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1. Contratos civiles
Elementos
Requisitos de Existencia
Por su parte, Maduro (2000) expresa que “De una manera general puede definirse el
consentimiento (del latín consensus) como una manifestación de voluntad deliberada,
consciente y libre, que expresa el acuerdo de un sujeto de derecho respecto de un acto
externo propio o ajeno” (p. 443). Entendiéndose de las definiciones anteriores, que el
consentimiento puede apreciarse como la coincidencia de dos declaraciones de voluntad,
expresada por varios sujetos capaces, que se unen para concurrir a un fin común. En
consecuencia, el consentimiento, visto como acto jurídico, no puede estar invalidado por
vicios.
Cabe mencionar que el consentimiento como requisito esencial del contrato se integra por
las diversas manifestaciones de voluntad comunicadas entre los contratantes que las
generan, logrando integrarse y complementarse entre sí. Por tanto, cada declaración de
voluntad se adhiere a las demás y expresa su acuerdo respecto a ellas.
Conforme al ordinal 2º del artículo 1141 del Código Civil (1982), el objeto es uno de los
elementos o condiciones necesarias para la existencia del contrato. Sin embargo, Maduro
(2000) opina que “para la mayoría de los autores, el objeto no es propiamente un
elemento del contrato, sino un elemento de la obligación” (p. 429). Así lo acoge la mayor
parte de la doctrina venezolana, al entender que el contrato es un acuerdo de voluntades
encaminado a hacer nacer obligaciones, de modo que el objeto del contrato será siempre
la obligación. Tal es el caso al que aluden los artículos 1.155 y 1.156 del ejusdem, pues
los mismos se refieren, más bien, al objeto de la obligación, es decir, a la prestación.
De manera que, el estudio del objeto del contrato, según lo entienden los autores y la
jurisprudencia venezolana (por ejemplo: Centro Simón Bolívar C.A. Vs. Richard Gil
Herrera Y Marlene Martínez, Tribunal Supremo de Justicia, Sala Político Administrativa,
del 26/03/2008, Nº 00377), consiste en el estudio del objeto de la obligación. El hecho que
el objeto del contrato se identifique con el objeto de la obligación, conlleva a que la
discusión se centre principalmente en relación a los requisitos que debe cumplir la
prestación para que pueda ser materia del contrato.
El régimen jurídico del objeto en el Código Civil venezolano, se limita a establecer que el
objeto debe ser lícito, posible, determinado o determinable; a admitir de forma expresa la
posibilidad de las cosas futuras de ser objeto de los contratos y; finalmente, a prohibir los
pactos sobre sucesiones futuras, determinando la imposibilidad de renunciar a la sucesión
cuando ésta no se encuentre abierta y prohibiendo estipular sobre la misma a pesar del
consentimiento futuro causante (Art. 1.156).
En cuanto a la licitud del objeto del contrato, el requisito tiene como fin establecer un
límite a la autonomía de la voluntad de las partes para regular sus situaciones jurídicas de
forma vinculante, impidiendo la formación de obligaciones que impliquen conductas
prohibidas o incompatibles con normas de carácter imperativo, con el orden público o las
buenas costumbres.
c) Causa lícita
Es uno de los requisitos básicos para la existencia del contrato. Es el motivo fundamental
por el que cada contratante se obliga frente al otro. Así, uno se obliga a pagar un precio
porque el otro se obliga a entregar una mercancía; un contratante se obliga a beneficiar a
otro, sin recibir nada a cambio, porque quiere recompensarle un servicio ya efectuado.
Se encuentra establecida en el artículo 1.157 del C.C.: La obligación sin causa, o fundada
en una causa falsa o ilícita, no tiene ningún efecto. La causa es ilícita cuando es contraria
a la Ley, a las buenas costumbres o al orden público. Quien haya pagado una obligación
contraria a las buenas costumbres, no puede ejercer la acción en repetición sino cuando
de su parte no haya habido violación de aquéllas. Mientras que en el artículo
1.158´ejusdem, se establece: El contrato es válido aunque la causa no se exprese. La
causa se presume que existe mientras no se pruebe lo contrario.
Mientras que, según el artículo 1.142 ejusdem, el contrato puede ser “anulado… por
incapacidad legal de las partes o de una de ellas; y por vicios del consentimiento”.
