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IMPORTANCIA DEL SANEAMIENTO DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA,

ECONÓMICA Y SOCIAL DE LOS ENTES PÚBLICOS Y SU PAPEL EN LA


GESTIÓN PÚBLICA

MILYN CASTRO CÁCERES

ESCUELA SUPERIOR DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA


ESAP
DEPARTAMENTO DE POSTGRADO
ÁREA DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA
ESPECIALIZACIÓN DE GESTIÓN PÚBLICA
BOGOTÁ, D.C.
2005

1
IMPORTANCIA DEL SANEAMIENTO DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA,
ECONÓMICA Y SOCIAL DE LOS ENTES PÚBLICOS Y SU PAPEL EN LA
GESTIÓN PÚBLICA

Saneamiento Contable, Contribución para la ge neración de Herramientas


idóneas de Gestión Administrativa

MILYN CASTRO CÁCERES

Monografía para optar al título de


Especialista en Gestión Pública

Director
LUIS ALONSO COLMENARES RODRÍGUEZ

ESCUELA SUPERIOR DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA


ESAP
DEPARTAMENTO DE POSTGRADO
ÁREA DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA
ESPECIALIZACIÓN DE GESTIÓN PÚBLICA
BOGOTÁ, D.C.
2005

2
Nota de aceptación

____________________________

____________________________

____________________________

____________________________
Presidente del Jurado

____________________________
Jurado

____________________________
Jurado

Bogotá, noviembre de 2005

iii
AGRADECIMIENTOS

La autora expresa sus agradecimientos a:

Luis Alonso Colmenares, Contador Público y Subcontador General de la Nación, por

sus valiosas orientaciones.

Omar Eduardo Mancipe Saavedra, Contador Público y Asesor de la Subcontaduría

General y de Investigación de la Contaduría General de la Nación, por su constante

motivación en este trabajo.

iv
CONTENIDO

Pág

INTRODUCCIÓN 9

1. DESCRIPCIÓN Y FORMULACIÓN DEL PROBLEMA 13

2. OBJETIVOS 14

2.1. OBJETIVO GENERAL 14

2.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS 14

3. JUSTIFICACIÓN 16

4. DELIMITACIONES 19

5. HIPÓTESIS 21

6. VARIABLES 22

7. MARCO JURÍDICO DE SANEAMIENTO CONTABLE 23

7.1. ANTECEDENTES 23

7.2. NORMAS GENERALES 26

7.2.1. Ley 716 de 2001 28

7.2.2. Ley 863 de 2003 31

7.2.3. Ley 901 de 2004 31

7.2.4. Ley 998 de 2005 35

7.2.5. Decreto 1282 de 2000 35

7.2.6. Decreto 1914 de 2003 38

v
7.2.7. Decreto 1014 de 2005 39

7.3. NORMAS CONTABLES 41

7.3.1. Circular Externa 050 de 2002 41

7.3.2. Carta Circular 042 de 2003 45

7.3.3. Circular Externa de 2004 46

8. ANTECEDENTES BIBLIOGRÁFICOS 49

8.1. EL SANEAMIENTO CONTABLE: PROCESO CONTÍNUO DE

BENEFICIO INCALCULABLE 49

8.2.“CRÓNICA DE UN SANEAMIENTO ANUNCIADO” 65

9. RAZONABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA,

ECONÓMICA Y SOCIAL ANTES DE LA APLICACI ÓN DE LA LEY DE

SANEAMIENTO CONTABLE. 84

9.1.GOBERNACIÓN DE CUNDINAMARCA 84

9.2.DISTRITO CAPITAL 87

9.3.FONDO NACIONAL DEL AHORRO 89

10. BENEFICIOS QUE ADQUIEREN LAS ENTIDADES PÚBLICAS COMO

CONSECUENCIA DE LA APLICACIÓN DEL PROCESO DE

SANEAMIENTO CONTABLE 91

10.1. CONOCER LA VERDADERA SITUACIÓN FINANCIERA,

ECONÓMICA Y SOCIAL DEL ENTE PÚBLICO 91

10.2. ESTABLECER SI LOS BIENES, DERECHOS Y OBLIGACIONES

REVELADOS EN LOS ESTADOS CONTABLES DEL ENTE PÚBLICO

vi
SON CIERTOS. 92

10.3. CONOCER LAS EXIGIBILIDADES Y OBLIGACIONES CIERTAS

DEL ENTE PÚBLICO 93

10.4. SOPORTAR LA TOTALIDAD DE LAS OPERACIONES REALIZADAS

POR EL ENTE PÚBLICO Y QUE AFECTARON LA PARTE

FINANCIERA 93

10.5. LA FORMULACIÓN Y ADECUACIÓN DE LOS PROCEDIMIENTOS

DE LAS ÁREAS FINANCIERAS PARA GARANTIZAR EL REPORTE

OPORTUNO Y ADECUADO DE LA INFORMACIÓN PARA LA

GENERACIÓN DEL PROCESO CONTABLE 94

11. BENEFICIOS DE LA INFORMACIÓN SANEADA 95

11.1. TOMA OPORTUNA Y EFICIENTE DE DECISIONES 95

11.2. EJERCICIO DE CONTROL EFECTIVO DE LOS RECURSOS

PÚBLICOS 96

11.3. PERMITE EL EJERCICIO DE LA OBLIGACIÓN DE RESPONDER A

LA COMUNIDAD SOBRE EL ADECUADO MANEJO DE LOS

RECURSO S PÚBLICOS 97

11.4. REVELACIÓN DE INFORMACIÓN ÚTIL DE ACUERDO CON LAS

DIFERENTES NECESIDADES DE LOS USUARIOS

ESTRATÉGICOS 97

CONCLUSIONES 99

BIBLIOGRAFÍA 102

vii
ANEXOS 103

MATERIAL ACOMPAÑANTE 109

viii
INTRODUCCIÓN

La importancia de la aplicación de la Ley de saneamiento contable , para garantizar

que la contabilidad pública cumpla con uno de sus principales objetivos cual es el

de contribuir como herramienta para la administración de los recursos públicos y

así permitir la adecuada gestión financiera pública.

Desde antes de la promulgación de la Constitución Política del año 1991, el país

careció de un sistema de información idóneo que le permitiera conocer el grado de

eficiencia y eficacia con la que se administraban los recursos públicos por parte de

los administ radores, en beneficio de la comunidad.

De otra parte, debido a que anteriormente se utilizaba un sistema de contabilidad

presupuestal, no se contaba con una herramienta que permitiera realizar una toma

adecuada de decisiones y que garantizara ejercer de forma eficiente el control

sobre la utilización de los recursos públicos, ya que no se encontraba vestigio de

las transacciones realizadas por los gestores públicos relacionadas con la utilización

y optimización de los mencionados recursos.

Con la promulgación de la nueva Constitución Política, se dan las bases para la

9
formulación de un sistema de información que permita a los usuarios estratégicos

conocer, de la fuente primaria, todas las transacciones realizadas por los entes

públicos.

El desarrollo de éste documento pretende dar a conocer el valor agregado que

genera el hecho de que las entidades públicas apliquen la ley de saneamiento

contable a su información financiera, económica y social, de tal manera que,

cuenten con información cierta en sus Esta dos Contables, es decir, que las cifras

reveladas muestren el valor real de los bienes y derechos de propiedad de los

entes públicos y las obligaciones que le son exigibles.

En la primera parte, se analiza el grado de razonabilidad que presentaban los

estados contables de la Gobernación de Cundinamarca, el Distrito Capital de

Bogotá y el Fondo Nacional del Ahorro, estableciendo las limitaciones que para la

adecuada toma de decisiones, el ejercicio del control, la realización de análisis y

divulgación de información y el conocimiento de la ciudadanía sobre el manejo de

los recursos públicos que realizan los gestores públicos, genera el hecho de no

poseer estados contables razonables.

En la segunda parte, se darán a conocer las posibilidades o facilidades que da la

Ley 716 de 2001, previo al análisis de la información financiera, económica y social

que presentaban las entidades, antes, durante y después del saneamiento

10
contable, para garantizar que finalmente, después de tanto tiempo, los entes

públicos cuenten con información que servirá como herramienta de gestión.

Adicionalmente, tomando como base la información reportada por los mismos

entes públicos, se analiza el grado de avance del proceso, la magnitud de las

partidas objeto de depuración y la inciden cia en el patrimonio al aplicar el proceso

de saneamiento contable.

Para ello, inicialmente se realizará un recorrido por la normatividad expedida en

materia de saneamiento contable, desde las leyes que dieron origen al proceso y

lo prorrogaron, pasando por los decretos que las reglamentaron, hasta los

procedimientos contables necesarios para garantizar el adecuado registro de las

operaciones que generen el desarrollo del proceso de saneamiento contable, para

finalizar analizando la información relacionada con el avance del saneamiento

contable y el formato del catálogo de cuentas de los cortes de 2002, 2003, 2004 y

2005.

Finalmente, se darán a conocer los beneficios que obtendrían los entes públicos,

que mediante la aplicación de la ley de saneamiento contable generan información

razonable sobre la situación financiera, económica y social.

Se espera que con el desarrollo del presente trabajo, se conozcan las

11
características y beneficios del proceso de saneamiento contable, para que

finalmente los entes públicos cuenten con una verdadera herramienta de gestión, y

de esta manera se garantice la adecuada administración de los recursos públicos

en beneficio de la comunidad.

12
1. DESCRIPCIÓN Y FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

¿La información financiera, económica y social que es utilizada por parte de los

usuarios estratégicos para la toma de decisiones y el ejercicio del control, contiene

los estándares mínimos de calidad para garantizar que ésta contribuya a una

adecuada gestión pública respecto de los bienes, derechos y obligaciones que

administran los entes públicos?

¿Cómo garantizar que la información financiera, económica y social revelada en los

estados contables de los entes públicos pueda ser utilizada como herramienta de

gestión financiera?

13
2. OBJETIVOS

2.1. GENERAL:

Dar a conocer el valor agregado que genera en las entidades públicas, el hecho de

que su información financiera económica y social contenida en los Estados

Contables, a una fecha de corte, una vez sometida al proceso de saneamiento

contable, prese nte de forma razonable la situación financiera, económica y social,

de tal manera que los bienes, derechos y obligaciones allí revelados, sean ciertos,

lo cual se traduce en la obtención de herramientas gerenciales para una adecuada

toma de decisiones y el ejercicio del control.

2.2. ESPECÍFICOS:

Conocer el grado de razonabilidad de los Estados Contables de los entes públicos

objeto de análisis, antes de la aplicación de la Ley 716 de 2001, modificada y

prorrogada por las Leyes 863 de 2003 y 901 de 2004.

Conocer el grado de utilización de los Estados Contables por parte del ente público

para la toma de decisiones, antes de la aplicación de la Ley 716 de 2001,

14
modificada y prorrogada por las Leyes 863 de 2003 y 901 de 2004.

Conocer sobre las decisiones tomadas por los entes públicos y su efectividad, con

base en la información financiera, económica y social, antes de la aplicación de la

Ley 716 de 2001, modificada y prorrogada por las Leyes 863 de 2003 y 901 de

2004.

Analizar el impacto que genera en la toma de las decisiones, el hecho de que las

cifras utilizadas, sean tomadas una vez se haya aplicado la Ley 716 de 2001,

modificada y prorrogada por las Leyes 863 de 2003 y 901 de 2004.

15
3. JUSTIFICACIÓN

Existe un desconocimiento entre los gestores públicos sobre la utilidad que presta

la contabilidad pública como instrumento o herramienta de gestión, esto, debido a

que los administradores de los recursos públicos, actualmente no cuentan con

información de base contable que contenga las características y requis itos mínimos

que garanticen la idoneidad de ésta herramienta.

Desde el cambio fundamental de la contabilidad pública en Colombia, suscitado en

año de 1991 con la promulgación de la Constitución Política, la cual paso de ser

una contabilidad regida por el sistema de caja y que buscaba un control en la

ejecución del presupuesto, a ser una contabilidad regida bajo el sistema de

causación y de la cual se determinan los efectos patrimoniales cuando se realizan

los hechos financieros y sociales, se ha venido presentando una falencia en la

información generada en el proceso contable, la cual se traduce en falta de

razonabilidad en las cifras.

Esa falta de razonabilidad se origina desde la elaboración del primer Balance

General de la Nación, ya que para la obtenci ón de los saldos iniciales, la

Contaduría General de la Nación, solicitó a la totalidad de los entes públicos la

16
remisión de los saldos contables con corte a 31 de diciembre de 1995, entes que al

cumplir con tal solicitud no tuvieron en cuenta aspectos fundamentales como la

existencia real de los bienes, derechos y obligaciones, valor actual real,

documentos soportes idóneos para demostrar los derechos y exigibilidades, entre

otros, lo cual trajo como consecuencia que a partir de esa fecha la información

revelada en los estados contables, no contuvieran los estándares mínimos de

calidad para utilizar esta herramienta para una adecuada administración pública.

Aunado a lo anterior, la carencia o la falta de operatividad de manuales de

funciones y procedimient os razonablemente integrados para cada una de las

dependencias de las áreas financieras de los entes públicos, y la ausencia de una

marcada cultura contable de los administradores públicos, permitieron que la

información contable no fuera tenida en cuenta como herramienta para la

adecuada toma de decisión.

