Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Cartilla 5 Violencia Intrafamiliar PDF
Cartilla 5 Violencia Intrafamiliar PDF
5
Diciembre 2005
VIOLENCIA INTRAFAMILIAR
Introducción
Como en todos los temas, queremos invitar a las organizaciones sociales y a las
personas de las diferentes poblaciones de Antioquia para que, después de analizar este
folleto, realicen foros de discusión y envíen sus aportes por escrito a Antioquia se toma
la Palabra, al apartado aéreo, al correo electrónico o a la línea telefónica.
Recuerde que todos sus aportes sobre cada temática serán tenidos en cuenta. Con
éstos se realizará un debate cada mes en Medellín que será emitido en diferido por
Teleantioquia y otros canales locales de televisión. De igual manera, todos los temas
serán tratados por los distintos medios de comunicación (radio, prensa y televisión)
para que el mayor número de habitantes de Antioquia tengan acceso suficiente a la
información que les permita, cada vez más, tomarse la palabra por la equidad y la vida
en Antioquia.
1
Así pues, esperamos sus aportes.
Gandhi
2
Qué es la violencia intrafamiliar?
Maltrato físico: Todos los actos que atenten o agredan el cuerpo de la persona, tales
como empujones, bofetadas, golpes de puño, patadas, etc. Puede ser de intensidad
leve, moderada o severa y de ocurrencia antigua, reciente o recurrente. Es la forma de
maltrato más frecuente hacia los niños y las niñas.
3
pensamientos de la persona a quien se está agrediendo; en este tipo de conducta
están incluidos las descalificaciones, los insultos, las amenazas, las imposiciones, etc.
Es una agresión a la vida afectiva que genera múltiples conflictos, frustraciones o
traumas de orden emocional en forma temporal o permanente.
Es un tipo de maltrato frecuente y difícil de detectar.
4
Violencia Intrafamiliar; de los cuales correspondieron 9.847 a Maltrato al Menor;
36.901 a Maltrato de Pareja y 13.022 a Lesiones ocasionadas por Maltrato entre
familiares. El Ministerio de la Protección Social considera la VIF un problema de salud
pública, dado que afecta a un grupo amplio de la comunidad en forma cotidiana.
Además, las muertes e incapacidades por actos violentos generan grandes costos, si se
tiene en cuenta que la mayoría de los muertos e incapacitados se encuentran en plena
edad productiva (15-44 años).
5
Vigilancia en Salud Pública de la VIF: A partir del 2002 el Sistema de Vigilancia en
Salud Pública de Antioquia incorporó la VIF dentro de los eventos a monitorear. Este
instrumento permite vigilar el comportamiento del fenómeno a fin de determinar sus
características y así orientar acertadamente las acciones de intervención. La vigilancia
es una herramienta de gran importancia teniendo en cuenta que la VIF presenta
particularidades de acuerdo con el contexto en el cual se registre. Según este sistema
de vigilancia desde el primero de enero hasta el 30 septiembre se han reportado 1155
casos de VIF en 74 municipios de Antioquia.
Normas Nacionales
6
De acuerdo con los datos de Medicina Legal, el 16% de los casos de VIF reportados
corresponde a maltrato infantil; el 63%, a violencia conyugal y el 21% restante a
lesiones ocasionadas entre otros familiares. Por esta razón dedicaremos las siguientes
páginas de la cartilla a tratar el tema de las personas más vulneradas: los niños y las
mujeres. Vale la pena que tengamos en cuenta las cuestiones culturales que generan
situaciones de VIF, para establecer acuerdos, compromisos y proyectos que le pongan
freno al maltrato en la familia.
Fuera de los golpes, Wilson comenzó a tener peleas con su mamá, porque ella nunca lo
defendía de los castigos. Además, le empezó a ir mal en la escuela. También decidió
hacer cosas que lo hicieran enfrentarse a su padrastro, como salir a fiestas por las
noches, llevar amigos a la casa, gritarle a su mamá, descuidar los oficios... Y ahí sí,
con las reprimendas que se ganaba dejó de sentir el dolor físico. Sólo sentía mucha
rabia. No entendía cómo alguien que apenas lo conocía podía ordenarle, pegarle
cachetadas, darle puños o dejarlo encerrado en la pieza durante un día entero. Y una
7
mañana cualquiera recogió sus cosas y se fue. Dejó la escuela, cuando apenas iba en
sexto, y se fue al campo, cerca de donde vivió cuando era muy niño.
En los últimos meses las noticias han presentado casos de niños y niñas desaparecidos
que fueron violados, torturados y asesinados con crueldad. Sin embargo, la violencia
hacia los menores también se da de modos menos explícitos pero igual de traumáticos
para el niño, la familia y la comunidad. Se les maltrata el cuerpo con golpes y
quemaduras. Se les maltrata el alma con gritos, sin estímulos, y se les obliga a crecer
demasiado rápido cuando son abusados sexualmente o explotados para llevar algo más
que el sustento a sus hogares.