Configurando así, aquellos elementos sin los cuales el contrato sería anulable, es decir
que, no obstante el contrato estar viciado, el mismo sería capaz de desplegar sus efectos
hasta tanto la anulación no fuese declarada por un tribunal
Requisitos de Validez
Como estudioso del derecho, puede plantearse la siguiente interrogante: ¿Cómo puede
ser anulado un contrato? La respuesta se encuentra en el art.1142 del C.C., según el cual
el contrato puede ser anulado:
La capacidad consiste en la aptitud legal de ejercer uno por sí mismo o por sí solo sus
derechos y dentro de esos derechos se encuentra la capacidad para contratar. El Artículo
1.143, ejusdem, establece que: Pueden contratar todas las personas que no estuvieren
declaradas incapaces por la Ley.
El Artículo 1.144 ejusdem, señala que: Son incapaces para contratar en los casos
expresados por la Ley: los menores, los entredichos, los inhabilitados y cualquiera otra
persona a quien la Ley le niegue la facultad de celebrar determinados contratos. No tienen
capacidad para adquirir bienes inmuebles los institutos llamados de manos muertas, o sea
los que por las leyes o reglamentos de su constitución no pueden enajenarlos.
Así, se reputan como vicios del consentimiento los que afectan el querer interno del
contratante en su proceso psicológico de formación de la voluntad en la toma de
decisiones; estos se denominan error, dolo y violencia, los cuales son enumerados en el
artículo 1146 del Código Civil (1982) al estipular que “Aquel cuyo consentimiento haya
sido dado a consecuencia de un error excusable, o arrancado por violencia o sorprendido
por dolo, puede pedir la nulidad del contrato”. A este respecto, señala Bernad-Mainar
(2012) que “El error y el dolo operan sobre la inteligencia, mientras que la violencia lo
hace más bien sobre la voluntad” (p. 95).
b.1) Error: Es el que abarca todos los supuestos de falsas apreciaciones de la realidad.
De una manera más específica, el autor Calvo (2011) refiere que “El error en sentido
estricto o strictu sensu, comprende las falsas apreciaciones de la realidad en las cuales
incurre espontáneamente el sujeto de derecho por una perturbación de tipo psíquico o
volitivo” (p. 319). Se hace alusión al término espontáneo, ya que cuando la falsa
representación de la realidad es inducida o provocada, bien sea por la otra parte o por un
tercero, se hablaría de dolo, por cuanto media una intención para obtener un resultado,
por esto se requiere que se incurra espontáneamente en el error. El error, como vicio del
consentimiento, se encuentra regulado en los artículos 1.146 al 1.149 del Código Civil
(1982).
b.3) Violencia: Maduro (2000) indica que “Tradicionalmente se ha definido como violencia
toda coacción de tipo físico o de tipo moral destinada a obtener el consentimiento de un
sujeto de derecho a fin de que celebre un determinado contrato” (p. 480). De un modo
más concreto, Bernad Mainar (2012), define la violencia como “la coacción física o moral
que impide a una persona prestar libremente el consentimiento a los fines de celebrar un
contrato” (p. 109). De lo cual se extrae que, la manifestación de los actos de violencia, sea
ésta física o moral, persigue como fin último que uno de los contratantes manifieste su
consentimiento, es decir, obtener tal consentimiento a pesar de la negativa del contratante
afectado. La base legal de la violencia como vicio del consentimiento son los artículos
1.146 y 1.151 del Código Civil (1982). Así, el artículo 1.151 es del tenor siguiente: “El
consentimiento se reputa arrancado por violencia, cuando ésta es tal que haga impresión
sobre una persona sensata y que pueda inspirarle justo temor de exponer su persona o
sus bienes a un mal notable”. Se deduce del artículo citado, que para el Código Civil
(1982) la violencia no sólo comprende la compulsión o coacción física o moral ejercida
sobre una persona, sino que también incluye un justo temor o amenaza con respecto a
sus bienes.
La aceptación debe ser recibida por el autor de la oferta en el plazo fijado por ésta o en el
plazo normal exigido por la naturaleza del negocio.
El autor de la oferta puede tener por válida la aceptación tardía y considerar el contrato
como perfecto siempre que él lo haga saber inmediatamente a la otra parte.
