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J. Gimeno Sacristán* *
E
l discurso acerca de la autonomía de los ejecutarlas? Sin embargo, consideramos que hoy
profesores mezcla indiscriminadamente no es una reivindicación profesional profunda o
un elenco muy variado de significados, ampliamente sentida por los docentes, sino, más
reivindicaciones de distinto alcance y bien, fruto de la sensibilidad sostenida por un
proposiciones desigualmente asumibles desde un discurso moral sobre las condiciones de la
punto de vista ético, social y profesional práctica profesional. Es, pues, un lenguaje
(Contreras, 1997; Martínez, 1998). La autonomía atractivo por todas esas significaciones
se refiere a la capacidad de iniciativa, a la prometedoras y dignificadoras del ser humano
independencia de pensamiento, a la potestad de que lleva adheridas.
tomar decisiones por sí mismo. Un ser autónomo
es el que goza de autonomía, el que no depende La proclamación de la autonomía tiene reflejo en
de nadie, el que puede y sabe desenvolverse por dos frentes distintos. Por un lado, en el marco de
sí mismo, el que está capacitado para las sociedades democráticas modernas, expresa la
autogobernarse. La autonomía es un concepto necesidad de liberación de los sujetos personales
que, en su acepción más profunda, tiene raíces o sociales -individuos o grupo- respecto de
kantianas y que se ha revitalizado tras el giro cualquier condición opresiva que limite o les
subjetivista que afecta al pensamiento de nuestro impida su realización como tales sujetos. Por eso
tiempo. Lleva asociados los significados de la audeterminación personal representa una causa
libertad en general, potencialidad de desarrollo, loable en aras de la dignidad, como condición de
realización personal, independencia de criterio los seres humanos. Ser autónomo es más digno
intelectual y moral, ausencia de opresión y de que no serlo, es un estado superior de la
interferencias externas, desenvoltura, capacidad naturaleza moral de las personas que se refiere
de adentrarse en terrenos elegidos por uno tanto a la capacidad de pensar, como a la
mismo, etc. posibilidad de
Ponencia presentada en el Congreso "Educación y Sociedad. La profesión docente. Claves en la Europa del maña-
na". Torremolinos, 30 de octubre de 1999. Reproducida con el permiso del Colegio de Docentes y Licenciados de
Málaga, España.
Catedrático de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Valencia.
Dirección electrónica: josegimeno@uv.es
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EL SENTIDO Y LAS CONDICIONES DE LA AUTONOMÍA
decidir y de actuar. El ser heterónomo es aquél Cabe plantear la autonomía como la condición
que se halla sometido al poder ajeno, que le general de las personas que afecta a todas sus
impide su autorrealización y su propio desarrollo. acciones y cabe hacerlo respecto de acciones
La carencia de autonomía implica tener que específicas, como es el caso de la autonomía de
depender de otros al decidir y ejecutar las los profesores en tanto que profesionales. En este
acciones propias. Conquistarla supone remover segundo sentido, que no es del todo
obstáculos para las libertades, generar climas de independiente del primero, la autonomía del
intercambio y diálogo con los demás, liberados profesorado es interpretada, generalmente, al
de relaciones de poder que nieguen las libertades modo como se entiende aplicada a las profesiones
de pensamiento, de decisión o de acción de los liberales. Éstas consisten en conjuntos de
sujetos. actividades que se regulan por reglas autónomas,
apoyadas en unas normas éticas y de
Por otro lado, la autonomía hace relación a unas procedimiento práctico establecidas para la
ciertas capacidades del sujeto para ejercerla. Su profesión, apoyadas en un saber especializado,
carencia, en este caso, denuncia el impedimento que permiten e incluso estimulan el ejercicio de
interior que anula o dificulta su ejercicio. Un la práctica con diferentes grados de competencia
sujeto heterónomo es aquél que está impedido o y originalidad. Es el caso de la abogacía o de la
limitado para desplegar las posibilidades por sus medicina, en tanto son profesiones ejercidas en
limitaciones personales. Desde este punto de régimen de libre oferta y demanda de sus
vista, lograr la autonomía requiere capacitarse servicios (algo que no siempre ocurre así), donde
para ejercerla. La primera perspectiva -la referida el cliente elige a los profesionales que considera
al medio externo-, cuando forma parte pueden satisfacer mejor sus necesidades.
