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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA


EDUCACIÓN UNIVERSITARIA,
CIENCIA Y TECNOLOGÍA
INSTITUTO UNIVERSITARIO POLITÉCNICO
“SANTIAGO MARIÑO”
EXTENSIÓN MATURÍN

COLUMNAS

Profesor: Estudiante:
Rodulfo Joaquín González C.I: 26.812.354
Sergio Estanga C.I: 29.516.675

Maturín, Agosto de 2018


Columnas
La columna es un elemento estructural muy utilizado en la
construcción, ya que sirve para soportar el peso de toda la estructura. Esta es
de forma vertical y es muy alargada. Además de servir para fines estructurales,
también forma parte de la ornamentación del lugar, ya que es utilizada como
fines decorativos, la cual se ornamenta y se diseña de una forma muy estética
y hermosa. Generalmente posee sección circular, pero en ocasiones se puede
apreciar columnas cuadrangulares que están adosadas a un muro, pero estas
pasan a llamarse pilares o pilastras. Las columnas clásicas están compuestas
por un capitel, un fuste y por una basa. Las columnas también se pueden
clasificar de acuerdo a las órdenes arquitectónicas clásicas, a otros
componentes de edificios, y a su fuste. Una columna es un elemento largo de
forma vertical sujeto a una fuerza de compresión axial, se utilizan como soporte
para estructuras como edificios, puentes, etc. Siempre que se diseña una
columna, es necesario que se satisfagan requisitos específicos de resistencia,
deflexión y estabilidad. En algunas columnas, si son muy largas o esbeltas la
carga puede ser suficientemente grande como para provocar que se
deflexionen lateralmente (llamada pandeo). Con suma frecuencia el pandeo de
una columna puede conducir a una repentina y dramática falla de una
estructura o mecanismo y, por tanto, debe presentarse especial atención al
diseño de columnas, de modo que sean capaces de soportar cargas sin
pandearse.

Una columna como elemento axial sometido a compresión, lo bastante


delgado respecto su longitud, para que abajo la acción de una carga
gradualmente creciente se rompa por flexión lateral o pandeo ante una carga
mucho menos que la necesaria para romperlo por aplastamiento. Las columnas
suelen dividirse en dos grupos: “Largas e Intermedias”. A veces, los elementos
cortos a compresión se consideran como un tercer grupo de columnas. Las
diferencias entre los tres grupos vienen determinadas por su comportamiento.
Las columnas largas re rompen por pandeo o flexión lateral; las intermedias,
por combinación de esfuerzas, aplastamiento y pandeo, y los postes cortos, por
aplastamiento.
Una columna ideal es un elemento homogéneo, de sección recta constante,
inicialmente perpendicular al eje, y sometido a compresión. Sin embargo, las
columnas suelen tener siempre pequeñas imperfecciones de material y de
fabricación, así como una inevitable excentricidad accidental en la aplicación de
la carga. La curvatura inicial de la columna, junto con la posición de la carga,
dan lugar a una excentricidad indeterminada, con respecto al centro de
gravedad, en una sección cualquiera. El estado de carga en esta sección es
similar al de un poste corto cargado excéntricamente, y el esfuerzo resultante
está producido por la superposición del esfuerzo directo de compresión y el
esfuerzo de flexión (o mejor dicho, por flexión).

Si la excentricidad es pequeña u el elemento es corto, la flexión lateral


es despreciable, y el esfuerzo de flexión es insignificante comparado con el
esfuerzo de compresión directo. Sin embargo, en un elemento largo, que es
mucho más flexible ya que las flexiones son proporcionales al cubo de la
longitud, con un valor relativamente pequeño de la carga P puede producirse
un esfuerzo de flexión grande, acompañado de un esfuerzo directo de
compresión despreciable. Así, pues, en las dos situaciones extremas, una
columna corta soporta fundamentalmente el esfuerzo directo de compresión, y
una columna larga está sometida principalmente al esfuerzo de flexión. Cuando
aumenta la longitud de una columna disminuye la importancia y efectos del
esfuerzo directo de compresión y aumenta correlativamente las del esfuerzo de
flexión. Por desgracia, en la zona intermedia no es posible determinar
exactamente la forma en que varían estos dos tipos de esfuerzos, o la
proporción con la que cada una contribuye al esfuerzo total. Es esta
indeterminación la que da lugar a la gran variedad de fórmulas para las
columnas intermedias.