Una aceptación que modifica la oferta, tendrá únicamente el valor de una nueva oferta.
2. Contratos de Compra-Venta
Entregar el bien.
Responder a la evicción.
Pagar el precio.
Modalidades de la Venta
1. Venta Ensayo Previo: en las ventas sujetas a ensayo previo el contrato queda sujeto a
que la cosa sea ensayada y a que el ensayo demuestre que es apta para el uso a que
está destinada.
2. Venta ad gustum (al gusto): es aquella que está sometida a la condición futura e
incierta de superar una prueba o degustación que permita averiguar si la cosa posee
la calidad expresa o tácitamente convenida.
7. Venta a Crédito o Plazos (en abonos): es aquella en que el vendedor, por un lado,
realiza la transferencia de la propiedad, y por otro el comprador, se obliga a realizar el
pago fraccionado en un determinado número de cuotas periódicas.
8. Venta con reserva de dominio: es aquella en que la transferencia del dominio queda
sujeta a una condición suspensiva que puede consistir en el pago del precio o cualquier
otra lícita.
9. Venta con arras: En general, las arras pueden utilizarse como medio de prueba, de
pago a cuenta, de cláusula penal, o en algunos derechos, de separación del contrato.
10. Venta por unidad de cabida: el vendedor siempre estará obligado a entregar la cosa
en toda la cantidad expresa en el contrato, salvo algunas modificaciones
Incapacidades
El único supuesto de incapacidad para vender y comprar deriva de la norma de que entre
marido y mujer no puede haber venta de bienes (Artículo 1.481 del Código Civil
Venezolano Vigente), precepto cuyos antecedentes se encuentran en el antiguo Derecho
Francés.
3. Contrato de Arrendamiento
El precio puede consistir en una suma de dinero pagada de una sola vez, o bien en una
cantidad periódica, que en este caso recibe el nombre de renta. Otro tipo de precio puede
consistir en la mitad de los bienes o beneficio, según el tipo de contrato en que consista.
c) Es oneroso: Puesto que cada una de las partes trata de procurarse una ventaja
mediante un equivalente, en consecuencia el arrendador busca obtener el beneficio
económico que representa el pago del canon de arrendamiento; mientras que por su
parte, el arrendatario procura el beneficio que representa para él el uso de la cosa
arrendada, según el artículo 1135 del Código Civil (1982). Bajo ninguna circunstancia el
arrendamiento podría ser a título gratuito, ya que de ser así, cambiaría radicalmente la
figura arrendaticia y estaríamos en presencia de un contrato de comodato, de
conformidad con el artículo 1724 del Código Civil (1982).
Pero antes, para ser debidamente validados, los contratos de arrendamiento deben ser
revisados por los funcionarios de esta Superintendencia, conforme a lo estipulado en el
artículo 5 del Reglamento de la Ley para la Regularización y Control de los
Arrendamientos de Vivienda (2011), en dicha revisión también deben comprobarse los
datos del contrato (artículo 6 ejusdem), y luego que el funcionario no encuentre errores u
omisiones (artículo 8 ejusdem) en el contrato, procederá a elaborar una autorización, para
habilitar a los suscribientes a autenticar el documento en un lapso no mayor de cinco días
hábiles. Finalmente, en un lapso no mayor de quince días hábiles, el arrendador está en
la obligación de consignar ante la Superintendencia Nacional de Arrendamiento de
Vivienda copia certificada del contrato de arrendamiento.
De la misma forma, se tomó la previsión sobre la muerte del arrendatario, en cuyo caso se
aplican las previsiones sobre subrogación por muerte del arrendatario, contenidas en el
artículo 57 ejusdem, el cual estipula que en caso de fallecimiento del arrendatario, podrán
subrogarse la relación arrendaticia los ocupantes beneficiarios del inmueble, quienes
prueben una permanencia pacífica y continua en la vivienda, debiendo cumplir los
términos expuestos en el contrato. Esta situación será homologada por la
Superintendencia Nacional de Arrendamiento de Vivienda, en un plazo no mayor a treinta
días hábiles del fallecimiento del arrendatario o arrendataria.
a) Arrendamiento de cosas: éste crea un vínculo personal, por virtud del cual puede exigir
el arrendatario, el uso y disfrute de aquellas, en tanto pesa sobre él la obligación de pagar
la merced convenida.
c) Locación de obras: en éste contrato una persona se compromete con otra a realizar
una obra o un trabajo determinado mediante el pago de un precio. Esto recae sobre el
resultado de un trabajo, sobre el producto del mismo, ya acabado. Ejemplo: la confección
de un traje o la construcción de una casa.