Gracias a los esfuerzos conjuntos entre la Contraloría General de la República y la

Contaduría General de la Nación, se presentó ante el Congreso de la Republica un

proyecto de Ley que buscaba la generación de una serie de mecanismos para que

los entes públicos depuraran y sanearan su información financiera, económica y

social, de tal manera que en sus estados contables se revelaran en forma

razonable y fidedigna, los bienes y derechos con que cuentan las entidades para el

ejercicio de sus funciones y las obligaciones y exigibilidades derivadas de estas.

17
Así las cosas, en el año 2001 fue expedida la Ley 716 conocida como la Ley de

Saneamiento Contable cuyo objeto principal esta dado en establecer la obli gación

a los administradores de los entes públicos a desarrollar todo tipo de acciones

administrativas, de tal manera que sus estados contables a una fecha de corte

muestren la verdadera situación financiera, económica y social y así contar con

una herrami enta fundamental para la adecuada gestión de los recursos públicos.

Con el análisis que realizar é sobre el impacto positivo que genera en la información

financiera, económica y social de los entes públicos el hecho de que esta

información haya sido someti da al proceso de depuración y saneamiento, pretendo

dar a conocer los beneficios que obtendrán los gestores públicos al contar con una

herramienta idónea para un adecuado gestionar de los recursos públicos

entregados para su administración.

Basta ver la diferencia marcada entre la información presentada a la Contaduría

General de la Nación antes de ser sometida al proceso de saneamiento contable,

frente a la que ha sido depurada y saneada, demostrando ser más confiable para

la toma de decisiones.

18
4. DELIMITACIONES

Para el desarrollo del presente documento analizar é la información financiera,

económica y social de tres tipos de entidades a saber: uno correspondiente a la

administración central departamental, para ello se escogió a la Gobernación del

Departamento de Cundinamarca, debido a que es una de las entidades que

muestra los mejores índices de cumplimiento en el envío de la información a la

Contaduría General de la Nación.

De otra parte, por considerar que los municipios son las entidades que más

requieren la aplicación de la mencionada Ley de saneamiento contable y su

infraestructura, toma ndo como ejemplo el Distrito Capital.

Ahora bien, teniendo en cuenta que dentro de la estructura del Estado

Colombiano, se encuentran entes públicos cuya natural eza pertenece a la de las

empresas, se toma como modelo una Empresa Industrial y Comercial del Estado,

cual es el Fondo Nacional del Ahorro.

Una vez definidas las entidades que servirán de muestra para la elaboración del

presente trabajo, se encuentran como limitantes para determinar el grado de

19
utilización de la contabilidad pública para la toma de decisiones, el hecho que en la

Contaduría General de la Nación sólo se cuenta con los saldos de las cifras a una

fecha de corte, sin que se pueda deducir como se está utilizando.

Adicionalmente, el hecho de que los entes públicos aún no hayan terminado con la

aplicación de la Ley de Saneamiento Contable hace que aún no se cuente con

información suficiente y pertinente para determinar la calidad de sus estados

contables, el tipo de decisiones que está tomando el ente público y el grado de

utilización de la información contable ya depurada.

20
5. HIPÓTESIS

En la medida en que la información financiera, económica y social muestre de

forma razonable la situación financiera de los entes públicos a una fecha de corte,

y ésta pueda ser utilizada para adecuada toma de decisiones y el ejercicio del

control, los recursos públicos entregados a los diferentes gestores públicos, podrán

ser administrados de forma eficiente, eficaz y económica.

21
6. VARIABLES

En la ejecución del trabajo se encontró como variable independiente el hecho de la

necesidad ingente de realizar capacitación a los diferentes administradores

públicos sobre las herramientas que pueden utilizar para el desarrollo de la gestión

pública, entre ellas la contabilidad pública.

De otra parte, se hace necesario desarrollar programas de capacitación sobre los

beneficios que genera el hecho de aplicar el proceso de saneamiento contable a la

información financiera, económica y social, y los tipos de decisiones en los que se

pueda aplicar la contabilidad depurada y saneada.

Por último, se hace necesario, capacitar a los gestores públicos de la

responsabilidad que respecto al proceso de saneamiento contable les corresponde

sobre el mencionado proceso.

De igual forma, se determinó como variable dependiente el hecho de que por

iniciativa propia de los gestores públicos de las entidades, se garantice que de

forma permanente la información financiera, económica y social cuente con las

características y requisitos mínimos que permitan utilizarla como herramienta de gestión.

22
7. MARCO JURÍDICO DE SANEAMIENTO CONTABLE

7.1. ANTECEDENTES

Con la expedición de la Constitución Política de 1991, se desarrollaron nuevos

lineamientos rel acionados con el proceso contable del sector público colombiano,

la cual, en su artículo 354, creó la figura del Contador General de la Nación,

modificando la labor que desde la creación de la Contraloría General de la

República –CGR- en el año de 1923 venía desarrollando.

A partir de la expedición de la Constitución y del desarrollo de las competencias

constitucionales, fue común el hecho de que no se feneci era la Cuenta por parte

de la Cámara de Representantes y se expidieran dictámenes negativos o adversos

proferidos por la Contraloría General de la República sobre los Estados Contables

presentados por el Contador General, hechos que evidencian una gran

incertidumbre sobre larazonabilidad de las cifras contables públicas.

Dicho de otra manera, el país no cuenta con información que revel e con cer teza su

verdadera situación financiera, económica y social representada en

disponibilidades, derechos, obligaciones y por lo tanto, su real patrimonio.

23
Ante tal situación se hace necesario emprender acciones tendientes a depurar la

mencionada información, con el objetivo de rescatar la confianza pública, contar

con una confiable herramienta para el control, la evaluación de la gestión y la

toma de decisiones, sobre lo cual en el pasado sólo se habían hecho

intr ascendentes reflexiones.

Lo a nterior trajo como consecuencia que en la Contraloría General de la República,

se iniciara un proceso para rescatar la realidad contable del sector publico, bajo el

marco de un plan estratégico, para que a través de las distin tas Contralorías

Delegadas Sectoriales se diseñara un plan de acción que involucrara las

actuaciones frente a todos los sujetos de control que habían sido objeto de

formulación de glosas contables por parte de la Comisión Legal de Cuentas a partir

de 1993, pero especialmente, como resultado del proceso de Auditoria

Gubernamental con enfoque integral adelantado por la CGR.

El proceso de saneamiento contable es una actividad que involucra toda la

administración pública. El conocimiento integral de este proce so llevó a la CGR a

elaborar conjuntamente con la CGN, una propuesta de proyecto de Ley,

posteriormente avalada por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, con el fin

de habilitar competencias para que la administración, durante un periodo

determinado, pudiera depurar saldos insolutos que a través de la normatividad

24
vigente no era posible lograr, y de esa manera evitar que no se contara con

información razonable para una adecuada administración pública .

Antecedentes normativos relacionados con el tema , se remontan a la expedición

de la Ley 94 de 1928, referida a la condonación de deudas a favor de la Nación.

Posteriormente, el Decreto Extraordinario 911 de 1932, autorizó al Contralor

General para fenecer y cancelar “todas las cuentas personales” corres pondientes a

los años anteriores a 1923 que resultaban difícil establecer por diferentes causas.

Veintiún años más tarde el Decreto Ley 3219 de 1953, sobre ejercicio de

jurisdicción coactiva, ordenó dar por terminado juicios ejecutivos y el archivo de

negocios menores de cien pesos.

Paradójicamente, como si fuera propio de una administración pública caracterizada

por la captación de voluminosos recursos, todas las normas que al respecto se

dictaron en el pasado sobre este tema, pretendían favorecer, de a lguna manera, a

las personas con acreencias a favor del tesoro público. Transcurrieron casi

cincuenta años para poder contar con un ordenamiento legal que no busca borrón

y cuenta nueva, sino, poder establecer la verdadera situación financiera del sector

público y de cada órgano que lo integra.

Tanto la CGR como la CGN, estuvieron siempre pendientes de esta trascendental

iniciativa. Después de surtir todo el proceso legislativo, el Congreso de la República

25
promulgó la Ley 716 de 2001, “Por la cual se expi den normas para el saneamiento

de la información contable en el sector público ...”.

Ahora bien, para poder interpretar la mencionada Ley, es necesario que

analicemos las razones que motivaron al legislativo a la expedición de la Ley de

Saneamiento Contable, las cuales se focalizan al hecho de que en los estados

financieros de las entidades públicas, figuran saldos con una antigüedad

significativa sin contar a la fecha con un mecanismo técnico ni legal que permita su

depuración definitiva.

7.2. NORMAS GENERALES

Como se había advertido en la justificación de este trabajo, la falta de

razonabilidad en los estados contables de los entes públicos, se origina desde la

elaboración del primer Balance General de la Nación, al momento de obtener los

saldos iniciales.

La Contaduría General de la Nación, consciente de la situación planteada, y con el

fin de darle razonabilidad a la información, expidió en el año 1996 la Circular

Externa 013, con cual establece los parámetros mínimos que deben aplicar los

entes públicos para que su información financiera, económica y social, contuviera

26
con las características y requisitos mínimos de calidad que garantizarán el

cumplimiento de los objetivos de la Contabilidad Pública.

Pero infortunadamente, el temor de los administradores públicos a que les

involucrara en procesos de responsabilidad fiscal, por detrimento en el patrimonio

de los entes que representaban, hizo que esta norma no fuera aplicada por la gran

mayoría de entes estatales.

De otra parte, con la ejecución de las auditorías integrales, las Contralorías tanto

Nacional como Territoriales, evidenciaron la falta de razonabilidad en la

información, situación que junto con los análisis realizados por la Contaduría

General de la Nación mediante la evaluación institucion al, permitió que se realizara

una alianza estratégica entre estas dos entidades para presentar ante el Congreso

de la República el proyecto de Ley de lo que más tarde se convirtió en la llamada

Ley de Saneamiento contable.

A continuación se presenta el desarrollo normativo del proceso de saneamiento

contable en estricto orden cronológico, con lo cual pretendemos dar a conocer la

intención que ha tenido el órgano legislativo como el Gobierno Nacional para

garantizar la adecuada aplicación de la Ley y el cum plimiento de sus objetivos.

27
7.2.1. LEY 716 DE 2001

Con la expedición de esta Ley, el Congreso de la República estableció la

obligatoriedad por parte de las entidades públicas de adelantar las gestiones

administrativas necesarias para depurar la información con table, con el fin de que

en los estados financieros se revele en forma consistente y razonable la realidad

económica, financiera y patrimonial del Estado.

Adicionalmente, dispuso que los entes públicos deben adelantar acciones que

permitan establecer la e xistencia real de bienes, derechos y obligaciones, a efectos

de depurar y castigar los valores que presentan un estado de cobranza o pago

incierto para eliminarlos o incorporarlos, según sea su efecto en el patrimonio

público.

Tal como lo establece el artículo 4º. de la Ley, las entidades públicas depurarán los

valores contables que resulten de la actuación anterior, cuando se cumpla algunas

de las siguientes condiciones:

• Los valores que afectan la situación patrimonial y no representan derechos,

bienes u obligaciones ciertos para la entidad.

• Los derechos u obligaciones que no obstante su existencia, no es posible

ejercer los derechos por jurisdicción coactiva.

28
• Que correspondan a derechos u obligaciones con una antigüedad tal que no

es posible ejercer su exigibilidad, por cuanto operan los fenómenos de

prescripción o caducidad.

• Los derechos u obligaciones que carecen de documentos soportes idóneos

que permitan adelantar los procedimientos pertinentes para su cobro o

pago.

• Cuando no haya sido posible legalme nte imputarle a persona alguna el valor

por pérdida de los bienes o derechos.

• Cuando evaluada y establecida la relación costo beneficio resulte más

oneroso adelantar el proceso de que se trate.

De otra parte, la precitada Ley establece sobre quién recae la responsabilidad

sobre el proceso de saneamiento contable, la cual para el caso de las entidades

públicas del orden Central, será sobre el jefe o el Director de la entidad, y para el

caso de los organismos descentralizados, será sobre el Máximo Órgano Col egiado

de Dirección y el Director de la entidad.

Cómo complemento la Ley determina que las responsabilidades para los

administradores públicos se darán en el caso de la no aplicación del proceso de

saneamiento contable o la utilización indebida de las facultades otorgadas por la

Ley, lo cual implica responsabilidades desde el punto de vista administrativo y

disciplinario.

29
Cabe anotar, que esta Ley tiene unas características que van a permitir el

cumplimiento de su objetivo cuales son, las relacionadas con la temporalidad, no

es una Ley de punto final y es una Ley de carácter prevalente.

Esta Ley, de acuerdo con el artículo que determina su vigencia tendrá aplicación

hasta el 31 de diciembre del año 2003, pero dado el precario grado de avance en

el proceso de una mayoría significativa de entes públicos, se incorporó en el texto

de la Ley de la Reforma Tributaria del año 2004, “Ley 863 de 2003” un articulado

que permitió la ampliación de su primera vigencia hasta el 31 de diciembre del año

2005.

Teniendo en cuenta que en el desarrollo del proceso de saneamiento contable se

van a identificar una serie de partidas que representan bienes y derechos que de

acuerdo con los análisis realizados se podrá determinar si esos bienes son

susceptibles de retiro de la contabilidad por la acción negligente de los servidores

públicos que los tenían bajo su responsabilidad, la Ley dispone que el

Representante Legal deberá iniciar los trámites administrativos necesarios para

informar a las autoridades competentes, para que esta s en el ámbito de su

jurisdicción desarrollen las acción correspondientes desde el punto de vista fiscal,

disciplinario y penal.