Estas formas de maltrato infantil, según sus características, pueden ser evidentes o
sutiles, dependiendo de las marcas que dejen en el niño o niña maltratado. Y si esas
marcas se han borrado del cuerpo, no hay entonces, la mayoría de las veces, manera
de comprobar el maltrato ni modo de asegurar que el menor no vuelva a ser ultrajado.
También hay otro tipo de violencia en que el niño ni siquiera interviene directamente.
Sucede cuando es testigo del maltrato entre otros miembros de su familia, en especial,
entre su papá y su mamá. Y es que el niño y la niña aprenden estímulos agresivos con
conductas violentas y a responder con violencia o frustraciones.
8
entre la víctima durante la niñez (tanto los niños que son abusados como los que son
testigo del abuso crónico de otros familiares) y el victimario durante la adultez. A este
respecto, surgen preguntas como ¿en realidad los derechos de los niños sí son
respetados? ¿A quién le corresponde cuidar a la infancia? ¿Por qué en una sociedad
que se llama a sí misma civilizada los que pagan los errores de los adultos son los
niños?
Un gran problema para afrontar el maltrato infantil tiene que ver con que el niño y la
niña son invisibles ante la sociedad y por esta razón ni es protegido para que no se le
maltrate ni puede denunciar cuando es maltratado. La legislación existente en
Colombia sobre protección hacia los niños no es ni integral ni efectiva, lo cual es una
representación clara de violencia social. Existe el artículo 19 de la Convención de los
Derechos del Niño, que ordena a los gobiernos tomar medidas para proteger al niño de
toda forma de violencia. Sin embargo, la aplicación práctica de esta norma es mínima.
La evidencia es que en el Código del Menor apenas se sanciona el maltrato infantil con
el pago de multas. Sin embargo, ese delito no existe como tal, porque en el ámbito
social se considera o se supone que la familia es intocable y tan privada como para
golpear o abusar de los hijos a puerta cerrada. En la actualidad está en trámite la
reforma al Código del Menor, pero surge la pregunta sobre su efectividad: ¿Será una
norma más en el papel? Y más allá de los esfuerzos oficiales, lo que hagan las
organizaciones no gubernamentales y la academia para proteger al menor resulta un
acto pedagógico que puede ser muy válido, en la medida en que reflexiona y reeduca
sobre las creencias de una sociedad, pero también muy pobre cuando un niño
maltratado no tiene la oportunidad de acogerse a los programas diseñados para
cuidarlo.
Las cifras:
En todo el país, de los 59.770 casos reportados en 2004 a Medicina Legal, el 9.847
corresponden a maltrato infantil. Y en Antioquia, se conocieron 950 casos de maltrato
físico hacia niños y niñas. La historia de Wilson, tan común en todos los rincones del
departamento, no se incluye entre los casos denunciados. Pero, si son tan evidentes,
9
¿por qué no hay denuncia? Porque muchas veces son los vecinos los que pueden ir con
las autoridades a referir estas situaciones. Y cuando esto sucede, los resultados no son
tan positivos para las víctimas: si a una mamá la llevan a la inspección de Policía y por
algún motivo regresa a la casa como inocente, el niño corre el riesgo de ser golpeado
nuevamente por haber contado las situaciones “íntimas” de su familia. O si a un papá
lo meten unos días a la cárcel por lesiones personales, no hay entonces quién lleve a la
casa el sustento diario. Así el niño queda maniatado y la única esperanza que tiene es
crecer para irse de la casa, aun dejando a sus otros familiares con el victimario.
La Red Antioqueña de Niñez, conformada por entes oficiales y privados, considera que
existen ocho grandes dificultades para enfrentar el maltrato infantil, que tienen que ver
con el tipo de violencia social: La inexistencia de una política pública coherente,
integral, permanente y participativa, que actualmente presenta descoordinación de los
sectores. A deficiente participación e invisibilidad de la niñez en su proceso de
desarrollo. El débil acompañamiento a la familia. La carencia de una cultura de la niñez
en la perspectiva de derechos y equidad, con nociva, ilegal y abusiva incorporación de
los niños y las niñas al mercado laboral, explotación sexual, delincuencia organizada y
callejera, narcotráfico, farmacodependencia y grupos armados. Asignación
presupuestal insuficiente e inequidad en la priorización de los recursos para proyectos
sociales. La deficiente calidad del sistema educativo. La inadecuada atención en salud.
Los municipios no disponen de una estructura que integre los recursos para la atención
adecuada de los niños.
Aparte de estos grandes obstáculos hay otros que tienen que ver con la formación de
la familia y que no permiten que el niño desarrolle aspectos tan importantes como la
autoestima, la solidaridad, la creatividad y el gozo por lo que se es. No se puede dejar
de lado que el maltrato infantil se relaciona mucho con las prácticas culturales de la
sociedad y de modo más específico, con sus prácticas de crianza, aquellas utilizadas
por un grupo humano para enseñarle a los infantes a desenvolverse como miembros
activos de una sociedad.