permanentemente del ambiente en el que viven
los sujetos, acaba por convertirse en impedimento ¿En qué medida se puede aplicar todo el universo
interno también. de cualidades, metas y condiciones de la
autonomía a la persona del profesor, en tanto que
En el universo semántico que sucintamente ejecutante de la actividad de la enseñanza y de
hemos señalado, se insinúan las dimensiones más todas las funciones generales que engloba su
sobresalientes de lo que significa un ser puesto de trabajo o profesión? Está claro que los
autónomo: un sujeto personal, que se dignifica al significados de la autonomía no pueden
ejercer su condición libre, porque el medio en el trasladarse de manera mecánica y en un sentido
que vive lo posibilita, que está capacitado para absoluto, porque la enseñanza y la educación
actuar por sí mismo y que es libre respecto de requieren relacionarse y actuar sobre otras
coacciones externas. No se trata sólo, pues, de personas que son sujetos también llamados a ser
una reivindicación de libertad hacia fuera, frente autónomos y desarrollar con ellos y para ellos un
a impedimentos o poderes externos, sino también proyecto. La legitimidad de éste obviamente no
de exigencias hacia adentro, hacia el sujeto está fundada exclusivamente en los criterios
(ahora el profesor) y hacia el colectivo del profesionales de los profesores. Las libertades de
profesorado como colegio profesional. La éstos tienen su límite en las de los otros afectados
autonomía es algo que depende por igual de la directa e indirectamente por la educación. Con lo
libertad (en el sentido negativo de carencia de cual, cualquiera que sea el significado que se le
obstáculos y limitaciones a la dignidad, a la libre atribuya a la autonomía del profesorado, siempre
manifestación de opiniones, adopción de valores lo será en contraposición a otras instancias
y del comportamiento) y de las dotes del sujeto externas, también legitimadas para ejercer su
para ejercerla (ilustración, formación, etc.). autonomía, si bien no necesariamente enfrentadas
Autonomía, libertad e ilustración capacitadora al docente. Siempre tendrá un carácter relativo.
van indisociablemente unidas. Los lí-
mites a la autonomía del docente provienen de público, que debería tener un muy bien marcado
las exigencias de la dignidad de los estudiantes, rumbo por el que guiarse y al servicio del cual es
de las funciones exigióles que la educación debe preciso subordinar autonomía y reclamar la
cumplir con ellos, de la sabiduría acumulada para responsabilidad de los profesores. El sistema
caminar en esas direcciones y de las exigencias público configura un campo de juego sutil para
legítimas de las familias y de la sociedad. discutir el sentido y los límites del ejercicio de la
autonomía y las libertades de los profesores,
El discurso que llena de aspiraciones la recla- pues, en tanto que es un espacio público, ellos
mación de autonomía de los profesores no puede están llamados a configurarlo junto a otros
tener, por lo tanto, como referencia exclusiva a agentes. Dos vicios potenciales afectan a ese
éstos, sino a todo a lo que ellos han de servir. Por espacio. Por un lado, en la medida en que los
eso, en esta exposición, nuestra tesis es que el
otros agentes se retiran o son muy limitadas sus
concepto de autonomía docente tiene que
capacidades para participar públicamente en la
contraponerse a los de responsabilidad y
educación, la autonomía de los docentes puede
compromiso con un proyecto aceptable de
educación, de suerte que únicamente al servicio pasar a convertirse en un predominio
de éste tiene valor la autonomía como exigencia corporativamente monopolizado sobre la
profesional. Las reivindicaciones relacionadas educación. Por otro lado, ese espacio público ha
con la causa de la autonomía contra poderes y sido frecuentemente acaparado por las
limitaciones externas ilegítimas despiertan la burocracias de las administraciones, que han
adhesión con facilidad y por eso no merece la reglamentado y gestionado los sistemas públicos
pena insistir en ellas. Por nuestra parte, nos de educación hasta límites inconvenientes para el
dedicaremos a resaltar la importancia de ejercicio necesario de la autonomía de los
reivindicarla hacia adentro de la profesión, como docentes. Es en la educación pública donde el
una exigencia responsable con la propia práctica. debate acerca del significado profesional y moral
de la expresión de la libertad, cobra matices más
Conviene insistir en la responsabilidad del sutiles y donde son más necesarias las precisiones
colectivo docente por encima de su autonomía, que impone el hecho de ser aquélla un proyecto y
dado que su función es delegada por la sociedad, un bien públicos.
