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La Formación Estelar
La Formación Estelar
En junio del 2005 los astrónomos aportaron evidencias para estrellas de la Población III en la
galaxia Cosmos Redshift 7 en z = 6.60. Es probable que tales estrellas hayan existido en el universo
primigenio (es decir, con alto corrimiento hacia el rojo), y pueden haber comenzado la producción
de elementos químicos más pesados que el hidrógeno que son necesarios para la posterior
formación de planetas y vida tal como la conocemos.
La teoría actual sobre la formación estelar, sostiene que la formación estelar se da en las nubes
moleculares gigantes. Estas nubes contienen, básicamente, hidrógeno molecular H2 (90%) y helio
(9%), mientras que la abundancia de otros elementos depende fundamentalmente de la historia
de la nube, como por ejemplo la explosión de alguna supernova en las cercanías de la nube. Son
regiones frías (10-30 K) y densas (103-104 partículas/cm3) con dimensiones que varían entre 10 y
100 parsecs. Las nubes moleculares no son estructuras uniformes y el gas y el polvo dentro de
ellas se distribuye a lo largo de estructuras filamentosas muy complejas con zonas de alta
densidad que se corresponden con regiones de formación estelar. La mayor fuente de información
acerca de las nubes moleculares proviene del análisis de líneas de emisión de moléculas como el
CO, CS o NH3, a pesar de que el mayor constituyente de las nubes sea el H2. Esto se debe a las
altas temperaturas necesarias para excitar esta molecular (~ 510K), mientras que las nubes son
muy frías.
Cuanto más grande es la nube molecular más corta es su vida. Esto se debe a que en el interior de
las nubes moleculares más grandes se forma estrellas de tipo O y B que emiten fotones de alta
energía que destruyen las moléculas.
Inestabilidad de Jeans
Jeans calculó que bajo determinadas condiciones una nube molecular podía contraerse por
atracción gravitatoria. Solo hacía falta que fuera lo suficientemente masiva y fría. Una nube
estable, si se comprime, aumenta su presión más rápidamente que su gravedad y retorna
espontáneamente a su estado original. Pero si la nube supera cierta masa crítica entonces se
inestabilizará toda y colapsará en todo su volumen. Éste es el motivo por el cual las inestabilidades
suelen producirse en las nubes más grandes dando lugar a brotes intensos de formación estelar.
En este escenario clásico, entonces, una nube comienza a colapsar cuando la energía gravitacional
de la nube es más grande que su energía térmica: