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BIOENERGÍA
TERAPÉUTICA
con
MANOS y PIEDRAS

Esta obra describe con detalle un modelo de trabajo sobre el campo Energético
Humano con fines de limpieza, regeneración y equilibrado.

Gerardo Oyaregui

ÍNDICE

Prólogo
Modelo Global de Trabajo
Introducción

TEORIA
Energía
Bioenergía
Enfermedad
Salud = Equilibrio Dinámico
Anatomía Energética
Fisiología Energética
Diagnóstico
Pautas Generales para la Sesión
Tratamiento
Masaje
Imposición de Manos
Detalle y Propiedades de las Piedras
Desarrollo del Practicante

PRACTICA
Ejercicios de Entrenamiento
Detalle Práctico de las Técnicas
Masaje
Imposición de Manos
Aplicación de Piedras
Una Sesión Completa
Trabajo en Espalda
Algunas Disciplinas Relacionadas
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PRÓLOGO

Hasta el día de hoy el ser humano no ha descubierto una forma terapéutica capaz de solucionar el tan
antiguo problema de la enfermedad; ni siquiera una que tenga la capacidad de explicar satisfactoriamente el
verdadero origen de la mayoría de ellas. Esta situación evidencia un abordaje limitado y parcial de la totalidad
que constituye el sistema humano humano. El trabajo con Bioenergía no es más abarcativo que cualquier
otro método; sólo opera algunos eslabones más “arriba” en la cadena de sucesos que configuran una
alteración: el acceso a la causa última lo tiene sólo el paciente.
Leer muchos libros o tomar algunos cursos no los convertirán en bioenergetistas competentes; eso es sólo el
comienzo de un largo y profundo Camino. Ser verdaderamente efectivos en los tratamientos lleva tiempo,
entrenamiento, experiencia y conciencia.
Los invito a prestar la atención correcta, estudiar con responsabilidad, hacer sus experiencias, proceder con
conciencia, elaborar cuidadosamente sus propias conclusiones y estilo de trabajo, y, fundamentalmente,
disfrutar de este nuevo y profundo aprendizaje que los va acercar al maravilloso e inconmensurable núcleo
del ser.

Gerardo Oyaregui

MODELO de TRABAJO

Quiero exponer en esta primera parte del libro la pauta general de trabajo con que está escrita esta obra.
No es novedoso para nadie que se haya detenido a estudiar, o simplemente a observar mínimamente al ser
humano, que la vida sigue siendo un misterio para él. Cuando digo vida me refiero a todo el Universo
conocido hasta hoy por el hombre, desde su cuerpo físico hasta sus incomprensibles procesos mentales,
sentimentales y espirituales, y lo hago extensivo a la Naturaleza en general. Pero si algún lector tiene más
certezas que dudas sobre la vida o cree que puede comprenderla por medio de la razón, no tiene más que
dejar de mirar por unos instantes el tan habitual cielorraso y dirigir su atención hacia arriba, a cielo abierto.
Creo que ya no puede haber tantas certezas.

Si la vida es un enigma:
¡cuánto más han de serlo las alteraciones
experimentadas por un sistema a través de ésta!

Cuando digo sistema me refiero a un conjunto de partes interactuantes e interdependientes

que conforman una totalidad estructural y funcional.

Es claramente observable que si una de las componentes de dicha estructura sufre alguna alteración de
cualquier tipo, el cambio tendrá efecto sobre todo el sistema. El tipo de efecto que se verifique en la
estructura y, por lo tanto, sus consecuencias, dependerá de la intensidad, de la duración y de la clase de
modificación experimentada, así como también del plano en el cual se haya producido ésta.
A pesar de lo incomprensible del ser humano para el ser humano mismo, hay algunos patrones ciertos con
los que podemos trabajar para acercarnos un poco a esa verdad tan profunda.
Cuanto más logremos aproximarnos a ese gran centro de conciencia que reside en cada uno de nosotros,
tanto más cerca estaremos del origen de la mayoría de las alteraciones para las que hoy tenemos tan sólo
explicaciones superficiales e incompletas.
El proceso de acercamiento al núcleo del ser sería comparable al ascenso por una pirámide. Mientras dure la
ascensión no tendremos un panorama completo de la totalidad; únicamente podremos ver la cara en la cual
estamos, y si no logramos vencer una muy arraigada tendencia humana, creeremos que la única cara vista
constituye la totalidad del cuerpo piramidal.
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Sólo si logramos llegar al vértice tendremos delante de nosotros la imagen completa que conforma la
estructura por la cual ascendimos.
No llegar a la cima y quedarse con la imagen de la única cara conocida hasta el momento nos hará tener una
apreciación errónea de la situación y, en consecuencia, la acción a emprender también será equivocada.
Pareciera que en este marco de misterio es poco lo que el ser humano puede hacer por su destino y por su
salud; esto no es correcto. Para cualquier persona que quiera aprender realmente y, por lo tanto, sanarse,
hay muchas cosas que pueden hacer por él sus pares, y otras tantas que puede y debe hacer por sí mismo.
Este libro intenta describir sólo algunas pautas de trabajo para la persona que decida sanarse y para aquel
que desee y necesite ayudar a los demás a ampliar su estado de conciencia de ser un ser del Universo.

INTRODUCCIÓN

La realidad constitucional de un ser humano abarca varios planos que más adelante veremos en detalle.
Estos planos son respaldados por un campo energético que estructura y controla los procesos de todo el
sistema.
Las técnicas que veremos en este libro están orientadas a reestructurar ese campo para que, como
consecuencia, se produzcan efectos en el nivel correspondiente.
Podríamos decir entonces que lo que vamos a aprender es manejo de energía vital -BIOENERGÍA- bajo el
principio de interacción entre niveles energéticos.
Esta interacción entre niveles de energía abarca todas las frecuencias del biocampo humano al alcance del
hombre (hay otras sobre las que no tiene influencia el ser humano de manera directa), desde la energía sutil
hasta la energía densa conocida como materia.
Lo que vamos a ver es el estudio de la función natural que nació con la vida misma: la modulación de
BIOENERGÍA. Sin esta actividad no habría posibilidad de vida en ninguna de sus manifestaciones y en
ninguno de los tres reinos conocidos.
El movimiento energético es el origen del movimiento físico, del equilibrio y del desequilibrio, de la salud y de
la enfermedad, de la vida y de la muerte: es el origen de todo lo conocido por el hombre; es la expresión
material de la conciencia de ser en su más amplia gama de manifestaciones.
Cualquier cambio físico es indefectiblemente precedido por un movimiento energético que le da origen.
Esta afirmación posiblemente le resulte algo extraña a algún lector materialista-determinista, pero no
debemos olvidar que el hombre aún no conoce prácticamente nada de las fuerzas formadoras y regentes del
Universo y de su propia vida.
Durante el transcurso de este libro nos vamos a manejar con los planos sutiles de la conciencia de ser, tanto
en la teoría como en los ejercicios sugeridos, por lo tanto, no rigen las leyes de lo racional ni de la Física
newtoniana ya que estas están orientadas exclusivamente al mundo material y sus fenómenos. Esto se debe
a que dicha rama de la Física trata con bajas velocidades relativas y grandes masas relativas. Al momento de
aumentar la velocidad y acercarnos a la de la luz, o cuando la cantidad de materia es inferior a la de una
molécula, las leyes de la Física delineadas por Newton dejan de ser aplicables.
Es posible que durante el proceso de estudio y aún luego nos encontremos con:

 Preguntas sin respuesta.

 Supuestas contradicciones.
 Fenómenos para atestiguar resultados sin explicación racional aparente.

Esto es común debido al nivel de sutilidad en el que operan las técnicas y los ejercicios. Al desarrollar nuestra
actividad en un campo de esa sutileza, es natural que se encuentre dificultada la observación y la verificación
detallada; mucho más aún la medición, parametrización, calificación y clasificación.
No debemos olvidar que todavía no conocemos nada del Universo que nos rodea ni de nosotros mismos,
incluyendo la naturaleza última de la materia que nos compone; teniendo esto en cuenta podemos
preguntarnos: ¿cuánto más ignoraremos entonces acerca de las componentes sutiles que constituyen la
parte más profunda de nuestra totalidad como centros de conciencia?
Es evidente que mucho más aún.
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También nos encontraremos con frecuencia ante muchos estados internos-externos que no tienen
representación precisa en palabras: hay que aprenderlos con el cuerpo y con la percepción.
Con esta afirmación quiero dejar en claro que el conocimiento de las fuerzas con las que vamos a trabajar no
se logra por medio de un proceso intelectual; por el contrario, la aptitud resultante de este estudio va a estar
en relación directa al hecho de haber experimentado los fenómenos y los efectos en nuestra propia
conciencia de ser, tanto corporal como sutil. Llegado este punto, las palabras son solamente ilustrativas ya
que se tornan ineficientes en este plano, tanto para tratar de enseñar o explicar un concepto como así
también para inducirlo en el otro.
Vamos a hacer el intento de entender a la Naturaleza y cooperar con ella en el proceso de restauración del
equilibrio. Si abordáramos el trabajo con una actitud material racionalista intentando comprender y controlar
todo lo que suceda, los resultados serán de alcance limitado y solamente pondrá de manifiesto una vez más
las limitaciones humanas ante tanta inmensidad.

Lo más difícil del aprendizaje adecuado de las técnicas para modular energía no son las técnicas en sí sino el
trabajo personal por el que hay que pasar a fin de estar preparado para aprenderlas y utilizarlas de manera
consciente.

TEORÍA

ENERGÍA

Es frecuente oír en boca de practicantes de diversas disciplinas y técnicas la palabra ENERGÍA. En

ocasiones pareciera que el solo hecho de nombrarla fuese revitalizante o purificante; cuanto más si la
incluimos dentro de alguna práctica. Pero avancemos con cuidado y prudencia ya que, del hecho de hablar
de energía al hecho de conocerla y manipularla de manera adecuada, hay realmente una diferencia decisiva.
Si bien sabemos que la teoría no es suficiente para conducir a resultados correctos, creo adecuado exponer
de forma breve y general algunos conceptos, con la idea de establecer con la mayor claridad posible un
sistema de coordenadas en el cual basar la práctica.
En nuestra cultura se suelen valorar en exceso las explicaciones racionales a pesar de que, en la práctica
cotidiana, pueden verse los trastornos que causa el abuso de este recurso y su limitación al momento de
necesitar una verdadera comprensión de alguna situación. En este contexto intelectual, en ocasiones es
necesario, a fin de tranquilizar a alguien que requiere fundamentos técnicos, ofrecerle alguna explicación,
aunque ésta sea de carácter elemental. Aún en el caso de que la persona que solicita la información no esté
capacitada para comprenderla, el solo hecho de que nosotros hayamos podido dársela, en la mayoría de los
casos, es motivo suficiente para que se sienta respaldada y segura respecto de la situación en la que se
encuentra.
Esto es lo que motiva el desarrollo teórico.

¿QUÉ ES REALMENTE LA ENERGÍA?

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No se conoce la naturaleza última de la energía. Sólo se conocen distintas manifestaciones del mismo
fenómeno.
Todos nosotros sabemos también que la naturaleza última de la materia sigue siendo un misterio para la
ciencia; mucho más misteriosas aún son las energías sutiles, en especial las referidas a los organismos
vivientes ya que poseen un alto nivel de conciencia y, por lo tanto, su complejidad constitutiva excede la
comprensión racional y las posibilidades de exploración con los medios conocidos.
Existe abundante literatura altamente especializada al respecto como para que se justifique una larga
exposición; pero de todos modos daremos un panorama general para conocer algunos de los fundamentos
del tema que nos ocupa.

ORIENTE

La antigua y sabia filosofía oriental habla de una energía universal que es el componente básico y la fuente
de toda vida. En India se la llama prana, c’hi en China, ki en Japón; en la antigua Grecia era conocida como
pneuma; Wilhelm Reich la llamó orgona y actualmente podríamos denominarla BIOENERGÍA.
Lo que se conoce como distintos tipos de energía son en realidad distintas manifestaciones de esta única
energía universal, que pareciera adquirir las más diversas formas de expresión para producir una amplia
gama de efectos en el plano en el que actúe.
Según dicha filosofía, esta energía contiene en sí dos fuerzas polares que la animan: el yin y el yang.
Estas dos fuerzas opuestas y complementarias son las que aportan la dinámica al ir mutando
permanentemente desde una hacia otra polaridad.
El principio de la medicina oriental se basa en la interacción de estas fuerzas.

Cuando estas fuerzas están equilibradas,

el sistema vital muestra salud física;
si se desequilibran, el resultado es la enfermedad.

Exceso de yang produce, como consecuencia, hiperactividad orgánica. Un exceso de yin da como resultado
el funcionamiento insuficiente de un sistema, órgano o zona. Ambos desequilibrios provocan finalmente la
enfermedad física.

FÍSICA ACTUAL

La Física postula que todo lo conocido es energía en distintos estados, desde los más densos como es la
materia hasta aquellos en los que la energía vibra a altísimas frecuencias y, por lo tanto, pasa a estados
sutiles no detectables por los cinco sentidos físicos.
La Física definía a la energía como “todo agente capaz de producir un trabajo”.
La investigación de la vida continuó y hoy se usa un concepto que pareciera ser mucho más preciso y amplio;
actualmente se define a la energía como una fuerza.

REFERENCIAS

Si tenemos en cuenta que estamos tratando nada menos que con la fuerza formadora y regente de todo lo
conocido, es natural suponer que dicha fuerza tendrá influencia en muchos ámbitos asociados con el ser
humano y su realidad.
A modo de referencia y para despertar la necesidad de investigación en el lector, cito algunos campos en los
que se considera la BIOENERGÍA:

Biofísica - Bioarquitectura - Bioelectrónica

Biomagnetismo - Bioinformación
Bioplasma - Geobiología - Biósfera - Biometeorología

ESTADOS DE LA MATERIA

Si hablamos de energía y de sus tan distintas manifestaciones, no podemos dejar de examinar, aunque más
no sea sintéticamente, los estados de la materia.
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A pesar de que la información expuesta es de carácter introductorio, podemos decir que nos va a servir de
referencia válida tanto para nosotros a la hora de entender algún fenómeno como en el caso de tener que
ejemplificarlo para terceros.

Agrupados de acuerdo con su estado

Los estados reconocidos por la física son cinco:

SÓLIDO - LÍQUIDO - GASEOSO

ELECTROMAGNÉTICO o RADIANTE - PLÁSMICO

En el estado sólido, la fuerza de atracción entre sus moléculas y, por lo tanto, su proximidad, es considerable
y a ello se debe su consistencia.
En el estado líquido, la atracción intermolecular es menor que en el sólido y el conjunto carece de forma
propia teniendo que tomar la del recipiente que lo contiene.
En el estado gaseoso, la fuerza de repulsión supera a la de atracción.
El estado siguiente es conocido como electromagnético y se manifiesta en fenómenos magnéticos, eléctricos,
luminosos, y otros.
Al quinto estado, el plásmico, lo podemos encontrar en las estrellas, galaxias y reacciones termonucleares
donde la temperatura es superior a los 100.000.000 de grados.

Agrupados de acuerdo con la percepción humana

Otra de las clasificaciones que acostumbro a exponer en los cursos y seminarios tiene la finalidad de ir
acercando al oyente y, en este caso, al lector, a una visión más profunda del ser humano y a demostrar lo
limitado del alcance de nuestros sentidos físicos.
La primera parte consta de los fenómenos registrables por los cinco sentidos convencionales, cuya función es
únicamente la de conectarnos con el mundo físico:

Materia - Sonido - Calor - Luz

La segunda división abarca fenómenos no registrables por los sentidos físicos pero sí por aparatos
especiales:

Ondas de Radio - Rayos Infrarrojos y

Ultravioletas - Rayos X

El último grupo es registrable por los sentidos superiores e interviene de forma directa la BIOENERGÍA:

Clarividencia - Intuición - Telepatía

Pensamientos - Sentimientos - Deseos

No es el propósito de esta exposición profundizar en temas que han sido suficientemente experimentados y
documentados. Lo destacable a tener en cuenta para este último grupo de fenómenos es que no existen en
el Universo conocido representaciones abstractas. Absolutamente todo lo experimentable por el hombre pone
en movimiento un monto de energía de características particulares de acuerdo con las propiedades de la
fuente de origen; por lo tanto, cualquier expresión de la vida, por pequeña y sutil que ésta sea, estará
acompañada por una determinada cantidad de energía vital.

¿QUÉ DIFERENCIA LOS FENÓMENOS?

Considerando lo visto, hay una pregunta que surge de manera casi automática: si tomamos lo postulado por
la Física y vemos todo lo conocido como energía: ¿qué es lo que diferencia las tan variadas manifestaciones
de ésta?
La disparidad en la forma en que se muestra la energía está dada por algo que se conoce en Física como
frecuencia vibratoria. Esta frecuencia es la cantidad de veces que se repite un suceso determinado en un
lapso. Imaginen el péndulo de un reloj y podrán tener un panorama aproximado.
Hay frecuencias bajas en las que la energía oscila a muy pocas veces por minuto, en contraposición con
otras en las que vibra a billones de veces por segundo.
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La Física grafica esto sobre una línea y lo llama espectro electromagnético. Este último es dividido en octavas
de acuerdo con la frecuencia vibratoria.
Para tener un ejemplo gráfico, imaginen el teclado de un piano. Hagamos de cuenta que pulsamos la tecla
correspondiente a la nota DO del centro de dicho teclado. Sabemos que si nos desplazáramos por las teclas,
por ejemplo, hacia la derecha, nos encontraríamos con otras notas: RE, MI, FA, SOL, LA y SI
correspondientes a la escala musical en orden ascendente. Pero si avanzáramos una tecla más volveríamos
a pulsar otro DO.

Si ambas notas son DO,

¿cuál es la diferencia sonora y técnica?

La desigualdad sonora está dada en la altura del sonido, ya que el primer DO nos suena más grave que el
segundo.
La explicación técnica es que el segundo DO está ubicado una octava de frecuencia más “arriba” que el DO
primero. Ambas notas son DO pero con diferencia de frecuencia de una octava.
Si continuáramos pulsando las teclas correspondientes a las notas DO nos encontraríamos con el fin del
teclado del piano, y con un DO final muy agudo.
Seguramente, el DO que seguiría en secuencia ascendente puede ser reproducido por un violín.
Podemos seguir aumentando la frecuencia de nuestro DO original hasta que se haga tan agudo que el oído
humano ya no pueda captarlo,

LO CUAL NO SIGNIFICA QUE NO ESTÉ SONANDO

EN ESTE MISMO MOMENTO.

Si aumentáramos aún más la frecuencia vibratoria de este DO, en algún momento veríamos un color en lugar
de escuchar un sonido. Lo que sucede es que la energía sonora original se fue convirtiendo en energía
lumínica a causa de la variación de frecuencia experimentada.
No debemos olvidar que todo lo conocido es energía y el ser humano capta solo partes aisladas de las
manifestaciones de esta energía por medio de sus limitados sensores (cinco sentidos).
Hay un ejemplo de la vida diaria que resulta todavía más gráfico para clarificar este concepto.
Imaginen que sacan de su heladera un cubo de hielo. Lo pueden tocar, ver, oler, etc. No cabe duda alguna
para alguien que crea estar en sus cabales que este objeto puede ser calificado de material, o sea, hecho de
materia sólida.
Procedamos a dejarlo que tome la temperatura del ambiente, si esta no es menor a los 0º centígrados.
En breve lapso el cubo de materia se convierte en un charco, por lo tanto, estamos hablando de nuestro trozo
de materia en estado líquido.
Los invito ahora a imaginar que ponemos el agua resultante del cubo en un recipiente de vidrio de
dimensiones importantes. Cerramos herméticamente el receptáculo y lo calentamos.
Si las condiciones de humedad interior del recipiente lo permiten, el agua se convierte al estado gaseoso y

DESAPARECE ANTE NUESTROS OJOS

Si mostrásemos este “truco” a alguien que no conociese los estados del agua, seguramente seríamos
calificados de magos, ya que hicimos desaparecer materia. Este proceso no llama la atención del hombre
mayoritario porque está acostumbrado a convivir con él, pero no por esto es menos misterioso.
Continuemos con el experimento y enfriemos nuestro recipiente hasta que el agua-gas se condense y
obtengamos de nuevo agua-agua.
Depositemos el agua-agua en la cubetera original y volvamos a enfriar a menos de 0º centígrados.
Al solidificarse el agua-agua pareciera que de la nada obtuvimos materia. Otra vez seríamos llamados
injustamente magos, ya que todo lo que hicimos se reduce a la manipulación de los estados de un elemento
con energía calórica.
Mediante este ejemplo se revela la diferencia con la que se manifiesta la energía -materia-agua-gas- cuando
operamos sobre ella con energía -térmica-, y lo limitado de nuestros sentidos.

BIOENERGÍA
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Para entender la necesidad de la existencia de BIOENERGÍA en estado sutil (recordemos que todo es
energía) en los organismos vivos, es necesario tomar conciencia de la conformación de éstos.
No son necesarios mayores conocimientos sobre Biología para que nos sea posible advertir el altísimo nivel
de complejidad en la formación de los seres con vida orgánica y aún inorgánica.
Si llevamos un poco más allá la observación atenta nos encontraremos con incomprensibles posibilidades
funcionales en todo lo que posea algún tipo de vida. Basta detenernos un momento en el más elemental
proceso orgánico: p.ej.: la digestión, el equilibrio.
Pero también podemos ver las limitaciones de la materia para soportar procesos como son los
incomprensibles mecanismos de acumulación y selección de memoria, los sueños, la percepción ampliada
de algunas personas.
Pareciera que la conclusión surgiese de manera automática:

se necesita un SISTEMA DE CONTROL MÁS SUTIL,

para soportar dichas funciones .

Este sistema de control está constituido por nuestro campo energético.

La modulación de BIOENERGÍA es una función natural del cuerpo físico y de los cuerpos sutiles que nació
con la vida misma del ser humano con la finalidad de respaldar y controlar todo lo que sucede en el plano
material. Por lo tanto, podríamos decir sin riesgo de equivocarnos que el movimiento energético vital es el
origen del movimiento físico y de todo lo registrado por la conciencia de un ser.

Cualquier cambio físico es indefectiblemente precedido

por un cambio energético.

La demostración de esta última afirmación es tan obvia como observar que un automóvil desprovisto de
combustible y de una inteligencia rectora al volante se convierte en una masa de materia inerte, con la única
posibilidad de deteriorarse lentamente hasta su fin.

CAMPO ENERGÉTICO HUMANO

La Física moderna nos dice que el cuerpo humano no es simplemente una estructura material formada por
moléculas sino que está formada, al igual que todos los demás objetos, por campos energéticos.
Con este concepto, la idea que teníamos del cuerpo físico se traslada desde el mundo de la forma sólida
estática a otro de campos energéticos dinámicos en constante transformación y expuestos a acciones y
reacciones acordes a las fuerzas internas y externas.
En este campo de energía asociado a los organismos vivos han sido detectados algunos tipos particulares de
radiaciones y determinadas sus respectivas longitudes de onda (magnitud complementaria de la frecuencia
de vibración).
La existencia de esta energía vital ha sido comprobada en innumerables ocasiones por la percepción
clarividente y medida en laboratorios con instrumental de alta precisión en algunos países tales como, por
ejemplo: Rusia, China, Japón, EE UU, Alemania.
Podríamos considerar el campo energético humano como una matriz de energía o molde sobre el cual se
desarrolla el cuerpo físico y al que, por lo tanto, define y controla.
Hay una tendencia generalizada a creer que el campo energético de los organismos vivos es emitido por el
cuerpo físico de estos. Si bien es cierto que el cuerpo físico emite radiación electromagnética gracias a que
posee una vasta red nerviosa por la que circulan corrientes eléctricas, el caso real es el inverso. El cuerpo
físico es la parte más densa del cuerpo energético. Dicho cuerpo energético tiene reflejado en él todo el plano
físico y muchos otros registros de información sin correspondencia material. El campo bioplásmico es regente
del cuerpo material. Considerando esto la conclusión es inmediata:

cualquier distorsión de esa estructura matricial

terminará produciendo en el cuerpo una alteración llamada ENFERMEDAD.

Por lo tanto

actuando adecuadamente sobre esta estructura regente

podemos producir efectos sobre el cuerpo físico.
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El trabajo con BIOENERGÍA apunta a reestructurar este campo para que, como consecuencia, se equilibre el
cuerpo físico.
Quiero hacer en este punto una salvedad como refuerzo de lo expuesto en MODELO GLOBAL de TRABAJO
y en la INTRODUCCIÓN, y como aproximación a la visión de la enfermedad humana.
Hemos visto que el campo energético humano es regente del cuerpo físico y que, actuando sobre aquél, se
verificarán modificaciones en éste. Tomada esta afirmación de manera superficial podría pensarse que con el
solo hecho de manipular adecuadamente el campo citado tendríamos resuelto el problema de la enfermedad:
nada más lejos de mi convicción y de lo que intento afirmar.
Si bien la realidad respalda lo dicho hasta ahora, tengamos en cuenta que el campo energético no se altera
por decisión propia. Exceptuando por el momento los factores energéticos externos, la mayoría de las
alteraciones sufridas por este campo son producto de una inadecuada forma de pensamiento-conducta de
vida, y aunque lográramos equilibrar energéticamente una estructura, dicha estabilidad tendría carácter de
temporal si no estuviese acompañada de trabajo personal en el plano que generó internamente la alteración;
o sea: detectar y corregir la causa primera que origina la alteración.

NINGÚN SER HUMANO TIENE LA CAPACIDAD DE MODIFICAR EL INTERIOR DE SUS IGUALES

DE MANERA DEFINITIVA.

NADIE PUEDE HACER POR NOSOTROS

LO QUE NO HACEMOS POR NOSOTROS MISMOS.

BIORRITMOS

Asociado a la vibración del Universo funcionando como un TODO rítmico sincronizado, existen innumerables
ciclos vitales o ritmos biológicos conocidos como biorritmos.
Todos ellos trabajan bajo el principio de polaridad dinámica que da movimiento a todo lo conocido.
Si bien la profundización de este tema excede los límites de este libro, les propongo prestar atención y
dejarse llevar por los ritmos naturales biológicos, acompañándolos en lugar de ir en sentido contrario. Al ser
leyes naturales inalterables por el hombre, si les ofrecemos resistencia sólo lograremos romper el equilibrio
natural que nos regula en todos los planos, derivando esto en una alteración más o menos profunda, o sea,
en enfermedad.
Si nos detenemos a observar un instante, por ejemplo, el ritmo ciudadano, podemos encontrarnos con
innumerables particularidades perjudiciales de la conducta humana. Nuestra vida transcurre junto a ciclos
vitales tales como el día, las estaciones, los tránsitos planetarios. Salvo excepciones, el ser humano medio
ignora las diferencias inherentes a la naturaleza de estos biociclos y vive de manera prácticamente igual en
las distintas etapas de todos ellos. Un ejemplo claro es la alimentación. Salvo mínimas modificaciones, nos
alimentamos de igual manera durante todo el año, haciendo caso omiso de las enormes diferencias que se
registran en todo el sistema humano -físico, anímico, energético-. El perjuicio que causa esta actitud
mayoritaria puede verse claramente reflejado en el estado de salud general.
Algunos ejemplos de ritmos naturales son: el día, el año, la vida humana, el ciclo anímico, el ciclo mental, el
zodíaco, el sueño, la asimilación/eliminación en el ciclo digestivo animal.
Algunos ejemplos de intento de alteración llevados a cabo por el hombre son: crear vida/inteligencia, trabajar
de noche, fijar horario para comer, contaminar el hábitat, tomar vacaciones sin considerar las necesidades
del cuerpo y del psiquismo, ingerir sustancias que actúan sobre el equilibrio hormonal u otro sistema natural
de regulación, mantener la vida del cuerpo artificialmente, prolongar deliberadamente la etapa de hogar
paterno, hacinarse en grandes ciudades impidiendo la carga/descarga de energía, vivir separados del suelo,
ruidos ambientales que superan los límites de lo tolerable, proyección de las emociones hacia el exterior
(películas, juegos, etc.) alejándose de la emoción de lo real que consiste en emocionarnos y disfrutar del
incomprensible estado de conciencia de ser un ser.
La lista podría continuar y sería interminable. Los invito a citar algunos más observando la realidad.

ENFERMEDAD
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Vamos a ver ahora el concepto de enfermedad de acuerdo con lo que significa este proceso para el trabajo
de modulación de BIOENERGÍA.
Estar enfermo indica una ruptura del equilibrio natural de los mecanismos de autorregulación biológica de
nuestro sistema por habernos apartado de las pautas de salud definidas por nuestro diseño original. El
síntoma físico es el último eslabón de una cadena de sucesos desequilibrados. Esta ruptura del equilibrio
tiene tantas formas como seres existen; por lo tanto, dicho desequilibrio se expresará de las maneras que
cada sistema en particular lo determine espontáneamente de acuerdo con su configuración natural y
dinámica operativa.
Posiblemente, previendo la inconciencia humana mayoritaria que suele ignorar las pautas de salud más
elementales, el sistema humano cuenta con un margen de tolerancia y un poder de restauración del
equilibrio, asombrosos. Aún así, el hombre consigue superar estos límites de seguridad en contra de su
bienestar, su tiempo, su cuerpo y su vida; y en medio de la enfermedad dice no comprender por qué está
enfermo o atribuye la causa a motivos externos.
Habitualmente, el ser humano medio desconoce o hace caso omiso de las pautas de salud más básicas que
cualquier animal, en su lugar, conoce y respeta de manera espontánea. En caso de conocer algunos de esos
lineamientos elementales, el hombre adopta otra nociva costumbre que consiste en minimizar lo perjudicial. Si
el efecto nocivo de nuestra práctica inadecuada arrastra consigo la suficiente intensidad, podremos observar
que dicho efecto es acumulativo. Los efectos dependerán, en todos los casos, de las características y del
plano donde actúe el error.
Lo expresado hasta ahora puede dar la idea de referirse solamente al plano físico; la realidad es que alude a
la totalidad humana, haciendo especial hincapié en el aparato psicoemocional, ya que es éste el que se
ocupa de nuestro control inmediato. Esto puede verse resumido en un claro concepto:

En caso de perturbación psicoemocional profunda

se produce en el cuerpo una alteración del equilibrio natural de los mecanismos de autorregulación biológica.

Todos conocemos algunos de los mecanismos de autorregulación biológica; a modo de sencillo ejemplo
recordemos los latidos cardíacos, la presión sanguínea, el peristaltismo intestinal, el sistema inmunológico, el
sueño.
¿Quién de nosotros no ha tenido un disgusto mientras comía?
¿Recuerdan la resultante orgánica de ese episodio?
¿Qué ocurrió con el mecanismo regulador de la digestión?
Imaginen ahora una perturbación psicoemocional de intensidad menor y que pase casi desapercibida para la
conciencia, pero que se repita con frecuencia. ¿Pueden suponer el efecto? Algo va a suceder...
Pasemos ahora a una definición global que debe tener presente en todo momento aquel que quiera
dedicarse a trabajar con la conciencia humana:

El estado de salud es la suma del buen funcionamiento

de las partes que nos constituyen:

Nivel
 FÍSICO
 EMOCIONAL
 MENTAL
 SENTIMENTAL
 ESPIRITUAL

Estos cinco planos de la conciencia se reflejan en su campo energético. La medida en que el ser humano
accede a estos niveles está en relación directa a su densidad; o sea: a mayor densidad, mayores
posibilidades de acceso. Lo mismo se puede decir del grado de comprensión y decisión que sobre cada uno
de ellos tiene el hombre.

 Es evidente que tenemos la mayor comprensión y decisión sobre el cuerpo físico ya que está al alcance
de los sentidos y lo podemos llevar donde nos plazca.

 Para comprender y manejar el plano emocional, la cuestión se complica de forma notoria. Cualquiera que
se haya tomado el trabajo de observar las emociones, tanto propias como ajenas, habrá observado la
enorme dificultad que tiene el hombre medio para controlarlas.

 A la hora de comprender y actuar sobre el plano mental nos encontramos con que es muy poco lo que
sabemos y podemos hacer de forma real y duradera.
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 Sobre el nivel de nuestros sentimientos -hablo del Amor y no del emocionalismo- no conocemos
absolutamente nada de las leyes que intervienen y, por lo tanto, no tenemos la menor de las posibilidades de
decisión dentro de este plano.

 Llegamos al grado espiritual. Sólo puedo atestiguar su existencia y su maravillosa guía. Si alguno de
ustedes puede aportar algo más con certeza, se lo agradeceré...

La salud, el bienestar y la alegría

son un reflejo de nuestro interior;
por lo tanto, si nuestras pautas de vida
no son adecuadas terminarán afectando el cuerpo físico.

Es del conocimiento de todos nosotros que la mente ejerce una función directiva sobre el cuerpo físico. De
esto se desprende que todo síntoma tiene tras de sí una orden emitida desde nuestro psiquismo y que se
manifiesta a través del cuerpo. Si llevásemos el tema más allá, podríamos observar que también la ansiedad,
las depresiones, la angustia, utilizan el cuerpo para manifestarse.
De lo visto surgen dos preguntas:

¿El síntoma será arbitrario o estará indicando algo?

¿Tratamos de eliminarlo lo antes posible

o nos detenemos a buscar la causa?

Evidentemente, el tan temido y molesto síntoma tiene su sentido y su justificación, y nuestra acción correcta y
responsable si es que decidimos vivir en un adecuado estado de salud es atender con eficacia la indicación
que éste nos da.
Al momento de explorar las causas llegamos indefectiblemente a nuestro psiquismo ya que el cuerpo y sus
procesos no poseen autonomía vital alguna. Una de las disciplinas que se ocupa largamente de esto es la
medicina psicosomática. Para los lectores que estén interesados en profundizar el tema recomiendo la obra
del Dr. Luis A.Chiozza y su equipo de colaboradores.
Sin intención de ahondar en un tema tan complejo que no es de mi especialidad, quiero exponer algunos
lineamientos generales que deben tenerse en cuenta en oportunidad de trabajar con cualquier método que
apunte a la restauración del equilibrio del sistema humano.
Apartar los procesos psicoemocionales del estado de salud teniendo en cuenta que el psiquismo es regente
del cuerpo físico de forma directa, sería como reparar repetidas veces un automóvil chocado sin tener en
cuenta la manera de conducir de su conductor: los resultados serían temporarios y el deterioro sería
progresivo.

CONFORMACIÓN HUMANA

Vamos a ver de manera global cómo está conformado el ser humano en sus tres planos inferiores. Me limito
a desarrollar estos niveles por ser los más familiares y experimentados por hombre dentro de los limitados
conocimientos que éste posee sobre su Universo. Adentrarse en el plano sentimental y espiritual sería incurrir
en la misma actitud de tantas líneas de pensamiento: intentar enseñar sobre lo que el ser humano no está
capacitado para conocer.

 ÓRGANOS Y SISTEMAS - Aparato físico adaptado para la vida terrestre.

 SISTEMA DE CREENCIAS - Estructura psíquica de control del sistema.

 EMOCIONES - Descargas motoras neurovegetativas a modo de interfaz entre el psiquismo y el cuerpo.

