Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Unidad IV PDF
Unidad IV PDF
1. La Política Económica.
Para hablar acerca de lo que es la Política Fiscal, debemos de entender primero lo que es
la Política Económica. El último objetivo de la economía es desarrollar políticas que
puedan resolver nuestros problemas. Las políticas económicas sirven para mover la curva
de demanda en la dirección que se necesite para alcanzar el pleno empleo y para que
esto suceda, el Estado puede usar 2 instrumentos (medidas) principales para regular la
demanda agregada. La política fiscal y la política monetaria.
Desarrollo Económico
Estabilidad Económica
Eficiencia Distributiva
1) Desarrollo Económico:
Es la búsqueda obstinada del desarrollo.
2) Estabilidad Económica:
Reúne 3 objetivos básicos que son de importancia vital.
1) Eficiencia distributiva:
Lo que busca es disminuir las desigualdades en la distribución del nacional entre las
unidades familiares.
2. La Política Fiscal.
La política fiscal es el conjunto de medidas e instrumentos que toma el estado para
recaudar los ingresos necesarios para la realización de la función del sector público. Se
produce un cambio en la política fiscal, cuando el Estado cambia sus programas de gasto
o cuando altera sus tipos impositivos. El propósito de la política fiscal es darle mayor
estabilidad al sistema económico, al mismo tiempo que se trata de conseguir el objetivo
de ocupación plena. Como hemos dicho anteriormente la Política Fiscal tiene 2
componentes, el gasto público y los ingresos públicos.
3. Gasto Público
En cuanto al gasto público, este se define como el gasto que realizan los gobiernos a
través de inversiones públicas. Un aumento en el gasto público producirá un aumento en
el nivel de renta nacional, y una reducción tendrá el efecto contrario. Durante un periodo
de inflación es necesario reducir el gasto público para manejar la curva de la demanda
agregada hacia una estabilidad deseada. El manejo del gasto público representa un papel
clave para dar cumplimiento a los objetivos de la política económica.
El gasto público se ejecuta a través de los Presupuestos o Programas Económicos
establecidos por los distintos gobiernos, y se clasifica de distintos maneras pero
básicamente se consideran el Gasto Neto que es la totalidad de las erogaciones del
sector público menos las amortizaciones de deuda externa; y el Gasto Primario, el cual no
toma en cuenta las erogaciones realizadas para pago de intereses y comisiones de deuda
publica, este importante indicador económico mide la fortaleza de las finanzas públicas
para cubrir con la operación e inversión gubernamental con los ingresos tributarios, los no
tributarios y el producto de la venta de bienes y servicios, independientemente del saldo
de la deuda y de su costo.
Sin embargo, todos los países están en proceso de desarrollo, en virtud de que se
pretende mejorar las condiciones de vida de la mayor parte de la población (aunque
muchas veces no se logra). Incluso los países llamados desarrollados siguen
desarrollándose, ya que no se puede concebir el estancamiento y menos el retroceso.
En muchos países el crecimiento económico llega a ser muy importante, pero los
beneficios derivados de el solo son disfrutados por unos cuantos privilegiados. A esto no
se le puede llamar desarrollo económico, sino más bien crecimiento desigual.
En síntesis, podemos afirmar que el desarrollo económico, es una categoría histórica que
se refiere a la satisfacción de las necesidades básicas de la sociedad, y que dicha
satisfacción y necesidades se incrementan a medida que la sociedad sigue
desarrollándose.
Todas estas consecuencias del progreso son negativas, por lo que tampoco se puede
confundir progreso económico con desarrollo económico; pero hay que aclarar que
actualmente ambos conceptos son puestos en tela de juicio por algunos investigadores y
estudiosos críticos de la realidad económica.
Sin embargo, muchos autores están de acuerdo en que las principales manifestaciones
del desarrollo son:
Un proceso continuo y sostenido de industrialización.
Como se puede apreciar, el desarrollo es un termino muy polémico y se tiene que precisar
claramente su significado cuando se habla de el para no causar confusiones, ya que es
un concepto al que hay que referirse en forma comparativa y que debe estudiarse
continuamente, ya que las condiciones del desarrollo cambian de manera constante y hay
que ajustarse a ellas.
