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El consumo de agua embotellada en el Perú ha seguido la misma tendencia según Euromonitor

(2016) manifestando un crecimiento de 93% entre el 2010 y 2015

Potencial y entorno

A pesar de que el consumo en el Perú se ha incrementado en los últimos años, los niveles de
consumo promedio anuales por persona están entre los más bajos de Sudamérica. En el año
2015, el consumo per cápita de agua embotellada en el Perú fue de 19.2 litros, mientras que
en Chile fue de 25.5 litros, Brasil 40.8 litros, en Uruguay de 79.6 litros y en Argentina de 114.7
litros. Estos niveles de consumo en comparación con los de México (174.3 litros per cápita) son
todavía muy bajos, lo cual demuestra que podría haber un potencial mercado por explotar
(Euromonitor, 2016).
México lidera el listado con un impresionante registro de 163,5 litros per cápita durante el
2014. Según un reportaje de la BBC esta cifra alta es debida a la falta de confianza en los
sistemas operadores de agua y la alta disponibilidad de agua embotellada.
México es seguido por dos otros países de Centroamérica y el Caribe, Guatemala y la
Republica Dominicana, y después por Argentina. Es interesante notar que el Grupo
Danone, la multinacional agroalimentaria francesa, es el dueño de las marcas de agua
embotellada más populares en México, Argentina y Uruguay.

La firma explica que un garrafón de agua es realmente más accesible, puesto


que el precio por litro es de 0.85 centavos, mientras que la presentación
individual o de botella es de hasta siete pesos por litro
BRASIL
Las altas temperaturas récord de este verano son las responsables de la explosión del
consumo. A pesar de ello, no se esperan faltas de producto ni reajustes de precios.
"La industria tiene la capacidad de abastecer con holgura la demanda, porque la oferta
la venía duplicando", explicó el preSidente de la Asociación Brasilera de la Industria de
Aguas Minerales (Abinam), Carlos Alberto Lancia.
CHILE

Los chilenos están consumiendo 29 litros hoy en día al


año, versus los 13 que se tomaban en 2006. La razón es
que los gustos de los consumidores se han ido sofisticando
en los últimos años, sobre todo en las regiones del norte.
Una vida más saludable y un consumidor más informado han impulsado, en los últimos 10 años,
un aumento explosivo en el consumo de agua embotellada en Chile. Como contraparte, el de
bebidas ha ido experimentando una baja constante. Según estima Euromonitor International,
hacia 2020 un chileno comprará 117 litros de bebida gaseosa al año, lo que significará una
contracción de cerca del 2% anual.
Desde el organismo explican que los cambios en el estilo de vida que impulsan el consumo de
agua embotellada, que también incluyen el aumento de la práctica deportiva, las preocupaciones
nutricionales de los padres para los niños en edad escolar y la relativa mejor proporción de
costo-beneficios, ya que ha habido preocupación pública por la prevalencia de sobrepeso y las
enfermedades relacionadas con la obesidad en todas las edades, pero especialmente en los niños.

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