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Reporte 2.

Cuerpos que importan (9-11 hrs) 8 de octubre de 2016


Rivera Díaz Josue Emmanuel

Fue un lleno total, llegue a las 9 en punto y no tuve más remedio que escuchar la
conferencia parado a un lado de la sala de proyección. Fue una grandiosa idea
comenzar con dos proyecciones sobre el acoso, por que estos fueron piedra angular
del debate y los comentarios de algunos compañeros que, por lo que pude notar,
también eran de primer trimestre. Repito, me pareció un muy buen movimiento la
proyección de esos dos vídeos sobre el acoso sexual escolar, sin embargo, creo
que se limitaron a hablar del acoso sexual que sufren las mujeres, y exclusivamente
las estudiantes, ni siquiera las conferencistas mencionaron algo más allá de esto.
Eso sembró muchas dudas y no sólo en mi; ¿Por qué nadie habla del acoso que
sufren los hombres?, ¡Los profesores también sufren acoso!, ¿"Cuerpos que
importan" toca solamente el acoso sexual o también el escolar (Bullying)? etc. En
mi opinión, faltó una introducción al tema, a lo que se pretendía con esta
conferencia, todo fue muy ambiguo, poco claro.

Después de los dos vídeos presentados, nos sugirieron de una forma grosera y casi
obligatoria, opinar. El primer colega universitario en tomar el micrófono, se intimido
por la inmensidad de los ojos y oídos del auditorio, y con una voz entre cortada
apenas y pudo formular una pregunta, pensé que a esta le sucedería una respuesta
argumentada de alguna especialista, pero lo que siguió sólo fue un regaño que
repercutió en la sala, pues después de esto, pocos querían participar. Así siguieron
multitud de preguntas y experiencias por parte del alumnado durante poco menos
de una hora, después de esto, la mesa especializada se enfocó en responder
(según ellas) todas las dudas. A este punto, personalmente, estaba confundido.
Todas las preguntas ya las había olvidado y por si fuera poco, la mesa daba
respuestas sin mencionar el cuestionamiento preciso. Creo que hubiera sido mejor
que a cada duda o punto de vista le sucediera una explicación de quien tuviera o
creyera tener la respuesta, fuera o no conferencista.

Otro punto que quiero señalar es que en la mesa no había una presencia masculina,
teníamos un enfoque 100% femenino, no pretendo ser misógino ni tampoco quiero
decir que estás mujeres practicaran la misandría, se que ellas están muy bien
preparadas, pero faltó la otra visión, otra perspectiva.

Agradezco a mi universidad por tener este tipo iniciativas, aportan mucho a la sana
convivencia en la comunidad universitaria.

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