30
Ahora bien, el artículo 9º de la Ley 716 dispone que esta es de carácter

prevalente, lo que implica que lo establecido en est a Ley se aplicará de preferencia

sobre las disposiciones especiales previstas para las entidades públicas, lo que

permite que se avance significativamente en la aplicación del proceso, siempre y

cuando se atienda la normatividad correspondiente.

7.2.2. LEY 863 DE 2003

Cómo se había advertido anteriormente, y dado el grado de avance del proceso de

saneamiento contable faltando pocos meses para el término de la vigencia de la

Ley 716 de 2001, el Gobierno Nacional propuso al Congreso de la República

ampliar su aplicación hasta el año 2005, lo cual, se incorporó en los artículos 65,

66 y 67 de la Ley 863 del 2003.

7.2.3. LEY 901 DE 2004

Debido a que en la Ley 716 de 2001 no se incorporaron factores necesarios para

permitir la legalización de los bienes inmuebles por parte de los entes públicos y

otros temas necesarios para realizar el seguimiento al proceso por parte de los

entes públicos competentes, el Congreso de la República aprobó la Ley 901 de

31
2004, por medio de la cual se prorroga la vigencia de la Ley 716 de 2. 001,

prorrogada y modificada por la Ley 863 de 2003 y se modifican algunas

disposiciones:

Como características principales de esta Ley podemos destacar que da prorroga

hasta el 31 de diciembre de 2005, la vigencia de varios artículos de la Ley 716,

entre ellos los numero; 1º, 2º, 3º,4º,5º, 6º, 7º, 8º, 9º, 10º, 11º y 17º.

Adicionalmente, establece que la Procuraduría General de la Nación y demás

autoridades disciplinarias realizarán, las correspondientes investigaciones en contra

de los representantes lega les y miembros del máximo órgano colegiado de

dirección, donde aplique esta ley por no haber adelantado el proceso de

Saneamiento Contable de las entidades y organismos públicos bajo su dirección en

la vigencia inicial de la Ley, con base en los informes r emitidos por la Contaduría

General de la Nación, la Contraloría General de la República o por la autoridad

fiscal correspondiente.

De otra parte, la Ley modificó y adicionó el artículo 4º de la Ley 716, estableciendo

las siguientes condiciones para la depuración de saldos contables:

Valores que afecten la situación patrimonial y no representan derechos, bienes u

obligaciones ciertos para la entidad.

32
D erechos u obligaciones que no obstante su existencia no es posible realizarlos

mediante la jurisdicción coactiva.

Derechos u obligaciones respecto de los cuales no es posible ejercer su cobro o

pago, por cuanto opera alguna causal relacionada con su extinción, según sea el

caso

Derechos u obligaciones que carecen de documentos soporte idóneos a través de

los cuales se puedan adelantar los procedimientos pertinentes para obtener su

cobro o pago.

Cuando no haya sido legalmente posible imputarle a alguna persona el valor por la

perdida de los bienes o derechos.

Cuando evaluada y establecida la relación costo-beneficio resulte más oneroso

adelantar el proceso de que se trate.

Los inmuebles que carecen de título de propiedad idóneo y respecto de los cuales

sea necesario llevar a cabo el proceso de titulación para incorporar o eliminar da la

información contable, según corresponda.

En su estructura se pueden identificar tres parágrafos, donde el primero ratifica la

33
posibilidad de contratación del proceso, el segundo precisa sobre el tratamiento de

aquellas partidas cuya cuantía no supera un valor mayor a 5 sala rios mínimos,

para lo cual se requiere la simple prueba sumatoria para ser depurados, y el

tercero, la novedad de incorporar en un boletín semestral de deudores morosos,

como un instrumento más de saneamiento a la cartera pública cuando la deuda

supere los 5 salarios mínimos legales vigentes, y presente una morosidad mayor a

6 meses.

En esta Ley se precisa el procedimiento a seguir para dar cumplimiento al literal g)

del artículo 4º de la Ley 716, en lo relacionado con la obtención de los títulos de

propie dad idóneos, respecto de aquellos bienes inmuebles que aparecen

registrados contablemente, y de los cuales se carezca del derecho de dominio, o

de identidad catastral y de existencia jurídica.

De otra parte, se modificó el Artículo 5 de la ley 716, en lo relacionado con la

competencia y responsabilidad administrativa, que tienen los jefes o directores de

entidades y los Comités, juntas o consejos directivos, como directos responsables

de informar detalladamente anualmente sobre la depuración al poder legislativo

correspondiente, como son el Congreso de la República, las asambleas

Departamentales y los Concejos Municipales.

34
7.2.4. LEY 998 DE 2005

Debido a que un significativo número de entidades públicas no alcanzaron a

desarrollar el 100% de las acciones admi nistrativas necesarias para la depuración y

saneamiento de las partidas que representan bienes, derechos y obligaciones, y

específicamente lo relacionado con la legalización de los bienes inmuebles y la

actualización de los pasivos laborales, el Congreso de la República aprobó la Ley

998 de 2005, en la cual se prorroga por un año más la aplicación de la Ley de

Saneamiento Contable, es decir su aplicación será hasta el 31 de diciembre de

2006.

7.2.5. DECRETO 1282 DE 2000

Decreto que reglamenta la Ley 716, estableciendo la conformación de Comités

Técnicos de Saneamiento Contable, y asignándole sus funciones.

De otra parte, establece que las actuaciones administrativas adelantadas en el

Saneamiento Contable deben quedar adecuadamente soportadas en estudios

técnicos , los cuales deben formar parte de las actas de aprobación suscritas por

los jefes de los organismos o del máximo órgano colegiado, para respaldar las

decisiones adoptadas.

35
Este Decreto precisa que se entiende por información contable depurada,

determinan do que las entidades y organismos del sector público deberán

establecer la existencia real de bienes, derechos y obligaciones que afecten su

patrimonio público con corte a 31 de diciembre de 2000, depurando y castigando

los valores que presenten un estado de cobranza o pago incierto a fin de buscar su

eliminación o incorporación en la respectiva contabilidad.

Adicionalmente, precisa quienes deben aplicar la Ley de Saneamiento Contable,

disponiendo que el campo de aplicación de la Ley, comprende los organis mos que

conforman las distintas ramas del poder público en el nivel nacional; las entidades

de control, organismos electorales, entidades y organismos estatales sujetos a

régimen especial, entidades descentralizadas territorialmente o por servicios y

cualquier otra entidad que maneje o administre recursos públicos y sólo en lo

relacionado con éstos; siempre y cuando hagan parte del balance general del

sector público.

Para garantizar la definición de hacía donde debe dirigirse el proceso de

saneamiento contable, este Decreto dispuso que los representantes legales de las

entidades y organismos públicos obligados al saneamiento contable, establecerán

las políticas y procedimientos necesarios para garantizar que se identifiquen,

clasifiquen y determinen, previo estudio sustentado, las respectivas partidas

contables que deberán ser sometidas a consideración de la instancia

36
correspondiente para su castigo o depuración.

Con el fin de garantizar el adecuado registro contable de las operaciones

generadas en el proce so de saneamiento contable, el Decreto 1282 de 2003, en su

Artículo 8°, dispuso que el Contador General de la Nación incorpore y modifique el

Plan General de Contabilidad Pública, PGCP, y establezca los procedimientos

contables que se requieran para el debido registro de la depuración contable que

realicen los distintos entes públicos.

De forma complementaria, dispuso que las actuaciones administrativas que se

adelanten para el saneamiento contable, deberán quedar adecuadamente

soportadas en estudios técni cos necesarios para sustentar la depuración y

formarán parte de las actas de aprobación suscritas por los jefes de los organismos

o los integrantes del máximo organismo colegiado, según corresponda.

En cuanto a la actualización de los valores revelados en los estados contables, en

el artículo 10º. da la potestad para que los entes públicos ajusten los saldos de las

cuentas de los estados financieros, a los valores que se establezcan en el proceso

de depuración contable. Dicho ajuste se soportará con las re spectivas actas que se

elaboren y aprueben por los comités técnicos de saneamiento y con un informe

técnico final, suscrito por sus integrantes, en el cual se presenten los resultados

del proceso.

37
7.2.6. DECRETO 1914 DE JULIO DE 2003

Este Decreto precisa entre otros aspectos, el relacionado con la información objeto

de depuración, estableciendo que toda la información que forma parte de los

estados contables hasta la fecha de vigencia de la Ley 716 del 24 de diciembre de

2001 será objeto de depuración.

De otra parte, hace la precisión respecto a que los registros contables derivados

del proceso de saneamiento contable no tendrán efectos fiscales de conformidad

con la reglamentación que expida el Contador General de la Nación.

Un aspecto fundamental que reglamenta este Decreto es el relacionado con la

aplicación de las normas de auditoría en el desarrollo de los procedimientos

relacionados con el saneamiento de la información contable, para la obtención de

una información contable que refleje razonablemente la situación financiera,

económica y patrimonial de los entes públicos, soportándolo en papeles de trabajo

que técnicamente evidencien las actividades llevadas a cabo.

Como complemento, el Decreto faculta a la Contaduría General de la Nación para

que en ejercicio de sus funciones, lleve a cabo las labores de inspección que sean

necesarias y le permitan determinar el cumplimiento de las disposiciones

relacionadas con el proceso de saneamiento contable y, en consecuencia, que los

38
entes públicos suministran información contable que refleja la realidad económica,

financiera y patrimonial. En cumplimiento de dichas labores también podrá solicitar

información relativa al proceso de saneamiento contable de cualquier entidad

pública, mediante la solicitud de informes sobre los avances logrados en desarrollo

del proceso de saneamiento de la información contable.

En relación con el apoyo que debe prestar la Contaduría General de la Nación, el

Decreto dispone que ésta entidad coadyuvará el proceso de saneamiento de la

información contable con actividades de capacitación y asistencia técnica, sin que

ello le obligue a formar parte del comité técnico de saneamiento, ni le genere

responsabilidad alguna por el incumplimiento de las entidades respecto del

saneamiento contable a que se encuentran obligadas.

7.2.7. DECRETO 1014 DE 2005

Con el fin de precisar el tratamiento que se debe dar al artículo 3o de la Ley 901

de 2004, para efectos de la titulación de bienes inmuebles, este Decreto establece

los pasos y requisitos que se deben ab ordar y cumplir para obtener el documento

soporte idóneo que permita evidenciar la pr opiedad de los inmuebles baldíos

rurales o urbanos, según se trate, que hayan sido ocupados o poseídos por una

entidad pública, con ánimo de dueño durante un período no inferior a diez (10) años.

39
Al igual que para aquellos bienes inmuebles que sin haber sido ocupados o

poseídos en el mismo período por una entidad pública, estén destinados a la

prestación de un servicio público o afectado a proyectos de desarrollo en beneficio

de la comunidad.

Adicionalmente el Decreto establece el tratamiento que se debe dar cuando se

requiera obtener el título de los bienes que carecen de identidad catastral y registral .

Constituye factor importante en este Decreto el hecho de que establec e el

mecanismo para legalizar los bienes cuando provienen de la transferencia realizada

por una colectividad, comunidad o un tercero público o privado. Si entre los

otorgantes se encuentra un tercero público, la transferencia del dominio respecto

de este se considerará a título de cesión.

Ahora bien, debido a que muchos entes públicos se encuentran bienes que han

sido construidos con recursos propios, el artículo 6o. del Decreto en mención

establece la forma de legalizar estas construcci ones, estableciend o que el acta de

liquidación del contrato de obra o el documento que haga sus veces, se elevará a

escritura pública, en la cual se dejará expresa constancia de los datos de registro

del inmueble de que se trate, la cual una vez inscrita en la Oficina de Re gistro de

Instrumentos Públicos competente será título idóneo para legalizar la construcción,

sin consideración a que la entidad pública sea o no titular del derecho real de

dominio del bien inmueble sobre el cual se construyó, en virtud de lo establecido

en el artículo 3o de la Ley 901 de 2004.

40
7.3. NORMAS CONTABLES:

7.3.1. Circular Externa 050 de 2002

La Contaduría General de la Nación, con el fin de reglamentar el procedimiento

contable, expidió la circular 050 de 2002 la cual viene derogando la Circular

Externa 032 de 2000.

Como objetivo se propuso, inducir el proceso de identificación de las partidas

inconsistentes que afectan los estados contables institucionales, con el objetivo de

revelar la magnitud y el origen de los problemas, y generar el espacio que co nlleva

a que se adelanten las acciones pertinentes y la expedición de los actos

administrativos que se requieran, para que las áreas contables procedan a efectuar

los ajustes que en cada caso correspondan, y definir los lineamientos generales

que contribuyan a la depuración de saldos antiguos y permitan la incorporación de

operaciones ciertas y verificables frente a la existencia de bienes, derechos y

obligaciones.

Se deben depurar:

• Saldos pendientes de conciliar

• Valores pendientes de recaudo o pago con e levada antigüedad

41
• Acreedores y deudores no identificados

• Diferencias entre las existencias físicas de bienes y derechos y los saldos

contables

• Inexistencia de comprobantes de contabilidad o de sus documentos soporte

• Omisión en liquidación de contrato

Para evitar y solucionar todas las falencias y deficiencias de Orden Contable,

deberá aplicarse el procedimiento relativo al debido reconocimiento, valuación y

revelación de las operaciones financieras, económicas y sociales, sin perjuicio de

las acciones fiscales correspondientes a las responsabilidades del cargo de los

funcionarios públicos.

