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7 claves para organizar tu tiempo

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Por Dr. Marcelo Cubellun, Equipo de Bien Simple.


Médico Psiquiatra
M.N 69874

Resumen
El tiempo es un valor que puedes otorgar, compartir o incluso perder. Pero nunca
lo podrás "recuperar". Por ello el tiempo que pierdes o malgastas en un proyecto
es un recurso que ya nunca volverá a tu haber: ha dejado de ser un recurso para
convertirse en una pérdida.

Sigue con atención a estos tips y sin perder tiempo, ponlos en práctica.

Pasos

1
Utiliza una agenda semanal o mensual para tener una idea global de tu tiempo
disponible y de tus actividades. Advertirás que agrupamientos de actividades
serían los más efectivos para ahorrar tiempo de viajes o de traslado, trámites
pasibles de realizar simultáneamente, actividades que podrían superponerse sin
perder eficacia. Por ejemplo, tomar una mañana al mes para realizar todos los
trámites bancarios, concurrir al odontólogo, en tanto limpian tu automóvil en un
lavadero vecino, realizar tu propio chequeo médico cuando acompañas a tu pareja
o a tus hijos al suyo.

2
Planifica cada día incluyendo todas las actividades previstas para la jornada. No
marques sólo el tiempo dedicado al trabajo. Dejar gran parte de tus actividades
libradas a la improvisación, la memoria, el azar o la suerte suele ser muy divertido,
si te lo permites ocasionalmente, pero si lo conviertes en tu estilo de vida, estarás
supeditado a hechos fortuitos, y tu tiempo se esfumará.

3
Agenda tus compromisos, colocándoles no sólo la hora de comienzo sino también
la de finalización. Procura atenerte a ambas.

4
Cumple con lo que has previsto para cada jornada. Si has planificado
correctamente, contarás con el tiempo suficiente para realizarlo. Si surge un
inconveniente no considerado que te obliga a postergar algún compromiso,
reacomoda tu agenda para concretarlo, apenas te sea posible.

5
Incluye en tu plan semanal un espacio dedicado al ocio y al esparcimiento. No
consideres estas actividades como una "pérdida de tiempo". Por el contrario, verás
que reconocer y valorar el tiempo disponible enriquecerá tu vida personal, te
fortalecerás y volverás más tonificado y mejor predispuesto a la actividad laboral.

6
Actúa con velocidad y eficacia, pero no intentes correr todo el tiempo. Una cuota
de creatividad es necesaria para flexibilizar y encontrar nuevas soluciones en el
menor tiempo posible. Sin embargo vivir "acelerado" permanentemente, sólo te
expondrá al stress y a la enfermedad. No confundas velocidad con apuro. Dedica a
cada cosa el tiempo que realmente necesita.

7
Cuida los minutos para aprovechar las horas. No desestimes los minutos que te
quedan libres entre una y otra actividad. Ni tampoco "redondees" el tiempo
haciendo coincidir la hora de finalización de una acción con el comienzo de otra,
especialmente si debes desplazarte de un lugar a otro. Permitirte atrasos por mala
planificación horaria, sólo disminuirá tu rendimiento a medida que transcurra el día.
Además, te expondrás a no contar con el tiempo necesario para las últimas
actividades de tu agenda.

Importante
Recuerda que el tiempo sólo puede ser gestionado o perdido, pero nunca
recuperado. Organiza inteligentemente tus actividades para sacarle al tiempo el
mayor provecho posible.

Claves para que el día no parezca


tener menos horas de las que tiene.

Aprovecha tu tiempo. Hay veces que parece que la vida se pasa en un


momento, tenemos montones y montones de cosas que hacer y el tiempo se
nos pasa volando sin haber podido hacer todo lo que necesitábamos y para
colmo de males llegamos a la cama destrozados. Vamos a dar unas pistas de
qué poder hacer para organizar nuestra agenda diaria sin entrar en colapso.
Lo primero que vamos a hacer es tomar un papel y escribir lo que tenemos que
hacer, también se puede usar una agenda, pero primero mejor un papel ya que
la lista original seguro que terminará siendo otra. Una vez tengamos escrito las
tareas del día vamos a ir valorándolas según importancia y/o urgencia. De este
modo nos haremos una idea de las cosas primordiales y de las otras que quizá
no sean importantes ni tan necesarias como pensábamos pero sí nos quitan
tiempo.

Una vez realizada esta organización veremos cuales de las tareas de la lista
podemos delegar en otras personas, mira bien que seguro que más de una se
puede delegar.

Entonces, hasta ahora tenemos la lista ordenada en prioridades, hemos


delegado en otros algunas de ellas, con lo cual la lista habrá disminuido, y el
siguiente paso es planificar cómo vamos a realizar las tareas, el orden que les
daremos y más o menos el tiempo que nos llevarán. Por ejemplo si hay que ir a
la oficina de correos calcular el horario para poder ir y que no esté cerrada, o si
tenemos que terminar un trabajo y necesitamos imprimirlo para entregarlo,
antes de ponernos a escribir como locos, deberemos cerciorarnos de que la
impresora tiene tinta, a esto me refiero con planificar las tareas antes de
realizarlas.

Otro punto a tener en cuenta es no perder el tiempo andándonos por las ramas
a menos que hayamos decidido que un rato al día será exclusivo para eso, que
lo tengamos ya anotado porque no sólo del trabajo vive el hombre.

Pues con estas pequeñas claves podemos organizar nuestra agenda y


aprovechar el tiempo del día al máximo.

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