10
Hogar, no tan dulce hogar
11
siento que puedo vivir así porque él quiere a los niños y me gusta que ellos crezcan
viendo la figura paterna, pero también me enredo, porque veo que les está dando mal
ejemplo. No sé qué me falta para tomar esa decisión”.
Cultura de violencia
12
De la misma manera, encontramos otros mitos culturales que favorecen la violencia
contra la mujer como la concepción de amor-pasión. Ésta es reforzada por las
telenovelas y algunos géneros musicales, que legitiman desde los celos hasta los
crímenes pasionales, entendiéndolos como hazañas novelescas y difícilmente como la
negación de la individualidad del otro. También se asocia el amor con el sufrimiento y
se habilita con dichos como “porque te quiero te aporrio” o “quien no te cela no te
ama” o como decía la telenovela Leonela: “No te olvides que quien te hace sufrir es
quien te ama”.
Otro aspecto, que tal vez es el que más favorece la proliferación de la violencia
intrafamiliar, es el manejo que se le da de competencia exclusiva del mundo privado e
íntimo como “cosas de marido y mujer”. Esto, acompañado del miedo al escándalo,
influye de manera importante para que se calle el maltrato. De igual forma incide la
consideración de la violencia como un hecho aislado atribuido a desmanes esporádicos
como la furia o el efecto del alcohol.
Ante esta circunstancia la Secretaría de Equidad de Género para las Mujeres del
departamento cuenta con proyectos como “Escuela itinerante de Liderazgo Femenino
por la Paz, democracia y el Desarrollo Local y Subregional” que promueve los derechos
de las mujeres. También se han hecho foros de sensibilización frente a la violencia
intrafamiliar con servidores públicos, y se desarrolla la campaña: “Una vida sin
violencia, un derecho nuestro” que educa y orienta a las mujeres frente a la violencia
sexual y sus procedimientos de denuncia. Aunque aún no se conocen los resultados de
estas iniciativas de solución queda la duda sobre su incidencia en el problema,
máxime cuando las circunstancias nos demuestran que urge un cambio cultural que
penetre en cada hogar y en los racionamientos de cada individuo.
13
otras hipótesis. Como lo plantea la investigación “Cambio familiar y maltrato conyugal
a la mujer”, publicada en 2004, del académico español Gerardo Meil Landwerlin. Él
encontró que la incorporación de la mujer al mercado del trabajo y la mejora de sus
niveles educativos no han significado un menor riesgo de maltrato conyugal. Es decir,
que es igualmente maltratada una mujer que labora que una ama de casa. Frente a
eso, se ha explicado que puede deberse a que la mujer no ha asumido su liberación en
todos los aspectos, y al contrario, en lugar de liberarse de su carga en el hogar asumió
también la del trabajo y otras, sin que esto genere una mejor calidad de vida. Es decir,
que tal vez en muchas sociedades la liberación femenina llegó sin estar preparadas
para ella. Por otro lado, la Noviolencia, por ejemplo, atribuye la VIF a que hemos sido
educados en violencia por la familia, los medios de comunicación, el entorno, etc.
Entonces utilizamos la violencia porque no sabemos qué más hacer, para sacar
nuestras frustraciones, porque no sabemos responder de otra forma. Seguramente,
usted tendrá otra teoría para aportar ¿A qué factores atribuye usted la VIF? ¿Cómo
podría solucionarse? Antioquia lo necesita. Tómese la Palabra.
Bibliografía
14
Dirección Seccional de Salud en Antioquia, Dirección de Salud Pública. Protocolo de
vigilancia en salud pública de la violencia intrafamiliar. Medellín, 2005.
LONDOÑO, Argelia, La violencia contra la mujer. En: Rasgando velos, ensayos sobre la
violencia en Medellín. Medellín: Editorial Universidad de Antioquia, p135.
Fuentes Primarias
Álvaro Posada Díaz, pediatra puericultor. Grupo de Puericultura de la Facultad de
Medicina, de la Universidad de Antioquia.
Clara Olga Espinosa Correa, Dedsy Yhajaira Berbesí Fernández, Rodrigo Lopera
funcionarios de la Seccional de Salud de Antioquia programa de Salud Mental.
15
Dioselina Correa, Astrid Torres, funcionarias Secretaría de Equidad de Género para las
Mujeres.
Gloria Cecilia Zapata González, jefe del Grupo de Apoyo a la Justicia, Comisarías de
Familia.
Luis Julián Salas, director ejecutivo, y Samuel Tobón, investigador. Fundación para el
Bienestar Humano.
María Adelaida García, psicóloga Fundación: “Centro de Apoyo para la felicidad (CAFÉ)
16