Esta simple y reducida clasificación es la base de la conformación humana inmediata -podríamos llamarla
terrestre-. El habitante orgánico material del planeta Tierra posee un cuerpo denso como dispositivo adaptado
a las características del lugar que habita. Sus sensores físicos están diseñados para mantenerlo en contacto
con el medio físico que lo rodea y del cual forma parte. Sus procesos físicos dependen también del medio
físico, en cuanto a su abastecimiento físico. Su cuerpo físico y el entorno operan en consonancia formando
una unidad indivisible. Si fuera rota esta unidad, el ser humano se vería perjudicado de forma inmediata ya
que no está capacitado biofísicamente para habitar otro medio. Este es su hábitat natural y le es
indispensable para mantener su armonía básica. Esta es una realidad fácilmente verificable.
Vimos anteriormente que el psiquismo actúa como director del cuerpo material. Sin esta central de control no
existiría posibilidad de vida ya que el cuerpo físico sólo se convertiría en una masa informe de tejido orgánico
 12

en inmediato proceso de descomposición carente de toda posibilidad de autonomía vital. De esto se

desprende la existencia de una región de la psiquis humana que regula los procesos vitales sin la
intervención de la voluntad consciente. Sin adentrarnos en detalles respecto del manejo de nuestro
enigmático estado onírico, podemos decir que el psiquismo humano posee una zona a la que sería adecuado
llamar inconsciente, debido a sus características de autonomía.
No hace falta mencionar que, complementando esta forma de psiquismo inconsciente, existe otra relacionada
con nuestra conciencia diurna e inmediata conocida como consciente debido a las características de volición
que posee.
De acuerdo con los dos planos descriptos, tenemos entonces el primero que consiste en un aparato
adaptado para la vida terrestre y un centro de control de éste con características duales.
Hasta aquí el panorama pareciera ser sencillo y claro, mientras no surja la pregunta casi obligada:

¿Cómo se comunica un plano abstracto

con un plano material?

Sabemos que en la actualidad la ciencia se esfuerza sostenidamente por intentar descubrir aunque más no
sea dónde se halla localizado nuestro psiquismo. En principio se le atribuyó asiento en el cerebro y en otras
partes del sistema nervioso central, hasta que diversas comprobaciones de laboratorio dieron por tierra con
esta teoría. Lo mismo sucedió con el almacenamiento de memoria. Hoy que la ciencia ha avanzado en este
ámbito, se tienen más dudas que certezas, lo cual indica un real progreso ya que la mente estudiándose a sí
misma no es una cuestión sencilla...
Exactamente a esto me refiero cuándo digo plano abstracto, ya que no sólo no se conoce su real localización
sino mucho menos aún su dinámica. Pero lo que sí es claro es que se comunica de una manera concreta y
de acuerdo con una lógica apenas conocida hasta en sus funciones más elementales.
Esta forma de nexo entre el psiquismo y el cuerpo se efectúa por medio de corrientes eléctricas a las que la
neurología llama descargas motoras neurovegetativas.
Al decir descarga se refiere a las corrientes bioeléctricas generadas por el sistema nervioso central. Con
motoras alude a la cualidad de movimiento que producen estos estímulos -sea movimiento manifiesto o
interno-; y al definirlas como neurovegetativas aclara su origen cerebral y el carácter de involuntarias que
estas poseen.
Dichas corrientes poseen una amplia variedad de voltajes, intensidades, tipos de onda y frecuencias. Con
esto pretendo mostrar que el efecto que producirán será también muy variado debido la cantidad de variables
que las conforman. Tales corrientes no sólo circulan por la red del sistema nervioso del mismo modo que lo
harían por un cable, sino que lo hacen por otros medios tales como, por ejemplo, la piel.
Algunos de los efectos finales que produce la influencia de estas corrientes son claramente observables y
medibles; un ejemplo claro es el movimiento muscular y podemos verificarlo con facilidad y precisión en el
cuerpo físico. Existen otras de distintas características que producen en la conciencia de ser algunas
sensaciones conocidas por todos nosotros y que están tipificadas por la psicología. El efecto que dichas
corrientes provocan cuando llegan a la conciencia se conoce como emociones.
Estas sensaciones son inconfundibles para el hombre cuando están claramente diferenciadas por poseer una
intensidad y un tipo particular que, al llegar al cuerpo físico y al estado anímico, no permiten error alguno.
Pero, ¿que sucedería si la intensidad y/o el voltaje de una corriente no fuera lo suficientemente fuerte y
diferenciado como para producir un efecto claro en el cuerpo? Pasaría desapercibido para la conciencia pero
igualmente produciría un efecto de acuerdo con su tipo particular.
¿Y si una corriente impropia se mezclara alterando las corrientes normales que controlan, por ejemplo, un
órgano? Obviamente, si esta situación se prolongase, terminaría produciéndose una alteración en la zona
comprometida.
Este principio que he desarrollado de manera extremadamente sintética es la base de la medicina
psicosomática ya mencionada, la cual ha adquirido un altísimo nivel de desarrollo y, como consecuencia, una
alta capacidad de respuesta. Por supuesto, la conciencia humana para comprenderse a sí misma tiene
todavía un Camino muy largo que recorrer.
Con lo expuesto queda claramente demostrado que la mente es regente del cuerpo por medio de emociones
de distinto tipo. Veamos ahora de manera general como está compuesto el psiquismo humano.

ESTRUCTURA PSICOLÓGICA HUMANA

 Módulo básico al nacer

- Características personales
- Factores hereditarios
- Factores geográficos
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 Influencia socio-cultural

La estructura psicológica humana está formada por patrones de conducta; este nombre se deriva de su
función, ya que es por medio de ellos que nos conducimos en la vida. Estos patrones de conducta están
registrados en nuestra mente y los llamaremos sistema de creencias. Creencias son aquellas cosas con que
absolutamente contamos, aunque no pensemos en ellas (Ortega y Gasset, 1946).
Con esto quiero mostrar y dejar en claro que no hace falta pensar en algo para que exista en nuestra mente y
produzca sus efectos. De hecho, en la gran mayoría de las ocasiones creemos estar decidiendo algo
conscientemente, cuando lo que en realidad está sucediendo es que nuestro psiquismo consciente está
siguiendo pautas de origen desconocido -inconscientes-.
Como claro ejemplo recordemos nuestros tan conocidos gustos y preferencias. Sabemos que algo nos gusta
pero no conocemos el por qué. Nuestra aparente decisión consciente no hace más que interpretar la
tendencia que le llega desde un plano mas profundo y desconocido que tiene sus propios motivos y que
permanecen ocultos a la mente racional. Nuestra vida esta montada sobre un enorme repertorio de
creencias. Esta gran cantidad de creencias de la cual depende nuestra vida por medio de sus instrucciones,
está conformada por dos grandes grupos de registros que mantienen entre sí una muy activa dinámica. El
primero de estos dos conjuntos está constituido a su vez por tres módulos de distinto origen.

 El primer módulo contiene las características personales al nacimiento; se conoce también como tipo de
personalidad. La disciplina que se encarga de manera absolutamente precisa y exhaustiva del análisis de
este grupo es la Astrología.
Creo que no son necesarias mayores aclaraciones sobre este módulo ya que su existencia e influencia de
por vida es innegable para cualquiera que haya observado aún mínimamente la conciencia humana y sus
particularidades.

 El segundo módulo contiene los factores hereditarios tan conocidos por todos nosotros y de cuya
existencia e influencia no son necesarias más aclaraciones: la realidad se encarga del trabajo.

 Cómo tercer grupo tenemos los factores geográficos. Este es un tema de difícil explicación pero de fácil
verificación. Tomemos alguna manifestación de las distintas particularidades de algunas zonas geográficas
tales como, por ejemplo, la música. ¿Qué sensación les produce un tango, una vidala o una zamba
comparados con otros tipos de música de países vecinos?
Esta diferencia no quiere indicar, de ninguna manera, que alguna expresión sea superior a otra; simplemente
está mostrando las diferentes características que la influencia que cada zona terrestre ejerce sobre la
tendencia anímica del ser humano que habita en ellas.

Estos tres factores actuando concurrentemente, conforman una personalidad al día cero de vida.
A partir de ese momento comienzan a influir sobre el ser humano los factores socio-culturales que
interactuarán con nuestro sistema de control de vida efectuando modificaciones de manera continua hasta
nuestro último día sobre la Tierra.
Creo adecuado volver a destacar que el gran control de todo el sistema humano lo ejerce sin lugar a dudas el
inconsciente. El plano consciente solo puede actuar sobre él indirectamente y a través de una interacción que
el hombre conoce muy poco, ya que su codificación, su dinámica y sus posibilidades son demasiado distintas
de las del psiquismo conciente como para que pueda ser interpretado por los limitados patrones de éste.
Luego de lo expuesto tal vez alguien se pregunte como se consideran dentro de este contexto las
enfermedades congénitas, especialmente las de gravedad o las terminales. Es cierto; podríamos hablar de
los factores conocidos como kármicos, pero sería adentrarnos en un tema que creo debe estar al alcance de
muy pocos seres humanos, pues la inmensa mayoría de nosotros no está capacitada ni entrenada para
conocer las leyes que rigen el Camino del hombre.
Vimos hasta aquí, principalmente, las causas psicológicas de la enfermedad, ya que no sólo originan gran
parte de ellas sino que son las de más difícil diagnóstico y tratamiento. Agrego otras causas tales como las de
origen infeccioso; causas que el organismo está capacitado para combatir con éxito en la mayoría de los
casos si se encuentra en un adecuado estado de equilibrio.
Existen las de origen alimentario cuyo detalle no corresponde a esta obra, pero recomiendo su estudio o
consulta con un profesional en nutrición, ya que contribuyen notoriamente a degradar el estado de salud
general.
También tienen gran influencia las causas de origen energético externo; me refiero a las energías terrestres
de las distintas zonas y puntos determinados, y en la disposición, materiales y mobiliario, de nuestras
viviendas. Recomiendo la lectura de fundamentos de Geobiología como formación complementaria.
 14

Quiero concluir con el agregado de una aclaración que tiene casi el carácter de obvia aunque pareciera ser
ignorada por muchos practicantes de distintas técnicas para la restauración del equilibrio.
Debe tenerse presente que los factores mencionados y aún otros actúan concurrentemente sobre el estado
de salud y, por lo tanto,

NO DEBE IGNORARSE NINGUNO DE ELLOS.

SALUD = EQUILIBRIO DINÁMICO

Uno de los primeros problemas con que se encuentra el ser humano al momento de intentar restaurar el
equilibrio de su sistema, es el del diagnóstico.
Para graficar esto, transcribo uno de los ítems de mi libro EL HOMO IGNORANTIS Y SU CONDUCTA.

LAS TERAPIAS PARA LA SALUD

No soy profesional de la salud pero el hecho de haber sido paciente de distintas disciplinas y haberlas
experimentado en mi cuerpo me hace sentir con derecho a evaluar mis experiencias -y las de otra gente en
situación similar- y a hacerme algunas preguntas.
Es desconcertante ver como cada disciplina se ocupa de diagnosticar y de tratar de acuerdo con los
incompletos conocimientos adquiridos. Digo incompletos porque nadie puede ignorar que la realidad total del
ser humano abarca varios planos muy distintos que operan concurrentemente y, por lo tanto, interactúan, y
no pueden ser aprendidos con el estudio de una sola disciplina.
Si alguno de los lectores desea ampliar el tema puede comenzar con la tan antigua y sabia medicina oriental
y sus distintas técnicas.
Formar un profesional de la salud que conozca todos los aspectos que constituyen un ser humano llevaría
muchísimos años de dura y profunda formación. Por lo tanto, la totalidad humana es dividida en las partes
que la conforman a fin de facilitar su estudio. Esto pareciera ser la actitud adecuada; pero de acuerdo con mi
entender es correcta solo si le agregamos un componente que nos permitiría reconstruir la totalidad; este
componente se conoce como interconsulta.
Ante esta situación, las distintas terapias adoptan en la mayoría de los casos la postura mas fácil:

DIAGNOSTICAN Y TRATAN DE ACUERDO CON SU

DISCIPLINA E IGNORAN TODO LO DEMÁS.

Por supuesto, los resultados están a la vista para cualquiera que quiera observarlos.
El tiempo y la naturaleza siguen su trabajo independientemente de la actitud humana, y la enfermedad los
acompaña.
De lo comentado, y como paciente, me surgen algunos interrogantes.

La MEDICINA ALOPÁTICA:
 ¿Realmente creerá que los seres humanos y sus enfermedades empiezan y terminan en el cuerpo físico?
 ¿Pensará que con intentar suprimir el síntoma también se eliminará la causa que lo produjo?
 ¿Conocerá con claridad la importancia del sistema psicoemocional en la salud corporal?
 ¿Conocerá el sistema energético humano y su interacción con otros sistemas?

La MEDICINA HOMEOPÁTICA:
 ¿Realmente pensará que existe una medicina al alcance del hombre capaz de reemplazar su trabajo
personal de vida, aunque esta actúe en planos sutiles?
 ¿Qué lugar tiene en su disciplina el cuerpo bioplásmico con sus adherencias?
 Y el trabajo de tomar conciencia y modificar pensamientos y conductas: ¿podrá hacerse suministrando
desde afuera sustancias sutiles?

La PSICOTERAPIA:
 ¿Creerá seriamente que los conflictos de la desconocida psiquis humana pueden trabajarse sólo con la
palabra?
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 ¿Conocerá la influencia perjudicial de vivir en una ciudad contaminada?

 ¿Y cómo creerá que interactúa con el plano psicoemocional el hecho de ingerir gran cantidad de alimentos
nocivos?
 Y la psicoterapia clásica: ¿conocerá sobre lectura y terapia corporal?
 ¿Qué alcance, poder, precisión y velocidad de actuación le otorgará al discurso?

Las TERAPIAS ENERGÉTICAS:

 ¿Conocerán el grado de beneficio de un medicamento suministrado adecuadamente?
 ¿Estarán informadas del enorme avance de la tecnología en el área de diagnóstico físico que puede servir
como base para obtener conclusiones secundarias más profundas?
 Si bien dicen que todo está reflejado en el cuerpo energético: ¿cómo influye la actitud de vida de la
persona tratada con respecto a lo hecho desde afuera?

La lista podría seguir con muchas otras disciplinas e innumerables preguntas que me hago sobre cada una
de ellas pero resultaría realmente extensa ya que mi ignorancia es amplia.
Se me ocurre algo que, de acuerdo con mi entender, muestra la estructura humana desde dos visiones
opuestas y complementarias que hablan de su totalidad:

El cuerpo físico muestra la enfermedad que tiene el enfermo en el último eslabón de la cadena de sucesos
enfermos.

El psiquismo muestra al enfermo que padece la enfermedad en el primer eslabón de la cadena de sucesos
enfermos.

Cierro este punto con dos preguntas para todas las formas de terapias para la salud:

¿Estarán informadas de la importancia de tener un

panorama completo de la estructura total de la persona
y tratarla con el medio adecuado para cada plano?

¿No sería una actitud adecuada, si es que no están informados, por lo menos no creer
que lo único que conocen es lo único existente y verdadero,
y mucho menos tratándose de
un sistema tan complejo como es el humano?

Creo que el comentario es lo suficientemente claro como para que se justifique algún agregado. No vamos a
combatir un síntoma de manera directa: vamos a intentar que la persona tome conciencia y equilibre su
propia vida luego de asegurarnos que no existen factores externos determinantes de la alteración. A fin de
prevenir estados crónicos de alguna patología, para evitar alguna posible crisis, para realizar los controles del
estado físico o eventuales tratamientos, SIEMPRE se le recomendará a la persona consultar con
profesionales de la medicina: Médicos, Psicólogos, Psiquiatras, etc.
Si no podemos lograr que la persona tratada tome conciencia de su error y esté dispuesta a hacer las
modificaciones necesarias, no podremos lograr más que un equilibrio temporario, ya que el trabajo profundo
de comprensión, la decisión interna y la acción son de exclusiva responsabilidad de la persona afectada.
Nuestro primer trabajo y logro en la práctica de esta actitud deberá efectuarse dentro de nosotros mismos de
por vida, ya que de acuerdo con esta forma de ver el equilibrio humano, considero que nadie puede
transmitirlo ni inducirlo sin experimentarlo en su propia conciencia en un grado avanzado.
Por supuesto que no estoy intentando sugerir que la persona que quiera trabajar con BIOENERGÍA deba
gozar de un equilibrio perfecto y permanente ya que en la escuela de la vida somos todos alumnos en
proceso de aprendizaje, pero sí trato de decir que esa persona debe ser clara en su forma de vida y en su
estado de conciencia.
De acuerdo con lo enunciado, podríamos afirmar que cada ser humano tiene su propia biohistoria asociada a
su desequilibrio. Cuando digo desequilibrio me refiero no sólo a una alteración corporal anatómica o
fisiológica sino también a estados de ansiedad, angustia, tensión, incomodidad de origen incierto y a toda otra
anomalía que aparte al sistema humano del estado de salud completa.
Una de nuestras funciones es localizar las partes de esa historia de vida causante del problema. Luego de
haber logrado detectar la causa o estar lo suficientemente encaminado hacia ella, la función principal
inmediata de quien asiste a otros en el Camino es lograr que la persona vea claro el motivo de su conflicto.
En este punto creo conveniente detallar cual es la tarea de la persona que trata y de la persona tratada, tanto
para conocimiento del lector como para comunicarle oportunamente a quien requiera sus servicios.

Equilibrio energético inducido externamente:

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a cargo de quien asiste:

 Trabajo sobre las distintas capas del campo energético.

 Sobre los centros de energía.
 Sobre los sistemas y órganos del cuerpo físico.

Equilibrio interno para fijar el inducido de forma externa:

a cargo de la persona asistida:

 Reenfoque en su visión de la realidad.

 Modificación del sistema de creencias en el plano correspondiente.
 Constancia en la determinación y en la acción de cambio.

Estas dos formas de procedimiento -que veremos en el capítulo correspondiente al detalle de la sesión-
trabajan en conjunto, por razones obvias, y no deben ser separadas en ningún caso si pretendemos lograr
resultados reales y definitivos.

ANATOMÍA ENERGÉTICA

GENERALIDADES

Vimos en CAMPO ENERGÉTICO HUMANO una introducción al tema. Recordemos y agreguemos que el
campo energético de los organismos vivos es un cuerpo sutil que rodea la estructura física, penetra en ella y
posee su propia radiación particular inherente a su naturaleza.
Hay distintas versiones sobre la conformación de este campo. Tomemos, a modo de generalidad orientativa,
la versión que lo divide en siete capas y siete centros ubicados sobre el sistema nervioso central. Si algún
lector deseara ampliar el tema puede hacerlo con el libro MANOS QUE CURAN de Bárbara Ann Brennan
(Ed. Martínez Roca) como introductorio, ya que no se justifica desarrollar un asunto sobre el cual existe tan
abundante bibliografía.
Y si alguien es afecto a la literatura técnica y profunda puede leer la obra del Dr. Livio Vinardi (Ed. KIER).
Este campo energético, en los seres humanos, posee siete capas que se interpenetran y se proyectan cada
una de ellas mas allá de la precedente. Cada capa posee una frecuencia vibratoria mayor y menor densidad
que la anterior. En dicho campo y sus respectivas capas se encuentran reflejadas todas las formas del
cuerpo físico y otras que no pertenecen al plano material.
El trabajo que desarrollaremos toma como base del sistema energético humano una corriente de energía que
fluye a lo largo de la columna vertebral y a la que llamaremos corriente principal de energía.

CENTROS DE ENERGÍA (CHAKRAS)

El campo bioplásmico humano presenta remolinos con el ápice señalando hacia la corriente principal antes
mencionada. Cada nivel del campo se relaciona con uno de estos centros de energía siendo el primer centro
el correspondiente a la primera capa, el segundo a la segunda, y así sucesivamente.
Estos centros se presentan de a pares, siendo el 1º par del 7º; del 2º al 6º aparean frente y dorso. Existen
también, en mayor cantidad, centros de distintos tamaños distribuidos por todo el cuerpo energético,
cumpliendo funciones específicas.

UBICACIÓN de los chakras mayores

 1º: Nace en parte extrema inferior de la articulación sacroilíaca.

 2º: Esta ubicado 3 cm. debajo del ombligo (aproximadamente).
 3º: Directamente sobre el eje del diafragma, en el extremo inferior del esternón.
 4º: Entre las tetillas o pezones.
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 5º: Sobre la garganta, en el hueco formado por las clavículas y el esternón.

 6º: En el centro de la frente.
 7º: En el centro de la parte superior de la cabeza.

La ubicación de algunos centros menores se localiza en articulaciones, manos, pies, ojos.

FISIOLOGÍA ENERGÉTICA

GENERALIDADES

Recordemos por un instante el desconocimiento que tiene el ser humano de sus procesos orgánicos
profundos. Por extensión: ¿en qué medida desconocerá sus procesos energéticos? Creo que mucho más.
Pero dentro de esta enorme incertidumbre, el espíritu investigador del hombre ha hecho algunos avances y
logró establecer una serie de pautas que le sirven de fundamento para continuar con su ilimitada búsqueda.
Ya que el propósito es que este libro sea de carácter introductorio y solamente informativo, no voy a
profundizar mayormente en el tema.
Lo que veremos son pautas básicas que le servirán al lector para posteriores ampliaciones e investigaciones
que, sumadas a la práctica y a la experiencia, irán formando un esquema sólido de trabajo.

La energía:

PRECEDE A LA MATERIA.
Vimos en el comienzo que todo cambio en el mundo físico es indefectiblemente precedido por un
movimiento energético que ordena esta transformación ya que la materia carece de autonomía.

PUEDE SER DIRIGIDA CON UN FIN DETERMINADO.

Es posible dirigirla con una finalidad que dependerá del efecto buscado. La modulación y el
direccionamiento de BIOENERGÍA no debe ensayarse sin antes haber hecho un adecuado aprendizaje y
entrenamiento guiado por un profesional competente.

NO CIRCULA DE FORMA CAÓTICA.

Siguiendo el principio que opera sobre todo lo conocido por el hombre, la energía sigue en su fluir un
orden prefijado por las fuerzas que rigen todo lo existente dentro del Universo.

CIRCULA DE PUNTOS DE MAYOR POTENCIAL A PUNTOS DE MENOR POTENCIAL.

Este es un importante concepto a tener en cuenta al momento de trabajar con BIOENERGÍA sobre el
campo de otros seres. La persona que trata deberá poseer, indefectiblemente, un mayor potencial
bioenergético que la persona tratada; caso contrario, la transferencia se efectuará en sentido inverso con
consecuencias que dependerán del estado interno-externo de ambos participantes.

NO EXISTE ENERGÍA NEGATIVA O POSITIVA.

La negatividad/positividad de la energía es un concepto erróneo que se ha popularizado. La energía
es una fuerza capaz de producir un trabajo, por lo tanto, lleva en sí ambas polaridades, caso contrario, no
podría existir movimiento, o sea: capacidad de producir efectos. Lo que sí puede diferenciar la BIOENERGÍA
es el hecho de producir distintos efectos sobre los organismos. Dichos efectos dependerán del tipo y del
estado de la fuente emisora, y del tipo y el estado del sistema receptor. Por supuesto, el efecto puede ser
beneficioso o perjudicial.

BIOCAMPO HUMANO

Cada ser representante de cualquiera de los tres reinos es un biosistema de transformación energética con
distintas posibilidades que dependerán, entre otras cosas, de su estado evolutivo y del estado de todo el
sistema.
La actividad de nuestro biocampo es permanente, cualquiera sea nuestro estado y mientras dure la condición
vital. Esto ocurre no sólo a nivel corporal y orgánico sino también en el plano puramente energético,
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respaldando y cumpliendo funciones que no llegan a la conciencia y también interactuando con los demás
seres, objetos, biósfera, cuerpos del espacio exterior y con fuentes desconocidas para la percepción humana.

Niveles del campo

Los tres primeros niveles y sus respectivos centros asociados representan la experiencia física, emocional y
mental en nuestro plano físico. Estas tres componentes no sólo mantienen la circulación energética necesaria
en esa zona del cuerpo físico sino que favorecen el desarrollo de los aspectos de la autoconciencia sutil
relacionados con dicha área.
El cuarto nivel opera de puente entre los mundos físico y espiritual, y tiene a su cargo el procesamiento de la
energía que intenta conectarnos con el amor.
Los tres niveles superiores representan nuestra conciencia humana en el plano espiritual.

MECANISMOS ENERGÉTICOS DE LA ENFERMEDAD

Si bien es cierto que la actividad del biocampo posee una dinámica compleja y variable ya que se mantiene
en movimiento y en transformación permanente, podemos decir que existen lugares específicos dentro de
nuestro sistema para las sensaciones, las emociones, los pensamientos, los sentimientos y otros registros y
experiencias no conocidos por el estado habitual de conciencia.
Cuando experimentamos emociones fuertes, el campo energético sufre alteraciones relacionadas con la
sensación, de acuerdo con los parámetros que hemos visto en ENFERMEDAD. Como consecuencia de esa
alteración energética se producirá en el cuerpo físico algún cambio acorde con el tipo de emoción registrada
(no olvidemos que el biocampo es regente del cuerpo material).
Dependiendo de la fuerza y de la duración de estos movimientos emocionales, van quedando registrados en
lugares determinados con distintas intensidades. Como sucede en todo trabajo, este proceso implica un
movimiento de energía que, en su accionar, va a determinar efectos relacionados y proporcionales a la causa
que los produjo.
A modo de pauta general, veremos brevemente una de las causas más comunes de alteraciones orgánicas
en la cultura latina. Si algún lector desea ampliar el tema, sugiero como material básico el libro de psicoterapia
corporal titulado BIOENERGÉTICA, del Dr. Alexander Lowen (Ed. Diana).
Uno de los mecanismos de defensa que posee el ser humano para combatir el síntoma conocido como dolor
físico-emocional es el hecho de intentar aislarlo retirando la conciencia de la parte del cuerpo implicada y, por
lo tanto, reduciendo el flujo de energía en dicha zona.
Para lograr este efecto, el recurso psicofísico habitual es contraer los músculos en la región comprometida,
encerrando así la angustia psicoemocional en el preconsciente. Imaginen las consecuencias si esta situación
se torna un hábito y se practica de manera continua. El cuadro ante el cual nos encontraríamos, transcurrido
un tiempo, sería el de una zona crónicamente contraída -contracturada- y aislada energéticamente. Creo que
no es impropio llamarla zona muerta ya que este es el carácter que adquiere para la conciencia física.
Otro de los grandes problemas con que se enfrentan gran cantidad de seres humanos es el grado de
objetividad en su visión de la realidad interior-exterior.
Si recordamos lo que es y como actúa nuestro sistema de creencias, podemos decir que está compuesto por
grupos de registros que contienen su propia definición de la realidad y la experimentan de modo diferente.
Este sistema personal de creencias coincide con la verdadera realidad en mayor o menor medida
dependiendo del grado de disociación de la persona con ésta. Esto, a su vez, depende de la claridad que
tengamos o la voluntad que pongamos para vernos con la mayor objetividad, tanto individualmente como en
el contexto que nos relaciona con los otros.
Estas formas de pensar y de actuar son realidades energéticas observables con características propias. La
naturaleza y la fuerza de las emociones asociadas a este sistema de creencias le otorgan a esas realidades
la intensidad y la potencia con la que van a actuar. La intensidad de estas formas es el resultado de la
importancia que la persona les concedió, y es por medio de esta importancia que estos registros acumulan
energía: a mayor importancia, mayor potencial energético acumulado.
Quiero destacar un detalle a tener muy en cuenta dentro de este planteo ya que la mayoría de las personas
creen que el control lo tiene solamente su conciente y pueden manejarlo a voluntad: los pensamientos
pueden ser conscientes o no.
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En general, estos patrones de pensamiento forman parte de la personalidad con tanta naturalidad que la
persona ni siquiera tiene conciencia cierta de su existencia y en la mayoría de las ocasiones ni siquiera los
advierte y opta por negarlos. Este es uno de los grandes enemigos de la restauración de la salud, porque
cuando le hablamos a la persona tratada de su estructura de pensamiento y no coincide con lo que ella cree
ver de sí misma, generalmente rechaza lo que se le intenta mostrar.
Estas formas de pensamiento son difíciles de cambiar porque le parecen coherentes y lógicas a la persona
que las experimenta.

CENTROS DE ENERGÍA (CHAKRAS)

La idea habitual que se tiene acerca de la función de los chakras es que se trata de órganos sutiles
encargados de captar energía del medio e introducirla en el sistema energético humano. Esto es una verdad
parcial.
Todo sistema conocido que tenga las características del campo energético humano presenta como estructura
operativa un esquema que se divide en tres partes:

ENTRADA ----> PROCESO ----> SALIDA

En el caso del sistema humano sutil, la etapa llamada entrada corresponde a la admisión de energía desde
distintos planos y de diferente manera. No es mucho lo que se conoce con certeza acerca de dónde toma
energía sutil el hombre. La creencia mayoritaria es que lo hace de un reservorio conocido frecuentemente
como campo energético universal; en mi opinión, lo hace desde la Biosfera sutil; o sea, del campo energético
relacionado con su entorno inmediato. Una parte importante de su “carga” la recibiría durante las horas de
sueño.
La segunda faz, enunciada como proceso, corresponde a la asimilación de la energía absorbida. Dicha
asimilación se haría por medio de sucesivas transformaciones que la convertirán en apta para la ejecución de
las distintas funciones que posee el sistema humano.
El tercer paso es la obligada etapa de salida donde se efectúa la expulsión de los residuos resultantes de la
“combustión” natural del sistema (metabolismo energético).
La etapa de entrada y la de salida se realizan por medio de todos los chakras, no sólo de los mayores. La
materia bioplásmica de desecho es enviada al exterior del sistema, o sea, a su medio ambiente.
El proceso propiamente dicho se efectúa parcialmente por medio de los centros, y se completa dentro del
sistema y sus distintas componentes, desconocidas en su mayoría.
Podemos concluir entonces que la función de los chakras es intercambiar energía con el medio. Cada centro
opera con distintos niveles de energía y tiene funciones claramente diferenciadas.
Siendo este un tema que supera el carácter introductorio del presente libro, me voy a limitar, igual que en
otros casos, a transmitir generalidades.
El 1º y 7º son nuestro contacto con los planos inferior y superior de la conciencia de ser.
Lo destaco en párrafo aparte ya que conforman una de las polaridades más importantes al momento de
acercarnos a un diagnóstico. Podríamos decir que el primero es el centro más “material” y, por lo tanto, es el
que nos mantiene conectados con nuestro cuerpo físico. El séptimo es nuestro centro más sutil -sin tener en
cuenta los extracorporales- y nos conecta con las partes más profundas de la autoconciencia.
En consecuencia, la conciencia humana abarca una amplia gama de estados que oscilan desde los más
primarios -tal como es la sensación del cuerpo material-, hasta las experiencias de percepción superior. Cada
estado se asocia con distintas frecuencias de vibración y cada una de ellas cumple una función única e
irremplazable en el Camino evolutivo.
En cuanto al cuerpo físico, cada uno de estos centros abastece una glándula endócrina y un órgano o
sistema, y en lo referente a su función psicológico-espiritual, metabolizan las energías correspondientes a los
distintos aspectos de ésta propiciando su desarrollo.

CHAKRA BASE O RAÍZ (1º)

Glándula endócrina: Corticoadrenales
Órgano/Sistema: Columna Vertebral - Riñones

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Se relaciona con las sensaciones del cuerpo y con el sentido de realidad física.
Cuando este centro funciona correctamente, la persona tiene una imagen de poder sobre sí mismo y gran
vitalidad -presencia-. Está aquí y ahora con la atención afirmada en la realidad material. Tiene gran voluntad
de vivir y actúa como un inductor de vitalidad debido a su entusiasmo.
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Por todo esto es que está relacionado con el asentamiento en la realidad física y con las relaciones con el
mundo. Tiene que ver también con la capacidad de supervivencia.
Cuando este centro no funciona correctamente, es frecuente observar personas con dudas permanentes,
miedo a los cambios, confusión en la evaluación de la realidad y en el Camino a seguir.

CHAKRA UMBILICAL (2º)

Glándula endócrina: Gónadas
Órgano/Sistema: Sistema Reproductor

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Es un centro emocional. Procesa y refleja las emociones del individuo incluyendo las que experimenta hacia
sí mismo de forma consciente o inconsciente.
Está vinculado directamente con el proceso de nuestras emociones inconscientes.
Se relaciona también con la energía sexual y con la capacidad de intercambio sexual y físico con el otro.
Este centro es el que provee principalmente energía al sistema inmunológico, y cuando sufre un bloqueo
bajan las defensas del cuerpo. El área pélvico es la fuente vital del cuerpo, por lo tanto, cualquier disfunción o
bloqueo en esa zona tendrá un efecto reductor de la vitalidad física general del sistema con las
consecuencias esperables, tanto físicas como anímicas

CHAKRA PLEXO SOLAR (3º)

Glándula endócrina: Páncreas
Órgano/Sistema: Estómago - Hígado - Vesícula - Sistema Nervioso

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Es un centro mental y está directamente relacionado con nuestra racionalidad -plano mental consciente- y
con las emociones conscientes.
Es aquí donde nuestro sistema de creencias y sus procesos mentales actúan como reguladores del plano
emocional. Si los patrones psíquicos que regulan el intercambio con el medio son los adecuados logrando así
una comprensión racional clara de las emociones y las ubican en un contexto ordenado, nos encontraremos
experimentando una realidad apta para el equilibrio del cuerpo físico. Esta situación es sinónimo directo de
salud psicoemocional y un gran paso dado hacia la salud corporal.
De este centro depende la capacidad de autocontrol y la sensación general de bienestar físico.
Tiene que ver también con la digestión de nuestra vida, tanto se trate del alimento físico, de las ideas, y de la
realidad en general.
Es el centro del equilibrio corporal por excelencia; por eso algunos lo llaman el centro de la sanación.

CHAKRA CARDIACO (4º)

Glándula endócrina: Timo
Órgano/Sistema: Corazón - Sangre - Nervio Vago - Sistema Circulatorio

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Es el centro a través del cual procesamos la energía del amor. Este centro contribuye a elaborar el
sentimiento del amor en todas sus formas.
Cuando hablamos de amor no debemos confundirlo con el emocionalismo o el apego físico.
Sin amor, los seres humanos nos convertimos en una biomáquina fría e infrahumana.

CHAKRA GARGANTA (5º)

Glándula endócrina: Tiroides
Órgano/Sistema: Aparato Bronquial y Vocal - Pulmones - Esófago

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Se relaciona con la expresión de nuestra verdad y, paradójicamente, con saber, querer y poder oír.
Es un lugar de comunicación y contacto con el medio que nos rodea.
Cuando funciona correctamente se incrementa la capacidad de oír a los demás.
Es una zona de transición entre nuestra mente y nuestro cuerpo, o dicho de manera equivalente: separa o
conecta el pensar con el sentir.
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CHAKRA 3er OJO (6º)

Glándula endócrina: Pituitaria
Órgano/Sistema: Cerebro Inferior - Sistema Nervioso

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
Este centro procesa las energías relacionadas con la capacidad de comprender con claridad conceptos
mentales, incluyendo el de la realidad mundana y el del interior personal (imagen de nosotros mismos).
Ante una disfunción los conceptos se tornan confusos, se deforma la imagen de la realidad y el mundo de la
persona se torna caótico.
El desarrollo superior del 3º ojo permite llegar a experiencias clarividentes y aumenta la capacidad perceptual.

