Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Pasos para Transformar Nuestra
Pasos para Transformar Nuestra
Aprendimos cómo todo lo que hay en nuestra realidad es una proyección de lo que hay en
nuestro interior, y también cómo podemos identificar en las cosas que nos molestan de los
demás, características que en realidad son parte de nosotros. Recordemos que nuestra sombra
está formada por todo lo que no reconocemos de nuestra ser, es importante tener muy claro que
negarlo no significa que no exista.
En el artículo de hoy aprenderemos algunos pasos que nos ayudarán a transformar lo que estaba
en nuestro inconsciente, y que gracias a la ley del espejo hemos podido hacer consciente.
Cuando estamos presentes tenemos la capacidad de estar alerta, así, podemos corregir
nuestros errores pasados y sembrar semillas que nos proporcionarán buenos frutos.
Reconocer.
Cuando te veas en una situación similar, en vez de negar o culpar al otro por la molestia que
experimentas, respira profundo, analízate y obsérvate a fondo. Solo así podrás descubrir en qué
situaciones eso que tanto te molesta de la otra persona, ha sido parte de tu comportamiento.
Hay cuatro preguntas que suelo hacerme y que me ayudan a reconocer en mí lo que juzgo en los
demás:
Es muy importante ser enfáticos en el MÁS de la primera pregunta, porque lo que nos saca de
nuestra paz interior y nos perturba, es lo que realmente tenemos que analizar y preguntarnos:
¿En qué situaciones ese comportamiento que tanto me molesta ha sido parte de mí
manera de actuar?
¿Hacia quién o quiénes suelo tener dicho comportamiento?
Imagina que conoces a alguien que tiene actitudes de maltrato psicológico o hasta físico hacia ti
o hacia otras personas y esto obviamente te saca de tus casillas. Si después de hacer el ejercicio
anterior no logras encontrar respuestas, significa que ha llegado el momento de ser muy sincero
y autocrítico. Analiza muy bien, quizás no maltratas a quienes te rodean, pero si a ti mismo
diciéndote que no eres capaz, que eres feo o gordo, que no sabes hacer esto o lo otro; tal vez te
maltrates alimentándote mal…
Aceptar.
“Lo que niegas te somete y lo que aceptas te transforma”. Aceptar que eso que tanto nos
disgusta es parte de nosotros es la clave para transformarlo. Como siempre digo, es imposible
corregir algo que no sabemos que existe. No te avergüences, los errores y los defectos son la
mejor herramienta que tenemos para aprender. Equivocarnos produce resultados
negativos y esto nos ayuda a no querer repetirlos, por lo tanto, es el motor que nos
impulsa al cambio.
Acéptate como eres, recuerda que además de todas tus virtudes eres humano y tienes defectos
al igual que los otros. Las personas que te quieran te querrán tal y como eres y si logras ser
mejor cada día, te querrán aún más.
Quitarles poder.
Aquí entra en juego la sumatoria de los pasos anteriores, habiendo reconocido y aceptado
nuestro error, tendremos que permanecer muy atentos para que en el momento en el que vaya a
salir a flote, podamos gestionarlo y corregirlo.
Puede que al principio nos cueste y nos demos cuenta después de haber errado, pero poco a
poco iremos agudizando nuestra atención hasta que llegue el momento en el que antes de
cometerlo podamos controlarlo. Nuestra mente es como un músculo, necesita entrenamiento, si
inconscientemente hemos estado entrenando para actuar de una manera negativa, ahora
tendremos que entrenarnos para actuar de manera positiva.
En el momento que comiences a cambiar, cambiará tu vida por ley de causa y efecto.
Compromiso.
Hacer consciente lo inconsciente puede ser muy difícil, y transformarlo puede llegar a ser muy
retador, pero recordemos que la mente es un músculo, la información que recibimos es el
entrenador y la vida nuestro gimnasio. Solo tú y nadie más que tú podrás cambiar las cosas, al
principio puede costar trabajo, pero cuando comiences a ver los resultados te pondrás metas más
altas y tu transformación te dará la posibilidad de vivir una vida llena de paz, amor, abundancia
y dicha.
“Todo lo que te molesta de otros seres, es solo una proyección de lo que no has resuelto en ti
mismo”