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GUIA DE LA DIETA ALCALINA Is PDF
GUIA DE LA DIETA ALCALINA Is PDF
Una guía práctica sobre la dieta alcalina, cómo realizarla correctamente, alimentos
alcalinos, neutros y ácidos y valor del pH de los alimentos. Incluye un plan depurativo
completo de una semana con recetas fáciles y sabrosas para cada día.
www.bionutricionortomolecular.wordpress.com
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bionutricionortomolecular.wordpress.com
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Este libro puede ser adquirido para uso personal como guía práctica. Para obtener más
información, póngase en contacto con consultabionutricion@gmail.com
Si bien todas las precauciones se han tomado en la preparación de este libro, el editor y los
autores no asumen responsabilidad alguna por errores u omisiones, ni de los daños que
resulten del uso de la información contenida en este documento.
Químicamente los ácidos son iones de hidrógeno con carga positiva (H+) y las bases iones
de hidróxido con carga negativa (OH-) en los que se unen un ion de hidrógeno y uno de
oxígeno (grupo hidroxilo). Cuando se produce una mayor carga de iones libre (H+)
entonces obtenemos un medio ácido, cuando se produce una carga mayor de iones libre
(OH-) obtenemos un medio alcalino.
Valor del pH
Hígado: es el órgano que nos da energía y nos ayuda a depurar nuestro organismo.
Cuando se encuentra sobrecargado y no es atendido adecuadamente a través de
cuidados y depuraciones periódicas provocará la intoxicación del organismo. La
degradación de proteínas ingeridas a través de la dieta produce amoníaco que es
metabolizado por el hígado en forma de urea y agua para poder ser excretado.
Estómago: en el estómago se forman las células parietales que dan como resultado los
iones ácidos imprescindibles durante la digestión. Estos ácidos son el ácido clorhídrico que
sitúa a el estómago en un pH de entre 1-3 pH (muy ácido), y es en este proceso de
creación de ácidos donde se generan a su vez bases (carbonatos de hidrógeno) que serán
transportados por la sangre y que órganos como el páncreas y el hígado necesitan para
poder formar las secreciones alcalinas (jugos pancreáticos y bilis) tomando las bases de la
sangre con esta finalidad. Una parte de ese carbonato de hidrógeno se quedará en la
sangre y será destinado al mismo equilibrio ácido-base y el resto será absorbido por los
músculos para equilibrar los ácidos depositados en ellos.
Acidosis latente crónica: se da cuando este estado se mantiene durante años. Los sistemas
de amortiguación están sobrecargados o agotados. En este estado numerosas molestias se
hacen presentes y la solución no es otra que realizar un tratamiento alcalinizante a largo
plazo.
Acidosis aguda: en este estado se hace uso de todos los sistemas de amortiguación del
cuerpo. Se presenta con inspiraciones y espiraciones de forma constante con el fin de
liberar la mayor cantidad posible de ácidos a través de los pulmones. Este estado de
La alimentación
Por inadecuada, desequilibrada y desordenada pudiendo afectar a largo plazo a todos los
sistemas de amortiguación generando un estado de acidosis crónica. Es a partir de la
combustión de los alimentos como se produce en nuestro organismo los residuos
metabólicos para ser transportados y posteriormente eliminados. Éstos pueden verse
afectados por una flora intestinal ineficiente, un estilo de vida insano, la alimentación
tóxica, el aire contaminado, y un exceso de acidez a través de la alimentación o por
toxicología farmacológica (medicamentos). Hay que tener en cuenta que el equilibrio
ácido-base es responsable sobre todo de los sistemas de excreción del cuerpo que eliminan
los ácidos o bases según sus necesidades. Si en los sistemas (órganos) se acumulan toxinas
que nunca se limpian sea por razones metabólicas, patologías o deficiencias del organismo
todo equilibrio ácido-base de desestabilizará irremediablemente. La alimentación, el estilo
de vida y la actividad física son factores claves para recuperar y mantener este equilibrio.
Existen alimentos capaces de producir tanto ácidos como bases, por ejemplo la comida
rápida o fast-food es un tipo de alimentación altamente acidificante. También lo es una
alimentación alta en proteínas de origen animal, alcohol y refrescos, refinados (hidratos de
carbono) y azúcares. Por el contrario una alimentación basada en vegetales, granos
integrales y completos y legumbres, es altamente alcalinizante. Los minerales y
oligoelementos poseen un efecto alcalinizante y se hallan presentes en cantidades
elevadas en los alimentos de origen vegetal.
El ejercicio
El ejercicio adecuado ayuda al cuerpo a liberar ácidos así como la sudoración. Ahora bien,
siempre estaremos refiriéndonos a un tipo de ejercicio regular y/o moderado, adecuado a
cada persona y sin ningún tipo de sobre esfuerzo puesto que el ejercicio que sobrecarga el
cuerpo de forma exagerada exige a los sistemas de amortiguación que se pongan en
marcha, provocando estados de acidosis (por ej. en forma de dolores musculares). Se
recomienda una alimentación alcalina antes de la realización de ejercicio para poder
disponer de suficientes reservas en caso de ser necesario.
El estilo de vida
También en los diferentes estados de la vida el equilibrio ácido-base tiene su papel. Éste
depende básicamente de como nos alimentemos en algunos momentos importantes de la
vida como la infancia, la adolescencia, el embarazo y lactancia, la edad adulta y la vejez.
