TALLER DE LECTURA: “LA DIRECCIÓN DE LA CURA Y LOS PRINCIPIOS DE SU

PODER”
Reunión del 10-04-2013

A manera de recapitular lo trabajado en la anterior reunión diremos que se trata de un escrito

esencial para la praxis del psicoanálisis; la cual consiste en: dirigir la cura y no al paciente. Es así
que hablamos de una praxis donde los principios reemplazan al estándar.
Para este proceso psicoanalítico, Lacan marca un constante retorno a Freud y a la regla
fundamental del psicoanálisis: que el paciente “asocie libremente”: “hábleme de lo que usted
quiera”.
En este sentido el analista como sujeto, como persona pasa a un segundo plano. El analista está allí
presente pero no con su propio SER; cuando alguien habla aparece su ser, pero en el análisis no se
trata de un ser que domina algo, habla dominado por un deseo: “El deseo del analista”.
Lacan hace una pregunta, no sólo dirigida a la EGO PSYCHOLOGY; sino en especial a los
psicoanalistas de su propia Escuela: ¿Quién analiza hoy?
1. La primera respuesta surge hablando acerca de la contratransferencia; la cual esta
conceptualizada por Lacan como una impropiedad conceptual. El ejercicio de un poder sobre el
sujeto, que conlleva una manera de reeducación emocional del paciente.
2. Se habla de la cura; alejándose el analista de lo que se podría llamar una religión, donde se dirige
la conciencia de un sujeto.
3. El analista paga: a) con palabras, a nivel de interpretación, no habla de cualquier cosa, sino que
realiza un esfuerzo de decir lo justo, lo adecuado a la asociación libre; b) con el cuerpo, pues es un
soporte de la transferencia, c) renuncia a su ser, pone en juego la falta-en-ser.
Hablando de la técnica Lacan plantea que uno es “único amo en su barco”, él decía: “yo decido
sobre mi oráculo”. En esta afirmación, lo que Lacan nos da a conocer, es sobre lo que un analista
puede hacer dentro de su práctica o ejercicio de la misma: “uno es libre en las intervenciones”.
Esta afirmación, muestra un proceso interventivo bastante libre y sin restricciones en apariencia;
más no es así.
Lacan, apoyado en el texto “De la Guerra” de K. von Clausewitz; trae a la praxis tres conceptos
que serán asumidos como los elementos que dirigen el accionar del analista. Von Clausewitz,
plantea la Táctica como sucesión de jugadas para llegar al plan propuesto (interpretación), la
Estrategia como una elección de un plan a seguir (Transferencia, como lugar del Otro, campo de
posibilidades; vinculado al fantasma). Toda interpretación tiene sentido por la transferencia. Y la
Política, que sostiene la estrategia y la táctica (Falta-en-ser, deseo del analista)
4. Se entenderá la TÁCTICA como la TÉCNICA: el hacer, la interpretación, las palabras. Cuando
se invita al paciente a asociar libremente lo que hace el analista es plegarse al Inconsciente del
sujeto, el analista se mueve por donde va el inconsciente, se mueve con los significantes del sujeto.
Se podría decir que la técnica es de amplia libertad y la táctica implica una acción.
5. La ESTRATEGIA, será quien regula, limita a la táctica; está vinculada con la transferencia.
Para comprender mejor este punto, debemos remitirnos al esquema “L”, el cual nos muestra las
relaciones que se marcan entre el paciente y el analista. Colocarnos en el eje imaginario a-a’; es el
lugar de la contratransferencia, donde se hace un pacto con el “YO fuerte” del paciente y se lo
“amasa”. Si el analista se coloca en el lugar de Otro, será una posición con la que debe maniobrar,
pues ese lugar será el que el sujeto le adjudique a partir del fantasma.
El analista debe hacer surgir al sujeto ($), el cuarto en la metáfora del juego de bridge, procurar
que todo el tiempo aparezca por medio de la asociación libre.
La estrategia no tiene nada que ver con lo especular, no debe confirmar al yo, y de esta manera es
que el analista debe abstenerse de decir desde su lugar como persona.
La táctica a nivel de interpretación no puede utilizarse con todos, no es “estandarizable”, entonces
lo que viene a regular o limitar esta praxis es la estrategia: “no con todos se hace lo mismo”. Se
trata de ver el caso por caso, la singularidad de cada paciente. El secreto se podría decir a este nivel
es el desdoblamiento del analista en donde el paciente lo situaría en dos posibles lugares la de “A” y
“a”.
7. Todo lo que haga el analista será leído por el paciente desde el lugar asignado, por el PODER de
la transferencia; es decir desde el lugar de Otro (A).
Es importante ubicar el lugar de la transferencia, y cómo es que se aloja el sujeto. Y es desde esa
posición que se puede hacer un uso o un abuso del poder de la transferencia, sostenido en el
“supuesto” SER del analista.
Para regular este PODER es que Lacan plantea la POLÍTICA, donde se trata de la falta-en-ser.
El “deseo del analista” nace de una concesión del SER. El SER tiene una tendencia natural al deseo
de rectificación, de bien estar. La Falta-en-ser, el “deseo del analista”; apunta a operar desde una
posición de semblante de objeto, desde el “lugar del muerto”; para llevar a un sujeto a un fin de
análisis. Se trata de lo que llamó Lacan un “deseo impuro”, en el Seminario XI: lo que se busca, es
la máxima diferencia posible, que el paciente no se parezca en nada a su analista. Ser un sujeto
distinto al otro.
Cuando hablamos del deseo del analista, hablamos de una posición, de que el analista debe dejar su
narcisismo, debe dejar su SER. Cuestión a la que apuestan los “psicoanalistas de hoy”: “el analista
cura menos por lo que dice y hace por lo que es”.
La gráfica que acompaña a esta reseña; muestra que se trata de tres elementos que dependen
concéntricamente; donde la política marca tanto a la estrategia como la táctica; y donde si bien
pueden manejarse con cierta libertad, responden inevitablemente a la política (del síntoma); puesta
que esta marca los principios fundamentales del accionar y el cómo hacerlo. Y donde se resalta la
no estandarización del accionar, sino que responde al caso por caso.

Política -------------------- Falta-en-ser

Estrategia ---------------- Transferencia

Táctica -------------------- Interpretación

Reseña realizada por:

Gaely Miranda
Lino Olarte
Tatiana Flores