y porque, en la medida que seamos exigentes con
nosotros mismos, nos legitimamos para pedir
autonomía hacia fuera, en lo que esté justificado 2. EL LARGO RECORRIDO DE UN
el reclamarla. Ambos flancos del problema -la
exigencia hacia adentro y la reivindicación hacia CAMINO AMBIGUO Y SIN FIN
afuera- representan territorios de búsquedas y de
luchas permanentes, porque la libertad y la Hemos destacado dos acotaciones importantes al
dignidad humanas son metas inagotables, pues concepto de autonomía profesional. Se ha
siempre descubriremos nuevas necesidades de argumentado que la autonomía despierta la idea y
autorrealización y nuevos obstáculos que se les las ansias de un camino de ejercicio de la libertad
oponen. que no tiene fin, porque forma parte de las
necesidades de autorrealización, que son abiertas
Si esta forma de plantear las cosas tiene rele- e inagotables. Además, hemos recordado que el
vancia respecto de la educación, en términos profesor debe ejercer con responsabilidad esa
generales, por razones de especial importancia autonomía, pues desarrolla su acción profesional
hay que referirla al sistema de enseñanza en algo que no es exclusiva propiedad personal ni
del colectivo de profesionales de la enseñanza,
sobre todo en la educación pública. La educación
supone un
proyecto en el que, en su diseño y desarrollo, está autonomía profesional; las condiciones y reglas
implicada toda la sociedad; es decir, es un mínimas para poder desarrollar cualquier otro
genuino bien público, y es al público como sujeto significado de las libertades profesionales. Se
social organizado al que corresponde la trata de libertades que deben quedar garantizadas
responsabilidad de delinearlo y sostenerlo. El por regulaciones legales, para que queden a salvo
profesorado es parte de ese público, cuya misión de los poderes que pueden interferir en la práctica
le es delegada por la sociedad, y es autónomo en
de los profesores.
la medida en que él es también parte del colectivo
social que determina el proyecto y lo concreta,
a. Autonomía sustentada en la seguridad en el tra-
desempeñando su principal responsabilidad en su
desarrollo y en su mejora. La acción de los bajo. Con anterioridad a cualquier otro sentido
profesores, más allá de todos estos principios, es de la libertad de los profesores, está la libertad
una acción que se solapa constantemente con la de disponer de las condiciones materiales para
de otros agentes (familia, Estado, iglesias y sobrevivir. El profesor debe disfrutar de las
medios de comunicación) y siempre existirá la imprescindibles seguridades en el trabajo,
posibilidad de coiisionar con ellos, de interferir y como condición previa para poder reclamar o
ser interferido por ellos. Por eso, la delimitación y ejercer cualquier otro sentido de la autonomía.
el ejercicio de su autonomía no es tarea fácil. Se trata de un punto básico de partida que
tiene su fundamento en dos razones
Estamos, pues, ante lo que creemos es un marco principales. La primera, porque sin esa
de juego poco claro, cuyo contenido real no está seguridad material no es fácil poder
suficientemente delimitado, ni lo estará nunca de desarrollarse, atisbar nuevos mundos, innovar
manera definitiva, al ser la autonomía un camino
en la profesión, etc. Las condiciones de vida
sin fin ejercido junto a los derechos de otros. Por
eso, para el profesorado es potencialmente una de muchos docentes en el mundo muestran
reivindicación constante, a la vez que difusa y carencias muy notables que imposibilitan
conflictiva. Lo que podemos hacer es ir hacer de la docencia un medio de vida digno
precisándola en cuanto a sus contenidos en el que proyectarse. Sin ese requisito no
reivindicativos e ir asentando los consensos que pueden plantearse ideales profesionales o
podamos alcanzar, junto a los que ya han sido morales relacionados con significados más
logrados en las sociedades democráticas. elevados de la autonomía. La segunda razón
Haremos una relación de los estratos reside en la necesidad de que el puesto de
superpuestos en esa reclamación de "libertad trabajo del docente no quede a merced de
profesional", en los que se ha substanciado la quienes éste dependa (propietarios de centros
demanda de autonomía, como una forma de educativos o autoridades públicas), para que
aclarar los ámbitos en los que se plantea, se las manifestaciones de las libertades legítimas
ejerce y se limita la capacidad profesional y la
no puedan repercutir en su permanencia en el
potestad de decisión de los profesores; no son
trabajo. En regímenes insuficientemente
capas asentadas cronológicamente en el orden en
que las trataremos con brevedad. democráticos o simplemente autoritarios y en
determinadas situaciones de la enseñanza
privada se sabe lo que significa esta elemental
2.1. LAS CONDICIONES MÍNIMAS DE demanda de libertad. En los procedimientos de
AUTONOMÍA COMO SEGURIDAD ingreso a instituciones públicas de enseñanza
PARA EL EJERCICIO PROFESIONAL se pueden hallar todavía reminiscencias de
censuras intelectuales acerca de la
Plantearemos, en primer lugar, los significados
conveniencia o inconveniencia de citar y
más elementales para el desarrollo de la
seguir a determinados autores o corrientes
educativas. Las
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profesores y a partir de qué punto se deben de Herbart de que la pedagogía como ciencia
permitir las opciones individuales derivadas se basaba en la psicología, decía que esa base
del derecho a la libertad de cátedra y no era ninguna garantía, pues lo que hace falta
pedagógica. es tacto, que es el «alfa» y el «ome-ga» del
arte del profesor. Posiciones parecidas adoptó
Dewey y otros muchos autores recientes.