Con todo, los dos criterios señalados son insuficientes para determinar si un país es
desarrollado o no, por razón de la calidad de vida, la cual puede ser deficiente a pesar de
disponer de un elevado ingreso monetario por persona. Por ejemplo, hay países o
regiones donde los ingresos son elevados, pero la salud y la alfabetización son muy
necesitadas. Tal es el caso de algunas regiones auríferas y petrolíferas.
Pautas de clasificación
El PIB per cápita varía en un rango muy amplio. En 2005 Luxemburgo llega a US$80.288
y Burundi (África) está en solo US$107. Se concibe como ingreso per cápita alto el que
supere US$25.000.
El PIB per cápita, según la paridad del poder adquisitivo, muestra que Luxemburgo es el
primero con US$69.800 y Malawi (África) el último con US$596. Se toma como ingreso
per cápita alto, según la paridad del poder adquisitivo, el que sea superior a US$25.000.
El índice de desarrollo humano fluctúa entre cero y uno. Noruega va a la cabeza con un
índice de 0,965 y Níger (África) es el último con 0,311. Se considera que es alto el nivel
de la calidad de vida cuando el índice de desarrollo humano se encuentra por encima de
0.900.
En síntesis, se entiende por países desarrollados aquellos que presentan, a la vez, los
más altos ingreso monetario, poder adquisitivo e índice de desarrollo humano.
Países con PIB nominal per cápita superior a US$25.000 en 2005, en orden
descendente
1. Luxemburgo 14. Japón
2. Noruega 15. Bélgica
3. Islandia 16. Canadá
4. Suiza 17. Australia
5. Irlanda 18. Francia
6. Dinamarca 19. Alemania
7. Qatar 20. Italia
8. Estados Unidos 21. Emiratos Árabes Unidos
9. Suecia 22. España
10. Países Bajos 23. Singapur
11. Finlandia 24. Nueva Zelanda
12. Austria 25. Kuwait
13. Reino Unido 26. Brunei
Países con PIB, según ppa, per cápita superior a US$25.000 en 2005, ubicados en
orden descendente
1. Luxemburgo 13. Australia
2. Noruega 14. Países Bajos
3. Estados Unidos 15. Japón
4. Irlanda 16. Alemania
5. Islandia 17. Reino Unido
6. Dinamarca 18. Suecia
7. Canadá 19. Francia
8. Austria 20. Italia
9. Suiza 21. Singapur
10. Qatar 22. Emiratos Árabes Unidos
11. Bélgica 23. Taiwán
12. Finlandia 24. España
1 Noruega 5
2 Islandia 10
3 Irlanda 13
4 Luxemburgo 14
Estados
5 Unidos 19
6 Suiza 24
7 Dinamarca 27
8 Canadá 30
9 Suecia 34
10 Australia 35
11 Países Bajos 36
11 Finlandia 36
11 Austria 36
14 Japón 38
15 Bélgica 41
16 Reino Unido 50
17 Francia 55
18 Alemania 58
19 Italia 59
20 España 68
21 Singapur 71
No sobra recordar que con escala de medición ordinal no es posible determinar
diferencias entre los valores. El puntaje anterior, dado en “unidades ordinales”,
permitió establecer un orden entre los países desarrollados y permite, además,
calcular diferencias. Sin embargo, tales diferencias carecen de significado, pues cada
“unidad ordinal” no representa una cantidad exacta que permita la comparación.
Apreciaciones preliminares
1. El 76% de los países desarrollados son europeos.
2. Casi todos los países desarrollados, 19 de 21, están ubicados en la zona
templada del norte.
3. Contrario a lo que afirman algunas teorías del desarrollo, sí es posible que un
país sin costas y montañoso alcance el desarrollo. El ejemplo es Suiza.
4. En el trópico también se puede llegar al desarrollo. Así lo confirma Singapur.
5. La vecindad es un factor del desarrollo. Solo 3 de los 21 países desarrollados
no tienen países vecinos desarrollados: Australia, Japón y Singapur.
6. La extensión del territorio o el número de habitantes no parecen ser factores
determinantes del desarrollo.