CHAKRA CORONARIO (7º)

Glándula endócrina: Pineal
Órgano/Sistema: Cerebro Superior - Ojo Derecho

FUNCIONAMIENTO PSICOLÓGICO
A través de este centro el ser humano se conecta con su conciencia profunda y con su Camino de
aprendizaje de vida (evolución consciente). Como consecuencia de esto, este centro también se relaciona
con la integración de todo el ser en sus respectivos planos.

DIAGNÓSTICO

UN PANORAMA GENERAL

Vimos ya en ENFERMEDAD la dificultad con que se encuentra el ser humano al momento de diagnosticar
con precisión el verdadero origen de la mayoría de las alteraciones de su sistema. Este origen es el primer
eslabón de una cadena de sucesos patológicos que desembocan, como última manifestación, en una
alteración corporal anatómica o fisiológica. El hecho de no llegar a este primer suceso desencadenante
equivale a cortar la cadena en un punto que no es el inicial y, por lo tanto, el genuino. Esta acción trae como
consecuencia esperable el dejar viva la semilla del problema. El resultado obvio es el rebrote de la alteración
de la misma o de otra manera, ya que el sistema intentará seguir expresándose.
La pequeña ventaja que tiene el trabajo con BIOENERGÍA respecto de otros métodos es que diagnostica y
trata en un área (campo bioplásmico) que tiene reflejado en sí la estructura general.
Está de más aclarar que esto no convierte al trabajo energético en una panacea, pero sí podemos decir que
el panorama que tendremos a la vista, si sabemos interpretarlo, es más global o más amplio que el
diagnóstico y el tratamiento efectuado en planos aislados.
Antes de adentrarnos en el tema concreto de cómo vamos a efectuar un diagnóstico en la forma de trabajo
expuesta, quiero nombrar algunas otras formas de observación muy válidas a la hora de reconstruir la
mencionada cadena de sucesos de la cual su último eslabón se conoce en la cultura occidental como
enfermedad.
La situación ideal consistiría en que todas las formas nombradas y aún otras trabajaran concurrentemente;
lamentablemente, la realidad terapéutica mayoritaria está muy lejos de sostener esta actitud. Aún la salud y
otros aspectos que conforman la realidad cotidiana se toman de manera individual y aislada. Los resultados
de la falta de integración están a la vista en el estado de salud general y en la situación mundial.
Antes de nombrar algunas formas de diagnóstico conocidas, recordemos que el sistema humano es un todo
relacionado interdependiente. En caso de no conocer el alcance de esta idea, tengamos en cuenta a modo
de generalidad aclaratoria, que TODO lo que se origine en un ser humano -incluyendo su enfermedad- es
una manifestación clara y definida de su totalidad. Dicho de otra manera: todo cuanto haga, sea, diga, desee
un hombre es material interpretable, ya que parte del mismo origen profundo. Se origina en la misma zona
donde se inicia la tan temida enfermedad física. Si tenemos en cuenta este milenario concepto podremos ver
métodos de diagnóstico en:
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 EXPRESIÓN y DETALLES FACIALES (fisiognomía)

 FORMA DE CAMINAR (psicoterapias corporales)
 CONFORMACIÓN FÍSICA (psicoterapias corporales y astrología)
 FORMA DE VESTIR (psicología)
 COLORES PREFERIDOS (psicología cromática)
 ZONAS CORPORALES AFECTADAS (psicosomática)
 TIPOS DE AFECCIÓN FÍSICA (psicosomática)
 GUSTOS y PREFERENCIAS PERSONALES (psicología)
 DIBUJOS y otras formas de expresión (psicología)
 LETRA (grafología)
 CARACTERÍSTICAS AL NACIMIENTO (astrología y astrodiagnosis)
 CAMPO ENERGETICO (bioenergía - radiestesia)
 HÁBITOS ALIMENTARIOS (medicina oriental)
 RELIEVE DE DETERMINADAS ZONAS (reflexología)
 FORMA DE VIDA EN GENERAL

Todavía podríamos agregar otros pero creo que con estos ejemplos tenemos claramente la idea de la
manifestación de la totalidad humana en muchas expresiones del ser que, debidamente interpretadas, nos
acercan a su centro.

CORRESPONDENCIAS CUERPO-MENTE

A continuación expongo un antiguo método que ayudará en la observación y en el conocimiento de cómo la

persona a tratar maneja su energía-cuerpo. No debe tomarse como único sistema para llegar a alguna
conclusión absoluta pero sí puede ser una herramienta más. Estas divisiones son una síntesis orientativa
para facilitar el estudio y reconocerlas fácilmente a la hora del diagnóstico. No debemos olvidar que somos un
todo integrado cuyas partes interactúan.
La mitad o la zona del cuerpo a la cual aportemos mayor conciencia y desarrollo -intencionalmente o no-, será
más vital y padecerá menos lesiones y enfermedades, mientras que la zona olvidada, descuidada, no
integrada, rígida, padecerá la mayoría de las tensiones, lesiones, incomodidades y enfermedades.
Es fácilmente detectable por medio de la exploración visual, la zona corporal que recibe la mayor atención de
nuestro ya descripto sistema de creencias. De igual modo y por compensación, se hace claramente visible la
región más olvidada.
La primera es ciertamente más vital, pero si llevamos esto más allá del límite natural admisible para nuestro
sistema, la vitalidad en cuestión se transforma en sobrecarga.
Lo mismo sucede con su contraparte. El olvido energético a la que la somete nuestra conciencia a la otra de
las mitades, se traduce en carencia de la vitalidad necesaria e indispensable para que los procesos locales se
desarrollen con normalidad. Se convertiría en una zona cuyo estado se me ocurre describir con una simple y
gráfica secuencia:

VIVA-OLVIDADA-MUERTA.

DERECHA
Fuerzas solares, masculinas, expansivas, hacia el exterior.

Se relacionan con el pensamiento lógico, la racionalidad, el dogmatismo, la agresividad, el autoritarismo, el

dar, el creer, la actividad física, la dureza, la tendencia emisiva, etc.

IZQUIERDA
Fuerzas lunares, femeninas, sensitivas, hacia el interior.

Están vinculadas con la parte sutil de la conciencia humana. Se asocian con la imaginación, la pasividad, la
emotividad, el recibir, la sensibilidad, la creatividad.

ARRIBA
Fuerzas espirituales, sentidos.
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Están relacionadas con los aspectos de la autoconciencia humana que procesan la experiencia de la
expresión, la comunicación, la respiración, el intelecto, la espiritualidad.

ABAJO
Fuerzas terrestres y materiales, contacto con la tierra.

Es la parte corporal relacionada con el movimiento físico, la estabilidad, el equilibrio, el arraigo, el

asentamiento, el sostén y con todo lo que mantenga contacto directo con la realidad terrenal.

DELANTE
Corresponde al yo exterior

Es el asiento simbólico del yo conciente, el yo expreso, la conciencia activa, la comunicación, los deseos, el
mostrarse en el mundo.

DETRÁS
Es el yo privado.

Esta zona corporal corresponde al inconsciente, a lo que no quiero ver, lo que oculto y me oculto, el lugar de
lo desconocido.

CABEZA

Es el lugar del cuerpo donde fabricamos y llevamos la máscara con la que queremos mostrarnos, la razón, la
faz lógica.

CUERPO

Aquí residen las fuerzas materiales y animales, inconscientes y autónomas.

TRONCO

Alberga el núcleo del yo, se relaciona con la protección, la comprensión y el servicio hacia sí mismo. En
resumen: SER.

EXTREMIDADES

Es la parte de relación con el mundo, el contacto, el movimiento, la acción, la manipulación, la comunicación

física. En resumen: HACER.

CAUSAS PSICOEMOCIONALES DE DESEQUILIBRIOS LOCALIZADOS

Este es otro antiguo y conocido método de diagnóstico utilizado por la sabia medicina oriental. Mediante esta
sencilla técnica se puede detectar la anomalía en el funcionamiento de un órgano conociendo la emoción
asociada o, en el caso inverso, si conocemos la manifestación orgánica corporal, podremos saber qué
particularidad emocional la produjo.

Órgano: Hígado - Vesícula

Emoción: Ira - Irritabilidad - Inquietud - Inestabilidad
Chakra: 3º

Órgano: Pulmones - Colon

Emoción: Pena - Negativismo
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Chakra: 5º - 2º

Órgano: Bazo - Estómago

Emoción: Preocupación - Tensión emocional - Depresión
Chakra: 3º

Órgano: Corazón - Intestino delgado

Emoción: Júbilo - Risa excesiva
Chakra: 4º

Órgano: Riñones - Vejiga

Emoción: Miedo - Timidez - Sorprenderse con facilidad
Chakra: 1º - 2º

MÉTODO SENSOPERCEPTIVO

El método con el que nos manejaremos principalmente consiste en la acción de sensar el campo energético
con las manos -sensopercepción-. Esta técnica pone de manifiesto la gran mayoría de las particularidades
bioplásmicas del campo en ese momento puntual. Cuando digo gran mayoría es porque hay alteraciones que
operan en frecuencias tales que aún no nos será posible detectarlas, ya que para poder palpar o detectar
cualquier manifestación energética por medio de nuestros sensores físicos o sutiles estos deben vibrar
necesariamente a la frecuencia que intentamos percibir. Un ejemplo claro tomado del mundo material a modo
de paralelismo es el de no poder oír un sonido que no está vibrando dentro de las posibilidades de reacción
de nuestra membrana timpánica. El resultado es que el sonido existe pero no lo oímos.
Como complemento de este procedimiento se pueden emplear, en algunas ocasiones, la radiestesia por
medio de péndulo o varillas.
Para obtener destreza en el empleo de la sensopercepción no es necesario un entrenamiento prolongado,
pero sí es indispensable una forma de práctica adecuada y debidamente guiada. Una cosa es sensar el
campo energético y otra cosa es la precisión con que se haga.
Aún luego de habernos entrenado responsablemente y de haber obtenido resultados ciertos, nos
encontramos con el problema de interpretar de manera correcta lo que estamos percibiendo, ya que no es lo
mismo leer un texto que comprender lo que estamos leyendo. En los capítulos correspondientes a la práctica
veremos el detalle del método.
Vuelvo a decir que este libro tiene carácter introductorio e informativo y carece de valor si es utilizado para
intentar manipulaciones sin previo entrenamiento con alguien que conozca y posea experiencia en las
técnicas que conforman el modelo de trabajo descripto. Según mi criterio, su sola lectura no prepara a la
persona para ningún tipo de práctica sobre terceros, pero sí puede ser una guía de estudio y entrenamiento
personal para comenzar a acercarse sólidamente al mundo de la BIOENERGÍA.

UN SISTEMA EN EQUILIBRIO ENERGÉTICO

Vamos a detallar ahora las variables básicas que deben verificarse en el sistema para que éste pueda ser
calificado de equilibrado.
Un sistema bioenergético en equilibrio debe mostrar:

 Adecuada absorción energética.

 Balance entre sus distintos tipos.
 Correcto proceso de estas energías.
 Circulación y distribución equilibrada.
 Ausencia de causas que impidan su libre metabolización.
 Capacidad de retención de lo ingresado.

El sistema debe estar capacitado para ingresar la cantidad necesaria de energía para sus procesos.
La proporción entre las distintas energías captadas tiene que ser la adecuada para cada persona.
Los órganos sutiles han de hallarse en un estado tal que procesen eficientemente la materia radiante
ingresada desde el exterior.
La circulación y la distribución necesaria no deben encontrar ningún impedimento para efectuarse libremente
por medio de los canales y los circuitos naturales.
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No tienen que existir factores que impidan a los mecanismos y órganos de consumo la metabolización y el
aprovechamiento de la energía ingresada y procesada.
Tampoco deben existir alteraciones que impidan que la materia radiante sea retenida en el sistema para su
consumo gradual.
Cumplidos estos requisitos generales, podríamos decir que el sistema se encuentra en condiciones de operar
saludablemente.
Debe tomarse este panorama como una situación ideal muy difícil de lograr, y el objetivo de nuestro trabajo
debe consistir en acercarnos a ella tanto como sea posible.
Una de las particularidades más importantes a tener en cuenta a la hora de analizar el estado de un sistema
humano es que la condición de desequilibrio energético, además de conducir directamente a la enfermedad,
produce aturdimiento sensorial y distorsiona la percepción de la realidad movilizando emociones perjudiciales.
Este es otro de los problemas que han de considerarse al momento de abordar un tratamiento, ya que la
claridad y la participación activa de la persona tratada son indispensables si queremos hacer un trabajo
profundo y lograr resultados ciertos y definitivos. Todos sabemos lo nocivas que pueden ser algunas
emociones para nuestro equilibrio general, en especial, la angustia, la ansiedad, la confusión, la tensión, el
miedo, la ira.
Una de las primeras fases del diagnóstico consistirá en determinar con la mayor precisión posible el grado de
disociación perceptual de la persona tratada. Paralelamente, las primeras etapas del tratamiento se centrarán
principalmente en la corrección de este tipo de alteración.
Como parámetro general debemos tener en cuenta que, cuanto más enferma esté una persona o más
antigua sea la dolencia, igual de profunda será la deformación de la percepción de la realidad personal y
mayor la tendencia a la negación y a la justificación de su estado, ya que no debemos olvidar que si una
disfunción energética arrastra consigo la suficiente intensidad, su efecto es acumulativo junto a una
percepción cada vez más alejada de la verdad.
Otro de los enemigos de la restauración del equilibrio es la actitud de la persona con respecto a la solución de
su problema. Parece absurdo pensar que alguien puede no querer sanarse. En la práctica, es frecuente
encontrar este tipo de postura. Los motivos son muy amplios y variados como para detenerse en su análisis
sin ser profesionales en la disciplina que los estudia.
Lo que debemos determinar es la verdadera posición interna de la persona con respecto a su dolencia. Ya el
padre de la medicina, Hipócrates, decía: “Antes de intentar sanar a un paciente debemos preguntarle si está
dispuesto a eliminar la causa que lo enfermó…”.
Por lo tanto, no debemos tomar como fracaso ni olvidar que

ES IMPOSIBLE SANAR
A QUIEN NO QUIERE SER SANADO

Una cosa es manifestar verbalmente la convicción de querer mejorar y acudir para ser tratado, y otra muy
distinta es estar dispuesto internamente a sanar, a verse con claridad y a colaborar activamente con el
trabajo de equilibrado.

INTERROGATORIO

Antes de lograr una adecuada práctica en el método de sensopercepción descripto, sugiero usarlo
concurrentemente con un sencillo interrogatorio verbal que está relacionado con el estado de los centros
principales de energía.

1º:
 ¿Sensaciones físicas en general?
 ¿Equilibrio?
 ¿Sensación de incomodidad física incierta?
 ¿Insensibilidad?
 ¿Miedo?
 ¿Columna vertebral?
 ¿Riñones?

2º:
 ¿Sensación de insatisfacción permanente?
 ¿Qué tipo de emociones tiene? (tristeza, falta de entusiasmo)
 ¿Se cansa con facilidad?
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 ¿Le cuesta levantarse por la mañana?

 ¿Vitalidad general?
 ¿Se enferma con facilidad?
 ¿Problemas genitales o sexuales?
 ¿Intestinos?

3º:
 ¿Se enoja con facilidad?
 ¿Qué situaciones lo enojan?
 ¿Tiene inquietud y ansiedad?
 ¿Páncreas?
 ¿Digestión?
 ¿Estómago?
 ¿Hígado?
 ¿Vesícula?
 ¿Sistema nervioso?

4º:
 ¿Cree que ama?; y si es así: ¿qué cosas y a quién?
 ¿Cómo lo manifiesta? ¿Es correspondido?
 ¿Corazón?
 ¿Sistema circulatorio?

5º:
 ¿Puede comunicar su verdad interior con facilidad?
 ¿Es escuchado?; si es así: ¿qué devolución obtiene?
 ¿Habla mucho de sí mismo (directa o indirectamente)?
 ¿Sabe escuchar?
 ¿Tiroides?
 ¿Aparato bronquial y vocal?
 ¿Pulmones?
 ¿Esófago?

6º:
 ¿Cómo ve su entorno?
 ¿Comprende lo que sucede a su alrededor y a usted mismo o se siente confuso?
 ¿Ve con claridad la realidad?
 ¿Qué proyectos tiene?
 ¿Sistema nervioso?

7º:
 ¿En algún momento siente paz y equilibrio?
 ¿Ríe con espontaneidad?
 ¿La mirada es fija y atenta?
 ¿Habla o prefiere escuchar?
 ¿Qué opina de su vida?

El análisis del conjunto de las respuestas requiere un conocimiento profundo del funcionamiento de la
totalidad del sistema y no de interpretaciones aisladas, a fin de evitar caer en los viejos errores de otras
disciplinas que dividen al ser humano y toman solamente la parte conocida por su práctica.
Para llegar a entender los mensajes de la estructura profunda y la necesidad de aprendizaje que nos indica
sabiamente el síntoma, es necesario contar con algo insustituible: EXPERIENCIA.

PAUTAS GENERALES PARA LA SESIÓN

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Es muy importante tener en cuenta algunas reglas básicas antes, durante y después de la sesión.
No debemos tomar de manera superficial este tipo de práctica ni incurrir en una simplificación de su
metodología, ya que por su naturaleza misma es una tarea compleja y requiere ser aprendida y ejecutada
con responsabilidad.

PERSONALES

Debemos tener conciencia exacta de los propios límites y nunca aventurarnos más allá de estos.

 Cantidad de personas atendidas por día.

 Capacidad de extracción de desechos energéticos.
 Capacidad de movilización energética.
 Alcance de las interpretaciones y explicaciones verbales.
 Tiempos de desintoxicación y regeneración.

Durante el período de entrenamiento, el instructor ayudará al alumno a reconocer y a establecer sus propios
límites mediante las técnicas adecuadas que desarrollarán la capacidad de atención sobre su organismo.
El primero habla de determinar cuál es la cantidad máxima de personas que podemos ser capaces de
atender sin poner en riesgo nuestro sistema energético.
El segundo es uno de los más importantes, ya que es necesario conocer claramente cuál es el límite de
nuestra capacidad de extracción de bioplasma de desecho del campo de la persona tratada.
Otro factor primordial a tener en cuenta es nuestro potencial energético, ya que de ello dependerá la cantidad
que podamos poner en movimiento y la cantidad que tengamos disponible para consumir nosotros mismos
durante el desarrollo de la sesión (no olvidemos que TODO proceso humano consume energía vital). Si
alguien desea un fundamento técnico de esta última afirmación puede indagar en la teoría básica de la Física
Cuántica (Max Planck) la cual postula que el solo hecho de hacer vibrar una estructura a frecuencias más
altas consume mayor cantidad de energía; en este caso, el incremento del consumo es de energía sutil, ya
que este tipo de trabajo opera en frecuencias altas.
En cuanto al alcance de las interpretaciones y explicaciones verbales, no debemos olvidar que no somos
profesionales calificados ni especializados en esas técnicas, por lo tanto, trataremos de reducir a lo
indispensable el método de apoyo verbal y siempre que estemos seguros.
En cuanto a nuestra persona, estableceremos durante el entrenamiento y la práctica cautelosa, los tiempos
de desintoxicación y regeneración del sistema. Aprovecho este punto para hacer una aclaración: el sistema
energético humano -por su naturaleza y sus características- es del tipo que se conoce como sistema abierto.
Esto quiere decir que intercambia energía de manera permanente con el medio. Visto esto, es obvio concluir
que no podemos evitar que una parte de la masa bioplásmica de desecho con la que estamos trabajando
penetre en nuestro campo, permanezca en él y produzca efectos en relación directa con el estado de
equilibrio y con el nivel de desarrollo que haya adquirido nuestro estado de conciencia y, por lo tanto, nuestro
sistema energético.
Siempre recordando que vamos a trabajar con los niveles sutiles del ser humano y que estos niveles del
campo son regentes de sus estados emocio-psico-físicos, es lógico suponer que en muchos casos pueden
efectuarse movimientos temporarios en distintos planos. Si recordamos que, por las características del
trabajo, existirá interacción directa entre sistemas abiertos, debemos esperar alteraciones temporales
también en nuestros estados.
Me parece apropiado mencionar a título informativo personal y para transmitir a la persona tratada, algunas
de las sensaciones más frecuentes. Por motivo de preferencia personal las llamo sensaciones de disociación
y estimo conveniente familiarizarse con ellas.

 Temporal
 Física
 Cinestésica
 Emocional
 Sentimental
 Energética

Durante la sesión y aún después es frecuente tener la sensación de que el transcurrir temporal lineal con el
que estamos familiarizados sufre alteraciones, de manera que tenemos la impresión de que éste se
comprime o se expande en distintos grados.
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Sabemos que poner palabras a las sensaciones y, especialmente a las de este tipo no convencional, es tarea
de baja precisión y, por lo tanto, de escasa utilidad. Si tuviese que intentar describir lo que se siente en cuanto
al cuerpo físico, la impresión experimentada podría expresarse como el hecho de estar y no estar o de estar
aquí y en otro lugar simultáneamente. Te invito a que hagas tus propias experiencias y le pongas tus propias
palabras.
En cuanto a lo cinestésico, es frecuente sentir una especie de ondulaciones o pulsaciones en todo el cuerpo
y también sensaciones de desplazamiento o liviandad (por citar sólo las más generales).
Son más frecuentes y más definidas las particularidades que hacen al plano emocional y debemos tener
especial cuidado con ellas. Es recomendable instruirse en técnicas de contención.
Algo similar pero mucho más profundo sucede con los sentimientos y las sensaciones asociadas a estos.
Digo más profundo debido a la naturaleza de este plano con respecto a los demás.

HACIA LA PERSONA TRATADA

Dada la complejidad del ser humano, comenté anteriormente las dificultades de diagnóstico con las que se
encuentran todas las disciplinas, en especial las que consideran el sistema humano como una totalidad e
intentan profundizar y llegar al verdadero origen del problema.
En el desarrollo de nuestra actividad es frecuente que nos encontremos ante un diagnóstico confuso o
parcial, principalmente durante el transcurso de las primeras sesiones con una persona.
En caso de ser incierto el diagnóstico o el procedimiento a seguir, se debe trabajar con el equilibrio
psicoemocional general como base. La causa profunda y un cuadro más preciso de la situación así como
también el procedimiento a emplearse, emergerán de manera natural más adelante.
Tengamos en cuenta como base de trabajo que si no logramos la actitud adecuada de la persona tratada
para que logre modificar su sistema de creencias mediante su voluntad y su trabajo personal, es imposible
conseguir un equilibrio duradero.
Para esto se hace imprescindible la participación responsable de la persona en su proceso de restauración
de la salud, por lo tanto, debe lograrse que ésta mantenga una actitud consciente y positiva hacia su propia
sanación. Nuestra responsabilidad es localizar y mostrar a la persona la causa real y la dimensión de su
malestar. Para esto trabajaremos con la siguiente premisa usada por la medicina homeopática: no nos
centraremos principalmente en qué tipo de problema tiene una persona sino en el tipo de persona que tiene
el problema.

SOBRE LA SESIÓN

Durante el trabajo con BIOENERGÍA, la persona tratada participará consciente o inconscientemente de una
experiencia física, emocional y mental muy difícil de describir con exactitud a quien no la ha experimentado en
alguna medida.
Podríamos describirla como si la conciencia penetrara en una zona que hasta el momento se hallaba oculta o
lejos de las percepciones conocidas; una región cuya existencia es posiblemente conocida sólo por quienes
practican alguna forma de profundización en su ser interior.
Dadas las características de este estado, debemos observar algunas pautas que acompañen de una manera
acorde las sensaciones experimentadas.
Mientras mejor podamos contactarnos con la mayor conciencia de sí que siente la persona en esos
momentos, mejor podremos transmitirle algo de nuestro propio ser interior (energía sutil con su respectivo
argumento de conciencia).
Esta última afirmación vuelve a mostrar con claridad la fundamental importancia del estado interior-exterior en
el que nos encontremos.
Tendremos en cuenta también que no debemos esperar que, a iguales maniobras, se produzcan siempre
iguales resultados, pues es muy amplia la cantidad de factores que intervienen en una sesión de trabajo con
BIOENERGÍA, por ejemplo, estado físico, la inestabilidad del carácter, la tensión emocional o mental, los
factores climáticos, y otros muchos. Pero la variable más fundamental que determina siempre resultados
distintos es que, al estar el sistema energético del hombre en continua transformación, nunca el ser humano
vuelve a ser exactamente el mismo. Podrá experimentar cambios de distinto tipo pero en ningún caso las
leyes que rigen su vida y su destino permitirán que pueda ser el mismo que era apenas un instante antes.
La sesión producirá efectos fisiológicos, psicológicos y emocionales por la vía de la limpieza y de la activación
energética, y por las maniobras sobre el cuerpo físico, si es que se aplican. Debemos estar preparados para
presenciar, comprender y tratar de explicar (si se puede o corresponde) estos movimientos de manera
satisfactoria.
 29

Otro de los factores que debe ser observado cuidadosamente es el entorno en el que vamos a trabajar. Para
la sesión hay que tener en cuenta la soledad y el silencio. La persona se halla en un estado donde el sentido
preponderante que lo mantiene conectado con el mundo exterior es el del tacto, por lo tanto, cualquier ruido o
estímulo repentino puede resultar extremadamente perturbador en virtud del estado de alta sensibilidad que
experimenta. La presencia de otras personas en el lugar deberá permitirse sólo cuando las circunstancias no
brinden otra alternativa.
Respecto del ambiente, téngase en cuenta la temperatura considerando el estado de la persona.
Habitualmente es necesario mayor calor ambiental debido al nivel de relajación que experimenta con la
consecuente disminución de su metabolismo.
Para minimizar la cantidad y la intensidad de estímulos externos debemos evitar la iluminación fuerte y
directa.
En cuanto a los sonidos, es frecuente ver como se utiliza y se sugiere en distintos ámbitos el empleo de
música. Sólo se recomienda en caso de que los ruidos ambientales no permitan otra posibilidad y resulten
realmente molestos. La razón por la cual no debe recurrirse a la música es porque tiende a producir sus
propios efectos y/o a distraer a la persona no permitiendo o dificultando el acceso a su propio mundo (su yo
interior profundo). El sonido armónico crea su propio clima y también tiene su influencia en el campo
energético humano; no olvidemos que es una forma de energía.
Otro de los motivos que contraindican su empleo es que, al estar agudizados los sentidos, puede llegar a
saturar y a “empastar” el estado personal experimentado.
Es recomendable que se tenga puesta la menor cantidad de ropa posible a fin de facilitar el contacto y evitar
así interferencias en el biocampo. Por el mismo motivo y en la medida de lo posible, no se deben llevar
objetos ornamentales o de otro tipo.
Trataremos de evitar el diálogo, salvo que lo usemos con un fin determinado; los motivos pueden ser una
imperiosa necesidad de expresión de la persona o para brindar explicaciones y respuestas.
No se debe tratar más de un tema principal por sesión a fin de que ésta tenga carácter de específica; caso
contrario, existe la posibilidad de movilizar mayor cantidad de registros distintos con la consecuencia de no
permitir al individuo el procesamiento prolijo y repartido en el tiempo. Siempre debemos respetar los límites y
la capacidad de trabajo del sistema humano. En caso de no respetar estos límites, capacidades y ritmos
naturales, restaríamos claridad y precisión al tratamiento.
Estas son las pautas que considero primordiales. Seguramente la experiencia personal de cada practicante
agregará otras a la lista.
He enumerado y comentado muchos lineamientos a considerar pero creo que el de mayor importancia está
relacionado con la calidad y la actitud humana de la persona que trata.
El estado de conciencia y la disposición interior de la persona que asiste es un requisito indispensable e
insustituible ya que hay elementos que se transmiten entre los planos profundos de los seres humanos y está
fuera del alcance del hombre el hecho de influir sobre ellos de forma directa. Pretendo dejar claramente
establecido así que la calidad y la actitud interna no pueden fingirse ni imitarse, y mucho menos aún intentar
lograrlas por medio de un proceso intelectual y aprendido. Irradiamos y transmitimos lo que somos en nuestro
interior.
Al momento de tratar a un ser humano debemos recordar siempre que tenemos en nuestras manos un ser:

 En estado de alta sensibilidad y receptividad.

 En contacto con sus conflictos profundos.
 En intercambio energético con nosotros.

TENEMOS EN NUESTRAS MANOS UN SER

EN ESTADO DE APRENDIZAJE.

TRATAMIENTO
 30

ESTILO DE TRABAJO

Son innumerables los instrumentos con los que cuenta el ser humano para modular BIOENERGÍA con fines
terapéuticos. Tales recursos tienen representantes de los tres reinos básicos terrestres.
Por una cuestión de afinidad personal y porque con ellos se puede abarcar la gama necesaria de
biofrecuencias humanas emplearemos como instrumentos las manos y las piedras. Sin entrar en una larga
explicación técnica -con la cual solo podríamos explicar parcialmente la situación-, creo adecuado afirmar que
para tratar un sistema energético humano es necesario conocer muchas técnicas a fin de poder emplear la
adecuada para cada plano.
Uno de los grandes errores en el que incurren muchas de las disciplinas de todo tipo conocido es el hecho de
tratar sólo con una técnica. Es evidente lo limitado de esta práctica. Los resultados son, en su mayoría,
parciales y temporarios.
Para modular la energía del biocampo utilizo tres técnicas básicas que consisten en:

Masaje de distintos tipos

Esta milenaria y profunda práctica va mucho más allá de la mera manipulación del cuerpo físico. El masaje,
por su naturaleza, es una maravillosa técnica de modulación de energía. De acuerdo con mi entender y luego
de décadas de experimentar distintas formas de gestión energética creo estar en condiciones de asegurar
que el masaje opera principalmente sobre la energía corporal que circula por los respectivos canales
(meridianos) y en el plano emocional superficial. De todos modos, tal como sucede en todos los casos de
contacto e intercambio humano, los efectos y el alcance de la práctica depende, en gran medida, del estado
interno de los participantes.
Al tratarse de una técnica que trabaja sobre el plano energético corporal, la emplearemos principalmente para
inducir a la persona a un estado de relajación que permitirá una mejor actuación de los procedimientos
siguientes, ya que luego de efectuarse las maniobras adecuadas, el sistema adquiere un alto grado de
sensibilidad y receptividad.
Existe abundante bibliografía y cursos de excelente nivel para quien quiera profundizar en su estudio y
práctica.

Trabajo con las manos

La segunda técnica a emplear es el contacto y la limpieza del campo con las manos.
De acuerdo con lo experimentado a lo largo de muchos años pude comprobar que estas maniobras operan
en los planos inmediatamente superiores a los influidos por el masaje. Podríamos decir, sin tomar esto como
una pauta rígida ya que las variaciones son amplias, que esta segunda forma de trabajo se adapta más a los
niveles psíquicos conscientey preconsciente y, por lo tanto, emocional profundo. Recordemos una vez más
que es el psiquismo quien genera las emociones de acuerdo con la importancia que le otorguemos a los
distintos objetos, seres y situaciones cada uno de nosotros.
Lo enunciado debe tabularse ni considerarse como absoluto ya que se trata de una generalidad informativa
de acuerdo con mi experiencia; cada quien debe hacer la propia. Debemos repetirnos continuamente que el
ser humano y su estado de conciencia son un misterio insondable como para que sea posible reducirlos a
una postura simplista y a un conjunto de maniobras externas.
Para lectura informativa y complementaria de una parte de esta modalidad de trabajo recomiendo el libro
CURACIÓN PRÁNICA de Choa Kok Sui (Ed. KIER).

Aplicación de Piedras y Cristales

El tercer recurso que emplearemos para modular BIOENERGÍA son las piedras y los cristales. Para conocer
con claridad el nivel en el que actúan y las posibilidades de trabajo, necesariamente hay que contactarse
pacientemente con ellos hasta lograr una verdadera integración que asegure su conocimiento profundo.
Al utilizarlos en la última parte de la sesión y luego de haber actuado el masaje y el trabajo con las manos,
podemos decir que el campo se encuentra despejado y en condiciones inmejorables para que ellos puedan
intervenir ejerciendo su máxima influencia.
En algunas ocasiones la remoción bioplásmica hecha con las manos no puede actuar sobre algún cúmulo
fuertemente adherido ya que no poseemos aún la capacidad de vibrar en una frecuencia tal como para que
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se efectúe el desprendimiento o la disociación necesarios; en este caso emplearemos cristales para la

limpieza, ya que ellos poseen una frecuencia vibratoria vital mucho mas alta y constante que la humana.
Existen otros recursos que podremos utilizar eventualmente: imanes, luces, inducción verbal, diálogo. Tales
apoyos y otros no mencionados están fuera del alcance de este libro y posiblemente sean expuestos
oportunamente.

Limpieza del Campo

Ya he hecho referencia a la contaminación bioplásmica del campo. Dicho estado se agudiza en casos de
enfermedad, cualquiera sea su naturaleza. La cantidad, el potencial y el tipo de esta materia energética
congestiva dependerá de la clase de anomalía que la generó y del tiempo transcurrido desde el origen de la
disfunción.
Uno de los primeros efectos que debemos lograr para que una sesión sea efectiva es despojar el sistema de
la persona tratada de la mayor cantidad posible de bioplasma congestivo.
Lo nocivo de esta materia depositada en el campo energético es que obstruye la libre circulación de la
BIOENERGÍA necesaria para el correcto desarrollo de los procesos vitales.
Las técnicas a utilizar son: imposición de manos, rastrillado manual, remoción con cristales, drenaje con
cristales, y sahumado. El detalle de dichas técnicas lo veremos en la sección dedicada a la práctica.

RECOMENDACIONES SOBRE LAS TÉCNICAS

Veamos ahora algunos puntos que deben tenerse en cuenta en lo que concierne a las maniobras a aplicar.
En la mayoría de las tan distintas componentes que conforman nuestra vida diaria nos encontramos con que
muchos de los enemigos de un adecuado bienestar consisten en transponer los límites de seguridad
naturales con los que cuenta todo sistema. En lo referente a la sesión de trabajo planteada es muy
importante conocer y minimizar el error, ya que un pequeño descuido, variación o error de apreciación puede
anular el efecto beneficioso que intentamos lograr, y en algunas ocasiones el resultado puede ser molesto
para quien que lo recibe.
Debemos tener noción precisa de los límites de la persona en cuanto a la:

 Presión sobre el cuerpo en el masaje

 Cantidad de cristales a aplicar
 Tamaño de los cristales
 Tiempo de masaje
 “ limpieza
 “ recarga
 “ saturación
 “ exposición a los cristales

Creo que no es necesario comentar el porqué de la primera consideración si recordamos las distintas zonas
corporales, en especial las afectadas. En ocasiones, la excesiva presión sobre una zona no produce dolor
pero causa sensación de opresión o molestia. Debemos evaluarlo convenientemente y de manera
permanente; si es necesario, se consultará a la persona que lo recibe.
Por lo general, y sobre todo durante los comienzos de nuestra práctica, mostramos una marcada tendencia a
trabajar todas las zonas al mismo tiempo y con la misma intensidad. De esto se deriva una cantidad
extremada de piedras y cristales a ser aplicados. La experiencia les indicará que hay un punto de equilibrio
que deben conocer, y el cual se irá desarrollando con la práctica guiada y la experiencia posterior.
Similar al caso anterior es el tamaño de las piezas que se utilizan. Tengamos en cuenta que lo que produce el
efecto buscado es la mayor aproximación posible al punto justo en el que opera cada recurso. La diferencia
en más o en menos variará el resultado alejando de lo óptimo el efecto buscado.
En cuanto a los tiempos, sepamos que en el caso del masaje, si continuamos operando una vez logrado el
estado adecuado, el resultado tiende a invertirse.
Si continuáramos con el procedimiento de limpieza más allá de lo necesario sólo conseguiríamos gastar
innecesariamente nuestra energía y el tiempo de la sesión. Las mismas consideraciones que para el punto
anterior se aplican a la maniobra de movilización de BIOENERGÍA.
Tal como vimos, es común que a causa del entusiasmo inicial mostremos tendencia a tratar de corregir en
una misma sesión todas las disfunciones detectadas; actitud que se incrementa si, habitualmente, logramos
buenos resultados.
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Tengamos siempre en cuenta que las leyes que rigen el mecanismo de saturación energética de los
organismos, prácticamente no se conocen. Cualquier intento de ir más allá de los límites impuestos por ellos
dará resultados parciales o aún el fracaso del trabajo.
Los mismos principios enumerados anteriormente son aplicables respecto del tiempo de exposición de la
persona a la influencia de las piedras y cristales.
Una buena práctica oscila en las cercanías del límite máximo tolerado pero no lo transpone en ningún caso.
Esto equivale a aprovechar todo lo posible los recursos sin arriesgarse nunca a malograr una sesión, ya que
cada una de estas deja en la persona huellas profundas, incluso en el caso de que el efecto pase
desapercibido para la percepción consciente.