Los sujetos que intervienen en una relación arrendaticia son: por una parte al arrendador,
que es aquel que da en calidad de arrendamiento un bien o cosa de su propiedad o que le
ha sido confiada por un tercero para su administración; y por la otra parte, está el
arrendatario, que es aquel que toma el inmueble arrendado. En este tipo de contrato, el
arrendador tiene la obligación principal de hacer gozar a otro de una cosa que le
pertenece, durante cierto tiempo; y el arrendatario tiene la obligación de pagar el precio en
dinero o en especie.
En donde:
NÚCLEO TEMÁTICO II
Contratos laborales
La Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y Trabajadoras (2012), establece las
distintas modalidades en que puede contratarse un trabajador. Estas son: A tiempo
indeterminado, a tiempo determinado y por obra.
d) Cuando no haya terminado la labor para la que fue contratado el trabajador y se siga
requiriendo de los servicios, bien sea por el mismo trabajador u otro.
Ahora bien, uno de los efectos de este contrato es que la expiración del lapso del contrato
implica la culminación de pleno derecho de la relación de trabajo, y no constituye un
despido u otra forma de terminación unilateral por parte de los patronos. Resulta muy
importante revisar que los contratos celebrados por tiempo determinado en efecto
cumplan con los supuestos excepcionales permitidos por la Ley Orgánica del Trabajo, los
Trabajadores y Trabajadoras (2012), pues de lo contrario se puede entender que son en
esencia contratos a tiempo indefinido y que la culminación por vencimiento del término es
equiparable a un despido.
En virtud de la apreciación dada por este autor, se puede inferir que el pacto o acuerdo en
esta modalidad puede realizarse para dos propósitos, estos son: a) para la ejecución total
o parcial de una obra específica; y b) para la prestación de algún servicio, también
específico, que se cumple con ocasión de la ejecución de alguna obra determinada.
Cabe destacar que, en caso que los contratos para una obra determinada o por tiempo
determinado culminen antes de su vencimiento por decisión del patrono, el trabajador
tiene derecho a recibir la indemnización por despido prevista en la Ley Orgánica del
Trabajo, los Trabajadores y Trabajadoras (2012). Si el retiro es justificado, el patrono
deberá pagar, además, una indemnización de daños y perjuicios cuyo monto será igual al
importe de los salarios que devengaría el trabajador hasta la conclusión de la obra o el
vencimiento del término.
Cabe destacar que todo contrato de trabajo idealmente debe ser por escrito, sin perjuicio
de que pueda probarse su existencia en caso de haberse realizado en forma oral, según
lo establece el artículo 58 de la Ley Orgánica del Trabajo de los Trabajadores y
Trabajadoras (LOTTT).
Todo contrato, incluyendo los laborales, deben contar con: El consentimiento de las
partes, Objeto que pueda ser materia de contrato y que la causa sea lícita y verdadera;
según lo que establece el artículo 1.141 del Código Civil.
El contrato de trabajo escrito se extenderá en dos ejemplares originales, uno de los cuales
se entregará al trabajador o trabajadora, mientras el otro lo conservará el patrono o la
patrona. Este contendrá las especificaciones siguientes:
1. El nombre, apellido, cédula de identidad, nacionalidad, edad, estado civil, domicilio y
dirección de las partes.
3. La denominación del puesto de trabajo o cargo, con una descripción de los servicios a
prestar, que se determinará con la mayor precisión posible.
7. La obra o la labor que deba realizarse, cuando se trate de un contrato para una obra
determinada.
9. El salario estipulado o la manera de calcularlo y su forma y lugar de pago, así como los
demás beneficios a percibir.
En consecuencia, cualquier contrato de trabajo por escrito debe reunir los requisitos antes
mencionados, para que tenga validez, y el no cumplimiento de los mismos, puede
acarrear sanciones para los empleadores.
