Erick Ricardo Santos Páez Genética

Historia de la genética
Los conocimientos respecto de la herencia y del modo como se puede
manipular han ido acompañando al género humano alrededor de su historia,
llegando a ser hoy en día uno de los principales campos de investigación y
aplicaciones biotecnológicas. Primero que nada, el inicio de este saber científico se
localiza más allá de los umbrales de las fuentes históricas, pues la simple
observación dio la evidencia para establecer relaciones entre padres e hijos, sea de
animales o en plantas, y de modo más preciso, fue alrededor de 8000 a.C y el 1000
a.C cuando se dio la domesticación de animales y vegetales cuando se empezó a
manipular la genética de esos individuos, aunque aún sin dilucidar los procesos con
la exactitud en que intervenían.

En la época de VI y IV a. C., los griegos como el médico Hipócrates y el

Maestro Aristóteles dieron algunas teorías para explicar el fenómeno de la herencia,
como fue la pangénesis que postulaba que la herencia era trasmitida por la infusión
de caracteres del progenitor en el semen, aunque el Estagirita demostró que hay
individuos que no heredan de manera visible y/o inmediata sus rasgos. Durante
largo tiempo el avance en la genética estuvo quieto, no fue sino hasta el siglo XVIII
cuando de nuevo el tema fue investigado y que dieron material para que el padre
G. Mendel realizara sus experimentos en 1866. Mientras las teorías teleológicas de
la Modernidad fortalecieron los postulados de una evolución que alcanzó su cumbre
cuando en 1830 Darwin publicara su Origen de las especies, lo que demostraba, en
cierto sentido, que la evolución estaba emparentada con la herencia en su
explicación de la diversidad y parentesco de las especies.

Al padre Mendel se le reconoce ser padre de la genética, por que

verdaderamente con sus experimentos demostró un modelo que explicaba de
manera satisfactoria ciertos fenómenos de la herencia, lo que dio pie a futuras y
renovadas investigaciones. Entre los científicos que continuaron investigando se
encuentran Batenson, Vries, entre otros, y sumaron evidencias que daban crédito a
Mendel. No fue sino hasta el siglo XX cuando los hallazgos en bioquímica y citología
empezaron a sugerir el lugar físico y el mecanismo por el cual se da el fenómeno
de la herencia, primero se postuló a las proteínas como las portadoras de la
herencia, pero gracias al descubrimiento de la naturaleza química del ADN en 1944
y de su estructura en 1953 se pudo reconocer su papel como portadora de la
información genética, de modo que ahora se conoce que al conjunto de
cromosomas como código genético en cual es responsable de la trasmisión y
expresión de las características de los progenitores, lo que sin duda ha permitido un
gran avance en la biotecnología en diversos campos, desde la medicina (terapia
génica) hasta la agricultura (transgénicos) e incluso la industria (prod. de insulina).