FRECUENCIA DE LAS SESIONES

Una de las inquietudes de la persona que trata y aún de la persona tratada es la frecuencia y la duración del
trabajo.
La gran y desconocida cantidad de variables que existen para la conciencia humana y su dinámica no nos
permite determinar los tiempos más que con una aproximación remota. La realidad debe verse en el
transcurso de las sesiones y observando los efectos del trabajo; a partir de estos debemos ir realizando las
correcciones necesarias.
De todos modos, y como regla general, veamos algunos puntos de los que depende la frecuencia de las
sesiones. La primera variable es la seriedad del problema y el estado general de la persona. Si el caso fuese
grave nos encontraremos que la degradación energética es superior a la normal, por lo tanto, la frecuencia de
las sesiones debe ser mayor a la habitual para compensar la velocidad de consumo energético. Recordemos
que el estado de alteración de un sistema (conocido mayoritariamente como síntomas o enfermedad)
requiere de una mayor cantidad de energía que la del estado de salud a fin de hacer frente al proceso de
regeneración del sistema en la zona afectada (de ahí la prescripción de reposo que se da en la mayoría de
los casos).
Debemos considerar también el ritmo de consumo energético ante lesiones locales. Este gasto es alto en
caso de tejidos lesionados por quemaduras, contusiones, fracturas, infecciones agudas. Ante esta situación,
la cantidad de tratamientos también se incrementará en la medida de lo necesario.
Otro factor es lo delicada e importante que sea la parte a tratar, pues hay zonas que soportan una cantidad
mayor de movilizaciones energéticas en un lapso dado, tales como, por ejemplo, los miembros. Otras áreas
requieren un mayor cuidado, tal como sucede en el caso del sistema nervioso central, en especial en la
cabeza.
También depende de la edad y del estado físico. En caso de tratar a una persona de edad avanzada se
pueden hacer una serie continua de sesiones suaves a fin de evitar el trabajo prolongado sobre ese sistema
naturalmente debilitado.

POST SESIÓN

Cuando practiquemos cualquier tipo de manipulación bioenergética podremos observar con claridad algunos
cambios de distinta intensidad, duración y tipo en los respectivos niveles en los que opera el trabajo.
Cuando actuemos sobre otro ser humano con BIOENERGÍA nos encontraremos con algunas respuestas del
sistema más o menos comunes en la mayoría de los casos. Una de las impresiones que con mayor
frecuencia relatan las personas tratadas es la sensación de liviandad, apertura, frescura y desintoxicación
asociada a emociones como la alegría, la vitalidad, la calma, la comprensión profunda de los problemas, la
aceptación de las leyes de la vida y de la condición humana. Pero en muchos de los casos, durante la época
de las primeras sesiones, nos podemos encontrar con algunas sensaciones molestas de distinto tipo ya que
el sistema adquiere un ritmo distinto. Algunos lo comparan con el síndrome de eliminación de la medicina
homeopática.
Algunos síntomas típicos de purificación son, por ejemplo:

 Alteración del ritmo intestinal

 Dolores de cabeza (en especial al comienzo del tratamiento)
 Molestias digestivas
 Inestabilidad emocional
 Angustias de origen desconocido
 Tristeza de origen incierto
 Accesos de ira
 Alteraciones en el sueño
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Es común que en los días posteriores a la primera sesión el intestino tienda a limpiarse y aumente la
frecuencia de evacuación y disminuya la consistencia de la excreción. En ocasiones estos síntomas
aparecen acompañados de dolores de cabeza de distintas intensidades y localizaciones que nos indican que
existe una descarga de elementos tóxicos en el sistema. Pueden aparecer otras molestias digestivas tales
como náuseas, sensación de “estómago cerrado”, dificultad para digerir.
Si recordamos lo expuesto sobre las emociones, dicho plano no puede ser la excepción y mantenerse
estable: es frecuente la inestabilidad emocional y algunas sensaciones inciertas que pueden ser tristeza,
angustia, ansiedad, miedos, largamente reprimidas y estructuradas en planos lejanos del consciente.
También la alteración de nuestro tan delicado y desconocido mecanismo del sueño suele observarse en esta
situación.
Habitualmente, estas manifestaciones no revisten mayor importancia y tienden a desaparecer en corto tiempo
de manera espontánea. De todos modos, ante estos casos, debemos recomendar siempre una interconsulta
con el profesional especializado en el plano afectado. No olvidemos que ningún profesional puede
especializarse profundamente en todos los niveles que configuran la totalidad de un ser humano.

ACTITUD PARA ABORDAR EL TRABAJO

Recordemos lo visto en SALUD con respecto al equilibrio externo e interno. Antes de adentrarnos
detalladamente en la parte práctica de la sesión, quiero ampliar el tema del equilibrio interno.
Sabemos que, sin lugar a dudas, éste está a cargo de la persona tratada. Pero también sabemos por la
experiencia que una cosa es saberlo nosotros y otra muy diferente es transmitirlo y lograr que la persona lo
comprenda, lo acepte y trabaje activamente sobre SU problema. Puedo asegurar que este es el escollo
mayor en el proceso de restauración del equilibrio sea cual fuere la técnica empleada. Estamos inmersos en
una cultura dentro de la cual crecimos con la convicción de que la enfermedad venía de afuera y la salud
también tenía que provenir del exterior. Por lo tanto, cuando insinuamos a una persona que ella misma
generó su problema (siempre que no sea de origen puramente externo), nos encontramos con caras de
sorpresa y hasta de disgusto.
Lamentablemente, si queremos avanzar por el Camino que conduce hacia el verdadero equilibrio no
tendremos otra alternativa que mostrar a ese desinformado ser humano la auténtica situación en la que se
encuentra e invitarlo a colaborar con la solución de su problema.
La idea no es darle largas explicaciones sobre los estudios de la medicina psicosomática pero sí mostrarle
una sintética secuencia que debe seguir para trabajar con nosotros en su proceso. Esta secuencia consta de
tres puntos que son:

- ACEPTACIÓN de que el origen de la alteración proviene de su interior y no de factores externos y fortuitos.

- COMPRENSIÓN de la VERDADERA CAUSA del problema.

- EMPRENDER LA ACCIÓN CORRECTIVA ADECUADA

Recién cuando se den por completados estos pasos podremos hablar de salud estable y real.

Tal como ya he planteado, creo que la llave de la puerta que conducirá a una verdadera sanación es lograr
que la persona acepte que la causa primera de su problema reside en su interior, y desde ahí debe ser
trabajada; caso contrario cualquier terapéutica sólo estará operando sobre el síntoma; o sea: sobre la
manifestación externa del verdadero conflicto.
Para lograr la tan difícil comprensión es necesario primero que la persona aprenda a escuchar para luego,
con el tiempo, aprender a oír en profundidad. Mientras transcurre este proceso debemos invitarla a que
reflexione con la mayor dedicación y objetividad sobre lo escuchado. Luego de haber conseguido este estado
deberá obtener una síntesis a modo de conclusión que le servirá de guía y de pauta para su trabajo de
restablecimiento del equilibrio.
Cumplida esta etapa deberá emprender la acción adecuada para conseguir modificar el error en su sistema
de creencias que desencadenó el problema. Otro factor asociado es la constancia que se deberá tener en
cuanto al mantenimiento de la acción por el tiempo que sea necesario ya que muchas personas comienzan
con entusiasmo y luego permiten que su voluntad decaiga.
Recién en este punto y luego de un sólido trabajo en conjunto es cuando podemos hablar de transformación
como sinónimo de equilibrio real y duradero.
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A modo de síntesis muy elemental podríamos decir que la persona tratada debe localizar y centrarse en
aquellos esquemas de pensamiento-conducta que le producen el desequilibrio y trabajar sobre ellos de
manera constante y paciente. Si las circunstancias que originan la incomodidad pertenecen al pasado y no
existen posibilidades de modificación desde el presente, los lineamientos de trabajo sobre estos registros
deben dejarse en manos de los profesionales especializados, lo cual no nos impide continuar con la tarea en
el área de nuestro conocimiento: la BIOENERGÍA.
De todo lo visto se desprende que el tipo de acción planteada -la modulación de BIOENERGÍA- va a movilizar
gran cantidad de elementos pertenecientes al plano mental y a las emociones asociadas con éste. Si
recordamos que cada centro de energía abastece zonas específicas del cuerpo y, paralelamente, procesa
una modalidad energética particular para contribuir a la existencia y al desarrollo de los distintos aspectos de
nuestra autoconciencia, concluiremos que la manipulación efectuada producirá efectos acordes con el tipo de
trabajo y con la zona sobre la cual se efectúe.
Tengamos presente, a modo de pauta general, que el material psicoemocional relacionado con cada chakra
tiende a emerger hacia la conciencia cuando aumenta la circulación energética a través de él; lo mismo
sucede en otras zonas ya que el sistema tiene distribuida la información por todo el campo. Por eso,
debemos ser cautelosos, ya que un flujo intenso y continuado liberaría demasiados registros psico-emocio-
sentimentales y la persona no podría procesarlos todos de forma útil; debido a esto es que se recomienda la
gradualidad en todos los casos.
Habitualmente se habla de los planos o niveles que conforman al ser humano. Dos de ellos son el psíquico y
el emocional. Esta diferenciación se hace a causa de las tan distintas características de ambos y no porque
sean realmente dos planos. ¿Acaso es posible sentir alguna emoción sin un psiquismo que las genere de
acuerdo con su sistema de creencias (ideas)? Por supuesto que no. Con lo enunciado pretendo mostrar que
lo conocido como plano emocional depende directamente de nuestra psique. De acuerdo con la importancia
que ella le otorgue a una idea, así será la intensidad de la descarga emocional que ordene poner en
movimiento. Por eso he manifestado en muchas oportunidades que no es posible trabajar sobre las
emociones de manera directa. La acción debe aplicarse sobre las ideas de la persona para que adquiera una
comprensión tal de la vida y de sus procesos que le asigne el valor adecuado. Al asignarle el valor correcto, la
emoción generada será la adecuada para cada situación que deba vivir en su Camino de aprendizaje.
Veamos un ejemplo. Cuando una idea mueve un mínimo potencial emocional o este es nulo, diremos que se
trata de una idea muerta, ya que no produce efectos considerables en la conciencia. Si escuchan decir que
2+2 es igual a 4, lo más probable es que no se produzca en ustedes emoción alguna. Esto es una idea
muerta.
El caso opuesto, al que podríamos llamar enemigo de la salud en caso de ser tratarse de emociones de
efecto perjudicial, es la idea viva. Estos registros psíquicos llevan asociados una gran capacidad de
movimiento emocional ya que se trata de ideas con significados importantes para el poseedor. Un ejemplo
sería recordarle a alguien un episodio feliz. Esta situación pondría en movimiento fuerzas emocionales de
determinado tipo que producirán en el sistema un obvio efecto benéfico. Imaginen ahora qué sucedería ante
episodios cargados de dolor; serían esperables descargas emocionales que causarían un efecto perjudicial
en las zonas que reciban la descarga.
Aún podemos agregar que, si mediase una gran represión de estos episodios traumáticos (reales, supuestos
o potenciales) y su importancia lograse ser retirada de la conciencia, el proceso continuaría bajo los límites de
ésta produciendo efectos aún mayores sobre el cuerpo y el ánimo ya que todo el potencial emocional
perjudicial se descargaría dentro del mismo sistema afectando los planos psíquico, corporal y, por supuesto,
energético.
Gran parte del trabajo de restauración del equilibrio consiste en convertir una idea viva en una idea muerta
suprimiendo el potencial emocional de la idea en cuestión, o sea, logrando que la persona le asigne a cada
suceso de su vida el valor adecuado. Si algo deja de ser importante para alguien, pasa a ser un recuerdo
ilustrativo en la memoria sin capacidad de daño: sólo un registro mnémico.
En principio, y a modo de generalidad, podemos decir que esto se logra accediendo y disolviendo el cúmulo
energético que habitualmente se forma en estos casos y resignificando la persona la idea en cuestión para
restarle importancia (investidura).

MASAJE

Veremos ahora algunas generalidades de la técnica de masaje empleada. A pesar de esto, considero que
deben practicarse en grupo y con una adecuada coordinación y seguimiento para ser integradas a las demás
técnicas a fin de formar una unidad operativa y así obtener de ellas su máximo potencial.
Uno de los grandes errores de criterio humano es dividir y tomar solo algunas partes de la totalidad del ser;
generalmente las que nos resultan más sencillas y conocidas, o aprender por medio de teoría y prescindir de
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una adecuada práctica. Esta actitud desemboca en resultados parciales, confusos y en ocasiones hasta
perjudiciales.
Debemos tener en cuenta que el masaje es una técnica que moviliza las energías corporales en distintos
planos. Las técnicas operan sobre los órganos de manera directa actuando, por ejemplo, sobre la circulación.
También lo hacen directamente sobre la BIOENERGÍA corporal de baja frecuencia, sobre los meridianos y
puntos electrodérmicos, sobre las energías más sutiles del campo y sobre los centros de energía sutil.
El masaje no se reduce a la mera acción físico-mecánica y sus efectos. Unas pocas maniobras efectuadas
eficientemente y en las zonas adecuadas nos allanarán el camino para el resto de la sesión. No debe
subestimarse esta técnica bajo ningún concepto ya que es mucho más abarcativa de lo que se conoce
habitualmente.

 Para dar masaje e imponer manos es importante cuidar la temperatura y la humedad de estas, ya que el
estado de la persona tratada es de alta sensibilidad y se torna muy desagradable el contacto con manos
frías y/o húmedas.

 Debemos regular con cuidado la presión que ejerzamos. Esta estará de acuerdo con la zona tratada y el
efecto que busquemos producir. Deberemos estar muy atentos y ajustarla de manera continua.

 Las manos deberán estar relajadas en todos los casos en los que la maniobra sea de amasamiento o
deslizamiento. La tensión en las manos produce un efecto muy desagradable en la persona tratada y no
nos permite a nosotros un trabajo preciso, rítmico y armónico.

 En caso de dígitopresión se buscará una postura firme, ya que es notoria y desagradable la sensación de
inseguridad.

 Las manos deben amoldarse permanentemente al relieve corporal de manera suave y natural.

 Mantendremos una velocidad y una presión uniforme pero sin tener temor de variar la velocidad y la
presión cuando lo consideremos necesario. Por supuesto, debe hacerse de manera armoniosa
manteniendo la continuidad.

 Mientras maniobramos, iremos registrando y definiendo mentalmente la estructura interna de la zona

tratada. Esto nos mantendrá unificados con la persona y tendremos un panorama claro de lo que sucede
en su cuerpo.

 Trataremos de interrumpir el contacto de nuestras manos con su cuerpo la menor cantidad de veces
posible.

 Nuestro cuerpo se convertirá en un todo armónico y lo utilizaremos completo para dar masaje. Aunque
únicamente operemos con las manos, el ritmo y el impulso de las maniobras debe sentirse en todo el
cuerpo.

 Es importante cuidar la postura corporal a fin de evitar el cansancio y los movimientos forzados. Se debe
prestar especial atención a la postura de todo el cuerpo, tanto para el bien de la persona como para lograr
un trabajo efectivo con el menor desgaste posible.

IMPOSICIÓN DE MANOS

El sistema energético del ser humano está naturalmente capacitado para modular y dirigir BIOENERGíA. De
hecho, lo hace a nivel inconsciente para mantener la vida y puede también hacerlo conscientemente.
Una de las posibilidades naturales del ser humano, por el solo hecho de serlo, es poner en movimiento su
propia energía con distintas finalidades. La forma más frecuente y sencilla de hacerlo es mediante el uso de
las manos. El solo hecho de imponer la mano o las manos sobre otro ser (orgánico o no), trae aparejado una
serie de efectos energéticos sobre la persona tratada y sobre la que trata. Esto es comprobable a través de
diversas disciplinas.
Pero también es evidente -y en esto hacen hincapié la mayoría de las escuelas-, que el efecto no es igual en
todos los casos. Veamos los motivos basándonos en un principio de la Física al que ya aludimos en el
método de diagnóstico por sensopercepción. Este principio postula que no podemos percibir o transmitir una
frecuencia vibratoria (energía) a la que no somos capaces de vibrar. Puse el ejemplo de un sonido que
nuestro tímpano no puede reproducir por estar fuera de su capacidad vibratoria. Dado este caso: ¿qué
sucedería si tuviésemos que escuchar y transmitir una conversación que se desarrolla fuera de nuestra
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capacidad auditiva natural? Obviamente, la conversación no existiría para nosotros y, por lo tanto, no
seríamos capaces de transmitirla.
Este mismo principio se aplica a la movilización de energía con las manos (y por otros métodos). Sólo
podemos poner en movimiento las frecuencias a las que somos capaces de vibrar. Los límites de esto los
determina nuestro estado evolutivo; dicho de otra manera: tendremos capacidad de vibrar más alto y, como
consecuencia, poner en movimiento mayor cantidad y calidad de energía si trabajamos conscientemente
afinando nuestro ser total. De todos modos, la gran mayoría de los seres humanos con una sana intención
pueden modular, en distinta medida, energía vital de distintas características para tratar a otros seres. El
resultado depende de una serie de variables conocidas y otras tantas no determinadas aún; veamos algunas:

 El estado interior (evolutivo, de conciencia) de la persona tratada y de la que trata.

 La capacidad del terapeuta de conectarse con su ser profundo.
 El estado de salud psicofísica del individuo que asiste.
 La intención subliminal de ambos. Me refiero a la verdadera intención que existe por debajo de los límites
de la conciencia. En muy pocos casos coincide la intención que manifestamos con la que subyace en
nuestro interior oculta al mundo.

Los dos primeros puntos ya han sido comentados. El tercero tiene que ver con la posibilidad de transmitir
hacia la persona tratada las congestiones energéticas que tiene el operador. Esto es viable de acuerdo a
algunas leyes de la BIOENERGÍA. Hemos visto que ésta siempre circula de puntos de mayor a puntos de
menor potencial. ¿Qué sucedería si la persona que trata tuviese un mayor potencial energético que la
persona tratada pero sufriese alguna congestión importante en su sistema? El riesgo es la transmisión de
cúmulos bioplásmicos correspondientes a los bloqueos energéticos de problemas emocionales internos.
A pesar de estas variables y riesgos hay efectos benéficos que se producen indefectiblemente en mayor o
menor grado y siempre que no haya un gran impedimento de origen exterior, interior o desconocido.

Efecto

Básicamente, los efectos que se verifican con el trabajo de las manos sobre el campo energético (con o sin
contacto físico) se pueden reducir a dos. Existen otros pero, debido al carácter informativo y general de este
libro, creo suficiente con enumerar sólo los dos más generales.
El primero es el desprendimiento de materia bioplásmica muerta o impropia, siempre y cuando esta sea
reciente y superficial, o sea, de baja penetración y fijación en el campo. No voy a detallar los distintos tipos y
las distintas profundidades de las adherencias energéticas en el biocampo ya que podría prestarse a
confusión sin posibilidad de ser aclarada e invitaría a distintas manipulaciones hechas con muy buena
voluntad pero con escasa formación.
El segundo efecto resultante de estas maniobras es la energización debida a la disociación de los residuos
que obstruían la libre captación, metabolización, circulación y distribución de la energía.
Dejando de lado el facilismo y la simplificación que algunas prácticas hacen de una técnica que es compleja
por su naturaleza intrínseca, quiero dejar claro que no es fácilmente comprobable el hecho de saber con
absoluta precisión qué sucede en el sistema energético. Recordemos que estamos operando sobre una
estructura de una complejidad tal que no es posible comprender con los medios al alcance del intelecto
humano. El sistema energético humano es una combinación de redes de campos interactuantes de muy
variadas frecuencias y el hombre recién está comenzando a verificar con certeza algunas de ellas.
Para aclarar algo del tema tendríamos que ahondar en lo poco que se conoce realmente de la fisiología
energética cuando existe interacción entre dos organismos vivos.
A modo de generalidad indiscutible para quien se haya hecho algunas preguntas a lo largo de su vida,
sepamos que no es posible efectuar ningún trabajo sin hacer una inversión o desgaste de la propia energía,
ya que el mero hecho de operar sobre otro sistema implica un compromiso energético del sistema que asiste;
un compromiso que consume energía de alta frecuencia y produce un alto desgaste.
Con esto no pretendo desilusionar a quien quiera dedicar su vida a mejorar el estado de conciencia de su
prójimo; sí quiero prevenir e invitarlos a hacer las cosas con responsabilidad y después de haberse formado
con profundidad, ya que lo que se aprende fácil y rápido es de muy escaso alcance.
La modulación de BIOENERGÍA es viable para cualquier persona con buena intención, pero requiere mucho
y adecuado entrenamiento si es que se quiere trabajar con responsabilidad y respeto.

Advertencias
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Sabemos ya que la acción de la movilización energética sobre el sistema produce distintos efectos de
acuerdo con las variables comentadas. Como resultado de este movimiento, la persona tratada y, en algunas
ocasiones, la que trata, pueden sentir diferencias de temperatura (calor o frío) en determinadas zonas,
vibraciones o cosquilleo, emociones y estados anímicos particulares, recuerdos, ensueños, imágenes y
visualizaciones, sonidos, mensajes del inconsciente, memorias de vidas pasadas, momentos de
comprensión profunda.
Para minimizar los efectos que produce el impulso entusiasta de todo principiante sugiero, ante cualquiera de
las sensaciones enunciadas, evitar la tendencia a la interpretación a menos que lo experimentado sea tan
obvio que no deje lugar a dudas sobre su origen, o que la persona que trata se sienta con la necesaria
competencia como para dar una devolución satisfactoria y precisa.
Es frecuente también al imponer manos sentir rechazo o un malestar incierto hacia la persona o la situación.
No debemos olvidar nunca que todos los seres humanos somos absolutamente distintos en los planos
profundos y existen grandes diferencias que, en ocasiones, producen rechazo de unos hacia otros. En estos
casos la actitud prudente consiste en retirar las manos y no continuar con el tratamiento.
Recordando lo visto anteriormente reitero que es inevitable que una parte de los residuos bioplásmicos
movilizados se adhiera o penetre en el campo llevada por el metabolismo energético del terapeuta. Se
sugiere atención a los posibles malestares a fin de no superar el límite admisible de contaminación.

PIEDRAS y CRISTALES

Generalidades

Al momento de trabajar con piedras y cristales debemos recordar que se trata de un tema en el que se hace
muy dificultosa la verificación cierta de sus efectos reales. Esto se debe a que operan en biofrecuencias que
se encuentran muy distantes de las posibilidades aparatológicas actuales.
Siendo tan atractiva su presencia física y produciendo efectos sobre el biocampo humano, podemos
encontrar una amplia, contradictoria y poética gama de versiones y supuestas propiedades sobre esta forma
de vida. A pesar de tratase de un tema delicado, existen algunas pautas que podrían tomarse como básicas y
que se desprenden de una observación y experimentación cuidadosa y responsable de muchas personas
con vasta experiencia.
Es obvio que las piedras y los cristales actúan sobre nuestro campo energético. En el trabajo con cristales y
debido a su proximidad permanente, comenzaremos a incorporarlos dentro de nuestro campo
electrodinámico durante muchas horas al día; por ello es necesario tener en cuenta que estaremos expuestos
a otras fuerzas de características distintas a las del biocampo humano y, por lo tanto, el efecto que esto
producirá será diferente de lo habitual. De acuerdo con la experiencia personal, podría decir que empiezan a
suceder “cosas” difíciles de catalogar y entender por los medios habituales racionales y lógicos.
Dentro de las tantas cosas que aprenderemos por el solo contacto con ellos, creo que una de las más
valiosas que van a enseñarnos consiste en no evaluar el mundo solamente en términos de lógica racional
sino a conectarnos con una parte de nosotros mucho más profunda y poco utilizada en la vida diaria habitual.
La zona de las sensaciones y la intuición, la zona humana que no piensa, la zona que sabe: la de la
sabiduría.
Dadas las características del modo en que actúan los cristales sobre nuestro campo energético y teniendo en
cuenta las grandes diferencias que existen entre todos los seres humanos, nos encontraremos ante una
amplia gama de experiencias distintas que aunque repitamos con exactitud los ejercicios, las condiciones de
alguna prueba o una sesión, lo usual es que los resultados no coincidan en muchos de los casos. También
es frecuente pasar por experiencias molestas en el contacto con ellos, no porque puedan ser dañinos sino
porque pueden actuar sobre viejos y olvidados conflictos trayéndolos a la conciencia. Al hacerlo,
experimentamos la incomodidad más o menos fuerte de acceder a registros que ocultamos sin haberlos
resuelto.

¿Qué son los cristales?

He leído las más insólitas y fantasiosas versiones por medio de las cuales se intentaba definir lo que es una
piedra o cristal. Entre tanta ilusión elijo atenerme a las leyes conocidas y así evitar incurrir en más
suposiciones y conclusiones personales. Si tuviese que resumir y definir lo que es un cristal diría
prudentemente que es materia comprimida en una estructura regular.
Tomando en cuenta lo que postula la Física de nuestros días cuando dice que el átomo se parece más a un
campo energético que a algo sólido, tenemos que ver en el cristal un campo muy potente dada la regularidad
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de su estructura molecular y la cantidad de materia por unidad de volumen. Resumiendo digamos que a más
materia, más energía.

¿Por qué influyen en el campo de los organismos vivos?

A causa de la regularidad de sus estructuras moleculares, esa organización de la materia vibra a frecuencias
más constantes que cuando la disposición interna es caótica. Al contener más cantidad de materia por unidad
de volumen y vibrar a una frecuencia muy estable, los cristales generan un campo energético intenso, regular
y constante. Al emitir vibraciones muy intensas, regulares y de manera constante, los cristales tienden a influir
sobre aquello que se encuentre dentro de su área de influencia (campo energético). Para comprender esto
recordemos que la energía circula o actúa siempre desde puntos de mayor a puntos de menor potencial
cuántico. Por eso, en principio, el cristal actúa sobre el ser humano y no éste sobre el cristal.
El campo energético del cristal influye sobre la energía sutil del ser humano, o sea, sobre su campo
bioplásmico, por eso los efectos más profundos suelen registrarse después del tratamiento ya que las
modificaciones energéticas profundas tardan un tiempo importante antes de mostrar sus efectos en el cuerpo
físico y en el ánimo.
Cuanto mayor sea el estado evolutivo de la persona (mayor sensibilidad, receptividad, apertura, conciencia)
tanto mayor será la posibilidad de asimilar la influencia del cristal, ya que vimos que a una persona de mayor
nivel evolutivo le corresponden frecuencias de vibración más elevadas. Por lo tanto, hay que crear las
condiciones adecuadas para percibir los efectos.

¿En qué nos pueden ayudar?

Para mantener una sana y adecuada relación con el mundo mineral, en especial el de las piedras y cristales
preciosos y semipreciosos, debemos tomarlo como un instrumento para modulación de BIOENERGÍA. No
pretendo decir que deban ser vistos y tratados como una fría herramienta ya que existen sobradas
experiencias personales que justifican y avalan el hecho de verlos como otra forma de vida: vida inorgánica.
En el trabajo con ellos podemos esperar que contribuyan, como instrumento, para lograr una mayor
armonización de nuestro sistema energético y que nos ayuden a tener una visión interior más clara. Ese es el
comienzo del cambio y el equilibrio definitivo.
Tenemos entonces que podemos contar con su forma de energía como instrumento de modulación de
energía y también, como extensión, para ampliar nuestro estado de conciencia.

Integración

Habitualmente, los seres humanos medios tenemos serias dificultades para vencer la tendencia a la dualidad
del mundo conocido; el mundo de los opuestos complementarios. Esta visión se manifiesta una vez más en
relación con lo material. La clasificación frecuente y casi automática que hacemos es: todo lo sólido debe ser
un objeto o ser orgánico. Nos resulta prácticamente imposible, aunque más no sea, imaginar una forma de
conciencia que no esté dentro de lo que se conoce como vida metabólica. Los cristales no pueden ser la
excepción y son vistos y tratados como un objeto más que compone nuestro mundo material.
Como suele suceder en todo el Universo conocido, la realidad de lo profundo y sutil suele manifestarse a la
ilusión de lo superficial y material en el momento en que se le presenta la primera oportunidad. Una de estas
ocasiones es cuando nos acercamos a los cristales. Lo que suele suceder es que un día los descubrimos ya
no como objetos inertes sino como algo que nos atrae de una forma distinta, una forma que las palabras,
creadas para definir lo convencional, no pueden describir. Sentimos esa sensación por ellos en una parte
indefinida de nuestro ser. Creo no exagerar si digo que a partir de ese momento damos un notorio y hermoso
salto evolutivo y que ya no volvemos a ser los mismos ni a ver el mundo de igual modo: algo sucede en
nuestro interior.
Visto esto, es lógico inferir que el acercamiento a este reino debe hacerse siguiendo algunas pautas que
vayan paralelas a su naturaleza, ya que si intentáramos hacerlo con las reglas conocidas para la vida
orgánica o para los objetos, los resultados tendrían carácter de pobres, parciales o nulos. No olvidemos que
vamos a adentrarnos en un reino distinto del humano, con leyes propias, por ejemplo: un metabolismo mas
lento, mayor poder de reflejar la luz, mayor densidad, frecuencias de vibración mas altas, otra forma de
conciencia.
La técnica empleada para este fin se conoce como integración. El principio es similar a cuando llegamos a
instalarnos en un lugar nuevo para nosotros. Como primer paso tratamos de impregnarnos del lugar y captar
todos los detalles a nuestro alcance. Lentamente y transcurrido un tiempo, adquirimos familiaridad con el sitio,
 39

sus costumbres y su ambiente. Un proceso similar se lleva a cabo cuando conocemos a una persona y
queremos intercambiar vida.
El procedimiento para adentrarnos en el mundo de los cristales no difiere en gran medida de los
mencionados; la gran diferencia y dificultad estriba en nuestra visión de ellos. Si los vemos como objetos, el
intercambio será sólo superficial; si logramos verlos como otra forma de vida, el intercambio tendrá carácter
profundo y sus posibilidades serán mayores. Es mediante la compenetración paciente que llegamos a
entenderlos y a compartir algo de su interior. Si a esta nueva forma de considerarlos y relacionarnos con ellos
le agregamos la compenetración, entramos literalmente en otro mundo de características desconocidas por
nosotros hasta el momento; otro mundo que es parte de nuestro mundo. No olvidemos que, habitualmente,
nos manejamos en el plano de lo inmediato sin ver más allá; así nos perdemos gran parte de las
posibilidades profundas de la vida.
Para lograr el proceso de integración es necesario que comencemos por desarrollar la observación. Al hablar
de observación no me refiero al sentido de la vista, aunque a veces por medio de éste damos el primer paso,
sino a penetrar con toda nuestra conciencia de ser en el cristal y permitir que él penetre en nosotros para ver
con mayor profundidad.
Logrado dicho estado podemos decir que nuestra conciencia se encuentra más cerca de la conciencia del
cristal y, por lo tanto, el intercambio entre mundos se abre en ambas direcciones.
En la sección dedicada a la PRÁCTICA veremos ejercicios detallados de integración.

Elección de piedras y cristales

Siendo tantas las corrientes, tendencias y opiniones sobre las propiedades, uso y cuidado de piedras y
cristales, la actitud más prudente y segura es tomar pautas generales y hacer nuestra propia experiencia
basada en la sensibilidad personal y en un agudo sentido de observación y conclusión. La elección de los
cristales debe hacerse empleando todos los elementos a nuestro alcance: físicos y no físicos. Desde el
simple gusto por el color, la textura o la forma, hasta las sensaciones profundas e inexplicables de atracción
que no pueden definirse con palabras. Al elegir y trabajar con cristales no olvidemos que la percepción no
razona, ella simplemente sabe.
Al momento de elegir piedras o cristales lo más importante es asegurarse de no hacerlo impulsados sólo por
la apariencia física. Debemos prestar especial atención a la sensación interna que nos producen. También
dicha sensación incluirá el uso que les podemos dar, ya que no será igual una elección hecha para cristales
de trabajo que para cristales personales.
Aunque no podamos ser conscientes de nuestros procesos internos profundos, al acercarnos a otra forma de
vida se activan módulos inconscientes que sí pueden distinguir la proximidad de otras vibraciones vitales
sutiles. Si permitimos que estos registros naturales tomen el control (tratando de interferirlos lo menos posible
con la mente consciente), ellos se encargarán de la elección sin posibilidad de error. Recordemos que ellos
no piensan; perciben, saben, conocen de forma directa; es su función.
Aún habiendo interferido el control de estos módulos y habiendo elegido erróneamente, podemos aprender
de la experiencia observando atentamente el efecto o la sensación que nos produce nuestro nuevo cristal. Lo
más probable es que la siguiente elección sea más aproximada.
Es conveniente antes de comprar cristales dedicar por lo menos una hora por día durante algunos meses a
ejercicios de silencio interior a fin de ablandar o hacer más permeable el preconsciente y permitir así una
mayor comunicación del inconsciente.
A modo de generalidad orientativa recomiendo comenzar con una punta de cuarzo. Hacer adecuada y
pacientemente el proceso de integración. Luego, gradualmente, recurrir a ella en los momentos o para las
funciones que sepan con seguridad que pueden ser útiles, o en caso de que sientan la necesidad de su
servicio. Cuando digo “seguridad o necesidad” me refiero a un estímulo no consciente. Si existen dudas no se
trata de un mensaje del inconsciente. Él no permite dudas.
Observaremos las instrucciones de limpieza que se detallan más adelante.
Otra de las precauciones a tener en cuenta es al momento de dormir. Se sugiere con toda soltura que se
coloquen piedras y cristales bajo la almohada durante la noche olvidando que durante nuestro período de
reposo existe una emisión involuntaria del cuerpo astral con fines de recarga. Si tenemos en cuenta la
sutilidad de este cuerpo, lo poco que se sabe de ese estado, y la frecuencia de irradiación de las piedras,
creo que está de más aclarar el porqué de la cautela recomendada.
Es buena práctica cuando trabajemos con cristales personales estar atento a las sensaciones, ya que de
esos pequeños y efímeros estados obtendremos la mayor información.
Siempre como piezas personales, otra de las posibilidades es trabajar con drusas o geodas. El desarrollo de
estos tópicos no está incluido en este libro.
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En cuanto al uso de cristales láser creo que es necesario un gran entrenamiento previo como para poder
emplearlos de manera segura y eficiente.