Cuanto más jóvenes seamos podremos enfrentar con mayor eficacia los estados de acidez
metabólica, pero a medida de que cumplamos años y con el añadido de otros factores
(estilo de vida, etc.) esta capacidad se verá mermada siendo cada vez más ineficaz. Es de
lógica que a los niños, adolescentes, bebés y futuras madres una alimentación libre de
toxinas les supondrá mayores beneficios para la salud. En la edad adulta será únicamente
nuestra la responsabilidad de una alimentación sana, natural y equilibrada que nos aporte
verdadera salud. Además ésta será nuestro billete a una vejez lo bastante buena en cuanto
a problemas de salud se refiere. La salud entra por la boca, no lo olvidemos nunca ya sea
tanto a la presente como a la futura.
Durante el embarazo la recomendación es llevar una alimentación lo más alcalina posible
(rica en bases) con considerable cantidad de verduras, frutas, granos y cereales integrales,
legumbres, pescados y carnes magras. La leche materna tiene un equilibrio absoluto para
el bebé aportando un grado de acidez que nunca podrá recargar el metabolismo del
lactante. Proporcionará el equilibrio ácido-base que el niño necesita, siendo la orina del
bebé ligeramente alcalina (8-8.5 pH). Durante la infancia será tarea de los padres enseñar a
los niños que la salud está en el plato, sabiendo darles un equilibrio entre lo alcalino y los
caprichos. La adolescencia es una época ácida llena de comida basura y con muy poco
interés por escuchar ningún buen consejo o seguir ninguna pauta saludable. Tendrá que
ser con paciencia y sabiduría como se enseñe a comer equilibrada y sanamente a estos
jóvenes. Durante la menopausia el equilibrio ácido-base se ve realmente descompensando
sobre todo por la disminución en la producción de hormonas que afectan no sólo física
sino psicológica y emocionalmente a las mujeres, en esta época de la vida será de especial
utilidad tomar la decisión de llevar una alimentación alcalina hasta el resto de nuestros
días, evitando y minimizando cualquier posibilidad de sufrir enfermedades o
complicaciones mayores.
Huesos: es la mayor reserva de bases de nuestro cuerpo, tanto que un estado de acidosis
crónica provoca la pérdida ósea. Hasta aprox. Los 35 años de edad creamos una estructura
ósea sólida y fuerte, tras lo cual comienza el estancamiento o la pérdida de densidad ósea.
Esto dependerá de factores bioquímicos internos, del ejercicio y por supuesto de la
alimentación. La alimentación en la infancia supone otro factor importante para que en la
vida adulta y en la vejez la pérdida de densidad ósea sea lo menos perjudicial posible. La
importancia del equilibrio ácido-base es mayor cuanto más avanzada esté el proceso de
pérdida ósea.
Sistema inmunológico: un estado de acidosis activa la pérdida de proteínas del cuerpo así
como disminuye la producción de componentes proteínicos de la sangre (inmoglobulinas)
provocando una falta de anticuerpos. Las enzimas también se producen de manera
insuficiente afectando todos los sistemas de nuestro organismo, pues son específicamente
imprescindibles para el mantenimiento de la vida. Al debilitar nuestro sistema
inmunológico perdemos la capacidad de hacer frente adecuadamente a las enfermedades.
Cáncer: aunque en la actualidad no todas las causas del cáncer pueden ser explicadas aún,
se sabe que son muchos los factores que pueden influir en su desarrollo: contaminación de
todo tipo, alimentación tóxica, tabaco, etc. No obstante se sabe con certeza que las células
cancerígenas sobreviven en medios ácidos y que las células NK (encargadas de destruir
este tipo de tejidos malignos) no desempeñan tan bien esta función en un medio ácido.
Estas células forman parte del sistema inmunológico y si éste se halla debilitado no podrá
hacer frente a la curación. Es de vital importancia recomponer el sistema inmunológico
para ayudar a la recuperación si la enfermedad ya se ha producido. Los tratamientos
actuales pueden curar muchos tipos de cáncer pero no obstante son altamente agresivos
perjudicando y debilitando aún más el organismo. Por esta razón una alimentación
alcalina resulta imprescindible como parte del tratamiento.
Sistema nervioso: en un estado de acidosis el organismo libera muchas más hormonas del
estrés que en un estado alcalino. Estas hormonas entre tantas son: adrenalina y tiroxina y
actúan como aceleradores que activan el sistema simpático (es la parte del sistema
nervioso que puede activarse de forma voluntaria y que prepara el cuerpo para situaciones
de estrés). Si su liberación aumenta como resultado de este desequilibrio nos sentiremos
acelerados, intranquilos, nerviosos, tendremos ansiedad, insomnio, etc. Todos estos
síntomas son a la larga agotadores y como no se producen fases de recuperación
acabaran por debilitarnos en exceso dando como resultado cansancio crónico, bajo
rendimiento, disminuyendo la capacidad de concentración y memoria, alterando el estado
de ánimo, y en algunos casos desarrollando incluso estados depresivos. En un estado de
equilibrio ácido-base nuestro ánimo será regular y positivo, tendremos un sueño reparador
y disfrutaremos de mayor nivel de energía.
