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UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL

FACULTAD PILOTO DE ODONTOLOGIA


TRABAJO INVESTIGATIVO

TEMA:

BISFOSFONATOS

CATEDRA:

PERIODONCIA I

DOCENTE:

DRA. YAMILIA JIJON

ESTUDIANTE:
JORGE CABRERA BURGOS

PARALELO:
6/2
CONTENIDO

BIFOSFONATOS ............................................................................................................ 3

 CONCEPTO .......................................................................................................... 3

 MECANISMO DE ACCIÓN ................................................................................ 3

 BISFOSFONATOS EN LA PRACTICA ODONTOLOGICA ............................. 5

 LAS VARIACIONES BIOMECANICAS DEL HUESO PERIDENTAL ........... 5

 INTERVENCION FARMACOLOGICA ............................................................. 7

 HORA DE LOS BISFOSFONATOS .................................................................... 7

 TOLERABILIDAD ............................................................................................... 9

Bibliografía ..................................................................................................................... 10
BIFOSFONATOS

 CONCEPTO

Los bisfosfonatos (BF) son fármacos inhibidores de la resorción ósea cuya

estructura química es relativamente simple, ya que está formada por dos moléculas de

fosfato unidas a un átomo de carbono. Son análogos sintéticos de los pirofosfatos

inorgánicos pero, a diferencia de éstos, cuyo átomo central es el oxígeno, aquellos

disponen de un átomo puente de carbono que les proporciona resistencia a la hidrólisis

enzimática digestiva. Además, los dos radicales del carbono que no están unidos a los

fosfatos van a poder ligar cadenas de estructura variable, que están directamente

relacionadas con la afinidad por el tejido óseo y la actividad antirresortiva de cada

molécula. La adición de un grupo amino a una de las cadenas ha permitido la síntesis de

BP más potentes, que pueden utilizarse por vía oral en administración semanal o mensual

(alendronato, risedronato e ibandronato) o por vía intravenosa (pamidronato, ibandronato

y zoledronato). (Arboleya, 2011)

 MECANISMO DE ACCIÓN

Los ABF, los más utilizados en clínica en el momento actual, tienen una

extraordinaria avidez por los cationes divalentes como el Ca++, lo que provoca que sean

rápidamente captados, desde el torrente circulatorio, por las superficies mineralizadas

sometidas a resorción por los osteoclastos. Estas células, que son la diana principal de su

acción farmacológica, internalizan el fármaco por endocitosis y experimentan la

inhibición de una enzima de la vía del mevalonato, la farnesil pirofosfato sintetasa,

necesaria para la formación de isoprenoides.


Estos compuestos lipídicos son necesarios para la modificación postranslacional

de una serie de proteínas, entre ellas las guanosín trifosfatasas, cuya acción sobre el tráfico

de vesículas y la formación del ribete en cepillo osteoclástico queda interrumpida. De

manera adicional a la interrupción de la vía metabólica citada, se produce el acúmulo de

algunos precursores, sobre todo de isopentenil pirofosfato, un producto con capacidad de

activar una subclase de linfocitos T, los denominados gamma-delta (γδ), que realizan

acciones inmunorreguladoras de interés en oncología. (Arboleya, 2011)

Los osteoclastos que han «ingerido» el BF situado en la superficie mineralizada

sufren una pérdida de su función resortiva, con lo que, en enfermedades como la

osteoporosis posmenopáusica, que se caracterizan por un balance de remodelado alterado

en el que predomina la resorción, se va a producir un equilibrio que alcanza valores

similares a los habituales en mujeres premenopáusicas. Aun no se conoce con suficiente

claridad cuál es el destino de los osteoclastos «atacados» por los BF. Recientemente se

ha observado que el número de estas células no disminuye, contrariamente a lo que se

suponía anteriormente, y que su tamaño aumenta. El significado de estos hallazgos no se

conoce; no obstante, estos osteoclastos gigantes tienen su capacidad funcional seriamente

afectada y son incapaces de ejercer su acción fisiológica.

Mecanismo de acción de los bisfosfonatos en un esquema


de hueso periimplantario.
Los bisfosfonatos acortan la vida de los osteoclastos. Se
depositan sobre el hueso y este no es reconocido por los
osteoclastos. Prolongan la vida de los osteocitos
 BISFOSFONATOS EN LA PRACTICA ODONTOLOGICA

Los bisfosfonatos son medicamentos utilizados con gran éxito en el tratamiento de

varias osteopatías médicas, como las osteoporosis, en donde logran reducir

deformaciones y fracturas, mejorando las propiedades biomecánicas de los huesos.