Adornos

Entre las tantas curiosidades de la conducta humana hay una referente a las piedras y cristales que, de
acuerdo con mi entender, linda con lo fantástico.
Si usted está leyendo este libro es evidente que tiene interés en el trabajo con el reino mineral. Con seguridad
ya sabrá que existe la Gemoterapia como disciplina que emplea únicamente estos instrumentos en elixires y
en aplicaciones corporales de escasa duración. Hay personas que los combinan con otras técnicas y también
los aplican sobre el cuerpo durante el tiempo que dure una sesión, la cual suele no extenderse más de una
hora. Es habitual que se obtengan resultados de estas prácticas, y algunos son notorios.
Mi pregunta-reflexión es: si las piedras actúan en una hora produciendo resultados: ¿qué puede suceder si
las llevamos dentro de nuestro campo energético en forma de adornos durante todo el día?
Evidentemente, producirán un efecto imposible de determinar y que prefiero no imaginar. Si recordamos lo
expuesto, sabemos que hay un tiempo adecuado para lograr el resultado deseado. Transcurrido este lapso
comienza la distorsión de acuerdo con muchas variables.
No intento afirmar que no sea beneficioso llevar un adorno con piedras adecuadamente diseñado, durante el
tiempo necesario y con un fin determinado. Sí creo en el obvio perjuicio a largo plazo que puede causar en el
campo energético el uso indiscriminado e inconsciente de elementos que perturben su armonía natural. Una
vez más, recomiendo precaución y responsabilidad.

Cuidados

Los cristales, tal como todos los otros seres u objetos de este mundo, están expuestos de manera
permanente a las emisiones sutiles de los demás. Vivimos en un medio que, a pesar de ser físico, nos
mantiene energéticamente interconectados. Estamos individualizados pero no aislados de lo que nos rodea,
por lo tanto, es ininterrumpido el intercambio de energía entre todos los seres y objetos.
Todos tenemos, en mayor o menor grado, la tendencia antropocéntrica de pensar que lo que beneficia o
gusta al hombre debe producir el mismo efecto en cualquier forma de vida, orgánica o no. Los cristales son
otra forma de vida que tiene apenas algunos puntos en común con la vida orgánica y metabólica humana.
Por lo tanto, están regidos por otras leyes que apenas comenzamos a descubrir.
Por ejemplo: los cristales no necesitan ni deben ser expuestos al Sol, ya que su hábitat natural es el interior
de la Tierra (imaginen exponer al Sol raíces, un pez, una lombriz). No necesitan ser expuestos a la radiación
del Sol para ser recargados ya que se trata de piedras y cristales y no de un artefacto alimentado a energía
solar. Ellos tienen su propio metabolismo energético relacionado con el metabolismo energético universal.
Sí necesitan ser despojados de la materia bioplásmica que pueden haber absorbido o estar impregnados.
Los cristales poseen distinta permeabilidad, color, forma, dureza, por lo tanto, esta absorción puede ser más
o menos profunda según el cristal, la fuerza y tiempo de exposición a dicha materia radiante de desecho. No
obstante, hay métodos de limpieza más o menos comunes a todos. Las formas de limpieza habituales son:

 Sumergirlos en agua entre 1 y n días. Es recomendable renovar el agua hasta que dejen de llenarse de
pequeñas burbujas en su superficie.
 Exponerlos al campo energético de una drusa n días.
 Enterrarlos.

Cuando consideramos que están limpios los enjuagamos y dejamos secar a la sombra. Por ejemplo, la
Amatista, la Cornalina y la Fluorita pierden su color gradualmente si se exponen al Sol (debido a la radiación
ultravioleta).
Con mucha frecuencia, cuando se utilizan en sesiones de trabajo sobre el campo energético humano, estos
métodos no son suficientes y nunca recuperan su estado original. El cambio se hace evidente en el color y en
el brillo. Si hemos logrado un buen grado de integración y, por lo tanto, los conocemos, no tendremos dudas
respecto de cuándo sufren alguna alteración; será evidente el estado en que se encuentren.
Hay casos de gente que los limpia con su mano imaginando un haz de luz que se dirige hacia el cristal. Los
cristales pertenecen al mundo de la materia y tienen sus propiedades físicas y energéticas reales. Tratemos
de ser prudentes y objetivos; no sometamos las necesidades a nuestras ilusiones. Una cosa es imaginar un
desplazamiento energético y otra muy distinta es lo que sucede realmente.
También es conveniente, pero no indispensable, que sean manipulados sólo por la persona que los emplea.
 41

Uso

A pesar de los distintos tipos de uso que podemos darles, hay variables comunes a todos ellos. Cuando
utilicemos cristales, el efecto estará en relación con el tipo, el tamaño y la pureza del cristal, la profundidad de
la dolencia, el tiempo de exposición, la predisposición y las posibilidades de la persona, y otras muchas
variables.

Pasivo

Consiste en ubicar cristales dentro nuestro campo energético o en un ambiente y, simplemente, dejarlos
actuar. Dentro del biocampo suelen utilizarse en distintos ornamentos de acuerdo con lo ya expuesto.
Si fueron elegidos conscientemente prestando atención a la sensación que nos produjeron y no por mera
estética, la elección no habrá sido por gusto sino por necesidad. Por lo tanto, nos serán más útiles que en el
primer caso, con la salvedad de estar atentos al tiempo adecuado de uso y a su mantenimiento.

Pasivo-Activo (cristales personales)

También es habitual llevar cristales personales (en general se utilizan puntas de cuarzo) en los bolsillos o
cartera, y recurrir a ellos en ocasiones determinadas, simplemente saber que están, o trabajar juntos
deliberadamente. Sería muy amplio describir las posibilidades de efectos que podemos obtener trabajando
con un cristal personal.
Es una de las experiencias más interesantes e instructivas el hecho de reconocer cuando llega nuestro
cristal, cómo relacionarnos con él, y los resultados del trabajo juntos. Es un Camino a descubrir por cada uno
de nosotros.

Activo

Para utilizar los cristales de manera activa y, por lo tanto, aprovechar plenamente sus propiedades, se hace
necesario integrarse con ellos. La idea es acercarse a su frecuencia de vibración dentro de las posibilidades
humanas. Esto se logra con cualquiera de las técnicas conocidas de relajación y con la que veremos. Este
estado puede provocarlo la persona o ser inducido desde afuera en una sesión de trabajo. Puede extenderse
el uso de cristales a la meditación individual o grupal.

Remoto

Otra de las vastas posibilidades es la irradiación a distancia conocida como teleinfluencia o radiónica. La
práctica de esa técnica requiere una profunda y responsable capacitación, y un prudente entrenamiento con
el consentimiento de la persona implicada.
Una formación tan altamente especializada está fuera de los límites de este libro.

Elixires

Se efectúan preparados de gemas en donde estas irradian sus vibraciones al líquido en el que se las
sumerge.
Desconozco el tema en profundidad.

Sobre el cristal

Vimos en el punto titulado ENERGÍA, que esta no circula de manera caótica. Por el contrario, tiene
perfectamente definidos sus circuitos por la Naturaleza. Si tenemos en cuenta que el cristal es otra forma de
vida, no puede ser la excepción a este principio.
La punta es la zona de máxima irradiación y concentración energética, siguiéndole las aristas y finalmente las
caras. Esto se ajusta al mismo principio que la electricidad, la cual se concentraría, en el hipotético caso que
tuviésemos un conductor con la forma del cristal, en las mismas zonas descriptas y en ese orden.
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El sentido de circulación de su corriente principal es desde la base hacia el vértice y en ningún caso conocido
(por lo menos por mí), en sentido inverso.
Estas dos propiedades son aprovechadas en el uso de los cristales.

Programación

Es frecuente oír con qué soltura se habla y enseña a programar un cristal. Esta propiedad, derivada de la
interacción entre dos reinos de características tan distintas (el mineral y el animal), requiere de bastante más
trabajo interior que de buena voluntad. El facilismo con que se transmite esta técnica tiene más de ilusión que
de realidad.
Trabajemos con la siguiente pregunta: ¿Qué fuerza, frecuencia de vibración y concentración debiera tener
una estructura inestable como es la humana para lograr influir de manera más o menos duradera sobre otra
infinitamente más estable y densa como es la del cristal ?
Difícilmente tengamos la suerte de cruzarnos en esta vida con alguien capaz de influir sobre un cristal y, por
lo tanto, de programarlo de manera real y verificable.

PROPIEDADES

Es frecuente encontrarnos con abundante literatura sobre las propiedades energéticas del reino mineral.
Sabemos que es un terreno de muy difícil experimentación y verificación seria, por lo tanto, nos hallaremos
ante supuestas propiedades de los más diversos tipos y hasta muchas de ellas contradictorias.
Se supone que el efecto producido por las piedras y cristales está dado por su estructura molecular y por su
frecuencia cromática.
Tengamos en cuenta la complejidad del sistema humano, su dinámica, y el desconocimiento que se tiene de
él. Agreguemos a esto los misterios del reino mineral. También las dificultades de estudio por tratarse de
energías que operan en altísimas frecuencias.
Considerando esto:

¿Quién puede considerarse con autoridad

para tabular con certeza las propiedades
de las piedras y los cristales?

De todos modos, existen algunas pautas muy generales que pueden servir como guía básica a la hora de
emplear estos instrumentos. Recomiendo la mayor sensatez y respeto ante tanta inmensidad desconocida.
La lista que expongo a continuación debe tomarse solamente como un conjunto de conclusiones empíricas
originadas en mi experiencia, confrontada y enriquecida en algunos casos con la de otras personas.
Como prudente visión de la situación de trabajo energético sobre otro ser humano recomiendo tener en
cuenta lo siguiente: En una sesión de modulación del biocampo humano con distintas técnicas que operan
sobre múltiples zonas no es posible determinar con exactitud el efecto producido por cada una de ellas,
mucho menos aún la influencia precisa de cada piedra.

PROPIEDADES de las PIEDRAS

ÁGATA
- Fijación de las energías.
- Estabilizante, en especial de la zona baja del cuerpo-conciencia.
- En general, se usa de apoyo de otras piedras.

AGUAMARINA
- Efecto de estabilización leve.
- Tiende a enfriar localmente.

AMATISTA
- Disminuye la agitación mental
- Contribuye al silencio interior
- Genera gran movimiento interior en los planos profundos.
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ARAGONITA
- Eficaz reemplazo del Citrino (de menor potencial).

CALCITA
- Adecuada para tratamiento de limpieza y energización leve en personas o zonas en estado delicado o de
alta sensibilidad.

CITRINO
- Actúa como activador del cuerpo físico.
- Estabiliza el plano psicoemocional.

CORNALINA
- Gran capacidad de activación energética.

CRISOCOLA
- Estabilizante suave.
- Equilibrio en zona de garganta y cuello.

CUARZO AHUMADO
- Activa la capacidad de cambio.
- Purifica y estimula el centro raíz y, por lo tanto, moviliza las fuerzas primarias del cuerpo propiciando la toma
de conciencia en ese nivel.

CUARZO AZUL
- Tiende a enfriar y a estabilizar localmente.
- Calma.
- Buena capacidad de disociación de residuos contaminantes.

CUARZO HIALINO
- Disuelve bloqueos.
- Activa.
- Modulador de energía en todos los planos.

CUARZO ROSA
- Calma.
- Estabiliza.
- Estimulación leve.

CUARZO RUTILADO
- Estimula la fuerza vital.
- Disuelve congestiones y adherencias de bajo potencial.
- Alto poder de penetración en el campo.
- Elevado potencial vibratorio (usar con precaución).

CUARZO VERDE
- Equilibrante y Estabilizante.
- Favorece la desintoxicación local.
- Buena capacidad de absorción de bioplasma congestivo.

EPIDOTO o PERIDOTO
- Equilibrante.
- Apropiado para estabilizar plexo solar.

FELDESPATO
- Buena capacidad de absorción de residuos energéticos.
- Activación leve.

GRANATE
- Buena capacidad de Regeneración y Fortalecimiento.
- Calor y Activación local.
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- Gran poder de penetración (usar con precaución).

HEMATITE
- Similar al Granate pero de menor potencial.
- Propicia el arraigo en el plano físico.

JASPE ROJO
- Contribuye a limpiar y fortalecer los órganos que desintoxican la sangre (riñones, bazo, hígado).
- Absorción de bioplasma residual.
- Estimulación leve.

LAPISLÁZULI
- Estabilización y Profundización en frecuencias altas.
- Habitualmente se utiliza para propiciar la claridad mental y el discernimiento.

MALAQUITA
- Equilibrio local.
- Capacidad de absorción moderada.

OJO DE TIGRE
- Activador y Estabilizante del área pélvico bajo.

ÓNIX NEGRO
- Desbloqueante y/o Estabilizante del chakra raíz.
- Induce la conexión con el plano físico.

RODOCROSITA
- Activación local leve.

SODALITA
- Propicia la estabilidad y la calma en el plano mental.

TURMALINA NEGRA
- Absorción, Disolución y Drenaje de energía residual.

TURMALINA VERDE
- Equilibrio y Estabilidad local.
- Estimulación leve.

ÁGATA
- Estabilizante, en especial de la zona baja del cuerpo-conciencia.
- Fijación de la energía.
- En general, se usa de apoyo de otras piedras.

El Ágata es un muy buen estabilizador del área pélvico. Este efecto suele lograrse con los colores grises,
marrones, blanco lechoso. Ustedes harán sus experiencias.
Si bien hablo de estabilización, es una piedra que conviene usarla como apoyo de otras o de otra más
fuerte, ya que con sus propiedades de estabilidad e inalterabilidad pareciera que sacrifica capacidad de
penetración y movilización de energía. Si tuviera que hacer una comparación con una situación conocida,
diría que se trata de un tractor, el cual nos brinda su muy útil propiedad de fuerza, compensada por su
incapacidad de ofrecernos velocidad.
Otra de las capacidades, que tomo como secundaria, es la de trabajar con el arraigo de las energías. Es
frecuente observar el caso de personas cuyo sistema recibe sin impedimentos la energía transmitida pero
que es incapaz de retenerla. Las Ágatas pueden ayudar en el proceso de fijación de esa fuerza. De más está
decir que paralelo a esto debemos trabajar junto con la persona en el origen del problema que provoca la
expulsión del tan necesario fluido vital.
 45

AGUAMARINA
- Tiende a enfriar localmente.
- Efecto de estabilización leve.

Me refiero a las de color verde por ser las más frecuentes de encontrar debido a su precio, ya que las de
color azul con carácter de gema tienen un costo elevado, en especial las piezas usadas en tratamientos con
cristales que son de un tamaño considerable.
Es una variedad mineral que tiende a enfriar en todo el sentido del término. Las más transparentes logran
un efecto verdaderamente notorio en cualquier zona en la que sean aplicadas, no sólo en la región de la
garganta.
No es una piedra de espectaculares propiedades ni gran fuerza pero puede decirse que cumple su limitada
función de forma clara y precisa.
Si se desea aprovechar su propiedad de equilibrado junto con la de enfriado, las piezas a usar han de ser
de un tamaño importante y de un color parejo y definido. Caso contrario, el efecto se diluye.

AMATISTA
- Disminuye la agitación mental
- Contribuye al silencio interior
- Genera gran movimiento interior en los planos profundos.

Hablar de esta variedad de cuarzo me resulta realmente difícil. Se trata de un exponente de gran fuerza pero
sus propiedades son de difícil verificación cierta. Visto en detalle, pareciera que tiende a ocultarse y pasar
desapercibido como todos los realmente grandes.
Para comprender sus propiedades basta recordar la composición cromática de su color violeta: azul y rojo.
Estos colores nos indican una gran fuerza interior y profundidad (el azul), y otra gran fuerza en potencia (el
rojo). Habitualmente se clasifica a esta piedra dentro de la gama de los colores fríos olvidando su
componente roja. Otro dato interesante que habla de su tipo de influencia es que une en sí los dos extremos
del espectro cromático; asociemos esto a su amplitud de posibilidades y saquemos cada uno de nosotros las
conclusiones que se desprenden de la información que nos da ella misma.

ARAGONITA
- Eficaz reemplazo del Citrino (de menor potencial).

Ver propiedades del Citrino.

CALCITA
- Adecuada para tratamiento de limpieza y movilización leve de energía en personas o zonas en estado
delicado o de alta sensibilidad.

Es una piedra de uso poco frecuente ya que no posee gran fuerza ni propiedades claramente definidas. En
contraposición con esto, brinda utilidad en casos en que la persona o la región a tratar se encuentre en
estado delicado y, por lo tanto, requiera un cuidado especial.

CITRINO
- Actúa como activador del cuerpo físico.
- Estabiliza el plano psicoemocional.

Cuando nombro el citrino no me refiero a la Amatista quemada que se consigue habitualmente sino al
verdadero. De acuerdo con mi experiencia, el Citrino es una de las piedras de fuerza y efectos más
espectaculares.
Piedra de uso casi exclusivo en el plexo solar y la cabeza (región frontal; 6º chakra). Desde ahí pareciera
trabajar sobre todo el sistema; en realidad debe hacerlo ya que esta zona es el centro del equilibrio
psicocorporal. Si utilizamos un citrino en el plexo solar del tamaño, la pureza y la forma adecuadas, y
acertamos en la colocación exacta de la gema que pusimos en el 6º chakra (3er ojo), creo no exagerar si digo
que esto resolvería el porcentaje mayor de la sesión de gemas. Supongo que a esta altura deben saber que
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me estoy refiriendo a los dos centros mentales más importantes del cuerpo energético, y estabilizándolos y
activándolos adecuadamente luego de una limpieza, la persona tratada adquiere una claridad de
pensamiento y un estado de comprensión muy difícil de lograr por otros métodos indirectos o artificiales.
Luego de esta expansión psíquica, es de esperar una activación paralela del cuerpo físico y una consecuente
estabilización del emocional.

CORNALINA
- Gran capacidad de activación energética.

Es frecuente observar como se confunden en algunos casos las propiedades de las frecuencias y las
piedras rojas con las naranjas. Si bien las dos pertenecen básicamente a la familia de las activadoras y
cálidas, la diferencia a la hora del efecto es realmente notoria.
La Cornalina irradia en una biofrecuencia que favorece el movimiento energético en el cuerpo físico;
obviamente, lo hace por la vía de la inducción energética en el biocampo.
Esta piedra favorece el movimiento en dirección expansiva (excéntrica). A fin de evitar confusiones, quiero
dejar en claro un concepto que se ha propagado de manera absolutamente errónea: si un sistema humano
no posee BIOENERGíA propia las gemas no pueden transmitírsela. Las piedras pertenecen a otro reino
con características muy distintas de las humanas; por lo tanto, el intercambio de energía entre reinos no es
posible. Cada biosistema posee un metabolismo propio que toma, procesa, asimila y expulsa energía de
acuerdo con sus características naturales. No existe forma conocida de forzar a un organismo a incorporar
energía; mucho menos aún de otro reino. A modo de ejemplo gráfico, pueden imaginar a un ser humano al
que se le hiciese una transfusión de savia en lugar de sangre... Lo que trato de decir es que la Cornalina
puede estimular el movimiento de la energía humana propia en caso de que se encuentre patológicamente
detenida por encontrarse la función circulatoria parcialmente inhibida o infraactiva, pero sin agregar energía
extra al sistema de la persona tratada.

CRISOCOLA
- Estabilizante suave.
- Equilibrio en zona de garganta y cuello.

Es una piedra de efecto suave tal como sucede con sus primas hermanas la Malaquita y la Turquesa. Induce
a la estabilidad local. Con frecuencia se utiliza en la zona de la garganta. Mi experiencia es que también
puede extender sus efectos al cuello, incluyendo la zona cervical. De todos modos, no he verificado efectos
claros y precisos aún habiéndola utilizado durante mucho tiempo.

CUARZO AHUMADO
- Purifica y estimula el centro raíz y, por lo tanto, moviliza las fuerzas primarias del cuerpo propiciando la toma
de conciencia en ese nivel.
- Activa la capacidad de cambio.

Si en un caso hipotético tuviese que elegir tres piedras para formar un sintético equipo de trabajo, una de
estas sería el cuarzo ahumado sin lugar a dudas.
Para explicar las sensaciones que me llegan de esta variedad de cuarzo tendría que escribir varias páginas,
y con esto solo conseguiría impedir que ustedes lleguen a conocerlo por su propia experiencia, lo cual será,
sin duda alguna, de mayor utilidad que lo que yo pueda transmitirles por vía escrita con respecto a la mía.
De todos modos, voy a comentar lo que, de acuerdo con mi entender y experiencia, constituyen sus dos
propiedades más destacables y útiles.
Para ver claramente la utilidad de la primera, antes debemos comprender qué son las fuerzas primarias de
la conciencia y en qué punto nos encontramos nosotros y la persona a ser tratada.
Para hablar de los planos terrenales de la conciencia de ser basta recordar lo visto en los centros de
energía del biocampo (chakras). En todo el camino de la evolución tenemos mucho para aprende, hasta
llegar al estado en que seremos Uno con el Todo. En este momento de nuestra evolución personal
habitamos una estructura física y, por lo tanto, necesitamos de ella como vehículo especialmente diseñado
para adquirir las capacidades que aún no poseemos. Esta situación indica que el nivel evolutivo alcanzado
por nuestra conciencia de ser se encuentra en los primeros estadios. En estos primeros pasos hacia otros
niveles es lógico tener todavía muchas cosas que comprender y aceptar de nosotros y, por lo tanto, de
nuestra totalidad como seres completos. Aún en las personas con cuerpo físico y conciencia elevada es
 47

frecuente la sensación de desconcierto y duda, ya que si el estado de evolución fuese lo suficientemente

avanzado, no existirían estas dudas ni confusión... y tampoco cuerpo físico...
La primera propiedad del cuarzo ahumado es el intento de comprensión y elevación de nuestros planos
bajos. Cuando digo intento no me refiero, por supuesto, a una acción voluntaria de parte de estas piedras
sino a que su frecuencia de trabajo produce una movilización expansiva de la zona donde almacenamos,
comprimimos y olvidamos nuestra conciencia de las materias pendientes (parte baja aún no trabajada e
incorporada a la totalidad). De dicha movilización involuntaria se obtiene necesariamente una comprensión
(consciente o inconsciente) que estará de acuerdo con el estado evolutivo de la persona que la experimenta.
Paralelamente con esto, existe una segunda capacidad de actuación de esta piedra, que se relaciona con
los cambios. No hace falta ser un filósofo, ni siquiera un observador agudo de la vida para saber que sin
cambios, de cualquier índole que fuere, no puede existir vida, ya que esta es equilibrio dinámico, y el
dinamismo implica cambio permanente. Sin lugar a dudas, tales cambios son SIEMPRE hacia la evolución.
Para entender y aceptar estoicamente esta última afirmación, sí hace falta ser un observador agudo de la
vida y sus alrededores.
El Cuarzo Ahumado tiende a impulsar esos cambios por la vía de la primer propiedad enunciada: elevar los
planos bajos de la conciencia por medio del darse cuenta.
De acuerdo con mi experiencia y visión de las cosas, puedo decir que esta piedra ordena el proceso
evolutivo de la persona que se expone a su influencia. El grado y la velocidad con que esto suceda estará
sujeto a las posibilidades y al estado de la persona; pero en mayor o menor grado: algo va a suceder.

CUARZO AZUL
- Tiende a enfriar y a estabilizar localmente.
- Calma.
- Buena capacidad de disociación de residuos contaminantes.

El efecto de esta variedad de Cuarzo suele ser claro. Produce enfriamiento, detención y estabilización local.
El efecto resultante es de calma.
También suele disociar y absorber bioplasma congestivo de baja frecuencia, y de baja penetración y fijación
en el campo.

CUARZO HIALINO
- Modulador de energía en todos los planos.
- Disuelve bloqueos.
- Activa.

Al leer la primera propiedad del cuarzo pareciera tratarse de algo así como un comodín o la solución
energética para todo problema. Por supuesto que no es así; esto es sólo una forma de describir una piedra
de múltiples posibilidades y usos.
Siempre de acuerdo con mi humilde y escasa experiencia, he verificado que el cristal de Cuarzo ejerce una
función estabilizadora y vitalizante de forma leve pero constante y segura. Una vez más, las palabras
únicamente describen conceptos que pueden no ser interpretados por el receptor de la forma en que intenta
transmitirlos el emisor; pero no hay otro modo de hacerlo por medio de la palabra escrita.
Las piezas rodadas o facetadas pueden usarse confiablemente de acuerdo con las propiedades descriptas
y sin riesgo de alteraciones de consideración.
Los cristales en puntas naturales pueden emplearse de diversas maneras que abarcan desde la meditación
y la integración con ellos -a fin de recibir información por vía directa- hasta la remoción de bioplasma residual
adherido al biocampo. Otro uso frecuente es emplear su circulación natural para que cumplan la función de
dirigir la BIOENERGÍA humana dentro del campo de la manera en que la persona que los emplea crea
necesario desplazar. El empleo de esta última propiedad debe verse en detalle en sesiones de entrenamiento
guiadas.

CUARZO ROSA
- Calma.
- Estabiliza.
- Estimulación leve.

Estabiliza e induce al estado de calma junto con una leve pero clara estimulación de los procesos vitales.
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Existe una creencia generalizada según la cual la frecuencia cromática correspondiente al color rosa
corresponde al color verificable en los enamorados. Creo que debe tratarse de un error de interpretación de la
verdadera propiedad de esta piedra-color, ya que sólo está indirectamente relacionada con el amor en la
forma en que se expresa. Pero sí puede observarse en las personas poseedoras de vivacidad y dinamismo
adquiridos a fuerza de comprender los procesos vitales y la existencia terrestre en su forma más elevada.
Podríamos decir que la energía rosa es el agente de la vitalidad terrenal. Una movilización producida por
energía rosa equivale a una invitación a vivir conscientemente en estado de salud y aceptación de nuestra
condición actual, sea la que esta fuere.
La frecuencia transmitida por el cuarzo rosa no es penetrante pero sí puede decirse que es abarcante. Si
no logramos la suficiente apertura de conciencia, esta movilización no avanzará más allá de la superficie del
sistema y se hará necesaria una fuerza de penetración para vencer la resistencia a la profundización y hacer
llegar la vitalidad rosa a planos internos.

CUARZO RUTILADO
- Estimula la fuerza vital.
- Disuelve congestiones y adherencias de bajo potencial.
- Alto poder de penetración en el campo.
- Elevado potencial vibratorio (usar con precaución).

Sin lugar a dudas, es una de las piedras de mayor potencial vital y, como tal, debe usarse con precaución y
solamente luego de conocer con claridad su verdadero alcance. Puede utilizarse en todas las zonas del
cuerpo, siempre y cuando nos aseguremos que el poderoso efecto que produce es el que necesitamos para
esa región.
Posee una gran capacidad de estimulación de los procesos vitales y logra poner en movimiento gran
cantidad de energía. El cuidado recomendado en su uso estriba en que la movilización se efectúa no
solamente en la región del campo ubicada en la superficie del cuerpo físico sino también en la parte
intrasomática del cuerpo bioenergético.
No aliento ni recomiendo su uso en zona cardíaca ni en la región del 3er ojo (6º chakra).
Es muy apto para la disolución de congestiones energéticas que no requieran una intervención específica
tal como sucede en el caso de haberse detectado bloqueos del tipo larvas (ver detalle en el libro
BIOENERGÍA HUMANA – Gerardo Oyaregui).

CUARZO VERDE
- Equilibrante y Estabilizante.
- Favorece la desintoxicación local.
- Buena capacidad de absorción de bioplasma congestivo.

Junto con el Ágata, el Cuarzo Verde es una de las piedras de propiedades más sencillas y de resultados
más confiables.
No podemos esperar de él efectos espectaculares pero puede ser una segura herramienta de apoyo al
momento de equilibrar y estabilizar. Estas funciones mencionadas, de acuerdo a lo que he visto a lo largo de
los años, está relacionada con su capacidad de absorción de congestiones bioplásmicas. Puede resultar muy
útil en el caso de inflamaciones, para el trabajo local.
Por sus características naturales, es una piedra sin capacidad de movilización ni estimulación de ningún
tipo, así como tampoco posee capacidad de profundización. Por estas cualidades es que la considero una
piedra muy limitada, no como juicio de valor sino para definir claramente su alcance. De ahí que puede
usarse en cualquier parte del cuerpo sin riesgo alguno.
Recomiendo usar piezas grandes (del tamaño de una nuez grande como mínimo) ya que dada su
capacidad de absorción, es frecuente que luego de algunas sesiones quede totalmente impregnada de forma
irreversible. Si esto sucede, será inconfundible, pues su tonalidad variará del habitual verde vivo al verde
opaco, oscuro y pastoso: sin vida.

EPIDOTO o PERIDOTO
- Equilibrante.
- Apropiado para estabilizar plexo solar.

Tal como sucede en el caso de la mayoría de las piedras verdes, el Peridoto tiende a inducir la estabilidad
local. Puede ser utilizado sobre el plexo solar y zona hepática.
En algunos casos he verificado efectos sobre el sistema nervioso, produciendo calma y equilibrio.
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No he tenido oportunidad de investigar a fondo las capacidades de esta piedra pero creo que sus
posibilidades y su fuerza es mucho mayor que lo que conozco de ella.

FELDESPATO
- Buena capacidad de absorción de residuos energéticos.
- Activación leve.

Esta piedra posee una muy buena capacidad de absorber congestiones energéticas. El inconveniente es que
casi no es posible limpiarla. Luego de muy poco uso es notorio como cambia su color y su brillo hacia una
tonalidad más opaca y deslucida.
Las tonalidades rojizas producen un leve efecto de estimulación local junto con la propiedad de absorción.

GRANATE
- Buena capacidad de Regeneración y Fortalecimiento.
- Calor y Activación local.
- Gran poder de penetración (usar con precaución).

Me resulta en extremo dificultoso describir con precisión las propiedades del granate y del color rojo para
que el lector o el oyente no caiga en errores de interpretación.
Es habitual que se asocie el color rojo -y por extensión las piedras rojas- con la vitalidad y la fuerza. Esta es
una verdad parcial y generalmente se toma una parte de ella.
Puede comprobarse la sensación de estimulación que produce el rojo; pero una cosa es estimulación y
movimiento puntual, y otra cosa es vitalidad y adecuada circulación.
Si tuviese que graficar con palabras lo que acabo de describir, diría que el granate produce un efecto
interno de agitación energética. La particularidad de esto es la de movimiento en el lugar.
Dicho movimiento sin circulación puede ser sumamente útil en el caso de que se necesite poner en
actividad o „”espertar” una zona determinada para, posteriormente, incluirla en la circulación energética y en el
sistema.
Otra de sus ventajosas propiedades es que la frecuencia del granate es inalterable y la de mayor
penetración (como todos los rojos); suceda lo que suceda a su alrededor, el granate no se detendrá ni se
contaminará lo suficiente como para que sea inhibida su función.
Al no poseer fuerza expansiva, todo su potencial se concentra en un lugar puntua, trabajando con la
regeneración y el fortalecimiento local. Si debe utilizárselo en la zona cardíaca recomiendo extrema
precaución, minimizar su uso y limitarlo a casos en que se determine claramente la carencia de otro recurso.
En el caso mencionado, actuará localmente sobre el corazón y también sobre la sangre y su circulación; por
medio de esta, el efecto se trasladará a todo el cuerpo de forma atenuada.

HEMATITE
- Similar al Granate pero de menor potencial.
- Propicia el arraigo en el plano físico.

Cuando tengamos en nuestras manos una piedra de Hematite debemos olvidar su aspecto gris acerado y
verla con su verdadero color: el rojo. Una prueba para verificar esto consiste en rayar con él una superficie
clara; podremos observar que la marca que deja es roja.
Por características de su naturaleza y a pesar de ser una piedra roja, no posee la fuerza del granate. A
cambio de esto podemos contar con ella para obtener un suave efecto de estimulación roja.
Sabemos que existen personalidades o patologías caracterizadas por una tendencia a desplazar la
conciencia a la zona superior del sistema; la psicosomática sabiduría popular los llama “colgados”. Es un
simbolismo que define su estado de forma realmente gráfica y no deja lugar a mayores aclaraciones. Es
frecuente que estas personas muestren tendencia a salirse del cuerpo durante el transcurso de las sesiones
siguiendo su inclinación. El Hematite colabora en el proceso de retención en el cuerpo, a fin de arraigar
adecuadamente la experiencia del tratamiento y “bajar a tierra” la atención inconsciente desplazada hacia la
zona superior del sistema.
Puede usarse combinada alternativamente con el granate en tratamientos rojos a fin de suavizar la
influencia de este último pero manteniendo la línea trazada.
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JASPE ROJO
- Absorción de bioplasma residual.
- Estimulación leve.
- Contribuye a limpiar y fortalecer los órganos que desintoxican la sangre (riñones, bazo, hígado).

Si bien corresponde a la gama de los rojos, su tonalidad está atenuada y virada al color terracota.
Este representante de la gran familia del Cuarzo tiene dos propiedades que, por el hecho de encontrarse en
la misma piedra, la hacen interesante y sumamente útil en casos específicos. Estos dos atributos son: la
capacidad de absorción moderada y una suave estimulación.
Mi experiencia me lleva a utilizarla casi exclusivamente en el tratamiento del hígado y bazo; órganos estos
que se encuentran congestionados y sobreexigidos en la gran mayoría de las personas que he tratado.
Recordemos que son alimentados energéticamente por el plexo solar, por lo tanto, reciben directamente los
impactos de la tan característica tensión emocional típica de nuestra cultura racional y material.

LAPISLÁZULI
- Estabilización y Profundización en frecuencias altas.
- Habitualmente se utiliza para propiciar la claridad mental y el discernimiento.

Una de las piedras de la zona alta más utilizada desde siempre en el tratamiento con piedras.
Cuando hablamos de los colores de la parte alta del espectro debemos tener cuidado con las afirmaciones,
ya que a medida que la frecuencia aumenta se dificulta proporcionalmente la verificación cierta. La impresión
que me produce es como si se fueran aquietando y ocultando a la percepción. De todos modos, es una
sensación personal y, por lo tanto, subjetiva.
En principio y prudentemente podría decir que trabaja con la estabilización y claridad del plano mental
consciente. El índigo es el más frío de todos los colores y, de acuerdo con mi entender, se encuentra en el
extremo del espectro, ya que el violeta -que le sigue en secuencia- contiene azul y rojo y actuaría como nexo
entre el rojo (el más bajo de la escala) y el azul (el más alto de la escala).
Por sus características naturales trabaja induciendo la quietud y la profundidad, generando movimiento
interior hacia los planos altos de la conciencia.

MALAQUITA
- Capacidad de absorción moderada.

