BREVE GUÍA DICÁCTICA Y REFLEXIVA

Actividades de aula sobre la película:

PLAN DE IGUALDAD

CEIP VICTORIA DÍEZ

HORNACHUELOS (CÓRDOBA)

Autor: José Antonio Mora Trujillo

1. INTRODUCCIÓN:

La introducción, con voz de narrador e imágenes de la historia, nos sitúa en una perspectiva
que nos da a entender que la desigualdad de género, no es algo que haya existido siempre.
Existe un momento de la historia, el Neolítico, donde se data la división sexual del trabajo… los
hombres asumían unos papeles más poderosos que las mujeres, a las que les fueron
adjudicadas las tareas relacionadas con el cuidado, crianza y el hogar. Desde el Neolítico
existen por tanto, ricos y pobres… los primeros algunos varones privilegiados… las segundas,
mujeres.

Dicha división sexual del trabajo, se perpetúa hoy en día en muchos aspectos. Nuestra
encuesta, corrobora que los niños siguen prefiriendo profesiones tradicionalmente masculinas
y las niñas tradicionalmente femeninas, salvo excepciones contadas.

Gracias al feminismo, las mujeres y los hombres trabajan desde hace poco más de un siglo por
la IGUALDAD de género, derechos de las mujeres con respecto al voto, salariales… y otras
reivindicaciones como la lucha contra la violencia machista.

El machismo es un invento… un invento social y cultural, ningún hombre o mujer nace siendo
superior ni privilegiado frente a nadie, es una forma de control del patriarcado frente a las
mujeres. En los últimos años, cada vez percibimos menos machismo, pues gracias a las
campañas, las leyes que defienden la igualdad, el machismo descarado está mal visto por la
sociedad.

Para mantenerse vivo, el machismo diseña estrategias más sutiles, a las que llamamos
MICROMACHISMOS (L. Bonino), de ahí el nombre de nuestra película, y la tarea que nos
centra.

Rodamos 16 situaciones, inspiradas en situaciones reales, en las que se demuestra cómo en el

subconsciente colectivo, el machismo sigue vivo y seguimos reproduciéndolo. Porque los
llamemos “pequeños”, no quiere decir que no sean peligrosos, o que no generen grandes
desigualdades. Alguien escribió alguna vez, que los “pequeños machismos de hoy, son la
siembre de las mujeres muertas que recogeremos mañana”… para reflexionar.

Elijo esta actividad para celebrar el 25 de Noviembre, Día Internacional contra la Violencia
hacia las Mujeres, porque… los pequeños machismos son la raíz del problema… educar en
igualdad es la llave para una sociedad justa y equilibrada con todos y todas.

Un día Anna Freixas, una de mis maestras me dijo: “El día que te pongas las gafas violetas… ya
no te las podrás quitar”… qué razón tenía.

2. ESTRUCTURA DE LA PELÍCULA:

Toda la película tiene la misma estructura. Una introducción histórica, y 16 capítulos cortos
que se inician con CLAQUETA, y se cortan en un STOP. Tras el STOP, se reivindica un derecho
feminista alusivo a la situación del capítulo, y finalmente cada escena termina con un ME
GUSTA, parecido al de las redes sociales.
Se puede trabajar cada capítulo, visionándolo hasta el STOP, dándole a PAUSE, y analizando la
situación vista por el alumnado. Se pueden hacer DEBATES relacionados con la situación
preguntándoles:
- ¿Cómo se llama el capítulo?
- ¿Qué ocurre en él? ¿Quiénes lo protagonizan?
 - ¿Ves que hay alguna situación injusta para alguien? ¿Te ha pasado algo así?
- ¿Para quién es injusta la situación? ¿Por qué…?
- ¿Qué derecho feminista se puede reivindicar ante esta situación?
- DRAMATIZACIONES: Se puede interpretar en el aula con el alumnado la misma situación
sin que resulte machista.
- LEY DE LA INVERSIÓN: Se pueden dramatizar situaciones, dándole la vuelta al género. Que
el hombre-niño se vea en la situación de mujer-niña… si resulta ridícula la situación
seguramente es machista.
- Etc…

3. CAPÍTULO I: El maestro de infantil

Todavía hay quien ve extraño un maestro varón, llevando una tutoría en un aula de Educación
Infantil. Rodando el capítulo las madres participantes no se extrañaron del guión… es más,
confirmaron que algunas muestran su preferencia por una maestra, mejor que un maestro. Las
mujeres se manejan mejor con los niños… decían algunas.

