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LA PARTICIPACION CIUDADANA EN LOS CONSEJOS DE COLABORACION MUNICIPAL El quehacer municipal en México, a fo largo de su historia, ha sido en verdad dificil, penoso, rodeado de barreras que limitaban su esfera de gobierno, frenando y hasta impidiendo cumplirle a 1a ciudadania, con el otorgamiento de los servicios piblicos més elementales. Todo esto, propiciado por un centralis- mo llevado at extremo en los émbitos regio- nal y municipal. Haciendo resaltar la inca- pacidad del ciudadano y la incompetencia de los mandatarios o representantes. Al parejo de esta situacién, la imagen de la instituci6n municipal se fue deteriorando y la credibilidad del pueblo, se devalué en tun alto porcentaje. Los recursos econémicos siempre fueron raquiticos y toda obra para beneficiar a la comunidad, debia ser realizada por los go- biernos estatal y federal, marginando y menospreciando con ello lo més valioso que tenemos, o sea, la voluntad popular. El municipio, que conforma la célula basica de nuestra vida politica, requeria con urgencia el establecimiento en primer lugar, de nuevas normas legales que lo situaran realmente en el momento histori- co que vive el pais, Durante la campafia de la revolucién, emprendida por el entonces candidato, Miguel de la Madrid Hurtado, nuestro parti- do, el Revolucionario Institucional, cred Eduardo Valdespino Furlong los foros de consulta popular para explicar con toda amplitud, la problematica que envolvia a {a instituci6n municipal. Gracias a la correcta y interpretacion: que le supo dar, Miguel de la Madrid Hurta- do, ya investido con la primera magistratu- ra, apenas a los seis dias de iniciado su mandato, envid al honorable Congreso de la Unién las reformas al articulo 115 de la Constitucién general de la republica, orientando asi al municipio, hacia un claro concepto de modernizacién politica. El gran paso, se habia dado. La trascendencia historica de la reforma constitucional, conlleva impticito el reco- nocimiento a la inobjetable madurez que tha alcanzado el municipio en México. Han sido construidos los cimientos que deberén sostener y proyectar a las comuni- dades municipales en su desarrollo econé- mico y social. Ahora, los ayuntamientos pueden tomar y ejecutar decisiones fundamentales, otor- gando claras respuestas a las demandas de participaci6n ciudadana. Y es aqui, con estas dos Ultimas palabras, participacién ciudadana, que se abren las puertas de un campo fértil, cuyos frutos alimentarén el fortalecimiento de México. 62 GACETA MEXICANA DE ADMINISTRAGION PUBLICA ESTATAL ¥ MUNICIPAL La ciencia de la administracion, se basa en la correcta coordinacién de esfuerzos de los grupos humanos, asi como del debi- do aprovechamiento de los recursos mate- riales que integran toda una organizacion. Partiendo.de este concepto, el 15 de ene 0 de 1982, iniciamos la aventura —apasio- nante, por cierto— de servir a Pachuca, desde la honrosa tribuna municipal. Pachuca, ciudad capital del estado de Hidalgo, famosa desde hace cuatro centu- rias por su inagotable produccion de oro y plata, vive en la actualidad, una de las mejores etapas de su historia, gracias prin- cipalmente, al convencimiento de cada uno de sus habitantes, que s6io los pachu- quefios, unidos y organizados, habremos de forjar nuestro destino, tan grande y luminoso, como grandes y fuertes, sean nuestros arrestos. Con cerca de 200,000 habitantes, a Pachuca siempre se le habia calificado por Propios y extrafios, como una ciudad fria, apitica y reacia a emprender cualquier Programa que modelara los esquemas de su rogreso. Estudiamos y analizamos con todo dete- nimiento nuestra ley orgénica municipal, buscando un mecanismo, una palanca que auxiliara eficazmente la labor administrativa Encontramos finalmente, el articulo que trataba sobre la creacion de los consejos de colaboraci6n ciudadana. Sin embargo, no detallaba su reglamen- tacién ni abundaba en mayores conceptos. Asi, en primer lugar nos dimos a la tarea de elaborar el reglamento indicado. El municipio de Pachuca, se integra per 40 barrios, 26 colonias y 9 comunidades rurales. Ocurrimos a cada uno de estos lugares y en acciones absolutamente democraticas, establecimos los consejos de colaboracién. La estructura organica de estos consejos se forma de la siguiente manera: un presi- dente propietario; un presidente suplente; un coordinador de obras y servicios; un coordinador de salud; un coordinador de accion social; un coordinador de depor- tes; un coordinador juridico; un coord nador de recreacion, turismo y cultura; y un coordinador de educacion. En nuestra honorable asamblea muni pal, conformada por primera vez en la hi toria, de manera pluripartidista, cada regi- dor tiene asignada una cartera similar