Una de las propiedades que le atribuyen a la Malaquita la gran mayoría de los que emplean piedras es la
capacidad de extracción de bioplasma congestivo. De acuerdo con mi experiencia, esta propiedad no es tal
ya que nunca pude verificar con certeza que esta piedra extrajera o llevara a la superficie algún tipo de
desequilibrio, congestión o cualquier otra forma de alteración, en los cientos de veces que lo he intentado. Sí
lo he logrado con otras piedras.
Lo que puedo atribuir con claridad a esta piedra es la capacidad de absorción y estabilización de manera
muy similar al cuarzo verde pero con la diferencia de no trabajar sólo en la superficie sino de profundizar más
con su efecto. Creo viable que se deba a esta facultad de penetración la capacidad de extracción que
frecuentemente se le atribuye.
Junto con la estabilización, podría decir que genera una ligera actividad interior de movimiento expansivo.
Es frecuente que se dañen irreversiblemente, situación no conveniente debido a su precio.

OJO DE TIGRE
- Activador y Estabilizante del área pélvico bajo.

No he podido corroborar con certeza ninguna propiedad muy definida del Ojo de Tigre, a pesar de ser otro
integrante de la gran familia del Cuarzo. Lo he utilizado en distintas zonas del campo y los mejores resultados
han sido la activación y la estabilización de la zona pélvica inferior. Recomiendo utilizarlo junto con otras
piedras de mayor potencia, tales como el Cuarzo Ahumado, el Cuarzo Rutilado, la Cornalina, el Granate, el
Cuarzo Hialino.

ÓNICE
- Desbloqueante y Estabilizante del chakra raíz.
- Induce la conexión con el plano físico.
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Esta variedad de Ágata es una piedra sin grandes propiedades pero de una solidez terrestre como he
comprobado en pocas.
Suelo usarla como compañera casi inseparable del Cuarzo Ahumado cuando me encuentro ante casos de
personas con poco contacto con la realidad. El negro Ónix colabora con el proceso de conexión de esas
psicoestructuras con la realidad física.
Esta piedra, aplicada adecuadamente, tiende a concientizar a estas personas y a mostrarles que necesitan
un puerto seguro a donde arribar para convertir sus experiencias preceptuales en material útil para su
evolución y para colaborar con el Camino del otro.
Su aporte en la estabilización de los planos bajos, y por consecuencia de la zona corporal baja, es de
fundamental importancia en un tratamiento de toma de conciencia terrenal.
Combinada con el Cuarzo Ahumado colabora con el fundamental proceso de mostrar a la persona que, de
vez en cuando es bueno detenerse a hacer una introspección objetiva acerca de nuestra manera de pensar y
de nuestra conducta para lograr una imagen clara de nosotros.

RODOCROSITA
- Activación local leve.

Es una de las piedras que uso casi con exclusividad en la zona cardíaca. No he podido comprobar
sólidamente su actuación en otras regiones a pesar de haberlo intentado.
Acostumbro emplearla luego de haber logrado una adecuada estabilización, en sesiones anteriores, con
Cuarzo Rosa. Pareciera que la Rodocrosita continúa el efecto comenzado por aquel.
De acuerdo con lo visto, activa y moviliza, vitalizando suave pero sólidamente la zona mencionada.
No es una de las piedras que uso con frecuencia, pero sí, ante casos específicos, el resultado expuesto es
claro.

SODALITA
- Propicia la estabilidad y la calma en el plano mental.

Cuando las circunstancias requieren el trabajo con la gama de los azul-índigo, he logrado determinar una
secuencia luego de muchas experiencias que me indica la gradualidad necesaria para que sea efectivo el
tratamiento del plano mental conciente (también utilizo estos colores en otras zonas, pero lo específico se
verifica en este plano).
En el caso de una persona con alguna de las afecciones producidas por sobrecarga del intelecto
consciente, tan típicas de la cultura latina, la primer piedra utilizada es la Sodalita.
Como en todo lo que se trate de primeros auxilios, no podemos pedirle más de lo que puede dar por la
función para la que fue creado. La Sodalita cumple inmejorablemente con esta finalidad.
Es una piedra que no logra la penetración necesaria para una comprensión profunda, pero en cambio,
consigue inducir a la persona a que dé el primer paso hacia la calma del plano mental consciente. El proceso
mencionado es fundamental para poder continuar el trabajo con mayor profundidad.

TURMALINA NEGRA
- Absorción, Disolución y Drenaje de energía residual.

Esta es otra de las piedras a las que se le han atribuido las más diversas propiedades.
Es claro y verificable para las personas que manejan técnicas de comprobación del sistema energético
ANTES y DESPUÉS de la sesión, que la Turmalina negra colabora eficientemente en la resolución de
residuos o cúmulos energéticos adheridos.
Por lo general, la parte menor de la materia de deshecho mencionada es absorbida por ella, en tanto otra
cantidad mayor es movilizada haciéndola circular por las estrías características.
El tamaño de las piedras a usar debe ser importante y estar de acuerdo con la zona a tratar y con la
cantidad de materia bioplásmica que va a ser drenada. Cuando digo importante me refiero a un tamaño
promedio aproximado, comparable al dedo pulgar de un adulto de 70 kg. En caso de usarlas en zonas de
profuso drenaje natural del cuerpo, tal como, por ejemplo, la región del pubis, el tamaño no deberá ser inferior
a una varilla de un largo de 6 cm. por un diámetro de 3 cm.
Siempre me refiero a varillas estriadas y no a piedras rodadas o pulidas.

TURMALINA VERDE
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- Equilibrio y Estabilidad local.

- Estimulación leve.

En esta variedad de Turmalina se combinan varias propiedades. La principal es la de los verdes con su
habitual característica de equilibrado. La gran diferencia de esta piedra con otras es la frecuencia en la que
vibra. Si bien trabaja con la estabilización, logra este efecto en planos más altos que sus verdes compañeros.
No puede pedírsele capacidad de absorción bioplásmica pero sí un alto poder de penetración y fijación del
equilibrio logrado. Paralelo a esto, por medio de sus estrías logra una adecuada y suave estimulación,
expansión y movimiento de la zona tratada.
Es la piedra que uso para cicatrización energética después de intervenciones específicas.

DESARROLLO DEL PRACTICANTE

GENERALIDADES

Lo primero que quiero es reiterar una advertencia, debido a la superficialidad con que en muchos casos se
aborda el trabajo con BIOENERGÍA.

No jueguen a ser sanadores.

Corren el riesgo de manipular fuerzas
que, una vez puestas en movimiento,
no podrán controlar sus efectos.
Tengan discernimiento y prudencia.

Vamos a intentar llegar a un estado de mayor profundidad de conciencia para conectarnos con el núcleo de
nuestro ser y así emplear las capacidades latentes de percepción superior que posee todo ser humano.
Cuando se amplia la percepción y aumenta la sensibilidad, la habitual visión de la realidad deja de ser la
misma y comenzamos a ver un mundo absolutamente distinto del habitual. Esta sensación es uno de los
indicadores del Camino hacia nosotros como totalidad.
Al trabajar con BIOENERGÍA se hacen necesarios cambios interiores que desarrollen la sensibilidad y la
atención para poder manejarnos con los parámetros adecuados en este nuevo estado.
Durante el entrenamiento es natural que cada cual desarrolle un modo (o más de uno) distinto de percepción:
ver, oír, palpar, oler, certezas. Estas diferencias se deben a las distintas naturalezas intrínsecas de los seres
humanos.
Recordemos que la conciencia más desarrollada está siempre asociada con frecuencias y niveles
energéticos más altos, por lo tanto, los resultados que podamos obtener estarán directamente de acuerdo
con dicho estado del ser.

CUIDADOS PERSONALES

Recordemos que para lograr un efecto profundo y duradero en todos los niveles que constituyen la totalidad
del ser humano, el estado de conciencia (evolutivo), el nivel de purificación psicofísico, la claridad interior y la
quietud exterior del terapeuta han de ser superiores al de la persona tratada ya que nadie puede transmitir
aquello que no posee en la propia conciencia.

Limpieza áurica

Es inevitable el hecho de que tengamos en nuestro campo residuos energéticos provenientes del exterior,
generados por la propia combustión del sistema o por nuestros problemas de vida. Teniendo esto en cuenta,
trataremos de minimizar las adherencias registradas a un punto que nos permita el bienestar personal y un
estado adecuado para poder actuar sobre otros seres sin que exista el riesgo de una transmisión impropia.
Uno de los principales motivos es la gran concentración de polución bioplásmica en las grandes ciudades.
Algunas medidas que deben observarse para mantener el campo en condiciones son:

 Baños prolongados: en lo posible de inmersión.

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 Contacto con la naturaleza: no olvidemos que el circuito energético humano posee la principal descarga
hacia el plano Tierra y no puede ser reemplazado por ningún medio artificial.

 Descanso suficiente: el agotamiento por auto-sobreexigencia es uno de los factores de desgaste más
comunes en nuestra opresiva cultura.

 Ejercicio: tal como sucede con todos los planos que conforman el sistema humano, este necesita de la
adecuada movilidad que su naturaleza requiere para mantener el estado básico de salud.

 Respiración profunda: hemos visto ya la importancia de una respiración correcta.

 Protección con piedras: es un método que debe utilizarse solamente como refuerzo y apoyo de los ya
descriptos y en ningún caso como sustituto.

Respiración

Recordemos la importancia de la actividad respiratoria: no sólo tiene la función del intercambio de gases
necesario para nuestro metabolismo físico sino también la de toma y eliminación de energía de desecho.
Cuando se la usa de manera especializada nos conduce a estados superiores de conciencia.
Una adecuada respiración debe tener en cuenta las siguientes variables:

 Profundidad necesaria (restringida habitualmente para controlar las emociones).

 Ritmo adecuado.
 Aire puro y rico energéticamente (lugares naturales).

Alimentación

Igual que sucede con la respiración, la alimentación no cumple sólo una función física sino que aporta
energía vital al sistema.

 La pauta más importante es: coma cuando se lo pida el cuerpo y no el reloj.

 Regule la cantidad de alimentos: no coma por gusto sino por necesidad.

 Concédase suficiente tiempo para comer.

 No se enajene con medios externos (TV, conversación, música, lectura, problemas). Preste atención a su
comida. Disfrute de alimentarse.

 Mastique los alimentos hasta disolverlos.

 Elimine de su dieta los alimentos que contengan conservantes o aditivos.

 Mantenga su dieta baja en: grasas, colesterol, azúcar, sal, lácteos y derivados, ácidos, estimulantes.

 No beba durante la comida (diluirá los jugos gástricos y entorpecerá la digestión).

 No ingiera vitaminas y minerales elaborados. Si sigue una dieta equilibrada no necesitará de este recurso.

 Y en todos los casos, tengamos en cuenta que el tipo de alimentación adecuado depende exclusivamente
de su biotipo.

Acostúmbrese a escuchar lo que necesita su cuerpo.

Aliméntelo con responsabilidad y sentido común.

Lo que entra por su boca

pasa a formar parte de su futuro.

Descanso

Arregle sus actividades de manera que pueda descansar cuando el cuerpo se lo pida y durante el tiempo
necesario.
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Espacios y objetos

Los espacios, especialmente los interiores, acumulan las radiaciones bioplásmicas emitidas por los seres
humanos de acuerdo con las actividades, emociones, e intensidad de estas, sean beneficiosas o
perjudiciales.
Los objetos poseen la radiación natural del material que los constituye, la de la persona que los manipuló de
alguna manera, la que sus poseedores depositaron en ellos y la de los lugares por los que pasaron.
Un recinto con gran cantidad de objetos acumula gran cantidad de bioplasma residual. Tenga sólo lo
indispensable para la vida sana. Lo realmente valioso y definitivo se lleva adentro. Tenga siempre en cuenta
que una casa-museo no es saludable aunque contenga objetos confeccionados con materiales naturales.

Sentimientos

No aferrarse a sentimientos negativos. Cuidarse de relaciones enfermas, cualquiera sea el origen. Debe
determinarse con precisión si la relación es enferma o nos produce incomodidad por estar reflejando los
puntos débiles nuestros que habitualmente negamos. Todos tenemos tendencia a escapar de aquel que
pone el espejo frente a nosotros.

Tenga en cuenta que los sentimientos negativos

llevan asociada una emoción que se acumula
como un registro perjudicial para el poseedor.

Pensamientos

No reprimir u ocultar pensamientos negativos para autoconvencernos de su inexistencia. En su lugar, eliminar

el motivo que los produce.

Tenga en cuenta que la mayoría

de los pensamientos negativos
llevan asociada una emoción que se acumula como
un registro perjudicial para el poseedor.

Deseos

¿Qué deseo de mi vida?

Hay seres que dedican su vida a la obtención de dinero, confort, seguridad material, aceptación social,
entretenimientos vacíos, sin importarles cuánto tiempo de su limitada vida ocupen en eso. Hay seres que
dedican su vida a elevar el estado de conciencia de la raza humana.
En medio de ambos extremos evolutivos hay una inmensa cantidad de estados intermedios.

El tipo de efecto que ejercerá su estado

sobre su cuerpo-vida dependerá
del punto en que usted se ubique dentro de la escala.

PREGUNTAS SOBRE NUESTRA VIDA

A fin de intentar una síntesis de los motivos habituales de nuestra incomodidad vital y, por lo tanto, de
nuestras enfermedades más comunes, he confeccionado una muy sencilla lista de preguntas que estimo
conveniente hacerse frente al espejo y mirándonos a los ojos. Esta lista tiene la finalidad de servir de
primeros auxilios de vida para cada uno de nosotros.
Por supuesto, cada cual puede y debe agregarle otras que se desprenderán de la experiencia personal.

PLANO FÍSICO
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Alimentación
 ¿Me alimento adecuadamente o satisfago mi apetito con cualquier cosa que tengo cerca?
 ¿Presto atención a lo que necesita mi cuerpo o me alimento de acuerdo con las costumbres adquiridas?
 ¿Como por necesidad o cuando es la hora predeterminada?
 ¿Dejo de comer cuando mi cuerpo lo indica o termino todo lo servido?
 ¿Cómo por necesidad o por placer?
 ¿Soy realmente consciente que una parte de lo que entra por mi boca pasa a formar parte de mi cuerpo?
 Si no conozco el detalle de una dieta adecuada para mi: ¿consulto a un especialista y sigo sus
indicaciones?
 ¿Tengo constancia en mis determinaciones de progreso y salud personal o me estoy engañando?

Descanso
 ¿Me retiro a descansar cuando mi cuerpo lo pide o cuando es la hora predeterminada?
 ¿Me despierto cuando mi cuerpo lo decide o cuando lo indican mis auto-obligaciones?
 ¿Recurro a sustancias para dormir artificialmente o permito a la Naturaleza hacer su trabajo?
 Si mi sueño esta alterado: ¿busco el motivo o trato de eliminar el síntoma?

Respiración
 ¿Soy consciente de la importancia de esta función vital de la que no podemos prescindir más que algunos
minutos?
 ¿Qué calidad de aire respiro?
 ¿Con qué frecuencia busco aire limpio?
 ¿Soy consciente de lo que se respira en una ciudad?
 ¿Mi respiración es profunda o simplemente cumple la mínima función indispensable para mantenerme
vivo?
 ¿Estoy informado de que las disciplinas profundas asocian la respiración con los estados de conciencia y
realidad?

Ejercicio
 ¿Le doy a mi cuerpo físico una adecuada movilidad o me dejo llevar por el sedentarismo?

Estímulos externos
 ¿Vivo en condiciones sonoras adecuadas o me acostumbré a los ruidos y “ya no me molestan”?
 ¿Vivo con toda la atención dirigida hacia el mundo exterior o dedico algunas horas por día a centrarme en
mi conciencia de ser?

Vestimenta
 ¿Soy consciente de que la ropa es el segundo envoltorio de la vida en orden de importancia?
 ¿Estoy informado de que está comprobado que los materiales y los colores influyen en los seres vivos?
 ¿Me visto por moda socialmente aceptada y gusto personal o por salud vital?

Ambientes
 ¿Estoy informado de la influencia que ejercen los ambientes y los objetos sobre la salud humana
(Bioarquitectura)?
 ¿Conozco la importancia que las energías terrestres tienen sobre la salud corporal (Geobiología)?
 ¿Mi vivienda esta orientada, iluminada y ventilada adecuadamente o vivo en una casa antivida?
 ¿Vivo rodeado de adornos que ya no veo a causa de la costumbre o mi hábitat tiene lo indispensable para
la vida sana?

Ocupaciones
 ¿Me dedico el tiempo que necesito o estoy en movimiento hasta agotarme para ser una persona activa
socialmente aceptada y admirada de acuerdo con la obsoleta y nociva creencia de que la salud es
movimiento físico y el que se aparta de esta estructura está enfermo o es un vago?
 ¿Trabajo una cantidad de horas adecuadas para proveerme lo necesario para la subsistencia básica o
dedico casi todo mi día a ganar dinero que no puedo disfrutar por vivir en un estado de agotamiento y
confusión?
 ¿Soy consciente de mis gastos o malgasto en cosas superfluas dejándome llevar por la publicidad que
alienta el consumismo vacío?
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PLANO MENTAL

Consciente
 ¿Vivo pensando y haciendo un culto del intelecto y la memoria?
 ¿Vivo pensando o ya descubrí otras funciones más profundas y más acordes con el núcleo del ser?
 ¿Le doy el lugar que le corresponden por Naturaleza al pensar, al sentir y al percibir?
 ¿Guío mi vida por lo que determino con el impreciso y limitado plano mental consciente?
 Aunque mi vida no funcione y sobrevenga la enfermedad: ¿sigo negando y justificando mi conducta?
 ¿Alguna vez se me ocurrió pensar que mi vida puede andar mal por exclusiva causa mía y no por causa
de los otros?

Inconsciente
 ¿Escucho los mensajes que me llegan desde este plano en forma de sueños, certezas, intuiciones,
pálpitos?
 ¿Considero esta zona de mi ser profundo como algo incierto y de importancia y utilidad relativa?
 ¿Me dejo llevar por mi ser interno o voy en contra de la realidad, siguiendo lo que creo cierto (mis ideas)?

PLANO EMOCIONAL

Entorno social
 ¿Cómo me siento en la calle?
 ¿Qué siento con la gente en el entorno de mis ocupaciones habituales?
 ¿Estoy conforme con mis ocupaciones habituales?
 Si no estoy de acuerdo con mi trabajo o la gente que me rodea: ¿Qué hago por cambiar mi situación?

Entorno familiar
 ¿Mi actitud es integradora o trato de ganar las discusiones?
 A los que no están de acuerdo con mis ideas ¿los veo cómo maestros o cómo rivales?
 ¿Escucho las necesidades ajenas o trato de imponer mi forma de pensar (que opino es lo único correcto y
sano)?
 ¿Cómo me ven los demás, en especial los que más me conocen?
 ¿Qué reclamos me hacen?
 ¿Acepto los reclamos de los demás o niego y justifico mi conducta como si los otros viviesen
equivocados?
 ¿Soy consciente de que el hecho de tener buena voluntad no implica necesariamente eficiencia ni
sabiduría?

Entorno personal
 ¿Conozco realmente mis emociones?
 ¿Estoy viviendo como elegí?
 ¿Qué emoción me produciría si alguien me dijese INCONSCIENTE? (No debería molestarme; es la
condición humana mayoritaria)

PLANO SENTIMENTAL

Entorno social
 ¿Amo a TODA la raza humana o sólo a los que me agradan?
 ¿Me comprometo ayudando sin dudar o no me meto y sigo viviendo tranquilo?
 ¿Mi amor puedo verlo diariamente en la práctica o es sólo teórico?

Entorno familiar
 ¿Mi amor es incondicional o lo uso para lograr mis objetivos (manipulación)?
 ¿Retiro mi amor cuando me contradicen o cuando los demás no hacen lo que yo quiero?
 ¿Utilizo el amor de los otros hacia mí para especular, adoptando una postura lastimosa y desvalida?
 ¿Mi pareja es realmente pareja o las ideas, sentimientos y metas son desparejas?
 ¿Mi matrimonio es digno de ser considerado como tal o “prefiero no pensar...”?
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Entorno personal
 ¿Cuánto hace que no vibro realmente con un sentimiento? (no con una emoción).
 ¿Utilizo las emociones para intentar suplir mi falta de sentimientos profundos?
 ¿Me considero honesto y digno cuando estoy solo frente al espejo?
 ¿Puedo mirarme a los ojos en el espejo durante algunos minutos o me produce una incomodidad incierta?

PRÁCTICA

EJERCICIOS DE ENTRENAMIENTO

Los ejercicios que se detallan a continuación están diseñados para practicarse en la secuencia indicada y, en
la mayoría de los casos, con la orientación y la supervisión correspondiente de una persona que conozca y
tenga suficiente experiencia en el sistema planteado. Caso contrario, los resultados no producirán más que
efectos superficiales y temporarios.

RESPIRACIÓN

En nuestra cultura, la respiración es una de las funciones que, por lo general, más descuidamos.
Paradójicamente, es una de las que más dependemos y de la que tenemos asombrosamente poca
autonomía comparada con las otras necesidades vitales: unos pocos segundos sin respirar terminan con la
vida del cuerpo físico.
La respiración no sólo está estrechamente ligada al metabolismo físico y energético sino también a nuestro
estado de conciencia. Esto lo podemos ver en cualquiera de las grandes líneas de conocimiento
(Chamanismo, Sufismo, Zen o Yoga).
Tal como sucede en todo proceso corporal, la respiración debe seguir un ritmo: un biorritmo.
Por lo común, nuestra forma de respirar -a causa de una enorme cantidad de factores internos y externos- es
sólo un lejano reflejo de lo que debiera ser. La mayoría de nosotros respiramos de manera mecánica,
irregular y superficial, ignorando las necesidades profundas del cuerpo. Es fácilmente observable cómo el
hombre mayoritario vive entretenido con los procesos del mundo y en estado de agitación psicoemocional
permanente.
Lo primero que vamos a intentar es respirar de forma regular. Regularizando y teniendo conciencia de la
respiración podremos comenzar a poner en orden y a desarrollar nuestros procesos energéticos y, en
consecuencia, los corporales.
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La correcta respiración con sus infinitas variantes se convertirá en una poderosa herramienta para momentos
de tensión emocional, cansancio físico, agotamiento y confusión mental, falta de energía general o localizada,
como ayuda en la eliminación de residuos bioplásmicos y para una serie innumerable de aplicaciones que irá
descubriendo cada uno de ustedes.
Es la función corporal que brinda los resultados más notorios, más útiles y más placenteros en muy poco
tiempo. La función de la respiración es una de las más complejas del cuerpo debido a la diversidad de
cometidos que cumple:

 ALIMENTACIÓN: Aporta el oxígeno necesario para nuestro metabolismo físico.

 CARGA ENERGÉTICA: Junto con el aire, absorbemos BIOENERGÍA de la atmósfera.
 LIMPIEZA ENERGÉTICA: En la exhalación eliminamos desechos de la combustión energética del cuerpo.
 NIVELES DE CONCIENCIA: Utilizada de manera especializada accedemos por su intermedio a otros
estados de percepción.

Práctica

Tengamos en cuenta para todos los ejercicios de respiración, atención y sensibilidad, que ha de mantenerse
la columna vertebral derecha pero sin forzar la posición.
El ambiente donde se desarrollarán será silencioso y tranquilo, prescindiendo, en la medida de lo posible, de
estímulos artificiales como los ya citados (música, aromas, luces).

 1- NORMALMENTE: Comenzamos, simplemente, prestando atención a la respiración.

Este ejercicio de apariencia trivial nos va a mostrar cuan irregular y superficial es dicha función en la
mayoría de nosotros, y ayudará a conectarnos con ella conscientemente.
Nos mantenemos en esta actitud no menos de 3 minutos.

 2- UN POCO MÁS PROFUNDO: Sin perder la atención y después del paso anterior, profundizamos suave
y levemente la inspiración.
Prolongamos este estado por 3 minutos.

 3- AUMENTAR LA PROFUNDIDAD: Sin forzarnos, aumentamos un poco la profundidad de la inhalación.

El ritmo es lento, profundo y dentro de lo natural. Es fundamental no perder la atención.
La duración será de 2 minutos.

 4- SEGUIR EL RECORRIDO: En esta parte, seguimos con nuestra atención el recorrido del aire que entra
y el del aire que sale.
El tiempo de este ejercicio no superará los 2 minutos.

En este punto descansamos el tiempo necesario. En los comienzos del entrenamiento podemos suspender
aquí los ejercicios de respiración hasta que con la práctica estemos capacitados para continuar con los
siguientes.

 PROFUNDA Y LENTAMENTE: Continuando desde el estado anterior, sentimos que el aire inunda nuestra
cabeza. Esta sensación no debe imaginarse ni visualizarse ya que el ejercicio dejaría de tener sentido. La
idea es percibir cómo algo similar al aire inspirado nos inunda literalmente la cabeza. Si efectuamos el
procedimiento adecuadamente, lo que sentiremos podría describirse como si la cabeza se convirtiera en
un globo que es llenado por un leve cosquilleo o presión proveniente del aire inhalado.
Una vez obtenido tal estado, llevamos lentamente la
atención a la columna vertebral y percibimos cómo la
sensación anteriormente registrada baja por ella durante
la faz respiratoria correspondiente a la inspiración,
haciéndose difusa o desapareciendo temporalmente
durante el período exhalatorio.
Luego nos llena como si fuésemos una bolsa.

 PROFUNDA Y LENTAMENTE diez veces: Inspiramos con la mayor profundidad posible pero sin forzarnos
en exceso; siempre dentro de la comodidad natural. Luego de cada inhalación procederemos a exhalar
con fuerza. Esto último se hará en forma de un único soplido fuerte por la boca. Repetiremos esta
maniobra comenzando por tres veces y aumentando el número en los sucesivos días hasta llegar a diez.
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Terminada la secuencia, nos quedamos respirando a nuestro ritmo natural, con los ojos cerrados, durante
el tiempo que nuestro cuerpo lo considere necesario.

SILENCIO INTERIOR

Habitualmente, vivimos conectados con el exterior, dedicando poca atención a nuestro ser interior.
Mostramos dificultades para estar solos en paz, disfrutando de nuestro ser. Tendemos a resolver todo con la
razón y a vivir profundamente identificados con ella y con nuestro cuerpo.
Al momento que decidamos trabajar o simplemente acercarnos a la modulación de BIOENERGíA,
necesitaremos aprender a desplazar nuestra atención del mundo circundante al interior de nuestro ser. La
introspección requerida consiste en llegar a una parte más profunda de nosotros y, como consecuencia,
también veremos el entorno de manera distinta. Ya no estaremos conectados solamente de manera
superficial con el ruido externo y con nuestro cuerpo sino que la nueva sensación general podría describirse
como de estar más completos y percibir las cosas desde una perspectiva más profunda y amplia.
Esta atención interior puede lograrse con innumerables técnicas de respiración y relajación. Elijan la más
apropiada para ustedes. Lo importante es llegar a un estado de conciencia ampliado, desconectando o
minimizando temporariamente los sentidos que nos atan al mundo exterior.
Los efectos de la práctica y el conocimiento de este nuevo estado serán: mayor conocimiento y control de
nosotros (físico e interno), paz interior, comienzo de conexión con el conocimiento profundo, y una manera de
asimilar información que por los medios habituales no sería posible comprender y, por lo tanto, aprovechar.
Es importante que la práctica que elijan se centre en el SILENCIO INTERIOR. Cualquier tipo de intención,
idea, deseo o visualización dejaría automáticamente sin efecto el ejercicio, por lo menos para los fines de
nuestra práctica. La verdadera y única meditación es sinónimo directo de SILENCIO INTERIOR; desde otra
actitud conseguiremos tal vez otros resultados, pero nunca la conexión profunda necesaria e indispensable
para ser aptos y eficientes en el trabajo integrativo del ser.
Si tuviera que sugerir un ejercicio les propondría que se ubiquen en un lugar cómodo y silencioso para
comenzar a buscar el silencio. Luego de un poco de práctica cualquier sitio puede ser apto.

ATENCIÓN

Habitualmente, y dadas las características del entorno que habitamos, nuestra atención es algo sumamente
inestable y superficial. No conocemos prácticamente nada de la forma adecuada de manejar esta poderosa
herramienta humana. Creo conveniente aclarar que, cuando hablo de la atención no me refiero solamente
plano mental consciente ya que en la verdadera atención participa toda la conciencia de ser. Es imposible
transmitir esto mediante teoría pues se trata de desarrollo interior y de percepción, pero sí es posible inducir
su adquisición por medio de ejercicios.
La importancia de conocer y manejar la atención es suprema porque a partir de ésta se establece conexión y
control energético. Allí donde se dirija nuestra atención, allí irá una parte de nuestra BIOENERGÍA.
Si centramos adecuadamente la atención en alguna parte de nuestro cuerpo, la energía se dirigirá hacia esa
zona y la saturará. No me refiero a saturar en forma nociva, por supuesto, sino que esa parte se inundará
temporalmente de vitalidad.
La atención básica es pensamiento localizado. La atención especializada es el yo completo dirigido y
concentrado en una parte específica.
Para dirigir-concentrar la atención es fundamental estar relajado y respirando libre, natural, y profundamente.
Si partimos de la premisa que por medio de esta técnica dirigimos el flujo bioenergético a alguna zona del
propio cuerpo, es lógico inferir que también podemos direccionar nuestra atención fuera del cuerpo físico con
la consecuente proyección de la energía. En este caso debemos detenernos a hacer algunos razonamientos
de acuerdo con las leyes enunciadas sobre la BIOENERGÍA.
Si algo o alguien es destinatario de nuestra atención y, por lo tanto, de la energía vital asociada, es obvio que
se establece un vínculo en el plano correspondiente, ya que si no existiese enlace de algún tipo y por algún
medio no habría posibilidad de transmisión. Ahora bien, si recordamos que la energía circula de puntos de
mayor a puntos de menor potencial, surge inevitablemente una pregunta: ¿qué sucede en caso de que el
sistema receptor posea mayor potencial bioenergético que la fuente emisora? Creo que la respuesta es
evidente: la transferencia se efectuaría en sentido inverso, o sea, de la fuente que recibe nuestra atención-
energía hacia nosotros.
Si el receptor de este enlace fuese un objeto con menor potencial que nuestro campo, la situación no
revestiría mayor importancia. Pero, ¿qué sucedería si el objeto nos superase en valor cuántico? Sería dable
suponer que recibiríamos una parte de la carga acumulada por el objeto en cuestión produciéndose efectos
 60

que dependerían de las variables conocidas para la influencia energética. Lo mismo sucedería en la
vinculación con un sistema orgánico.
De acuerdo con lo expuesto, acostumbro a decir en los seminarios, que el flujo energético resultante de la
conexión puede circular en ambos sentidos, teniendo siempre en cuenta que la dirección del movimiento
dependerá del potencial energético de las partes, ya que siempre circulará de zonas de mayor a zonas de
menor potencial.

Por éste y otros motivos se debe tener

especial cuidado al dirigir la atención.

Práctica
Básica

Uno de los ejercicios más sencillos, claros y efectivos, tanto para entrenarnos como para verificar lo
expuesto, consiste en trabajar con la atención dirigida a las manos.

 1- Haremos los puntos -1- y -2- de la práctica de respiración.

 2- Hecho esto, desplazamos la atención a nuestra mano más sensible que estará ubicada en la misma
posición en que la usamos para dar la mano en calidad de saludo.

 3- Pasados algunos segundos, percibiremos distintas sensaciones tales como latidos, cosquilleo, aumento
de la temperatura local, presión. Todo esto y aun otros efectos son el producto de la concentración de
BIOENERGÍA ya mencionada.

 4- Luego de sentir con claridad este estado durante algunos minutos, sacudimos la mano y procedemos a
descansar.

 5- Repetimos el ejercicio con las dos manos en la misma posición anterior, enfrentadas a una distancia
correspondiente al ancho de nuestros hombros aproximadamente.

 6- Logrado esto procedemos como en el punto -4- y descansamos por un lapso más prolongado.

Avanzada

El procedimiento es similar al seguido con las manos. Lo que convierte en avanzada a esta práctica es la
importancia y las funciones de las zonas intervinientes.
Recomiendo prestar atención a las sensaciones registradas y suspender la práctica en caso de aparecer
efectos molestos. Vuelvo a recomendar el hecho de no ejecutar estos ejercicios sin la supervisión y la guía
adecuadas.

 1- Haremos los puntos -1- y -2- de la práctica de respiración.

 2- Dirigiremos la atención a los latidos cardíacos hasta percibirlos con claridad. Siempre procediendo con
precaución, podremos sentir el ritmo del corazón en todo el cuerpo.

 3- Tomamos un prolongado descanso; tanto como indique el cuerpo, incluyendo el hecho de no seguir
adelante con los demás puntos.

 4- Retomamos nuestra atención y la dirigimos a la zona abdominal durante el tiempo que nuestro sistema
pueda mantenerla con comodidad.

 5- Idem punto -3-.

 6- Para finalizar, hacemos lo mismo pero direccionando la atención al centro de nuestra frente.

 7- Nos retiramos a descansar por el tiempo necesario y no retomamos la práctica de la atención hasta el
día siguiente, ya que nuestro sistema necesita un tiempo de metabolización del entrenamiento efectuado.
Este proceso de asentamiento de lo practicado es similar al necesario en los casos de ejercicios
orientados al cuerpo físico.
 61

SENSIBILIDAD

Las manos son órganos extraordinariamente sensibles y pueden ser utilizadas como sensores de campos
energéticos. Una muy pequeña experiencia la pudimos vivenciar en los ejercicios de atención.
Sin ser necesarios dones congénitos -como se cree en muchos casos- y con un entrenamiento mínimo,
todos podemos hacer uso de esta propiedad de los organismos vivos.
Los ejercicios descriptos son conocidos y de uso frecuente en entrenamientos similares por poseer la
particularidad de ser sencillos y efectivos.

Mano-Mano

 1- Haremos los puntos -1- y -2- de la práctica de respiración buscando un estado de alta sensibilidad y
silencio interior.

 2- Llevamos la atención a ambas manos enfrentadas por las palmas a 20 cm. aproximadamente, como
ejecutando el acto de sostener una pelota deportiva grande.

 3- Siempre manteniendo la concentración en las manos y el estado de silencio interior, procedemos a ir

acercando ambas hasta percibir cierta presión y dificultad para unirlas.

 4- Lo que percibimos -si es que logramos sintonizar la actitud (frecuencia) adecuada- son las capas más
densas de nuestro campo electrodinámico.

 5- Pasados 2 o 3 minutos sacudimos las manos y descansamos lo necesario.

Mano-Cara

 1- Repetimos los pasos -1- y -2- de la práctica de respiración y buscamos un estado de silencio interior.

 2- Llevamos la atención a ambas manos enfrentadas por las palmas a 20 cm. aproximadamente, como
ejecutando el acto de sostener una pelota deportiva grande.

 3- Logrado el estado requerido, acercamos ambas manos a nuestra cara a no menos de 10 cm.

 4- Prestamos atención a las percepciones registradas que corresponden al campo energético de la zona
de la cara, sin perder silencio interior.

 5- Pasados algunos minutos procedemos como en casos anteriores: sacudimos las manos y dejamos
descansar nuestro sistema.

Con otra persona

Podemos hacer estos mismos ejercicios ayudados y complementando la práctica con otra persona. Siempre
respetando los pasos previos, ambos participantes acercaríamos nuestras manos a las manos del otro
practicante enfrentando las palmas; luego las manos a su cara.
En caso de hacer los ejercicios en grupo, es fundamental intercambiar los mismos papeles ejecutados a fin
de cotejar sensaciones.

Cortando

Una de las formas más convincentes a modo de verificación y práctica es el hecho de interferir en el campo
bioplásmico de otro ser humano.