Las acciones administrativas correspondientes se encaminan así:

• Efectuar exploración exhaustiva de archivos de los documentos soporte,

interno y externos, si se carece de esta se deben utilizar mecanismos

alternos de comprobación, como circulares y requerimientos a los entes o

terceros directa o indirectamente involucrados.

• Desarrollar procedimientos y estrategias especiales para garantizar la

evaluación, documentación y así mismo determinar las correcciones,

reclasificaciones y ajustes correspondientes, sin perjuicio de seguimiento

42
que debe adelantar la Oficina de Control Interno.

• Reproducir los documentos soporte, comprobantes de contabilidad, en

operaciones no regi stradas que hayan afectado la realidad económica de la

entidad, o en su caso obtener copias de los documentos faltantes cuando

son de origen externo.

• Adelantar los procesos de Liquidación de contratos a efectos de determinar

los derechos y obligaciones fi nales frente a terceros.

• Todos los demás que se consideren de gestión administrativa para efectos

de adelantar el proceso de depuración contable.

El tratamiento contable a aplicar es:

• Reclasificación de saldos activos a la cuenta 1996 “bienes y derechos de

responsabilidad administrativa”. Y de saldos pasivos a la cuenta 2996

“Obligaciones en investigación administrativa”.

• Constitución de Provisiones: Los bienes y derechos susceptibles de

aprovisionarse, beberán registrar una provisión equivalente al riesgo

probable o contingencia de pérdida para el ente público, la cual deberá

43
ajustarse permanentemente de acuerdo con los avances que se registren en

el proceso de depuración.

• Castigo de Activos: Los responsables deberán según la Ley ordenar el

castigo del saldo de los activos y sus cuentas complementarias, afectando a

su vez las provisiones constituidas, Debito1997 y Crédito 1996 “bienes y

derechos en investigación administrativa”.

• Ajuste a saldos de la cuenta del Pasivo: Los saldos que correspondan a

obligaciones, no pondrán desconocerse, en tanto que se concluya que

corresponden a pasivos ciertos, pero si se encuentra en alguna de las

causales del Artículo 4º de la Ley 716, y la Ley 901 de 2.004, deberán

depurarse, si no corresponde estos pasivos a obligaciones ciertas podrán

tratarse como aprovechamiento o recuperaciones determinados en el

proceso de depuración y sustentados en los actos administrativos,

registrándole en las cunetas de orden 9390 y 9915, con criterio propio de la

entidad.

Los estados contables deberán quedar depurados totalmente a 31 de diciembre de

2003.

44
7.3.2. Carta Circular 042 de 2003

El objetivo es efectuar un seguimiento al proceso de depuración de la información

contable pública, donde las entidades públicas deberán remitir una comunicación a

la Contaduría General de la Nación en la cual se informe sobre aspectos

relacionados con el proceso de saneamiento de la información financiera, contable

de la entidad, suscrita por el respectivo representante legal y el contador.

Los siguientes aspectos debe contener la comunicación:

• El mecanismo por el cual el representante legal ha definido las políticas y ha

establecido los procedimientos necesarios para identificar, clasificar y

determinar las partidas contables que serán objeto de depuraci ón, mediante

mecanismos de incorporación o anulación.

• Acto administrativo de creación y conformación del Comité Técnico de

saneamiento contable.

• Fecha de expedición del reglamento del Comité Técnico de saneamiento

contable.

• Valor a nivel de cuenta, de las partidas castigadas o incorporadas en bienes,

derechos y obligaciones.

• Valor a nivel de cuenta de las partidas castigadas o incorporadas para los

montos superiores de 5 salarios mínimos legales mensuales.

45
• Valor a nivel de cuenta, de las partidas reconocidas o incorporadas como

bienes, derechos u obligaciones, derivadas del proceso de depuración

contable.

• Estimación del porcentaje de avance en el proceso de depuración.

• Estimación de la fecha probable determinación del proceso de depuración,

de acuerdo con los cronogramas establecidos por cada entidad, dentro del

plazo prescrito por la Ley.

• Existencia de la documentación correspondiente.

Finalmente la Circular Externa 033 de 2.002, hace una síntesis referencial de las

normas expedidas por la Contaduría General de l a Nación que tienen impacto en

los procesos de saneamiento contable

7.3.3. Circular Externa No. 056 de 2004

Como consecuencia de la ampliación del plazo para el desarrollo del proceso de

saneamiento contable, y teniendo en cuenta el grado de avance y la problemática

en su aplicación, la Contaduría General de la Nación expidió la Circular Externa No.

056 de 2004 mediante la cual se dictan los procedimientos que deben ser

aplicados en el proceso de saneamiento contable, en cumplimiento de la Ley 716

de 2001 , prorrogada por la Ley 863 de 2003, y los Decretos Reglamentarios 1282

46
de 2002, 1914 y 1915 de 2003, y tratamiento contable de los valores registrados

como ajustes por inflación y de los saldos globales registrados en las cuentas de

Propiedad, Planta y Equipo.

Esta norma pretende orientar a las entidades para que adelanten la gestión

administrativa necesaria para la depuración de la información contable y para la

culminación completa del proceso de saneamiento, de acuerdo con lo establecido

en la Ley 716 de 2001, prorrogada por la Ley 863 de 2003.

Adicionalmente, definir los registros contables que deben realizar las entidades

públicas en el proceso de saneamiento de la información contable, revelando en

una cuenta patrimonial el efecto neto de los valores depurados, precisando el

tratamiento contable de los conceptos que han sido incluidos en el proceso de

investigación administrativa y orientar el proceso de saneamiento contable hasta

su culminación.

Así como, la definición de los lineamientos generales que contribuyan a la

depuración y saneamiento de saldos antiguos, a la vez que permitan la

incorporación de operaciones ciertas y verificables frente a la existencia de bienes,

derechos y obligaciones.

Finalmente, buscó definir el procedimiento contable para ajustar los saldos de las

47
propiedades, planta y equipo registrados en forma global, con los valores

determinados en la toma física de bienes.

Buscando dar claridad a los términos que se utilizan en el desarrollo del proceso de

saneamiento contable, en esta norma se hacen las precisiones relacionadas con el

proceso.

En esta parte se presentan, en el contexto de la Ley, los conceptos de: Gestión

administrativa, Depuración contable, Saneamiento contable, Normas de auditoría,

Técnicas de auditoría, Papeles de trabajo, Efectos fiscales y Valor en libros.

Finalmente, la circular externa establece los procedimientos necesarios para el

reconocimiento y revelación, que las entidades públicas deberán aplicar, teniendo

en cuenta que los mismos deberán ampararse en actos administrativos, en los

cuales se explicará en forma detallada entre otros aspectos, el origen de la

decisión, los documentos técnicos que demuestren el estudio adelantado y los

resultados de la investigación efectuada, observando que son de origen y efecto

contable y no pretenden sustituir el ejercicio de las acciones administrativas,

disciplinarias o fiscales que puedan derivarse, por la responsabilidad u omisión de

funciones de los servidores públicos, como resultado de las operaciones que

afecten el patrimonio del sector público.

48
8. ANTECEDENTES BIBLIOGRÁFICOS

Haciendo un análisis de artículos que han tratado sobre el tema de saneamiento

contable, encontramos dos de ellos publicados en la revista “Campaña

Anticorrupción ”, escritos por el doctor Iván Jesús Castillo Caicedo1, los cuales se

presenta n a continuación:

8.1. EL SANEAMIENTO CONTABLE: PROCESO CONTÍNUO DE BENEFICIO

INCALCULABLE

Introducción

A través de estas líneas quiero hacer un corto recorrido por el proceso que sin

lugar a dudas es para mí, el más importante de todos cuantos se hayan iniciado en

la vida económica, financiera y contable en el país: el saneamiento contable.

1
* Coordinador de la Subcontaduría General y de Investigación de la Contaduría
General de la Nación .

49
Está afirmación está sustentada en los beneficios y repercusiones positivas que en

el futuro representará para el sector público en las decisiones de tipo económico,

financiero e inclusive de índole administrativo, que se deban tomar, por cuanto

disponer de información contable real, razonable y verificable, apoyará los

procesos de planificación económica, de gestión financiera y de medición de los

resultados, pero por sobre todo, será una herramienta fundamental en la lucha

contra la corrupción.

En este artículo se presenta en orden lógico el proceso de saneamiento contable,

desde sus antecedentes, la expedición de la Ley 716 y sus decretos

reglamentarios, el apoyo de la Contaduría General de la Nación y de otras

entidades al proceso, el avance que hoy se advierte, su importancia, el futuro con

la posibilidad de prorrogarse la vigencia de la norma.

Aunque sin lugar a dudas muchos aspectos se pudieron haber quedado por fuera,

considero que se han destacados los más importes y significativos.

Antecedentes

Hablar hoy del proceso de saneamiento contable, hace necesario remitirnos a

conocer los antecedente s y las razones que llevaron al Congreso de la República

en el año 2001 a aprobar la Ley 716, cuyo proyecto fue trabajado en forma

50
conjunta entre la Contaduría General de la Nación y Contraloría General de la

República, entidades responsables de la elabora ción del Balance General de la

Nación y de la auditoría al mismo, respectivamente.

Corría el año 1995, y el Gobierno Nacional mediante los decretos 085 y 086 crea

en el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, la Dirección General de la

Contabilidad Pública y define su planta de personal, estableciendo para esta

dependencia, las funciones asignadas al Contador en el Artículo 354 de la

Constitución Política.

En cumplimiento de las funciones encomendadas ésta Dirección concentra sus

esfuerzos en la exp edición del Plan General de Contabilidad Pública, el cual tuvo

lugar a finales del mencionado año, mediante la Resolución 4444, proceso que se

llevó a cabo, con la ayuda de más de un centenar de profesionales de la

Contaduría, la mayoría de los cuales repr esentaban a las principales entidades

públicas, tanto nacionales como territoriales.

En otro campo en el cual trabajó la Dirección fue en el de la preparación y

elaboración del Balance General de la Nación y del Sector Público, para lo cual, se

expidieron a partir del mes de agosto de 1995, las Resoluciones 3425, 3694 y las

circulares externas 001, 002 y 003, con las que se solicita a las entidades públicas

nacionales y territoriales, tanto del nivel central (Ministerios, municipios,

departamentos, entre otros), como descentralizadas (Establecimientos públicos,

51
Empresas Industriales y Comerciales, Sociedades de Economía Mixta, Empresas

Sociales del Estado, Empresas de Servicios Públicos), la preparación, elaboración y

envío de lo que se llamó el “Balance de Apertura” de la información

correspondiente al 31 de diciembre de 1995, cuyo plazo se fijó para el 15 de

febrero del año 1996.

Es de anotar que previamente se había realizado en el país un diagnóstico del

número de entidades que tenían verdaderos sistemas de información contable, el

cual daba unos resultados nada alagadores, al establecerse que el 95% de las

entidades públicas del país no llevaban contabilidad.

Como puede observarse, el tiempo que disponían las entidades para conformar su

primer Balance de acuerdo con las normas recientemente expedidas por la

Dirección General de Contabilidad Pública, era bastante apretado y significó para

las entidades, principalmente para las territoriales, que no tenían procesos

contables, el tener que contratar a prof esionales de la Contaduría Pública, para

realizar esta labor en tan poco tiempo. A lo anterior, se une la poca experiencia de

estos profesionales en el manejo contable del sector público.

Con el fin de cumplir con la obligación legal, antes que en present ar una

información razonable, las entidades incluyeron dentro de este primer balance,

información que en la mayoría de entidades no reunía los requisitos mínimos de

52
consistencia exigidos en el proceso contable, como son el disponer de los

documentos soportes para la incorporación de bienes, derechos y obligaciones, el

incluir información con todo el detalle necesario para un seguimiento posterior, el

disponer de inventarios actualizados, entre otros.

Con el transcurso del tiempo se fue haciendo más evident e la falta de

razonabilidad de la información contable que presentaban las entidades a la CGN,

situación que ha sido advertida por instituciones como la Contraloría General de la

República, en sus procesos de auditoría financiera, por las oficinas de control

interno en los informes que preparaban, por los contadores de las entidades

públicas en las notas a los estados contables, por los revisores fiscales en sus

diferentes dictámenes, y por la misma CGN, en los procesos de asesoría, asistencia

técnica y capacitación en los que participaba.

Estos informes daban cuenta de una información contable del sector público que

arrastraba situaciones de tiempos pasados, que la presentaban sin la consistencia

necesaria y sin la confiabilidad requerida, a pesar de que l as entidades disponían

de normas contables expedidas por el Contador General de la Nación, que les

permitían y les exigían realizar los ajustes, reclasificaciones, incorporaciones o baja

de bienes, cuando sea del caso, para mostrar una información real.

53
Algunas de las consecuencias de lo anterior, son que la información contable no

fue utilizada, en muchas entidades, principalmente las entidades de gobierno,

como la herramienta gerencial que apoya los procesos de toma de decisiones; la

pérdida del control de los bienes; el desconocimiento del valor razonable de los

obligaciones del sector público, como por ejemplo su pasivo pensional y la deuda

pública.

La expedición de la Ley 716 de 2001

Preocupados por esta situación, y como producto de los trabajos

interinstitucionales entre la Contaduría General de la Nación y la Contraloría

General de la República, se pensó en la elaboración de un proyecto de ley que le

permitiera a las entidades públicas, sanear su información contable, y revelar a

partir de allí, información consistente y razonable, el cual fue presentado en el año

1999.

Fue arduo el debate en el Congreso para hacer conocer y entender a los señores

parlamentarios y a otros organismos de control, que el país necesitaba y

reclamaba esta norma, que era urgente su expedición para la organización de las

áreas financieras y de los sistemas de información institucionales, y para la lucha

contra la corrupción, por cuanto está demostrado que el desorden contable hace

presa fácil los problemas de pérdidas de bienes y fondos públicos.

54
El sentido patriótico se impuso finalmente, ante la necesidad de disponer de

información confiable y útil en la toma de decisiones del gobierno, y fue así como

el 21 de diciembre del año 2001 se expide la Ley 716. No obstante, s e precisó en

el texto normativo que no se trataba de borrón y cuenta nueva, ni de una amnistía

para las irregularidades cometidas en el pasado, lo era motivo de preocupación en

los debates del Congreso, sino que se obligó a ser puestas en conocimiento de l as

respectivas autoridades, las irregularidades advertidas en ejecución del proceso.

Los aspectos básicos de la norma están en su artículo 1º cuando manifiesta: “Del

objeto. La presente ley regula la obligatoriedad de los entes del sector público de

adelantar las gestiones administrativas necesarias para depurar la información

contable, de manera que en los estados financieros se revele en forma fidedigna la

realidad económica, financiera y patrimonial de las entidades públicas ”.

Por su parte, en el artículo 6º se anota: “Acciones complementarias. Los términos

de la presente ley no sustituyen el ejercicio de las acciones legales pertinentes que

se desprendan por la acción irregular u omisión de los deberes y responsabilidades

de los servidores públicos o terceros involucrados.”

Importante en esta ley es lo relacionado con la responsabilidad y la competencia

en la ejecución del proceso, cuando establece en forma expresa que le

corresponde al Representante Legal en las entidades del sector central, y al

55
máxi mo organismo colegiado de dirección y el director, gerente o presidente,

según se denomine en las entidades descentralizadas.

El Congreso consideró que esta norma no podría ser indefinida en el tiempo, por

ello, le otorgó una característica de temporalida d, y estableció la vigencia para dos

años, los cuales culminan el próximo 31 de diciembre del 2003. Igualmente, le dio

una fuerza vinculante, al establecer su prevalencia jurídica frente a otras

disposiciones específicas para las entidades públicas.

Apoyo de la Contaduría General de la Nación al proceso

La misma norma le establece a la Contaduría General de la Nación

responsabilidades a cumplir, cuando en el Artículo 7º expresa que, ésta entidad

establecerá los procedimientos para el registro contable de las operaciones que se

deriven de la aplicación de la ley.

En cumplimiento de este mandato la CGN expidió en el año 2002 la Circular

Externa 050, en la cual se precisan los procedimientos a realizar y los registros

contables que deben efectuarse en este proceso de saneamiento contable.

Ahora bien, más allá de esta función normativa, la CGN ha desplegado durante

todo el año 2003 un proceso de difusión y capacitación sobre ésta norma, teniendo

56
en cuenta, que durante el año 2002, fue muy poco el avance que presentaron las

entidades.

Dentro de este proceso se contó con el apoyo financiero y logístico de la firma

Cassalls y Asociados, quien patrocinó la realización de 16 eventos a nivel nacional,

a los cuales se hicieron presente 782 entes públicos, representados por 2.881

servidores públicos, con un gran éxito, como se puede advertir en las evaluaciones

de los mismos.

También se han adelantado otros procesos o seminarios de capacitación en

distintas ciudades del país, con recursos propios de la CGN y en mu chos casos con

recursos de las entidades interesadas en el tema.

De otra parte, han sido recepcionadas hasta el mes de noviembre de 2003, 161

consultas sobre el proceso de saneamiento contable que fueron atendidas con la

debida oportunidad, haciendo clari dad sobre los procedimientos a realizar y los

registros contables que se deben efectuar.

En este sentido, y con el fin de hacer más dinámico el proceso de consulta y

respuestas, la CGN implementó en su página WEB, un link que permite a los entes

públicos formular sus inquietudes sobre este tema y obtener por esta misma vía la

respectiva respuesta.

57
En conjunto con la Contraloría General de la República se publicó en el mes de

julio de 2003 la Cartilla denominada “Saneamiento Contable – Guía Práctica”, en la

cual se presentan los antecedentes de la norma, se destaca el procedimiento

general que las entidades deben seguir para el saneamiento contable, se

incluyeron las preguntas más frecuentes y sus respetivas respuestas, se diseñaron

los diferentes formatos que las entidades deben diligenciar y se presentaron a

manera de ejemplo, algunos casos prácticos y su respectiva contabilización.

Se han realizado asistencias técnicas directamente a diferentes Comités de

Saneamiento Contable en algunas entidades, como po r ejemplo en la Cámara de

Representantes.

Importancia del proceso

Aunque la importancia del proceso está justificado en las exposiciones de motivos

de la misma Ley 716, no sobra anotar que depurar la información contable es

supremamente necesario para el país, en la medida que permitirá conocer la

verdadera situación financiera, económica y social, es decir la situación patrimonial

del sector público, con lo cual se podrán identificar en forma detallada, los bienes,

derechos y obligaciones ciertos de cada ente público, y por esa vía, se convertirá la

información saneada en una barrera infranqueable para ese devastador flagelo de

la corrupción, que el gobierno han venido combatiendo con todos sus esfuerzos.

58
Por ello, la contabilidad pública como un sistem a de información, se convierte en

una herramienta fundamental para el ejercicio del control público en todas sus

manifestaciones, de control interno, fiscal, disciplinario, político y ciudadano.

El saneamiento contable es importante porque la información real, ayudará a los

procesos de toma de decisiones administrativas, a una mejor planificación de la

gestión financiera, y servirá de base para la construcción de verdaderos

indicadores de la gestión de los gobernantes.

El saneamiento contable es importante en la medida que una información real

permite proyectar las necesidades de ahorro, inversión y financiamiento, facilita la

integración de los sistemas de información financiera y de los procesos

administrativos y coadyuva al fortalecimiento de una verdad era cultura contable.

Avance del proceso

Aunque la Ley 716 fue expedida a finales del año 2001, las entidades le dieron la

importancia del caso solo durante el año 2003, cuando el Contador General de la

Nación, Dr. Jairo Alberto Cano Pabón posesionado e n el cargo a partir del 7 de

enero de ese año, preocupado por el poco avance del proceso durante el año

2002, y por la proximidad de terminación de la vigencia de la norma, empezó a

59
gestionar a través de organismos o entidades públicas y privadas, la conse cución

recursos que permitieran emprender un proceso urgente de capacitación.

Producto de esas gestiones fueron los convenios con Casalls, Universidad de

Antioquia, Gobernación de Cundinamarca, entre otros.

El despliegue de la capacitación liderado por Contaduría General de la Nación,

contó con el apoyo irrestricto de otras instituciones como la Procuraduría General

de la Nación y la Contraloría General de la República, quienes desplazaron a varios

eventos a funcionarios a explicar la importancia del proceso y las implicaciones que

se podrían derivar de no acatar la norma.

Todo lo anterior, conllevó a generar una dinámica y una sinergia entre los distintos

entes públicos que a partir de ese momento le han puesto un mayor interés y

entusiasmo en el cumplimiento de la Ley.

Hoy se puede afirmar que el proceso avanza bien, sin desconocer que el año 2002

fue un año prácticamente perdido para la mayoría de entidades, quizá por no tener

la suficiente claridad en la aplicación procedimental de la norma.

Para hacer claridad y recordar la necesidad de adelantar el proceso de

saneamiento el Contador General de la Nación ha expedido varias normas

60
relacionadas, insistiendo con los representantes legales de las entidades para que

adelanten las acciones de depuración de la información. Estas normas son: circular

externa 050 del 2002, carta circular 042, 043 y 045, y el instructivo 015 de 2003.

Con éste último, se solicitó a las entidades informen sobre el avance del proceso

en cada una de ellas, a fecha 30 de septiembre. Aunque se está haciendo la

consolidación de esta información que enviaron las entidades, se puede afirmar

que el avance que demuestran las entidades es bien importante.

El futuro del proceso

La vigencia de la Ley 716 y dada su temporalidad vence el próximo 31 de

diciembre de 2003. Hemos manifestado que el proceso adquirió toda su dinámica

durante el año 2003 y dada su complejidad por la responsabilidad implícita en él,

tanto en el campo jurídico como en el campo procedimental, muchas entidades

públicas han manifestado su imposibilidad de culminar el proceso al término de la

vigencia de la ley.

Esta complejidad jurídica y procedimental se advierte básicamente en los procesos

de legalización de predios, es decir, el proceso de encontrar los documentos

soportes que permitan demostrar la propiedad de los bienes, por cuanto se ha

podido comprobar que en el sector público y especialmente en los entes

61
territoriales, los predios o bienes inmuebles no están legalizados, lo cual es una

situación jurídica no fácil de resolver.

Existen otros inconvenientes que las entidades han tenido que sortear, como por

ejemplo la consecución de la documentación que respalden los derechos u

obligaciones registradas desde años anteriores, la asignación de valores reales a

los inventarios de bienes, la individualización de estos inventarios, la determinación

de la prescripción o caducidad de derechos u obligaciones.

A lo anterior, debemos agregarle los inconvenientes de índole logísticos, como por

ejemplo la falta de personal en la entidad para realizar el proceso, la falta de

recursos presupuestales para su contratación, lo cual muchas entidades lo tomaron

como excusa para no empezarlo, situación que la misma Procuraduría aclaró en el

sentido que no podrían tomarse estas razones como excusas para incumplir la ley.

También se han hecho evidentes en algunas entidades públicas, situaciones como

el temor que le asiste a los comités técnicos de saneamiento y a los representantes

legales para tomar decisiones de sanear la información, como por ejemplo, dar de

baja o retirar de la contabilidad bienes, derechos y obligaciones inexistentes o

prescritos, con el argumento que pueden verse abocados a investigaciones de

responsabilidades fiscales, por parte de las contralorías.

62
Esta situación ha sido bien aclarada por la misma Contraloría General de la

República, cuando ha manifestado que lo importante del saneamiento es allegar

las pruebas y demostrar las acciones adelantadas para soportar legalmente las

decisiones tomadas. Se ha manifestado por esta entidad, que es responsabilidad

del representante legal poner en conocimiento de las autoridades de control las

presuntas irregularidades detectadas en el proceso para ser objeto de la respectiva

investigación.

Se ha manifestado por parte de la Contraloría General de la República, que si el

proceso está bien documentado y las decisiones tomadas se han hecho

cumpliendo con la norma, las entidades no deben tener ningún tipo de temor,

frente a lo realizado.

Posibilidad de prorrogar la Ley

Las enti dades han manifestado su deseo de que se amplíe la vigencia de la norma,

por la imposibilidad de culminar al 31 de diciembre de 2003 en forma exitosa el

proceso que ya iniciaron, dado principalmente por lo manifestado antes, lo de la

complejidad del proceso, lo del año 2002 que fue un año casi perdido para

arrancar, por la falta de recursos, por la falta de personal, poca difusión o

capacitación al comienzo.

63
Se han manifestado otras razones, como por ejemplo, que el año 2003 fue un año

electoral y que esta situación conllevó a que algunas administraciones,

básicamente en el orden territorial, y ante la proximidad de su retiro no le dieran

al proceso la importancia requerida.

Estas razones, y la necesidad de culminar un proceso que ya tiene un avance m uy

significativo para disponer de información real, motivaron al Gobierno Nacional a

presentar al Congreso un proyecto de Ley que amplíe la vigencia de la norma, por

otros dos años más, el cual está siguiendo su curso normal, y se aspira que antes

de terminar la presente legislatura, sea aprobada la Ley de prórroga.

Ahora bien, el proyecto presentado contempla otras situaciones distintas a la

prórroga, como por ejemplo, se incluyó dentro del texto, procedimientos para

agilizar los trámites de legalización de predios entre entes públicos, que como

hemos advertido, es sin duda el principal problema del saneamiento contable.

Se espera que el Congreso apruebe este proyecto con estos procedimientos, para

asegurarles a las entidades unos trámites muchos más fáciles para proceder a

legalizar las propiedades.

64
No obstante la posibilidad de la prórroga, la Procuraduría ha sido enfática en

afirmar que se iniciarán las investigaciones para aquellas entidades que no le han

dado cumplimento a la norma vigente.

Finalme nte, quiero terminar este artículo retomando la importancia que tiene para

el país, que el proceso culmine en forma exitosa, para lo cual se requiere que la

norma sea ampliada en su vigencia. Esa importancia está en el beneficio o las

ventajas que traerá el disponer de información real, razonable y verificable, tanto

para las autoridades económicas, políticas, de gestión, de control y en definitiva

para la sociedad civil, pero por sobre todo, para combatir ese cruel e indeseable

flagelo de la corrupción.

El segundo artículo relacionado con el tema, es presentado a continuación:

8.2. “CRÓNICA DE UN SANEAMIENTO ANUNCIADO”

EL SANEAMIENTO CONTABLE: PROCESO CONTÍNUO DE BENEFICIO


INCALCULABLE.