7. Las diez primeras economías del mundo, por tamaño, (Estados Unidos, Japón,
Alemania, China, Reino Unido, Francia, Italia, Canadá, España y Brasil) no son
las más sobresalientes en desarrollo. Nótese que China y Brasil ni siquiera
forman parte de las naciones desarrolladas. Estados Unidos, la mayor
economía de la tierra, apenas ocupa el quinto lugar. En general, las economías
de mayor tamaño están en las últimas posiciones del escalafón de las naciones
desarrolladas.
Se han buscado otras categorías afines para precisar el subdesarrollo. Sin embargo, el
problema en lugar de resolverse se ha complicado, ya que cuando se habla de países
subdesarrollados se menciona también a los países periféricos, países satélites o
países del tercer mundo.
En forma similar, los países satélites son aquellos que giran en torno de los intereses
de los países de los cuales son satélites; estos países son los imperialistas. El
elemento clave en la concepción de países satélites también lo constituye la
dependencia.
A su vez los países del tercer mundo son aquellos que no son capitalistas (primer
mundo) ni socialista (segundo mundo), sino que se desarrollan en forma diferente al
capitalismo y al socialismo, lo que es totalmente equivocado. Basta analizar las
características específicas de dichos países para ubicarlos en cualquiera de los dos
sistemas económicos actualmente dominantes en el mundo.
Pero si ninguno de los conceptos nos sirve para explicar la realidad de esos países,
Entonces ¿cuál es el concepto correcto?
Para referirnos a los países de América latina que no han alcanzado un nivel elevado
de desarrollo tenemos que hablar de países capitalistas dependientes y atrasados. Es
decir, son países que, en términos generales, tienen las mismas características de los
países capitalistas, pero que además son dependientes y atrasados.
Las manifestaciones del subdesarrollo son, por lo tanto, la forma en que se expresan
el atraso y la dependencia en la vida económica y social de los países; en
consecuencia, algunos rasgos de la dependencia y el atraso son:
Dependencia
Incremento de inversiones extranjeras directas que llegan al país.
Mundo subdesarrollado
Los países subdesarrollados tienen una baja renta por habitante, que normalmente no
alcanza los 2.000 dólares anuales; un desarrollo industrial escaso o incipiente, pero
que, con frecuencia, depende de la inversión exterior y está basado en la mano de
obra barata y en el alto consumo energético; recursos naturales destinados
fundamentalmente a la exportación; una fuerte dependencia del exterior en tecnología,
comercio y créditos; un reducido nivel de vida, con servicios de baja calidad e
inaccesibles a una gran parte de la población; deficientes infraestructuras; un elevado
índice de analfabetismo; un crecimiento demográfico muy elevado; y un bajo nivel de
consumo. Además, la inestabilidad política, la corrupción y la desigualdad social son
corrientes en estos Estados.
La colonización histórica:
La colonización de territorios por parte de las potencias más poderosas es un
fenómeno que se ha venido repitiendo a lo largo de la historia. Sin embargo, este
proceso alcanzó su máximo desarrollo a partir de la conquista de América en el siglo
XVI, y culminó en el siglo XIX coincidiendo con la revolución industrial. Se consolidó
así el dominio político y económico de las potencias europeas sobre la mayoría del
mundo:
América, Asia, África y Oceanía. Las metrópolis importaban de sus colonias las
materias primas que necesitaban para alimentar sus industrias, a la vez que
exportaban los productos fabricados. Se creó así un sistema económico desigual.
Cuando las colonias alcanzaron su independencia, muchas de ellas siguieron
manteniendo la dependencia económica, financiera, industrial y tecnológica de sus
antiguas metrópolis y de otros países ricos.
La Deuda Externa:
Algunos países recibieron ayudas para mejorar sus estructuras productivas en forma
de préstamos por parte de instituciones financieras internacionales y de los países
más ricos. Los intereses de esos préstamos han resultado muy elevados, por lo que
hay Estados que han contraído una deuda altísima a lo largo de los años. Como tienen
que destinar una parte muy importante de sus recursos económicos a la devolución de
la misma, se encuentran con un fuerte obstáculo a sus posibilidades de desarrollo. En
caso de incumplir sus obligaciones de pago serían excluidos de futuros préstamos.
En 1996, el Banco Mundial y el FMI pusieron en marcha una iniciativa llamada Países
Pobres Muy Endeudados (PPME) con el fin de liberar de una parte de esta carga a los
países más pobres y con una deuda mayor.