2. 3. LA A UTONOMÍA INEVITABLE Frente a la seguridad de una pedagogía
pretendidamente técnica y pretenciosamente
Hemos visto que la autonomía profesional creída de ser tal, se alza la llamada a la
docente tiene un sentido de condición mínima reflexividad y al ensayo dirigido e inteligente
exigible por ser imprescindible. Hemos como modos de entender las "destrezas" de los
comentado que hay otras razones para entenderla docentes. La educación torna de la ilusión
como una posibilidad enriquecedora deseable. cientificista y se vuelve hacia el mundo de la
Ahora nos resta argumentar sobre su carácter de experiencia y del sentido común, donde
condición inevitable de la práctica docente. importa el conocimiento personal, que no
Queremos señalar que es algo que se ejerce tenemos que tomarlo como desgajado o
siempre, y en este caso es cuando se impone con desconectado del conocimiento riguroso o
nitidez la necesidad de la formación y de la "científico".
responsabilidad para ejercerla adecuadamente.
La influencia pedagógica es situacional,
a. Autonomía inevitable de la praxis frente a la práctica, normativa, de relación
dependencia de los expertos. La recuperación autorreflexiva (Van Manen, 1998,31).
de los análisis hermenéuticos, en detrimento
del dominio de los enfoques positivistas, nos Esta forma de ver la práctica y a "los prácti-
ha devuelto una visión de la práctica educativa
cos", así como a la racionalidad que les es
como una realidad en la que se expresan los
posible seguir en sus acciones, nos dibujan a
agentes singulares que la realizan. El práctico
unos docentes como profesionales necesaria y
puede aprender algo del "experto" que
pretenda dirigirle, pero de él no puede constantemente teniendo que inventar sus
aprender a ser un experto práctico. En el caso prácticas, abocados al ejercicio de una
de la enseñanza no estamos ante una técnica autonomía inexorable que les convierte en
regida por leyes técnicas inexorables o por inevitables agentes responsables de las
conocimientos científicos incontestables que acciones que emprenden. Una autonomía que
buscan producir cosas o efectos seguros, sino solamente pierden cuando dimiten de su papel
ante acciones que tienen detrás a actores de actores, acomodándose a las tradiciones
personales que, al realizarlas, expresan sus institucionalizadas que otros predecesores han
propias concepciones y sus aspiraciones inventado. La práctica de la enseñanza es
(Gimeno, 1998). La práctica, entendida como siempre, en alguna medida, autónoma, a pesar
acción de seres humanos, remite a los agentes de las regulaciones legales que recaen sobre
de la misma para ser comprendida, siempre ella y de la rutirúzación a la cual se halla
que se la quiera encauzar por caminos que no sometida; una condición que ningún control
estén trillados por la costumbre de esos externo puede anular del todo, por fuerte que
actores. Y nos remite también al ejercicio de la sea. La autonomía hoy, como afirma Cruz
prudencia (la frónesis aristotélica), la cual es (1999,47) es algo más que podernos valer por
imprescindible cuando de lo que se trata es de nosotros mismos, es sostener que disponemos
conseguir objetivos buenos y no sólo correctos de un cierto poder, lo cual significa tener que
desde el punto de vista técnico. James (1962), dar cuenta de esa responsabilidad. En otro
argumentando sobre la idea lugar hemos tratado con cierta exhaus-tividad
(Gimeno, 1998), las consecuencias
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ETICA Y PEDAGOGÍA
que para entender la práctica educativa tiene persona de los docentes, salvo en lo que hace
el comprenderla como entramado de acciones referencia a las condiciones señaladas de se-
de las personas y compromisos de las guridad en el ejercicio profesional. Al ser la
instituciones, donde queda siempre a salvo el educación algo que incumbe a otros agentes,
poder de los sujetos para participar en la además de los profesores, la autonomía resulta
pequeña historia de la educación. De ahí el liberadora y dignificadora de las personas que la
carácter moral que tiene siempre la enseñanza, ejercen, si tiene algún cometido relacionado con
que reclama responsabilidades respecto de algún proyecto que sea valioso para los intereses
unos criterios mínimos de calidad ante los generales, respecto del cual se debe ser
estudiantes y ante la sociedad en general responsable.