Esta es la idea a trabajar, la división sexual del trabajo. Los trabajos que generalmente ocupan
mujeres, y los que generalmente ocupan hombres. Como decía en nuestra investigación, los
niños siguen prefiriendo trabajos tradicionalmente masculinos, y las niñas tradicionalmente
femeninos.

Podéis comprobarlo haciendo una encuesta en clase.

4. CAPÍTULO II: El piropo

Las agresiones hacia las mujeres, son también verbales. El piropo, tan extendido en nuestra
cultura, es una de estas agresiones. Todos podemos mirar, pues tenemos ojos, pero podemos
ahorrarnos el piropo. Hay mujeres que lo viven como un elogio, pero es un despropósito.

Ante esta situación, podemos aplicar la LEY DE LA INVERSIÓN. Si dramatizamos con el alumnado
la misma situación cambiando los sexos, es decir, las niñas pintoras y un niño pasando…
resultaría irrisoria y hasta ridícula, nos provocaría gracia… señal de que la situación es machista.

5. CAPÍTULO III: El rosa es de todos/as

Desde la antigüedad clásica, el rosa se adjudica a las niñas pues es el color de la carne… el color
de la maternidad… también desde la psicología del color el rosa es un color que apacigua,
provoca ternura y sensibilidad.

Por otro lado, el azul, color adjudicado a los niños, era el color del cielo, pues tener un niño se
consideraba un “regalo de los Dioses”…

Añadimos el color rojo, pues es el color que más prefieren los niños encuestados de nuestro
colegio. El rojo es el color de la guerra, el dios Marte estaba simbolizado por este color, pues el
planeta Marte es también rojo. El rojo es un color “agresivo” que activa y que dinamiza…

El rosa es un color de la naturaleza, por lo tanto, la adjudicación de este color para las niñas es
un invento social con su explicación antropológica. Desde que nacemos nos colocan uno u
otro… y sin querer ya nos están determinando.

6. CAPÍTULO IV: Libros diferentes

 Los libros, los cuentos… educan. Reflejan modelos y patrones que los niños y niñas pueden
terminar siguiendo en su vida. Es alarmante ver cómo los niños siguen prefiriendo, según
nuestras encuestas, cuentos de aventuras, superhéroes… y las niñas cuentos tradicionales…
princesas, Disney… etc.

Muchas veces los adultos/as, o el propio consumismo de nuestra sociedad, somos los culpables
de esta división sexual de la literatura… pues seleccionamos los cuentos que leemos o
regalamos según sean los lectores… si son niños unos, si son niñas… pues otros. Así es normal
que las niñas prefieran ser princesas… y toda princesa, espera un príncipe que la rescate, por lo
cual, también estamos ofreciendo una imagen del amor romántico… muy desafortunada y
desventajosa para las mujeres.

7. CAPÍTULO V: La secretaria

Las administradoras de la pequeña economía, el hogar, son mujeres. Nuestro colegio tiene una
secretaria… y eso está muy bien, pero la escena refleja que “ellas administran, y mandamos
nosotros”… además con cierta complicidad entre hombres y una risa bastante jocosa.
Los altos cargos públicos o en grandes empresas, siguen siendo mayoritariamente varones…
por lo que es un espacio de poder muy reducido a ellos. Las grandes fotos de políticos,
banqueros, grandes abogados o financieros son hombres… pocas mujeres. Afortunadamente
esto va cambiando, pero… ¿por qué pasa?...
Fácil… si has sido toda tu vida educada para ser madre, proponerte grandes metas puede
suponer renunciar a serlo, o “delegar” la educación de tus hijos/as en otra persona. Esto
último, frena a las mujeres a ascender a cargos que les ocuparía mucho esfuerzo y tiempo…
esto se llama TECHO DE CRISTAL. Es un techo invisible, que te impide ascender y te obliga a
cumplir tus funciones para las que has sido educada tradicionalmente.

