En pleno corazón, el pensamiento

halló su palpitar. 15 de mayo. Como el diamante es una piedra fría

En libertad quedaron los canarios el haz de la conciencia vale más:
que trazaron las letras de San Juan. San Juan es capital del entusiasmo
y en la lucha ha encarnado su ideal.
A su primera piedra le llamamos
José Manuel Osores, y las puertas Para saber cantarle a tu estatura
una Dama las abrió en su propio hogar: habría que medirla con la luz,
Llamóse la primera clase: Fiat Lux. que encendida la antorcha de tu pecho
dan a Chota tus latidos plenitud.
No existe azar cuando hay techumbre
para un pueblo de pie, y en cuya frente
el sol valora su labor: el oro
que hace al hombre dispuesto a
progresar.

La guerra te sorprendió muy joven

y adolescente llevaste un batallón
hacia San Pablo y el Cárcamo.
Montán te dio la mesa del Tratado de
Paz.

¿Y para qué? La hoguera de tus libros

en medio del incendio no acalló
tu palabra, la templó al rojo vivo
en la verdad, el trabajo y la fe.

Las mejores ideas de este pueblo

son el fruto logrado con tu acción
y los hombres y mujeres inmolados
se afamaron al darte gratitud.

A Chota tú le has dado su destino.

A Chota tú le has dado dimensión.
A Chota tú le has dado paradigma.
A Chota tú le has dado libertad.

¿Quién sino San Juan le dio otro rostro

a la decrepitud? Vibra mocil
cualquier edad que fructifique siempre
nuestra amistad, el surco, la razón.

Lúcida voz o Madre del Espíritu

de Chota, cumples tus promesas de ayer
y el orgullo centenario reafirman
tu ideal: despejarnos la ecuación.

Local placeño es Monumento Histórico

y Corepuquio que es la fuente de oro
es tu universo y no una mansión,
tú siempre te has jurado anti feudal.

No importa que dividan a tu precio.

No importa que te roben extensión.
La espiga multiplica de la ciencia
que es inmenso quien tiene porvenir.

Amarillo es el recreo y el recuerdo

y los Juegos Florales son azul,
blanco es el deporte confraterno
y la marcha, del color sindical.

Los oscuros no tienen horizontes

y conllevan la doctrina del rincón.
Era nutricia en teoría y práctica
te ha elegido a tu pueblo dirigir.