% estarán exentas del pago de la tasa de inscripción a que hace referencia
en el artículo 16.2, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 6 de la Ley
9/1996, de 26 de diciembre.
K. La Promoción interna.
La promoción interna, según la define el Decreto, consiste en el
ascenso del personal funcionario de la Administración de la Junta de Andalucía
perteneciente a Cuerpos o especialidades del Subgrupo A2 al Cuerpo Superior
Facultativo de Instituciones Sanitarias de la Junta de Andalucía, especialidades
de Farmacia y Veterinaria, siempre que esté en posesión del título exigido.
Los procedimientos de promoción interna de estos colectivos serán

convocados y resueltos por la Dirección General de Personal y Desarrollo
Profesional del Servicio Andaluz de Salud, mediante su publicación en el
Boletín Oficial de la Junta de Andalucía.
La promoción interna se llevará a cabo mediante el sistema de

concurso-oposición, con sujeción a los principios de igualdad, mérito,
capacidad y publicidad, sin que en ningún caso la puntuación obtenida en la
fase de concurso pueda aplicarse para superar la fase de oposición.
El Decreto 70/08, establece que en cada convocatoria de pruebas

selectivas podrá reservarse hasta un 50% de los puestos convocados para su
provisión por el sistema de promoción interna.
Las personas aspirantes que deseen participar en las pruebas selectivas

por el sistema de promoción interna deberán:
Ý Acreditar una antigüedad de, al menos, dos años en Cuerpos o

Especialidades del Subgrupo A2 al que pertenezcan el día de
finalización del plazo de presentación de solicitudes de participación
Ý Reunir los requisitos generales exigidos a todos quienes participan y los
específicos que exija la convocatoria.
En las convocatorias podrá establecerse la exención de las pruebas

sobre aquellas materias cuyo conocimiento se haya acreditado suficientemente
en las de ingreso al Cuerpo de origen.
Quienes accedan al Cuerpo Superior Facultativo de Instituciones

Sanitarias, por el turno de promoción interna tendrán, en todo caso,
preferencia para cubrir los puestos vacantes de la respectiva convocatoria
sobre el personal aspirante que no proceda de este turno.
Los puestos de trabajo que no se cubran por el sistema de promoción

interna se acumularán a los convocados por el sistema general de acceso libre.
L. El Grado personal
El personal funcionario de nuevo ingreso del Cuerpo Superior

Facultativo de Instituciones Sanitarias de la Junta de Andalucía, especialidades
de Farmacia y Veterinaria, comenzará a consolidar el grado personal inicial en
el nivel inferior del intervalo propio del Subgrupo A1 (nivel 20).
FIN

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EL PERSONAL ESTATUTARIO Y SU RÉGIMEN JURÍDICO

EL PERSONAL ESTATUTARIO Y SU RÉGIMEN JURÍDICO:

ADQUISICIÓN Y PÉRDIDA DE LA CONDICIÓN DE PERSONAL

EL NACIMIENTO Y LA EXTINCIÓN DE LA RELACIÓN FUNCIONARIAL

LA PROVISIÓN DE PLAZAS, LA SELECCIÓN Y LA PROMOCIÓN INTERNA

BLOQUE III ..................................................................................... 59

LAS CONVOCATORIAS EN EL DECRETO 136/2001

EL CUERPO SUPERIOR FACULTATIVO DE INSTITUCIONES SANITARIAS DE LA

CASOS PRÁCTICOS ........................................................................... 89

TEST DE EVALUACIÓN FINAL .............................................................. 93

HOJA DE RESPUESTAS AL TEST DE EVALUACIÓN ................................. 99

Antes de comenzar con lo que es la materia propia de este curso sería

En primer lugar, vamos a ver qué significado tiene el término

Cuando utilizamos este término nos estamos refiriendo a

Reglas dictadas por una autoridad competente, con el objeto de

De esta definición debemos destacar los siguientes elementos:

• Que estas normas emanan de una “autoridad competente”; esta

• Que su finalidad solo busca ordenar las relaciones humanas.

• Que su incumplimiento puede traer como consecuencia la imposición

Resumiendo, las normas jurídicas confieren derechos e imponen

LA IGNORANCIA DE LAS LEYES NO EXCUSA DE SU CUMPLIMIENTO.

Este aforismo, que resulta fundamental en nuestra vida social, lo

Hasta ahora hemos utilizado dos conceptos: Normas Jurídicas y Leyes;

Lo primero que debemos saber es que el concepto “normas jurídicas” es

Lo cierto y verdad es que, en nuestra vida social nos vamos a encontrar

Conjunto de leyes y otras normas jurídicas que son aplicables en un

Este ordenamiento jurídico va a integrar distintas ramas del derecho

Rama del derecho mediante la que se regulan las actividades de las

Este derecho se ocupa de las relaciones

• Internas de cada administración.

• Entre las propias administraciones publicas.

• Entre las administraciones y los particulares.

Así mismo, este derecho tiene las siguientes características:

• Es un derecho común; aplicable a todas las actividades de las

Ley 30/92 Artículo 1. Objeto de la Ley.

La presente Ley establece y regula las bases del régimen jurídico, el

• Es un derecho autónomo; se rige por sus propios principios.

• Es un derecho de base territorial; está ligado al ámbito territorial

EL DERECHO ADMINISTRATIVO Y EL PRINCIPIO DE LEGALIDAD

Como empleados públicos, y sobre todo como personal sometido a una

Es decir, si en el Derecho laboral el principio de autonomía de las partes

Por lo tanto, la actuación de la administración deberá estar siempre

Este principio de legalidad conlleva a la aplicación de estos otros

• Principio de prohibición de la arbitrariedad.- Según este principio

• Principio de objetividad.- Éste obliga a que las decisiones se

• Principio de igualdad, mérito y capacidad.

• Principio de actuación través de procedimientos.

Otros principios que rigen la actividad de las administraciones públicas

• Principio de publicidad de los actos.

• Principio de competencia del órgano.

• Principio cobertura presupuestaria.

• Principio de no contradicción de las normas superiores.

Todo ello va llevar a que el órgano administrativo competente deba

Obviamente no deberíamos confundir lo discrecional con lo arbitrario

II. FUENTES DEL DERECHO ADMINISTRATIVO

De forma general, nos referimos a FUENTES DEL DERECHO como aquello

En nuestro ordenamiento estas fuentes del Derecho positivo o escrito

• La Costumbre, que sólo regirá en defecto de Ley aplicable,

• Los Principios Generales del Derecho, que se aplicarán en

A esto hay que añadir:

1º. Que las normas jurídicas contenidas en los Tratados

Aquí hemos de introducir Una salvedad sobre el Derecho Comunitario.

2º. Que la Jurisprudencia complementará el ordenamiento jurídico con