Enfermedades acidificantes
Mientras que en sangre excepto en estados de disfunción metabólica y por acción de los
sistemas de amortiguación el pH se mantiene siempre estable, su valor en la orina y saliva
varía constantemente bajo condiciones que pueden ser controladas y medidas con
facilidad. El valor del pH en las células mismas y en su medio intracelular solamente puede
medirse bajo complicadas pruebas de laboratorio. Estas pruebas sólo pueden ser realizadas
por un experto en el laboratorio donde conjuntamente con el valor del pH en sangre
puede medirse también la capacidad de amortiguación de los líquidos en los tejidos, y
suelen ser llevadas a cabo bajo anomalías severas del equilibrio ácido-base.
Nos centraremos en las que podemos realizar nosotros mismos en casa mediante las
conocidas tiras reactivas para medición del pH que pueden adquirirse en cualquier
farmacia. Estas tiras abarcan una escala de 5.0 a 8.0 pH y se reconocen por la coloración
del papel. Todas vienen con una escala de pH indicada por colores para poder identificar
el resultado de valor del pH. Estas tiras son muy sencillas de utilizar, sólo hace falta
introducir un recipiente con la orina y esperar unos minutos hasta que se coloree para
conocer cual es nuestro pH en orina.
El valor adecuado de pH
El valor de pH de la orina fluctúa constantemente, así como los biorritmos rigen las
funciones diarias de nuestro organismo el pH de nuestra orina también se ve sometido a
cambios dentro de un mismo día, incluidas en aquellas personas que poseen un correcto
equilibrio ácido-base. Por esta razón ciertas fluctuaciones dentro del pH en un mismo no
son siempre indicativo de que exista un desequilibrio ácido-base. Este valor se verá
incrementado tras la ingesta de una comida alcalina, siendo por la mañana más bien ácido
(entre 5.0 y 6.5 pH).
Con una única medición no podremos obtener un resultado objetivo para medir el estado
de acidosis metabólica. Es necesario realizar varias mediciones a lo largo de un mismo día
para obtener un perfil fiable.
Para obtener un resultado fiable, las mediciones se han de realizar siete veces en un día
teniendo en cuenta para ello lo siguiente:
Si los valores de pH en orina antes del desayuno y antes de dormir por las noches da como
resultado por debajo de 6.0 se establece dentro de la normalidad.
Después de las comidas estos valores deberían situarse hacia 7.0 o más. El pH debería en
estado de salud oscilar entre los 5.0-6.5 por la mañana temprano y a medida que avanza el
día subir hacia 7.0-7.4 para volver a bajar por la noche.
Se recomienda apuntar a conciencia los resultados de todas las mediciones a fin de poder
elaborar un perfil individual del pH y conocer así nuestro estado de acidosis metabólica. De
esta forma podremos obtener un biorritmo de nuestro pH más preciso, conociendo sus
curvas a lo largo de un mismo día.
Las horas son orientativas y pueden adaptarse a la actividad diaria de cada persona. Es
aconsejable realizar al menos 5 comidas diarias el día de la medición y no cambiar nuestra
A corto plazo:
A largo plazo:
que ante cualquier duda siempre acuda a su terapeuta de confianza y realice todas las
consultas oportunas.
El ayuno y su influencia en el pH
Cuando ayunamos estamos privando a nuestro organismo de bases, el ayuno sobre todo
prolongado produce acidosis. Es responsable de una desmineralización importante,
porque como ya hemos dicho este estado se amortigua mediante el pH de la sangre (sal
ósea) fosfato que extrae de los huesos generando por tanto descalcificación. Si por alguna
razón se ha de ayunar, siempre deberemos acompañar el ayuno con una ingestión de
carbonato hidrogenado para proteger la salud ósea, por ej. el agua mineral sin gas rica en
carbonato hidrogenado o caldo de verduras elaborado con esta agua ( 2-3 litros diarios) es
un buen paliativo para los estados inevitables de ayuno.
Sabemos que la base de nuestra salud bien podría residir en nuestros intestinos. Cualquier
alteración que afecte al funcionamiento intestinal puede verse reflejada en nuestro estado
de salud general, la mayor parte de nuestro sistema inmunológico se halla en los
intestinos, por lo tanto cualquier trastornos afectará de forma acuciante nuestra vitalidad.
Cuidar la flora intestinal, la permeabilidad y sus funciones de desecho es fundamental para
asegurarnos una vida libre de acúmulos tóxicos. Es en el intestino donde absorbemos los
nutrientes también, por esta razón la pared intestinal y su eficacia y estado a la hora de
tomar conciencia de nuestra salud es muy importante. Además de las enfermedades
intestinales y las alergias, hay tres factores fundamentales que siempre debemos tener en
cuenta a la hora de velar por nuestra buena salud intestinal:
Todo ello perjudica seriamente la salud intestinal y matan las bacterias beneficiosas que
ejercen una función protectora del intestino y del organismo mismo. Si la dieta habitual se
halla compuesta en gran medida por alimentos muy acidificantes la flora bacteriana
buena, muere porque no puede sobrevivir en un medio ácido. En su lugar se desarrollarán
parasitosis, y síndromes intestinales como la candidiasis intestinal crónica.
Si no existe un intestino sano tampoco habrá equilibrio ácido-base y viceversa. Ahora bien,
si antes de comenzar con la dieta alcalina se presenta problemas intestinales de larga
duración es muy recomendable primeramente acudir a la consulta de su nutricionista
ortomolecular de confianza para solucionar este problema primero, preparar el terreno, re-
equilibrar la salud intestinal y luego disponerse a adoptar la nueva alimentación.
El agua
Agua de manantial: procede de fuentes naturales pero han de contener una cantidad
mínima de minerales u oligoelementos.
