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Camanchaca

La camanchaca, una neblina espesa y abundante, usualmente presente en el norte de


Chile y el sur de Perú, tan maravillosa como siniestra y peligrosa, famosa por los
accidentes que suelen ocurrir bajo su manto, bajo este mismo halo de misterio, y con
este mismo nombre, se ampara la novela de Diego Zúñiga; Camanchaca, publicada en
2009 por la editorial: Calabaza del diablo y reeditada en 2012 por Random House, una
novela de narración más bien fría, cruda, relativamente corta, pero no por eso con
menor contenido interno ni menos interesante, con una historia más bien pérfida, que en
este reporte nos daremos a la labor de analizar.

La historia nos habla, principalmente, de la historia de un niño, un joven atrapado en los


conflictos de un hogar fraccionado, esto a través de una visión fragmentada, una
narración protagonista y ligeramente confusa. La novela va entrelazando distintos
momentos de la vida de este protagonista en tránsito de la niñez a la adolescencia: viajes
de carretera con su padre y la pareja de este, juegos infantiles con algunos de sus
amigos, extrañas escenas íntimas con su madre, etc.

Entre esta mezcla de momentos de niñez, juventud y adultez, se convierte en una tarea
difícil el “engancharse” con alguna de las líneas argumentales, sin embargo la más
estable es la que narra el viaje del protagonista y su padre desde Santiago hasta Iquique
y luego a Tacna, esto en busca de conseguir un tratamiento dental para el primero. En
Iquique viven su padre y la nueva familia de éste, así como también su abuelo,
recientemente viudo, además, en esta ciudad fue donde el protagonista vivió su niñez y
desde donde, en la actualidad, narra en forma de recuerdo la mayoría de las anécdotas
que conforman el texto.

Análisis de los personajes:

Gracias a esta manera tan particular de narrar la historia (usualmente con las historias
acerca de la madre en las páginas de numero par y las del padre en las de paginación
impar) se puede notar un fuerte contraste entre la relación que mantiene con su padre y
la que mantiene con su madre, la diferencia entre ambos esta destacablemente marcada,
por ejemplo:
“Ahora me dice que debemos ir a Tacna o si no podría perder mis dientes, que
él conoce a un dentista que me ayudará a salvarlos”.

Y en la página siguiente:

“Mi mamá perdió todos los dientes. Se tuvo que poner una placa. A veces va a
la cocina y abre un cajón, donde guarda la crema especial, da media vuelta y se
arregla la dentadura superior”.

Primeramente analizaremos al protagonista, cuyo nombre es, de hecho, inexistente, en


ningún momento a lo largo del relato este es llamado por su nombre, ni siquiera
mencionado, hecho bastante destacable. El protagonista es un personaje callado, pero
inteligente, sabe más de lo que dice, y posee un extenso mundo interior que no es capaz
de expresar, esto es algo que él también se auto-cuestiona, parece no ser capaz de
comprender el por qué es así, curiosamente esto no parece molestarlo, solo lo menciona,
no lo considera algo necesariamente negativo o positivo, solo algo destacable, gracias a
esta misma característica, su tendencia al silencio no tiene grandes relaciones con nadie
que no sea su familia inmediata (Aunque no parece relacionarse de manera correcta con
esta misma tampoco, como ejemplo más evidente esta su padre). Padece de sobrepeso,
pero no paree realmente importarte a él, parece ser más relevante para su padre y
abuelo,

Continuando con el padre del protagonista, está separado de la madre del personaje
principal, con quien mantiene una relación más bien lejana, mezquina, al padre parece
no importarle mucho su hijo más que en lo básico, lo mínimo necesario para aparentar
ser un padre atento y amigable. Parece ser una figura distante para su hijo. Se encuentra
en una relación con Nancy, quien ya tenía hijos por su cuenta y con la cual ya tiene un
hijo compartido; Elías, este último no tiene gran relevancia en el texto, solo nos queda
claro que aparentemente el padre le tiene más aprecio a el que al protagonista, además
en la novela se nos presenta la duda de si realmente es hijo del padre del personaje
principalmente o de Nancy y alguien más, puesto que se menciona que solo se parece a
ella. Aparte de esto se nos dice que Elías es un niño callado, que posee múltiple
cantidad de aparatos, y que mantiene una relación neutra con el protagonista.
El “tata”, abuelo paterno del protagonista, un personaje que ha enviudado
recientemente y un verdadero fanático religioso cuya actitud roza constantemente con
un delirio, probablemente causado por la pérdida de su esposa. Tiene una mala relación
con la madre del protagonista, quien ha prometido no volver a pisar la casa del abuelo
en su vida, además no parece tener una gran relación con el padre del personaje
principal. Posee una especie de cabaña de retiro de oración en su hogar.

El tío Neno, tío de lado paterno, es un personaje que aparece mencionado múltiples
veces a lo largo de la novela, está muerto, el texto sugiere que el padre del personaje
principal y que su muere tuvo fuertes efectos sobre la vida del protagonista y toda su
familia.

Respecto al contexto social, la época, seria situado probablemente alrededor de los 90’s
o los 2000’, aunque hay pocas referencias a la época a lo largo del texto, en respuesta a
este cuestionamiento el autor, Diego Zúñiga, dijo lo siguiente:

“Lo que pasa es que no me interesa centrar el foco ahí, la infancia de él está
marcada por otras cosas. Hubiese sido impostado, en realidad inverosímil, que
ese protagonista viera MTV. ¿Lo imaginas enamorado de Ruth Infarinato? La
verdad es que yo no. Siento que hay historias en las que estas marcas pop tienen
sentido, pero en general creo que es difícil manejar “lo pop” sin que suene
impostado, la verdad. Los objetos pop, como los llamas, son algo que está ahí,
que pasa, como un ruido de fondo, no como algo protagonista. Al menos yo lo
veo así.”

Se registra en la novela un paisaje principalmente visto desde el Chile urbano,


conformado por disputas callejeras y delincuencia, problemas económicos, devociones
religiosas, piezas a veces hacinadas, un mundo cuyos entretenimientos se centran en el
futbol principalmente en el cual la televisión o los videojuegos están constantemente
presentes. Dando una imagen de un Chile casi atemporal, totalmente reconocible y
quizás incluso demasiado expuesta.

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