La dependencia tecnológica:
La falta de tecnología propia y de capacidad para asimilar la de los países
desarrollados coloca a los más pobres en una posición muy desfavorable en el
mercado mundial, ya que no pueden producir de forma competitiva. Además los
avances tecnológicos han dejado obsoleta una parte importante de la producción de
estos países, lo que ha supuesto una reducción de sus exportaciones y. por tanto, de
sus ingresos. Por ejemplo, el caucho natural ha sido sustituido por productos
sintéticos, y el cobre, utilizado para las comunicaciones, está siendo reemplazado por
la fibra óptica.
A todo eso se une que las personas altamente cualificadas apenas pueden desarrollar
su labor en sus países de origen y son absorbidos por grandes corporaciones para
trabajar en el mundo desarrollado.
La guerra:
Los conflictos armados, a menudo sostenidos por los propios gobiernos, suponen en
muchas ocasiones la devastación de los países. Además de las pérdidas de vidas
humanas y económicas, las naciones que sufren estos conflictos se quedan sin una
mano de obra joven necesaria para su recuperación y desarrollo.
El Modelo Centro-Periferia.
Los desequilibrios que existen entre los países y los flujos que se establecer mire ellos
permiten diferenciar entre grandes dominios en el mundo:
Centro: incluye a los países que exportan productos industriales y tecnología
de alto valor, realizan inversiones más allá de sus fronteras mediante la
instalación de filiales de sus multinacionales, e imponen su dominio a través del
control de precios de sus productos. Estados Unidos, Europa occidental y
Japón son sus mejores representantes.
Semiperisiferia: En estos países coexisten rasgos de atraso y modernidad, lo
que genera fuertes desequilibrios internos. Entre ellos están los nuevos países
industriales asiáticos, los del Cono Sur de Iberoamérica, los de Europa del
este, la región costera de China, ciertas regiones de la India y parte de las
repúblicas
Periferia: Se identifica con aquellos países especializados en la producción y
exportación de materias primas o productos industriales de escaso valor. Son
países que se basan fundamentalmente en la explotación de una mano de obra
barata, pero que necesitan importar capital y tecnología, lo que suele provocar
un elevado endeudamiento y un escaso control sobre sus propios recursos.
África, Asia meridional y buena parte de Centroamérica y América del Sur
padecen todavía esta dependencia.
Bienes y servicios que sólo el Estado puede asumir son una serie de bienes y
servicios que el Estado está en mejores condiciones de ofrecer que los particulares, ya
sea porque su costo de producción es muy alto o porque se trata de actividades que
no generan rentabilidad. Por ello, el gobierno ofrece los servicios de salud, educación,
justicia, seguridad y defensa, cuidado del medio ambiente, carreteras, entre otros, y
los servicios sobre los cuales existe un monopolio natural, como el abastecimiento de
agua potable, por ejemplo.
Los recursos públicos son los ingresos de la tesorería del Estado, cualquiera sea su
naturaleza jurídica o económica. El Estado no logra cubrir sus gastos de producción de
bienes y servicios con la venta de lo que obtiene de ellos por lo tanto el Estado
necesita valerse de otras formas para generar ingresos que le permitan hacerle frente
a los gastos de producción de los bienes. Las principales Fuentes de financiamiento
son:
Recursos tributarios: Impuestos, tasas y contribuciones.
Recursos monetarios: Emisión monetaria.
Recursos del crédito público: Deuda externa e interna.
Recursos de las empresas del Estado: precios que facturan las empresas del
estado.
Otros recursos.
2.1. Impuesto
Definición:
Pago obligatorio de dinero que exige el estado a los individuos o empresas que
no están sujetos a contraprestación directa, con el fin de financiar los gastos
propios de la administración del estado y la provisión de bienes y servicios de
carácter público, tales como administración de justicia, gastos de defensa,
subsidios y muchos otros. Solo por ley pueden establecerse los impuestos de
cualquier naturaleza que sean, señalarse sus modalidades, su repartición o su
supresión. Las dos categorías fundamentales son impuestos directos e
indirectos.
En el artículo 13 capitulo IV del código tributario de el salvador, ser define como
el tributo exigido sin contraprestación, cuyo hecho generador esta constituido
por negocios, actos o hechos de naturaleza jurídica o económica que ponen de
manifiesto la capacidad contributiva del sujeto pasivo.