Esencialmente, son vistos como herramientas farmacológicas que pueden aplicarse en

casi cualquier situación en la que se vea comprometida la estabilidad estructural y la

función de soporte que le corresponde al esqueleto. En los últimos años estos

medicamentos han despertado el interés por las aplicaciones propias del quehacer

odontológico y su uso ya es estimulado por los resultados vistos en congresos o

publicaciones científicas. Acerca de los fundamentos de su aplicación en condiciones de

interés para el odontólogo, de cómo deben administrarse, qué resultados pueden

esperarse, cómo puede monitorearse la seguridad y eficacia en pacientes, se resumen en

un modo informativo y documentado.

 LAS VARIACIONES BIOMECANICAS DEL HUESO PERIDENTAL

La integridad y la conservación del hueso de soporte maxilar, peri-dental o

periimplantario es un factor decisivo en el éxito de los tratamientos odontológicos.

Numerosas técnicas quirúrgicas y materiales biocompatibles naturales y sintéticos son

utilizados para la resolución de los defectos óseos enfocados en los maxilares. En los

últimos años se ha recurrido a la utilización sistemática del auto-injerto óseo y auto-

hemoderivados (PRP) en sitios osteopénicos o carentes de hueso.

Si bien los auto-injertos, los hemoderivados y algunos materiales biocompatibles

brindan resultados exitosos, estos pueden utilizarse solo en defectos óseos regionales, por

medios quirúrgicos y su capacidad osteo-inductora es local y momentánea.


Hasta el momento no existen estudios controlados a largo plazo en pacientes con

metabolismo óseo lábil. La capacidad osteo-inductora de estos recursos se pierde si no

existe una estimulación biomecánica correcta e inmediata y adaptable a las variaciones

biomecánicas a largo plazo.

Cuando los defectos óseos ocupan superficies extensas o los maxilares son el

asiento predominante de patologías sistémicas óseas, las técnicas anteriormente

descriptas no pueden utilizarse en todos los pacientes.

Fue ante la creciente concepción de la importancia nosológica de estas discrasias

óseas odontológicas y/o de las sistémicas, con repercusión en el maxilar, que no podían

ser solucionables localmente, ya sea con técnicas quirúrgicas o con osteo-inductores

locales (injertos óseos o PRP), que los investigadores adaptaron las medicaciones osteo-

trópicas de uso sistémico esquelético al uso en patologías óseas maxilares.

Racionalmente, un tratamiento local puede aplicarse en un paciente con hueso “sano” al

momento de la intervención. Pero ese paciente puede luego manifestar problemas

metabólicos relacionados con cuestiones genéticas, biofísicas (cambios de cargas),

cambios hormonales (menopausia, hiper-tiroidismo, hiper-paratiroidismo) inflamatorias

(enfermedad periodontal), inmuno-metabólicas (reumatismo, diabetes), consumo de

hormonas o medicamentos (corticoides), que solas o en conjuntohacen variar la

distribución de cargas regionales y/o la calidad de resistencia ósea a la mismas. El hueso

antes “sano” es ahora osteopénico u osteoporótico y tiene muy poca relación funcional

con el hueso que el odontólogo manipuló en la intervención original. La observación

clínica, que ante el desarrollo de osteopenias regionales se producían movilidad y/o

pérdidas de dientes o implantes, complicadas ocasionalmente con dolor o infección,

desadaptación de prótesis, ortodoncias o de cualquier otro trabajo odontológico que

promueva cambios de cargas mecánicas en el hueso cercano, sugería que las posibilidades
de intervención medicamentosa son muy amplias. El hecho fisiopatológico que el hueso

maxilar se moviliza metabólicamente unas 4 o 5 veces más rápido que cualquier otro

hueso del esqueleto, y específicamente en el hueso peri-dental más rápidamente aún, le

dan a la osteología maxilar características propias del manejo odontológico.

En efecto, el defecto óseo no se comprende sin el conocimiento técnico del cambio de

cargas que introduce la práctica odontológica y es entonces el odontólogo quién debe

interesarse por el diagnóstico y tratamiento de las osteopenias regionales maxilares.

 INTERVENCION FARMACOLOGICA

La utilización de calcio-terapia, o sea la administración de suplementos de calcio y

vitamina D, como forma de asegurar el abastecimiento de nutrientes esenciales en la

composición del hueso es siempre importante, para cualquier persona que no tenga una

dieta suficiente. Pero esto no cubre las necesidades metabólicas del hueso osteopénico.