8. CAPÍTULO VI: Juegos de niños y juegos de niñas

Este capítulo refleja, como de manera inconsciente… “los niños con los niños, y las niñas con las
niñas”… sigue habiendo juegos que prefieren las niñas y juegos que prefieren los niños. Nuestra
encuesta corrobora que los niños… fútbol… las niñas… ballet, muñecas, patines… etc.

A veces de manera inconsciente, elegimos juguetes diferenciados desde que los niños y niñas
son pequeños/as. Estos juguetes desarrollan unas capacidades en unos y otras capacidades en
otras. Por no hablar del uso del espacio.

Los juegos de chicos son invasivos y expansivos… los de niñas son tranquilos, silenciosos. Unos
son juegos que invitan a expandirse hacia fuera, y otros invitan al recogimiento hacia dentro.

Cuidado con los catálogos de jugueterías, pues saben diferenciar muy bien por sexos, y además
son muy atractivos para ellos/as. Márketing muy bien estudiado.

9. CAPÍTULO VII: Trato desigual

Inconsciente traicionero que nos hace hablar de forma distinta a niños y a niñas. El elogio ante
una actividad bien hecha lleva implícito una serie de valores… ¡¡Muy bien, Campeón!!... ¡¡Muy
bien, princesa!!...

No hay nada más que hablar. Un campeón en la vida conseguirá lo que se proponga, una
princesa como mucho conseguirá marido.
10. CAPÍTULO VIII: Lo que no se nombra, no existe

El lenguaje construye nuestro pensamiento. Eso es así… del mismo modo que refleja lo que
pensamos. Si no nombramos lo femenino, a las niñas, a las mujeres… para empezar le quitamos
valor frente al mal llamado “masculino genérico” y para terminar, ocultamos su existencia. Lo
que no se nombra, no existe. Podemos utilizar lenguaje no sexista, lenguaje inclusivo en el que
quepamos todos y todas, porque una vez que te acostumbras… no podrás dejar de hacerlo.

Las niñas y las mujeres, se acostumbran a no ser nombradas desde pequeñas, por eso quizá
fueron borradas de los libros de historia, de ciencia… etc… hasta hacerse invisibles, y no solo
eso, todo lo que tiene nombre femenino… acaba siendo despectivo. Buscad en la RAE la
definición de “mujer libre” o “hombre libre”… ¿no debería ser lo mismo?... pues para ellos no,
porque la RAE está institucionalmente masculinizada, y sin embargo el la máxima institución del
lenguaje en nuestro idioma.

11. CAPÍTULO IX: El chistecito

La burla y el cachondeo hacia la mujer es una constante social. Es fácil encontrar chistes
machistas que menosprecian a las mujeres. También es fácil encontrar los mal llamados
“chistes feministas”… ni uno, ni otro. Ambos son chistes sexistas, y punto. Si basamos nuestro
humor en este tipo de broma, las risas de hoy serán las lágrimas del mañana… por no decir que
no tienen nada de ingeniosos, son facilones y burdos.

12. CAPÍTULO X: La tutoría

En mis años de maestro… conozco a tan pocos padres… son los grandes ausentes. Y puedes
pensar que están trabajando, por eso no van a las tutorías, o a llevar a los niños/as al cole. Nada
más lejos de la realidad, porque en muchos grupos que he tenido las mamás trabajan fuera de
casa y dentro… y muchos padres estaban parados. Aún así… alguna me dijo una vez… “Eso son
cosa de la mujer”.

El problema de esto es que los niños y niñas perciben que sus padres no se implican, no se
preocupan tanto como sus madres con respecto a su educación… esto lo perciben y lo
normalizan… con muchas probabilidades de reproducirlo en el futuro. También esta situación
provoca diferencia con respecto a los criterios educativos de los papás y de las mamás…
provocándose roles distintos y poca unidad en la educación.