(Carr, 2000; Sockett, 1993; Tom, 1984).
Metáforas como las que entienden al profesor No se trata, pues, de quedar liberados de im-
como intelectual crítico, investigador en el pedimentos y de controles externos, simplemente,
aula, práctico reflexivo o investigador en o de sino de ser autónomos para mejorar ese proyecto.
su acción, hunden sus raíces epistemológicas Nos justificamos reclamando la autonomía, si es
y su sentido ético y político en esta idea de la que, por su carencia, no podemos realizar algo
valioso y digno de ser llevado a cabo. Es decir,
autonomía inevitable y deseable.
hay que plantearla o exigirla de la mano de un
para qué.
La autonomía, pues, se asienta en el margen
de libertad inherente al tipo de práctica que es La adhesión a la reivindicación de la libertad, la
la educación. Será más o menos facilitada por dignidad o la autonomía es más probable de darse
los condicionamientos externos, por los o de ser más intensa en todas aquellas personas
límites que impone la estructura del puesto de que estén y se sientan privados de dichas
trabajo y los controles a que se halla sometida; cualidades, de forma que se crean impedidos para
será más o menos amplia según la llevar a cabo alguna empresa. Cuando se quiere
capacitación de quienes la ejerzan, pero en hacer algo y no se puede, es cuando cobramos
todo caso será inevitable. Más o menos conciencia viva de las trabas a nuestra autonomía.
holgada, será siempre posible, y en esa Si no se perciben limitaciones evidentes en ese
medida habrá de ser vista, por lo tanto, desde sentido es porque no se tienen proyectos a realizar
la responsabilidad de qué hacer con ella. o porque nuestras acciones están tan
perfectamente encajadas en el orden estatuido que
no sentimos necesario cambiar; entonces la
3. LA AUTONOMÍA COMO reacción reivindicativa es menos probable. Si se
ESPACIO A RELLENAR DE ha perdido el sentido de la dignidad bajo las
condiciones de opresión, o si ni siquiera se llegó a
PROYECTOS tener, es posible que tampoco se aprecie ni se
busque la emancipación. En las sociedades
El por qué de la autonomía de los profesores, lo acomodadas a unas mínimas reglas democráticas,
acabamos de comentar. Ahora nos toca hacerlo con ausencia de privaciones importantes para
sobre el para qué, interrogante que fundamenta desenvolverse en la vida y poder sobrevivir, los
sobremanera las reclamaciones de libertades individuos que no tengan sus cuerdas morales
profesionales. La autonomía, como expresión y tensadas pueden dejar pasar su existencia
condición de la libertad en el ejercicio sosegadamente sin otras exigentes demandas de
profesional, no puede entenderse en un sentido autorrealización a través del ejercicio de una
absoluto como un atributo no negociable que mayor autonomía. En esas condiciones resulta
afecta a la dignidad básica de la fácil caer en la anomia -esa especie de
desorientación personal propia de
todo aquél que carece de propósitos-, en la falta Resaltamos esa responsabilidad de los docentes,
de motivos para llevar a cabo proyectos en los porque en nuestro contexto político y educativo
que volcarse; una actitud que se corresponde con existen marcos y márgenes suficientes para el
una especie de anarquía organizada en las ejercicio de la autonomía profesional mínima,
instituciones, que se sostendrá mientras la como existen los marcos para la participación de
sociedad no haga presentes sus demandas, y que los docentes para orientar el sistema escolar,
tanto devalúa a las instituciones públicas aunque siempre es posible detectar carencias. Es
empantanadas en la rutina. La autonomía, en más, esos márgenes de libertad y las posibilidades
otras palabras, no es una reivindicación sentida que permiten, parece como si fuesen sobrados, a
como necesidad perentoria por muchos la luz del escaso ejercicio de la autonomía y de la
profesores, ante la comodidad que da el participación para desarrollar proyectos. Puede
sometimiento a lo establecido, por la carencia de
decirse que hoy los cauces son más amplios que
proyectos que choquen con los límites de lo
abundante es el caudal que corre por ellos. Lo que
estatuido y por el "miedo a la libertad" de
se precisa es llenarlos. Lo que hay que demandar
ejercerla, utilizando la expresión de Fromm.