Es la detracción económica que el estado exige en virtud de su poder de
imperio a los sujetos determinados por el en la ley tributaria correspondiente,
sin que exista un servicio o contraprestación especial de su parte.
Breve historia de los impuestos.
Los impuestos nacen como un mecanismo de búsqueda de nuevos ingresos. Fueron
implementados por los Estados para financiar la satisfacción de las necesidades
públicas. En este sentido, se puede afirmar que los primeros recursos tributarios
fueron aquellos que el Estado obtuvo mediante el ejercicio de su poder imperio o a
través de costumbres que luego se convirtieron en leyes, en la Roma antigua.
El origen de los tributos se remonta a la era primitiva, cuando los hombres entregaban
ofrendas a los dioses a cambio de algunos beneficios. Posteriormente, desde la
civilización griega, se manejaba el término de la progresividad en el pago de los
impuestos por medio del cual se ajustaban los tributos de acuerdo a las capacidades
de pago de las personas. También se controló su administración y clasificación.
En Europa, durante la Edad Media, los tributos los cancelaban los pobladores en
especies a los señores feudales, con los vegetales o animales que crecían en las
pequeñas parcelas que les eran asignadas, y a la Iglesia Católica en la forma conocida
como “diezmos y primicias”, de carácter obligatorio y relacionados con la eliminación
de posibles cadenas después de la muerte. Vale resaltar que al conocerse ambos
mundos, el impuesto entre comerciantes era de un buque por flota perdida en los
mares.
Los impuestos modernos, como los conocemos hoy, se instauraron a finales del siglo
XIX y principios del siglo XX. Dentro de los tributos que se crearon en este período,
destacaron: el impuesto sobre la renta al exportador, al importador, al vendedor y los
impuestos a la producción, entre otros (la cadena productiva).
La unidad fiscal. Es la cosa o cantidad señalada, como medida, número, peso, etc.,
sobre la que la Ley establece la cantidad a pagarse por concepto del impuesto. Esta
unidad sirve para calcular el impuesto correspondiente.
Base del impuesto Es la cuantía sobre lo que se determina el impuesto a cargo del
sujeto.
Catastro fiscal Son las listas oficiales para determinar los sujetos, y objetos del
impuesto; se le conoce como padrón fiscal.
CLASIFICACIÓNES DE LOS IMPUESTOS
Algunas de la clasificación de los impuestos son los siguientes:
POR SU OBJETO:
Impuesto directo: Impuestos que gravan directamente el ingreso de las personas y las
empresas. El impuesto a la renta de personas y sociedades, los impuestos al
patrimonio y, los impuestos a la propiedad hacen parte de los impuestos directos.
Impuesto indirecto: impuesto que gravan a los bienes y servicios, y por ende afectan
indirectamente el ingreso del consumidor o del productor. Entre estos impuestos
encontramos los impuestos a las ventas, y los aranceles a las importaciones.
Principales Funciones.
Administrar el proceso de endeudamiento del Sector Público no Financiero que
comprende la gestión, negociación, contratación, legalización, seguimiento y
control de los recursos originados por la vía del endeudamiento público, así
como administrar el pago del servicio de la deuda contratada por el Gobierno
Central, derivada de dicho proceso, manteniendo la solvencia crediticia del
país.
Administrar el proceso de inversión pública que comprende un conjunto de
instrumentos técnicos, normativos y procedimientos, mediante los cuales las
Instituciones del Sector Público no Financiero, identifican, formular, evalúan,
priorizan, programan, ejecutan y dan seguimiento a los proyectos de inversión
pública, a fin de lograr una eficiente asignación y administración de los
recursos públicos destinados a proyectos inversión.
Proporcionar asistencia técnica y legal a las instituciones del Sector Público no
Financiero, en las distintas etapas del proceso de inversión y endeudamiento
público, para lograr mayor agilidad y eficiencia en la ejecución de los mismos.