Agua corriente: puede ser del grifo o desalinizada (agua de mar sin sal) con lo cual
también puede ser embotellada.
El tipo de agua más favorable para conseguir un equilibrio ácido-base adecuado a nuestro
organismo es el agua sin gas con una alta concentración de carbonato de hidrógeno
(HCO3).
El agua debería contener al menos 600mg/l de esta sustancia, teniendo también como
marco de referencia los siguientes minerales:
Por fermentación del ácido láctico los panes de harina integral, centeno y avena logran
una bebida llamada “bebida de pan”. Esta bebida es muy rica en minerales,
oligoelementos, vitaminas B, E, y aminoácidos (enzimas digestivas). Posee un ligero sabor
La dieta alcalina
• Utilizaremos papel vegetal tanto para cocinar como para envolver los alimentos y
dejaremos a un lado el papel de aluminio y el film plástico
• Los utensilios de cocina, tanto para preparar los alimentos como para cocinarlos
deberán ser de: madera, cerámica, acero inoxidable a ser posible quirúrgico (es el
que lleva en su composición un determinado porcentaje de titanio), hierro colado
vitrificado, barro cocido sin barnices tóxicos, bambú y cristal (botes, recipientes, etc.).
Evitaremos utilizar utensilios hechos de aluminio, cobre y plástico.
• Si no tenemos opción y debemos tirar de algún alimento envasado que sea siempre
en bote de cristal
• A ser posible algunos alimentos como los cereales, granos, legumbres, huevos y
carnes incluidas las aves deberían ser de producción ecológica y biológica y
también los derivados de todos estos alimentos.
• Los embutidos (salchichas, patés, etc.), sobre todos aquellos que sean de
elaboración industrial y con aditivos deberían limitarse en la dieta, si acaso
prefiriendo solamente y en algunas ocasiones especiales el jamón serrano, el pavo y
el jamón cocido natural
• Los alimentos grasos como las carnes de cordero y cerdo deberían ser desterrados
de la dieta o reservados para ocasiones realmente excepcionales
• Los alimentos lácteos de origen animal también han de ser algunos suspendidos de
la dieta de forma permanente, otros podrán ser sustituidos. Los alimentos que
desterraremos de nuestra dieta son: margarina, leche y quesos muy grasos. Todos
los lácteos pueden ser sustituidos por lácteos y derivados de leche de cabra (leche,
quesos, nata etc.) y en concreto la nata por la leche de coco
• Los aceites solamente en pequeñas cantidades y de las mejores: oliva virgen, nuez,
sésamo, cártamo
• La sal se ha de sustituir por sal marina de hierbas, sal marina, sal del Himalaya
• Se pueden emplear todas las especias y hierbas frescas sin limitaciones
En la siguiente tabla se clasifican los alimentos según tengan efecto alcalino, ácido o
neutro en el organismo. Se recomienda tenerla siempre a mano hasta aprendernos bien la
clasificación de los alimentos.
Los alimentos alcalinos evidentemente podrán ingerirse con total liberta, los ácidos con
extrema moderación y los neutros también pueden comerse libremente puesto que no
producen en el organismo ni alcalinidad ni acidez alguna. Recordando siempre que el 80%
de los alimentos de nuestra dieta han de ser alcalinos y el 20% ácidos.
También podrás consultar el anexo al final de la guía con una clasificación de los alimentos
por su valor de pH y el cuestionario para saber si estás en un estado de acidosis metabólica
y en qué medida.
Siguiendo el criterio de esta sencilla tabla, ahora puedes elaborar tus menús en
dependencia de esta valiosa información para organizar tu dieta alcalina.
Como la dieta alcalina también es una dieta desintoxicante del organismo, no será
necesaria ninguna preparación previa para empezarla, pues ella misma tiene efecto
depurativo y por tanto no requiere una desintoxicación aparte. Obtendrás este beneficio
extra también con la misma dieta alcalina, además de conseguir tu equilibrio ácido-base.
Es muy posible que hacia el tercer día cualquier síntoma que pudiera padecer se pueda
agravar (fatiga, dolor, desgano, apatía, etc.), esto se llama crisis curativa y es totalmente
normal como respuesta de desintoxicación del organismo. Hacia el tercer día estos
síntomas comienzan a desaparecer y es entonces cuando se empieza a sentir los buenos
efectos de la alimentación alcalina al notar un aumento de la vitalidad y la energía y la
remisión de muchos dolores de carácter crónico.
Menú de 7 días para una alcalinización equilibrante (esta dieta podrá realizar también
durante 14 o 21 días seguidos para un efecto más prolongado, o incluso adoptarse como
alimentación habitual). A continuación de proponen menús para cada día de la semana
durante una semana completa.
Primer día
Desayuno:
Muesli de frutas: 2 cucharadas de semillas de girasol, 1 cucharada de uvas pasas, 1 pera
madura, 1 plátano maduro, 3 cucharadas de yogur natural, 2 cucharadas de cornflakes y
miel natural de abejas para endulzar a gusto.
Preparación: lavar y pelar las frutas, trocearlas y colocarlas en un bol. Añadir las semillas, las
pasas de uvas, el yogur y la miel. Se espolvorea con un puñado de cornflakes y se disfruta
de un delicioso desayuno alcalinizante.