de los docentes es contenido para hacer proyectos
Por eso, tan importante es mantener la capacidad de buena educación y reclamarles a ellos
de reivindicar y de luchar por la autonomía, en declararlos cuando pidan autonomía. Creemos
contra de los obstáculos que la impidan, como que hoy, gracias a las posibilidades existentes,
plantear las responsabilidades de quienes no la toca poner más énfasis en la responsabilidad del
necesitan por no tener proyectos en los que ejercicio de la autonomía que es en realidad
encontrar espacios donde crear, ser libres y dar un posible, que en el discurso de la mera resistencia.
sentido constructivo a la libertad profesional. La
educación bajo la óptica ilustrada tiene siempre 3.1. LA RESPONSABILIDAD CONSISTE EN
tras de sí un proyecto de progreso que pretende ir RESPONDER DE ALGO
más allá de lo dado, para el individuo, para la
sociedad, para el conocimiento, para la mejora de La educación y la autonomía creadora puesta a su
la felicidad... Sin un contenido, sin una meta para servicio requieren proyectos visibles por los que
las acciones, la reclamación de autonomía pierde trabajar. Se es autónomo para ser más libre
sentido y legitimación, y pierde fuerza creando, lo que implica tener algo sustancial que
reivindicativa ante quienes tengan que ceder realizar en la vida, con los demás y en el trabajo;
poder. Las reclamaciones de las libertades pro- es decir, proponerse metas relevantes. ¿Qué se
fesionales, sin ponerlas al servicio de alguna entiende por proyecto en este contexto, como
pretensión constructiva, quedan sin dirección contenido y cauce de la autonomía? Se puede
creadora y el sujeto en estado de satisfacción plantear a distintos niveles, y en cada uno de ellos
paralítica. A pesar de todo, en este estado, tanto podemos analizar el significado de la
las personas como las instituciones pueden inevitabilidad-necesidad de la autonomía y la
perdurar y cubrir la apariencia de que están vivas, consiguiente responsabilidad derivada en dichos
aunque sólo las mantenga la inercia de esa estratos. Podemos situarla en el nivel más
anomia que se autosostiene a sí misma. La concreto de tener que desarrollar una
percepción que obtenemos viendo muchas metodología o una tarea didáctica creadora, en la
instituciones educativas, y a no pocos profesores, búsqueda de un modelo de organización de
es la de padecer de una falta de propósitos, una profesores o de todo un centro escolar en torno a
carencia de tensión moral y de insatisfacción que una forma innovadora de hacer educación, hasta
no se quede en el lamento, una falta de en el afán de dar una orientación coherente a todo
consciencia sobre las funciones exigentes de las el
prácticas educativas.
sistema educativo o a una parte significativa del consumidores. La empresa condiciona la au-
mismo, como puede ser el sector público, por tonomía de sus empleados al mantenimiento de la
ejemplo. Todos ellos son espacios de desigual identidad de la oferta que hace a sus clientes. En
complejidad en los que desplegar nuestras este caso la autonomía de los profesores reside en
posibilidades. En todos esos ámbitos podemos aceptar o no el proyecto de la empresa, u optar
plantear el carácter proyectivo creador de nuestra por crear ellos su propia oferta a defender en el
práctica. Los docentes pueden ser o no mercado. En el modelo comunitarista se trata de
autónomos, creadores y responsables en el que cada unidad descentralizada del sistema
ámbito más genuino de su trabajo, que es el de la escolar responda a las peculiaridades y demandas
práctica didáctica en las aulas y en la or- locales de la comunidad en la que se sitúa el
ganización de la institución escolar, aunque no centro escolar; comunidad definida por afinidades
son ajenos a la necesidad de velar por la visibi- ligadas a determinadas condiciones locales,
lidad del proyecto de educación pública o por la religiosas, culturales, etc. El profesor se convierte
relevancia del sistema escolar en general, sea en un servidor de los propósitos educativos de
cual sea el lugar de su trabajo. cada comunidad, llamado él también a trabajar
por el proyecto de la misma.