A través de estas líneas se hace un corto recorrido por el proceso que, sin lugar a

dudas, es el más importante de todos, dándose como estrategia de transparencia

en la vida económica, financiera y contable del país: el saneamiento contable.

65
Está afirmación está sustentada en los beneficios y repercusiones positivas que en

el futuro representará para el sector público, las decisiones de tipo económico,

financiero e inclusive de índole administrativo, que se deban tomar por cuanto

disponer de información contable real, razonable y de verificación, apoyando así,

los procesos de planificación económica, de gestión financiera y de medición de los

resultados, pero por sobre todo, de convertirse en una herramienta fundamental

en la lucha contra la corrupción.

En esta crónica, se presenta en orden lógico el proceso de saneamiento contable,

desde sus antecedentes, la expedición de la Ley 716 y sus decretos

reglamentarios, el apoyo de la Contaduría General de la Nación y de otras

entidades al proceso, su importancia, el avance que hoy se advierte, el futuro, con

la posibilidad de pro rrogarse la vigencia de la norma.

Aunque sin lugar a dudas, muchos aspectos se pudieron haber quedado por fuera,

se han destacado los más importantes y significativos.

Antecedentes de una expedición necesaria...

Hablar hoy del proceso de saneamiento contable, hace necesario remitirnos a

conocer los antecedentes y las razones que llevaron al Congreso de la República

en el año 2001 a aprobar la Ley 716, cuyo proyecto fue trabajado en forma

66
conjunta entre la Contaduría General de la Nación y Contraloría General de la

República, entidades responsables de la elaboración del Balance General de la

Nación y de la auditoría al mismo, respectivamente.

Corría el año 1995, y el Gobierno Nacional mediante los decretos 085 y 086, crea

en el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, la Dirección General de la

Contabilidad Pública y define su planta de personal, estableciendo, para esta

dependencia, las funciones asignadas al Contador en el Artículo 354 de la

Constitución Política.

En cumplimiento de las funciones encomendadas, ésta Dirección concentra sus

esfuerzos en la expedición del Plan General de Contabilidad Pública, el cual tuvo

lugar a finales del mencionado año, mediante la Resolución 4444, proceso que se

llevó a cabo, con la ayuda de más de un centenar de profesionales de la

Contaduría, la mayoría de los cuales, representaban a las principales entidades

públicas, tanto nacionales como territoriales.

En otro campo, en el cual trabajó la Dirección, fue en el de la preparación y

elaboración del Balance Gener al de la Nación y del Sector Público, para lo cual, se

expidieron a partir del mes de agosto de 1995, las Resoluciones 3425, 3694 y las

circulares externas 001, 002 y 003, con las que se solicita a las entidades públicas,

nacionales y territoriales, tanto del nivel central - Ministerios, municipios,

67
departamentos, entre otros -, como descentralizadas - Establecimientos públicos,

Empresas Industriales y Comerciales, Sociedades de Economía Mixta, Empresas

Sociales del Estado, Empresas de Servicios Públicos -, la preparación, elaboración y

envío de lo que se llamó el “Balance de Apertura” de la información

correspondiente, al 31 de diciembre de 1995, cuyo plazo se fijó para el 15 de

febrero del año 1996.

Es de anotar que previamente se había realizado en el país un diagnóstico del

número de entidades que tenían verdaderos sistemas de información contable, el

cual presentaba unos resultados nada halagadores, al establecerse que el 95% de

las entidades públicas de los niveles central, principalmente en el orden t erritorial

del país, no llevaban contabilidad.

Como puede observarse, el tiempo que disponían las entidades para conformar su

primer Balance de acuerdo con las normas recientemente expedidas por la

Dirección General de Contabilidad Pública, era bastante apretado y significó para

las entidades, principalmente para las territoriales, que en su mayoría no tenían

procesos contables, el tener que contratar a profesionales de la Contaduría

Pública, para realizar esta labor en tan corto tiempo. A lo anterior, se une la poca

experiencia de muchos de estos profesionales en el manejo contable del sector

público.

68
Con el fin de cumplir con la obligación legal, antes que en presentar una

información razonable, las entidades incluyeron dentro de este primer balance,

información que en la mayoría de los casos, no reunía los requisitos mínimos de

consistencia exigidos en el proceso contable, como son, el disponer de los

documentos de soporte para la incorporación de bienes, derechos y obligaciones;

el incluir información con todo el detalle necesario para un seguimiento posterior,

el contar con inventarios actualizados, entre otros.

Con el transcurso del tiempo se fue haciendo más evidente la falta de

sustentamiento de la información contable que presentaban las entidade s a la

Contaduría General de la Nación, situación que ha sido advertida por instituciones

como la Contraloría General de la República en sus procesos de auditoría

financiera; la Comisión Legal de Cuentas del Congreso, en el análisis de

fenecimiento de las cuentas; las oficinas de control interno en los informes que

preparaban; por los contadores de las entidades públicas en las notas a los

estados contables; los revisores fiscales en sus diferentes dictámenes, y por la

misma Contaduría General de la Nación, en los procesos de asesoría, asistencia

técnica y capacitación en los que participaba.

No obstante la descripción de estos antecedentes, es importante señalar que CGN

venía insistiendo con las entidades en la realización de un proceso de depuración

de saldos antiguos y de conciliación o confrontación con las existencias ciertas y

69
reales de las operaciones, que concretó con la expedición de la circular externa

013 del 02 de diciembre de 1996, con la cual se dieron instrucciones para el

debido reconocimiento, valuación y revelación de las operaciones financieras,

económicas y sociales.

Más adelante, y ante la necesidad de continuar este proceso de revelar

información consistente y depurada, se expide la circular externa 032 del 14 de

enero de 2000, la cual establece el procedimiento contable para identificar y

separar en las respectivas cuentas los valores antiguos sin depuración de aquellos

depurados o reales, estableciéndose para los primeros, la obligación de adelantar

las acciones administrativas necesarias para determinar su permanencia o no de

estos saldos en la información contable.

Los informes de las distintas instancias de control daban cuenta de una

información contable del sector público, que arrastraba situaciones de tiempos

pasados, que la pres entaban sin la consistencia necesaria, y sin el grado de

confianza requerido, a pesar de que las entidades disponían de normas contables

expedidas por el Contador General de la Nación, que les permitían y les exigían

realizar los ajustes, reclasificaciones , incorporaciones o bajas de bienes, cuando

fuese el caso, para mostrar una información real.

70
Algunas de las consecuencias de lo anterior, son que la información contable no

fue utilizada en muchas entidades, principalmente las entidades de gobierno, como

la herramienta gerencial que apoya los procesos de toma de decisiones; la pérdida

del control de los bienes; el desconocimiento del valor razonable de las

obligaciones del sector público, como por ejemplo su pasivo pensional y la deuda

pública.

Se da inicio a la expedición: saneamiento contable

Preocupados por esta situación, y como producto de los trabajos

interinstitucionales entre la Contaduría General de la Nación y la Contraloría

General de la República, se pensó en la elaboración de un proyecto de ley que le

permitiera a las entidades públicas, sanear su información contable, y revelar a

partir de allí, información consistente y razonable, el cual fue presentado en el año

1999.

Fue arduo el debate en el Congreso para hacer conocer y entender a los señores

parlamentarios y a otros organismos de control, que el país necesitaba y

reclamaba esta norma, que era urgente su expedición para la organización de las

áreas financieras y de los sistemas de información institucionales, y para la lucha

contra la corrupción, por cuanto está demostrado que el desorden contable hace

presa fácil a los problemas de pérdidas de bienes y fondos públicos.

71
El sentido patriótico se impuso finalmente, ante la necesidad de disponer de

información confiable y útil en la toma de decisiones del gobierno, y fue así como

el 21 de diciembre del año 2001 se expide la Ley 716. No obstante, se precisó en

el texto normativo que no se trataba de borrón y cuenta nueva, ni de una amnistía

para las irregularidades cometidas en el pasado, que era a ciencia cierta, motivo

de preocupación en los debates del Congreso, sino que se obligó a ser puestas en

conocimiento de las respectivas autoridades, las irregularidades advertidas en

ejecución del proceso.

Los aspectos básicos de la norma están en su artículo primero, donde se

manifiesta: “Del objeto. La presente ley regula la obligatoriedad de los entes del

sector público de adelantar las gestiones administrativas necesarias para depurar

la información contable, de manera que en los estados financieros se revele en

forma fidedigna, la realidad económica, financiera y patrimonial de las entidades

públicas”.

Por su parte, en el artículo sexto se anota: “Acciones complementarias. Los

términos de la presente ley no sustituyen el ejercicio de las acciones legales

pertinentes que se desprendan por la acción irregular u omisión de los deberes y

responsabilidades de los servidores públicos o terceros involucrados.”

72
Lo importante en esta ley, es lo relacionado con la responsabilidad y la

competencia en l a ejecución del proceso, estableciendo en forma expresa, que le

corresponde al Representante Legal en las entidades del sector central, y al

máximo organismo colegiado de dirección y el director, gerente o presidente,

según se denomine en las entidades descentralizadas.

El Congreso consideró que esta norma no podría ser indefinida en el tiempo, por

ello, le otorgó una característica de temporalidad, y estableció la vigencia para dos

años, los cuales culminan el próximo 31 de diciembre del 2003. Igualmente, le dio

una fuerza vinculante, al establecer su prevalencia jurídica frente a otras

disposiciones específicas para las entidades públicas.

La responsabilidad de la expedición, en la Contaduría General de la


N ación

La misma norma, le establece a la Contaduría General de la Nación, que en esta

lectura será enunciada como la CGN, responsabilidades a cumplir cuando en el

Artículo séptimo se expresa que, ésta entidad, establecerá los procedimientos

para el registro contable de las operaciones que se deriven de la aplicación de la

ley.

73
En cumplimiento de este mandato, la CGN, expidió en el año 2002 la Circular

Externa 050, en la cual se precisan los procedimientos a realizar y los registros

contables que deben efectuarse en este proceso de saneamiento contable.

Ahora bien, más allá de esta función normativa, la CGN ha desplegado durante

todo el año 2003 un proceso de difusión y capacitación sobre ésta norma, teniendo

en cuenta, que durante el año 2002, fue muy poco el avance que presentaron las

entidades.

Dentro de este proceso se contó con el apoyo financiero de la Agencia de los

Estados Unidos para el Desarrollo Internacional – USAID, a través de la firma

Casals & Associates Inc quienes patrocinaron la realización de 16 eventos en el

ámbito nacional, a los cuales se hicieron presente 782 entes públicos,

representados por 2.881 servidores públicos, con un gran éxito, como se puede

advertir en las evaluaciones de los mismos.

También se han adelantado otros procesos o seminarios de capacitación en

distinta s ciudades del país, con recursos propios de la CGN y en muchos casos, con

recursos de las entidades interesadas en el tema, atendiendo todas las solicitudes

presentadas.

74
De otra parte, han sido recibidas hasta el mes de noviembre de 2003, 161

consultas sobre el proceso de saneamiento contable, que fueron atendidas con

buena disponibilidad, haciendo claridad sobre los procedimientos a realizar y los

registros contables que se deben efectuar.

En este sentido, y con el fin de hacer más dinámico el proceso de consulta y

definiciones, la CGN implementó en su página WEB, un “link” que permite a los

entes públicos formular sus inquietudes sobre este tema y obtener por esta misma

vía la respectiva respuesta.

En conjunto con la Contraloría General de la República se publicó en el mes de

julio de 2003 la Cartilla denominada “Saneamiento Contable – Guía Práctica”, en la

cual se presentan los antecedentes de la norma, destacando el procedimiento

general que las entidades deben seguir para el saneamiento contable, incluyendo

las preguntas más frecuentes y sus respectivas respuestas; de igual manera, se

diseñaron los diferentes formatos que las entidades deben diligenciar, presentando

a manera de ejemplo, algunos casos prácticos y su respectiva contabilización.

Se han realizado asistencias técnicas y acompañamientos directamente a

diferentes Comités de Saneamiento Contable en algunas entidades, como por

ejemplo, en la Cámara de Representantes, Instituto de los Seguros Sociales,

Ministerio de Defensa Nacional, Ministerio de Hacienda, municipio de Medellín,

75
Beneficencia de Antioquia, Empresas Públicas de Medellín, Lotería del Valle, entre

otras.

La importancia del proceso de saneamiento y su permanente expedición

Aunque la importancia del proceso está justificado en las exposiciones de motivos

de la misma Ley 716, no sobra anotar que la depuración de la información

contable es supremamente necesaria para el país, en la medida que permitirá

conocer la verdadera situación financiera, económica y social, es decir, la situaci ón

patrimonial del sector público, con lo cual se podrán identificar, en forma

detallada, los bienes, derechos y obligaciones ciertos de cada ente público, y por

esa vía, se convertirá la información saneada en una barrera infranqueable para

ese devastador flagelo de la corrupción, que el gobierno colombiano ha venido

combatiendo con todos sus esfuerzos.

Por ello, la contabilidad pública como un sistema de información, se convierte en

una herramienta fundamental para el ejercicio del control público en to das sus

manifestaciones: control interno, fiscal, disciplinario, político y ciudadano.

El saneamiento contable es importante, porque la información real, ayudará a los

procesos de toma de decisiones administrativas a una mejor planificación de la

gestión financiera y, servirá de base, para la construcción de verdaderos

indicadores de la gestión de los gobernantes.