Comida:
Coliflor con patatas gratinadas: 2 patatas medianas, 1 coliflor pequeña, ½ L. de caldo
vegetal en polvo, 1 yema de huevo, ½ vaso de nata líquida (o leche de coco), sal marina y
pimienta negra, un pellizco de nuez moscada, ½ manojo de perejil fresco, 2 cucharadas de
queso parmesano rallado, mantequilla un pellizco
Preparación: lavar las patatas y hervirlas en agua con la piel. Escurrirlas y quitarles la piel
una vez cocidas. Reservarlas pero manteniéndolas templadas.
Dividir la coliflor en ramilletes pequeños, lavarla y cocerla hasta que esté al dente, unos 10
minutos. Engrasar un molde para horno con la mantequilla, cortar las patatas por la mitad
y mezclarlas con la coliflor. Añadir ½ vaso de caldo. Mezclar la yema con la nata, el queso
parmesano y las especias y hierbas y repartirlo sobre la verduras. Llevar al horno y gratinar
unos 10 minutos. Espolvorear el perejil fresco picado por encima.
Canónigos con nueces: 100 gr. de canónigos limpios y frescos, 4 nueces picadas, 1
cebolleta pequeña, vinagre de manzana, sal marina y pimienta negra, aceite de oliva.
Preparación: colocar en un bol para ensalada los canónigos limpios, trocear las nueces y
añadir junto con la cebolleta picada en juliana. Mezclar el vinagre con aceite de oliva,
sal marina y pimienta y aliñar la ensalada.
Cena:
Sopa de tomate: 500 gr. de tomates maduros, 1 cebolla pequeña, 2 cucharadas de aceite
de oliva, sal marina y pimienta negra, 1 cucharadita de hierbas frescas (perejil, albahaca,
cebollino), 1 rebanada de pan de molde integral, 1 cucharadita de mantequilla, 2
cucharadas de nata.
Preparación: lavar los tomates y trocearlos en dados. Pelar la cebolla y trocearla finamente.
En una cacerola añadir el aceite de oliva y sofreír los tomates y la cebolla, agregar la sal y
pimienta y las hierbas frescas picadas. Añadir un litro de agua mineral o filtrada y dejar
cocer unos 10 minutos. Retirar del fuego y agregar la nata para espesarla un poco. Trocear
la rodaja de pan de molde y freír en la mantequilla hasta que estén crujientes. Servir la
sopa con los tropezones y espolvorear con cebollino finamente picado. Se puede aliñar la
sopa con un poco de aceite de oliva y vinagre de manzana si apetece.
Se puede comer una pieza de fruta fresca, un yogur natural con semillas y miel, una
tostada de pan integral con tomate y un té verde con limón, etc.
Segundo día
Desayuno:
Muesli activo: manzana, 1 puñado de uvas pasas, 2 cucharadas de germinados de alfalfa y
trigo, 1 cucharada de lino, 1 cucharada de zumo de limón, 3 cucharadas de yogur natural.
Preparación: lavar la manzana y trocearla. En un bol mezclar todos los ingredientes.
Comida:
Gratinado de verduras y alforfón: 100 gr. de alforfón, 1 hoja de laurel, ¼ L de caldo de
verduras en polvo, 1 cebolla, 100 gr. de champiñones, 1 zanahoria, ½ apio, 1 puerro, 1
diente de ajo, 1 puñado de perejil fresco picado, sal marina y pimienta negra, 4 cucharadas
de nata o leche de coco, 1 yema de huevo, mantequilla, 50 gr. de queso parmesano, aceite
de oliva.
Preparación: preparar en un 1 L de agua mineral o filtrada el caldo y añadir el alforfón
junto con la hoja de laurel que deberá hervir durante unos 20 minutos. Pelar y picar
finamente la cebolla y lavar y trocear los champiñones en láminas. Lavar y rallar la
zanahoria. Lavar el apio y trocearlo finamente y también el puerro y el ajo. Calentar el
aceite y sofreír la cebolla, añadir el ajo y los champiñones junto el resto de las verduras.
Sazonar con sal marina y pimienta negra. Mezclar aparte la nata con el queso rallado y la
yema de huevo y añadir toda la verdura salteada incorporando también el alforfón colado.
Enmantecar un molde y añadir la mezcla. Gratinar en el horno unos 15 minutos
espolvoreado con el queso.
Cena:
Sopa de coliflor con pan: ½ coliflor fresca, ½ L. de caldo vegetal en polvo, 1 cucharadita de
mantequilla, 1 cucharadita de harina integral, 1 puñado de perejil fresco picado, sal marina
y pimienta negra, 1 pizca de nuez moscada, 1 rodaja de pan de molde integral.
Preparación: lavar y hervir la coliflor en ramilletes. Cuando esté lo suficientemente blanda,
triturarla hasta obtener una consistencia fina pero cremosa. Añadir la cucharadita de
harina integral, sazonar con sal y pimienta y nuez moscada. Mezclar bien para que se unan
los sabores. Servir con el perejil espolvoreado y tropezones de pan de molde integral.
Tercer día
Desayuno:
Melón y sandía fresca
Preparación: trocee el melón y la sandía y sírvalo en un bol. Puede acompañarlo con pan
de espelta o harina integral untando con aceite de oliva y un yogur natural con semillas y
miel.
Comida:
Sopa de calabaza: 250 gr. de calabaza (pulpa), 1 cebolla pequeña, ½ apio, ½ puerro, 2
cucharadas de aceite de oliva, un puñado de perejil picado fresco, 1 L de caldo vegetal en
polvo, 2 cucharadas de nata, 2 lonchas de jamón serrano.