La práctica docente es regulada desde otro plano,
que condiciona la forma de ejercer las libertades, El profesorado que no se implique en el desa-
según cuáles sean las opciones de política rrollo de un proyecto general de carácter público
educativa. La autonomía y la responsabilidad de y que no asuma las responsabilidades derivadas
los profesores ni se ejerce ni se demanda desde el de sus exigencias, subordinando su autonomía a
vacío, sino desde formas alternativas de vertebrar éstas, estará contribuyendo a que las necesidades
el sistema educativo, que tienen que ver con las de los demandantes de educación de calidad
modalidades políticas de proporcionar a los encuentren la oportunidad de verlas cumplidas en
usuarios el servicio de la educación, de ordenar la alternativa del mercado o del comunitarismo.
los recursos, acoger a los estudiantes, organizar El proyecto público de educación puede
las actividades y dar cuenta de los resultados. realizarse a través del sector estatal o del llamado
Esas formas políticas son, básicamente, tres: el tercer sector (Bresser y Cunill, 1998); un modelo
modelo de la enseñanza pública, la educación éste, que siendo público, no es estatal, ni tiene la
dispensada bajo la lógica del mercado y las lógica de la oferta privada, pues no se rige por el
fórmulas comunitaristas. principio de la competencia en el mercado, ni por
el ánimo de lucro, adoptando fórmulas de orga-
En el primer modelo -el de la educación pública-, nización cooperativa o de organizaciones no
la coherencia del proyecto que la anima se gubernamentales estrechamente vinculadas con
sostiene por una ambiciosa, aunque no siempre las necesidades e intereses de la comunidad a la
muy visible, idea de servir al bien común de que sirven.
todos, disponiendo de un sistema educativo en el
que se funden las aspiraciones de equidad, Trabajar con autonomía, pero responsablemente,
calidad y respeto a la libertad para todos. A los en aras de un proyecto público de educación
profesores en ese modelo les cabe plantear sus requiere ejercer la libertad bajo unas
demandas de autonomía sin traicionar los fines determinadas condiciones. La primera de ellas es
básicos del servicio público y, en todo caso, la de que el proyecto al que se sirve ha de ser
pedirlas para mejorarlo. El modelo del mercado visible. Lo público, entre otras notas que lo
pretende asegurar la coherencia de su proyecto definen, tiene el sentido que le asigna Arendt
como una necesidad para mostrar una idea de (1993,59) de ser algo obvio para todo el mundo,
educación acorde con determinadas demandas aquello que percibimos nítidamente, por-
diferenciadas de los
que muestra ante todos su entidad y sus pro- tan frecuentemente puede ser detectada en
pósitos, en contraposición a lo que permanece, en nuestro paisaje educativo.
la privacidad o en la intimidad, fuera de la mirada
de cualquier observador externo. ¿Tiene la Un proyecto con las características anteriores
educación esa condición de visibilidad ante el requiere que su racionalidad no se agote en el
público en general y, particularmente, en el proceso de su configuración, sino que tiene que
profesorado? ¿Tiene esa propiedad, ser impulsado, vigilado y sostenido mientras dure
precisamente, la educación llamada pública? su desarrollo. Por eso requiere ser Iiderado, como
¿Contribuyen con su autonomía los docentes a tercera condición. Un liderazgo ejercido con
hacer que ésta sea visible ante el público, como formas y con legitimación democráticas, sin
muestra del contrato social que la profesión concesiones a la resistencia pasiva o activa de las
docente debe tener con la sociedad, con las individualidades, a la falta de compromiso y a la
familias y los individuos, o tienden más bien a defección respecto del proyecto. Hablar de
secuestrar sus prácticas y sus funciones? ¿En qué liderazgo democrático implica resaltar la
medida la ocultación no es una defensa para necesidad de mantener un orden y una coherencia
mantener lo que no resulta defendible por razones en la práctica del colectivo que se compromete y
que no serían aceptables de mantener en público? responsabiliza con una tarea que exige
coordinación, impulso y vigilancia de las
La segunda condición reside en la subordinación acciones individuales. Esta función debe ser
de la autonomía de los individuos a la coherencia compartida entre todos, aunque quede bajo la más
del proyecto general de la educación pública. Eso directa tutela de las figuras que componen los
implica disponer y fortalecer los canales de equipos directivos.