 1- Idem casos anteriores, prestando especial atención al estado de silencio interno.

 2- Uno de los participantes adopta la posición de palmas enfrentadas “sosteniendo la pelota”.

 3- El otro sensibiliza una de las manos (la más usada).

 62

 4- Estando ambos en el estado adecuado, la persona que está trabajando con una mano procede a
desplazarla en forma ascendente y descendente por entre las manos enfrentadas de su compañero sin
establecer contacto físico. La maniobra sería la de cortar la supuesta pelota por el medio.

 5- Transcurrido 1 minuto aproximadamente, sacuden las manos, y mientras descansan intercambian

sensaciones y aprendizaje.

MANEJO DE LA ENERGÍA CORPORAL

En la práctica que describiré seguidamente se debe tener especial precaución ya que vamos a poner en
movimiento directo nuestra energía vital con el intento de interactuar con otro sistema similar.
No conozco casos de complicaciones serias pero sí he visto muchos de innecesario desgaste, con la
respectiva sensación de incomodidad y tiempo de recuperación que esto trae aparejado.
Sabemos que con nuestra atención podemos dirigir el flujo de energía de nuestro cuerpo. Esto sucederá en
función directa al entrenamiento y, por lo tanto, al control que hayamos adquirido de ella.
Si no estamos seguros de nuestras fuerzas y de la estabilidad de nuestro sistema para dirigir la energía o
dudamos de la capacidad de eliminación de la materia energética de desecho puesta en movimiento por
nuestra acción de movilización, no debemos correr ningún riesgo. Si la situación excediese los límites
personales de nuestro estado de ese momento se dejará sin efecto el tratamiento y se le advertirá a la
persona. La actitud adecuada a seguir en estos casos es derivarla.

Práctica
Básica

 1- Procederemos como en los casos anteriores con los puntos -1- y -2- de respiración.

 2- Llevamos la atención a ambas palmas separadas por el ancho de hombros tal como lo hicimos en el
punto -5- de la práctica de manejo de la atención.

 3- Luego de lograr la sensibilidad característica, enfrentamos nuestras palmas a las de otra persona que
haya logrado la misma actitud, a 10 cm. aproximadamente.

 4- Simplemente, nos centramos en nuestras palmas y en las sensaciones percibidas durante 3 minutos
aproximadamente.

 5- Retiramos y sacudimos las manos e intercambiamos comentarios con nuestro compañero de práctica
con la finalidad de conocer distintas vivencias de lo que, aparentemente, es la misma situación.

Ambas impuestas

 1- La base de este ejercicio es la misma que para el caso anterior. La diferencia consiste en nuestra
actitud de silencio interior.

 2- Uno de los dos practicantes mantiene la actitud de atención en las manos descripta para el ejercicio
anterior.

 3- El otro participante de la práctica mantiene la mente en silencio. No importa otra cosa que el silencio.

 4- Se mantiene este estado durante 2 minutos aproximadamente. Ambos sacuden las manos e
intercambian verbalmente las sensaciones experimentadas.

 5- Se invierten las funciones y se procede de la misma manera.

Por ambas manos igual

Este ejercicio consiste en movilizar la energía de nuestro campo a través de las manos. Las
recomendaciones que deben observarse son las ya descriptas al comienzo de este tema.
 63

 1- Procederemos como en los casos anteriores con los puntos -1- y -2- de respiración.

 2- Llevamos la atención a ambas palmas separadas por el ancho de hombros, tal como en el punto -5- de
la práctica de manejo de la atención.

 3- Luego de lograr la sensibilidad característica, enfrentamos nuestras palmas a las de otra persona que
haya logrado la misma actitud, a 10 cm. aproximadamente.

 4- Uno de los 2 participantes mantiene simplemente la atención. El otro comienza irradiando

BIOENERGÍA. La actitud necesaria para lograr este efecto no es fácil de describir por medio de palabras y
menos aún por medio de un libro; este medio de comunicación carece de la necesaria continuidad y
práctica de grupo como para lograr códigos en común, tanto verbales como energéticos directos.
Haciendo uso de las limitadas palabras, puedo decir que la sensación de la persona que intenta irradiar y,
por lo tanto, movilizar su energía a través de las manos, se parece a dejarse ir por las manos.
Tengamos en cuenta que una cosa es lo que significan
para mí estas palabras y esta sensación, y otra es lo que
pueden estar imaginando ustedes. Les dejo la inquietud
a modo de salvedad.

 5- Extendemos por 2 o 3 minutos el ejercicio y procedemos a intercambiar verbalmente lo experimentado

por ambos.

 6- Invertimos las funciones y actuamos de la misma manera.

Advierto que se observe especial cuidado en la técnica que voy a detallar a continuación, debido al riesgo
expuesto oportunamente. No recomiendo la práctica individual y aislada por las incomodidades inciertas que
pueden surgir a partir de ésta.

 1- Procedemos en forma similar a los puntos -1- al -3- del paso anterior.

 2- Mientras uno de los practicantes únicamente mantiene la atención en las manos, el otro procede a
intentar atraer bioplasma del sistema del primero.
Aclaro que no es posible extraer energía vital de una
persona con este método; esta es la razón por la que lo
explico públicamente. Sí es posible extraerle la materia
radiante de desecho que se encuentre adherida de forma
más o menos superficial.

 3- La sensación del que absorbe es similar a lo que sentiríamos si fuésemos una aspiradora sutil por
medio de la cual incorporamos lo exterior a nuestro sistema. Sentimos succión vital.
Esta descripción de lo percibido puede resultar infantil o incierta; recordemos que no hay manera precisa
de definir con palabras las sensaciones.

 4- Detenemos la succión. Sacudimos las manos y comentamos sensaciones. Descansamos.

Circulación

 1- Procedemos en forma similar a lo ya conocido.

 2- La persona que comenzó anteriormente circula la energía de izquierda a derecha.

Esto equivale a sentir una combinación de los ejercicios anteriores ya que debemos succionar por nuestra
mano izquierda y transferir por la derecha.
La sensación, cuando la práctica sugerida es correcta,
deja sentir una corriente o flujo sutil que se inicia en la
mano izquierda, sube por el mismo brazo, atraviesa el
tórax y desciende por el lado opuesto.

 3- Luego de mantener este estado por no menos de 1 minuto, sacudimos las manos y descansamos el
tiempo que nos indique el cuerpo.

 4- Después de un adecuado descanso procedemos a adoptar la posición y el estado acostumbrado para

este tipo de entrenamiento.
 64

 5- Esta vez, el flujo energético entre los sistemas se hará en sentido inverso al caso anterior.

 6- Luego de extender la experiencia por no menos de 1 minuto procedemos a detener el flujo energético
puesto en movimiento. Tengamos en cuenta que es tan importante saber movilizar en cualquier sentido
como detener voluntariamente el movimiento, iniciado por nosotros o no. Si tuviese que hacer el
acostumbrado paralelismo con lo vivido en el mundo material, diría que es tan fundamental para nuestro
sistema psicocorporal humano el movimiento externo-interno como la quietud externa-interna. Del
equilibrio de estas dos actitudes depende nuestra salud y nuestra evolución.

CRISTALES

De acuerdo con mi juicio y con la experiencia, opino que los campos de fuerza generados por las piedras
deben ser experimentados para ser usados con efectividad. La teoría tiene alcance referencial e ilustrativo.
Los conceptos no equilibran el sistema humano ni dan pautas vivenciales para ese fin. Es bueno poder
explicar lo que estamos haciendo, pero es mejor ser eficiente en el trabajo. A caminar se aprende caminando;
la teoría es poca y muy sencilla.

Compenetración

Percibir

 1- Relajamos la musculatura y cerramos los ojos, sosteniendo un cristal de cuarzo en la mano izquierda.

 2- Respiramos uniforme y naturalmente de manera ligeramente más profunda que lo habitual.

 3- Tratamos de llegar al vacío interior deteniendo los pensamientos.

 4- La idea de este ejercicio consiste solamente en PERCIBIR cualquier impresión que pueda llegarnos, sin
importar la fuente de origen, ya que los cristales se comunican con nuestro reino de maneras que no
estamos capacitados para decodificar con el intelecto.

 5- Mantenemos este estado por un lapso de 5 minutos aproximadamente y descansamos lo necesario.

Penetrar

 1- Relajamos la musculatura y cerramos los ojos, sosteniendo un cristal de cuarzo entre ambas manos.

 2- Respiramos uniforme y naturalmente, de manera ligeramente más profunda que lo habitual.

 3- Tratamos de llegar al vacío interior deteniendo los pensamientos.

 4 - Buscamos SIN PENSAR la cara que atraiga nuestra atención.

 5- Fijamos la vista en ella sin perder el estado de silencio, y dejamos que el cristal nos atraiga hacia su
interior. Si el ejercicio se efectúa de manera correcta, la sensación descripta se podrá sentir de manera
literal.

 6- No esperemos obtener información de estas prácticas, ya que se trata de maneras de inducir a la

búsqueda de integración con otras formas de vida y, por lo tanto, podríamos decir que lo que intentamos
obtener es conocimiento profundo.

 7- Sugiero descansar por un tiempo prolongado a fin de evitar mayores desgastes y permitir que se
arraigue la experiencia en nuestros planos profundos.

Sensibilidad

Repito algunas consideraciones sobre la actitud psicofísica a modo de repaso.

 65

Este ejercicio se efectúa sosteniendo por la base un cristal de entre 7 y 15 cm. en la mano derecha (la
derecha para los diestros y en la opuesta para los zurdos).
Este es otro conocido ejercicio del que nos valdremos, no sólo con fines de práctica sino en toda ocasión que
necesitemos sentir el tipo de cristal que tenemos en nuestras manos.

Sentir

 1- Relajamos la musculatura y cerramos los ojos.

 2- Respiramos uniforme y naturalmente, de manera ligeramente mas profunda que lo habitual.

 3- Tratamos de llegar al vacío interior deteniendo los pensamientos.

 4- Llevamos la atención a la mano libre.

 5- Mantenemos este estado 3 minutos aproximadamente.

 6- Abrimos los ojos sin perder la concentración.

 7- Describimos círculos con la punta del cristal por la palma opuesta sin tocarla, a unos 5 cm.
aproximadamente.

 8- Variamos la distancia en más y en menos.

 9- La duración oscilará entre 1 y 3 minutos.

 10- Mientras descansamos analizamos la sensación.

Si logramos hacer el ejercicio de manera adecuada, sentiremos con claridad cómo el cristal, con su campo
concentrado en el ápice, arrastra parte de nuestro campo vital como si éste tuviese una consistencia gomosa.
Este ejercicio puede intentarse en distintas partes del cuerpo: frente, pecho, abdomen, pies, etc. Notaremos
distintas sensaciones y detectaremos zonas de nuestro campo que poseen diferente sensibilidad.
Sería prácticamente interminable enumerar las distintas sensaciones y su causa, teniendo en cuenta la
variedad y las diferencias existentes entre los seres humanos y la permanente dinámica del campo
bioplásmico. Es importante ir registrando y acumulando sensaciones (no ideas), sin intentar darles una
interpretación. El conjunto incorporado se conoce con el nombre de EXPERIENCIA.

Campo circular

Otro ejercicio que utilizo en los seminarios y cursos, con distintas finalidades es el siguiente.

 1- Disponemos delante de nosotros un círculo de cristales de tamaño uniforme. El tamaño útil más
pequeño no debe ser inferior a 5 cm. La cantidad no será menor a 6. El diámetro de la figura circular será
aproximadamente de 20 cm. entre las bases de los cristales. Las puntas se dispondrán orientadas hacia
afuera del círculo (a modo de “reloj de cristales”).

 2- Luego de lograr el estado respiratorio y de atención a nuestra mano más sensible requerido para otros
ejercicios, desplazaremos dicha mano sobre el centro de la figura formada a unos 15 cm. moviéndola
lentamente en varias direcciones y entrando y saliendo del círculo.

 3- Después de percibir las sensaciones correspondientes a este campo concentrado nos disponemos a
descansar durante el tiempo necesario.

 4- Invertimos la dirección de los cristales sin alterar la disposición y procedemos a sensar como en el caso
anteriormente planteado.

 5- Analizamos la diferencia de este campo invertido con respecto al anterior y descansamos.

Si el ejercicio descripto es realizado de manera adecuada, puede enseñarnos muchas cosas sobre los
cristales y su forma de vida. Abandonemos el intento de procesar estas experiencias con el intelecto lineal ya
que carecerían de todo valor.
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Acercamiento 1

Este ejercicio, practicado de manera individual pierde gran parte de su valor ya que no existe la posibilidad de
aprender de las experiencias de otros integrantes del grupo y tampoco se tiene la devolución del coordinador.
Para esta práctica es conveniente contar con algunos exponentes de las variedades más comunes utilizadas
en esta zona. Un equipo básico tendría que contener, por lo menos, cuatro piedras del tamaño de una
avellana, de cada color del espectro cromático (negro, rojo, naranja, amarillo, verde, azul, índigo, violeta), y
otras tantas de color rosa, cuarzos ahumados y ágatas; también se dispondrá de puntas de cristal de cuarzo
de distintos tamaños, que oscilarán entre 2 y 10 cm. y de grosores varios.

 1- Buscamos un lugar y una hora silenciosos; la temperatura deberá ser agradable.

 2- Evitaremos, en la medida de lo posible estímulos artificiales (aromas, sahumerios, música).

 3- Descalzos, nos sentamos cómodamente en el suelo con nuestra bolsa de piedras.

 4- Hacemos unos minutos de ejercicios de respiración hasta que ésta tome su ritmo natural (si el ejercicio
es correcto, la respiración será más lenta y profunda de lo habitual al cabo de pocos minutos).

 5- Continuamos con algunos minutos de silencio interior hasta lograr un estado natural de alta sensibilidad
(este estado es indispensable y no debe omitirse ni fingirse).

 6- Volcamos cuidadosamente las piedras en una tela blanca que habremos dispuesto frente a nosotros.

 7- Procedemos a separarlas lentamente en montones que dispondremos a una distancia aproximada

entre cada uno de ellos de 5 cm.

 8- Barreremos suavemente con la vista el conjunto completo.

 9- Trataremos de estar atentos a las sensaciones sin pensar, sólo sintiendo.

 10- Registraremos las piedras que nos produzcan mayor atracción.

 11- Registraremos las piedras que nos produzcan rechazo o menor atracción.

En este momento, se hace indispensable una interpretación general del coordinador. De todos modos, esta
parte del ejercicio es útil para compenetrarnos con los cristales y sensibilizarnos con ellos.

Acercamiento 2

Este ejercicio es continuación del anterior y carece de utilidad si se realiza de manera aislada.

 1- Tomamos en nuestra mano más sensible el montón que nos atrajo.

 2- Acentuamos el estado de silencio interior para agudizar la percepción.

 3- Mantenemos este estado un mínimo de 3 minutos a menos que aparezca alguna sensación muy
molesta o desagradable y que no pueda ser soportada. En este caso suspenderemos los ejercicios.

 4- Estaremos atentos a las sensaciones o percepciones que podamos registrar, de cualquier tipo que
estas sean.

 5- Volvemos las piedras a su lugar en la tela sin superar los 5 minutos de práctica (en principio).

Nuevamente, en este punto se necesitaría guía y trabajo grupal; aún así, el ejercicio brinda utilidad parcial.

 6- Tomamos ahora las que nos produjeron rechazo o menor atracción y procedemos igual que para el
grupo anterior.

 7- Terminada la práctica se dispondrán todas las piedras para ser limpiadas (incluyendo las que no
tomamos en la mano).

No recomiendo repetir esta secuencia dentro del mismo día ya que es necesario que la experiencia se
metabolice adecuadamente y se fije, a fin de disponer de información útil y clara (a nivel inconsciente, por
 67

supuesto). Puede repetirse el ejercicio en días sucesivos con la particularidad de que en muchos casos los
montones elegidos variarán de forma significativa llegando incluso a invertirse nuestra preferencia.
Luego de este ejercicio suelo seleccionar y entregarles a los participantes las piedras con las que interpreto
que tienen que integrarse, siguiendo el antiguo principio de que en la mayoría de las ocasiones rechazamos o
ignoramos aquello que más necesitamos o que nos podría ser de utilidad.

VISUALIZACIÓN DE AURA

Uno de los descubrimientos que producen mayor movilización emocional en los practicantes es cuando
logran por primera vez percibir visualmente el campo energético humano.
La visualización de la parte más densa del biocampo es sumamente sencilla y puede lograrse con muy poco
entrenamiento. Debemos tomar esto como un ejercicio y evitar la tendencia a la interpretación; mucho menos
aún tratar de usarlo como método de diagnóstico, ya que la percepción clara, precisa y completa lleva mucho
tiempo de real entrenamiento interior. Si la visualización precisa requiere de tanta práctica, les dejo a ustedes
el hecho de imaginar la dificultad de interpretar adecuadamente lo visto.
La metodología a seguir para el entrenamiento de esta capacidad es tan sencilla en lo exterior que se torna
casi banal su explicación.
El primero es un conocido y muy usado ejercicio; lo tomo debido a su sencillez y efectividad.

 1- Buscamos un estado donde la respiración sea adecuada (ver otros ejercicios).

 2- Llegaremos lo más cerca que nos permita nuestra capacidad al estado de silencio interior.

 3- Dejaremos que nuestra vista vague sin fijarse físicamente en ningún objeto.

 4- Lentamente, detendremos nuestra atención con la vista sin enfocar en nuestras manos enfrentadas, sin
tocarse, por la punta de los dedos extendidos.
Las desplazaremos buscando distintas posiciones y prestaremos atención a los cambios registrados y a
sus distintas particularidades.

 5- Transcurridos algunos segundos comenzaremos a percibir con la periferia de nuestro desenfocado

campo visual una luminosidad o resplandor correspondiente al biocampo buscado.

 6- No se debe prolongar el ejercicio por más de 3 minutos ya que dicha práctica consume gran cantidad
de BIOENERGÍA de alta frecuencia.

Otra variante a ser puesta en práctica luego de haber logrado claros resultados con el punto anterior consiste
en intentar visualizar el campo energético de otra persona. Para lograr esto nos dispondremos como en el
comienzo del ejercicio previo. Fijaremos la vista sin enfocar en la zona de la cabeza, preferentemente en la
frente de la persona que nos acompaña, y lentamente esperaremos que se haga visible el resplandor
característico.
En las prácticas de los seminarios y cursos, estos ejercicios se ejecutan con muchas más variantes y con
distintos tipos de experiencias mediante manipulaciones del campo energético del coordinador.
Luego de logrado un importante manejo de las técnicas sugeridas puede continuarse con la visualización del
campo energético de los cristales. El espectáculo es imponente, y la emoción asociada, digna de vivirse.

DETALLE PRÁCTICO
DE LAS TÉCNICAS

MASAJE

En la mayoría de las ocasiones, luego de haber hecho con sensopercepción la lectura del relieve del campo,
la primera técnica a aplicar consiste en un masaje en la parte posterior del cuello. Lentamente, haremos
varios ciclos de maniobras circulares prestando atención a la existencia de contracciones musculares
dolorosas (contracturas). Luego trabajaremos también con círculos bordeando la base de la caja craneana,
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en la terminación de los huesos occipitales. Por lo general, luego de estas maniobras, la persona muestra un
estado de relajación notablemente mayor al del momento inicial.
Continuaremos con los dedos delineando el borde de los arcos superciliares y después haremos pasadas
lineales barriendo toda la frente desde el centro hacia las sienes, las cuales masajearemos con suavidad en
círculo, aplicando una presión intermedia.
Si se lo considera necesario, nos desplazaremos haciendo mayor presión en pequeños círculos por todo el
cráneo con la yema de los dedos y con la mayor presión que permita el estado de la zona tratada.
Lo descripto es sólo a modo de generalidad, ya que de ser necesario aplicaremos un masaje específico en la
zona que lo requiera. Recomiendo la formación en este tema de manera adecuada y bajo guía profesional.

IMPOSICIÓN DE MANOS

La metodología que describiré seguidamente está orientada tan sólo a la movilización de BIOENERGÍA por el
principio de Interacción de Campos, y en ningún caso a la extracción de bioplasma congestivo.
Antes de imponer nuestras manos procedemos a sensibilizarlas tal como lo hicimos en los ejercicios vistos.
Llevamos la atención a una o a ambas manos, de acuerdo con la zona a tratar. Nos silenciamos
internamente prescindiendo de todo deseo, idea, o visualización.
Al sentir la sensibilidad característica, imponemos.
El detalle de la forma y las posiciones puede aprenderse en cualquier libro que las describa con minuciosidad;
de hecho, no hay necesidad de seguir unas formas prefijadas. En este caso, la forma ocupa un porcentaje
mínimo en la influencia y en los resultados porque, tal como expliqué, lo verdaderamente importante es
nuestro estado interno-externo ya que de ahí deriva lo que podamos lograr transmitir, o sea: EL FONDO.
La mayoría de las maniobras utilizadas con efectividad consisten en una aplicación simétrica comenzando
desde la cabeza hasta la zona pélvica (en algunos casos se prologa hasta los pies, técnica que no
recomiendo ya que se necesita real experiencia para ejecutarla por ser la parte baja del cuerpo la zona de
drenaje más pronunciado y, por lo tanto, de alto riesgo para la persona que trata).
En la zona cardíaca y en plexo solar, la aplicación de manos se efectúa asimétricamente (se impone la mano
más sensible a lo largo del esternón y, en el caso del plexo solar, la palma de la mano en el centro de éste).
Prestamos atención a las sensaciones de la persona tratada y a las nuestras sin perder sensibilidad ni vacío
interior.
El tiempo de la maniobra oscilará entre 30 segundos y 10 minutos para cada zona (estos valores son
orientativos).
Levantamos suavemente las manos y las sacudimos con fuerza en un lugar adecuado (puede ser una
maceta grande con tierra) a fin de desprender los residuos bioplásmicos adheridos.
Repetimos la operación si lo consideramos necesario.

PIEDRAS Y CRISTALES

No debemos olvidar que somos un todo dinámico interactuante y lo que modifique el funcionamiento de una
de sus partes afecta al conjunto, por lo tanto, siempre debemos tener en cuenta la resultante de las
componentes.
La base del trabajo de aplicación de piedras y cristales se hará en los centros mayores de energía, lo cual no
excluye que puedan colocarse en otros lugares del cuerpo y aún fuera de él; me limito a esta técnica por
poseer la suficiente amplitud y posibilidades, y debido al carácter básico de este libro.

 Las piedras con calidad de gema actúan mejor que las opacas, lo cual no implica que no puedan usarse
estas con buenos resultados.

 Generalmente, colocaremos por lo menos una piedra sobre cada centro principal de energía, salvo en el
caso de surgir dudas importantes. En este caso, se dejará sin tratar.

 La piedra que se coloca estará de acuerdo con efecto a producir. Esto se desprenderá del diagnóstico.

 Los efectos a producir sobre los centros de energía se reducen a 3: Estimulación - Contención - Neutro.

 Se estimulará el funcionamiento de un centro cuando se tenga la certeza que se encuentra infraactivo,

nunca para elevar más de lo normal su frecuencia vibratoria. Un centro jamás puede encontrarse
“cerrado”, ya que de ser así, no existirían posibilidades de vida. Tampoco debe estimularse ya que de ser
necesario esto, la Naturaleza se encargaría automáticamente de hacerlo.
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 Se emplearán piedras para reducir su actividad en caso de que el diagnostico haya determinado exceso
en su función y, tal como en la situación anterior, nunca para disminuir su régimen natural de trabajo por
debajo de lo normal.

 Si no se quiere modificar el ritmo de un chakra y se desea fijar su estado, emplearemos una piedra de su
color primario o un cristal de cuarzo. Es importante que no sea una punta ya que ésta tiene su propio
sentido de circulación e interrumpiría con esta corriente el funcionamiento del centro tratado. Esto no
sucede con un cristal rodado o facetado. En ocasiones, es necesario producir efecto neutro cuando van a
corregirse algunos, ya que todos actúan concurrentemente y no es una consecuencia deseable que se
altere el correcto funcionamiento de unos por modificación de otros.

 En algunas oportunidades que se dan con frecuencia, la situación indica que es necesario reforzar aún
más el efecto buscado. Esto suele suceder en casos de anomalía fisiológica seria. En tal circunstancia
pueden agregarse a la piedra central cuatro pequeñas puntas de cristal direccionando el vértice de
acuerdo al efecto a producir: orientado hacia el centro aumenta la actividad, concentra, estimula, carga.
Orientado inverso al caso anterior disminuye la actividad, dispersa, calma, drena.
ADVERTENCIA: En ningún caso se colocarán
perpendiculares a la corriente principal de energía ni
cruzándola.
Este refuerzo del efecto energético debe usarse con
precaución y certeza de su necesidad.

 En algunos casos es necesario producir un efecto mixto para generar movimiento. Pueden combinarse los
efectos de estimulación y contención en el mismo chakra: la piedra central estará conteniendo y,
alrededor, se colocarán cuatro estimulando para que trabajen en conjunto ejerciendo efecto
complementario. En este caso debemos extremar la precisión del diagnóstico del estado del chakra al cual
aplicar ambos efectos.

 En todos los casos se colocarán tres varillas de turmalina negra en cada pierna; una del volumen
aproximado de una nuez en las ingles y a la altura de los maléolos (tobillos), y otras de mayor tamaño
(aproximadamente un 50% más que las anteriores) en las rodillas.

 No aplicar piedras calientes o frías solamente. Para determinar la capacidad térmica, o sea, la frecuencia a
inducir por los cristales, debe tomarse como referencia el espectro cromático con sus conocidos colores
fríos y cálidos. Recomiendo el estudio de los colores y su influencia como formación complementaria ya
que tiene gran importancia tanto para diagnóstico como para tratamiento.

 Colocar primero las principales y luego las secundarias.

Veamos como piedras principales las que van a hacer (o
a terminar) el trabajo de modificación del funcionamiento
de algún centro o las que vayamos a colocar en el lugar
donde el diagnóstico haya detectado la o las afecciones
principales. Las secundarias serán las complementarias
o que servirán de apoyo a las anteriores.

 Si hubo una fuerte congestión en la cabeza no colocar piedras de color. Si hubiésemos diagnosticado una
sobrecarga (hiperactividad) del plano mental consciente cuyo asiento se localiza en la cabeza, sólo
utilizaremos cristales de cuarzo (hialinos).

 Colocar en la mayoría de los casos piedras color violeta, amarillo o cuarzo hialino en el 7º chakra. Estas
frecuencias cromáticas mencionadas son las principales de la zona alta del sistema cuando éste se
encuentra en estado de reposo o actividad natural. Si tenemos en cuenta que vivimos en una cultura
predominantemente racional, es lógico suponer y comprobar el inmenso desgaste de una persona que
trata de ser socialmente aceptada y admirada por su capacidad intelectual. Las consecuencias están a la
vista en la vida diaria y en algunos de los síntomas habituales.

 Las piedras usadas para generar movimiento energético en una zona se colocan de a cuatro en casi todos
los casos, definiendo los vértices de un cuadrado de aproximadamente 7 cm. de lado.

 En ningún caso volveremos a colocar las piedras que se caen, ya que muchas veces la inmensa sabiduría
del cuerpo expulsa lo que no necesita o puede perjudicarlo. De todos modos, recomiendo usar el sentido
 70

común ya que hay casos en que las piedras se deslizan debido a lo dificultoso de la colocación en algunos
relieves corporales.

 El tiempo de exposición oscilará, en todos los casos, entre 15‟ y 20‟.

 Las piedras se colocarán desde la cabeza a los pies y se retirarán de la misma manera. Este no es el
único modo de operar en cuanto a la colocación y debe tomarse sólo como una pauta básica.

 Al momento de retirarlas del cuerpo, se colocarán en un recipiente adecuado para tal fin; luego se lo
llenará de agua. La capacidad del recipiente oscilará entre uno y dos litros. Las piedras deben caber
cómodamente y permitir abundante cantidad de agua entre ellas.

A continuación detallo los colores primario y secundario de los siete centros principales. Esto debe tomarse
como generalidad introductoria y no como pauta rígida de trabajo, ya que es sabido que, debido a la
complejidad del sistema energético humano, no podemos reducir los colores verificados en estas zonas a
una simple y elemental tabla. La variación de frecuencias y, por lo tanto, los colores y tonalidades asociados
de estos órganos sutiles varía de manera continua y más allá de lo imaginable.
Mucho menos aún nos ajustaremos estrictamente a la lista de piedras y cristales que expongo, ya que la
metodología de trabajo no es determinada piedra para determinada zona sino que emplearemos el cristal que
produzca los efectos que necesitamos lograr en cada lugar puntual y, en muchas ocasiones, difieren de la
tabla enunciada. De todos modos, creo que es una información a tener en cuenta ya que muestra un
panorama general de la evolución humana representada en su cuerpo físico por medio del espectro
cromático y mineral.

Colores locales: Rojo - Negro

Piedras: Ónix - Turmalina negra - Cuarzo ahumado -
Hematite - Granate - Jaspe rojo

Colores locales: Naranja - Rojo

Piedras: Cornalina - Cuarzo ahumado - Granate - Ágata

Colores locales: Amarillo - Verde

Piedras: Citrino - Topacio imperial - Malaquita - Cuarzo
verde

Colores locales: Verde - Rosa

Piedras: Cuarzo rosa - Rodocrosita - Cuarzo verde -
Turmalina verde

Colores locales: Azul - Turquesa

Piedras: Aguamarina - Lapislázuli - Sodalita

Colores locales: Índigo - Violeta

Piedras: Lapislázuli - Sodalita - Amatista

Colores locales: Violeta - Blanco

Piedras: Amatista - Cuarzo hialino

Las técnicas, especificaciones y precauciones son muchas más pero, a mi juicio, sólo deben ser aprendidas y
practicadas en el contexto y con la guía adecuada.

SENSOPERCEPCIÓN

La técnica de sensopercepción consiste en percibir el relieve del campo energético por medio de muestras
manos. Estos maravillosos instrumentos poseen una gran sensibilidad que rara vez nos detenemos a
observar y a utilizar sus beneficios.
Contrariamente con lo que pudiera parecer a simple vista, el inicio y desarrollo en esta práctica no necesita de
mucho tiempo ni su entrenamiento es mayormente dificultoso.
Las reglas que rigen para esto son similares a las observadas para la visualización del campo: una cosa es
percibir, otra es percibir con claridad y precisión, y otra muy distinta es comprender lo que estamos
percibiendo.
 71

Los primeros resultados podrán notarse ya en los comienzos; la interpretación adecuada y útil nos
demandará un esfuerzo y un entrenamiento mayor que deberá efectuarse con la guía adecuada.

Procedimiento

 Nos disponemos de manera similar a como lo hicimos en otros ejercicios en cuanto a respiración y silencio
interior.

 Llevar la atención a nuestra mano más sensible.

 Logrado el punto de sensibilidad característico, desplazamos lentamente la mano a una distancia de entre
5 y 15 cm. del cuerpo, en varias direcciones atendiendo las distintas sensaciones percibidas. Puede
alternarse en la lectura el frente con el dorso de la mano.

 4- Préstese especial atención a los chakras mayores, órganos y zonas principales. También al plexo solar
por ser el centro del equilibrio corporal.

Lo que vamos a percibir con más frecuencia serán:

 SALIENTES
 HUECOS
 DESEQUILIBRIOS
 DESGARROS.

Interpretación

Salientes: Sin olvidar que no es posible definir con precisión las sensaciones, podemos decir que la
percepción de una saliente se parece a lo que acostumbramos a sentir como calor, mayor presión, cosquilleo
o mayor densidad.
Esto nos indica claramente que existe en esa zona una congestión o estancamiento energético.

Huecos: La sensación que caracteriza los huecos en el relieve del campo bioplásmico podría describirse
como: frío, menor presión o vacío.
Esto muestra una región que sufre agotamiento o insuficiencia de energía.

Desequilibrio: Aquí lo percibido no es fácilmente transmitible por medio de la palabra y mucho menos a
distancia. Ante una zona que sufre un desequilibrio distinto de los mencionados anteriormente nos
encontraremos con una sensación indefinida de alteración.
Podemos concluir que esta zona se encuentra operativamente fuera de su tono o ritmo normal.

Desgarro: En algunas ocasiones nos encontraremos con una sensación de vacío o depresión de contorno
definido y de menor tamaño que los huecos pero en un relieve parejo. Esto nos indica la existencia de una
rasgadura del campo energético cuya causa puede tener distintos y variados orígenes relacionados con el
empleo inadecuado de técnicas e instrumentos que manejan BIOENERGÍA y con la movilización de
emociones violentas o catárticas sin la adecuada resolución.

Una de las principales causas de la congestión energética y la formación de cúmulos bioplásmicos es la

detención o reducción del flujo energético normal; la materia plásmica congestionada pierde vitalidad y se
convierte en un elemento impropio para el sistema.
Otra de las consideraciones a tener en cuenta al momento de detectarse salientes es que una zona puede
estar temporalmente sobreactiva a causa de una emoción, sin indicar esta condición la presencia de
congestión. Lo habitual es que se normalice al poco tiempo y en el transcurso del tratamiento si no existiesen
factores que impidieran su estabilización.
Si recordamos que el cuerpo bioplásmico humano es regente del cuerpo físico, es dable suponer que
detectaremos anomalías de distinto origen en el campo energético antes de que el síntoma aparezca en el
cuerpo físico.

LIMPIEZA DEL CAMPO

 72

Sin duda alguna, la mayor importancia del trabajo con BIOENERGÍA reside en la operación de limpieza del
campo bioplásmico. Esta afirmación se debe a que, cuando se eliminan las congestiones, la Naturaleza
regenera el campo de manera natural. Esto se debe a que cualquier adherencia, sea cual fuere su tipo y
potencial, produce, en distintos grados, un efecto inhibitorio de la libre circulación energética en el sistema.
Como sabemos, esta anomalía es el comienzo del desequilibrio en el cuerpo físico, manifestándose
previamente como un estado de ánimo particular, molestias, ideas no habituales. No es posible restaurar el
equilibrio de ningún sistema energético que no ha sido previamente despojado de toda la materia de
desecho. Si movilizamos BIOENERGÍA en un campo bioplásmico congestionado sin despojarlo previamente
y de manera detallada de las adherencias, éste no será capaz de lograr un equilibrio duradero, por lo tanto,
dicha operación carecerá de utilidad o su efecto será superficial y temporario.
En muchos casos, el hecho único de lograr una correcta limpieza de campo es suficiente para producir
efectos profundos, por lo que recomiendo efectuarla de manera minuciosa y dedicándole el tiempo y el
esfuerzo preciso.
Con la experiencia y una adecuada observación vamos a descubrir que la remoción de distintos tipos de
cúmulos bioplásmicos responde mejor a determinadas técnicas de limpieza en las que otras son inoperantes.
Aclaro esto a fin de despertar la capacidad de análisis en el lector y también para evitar desgastes
innecesarios.