No se ha dado, hasta aquí, criterio alguno de diferenciación entre


columnas largas e intermedias, excepto en su forma de trabajar, es decir, la
columna larga está sometida esencialmente a esfuerzos de flexión y la
intermedia lo está a esfuerzos de flexión y compresión directa. La distribución
entre ambos tipos de acuerdo con su longitud sólo puede comprenderse
después de haber estudiado las columnas largas.
Cargas críticas

Colocando verticalmente una viga muy esbelta, articulándose en sus


extremos mediante rótulas que permitan la flexión en todas sus direcciones.
Aplíquese una fuerza horizontal H en sus puntos medios, de manera que
produzca flexión según la dirección de máxima flexibilidad. Como los esfuerzos
de flexión son proporcionales a la deflexión, no experimentarán variación
alguna si se añade una fuerza axial P en cada extremo, y haciendo que H
disminuya simultáneamente con el aumento de P de manera que la deflexión
en el centro no varíe. Es estas condiciones, el momento flexionarte en el centro
es:
M = H/2*(L/2) + P y, en el límite, cuando H ha disminuido hasta anularse,
M = (Pcr)*

Entonces, Pcr es la carga crítica necesaria para mantener la columna


deformada sin empuje lateral alguno. Un pequeño incremento de P sobre este
valor crítico hará que aumente la deflexión, lo que incrementará M, con lo cual
volverá aumentar y así sucesivamente hasta que la columna se rompa por
pandeo. Por el contrario, si P disminuye ligeramente por debajo de su valor
crítico, disminuye la deflexión, lo que a su vez hace disminuir M, vuelve a
disminuir, etc., y la columna termina por enderezarse por completo. Así, pues,
la carga crítica puede interpretarse como la carga axial máxima a la que puede
someterse una columna permaneciendo recta, aunque en equilibrio inestable,
de manera que un pequeño empuje lateral haga que se deforme y quede
pandeada.

Fórmula de Euler

En el año 1757, el gran matemático suizo Leonardo Euler realizó un


análisis teórico de la carga crítica para columnas esbeltas basado en la
ecuación diferencial de la elástica:

M = EI(d2y/dx2)

Ahora se sabe que este análisis es válido hasta que los esfuerzos
alcanzan el límite de proporcionalidad. En tiempo de Euler no se habían
establecido los conceptos de esfuerzo, ni de límite de proporcionalidad, por lo
que él no tuvo en cuenta la existencia de un límite superior de la carga crítica.

Cuando una columna está sometida a una carga P. Se supone que la


columna tiene los extremos articulados (mediante rótulas o pasadores) de
manera que no pueden tener desplazamientos laterales. La deflexión máxima
es lo suficientemente pequeña para que no exista diferencia apreciable entre la
longitud inicial de la columna y su proyección sobre el eje vertical. En estas
condiciones, la pendiente dy/dx es pequeña y se puede aplicar la ecuación
diferencial aproximada de la elástica de una viga:

EI(d2y/dx2) = M = P(-y) = -Py

El momento M es positivo al pandear la columna en el sentido contrario


al del reloj, por lo que al ser la y negativa, ha de ir precedida del signo menos.
Si la columna se pandara en sentido contrario, es decir, en la dirección de y
positiva, el momento sería negativo, de acuerdo con el criterio de signos
adoptado.

La ecuación anterior no se puede integrar directamente, como se hacía


anteriormente ya que allí M solamente era función de x. Sin embargo,
presentamos dos métodos para resolverla. Conociendo algo de dinámica nos
damos cuenta que la ecuación anterior es semejante a la ecuación de un
cuerpo que vibra simplemente:

Limitaciones de la fórmula de Euler

Una columna tiene a pandearse siempre en la dirección en la cual es


más flexible. Como la resistencia a la flexión varia con el momento de inercia,
el valor de I en la fórmula de Euler es siempre el menor momento de inercia de
la sección recta. La tendencia al pandeo tiene lugar, pues, con respecto al eje
principal de momento de inercia mínimo de la sección recta.

La fórmula de Euler también demuestra que la carga crítica que puede


producir el pandeo no depende de la resistencia del material, sino de sus
dimensiones y del módulo de elástico. Por este motivo, dos barras de idénticas
dimensiones, una de acero de alta resistencia y otra de acero suave, se
pandearán bajo la misma carga crítica ya que aunque sus resistencias son muy
diferentes tienen prácticamente el mismo modulo elástico. Así pues, para
aumenta la resistencia al pandeo, interesa aumentar lo más posible el
momento de inercia de la sección. Para un área dada, el material debe
distribuirse tan lejos como sea posible del centro de gravedad y de tal manera
que los momentos de inercia con respecto a los ejes principales sean iguales, o
lo más parecidos posible ( como en una columna hueca).

Para que la fórmula de Euler sea aplicable, el esfuerzo que se


produzca en el pandeo no debe exceder al límite de proporcionalidad. Para
determinar este esfuerzo, se sustituye en la fórmula el momento de inercia I por
Ar2, donde A es el área de la sección recta y r es el radio de giro mínimo.