Preparación: trocear la calabaza pelada en cubos pequeños, la cebolla, el apio y el puerro.
Calentar un poco de aceite de oliva y sofreír ligeramente la cebolla con el puñado de
perejil hasta que esté transparente. Añadir el resto de verduras y cubrir con el litro de
caldo. Hervir durante 20 minutos. Triturar toda la verdura hasta obtener una crema (añadir
la nata para espesar), sazonar con sal marina, pimienta negra molida. Servir con perejil
espolvoreado y el jamón serrano cortado en finas tiras.
Cena:
Crema de aguacate y germinados: 1 aguacate maduro, 2 champiñones, un puñado de
perejil fresco y cebollino picado, 1 puñado de germinados de alfalfa, un puñado de
germinados de rábanos, 1 cebolleta picada finamente, 2 cucharadas de aceite de oliva,
zumo de limón, sal marina y pimienta negra.
Preparación: aplastar la pulpa del aguacate con un tenedor hasta formar un puré. Limpiar
los champiñones y picarlos finamente, a continuación mezclar todos los ingredientes: la
cebolleta, las hierbas, sazonar con sal y pimienta y el aceite de oliva con el zumo de limón.
Servir la crema acompañada de tortas de arroz integral.
Cuarto día
Desayuno:
Macedonia de colores: 4 fresas, 1 kiwi, 1 mango, 1 pera, 5 uvas negras, miel natural de
abejas, germinados de cereales a gusto (quinoa, amaranto, etc.)
Preparación: lavar y trocear toda la fruta. Colocarla en un bol y mezclarla con los
germinados, aliñar con la miel a gusto.
Comida:
Brócoli crudo: 200 gr. de brócoli, 1 zanahoria, 1 cebolla, ¼ L de leche de coco, 2
cucharadas de aceite de oliva, sal marina y pimienta negra molida, zumo de limón, 1
puñado de semillas de girasol.
Preparación: lavar el brócoli y separarlo en pequeños ramilletes. Cocerlos en abundante
agua filtrada o mineral con un poco de sal durante unos 3-5 minutos. Retirarlos y enfriarlos
con agua fresca. Escurrirlos bien y reservarlos. Pelar y rallar finamente la zanahoria y la
cebolla. Mezclar toda la verdura añadiendo la leche de coco y sazonando con sal y
pimienta, calentar la salsa durante menos de 5 minutos antes de añadirla. Servir en boles
con las semillas de girasol. Puede acompañarse con tortas de arroz integral.
Cena:
Ensalada de apio y zanahorias: 1 apio, 2 zanahorias, ½ L de caldo vegetal en polvo, 125 gr.
de nata o leche de coco, 1 cucharada de vinagre de manzana, sal marina y pimienta negra
molida.
Preparación: lavar y cortar el apio y las zanahorias. Cocerlos en el caldo hasta que estén al
dente. Mezclar el apio con los dados de zanahorias y el resto de los ingredientes y dejarlo
reposar unos 30 minutos. Servir con pan integral de semillas. Este plato es ideal para
acompañar con una taza de caldo vegetal.
Quinto día
Desayuno:
Mousse de frutos secos con pan integral: 2 ciruelas deshidratadas, 2 dátiles secos, 1
puñado de uvas pasas, 2 albaricoques secos, ½ taza de almendras o avellanas picadas, 1
pellizco de canela.
Preparación: poner la noche anterior en remojo los frutos secos. Por la mañana triturarlos a
todos y mezclar con las almendras o avellanas picadas y un poco de canela. Untar el pan
integral con esta nutritiva mousse, también se puede untar sobre tortas de arroz, espelta o
quinoa.
Comida:
Patatas al horno con queso fresco de cabra para untar y germinados: 4 patatas cocidas,
250 gr. de queso fresco untable de cabra o en su defecto de queso de cabra hecho crema,
100 ml de leche de cabra o de leche vegetal, 2 cucharaditas de aceite de oliva, 2
cebolletas, un puñado de perejil y cebollino fresco picados, un puñado de germinados de
rabanitos, alfalfa, sal marina y pimienta negra molida, ¼ de pepino, un puñado de berros,
mantequilla.
Preparación: precalentar el horno, mientras tanto lavar las patatas y cortarlas por la mitad.
En una bandeja para horno untar la mantequilla y colocar las mitades de las patatas con la
parte cortada hacia abajo. Hornear durante unos 30 minutos. Batir el queso con el aceite
de oliva y la leche. Lavar las cebolletas y cortarlas en aros muy finos añadiéndolas a la
mezcla anterior junto con las hierbas picadas y los germinados. Sazonar. Pelar el pepino,
rallarlo y añadirlo a la mezcla una vez haya soltado toda el agua. Cuando las patatas estén
listas, servirlas en un plato junto la crema de queso y germinados y espolvorear con los
berros.
Ensalada de endivias: ½ endivia, 1 cebolla, zumo de limón, sal marina y pimienta negra
molida, ¼ de cucharadita de mostaza, ¼ de cucharadita de miel, 1 cucharada de aceite de
oliva.
Preparación: lavar la endivia y cortarla en juliana, pelar la cebolla y picarla finamente
añadiéndola a las endivias. Preparar el aliño mezclando el zumo del limón, el aceite de
oliva, salpimentando, añadiendo la mostaza y la miel y batiendo todo muy bien. Cubrir la
ensalada con la salsa y dejar reposar unos minutos. Se puede servir acompañadas de unas
patatas hervidas con aceite de oliva virgen, sal marina y pimienta negra molida o nuez
moscada.