76
Su relevancia es crucial en la medida que una información real, permite proyectar

las necesidades de ahorro, inversión y financiamiento, facili tando así, la

integración de los sistemas de información financiera, de los procesos

administrativos cooperando sobre el fortalecimiento de una verdadera Cultura

Contable.

Mensaje del C ontador General de la N ación ante las comisiones terceras


económicas conjuntas del Congreso de la Republica

Logros de la exploración, en el proceso de saneamiento

Aunque la Ley 716 fue expedida a finales del año 2001, las entidades le dieron la

importancia del caso solo durante el año 2003, cuando el Contador General de la

Nación, Dr. Jairo Alberto Cano Pabón posesionado en el cargo a partir del 7 de

enero de ese año, preocupado por el poco avance del proceso durante el año

2002, y por la proximidad de terminación de la vigencia de la norma, empezó a

gestionar a través de organismos o entidades públicas y privadas, la consecución

de recursos que permitieran emprender un proceso urgente de capacitación.

Producto de esas gestiones, fueron los convenios con Casals, Universidad de

Antioquia, y los recursos del proyecto MAFP, entre otros.

77
El despliegue de la capacitación, liderado por Contaduría General de la Nación,

contó con el apoyo estricto de otras instituciones como la Procuraduría General de

la Nación y la Contraloría General de la República, quienes desplazaron a vario s

eventos a funcionarios a explicar la importancia del proceso y las implicaciones que

se podrían derivar de no acatar la norma.

Todo lo anterior, conllevó a generar una dinámica y una sinergia entre los distintos

entes públicos que, a partir de ese momento, han puesto un mayor interés y

entusiasmo en el cumplimiento de la Ley.

Hoy se puede afirmar que el proceso avanza bien, ha concebido importantes

logros, sin desconocer que el año 2002 fue un año prácticamente perdido para la

mayoría de entidades, quizá por no tener la suficiente claridad en la aplicación

procedimental de la norma.

Para hacer claridad y recordar la necesidad de adelantar el proceso de

saneamiento, el Contador General de la Nación, ha expedido varias normas

relacionadas, insistiendo con los representantes legales de las entidades para que

adelanten las acciones de depuración de la información. Estas normas son: circular

externa 050 del 2002, carta circular 042, 043 y 045, y el instructivo 015 de 2003.

Con éste último, se solicitó a las entidades informar sobre el avance del proceso en

cada una de ellas, a la fecha 30 de septiembre del año en curso. Aunque se está

78
haciendo la consolidación de esta información que enviaron las entidades, se

puede afirmar que el avance que demuestran las entidades es bien importante.

De la exploración, a la correcta explotación contable

La vigencia de la Ley 716 y dada su temporalidad, vence el próximo 31 de

diciembre de 2003. Se ha manifestado que el proceso adquirió toda su dinámica

durante el año 2003 y dada su complejidad por la responsabilidad implícita en él,

tanto en el campo jurídico como en el campo procedimental, muchas entidades

públicas han manifestado su imposibilidad de culminar el proceso al término de la

vigencia de la ley.

Esta complejidad jurídica y procedimental, se advierte básicamente en los procesos

de legalización de predios, es decir, el proceso de encontrar los documentos

soportes que permitan demostrar la propiedad de los bienes, por cuanto se ha

podido comprobar que, en el secto r público y especialmente en los entes

territoriales, los predios o bienes inmuebles no están legalizados, lo cual es una

situación jurídica difícil de resolver.

Existen otros inconvenientes que las entidades han tenido que sortear, como por

ejemplo, la consecución de la documentación que respalda los derechos u

obligaciones registrados desde años anteriores; la asignación de valores reales a

79
los inventarios de bienes, la individualización de estos inventarios; la determinación

de la prescripción o caducidad de derechos u obligaciones.

A lo anterior, debemos agregarle los inconvenientes de índole logísticos, como por

ejemplo, la falta de personal en la entidad para realizar el proceso y la carencia de

recursos presupuestales para su contratación, lo cual muchas entidades lo tomaron

como excusa para no empezarlo, situación que la misma Procuraduría, aclaró en el

sentido de no poderse tomarse estas razones como excusas para incumplir la ley.

También se han hecho evidentes en algunas entidades públicas, situa ciones como

el temor que asiste a los comités técnicos de saneamiento y a los representantes

legales para tomar decisiones de sanear la información, como por ejemplo, dar de

baja o retirar de la contabilidad bienes, derechos y obligaciones, inexistentes o

prescritos, con el argumento que pueden verse abocados a investigaciones de

responsabilidades fiscales, por parte de las contralorías.

Esta situación ha sido bien aclarada por la misma Contraloría General de la

República, cuando ha manifestado que lo imp ortante del saneamiento es allegar

las pruebas y demostrar las acciones adelantadas para soportar legalmente las

decisiones tomadas. Igualmente, esta entidad ha aclarado, que es responsabilidad

del representante legal poner en conocimiento de las autoridades de control las

80
presuntas irregularidades detectadas en el proceso, para ser objeto de la

respectiva investigación.

Del mismo modo, se ha manifestado por parte de la Contraloría General de la

República, que si el proceso está bien documentado y las deci siones tomadas se

han hecho cumpliendo con la norma, las entidades no deben tener ningún tipo de

temor, frente a lo realizado.

De la posibilidad de continuar la expedición: saneamiento contable

Las entidades han manifestado su deseo de que se amplíe la v igencia de la norma,

por la imposibilidad de culminar al 31 de diciembre de 2003 en forma exitosa el

proceso que ya iniciaron, dado principalmente por lo manifestado antes, la

complejidad del proceso, lo acaecido en el año 2002, un tiempo casi perdido para

arrancar, por la falta de recursos, personal, difusión y capacitación en un

comienzo.

Han salido a la luz otras razones, como por ejemplo, que el año 2003 fue un año

electoral y que esta situación conllevó a que algunas administraciones,

básicamente en el orden territorial, y ante la proximidad de su retiro, no le dieran

al proceso la importancia requerida.

81
Estas razones, y la necesidad de culminar un proceso que ya tiene un avance muy

significativo, para disponer de información real, motivaron al Go bierno Nacional a

presentar al Congreso un proyecto de Ley que prorrogue la vigencia de la norma,

por otros dos años más, el cual está siguiendo su curso normal, y se aspira que

antes de terminar la presente legislatura, sea aprobada esa esperada Ley de

prórroga.

Ahora bien, el proyecto presentado contempla otras situaciones distintas a la

prórroga, por ejemplo, se incluyó dentro del texto procedimientos para agilizar los

trámites de legalización de predios entre entes públicos, que como hemos

advertido, son sin duda el principal problema del saneamiento contable. Se espera

que el Congreso apruebe este proyecto con estos procedimientos, para asegurarles

a las entidades unos trámites muchos más fáciles para proceder a legalizar las

propiedades.

No obstante, ante la posibilidad de la prórroga, la Procuraduría ha sido enfática en

afirmar que se iniciarán las investigaciones para aquellas entidades que no le han

dado cumplimento a la norma vigente.

Finalmente, es importante retomar la importancia que tiene pa ra el país, que el

proceso culmine en forma exitosa, para lo cual se requiere que la norma sea

ampliada en su vigencia. Esa importancia está en el beneficio o las ventajas que

82
traerá el disponer de información real, razonable y verificable, tanto para las

autoridades económicas, políticas, de gestión y control, en definitiva, para la

sociedad civil, pero por sobre todo, para combatir ese cruel e indeseable flagelo de

la corrupción.

83
9. RAZONABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA, ECONÓMICA

Y SOCIAL ANTES DE LA APLICACIONES DE LA LEY DE

SANEAMIENTO CONTABLE.

9.1. GOBERNACIÓN DE CUNDINAMARCA

Teniendo en cuenta la información presentada por la entidad a la Contaduría

General de la Nación para los cortes de 2001 a 2005, se evidencia que la entidad

ha trasladado de sus cuentas que representan activos a las cuentas creadas

especialmente para el tratamiento del proceso de saneamiento contable, partidas

objeto de depuración, valores significativos y progresivos para estos periodos.

Tal como se puede ver en el Anexo No. 1, para el año 2001 se trasladaron de las

cuentas que representan bienes y derechos la suma de $511, 7 millones,

presentando aumentos significativos año tras año, de tal manera que para el año

2002 se realizó el traslado por $588 ,7 millones, para el año 20 03 $869, 3 millones,

para el año 2004 un aumento significativo pasando a $90.517,6 millones,

finalizando con corte a septiembre 30 de 2005 por un valor de $123.436,9

millones.

84
Estas variaciones significativas se presentan principalmente en dos rubros del

balance: el primero relacionado con los deudores, los cuales para el año 2001

mostraban un valor de $1,0 millones pasando a $85.973,0 millones para el 2005.

El otro rubro que presentó variación significativa es el referido a la propiedad de

planta y equipo pasando de $510,7 millones en el año 2001 a $2.233, 4 millones

en el 2005.

Otro rubro significativo que durante los tres primeros años objeto de análisis que

no tuvo movimientos, es el de otros bienes y derechos en investigación

administrativa, el cual, representa para el año 2005 $35.085,1 millones.

Por su parte, los pasivos presentan un comportamiento similar, iniciando en el año

2001 con un valor de $56,2 millones llegando hasta los $63.592,4 millones

cobrando importancia por su representatividad las cuentas por pagar que en año

2001 revelaban un valor de $1.300,6 millones, alcanzando los $55.973,8 millones a

2005.

Ahora bien, respecto al impacto patrimonial reflejado en la dinámica de las cuentas

creadas para reconocer el efecto del saneamiento conta ble podemos observar que

durante los años 2004 y 2005 el patrimonio ha sido afectado negativamente

en -$117,1 millones para 2004 y de forma positiva por $5.009,6 millones para el

año 2005.

85
Cobra importancia dentro de las variaciones patrimonial es, el hecho de que para el

año 2005 se hayan incorporado $4.804,6 millones en las cuentas que representan

las propiedades, planta y equipo, generando un aumento patrimonial significativo.

Respecto a las contingencias relacionadas con bienes y derechos en investigación

administrativa, para el año 2005 se revela una variación significativa que

representa $5.579,5 millones de los cuales se espera que una vez se culmine el

proceso de saneamiento contable, se obtenga el documento soporte idóneo para

proceder a incorporarlos a las cuentas que representan los bienes y derechos y

como consecuencia se obtenga un aumento patrimonial.

Situación contraria presenta la cuenta relacionada con los bienes pendientes de

legalizar, la cual muestra una poca significativa disminución en el periodo

analizado, pasando de $281.669,6 millones en el 2001 a $226.239,1 en el año

2005.

Por lo anterior podemos concluir, que la información financiera, económica y social

de la Gobernación de Cundinamarca, para los periodos comprendido s entre el año

2001 y el año 2005, no es razonable, debido a que se encuentran partidas

significativas en proceso de investigación administrativa sin que se tenga la certeza

que una vez culminado este proceso dichas partidas vuelvan a formar parte de los

86
activos y pasivos de la entidad.

9.2. DISTRITO CAPITAL

Para el Distrito Capital, durante el mismo periodo objeto de análisis la situación no

dista mucho de la presentada por la Gobernación de Cundinamarca, encontrándose

variaciones muy significativas año a añ o tanto para los bienes y derechos como

para las obligaciones.

Tal como lo revela el Anexo No. 2, para el año 2001 en el Distrito Capital se

realizaron reclasificaciones de las cuentas bienes y derechos a las cuentas de

investigación administrativa sumas cercanas a los $3.136,0 millones, pasando a un

monto muy significativo de $5.565.454,6 millones para el año de 2002, y como se

avecinaba la terminación de la vigencia de la Ley en el año de 2003, se evidencio

una disminución significativa de $10.465,2 mill ones.

Con la prórroga de la Ley, nótese que hay una tendencia nuevamente al aumento

pasando a $18.256,4 millones en el año de 2004 y $44.011,9 millones para el año

2005.

Internamente, se puede deducir que el rubro más significativo se encuentra en los

87
deudores y las propiedades, planta y equipo, las cuales han presentado una

tendencia hacia el aumento y la disminución dependiendo del momento en el

avance del proceso de saneamiento contable.

Respecto a las cuentas que representan las obligaciones al igual que para los

bienes y derechos, se evidencia una variación fluctuante, de tal manera que para

el año 2001 representaban $535,2 millones, pasando a $21.241,3 millones en el

2002, disminuyendo a $4.515,1 millones en el 2003, aumentando nuevamente en

el 2004 a $21.790,9 millones para finalizar en el 2005 con $17.992,7 millones.

En lo relativo al efecto patrimonial, para el Distrito Capital se genera un aumento

significativo para los años 2004 y 2005, alcanzando cifras de $17.433,2 millones y

$18.180,9 millones respectivamente, destacándose aumentos en los bienes de

beneficio y uso público, propiedades, planta y equipo y disminuciones en los

deudores.

La dinámica que presentan los bienes pendientes de legalizar, muestra la gestión

realizada por el Distrito Ca pital para obtener los documentos soportes e idóneos de

bienes, que si bien estaban contablemente registrados, no representaban activos

que fueran de propiedad del ente público, los cuales pasaron de $838.577,9

millones en el 2001 a $264.200,1 millones en el 2005, siendo los terrenos el rubro

más significativo, seguido por las vías de comunicación y acceso y otros bienes

88
pendientes por legalizar.