Si se utilizan las formulas anteriores para diseñar una columna, es


decir, para determinar el área de su sección transversal para una carga y una
longitud efectiva dadas, entonces, por lo general debe seguirse un
procedimiento de tanteos, si la columna tiene una configuración compuesta, tal
como una sección de patín ancho, Ello es necesario porque el esfuerzo
permisible depende de la razón de esbeltez tal como lo indican las formulas. En
cada caso, siempre que se repita un procedimiento de tanteo, la selección de
un área se determina mediante el área requerida previamente calculada. En la
práctica este método de diseño en general se acorta mediante el uso de
programas de computadora o tablas y graficas publicadas. Como se puede
observar el diseño de una columna no es algo que debe tomarse a la ligera ya
que pueden causar problemas en la estructura o mecanismo en los cuales
empleamos columnas. Cuando se utilice cualquiera de las formulas
mencionadas anteriormente para analizar una columna, es decir, para hallar su
carga permisible, primero es necesario calcular la razón de esbeltez con el fin
de determinar cuál formula es válida.

Asumiendo así que el diseño de las columnas consiste básicamente en


seleccionar una sección transversal adecuada para la misma, con armadura
para soportar las combinaciones requeridas de cargas axiales mayoradas Pu y
momentos (de primer orden) mayorados Mu, incluyendo la consideración de los
efectos de la esbeltez de la columna (momentos de segundo orden).
La esbeltez de una columna se expresa en términos de su relación de
esbeltez kℓu/r, donde k es un factor de longitud efectiva (que depende de las
condiciones de vínculo de los extremos de la columna), ℓu es la longitud de la
columna entre apoyos y r es el radio de giro de la sección transversal de la
columna. En general, una columna es esbelta si las dimensiones de su sección
transversal son pequeñas en relación con su longitud.

Formula de la secante con cargas excéntricas

Relación de excentricidad

Relación de esbeltez

Estas expresiones se usan cuando la relación de esbeltez tiende a


valores mínimos, la secante tiende a 1.

Doblado y montaje de armaduras

El doblado y cortado de las armaduras será realizado de acuerdo a las


medidas de los planos estructurales

La armadura longitudinal debe ser cortada 40 veces el diámetro más


que la longitud de la columna y la losa, la misma que servirá para empalmar la
armadura de la columna del piso superior.

Las columnas que forman parte de las zapatas serán armadas


verticalmente sobre la base de la misma. El armado de las columnas para los
pisos superiores será realizado en superficie horizontal para luego ser
empalmado con alambre de amarre a los fierros que sobresalen de las
columnas subyacentes. Serán amarradas galletas a los estribos cada dos
posiciones, las cuales servirán para mantener el recubrimiento necesario
uniforme.

Encofrado:

El encofrado para las columnas será construido con madera de 1 ” con


las dimensiones de las mismas y en superficie horizontal.

Se clavarán solamente, tres caras del encofrado con crucetas


(listones de 2” x 2”) ubicadas cada 50 cm dejando la cuarta para cerrar el
encofrado en su posición vertical.

Las crucetas serán colocadas para evitar que se produzcan


deformaciones en la madera a consecuencia del colocado y vibrado del
hormigón fresco.

Se colocarán chanfles en las cuatro esquinas del encofrado, los cuales


serán fabricados cortando una madera de 1 ” a 45 º. La función de los chanfles
será la de evitar que se produzcan desmochaduras en las esquinas del
elemento al momento del desencofrado. Una vez que el encofrado esté
terminado se debe aplicar aceite sucio en toda la superficie interior para
impermeabilizarlo y para evitar la adherencia del hormigón, lo que además
facilita el desencofrado. Cuando la columna este completamente armada se
colocará el encofrado de tres lados verticalmente ajustando contra el dado para
finalmente cerrar clavando el cuarto lado.
Apuntalamiento del encofrado para columnas

Cerrado el encofrado y ajustadas las crucetas, se procederá a verificar


la verticalidad de la columna, por lo menos en dos caras adyacentes con la
ayuda de plomadas y se colocarán bolillos de listón (pie de amigo) asegurando
que estén firmes en el terreno evitando así posibles inclinaciones o
desplazamientos de la columna.

Colocado del hormigón:

El hormigón será vaciado de acuerdo con las especificaciones de


preparación y puesta en obra del hormigón.

Lo primero que se debe hacer antes de vaciar el hormigón es colocar


lechada de cemento sobre la superficie del dado para que exista mayor
adherencia. Cuando la altura de la columna sea mayor a 2.5 m se debe prever
la ubicación de una ventana por donde se vaciará y vibrará el hormigón.

Si la altura de la columna es menor o igual a 2.5 m se vaciará y vibrará


el hormigón desde la parte superior.

Desencofrado:

El desencofrado de las columnas puede ser realizado a los 7 días, ya


que las cargas producidas por la estructura no inciden directamente sobre las
columnas si no sobre los puntales de las vigas.

Curado:

Una vez que las columnas hayan sido desencofradas, estas deberán
ser forradas con polipropileno de tal manera que sean protegidas contra los
rayos solares, al mismo tiempo se verterá agua en su interior. La sudoración
que produce el mismo hormigón ayuda al curado.

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