Modalidades Especiales de Condiciones de Trabajo
Definición y regulación
La especialidad de estas modalidades radica en las diferencias que ellos presentan con
respecto al régimen general de la relación de trabajo, en vista de la peculiar condición de
los sujetos, merecedores de una preferente atención del legislador; de las circunstancias
propias del trabajo mismo, o del medio en que éste se realiza, que no permiten la
aplicación de las reglas ordinarias. Sin embargo, éstas se entenderán aplicables en
cuanto no resulte modificado por el dispositivo de excepción que dichos regímenes
contienen.
2°) Por la ampliación de la capacidad jurídica del menor, en relación con las previsiones
del Código Civil, de la LOTTT y de la LOPNNA, sobre la materia.
3°) Por la formalidad escrita requerida con preferencia para la celebración y prueba del
contrato o relación de trabajo.
Por su parte, la LOTTT, dispone en su art. 32, lo siguiente: "Se prohíbe el trabajo de
niños, niñas y adolescentes, que no hayan cumplido catorce años de edad, salvo cuando
se trate de actividades artísticas y culturales y hayan sido autorizados por el órgano
competente para la protección de niños, niñas y adolescentes. El Estado, las familias y la
sociedad asegurarán, con prioridad absoluta, su protección integral. El trabajo de los
adolescentes mayores de catorce años y hasta los dieciocho años, se regulara por las
disposiciones constitucionales y la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y
Adolescentes".
La interpretación y aplicación de esta Ley estará orientada por los siguientes principios:
8. Se prohíbe el trabajo de adolescentes en labores que puedan afectar en cualquier
forma su desarrollo integral. El Estado los o las protegerá contra cualquier explotación
económica o social.
a) Capacidad
Mayores de 14 años: La edad de catorce (14) años es la mínima para poder trabajar, de
conformidad con el artículo 96 de la LOPNNA y el artículo 32 LOTTT. Sin embargo, en
caso de infracción a la edad mínima establecida para trabajar, los niños, niñas y
adolescentes disfrutarán de todos los derechos, beneficios y remuneraciones que les
correspondan con ocasión de la relación de trabajo, de conformidad con el parágrafo
segundo del artículo 96 ejusdem.
Es decir, que la persona del menor trabajador continúa sujeta a poder de protección
legalmente reconocido a quienes detentan el derecho y el deber de dirección, guarda y
corrección sobre él (Padres, representantes o responsables). La facultad de vigilar las
relaciones del menor y de prohibirle las que se juzguen peligrosas e inoportunas, es la
misma a la que el artículo 101 de dicha L.O.P.N.N.A. alude cuando declara las libertades
del adolescente para asociarse, en general, o asociarse en sindicatos, con "los límites
derivados del ejercicio de las facultades legales que corresponden a sus padres,
representantes o responsables".
De igual forma, en el Parágrafo Tercero del artículo 96, la LOPNNA permite al Consejo de
Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, autorizar, en circunstancias justificadas, el
trabajo de adolescentes por debajo de la edad mínima, siempre que la actividad no
menoscabe su derecho a la educación, sea peligrosa o nociva para su salud o desarrollo
integral o se encuentre expresamente prohibida por la ley, previo sometimiento del
adolescente a un exámen médico integral que acredite su salud y capacidad física y
mental para desempeñar la actvidad laboral (Parágrafo Cuarto del art. 96 LOPNNA).
b) Jornada Máxima
La jornada semanal no puede exceder de treinta (30) horas (art. 102 LOPNA). Esta misma
regla prohíbe el trabajo del adolescente en horas extraordinarias.
- Libro de registro, para ser llevado en toda empresa, con los datos específicos de cada
menor de 18 años, inclusive los relativos a la escuela a la que asiste y su grado de
instrucción (artículo 108 LOPNNA).
f) Prescripción
Las acciones provenientes de las relaciones de trabajo de los niños, niñas y adolescentes
prescriben a los cinco (5) años (art. 114 LOPNA).
El art. 261 LOT prevé, sin embargo, la posibilidad de que el patrono adelante la concesión
del descanso del menor hasta por un término de tres (3) meses, con el fin de hacerlo
coincidir con las vacaciones escolares previstas en la Ley Orgánica de Educación. Si
todavía no fuera posible que coincida el derecho a la vacación del menor con uno de esos
períodos de vacaciones escolares, podrá retrasarse el goce del derecho por un mes más
de los seis autorizados como máximo por el artículo 230 LOT.
h) Aprendices
Hoy día la doctrina acepta uniformemente la naturaleza laboral del vínculo de servicio
doméstico y otro tanto ocurre en el derecho comparado. Es asimismo constante en la
legislación universal el tratamiento diferenciado del trabajo doméstico mediante un
régimen especial de normas.