discusión y de participación abiertos entre
docentes y entre éstos y otros agentes sociales, Un proyecto público, en el que depositar las
para confeccionar ese proyecto desde una virtualidades creadoras de la autonomía pro-
perspectiva de racionalidad apoyada en el diálogo fesional exige que, en el proceso de su desarrollo
habermasiano. En el intercambio dialógico nadie y al final del mismo, se rindan cuentas de lo que
tiene previamente el monopolio de la orientación se hace a los demás agentes sociales interesados
de la educación. En él los profesores están en la educación. La cuarta condición de dicho
llamados a desempeñar el importante papel que proyecto es, pues, la de que tiene que ser
les posibilita su peculiar competencia sometido a un control público democrático. La
profesional, y sólo en la medida que la tengan. La autonomía responsable tiene su forma de control
participación posible no creemos que deba más genuina en las normas éticas de la profesión,
dirimirse, en este caso, en el sentido de asignar a asumidas por cada uno de sus miembros y
las partes cuotas de representación, sino vigiladas por el colectivo colegiado. Pero en el
contemplarla como un problema de caso de la función pública docente, ese control
compiementariedad de las aportaciones que los moral de carácter autónomo muestra claras
diferentes participantes puedan poner de deficiencias. En primer lugar, porque sus normas
manifiesto en un diálogo irrestricto. La no se han explicitado con claridad; no se han
autonomía debe entenderse como libertad para elaborado las reglas relativas a los deberes
contribuir a formar la voluntad del público en profesionales. En segundo lugar, porque no existe
torno al proyecto de educación pública. La "vigilancia" y capacidad de corrección entre los
subordinación de las libertades individuales a las iguales cuando las reglas son transgredidas; bien
necesidades de esa forma de entender la al contrario, no es infrecuente encontrar
colegialidad practicada en torno a dicho proyecto encubrimientos de comportamientos
se contrapone a la autarquía metodológica de inadmisibles. En tercer lugar, este autocontrol
cada profesor, que interno ha sido suplantado por el sometimiento a
quienes desde la
burocracia delinean las líneas maestras a las que actores sociales. En el modelo del mercado, el
han de someterse los docentes. La bondad destinatario de la educación tiene esa caracte-
presumible de lo que se hace queda enajenada y rística de actor solamente en tanto tiene iniciativa
es, aparentemente, garantizada por el reconocida para poder elegir. La información que
acatamiento de la norma presuntamente buena. necesita el consumidor tiene la función de
proporcionarle claves sobre la calidad del
Aparte de estas deficiencias del control interno producto a ser elegido en competencia con otros;
para someter la autonomía de los individuos del información que puede tener más que ver con los
colectivo docente a pautas de actuación
intereses de quienes venden el producto que con
responsable, son necesarios otros controles que
los del consumidor. En un proyecto público, en
den información acerca de cómo funciona el
sistema educativo; un conocimiento que tenga la cambio, la información tiene el sentido de hacerlo
virtualidad de implicar al público destinatario y transparente y visible ante los usuarios, y
ayude a convertir a éste en actor deseable de un potenciar a éstos como actores, para hacerlos más
proyecto público de educación. La primera autónomos a todos ellos.
condición para esa participación en el control es
la de proporcionar cons-ciencia sobre lo que se Responsabilidad, transparencia o visibilidad y
hace y acerca de lo que se consigue. Como controles aseguran el equilibro entre las libertades
indicara MacDonald (1983) hace tiempo, y como necesarias e inevitables de los docentes y la
otros han señalado después (Simons, 1999), la conveniencia de someterlas a un proyecto que
evaluación democrática de un programa de sirva a los intereses del público. Ésta es la forma
actuación -que podemos hacer equivalente a de erradicar del discurso, sobre la necesidad de la
control, en este caso-significa hacer revertir autonomía profesional, la posibilidad de que
sobre las audiencias públicas conocimiento que
pueda ser instrumentada para fines espurios de
les capacite como
carácter corporativo.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ARENDT, H. (1993). La condición humana. Barcelona: Paidós.
CRUZ, M. (1999). Hacerse cargo. Sobre responsabilidad e identidad personales. Barcelona: Paidós.
MARTÍNEZ, J. (1998). Trabajar en la escuela. Profesorado y reformas en el umbral del siglo XXL Madrid:
Miño y Dávila.
SOCKETT, H. (1993). The moral basefor teacher professionalism. Nueva York: Teachers College Press.