Cena:
Quiché de verduras: para la masa: 100 gr. de harina integral, sal marina, 50 gr de
mantequilla y 1 yema de huevo. Si se desea se puede emplear cualquier otra harina
alcalinizante de nuestro gusto, por ej. de amaranto, quinoa, espelta, etc.
Para el relleno: ½ calabacín, ½ pimiento rojo, 1 cebolla, 1 diente de ajo, 250 gr. de
champiñones, 2 cucharadas de aceite de oliva, 60 gr. de queso de cabra, sal marina y
pimienta negra molida, orégano y albahaca fresca picados, 60 gr. de mozzarella,
mantequilla.
Preparación: primero preparar la masa brisa, se hará mezclando la harina con sal,
mantequilla y la yema de huevo. Se dejará reposar en la nevera unos 30 minutos envuelta
en papel vegetal. Luego se extenderá sobre un molde para horno con el mismo papel
vegetal empleado en su elaboración.
Preparar el relleno: lavar y cortar todas las verduras en trozos pequeños. Precalentar el
horno y mientras tanto, sofreír todas las verduras unos minutos. Añadir el queso de cabra
desmenuzado, salpimentar y agregar las hierbas aromáticas picadas finamente. Repartir la
mezcla en el molde con la masa preparada, cubrir todo con finas lonchas de mozzarella o
Sexto día
Desayuno:
Muesli de semillas: un puñado de semillas de calabaza y otro de semillas de girasol, un
puñado de avellanas picadas, 5 nueces de macadamia o normales, un puñado de uvas
pasas, 50 gr. de frutas secas: dátiles, ciruelas, higos, etc.) 1 manzana, ½ plátano, 4
cucharadas de yogur natural y miel.
Preparación: se puede poner en remojo la noche anterior a la preparación las frutas secas
si se desea. Lavar la manzana y trocearla, cortar el plátano en rodajas. Colocarlas un bol y
añadir las frutas secas, las semillas y los frutos secos picados. Agregar el yogur y la miel y
mezclar.
Comida:
Verduras al wok con arroz: 50 gr. de arroz integral o basmati (el arroz integral debe estar
en remojo al menos 12 horas antes de su cocción), 1 zanahoria, 100 gr. de coliflor, 150 gr.
de brócoli, 50 gr. de judías verdes, 100 gr. de maíz en grano, ¼ L de caldo vegetal en
polvo, 2 cucharadas de aceite de oliva, 1 diente de ajo, un puñado de germinados ( a
gusto), 1 cucharadita de tamari (salsa de soja sin trigo), un puñado de cilantro fresco
picado.
Preparación: cocer el arroz, si se opta por arroz integral éste necesita un tiempo de cocción
mayor que el arroz basmati o salvaje. Limpiar la verdura y trocearla, las judías se han de
hervir durante unos 10 minutos en el caldo vegetal. Calentar en el wok un poco de aceite
de oliva y rehogar el ajo, añadir las verduras y cocinar durante unos 5-10 minutos. Sazonar
con sal marina y pimienta negra molida. Mezclar con el arroz y dejar reposar unos minutos
antes de servir en boles acompañado con tamari y espolvoreado con el cilantro fresco.
Ensalada de tomate con germinados de alfalfa: 150 gr. de tomates frescos, pueden ser de
la variedad cherry, 50 gr. de germinados de alfalfa, 1 cebolleta, 2 cucharadas de aceite de
oliva, sal marina, vinagre de manzana.
Preparación: lavar y cortar los tomates, si son cherry cortarlos por la mitad. Colocarlos en
un bol para ensalada y añadir los germinados. Agregar la cebolleta picada finamente y
mezclar todo aliñando con el aceite de oliva, el vinagre de manzana y sal.
Cena:
Calabacines dorados con gambas: 2 calabacines, mantequilla, aceite de oliva, sal marina y
pimienta negra molida, 1 tomate grande, 6 gambas cocidas, 125 gr. de nata o leche de
coco, 1 rábano picante picado, orégano y tomillo, 1 diente de ajo.
Preparación: lavar los calabacines y cortarlos en rodajas. Dorar las rodajas de calabacín con
la mantequilla (puede ser en una sartén o en un plancha) sin dejar que se ablanden
demasiado. Escalfar el tomate en agua hirviendo y una vez retirada la piel y las semillas,
trocear finamente. Colocar la pulpa del tomate en una sartén con las gambas, añadir la
nata o la leche de coco y sazonar agregando también el rábano picante finamente picado
y las hierbas aromáticas junto con el ajo. Servir los calabacines con las gambas y su salsa. Se
puede acompañar con tortas de arroz integral.
Séptimo día
Desayuno:
Muesli de bayas: 400 gr. de bayas variadas (moras, frambuesas, grosellas, etc.), 80 gr. de
germinados de trigo (o a gusto), un puñado de pistachos, 100 gr. de yogur natural, miel,
vainilla en polvo o un trozo en vaina.
Preparación: lavar y escurrir las bayas y germinados. Colocar en un bol y mezclar con los
pistachos, el yogur, el trozo de vaina de vainilla y la miel.
Comida:
Tortas de tofu y mijo con verduras: 50 gr. de mijo, 150 ml de caldo vegetal, 1 colinabo, 1
zanahoria, 1 cucharada de tamari, 1 cebolla, un puñado de perejil fresco picado, aceite de
oliva, 50 gr. de tofu, 1 yema de huevo, sal marina y pimienta negra, un puñado de
cebollino picado, mantequilla.