Pueden ser definidos como tales "los que prestan sus servicios en un hogar o casa de
habitación o a una persona determinada para su servicio personal o el de su familia". De
conformidad con el artículo 207 LOTTT, los trabajadores y trabajadoras que realizan
labores para el hogar tienen igualdad de derechos:
Artículo 207. Los trabajadores y trabajadoras que prestan sus servicios en un hogar o
casa de habitación o a una persona determinada para su servicio personal o el de su
familia, tales como choferes particulares, camareros, camareras, cocineros, cocineras,
jardineros, jardineras, niñeros, niñeras, lavanderos, lavanderas, planchadoras,
planchadores y otros oficios de esta misma índole, se regirán por lo contenido en esta Ley
a todos sus efectos.
De igual forma, establece el artículo 208 ejusdem, que se regirán por una ley especial:
Artículo 208. Las normas que rigen las relaciones laborales de los trabajadores y
trabajadoras que realizan labores para el hogar serán establecidas en una ley especial,
elaborada con amplia participación de los trabajadores y trabajadoras que prestan
servicios para el hogar, y sus organizaciones sociales.
Trabajadores a domicilio
Artículo 211. Los trabajadores y trabajadoras a domicilio se regirán por los límites de la
jornada laboral, y tienen el derecho al disfrute y al pago de los días de descanso semanal
establecidos en esta Ley.
Artículo 212. El salario del trabajador o trabajadora a domicilio no podrá ser inferior al que
se pague por la misma labor en la misma localidad por igual rendimiento al trabajador o
trabajadora que preste servicio en la entidad de trabajo o local del patrono o patrona.
Los patronos o patronas identificados en este Capítulo, deberán fijar en lugar visible en
los centros de trabajo o lugares donde proporcionan o reciban el trabajo, los salarios y
beneficios que pagan por esas labores.
Registro: Artículo 214. Todo patrono o patrona que contrate trabajadores y trabajadoras a
domicilio deberá llevar un registro, con indicación de los siguientes datos:
10. Clase, naturaleza y modalidades del servicio que presta el trabajador o la trabajadora.
11. Firma del patrono o de la patrona y del trabajador o trabajadora en los recibos
otorgados.
Libreta: Artículo 215. Todo trabajador o trabajadora a domicilio estará provisto de una
libreta que deberá suministrarle gratuitamente su patrono o patrona, sellada y firmada por
el inspector o inspectora del trabajo que contendrá los siguientes datos:
1) Nombre y apellido, cédula de identidad, sexo, edad, estado civil del trabajador o la
trabajadora y dirección donde ejecuta el trabajo.
Deportistas profesionales
Sobre las condiciones del trabajo de esta clase de profesionales, la LOTTT, lo define de la
siguiente manera: Artículo 218. "Son trabajadores y trabajadoras del deporte quienes
actúen con carácter profesional, mediante remuneración y bajo la dependencia de una
persona natural o jurídica. Se consideran en esta modalidad especial de trabajo, los
deportistas, las deportistas, directivos técnicos o directivas técnicas, entrenadores o
entrenadoras, preparadores físicos o preparadoras físicas, cuando presten sus servicios
en las condiciones señaladas.
Los trabajadores y trabajadoras del deporte se regirán por las disposiciones contenidas en
esta Ley, su Reglamento, Convenios con organizaciones deportivas de otros países que
no colidan con el ordenamiento jurídico vigente en Venezuela. Así mismo las
disposiciones establecidas en esta Ley no afectan las normas consagradas en la Ley
Orgánica del Deporte, Actividad Física y Educación Física.
Una ley especial regulará lo correspondiente a los trabajadores y trabajadoras del deporte
profesional, en el marco de la justicia social y del proceso social de trabajo".
Artículo 219. En el contrato de trabajo que suscriban los o las deportistas deberá hacerse
por escrito y establecerá, expresamente, todas las condiciones pertinentes a la relación
de trabajo y, especialmente, el régimen de cesiones, traslados o transferencias a otras
entidades de trabajo.