El uso de la calcitonina (una hormona segregada por la glándula tiroides que en dosis

farmacológicas intoxica a los osteoclastos), se propuso en el post quirúrgico, por su acción

antirresortiva inmediata y efecto analgésico óseo. Pero su alto costo y los efectos adversos

derivados de su naturales heteróloga hicieron que se limitara su uso. Otras opciones, como

parato-hormonas, inhibidores de los RANK-L, y las sales de estroncio pueden ser

opciones futuras, en odontología. (Arboleya, 2011)

 HORA DE LOS BISFOSFONATOS

Los bisfosfonatos son moléculas sencillas, que pueden suministrarse por vía oral en

cantidades efectivas o inyectarse por vía intravenosa. No están relacionadas con alergias

o efectos sistémicos severos, su acción se centraliza en los huesos, no tienen metabolismo


y se eliminan por simple filtración renal. Se tiene experiencia con ellas desde los años

ochenta y varias están indicadas en procesos de osteopenia o fragilidad ósea. Es decir,

pueden ser clínicamente manejadas con facilidad y a las dosis usuales.

Entre los varios bisfosfonatos conocidos, aquellos compuestos que mayor éxito han

tenido en el tratamiento de osteopenias y fragilidad han sido el pamidronato, alendronato,

risedronato e ibandronato, de los cuales se dispone de evidencias clínicas de reducción de

fracturas, deformaciones óseas, y de amplios datos de seguridad. No debe incluirse aquí

las experiencias iniciales en odontología con etidronato oral, cuya utilización en dosis

inadecuadas y/o en modelos experimentales poco extrapolables a los nuevos compuestos,

mostraron resultados escasos. Tampoco se incluyen en este uso a las intervenciones

agresivas con algunos bisfosfonatos que han derivado en la comunicación de necrosis

óseas. Es decir, que solo limitamos el beneficio a los bisfosfonatos seguros que han

demostrado mejorar la resistencia de los huesos.

Los bisfosfonatos son drogas utilizadas en el tratamiento de osteopenias y

osteoporosis esqueléticas, dado que su acción es la inhibición de la reabsorción ósea,

obteniéndose así la conservación del hueso amenazado de resorberse por estímulos

hormonales, mecánicos o ambos. Pero, los bisfosfonatos también pueden modificar

propiedades estructurales y materiales de los huesos, de modo que no solo afectan la

cantidad sino también su calidad.

Para comprender el mecanismo de acción de los bisfosfonatos debemos mencionar el

mecanismo de regulación de la masa ósea. El hueso es un órgano vivo y cambiante en

constante adaptación funcional. Como cualquier otro órgano posee una determinación

genética de su masa y forma, propia de la especie, pero que luego cada individuo debe

mantener a lo largo de la vida, en armonía con el uso o desuso cotidiano.


Es decir que el perfil anatómico de un hueso revela tanto su determinismo genético

como el uso que se ha inferido. Por ello, es que no hay dos huesos iguales, ni constantes

en su masa y calidad.

Aparte del uso fisiológico, el hueso puede ser alterado en su masa o en su calidad por

diferentes patologías como osteoporosis, o la enfermedad periodontal, por citar las dos de

mayor frecuencia o perderse por desuso secundario a atrofias musculares, post fracturas,

pacientes postrados, etc. Finalmente las variaciones hormonales, metabólicas, y

alimenticias promueven cambios adicionales.

 TOLERABILIDAD

Los bisfosfonatos son productos muy seguros en el organismo y el principal problema lo

presentan durante el proceso de absorción digestiva, al irritar las mucosas sensibles,

particularmente del esófago y del estómago. La formulación de pamidronato tiene una

cubierta gastro-protectora que minimiza los efectos adversos, y las dosis recomendadas

de 2 cápsulas juntas por día están en el límite mayor de seguridad. Si bien la evolución

de la osteopenia peridental es muy rápida, se estima que la tolerabilidad de los

tratamientos cortos sea esencialmente similar a la de los tratamientos largos, vistos que

los efectos digestivos, ocurren mayormente en las primeras semanas. Las personas con

enfermedades digestivas importantes o con enfermedades hemáticas debieran ser

excluidas de estos tratamientos. También las embarazadas y las que están amamantando.

Con estos preceptos los pacientes con osteopenia en los huesos maxilares toleran muy

bien al pamidronato disódico.


Bibliografía

Arboleya, L. (3 de mayo de 2011). ReumatologíaClínica.org. Obtenido de

http://www.reumatologiaclinica.org/es/efectos-adversos-los-

bisfosfonatos/articulo/S1699258X11000180/

 http://www.medigraphic.com/pdfs/adm/od-2011/od111c.pdf
 http://sespo.es/wp-
content/uploads/2013/Protocolo%20SESPO.%20Actuacion%20en%20pacientes%20en
%20tratamiento%20con%20Bisfosfonatos.pdf
 http://www.gador.com.ar/wp-content/uploads/2015/04/fao41.pdf

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