Por imposición de manos:

Es uno de los métodos más antiguos de limpieza conocidos por el hombre ya que nace con el contacto físico
mismo y, por lo tanto, podemos decir que opera tanto voluntaria como involuntariamente. ¿Quién no ha
tenido alguna experiencia de mejoría espontánea de otra persona a la que le hemos puesto amablemente
nuestra mano? ¿Y cuántas hemos presenciado del caso contrario?
La explicación de este fenómeno es que, en algunos casos, al colocar las manos sobre congestiones
bioplásmicas superficiales, estas se disgregan por el efecto de otro campo que, voluntariamente o no, está
vibrando en una frecuencia tal que se hace posible la disolución de la energía bloqueante.
El proceso por el cual se elimina este material de desecho se conoce como efecto de disociación; el principio
operativo es similar al verificado cuando una sustancia líquida pasa al estado gaseoso.
Entre las consideraciones y precauciones a tener en cuenta, la principal es que el nuevo estado que adquiere
la materia disociada la incorpora al flujo normal del sistema de la persona tratada y gran parte al de la que
trata, los cuales la distribuyen por distintas zonas de acuerdo con su metabolismo natural. Por lo tanto, luego
de una operación de remoción, debemos efectuar las maniobras adecuadas para corregir la consecuencia
mencionada.
De acuerdo con el tamaño de la zona a tratar, se empleará una o ambas manos y el tiempo no superará los 5
minutos para cada maniobra.

Por rastrillado manual:

Mediante esta técnica se elimina gran parte de la materia bioplásmica incorporada a la circulación del sistema
por el efecto de disociación mencionado en el punto anterior. La metodología consiste en llevar la atención a
ambas manos, tal como lo hicimos en los ejercicios. La posición de éstas será abierta pero sin tensión, y leve
y naturalmente curvadas.
En este estado y en condiciones normales de salud se proyectan por los centros energéticos localizados en la
punta de nuestros dedos haces de energía de una longitud aproximada de entre 10 y 20 cm. Esto puede
comprobarse con la técnica descripta para la visualización del campo energético. Haciendo uso de dichos
haces, los desplazamos por la superficie del cuerpo a limpiar a una altura aproximada de entre 5 y 40 cm. Es
conveniente repetir la maniobra a distintas alturas a fin de detectar congestiones localizadas a diferentes
distancias.
Debe ejecutarse SIEMPRE desde la cabeza hacia los pies y desde el centro del cuerpo (corriente principal de
energía) hacia los lados.
Suele ser una maniobra efectiva para contribuir con la apertura de garganta, despejado de la frente, del
hígado y bazo, de la zona pélvica.
Luego de cada dos o tres maniobras de este tipo se sacuden las manos en el recipiente con tierra que
actuará como depósito de residuos bioplásmicos. En ningún caso debe desestimarse la nocividad de esta
materia radiante de desecho y arrojarla displicentemente en cualquier lugar o ignorarla ya que sería absorbida
por otros sistemas que tomen contacto con ella, produciendo efectos de acuerdo con las variables ya
explicadas.
 73

Por remoción con cristales:

Es una de las técnicas más efectivas debido a la alta capacidad de penetración y extracción de los cristales.
Estas capacidades se deben a las frecuencias en que vibran y, por lo tanto, que irradian. Las piezas a utilizar
deben ser puntas de cristal de cuarzo con las caras que forman el ápice lo más regulares posibles. Los otros
tipos de configuración producen un efecto muy reducido o en algunos casos, nulo. Deben tener un tamaño
mínimo de 12 cm. de largo por 3 cm. de diámetro, siendo los más usados los de 15x4 cm. (estas medidas
son, por supuesto, generales y orientativas).
En algunos casos se utiliza sólo uno y se procede como si se estuviese extrayendo una sustancia de
consistencia gomosa adherida a la superficie del cuerpo por medio de un haz emitido por la punta del cristal
que se extendiese hasta los 10 cm. de ésta aproximadamente.
Se realizan tres o cuatro maniobras de extracción y se lo sacude enérgicamente en el recipiente para los
residuos.
Cada dos o tres ciclos mencionados se vuelve a sensar a fin de hacer el seguimiento del proceso.
Lo daremos por terminado cuando al cabo de tres lecturas consecutivas no obtenemos modificación del
estado sensado.
En otros casos emplearemos dos cristales similares y haremos las mismas maniobras con ambos
simultáneamente a fin duplicar la potencia. Por un principio de economía energética se tratará de emplear el
recurso que mejor se ajuste a la situación y no la tan conocida actitud “es mejor que sobre”.
Las piedras utilizadas en este procedimiento se limpiarán de la misma forma que las demás y en ningún caso
se volverán a emplear sin haber mediado una adecuada limpieza.

Por drenaje con cristales:

Lograr un estado de limpieza perfecto es una situación ideal que no existe en la realidad física.
Luego de haber aplicado lo descripto en los puntos anteriores es común que queden en el sistema energías
congestivas remanentes alojadas de manera más o menos superficial.
Para corregir aún más este estado y acercarnos a lo óptimo, se pueden colocar -en el momento de la
aplicación de piedras o aún antes-, algunas puntas de cristal de un tamaño aproximado al de un dedo índice
de la persona tratada. El principio operativo en que se basa esta técnica consiste en el expuesto
anteriormente cuando vimos la circulación energética de las puntas de cristal de cuarzo.
Esto se hará en lugares específicos tales como los hombros, con la punta direccionada hacia afuera por
razones obvias, en las ingles, en la zona de los huesos coxales, en las rodillas y tobillos, sobre el hueso
púbico, entre las piernas (sobre la camilla), a la altura del cuello (sobre la camilla), etc. El tratamiento de
limpieza será similar al expuesto para los casos anteriores.

Por sahumado:

Nuevamente nos encontramos ante una antigua técnica: la purificación por el humo.
El humo contiene sustancias de la materia empleada en la combustión y muchas de ellas poseen un efecto
disociante de algunos residuos bioplásmicos superficiales.
El método más efectivo que he experimentado es el de sahumar canela molida, tanto para limpiar el campo
de la persona como el del operador, y también el lugar de trabajo.
Habitualmente se conoce poco del detalle de un efectivo sahumerio. Para que este actúe debe generarse
una abundante cantidad de humo en el recinto primeramente cerrado, a fin de que pueda actuar sin diluirse y
durante un lapso aproximado de 10 minutos. Transcurrido este tiempo debe ventilarse profusamente a fin de
eliminar el humo y los residuos disociados.
En ningún caso debe omitirse el ventilado del lugar ya que, de no hacerse, carecería de sentido la operación
efectuada porque lo disuelto volvería a condensar y a depositarse.
Para sahumar el campo de la persona lo haremos desde abajo de la camilla con la finalidad de que el humo
ascienda y envuelva el cuerpo físico y, por lo tanto, el cuerpo energético. El lugar de trabajo lo sahumaremos
hasta el último de sus rincones cuando la persona se haya retirado.
 74

UNA SESIÓN COMPLETA

Veremos una sesión de trabajo con la mayor cantidad posible de detalles a fin de tener un marco de
referencia. No debe tomarse como un modelo absoluto sino como generalidad orientativa.

La persona que requiere el servicio solicita turno telefónicamente.

Se otorgará el horario solicitado tratando de interrumpir lo menos posible sus actividades a fin de evitarle una
incomodidad.

Se le pedirá puntualidad a fin de comenzar la relación basada en el compromiso, la precisión y el respeto

(factores que contribuyen normalmente a desencadenar la enfermedad en caso de ser omitidos por mucho
tiempo y en distintas facetas de la conducta).

Trataremos de evitar una larga descripción del estado que la aqueja ya que nuestro interés inicial se centrará
más en su estructura general que en la manifestación externa comentada por la persona de manera parcial y
subjetiva.

Una de las ventajas que pueden aprovecharse de la conversación telefónica inicial es la ausencia de imagen.
Centraremos toda la atención en el volumen, la inflexión y otras particularidades de la voz. También
estaremos atentos a las pausas, la terminología y todo lo relevante que pueda captarse utilizando el sentido
del oído.

El día de la sesión se sumará a la información verbal obtenida al momento de combinar el encuentro, la

primera imagen de la persona. Antes de comenzar el diálogo trataremos de registrar visualmente todo lo que
su cuerpo y su atuendo pueda mostrarnos. No estoy tratando de sugerir que pueda hacerse un diagnóstico
con lo obtenido y, mucho menos aún, un juicio de valor: sólo se recabarán datos.

Acompañaremos a la persona al lugar de trabajo que se encontrará adecuadamente preparado de acuerdo

con lo visto anteriormente.

Le pediremos que se prepare manteniendo colocada la menor cantidad posible de ropa y accesorios pero sin
que esto le produzca incomodidad alguna, y que se acueste en la camilla de espalda en un sentido prefijado
por nosotros de acuerdo con la disposición física del lugar; mientras, saldremos del recinto a fin de lavarnos
las manos.

Se otorgará el suficiente tiempo a la persona para que al reingresar nosotros ya se encuentre acostada. De
no ser así, le daremos la espalda hasta que se encuentre preparada.

Nos colocaremos los cristales de protección y, si fuese necesario, música, mientras le preguntamos el motivo
de su consulta.

En la gran mayoría de los casos, la persona se lanza ansiosa y rápidamente a una detallada descripción de
su problema que, habitualmente, consiste en alteraciones físicas: tratamientos, evolución de la enfermedad,
tiempos, medicación, etc.

Trataremos de escuchar atentamente durante un tiempo limitado y luego preguntaremos a la persona “¿qué
opina del origen de su problema?” Las respuestas recibidas serán de los más variados tenores. Con esto nos
aproximaremos a ver que grado de responsabilidad se reconoce en su problemática y, por lo tanto, que
conocimiento posee de su interior.

Mientras escuchamos comenzaremos la lectura por sensopercepción y continuaremos acumulando

información.

Si la persona tiende a extender su relato de la situación se le solicitará que se limite a los puntos relevantes y
esquemáticos, ya que para este tipo de enfoque, los síntomas y la evolución del cuadro físico constituyen
sólo una parte del panorama completo y son de competencia de la medicina alópata.

Generalmente procederemos a comentar algunos puntos salientes de lo sensado. Dichos comentarios se

limitarán a preguntar o a informar acerca de la existencia de alguna molestia o alteración en la zona donde se
verificó congestión bioplásmica. Si se detectó carencia vital, se lo relacionará con las funciones de esa zona
o con el centro de abastecimiento correspondiente a fin de constatar la disfunción.
 75

Existen oportunidades en las que lo detectado por la operación de sensopercepción no coincide o sólo lo
hace parcialmente. Recordemos que cualquier anomalía se registra primero en el campo energético y recién
luego de un tiempo (que depende de muchas variables) se muestra en el cuerpo físico.

Independientemente del panorama registrado en los pasos anteriores se continuará con una maniobra que
puede o no tenerse en cuenta, ya que su aplicación depende de la preferencia o el estilo de trabajo de la
persona que trata.
Consiste en realizar el primer contacto y abordaje
poniendo la mano derecha sobre el 2º chakra y la
izquierda por encima del ombligo, de tal manera que
éste quede equidistante de ambas manos.
Esta maniobra comienza a movilizar BIOENERGÍA, el
sistema se activa y comienza a trabajar con algo más de
potencial y distinto tipo de fuerza vital.

Seguidamente, en algunos casos aplicaremos un rastrillado general trabajando más sobre la línea media del
cuerpo donde se localizan los centros y la corriente principal de energía.

Al cabo de tres minutos aproximadamente nos dirigimos a la zona de la cabeza donde comenzaremos el
trabajo de masaje de acuerdo con lo detallado anteriormente. No debemos olvidar sacudir las manos entre
cada maniobra.

Terminada la secuencia (la cual varía en la mayoría de los casos) y luego de sacudir nuevamente las manos
y frotarlas con firmeza, nos dispondremos a imponerlas en la zona de la cabeza mediante gran variedad de
maniobras, incluyendo la mano derecha en la frente y la izquierda en la parte posterior del cuello.

Se trabajará con las manos en la zona superior del tórax, luego el centro sobre la zona cardíaca, plexo solar y
región pélvica.
Si el caso lo requiere, se extenderá lo practicado a otros lugares del cuerpo, deteniéndonos todo lo necesario
en la zona específica (codos, hombros, rodillas, pies, etc.).

Volveremos a sensar y, de ser necesario, procederemos a efectuar la remoción de materia bioplásmica con
cristales hasta completar la limpieza de esa zona.
Si bien las técnicas de limpieza expuestas poseen una muy alta efectividad, en algunos casos bastante
frecuentes resultan insuficientes. No detallo los casos ni las otras maniobras ya que considero impropio
transmitirlas por medio de la palabra escrita debido al grado de especialización que posee tanto el diagnóstico
para justificar su ejecución como la forma de practicarlas.

Percibiremos nuevamente el relieve del campo a fin de verificar los cambios de estado y la efectividad de lo
hecho.

Si se lo considerara necesario y conveniente se impondrá una o ambas manos en zonas que se desee
reforzar y fijar su estado. Generalmente, se trata de las partes que hemos detectado más afectadas.

Concluido esto nos dispondremos a determinar y a colocar las piedras y los cristales. En casos especiales,
colocaremos una gran pieza de cuarzo hialino (entre 2 y 5 k.) de doble punta entre las piernas a la altura de
los muslos para facilitar la circulación por la corriente principal. Esto se hará al comienzo de la sesión.
En otras oportunidades aplicaremos una punta del mismo cristal mencionado en cada ingle, direccionada
hacia los pies, con la finalidad de colaborar con el drenaje del tronco. También puede hacerse al comenzar la
sesión.

Colocaremos las piezas necesarias y, si se presta el momento del día, disminuiremos la iluminación aún más.
Luego procederemos a sentarnos en nuestro banco de trabajo y a silenciarnos, invitando a la persona a
hacer lo mismo si es que su estado lo permite.

En las primeras sesiones se dejarán colocadas las piedras por 20 minutos. En las subsiguientes, se
disminuirá habitualmente a 15 minutos, salvo en casos que requieran consideraciones especiales.

Transcurrido este lapso se retirará suavemente lo colocado sobre el cuerpo -SIEMPRE desde la cabeza
hacia los pies- y se consultará a la persona por su estado.
 76

Si existiese molestia y fuese necesario agregar o repetir alguna maniobra, la ejecutaremos hasta lograr la
corrección necesaria en el lugar específico pero sin profundizar, ya que el sistema se encuentra en un estado
especial luego de aproximadamente una hora de trabajo.

Comentaremos con la persona las posibles alteraciones del sistema que eventualmente podrían observarse
en los días subsiguientes y la invitaremos a comunicarse con nosotros telefónicamente en cualquier
momento en caso de considerarlo necesario y ante dudas sobre sus posibles estados.

Contestamos sus preguntas y le proponemos estar atenta a las nuevas (u olvidadas) sensaciones que
puedan presentarse. Le aclararemos que todo cambio es importante y puede ayudarNOS en el seguimiento y
en la planificación del trabajo.

Si aún no se lo hemos comunicado, le explicaremos que nuestra forma de tratamiento y visión de la

restauración del equilibrio es un trabajo de ambos: ella por dentro y todas las disciplinas necesarias por fuera.

Procedemos a acompañar a la persona hasta la puerta de salida a la calle y nos despedimos cálidamente
recordándole que puede contar con nosotros.

Ventilamos y limpiamos el lugar de trabajo y las piedras utilizadas.

Nos disponemos a descansar y a efectuar nuestra limpieza personal.

TRABAJO EN ESPALDA

Si tenemos en cuenta que habitamos el Universo de la dualidad (por lo menos para la percepción humana),
es lógico suponer que si un cuerpo tiene frente y dorso debemos tratarlos ambos, ya que han de tener
funciones opuestas y complementarias. Ya hemos visto la significación de las partes mencionadas.
Hasta ahora nos hemos abocado al trabajo en el frente del sistema y se vuelve necesario hacer algunas
aclaraciones y ver las maniobras específicas para esta zona.
Ante todo, debemos considerar la espalda como la región que contiene una de las partes del sistema
nervioso central más importante y de mayor actividad energética. Recordemos la corriente principal.
Si a esto le agregamos que dicha zona tiene una representación psicológica asociada nada menos que a
nuestro inconsciente, podremos otorgarle la importancia que verdaderamente tiene y que habitualmente no
se le da por motivos que desconozco (excepto en las disciplinas de masaje).
Paralelo a ambos lados la columna vertebral existen los músculos paravertebrales que la acompañan en casi
toda su longitud. El estado de esta musculatura nos indica claramente una larga serie de problemas
relacionados con nuestra psiquis y, por lo tanto, como manejamos la totalidad del sistema estructuralmente
hablando. La reflexología utiliza el reflejo de la columna vertebral en los arcos de los pies y las manos con la
misma finalidad y precisión desde tiempos remotos. No voy a desarrollar la interpretación de las anomalías de
acuerdo con su ubicación, pero una buena pauta general de trabajo la podemos tener tomando en cuenta las
zonas donde se ubican los centros energéticos ya mencionados y sus respectivas funciones psicológicas.
Otro muy buen apoyo es un curso de reflexología con su bibliografía asociada.
En el trabajo en espalda comenzaremos detectando con sensopercepción las posibles anomalías, de la
misma manera empleada en la zona frontal.
Continuaremos con un masaje a lo largo de la musculatura mencionada, con la particularidad de comenzar
con maniobras superficiales en círculo y seguir profundizando hasta llegar a la dígito presión en algunos
lugares específicos.
En cuanto a la imposición de manos, la iniciaremos en los lugares donde hayamos detectado congestiones.
Aplicamos luego la mano izquierda en la región posterior del cuello y la derecha a la altura de la zona
sacrococcígea.
Desplazamos ambas manos hacia la parte central de la columna en sucesivas maniobras hasta llegar a
juntarlas en el centro (a la altura del plexo solar aproximadamente).
Si es necesario reforzaremos el trabajo imponiendo en las zonas afectadas.
Terminado esto, volvemos a sensar y, si hiciese falta, limpiamos con cristales.
 77

Volvemos a verificar el estado del sistema y repetimos las maniobras convenientes hasta que consideramos
que el trabajo está terminado o no puede (o no debe) hacerse nada más.
La aplicación de cristales en esta zona corporal tiene algunas características en común con la aplicación
frontal pero posee otras que solamente pueden transmitirse luego de haber adquirido mínima experiencia en
lo expuesto hasta el momento. El motivo de esto es que la parte dorsal del cuerpo, con su característica de
albergar la corriente principal de energía y una estructura de la importancia de la columna vertebral con su
médula, se parece más a una unidad que a la fragmentación que hemos visto para la parte frontal del cuerpo.
Por lo tanto, las particularidades de la aplicación de cristales necesitan ser tratadas en otro contexto.
La frecuencia con la que trabajaremos la espalda es de tres veces de frente por una de espalda. No por ser
menos importante sino por las características intrínsecas de la zona.

ALGUNAS DISCIPLINAS RELACIONADAS

La idea de esta parte del libro es hacerles llegar generalidades sobre las disciplinas y técnicas que considero
importante conocer (por lo menos sus principios operativos) ya que están muy relacionadas con el tipo de
trabajo con BIOENERGÍA, y algunas de ellas pueden constituir métodos complementarios de diagnóstico o
nuevas técnicas de tratamiento. En otros casos, y como efectos relacionados con el trabajo sobre el campo
energético, la persona puede comenzar a experimentar algunas particularidades, por ejemplo, en sus
sueños.

COLOR
Es conveniente recordar que el color es una de las manifestaciones de la energía (energía lumínica) por
medio de partículas (fotones) que “bombardean” los campos energéticos expuestos a ellas. Se sabe desde
hace mucho tiempo y se ha demostrado sin lugar a dudas que cada frecuencia cromática influye en el ser
humano de distintas maneras. Transmito solamente algunas particularidades para agregar a las pautas
generales de trabajo.
Vamos a ver como se relaciona el color y su respectiva influencia en los estados del ser.

Etapas evolutivas

NEGRO: De la oscuridad temporal de la conciencia para lograr el olvido y transmutar en materia - Nada - Paz.
Transición hacia la materia.

Esta fase corresponde a la vida entre vidas. Período en el cual descansamos y planificamos una nueva etapa
de aprendizaje. Nos preparamos para continuar el Camino de integración de nuestra conciencia.

ROJO: Fuerza y movimiento en potencia, a la espera de dirección.

Gestación física.

Aquí ya estamos comenzando con la fase planificada y se caracteriza por adaptarnos a la vida física con
todas sus leyes materiales. Fase de gran fuerza latente.

NARANJA: Fuerza y movimiento se manifiestan en dirección excéntrica.

Infancia.

Es el momento del movimiento y la fuerza expansiva. El comienzo del aprendizaje terrenal (y espiritual) y el
empuje inicial para todo el Camino. Se refuerza la adaptación a la vida material y a poseer nuevamente un
cuerpo físico.
 78

AMARILLO: Fuerza y movimiento pierden impulso de crecimiento y se lanzan al exterior de forma

desequilibrada e impulsiva.
Adolescencia.

Esta etapa, vista desde los procesos energéticos, sería el equivalente a una explosión terrenal. Nos
lanzamos de lleno al mundo sin rumbo ni meta clara.

VERDE: Inmovilidad y quietud con vitalidad interior - Armonía y equilibrio activo.

Riqueza interior - Profundidad - Espiritualidad
GRIS: Igual en valor que el verde pero sin vitalidad interior - Sin fuerza activa - Resistencia inmóvil.
Pobreza interior - Superficialidad - Materialismo.
Juventud.

Aquí sucede lo que yo llamo una diferenciación involuntaria. Analizando los dos estados planteados, creo que
pertenecemos a uno o a otro de acuerdo con el estado evolutivo logrado en etapas anteriores. De acuerdo
con mi entender, no hay posibilidad de elección.

AZUL: Pureza - Profundidad - Fuerza interior - Concentración en sí mismo - Inmaterialidad

Madurez.

Llegado este punto del Camino comenzamos a vernos con mayor profundidad (consciente o
inconscientemente). Se agudiza la conexión interior con el núcleo del ser y la actividad material pierde algo de
su importancia y valor.

ÍNDIGO: Distancia de la materia - Se acerca al alma - Recapitulación - Paz - Espera silenciosa

Vejez.

El Camino toma otra perspectiva y algo se serena gradualmente. Una parte de nosotros comienza a
comprender y recuerda (sin tener conciencia). Se ve la vida pasada y se elabora una síntesis sin saberlo. La
paz del que sabe lo que espera.

VIOLETA: Se distancia más de la materia y se apaga.

Gran vejez.

El contacto con el cuerpo material pierde importancia. Comienza el viaje de regreso a casa. Algo pierde
densidad y se hace más luminoso. Es la verdadera Vida.

BLANCO: Silencio - Depuración - Ya sin materia, la quietud y la claridad son totales.

Descanso del alma antes de una nueva planificación.
Conciencia sin materia.
No es necesario comentar algo que todos nosotros conocemos en alguna zona de nuestro ser...

Nuevamente hacia el NEGRO...

Influencia energética vital de los colores

ROJO: Excita - Activa - Calor - Fuerza

NARANJA: Energía - Vitalidad - Estimula (fomenta el movimiento)

AMARILLO: Estimulante irritante - Genera expansión

VERDE: Equilibrio - Detiene el movimiento - Estatismo - Vitalidad mínima - Estado de indecisión

AZUL: Enfría - Calma

ÍNDIGO: Afloja tensión - Introspección - Sabiduría - Estabilidad mental

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VIOLETA: Equilibrio interior - Silencio - Serenidad - Incrementa individualidad - Insensibilidad

NEGRO: Silencio - Oscuridad sagrada - El mundo visible pasa al invisible - Conciencia

BLANCO: Aislamiento - Vacío - La pureza en sí misma

Los invito a hacer sus experiencias basándose en estas pautas.

RADIESTESIA
Habitualmente se cree que para ser radiestesista se debe poseer un don natural especial. Creo que el único
requisito para desenvolverse en esta o en otras técnicas consiste en unas profundas ganas de aprender y
trabajar con disciplina.
Siguiendo algunas sencillas pautas y con algo de entrenamiento podremos comprobar que es una
maravillosa herramienta al alcance de cualquier persona. Podríamos decir que la radiestesia se basa en la
detección de las emisiones energéticas de todo objeto conocido. Esta detección se efectúa mediante el uso
de instrumentos (péndulos o varillas radiestésicas) que responden a dichas vibraciones mediante el sistema
del operador. Las capacidades fundamentales que debe desarrollar un radiestesista consisten en lograr un
adecuado entrenamiento en el estado de silencio interior y concentración a fin de interferir en la menor
medida posible el proceso de sintonización con el objeto y también en las respuestas.
Generalmente (no en todos los casos), el péndulo responde con un movimiento rectilíneo al encontrarse en
presencia de vibraciones YANG (masculinas), y con movimiento circular en caso de detectar vibraciones YIN
(femeninas). En caso de vibraciones combinadas el movimiento es irregular.
Existe otra variante común que es la de girar en sentido horario en casos YANG y en sentido antihorario en
casos YIN.
Debemos tener en cuenta que los instrumentos solamente traducen en movimiento las ondas detectadas por
el campo energético del operador. La detección se efectúa independientemente de su voluntad consciente y
sólo logrando una adecuada conexión energética con el campo del objeto (puede tratarse de un objeto o de
cualquier otra forma de energía). Si tenemos esto en cuenta será fácil comprender que las respuestas
obtenidas y su precisión estarán en relación con el estado psicofísico del operador.
Recomiendo el libro RADIESTESIA de Hector V. Morel (Ed. KIER).

RADIÓNICA
Desde tiempos remotos se conocen diversos métodos de influencia energética a distancia (teleinfluencia).
Algunas de estas prácticas fueron rotuladas como brujería, pero otras más científicas (y tan inexplicables
como las anteriores) generaron, por ejemplo, lo que se conoce como campos morfogenéticos.
La influencia energética entre campos y a distancia se conoce hoy como Radiónica y su estudio y práctica
requiere de real especialización.
El principio operativo es similar al de la radiestesia ya que se basa en el reconocimiento y control de las
pautas energéticas generadas por todo organismo viviente.
Para sintonizarse con el objeto se utilizan muestras de diversos tipos llamadas testigos. Por medio de estos
testigos, el instrumento adecuado y diseñado para tal fin establece un vínculo activo con el ser sintonizado.
Por medio de este vínculo se efectúa la teleinfluencia con el objeto, con la finalidad de restaurar el equilibrio
de su campo electrodinámico.

MAGNETOTERAPIA
La magnetoterapia consiste en la aplicación de imanes sobre el cuerpo con la finalidad de actuar sobre su
campo electromagnético de manera similar a como lo hacen la piedras.
La diferencia es el tipo de energía con la que operan y, por lo tanto, la frecuencia en la que irradian. La
influencia de los imanes sobre los organismos vivos ha sido comprobada mediante diversos experimentos de
distinto tipo y sobre variadas formas de vida.
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A pesar de existir la seguridad de la influencia de los imanes sobre los organismos vivos, nos encontramos
ante el mismo misterio que la Física con el electromagnetismo: se atestiguan los fenómenos pero se
desconoce su naturaleza; se describe pero no se explica.
En ocasiones, y ante casos determinados, suelo aplicar imanes sobre el cuerpo con resultados asombrosos
en algunos casos e inciertos en otros.
Es importante tener en cuenta el tamaño de la pieza, el tiempo de exposición, la dolencia, la zona a tratar, etc.
El principio básico a tener en cuenta es la polaridad del imán, ya que ambas producen efectos opuestos.

Polo Norte - Acción de retardo - Contención - Frío (todo lo YIN)

Polo Sur - Acción de estimulación - Calor - Movimiento (todo lo YANG)

El hecho de que enumere estos principios tiene carácter de informativo y no intenta ser una invitación a
experimentar sin la formación adecuada.

GEOBIOLOGÍA o COSMOTELURISMO
Como ser viviente, la Tierra tiene su propio campo y metabolismo energético asociado inseparablemente al
campo de los organismos que habitan en ella. Esta asociación natural produce efectos en dichos organismos
debido al potencial que posee la Tierra en comparación con ellos.
Es del conocimiento de todos nosotros, con mayor o menor profundidad, la influencia que producen las
distintas zonas terrestres con sus respectivas energías. Esta influencia puede ser altamente beneficiosa
como en los casos de lugares elegidos para la construcción de templos, de pirámides. Pero también puede
resultar altamente perjudicial como en casos de personas que duermen o pasan muchas horas en lugares
energéticamente nocivos, desencadenando esto en alguna alteración de distinta seriedad.
Incluso debemos tener en cuenta también la orientación, la forma, los materiales de nuestras viviendas, ya
que la circulación de BIOENERGÍA dentro de las construcciones es de fundamental importancia para nuestra
salud. Los motivos más comunes de los lugares terrestres de baja calidad vital consisten en cruces de líneas
de energía terrestre, cursos de agua subterráneos, yacimientos minerales, cavernas. Si a esto le agregamos
la baja calidad de vida de las grandes ciudades, creo que nos encontraremos ante el origen de muchas
anomalías inciertas y sin motivo aparente.
La actitud adecuada es hacer controlar los distintos sitios de nuestras viviendas y lugares de trabajo, ya que
en ellos pasamos gran cantidad de horas en puntos fijos.
Existen profesionales dedicados al serio estudio del tema y a brindar los servicios necesarios.

LOS 4 ELEMENTOS NATALES

Todos nosotros hemos oído hablar en innumerables ocasiones y generalmente asociado con la Astrología,
de los elementos. Decimos que hay signos de Fuego, de Tierra, de Aire y de Agua.
A modo introductoria y general, vamos a ver algunas características generales de esta clasificación del ser.
Como definición digamos que los cuatro elementos son estructuras básicas que se combinan para dar origen
y forma a todo lo conocido por el hombre. Cada elemento representa un tipo fundamental de energía y
conciencia que opera dentro de nosotros. A fin de ampliación del tema, recomiendo el libro ASTROLOGÍA,
PSICOLOGÍA y LOS CUATRO ELEMENTOS de Stephen Arroyo (Ed. KIER).
Los seres humanos poseemos todos los elementos en distintas proporciones, con predominancia de alguno
o algunos de ellos. Es importante -como en todo lo que se trate de nuestra conciencia de ser-, que podamos
reconocer y aceptar estas fuerzas para que su energía particular pueda ser utilizada adecuadamente. En
caso de ignorarlas, el proceso será similar a relegar una parte importante de nuestro yo profundo; ésta
buscará manifestarse de alguna manera y atraer nuestra atención consciente.
Veamos algunas relaciones de los elementos y las características asociadas a ellos.

Podemos asociarlos con los 4 estados de la materia:

TIERRA - SÓLIDO
AGUA - LÍQUIDO
AIRE - GASEOSO
FUEGO - PLASMA (energía ionizada)
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Y también con las 4 necesidades primarias de todo organismo complejo:

TIERRA - ALIMENTO
AGUA - AGUA
AIRE - AIRE
FUEGO - CALOR

Características de cada elemento

 AIRE
Actividad mental - Emociones - Uso del intelecto para entender la verdad
Representa lo que PENSAMOS

 FUEGO
Acción - Movimiento - Optimismo - Aventura - Lucha
Representa lo que HACEMOS

 AGUA
Receptividad - Pasividad - Reflexión - Amor - Amistad - Júbilo - Fantasía - Profundidad - Imaginación -
Paz - Armonía - Capacidad de sentir
Representa lo que SOMOS

 TIERRA
Realidad firme - Naturaleza - Trabajo - Actividades rutinarias
Representa lo que CONCRETAMOS

PROYECCIÓN DEL CUERPO ASTRAL

Agrego este punto ya que es frecuente encontrarnos con que durante y después de nuestro trabajo con
BIOENERGÍA se verifiquen fenómenos que hasta el momento no se experimentaban o lo hacían de manera
inconsciente. Uno de esos fenómenos es el que se conoce como desdoblamiento y consiste en la separación
momentánea de nuestro cuerpo energético del cuerpo físico. Es frecuente que esto suceda debido a la
profundidad y a los planos que intervienen en el trabajo descripto.
Expongo algunas pautas elementales para facilitar la comprensión de este mecanismo y a fin de orientar a la
persona tratada en caso de ser necesario. Para ampliar el tema recomiendo el libro LA PROYECCIÓN DEL
CUERPO ASTRAL de S. Muldoon y H. Carrington (Ed. KIER).
El cuerpo astral es el cuerpo energético que posee todo organismo viviente. Dicho cuerpo energético tiene la
finalidad de soportar las funciones vitales. En el estado de conciencia habitual se encuentra superpuesto con
el cuerpo físico, separándose durante el tiempo de sueño en mayor o menor grado. Puede decirse que el
cuerpo astral es un acumulador de BIOENERGÍA que necesita separarse del cuerpo material para ejecutar
su función con mayor rendimiento, ya que el estado de conciencia habitual consume gran cantidad de
energía sutil. La cantidad de energía cargada es directamente proporcional a la distancia que logre separarse
el cuerpo astral y a otras variables aún no establecidas con certeza.
El fenómeno de proyección puede producirse también en casos de síncope, de trance profundo, bajo los
efectos de anestésicos. Todos recordaremos testimonios de personas que han presenciado su operación
quirúrgica desde fuera de su cuerpo físico y la han descripto con precisión.
El tipo de desdoblamientos comentado se conoce como proyección involuntaria. Existen también las
proyecciones voluntarias con las cuales ha experimentado la ciencia con resultados positivos.
Durante la proyección, el cuerpo astral continúa abasteciendo de energía vital al cuerpo físico por medio de
un cordón sutil (el conocido cordón de plata) que actuaría como un cable conductor de BIOENERGÍA.
La mayoría de los desdoblamientos se producen sin que tengamos conciencia del proceso, pero en algunos
casos -durante o luego del trabajo con el campo energético- puede haber atisbos más o menos claros y de
duración variable. Esto no reviste ningún tipo de riesgo y debemos comunicar a la persona tratada, en caso
de que ella lo requiera, el proceso comentado y sus motivos.
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LOS SUEÑOS
Otro de los mecanismos que suele verse alterado o mostrar fenómenos desacostumbrados hasta el
momento de nuestro trabajo es el estado onírico. Lo que pueda experimentar la persona en sus sueños no
reviste riesgo alguno.
Al momento de encontrarnos ante los sueños debemos recordar que es un estado que se relaciona con
nuestro misterioso y desconocido psiquismo inconsciente. Dicho plano posee características y códigos que
poco tienen en común con la conciencia diurna, la cual lleva en sí el peligro de arrastrarnos a creer
firmemente en ella y a sentirnos totalmente identificados, al punto de casi olvidarnos de que el control
profundo y verdadero del sistema lo tiene, indudablemente, el plano inconsciente. Esta tendencia se debe a
que el psiquismo inconsciente es muy distinto del psiquismo consciente como para abordarlo y comprenderlo
con los limitados modelos del intelecto humano.
También debemos tener en cuenta que este estado se manifiesta con símbolos y sensaciones que provienen
de una zona que percibe y elabora la información sobre la base de patrones desconocidos para el estado
diurno.
Existe una modalidad que se me ocurre calificar de intermedia. Consiste en esos momentos en que nos
quedamos extasiados y en silencio interior espontáneo sin motivo aparente; en otros, nuestra mente vaga sin
rumbo fijo y tenemos algo así como paréntesis en la realidad sensorio-perceptual. Esta es otra forma con la
que intenta comunicarse el inconsciente para guiarnos una vez más.
La claridad en la forma de sentir y recordar, y la utilidad que podamos obtener de estos estados (tanto del
onírico como del intermedio), estará en relación directa con el grado de apertura de consciencia logrado hasta
el momento.
Es conveniente explicar también a la persona tratada que las variaciones experimentadas en estos estados
son una consecuencia esperable del trabajo realizado.
Recomiendo a quién desee ampliar el tema la obra de Carl G. Jung.