13. CAPÍTULO XI: Para eso les pagan

Cuántas veces hemos pisoteado el suelo fregado… habiendo otras alternativas. Y ellas, las
limpiadoras… se acostumbran a decirnos… “no pasa nada... no te preocupes”. ¿Te imaginas que
voy a un banco, cojo los papeles de la mesa del director/a y los desordeno?... Pues es lo mismo,
salvo que la respuesta no sería: “no pasa nada… no te preocupes”.

El trabajo tradicionalmente femenino, en muchos casos estamos acostumbrados a que no esté

pagado… y no le damos el mismo valor. Alguna vez reñí a unos niños por pisotear el fregado
habiendo otra escalera… y la respuesta fue esa… ¡Para eso les pagan!... o tirando un papel al
suelo y te dicen que ensuciando la calle están creando puestos de trabajo.

14. CAPÍTULO XII: Yo prefiero un niño

Este capítulo es de mis preferidos, por la implicación de las madres, y por la barbaridad de lo
que narra. Cuántas veces hemos oído…. Yo prefiero niño… o prefiero niña. Como si unos
 valieran para una cosa, y otras para otras cosas. Desde antes de nacer ya estamos proyectando
un futuro para nuestros hijos/as, según lo que venga.
Cada vez escuchamos más… “que lo que venga, venga bien”… quizá es una mejor respuesta.
Yo me pregunto… ¿Para qué saber el sexo del bebé, si no, para ir marcando de un modo u otro
su futuro?... Un verdadero compromiso, es saber que el niño/a venga bien, pero prescindir de
saber el sexo, pues aunque los papás/mamás procuremos no proyectar prejuicios, no estamos
solos/as y en el embarazo nos rodea mucha gente.

15. CAPÍTULO XIII: El carnaval

El carnaval es una fiesta que debe estar marcada por la libertad de elegir. Pues el márketing una
vez más nos envuelve, sobre todo a niños/as, para ir siempre de lo mismo. La historia cambia
muy poco.

Cuidado cuando en los colegios diferenciamos a niños y a niñas en sus disfraces. Todos y todas
juntos de lo mismo, mucho mejor, o cada uno/a de lo que quiera. En libertad. Los disfraces
muchas veces reflejan modelos a los que los niños/as admiran.

16. CAPÍTULO XIV: El wasap

El machismo está en las relaciones de pareja. El control de la mujer, la desconfianza, los celos…
sólo reflejan las inseguridades del varón.

Claro está, que si me han educado para ser superhéroe y futbolista famoso y millonario que se
liga a las modelos más guapas, y al final soy… esto…

Yo también sería inseguro con este panorama. Esta inseguridad nos provoca… controlar el
móvil, horas de entrada y salida… redes sociales… de nuestras parejas, algo que supone un
asalto a la intimidad.

Trabajemos con los niños/as… que el amor se basa en el respeto, la confianza, la seguridad y el
cariño a la pareja, y que querernos a nosotros mismos/as, es el primer paso para compartir la
vida con alguien.

17. CAPÍTULO XV: Deja, que yo lo saco

Hay situaciones que de manera “caballerosa” hacen que los hombres se ofrezcan a las mujeres
a hacer cosas que dan por hecho que ellos harán mejor… Y piensan que son amables.

Las mujeres y los hombres tienen derecho a intentar todo. Habrá cosas que se me den mejor
que otras, pero porque soy persona individual, no un hombre, o una mujer. Equivocarse o
hacerlo mal, es la mejor forma de aprender.

18. CAPÍTULO XVI: A mí no se me da bien

Y terminamos con las tareas domésticas. Cuántas veces oiremos: “A mí no se me da bien…

limpiar cristales, poner lavadoras o planchar…” pero sí se me da bien desmontar el taladro,
formatear el ordenador, mirar el motor del coche o limpiar la moto.

Cuidado con estas trampas del machismo, que acomodan al hombre al no hacer… o a que
digamos que es muy bueno porque “ ME AYUDA EN CASA”. Quien “ayuda” se hace responsable
de sus tareas y lo que hace es atribuírselas a la mujer por el simple hecho de serlo.