a la de los miembros del consejo. Con ello, las tareas se coordinan perfectamente y se simplifican las soluciones. Queremos destacar, que la asamblea municipal delined un manual de trabajo, que sirviera de guia a los miembros de los consejos. Ello nos indica, la seriedad y profesiona- lismo que desde su creacién, han seguido los trabajos comunitarios. La cimentacion, 1a base para arrancar con todos los proyectos y programas, que conjuntamente con la ciudadania en gene- ral habfamos elaborado, estaba en marcha. La gente de nuestros barrios, colonias y ‘comunidades, clamaba por la inmediate introduccién de los servicios piblicos. Dre- naje, alcantarillado, pavimentacion, alum- brado piiblico, agua potable, eran las constantes y principales peticiones. Ahora, con la organizacién implantada, estas peticiones se han canalizado ordena- damente, atendiendo su ejecucién eficien- temente en forma tripartita. El Partido Revolucionario Institucionat, recoge las solicitudes de necesidades; el gobierno estatal y el ayuntamiento otorgan TRIBUNA 63 los materiales y el pueblo colabora con la mano de obra. De esta manera, hemos integrado con todos sus servicios, el 80 % de los barrios, colonias y comunidades. Es importante comunicarles que en for- ma permanente, ejecutamos un interesante programa de trabajo, al que hemos deno- minado “accion ciudadana” y que permite junto con todo el equipo del ayuntamiento y los propios vecinos, durante un lapso de quince dias, remodelar totalmente un barrio 0 colonia. El esfuerzo y participa- cidn del pueblo se manifiesta una vez més. El nivel basico de nuestro pueblo, se encuentra motivado, estimulado y ahora obviamente, aspira a mayores y mejores logros que consoliden su bienestar social. Por otra parte, existe un sinnémero de programas de trabajo, creados por el go- bierno federal, tendientes a beneficiary apoyar los propios programas de tos gobier- nos estatales y por ende de los municipios. La actitud que hemos adoptado nosotros a este respecto, es la de promover intensa- mente estos programas, a través de los con- sejos de colaboracién. Ello no representa costo alguno para el ayuntamiento, y la derrama de benefi es enorme. Los diversos trabajos realizados en mate- ria de salud, educacién, obras materiales, reforestacién, agricultura, turismo, deporte y cultura, han cobrado cabal cumplimiento y pleno auge. Hasta ahora, hemos conocido la forma en que internamente, el municipio de Pa- chuca se ha organizado para atender sus necesidades més apremiantes. Cubierta esta etapa satisfactoriamente, convenimos en la necesidad de avocarnos a cumplir objetivos superiores, procurando: dar congruencia a los programas de los gobiernos estatal y federal. Oportunamente establecimos Ia direc- cidn de planeacién y desarrollo municipal. Esta oficina ha logrado enlazar efectiva y eficazmente los lineamientos 2 seguir, que plantean tanto el Plan Nacional de Desarrollo, como el plan del gobierno estatal. En el estado de Hidalgo, han sido instala- dos en los 84 municipios que componen la entidad, los Comités de Planeacién para el Desarrollo Municipal (COPLADEMS). Estos comités han involucrado en Pachu- ca, ademas de los consejos de colaboracién, a todas las dependencias estatales y delega- ciones federales, asi como a los diferentes organismos que son manejados por la iniciativa privada, dando como resultado la aceleracién de todos los programas, con una real y vigorosa participacién ciudadana, Por supuesto, la formacién de esta enor- me estructura y sobre todo, ponerla a fun- cionar, no ha sido tarea facil. Todo lo contrario. Hemos invertido ‘muchas horas, muchos dias. Nos alienta toda esta gran dificultad para alcanzar el triunfo, pues muy dificil seré también, desintegrar la unién det pueblo. La crisis econdmica que golpea duramen- te al pals, nos ha servido de acicate para demostrar que en el redoblamiento de es- fuerzos, permaneciendo unidos y activan- do la participacion ciudadana, todos fos objetivos y metas son viables de alcanzarse. Tengamos presente que la gestacion y consumacién det movimiento armado de 1910, se debié a la voluntad del pueblo. Hoy, en el umbral del Siglo XX!, nuestro oa GACETA MEXICANA DE ADMINISTRACION PUBLICA ESTATAL ¥ MUNICIPAL, pueblo continua la lucha, con {as armas del trabajo y del saber. Hemos logrado suplir las manifestacio- nes incoherentes y perniciosas, por la co- ‘recta congruencia de la consulta popular. La disgregacion se ha convertido en uni- dad. La marginacion, en auténtica justicia social. La confusion, en solidaridad. La rebeldia, en institucionalidad. Solo asi hemos podido avanzar y entor- ‘ar nuestra luchar, en una sola meta, en una sola razén, en una sola y muy justa aspiracion: México.

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