2.3.1. Orgánica
Sistema monetario en el que el valor de la moneda es convertible en oro de una
calidad determinada a un tipo de cambio fijado previamente por ley. El Banco Central
está obligado a entregar oro a cambio de moneda, y viceversa, al precio fijado
oficialmente y en el momento que se le demande. La cantidad de oro de que dispone
el correspondiente país determina el montante de dinero en circulación. Los tipos de
cambio entre las diferentes monedas vienen determinados por la cantidad de oro que
contiene cada una de ellas, y estos cambios se mantendrán fijos o variarán dentro de
un margen muy estrecho; los límites de este margen vendrán dados a su vez por el
coste de transportar oro entre los diferentes países. La importación y la exportación de
oro es libre y, por consiguiente, la base monetaria de cada país está directamente
relacionada con los movimientos internacionales de esta mercancía. Según este
sistema, un país con una balanza comercial favorable gana oro, lo que va a determinar
un incremento tanto de su base crediticia como del dinero en circulación. Esta
expansión de la liquidez del sistema conduce a una disminución de los tipos de interés
y a una expansión de la demanda, y a la postre a un incremento de los precios que
terminará por frenar las exportaciones y alentar las importaciones, restableciendo el
equilibrio de su balanza comercial. De igual modo, un país cuya balanza comercial sea
deficitaria perderá oro, lo cual obligará a la autoridad monetaria a reducir la cantidad
de dinero en circulación vendiendo títulos de la Deuda o efectos públicos. Al disminuir
la cantidad de dinero en circulación sube el tipo de interés, se reduce la demanda
efectiva y descienden los precios, con lo cual mejora la posición competitiva del país
frente al exterior y se restablece nuevamente el equilibrio de su balanza comercial.
Sistema monetario utilizado por la mayoría de los países desde el siglo XV hasta el
primer cuarto del siglo XX por el que se establecía el valor de una unidad monetaria
igual a su peso en oro. El oro disponible en las arcas de cada país aseguraba la plena
convertibilidad interna y determinaba, por consiguiente, la cantidad de dinero en
circulación. La cantidad de metal de cada moneda fijaba los tipos de cambio frente las
distintas monedas. Esta convertibilidad, prácticamente fija, entre las distintas monedas
y la disponibilidad del metal mediante su libre importación y exportación fomentaban el
comercio internacional en un ambiente político estable. A raíz de la Primera Guerra
Mundial varios países optaron por abandonar el sistema y, a partir de 1922, evoluciona
el sistema monetario denominado de patrón de cambios-oro.
2.3.2. Inorgánica
Este concepto se usa en el contexto de la economía y las finanzas públicas.
Originalmente, el concepto se refería a la creación de dinero de curso legal efectuado
por la autoridad y que no estaba respaldado por oro o monedas extranjeras
convertibles en oro. En la actualidad se utiliza para referirse a la expansión de la
cantidad de dinero de curso legal por sobre la cantidad demandada del mismo.
El traspaso de dicha deuda no tiene una fecha definida pero es un mandato de ley
establecido en el artículo 11 de la Ley de Integración Monetaria, que literalmente reza:
“Todas las obligaciones del Banco Central de Reserva de El Salvador serán asumidas
por el Estado por medio del Ministerio de Hacienda, que podrá compensarlas por
obligaciones existentes a su favor”.
Según la Revista Trimestral del BCR, esta institución adeudaba hasta marzo de 2002
alrededor de $737.5 millones (¢6 mil 453 millones) a varias entidades financieras, que
le compraron títulos valores cuando el propósito de estos era la esterilización de la
moneda.
¿Cómo empezó?
Durante buena parte de los 90 y aún ahora, el país mantiene un exceso de divisas
provenientes en su mayor parte de las remesas familiares, donaciones e ingresos por
exportaciones; sin embargo antes de la dolarización el Banco Central retiraba
(esterilizaba) los dólares en circulación y los canjeaba por colones.
Lo grave.
A juicio de un analista que pidió reserva de identidad, el verdadero problema es que “el
BCR no puede honrar dicha deuda de una sola vez por lo que tiene que renovarla
constantemente”.
Lo grave es que “el Banco Central está llegando a un punto crítico en donde su
generación de ingresos apenas cubre sus gastos financieros y llegará un momento `en
cuatro o cinco años en que no podrá pagar los intereses y cuando la situación sea
insostenible será Hacienda la entidad que deberá cubrir esas obligaciones”, dijo el
experto.