Jornada: Artículo 223. La jornada de los trabajadores y trabajadoras del deporte estarán
sujetos a las modalidades y características de la respectiva actividad. El tiempo requerido
para el entrenamiento se reputará como parte de la jornada que no podrá exceder de la
prevista en esta Ley. En caso de que se exceda la jornada semanal, el patrono o patrona
establecerá compensaciones especiales.
Descanso semanal: Artículo 224. Cuando los trabajadores y trabajadoras del deporte, por
la índole de sus labores, no disfrute de su descanso semanal en día domingo, la entidad
de trabajo en la cual presta sus servicios deberá concederle el correspondiente día de
descanso compensatorio. Por la naturaleza de la labor que desarrollan los y las
deportistas profesionales no se aplicaran, las disposiciones de esta Ley sobre horas
extras, trabajo nocturno y tiempo de trasporte.
d) Salario:
Artículo 226. El salario que reciban los trabajadores y trabajadoras del deporte podrá
estipularse por unidad de tiempo para uno o varios eventos, partidos o funciones para una
o varias temporadas.
Artículo 227. No constituye violación al principio de igualdad salarial las disposiciones que
estipulen salarios diferentes para trabajos iguales por razón de la categoría de los
eventos, partidos o funciones de los equipos o de la experiencia y habilidad de los
trabajadores y trabajadoras del deporte.
Artículo 228. Las normas que rigen las relaciones laborales de los trabajadores y
trabajadoras del deporte profesional serán establecidas en una ley especial, elaborada en
corresponsabilidad y amplia participación de los sujetos de la relación laboral,
particularmente los trabajadores, trabajadoras y sus organizaciones sindicales.
Trabajadores agrícolas
Modalidad especial ubicada en el Capítulo V del Título IV de la LOTTT. Dicha ley define al
trabajador agrícola en su art. 229, de la siguiente manera:
Artículo 229. Se entiende por trabajador o trabajadora agrícola quien presta servicios en
una unidad de producción agrícola en actividades que sólo pueden cumplirse en el medio
rural. No se considerará trabajador o trabajadora agrícola a quien realice labores de
naturaleza industrial, comercial o de oficina, aun cuando las ejecute en una unidad de
producción agrícola.
La regulación aplicada a esta modalidad está contemplada en los artículos 230 al 237 de
la LOTTT.
A) Terrestre.
D) Navegación Aérea
Ley Especial
Artículo 287. Las normas que rigen las relaciones laborales de los trabajadores y
trabajadoras culturales serán establecidas en una ley especial, elaborada en
corresponsabilidad y amplia participación de los sujetos de la relación laboral,
particularmente los trabajadores, trabajadoras y sus organizaciones sociales y sindicales.
En la ley especial se establecerá la protección para los trabajadores y trabajadoras
culturales.
Ámbito
Artículo 288. Todos los trabajadores y las trabajadoras de la cultura que realicen
actividades propias de su profesión u oficio, de tal forma que exista una relación laboral
con cualquier patrono o patrona sea ésta de carácter temporal o permanente, tendrán la
protección de esta Ley y de las disposiciones reglamentarias establecidas.
Artículo 290. Las disposiciones de esta Ley protegerán a las personas con discapacidad,
bien sea esta congénita, sobrevenida o de cualquier otro hecho o circunstancia que afecte
su desarrollo físico, intelectual o que le impida realizar actividades personales o laborales
en forma idéntica al resto de los trabajadores y las trabajadoras. Profundizando la
universalización de los derechos de las personas con discapacidad, e incorporándolas a
los procesos productivos.
En ninguna circunstancia pueden ser excluidos o excluidas y todo patrono o patrono está
obligado a incorporar a por lo menos el cinco por ciento de su nómina total a trabajadores
y trabajadoras con discapacidad, en labores cónsonas con sus destrezas y habilidades,
debiendo recibir en todo caso un trato digno, e insertarse en la entidad de trabajo con las
mismas garantías y características de los demás de los trabajadores y trabajadoras.
c) Ley de la materia
Artículo 292. Las normas que rigen las relaciones laborales de los trabajadores y
trabajadoras con discapacidad serán establecidas en la ley correspondiente, en todo lo
que les sea favorable.