Tal como se puede deducir del análisis anterior, la información financiera,

económica y social del Distrito Ca pital, en el periodo comprendido entre el año

2001 y el 30 de septiembre de 2005, aún no es razonable, pues como se puede

observar, aún se requiere depurar y sanear, partidas relacionadas con los bienes,

derechos y obligaciones significativas.

9.3. FONDO NACIONAL DEL AHORRO

Para el estudio de la información correspondiente al Fondo Nacional del Ahorro,

dado que el grado de desagregación en su presentación no es suficiente, ya que

las reclasificaciones fueron realizadas en su totalidad a las subcuentas de otro s

bienes, derechos, obligaciones, y en investigación administrativa, no se puede

profundizar en el análisis presentado.

Esta entidad, tal como se deduce en el Anexo No. 3, en los años 2001 y 2002 no

aplicó el proceso de saneamiento contable, sólo para el año 2003 muestra saldos

en las cuentas que fueron reclasificadas de las cuentas que representan bienes y

derechos por valor de $1.727,4 millones, revelando un significativo aumento para

el año 2004 el cual paso a $17.482,6 millones, y como producto de la aplicación

89
del proceso presenta una disminución hasta lograr una cifra cercana a los $4.123,0

millones.

Por su parte, las cuentas que representan las obligaciones que serán objeto de

depuración y saneamiento, muestran un comportamiento muy similar al de bi enes

y derechos, destacándose que para los años de 2004 y 2005 presentan saldos por

$3.205,6 millones y $4.552,1 millones, respectivamente.

En cuanto a las contingencias relacionadas con los bienes y derechos en

investigación, de igual manera se evidencia aumentos para los años 2003, 2004 y

2005, representando valores que oscilan entre los $2.500 y los $3.700 millones.

Las anteriores cifras demuestran que aún, en el Fondo Nacional del Ahorro, a

pesar de los avances en el proceso de saneamiento contable, l a información

financiera, económica y social, no es razonable.

90
10. BENEFICIOS QUE ADQUIEREN LAS ENTIDADES PÚBLICAS COMO

CONSECUENCIA DE LA APLICACIÓN DEL PROCESO DE

SANEAMIENTO CONTABLE

Una vez las entidades públicas apliquen y desarrollen el proceso de saneamiento

contable atendiendo los aspectos legales, administrativos y contables que

establece la normatividad vigente, se espera que los entes públicos cuenten con

información que permita:

10.1. CONOCER LA VERDADERA SITUACIÓN FINANCIERA, ECONÓMICA


Y SOCIAL DEL ENTE PÚBLICO.

Tal como se había precisado en los antecedentes, el país no contaba con

información que revel ará con certeza su verdadera situación financiera, económica

y social, debido a que no se contaba con instrumentos que permitieran desarrollar

las acciones administrativas necesarias para determinar si los bienes, derechos y

obligaciones revelados en los estados contables a una fecha de corte, eran ciertos.

Con la aplicación del proceso de saneamiento contable, y ante la obligatoriedad y

facilidad que otorga la Ley 716 de 2001, modificada y prorrogada por la Ley 901

de 2004, para la ejecución o realización de las acciones administrativas

91
pertinentes, se espera que a partir del 31 de diciembre de 2005, los entes públicos

cuenten con información razonable, que le permita conocer la situación financiera

a una fecha de corte, para la toma de decisiones de forma eficiente, eficaz y

económica.

10.2. ESTABLECER SI LOS BIENES, DERECHOS Y OBLIGACIONES


REVELADOS EN LOS ESTADOS CONTABLES DEL ENTE PÚBLICO SON
CIERTOS.

Con la expedición de la normatividad relacionada en el marco jurídico, la Ley de

saneamiento contable establece la obligatoriedad por parte de los administradores

públicos de realizar todas aquellas acciones administrativas tendientes a obtener

informaci ón suficiente y pertinente por la cual se pueda probar la existencia y

propiedad de los bienes y derechos del ente público.

En este orden de ideas, una vez culminado el proceso, los saldos revelados en los

estados contables que representen los bienes y derechos del ente público deberán

estar debidamente soportados para determinar si son claros, expresos y exigibles.

92
10.3. CONOCER LAS EXIGIBILIDADES Y OBLIGACIONES CIERTAS DEL
ENTE PÚBLICO.

Igualmente que en el punto anteriormente tratado, se espera que con la aplicación

de la normatividad, y la realización de las acciones administrativas pertinentes, una

vez culminen la aplicación del saneamiento contable, las entidades cuenten con la

información necesaria determinar si las obligaciones y exigibilidades revelada s en

sus estados contables son ciertas.

10.4. SOPORTAR LA TOTALIDAD DE LAS OPERACIONES REALIZADAS


POR EL ENTE PÚBLICO Y QUE AFECTARON LA PARTE FINANCIERA

Como se había advertido anteriormente, la Ley de saneamiento contable obliga a

los administradores públicos a desarrollar todas aquellas gestiones administrativas

necesarias que permitan sustanciar las partidas que una vez hayan sido

depuradas, serán sometidas al proceso de saneamiento. Lo anterior implica que

una vez se culmine el proceso, las partidas que sean presentadas en los estados

contables del ente público sean tomadas fielmente de los libros de contabilidad, los

cuales, deberán estar debidamente soportados por comprobantes internos y

externos respaldados en documento soporte idóneos .

93
10.5. LA FORMULACIÓN Y ADECUACIÓN DE LOS PROCEDIMIENTOS DE
LAS ÁREAS FINANCIERAS PARA GARANTIZAR EL REPORTE
OPORTUNO Y ADECUADO DE LA INFORMACIÓN PARA LA
GENERACIÓN DEL PROCESO CONTABLE.

Con la ejecución del proceso de saneamiento contable, se ha podido evidenciar

que en la gran mayoría de los entes públicos no existen o si existen se encuentran

desactualizados, o no son operativamente viables, manuales de procedimientos

que permitan interactuar a las dependencias que integran las áreas financieras de

los entes públicos.

A medida que se va ejecutando el proceso, y ante la evidencia de la falta o

inoperatividad de los mencionados manuales de procedimientos, se espera que los

entes públicos tomen los correctivos del caso para que se actualicen, elaboren y

apliquen los instrumentos de acción, de tal manera que se garantice el adecuado

flujo de la información en las áreas involucradas en el proceso de saneamiento

contable.

94
11. BENEFICIO DE LA INFORMACIÓN SANEADA

Una vez las entidades públicas culminen el proceso de saneamiento contable y

como consecuencia sus estados contables presenten de forma razonable la

información financiera, económica y social, los administradores públicos podrán

contar con una herramienta que, entre otros beneficios, podrá generar los

siguientes:

11.1. TOMA OPORTUNA Y EFICIENTE DE DECISIONES.

Con base en la información que se obtiene una vez se haya aplicado el proceso de

saneamiento contable, y con el hecho de que en los estados contables se puede

conocer realmente cuales son los bienes y derechos de propied ad del ente público

con los que cuenta para el adecuado ejercicio de sus funciones, los

administradores públicos podrán optimizar la administración de estos recursos,

permitiendo utilizarlos de una forma eficiente, eficaz y económica, lo cual

redundará en beneficios para la comunidad, coadyuvando en el cumplimiento de

los fines esenciales del Estado.

95
Respecto a las obligaciones, al igual que para los bienes y derechos, el hecho de

que el ente público cuente con información real, le permitirá atender de for ma

oportuna todos aquellos compromisos que han celebrado las entidades bien sea

con proveedores nacionales o extranjeros, empleados, entidades públicas que

administran recursos parafiscales, corporaciones financieras públicas y privadas,

entre otros.

Teniendo en cuenta, que con el desarrollo del proceso de saneamiento contable se

hace necesario que las entidades públicas formulen, adopten o actualicen los

procedimientos que garanticen el adecuado flujo de la información entre las

dependencias del área financiera, y como consecuencia se genere una dinámica

que permita generar estados contables en tiempos óptimos, la información

contable pública estará disponible para la toma de decisiones de una forma

oportuna.

11.2. EJERCICIO DE CONTROL EFECTIVO DE LOS RECURSOS PÚBLICOS

Una vez los estados contables de los entes públicos posean las características y

requisitos mínimos que garanticen su razonabilidad, y en la medida en que todos

los bienes, derechos y obligaciones se encuentren debidamente identificados y

valorizados, los entes de control, la ciudadanía y la propia entidad, contarán con

96
una herramienta idónea para el ejercicio del control tanto fiscal, como ciudadano e

interno.

11.3. PERMITE EL EJERCICIO DE LA OBLIGACIÓN DE RESPONDER A LA

COMUNIDAD SOBRE EL ADECUADO MANEJO DE LOS RECURSOS

PÚBLICOS.

Cuando los administradores públicos cuenten con información de base contable en

la cual puedan evidenciar que recursos poseen, la cuantía de los mismos para ser

administrados y la forma como fueron empleados, podrán respon der ante los

ciudadanos por la eficacia, eficiencia y economía aplicada en la administración de

los recursos públicos que les fueron entregados para el desarrollo de las funciones

sociales que deben cumplir las entidades.

11.4. REVELACIÓN DE INFORMACIÓN ÚTIL DE ACUERDO CON LAS

DIFERENTES NECESIDADES DE LOS USUARIOS ESTRATÉGICOS

Teniendo en cuenta que la contabilidad pública, de acuer do con los objetivos que

persigue, pretende satisfacer las diferentes necesidades de los usuarios, se hace

necesario que la inform ación producida en el proceso contable y que es requerida

por parte de los mencionados usuarios sea, razonable y muestre la situación

97
financiera, económica y social de forma real.

Para esto, aplicando la normatividad relacionada con el proceso de saneamie nto

contable, se espera que la información una vez sometida al proceso, cuente con

todas aquellas características de racionalidad, universalidad, comparabilidad y

medibilidad, y con los requisitos mínimos de oportunidad, objetividad, consistencia,

relevancia, verificabilidad y comprensibilidad, para que los usuarios estratégicos las

puedan utilizar en cualquier momento para lo de sus fines pertinentes.

98
CONCLUSIONES

1. Una vez analizada la información presentada por las entidades en estudio, en el

periodo comprendido entre los años de 2001 y 2005, se puede evidenciar

claramente que dicha información no posee la suficiente razonabi lidad para que

ésta sea considerada como herramienta para la adecuada toma de decisiones.

2. El hecho de que las entidades públicas estén aplicando el proceso de

saneamiento contable, les ha permitido establecer que en su información

estaban registrado contablemente una serie de bienes, derechos y obligaciones

que en algunos casos no eran ciertos, y en otros a pesar de ser de su

propiedad no se encontraban reconocidos.

Lo anterior, trajo como consecuencia que los administradores públicos al

momento de tomar decisiones, no contaran con información que les generara

la suficiente confianza, y por ende se rechazara buscando información en otros

sistemas.

3. Una vez la información contable pública haya sido sometida al proceso de

saneamiento contable, teniendo en cuenta que ésta revelará los bienes,

99
derechos y obligaciones del ente público que se consideran ciertos,

imprimiendo significativas medidas de razonabilidad, se convertirá en una pieza

clave para la adecuada administración de los recursos públicos, toda vez que

proveerá la información suficiente y pertinente sobre la cantidad y valor real de

los recursos que administra en desarrollo de su cometido estatal.

4. Con el desarrollo del proceso contable se hace evidente la ingente necesidad

que tienen los entes públicos de formular, adoptar o actualizar tanto los

manuales de funciones como los de procedimientos, relacionados con los

procesos administrativos aplicados para la administración de los recursos

públicos, de tal manera que, dicha formulación, adaptación o actualización

permita una óptima gestión en la utilización de los recursos públicos.

5. Es evidente que la información contable pública antes de la aplicación del

proceso de saneamiento contable, revelaba cifras poco confiables que en

algunos casos sobreestimaban o subestimaban los valores de los bienes,

derechos y obligaciones de forma significativa, generando incertidumbre sobre

la ba se con la cual se tomaban decisiones por parte de los entes públicos. Ésta

situación cambia significativamente a medida que se aplica el proceso de

saneamiento contable.

100
6. Teniendo en cuenta lo establecido en la normatividad sobre saneamiento

contable, en lo relacionado con la sostenibilidad del proceso contable, para que

se garantice la producción de información razonable de forma continúa, se

hace necesario que los entes públicos desarrollen políticas que permitan

mantener el adecuado reconocimiento y revelación de la información financiera,

económica y social, mediante la elaboración de documentos idóneos que

soporten todas y cada una de las transacciones realizadas por las entidades, de

tal manera que se tenga una evidencia sobre la adecuada gestión de l os

recursos públicos.

101
BIBLIOGRAFÍA

• CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COLOMBIA DE 1991.

• PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD PÚBLICA. Contaduría General de la Nación.

Versión 2005.

• NIETO SANCHEZ, Edgar Fernando. La Contabilidad Pública: Una Estrategia de

Modernización y Control. Bogotá: Imprenta Nacional de Colombia. 1998. 87p.

• GUÍA PRÁCTICA DE SANEAMIENTO CONTABLE. Contaduría General de la

Nación y Contraloría General de la República. 2003.

• INSTITUTO COLOMBIANO DE NORMAS TÉCNICAS Y CERTIFICACIÓN. Tesis y

otros tra bajos de grado. Bogotá: ICONTEC, 2002. NTC 1486.

• MÉNDEZ ALVAREZ, Carlos Eduardo. Metodología. Guía para elaborar diseños de

investigación en Ciencias Económicas, Contables, Administrativas. Bogotá:

McGraw Hill, 127p.

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