Preparación: lavar el mijo y hervirlo en el caldo de verduras, luego bajar el fuego y cocerlo
durante 35 minutos. Escurrirlo y dejarlo enfriar.
Pelar el colinabo, la zanahoria y cortarlos en rodajas, cocerlos en un poco de caldo vegetal
y sazonar con tamari. Picar la cebolla y sofreírla con el perejil. Añadir al mijo, así como el
tofu cortado en dados pequeños y la yema del huevo, sazonar y amasarlo todo hasta
formar una pasta homogénea. Formar bolitas y con las manos húmedas ir dándole forma
de tortita, que doraremos en una sartén con mantequilla. Servir en un plato acompañadas
con el colinabo y la zanahoria espolvoreados con el cebollino.
Cena:
Ensalada de achicoria: 2 achicorias, 1 manzana, vinagre de manzana, nata o leche de coco,
mostaza, sal marina y pimienta negra, aceite de oliva, un puñado de eneldo picado.
Preparación: lavar las achicorias o radichetas y cortarlas en finas tiras. Colocarlas en una
ensaladera y añadir la manzana cortada en trozos o bastoncillos. Condimentar la ensalada
con una mezcla de aceite de oliva, nata o leche de coco, mostaza, sal y pimienta. Añadir a
la ensalada y dejar reposar unos minutos, servir y espolvorear con eneldo Se puede
acompañar con lomo de salmón al horno.
Infusión desacidificante
Suplementos
Es importante que comprenda que tras la dieta alcalina de una semana si aún no se ha
decidido a adoptar esta nueva dieta como su forma habitual de alimentación deberá
ayudar de otra forma a su organismo mientras decide si da el paso o lo posterga. Hay unos
suplementos especialmente alcalinizantes y por tanto muy recomendables en estos casos,
sobre todo si sabe con certeza que no dispondrá de tiempo, quizás por trabajo o la razón
que sea para seguir cuidándose como sabe que debería hacerlo. Estos nutrientes son
naturales y debería tener en cuenta que le serán de enorme ayuda para mantener su
organismo en un estado alcalino de forma constante, no obstante nunca debemos olvidar
que la principal fuente de alcalinidad de nuestro organismo es la DIETA.
• Polen
• Jalea Real
• Alga espirulina y chorella
• Sales minerales alcalinizantes como el Alka Drink (Aminado Plus pH) de El Granero
Integral o el pH Basic de Nature´s Plus o el Ergybase o Ergymag de Nutergia o
Alkaline de Dietisa, Regula pH de Nova Diet (que además de sales contiene aloe
vera y alga chorella). Holomega Alkali de Equisalud, Green pH de Terranova,
Multidetox pH de CFN
• Zumo natural de aloe vera
Los aceites más aconsejables para desintoxicar y estimular el organismo así como la
mente son:
Fuente: bionutricionortomolecular.wordpress.com
Bibliografía consultada:
Equilibrio ácido-base de Dra. Eva Mª Kraske (Editorial Hispano-Europea, 2009)
Guía Alcalina Alkaline- Care (Versión 2.0)
Equilibrio ácido-base del Dr. Efrain Estrada Choque (Versión 2.0)
Trastornos del equilibrio ácido-base de Mª José Ruiz Marquez, Carmen Ortiz Garcia,
Juan José Sanchez Luque, Ana Peña Agüera.
Equilibrio ácido-base y las intervenciones dietéticas, artículo de
www.naturafoundation.es
Estilo de vida
1. ¿Está su alimentación basada en gran parte en comida rápida del tipo fast-food,
refinados, azúcares simples?
2. ¿Padece en su día a día de un alto grado de estrés?
3. ¿Bebe café, refrescos azucarados y con gas, alcohol y poca cantidad de agua?
4. ¿Fuma más de cinco cigarrillos al día?
5. ¿Dispone de poco tiempo para hacer ejercicio a diario?
6. ¿Duerme menos de 8 horas cada día?
Molestias y síntomas
Resultado
Cuantos más no obtenga, más avanzada estará la acidosis. Debido a que no todas las
personas reaccionan de la misma forma, no puede realizarse una calificación objetiva. Hay
personas que con tan sólo cinco puntos ya notan los devastadores efectos de este estado y
quien con veinte aún no nota ningún síntoma. Siempre es imprescindible acudir a la
consulta de su nutricionista ortomolecular de confianza para que la evaluación pueda ser
lo más profesional posible y obtener resultados asertivos. Recuerda que este auto-test es
tan sólo de carácter orientativo y nunca podrá sustituir al diagnóstico de un profesional de
la salud.
El contratest
Cuantos más puntos de SI obtenga, mucho mejor, significará que está en el buen camino.
• SI: 1 punto
• NO: 0 punto
Nota: Este auto-test ha sido basado en el contenido del libro de la Dra. Eva Mª Kraske (Equilibrio ácido-base)
Para una mejor visualización se recomienda visitar el perfil de Pinterest donde además
podrás descargar todas las infografías bionutricionales que ofrecemos diariamente para
que tengas toda la información necesaria para una alimentación saludable e hipotóxica.
Esta guía ha sido elaborada por autoría del Blog Bionutrición Ortomolecular con el fin de
brindar una herramienta práctica e información de calidad a sus lectores y suscriptores.
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